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TESTIGO DE LA PAZEN EL CORAZÓN DE NUESTRO PUEBLO
EL PADRE MACHADO
2
JEAN-PIERRE WYSSENBACH S.J.
Publicaciones de la Academia Internacional de Hagiografía.Caracas, Venezuela.
Diseño: Norka SalasImpresión: Organización Gráficas Capriles, C.A.
ÍNDICE
Presentación 5 1. El entierro apoteósico 7 2. Vocación. Sacerdote 9
3. Teniente cura. Párroco 13
4. Hospital. 17
5. Las Hermanitas de los Pobres 21
6. A Caracas. Muere la Madre Emilia 25
7. Nuevas Fundaciones 31
8. Separación. San José del Ávila 39
9. La Plaza Jerusalen 49
10. El Prado de María 55
Los santos enseñan caminos. A Rafael Febres -Cordero
le tenemos que agradecer por tantas publicaciones con
las que nos acerca a los santos de América Latina.
Yo me comprometí a resumir la vida del padre Santiago
Machado. Pero la Hermana María Margarita Villalba la
ha escrito tan bien, y con tantas escenas de cine, que se
hace dificilísimo resumirla. Además le añadí alguna
anécdota tomada de Luis Enrique González, cronista del
Municipio Vargas.
Así que mi nombre firma sólo esta presentación y los
párrafos finales. Todo lo demás es de la Hermana María
Margarita Villalba, a la que le agradezco por habernos
regalado esa película del padre Machado.
También doy las gracias a la Hermana Inmaculada
Lacarra, la primera que me entusiasmó con la figura de
este extraordinario sacerdote.
Jean-Pierre Wyssenbach S.J.
PRESENTACIÓN
Padre Santiago Machado
CAPÍTULO 1
1. ENTIERRO APOTEÓSICO
Eran las 4 de la tarde del jueves 7 de diciembre de1939, hora señalada para conducir el cadáver del
presbítero Santiago Florencio Machado Oyarzábal a la
Santa Iglesia Catedral de Cacas, a fin de satisfacer el deseo
del pueblo.
Asistió todo el Clero, el Seminario, muchas
Congregaciones Religiosas, el Colegio Santa Eduvigis y
la Banda Marcial, así como el General Eleazar López
Contreras, Presidente de la República y su Gabinete en
pleno.
Llegado el momento de ir a cargar la urna, el Presidente
hizo ademán de hacerlo él también, pero los hombres del
pueblo no lo consintieron y casi se lo arrebataron como
diciendo: «Esta honra nos toca a nosotros».
El silencio y el orden impresionaban; los rezos eran
constantes y las siguientes exclamaciones casi continuas:
«Es un santo», «Cuánto vale la virtud», «Este fue mi
maestro», «Éste me pegó para que yo fuera bueno», «Es
la primera vez que esto se ve en Caracas».
8 PADRE SANTIAGO MACHADO
El momento de entrar en la Catedral fue
angustiosamente dramático, pues el pueblo no quería
separarse del cortejo ni por unos instantes, permaneciendo
afuera, pues la Catedral también estaba llena. Tuvo que
intervenir la Policía. Hubo un momento en que las
Hermanitas de los Pobres creyeron asfixiarse pero, sin
saber cómo, se encontraron todos dentro de la Catedral.
También los seminaristas debieron sostener ardua lucha
para hacer llegar a su sitio a Monseñor Mejías, Obispo
auxiliar de la Arquidiócesis de Caracas y al resto de los
Obispos que iban a celebrar los oficios y al Encargado de
la Nunciatura, Monseñor Tunzi.
El padre Fuentes Figueroa se subió al púlpito y dio las
gracias por aquella nunca vista manifestación.
¿Quién era Santiago Florencia Machado Oyarzábal,
el padre Machado, el sacerdote que había conquistado
todos aquellos corazones?
9
CAPÍTULO 2
VOCACIÓN. SACERDOTE
Santiago Machado nació el 7 de noviembre de 1850en La Victoria (Estado Aragua).
Fue hijo de don Santiago Machado y León y de doña
Bernardina Oyarzábal García. Dos padres santos, que a
él y a su hermana Dominga, cuatro años mayor que él, los
educaron en la fe cristiana. Todos los días, a las 8 de la
noche, rezaban el rosario todos los habitantes de la casa.
Doña Bernardina, mientras amamantaba a su hijo,
rezaba el rosario, pidiéndole a la Madre celestial le
alcanzara la gracia de que su hijo fuera escogido por Dios
para ser sacerdote.
Doña Bernardina enseñó a sus hijos el catecismo, así
como las primeras nociones de lectura y escritura. Llevaba
a sus hijos a un oratorio que había hecho en la casa, para
orar ante el Crucifijo e inspirarles una gran devoción a la
Pasión de Nuestro Señor.
Don Santiago llevaba en noviembre a su hijo a San
Mateo, a la peregrinación de Nuestra Señora de Belén.
10 PADRE SANTIAGO MACHADO
Así le infundió la devoción a la Virgen María. También lo
llevaba al campo, para iniciarlo en los trabajos del campo.
A los siete años su mamá perdió definitivamente la
vista. Esto le produjo un gran dolor.
También a esa edad comenzó a asistir al catecismo. A
los 12 años hizo su primera comunión. Y ese día, después
de la celebración, su mamá lo envió con alimentos para
repartirlos por las casas de los pobres.
Hasta los 15 años estudió en La Victoria, en la escuela
primaria de La Candelaria.
Tuvo que superar muchas dificultades hasta ingresar
al Seminario de Caracas a los 18 años.
A Santiago Machado le cuesta separarse de sus padres
para ir a Caracas. Su padre le acompaña en el viaje. El
Seminario Santa Rosa de Lima funcionaba en un local al
lado de la Catedral.
Eran años difíciles para Venezuela. A los pocos días
de asumir la presidencia, el general Antonio Guzmán
Blanco expulsa de Venezuela al arzobispo de Caracas,
Monseñor Silvestre Guevara y Lira, por no plegarse a los
caprichos del autócrata y suprime los seminarios. El de
Caracas sigue funcionando como un colegio.
Santiago Machado no perdió ni un año de sus estudios
y tenía un entusiasmo que lo contagiaba a sus compañeros,
11
para que los que se desanimaban fácilmente continuaran
estudiando.
En las vacaciones regresaba a La Victoria y las
aprovechaba para dar catecismo a los niños y prepararlos
para celebrar la Primer Comunión. Una experiencia que
le servirá para la publicación de su catecismo, del que se
hicieron 19 ediciones, y para la celebración de las Primeras
Comuniones en la Iglesia de Santa Teresa en Caracas, que
se hicieron famosas.
Para ordenarse de sacerdote tuvo que viajar a la isla
de Trinidad, donde estaba desterrado el arzobispo de
Caracas. Salió para la isla el 12 de febrero de 1875.
Terminó su formación con el arzobispo. Fue ordenado de
sacerdote el 10 de junio de 1876. El 23 de junio de
1876, fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, en la capilla
de las religiosas dominicas exclaustradas de su monasterio
de Caracas, celebró su primera misa.
Pasados unos días más al lado del Señor Arzobispo y
compañeros sacerdotes, regresó a Venezuela por el puerto
de La Guaira, donde le esperaban Don Santiago,
familiares, amigos y compañeros de Seminario.
Después de un breve descanso en Caracas, padre e
hijo siguieron a La Victoria, donde Doña Bernardina, llena
de alegría, daba gracias a Dios repitiendo que no tenía
VOCACIÓN. SACERDOTE
12 PADRE SANTIAGO MACHADO
palabras para agradecer esa gracia tan especial que Dios
le había concedido.
La solemne Misa Cantada en La Victoria fue una gran
manifestación de fe y piedad, donde participó el pueblo
que quiso acompañar al joven sacerdote. El monaguillo
fue su papá.
Después del almuerzo continuaba el festejo en casa
de los Machado cuando se dieron cuenta de que faltaban
los papás. Los buscaron por todas partes hasta encontrarlos
en la iglesia, donde llevaban varias horas de rodillas ante
el sagrario, dando gracias a Dios, diciendo que lo que
había hecho con ellos no tenían cómo pagárselo.
Seminario Santa Rosa de Lima, Caracas
13
CAPÍTULO 3
TENIENTE CURA. PÁRROCO
En aquel tiempo el estado Aragua pertenecía a la
arquidiócesis de Caracas.
El primer destino que la Jerarquía asignó al joven
Santiago Machado fue la Capellanía de la Ermita delCarmen en La Guaira. Con su celo y fervor asombró a
sus feligreses. En poco tiempo organizó el catecismo y
preparó a los jóvenes para las Primeras Comuniones, que
se realizaron el 16 de julio de 1877. Celebró también las
fiestas patronales.
Después de unos meses con mucho fruto fue nombrado
Teniente Cura, o Vicario Cooperador de la Parroquia de
Maiquetía. Este cambio fue muy sentido por los feligreses
de la Ermita, pues con su ejemplo de Sacerdote fervoroso
e incansable en su trabajo los había conquistado.
Escribieron un Manifiesto al Arzobispo de Caracas,
pidiendo en vano el regreso del padre Machado.
En octubre de 1877 comenzó a ejercer de Teniente
Cura en la parroquia de Maiquetía, donde el párroco era
14 PADRE SANTIAGO MACHADO
Monseñor Doctor Juan Bautista Castro, que poco después
sería nombrado Arzobispo de Caracas.
