«Convertíos, porque está cerca el Reino de los Cielos».

Sábado 4 y Domingo 5 Venta de flores de Pascua

2º de Adviento A

MISIONEROS REDENTORISTAS Avenida Villamayor 87 (37007 SALAMANCA)

Parroquia 923 23 24 58. Residencia 923 23 29 94 WWW.laparroquia.org

LUNES 5 Is 35, 1-10 + 84,9-14 + Le 5,17-26 Nuestro Dios viene y nos salvará.

MARTES 6 Is 40, 1-11 + 95,1-13 + Mt 18, 12-14 Consolad a mi pueblo, dice el Señor.

MIÉRCOLES 7. S. Ambrosio, ob y dr Is 40, 25-31 + 102,1-10 + Mt 11, 28-30

El Señor rescata tu vida y te colma de gracia y de ternura. JUEVES 8. LA INMACULADA CONCEPCIÓN

Gn 3, 9-15. + Ef 1, 3-6. 11-12 + Lc 1, 26-38 Digna Madre de tu Hijo, y también mi mejor Madre.

VIERNES 9 Is 48, 17-19 + 1,1-6 + Mt 11, 16-19

Sería tu paz como un río. -2 SÁBADO 10

10 Si 48, 1-4 + 79, 2-19 + Mt 17, 10-13 Ven a visitar tu viña, Señor, la cepa que tu diestra plantó.

EL ADVIENTO COMO REGALO En palabras de Fano, «el Ad-viento es un regalo envuelto en papel morado”, Cada domingo, un personaje miembro de la familia de Jesús (sus antepasados los profe-tas, su primo Juan, su madre Ma-ría y su padre José) nos irán rega-lando un mensaje nacido de la palabra de Dios, que nos ayudará a preparar la venida de Jesús, Recibidos los cuatro regalos, (uno cada domingo) llegaremos a la Navidad, donde será Dios el que nos haga el gran regalo, que no es

otro que él mismo, nacido Niño en el portal de Belén. Con alegría y agradecimiento, nosotros recibimos el regalo de Dios y lo compartiremos con todos aquellos que quieran unirse a la fiesta de su nacimiento, porque “quien a Dios tiene, nada la falta”.

BAUTIZO

Alba Maide Tapia

Día 8: FIESTA DE LA INMACULADA Contamos con una imagen nueva de la Inmaculada, regalo de nuestra casa del Per-petuo Socorro de Madrid. En torno a ella, celebramos este año la novena y la fiesta de la Inmaculada. Después ocupará un lugar en nuestra iglesia. Delante de ella podremos repetir muchas veces la conocida frase: “Madre, no te merezco pero te necesito”.

El día 8 Horario de Misas de festivo

Con el salón a rebosar, se celebró un año más la “Cena de la Solidaridad”. Todo un

éxito de organización y de participación. Se recaudaron

1903 €. Una vez más ¡gracias! Por vuestra solidaridad

Del 9 al 15 Rastrillo de Cáritas

Lunes 5 Consejo de Pastoral Parroquial

Domingo 4 Colecta de Cáritas parroquial

Sábado 17: FESTIVAL DE NAVIDAD Entrada gratis. ¡Te esperamos!

LECTURA DEL LIBRO DE ISAÍAS. En aquel día, brotará un renuevo del tron-co de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago. So-bre él se posará el espíritu del Señor: espíritu de sabiduría y entendimiento, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor del Señor. Lo inspirará el temor del Señor. No juzgará por apa-riencias ni sentenciará de oídas; juzgará a los po-bres con justicia, sentenciará con rectitud a los sencillos de la tierra; pero golpeará al violento con

la vara de su boca, y con el soplo de sus labios hará morir al malvado. La justicia será ceñidor de su cintura, y la lealtad, cinturón de sus caderas. Habitará el lobo con el cordero, el leopardo se tumbará con el cabrito, el ternero y el león pacerán juntos: un muchacho será su pastor. La vaca pas-tará con el oso, sus crías se tumbarán juntas; el león como el buey, comerá paja. El niño de pecho retoza junto al escondrijo de la serpiente, y el recién destetado extiende la mano hacia la madriguera del áspid. Nadie causará daño ni estrago por todo mi monte santo, porque está lleno el país del cono-cimiento del Señor, como las aguas colman el mar. Aquel día, la raíz de Jesé será elevada como enseña de los pueblos, se volverán hacia ella las naciones y será gloriosa su morada. Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL

R.- Que en sus días florezca la justicia y la paz abunde eternamente.

