40

2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

  • Upload
    others

  • View
    0

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario
Page 2: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

2 aguas vivasPRESENTACIÓN

Además:Parábolas (05) · Citas escogidas (16)Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27)Desde el griego (31) · Anecdotario (36)Para Meditar (38)Cartas de nuestros lectores (39)

Suplementos:Boletín Informativo bimestral“Tesoros” (Para niños que aman a Jesús)“Bocetos” (Para jóvenes dispuestos a servir)

Fotografías portada y contraportada:Mario Contreras T.

llevando

Equipo Redactor:Eliseo Apablaza F., Roberto Sáez F.Gonzalo Sepúlveda H., Claudio Ramírez L.

Colaboran en esta edición:Rodrigo Abarca B., Rubén Chacón V.

Diseño y diagramación:Mario Contreras T., Mario Cortés P.

TraduccionesDalia Studer de Schubert, Esmérita Verdejo deCanales, Rodrigo Abarca, Andrés Webb.Finanzas y distribución:Alicia Cuevas P., Jorge Geisse D.Llanquín Lucio 01972, Temuco, Chile.Fonos (45) 261791 – 221202.E-Mail: [email protected]@hotmail.com

l comenzar nuestro cuarto año de vidahemos querido replantearnos los objeti-vos y el camino a seguir con nuestrarevista. Cada vez somos más conscien-

tes del lugar privilegiado que ocupamos en lahistoria de la fe, y más conscientes de que nosqueda poco tiempo.

En estos tres años hemos ido entregandonuestro propio testimonio de fe, y damos graciasa Dios por permitirnos hacerlo. Pero desde elpasado nos llegan voces claras e inspiradas quequieren hacerse oír: son las voces de nuestroshermanos que tuvieron una visión muy clara dela gloria de Dios y de su voluntad en su tiempo.Sus voces no se están oyendo hoy, por causa deltráfago que nos rodea. Su mensaje no es muyatractivo para quienes buscan un camino fácil yuna solución inmediata. Algunos de ellos jamáshan sido publicados en español. Jamás aparece-rían en las listas de libros más vendidos en laslibrerías. Su riqueza está casi oculta, destinadasólo para aquellos buscadores de tesoros espiri-tuales.

Quisiéramos unir nuestras débiles voces alas de ellos, porque ellos fueron antes que noso-tros, y porque nosotros hemos bebido de ellos.Quisiéramos tomar la antorcha que ellos handejado al partir y seguir sosteniendo el testimo-nio que ellos sostuvieron. No seremos los únicos;simplemente ocuparemos el lugar que el Señorreservó para nosotros en esta obra.

Si su mensaje –y el nuestro– despiertan enustedes algo dormido, o les abre un horizontenuevo, escríbanos, y les daremos más, más de loque estas pocas páginas pueden contener.

Que el Señor nos socorra a ustedes y a noso-tros, para llevar más allá la antorcha, hastadonde el Señor quiera.

la antorchaENFOQUE DE ACTUALIDAD¿Quiere cambiar su rostro?Los avances de la ciencia médica nos vuelven a asombrar ............................ p. 3

TEMA DE PORTADALa gloria de la herencia divinaNo sólo nosotros tenemos una herencia en Cristo; Dios tiene tambiénuna herencia en los santos. Christian Chen .................................................... p. 6

El hijo varón: los testigos que traen la victoriaLa obra de los vencedores en el tiempo del fin. Rodrigo Abarca .................... p. 11

Nosotros tambiénLos vencedores de este tiempo también tienen un lugar en la lista dehéroes de la fe. Roberto Sáez ....................................................................... p. 14

Tal vez la última generaciónNuestra responsabilidad como la generación más privilegiada … y lamás responsable. Eliseo Apablaza ................................................................ p. 17

LEGADOLa corriente del EspírituAl estudiar la historia de la iglesia podemos observar las huellas de Dios.Watchman Nee ............................................................................................. p. 21

