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Retratos formales
El retrato formal es el que se hace en estudio o
en locación, pero que siempre lleva
características como el ser planeado y preparado, se entiende como una sesión de
fotografías totalmente controlada.
En un retrato formal existe una cooperación
entre el fotógrafo y el modelo, que en realidad
está posando activamente para la cámara.
Retratos formales
Cuando se hacen retratos formales, hay que conocer el modelo. ¿Quién es? ¿Qué
características de su personalidad queremos
reflejar? ¿Es un intelectual? ¿Es sensual, aparenta
felicidad, seriedad? Luego hay que estudiar de qué manera la pose, el vestido y el entorno nos
ayudarán a comunicar esas cualidades.
La expresión de una persona es casi siempre la
forma más inmediata y clara de mostrar su
personalidad, pero todos los elementos de la
fotografía contribuyen a ello en mayor o menor
medida.
Retratos informales
En el retrato formal se encuentra el retrato
ejecutivo, que es una forma
de hablar en nombre de la
empresa a la que se le destinaran las imágenes.
Se pretende resaltar las
cualidades de las compañías, como la
seriedad, confiabilidad,
transparencia,
profesionalismo, calidad de servicio y más los empleados
más profesionales.
Retratos informales
En este tipo de retrato se pretende demostrar el
carácter de la empresa y su
personalidad en el mercado.
Casi siempre se emplean personas con vestimenta
formal, colores neutros y
serios, locaciones muy iluminadas y blancas en su
mayoría, se recrean oficinas
y ambientes profesionales.
Retratos informales
En el caso de las mujeres, usualmente se retratan con
el cabello recogido y en
trajes sastre, maquillajes
sutiles y rostros muy limpios.
Los hombres con cabellos
recortados, trajes y rostros
mate.
Normalmente se busca que
los modelos interactúen
entre ellos o con los elementos de la escena,
pizarras, mesas de reuniones
o tecnologías.
Retratos informales
Aunque es menos elaborado, el retrato informal
exige no menos habilidad. El fotógrafo tiene que
estar en continua alerta para tomar decisiones inmediatas y captar una pose antes de que
desaparezca.
En cuanto a este retrato, aquí se encuentra el
retrato documental donde podemos hablar de
fotoperiodismo, sociales o simplemente la que
retrata la realidad (por ejemplo un artesano en
sus actividades).
Retratos informales
En un retrato espontaneo, el fotógrafo actúa
como un reportero, cazando situaciones que se
dan en forma natural y sin su intervención. Es
importante analizar al modelo y la situación para
tener idea de lo que se quiere captar.
Se utiliza en gran medida la improvisación, congelamientos, secuencias fotográficas,
entornos diversos, el fotógrafo debe pensar
rápido y ser ágil con la mente y la técnica para hacer los ajustes que crea pertinentes para la
escena a tomar.
Retratos familiares
Requiere de especial atención si no queremos caer en los típicas, si no queremos esa fotos estáticas de grupo que no suelen tener interés y que acaban olvidadas.
Si queremos darle un punto más especial y original debemos tener en cuenta algunas consideraciones. Sobre todo si queremos que nuestra captura acabe finalmente enmarcada en la casa de un familiar luciendo como uno de esos momentos inolvidables.
Elegir el momento apropiado. Si estamos en una celebración, en una
comida en grupo, es habitual que al final, tras los postres, se busque
una foto para recordar. Puede ser un buen momento.
Si hay niños, ya sabemos que son muy impacientes, así que igual es
interesante elegir otro momento, en medio de la comida, antes de
empezar,… en el que todo el mundo anda más relajado e integrado,
con lo que obtendremos una escena algo más natural.
Si optamos por la captura en la que todos posan con su mejor sonrisa y paciencia, intentemos cuidar al máximo la colocación de cada persona. Evitemos que algunos acaben con posturas incómodas o ridículas (agachados, tumbados, demasiado alejados, asomando la cabeza por algún hueco…).
Esto nos llevará tiempo, pero seamos pacientes, dejemos que todos se involucren, que se lo tomen como un momento distendido y que cada uno encuentre el lugar más adecuado. Intentando que todos estén cómodos, bien iluminados y situados.
Si tenemos un grupo grande y no están ubicados uno junto al otro
tendremos que cuidar bien la apertura a la que vamos a disparar.
