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PRÁCTICAS DE CRIANZA COMO NECESIDAD COGNITIVA-EMOCIONAL
EMPERATRIZ CORREA MESTRA
DANIELA ALEJANDRA PÉREZ MONÁ
KELLY ANDREA ZULUAGA CARVAJAL
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA MEDELLÍN
FACULTAD DE EDUCACIÓN
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR
MEDELLÍN
2016
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PRÁCTICAS DE CRIANZA COMO NECESIDAD COGNITIVA-EMOCIONAL
EMPERATRIZ CORREA MESTRA
DANIELA ALEJANDRA PÉREZ MONA
KELLY ANDREA ZULUAGA CARVAJAL
Monografía presentada para optar al título de Licenciado en Educación Preescolar
Asesor: Gloria Román
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA MEDELLÍN
FACULTAD DE EDUCACIÓN
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR
MEDELLÍN
2016
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Tabla de contenido
Resumen ................................................................................................................................. 6
Introducción ............................................................................................................................ 8
1. 1. Antecedentes ............................................................................................................. 12
1.1.1 Locales ............................................................................................................ 13
1.1.2 Nacionales ............................................................................................................ 15
1.1.3 Internacionales ..................................................................................................... 17
2. Justificación ...................................................................................................................... 23
3. Objetivos ........................................................................................................................... 25
3.1. Objetivo General........................................................................................................ 25
3.2. Objetivos Específicos ................................................................................................ 25
4.1 Capítulo 1: Prácticas de crianza ............................................................................. 26
4.2 Capítulo 2: Necesidades educativas especiales...................................................... 36
4.3 Capítulo 3: Primera infancia .................................................................................. 48
4.3.1 Dimensión comunicativa ................................................................................ 53
4.3.2 Dimensión corporal ........................................................................................ 54
4.3.3 Dimensión estética: ........................................................................................ 55
4.3.4 Dimensión ética y espiritual: .......................................................................... 56
4.3.5 Dimensión cognitiva ....................................................................................... 56
4.3.6 Dimensión socio afectiva................................................................................ 57
6. Metodología .................................................................................................................. 58
6. Discusión .......................................................................................................................... 60
6.1 Desde los objetivos: ............................................................................................... 60
6.3 Primera infancia: .................................................................................................... 62
6.4 Necesidades emocionales y cognitivas .................................................................. 63
7. Conclusiones ..................................................................................................................... 66
7.1 Desde los objetivos: ............................................................................................... 66
7.2 Las prácticas de crianza: ........................................................................................ 67
7.3 Primera infancia: .................................................................................................... 67
4
7.4 Necesidades emocionales y cognitivas .................................................................. 68
Referencias ........................................................................................................................... 71
Anexos .................................................................................................................................. 74
5
Lista de Figuras
Figura 1. Modelo de Patterson (1982)
…………………………………………….……..…34
6
Resumen
El presente trabajo de investigación se realiza por medio de la intervención a niños
de 3 a 5 años del centro infantil Fundación Las Golondrinas del barrio Caicedo, Medellín,
con el objetivo de buscar la relación existente en la manera como se aplican las prácticas de
crianza, como pueden generar necesidades cognitivas – emocionales en los niños y cómo
los diferentes estilos de crianza influyen en el desarrollo integral del niño en cada uno de
los contextos.
Para orientar esta investigación se decide utilizar diferentes estrategias que permiten
vincular la participación de los niños, familias y agentes educativos a través de talleres
reflexivos que basados en diversas actividades posibilitan la observación directa e indirecta,
diarios de campo, entrevistas e historias de vida, y por tanto triangular la información para
lograr deducir las conclusiones y hallazgos del grupo investigador frente al proceso
realizado.
Fue posible entonces determinar que si existe una relación directa entre las prácticas
de crianza implementadas y la creación de necesidades cognitivas – emocionales tales
como: la inseguridad, la rabia, la desatención, la rebeldía y la incapacidad para socializar
con sus pares, las cuales son generadas por la familia debido a que aplica estilos de crianza
de acuerdo a las circunstancias, la mayoría basadas en la amenaza, el maltrato y la
desautorización entre los padres.
Palabras clave: Prácticas de crianza, necesidades cognitivas -emocionales, primera
infancia, estilos de crianza.
7
Abstract
The present research is carried out by means of an intervention on kids aging from 3
to 5 years old in the kids center Foundation Las Golondrinas at Caicedo, Medellin, with the
purpose of finding the existent relationship on the way that the upbringing practices have
been being applied, how they can generate cognitive-emotional needs on the kids and how
the different upbringing styles influence on the integral development of the kid in every
single context.
In order to guide this research, it was decided to use different strategies that allow to
link up the participation of the children, the families and the educators through reflexive
workshops which based on several activities enable the direct and indirect observation,
field diaries, interviews, and life stories, in that way, it is possible to analyze the gathered
information in order to draw conclusions and findings of the research group regarding the
made process.
It was possible then, to determine that there is indeed a direct relationship between
the implemented upbringing practices and the creation of cognitive-emotional needs such
as: insecurity, anger, inattention, rebellion, and inability to socialize with their peers, which
are all generated by the family due to the fact that they apply upbringing styles according to
the circumstances, most of them based on threats, abuse and deauthorization among
parents.
Key words: Upbringing practices, cognitive-emotional needs, early childhood, upbringing
styles.
8
Introducción
Las familias del Centro Infantil Fundación las Golondrinas se ve como son las
principales personas significativas de los niños de este lugar, repercutiendo en la influencia
que estos tienen con respecto al desarrollo socio afectivo y cognitivo de ellos, ya que por
ser las bases de su desarrollo integral son quienes promueven o limitan los procesos que se
deben ejecutar para lograr su evolución en los diferentes contextos y situaciones a los que
se verá inmerso.
En el presente documento se encuentra el proceso de una investigación cualitativa,
basada en la hermenéutica, realizada durante los años 2015-2016 sobre la implementación
de las prácticas de crianza y la creación de necesidades cognitivas –emocionales en niños
de 3 a 5 años.
El interés por llevar a cabo dicha investigación surgió desde los interrogantes que
los docentes manifiestan a la hora de relacionarse con los niños y observar diferentes
características desde lo socio afectivo y cognitivo poco convencionales de acuerdo a su
ciclo vital y por tanto abordar ciertas reacciones como la rabia, el temor, la agresividad de
manera más directa, desde las situaciones a las que son participes en su familia.
Uno de los objetivos cruciales fue indagar las posibles causas que conllevan al
desarrollo de las necesidades educativas especiales entendida como la vinculación entre lo
cognitivo y emocional, lo cual fue evidente en los análisis de cada una de las estrategias
implementadas y que por tanto logra confirmar dicha hipótesis.
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1. Planteamiento del Problema
“Si los niños viven con hostilidad, aprenden a ser agresivos.
Si los niños viven con miedo, aprenden a ser aprensivos.
Si los niños viven con tolerancia, aprenden a ser pacientes.
Si los niños viven con elogios, aprenden a apreciar a los demás.
Si los niños viven con aceptación, aprenden a amar.
Si los niños viven con aprobación, aprenden a valorarse.
Si los niños viven con afecto, aprenden que el mundo es un maravilloso lugar donde vivir”
Dorothy Law Nolte (1954)
Hablar de prácticas de crianza en la actualidad puede ser contradictorio, denso e
inquietante por el siglo en que se vive al contar con diferentes núcleos familiares, padres sin
experiencia y tipos de formación evidenciada de generación en generación. Las prácticas de
crianza se presume son la guía que todo padre de familia debe utilizar o seguir para darle la
adecuada formación a sus hijos, o un estilo educativo que cada familia adopta y práctica.
Con esto; la familia es escenarios de socialización primaria de todo ser humano, es
dónde a partir de sus costumbres, actitudes y creencias asumen el rol de velar por los
derechos de los niños y niñas, de vincularlos a ambientes saludables que ayuden al
desarrollo integral de cada uno y de ser la base en la que se edifica la identidad y la
autoestima para lograr convertirse en un sujeto político y social.
Luego de pasar por el siglo XX, una época en la que el cuidado de los niños y
niñas recae sobre personas ajenas a la familia, o en la que, simplemente, algunos de ellos no
corrían con tan buena suerte de nacer bajo un “núcleo familiar” y por lo tanto quedaban en
manos del Estado o peor aún morían en sus primeros meses de vida por ser hijos de la
pobreza, se pasa a un periodo en el cual las estrategias de formación que cada niño requiere
se maximizan porque no se cuenta con relaciones estables, tolerantes y/o ejemplares dentro
de los núcleos familiares, lo que contribuye al deterioro de los procesos y que conllevan,
sin pensarlo, a encapsular al niño o la niña en medio de todos los problemas, desconociendo
10
que ellos no son una tabula rasa ni un ser vivo al cual no le afectan las problemáticas que se
presentan a su alrededor.
Los anteriores cambios de paradigma han hecho que este trabajo se concentre en
un acercamiento a las diferentes prácticas de crianza y cómo estos influyen en la formación
de niños y niñas con necesidades cognitivas y emocionales.
Ahora bien es indiscutible que los castigos, premios, maltratos por parte de los
padres al interior del hogar hacia sus hijos son conductas que de manera frecuente se
presenta sin importar la condición económica y social y que en un alto porcentaje genera
conflictos familiares a nivel emocional y conductual en cada uno de los miembros de la
familia especialmente en los niños, de ahí que lleguen a las salas de desarrollo, niñas y
niños aburridos, inquietos, inapetentes, con conductas agresivas o temerosas y como
consecuencias con dificultades para adaptarse a las diferentes rutinas del centro infantil, sin
embargo los adultos al darse cuenta de su incidencia en el estado de ánimo del niño, pocas
veces asumen apropiadamente su rol y toman las medidas que para el caso corresponden.
Con el fin de profundizar en este planteamiento se hizo necesario realizar un
recorrido por una serie de procesos investigativos, que brindaron la posibilidad de conocer
más al respecto del tema de interés para esta investigación, permitiendo así abrir un
panorama de posibilidades frente a las causas de las problemáticas consideradas, con la
debida calidad de los temas tratados.
Por otro lado, las prácticas de crianza están inmersas en diferentes aspectos de la
vida del sujeto como es el ámbito personal, familiar y social, los cuales generan diversos
aprendizajes que el niño asimila desde su diario vivir que de una u otra forma marcan el
comportamiento del niño el cual exterioriza con sus sentimientos y emociones.
En el ámbito académico puede encontrarse una gran dificultad, exactamente
cuándo padres y docentes orientan al niño por caminos distintos y cada uno establece sus
propias prácticas y acuerdos los que conllevan a confundirlos. Para ser más concisos es
necesario que los diferentes ambientes en los que se desenvuelve el niño tenga una
11
adecuada comunicación y estén más relacionados con las normas que se llevan en ambos
ambientes con ellos para facilitar el desarrollo de habilidades sociales y pro sociales.
Por tanto, el desarrollo de esta investigación estará orientado a identificar, analizar
e interpretar ¿Cómo los tipos y prácticas de crianza generan niños y niñas de 3 a 5 años
con necesidades cognitivas - emocionales? Además, se estiman otras preguntas que
emergen del interrogante principal para ampliar y sustentar la reflexión inicial: ¿Qué tipos,
y/o prácticas de crianza se han generado al interior de las familias? ¿Existe un vínculo
estrecho entre los cambios emocionales y cognitivos? ¿En qué afecta el inadecuado manejo
de las prácticas de crianza en el hogar? ¿Cómo la mala instauración de las prácticas de
crianza impacta en el comportamiento de los niños y las niñas?
Para apoyar esta investigación es necesario articular otras que den a conocer la
importancia de las prácticas de crianza en la formación de niños y niñas, retomando con
ello una investigación realizada durante el año 2010 por Julia Alonso García y José María
Román Sánchez, cuyo objeto de estudio fueron familias de nivel medio a quienes se les
analizó la relación de autoestima, estilo educativo e identificación familiar, llegando a la
conclusión de que las prácticas de crianza equilibrada generan mayor autoestima en el niño
pero si es lo contrario se verá afectada.
Ángela Cuervo Martínez investigó acerca de la relación entre las prácticas de
crianza y el desarrollo socio afectivo durante la infancia, encontrando como resultado que
la familia cumple un papel primordial en la vida de cada niño y es quien impulsa y facilita
el desarrollo de conducta pro social y la autorregulación emocional.
En esa misma línea una investigación realizada por Natalia Franco Nerín,
Miguel Ángel Pérez Nieto y María José de Dios Pérez (2014) enfoca su
atención en La relación entre las prácticas de crianza parental y el desarrollo
de síntomas de ansiedad y comportamientos disruptivos en niños entre 3 y 6
años de edad (p. 1).
12
La conclusión que arroja esta investigación tiene que ver con la poca eficiencia
emocional de los padres las cuales generan trastornos en la vida del niño, provocando con
ello un bajo desempeño de sus emociones, afectos, sociabilidad y cognición.
Entre estas podemos encontrar un sin fin de investigaciones que respaldan y son
del interés de esta investigación además de las que se pueden encontrar en los antecedentes.
Es claro entonces que la mayoría de los comportamientos de los niños y niñas
están directamente relacionados con las prácticas de crianza que ejerce cada familia y con
el contexto en que se desenvuelve, a medida que los desarrollos sociales, culturales y
políticos se diversifican, la familia también cambia con nuevas condiciones; en este caso, el
objeto de estudio será intervenido en una población vulnerable de la comuna 8 de la ciudad
de Medellín, la cual cuenta con estratos 0, 1, 2 y 3, familias monoparentales, desplazadas,
divorciadas, extensas, nucleares, conyugales, de reproducción y/o supervivencia, de las
cuales, la mayoría son provenientes del chocó o representativos de los diversos grupos
étnicos del país como las culturas afrocolombianas, y que quizás, algunas de ellas
comparten la formación de sus hijos con diferentes instituciones educativas que están en
pro de un buen desarrollo integral.
1. 1. Antecedentes
Numerosos estudios sobre prácticas de crianza se han llevado con el fin de
entender mejor la importancia de éstas en los comportamientos de los niños, para el
presente estudio se relacionarán varios de ellos derivados de investigaciones de diferentes
programas de pregrado y posgrado, encontrados a nivel local, nacional e internacional, los
cuales pueden ser complementarios y relevantes a la hora de analizar esta problemática
actualmente.
13
1.1.1 Locales
1.1.1.1Prácticas de crianza, implicación directa en la construcción de tejido social
En primera instancia, se hará mención a la tesis de Claudia Cristina Castiblanco
Castillo y Maritza Valbuena Rojas de la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la
Corporación Universitaria Minuto de Dios de Soacha, quienes en el año 2012 realizaron un
estudio en niños de 9 a 12 años del colegio Julio César Turbay, sobre las prácticas de
crianza que “han sido impartidas dentro de la formación y el cómo estas influyen en las
relaciones con su entorno, específicamente el académico.” (p. 19).
Dentro de sus apartes, hicieron un rastreo en donde se recolecto información de
acuerdo a la forma en como los niños se comportan, su grado de compromiso con la
asistencia y rendimiento académico, a partir de la Etnometodología propuesta por Harold
Garfinkel con herramientas como: Entrevistas, grabaciones, y registros etnográficos como
los diarios de campo.
Finalmente, de su trabajo quedaron varias conclusiones, es indispensable que los
niños y niñas a partir de la formación académica desarrollen prácticas de crianzas con el fin
de interiorizar la importancia de asumir comportamientos asertivos.