La obra de Dios en el tiempo del finUna dispensación termina; otra comienza; una tiene las sombras;la otra la realidad. T.Austin-Sparks ................................................................ p. 23

Reflexiones sobre la visiónDonde no hay visión, el pueblo se extravía. Oswald Chambers ..................... p. 28

¿Cuál es el camino?Cuando los que iban delante ya no están, surge la inevitablepregunta. F.B. Meyer ..................................................................................... p. 30

SEMBLANZASPregonero de CristoUna biografía sobre T.Austin-Sparks, quien fuera un fiel testigo deCristo por más de sesenta años .................................................................... p. 32

MUJERMujeres piadosasUna esfera de servicio más allá de las palabras ............................................ p. 37

Suscripciones:Jorge Geisse D., Fono (45) 343429,[email protected] · Casilla 3050, Temuco.

Solicitar versiones digitales:Esmérita Verdejo de [email protected]

Contactos en EE. UU, Canadá y Puerto Rico:James Huskey · Spanish Publishing MissionP.O.Box 1339, Guthrie, OK, (73044) [email protected]

Contactos en México:Samuel González E. · Apartado Postal Nº 639C.P. 80000, Culiacán, Sinaloa, [email protected]

Una revista para todo cristianoAño 4 · Nº 19 · Enero - Febrero 2003

Nota: Las fotografías incluidas en esta edición no tienen necesariamente relación con personas o lugares mencionados en los textos, a menos que se indique otra cosa.

Page 3: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

3aguas vivas ENFOQUE DE ACTUALIDAD

¿quiere

Los avances de la ciencia médica nos vuelven a asombrar; esta vez al abrirnos unainsospechada perspectiva, mezcla de felicidad y alienación.

ace unos pocos años muchos críticos decine ridiculizaron la película Face/Off(Contracara), porque se basaba en loque consideraban una premisa “increí-

ble”, “futurista”, “imposible de hacer con la tecno-logía actual”. En la película, un detective se veíaobligado a someterse a una operación para cambiarde rostro con un terrorista –quien se encontraba enestado de coma– y averiguar dónde éste había de-jado una bomba química.

En estos últimos días, tras un anuncio realiza-do por un médico inglés, todo parece indicar quelos guionistas de la película no estaban muy lejosde la realidad. En efecto, el doctor Peter Butler, delRoyal Free Hospital de Londres, ha señalado re-cientemente que “las técnicas quirúrgicas actualesposibilitarán la realización de una operación derostro dentro de seis a nueve meses.” 1 El anuncioprecisa que las técnicas de microcirugía permiti-rían trasplantar a un paciente la piel, las orejas, lanariz, los labios, la barbilla y los huesos de unapersona fallecida poco antes. Los vasos sanguíneosy las venas también tendrían que tomarse de lacara del donante. “Para poder trasplantarlos al re-ceptor –continúa la noticia– se le quitaría su cara,los músculos faciales y las grasas subcutáneas.”Luego, sería necesario “conectar correctamente losnervios que controlan las sensaciones y el movi-miento”.

Los primeros beneficiados con estos transplan-tes serían los pacientes cuyos rostros han quedadodesfigurados debido a quemaduras, accidentes ocáncer, pero es muy probable que no pase muchotiempo antes de que se quieran realizar con finesestéticos.

su

rostro?En una encuesta realizada por la web BBC

Mundo respecto de este asunto, la mayoría de losopinantes teme que estos transplantes no sólo ser-virían para ayudar a quienes realmente lo necesi-tan, sino que podría beneficiar también a los delin-cuentes. Otros señalan que, aunque ellos estaríandispuestos a aceptar un trasplante de cara, si lo ne-cesitaran, no estarían, sin embargo, dispuestas adonar la suya.

Tal como lo señaló Peter Butler, antes de co-menzar a realizar estos transplantes, es esencialque se lleve a cabo un debate moral y ético.