Recordemos que una apertura grande conlleva menos
profundidad de campo y es más complicado que todos acaben
dentro de la zona enfocada.
http://fotografia.facilisimo.com/blogs/general/21-poses-que-te-serviran-de-inspiracion-para-tus-fotos-de-
grupo_784282.html
Aquí dependeremos mucho de las condiciones de luz, si estamos en interior o exterior, así que antes de situar al grupo o tomar las capturas, midamos bien, hagamos pruebas y estudiemos bien la velocidad, sensibilidad y apertura más adecuadas. Incluso si necesitamos de algún apoyo para iluminar mejor el lugar.
Así lograremos fotografías familiares para el recuerdo, que además serán más naturales, originales y “especiales” con nuestra visión y estilo. La cámara no importa, en estas fotos lo realmente importante es capturar el momento especial, con encanto, que transmita.
Retratos grupales
En las mejores fotografías de grupo se han cuidado
especialmente dos elementos. Por un lado la composición: no
basta con que todos los del grupo estén dentro del marco; hay
más factores a contemplar. Y por otro la iluminación, siempre
un elemento fundamental en cada una de nuestras
fotografías.
Retratos grupales
La mejor luz: Como en fotografía de paisajes, las primeras y las últimas horas del día son las mejores para tener una buena iluminación natural.
Juntos es mejor: A la hora de realizar la composición de la foto, trata de situar al grupo lo más junto posible. Una regla que suele funcionar bastante bien consiste en situar a todo el grupo a una distancia angular máxima de 45 grados de la cámara: habrá lugar para fondo y la instantánea dará sensación de desahogo.
Retratos grupales
Si hay mucha gente puede llegar a ser muy complicado el meterlos a todos en el marco. En tal caso resulta muy útil tomar una ángulo picado y disparar desde allí. La perspectiva permitirá que todos quepan en la foto sin necesidad de situarlos en gradas.
Crea un buen ambiente. Cuenta algo gracioso y, si puedes, evita que se den cuenta del momento en el que tomas la instantánea. La naturalidad de los gestos es un elemento que influye muy positivamente en las fotos de grupo.
Retratos grupales
Si notas que el grupo te responde y no se cansan ante la cámara, pídeles que cambien de postura, trata diferentes ángulos y juega todo lo que puedas. Nunca sabes el momento ni la forma exacta en que tu cámara captará la foto de grupo perfecta. Es importante no cansar a las personas, especialmente si se trata de niños: en el momento en que detectes el más mínimo nivel de aburrimiento corta.
Dispara, dispara, dispara…
Hacer autorretratos no es nada fácil…
El encuadre y, sobre todo, el enfoque, son dos parámetros clave
para conseguir un buen autorretrato. A continuación se presentan
una serie de consejos para que la próxima vez que lo intentes
tengas menos problemas y mejores resultados.
Ya sabes usar los controles manuales, ya tienes noción de la
iluminación, y te empiezas a interesar por algunas temáticas y puede
que el retrato es una de ellas.
Y a falta de algún amigo que se ofrezca, no hay mejor modelo que tú
mismo!!
¿Qué mejor modelo que tú?
Vamos a olvidarnos de la belleza y la expresividad delante de la cámara.
Lo que seguro que tienes es paciencia. Con paciencia puedes montar tu
propio estudio fotográfico en casa y depurar la técnica todo lo que sea
necesario.
Para primeros planos o detalles el encuadre te costará un poco más, ya
que cualquier mínimo movimiento te sacará de la foto.
Por eso, independientemente del tipo de plano que utilices, recuerda el
siguiente consejo: pon un espejo detrás de la cámara, de modo que
puedas ver reflejado el resultado de la foto que aparece en el LCD durante
el disparo o después de disparar, según el tipo de cámara que tengas.
Encuadre es la parte más fácil,
partimos de la base de que tienes la
cámara montada en el trípode y estás de
pie o sentado frente a la cámara. Puedes
disparar con el temporizador o usar un
disparador remoto.
A la hora de realizar el encuadre no tendrás
demasiados problemas siempre y cuando
se trate de un retrato en plano entero a
plano medio.
Y es que es relativamente normal que la cámara presente ciertos
problemas a la hora de enfocar, con el consiguiente resultado de que no
salga enfocado lo que tu quieras, o simplemente todo aparezca
desenfocado en la foto.
Mucha gente hace fotos y fotos con la esperanza de que alguna sea
salvable. Pero hay una serie de medidas que puedes aplicar para
ahorrarte este método tan tedioso de prueba y error.
Estas son algunas de las opciones que puedes utilizar:
Enfoque Si el encuadre te ha
dado algún quebradero de cabeza,
el enfoque te va a sacar de quicio
completamente…
1. Cierra el diafragma Esta opción es la más sencilla, pero posiblemente la peor.
La clave de un buen retrato es centrar la atención en el punto de
mayor interés (normalmente los ojos). Esto se consigue con
diafragmas abiertos, o lo que es lo mismo, profundidades de
campo pequeñas.