Además, es necesario que este proceso sea intervenido por profesiones que
orienten a los padres de familia y los niños sobre las prácticas de crianza asertivas para
llevar a cabo la identificación de problemas de cada familia y por ende contribuir a una
solución.
14
1.1.1.2 Prácticas de crianza y factores de riesgo que influyen en el ejercicio de la
norma y la conducta en los niños y niñas del hogar infantil el raizal, nivel pre-
jardín a
La presente investigación estuvo a cargo de Yudis Rosa Morales, Ruth Córdoba
Murillo y Lisseth Tascon Palacios estudiantes de Pedagogía Infantil de la Corporación
Universitaria Minuto de Dios.
Este proceso investigativo se llevó a cabo a partir de estudios de casos e
Investigación Acción Participativa en el Municipio de Bello, dirigido a la población de
niños-niñas, docentes y padres de familia, con la finalidad de “descubrir las causas de
aquellos comportamientos no aptos para una buena formación tanto interior como exterior
de los niños y niñas, de igual manera, sensibilizar a los padres de familia que son los ejes
principales.” (p. 4).
El resultado de la investigación se obtiene a través de repetidas observaciones
realizadas en el Hogar Infantil el Raizal a nivel Pre Jardín A con niños y niñas de 3 a 4 años
de edad.
Algunas de la conclusiones arrojadas de esta investigación dejan claridad de la
falta de acompañamiento que viven a diario los niños y niñas, además factores como, la
ruptura familiar la falta de normas claras en el hogar, niegan un ambiente adecuado que
oriente y prepare a los niños y niñas para enfrentarse a los problemas de una sociedad,
además es inquietante la desarticulación total entre el jardín y los hogares generando un
desligamientos y división del seguimiento de los pactos de convivencia en el centro infantil
y en el hogar.
15
1.1.2 Nacionales
1.1.2.1 Estudio sobre las prácticas educativas parentales y su relación con los
trastornos de conducta en la infancia
La tesis doctoral realizada en la Universidad de Córdoba por Antonio Félix Raya
Trenas en el año 2008, se enfoca en las prácticas educativas parentales y su relación con los
trastornos de conducta en la infancia, donde influye la relación entre padres e hijos como
fuente primaria de educación, aplicando Estudios de Casos como metodología, con el
propósito de determinar factores familiares y transformar conductas para lograr una
educación con calidad. Para su realización hicieron parte padres y madres de niños en edad
preescolar (3-6 años), pertenecientes a dos colegios de Madrid y Toledo.
Los resultados obtenidos muestran que, a partir de los contextos socioeconómicos
y culturales, determinadas actitudes, prácticas de crianza, normas, nivel de agrado y
responsabilidad con la crianza y autonomía, influyen de manera significativa en el
desarrollo y crecimiento de los niños y niñas.
Por tanto, a partir de esta investigación se percibe la necesidad de acrecentar
programas de educación familiar que impliquen cambios en la forma de cómo crían o
educan a niños y niñas con necesidades educativas especiales basándonos en la parte
cognitiva y emocional, en las prácticas disciplinarias y en la atención que los padres prestan
a sus hijos como estrategias preventivas.
1.1.2.2 Prácticas, creencias y prácticas de crianza relacionadas con el castigo y su
transmisión generacional
Sandra Pulido, Juliana Castro Osorio, Marlyn Peña y Diana Ramírez de la
Universidad del Bosque fueron las encargadas de realizar la presente investigación en el
año 2012 con el objetivo de “describir las prácticas, creencias y prácticas de crianza
16
relacionadas con el castigo y su transmisión generacional en cuatro familias de nivel
socioeconómico bajo de la ciudad de Bogotá.” (p. 245).
El enfoque metodológico que oriento la presente investigación fue de tipo
exploratorio descriptivo con técnicas cualitativas como estudio de casos y hermenéutica
utilizando recursos como entrevistas, historias de vida, observaciones de campo, que
ayudaron a llegar a conclusiones como: que la constitución de la familia y sus
particularidades influye directamente los procesos de socialización de los niños y niñas, se
estigmatiza además al niño y niña como fuerte y frágil, y al castigo como formador,
ambivalente, maltratante y temido.
Del mismo modo, es importante tener en cuenta los hallazgos de esta investigación
con el fin de “diseñar programas que promuevan mejores prácticas de crianza, no solo que
estén a los padres y madres sino a las personas encargadas de educar la mayor parte del
tiempo a los niños y a las niñas.” (p. 257).
1.1.2.3 Prácticas de crianza y desarrollo socio afectivo en la infancia
Ángela Cuervo Martínez, de la Fundación Universitaria los Libertadores ofrece en
este artículo una revisión sobre la relación entre las prácticas y las prácticas de crianza, el
desarrollo socio-afectivo durante la infancia, utilizando técnicas metodológicas como
Investigación Acción Participativa aplicado a familias de Bogotá en el año 2009.
En esta investigación se da a entender la importancia y relación que tiene la salud
mental de los padres, las prácticas de crianza y el desarrollo socio-afectivo de los niños y
niñas, y que estos están sujetos a cambios según las diversas variables evolutivas y
contextuales.
Para finalizar se considera necesario brindar una orientación y apoyo a partir de
programas que contribuyan a la prevención de psicopatologías en los niños y niñas creando
conciencia en las familias y generar factores protectores de problemas comportamentales y
17
emocionales a partir de una adecuada orientación desde las prácticas de crianza. Además,
sensibilizar a los padres de familia y cuidadores sobre su responsabilidad y rol que
enfrentan a diario para de construir poco a poco el desarrollo de las competencias sociales,
la autorregulación emocional y las buenas conductas en la infancia.
1.1.3 Internacionales
1.1.3.1 Prácticas de crianza asociadas a la reducción de los problemas de
conducta infantil: una aportación a la salud pública
La tesis que se valorará a continuación fue elaborada por Silvia Morales Chainé y
Fernando Vázquez Pineda, estudiantes de la Facultad de Psicología de la Universidad
Nacional Autónoma de México, quienes llevaron a cabo esta investigación en el año 2014,
la cual buscaba identificar los componentes de un programa de entrenamiento conductual a
padres para cambiar la conducta parental y la de sus hijos. Para dicha investigación se
contó con la participación de 84 padres mexicanos de niños con dificultades en su conducta
entre las edades de 2 a 12 años. Los padres participaron en un programa de crianza
positiva, que consistió en un juego de roles que posibilito entrenar padres para lograr que
ellos reconozcan y den respuesta positiva a los diversos comportamientos que se
manifiestan en los niños, en aras de minimizar las dificultades.
Como metodología de investigación y en busca de evaluar la conducta de los niños
fue necesario hacer uso de cuestionarios dirigido a los padres de familia o personas a cargo
que dieran cuenta de las pautas de crianza ejercida con los mismos o las conductas más
dadas al interior del núcleo familiar. Así mismo, se emplearon observaciones directas en
las que se observaban las conductas y comportamientos de los padres.
Los cuestionarios psicométricos que se emplearon fueron el Inventario de
Prácticas de Crianza, el Cuestionario de Habilidades de Manejo Infantil, el
Inventario de Conducta Infantil y el Cuestionario de Validez Social.
(Morales, Vázquez, 2014, p. 12)
18
Finalmente se obtuvieron resultados positivos. Esta afirmación se hace debido a
que se observaron cambios en la conducta de los padres con relación a sus hijos, lo que
indica que en los niños también se manifestaron conductas positivas. Lo anteriormente
mencionado deja ver que los padres de familia lograron establecer reglas claras y precisas,
llevar a cabo de forma eficiente y eficaz la solución de problemas, y hacer una reducción de
los castigos.
1.1.3.2 Prácticas educativas familiares y autoestima
Otra de las tesis que permiten reflejar intervenciones en familias, niños y niñas es
la de Julia Alonso García y José María Román Sánchez de la Universidad de Valladolid,
Facultad de Educación y Trabajo Social, quienes en el año 2010 realizaron un estudio en
aras de analizar la relación entre el
Autoestima del niño, el estilo educativo familiar y las variables de identificación
familiar, en el que participaron 283 familias de nivel sociocultural medio y medio
alto. (García y Román, 2005, p. 76-82)
Teniendo en cuenta la intervención de las maestras de los niños que pertenecen a estos
núcleos familiares, los cuales se encuentran entre las edades de 3 a 5 años.
Para ello, diseñaron su propio protocolo de recolección de datos. Para ellos fue
necesario utilizar un tiempo y espacio común de los padres e hijos.
La evaluación de la autoestima del niño, sin embargo, se hizo en dos tiempos y
espacios diferentes: a) En el centro escolar: la autopercepción, de forma individual
con cada niño y niña, y la heteropercepción a partir de la observación conductual
de sus maestras. b) En el hogar familiar: la heterovaloración, a partir de la
observación conductual de la familia, habitualmente las madres. (García y Román,
2005, p.78)
19
Con este estudio se logró asemejar el impacto que tienen las diferentes prácticas de
crianza y la correlación entre padres e hijos en la autoestima de los mismos. Sin embargo,
en su investigación quedaron pendientes dos hipótesis que hasta el momento no se ha
llevado a cabalidad: si los padres usan con mayor frecuencia prácticas de prácticas
equilibrados, corresponderá a un mayor grado de autoestima por parte de los hijos, pero si
por el contrario el estilo de prácticas utilizado es el autoritario se cree que el niño afectará
el grado de autoestima en ellos.
1.1.3.3 Relación entre las prácticas de crianza parental y el desarrollo de ansiedad
y conductas disruptivas en niños de 3 a 6 años
La investigación dada en la ciudad de Madrid por los autores Natalia Franco
Nerín, Miguel Ángel Pérez Nieto y María José de Dios Pérez se llevó a cabo con padres y
madres de familia con nacionalidad española pertenecientes a un nivel socio económico
medio, sus hijos estudian en los colegios de Madrid y Toledo. Esta tiene como objetivo
principal “investigar la relación entre las prácticas de crianza parental y el desarrollo de
síntomas de ansiedad y comportamientos disruptivos en niños entre 3 y 6 años de edad.”
(2004, p.82)
Para la recolección de datos se utilizaron cuestionarios que recogían los siguientes
ítems: Disciplina, compromiso con la crianza, distribución del rol, satisfacción con la
crianza, autonomía, afecto y apoyo.
A cada padre y madre de familia se le realizó un proceso de identificación y
partiendo de esto se daba paso a la exploración de las diversas prácticas de crianza y de
cómo estos influyen en la vida del sujeto.
Se logró percibir durante la investigación como las prácticas de crianza juegan un
papel preponderante en el desarrollo evolutivo del niño, no es lo mismo un niño que ha
recibido en su vida alta dosis de aprobación y estímulos por parte de los adultos a aquellos
que se crían en hogares demasiado afligidos, caóticos o negligentes, sin duda el segundo
20
grupo de niños se verán enfrentados al fracaso y tendrán una visión derrotista de la vida a
comparación del primer grupo de niños que esperan los grandes retos porque saben que
llegarán al éxito.
Todo ello conlleva a dificultades en las conductas del niño, se pueden despertar los
índices de ansiedad y miedo, además de generarse conductas opuestas y agresivas. Esto fue
claro y evidente en los resultados donde se demostró que padres poco eficientes
emocionalmente generan trastornos en sus hijos, provocan que estos no se desempeñen
adecuadamente en sus propias emociones, ni a nivel afectivo, social y cognitivo. Pese a que
son sujetos que se preocupan más a menudo, se muestran menos afectuosos, a nivel social
son menos populares y hábiles socialmente y tiene más problemas de conducta; además de
que se distraen con más frecuencia y son menos eficaces a nivel cognitivo.
Por lo ya mencionado anteriormente se convierte en una necesidad la promoción
de programas que integren el núcleo familiar para fomentar nuevas formas de enseñar, de
prácticas disciplinarias y de atención a los niños y niñas.
1.1.3.4 Exposición a la violencia entre los padres, prácticas de crianza y malestar
psicológico a largo plazo de los hijos
El estudio titulado “exposición a la violencia entre los padres, prácticas de crianza
y malestar psicológico a largo plazo de los hijos” en la ciudad de Madrid por los autores
Manuel Gámez Guadix y Carmen Almendra, tiene como finalidad hacer un exhaustivo
análisis sobre la relación de la violencia entre la pareja de esposos durante la infancia del
niño y sobre cómo esto trae en la adultez traumas psicológicos, teniendo también como
punto de referencia la prácticas de crianza impartidas por estas parejas. (2011, p.123)
Para llevar a cabo este estudio fue necesaria la participación de 680 estudiantes
pertenecientes a las distintas facultades de la Universidad Autónoma de Madrid, elegidos
aleatoriamente. La recolección de datos se llevó a cabo por medio del cuestionario IPS en el
que se tuvieron en cuenta los siguientes ítems: Violencia intrafamiliar, disciplina severa,
21
afecto y apoyo parental, consistencia interparental, consistencia intra-parental, malestar
psicológico, abuso físico, deseabilidad social nivel educativo de los padres.
Los estudiantes dieron a conocer que durante su infancia presenciaron violencia
entre sus padres siendo la agresión verbal la conducta más frecuente, las prácticas de
crianza ejercidas por los mismos eran severas y de maltrato físico, además de que dieron
conocer cómo esto ha ocasionado para ellos en la actualidad un trauma psicológico.
Es preciso decir que la presencia actos violentos en la vida de un niño y el tipo de
crianza que haya tenido, pueden generar traumas y dificultades que quizás no salgan a
relucir inmediatamente, pero que con el paso del tiempo serán cada vez más notorias en los
diferentes aspectos de su vida. El conflicto y la violencia influyen indudablemente en el
afecto y conductas de los niños lo que termina afectando la relación padres e hijos debido a
que se reducirán los espacios de interacción positiva y las estrategias educativas quedan
más frágiles; lo que da lugar a nuevas prácticas de crianza no tan adecuadas y que generan
más conflicto a nivel familiar y personal.
De acuerdo a lo abordado es de suma importancia que los padres tengan en cuenta
las siguientes dimensiones fundamentales que pueden verse afectadas gracias a la violencia
al interior del hogar: Implementación de estrategias de disciplina agresivas para corregir a
los niños, recurriendo a golpes, cachetadas, amenas y gritos, disminución de interacción
positiva con el niño, demostrándole poco apoyo, aceptación y afecto, la violencia en la
pareja disminuye la consistencia interparietal, al haber conflicto cada padre no da al niño
la importancia suficiente, de ahí que se generen distintas formas de castigar y criar al niño.
1.1.3.5 Familias adolescentes: entre no ser, no tener y no acceder
El presente artículo titulado “Familias adolescentes: Entre no ser, no tener y no
acceder” en el país de chile por Celedón y Garri; propone abordar,
la problemática y reconocimiento de las familias adolescentes desde la
perspectiva de la política pública, con el fin de otorgar la posibilidad de que
22
puedan conciliar y ser protagonistas de sus propias trayectorias, vinculados a
los múltiples fenómenos que se dan en las interacciones sociales. (2004, p.
67)
Este es un tipo de estudio cualitativo basado en una metodología de descripción e
interpretación. Para llevarlo a cabo fue necesaria la participación de padres y madres
adolescentes de diversos sectores, tanto rurales como urbanos, a quienes se les aplicó 60
entrevistas. La elección de los entrevistados tuvo en cuenta los siguientes criterios: Madres
adolescentes sin pareja, madres y padres adolescentes viviendo en pareja, padres
adolescentes que no viven con sus hijos. (Beghelli, 2015, p. 8)
Durante el estudio realizado y al analizar las entrevistas se pudo constatar algunas
dificultades que tienen los padres adolescentes luego del nacimiento de su hijo. Es claro
que el nacimiento de un bebé cambia dinámicas en la vida de pareja y más aún cuando
vamos hablar de embarazo adolescente.