Una espiral de trasplantesDebido al desarrollo de la ciencia médica y a

la buena voluntad de los donantes, los transplantesde diversos órganos se están haciendo cada vezmás habituales. Corazón, riñones, hígados, pulmo-nes y médula están pasando de unos cuerpos aotros permanentemente en todo el mundo, salvan-do cientos de vidas. Esto ha generado largas discu-siones por los valores éticos implicados, y sobretodo porque ha dejado en evidencia la inescru-pulosidad de quienes están comerciando con ello.Se sospecha que hay algunos países asiáticos enque el uso de órganos de pacientes con muerte ce-rebral y de prisioneros ejecutados está traspasandoel límite de lo aceptable moralmente. 2 Y esto notiene visos de terminar; al contrario: la demandaaumenta, y los donantes son insuficientes.

Entre tanto la ciencia está preparando otras so-luciones. La más inocua de todas parece ser lacreación de órganos artificiales. Ya está en su etapade experimentación final el pulmón artificial que –según se afirma– “reproduce el 100% de las fun-

cambiar

Page 4: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

4 aguas vivasENFOQUE DE ACTUALIDAD

ciones pulmonares normales”. 3 Los avances en lacreación de corazones deberán también rendir sufruto en algún momento.

Pero están también aquellas soluciones que si-guen afectando mayormente las sensibilidades éti-cas. Se trata de la obtención de órganos clonados.Los experimentos con animales han sido exitosos,al menos en las primeras etapas, y se espera que enlos próximos años se realizarán con órganos obte-nidos de embriones humanos. Un asunto que damucho que hablar y sobre el cual se vislumbra undebate extraordinariamente largo.

Pero el asunto que hoy llama nuestra atenciónes el trasplante de rostros, porque tiene que ver conalgo más profundo: nuestra identidad.

Los temores del poetaEn el siglo XV, el poeta español Jorge

Manrique escribía, en sus “Coplas a la muerte desu padre”:

Si fuesse en nuestro poderhazer la cara hermosa

corporal,como podemos hazerel alma tan glorïosa

angelical,¡qué diligencia tan vivatoviéramos toda hora

e tan presta,en componer la cativa,dexándonos la señora

descompuesta!

A la luz de los avances de la medicina, pareceque los temores del poeta Manrique se van a cum-plir. Ciertamente, la preocupación por la bellezano es nada nuevo en la historia, pero conforme sehan ido produciendo más oportunidades para real-zarla, esto se torna un asunto prioritario. Estamos apunto de ir más allá de la mera cosmética para lle-gar a una solución más drástica: el cambio de ros-tro, que toca los límites de la identidad misma. Nodiremos nada de la solución que traería estos tras-plantes a las atribuladas víctimas de accidentes.Nos preocupa la otra parte, la tendencia actual detratar de ‘hacerse un rostro’, de ocultar el verdade-ro yo. La vida parece querer tornarse en un verda-dero “baile de máscaras”, en que paseninadvertidos los dramáticos sobresaltos del alma.

La “estética” hoy por hoy está recibiendo elculto de muchos adoradores. Muchos altares a estadiosa se están levantando por el mundo. Y esto, en

desmedro de su prima hermana –al menos en lo fo-nético–, la “ética”. ¿Llegaremos a realizar comoraza humana lo que hace unos años parecía un jue-go de ciencia-ficción? ¿Seguiremos buscando mejo-rar nuestro cuerpo en desmedro de nuestra alma? Sies así, los temores de Manrique, de que “la señora”–el alma– quede “descompuesta” tendrán un infelizcumplimiento.

¿Podremos burlar a Dios?¡Cambiar el rostro! Esa es la cuestión. ¡Cuántos

hombres y mujeres han estimado su rostro comoun castigo injusto para lo que juzgan un alma tannoble como la suya! ¡Cuántos deseos “estéticos”se van a despertar ante la idea de un cambio derostro! ¡Cuánto subterfugio, cuánto acomodo,cuántas ideas infernales de los malignos hallaránsu cauce para obtener algún provecho de ello!