El Padre Machado con su ardiente ideal sacerdotal
cimentado en la fe, su dinamismo, carácter emprendedor,
hondo sentido de solidaridad con todos, en especial con
los más pobres y necesitados resultó el compañero ideal
para la transformación de la Parroquia. Los fieles fueron
deponiendo sus rencores, se legalizaron las uniones
conyugales mediante el sacramento del matrimonio. Hasta
los que tenían el poder cambiaron de conducta y mejoraron
en sus actuaciones, consiguiendo que de una parroquia
disoluta y revoltosa, Maiquetía se transformara en una
parroquia modelo, tanto en la vida pública y privada como
en lo referente al aspecto religioso.
Al Padre Machado le tocaba con frecuencia ir a
administrar los Sacramentos a los enfermos de los barrios
más pobres y así tenía un nutrido grupo a los que visitaba
con gran frecuencia. Muchos vivían en pobres ranchos y
por cama sólo tenían el duro suelo. En estos casos el padre
Machado hablaba con un carpintero que le construía un
catre. Luego llamaba al doctor Brito, llevándose el padre
la receta para enviar las medicinas. Y si era necesario les
conseguía hasta ropa. Más adelante, en colaboración con
algunas damas, alquiló unos cuartos en los barrios para
15
alojar a los enfermos abandonados, para que no estuvieran
a la intemperie.
En estrecha colaboración, el Párroco y el Teniente Cura
se entregaban a la Catequesis de niños y adultos,
preparándolos para la Primera Comunión. Maiquetía fue
la parroquia en las que se inauguraron de forma tan
solemne, que sirvieron de modelo hasta para la capital de
la República.
En 1881 al Párroco le pidieron que llevara la comunión
a un enfermo. Él lo hizo en la forma tradicional, con un
acompañante tocando la campanilla. Las autoridades
dijeron que esto estaba prohibido. Detuvieron al párroco.
Lo condujeron a la cárcel. Y de allí lo remitieron a Caracas.
El padre Machado quedó desde entonces encargado
de la parroquia. Como párroco se caracterizó por su
dinamismo, que le permitió continuar la labor emprendida
con el párroco anterior. Se ocupó no sólo de la pastoral
evangelizadora de la población, sino también de la socio-
benéfica y asistencial, que siempre habían estado
coaccionadas por el ambiente de opresión a la Iglesia que
ejercían las autoridades de turno.
Debido a su iniciativa se mejoró el Acueducto, para
lo cual colaboró con sus propios recursos y al ayuda de
varias personas pudientes de la Parroquia, ya que la
aportación del Gobierno fue insuficiente.
TENIENTE CURA. PÁRROCO
16 PADRE SANTIAGO MACHADO
Comenzó a funcionar el Servicio Postal.Logró que el alumbrado de la población también fuera
mejorado.
Para dotar a la Iglesia parroquial de todo cuanto
necesitaba hizo un primer viaje a Europa el año 1883.
Visitó Barcelona, Lourdes, París y Roma.
Entusiasmado y lleno de fe por los hechos
sobrenaturales que presenció en Lourdes –de cuyas
apariciones se cumplían justamente 25 años– se propuso
hacer en Maiquetía una réplica de la Gruta de Lourdes y
en el mismo año 1883 comenzó la construcción de la Gruta
en la Iglesia. Esa gruta fue la primera que se hizo en toda
América.
Ese año también inauguró las Peregrinaciones a
Nuestra Señora de Lourdes desde Caracas subiendo por
el Ávila, que todavía se hacen.
En 1885 organizó el Alojo de los peregrinos.
Más adelante hizo la Plaza de Lourdes, que fue
bendecida el 21 de febrero de 1902.
Compuso un texto de Catecismo en un estilo de fácil
comprensión para niños y adultos. El Arzobispo de
Caracas, monseñor Críspulo Uzcátegui lo aprobó el 31
de marzo de 1887. Este catecismo llegó a tener 19
ediciones.
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CAPÍTULO 4
HOSPITAL
El año 1887 el Padre Machado resolvió interesar a la
feligresía para que entre todos pudieran prestar una ayuda
efectiva a dichos enfermos. Se constituyó la Fundación
de la Asociación de San José, compuesta por dos juntas:
una de Damas, para prestar el servicio asistencial a
domicilio y una de Caballeros, para aportar el dinero
necesario para el sostenimiento de los enfermos.
Ambos grupos eligieron su Junta Directiva: la de
Caballeros la presidiría el señor Carlos Devoe y la de
Damas la señorita Isabel Lagrange.
Se resolvió conseguir de la Junta Comunal la donación
del edificio en ruinas de lo que fue una cárcel, situado en
Pariata, a fin de construir allí un modesto albergue.
El padre Machado acudió al Palacio Arzobispal para
informar al Arzobispo sobre sus actividades y pedirle el
permiso para la construcción del pequeño Hospital.
Después de saludar al Arzobispo le preguntó lleno de
interés, quién era la joven que acababa de salir de su
Despacho y se había cruzado con él en la escalera.
18 PADRE SANTIAGO MACHADO
Monseñor le contestó: «Es la señorita Emilia ChapellínIstúriz, quien ha venido a despedirse pues próximamente
viajará a Curazao a entrar a la vida religiosa». El Arzobispo
autorizó verbalmente la construcción del edificio.
El padre Machado fundó un periódico parroquial, al
cual puso por nombre «El Eco de Lourdes» y cuyo primer
número salió a la luz pública el 5 de mayo de 1888.
Circulaba mensualmente.
En Curazao, a los pocos meses de haber comenzado
su postulantado, la señorita Emilia Chapellín se enfermó
de sumo cuidado y se hizo indispensable que regresara a
Venezuela. De Caracas se trasladó a Maiquetía en busca
de los aires marinos que el médico de la familia
consideraba que le serían provechosos.
Emilia frecuentaba la Casa de Dios. Y su oración
prolongada, su porte modesto, su actitud toda,
impresionaron favorablemente al Párroco, quien al fin
reconoció en ella a la joven que viera en el Palacio
Arzobispal. La invitó a asociarse a la Junta de Damas.
Ella, después de orar, reflexionar y consultar, aceptó la
propuesta.
Emilia, mediante el apostolado asistencial, realizó una
pastoral evangelizadora fructífera y trabó una gran amistad
con Isabel Lagrange, futura fundadora de las
Franciscanas del Sagrado Corazón.
19
Al agotarse los recursos económicos por las obras, el
padre Machado envió a Isabel y Emilia a pedir de puerta
en puerta lo necesario para proveer al sustento de esos
pobres y enfermos. Fue a la vez que una dura experiencia,
una gran victoria del amor a los más necesitados y
abandonados.
Y cuando Isabel Lagrange tuvo que retirarse del
Hospital, la sustituyó Emilia en la presidencia de la Junta
de las Damas.
El Párroco bendijo el Hospital en acto solemne el 22de abril de 1888. El Hospital San José de Maiquetía fue
el primero construido en Venezuela para los pobres y
personas más necesitados, antes que el Hospital Vargas
de Caracas.
HOSPITAL
Viaducto de Pariata en Maiquetía
Hospital San José de Maiquetía. Finales del siglo XVIII
CAPÍTULO 5
LAS HERMANITAS DE LOS POBRES
El 5 de mayo de 1874, el presidente Antonio Guzmán
Blanco había dado la Ley de Cierre y Expropiación de
los Conventos.
En el Hospital ya habían sido instalados los enfermos.
Y las Damas de la Junta, encabezadas por su Presidenta,
prestaban sus servicios en diversas actividades, turnándose
por días. El padre Machado instaló a la señora Rufina de
Alfonso, viuda, como enfermera a tiempo completo. Y
cuando enfermó, a principios de 1889, fue sustituida por
la señorita María de Jesús Badillo.
El Padre también dictó a las Damas de la Junta el
primer Reglamento para el trabajo en el Hospital.
A los dos meses de la llegada de la señorita Badillo se
asoció a ella la señorita María Eustaquia Ochoa, quien
también había escuchado la llamada del Señor.
En mayo de 1889 el Padre Machado viajó a Europaen compañía de su amigo el presbítero doctor Juan
Bautista Castro, a quien había hecho partícipe de su
aspiración a fundar una Congregación Religiosa con
22 PADRE SANTIAGO MACHADO
algunos miembros de la Junta de Damas que deseaban
consagrarse al Señor en el servicio asistencial a los pobres,
y a quien sorprendió en la Sala de Audiencias Pontificias,
preguntándole si creería en la Congregación que pensaba
fundar cuando le presentara 50 Hermanas de hábito. Aquél
le respondió que se conformaría con 20. Pero el padre
Machado le ofreció celebrar una fiesta en su honor cuando
le pudiera presentar las 20 hermanas, aunque no quedaría
satisfecho hasta no presentarle las 50.
Mediado el mes de agosto de 1889 regresó de Europa
el Padre Machado. En su mente bullía la idea de realizar
lo antes posible su deseo de establecer una Congregación
Religiosa para la atención de los pobres y enfermos del
Hospital. Estaba seguro que además de Emilia, María de
Jesús y María Eustaquia habría entre las jóvenes
pertenecientes a la Asociación otras que también
responderían con un sí generoso al llamado del Señor.
Habló con Emilia y la convenció de ir a Caracas donde
se encontraba su padre, para conseguir el anhelado
permiso de instalarse definitivamente en el Hospital. Su
papá le dio el permiso, pues la situación política había
cambiado con el nombramiento del doctor Juan Pablo
Rojas Paúl como Presidente de la República.
