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Revista Digital
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TACANÁ NEWS Periodismo con responsabilidad social
LOGOTIPO
DIRECTORIO
EDITORIAL
.- El devenir histórico, y las nuevas herramientas tecnológicas del presente siglo XXI
que han digitalizado, y “achicado” el entorno social, económico y político del mundo, nos
empujan a los profesionales del periodismo a abordar la nave para los nuevos tiempos en
el ciberespacio, e informar a la sociedad el acontecer diario.
Más allá de los muchos o pocos medios de comunicación tradicionales, Tacaná
News nace con el objetivo y misión de informar, a través de la enorme y gran autopista del
Internet a los lectores del mundo.
Salimos a la luz pública con el deseo que la Revista Digital Tacaná News llene las
expectativas de informar los acontecimientos que se registran en esta región del Sur de
México y en la zona limítrofe con nuestro vecino país de Guatemala.
Tenemos el claro deseo de estar diariamente con ustedes a través de la dirección
electrónica WWW.Tacanánews.com desde donde podrán leer, escuchar y ver también los
videos informativos.
Tacaná News es un proyecto de jóvenes universitarios de la Universidad Autónoma
de Chiapas, para el mundo.
La Revista contiene noticias, reportajes, entrevistas y columnas políticas,
elaboradas por profesionales de la comunicación.
En espera de satisfacer el natural deseo de estar comunicado y saber lo que ocurre
en nuestro entorno, esperamos poder estar en contacto a través nuestros correos
electrónicos.
NOTA 1:
CENTROAMERICANOS, EN EL FILO DE LA NAVAJA AL CRUZAR MEXICO.
*Son víctimas de asaltos, robos, violaciones y homicidios.
*Pandilleros y autoridades los acusados.
Por: Gonzalo Egremy.
FRONTERA MEXICO-GUATEMALA.- El camino hacia los Estados Unidos está
sembrado de inseguridad, violencia y muerte, y según diversas fuentes, esta frontera, es
donde más cotidianamente los inmigrantes centroamericanos son víctimas de la
delincuencia común y de las propias autoridades.
El sueño de alcanzar la tierra del Tío Sam, se convierte en una pesadilla para un
sinnúmero de centroamericanos y para sus propias familias cuando resultan, en el
“mejor” de los casos, lesionados al sufrir asaltos, robos, violaciones y, en el peor,
muertos en su paso por esta región limítrofe con Guatemala.
Las autoridades encargadas de frenar el flujo de inmigrantes centroamericanos
ilegales, que diariamente intentan burlar la vigilancia para viajar a la Unión Americana,
dieron a conocer que cada año son detenidos en esta frontera sur de México, un
promedio de doscientos mil guatemaltecos, salvadoreños, hondureños, nicaraguenses,
ecuatorianos y dominicanos, así como un número reducido de cubanos y de otras
nacionalidades como chinos, pakistaníes e hindúes.
El abogado y académico, Gabriel Citalán Trujillo, afirma que si bien el Estado
mexicano tiene organismos de protección al inmigrante, como son los Grupos Beta, así
como instalaciones para la atención de los cientos de miles de indocumentados
detenidos anualmente, y programas ordenados de repatriación, se ha olvidado de la
seguridad en esta frontera sur con Centroamérica.
“La seguridad no es sólo patrullajes policíacos esporádicos, sino una integración
de políticas y coordinación entre todas las instancias del área para brindar cuidado en su
persona y patrimonio a la ciudadanía nacional y extranjera, sin importar si ésta última
está legal o ilegalmente en México”, expuso y calificó de grave la violencia que sufren los
inmigrantes en el área limítrofe México-Guatemala.
De acuerdo con organismos oficiales consultados, el número de decesos de
migrantes que salieron de sus casas en Centroamérica con el sueño de llegar a los
Estados Unidos, en los últimos diez años, en esta frontera, y de lesionados con armas
durante asaltos y robos, arrojó una suma conservadora de 723 muertos y 439 heridos.