Nadie puede asegurar que los adelantos cientí-ficos –amorales en esencia– no caigan en manosinescrupulosas. Nadie puede velar tampoco porqueavances como este que venimos comentando se li-bre de ese peligro. ¿Nos ayudará esto a perfeccio-nar una de las peores artes sociales, el burlarnosunos de otros?

En la Biblia se cuenta de un joven –Jacob– quepara obtener los derechos de primogenitura, enga-ñó a su padre anciano y ciego, haciéndose pasarpor su hermano mayor. Para ello utilizó unas pielesde cabritos que simulasen la piel velluda de su her-mano, y se vistió con las ropas de aquél para burlarel tacto y el olfato de su padre.

Jacob lo logró; aunque las consecuencias querecibió son muy tristes y de larga data. ¿Obtendráel hombre provecho en engañarse unos a otros, oen suplantar al hermano delante de Dios? ¿Podráservir un cambio de rostro –perfecto, sin huellasdelatoras– para burlar a Dios y permitirle a un pe-cador redomado pasar por justo hacia las moradaseternas? ¡Si un cambio de rostro no sirve para esoentonces sirve para muy poco!

Lo que en verdad necesita todo hombre no esun cambio de rostro, sino de corazón. Un corazónnuevo, creado por Dios, dado por Dios, afín a lanaturaleza de Dios. Es lo único que trascenderámás allá de la tumba.

***

1 BBC Mundo, 3/12/2002.2 “El comercio de órganos humanos”, en Revis-ta “Creces”, www.creces.cl3 BBC Mundo, 13/06/2002.

La vida parecequerer tornarseen un verdade-ro “baile demáscaras”, enque paseninadvertidos losdramáticos so-bresaltos delalma.

Page 5: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

5aguas vivas MISCELÁNEA

Evangelización de costilla de corderoUno se gana a la gente como se gana a un perro. Si ve pasar a

un perro trotando por la calle con un viejo hueso en el hocico, nose le quita el hueso diciéndole que no es bueno para él. Lo quehará será gruñirle. Ese hueso seco y viejo es lo único que tiene.Pero si uno le tira delante una chuleta gorda de cordero, conseguridad va a dejar el hueso y agarrar la chuleta mientras quemeneará rápidamente la cola. Y se habrá ganado un amigo. Envez de andar de aquí para allá quitándole huesos a la genteyo voy tirándoles costillas de cordero. Algo que tenga car-ne y vida. Les voy a decir cómo pueden comenzar unanueva vida.

Testimonio de David Wilkerson, acerca de su abuelo, predicadoritinerante, en La cruz y el puñal

Las raíces del árbolComo el árbol tiene sus raíces ocultas en el

suelo y su tronco levantándose y creciendo en laluz del sol, así la oración necesita igualmentepara su pleno desarrollo el ocultamiento secretodonde el alma encuentra a solas a su Dios.

Andrew Murray, Con Cristo en la Escuela de la Oración

Esclavos sin saberloEn el Amazonas hay una clase de hormigas que ilus-

tran muy bien la triste condición del hombre. Cientos deestas hormigas salen de sus nidos periódicamente paracapturar colonias vecinas de hormigas más débiles. Des-pués de destruir a los defensores que resisten, se llevan los ca-pullos que contienen las larvas de las hormigas obreras. Cuandoestos “hijos capturados” salen del capullo, asumen que forman partede la familia y se lanzan a las tareas para las cuales nacieron.Nunca se dan cuenta de que son víctimas del enemigo y que ha-cen un trabajo forzado. De la misma manera en que estas criaturasson cautivas desde el momento mismo de nacer, así nosotros en-tramos en el mundo esclavos del pecado y de Satanás.