Emilia regresó a Maiquetía el 25 de septiembre de1889 y esa misma tarde, previa la autorización verbal del
23
Arzobispo Monseñor Críspulo Uzcátegui, que el padre
Machado había solicitado, se instaló definitivamente en
el Hospital.
El padre Machado, que conocía la ferviente devoción
que ella le profesaba a San José, había colocado su imagen
en medio del patio.
Ese mismo día recibió de la señorita María de Jesús
Badillo junto con la donación de sí misma y de María
Eustaquia Ochoa, las llaves del Hospital con todo el caudal
humano que poseía, 30 enfermos, de los cuales 18 eran
mujeres y 12 hombres. Desde ese momento junto con el
padre Machado pasaba a ser fundadora de la primera
Congregación de Vida Activa en Venezuela.
El Padre Machado obtuvo prontamente del Arzobispo
Monseñor Críspulo Uzcátegui la anhelada licencia y fijó
el 25 de octubre para bendecir y entregar a Emilia el
Hábito de Hermanita de los Pobres.
El 12 de febrero de 1890 colocaron la primera piedra
de la capilla del Hospital. La Capilla se terminó y fue
bendecida el 4 de mayo. Y el 30 de agosto, cuando llegó
el permiso de la Santa Sede, se instaló el Santísimo.
Contando con la ayuda de un piadoso sacerdote
español, amigo del Padre Machado, el presbítero Domingo
Lamolla, quien sí conocía bastante del estado religioso,
entre ambos Fundadores fueron elaborando las primeras
LAS HERMANITAS DE LOS POBRES
24 PADRE SANTIAGO MACHADO
Reglas, de manera que resultaran acordes con la manera
de ser de los venezolanos.
La Madre Fundadora se propuso desde el principio
que las Hermanitas imitaran la vida mixta de Jesús,
distribuyendo el tiempo entre la oración, por la cual se
unían a Dios en mente y corazón, y las obras de celo y
caridad, mediante la atención integral a los enfermos y
ancianos.
Emilia Chapellín Istúriz
25
CAPÍTULO 6
A CARACAS.MUERE LA MADRE EMILIA
A pesar de los esfuerzos realizados por la
Congregación, los ingresos del Hospital no alcanzaban
para su sostenimiento, lo cual obligó a los Fundadores a
tomar la resolución de ir a recolectar limosnas en la ciudad
de Caracas. Para esto el Padre Machado se encargó de
pedir los permisos necesarios a las autoridades Civil y
Eclesiástica.
Viendo que en Caracas había buenas posibilidades para
establecer la segunda Casa de la Congregación, que se
hacía indispensable dadas las condiciones del Hospital
San José, que ya resultaba insuficiente para recibir más
enfermos y los recursos económicos eran pocos para poder
ampliarla, el Padre Machado y la Madre Emilia
resolvieron que había llegado la hora, pues ya contaban
con doce miembros (siete Hermanas Profesas y cinco
Novicias) con las cuales se podría atender a las dos Obras.
26 PADRE SANTIAGO MACHADO
El Padre Machado hizo diligencias y consiguió en
alquiler una casita en las inmediaciones de La Pastora,
exactamente de Cuño a El Guanábano, nº 28.
Se fijó como fecha para el traslado el 15 de enero de1892.
El 31 de mayo se tuvo por primera vez la celebración
eucarística. Una de las hermanas buscó en el almanaque
cuál era el santo del día, y resultó ser «Nuestra Señora de
la Providencia. Y a la casa la llamaron «El Asilo de laProvidencia».
El 2 de febrero de 1892 llegó a Caracas la hermana
Paula, que fue nombrada Superiora de la casa y maestra
de las cuatro novicias que había en ese momento.
Para poder dedicarse mejor a la Congregación de las
Hermanitas de los pobres, el Padre Machado le puso la
renuncia como párroco de Maiquetía al Señor Arzobispo,
el cual, vistas todas las razones expuestas se la aceptó,
nombrando párroco al presbítero Nicolás E. Navarro,
quien le recibió la Parroquia el 4 de agosto de 1892. El
padre Machado había trabajado allí 15 años.
El Arzobispo de Caracas, consciente de la inmensa
capacidad de trabajo que poseía el Padre Machado,
dispuso que ayudase al Señor Arcediano en el importante
servicio de la Santa Capilla. Esto le obligó a fijar su
27
morada en la residencia de los sacerdotes que atendían el
templo.
La salud de la Madre Emilia comenzó a declinar a
pasos agigantados, a pesar de los cuidados de sus hijas y
de la preocupación del Padre Fundador, que empleaba
todos los medios a su alcance para que guardara reposo y
se alimentara mejor.
Los médicos indicaron un reposo en Los Teques,
hospedándose en casa de la familia León, muy ligada a la
Congregación.
El temperamento de la Madre Emilia no mejoró en
nada su salud. Después de instalarse y reposar por algunos
días, se sintió algo mejor, comenzando a interesarse por
las necesidades de los pobres de la zona.
Y al enterarse de que había un Asilo de Enajenadosresolvió ir a visitarlo, acompañada por la Hermana María
de los Ángeles y su amiga Trina Alvarado.
Encontró una situación espeluznante. Procedió a asear
a los enfermos que estaban en peores condiciones. Llamó
al padre Machado. Y éste se entrevistó con el doctor
Guillermo Tell Villegas Pulido, Consejero Federal
Encargado de la Presidencia de la República y logró que
se fundara el Municipal Psiquiátrico, y que se encargaran
de él las Hermanas de San José de Tarbes.
A CARACAS. MUERE LA MADRE EMILIA
28 PADRE SANTIAGO MACHADO
El Gobernador de Caracas, doctor Lucas Remella,
cedió el Hospital de Mujeres situado entre las esquinas
del Teatro Municipal y San Pablo para que fuera la nuevasede del Asilo de la Providencia, atendiendo a la solicitud
hecha por el Padre Machado, que palpaba la necesidad
de que los ancianos, ciegos e inválidos disfrutaran de
mayor espacio físico para su comodidad y también para
poder aumentar su radio de acción. A mediados de
diciembre de 1892 se realizó el traslado.
La madre Emilia, obedeciendo los deseos del Padre
Machado, que aún conservaba la esperanza de que pudiera
mejorarse, se trasladó a la casa que tenía en Macuto su
hermana Dolores Chapellín de Castillo.
El 13 de enero el Padre Machado le administró la
Unción de los enfermos y le aplicó la indulgencia plenaria.
El 18 de enero de 1893, ante la inminencia de la
muerte, el Padre anticipó la celebración de la Eucaristía,
para darle la Comunión. Avisada la Madre, la recibió de
rodillas y con los brazos en cruz, sostenida por las
Hermanitas. Acostada prontamente, entregó al Creador
su alma, embellecida por la práctica constante de todas
las virtudes.
El 19 fue enterrada en la Capilla del Hospital San José.
El 24 de abril fue elegida Superior General la hermana
María de los Ángeles. .
29
La mamá del Padre Machado, Doña Bernardina,
hacía tiempo que venía sufriendo serios quebrantos de
salud, además de los achaques propios de su edad, siendo
atendida con amor y dedicación por Don Santiago y su
hija Dominga. El Padre Machado la acompañaba durante
todo el tiempo que podía robarle a sus múltiples tareas en
la organización y asesoramiento de la Congregación y a
sus obligaciones en la Santa Capilla.
Para esa abnegada Madre, ciega y enferma, era
consolador el que su hijo estuviese abrumado de trabajo
sirviendo al Buen Dios y viviendo su ideal sacerdotal como
ella se lo había pedido al Señor, por intercesión de su
Santísima Madre, desde el instante en que lo tuvo en sus
brazos por primera vez.
El 9 de julio de 1893 entregó su preciosa alma al
Creador. La muerte de su madre que le dio la vida y le
obtuvo la vocación fue para el Padre Machado fuente de
constante dolor hasta su muerte.
A CARACAS. MUERE LA MADRE EMILIA
Madre Emilia
CAPÍTULO 7
NUEVAS FUNDACIONES
El 8 de septiembre de 1893 debían profesar tres
novicias y tomar el hábito una postulante. Con ello se
completaba el número de veinte Hermanas. Entonces el
Padre Machado le preparó una fiesta a su amigo, el padre
Juan Bautista Castro para presentarle las veinte Hermanas.
Y le dijo: «Bien, ésta es su fiesta. La mía será cuando
pueda presentarla cincuenta Hermanas de hábito».
El Padre Machado había recibido la petición de una
Junta de Caridad de Puerto Cabello, para que tomara a
su cargo la Obra denominada «Beneficencia del Carmen»,
que funcionaba en dicha población. La asumieron el 20de septiembre de 1893.
Un clérigo colombiano, Adolfo Gil, organizó una serie
de calumnias contra la dignidad y moralidad de los
presbíteros Santiago Machado y Nicolás Navarro. Adolfo
Gil fue censurado por Roma. Pero desgraciadamente,
aquellas calumnias dejaron heridas no cicatrizadas. ¿No
decía Voltaire: «Calumnia, calumnia, que algo queda»?
32 PADRE SANTIAGO MACHADO
El 3 de julio de 1894 se bendijo la Casa Noviciado, al
lado del Asilo de la Providencia.