Cerrando el diafragma asegurarás que la parte enfocada en la
fotografía sea mayor, con lo que aumentas la probabilidad de salir
enfocado todo tú, pero perderás el poder compositivo que te
otorga la profundidad de campo.
Pero si no quieres curarte en salud (y harás bien), el resto de
opciones te serán muy útiles.
2. Enfoca sobre un objeto
Sitúa en la posición donde vayas a estar tú después un objeto que
te permita enfocar la cámara para bloquear a continuación el
enfoque pasando a enfoque manual.
Te servirá cualquier cosa como un muñeco de peluche o una
almohada.
3. Ayúdate de cinta adhesiva
Si estás posando de pie, puedes hacer una marca en el suelo con
cinta adhesiva.
De este modo sabrás donde te tienes que colocar siempre, a la
hora de jugar con el enfoque manual de tu cámara.
4. Ayúdate de una luz
Este es el método que da un resultado más efectivo sin duda. Para
ello necesitarás el disparador remoto.
Con la habitación a oscuras, ayúdate de una pequeña linterna para
enfocar la parte del cuerpo que deseas enfocar, como por ejemplo
un ojo.
El punto de luz ayudará a la cámara a enfocar, y el enfoque se
realizará sobre el punto iluminado. Es un método que suele
resultar bastante fiable y te permitirá hacer primeros planos o
detalles con una precisión inimaginable.
5. Practica frente al espejo
Este método te dará la oportunidad de verificar el resulado que esperas
obtener, conocerás cuál es el ángulo más favorecedor para ti y tu rostro, la
pose más adecuada y la actitud que deseas mostrar.
6. Debes tener bien claro cuales son tus puntos fuertes y esos
destacarlos es más fácil hacer un autoretrato cuando sabes lo que quieres y
esperas lograr.
7. La ideas es que tú mismo cuentes quién eres o como te ves tu mismo
o quieres que te vean los demás, sin palabras solo a través de la fotografía
El CONCEPTO
Tú No Eres Sólo una Cara!
Sí, hacerte autorretratos significa hacerte fotografías pero tu cuerpo
es mucho más extenso que sólo tu cara. Así que, ¿por qué nos
empeñamos en que nuestras facciones aparezcan en nuestros
autorretratos?
Por norma general, cuando nos vemos en una fotografía, nosotros,
que estamos acostumbrados a vernos a todas horas, nos fijamos en
detalles que para el resto de gente pasan desapercibidos. Y esta es
la principal razón por la que muchos autorretratos caen en el olvido:
porque no nos gustamos en ellos.
La solución es muy sencilla: para que sea un autorretrato, no hace
falta que aparezca tu cara en la imagen. Y para conseguir esto,
tienes varias opciones:
Busca en tu cuerpo.
Como decía al principio, tú no eres sólo tu cara, y seguro que tu
cuerpo está llenísimo de detalles para fotografiar: la manos, los pies,
la piel, alguna peca... Puedes incluso centrarte en la cara, si es lo
que quieres, pero fijándote en alguna parte concreta de la cara. Por
ejemplo los ojos, la boca, etc.
A contraluz.
Así saldrás en la imagen pero, a la vez, no se te verá. Y no deja de
ser un autorretrato. Así que si dispones de la luz adecuada (con un
flash externo o en frente de una ventana de tu casa, por ejemplo)
móntate el escenario que necesites y crea siluetas con tu cuerpo!
Moviéndote.
¿El tema de buscar en tu cuerpo no te convence y, por lo que sea,
no puedes hacer un contraluz? Esta es otra opción para salir en el
autorretrato sin que se te vea: programa la velocidad de obturación
de tu cámara por debajo de 1/30 y, mientras estés realizando la foto,
muévete frente la cámara. La foto saldrá movida, sí; pero tu estarás
en ella!
La creatividad lo es TODO
Sí, la creatividad lo es todo siempre, no sólo en los autorretratos. Pues
sí, per nunca está de más recordarlo, por si a alguien se le olvida. Y no me
refiero sólo a la creatividad en la temática de tu autorretrato, también en su
formato. En qué será un autorretrato, cómo te mostrarás en la imagen,
mediante qué vas a representarte, etc.
Anti
Retratos Este tipo de retratos se concentra en demostrar lo
que el fotógrafo en definitiva no es, y al igual que el
anterior , éste es un autoretrato pero destaca el lado
que no es real, o como no les gustaría verse o que
lo vean .