Dios mío, confía tu juicio al rey, tu justicia al hijo de reyes, para que rija a tu pueblo con justicia, a tus humildes con rectitud R.-

En sus días florezca la justicia y la paz hasta que falte la luna; domine de mar a mar, del Gran Río al confín de la tierra. R.-

Él librará al pobre que clamaba, al afligido que no tenía protector; él se apiadará del pobre y del indigente, y salvará la vida de los pobres. R.-

Que su nombre sea eterno, y su fama dure como el sol; él sea la bendición de todos los pueblos, y lo proclamen dichoso todas las razas de la tierra. R.-

CARTA DE SAN PABLO A LOS ROMANOS. Hermanos: Todo lo que se escribió en el pasado, se escribió

para enseñanza nuestra, a fin de que a través de nuestra pacien-cia y del consuelo que dan las Escrituras mantengamos la espe-ranza. Que el Dios de la paciencia y del consuelo os conceda tener entre vosotros los mismos sentimientos, según Cristo Jesús; de este modo, unánimes, a una voz, glorificaréis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. Por eso, acogeos mutuamente, como Cristo os acogió para gloria de Dios. Es decir, Cristo se hizo servi-dor de la circuncisión en atención a la fidelidad de Dios, para llevar a cumplimiento las promesas hechas a los patriarcas y, en cuanto a los gentiles, para que glorifiquen a Dios por su misericordia; como está escrito: «Por esto te alabaré entre los gentiles y cantaré para tu nombre». Palabra de Dios.

ALELUYA: Aleluya, aleluya, aleluya. Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos. Toda carne verá la salvación de Dios.

EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO. 3,1-12 Por aquellos días, Juan el Bautista se presentó en el desierto de Judea predi-cando: «Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos». Este es el que anun-ció el profeta Isaías diciendo: «Voz del que grita en el desierto: "Preparad el camino del Señor, allanad sus sende-ros"». Juan llevaba un vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre y acudía a él toda la gente de Jerusalén, de Judea y de la comarca del Jordán, confesaban sus pecados y él los bautizaba en el Jordán. Al ver que

muchos fariseos y saduceos venían a que los bautizara, les dijo: «¡Raza de víboras!, ¿quién os ha enseñado a escapar del castigo inminente? Dad el fruto que pide la conversión. y no os hagáis ilusiones, pensando: "Tenemos por padre a Abrahán", pues os digo que Dios es capaz de sacar hijos de Abrahán de estas pie-dras. Ya toca el hacha la raíz de los árboles, y todo árbol que no dé buen fruto será talado y echado al fuego. Yo os bautizo con agua para que os convirtáis; pero el que viene detrás de mí es más fuerte que yo y no merezco ni llevarle las sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego. Él tiene el bieldo en la mano: aventará su parva, reunirá su trigo en el granero y quemará la paja en una

hoguera que no se apaga». Palabra del Señor.

A la luz de la Palabra

EL REGALO DEL PRIMO JUAN Juan Bautista, primo de Jesús, es quien nos trae el regalo para este segundo domingo de adviento. Es una buena noticia: "Dios está cerca". Esta noticia nos llena de alegría. Nada mejor nos puede suceder; pero, al mismo tiempo, es motivo de preocupación. Nos puede pasar lo que ya le pasó a los habitantes de

Belén, que no le reconocieron porque estaban tan entretenidos en otras cosas que ni se imaginaron que por allí pudiera pasar el Señor. Esto mismo nos puede suceder a nosotros; nuestras vidas están tan fuera del ritmo de Dios que, cuando llegue, quizá ni nos enteremos. Por eso, siguiendo a Juan, lo primero que tenemos que hacer es “Preparar el camino del Señor, allanar sus senderos” Es una tarea clave que Juan resume en una sola palabra “Convertíos”. La conversión es un cambio; pero no un cambio superficial y exterior como pintar las paredes de la casa para que todo parezca más limpio, darnos una cremas de calidad para reju-venecer y parecer más guapos. La conversión es un cambio radi-cal y en hondura. San Juan habla de podar árboles, de limpiar la parva y de quitar pecados. Lo entendemos bien. Quizá haya de-masiada rama inútil en nuestra vida, demasiada paja y poco grano. De hecho si nos detenemos un poco nos damos cuenta de que nuestra casa está llena de cosas, nuestra vida está llena de cosas, nuestra alma está llena de cosas. Montones de cosas que no sirven para nada. ¡Dios mío cuántas cosas!. Ahora llega la Navidad y seguimos comprando muchas más cosas. Tendremos tantas cosas en casa que ya no nos quedará en ella ni un rincón para el Niño Jesús que va a nacer. Y tendremos que repetir una vez más: "No hay lugar para Él en esta posada". Lo mismo pasa con nuestro ritmo de vida. Tenemos tantas cosas que hacer, tantos asuntos que atender, tantos problemas que resolver, tantos lugares a donde ir que es imposible sacar unos minutos para el encuentro con Dios. Trabajamos mucho, corremos mucho, aten-demos muchos asuntos; ¿Cómo encontrar a Dios en medio de todo este laberinto cuando nosotros mismos nos encontramos perdidos en él?. ¡Convertíos!