Es preciso mencionar que los padres y madres adolescentes sufren
transformaciones en muchos aspectos de su vida, ahora deben pensar no solo en ellos sino
en cómo obtener un nivel socioeconómico adecuado para brindar al niño todo lo que
requiere, posiblemente sus expectativas y proyecto de vida cambien o se aplacen, quizás
haya disputas entre ambos padres porque ya no pueden disfrutar como antes lo hacían;
además de que el cuidado del niño se pone en juego.
En las entrevistas realizadas muchos de los adolescentes dan a conocer sus temores
al enfrentarse a un embarazo a temprana edad, temores que no son capaces de compartir
con sus familiares y que están muy asociados con la falta de apoyo, no ser reconocidos por
su corta edad como padres y madres, los pocos recursos para brindarle a su hijo una
estabilidad económica y para conformar una familia. La palabra clave es
RESPONSABILIDAD, debido a que se adquieren nuevas obligaciones que deben ser
asumidas frente a la familia, la pareja y la sociedad, todo con el fin de proteger y promover
las necesidades elementales del niño como la alimentación e higiene.
23
2. Justificación
El motivo por el cual se quiere realizar la investigación responde básicamente a la
necesidad de encontrar respuestas sobre los comportamientos de los niños y niñas en su
interacción dentro de la sala de desarrollo, debido a que son ellos los principales actores de
una sociedad y también los más vulnerables ante los agentes negativos que puedan
intervenir en el proceso de formación de cada uno.
A nivel personal porque es necesario traer a colación diferentes problemáticas que
nos rodean, analizarlas, identificarlas y contribuir de cierta manera a la solución y/o
transformación de realidades. En este caso, es importante determinar los factores de riesgo,
y los problemas cognitivos y/o emocionales a los que se ven implicados los niños y niñas
de 3 a 5 años.
Las prácticas de crianzas enseñadas y aprendidas de manera inconsciente o
consciente generan diferentes comportamientos en los niños y niñas sobre cómo deben
enfrentarse a situaciones del diario vivir, se generan reacciones que afectan sus habilidades
comunicativas, además la forma como se relacionan con otras personas de manera física y/o
verbal.
Es necesario aclarar que la mayoría de los padres actualmente no tienen claro que
será lo mejor para sus hijos en un momento determinado, ya que le dan más importancia al
conformismo que busca la sociedad sin tener presente el papel fundamental que tiene el
núcleo familiar en el proceso socio afectivo, la interiorización de normas, y los espacios de
socialización.
La familia es la que le permite al niño su desarrollo social, el cual le ofrece través
de espacios de socialización, interiorizar los elementos básicos de su sociedad con la
24
finalidad del desarrollo personal, cada familia asume las prácticas de crianza dependiendo
de sus características, dinámica y el contexto que los envuelve, así como los bienes
económicos y apoyos, entre otros.
El quehacer docente comprende estas situaciones por tanto asume el papel más que
ser uno de los protagonistas principales en el desarrollo de los niños y niñas, es el centro de
muchas realidades que continuamente van cambiando, pero para poder intervenir en éstas,
el agente educativo debe poseer una perspectiva holística que implica compromiso y rigor
para afrontar las situaciones que se presentan, en este caso las dificultades académicas en la
sala de desarrollo, los comportamientos inadecuados, el incumplimiento de las normas y los
estados de ánimo tan inestables que los niños y niñas manifiestan.
Por lo tanto, esta investigación quiere llegar al punto más crítico de estas
situaciones negativas que se viven a diario en la escuela, y de esta manera comenzar por
intervenir las familias y definir las dificultades padecidas según las prácticas y prácticas de
crianza que utilizan para llevar a cabo la formación de sus hijos, teniendo en cuenta que los
niños a esta edad aprenden a identificarse como sujetos que tienen fortalezas y limitantes,
que manifiestan emociones y sentimientos; Es ahí donde la familia debe asegurar este
adecuado desarrollo socioemocional a partir de una comunicación asertiva, el
establecimiento de las normas y el frecuente acompañamiento en el proceso de crecimiento
y desarrollo de los niños.
El desarrollo de esta investigación beneficiará no solo a las próximas
investigaciones sino también a la Facultad de Educación de la Universidad de San
Buenaventura, por consiguiente, a las agentes educativas que se enfrenten a esta situación,
de igual manera servirá como elemento de valoración y guía para los intermediarios
psicosociales y para los padres de familia que requieran de alternativas de solución sobre
los comportamientos inapropiados de los niños y niñas.
25
3. Objetivos
3.1. Objetivo General
Determinar la relación existente entre el desarrollo emocional y cognitivo en el
marco de las prácticas de crianza de niños y niñas de 3 a 5 años de edad.
3.2. Objetivos Específicos
Analizar la selección y dirección de las prácticas de crianza en niños y niñas.
Identificar la práctica de crianza predominante y su influencia en el desarrollo
emocional y cognitivo del niño y la niña.
Indagar las posibles causas que conllevan al desarrollo de las necesidades
educativas especiales entendida como la vinculación entre lo cognitivo y emocional.
26
4. Marco Teórico
4.1 Capítulo 1: Prácticas de crianza
Los niños y niñas suelen ser extraordinariamente sensibles.
El ser humano es dueño de su destino;
Pero los niños están a merced de quienes lo rodean”
J. Lubbock (s.f)
En este capítulo se describen elementos vitales del concepto prácticas de crianza y
cómo afectan las interacciones de los niños en diversas actividades académicas y sociales.
Ante todo, la palabra crianza según La Real Academia Española tiene relación con
el acto de criar, alimentar, cuidar, instruir, dirigir y formar a un sujeto. En otras palabras “es
el proceso de educar y orientar a niños y jóvenes en la aventura de la vida para que avancen
armoniosamente en su crecimiento y desarrollo” (Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar, 2006) Por consiguiente al hablar de prácticas de crianza se hace referencia a la
relación entre padres e hijos que requiere poner en función una práctica, estilo o estrategia
de crianza en aras de educar y orientar a los niños para su integración social.
Eraso, Bravo & Delgado (2006) citado por (Izzedin Bouquet & Pachajoa Londoño,
2009) se refieren al,
Entrenamiento y formación de los niños por los padres o por sustitutos de los
padres. También se define como los conocimientos, actitudes y creencias
que los padres asumen en relación con la salud, la nutrición, la importancia
de los ambientes físicos y sociales y las oportunidades de aprendizaje de sus
hijos en el hogar (…). La crianza del ser humano constituye la primera
historia de amor sobre la que se edifica en gran parte la identidad del niño y
se construye el ser social (p.1).
27
Este concepto ha sufrido cambios históricos asociados a la personalidad como
resultado de la interrelación que se da entre padres e hijos, producidos gracias a los cambios
sociales de cada época. En el siglo XIX en la antigua Grecia, América y Europa la pauta de
crianza predominante era el castigo físico severo, también las implementaciones de
historias aterradoras eran usadas para horrorizar a los niños y controlarlos. En la actualidad
es posible ver como las prácticas de crianza se han volcado al cuidado del niño, a su
protección, a un sistema más humanitario que tiene como fin único amparar los derechos de
los niños y niñas para que estos tengan un pleno desarrollo durante toda su infancia.
Sin embargo, haciendo una búsqueda más detallada acerca de las prácticas de
crianza se puede percibir como en culturas antiguas como Roma, la protección de los niños
no era una práctica muy sobresaliente, muchos eran negados y no aceptados en sus familias
si así lo determinaba el padre, incluso este tenía la potestad de impedir el embarazo en
cualquier momento de la gestación en especial si este no era concebido en matrimonio,
debido a que el niño antes de nacer no tenía ningún valor. En esta misma cultura era común
dar a personas caritativas los niños cuando los padres no contaban con recursos económicos
adecuados.
Así mismo en La Edad Media se les da poca importancia a las necesidades de los
niños muchos eran abandonados pese a la carencia de recursos económico de los padres; la
disciplina y obediencia cobra gran importancia en esta época, el adulto es el referente de
autoridad supremo y todo se limita a la instrucción.
Más adelante, en la época de Carlos III se crean escuelas especialmente para niños
pobres y abandonados, las cuales era gratuitas y sus funciones eran educativas enseñando
labores y oficios propios de cada sexo, la educación de las niñas se destacaba por aprender
la educación cristiana y las labores domésticas y manuales; para los hombres además de
aprender la vida religiosa y moral debían convertirse en hombres útiles para la patria.
28
Carlos III hizo que niños abandonados y sin educación, de padres que vivieran del
ocio fueran llevados a hospicios; evitando ser utilizados para pedir limosna. Con la
intención de prevenir y proteger la infancia, se daban amonestaciones a aquellos padres de
niños que no estudiaran en aras de que pronto fueran educados, de lo contrario se les
buscaba otra familia. Muchos hospicios, casas de caridad y hospitales fueron dotados de
escuelas y talleres para los niños.
A partir del siglo XVIII el niño cobra mayor importancia en la sociedad, pasa de
ser un adulto en miniatura a convertirse en un sujeto que debe ser comprendido, se le
dedica más tiempo a su educación y cuidado. Sin embargo, a comienzos de este siglo estas
consideraciones se dan únicamente a hijos de familias pudientes mientras que aquellos
niños pertenecientes a padres obreros y labradores no contaban con los mismos derechos.
Ahora bien, autores como DeMause (1991), citado por (Izzedin Bouquet &
Pachajoa Londoño, 2009) dan a conocer la historia de la infancia dividiéndola por épocas,
haciendo énfasis en la transformación que ha sufrido las prácticas de crianza con el paso del
tiempo. Así pues, en el siglo IV es común ver que padres que desconocen como brindar
cuidado a sus hijos recurran al infanticidio de igual forma durante el mismo siglo hasta
llegar al S.XIII es frecuente el abandono de niños en monasterios o conventos, donde eran
dados en adopción a otras familias. Nada parecido a lo que ocurre en el siglo XIV-XVI
debido a que en esta época es tarea de los padres formar a sus hijos, para ello muchos
recurren a manuales de instrucción infantil que los ayuda a educarlos; los castigos físicos y
psicológicos eran muy utilizados en este siglo. Poco a poco específicamente en el siglo
XVIII hay más cercanía entre padres e hijos y la instrucción y disciplina juega un papel
preponderante. Así se acerca el siglo XIX donde los padres se vuelven orientadores de sus
hijos y procuran que estos se adapten y socialicen con su entorno y finalmente a mediados
del siglo XX se suprimen los castigos físicos y psicológicos por el dialogo.
Así pues, las prácticas de crianza ejecutadas por cada padre en cualquier época o
lugar han tenido como finalidad orientar las conductas de los niños como ellos lo creen
conveniente según su forma de pensar y el contexto en el que se desenvuelve. De manera
29
que los padres transmiten hábitos, valores, afectos, normas y modelos a seguir por medio de
las pautas de crianza establecidas, que varía según cada padre y sus efectos en los niños
también es diferente, incidiendo en los comportamientos, sentimientos, emociones, formas
de pensar y expresar de cada sujeto. De ahí el valor de conocer la educación que se les
brinda a los niños al interior del núcleo familiar, pues es primordial para comprender sus
comportamientos y actitudes.
Por tanto, la familia se constituye como el núcleo fundamental de la sociedad que
suministra al niño valores y sirve para que tenga un mejor desarrollo y socialización en su
contexto. En base a esto es preciso indicar que al interior de ella se transfieren a través del
tiempo, de generación en generación, formas de cuidar y educar a los niños que no están
definidas, pues no existe un modelo único. Al interior de cada núcleo familiar se puede
encontrar un modelo de padre con una modalidad propia de prácticas de crianza. Según
Baumrind (1973) citado por (Ramírez, 2005) existen algunos estilos de crianza adoptados
por los padres a los que denomina estilo autoritario, estilo permisivo, estilo democrático y
estilo de negligencia-rechazo. Estas difieren unos de otros por el nivel de exigencia, control
y comunicación que los padres requieren a sus hijos.
El estilo autoritario, también denominado estilo de crianza represivo se caracteriza
por la rigidez hacia sus hijos, la obediencia y disciplina cobran un valor importante y son
sinónimo de virtud. Los padres que se rigen bajo este estilo forman en disciplina bajo el
castigo, y el diálogo es poco utilizado. Bajo esta pauta de crianza se forman niños tímidos,
retraídos, coléricos, poco sociables, hostiles, con baja autoestima, agresivos, desconfiados y
vulnerables a cualquier tipo de tensión.
El estilo permisivo, también denominado no restrictivo refleja una relación padre e
hijo basada en el afecto, sin embargo, los padres de este estilo son incapaces de controlarlos
y aceptan cualquier comportamiento del niño, evitan los castigos y no establecen normas ni
hay una orientación adecuada. Los niños formados bajo este estilo no tienen una noción
clara de autoridad, no tienen disciplina, son caprichosos y se les dificulta controlar sus
impulsos.
30
El estilo democrático, también llamado estilo equilibrado se basa en una adecuada
y asertiva comunicación entre padres e hijos, los padres que se adhieren a este modelo de
crianza son afectuosos, responden a las necesidades de los niños, tienen presente las
opiniones de sus hijos, les suministran responsabilidades y las normas son claras, se usan
los estímulos a cambio de los castigos, dando como resultado la formación de niños
independientes, responsables y con altos niveles de autoestima.
Finalmente, el estilo de crianza de negligencia-rechazo es en el que generalmente
se encuentran padres poco receptivos y exigentes, que les es indiferente el niño y son
negligentes en su crianza. Los niños que son formados bajo esta pauta de crianza recibe
pocas normas, afecto, sus conductas y comportamientos son ignoradas y los padres no se
esfuerzan ni sienten preocupación ante las dificultades, por el contrario, actúan como si
nunca las hubiera.
Los anteriores estilos de crianza están determinados por diversas características
como la experiencia previa de los padres y el contexto en el que se desenvuelve la familia.
Generalmente la práctica de crianza adoptadas por los padres se debe a que de esa misma
forma fueron educados, así podemos ver cómo este concepto se convierte en un asunto
generacional en el que influye de alguna manera el contexto en el que se encuentra inmerso
la familia.
Villegas (2009) citado por (Castiblanco & Valbuena, 2012) dice que,
Las prácticas de crianza son aprendidas por los padres de sus propios padres
y son transmitidas de generación en generación, algunas veces sin
modificaciones. Este proceso que se inicia durante la socialización del niño
en el núcleo familiar, social y cultural, lo asimilan por medio del juego de
roles, con el que se apropian de las prácticas con las que sus padres los
orientan, las asumen e incorporan, para más tarde, al ser padres,
complementarlas con sus hijos. (p. 18).
31
De lo anterior se puede inferir que la crianza de un sujeto implica un proceso de la
conducta humana basado en pautas, prácticas y creencias. Al hablar de pautas se hace
referencia a los modelos de crianza que han pasado de generación en generación para
educar, formar y guiar a un niño, las practicas siendo las acciones ejecutadas por los padres
ya sea aprendidas o imitadas con el fin de encaminar la conducta del niño y finalmente las
creencia siendo estas propias de aquellos conocimientos que cada sujeto tiene sobre la
crianza del niño, las cuales varían según las culturas y sus modificaciones a lo largo de los
años, un claro ejemplo de ello tal como lo establece Mead (1972) citado por (Vergara,
2002) se da en Rusia donde envuelven con firmeza a los niños debido a que “los consideran
tan fuertes que necesitan impedir que se lastimen. A diferencia de otras culturas que
piensan que los bebés son frágiles y vulnerables, por tanto; se les debe envolver para
protegerlos” (p. 8).