De 1995 a la fecha, en el corredor migratorio Tecún Umán, Guatemala-Veracruz,
México, a manos de pandilleros perdieron la vida 723 inmigrantes como víctimas (60 por
ciento) de asaltos y robos por delincuentes en caminos de extravío, a bordo de trenes e
inmediaciones de las vías.
Las anteriores estadísticas recopilados en consulados, hospitales, agencias
funerarias, en la prensa escrita, en organismos no gubernamentales defensores de los
derechos humanos, albergues y con autoridades de Tecún Umán, Guatemala, así como
en el Grupo de Protección al Migrante Beta Sur, revelan que el resto, 39 por ciento, de
migrantes fallecidos en los últimos diez años, lo fueron en accidentes automovilísticos,
ahogados en ríos, presas y en el mar, y en un uno por ciento, por alguna enfermedad.
Del total de la suma, resultaron ser salvadoreños 214; hondureños 269;
guatemaltecos 149, y los 91 restantes no fueron identificados y los cuerpos quedaron en
fosas comunes de los panteones locales tanto del lado de Guatemala como en esta
región de la Costa de Chiapas.
En el mismo periodo, durante asaltos registrados en Tecún Umán, Guatemala, en
las vías del tren de Ciudad Hidalgo, Tapachula, Huehuetán, Huixtla, Mapastepec,
Pijijiapan, Tonalá y Arriaga, Chiapas, así como en los estados de Oaxaca, Tabasco y en el
sur de Veracruz, 439 migrantes resultaron heridos con armas de fuego, punzocortantes
(machetes y cuchillos principalmente) o lesionados a golpes.
De esa suma, 185 son salvadoreños, 141 hondureños, 96 guatemaltecos y 17
entre nicaraguenses, dominicanos, beliceños, panameños, brasileños y ecuatorianos,
quienes recibieron atención en hospitales de la región, en albergues y posteriormente
fueron repatriados o regresaron de manera particular a sus lugar de origen.
El director del hospital de Tapachula, Ubence Molina, reportó que en los últimos
años en ese nosocomio fueron atendidos un promedio de 70 centroamericanos
anualmente, de lesiones producidas por armas de fuego y machete, principalmente,
durante asaltos y robos en esta región limítrofe, así como lesionados por las ruedas del
tren al ser aventados por pandilleros o caer accidentalmente.
En otro hospital, el de Huixtla, ruta también obligada de los centroamericanos en
su viaje a la Unión Americana, el número de inmigrantes atendidos cada año de las
heridas provocadas por el ataque de grupos de delincuentes armados que operan en las
cercanías de las vías del tren, es superior a los 70 del nosocomio de Tapachula.
La directora del albergue para emigrantes lesionados, “Jesús El Buen Pastor”,
Olga Sánchez Martínez, calificó de “muy lamentable y grave la violencia ejercida por
delincuentes contra todo ser humano extranjero que pasa por estas tierras con rumbo a
los Estados Unidos”.
Añadió, sin precisar, que un gran porcentaje de los más de cinco mil emigrantes
que han sido atendidos en ese albergue en los últimos años, lo fueron por lesiones
inferidas por delincuentes o por haber caído del tren accidentalmente o al ser aventados
por pandilleros que controlan el tráfico de indocumentados en el ferrocarril.
“Claro que también hemos atendidos a muchos más que resultaron heridos en
accidentes de carreteras cuando viajaban en los trailers cargados de banano; aquí en el
albergue actualmente tenemos a unos treinta centroamericanos convaleciendo de sus
heridas y esperando una prótesis para que algún día puedan volver a caminar”, dijo.
En ese albergue, se encuentra Omar Ismael Jiménez, quien tiene una bala
incrustada en la pierna izquierda disparada, dice, por pandilleros que lo asaltaron e
hirieron del lado de Guatemala en abril cuando intentaba viajar en el tren hacia los
Estados Unidos.
“Así herido logré llegar hasta aquí y estoy esperando un apoyo del hospital para
ver cuándo me van a operar y sacar la bala; puedo caminar y el sangrado paró por las
curaciones caseras aquí en el albergue”, dice.