En 1894 llegó al conocimiento del Padre Machado la
Obra del Pan de los Pobres. Y el 13 de junio de 1895 la
estableció en el Asilo de la Providencia, colocando a su
entrada una pequeña imagen de San Antonio de Padua, y
a sus pies una alcancía para recoger las limosnas que
ayudarían a sostener a los pobres acogidos en dicha casa.
San Antonio es uno de los dos co-patronos de la
Congregación.
El Padre Machado sentía la necesidad de dotar a la
Congregación de leyes firmes y ya aprobadas por la
Iglesia. Para logarlo, pasó los primeros meses del año 1896dedicado, en los ratos que podía robar a sus otros deberes,
a estudiar las Reglas existentes, no excluyendo ni la de
san Benito. Terminada la tarea llegó a la conclusión de
que la de San Agustín era la que mejor se adaptaba al
espíritu de la Congregación.
A partir de esa fecha quedó San Agustín como co-
patrono de la Congregación, porque con la espiritualidad
de su Regla aporta al Instituto una genuina fuente de
inspiración.
Luego el Padre Machado se propuso organizar los
apuntes que ya tenía hechos para las Constituciones. Para
disponer de más tiempo para la oración y el estudio de su
33
proyecto, se retiró por dos o tres semanas a la residencia
de un amigo en Mamo, cerca de Maiquetía. Aprovechó
la oportunidad para dar una Misión a los habitantes de la
zona.
Presentó su proyecto de Constituciones al Arzobispo,
que le dio su aprobación. En Roma las aprobaron el 27 de
abril de 1902. Y nuevamente aprobadas después del
Concilio Vaticano segundo, el 11 de febrero de 1984.
El Padre Machado preparó una revista a la que dio el
nombre de «Boletín del Pan de San Antonio», cuyo
primer número alió a la luz pública el día 13 de febrerode 1897.
El día 8 de mayo de 1897 el Padre Machado viajó aEuropa con la Madre María de los Ángeles y las
Hermanas Eugenia e Inocencia. Visitaron Roma, donde
fueron acogidas y bendecidas por su Santidad León trece.
Quería el Padre Machado que vieran cómo ejercer su
misión entre los enfermos, ancianos y necesitados de todo
tipo. Regresaron a mediados de Septiembre.
El Padre Machado, de acuerdo con la Madre María
de los Ángeles, tomó a su cargo el Hospital de LosTeques, que funcionaba en el antiguo Asilo de los
enajenados, donde la Madre Emilia se inmoló realizando
el heroico acto de caridad que le costó la vida. Lo
NUEVAS FUNDACIONES
34 PADRE SANTIAGO MACHADO
recibieron el 31 de enero de 1898. A la obra le pusieron
el nombre «Hospital San Antonio».
El 26 de abril de 1899 se eligió a la Hermana
Inocencia como la nueva Superiora General, sucediendo
a la Hermana María de los Ángeles.
También en 1899 se puso aparte el Postulantado, ante
el asombroso número de jóvenes que debían empezarlo.
El 9 de mayo de 1900 murió Don Santiago, el papá
del padre Machado. Nutrió diariamente su alma con el
Pan Eucarístico y la purificó semanalmente mediante el
Sacramento de la Reconciliación. En muchas ocasiones
servía de asistente al Sacerdote en la misa. Nunca dejaba
de hacerlo cuando era su hijo el celebrante. Conservó hasta
su muerte la costumbre de rezar diariamente el santo
Rosario a la Santísima Virgen, de quien era devotísimo.
Hasta el final de su vida conservó su amor al trabajo,
dejando como recuerdo al morir, una serie de árboles que
sembró al frente del Hospital. De tal padre…tal hijo.
El 21 de octubre de 1900 fue la fiesta de las cincuentaHermanas, dedicada al presbítero doctor Juan Bautista
Castro, Provisor de la Arquidiócesis y encargado de ella
por enfermedad de Monseñor Críspulo Uzcátegui.
Uno de los deseos más vehementes del Padre
Machado, el cual compartían las Hermanitas, era fundar
una Casa fuera de los límites de la Arquidiócesis de
35
Caracas, ya que sin ese requisito la Santa Sede no podía
conceder el Decreto «Laudis» o de alabanza y
reconocimiento del Instituto. El sitio escogido de
antemano era la ciudad de Barquisimeto.
El 11 de abril de 1901 llegó a Barquisimeto el Padre
Machado con la Hermana Inocencia y el personal
designado para la nueva casa, a la que llamaron «Asilo
del Sagrado Corazón de Jesús».
El 8 de mayo de 1902 el Padre Machado viajó paraRoma, para presentar personalmente las Constituciones
de la Congregación, llevando consigo las cartas de
recomendación del Arzobispo de Caracas, del Obispo de
Barquisimeto y del excelentísimo señor Julio Tonti,
Delegado apostólico en Venezuela.
De Roma pasó a Lourdes a visitar y honrar a la Virgen
de sus amores y regresó de inmediato a Venezuela. Llegó
a La Guayra el 24 de septiembre, víspera del aniversario
de la Fundación de la Congregación.
Con fecha 27 de abril de 1902 la Santa Sede promulgó
el Decreto «Laudis» o de Alabanza y Reconocimiento del
Instituto como Congregación Religiosa.
La Madre Inocencia enfermó gravemente y falleció el
11 de febrero de 1902. La Hermana Eugenia quedó de
Vicaria General encargada.
NUEVAS FUNDACIONES
36 PADRE SANTIAGO MACHADO
En 1902 Venezuela fue azotada por una guerra civilque dejó sus terribles consecuencias en las principales
ciudades. El Padre Machado y las hermanitas prestaron
su ayuda desinteresada durante dos meses en La Victoria
a doscientos heridos de los dos bandos.
El Padre Machado fundó la pía Asociación que
denominó «Obra del Sufragio», en beneficio de las
benditas Almas del Purgatorio.
Sometió la obra y los estatutos a la aprobación
eclesiástica el 30 de agosto de 1902, la cual le fue
concedida el 4 de septiembre del mismo año, lo que le
permitió establecer la obra en Caracas el 2 de noviembrede 1902.
El 19 de enero de 1903 se reeligió como Superiora
General a la Madre María de los Ángeles.
Entre mayo y junio el Padre Machado y la Superiora
General hicieron la Visita Canónica a todas las casas de
la Congregación.
El 15 de agosto de 1903 comenzó a funcionar en
Valencia el Asilo de María Auxiliadora. Pero la pobreza
era extrema. Hasta que el presbítero doctor Luis A. Ochoa
entregó a las Hermanas un terreno de su propiedad, donde
había unas ruinas denominadas «Sitio del Socorro». El
15 de agosto de 1908 pudo ser bendecida la nueva casa,
que asumió a los ciegos y ancianos del Asilo de María
37
Auxiliadora, que, por ser Nuestra Señora del Socorro la
Patrona de Valencia, a todos les pareció más justo que se
llamara Asilo del Socorro.En el año 1894 el Padre Machado logró adquirir un
extenso terreno enclavado al pie del Ávila, en el sitio
denominado «Sabana del Blanco», con la intención de
fabricar allí la Casa Madre para las Hermanitas.
Por fin, en el año 1900 pudo comenzar la construcción.
El 18 de junio de 1904 el Padre Machado invitó al
Episcopado Venezolano reunida en Caracas para la
bendición de los salones que ya estaban terminados.
El 24 de septiembre fue traslado el noviciado. El 25
se instaló el Santísimo. Al poco tiempo la Madre General
fijó allí su residencia y la de la Vicaria General, siendo
acompañadas de otras hermanas. Así la casa se transformó
en «Casa Madre» de la Congregación durante nueve años.
Los moradores de El Tocuyo quisieron la presencia
de las Hermanitas para atender a los pobres que carecían
de albergue. Llegaron el 25 de junio de 1906. La casa se
llamó «Asilo San Antonio». Y desde el primer momento
comenzó a prestar sus servicios a los más necesitados.
El 19 de marzo de 1907 llegó al Hospital San José de
Maiquetía la petición de una fundación de las Hermanitas
de los Pobres en Barranquilla, Colombia. En marzo de
1908 se aceptó. El 5 de abril viajaron el Padre Machado,
NUEVAS FUNDACIONES
38 PADRE SANTIAGO MACHADO
la Madre General y las Hermanitas que iban a trabajar
allá. La casa se llamó «Hospicio de San Antonio».
El 19 de enero de 1909 se eligió como nueva madre
General a la Madre Felícitas y como Vicaria General a la
hermana Eugenia.
A mediados del mes de junio de 1909 el comercio
capitalino y el Gobierno resolvieron fundar un Asilo paraMendigos. La Junta encargada la confió al padre Machado
y a las Hermanas, que se instalaron el 23 de octubre.
Y el 24 llegaron alrededor de 30 mujeres y el 26 unos
40 hombres.
Madre Emilia y el Padre Machado
39
CAPÍTULO 8
SEPARACIÓN. SAN JOSÉ DEL ÁVILA
El Padre Machado, después de haber obtenido en 1902
el reconocimiento de su Instituto mediante la
promulgación del Decreto «Laudis» por parte de la Santa
Sede, dejó en manos de la superiora General y su Consejo
todo lo referente al gobierno de la misma. Y él se limitaba
a resolver junto con ellas lo relativo a fundaciones, a pasar
con la Madre General algunas de las Visitas Canónicas y
a participar en algunos actos como testigo.