Mientras tanto, en la actualidad, la crianza de los niños se ha modificado estando a
cargo de gran variedad de personas aledañas como abuelos (as), tíos (as) y en mucho de los
casos a cargo de una madre o padre cabeza de familia. Esto debido a las nuevas estructuras
familiares que han ido surgiendo en el último siglo.
Pues bien, la familia tradicional conformada por padre, madre e hijos ha variado
tanto por su estructura como por las funciones educativas, recreativas, de ocio y
socialización que desempeñaban, actualmente ejecutadas fuera del entorno familiar por
otros agentes como la escuela. Probablemente el papel de la mujer ha contribuido de
manera significativa a esta modificación pese a los cambios que ha ido sufriendo pues si
antiguamente se limitaba a las actividades del hogar y a los cuidados del niño, ahora se
desenvuelve fuera del mismo en labores remuneradas. Así mismo los cambios económicos,
han contribuido a tal cambio, llevando a una disminución considerable en el número de sus
habitantes, pues anteriormente se contaba con familias numerosas a diferencia de hoy que
su número disminuye gradualmente con el paso de los años. De este modo y adaptando
diferentes teorías se realiza una construcción propia y por tanto se presentan a continuación
los siguientes prototipos de familias:
32
Familia nuclear: Constituida por padres e hijos.
Familia extensa: No solo incluye a la familia nuclear sino también otros miembros como
los abuelos, tíos, primos, entre otros parientes.
Familia monoparental: En este tipo de familia el niño vive únicamente con su padre o
madre. Este estilo se ha dado de manera distinta con el paso de los años pues antiguamente
se daba pese al fallecimiento de alguno de los padres a diferencia de hoy que la mayoría de
las veces es por divorcio.
Hoy en día muchos padres divorciados contraen matrimonio nuevamente, de este
modo el núcleo familiar vuelve a ser modificado, debido a que este tipo de familia
generalmente se forma por un padre con hijos y una madre con hijos o padre sin hijos y
madre con hijos y viceversa, viéndose así la unión de familias monoparentales en muchos
casos.
Otro tipo de familia: es aquellas conformadas por hermanos y amigos sin necesidad de
tener parentesco de consanguinidad.
Ahora bien, en la actualidad han ido surgiendo nuevos modelos de familia
formadas por homosexuales, quienes por lo general recurren a la adopción.
Cada núcleo familiar mencionado con anterioridad hace parte del primer grupo al
que pertenece el niño; por consiguiente, son los primeros a cargo de la educación y
socialización del sujeto. Por tanto, los estilos de crianza ejecutados al interior se convierten
en estilos de socialización entre padres e hijos que se da en aras de regular la conducta e
inculcar valores, actitudes y normas en los niños y que apuntan además a su
desenvolvimiento en el contexto social al que pertenece. Este proceso que inicia en casa se
da a lo largo de toda la vida del ser humano y permite al sujeto adaptarse a las
circunstancias de su entorno llegando así a una plena socialización con todo lo que lo rodea.
33
Aguirre (2000) dice que,
La socialización es el proceso mediante el cual los seres humanos
adquieren e interiorizan un variado conjunto de conocimientos y un saber
hacer, a la vez que construyen y consolidan su identidad individual y
social, y los lazos imprescindibles para el desarrollo del tejido social. (s.f.,
p.19).
Con relación a lo anterior, la interacción del niño y la sociedad es una entrega
mutua que implica transmisión de conocimientos entre ambas partes y que posibilita el
desarrollo de la identidad personal y social del niño. En esta interacción el niño manifiesta
comportamientos aprendidos en casa y experiencias vividas en los diversos ámbitos en los
que se desenvuelve, esto se debe a que el papel que desempeñan los padres, la escuela, la
sociedad, el estado, son fundamentales en su formación.
Al respecto, Aguirre & Durán (2000), citado por (Izzedin Bouquet & Pachajoa
Londoño, 2009) caracterizan el proceso de socialización en cinco aspectos:
1. Es continuo
2. Es interactivo: la sociedad influye en la vida de la persona a la vez la
persona participa de la vida en sociedad.
3. Posibilita el desarrolla de la identidad personal y social del individuo.
4. Le permite al individuo internalizar las normas, los valores y las reglas
que dan sentido a la cotidianidad del ambiente social en el que está
inserto.
5. La socialización de los niños se produce a través de las prácticas de
crianza. (p. 112).
Por consiguiente, lo vivido por el niño en cada uno de estos ámbitos genera
emociones determinantes en su estabilidad; por lo que es necesario verificar la forma en
34
como la sociedad y en especial los padres se dirigen a los niños pues su vida emocional se
puede ver afectada. Tal como lo menciona Goleman (1995) “las parejas más competentes
en el matrimonio desde el punto de vista emocional son también las más eficaces cuando se
trata de ayudar a sus hijos en sus altibajos emocionales” (p. 121) por tanto el tener presente
sus sentimientos le va a permitir encontrar formas positivas para tranquilizar sus
emociones. Con ello se habla de un acompañamiento inteligente y afectuoso para que haya
un acercamiento asertivo hacia los niños en aras de que estos potencien su autonomía
comprendiendo que el trasegar de su formación es un proceso que tiene límites.
Lo cual indica que una adecuada pauta de crianza aporta positivamente a la
relación padres e hijos previniendo, sin duda, efectos negativos en los comportamientos del
niño como conductas agresivas y bajos niveles de autocontrol; por el contrario, aportando a
un buen desarrollo cognitivo y emocional.
Por su parte, Patterson (1982) citado por (López, 2013) da a conocer que la
implementación de unas inadecuadas pautas de crianza en la familia genera conductas
antisociales en el niño que por lo regular promueve el incumplimiento de la norma y que
están frecuentemente asociadas a crisis familiares que surgen en muchos casos en el
proceso de criar a un hijo por factores como discapacidad, problemas de conducta infantil,
entre otras.
Figura 2. Modelo de Patterson (1982)
35
Fuente: http://goo.gl/bpSFT1
De lo anterior es pertinente dar por hecho que los padres influyen en el desarrollo
socioemocional del niño. Lo cual se exterioriza a través de las actitudes, normas a
implementar, valores, relación entre pares y comportamientos aprendidos.
Por tanto, de lo expuesto es de suma importancia reconocer que tipo de crianza
genera en los niños problemas de conducta, que si bien al realizar un análisis se debe a la
poca atención que se presta a las necesidades del niño. En definitiva, se hace imprescindible
la ejecución de una adecuada pauta de crianza para favorecer un seguro desarrollo en la
relación padres-hijos respaldando las emociones del niño frente a las adversidades
propiciadas por otros ambientes externos.
36
4.2 Capítulo 2: Necesidades educativas especiales
“La enseñanza que impacta no es de cabeza a cabeza, sino de corazón a
corazón”.
(Howard Hendricks, 1998, p. 95)
Para empezar, la educación especial en su comienzo ha estado emparentada con
la medicina y la psicología. Por lo cual se han realizado diversos estudios para poder
llegar a la descripción de los déficits, que se han ido estableciendo durante la historia, los
cuales han sido amplios y detallados. Las diversas categorías con las que cuenta este
estudio son la etiología, la cual partiendo de su objetivo es la de corregir o curar los
déficits las cuales plantea el MEN o diversos autores que llevan a cabo este tipo de NEE,
ahora bien, está la patología, que se enfoca en la parte psicológica del ser humano, donde
muestran un diagnóstico claro y preciso de cómo está el niño o adulto que manifiesta
alguna necesidad. Estas categorías repercutieron en una mirada del desarrollo, por lo cual
su mayor incremento se vio entre los años 40 y 60. El cual se enfocó particularmente en
dar atención educativa a los niños y jóvenes con diversas discapacidades en centro y
escuelas especiales distanciadas de las escuelas regulares.
En este marco se define la Educación Especial, como la atención educativa
(en el más amplio sentido de la palabra específica) que se presta a todos
aquellos sujetos que, debido a circunstancias genéticas, familiares,
orgánicas, psicológicas y sociales, son considerados sujetos excepcionales
bien en una esfera concreta de su persona (intelectual, físico sensorial,
psicológico o social) o en varias de ellas conjuntamente. (Garanto, 1984, p.
3)
En el transcurso de los años 60, se tiene en cuenta la aparición del principio de
Normalización y por consiguiente al surgir y afianzarse el concepto de Necesidades
Educativas Especiales, a partir del informe de Wernicke de 1978, surge una nueva forma
de pensar sobre la Educación Especial. Por tanto;
37
Por tanto, el “Decreto 366 de 2009: Por medio del cual se reglamenta la
organización del servicio de apoyo pedagógico para la atención de los estudiantes
con discapacidad y con capacidades o con talentos excepcionales en el marco de
la educación inclusiva”.
Así mismo, el Informe “Warnock” fue encargado por el secretario de Educación del
Reino Unido a una comisión de expertos, presididos por Mary Warnock, en 1974 y
publicado en 1978, convulsiono los esquemas vigentes y popularizó una concepción
distinta de la educación especial. El comité comenzó sus trabajos poco después de la
entrada en vigor de la Ley de Educación (para niños y niñas deficientes) de 1970.
(Warnock, 2009)
Se ve como el pensamiento sobre los fines de la educación son iguales para todos
los niños, sin importar las dificultades que presenten en sus diversos procesos de desarrollo
y, en resultado, la educación queda establecida como la labor en la que se recopilan
esfuerzos, estrategias, motivaciones para dar respuesta a las diversas necesidades
educativas de los niños, en aras de alcanzar los fines planteados. Es por ello que el objetivo
de esta particularidad educativa comienza a dar una transcendencia en sentido de que no
sólo se trata de perfeccionar los progresos en el desarrollo de la persona teniendo en cuenta
como base fundamental el tipo de su discapacidad, sino que también y especialmente de
fomentar y tener en cuenta un conjunto de apoyos y recursos que se puedan implementar
dentro del sistema educativo regular para llegar de a esta manera a una respuesta educativa
adecuada y pertinente del máximo desarrollo, de cada infante o joven.
Se ha dicho que a mediados del siglo XIX no surge la Educación Especial como
base fundamental de conocimientos tanto pedagógico como didáctico quienes son los
encargados de aquellas personas que muestran alguna dificultad. Es por esto que el futuro
de estas personas era muy diverso, ya que en un principio los niños que nacían e iban
evolucionando con cualquier necesidad, solían ser eliminadas, y fue por ello que más
adelante se construyeron los primeros asilos voluntarios para ellos.
38
Es justo decir que la mirada de esta perspectiva permite tener un aporte más
amplio sobre como la Educación Especial se interesa por asociar la acción educativa a
personas de diversas edades en diferentes ámbitos educativos formales y no formales.
A lo que Hernández (2012), dice:
“La Educación Especial como disciplina y praxis que engloba las distintas
deficiencias, su evaluación y tratamiento, es relativamente reciente” (p. 3)
De acuerdo con Hernández (2012), se ha tejido un largo camino para situar el
nuevo modelo vigente en la actualidad, teniendo como base fundamental la integración
escolar y una escuela inclusiva. Conocer esta transcendencia implica volver hasta finales
del S.XVIII, al inicio de un recorrido que comprende el comienzo de las instituciones que
reconocen el sentido de una educación para todos, hasta llegar aproximadamente a los años
60, donde una serie de circunstancias sociales y científicas principalmente, repercutieron al
nuevo modelo de intervención.
Por consiguiente, es importante aportar o ayudar a darle una mejora a las
estructuras de los nuevos procesos educativos, donde sean más aportes del conocimiento
para estos niños con diversas dificultades. No limitándoles sus aprendizajes e intereses, sino
más bien aportándoles a un nuevo y amplio conocimiento, permitiéndoles dejar ser y actuar
de manera correcta tanto en la sociedad que es la que se encarga en dejarlo de un lado y
fomentándoles comprensión y atención, a sus saberes previos.
Seguidamente también se ve el aporte que brinda el Ministerio de Educación
Nacional (MEN), que es quien históricamente hablando identifico dentro de la población
vulnerable a la población con Necesidades Educativas Especiales, el cual hoy en día las han
ido enmarcando como población con discapacidad en un marco significante de la
educación. Por ello es que se pretende con este trabajando concientizar a las personas, de
que la educación es para todos y que es importante brindarles el aprendizaje adecuado a
39
todas las etapas de vida, haciendo énfasis en tener en cuenta medidas especiales donde se
lleve la educación a los grupos más vulnerables, desfavorecidos y pobres.
Habría que decir también que es necesario tener en cuenta que las Necesidades
Educativas Especiales (NEE) puede provenir de algunas situaciones que se derivan de las
dimensiones con las que cuenta el ser humano, como los factores cognitivos en los que se
enfocaron para la construcción del trabajo de grado, seguidamente el físico, sensoriales, de
la comunicación y cabe de descartar como un enfoque significativo el de la parte emocional
en la que se encuentra las familias y los niños, con los cuales se trabajó.
Observamos como a partir del marco de la declaración de los derechos Humanos
de 1949 se tienen en cuenta dos procesos los cuales son reducir la exclusión de estudiantes
que actualmente se encuentran escolarizados y amplificar la participación de aquellos
estudiantes que se tienen en cuenta para este ejercicio que presentan alguna discapacidad en
cualquiera de los aspectos, para así eliminar barreras de aprendizaje:
En Colombia, la Constitución Política de 1991, en el artículo 5, reconoce que
las personas con NEE tienen derecho a acceder a una educación de calidad a
lo largo de toda su vida, que promueva su desarrollo integral, su
independencia y su participación, en condiciones de igualdad, en los ámbitos
público y privado.
Estos objetivos son el resultado de la Conferencia Mundial de Necesidades
Educativas Especiales, la cual se celebrada en la ciudad de Salamanca- España en 1992. Y
por ende en este dan a conocer algunos principios básicos, quedan aportes significativos
para este tipo de necesidades especiales; como lo son de que los infantes de ambos sexos,
tienen derecho a tener una buena educación y se le debe brindar las mismas oportunidades
que a los demás niños que no cuentan con esta situación. Los niños con necesidades
especiales se pueden mostrar con muchas más capacidades y conocimientos que un niño
que no tenga ninguna dificultad de aprendizaje.
40
Pero como se propone no solo es enfocarse en aquellos niños que son
pronosticados con NEE; sino más bien con aquellos que cognitivamente, emocionalmente
y afectivamente se les hace difícil compartir sensaciones, aprendizajes, intereses que le
surgen a diario dentro del lugar donde el habite, ya sea por una dificultad familiar,
educativa o cultural.
Llegado a este punto para que de esta manera se pueda visualizar y enfocar en
cada una de las necesidades que muestran los niños de 3 a 5 años dentro y fuera de la
Institución o Barrio donde se forma o desenvuelve, pero a su vez sabiendo que no solo son
esas necesidades que se ven la anterior información, sino que también aquellas que se basan
a partir de una necesidad tanto emocional, afectiva, comunicativa o sea aquellas que surgen
a partir de un maltrato, una mala comunicación o un tipo de crianza no acorde para la
formación de este sujeto. Por ello este trabajo permitió interesarnos y a trabajar en cada uno
de estos aspectos a partir de lo que se fue observando a través de nuestros lugares de
trabajo, pero en especial la Fundación las Golondrinas.
