6ºB Rubén Benítez

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Un gran escarmientoCuento Medioambiental Enrique Soler

Érase una vez un niño que sellamaba Juan Carlos. Era alto,gordito,con el pelo rizado, castaño,tenía los ojos almendrados, lacabeza redondeada, las orejasmuy grandes, la boca erapequeña… También tenía gafas,era muy pijo y siempre llevaba laropa mal puesta.

Juan Carlos vivía en una casa con su padre y su madre y no tenía ningún hermano. Era muy travieso y sacaba muy buenas en el colegio. Estaba en 1ª de primaria y tiraba muchas cosas al suelo, Juan Carlos era muy sucio.

Un día Juan Carlos iba clase y se encontró su barrio lleno de basura y plástico, y él pensó que no pasaba nada, porque le daba igual tirar cosas al suelo al mar o cualquier sitio, no cuidaba el medio ambiente.

Pero un día, a Juan Carlos le pasó algo extraño, y se convirtió en un lince ibérico. Él se preguntaba que hacía dentro de un animal, en lugar de ser una persona. Tenía hambre, seguía buscando comida y comida, y solo veía bolsas de plástico y basura por todas partes, y pensó que el mundo estaba lleno de basura para la naturaleza, pero todavía no aprendía la lección…

Encontró comida, un trozo de carne, se lo comió y masticó algo de plástico. ¡Es que esa comida tenía un plástico dentro! Menos mal que no se lo había tragado, podría haber muerto.

Juan Carlos que se convirtió en un lince ibérico por casualidad, descubrió que tirar cosas al suelo era malo para el planeta, y empezó a pensar que los animales de todo el mundo tendrían que estar sufriendo, sobre todo los que están en peligro de extinción.

Juan Carlos se dio cuenta de la gran importancia de la naturaleza en nuestro planeta. Estaba triste porque había tirado muchas cosas y contaminado mucho. Encontró un lince ibérico, como él. El lince como él tenía una herida en la pierna y todo su cuerpo rodeado de plástico. El lince murió, y los linces son una especie protegida, pensó él.

Al día siguiente se levantó y fue en busca de comida. Pasó por una granja que tenía tractores, cosechadoras, etc. Juan Carlos, el lince, pensó que dentro habría comida, fue a buscar comida y cayó en una trampa para animales y murió.

Él murió y volvió a ser un humano. Estaba contento por volver a la normalidad tal como es, pues la verdad es que también le gustaba jugar a la PSP.

Juan Carlos pensó que contaminar era una cosa muy peligrosa para el planeta y nunca volvió a contaminar. Juan Carlos vivió una aventura increíble.