En el año 1909 creyó llegado el momento de separarse
definitivamente. La Congregación se acercaba a los 21
años. En consecuencia resolvió ir a despedirse de todas
las Casas de la Congregación, para lo cual emprendió el
viaje con la superiora General y una Hermanita.
Ese mismo año, un grupo de amigos se propuso colocar
solemnemente en el Hospital San José de Maiquetía, un
retrato del Padre Fundador. En dicho acto, efectuado el
10 de agosto, el párroco de Maiquetía dijo entre otras
cosas: «El Padre Machado ha hecho surgir nuevos
40 PADRE SANTIAGO MACHADO
Hospitales y ha visto dilatarse la Congregación de las
Hermanitas de los Pobres, ha fundado Escuelas de
Instrucción y de Artes y Oficios, ha hecho pozos artesianos
y tiene Imprenta y redacta un Periódico, ha favorecido el
arte cristiano, ha construido acueductos, ha abierto calles,
erigido estatuas a la Madre de Dios, levantado capillas,
ha sido misionero y perseguido por los que en el Poder
son naturalmente enemigos de Dios, del bien y de la
virtud».
El Delegado apostólico Monseñor Aversa escribió al
Secretario de Estado del Vaticano diciendo que el Padre
Machado era abierto, franco, sonriente y a menudo
chistoso, se veía que era un hombre emprendedor y audaz,
con una actividad casi fenomenal.
El Padre Machado salió para Roma el 18 de julio de
1910. Llegó a Roma el 10 de agosto. Pasaron dos meses
sin que le atendieran en Roma –quizá coincidió con las
vacaciones romanas–.
Días antes había entrado en la Congregación una
Postulante que era familia de la Hermana Paula, con quien
el Padre Machado había tenido muy serios inconvenientes
sobre el cuidado de los enfermos hombres. La mencionada
postulante ingresó en estado de gravidez, y la Hermana
Paula no vaciló en imputarle ese hecho al Padre Machado.
41
Como consecuencia eso trajo el escándalo y la definitiva
división en las Hermanas y además la retirada del Padre,
ofendido en su dignidad de Sacerdote y Fundador y dolido
por la calumnia y actitud de algunas Hermanas.
Mientras el Padre Fundador viajaba a Roma, se
presentó la ex postulante y, con testimonio jurado, dijo
que no tenía paz en su vida y que el Padre Machado era
inocente del delito que se le imputaba, que ella ya había
entrado en estado de gravidez a la casa de las Hermanas y
que se había callado coaccionada por las Hermanas Paula
y Vicenta, y que ella al saber lo que le estaba pasando el
Padre Machado, ya no podía más con su conciencia.
Por fin el 12 de noviembre atendió al Padre Machado
un Sacerdote que le informó que la Congregación del
Santo Oficio había resuelto que se separara de la
Congregación, agregando que no se comunicara con ella
sino por medio del Arzobispo de Caracas.
Al llegar a La Guayra fue recibido por una multitud
de amigos y admiradores. De Caracas se trasladó a La
Victoria con su hermana Dominga, permaneciendo allí
hasta el 18 de septiembre de 1911, fecha en que se instaló
en Caracas con su hermana Dominga, su prima Rafaela
Villasana y su fiel niñera María del Rosario Ochoa. Fijó
su residencia en una casita situada en las esquinas de Cuño
y Guanábano, de la parroquia de La Pastora.
SEPARACIÓN. SAN JOSÉ DEL ÁVILA
42 PADRE SANTIAGO MACHADO
Como siempre tenía que hacer algo por los demás,
allí comenzó a reunir muchachos pobres, que no contaban
con medios para asistir a la Escuela y les impartía
instrucción gratuita en lo que podía.
Al separarse el Padre Machado de la Congregación,
se convino que el Padre recibiría la Casa madre en plena
propiedad y posesión, quedando a su cargo absolutamente
todas las deudas de la Congregación hasta fecha en que él
se separó. Y él transmitiría a la Congregación la plena
propiedad y posesión de todas las demás fincas que
pertenecían a la Congregación, libres de gravámenes.
El Padre Machado se había dado cuenta de que en las
zonas adyacentes a su morada vivían familias sumamente
pobres, que apenas podían dar de comer a sus hijos y les
era absolutamente imposible enviarlos a la escuela. Y
reunió a todos los que pudo y comenzó su tarea como
educador. Así nació la «Escuela del Niño Jesús», que
fue creciendo progresivamente.
Luego se dio cuenta que la mayoría de los niños
regresaban a las clases por la tarde sin haber almorzado,
porque en sus casas las mamás no tenían nada que darles.
Y con la ayuda de Dios y de personas caritativas dieron
almuerzo diariamente a la mayoría de los alumnos de la
Escuelita. Sin darse cuenta había sido el iniciador de los
«Comedores escolares» de Venezuela.
43
Tan pronto como se pudo regularizar la personalidad
jurídica de la Congregación, las Hermanitas de los Pobres
se trasladaron al Asilo de la Providencia, entregando la
Casa Madre al Padre Fundador el 1 de mayo de 1913.
Una vez realizada dicha entrega, el Padre instaló la
«Escuela del Niño Jesús» en ese edificio, donde los niños
disfrutaban de mayor comodidad, aunque la Casa estaba
todavía a medio construir. Instaló el Internado para unos,
el Semi-Internado para otros y el Externado para los que
vivían en las cercanías. Pagaban los que podían y lo que
podían. El padre pedía a los familiares que todas las
semanas les llevaran la ropa limpia.
Un día llegó a la casa una señora muy viejecita y
humilde a visitar a uno de los muchachos internos. Los
internos estaban disparando cohetes dentro de la casa, pues
era tiempo de Navidad y uno de los cohetes, mal disparado,
explotó en el corredor donde estaba la visitante, que se
asustó mucho, y exclamó: ¡San José del Ávila bendito!
El Padre, que estaba cerca rezando el Oficio del Breviario,
interrumpió el rezo y dijo: «Ése es el nombre de la Casa y
es el que San José quiere, pues me lo ha hecho saber en
Navidad y por medio de una persona humilde». El 24 de
octubre de 1915 se instituyó solemnemente el culto a San
José del Ávila.
SEPARACIÓN. SAN JOSÉ DEL ÁVILA
44 PADRE SANTIAGO MACHADO
El 19 de diciembre de ese mismo año salió a la luz
pública el primer número del «Mensajero de San José
del Ávila».
El 19 de marzo de 1916 se celebró la primera fiestade San José del Ávila, con gran afluencia de fieles.
El 22 de octubre de ese mismo año el Padre Machado
transformó la Escuela del Niño Jesús en el Internado San
José del Ávila, logrando 40 becas entre los bienhechores
para comenzar. Este cupo fue aumentando hasta llegar a
tener a su cargo 300 niños, de los cuales la inmensa
mayoría eran sostenidos con el propio dinero del Padre y
las ayudas que podían conseguir, más las limosnas de los
bienhechores, que nunca le faltaron.
Cuando salía al comercio contraía grandes deudas por
que compraba todo lo que hacía falta en el internado. Todo
se lo daban a crédito diciendo: «El Padre Machado que
pague cuando pueda, pues él está haciendo lo que nadie
hasta ahora ha hecho».
Todos los años pasaba en su ciudad natal de La Victoria
una temporada de descanso o vacaciones. Pero dedicaba
ese tiempo a preparar unas numerosas y bellísimas
Primeras Comuniones.
Todos los años en la iglesia de Santa Teresa en
Caracas enseñaba durante varios meses el Catecismo a
un inmenso número de niños, a fin de prepararlos para su
45
Primera Comunión. Además les enseñaba hermosos cantos
compuestos también por él para tan solemne ocasión. Esas
Primeras Comuniones llegaron a tener fama en la ciudad
y pueblos cercanos, de tal manera que llegó un momento
en que era imposible recibir más niños, porque el recinto
resultaba insuficiente y fue necesario organizar otros
Catecismos, siempre supervisados por él.
Una vez el Padre Machado estaba muy enfermo,
aquejado de su eterno padecimiento del estómago. La
familia del doctor Germán Rodríguez Lange, muy amiga
del Padre, lo invitó a pasar una temporada con ellos en
Puerto La Cruz (Estado Anzoátegui), con el objeto de
que tomara las aguas medicinales del vecino pueblecito
de Pozuelos, reconocidas como efectivas para ese tipo de
dolencias.
Apenas llegó a Puerto La Cruz, el Padre Machado
comenzó a visitar hogares, enseñándoles a rezar el
Rosario, les repartió Catecismos, legalizó uniones
mediante el Sacramento del Matrimonio, organizó una
masiva peregrinación al bellísimo templo colonial de
Pozuelos, obtuvo el consentimiento de sus representes para
llevarse a San José del Ávila a un grupo de los más pobres
y necesitados para darles educación y prepararlos a
afrontar la vida.
SEPARACIÓN. SAN JOSÉ DEL ÁVILA
46 PADRE SANTIAGO MACHADO
El doctor, ante semejante actividad desplegada, le
decía: «Padre, estése tranquilo, descanse, yo no lo traje
aquí a trabajar sino a descansar». El Padre le contestaba:
«El que me tiene que dejar tranquilo y descansar es usted,
pues yo no puedo perder mi tiempo ni esta oportunidad
que me pone Dios en bandeja de plata para que le sirva».
En otras ocasiones le decía al Doctor que «si él se quedaba
quieto, se moría».