Hacia una identificación de las Dificultades de Aprendizaje (DA) en el contexto
escolar: aportes de la experiencia americana; permite ver algunas perspectivas en la cual
algunos estudiosos se han acercado a la identificación y caracterización de las Dificultades
de Aprendizaje (DA) como un trastorno neuropsicológico.
No obstante, las diferencias, limitaciones e imprecisiones en la identificación
de los estudiantes que las presentan han propiciado la generación de
controversias, que influyen en los ámbitos sociopolítico, educativo, clínico y,
por supuesto, investigativo. Contrarios a esta perspectiva, los sistemas de
clasificación propuestos por la investigación han determinado que no
permite diferenciar aquellos casos que realmente obedecen a la presencia de
una incapacidad para aprender. (Echeverry, Vélez, Cuadros, & Gómez,
2013, p. 58)
41
Es bueno conocer sobre este tema, ya que como se menciona anteriormente no
solo las Necesidades Educativas Especiales son aquellas enfocadas en la parte motriz o
cognitiva de los infantes, adolescentes o adultos mayores.
Como bien lo muestra el texto este tipo de dificultades no tienen por qué afectar
el aprendizaje, la manera como se desenvuelven en su entorno de donde pertenece, sino
que más bien todas estas dificultades o necesidades educativas deben de fortalecer el
trabajo tanto con los niños- niñas, sino que también con las familias de cada uno de estos.
En el contexto escolar, el aprendizaje de los estudiantes sufre divergencias en
muchos aspectos, entre los que se resaltan los contenidos, estrategias, materiales de
enseñanza-aprendizaje implementados por el docente a cargo, nivel de motivación que el
estudiante tenga, expectativas que se cree a corto y largo plazo, apoyo familiar y escolar,
facilidad para comprender y transferir sus conocimientos, entre otros. No obstante, un
número considerable de estudiantes puede padecer de las anteriores características de
aprendizaje lo que hace que ya presente una Dificultad de Aprendizaje (DA), en la medida
en que ostentan dificultades significativas para alcanzar los logros.
Mirando otro punto de partida por medio del texto Dificultades de Aprendizaje
(DA) el cual surgió entre la década de los setenta, dando como aporte fundamental orientar
a los padres y profesionales de manera que entiendan la situación específica de quienes, a
pesar de mostrar una inteligencia normal, se les hace difícil tener un buen rendimiento
académico y se les evidencia dificultades para aprender, los temas que son en su mayoría
de interés o agrado para ellos.
A pesar de los debates y desacuerdos, con el paso del tiempo esta denominación no
muestra un carácter global, como el que puede ser observado en la discapacidad
intelectual, sino que se refiere a un trastorno específico de aprendizaje, asociado a
áreas como la lectura, la expresión escrita, las matemáticas o el cálculo, es por ello
que se habla dentro de las Instituciones Educativas o Centros Educativos de un
ámbitos de aprendizaje ,en los cuales se basa el docente para poder conocer las
42
diversas dificultades que tienen los niños- niñas de 3 a 5 años. (Pérez & Cerván,
2003, p. 107)
En ocasiones se ve como son los mismos padres, docentes y cultura quienes no
permiten ser a sus hijos y por ello es que se evidencia algunas necesidades en ellos.
También los malos hábitos de crianza para con ellos nos es muy claro, ya que esto
repercute en los diversos comportamientos que estos infantes tienen a diario, ya sea con sus
compañeros de clase o con las personas significativas para ellos o también las docentes de
cada uno de ellos.
Por ello a partir de la experiencia docente se observó cuáles son las dificultades
que más diversifican en cada sujeto o población donde se desenvuelve este pequeño ser,
para que a partir de esto se realiza el trabajo con las familias de cada uno de los niños, a
los cuales se tuvo en cuenta para esta investigación, pero se retomó más que todo en los
hogares ya que en ocasiones se les vulnera los derechos y el tipo de crianza para estos no
es el más adecuado para su proceso de formación y es a partir de esto cómo se identifica o
surge Necesidades Educativas, ya que en muchas ocasiones no se les brinda el espacio, el
amor, el respeto y la corresponsabilidad por ser ellos mismos.
En este apartado también es importante involucrar al Aula de Apoyo, como aquel
espacio que permita pensar en las Diferencias de algunos infantes, por ello es significativo
aprender no solo lo que necesitamos y, sino que también lo que queremos y deseamos
aprender.
En los últimos años, la educación colombiana se ha visto confrontada con la
integración escolar, que se concretó con el Derecho 2082 del 18 de
noviembre de 1996, y en el cual se exige que el niño y la niña que presentan
necesidades educativas especiales (NEE) se integren al ámbito escolar
regular. Estas propuesta se articula a través de espacios como el aula de
apoyo, definida como el conjunto de recursos y estrategias extraordinarias
que requiere un(a) estudiante que presenta NEE, para alcanzar los
43
indicadores de logros curriculares (Ministerio de Educación Nacional –
MEN-, 1998, p. 16).
Es bueno saber que el Ministerio de Educación Nacional, se centra y se interesa
por las dificultades y necesidades que tienen los niños y niñas de Colombia, que sin
importar su más mínima dificultad ellos siempre le proporcionan los mejores recursos para
que ellos salgan adelante. Siempre buscando la mejoría del desarrollo intelectual y
emocional de estos sujetos de hoy, que también se están formando para un futuro mejor.
Durante el proceso de integración intervienen, entre otros, los y las docentes
de apoyo (Decreto 2082 de 1996), encargados de asesorar a la comunidad
educativa respecto a las ayudas que requiere el o la estudiante que presenta
NEE en su proceso de integración al aula regular, y los y las docentes
integradores, quienes orientan el proceso de aprendizaje del o la estudiante,
realizando adecuaciones necesarias acordes con las necesidades potenciales
de aprendizaje. (Rendón & Estrada, 2004, p. 11)
Llegado a este punto llama mucho la atención la ayuda de los docentes o
profesionales en esta área en específico, fue por ello que se tomó en cuenta este tema
abordado las cuales son las Necesidades tanto Emocionales como Cognitivas porque es un
asunto que se debe abordar con bastante interés ya que se está viendo como los infantes
repercuten en sus dificultades por este tipo de situaciones o dificultades, y no dejando de
lado es bastante gratificante saber que se cuenta con ayuda profesional, para este tipo de
Necesidades en las cuales nos enfocaremos, como lo es el trabajo de las psicosociales, ya
que son las encargas de abordar este tipo de situaciones, a las cuales nos vamos a
enfrentar. No parecería necesario, pero es bastante interesante darles a conocer a las
familias o cuidadores de los niños que muestran alguna Necesidad Educativa, partiendo
del tipo de crianza que le proporcionen estas personas a cargo. Ya que en diversas
ocasiones son los mismos padres los que ocasionan este tipo de dificultades en los infantes
de hoy, ya que no tienen el adecuado acompañamiento, para hacer parte de cada uno de los
espacios que tienen para estar en familia. En ocasiones son las personas significativas las
44
que apoyan a estos diferentes procesos de formación, aprendizaje y necesidades del
pequeño.
Todo lo dicho hasta ahora explica por qué el trabajo de grado esta vislumbrado en
las Necesidades Emocionales del niño entre los 3 a 5 años, ya que es importante mirar
como a partir de su crianza este ha llegado a una necesidad, que en ocasiones los padres o
personas significativas no llegan a saciar.
Es necesario recalcar; “¿Qué siente el niño? ¿Cómo lo expresa? ¿Qué necesita?”. (Siegrist,
2014)
Para que de esta manera se conozca la necesidad que tiene el sujeto desde la parte
emocional, y desde allí trabajar con estas diversas situaciones, que son las encargadas de
dejar un lado lo que siente, piensa o cree el niño. Dicho anteriormente el ambiente o la
sociedad son los encargados de satisfacer o aportar a esas necesidades que muestran estos
niños hoy en día, en cierto sentido se ve como desde que nace el niño muestra algún
problema ya sea o en ocasiones tienen temperamentos difíciles, ahora bien, genéticamente
está comprobado de que el infante desarrolla un carácter alegre y positivo. Y es por ello que
necesita en ocasiones de una persona que le brinde la pertinente ayuda para mejorar en
estas diferentes situaciones.
Según lo propone (Siegrist, 2014), el niño cuenta con unas necesidades
emocionales las cuales son:
Sentir seguridad: Es cuando el niño tiene la sensación de que pueden acudir a sus padres
cuando los necesitan. Es por ello que entre más grande este el niño, esa ahí cuando siente
que sus padres lo aman completamente, a pesar de sus rarezas, caprichos y sus pequeños
defectos.
Ser auténtico: Los niños son en muchas ocasiones el espejo de lo que sus padres son y
hacen con ellos, y en algunas situaciones a ellos les gusta o les llamas la atención, pero sólo
cuando ellos quieren y a su manera. Es a partir de esto que ellos van desarrollando el
45
pensamiento creativo. Es por esto que tienden a tener sus propios gustos e intereses, y hay
que seguirlos trabajando y fortaleciéndoles esta autonomía o toma de decisiones. Ya que
ellos son capaces de demostrar cómo son ellos mismos, poder iniciar la construcción de sus
propios sueños, metas para el futuro.
Sentirse respetado: Hoy en día a los niños les gusta que sus papás o personas significativos
para ellos los tengan en cuenta y en muchas ocasiones que los tomen en serio frente a las
decisiones u opiniones que dan a diario dentro o fuera de la Institución o Centro Infantil.
Respetar a los niños no es permitirle dejarlo hacer lo que quiera, sino tener presente lo que
él siente o piense.
Jugar y estar alegre: Los niños requieren de momentos para el goce y el disfrute. Es por
esto que es gratificante proporcionarles a los niños estos sucesos emocionales positivos,
que en muchas ocasiones finiquitan convirtiéndose en hábitos.
Tener atención y cariño: Además, necesitan de la atención amorosa, ya que cuando su
comportamiento no es el adecuado, dicen que es cuando más necesitan que los quieran y les
presten la suficiente atención.
Ahora bien, es pertinente decir que el trabajo está enfocado en las Necesidades
Cognitivas de los niños y en este caso, teniendo en cuenta la edad de 3 a 5 años; por ende,
este tipo de necesidades son aquellas que permiten adquirir conocimientos y se benefician
del entorno el cual nos rodea. Permitiendo llenar las diversas necesidades por las cuales los
niños y el mismo hombre en muchas ocasiones suelen pasar, a nuestro modo de ver es por
ello que en diversos escenarios los niños llegan a tener una serie de otros comportamientos
en diferentes lugares, siendo en ocasiones ambiciosos con algunos de sus juguetes
favoritos o con cualquier u otro material que sea de su agrado y no les gusta que nadie lo
tenga o lo tome prestad, también entran al mundo del conocimiento, cierto es que también
algunas cosas de su alrededor son un misterio para él y a través de esta serie de necesidades
se ve como todo esto es a partir de algunos sistemas como lo son la política, la economía,
social y cultural, en la que cada persona se desenvuelve y que actualmente son los
influyentes para que se vea estas dificultades con los niños y repercuten en su crecimiento y
desarrollo de cada uno de ellos.
46
Dicho anteriormente es necesario de que el niño se sienta bien en el entorno que le
rodea y el cual hace parte, se le ayude a comprender positivamente la vida, para que más
adelante tenga repercusiones en su formación como sujeto, permitirle a que tenga un
conocimiento de lo que lo rodea, permitiéndoles visualizar lo bueno y lo malo que les
puede brindar el mundo al que hacen parte y como punto final no dejar que la diversidad de
cada uno de ellos les afecte en las relaciones interpersonales, que tiene con las personas de
su agrado y de su alrededor.
Aquí he de referirme también a que las necesidades cognitivas se enfocan en la
estimulación sensorial, la cual permite estimular los sentidos y el desenvolvimiento lúdico
con la familia, estimulación proyectada en la escuela o centro infantil; también está la
exploración física y social la cual plantea que el niño debe tener contacto físico y social rico
en materiales, elementos de la naturaleza y los personales que son con lo que ellos cuentan,
por ende brindarles “ bases de seguridad” donde los adultos o los mismos amiguitos
compartan entre ellos mismos, espacios y momentos y esto le genere buenas emociones y
sensaciones; cabe señalar también un punto base el cual es la escolarización de manera que
se vea la integración de los niños dentro de las escuelas y se vean buenos rendimientos
académicos y comportamentales dentro de este lugar significativo y como último punto está
la comprensión de la realidad física y social la cual permite la escucha y responde de
manera circunstancial a las preguntas que a menudo hace el niño.
Cabe señalar que este tipo de necesidades se relacionan con algunas formas de
maltrato como lo son “abandono físico y negligencia” la cual aflige la parte educativa del
niño, ya sea en aspecto familiar como escolar, y esto de cierta manera repercute en dar
diferentes respuestas inadecuadas a este tipo de necesidades. También “está el retraso en el
desarrollo no orgánico (o mejor, que es evitable)” el cual muestra como las diversas
acciones familiares y del sistema escolar es una manera de ver como se maltratan a los
niños y de esta manera este punto se enfoca en ver como esto se relaciona con las
necesidades que se ven a diario en cada uno de estos sujetos. Hablando de otra manera el
desarrollo no orgánico es aquel que se basa en “peso, altura y diámetro craneal por debajo
47
del adecuado en las tablas de crecimiento, recuperación del estadio evolutivo en un
ambiente de cuidados adecuados”. (Medidas para la inclusión social y equidad en
Instituciones de educación superior en America Latina, 2013)
Basándonos en lo anterior es pertinente aclarar que nuestro trabajo está claramente
enfocado en este tipo de necesidades, es por esto que a partir de lo suscitado anteriormente
se da un claro alivio de saber que si existen retrasos que generan necesidades cognitivas y
emocionales, y que estos surgen a través de los aspectos sociales, educativos y familiares
de cada uno de los niños en algunas ocasiones, ya que son ellos los causantes de que el niño
tenga un retraso en su aprendizaje, sean agresivos o simplemente no les guste compartir sus
cosas con los demás compañeros o personas significativas.
Lo que nos interesa aquí es saber cómo en el ambiente en el que nos basamos
como lo fue la Fundación las Golondrinas, ver, conocer y saber cómo la parte pedagógica
de cada docente permite o ayuda a que sea mejor las difíciles situaciones de cada uno de los
niños, y como ellas se encargan de darle a conocer estas diferentes situaciones o
problemáticas o los papás o personas significativas. También saber qué es lo que siente o
piensan los niños a los cuales no vamos a dirigir y observar como no se ha generado un
retraso en estos niños, por desenvolverse en lugares difíciles para cada uno de ellos. Para
finalizar nuestro trabajo se construyó con el fin de poder mirar y transformar conciencia
sobre estas diversas necesidades tanto emocionales como cognitivas en los niños de la
fundación, anteriormente nombrada, con la edad promedio de 3 a 5 años. Estos fueron
nuestros intereses ya que hoy en día se ve como a través de las diversas Prácticas de
Crianza generan niños con Necesidades Emocionales y Cognitivas y de qué manera
nosotras podemos aportar a este trabajo y desarrollo de estas diversas situaciones.