Sin embargo, al acudir a Cristo por medio de la fe somos libera-dos de la condenación del pecado. Luego, podemos empezar aservir al Señor. Todos somos siervos. Nuestra decisión, como dijoJosué, no es si vamos a servir, sino a quién vamos a servir.”

MRD II

La arena del gran marHace algunos años acompañaba a unos hermanos albañiles a

recoger arena en una playa para el edificio que construíamos.Hicimos varios viajes y literalmente cargamos el camión casi enel mismo lugar. Cada vez que nos retirábamos dejábamos unhueco hecho y, al volver, a la semana siguiente, el hoyo ya habíasido rellenado por el propio mar que se encargaba de renovar loque se había perdido.

La gracia divina es así. Por mucho que uno saque de ella, elSeñor siempre tiene para prestarnos toda la que nos haga falta.Por eso se nos dice: «Porque de su plenitud tomamos todos ygracia sobre gracia» (Juan 1:16). Nos hace mucha falta paranuestro trabajo, ante todo para nuestras propias personas.

Humberto Pérez, en El maestro y la forma de la verdad

Como brota la sangreLa verdadera oración, de la misma manera que la sangre brota

de la carne cuando ésta es aprisionada por férreas ligaduras,expresa balbuceante lo que procede del corazón cuando éste sehalla abrumado por el dolor y la amargura.

Juan Bunyan, La oración

Un león en el cuarto contiguoPodríamos comparar la presencia del pecado con la de

un león al que se ha criado desde pequeño. El cacho-rro parece un inocente gatito: tiene dientes chiqui-

tos, ronronea y no hace daño. Se le puede dar elbiberón. Hasta sonríe agradecido. Pero luego co-mienza a crecer en tamaño y ferocidad, hastaque un día, de repente, caemos en la cuenta deque estamos conviviendo con un león en el cuar-to contiguo. Tarde o temprano nos devorará.

Oscar Marcellino, Violentamente cristiano

Las naranjas de FukienMi pueblo natal en la provincia de Fukien es

renombrado por sus naranjas. Yo diría (y sinduda, me siento algo parcial) que en todo el

mundo no hay otras como ésas. Al contemplarlas colinas en los comienzos de la temporada de

las naranjas, se ve todo verde. Pero si uno obser-va atentamente esas plantas, verá aquí y allá algu-

nas frutas manifestando ya su color anaranjado. Pre-sentan una hermosa vista esos botones de oro salpicando

el verde oscuro de los árboles. Más tarde todas madurarán y losnaranjales se teñirán de color dorado. Pero, por ahora, son estasprimicias las que se arrancan. Son recogidas con cuidado y sonéstas las que obtienen los más elevados precios en el mercado –a veces tres veces más que las otras.

Todos alcanzarán la madurez, pero el Cordero está buscandoprimicias (Ap.14:4).

Watchman Nee, Sentaos, andad, estad firmes

El duelo de los cardenalesLa primavera pasada una hermosa pareja de cardenales arribó

a nuestro patio. Ambos pajarillos construyeron su nido en unárbol, y se deleitaron con la espléndida paz de su apartado ho-gar. La hembra puso cinco huevos. Se sentaba sobre ellos díatras día, y nosotros observábamos con gran interés. Un día, aescondidas, vino un ladrón. Creemos que fue una ardilla – llegódurante el corto tiempo en que la hembra estaba ausente. Robócuatro huevos, y deshizo el nido. Cuando salimos, los dos carde-nales estaban en la barda junto a la puerta, aunque antes siem-pre se mantenían lejos. Estaban muy agitados, gorjeando comoenviando un SOS, o tal vez para regañarnos por haber permitidoque eso ocurriera. Su hogar fue deshecho, y su familia se acabó.

¡Este es el vivo retrato de muchos hogares cristianos! Los pa-dres están mirando para otro lado, sin darse cuenta que el ene-migo está cerca!