El 19 de mayo de 1918 el Padre Machado logró que
se colocara la «primera piedra» para el amplio Santuarionuevo de San José del Ávila.
El 19 de marzo de 1922, en la fiesta de San José, fue
bendecida la nueva imagen del Santo Patrono y se realizó
la primera procesión con dicha imagen, iniciándose así la
piadosa costumbre que hasta el presente se realiza.
Entre tantos trabajos y acontecimientos, el activo Padre
notaba el peso de los años y los achaques propios de la
edad no le permitían continuar en tan agotadora tarea.
Entonces pensó en quiénes podían encargarse de la obra.
Y se la confió a los Padres Benedictinos. El 2 de abril de
1923, el Padre Machado los recibió en el puerto de La
Guayra.
Por su estado de salud y haber dedicado a sus
diferentes Obras todo cuanto poseía y recibía, con la
entrega de San José del Ávila a los Padres Benedictinos,
47
el Padre Machado quedaba completamente en la calle.
Ante esta situación el Arzobispado resolvió que mientras
viviera, el Padre percibiera de los Padres Benedictinos la
suma de 400 bolívares mensuales, para que pudiera
subsistir.
Santuario San José del Avila
SEPARACIÓN. SAN JOSÉ DEL ÁVILA
Plaza Lourdes, Maiquetía
CAPÍTULO 9
LA PLAZA JERUSALÉN
El Padre Machado profesaba un gran amor a Cristo
Crucificado, amor sembrado por Doña Bernardina desde
su más tierna infancia cuando, para preparar la Primera
Comunión, madre e hijo pasaban largos ratos de
meditación sobre la Pasión del Señor.
En 1910 el Padre Machado compró un botadero debasura en la parte norte de la Plaza Lourdes. Logró
erradicar el basurero, los ranchos que allá había y las ratas.
Mandó fundir en Francia el cuerpo de JesúsCrucificado, utilizando para ello un metal que fuera
resistente al salitre y a la intemperie. La cruz fue hecha en
Venezuela. Y para servir de base a ese monumento se
construyó la gruta donde se colocó el santo sepulcro.
Cuando llegó a La Guaira el Cristo destinado a la plaza
de Maiquetía, el Padre Machado fue a la aduana, pero
no quisieron entregárselo, porque no tenían órdenes de
Caracas.
De Caracas lo regresaron a La Guaira, donde no
solamente se negaban a entregarle la caja, sino que le
50 PADRE SANTIAGO MACHADO
habían puesto cinco míl bolívares de multa, alegando que
estaba mal manifestado.
El Padre Machado descubrió que la oposición venía
nada menos que del Ministro de Hacienda César Zumeta,
con fama de anticlerical.
El Padre no se amilanó, y pidió una audiencia privada,
que le fue concedida. Al final de ésta, el Padre le dijo al
Ministro: «Yo no creo que el señor Ministro sea peor que
Judas, porque Judas dio a Cristo vivo por treinta monedas,
y ahora por dármelo muerto me piden a mí cinco mil». El
Ministro cedió y mandó que se lo entregaran, creo que
por 29 monedas.
La inauguración del grandioso monumento y su
bendición se realizaron el día 6 de febrero de 1914, en
medio de numerosísima concurrencia de personas del
Litoral, de Caracas y de otras ciudades y pueblos vecinos,
pues el Padre hizo coincidir la peregrinación a la Gruta
de Lourdes con la fecha de la inauguración del
monumento. La bendición del hermoso monumento estuvo
a cargo del Delegado Apostólico, representante de Su
Santidad del papa Pío X en Venezuela, Monseñor
Pietropaoli. Se leyó y cantó el Himno a Jesús Crucificado
compuesto por el Padre Machado para esa ocasión.
Después de inaugurado el monumento, el Padre
Machado invitó a toda la concurrencia a una nueva
51
peregrinación en el mes de julio, en honor del Santo
Cristo. A todos les agradó la idea, estableciéndose así las
piadosas Peregrinaciones al Santo Cristo de Maiquetía.
Desde un principio, al concebir la idea de erigir el
monumento a Jesús Crucificado, el Padre Machado había
soñado con rodearlo de un Vía Crucis, también
monumental, como uno que él había visto en Lourdes.
La primera estación la adquirió el Padre Machado
en 1922. El Padre se dirigió a un grupo de personas
piadosas y les pidió que donaran las estaciones faltantes.
La última se inauguró el día 10 de febrero de 1939, diez
meses antes de la muerte del Padre Machado.
Cuando el General Gómez murió en 1935, se iniciaron
una serie de saqueos, incendios, ataques a personas
pertenecientes al régimen y todo el vandalismo que se le
pudo ocurrir a las turbas enfurecidas y desbordadas, no
sólo en Caracas, sino en el Interior de la República.
Al enterarse el Padre Machado de lo que estaba
ocurriendo en Maiquetía, se trasladó de inmediato allá, y
se instaló a la entrada de la Plaza Jerusalén, a esperar a la
multitud. Y cuando ella llegó gritando: «Abajo Gómez,
abajo los gomecistas, mueran, etc., etc.» El Padre les dijo
«Aquí les estoy esperando». Todos se acercaron mudos y
confundidos. Entonces el Padre, aprovechando aquel
silencio, improvisó un pequeño discurso, diciéndoles que
LA PLAZA JERUSALÉN
52 PADRE SANTIAGO MACHADO
el pueblo venezolano, por su historia, siempre se había
mostrado venerante y respetuoso de las cosas sagradas y,
que en ningún momento, a pesar de lo que le habían dicho,
creía que ellos, siendo parte de ese mismo pueblo, fueran
a profanar un lugar santo. Y que el General Gómez, si
había donado aquella novena estación y lo había hecho
para ornato de Maiquetía en un gesto de cristiano, pues
todos tenemos cosas malas y buenas. Y él les exigía como
a católicos, respetar una voluntad que era sagrada, pues
ese ser ya estaba juzgado por Dios y no de los humanos.
Y que más bien por la caridad que Dios nos pide para con
nuestros prójimos, apartaran todos los odios y trataran de
que de sus labios brotara una oración por un alma que tal
vez podía necesitarla mucho. De inmediato los invitó a
todos a rezar con él ante Jesús Crucificado, un Padre
Nuestro y Ave María por el general Gómez, el cual todo
rezaron y ahí terminó todo el incidente.
Su inmenso amor al Señor Crucificado le llevó a
remodelar la iglesia del Calvario en La Victoria,
incluyendo la fachada que la embellece.
También importó de Francia el Calvario existente en
dicho templo y construyó las escalinatas por donde hoy
se llega a esa iglesia, terminando con la penalidad del
viejo e incómodo camino.
53
En los Jardines de El Valle fabricó en 1934 una
Capilla donde instaló el culto al Santo Cristo de lasMisericordias, en el terreno que tenía destinado para el
Asilo de Ancianos y Ciegos, que dejó en construcción
por falta de medios y su edad ya muy avanzada.
En el año 1938 entregó a las Hermanas Catequistasde Lourdes tanto la Capilla con su floreciente culto al
Cristo de las Misericordias como el «Hogar de Ancianos»
en fábrica, y que las Hermanas con tesón lograron hacer
una realidad.
Cristo de Maiquetía
LA PLAZA JERUSALÉN
Plaza Jerusalén, Maiquetía
CAPÍTULO 10
EL PRADO DE MARÍA
Monseñor Felipe Rincón González, Arzobispo de
Caracas, al ver al Padre Machado, ya separado de «San
José del Ávila» y teniendo él gran necesidad de un
Sacerdote para atender la Capellanía de El Rincón delValle, comenzó a primero a insinuarle la idea y luego a
ofrecerle formalmente que se hiciera cargo de dicha
Capellanía. El Padre le respondió: «Monseñor, yo acabo
de entregar una Obra. ¿Cómo tan de repente me va a meter
en otra?» El Señor Arzobispo le dijo: «Padre Machado,
allí es donde lo necesito». A pesar de que su salud no era
buena y las fuerzas ya le iban fallando, aceptó sumiso y
obediente a la legítima autoridad. Era el año 1924.
No había vivienda para el Capellán y tuvo que alquilar
una casa en la cual vivió hasta casi el final de sus días.
El barrio, además de llevar un feo nombre, era
paupérrimo, lleno de monte, sabanas y cloacas malolientes,
plagadas de zancudos.
El Padre, buen psicólogo, sabía que el nombre influye
mucho en todos los aspectos de la vida. Y así, se dedicó
56 PADRE SANTIAGO MACHADO
con ahinco a la campaña de cambiarle al Barrio el triste
nombre de «El Rincón del Valle» por el diáfano,
refrescante y sonriente de «El Prado de María», en el
cual debía andar de por medio su amor a la Santísima
Virgen y su confianza en que le ayudaría en la ardua tarea
que comenzaba.
Se dirigió a la Compañía de tranvías, que era el único
medio de transporte que existía para esa época, y les pidió
que cambiaran la tablilla que decía «El Rincón del Valle»
por una que dijera «Prado de María». Pero como la
Compañía no le hizo caso, el Padre Machado, cada vez
que se aproximaba un tranvía con el antedicho nombre,
lo detenía y armaba un lío tan grande que los maquinistas
y colectores les pidieron a los Jefes de la Compañía que
cambiaran los letreros, pues no querían verse en problemas
con el tenaz Padre. Y así se hizo.