48
4.3 Capítulo 3: Primera infancia
“El niño tiene cien lenguas cien manos
cien pensamientos cien maneras de pensar de jugar
y de hablar cien siempre cien maneras de escuchar
de sorprenderse de amar cien alegrías para cantar y
entender cien mundos que descubrir”
(Malaguzzi, 2001, p.141)
En la siguiente categoría se llevará a cabo la profundización del concepto primera
infancia a nivel teórico, por consiguiente, se enfatizará en el desarrollo integral y ciclo vital
de 3 a 5 años, edad que nos compete intervenir en la presente investigación.
La historia de la infancia no fue uno de los más grandes intereses de los
historiadores, pudo haber sido porque el niño era un ente diminutivo e improductivo o
simplemente por ser “algo” de tan poca relevancia que por tanto carecía de status social e
identidad.
El niño al ser alguien cotidiano, crecía y podía valerse por sí mismo, demostrando
poco a poco el avance en el desarrollo biológico y neurológico, y que contaba con las
condiciones necesarias para participar en la humanidad
Mientras se vivía en una época dónde importaban los reyes, las revoluciones, las
ejecuciones y los héroes, el niño no tenía cabida ahí, simplemente permanecía en su mundo
en un lugar oscuro dónde nadie intervenía y por lo tanto no se sabía nada de él.
Al respecto conviene traer a colación algunas épocas en las cuáles la concepción
de niño ha dado a conocer diferentes características; en la antigüedad el niño fue
intervenido desde diferentes puntos de vista, uno de ellos fue la religión, los padres por
permanecer en la gracia de los dioses y recompensar algún favor, sacrificaban a los niños
como ofrenda. Sumado a esto en Egipto los cocodrilos devoraban a los niños con la
49
intención de contrarrestar los efectos malignos, ya que los animales para las personas eran
fuentes de divinidad a las que por causas ajenas ellas le temían
En otra dirección, en el mismo escenario el niño era sometido a una estricta
disciplina, en la cual, según los padres, él solo aprendía y obedecía a golpes, encubriendo la
autoridad con la amenaza.
En la misma línea de la antigüedad se da el infanticidio en Grecia, el niño “es
rebajado aquí a la condición de bicho, pues, aunque se alimente de nuestro cuerpo no tiene
ninguna utilidad, es un desecho, algo sin valor de lo que el hombre puede deshacerse de
manera fácil y sin ningún remordimiento” (Madrid, 2003, p.27)
De esta manera en Esparta al nacer un niño, era examinado y bañado en vino,
luego de haber estado bajo observación si se le encontraba alguna mal formación o defecto
era abandonado en el monte para ser devorado por los animales; por el contrario, quienes
no tenían ningún defecto, más conocidos como “normales”, permitían dejarlo bajo el
cuidado de sus padres hasta los siete años, para luego prepáralos para el estado y hacerlos
parte del régimen militar.
Muchos de estos niños murieron bajo ésta disciplina, sin embargo, entendían que,
desde el nacimiento, la muerte era algo cercano y factible para ellos, y que por tanto se
tenía en cuenta esta predicción como algo normal.
Durante la Edad Media, otros pensadores como San Agustín, se referían al niño
como una fuente de pecado, un ser ignorante, una fuerza del mal, y como tal una criatura
capaz de cometer las más grandes atrocidades.
Durante el siglo XX aparecen pensadores como Rousseau que expone la
formación del niño a partir de una obra pedagógica llamada el Emilio, dónde aclara “El
niño ha de guiarse por los cánones de la recta razón y no por las costumbres, creencias, y
supersticiones que operaban en la época” Rousseau (1762) citado por (Madrid, 2003)
50
planteando además una forma ideal de crianza, como el cuidado pertinente de la madre,
dónde no se le impida al niño ser él mismo, y que por ende, explore, goce y demuestre sus
potencialidades innatas con las que nace.
Aparece también una mujer, María Montessori que rompió todas las tradiciones y
apoyó de cierta manera las ideas de Rousseau refiriéndose al niño como un organismo que
evoluciona y que tiene potencialidades latentes y que por tanto aprende todo a partir de la
experimentación.
Hoy en día estas últimas manifestaciones sobre el niño se han ido
complementando para bien, demostrando la importancia que tiene en la sociedad, apoyado
bajo leyes y políticas públicas que lo amparan.
Por tanto, la primera infancia se reconoce como una etapa decisiva en el momento
del desarrollo, que empieza desde la gestación, dónde el niño es un participante activo que
construye su propia historia hasta los seis años, en este periodo surgen cambios constantes
según sus características físicas, emocionales, cognitivas y sociales.
Lo que permite además que sea entendida como un derecho, en el cual los niños y
las niñas interactúan con el mundo convirtiéndose en sujetos activos que ayudan a
desarrollar su personalidad y reconocer el contexto que los rodea, estableciendo al mismo
tiempo relaciones interpersonales que motiven a participar y a opinar en espacios de
socialización.
A partir de la política pública en primera infancia realizada por Conpes en el año
2007, se hace una aproximación a la definición legal del desarrollo integral de los niños en
su ciclo vital.
La Convención Internacional sobre los Derechos de los Niños aprobada por
el Congreso de la República de Colombia, mediante la Ley 12 del 22 de
enero de 1991, introduce un cambio en la concepción social de la infancia:
los niños deben ser reconocidos como sujetos sociales y como ciudadanos
con derechos en contextos democráticos. El desarrollo integral, que
51
considera aspectos físicos, psíquicos, afectivos, sociales, cognitivos y
espirituales, aparece, así como un derecho universal o como un bien
asequible a todos, independientemente de la condición personal o familiar.
(Ministerio de la Protección Social, 2007, p.6)
Los niños al ser reconocidos como sujetos de derecho son resguardados bajo el
manto de la primera infancia dentro de un proceso continuo que se da en el desarrollo de
cada ciclo vital acompañado de diferentes factores que están en pro de potenciar y
desarrollar sus capacidades para desenvolverse en los diferentes escenarios de la vida.
Por consiguiente, la primera infancia aparte de velar por el adecuado desarrollo y
cumplimiento de cada uno de los derechos, se enfatiza en ser inclusiva, equitativa con la
diversidad cultural, social, geográfica y educativa de los niños ya que es necesario darle
prioridad al contexto en el que se desenvuelven.
Actualmente la primera infancia en Colombia ha estado orientada por dos
instituciones responsables que son el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y
el MEN, por lo tanto, el concepto de primera infancia se encuentra en construcción, está
abierta a la variedad de actores, sujetos, contextos y modalidades que permitan globalizar
su campo de acción, permitiendo un lugar privilegiado para el reconocimiento de las
particularidades de los niños y niñas.
Por tal razón uno de los objetivos de la primera infancia es proporcionar diferentes
oportunidades para potenciar las capacidades de los niños, teniendo en cuenta los intereses
que surgen a partir de los ritmos cotidianos, lo que se considera como la base para el
desarrollo de nuevos procesos educativos y
La construcción de aprendizaje, reconociendo el significado de educar.
Educar en la primera infancia significa proponer, por parte de los distintos
miembros de la sociedad, acciones conducentes a lograr la inmersión de las
52
nuevas generaciones en la cultura, que contribuyan a su estructuración como
seres sociales que aprenden a convivir con otros, en la medida en que
adquiere y hace propias las reglas y normas de la sociedad, y en tanto cuenta
con las condiciones de bienestar que les permiten tener una vida digna; al
mismo tiempo, es un proceso que responde a las apuestas sociales, culturales
y políticas de una sociedad en relación con el sujeto que se desea formar.
(Abello, 2014, p. 42)
En el proceso de relacionamiento del niño y la exploración del mundo social, se
van construyendo realidades que generan de cierta manera aprendizajes y que por ende
conllevan al desarrollo de sus capacidades, adquiridas como la construcción de la identidad,
la autonomía y reconocimiento del otro, como forma de promoción para los momentos de
socialización.
Se hace necesario establecer diferencias entre la educación inicial y educación
maternal, siendo la primera el motor que potencia los procesos de crianza que se inician en
el hogar, mientras que la educación maternal propone ser un eje articulador en los valores y
tradiciones que permiten enriquecer los procesos de un adecuado desarrollo integral.
Soto y Violante (2004) citado por Abello (2014) reafirman la crianza o la
educación maternal como:
“Un proceso educativo característico de los niños en sus primeros años”, a
cargo de padres, madres y/o adultos cuidadores que desempeñen, en el seno
familiar, las funciones del cuidado, la socialización y la adquisición de la
identidad de las niñas y los niños, lo que incluye alimentar, nutrir y ayudar a
crecer. Este proceso tiene especial incidencia en el desarrollo infantil por el
vínculo afectivo que construye la niña y el niño con quienes lo promueven,
de tal manera que entre más oportuna y pertinente sea la comprensión y
respuesta a sus necesidades, hay mayores posibilidades de proponer
interacciones para propiciar el desarrollo integral. (p. 47).
53
Enfatizando en que la primera infancia es un momento crucial en la vida, debido a
que es el punto de partida del desarrollo neurológico, físico, de la interacción con el mundo
exterior, del desarrollo de las emociones, de la construcción de la identidad a partir de
espacios de socialización y del establecimiento de las relaciones interpersonales. Este
proceso se da con el apoyo de cada una de las personas que giran en pro del buen desarrollo
del niño.
Al ir desarrollando ciertas características se generan procesos que ayudan a la
formación de sujetos críticos, propositivos, innovadores como lo es la participación, de
igual forma se lleva a cabo un proceso espontáneo y seguro como la construcción de la
autonomía, en los diferentes escenarios de la vida en los cuales se desarrollan dichas
características se promueve también la creatividad debido a que se aprende a resolver
problemas para afrontar las adversidades de cada día y por ende se desarrolla la capacidad
de comunicar por medio de ideas y nuevas construcciones.
La primera infancia, por lo tanto, concibe al niño como un sujeto integral donde
permite el desarrollo de las dimensiones a fin de potenciarlas armónicamente. Al hablar de
dimensiones es posible referéncialas con aspectos o áreas que componen las características
de los niños, explicando que se separan, no con el ánimo de dividir el sujeto, sino de
percibir los avances y/o retrocesos en cada una de ellas.
Para ello será necesario definir cada una de las dimensiones puntualmente de
acuerdo al momento del desarrollo de 3 a 5 años.
4.3.1 Dimensión comunicativa
Se desarrolla desde el momento de la gestación, este periodo se caracteriza por la
reacción ante estímulos que sus padres le generan desde el entorno, poco a poco va
reconociendo su ambiente, y, al nacer, se conecta fácilmente con dichas personas al haber
sido la primera fuente de comunicación, los reconoce por sus gestos, voz y más adelante
por su rostro, dirige la mirada hacia la persona que le habla manifestando emociones.
54
Durante el crecimiento ésta dimensión refleja el fortalecimiento de la expresión de
ideas sobre acontecimientos y hechos de la realidad, con el fin de construir mundos
posibles, crear vínculos afectivos y expresar emociones y sentimientos a partir de las ideas
alternativas que hacen alusión a la identificación de la cultura, su representación e
interpretación de su alrededor.
Expresa con un vocabulario mínimo diferentes situaciones que vive a diario y que
para él han sido significativas, empieza a construir las definiciones de la sociedad en la que
está inmerso realizando representaciones de acciones observadas en personas cercanas, a
partir del juego de roles.
Utiliza mil maneras de expresarse, a través de la escenografía, las artes plásticas, la
música y la grafía queriendo dar a conocer las opiniones que tiene acerca de algo.
4.3.2 Dimensión corporal
Desde “la serie de los lineamientos preescolar” por el Ministerio de Educación
Nacional, se entiende por ésta dimensión:
La expresividad del movimiento se traduce en la manera integral como el
niño actúa y se manifiesta ante el mundo con su cuerpo “en la acción del
niño se articulan toda su afectividad, todos sus deseos, todas sus
representaciones, pero también todas sus posibilidades de comunicación y
conceptualización”. Por tanto, cada niño posee una expresividad corporal
que lo identifica y debe ser respetada en donde sus acciones tienen una razón
de ser (p.18).
Por ende, ésta se encuentra directamente relacionada con la dimensión
comunicativa ya que el cuerpo es la principal herramienta para expresar emociones,
intereses e inquietudes; durante los primeros años el niño empieza a lograr control de su
55
cuerpo, se encuentra con retos motrices como controlar la cabeza, sentarse, pararse y dar
pasos para lograr motivación a explorar el mundo.
Más adelante reconoce las partes de su cuerpo y la utilidad de cada una de ellas,
por medio del desarrollo motor demuestra afinidad en las habilidades básicas motrices y
por ende al participar establece vínculos afectivos, reconoce además el lugar que ocupa su
cuerpo en el espacio, desarrolla el control de mente - cuerpo y procesos como: lateralidad y
ubicación espacial.
4.3.3 Dimensión estética:
El niño al estar en constante interacción con sus pares adquiere personalidad y
seguridad para manifestar sus necesidades e intereses por medio del gusto estético,
desarrollando la imaginación y creación de nuevas representaciones de su entorno natural,
social y cultural.
Demuestra ser autónomo para expresarse, creativo, y seguro de la construcción
que realiza, manifestando interés por exponer sus trabajos en frente de los demás
compañeros
Según el lineamiento pedagógico y curricular para la educación inicial del distrito
(2003) éste proceso estético se considera, además, la manera de demostrar la interpretación
de su propia realidad a través de la artística
El arte está íntimamente ligado a la condición humana de crear, expresar,
apreciar y ser sensible a través de múltiples lenguajes que además permiten
al niño y la niña descubrir maneras de conocer, transformar, representar e
interpretar tanto el entorno y la cultura en la que se encuentran inmersos,
como a sí mismos (p.144).
56
Se pretende entonces, motivar a los niños para apropiarse de las diferentes formas
de expresión y creatividad, con el fin de simbolizar sentimientos, emociones y/u opiniones
frente algún interés
4.3.4 Dimensión ética y espiritual:
Permite lograr la autonomía en el niño, al momento de tomar decisiones, expresar
los puntos de vista y generar espacios de socialización dónde se propicien las relaciones
interpersonales sólidas, lo que puede motivarlos a indagar ante la solución de problemas.
Es indispensable reforzar las bases que en el hogar les han acompañado con
relación a los valores, interiorizando el respeto por sí mismos, por el otro y por lo otro.
Desde los primeros meses los niños logran un contacto con todo su contexto,
adaptándose de manera paulatina a las diferentes culturas, demostrando un sentido de
pertenencia y respeto por la diferencia del otro, desde allí es posible percatarse de las
particularidades de cada uno, en el momento de pensar, creer y decir para demostrar la
esencia de lo que se es.
4.3.5 Dimensión cognitiva
A partir de la relación del niño con el entorno se motiva a la identificación de
factores que los rodea por medio de la observación, la exploración y la experimentación en
actividades que realiza cotidianamente, a través de éstas, el niño comienza a construir los
esquemas mentales y las características particulares del pensamiento, desde las experiencias
y los elementos que le ofrece su contexto, por lo que éste no es un proceso lineal sino que
se da como resultado de la experimentación diaria.
Es necesario entender que la construcción de saberes se hace de manera interna y
es Piaget quien postula tres procesos cognitivos para entender que sucede en el interior del
pensamiento.
57
La asimilación: se basa en recoger los insumos necesarios para comprender un
aprendizaje nuevo y compararlo con el que ya ha sido interiorizado, es decir, “el sujeto
actúa sobre el ambiente que lo rodea, lo utiliza para sí y entonces ese medio se transforma
en función del sujeto” (Cicarelli, sf, p.44)
La acomodación: se da luego de haber interiorizado un esquema y se hace
necesario modificarlos o aumentarlos cuando se trata de algo nuevo, es decir, motivar el
pensamiento a trascender más allá de lo que ya está innato.