Antiretrato 1. Definitivamente necesitas conocerte a tí
mismo
Hacer una introspección de quién eres cómo
eres, cuál es tu personalidad, con qué cosas te
identificas cómo te ves y como te ven los demás.
Partiendo de esa información es que puedes
empezar a generar el personaje que se volvería
en tu antagónico, en tu lado contrario, en tu no-
yo.
Es muy válido hacer pequeñas encuestas o
entrevistas a nuestros amigos o familiares para
tener una idea más clara de lo que somos y
proyectamos. Esta técnica es muy útil pues en
muchas ocasiones no tenemos la misma
percepción de nosotros con la gente tiene.
Antiretrato Eso sí, los antiretratos tienen el añadido de
que no estamos detrás de la cámara al
disparar, por lo que se hace necesario tomar
algunas consideraciones para conseguir un
buen antiretrato. Al menos que consigamos
encuadrar bien, enfocar apropiadamente y, lo
más importante, ser originales.
Debemos tomar en cuenta estos aspectos
básicos para mejorar nuestros antiretratos:
1. Planificación
Es obvio, pero cuanto mejor pensemos,
estudiemos el lugar, la luz, las condiciones
incluso nuestro aspecto mejor podremos
trabajar.
Antiretrato 2. ¿Qué queremos transmitir? Personalidad, estilo, estado de ánimo,... primero pensemos qué queremos reflejar con el antiretrato antes de sumergirnos en la técnica. 3. Piensa en qué eres tu, para que te sea más fácil saber reflejar entonces lo que no eres. 4. Cuidar el fondo Antes de colocarnos delante de la cámara hay que buscar un fondo apropiado a lo referido en el punto anterior. Influye mucho un fondo oscuro, iluminado, neutro o que forme parte del escenario que acompaña a nuestro rostro o cuerpo. Prepararlo a conciencia nos ayudará mucho a transmitir nuestra intención.
Antiretrato 5. La composición y el encuadre la composición es fundamental. Es necesario que busquemos nuestra ubicación, más próxima o lejana, sólo el rostro llenando el encuadre o parcialmente,... no hay nada como hacer pruebas. Tenemos a un modelo esforzado :) 6. Esdudiar la iluminación Conforme a la idea que hemos elegido, el fondo y la composición debemos dotar de la iluminación adecuada. Aprovechemos ventanas, reflejos, fondos claros si estamos en interiores o buen momento y espacio en el exterior con una luz apropiada. Usar reflectores caseros tipo cartulina blanca o láminas de aluminio, nos pueden ayudar a dar con una luz adecuada o eliminar sombras molestas.
Antiretrato 7. Uso de trípode o soporte seguro
Lo más adecuado es colocar la cámara sobre
un trípode o un lugar seguro es necesario
porque tendremos que hacer pruebas,
movernos, reencuadrar y si tenemos la cámara
bien fijada nos resultará cómodo. Además,
también nos puede permitir disparar a una
exposición más larga si fuese necesaria.
8. Pantalla LCD
Si disponemos de una cámara con pantalla
abatible nos resultará muy práctico para la
composición. Pero si no es el caso, un espejo
estratégicamente colocado nos ayudará a ello.
Antiretrato 9. Enfoque: fundamental
Con él podemos controlar con precisión donde
enfocamos. Hacer uso de las técnicas del
enfoque y tener especial cuidado cuando usemos
grandes aperturas de diafragma, puesto que la
profundidad de campo es muy reducida. Y lo
habitual es lograr un buen enfoque en los ojos,
así que toca hacer pruebas.
10. Dispara en ráfaga
Si somos buenos modelos seremos capaces de
mantener el gesto adecuado, pero no quita que
parpadeemos accidentalmente en el momento
del disparo. Lo ideal es disparar en ráfaga, varias
tomas que nos aseguren alguna buena.
11. Usa el temporizador o disparador remoto
Esencial para que podamos estar en nuestro sitio
en el momento del disparo.
Prepárate A la gente no le gusta que le hagan esperar, por lo que es interesante que tengas
esto en cuenta:
- ¿Dónde vas a realizar la fotografía? No todas las ubicaciones son iguales ni
brindan el mismo efecto o beneficio.
- ¿Cómo quieres que posen las personas? ¿Serios, sonrientes, bromeando,
haciendo muecas ? Dícelo!
- ¿Salen todos en la fotografía? A nadie le va a gustar que la cabeza del que tiene
delante le tape a él o que se quede fuera del encuadre.
- ¿Has avisado? Parece una tontería, pero te evitarás estrés si avisas 5 minutos
antes.
- ¿Tienes la cámara preparada? La cámara, las baterías las tarjetas de memoria,
trípode…
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