Entonces se dedicó a la parte más importante:
conseguir el cambio del ambiente físico y las condiciones
sanitarias. El Ministro de Obras Pública no hizo caso de
su petición para solucionar tan grave problema, que se
agudizaba en la época de lluvias, cuando las asquerosas
calles de tierra se convertían en un pantano por el que era
imposible transitar. El padre Machado fue a Maracay a
entrevistarse con el presidente de la República. Y, debido
57
a la voluntad indomable de aquel joven que ya frisaba en
los 74 años, el Gobierno pavimentó las calles.
También consiguió el alumbrado eléctrico de las
calles, que no existía ni siquiera en forma rudimentaria.
Igualmente logró los servicios de una línea de
autobuses, pues los tranvías se demoraban mucho,
llegando uno cada media hora, si la fuerza eléctrica no se
iba.
El Padre Machado, preocupado como siempre por la
educación de los niños fundó dos Escuelas, una de
hembras y otras de varones, las que sostuvo durante
muchos años con su esfuerzo propio, hasta que gracias a
sus gestiones, el Gobierno Nacional se hizo cargo de ellas,
pues a él ya le era casi imposible sostenerlas.
Con su fe, tenacidad y clara visión de futuro, el Padre
Machado logró hacer el inhóspito Rincón del Valle, el
ameno y acogedor Prado de María.
Para completar su labor se propuso arreglar la capillaexistente, para lo cual pidió y obtuvo la cooperación de
sus feligreses.
El mes de septiembre de 1925 se terminó la
reconstrucción de la capilla, que fue bendecida el 10 de
ese mismo mes por el Señor Nuncio Apostólico, Monseñor
Felipe Cortesi.
EL PRADO DE MARÍA
58 PADRE SANTIAGO MACHADO
El mismo 10 de septiembre fue bendecida la imagen
de la Virgen de la Saletta, cuya devoción trajo de Francia.
E instituyó su culto sin menoscabar el de la Virgen del
Carmen, a quien estaba dedicada desde su fundación la
primitiva Iglesia.
El Padre Machado inventó un «Libro de Oro de laSantísima Virgen». Fueron muchas las mujeres que se
inscribieron, y los donativos que hicieron posible agregar
a la nave existente dos naves laterales y la primera torre.
El 10 de junio de 1926 cumplió el Padre Machado sus
50 años de haber sido ordenado Sacerdote lejos de su
Patria y de los suyos. Los celebraron en diversos días en
el Prado de María, La Victoria, Santa Teresa de Caracas y
Maiquetía. Los celebraron con el genuino cariño que todos
profesaban al Sacerdote, Maestro, Apóstol incansable,
ciudadano ejemplar, amigo consecuente e incondicional
El Gobierno Nacional le concedió la Orden delLibertador en su más alto grado y el título de
«Benemérito Sacerdote». El Ministerio de Educación le
concedió una condecoración que hasta ese momento no
existía y fue creada para esa ocasión, «Honor al Méritode Gran Educador». En uno de los muchos discursos de
esos días alguien dijo: «La escuela, el hospital, el
santuario, he aquí la trilogía moral que formó el objetivo
de la intensa actuación del Padre Machado en sus
59
aspiraciones hacia el perfeccionamiento de sus
conciudadanos. Su misión espiritual de taumaturgo del
alma, llevó también su acción santificadora a la del cuerpo,
abarcando así todo el radio vital de la existencia humana.»
El Congreso Nacional lo propuso para Obispo de
Guayana. Pero el Padre, al enterarse, de inmediato les
expresó su agradecimiento pero se negó a aceptarla pues
«no la merecía» y «no podía abandonar su pobres obras».
En el año 1928, el Padre Machado enfermó degravedad, sin que las medicinas prescritas por el Médico
mejoraran en nada su crítico estado.
Se salvó por la milagrosa intervención de SantaTeresita del Niño Jesús. En agradecimiento estableció
la costumbre celebrarle todos los años en el mes de octubre
su fiesta con todos los niños del Prado de María, cuyo
acto central era una solemne Eucaristía en acción de
gracias por el favor recibido. A tan simpática fiesta la
bautizó con el sugestivo nombre de «Fiesta de las Rosas».
El 19 de mayo de 1929, el Padre Machado pasó por
la inmensa pena de la muerte de su hermana Dominga.
La señorita Rafael Serrano se le brindó para atender lo
referente a la Parroquia.
Con ocasión de la celebración de las Bodas de Oro
Sacerdotales del Padre Machado, las Hermanas de losPobres de San Pedro Claver, habían estado insistiendo
EL PRADO DE MARÍA
60 PADRE SANTIAGO MACHADO
mucho ante el Padre Machado para que viajara a
Colombia, a fin de ellas agasajarlo también en sus Casas.
Al fin ante tanta insistencia y la seguridad que le daban
las Hermanas de que el señor obispo de Cartagena había
concedido el permiso para que fuera a visitarlas, el Padre
se decidió y arregló el viaje.
En abril de 1930 embarcó para Barranquilla,
acompañado de la señorita Rafaela Serrano y de otra
señora amiga.
Ya en Barranquilla se hospedó en el Asilo de San
Antonio, en medio del regocijo de todas las Hermanas,
en especial las venezolanas. Lo llevaron a conocer algunas
de las otras Casas que tenían en diferentes ciudadesdonde le rindieron innumerables homenajes, destacándose
entre ellos el de la Alcaldía de Barranquilla, que lo declaró
«Huésped Ilustre de la ciudad».
A poco de haber regresado fue llamado por el Señor
Arzobispo Monseñor Felipe Rincón González para hacerle
saber que en comunicación del 13 de junio le participaba
el Cardenal Secretario del Santo Oficio, Monseñor Canali
la Suspensión a Divinis en que había incurrido e
imponiéndole la obligación de romper con los dos
Institutos de las Hermanitas de los Pobres, sean llamadas
las de Maiquetía o sean las que de San Pedro Claver se
llaman».
61
El Padre aceptó humildemente su sanción y de
inmediato pidió perdón, pues él creía que, como las
Hermanas de San Pedro Claver habían sido fundadas en
Colombia por la Madre Marcelina sin tener nada que ver
con las de Venezuela, no estaban incluidas en la
prohibición. El Padre escribió inmediatamente a Roma,
comunicándoles cómo el señor obispo de Cartagena,
monseñor Brioschi, había dicho que «ese pobre viejo
octogenario podía ir a visitarlas».
La suspensión duró poco tiempo. Y no se enteraron
de ella sino los más allegados, pues algunos de sus amigos
Sacerdotes celebraban la Eucaristía por él y le suplían en
la administración de los demás Sacramentos.
En ese mismo año 1930 se instalaron en la casa vecina
a la del Padre Machado dos personas muy amigas de él.
Y vino para acompañarlas un muchacho de unos diez años,
llamado Carlos Soria Villaparedes. Cuando Carlos tuvo
que regresar a hogar, el Padre Machado lo llevó a su casa,
donde terminó sus estudios de Primaria y le ayudaba en
lo que estaba a su alcance, pasando temporadas con su
familia.
Luego comenzó a hacerle también de secretario,
enfermero, pero sobre todo de compañero, pues sus
fuerzas iban debilitándose cada día más. El Padre siempre
fue muy generoso con él.
EL PRADO DE MARÍA
62 PADRE SANTIAGO MACHADO
Gracias a ese compañero inseparable se han conocido
muchos datos reveladores de lo que realmente era el Padre
Machado, de carácter afable y bondadoso que inspiraba
gran confianza desde el instante mismo en que se le
conocía, haciendo que la persona se sintiera su amigo,
pero era a la vez recto, firme y decidido en todas sus
actuaciones, reflejando una gran personalidad.
En el año 1934 el Padre Machado recibió un rudo golpe
cuando el Episcopado Venezolano se reunión y redactó
un nuevo Catecismo de la Doctrina Cristiana, que excluía
todo otro. El Padre Machado acababa de mandar a
imprimir la Edición número 18 consistente en 20 mil
ejemplares, contrayendo una deuda que logró saldar a
costa de muchos sacrificios. A pesar de no estar ya en
vigencia, siguió siendo muy utilizado por los Catequistas,
dado a que era más comprensible a las mentes infantiles.
En 1938 el Ilustrísimo Monseñor Mejías, Coadjutor
del Arzobispado de Caracas, concedió su autorización al
Padre Machado para que reeditar su Catecismo, por
considerarlo útil y de fácil comprensión para el pueblo.
Esa Edición, la número 19, fue la última que el Padre
hizo imprimir.
Para ayudar a un señor que hacía helados, el Padre
hipotecó una casita que tenía en la calle El Carmen. El
señor se perdió con los reales y el Padre Machado estaba
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a punto de perder su casita. Le escribió una carta al General
Gómez, que le solucionó el problema.
Una vez fue el Padre Machado con Carlos Soria a
visitar al Arzobispo, que estaba muy enfermo. Al salir los
abordó una viejecita pidiéndole ayuda para medicinas.
El Padre Machado, contra la opinión de Carlos Soria,
decidió darle los únicos cinco bolívares que tenían para
regresar a la casa. Carlos detuvo un carro para regresar,
pensando con qué lo pagarían. Cuando llegaron a la casa
una señora le dio al padre Machado 50 bolívares por un
favor que le hizo la Virgen de Lourdes.