Por lo tanto, para lograr una sincronía en dichos procesos se debe generar un
equilibrio que permita una relación entre la construcción de los sujetos y los estímulos a los
que se encuentran expuestos.
4.3.6 Dimensión socio afectiva
Se desarrolla desde la gestación hasta los siguientes años de vida, al comienzo se
crean vínculos afectivos especialmente con su madre y/o cuidadora, debido a que están
conectados física y emocionalmente. Seguidamente, se da el establecimiento de relaciones
interpersonales con personas de su alrededor que le generan confianza, reconoce sus
intereses y manifiesta sensaciones de agrado y desagrado frente a la experimentación de su
alrededor.
De esta manera se puede concluir que durante la historia las concepciones de niño
han cambiado y que por tanto cada día va a tener mayor relevancia y apoyo desde las
diferentes políticas públicas, modelos pedagógicos y sociales.
58
6. Metodología
El establecer si los diversos estilos de crianza causan en los niños de 3 a 5 años
del Centro Educativo Las Golondrinas Caicedo necesidades cognitivas-emocionales,
responde a un interés investigativo de carácter interpretativo en el que se hace uso de la
investigación cualitativa para hacer una adecuada recolección de datos desde la misma
naturaleza del fenómeno lo cual posibilitara una buena comprensión del problema de
investigación en la que los datos será espontáneos en lugar de forzarlos para que haya una
lógica deductiva derivada de las categorías.
Esta investigación tuvo como finalidad la recolección de información y hacer uso
de diversas fuentes para la misma; además, realizó todo un proceso de triangulación con el
cual se da veracidad a lo que está investigando, el cual permitió dar cuenta de si toda la
información recolectada guarda relación entre sí.
En definitiva, las investigadoras hicieron hacer uso de diversas fuentes como bases
de datos, entrevistas, encuestas, libros, internet, historias de vida, documentos que se
abordó en la investigación.
Para lograr una interpretación comprensiva se hizo necesario analizar
cuidadosamente los datos y tener presente dos asuntos muy importantes; el primero está en
reconocer lo que rodea al sujeto como aquello que lo condiciona en cierta medida, y en
segundo momento fue pertinente seguir los pasos que conforman el círculo hermenéutico,
según Gadamer (1960) y Heidegger (1963) citado por (de la Maza, 2005) los cuales son: la
comprensión, la interpretación y la aplicación.
En aras de ahondar en el conocimiento de la situación problematizadora que actúa
como eje transversal en el presente trabajo de investigación, enfocada hacia prácticas de
crianza como necesidad cognitiva-emocional, se van a aplicar diferentes herramientas
dirigidas a la población infantil y a los padres de familia. Se contó con la participación de
20 niños del Centro Educativo Las Golondrinas Caicedo que se encuentran entre las edades
59
de 3 a 5 años de los cuales se escogieron 4 por medio de un proceso de selección, siendo 2
niñas y 2 niños. Los criterios de selección se llevaron a cabo por medio de un proceso de
observación en el que se tuvo muy presente los comportamientos y actitudes de los niños.
Los niños elegidos para el trabajo de investigación manifestaban diferentes conductas,
especialmente las manifestaciones agresivas. Además, se incluyó en el plan observaciones
directas participantes, talleres reflexivos y los diarios pedagógicos.
Las observaciones directas participantes consistían en encuentros pedagógicos
transversalizados por la enseñanza de la lecto-escritura y las Ciencias Sociales, como
patrones fundamentales para afianzar un adecuado desarrollo de la motricidad fina en los
niños del grado primero del Centro Educativo Hogar Jesús Redentor.
Estas sesiones fueron determinantes para que los investigadores interpreten lo que
sucedía y trasversalizaba la realidad de los estudiantes, estableciendo estrategias para dar
soluciones apropiadas a la pregunta problematizadora.
Los diarios pedagógicos permitieron que los investigadores realizaran un registro
riguroso de las impresiones de lo vivido, que posteriormente se convirtieron en un objeto de
análisis desde la reflexión pedagógica lo que permitió dar cuenta de las siguientes
conclusiones y análisis.
60
6. Discusión
Por medio de la intervención en nuestro enfoque poblacional y la triangulación que
se realizó con relación a los referentes teóricos fue posible deducir
6.1 Desde los objetivos:
Durante todo el proceso de investigación fue posible inferir que si existe una
relación directa en la manera como se aplican las prácticas de crianza y cómo pueden
generar necesidades cognitivas emocionales en los niños como: la inseguridad, la rabia, la
desatención, la rebeldía y la incapacidad para socializar con sus pares, las cuales afectan al
niño de forma afectiva y cognitiva. A lo que Patterson (1982) citado por (López, 2013) dice
la implementación de unas inadecuadas pautas de crianza en la familia genera conductas
antisociales en el niño que por lo regular promueve el incumplimiento de la norma y que
están frecuentemente asociadas a crisis familiares que surgen en muchos casos en el
proceso de criar a un hijo por factores como discapacidad, problemas de conducta infantil,
entre otras.
Frente a los estilos de crianza, los padres y agentes educativos no tienen un pleno
reconocimiento, por el contrario, educan a sus hijos aplicando las estrategias a las que en su
infancia fueron sometidos; “le doy reglazos, o en algunos casos le doy consejos; yo lo
educo así porque lo he visto” persona entrevistada 2 (P2), “yo la educó de forma juguetona
y basada en el respeto y el amor. Aprendí a educarla con paciencia y cada día conociéndola
mejor, porque no quiero repetir el maltrato que me dieron a mí” persona entrevistada 3 (P3)
“si no me hace caso le pego con el rejo de vaca, a los más pequeños a medida que lo
aguante, y si no se los muestro y ellos ya saben que va a pasar y hacen caso, yo lo hago
porque mis papás lo hacían así conmigo” niño entrevistado 4 (N4). Lo anterior refleja que
no hay un estilo definido es decir, actúan de acuerdo a la circunstancia adoptando, aunque
no los conozcan, los estilos de crianza que Baumrind (1973) citado por (Izzedin Bouquet &
Pachajoa Londoño, 2009)proponen los cuales hacen referencia al estilo autoritario, estilo
permisivo, estilo democrático y estilo de negligencia-rechazo. Estas difieren unos de otros
61
por el nivel de exigencia, control y comunicación que los padres establecen con sus hijos
como búsqueda de estrategias adecuadas que propicie brindarle al niño un mejor cuidado,
moldeando su conducta y acompañando su hijo en los diferentes procesos del desarrollo, ya
que tienen claro el papel que cumple el niño actualmente.
Es claro que en su desconocimiento se generan prácticas de crianza inadecuadas,
algunas de las cuales causan el desarrollo de las necesidades cognitivas y emocionales
provocadas por: la amenaza, el maltrato físico y verbal, la desautorización entre los mismos
padres, generando en los niños alteración en el desarrollo de sus emociones.
6.2 Las prácticas de crianza:
Los resultados de esta investigación revelaron como las pautas de crianza están
asociadas al cruce de culturas y a las experiencias vividas por los padres, manifestándose a
través de la la estrategia que utilizan con sus hijos. A lo que Villegas (2009) citada por
(Castiblanco & Valbuena, 2012) dice
las prácticas de crianza son aprendidas por los padres de sus propios padres y
son transmitidas de generación en generación, algunas veces sin
modificaciones. Este proceso que se inicia durante la socialización del niño
en el núcleo familiar, social y cultural, lo asimilan por medio del juego de
roles, con el que se apropian de las prácticas con las que sus padres los
orientan, las asumen e incorporan, para más tarde, al ser padres,
complementarlas con sus hijos (p.18).
Lo anterior fue palpable durante todo el proceso de investigación donde se
identificaron diversas realidades en las que se encuentran inmersos los niños junto con sus
familias, las cuales influyen sin duda en su formación al estar permeadas por pautas de
crianza in-apropiadas que generan el acrecentamiento de las problemáticas sociales.
62
De acuerdo a lo observado durante la investigación se percibieron vacíos
familiares, como: la inestabilidad nuclear, emocional y socioeconómica, la desautorización
entre los padres al tomar decisiones y falta de acompañamiento, los cuales repercuten
directamente en los procesos no solo académicos, sino también emocionales y psicológicos
del niño. Para lo que se hace necesario tal como lo menciona (Goleman, 1996) “padres
competentes desde el punto de vista emocional para que de este modo sean eficaces cuando
se trata de ayudar a sus hijos en sus altibajos emocionales” (p.121).
Se observa pues, la necesidad de que la familia centre la educación en prácticas de
crianza positivas en aras de prevenir inadecuadas estrategias que atenten contra la
integridad del niño.
6.3 Primera infancia:
Los padres de familia reconocen que los niños son participantes activos que
quieren explorar y que por ende deben velar por su adecuado desarrollo integral.
Para promover la recreación y la actividad física y motriz los padres tratan de
ejecutar hábitos familiares como salidas a parques, juegos en casa y ejecución de roles
brindándole tiempo, acompañamiento y dedicación con el fin de lograr el desarrollo
oportuno de la dimensión motriz .Sin embargo, identifican que desde el aspecto
socioeconómico existen limitantes que impiden brindarles mayor parte de su tiempo, por
tanto se crean metas que ayuden a suplir estas necesidades cómo: “llevarlas todos los
viernes a las recreaciones que hace el Ender” (P1) “Juego con ella en casa el tiempo que
pueda”(P2) y “algunas veces visitamos la Ludoteca cerca del barrio” (P3) Con lo anterior se
busca que el niño tenga un pleno desarrollo integral desde los diferentes aspectos físicos,
psíquicos, afectivos, sociales, cognitivos y espirituales, reconociéndolo como sujeto
social y como ciudadano con derechos en contextos democráticos . Tal como lo propone
Conpes (2007) en la Ley 12 del 22 de enero de 1991 en La Convención Internacional sobre
los Derechos de los niños.
63
Es de gran valor mencionar que de acuerdo a las etapas del crecimiento del ciclo
vital 3 años, los niños se encuentran en el desarrollo de las diferentes dimensiones
propuestas por el Ministerio de Educación Nacional: Dimensión comunicativa, corporal,
estética, ética, espiritual y socio-afectiva, por lo que demuestran reconocimiento de sí
mismos a partir de las características de género, reconocen su cuerpo, los movimientos que
pueden realizar con ellos, y la importancia de ejecutar hábitos de autocuidado, además, por
medio de la ejecución de juegos de roles se visualizan como personas profesionales a partir
de sus gustos e intereses.
Los cuatro niños con los cuales se llevó a cabo la investigación demuestran respeto
por las decisiones que toma la figura materna, su figura es el referente de disciplina y
exigencia prefieren acudir a los padres ya que encuentran en ellos mayor complacencia y
permisividad de sus necesidades. Además, identifican fácilmente las emociones que les
genera cada uno de sus padres al momento de expresarse sobre ellos y la necesidad
emocional que por ende son generadas y reflejadas en los niños a partir de las diferentes
manifestaciones del lenguaje.
6.4 Necesidades emocionales y cognitivas
Las emociones fueron determinantes para el trabajo ya que dieron a conocer
diferentes sentimientos, necesidades e intereses que hay tanto al interior como al exterior de
las familias de los niños de la Fundación las Golondrinas, como: Interés por participar de
las diferentes actividades que propone el centro infantil y la necesidad de vincularse como
núcleo familiar para velar por el desarrollo de los niños.
Se conoció el tipo de relación que hay al interior de las familias, arrojando en la
mayoría de los casos una mejor relación con las madres o abuelas a diferencia de los papás,
siendo un caso en particular el único en el que la relación más cercana y afectivas se daba
con el padre porque evita llamar la atención cuando sus comportamientos son inadecuados.
64
Se infiere que el hogar para cada uno de los niños es un lugar muy especial por la
forma en cómo se refieren a él, “ A mí me gusta mi casa porque es de madera y muy linda”
N1 “Me gusta estar en la cocina porque mi mamá me da la comida” N2 “Yo me siento feliz
en mi casa con mi mamá”N3, estos son lugares que les genera tranquilidad, alegría,
seguridad, amor y unión, allí es donde más se divierten y pasan el tiempo con las personas
más importantes para cada uno de ellos; realizando diferentes actividades, para dos de
ellos jugar con carros y para las otras dos cocinar y jugar a la cocinita. Esto es a lo que el
autor Winnicott denomina como objetos transicionales “los cuales posibilitan al niño
explorar con seguridad su ambiente y a descubrir y canalizar nuevos sentimientos” lo que
favorece su autonomía.
Algunos de los niños se sienten felices especialmente cuando tienen tiempo para
estar con ellos, porque comparten, juegan y los cuidan ya que esto les promueve un estado
emocional muy sereno, alegre y confiable
La convivencia en las diferentes familias tiene una mirada distinta ya que se
enfocan en la disciplina bajo estrategias como la amenaza y el castigo que les generan a los
niños inseguridad y temor para enfrentar las situaciones de la vida cotidiana.
Se evidencia cómo los niños han logrado tener aprendizajes significativos por
medio del juego simbólico, pero algunos de ellos, en ocasiones se muestran distraídos y
retraídos con explicaciones o temas propuestos, sin embargo, esto no significa que no esté
construyendo conocimientos. Por tanto, todo agente educativo debe preocuparse por lo que
siente el niño, ¿cómo lo expresa? ¿Qué necesita? tal como lo propone J. C. Siegrist.
La percepción que tienen los niños de la familia es que está compuesta por mamá,
papá, abuela y tía, en ocasiones se identifica, en éstos agentes educativos amor, maltrato,
agresividad, y a su vez autoridad, generando en ellos diferentes necesidades y/o
satisfacciones emocionales. Las cuales el autor J. C. Siegrist clasifica en: tener seguridad,
ser auténtico, sentirse respetado, jugar y estar alegre, tener atención y cariño.
65
Fue preciso encontrar similitudes entre los conceptos que tienen los niños sobre
sus madres los cuales se expresan a través de las diferentes manifestaciones del lenguaje
“Ella me cuida, pero me pega con el rejo, a mí me da mucho miedo y salgo corriendo” N1
“yo quiero más a mi papá, mi mamá me pega. Este algodón es suave como mi papá” N2
“Mi mamá es muy linda, ella juega conmigo a hacer jugo, cuando me porto mal me muestra
la chancla, pero no me pega” N4; cambiando este concepto de acuerdo a la situación o la
emoción como: felicidad, tristeza, miedo y temor.
66
7. Conclusiones
Por medio de la intervención en nuestro enfoque poblacional y la triangulación que
se realizó con relación a los referentes teóricos fue posible deducir
7.1 Desde los objetivos:
Fue posible inferir que si existe una relación directa en la manera como se aplican
las prácticas de crianza y cómo pueden generar necesidades cognitivas emocionales en los
niños como: la inseguridad, la rabia, la desatención, la rebeldía y la incapacidad para
socializar con sus pares, las cuales afectan al niño de forma afectiva y cognitiva.
Los padres y agentes educativos no reconocen la crianza por sus estilos, por el
contrario, educan a sus hijos aplicando las estrategias a las que en su infancia fueron
sometidos; “le doy reglazos, o en algunos casos le doy consejos; yo lo educo así porque lo
he visto” P2, “yo la educo de forma juguetona y basada en el respeto y el amor. Aprendí a
educarla con paciencia y cada día conociéndola mejor, porque no quiero repetir el maltrato
que me dieron a mí” P3 “si no me hace caso le pego con el rejo de vaca, a los más pequeños
a medida que lo aguante, y si no se los muestro y ellos ya saben que va a pasar y hacen
caso, yo lo hago porque mis papás lo hacían así conmigo” P4. Por esto no tiene un estilo
definido, es decir, actúan de acuerdo a la circunstancia con autoridad, democracia o
permisividad, evitando aplicar estrategias inadecuadas con el propósito de brindarle un
mejor cuidado, moldeando su conducta y acompañando su hijo en los diferentes procesos
del desarrollo, ya que tienen claro el papel que cumple el niño actualmente.