Las mismas autoridades policíacas reconocen que en las vías de los trenes de los
municipios de Huehuetán, Tapachula, Ciudad Hidalgo, Huixtla y Villa Comaltitlán, operan
bandas organizadas de delincuentes que atacan a los centroamericanos en su paso hacia
los Estados Unidos.
El albergue Belén, ubicado al sur oriente de Tapachula, dependiente de la diócesis
católica, reporto que es alto el número de migrantes que han acudido en los últimos
años en busca de consuelo tras ser asaltados, lesionados y las mujeres violadas, indicó el
encargado.
La lista de centroamericanos lesionados en asaltos, es interminable, así como los
casos en donde han perdido la vida; sin embargo no sólo delincuentes comunes y los
pandilleros autollamados MS13 agreden a los migrantes, sino que también la policía y
militares en los retenes y puestos de control a lo largo y ancho de las carreteras
fronterizas con Guatemala.
El cónsul salvadoreño en Tapachula, Edgar Enrique Gómez, afirmó que ha visto
una larga cadena de abusos contra los centroamericanos, citando de ejemplo el caso de
corrupción de fuerzas policíacas y militares en los retenes en las carreteras.
“Mis compatriotas, Jaime Ovidio Pérez Fernández, con pasaporte número
C0108740 y con FMT 0600469414, así como Víctor Manuel Girón con pasaporte C020335
y FMT 0600467662, ingresaron legalmente a México y en todas las garitas y retenes la
policía, los extorsionó hasta dejarlos sin 1,800 dólares que traían para pasar unas
vacaciones”, aseguró.
El funcionario se pronunció por una campaña informativa en toda Centroamérica,
dirigida a las personas que intentan viajar de manera ilegal hacia los Estados Unidos,
para disuadirlos o de lo contrario, para que extremen precaución en su paso por
Guatemala y el sur de México ante la violencia de la delincuencia común y las policías.
Los consulados de Honduras y Guatemala en Tapachula, han manifestado
también su preocupación por la reincidencia de los asaltos, robos, violaciones entre
otros delitos cometidos por la delincuencia común en este corredor migratorio contra los
centroamericanos indocumentados.
El Centro de Derechos Humanos “Fray Matías de Córdova”, dependiente de la
diócesis católica de Tapachula, dio a conocer que en los últimos meses documentó trece
casos de extorsión y abuso de autoridad de elementos del ejército mexicano a migrantes
en esta franja fronteriza, así como la desaparición forzada de una mujer hondureña.
Los soldados acusados, se ubicaban a la orilla del divisorio río Suchiate, “les
quitan el dinero a los emigrantes provenientes de Centroamérica para permitirles el
ingreso a México y que cuando los indocumentados no traen efectivo, son amenazados
de muerte o de ser enviados a la cárcel“, difundió.
Un caso concreto sobre desaparición forzada de persona, indicó el Centro, es en
la persona de la migrante, Maritza Bayres, de 24 años de edad, explicando que el 21 de
febrero en un retén del ejército en Tapachula, los soldados detuvieron a siete
indocumentados, entre ellos a dos jovencitas hondureñas.
“Los afectados, quienes omiten sus nombres por razones de seguridad,
aseguraron fueron detenidos por los militares del vehículo tipo Hommer con número
0904170, quienes los obligaron a bajarse los pantalones para revisarlos y quitarles el
poco dinero que traían”.
La coordinadora general del Centro defensor de derechos humanos, detalló que
los elementos del ejército mexicano presionaron y amenazaron a los siete
indocumentados y les arrebataron a la joven Maritza Bayres, quien hasta la fecha no
aparece por ningún lado.
Entre las violaciones más comunes, dijo, destacan: incomunicación consular y
familiar; la falta a tomarles sus declaración; violencia psicológica (maltrato verbal y
amenazas); atención médica insuficiente y falta de medicamentos; insalubridad,
insuficiente calidad y cantidad en la alimentación, corrupción, impunidad, denegación de
justicia y amotinamiento.
Denunció que las condiciones físicas de la estación migratoria de Tapachula, son
deplorables y que ahí las autoridades hacinan y someten a los migrantes detenidos, a
quienes les niegan condiciones mínimas para el higiene personal.
