MATRIMONIO Una aventura de dos (o más). Cuando alguien escoge una pareja no está solo

Preview:

Citation preview

MATRIMONIO

Una aventura de dos (o más)

Cuando alguien escoge una pareja no está solo.

Para conocer al otro es necesario comunicarse

Saber sus deseos Conocer sus ambiciones Tener conocimiento de sus frustraciones

NIÑO PADRE/MADRE

ADULTO

ADULTO

¿Como nos

relacionamos?

Relaciones Niño-Padre/Madre

Son las normales relaciones padre-hijo El padre ejerce dominio sobre el niño El niño se deja “dominar” por el padre en el

que busca protección. El niño imita al padre y espera su consejo y

aprobación para cualquier decisión. El que actúa como niño, deja de pensar.

Relaciones Niño-Adulto

El niño busca en el adulto la figura del padre.

El adulto no hace el papel de padre, sino que intenta una relación de igual a igual.

El niño busca aprobación, mientras que el adulto intenta el razonamiento.

Normalmente se volverá conflictiva.

Relaciones Padre-Adulto

El padre intenta buscar una posición de “dominio” que el adulto no acepta.

El padre intenta decir al adulto que ha de hacer.

El padre busca dar la aprobación de aquello que hace el otro.

Normalmente se volverá conflictiva

Relaciones Adulto-Adulto

Se tratan de igual a igual. Se ejerce una posición de confianza mutua

y no de dominio. No se busca la aprobación del hecho o que

se haga aquello que uno dice, sino se trata de consejos que se pueden o no aceptar.

Se habla desde la libertad de acción y pensamiento.

¿Nos respetamos uno al otro?

¿Sabemos dar y ceder?

¿Estamos dispuestos a darlo todo para potenciar el yo del otro?

POTENCIAR AL OTRO

POTENCIACIÓN PERSONAL

AUTOESTIMA

El matrimonio o relación de pareja no es solamente una atracción

física, sino una unión de mentes y almas. Y como muy bien dice

Khalil Gibran:

“Que haya espacios en vuestra comunión,

y que los vientos del cielo dancen entre vosotros.

Amaos uno al otro, pero no hagáis del amor una traba:

Llenaos las copas el uno al otro,

pero no bebáis en una sola copa.

Bailad y cantad juntos y sed alegres;

pero permitid que cada uno pueda estar solo,

al igual que las cuerdas del laúd están separadas y, no

obstante, vibran con la misma armonía”.

En la vida, podemos ser nómadas

o peregrinos

¿Qué eres? ¿Qué somos?

Nómadas Avanzamos sin rumbo Estamos a la

expectativa Actuamos según se

nos presenta

Peregrinos Tenemos un

objetivo marcado Analizamos el

camino que hacemos

Prevemos las situaciones

Planificamos

¿Qué podemos hacer?

Valorarnos suficientemente.

Mantener un buen concepto de uno

mismo, identificando y remarcando

nuestros valores y cualidades.

¿Qué podemos hacer?

No enfadarnos gratuitamente,

esto trasmite una imagen de

debilidad. Conviene recuperar la

calma, contextualizar el problema,

calmarse y expresar tranquilamente

nuestra opinión.

¿Qué podemos hacer?

Evitar las amenazas, tanto abiertas

como veladas. Es más eficaz para que nos

tomen en serio y nos valoren, reflexionar

sobre los pasos que haremos para defender

nuestras opiniones y posturas, y después

enunciar los argumentos.

¿Qué podemos hacer?

No pedir disculpas

protocolariamente, solo cuando sean

sinceras y salgan del corazón.

¿Qué podemos hacer?

Nunca ignorar al otro. Escuchemos

mostrando respeto por el otro e interés por

lo que dice. No avasallemos, por mucha

razón que creamos tener. Y permitamos

que el otro tenga siempre una salida

respetable, no cerremos puertas al diálogo.

¿Qué podemos hacer?

Admitir nuestros errores y

equivocaciones.

¿Qué podemos hacer?

Conocer nuestros sentimientos y emociones y saber expresarlos

Comprender, valorar y respetar los sentimientos y emociones del otro

Saber reaccionar frente al enojo del otro y gestionar bien la situación

Saber gestionar las situaciones de miedo.

En definitiva, estamos en un mismo barco

Uno a las velas,el otro al timón

¿Qué nos dice el Señor?

Por esto, dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su esposa, y los dos serán una sola carne Mt 19, 5

¿Qué significa ser una sola carne?

Tener un proyecto común Tener ilusiones de futuro Respetarse entre los dos Tener ganas de hacer cosas conjuntamente Tener respeto a las individualidades Amarse con todo el corazón y para siempre,

con un amor fuerte como el fuego, que los grandes diluvios no pueden apagar.

Ser una sola carne y ser tres entre dos

En todo nuestro proyecto incluir a Dios. Pensar en el otro en clave de amor

cristiano. Amar al otro como a uno mismo

¿Y los hijos?

Para tenerlos, respetar los tiempos de los dos. Establecer un proyecto común a pesar que

tengáis diferencias: hay que hablar, discutir y ceder.

No discutir delante de ellos: el proyecto es común.

Buscar tiempo para la pareja alejados de los hijos.

Mantener comunicación entre la pareja más allá de las conversaciones que afectan a los hijos.

Los hijos no estarán siempre...

Una vez más, hay que decir aquí que todos podemos

cambiar para mejorar sin que eso signifique despreciar

nuestra personalidad que, sin duda, se verá nítidamente reflejada en los posibles

cambios que introduzcamos en nuestra manera de

comportarnos