Algunas de las causas que conllevan al desarrollo de las necesidades cognitivas y
emocionales son las estrategias de formación inadecuadas como: la amenaza, el maltrato
físico y verbal, la desautorización entre los mismos padres, generando en los niños
alteración en el desarrollo de sus emociones.
67
7.2 Las prácticas de crianza:
Los resultados de esta investigación revelaron como las pautas de crianza están
asociadas al cruce de culturas y a las experiencias vividas por los padres, manifestándolas a
través de la estrategia que utilizan con sus hijos.
Durante el proceso de investigación se identificaron diversas realidades en las que
se encuentran inmersos los niños junto con sus familias, las cuales influyen sin duda en su
formación al estar permeadas por pautas de crianza inapropiadas que generan el
acrecentamiento de las problemáticas sociales.
De acuerdo a lo observado durante la investigación se percibieron vacíos
familiares: la inestabilidad nuclear, emocional y socioeconómica, la desautorización entre
los padres al tomar decisiones y falta de acompañamiento, los cuales repercuten
directamente en los procesos no solo académicos, sino también emocionales y psicológicos
del niño.
Se observa la necesidad de que la familia centre la educación en prácticas de
crianza positivas en aras de prevenir inadecuadas estrategias que atenten contra la
integridad del niño.
7.3 Primera infancia:
Los padres de familia reconocen que los niños son participantes activos que
quieren explorar y que por ende deben velar por su adecuado desarrollo integral.
Para promover la recreación y la actividad física y motriz los padres tratan de
ejecutar hábitos familiares como salidas a parques, juegos en casa y ejecución de roles
brindándole tiempo, acompañamiento y dedicación con el fin de lograr el desarrollo
oportuno de la dimensión motriz .Sin embargo, identifican que desde el estado
socioeconómico que les limita brindarles mayor parte de su tiempo, se crean metas que
ayuden suplir estas necesidades cómo: “llevarlas todos los viernes a las recreaciones que
68
hacen el Inder”P1 “Juego con ella en casa el tiempo que pueda”P2 y “algunas veces
visitamos la Ludoteca cerca del barrio” P3
De acuerdo a las etapas del crecimiento del ciclo vital 3 años, se encuentran en el
desarrollo de las diferentes dimensiones por lo que demuestran reconocimiento de sí
mismos a partir de las características de género, reconocen su cuerpo, los movimientos que
pueden realizar con ellos, y la importancia de ejecutar hábitos de autocuidado, además, por
medio de la ejecución de juegos de roles se visualizan como personas profesionales a partir
de sus gustos e intereses.
Los cuatro niños demuestran respeto por las decisiones que toma la figura
materna, sin embargo, disciplina y exigencia prefieren acudir a los padres ya que
encuentran en ellos mayor complacencia y permisividad de sus necesidades. Además,
identifican fácilmente las emociones que les genera cada uno de sus padres al momento de
expresarse sobre ellos y la necesidad emocional que por ende son generadas y reflejadas en
los niños a partir de las diferentes manifestaciones del lenguaje.
7.4 Necesidades emocionales y cognitivas
Las emociones fueron determinantes para el trabajo ya que dieron a conocer
diferentes sentimientos, necesidades e intereses que hay tanto al interior como al exterior de
las familias de los niños de la Fundación las Golondrinas, como: Interés por participar de
las diferentes actividades que propone el centro infantil y la necesidad de vincularse como
núcleo familiar para velar por el desarrollo de los niños.
Se conoció el tipo de relación que hay al interior de las familias, arrojando en la
mayoría de los casos una mejor relación con las madres o abuelas a diferencia de los papás,
siendo un caso en particular el único en el que la relación más cercana y afectivas se daba
con el padre porque evita llamar la atención cuando sus comportamientos son inadecuados.
69
Se infiere que el hogar para cada uno de los niños es un lugar muy especial por la
forma en cómo se refieren a él, “ A mí me gusta mi casa porque es de madera y muy linda”
N1 “Me gusta estar en la cocina porque mi mamá me da la comida” N2 “Yo me siento feliz
en mi casa con mi mamá”N3, estos son lugares que les genera tranquilidad, alegría,
seguridad, amor y unión, allí es donde más se divierten y pasan el tiempo con las personas
más importantes para cada uno de ellos; realizando diferentes actividades, para dos de
ellos jugar con carros y para las otras dos cocinar y jugar a la cocinita.
Algunos de los niños se sienten felices especialmente cuando tienen tiempo para
estar con ellos, porque comparten, juegan y los cuidan ya que esto les promueve un estado
emocional muy sereno, alegre y confiable
La convivencia en las diferentes familias tiene una mirada distinta ya que se
enfocan en la disciplina bajo estrategias como la amenaza y el castigo que les generan a los
niños inseguridad y temor para enfrentar las situaciones de la vida cotidiana.
Se evidencia cómo los niños han logrado tener aprendizajes significativos por
medio del juego simbólico, pero algunos de ellos, en ocasiones se muestran distraídos y
retraídos con explicaciones o temas propuestos, sin embargo, esto no significa que no estén
llevando a cabo procesos desde las diferentes dimensiones del desarrollo
La percepción que tienen los niños de la familia es que está compuesta por mamá,
papá, abuela y tía, en ocasiones se identifica, en éstos agentes educativos amor, maltrato,
agresividad, y a su vez autoridad, generando en ellos diferentes necesidades y/o
satisfacciones emocionales.
Fue preciso encontrar similitudes entre los conceptos que tienen los niños sobre
sus madres los cuales se expresan a través de las diferentes manifestaciones del lenguaje
“Ella me cuida, pero me pega con el rejo, a mí me da mucho miedo y salgo corriendo” N1
“yo quiero más a mi papá, mi mamá me pega. Este algodón es suave como mi papá” N2
“Mi mamá es muy linda, ella juega conmigo a hacer jugo, cuando me porto mal me muestra
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la chancla, pero no me pega” N4; cambiando este concepto de acuerdo a la situación o la
emoción como: felicidad, tristeza, miedo y temor
71
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Obtenido de Proyecto de Innovación Docente Aula Virtual de Psicologia:
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74
Anexos
ANEXO 1
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Esta información está dirigida a directivas, padres de familia, niños y niñas que se
encuentran vinculados con el programa Buen Comienzo 8 horas, sede Fundación las
Golondrinas Caicedo- Villa Lilian con el fin de autorizar la participación en la
investigación “Prácticas de crianza y necesidades cognitivas –emocionales en niños y
niñas de 3 a 5 años” realizada por estudiantes del décimo semestre en Licenciatura en
Educación Preescolar de la Universidad San Buenaventura- Bello; con nombre;
identificación y código:
Kelly Andrea Zuluaga Carvajal, 1’035.869.984, 998204
Daniela Alejandra Pérez Moná, 1’020.442.951, 1028445
Emperatriz Correa Mestra, 1’035.430.644, 998203
Por tanto, se agradece la participación en dicha investigación, ya que es indispensable en la
ejecución del trabajo de campo, sin embargo, está en la libertad de retirarse antes, durante
y/o después de la investigación y que por seguridad se cambiaran los nombres de las
personas implicadas, además, las estudiantes se comprometen a garantizar anonimato y a
entregar devoluciones durante el desarrollo y al final de la investigación.
Al firmar dicha autorización, está aceptando la participación en talleres reflexivos,
entrevistas, encuestas, historias de vida, videos, fotografías, audios y diversas actividades
que se encuentren planeadas para cada sesión según el cronograma previsto (Anexo 1).
Las fotografías y la información obtenida son confidenciales, no serán publicadas y su uso
es estrictamente académico. Su participación en esta investigación es totalmente voluntaria.
Por tanto, el acudiente o padre de familia debe garantizar la autorización del niño o niña
incluido en el proceso al igual que él/ella.
75
AUTORIZACIÓN
Hemos leído el procedimiento descrito arriba. Las Licenciadas en Educación Pre-escolar en
Formación nos han explicado, y contestado nuestras preguntas. Voluntariamente damos
nuestro consentimiento para que se realicen las actividades programadas y el registro
fotográfico de cada una de ellas, durante el tiempo que tome el diseño de este trabajo de
grado.
Asesora del trabajo de grado
Nombre:……………….Cédula……………………
Licenciadas en Formación
Nombre:…………………………………….…………………Cédula….……………….
Nombre:…………………………………….…………………Cédula…………………..
Nombre:…………………………………….………………....Cédula………..........
76
LISTA DE AUTORIZACIÓN DE DIRECTIVAS, NIÑOS, NIÑAS Y PADRES DE FAMILIAS
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño (a
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño(a)
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño(a)
77
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño (a
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño(a)
_________________________________ ________________________ ___________________
Nombre padre y/o acudiente Firma y cédula Nombre y firma-huella del niño(a)
ANEXO 2
ANEXO 3
ANEXO 4
ENTREVISTA
1. ¿Qué es lo que más les gusta hacer juntos en los días libres de ambos?
2. ¿Cómo familia realizan alguna actividad que los identifiquen cual y porque?
3. ¿Acompaña los buenos o malos momentos en los que su hijo se siente triste o
feliz?
4. ¿Cómo es la manera de llamar la atención de su hijo frente a los diferentes
comportamientos que tiene dentro o fuera del CI?
5. ¿De qué manera aporta usted como papá o mamá al crecimiento personal de su
hijo?
6. Recuerde por favor algunos aspectos sobre cómo lo educaban a usted su padres y
encuentra algunas similitudes como trata o educa ahora con sus hijos
ANEXO 5
ENTREVISTA PARA NIÑOS- NIÑAS DE
3 A 5 AÑOS
NOMBRE DEL ENTREVISTADO: _________________________________ Huella
La presente entrevista se realizará con el objetivo triangular nuestra investigación. Sus respuestas
y la veracidad que tengan serán de gran importancia las conclusiones y análisis de resultados.
Realiza un dibujo de tu familia.
*El entrevistador también realizará un dibujo con el fin de establecer un dialogo con el niño-
niña y continuar con la solución de las siguientes preguntas.
1. Señala las personas que viven contigo
2. Contemos cuántas personas te cuidan
3. ¿Con quién te gusta estar más tiempo?
4. La persona que te cuida es:
5. ¿Cómo te tratan tus padres o la persona que te cuida (abuela, tía, vecina)? Por ejemplo
cuando no quieres comer O cuando estas triste
6. ¿Te castigan muchas veces o pocas?
7. ¿Sabes que es un castigo o sanción? ¿Por qué lo hacen las personas adultas contigo?
8. ¿Cómo es tu casa? Dibújala y cuéntame si te siente muy feliz o triste allí
9. Dibuja el lugar que más te gusta. ¿por qué te gusta este lugar?
10. ¿Qué actividades haces durante el día? ¿Cuál es la que más te gusta? ¿por qué?
11. ¿Cuál es la persona que más quieres? Y ¿por qué?
12. ¿cuál es el momento en que eres más feliz?
ANEXO 6
ENTREVISTA A PADRES DE FAMILIA Y/O ACUDIENTES
La presente entrevista se realizará con el objetivo de profundizar nuestra investigación. Sus
respuestas y la veracidad que tengan serán de gran importancia las conclusiones y análisis de
resultados.
NOMBRE DEL ENTREVISTADO:____________________________CC.___________
1. ¿Cómo es la relación entre los miembros de su familia?
2. ¿Cómo es la relación del niño con los miembros de su familia?
3. ¿Con qué personas vive actualmente el niño(a)? ¿Quiénes son?
4. ¿Hay otras personas que ayudan en el cuidado de tu hijo? ¿Quiénes son esas personas?
¿Por qué piensas que ellas ayudan en el cuidado?
5. ¿Qué parentesco tiene la persona que cuida o educa con el/la niño(a)?
6. Incluyendo alimentación, abrigo, protección, etc. ¿cómo cuidas a tu hijo?
7. Cuando él (ella) esta alterado(a) o molesto(a) ¿cómo respondes?
8. ¿Qué estrategias utiliza para educar a su hijo? Físicamente, emocionalmente,
económicamente
9. ¿cómo aprendiste a educarlo de ese modo?
10. ¿Con que frecuencia castigas al/la niño(a)? y ¿por qué?
11. ¿Qué opina usted sobe el castigo físico?
12. ¿Cómo genera espacios de recreación familiar?
13. ¿Usted qué cambiaría de su forma de educar a su hijo? Le parece adecuada, Si_ No_
Porque?
14. ¿Si contara con más tiempo le gustaría hacer con su hijo?
15. Como proyecta a su hijo dentro de unos años
ANEXO 6
PERMISO
Medellín, 19 de Marzo de 2016
Señora
Nora Elena Ramírez Pareja
Coordinadora pedagógica Comité Privado de Asistencia a la Niñez PAN
Asunto: solicitud permiso
En el marco del programa de Educación Preescolar que vengo realizando en la Universidad San
Buenaventura, en este momento me encuentro cursando el noveno semestre y con ello mi trabajo
de investigación que se denomina: “PRÁCTICAS DE CRIANZA Y NECESIDADES
COGNITIVAS –EMOCIONALES”. Para continuar con dicha investigación se hace necesario
realizar el trabajo de campo en la Fundación las Golondrinas del barrio Caicedo. Por tanto, es
fundamental solicitarle permiso para asistir a los diferentes talleres reflexivos los días 28 de
Marzo entre las 7:00 am y 12:00pm y el 30 de Marzo a partir de las 3:40 pm.
Cualquier inquietud que desee ampliar al respecto, puede contactar a la asesora del proyecto de
investigación Gloria Elena Román Betancur. E-mail: glorobe@yahoo.com. Celular 310 410 95
53
Respetuosamente,
____________________________ ______________________________
Gloria Elena Román Betancur Daniela Alejandra Pérez Moná
Asesora de Trabajo de Grado Estudiante
Medellín, 19 de Marzo de 2016
Hermana
Adriana María Bedoya Gaviria
Coordinadora pedagógica Centro Educativa Hogar Jesús Redentor
Asunto: solicitud permiso
En el marco del programa de Educación Preescolar que vengo realizando en la Universidad San
Buenaventura, en este momento me encuentro cursando el décimo semestre y con ello mi trabajo
de investigación que se denomina: “PRÁCTICAS DE CRIANZA Y NECESIDADES
COGNITIVAS –EMOCIONALES”. Para continuar con dicha investigación se hace necesario
realizar el trabajo de campo en la Fundación las Golondrinas del barrio Caicedo. Por tanto, es
fundamental solicitarle permiso para asistir a los diferentes talleres reflexivos los días 28 de
marzo entre las 7:00 am y 12:00pm y el 30 de marzo a partir de las 3:40 pm.
Cualquier inquietud que desee ampliar al respecto, puede contactar a la asesora del proyecto de
investigación Gloria Elena Román Betancur. E-mail: glorobe@yahoo.com. Celular 310 410 95
53
Respetuosamente,
____________________________ ______________________________
Gloria Elena Román Betancur Daniela Alejandra Pérez Moná
Asesora de Trabajo de Grado Estudiante
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