Los migrantes, dijo el organismo eclesiástico de derechos humanos, denunciaron
el año pasado haber sido objetos de abuso de autoridad como detenciones arbitrarias,
intimidación, extorsión, destrucción de sus documentos, de violaciones sexuales y
psicológicas.
Las autoridades mexicanas involucradas en todo lo anterior, acotó, son:
elementos del ejército mexicano, policías municipales, de la Agencia Federal de
Investigaciones (AFI) dependiente de la Procuraduría General de la República y de la
policía sectorial del gobierno de Chiapas.
La Policía Nacional Civil de Guatemala, consideró que el poblado fronterizo Tecún
Umán, “es una verdadera olla de presión” por la presencia de “incontables grupos de
delincuentes dedicados al asalto, robo, violación y muerte de ilegales”, así como de los
delitos del narcotráfico y contrabando en que están involucrados.
“Efectivamente, cada año aparecen muchos cadáveres de ilegales en el río
Suchiate (afluentes divisorio internacional) tanto de este lado (Guatemala) como de
México; algunos por que se ahogan al no saber nadar aunque el agua esté hasta la
canilla, pero otros al ser muertos por los asaltantes”, apuntó un comandante de grupo
que pidió la omisión “por la tronadera (muerte a balazos) que existe”.
Acostados sobre los rieles del tren, en espera de la salida del ferrocarril, Julio
Barahona y Félix Alberto Videla, de 17 y 21 años de edad, respectivamente, confían que
con 20 dólares pagados a los pandilleros de la mara (MS13) cualquier inmigrante puede
abordar los furgones del tren y viajar como se acomoden, hacía el norte de México.
“Así es, la mara controla el viaje al norte de México y los 20 dólares te da derecho
a que no te tiren del tren o no te roben; ellos te cuidan para que nadie (otros
pandilleros) te moleste; yo así he viajado tres veces en los dos últimos años; la primera
me detuvieron en Nuevo Laredo y me deportaron; la segunda llegué hasta Los Ángeles y
en diciembre regresé a San Salvador, ahorita voy de nuevo pa´rriba”, dijo ufano, Félix
Alberto Videla.
De acuerdo con testimonios recabados entre los emigrantes en las vías del tren,
la pandilla MS13 integrada en su mayoría por centroamericanos deportados de los
Estados Unidos, y algunos mexicanos, son los que controlan desde hace seis años el
tráfico de indocumentados por tren.
La MS13 se ha hecho de esa “industria” a sangre y fuego. Seguido aparece uno o
dos personas muertas a balazos en el corredor migratorio Tecún Umán-Veracruz, por la
supuesta lucha entre rivales por preservar el rico filón de oro que les representa el
transporte de inmigrantes por el tren o por que se negaron, los occisos, a pagar el boleto
al sueño americano. Fin.
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Reportaje
por Gonzalo Egremy.
EXIGEN ORGANISMOS A AUTORIDADES ATENDER RECOMENDACIÓN DE COMISION DE
DERECHOS HUMANOS EN MATERIA DE MIGRANTES.
*14 Salvadoreños atendidos este año por violación a sus derechos.
*Vicecónsul lamenta maltrato de migrantes en frontera sur.
Por: Gonzalo Egremy.
TAPACHULA, México. 23 DE DICIEMBRE.- Organismos no gubernamentales, así
como la vicecónsul salvadoreña, Miriam Benavides, se pronunciaron por que las
autoridades de México atiendan la recomendación que hiciera la Comisión Nacional de
Derechos Humanos sobre abusos y maltrato que sufren los migrantes centroamericanos.
El presidente de la CNDH, José Luis Soberanes Fernández, aseguró en su informe
especial rendido en capital mexicana el miércoles que “el tema migratorio es una
asignatura pendiente, porque el gobierno maltrata a los indocumentados que cruzan el
territorio, los retiene en cárceles, en hacinamiento, sin alimentos muchas veces, sin
atención médica y, sobre todo, se violan sus derechos humanos".
Siete de las 52 estaciones migratorias señaladas en el informe del ombudsman, se
encuentra aquí en la jurisdicción de Tapachula, así como diez de los 119 cárceles locales
en donde los migrantes son víctimas de abusos y maltrato.