La más patente de todas las gracias de la Divina
Providencia en respuesta a la fe y confianza del Padre
Machado la constituía el que ese hombre que no contaba
casi con ingresos fijos pudiera sostener una casa donde a
veces llegaron a vivir hasta 19 personas, pues la mantenía
abierta de par en par para todo el que la necesitara,
recibiéndoles a todos con una alegría que desbordaba de
su gran corazón.
El fervor del Padre Machado y su abstracción cuando
se entregaba a la oración eran tales que nada ni nadie
lograba distraerlo y todas sus empresas las preparaba al
pie del Sagrario. Aunque ya en su vejez muchas veces lo
hacía en el recogimiento de su habitación.
EL PRADO DE MARÍA
64 PADRE SANTIAGO MACHADO
El 10 de junio de 1936 le fueron celebradas por un
grandísimo número de personas los 60 años deOrdenación Sacerdotal.
Por su casa desfilaron todas las clases sociales a
rendirle el homenaje de respetuoso cariño que le
profesaban.
Se constituyó una Junta que se propuso comprar la
casa en que vivía el Padre, a fin de regalársela. Pero cuando
el Padre se enteró, se opuso rotundamente. Y pidió le
entregaran lo que ya tenían reunido para comenzar la
fábrica de la Capìlla de Los Jardines del Valle y del Asilo
en los terrenos que ya había logrado adquirir.
En el mes de octubre de 1937 se le presentó un grave
eczema en las piernas, que deterioró su ya precaria salud,
a tal extremo que la Navidad la pasó en estado de coma.
El 1 de enero «lo resucitó» la Virgen de Lourdes. El padre
Machado decía que San Pedro siempre había sido amigo
de tomarle el pelo. Y lo devolvió de la puerta cuando se
acordó que todavía faltaba la última estación del Vía
Crucis de Maiquetía.
Con motivo de la Peregrinación a la Gruta de Lourdes
de Maiquetía, aprovechó la gran afluencia de fieles para
bendecir solemnemente la capilla recién terminada que
correspondía a la 3ª caída del Señor y con la cual se
completaba el Vía Crucis monumental.
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El orador sagrado para esa ocasión emocionó a toda
la concurrencia con las siguientes frases: «El Vía Crucis
está terminado. Todo está consumado. Ya el Padre
Machado debe estar muy satisfecho de poder presentar al
Señor esta obra concluida en su camino hacia Él». Pues
comprendieron perfectamente el doble sentido que tenían.
Era la despedida al buen Padre que estaba completando
su recorrido en la tierra para ir a descansar en Dios por
toda la eternidad.
El único que no lo comprendió fue el interesado, pues
sus facultades mentales ya estaban decayendo. Y
preguntaba ingenuamente por qué todos lloraban. A lo
que se le respondió que el sermón sobre la Pasión del
Señor los había conmovido mucho.
El día 30 de abril llegó de España el Reverendo Padre
Domingo Maguregui, quien en nombre de los PadresPaúles venía a recibir del Padre Machado la Capellanía
del Prado de María, que el Padre ya materialmente no
podía atender. El resto de la comunidad llegaría después.
El 1º de mayo el Padre le entregó a su sucesor la
Capellanía, motivo por el cual quedaba en la pobrezamás grande y con su salud completamente deteriorada, lo
que le obligaba a permanecer en cama, dependiendo para
todo de sus fieles acompañantes.
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66 PADRE SANTIAGO MACHADO
Un día del mes de agosto el Concejo Municipal del
Distrito Federal se acordó del Padre Machado y en una
sesión resolvieron concederle una pensión vitalicia de
trescientos bolívares, la cual no se cobró sino los cuatro
meses que le quedaban de vida.
Mientras en el Prado de María todos se desvivían por
atender al amado Padre enfermo, en la Casa Madre de las
Hermanitas de los Pobres, la Superiora General Madre
Carlota de San José, había comenzado a hacer gestiones
para ver si lograba de la Santa Sede que permitieran el
retorno de su anciano Fundador como regalo en las Bodasde Oro de fundada la Congregación, que se celebrarían
en el mes de septiembre. La Santa Sede respondió
favorablemente.
Con esa autorización en sus manos, las Hermanas
arreglaron la enfermería, a fin de instalar allá al padre
Machado a quien ya le estaban buscando un enfermero
competente para que lo atendiera.
El domingo 24 de septiembre, las Hermanas fueron
donde el padre con el Padre Fuentes Figueroa, gran amigo
suyo.
Las Hermanas manifestaron su deseo de ver al Padre
y fueron conducidas a su habitación, donde entraron y se
arrodillaron junto a la cama, pidiéndole la bendición,
agregando de inmediato: «Nuestro Padre, venimos a
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buscarlo y se va con nosotros». Como al Padre por su
edad ya le fallaba la memoria, no se dio plena cuenta de
los que sucedía, y dijo al fiel Carlos, quien lo acompañaba:
«¿Vamos a Misa? ¿Y por qué no la celebran aquí?»
La Madre Carlota les informó a quienes cuidaban al
padre que el único regalo que habían pedido al Cielo en
las Bodas de Oro, era la vuelta del Padre a la
Congregación, para tener ellas la dicha de cuidarlo, aunque
fuera en sus últimos días. Con muchas dificultades
lograron que los que le servían de familia entendieran que
era la reivindicación del padre, y cedieron.
Las Hermanas que lo esperaban en la Casa Madre eran
cerca de ochenta que, procedentes de las diversas Casas
de la Congregación, se habían reunido por los festejos de
las Bodas de Oro.
Por fin llegó el momento. Se abrió la puerta de par en
par. Y rodeado por todos sus acompañantes, hizo su
entrada en silla de ruedas el venerable y amado Padre. Su
rostro, lleno de dulzura y de paz, su mirada serena y vivaz.
Desde que llegó a la puerta comenzó a impartir
bendiciones sobre los diversos grupos de Hermanitas que
se iban acercando. A él no se le notó decaimiento, sino
por el contrario complacencia y alegría. Cuando llegó a
la enfermería lo sentaron en un sillón. Y entonces sí, fueron
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llegando una a una y, de rodillas, le pedían la bendición y
le besaban la mano. Él las bendecía también una por una.
Luego lo dejaron al cuidado de su enfermera y del
enfermero para los cuidados personales. Como a las 6 y
30 p.m. llegó el fiel Carlos a llevarle al Padre la maleta
con sus prendas personales.
Volvió a la mañana del día siguiente.
Notando la Madre que Carlos lograba hacerlo comer
–cosa que los demás no conseguían– le pidió que lo
visitara a las horas de la comida y así quedó establecido.
Los primeros días mejoró mucho la memoria del Padre
Machado, dándose cuenta de que estaba entre sus hijas.
En sus momentos de lucidez les daba consejos. «Me gusta
mucho que tengan escuelas. Deben procurar enseñar a las
niñas estas tres cosas: conocimiento de Dios, amor de Dios
y temor de Dios, porque ésta es la base de todo hombre
cristiano». «La religión no entra a toletazos, sino con
cariño y amor».
El 7 de noviembre cumplió sus 89 años de edad y le
fueron celebrados con gran cariño y regocijo por sus Hijas
y mucha gente que lo apreciaba.
El 24 de noviembre el Padre Fuentes Figueroa le
administró la Unción de los Enfermos. Luego el Padre
Machado fue bendiciendo a todas las Hermanas.
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A partir de ese día fue empeorando día a día, hasta
que el 6 de diciembre a las 11 y 45 a.m. entró en agonía,
falleciendo alrededor de las 12 m., recibiendo la última
bendición de los tres sacerdotes presentes.
Desde que se supo su muerte, comenzaron a llegar las
personas amigas del Padre, de la Congregación, y los
pobres, los grandes amigos del Padre Machado. El pueblo
de Caracas en su inmensa mayoría y el de Maiquetía y
demás poblaciones del Litoral en su casi totalidad
desfilaron el jueves y el viernes hasta las 4 p.m. ante el
cadáver el Padre Machado.
Terminada la concurrida Vigilia nocturna, comenzaron
las celebraciones eucarísticas de cuerpo presente,
celebrando las primeras varios obispos. En la Oración
Fúnebre, Monseñor Jesús María Pellín recordó la
fructífera vida del Padre Machado.
Hemos comenzado este resumen de la vida del Padre
Machado recordando su apoteósico entierro.
Lo enterraron en el Presbiterio de la Capilla de la Casa
Madre. Allá estuvo 35 años. Cuando hubo que desalojar
aquella casa, el 24 de marzo de 1974 fue trasladado al
Presbiterio de la Capilla del Hospital San José deMaiquetía, fundado por él 86 años antes. Allí se puede
sentir su presencia de un modo especial.
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70 PADRE SANTIAGO MACHADO
Porque su presencia también se siente allá donde hay
una Hermanita de los Pobres, en la Gruta de Lourdes, en
las Peregrinaciones de Lourdes, en todo el Hospital San
José, en San José del Ávila, en el Asilo de la Providencia,
en la Plaza Jerusalén, en el Prado de María, en su
catecismo, en los cantos que inventó, allá donde cuando
se conoce su vida surge un nuevo devoto que da gracias a
Dios por ese santo y siente fuerza para tratar de seguir
sus pasos, su devoción a Cristo Crucificado, a la Santísima
Virgen, a San José, a San Antonio, a San Agustín, su
oración, su caridad, su pobreza, su apostolado, su
humildad, su obediencia, su creatividad, su trabajo
incansable.
¿Qué tenemos que esperar para decir: Santiago
Machado, intercede por nosotros?
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