El director de la Fundación Integración Humana, Moisés Sánchez López, dijo que es
urgente que Migración atienda la recomendación de la CNDH “por que es más que
evidente los aseguramientos masivos de migrantes, los hacinamientos, la baja calidad de
los alimentos y la ausencia de servicios médicos en las estaciones migratorias“.
Agregó que en esta frontera sur de México no es secreto que las cárceles
municipales se habilitan para meter ahí a los migrantes y que por ello la CNDH dijo con
esta acción México criminaliza a las personas que se internan de manera ilegal en el país,
cuyo destino es llegar a Estados Unidos".
Las estaciones migratorias señaladas en donde se hacinan y abusan de los
migrantes en esta frontera sur son: Ciudad del Carmen, Campeche; Echegaray (Pijijiapan),
El Hueyate (Huixtla), Huehuetán, Mazapa de Madero, Talismán (Tuxtla Chico) y Tapachula,
así como el Aeropuerto Internacional de esta misma ciudad.
A su vez el católico Centro de Derechos Humanos “Fray Matías de Córdova”, luego
de afirmar que es urgente que las autoridades atiendan la recomendación de la CNDH,
reportó que de doscientos diez casos que atendió este año sobre violación de derechos
humanos a migrantes, catorce eran salvadoreños, 43 hondureños, 179 guatemaltecos y
diez nicaraguenses que por su condición de extranjeros es la población más vulnerable.
Las violaciones a derechos humanos de los anteriores casos, se explicó, son: por
detenciones arbitrarias e ilegales, tortura física y psicológica, desaparición de personas,
violación al libre tránsito entre otras.
Señalando que los mismos fueron cometidos por policías de la Agencia Estatal de
Investigación (Fiscalía General de Chiapas), por agentes del Instituto de Migración, por
policías de Seguridad Pública del Estado y uno por militares.
“Durante su travesía la población migrante enfrenta un sin fin de riesgos y diversas
violaciones a sus derechos humanos: extorsión, robo, asaltos, abusos sexuales,
explotación, asesinatos, entre otros, realizados muchas veces ya sea por autoridades –
PFP, INM, policía municipal y/o estatal, agentes de tránsito-- o en complicidad de éstas
con particulares“, indica en un documento el Centro defensor de derechos humanos.
Finalmente añade que “México tiene una política migratoria marcada por los
intereses de los Estados Unidos, usando la represión y control de las y los migrantes
centroamericanos que buscan llegar al norte tratando de alcanzar el “sueño americano”.
Una muestra son los diversos programas que ha aplicado en años recientes en la frontera
sur. Desde el 2001 puso en marcha el Plan Sur, el Sellamiento de la Frontera Sur y
actualmente existen los Programas Antimigrantes Acero I, Acero II y III, que igual que en
los anteriores son operados por las diversas corporaciones policíacas a los tres niveles,
municipal, estatal y federal“.
A su vez la vicecónsul, Miriam Benavides, expuso que “el informe de don José Luis
Soberanes (de la CNDH) es más que la realidad sobre lo que les acontece a nuestros
ciudadanos salvadoreños en su paso por estas tierras a los Estados Unidos; por eso yo
pido que el gobierno mexicano atienda la recomendación de ese organismo de derechos
humanos”.
Abundó que “aun cuando no tengo a la mano las estadísticas, bien creo que en
este año en la oficina con el cónsul, Edgar Enrique Gómez, hemos atendidos más de cien
denuncias sobre diversas violaciones a los derechos humanos de los salvadoreños por
parte de autoridades, policías y delincuencia común en esta parte de México”.
ENVIO TRES FOTOS (SON DE MI ARCHIVO) CON LAS GUIAS: estación y estación1:
Migrantes indocumentados salvadoreños y hondureños en la estación de migración
“Echegaray” en el municipio de Pijijiapan, siendo visitados por la vicecónsul, Miriam
Benavides...GUIA: fusil: Policías en uno de cuatro programas operativos antiemigrante en
Tapachula.
Proyecto policía ciudadano (Juan Sabines)
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