Howard G.Hendricks, ¿Problemas en el hogar? El cielo puede ayudar

parábolas

Page 6: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

6 aguas vivasTEMA DE PORTADA

La finalidad de todas las cosas y el misterio dela voluntad de Dios

uál es el misterio de la voluntad deDios? Nosotros lo vemos muy clara-mente en la Palabra de Dios. Estaspalabras no han sido expresadas úni-

camente como signos y presentadas como merasilustraciones, sino que, en Efesios 1-3, el EspírituSanto nos habla claramente de cuál es el misteriode la voluntad de Dios. Esto es, que en la plenitudde los tiempos todas las cosas que están en loscielos y todas las cosas que están sobre la tierraserán reunidas en Cristo.

Pero, Pablo no termina aquí. Él continúa ha-blando para que comprendamos cuál es la sustan-cia del misterio de la voluntad de Dios. Ef.1:11 nosdice que en Él también nosotros obtuvimos unaherencia. Cuando se habla acerca de reunir todaslas cosas en Cristo, se dice también que asimismonosotros obtuvimos una herencia en él. Y se afir-ma, además, que el Espíritu Santo nos ha sidodado como las arras de nuestra herencia. El Espíri-tu Santo vive en nosotros hoy, como las arras denuestra herencia con miras a la redención de laposesión adquirida por Dios, para alabanza de sugloria (1:14).

En el pasaje de Ef.1:10-18, hay dos puntos aconsiderar en la palabra “herencia”. Uno es nues-tra herencia, el otro es la herencia de Dios. En mu-chas ocasiones, cuando leemos las Escrituras, con-sideramos nuestra herencia: el que hemos sidosalvos y alcanzado salvación. La salvación y todolo que ella conlleva se convierte en nuestra heren-cia. Después de ser salvos, tenemos gozo y paz.

No sólo nosotros tenemos una herencia en Cristo, sino que Dios tiene una herenciaen los santos. Cristo no sólo es el heredero de todas las cosas, sino que lo es, sobretodo, de la Iglesia, su plenitud. Así como Canaán fue la herencia de Israel, y Hebrónera lo mejor de Canaán, así la Iglesia es lo mejor de “todas las cosas” como herenciade Cristo.

Dios es nuestra propia herencia. Donde Dios está,allí está el cielo. El cielo es cielo porque Dios estáallí. El infierno es infierno porque Dios no estáallí. Así que, una vez salvos, aunque estamos aúnsobre la tierra, sentimos cual si estuviésemos en elcielo. Todos podemos ver y experimentar cuánbuena es nuestra herencia. Una vez salvos, nuestroprimer pensamiento es: ¡Qué grande es la herenciaque hemos heredado! Sobre la tierra, algunos sonpobres y otros son ricos. Pero, una vez salvos, to-dos somos millonarios, porque nuestra herencia essobreabundante.

La herencia del pueblo terrenal de DiosEn el Antiguo Testamento leemos también so-

bre una herencia. Mas, si leemos a través del Anti-guo Testamento cuidadosamente, encontraremosque para significar “herencia” se usan dos palabrasdiferentes en hebreo. Una de esas palabras nosmuestra que esta herencia es un don; un don gra-tuito. Dios otorgó la tierra de Canaán a Abraham ysus descendientes como un regalo gratuito.Abraham no tuvo que hacer nada. La tierra deCanaán es una tierra que fluye leche y miel. Laleche es la esencia de los animales; la miel es laesencia de las plantas. Cuando usted combina lasdos, tiene la esencia de la vida. La palabra heren-cia aparece 273 veces en el Antiguo Testamento:de ellas, 188 se refieren a la tierra de Canaán. Así

de la herencia divina

gloria

Lectura Bíblica: Ef.1:9-11; 15-23

la

Christian Chen

Page 7: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

7aguas vivas TEMA DE PORTADA

que, usted puede hacer esta palabra casi equivalen-te a la tierra de Canaán. Si el pueblo de Israel nostipifica, entonces el que Dios les haya dado la tie-rra de Canaán para que fuese su herencia, en ellenguaje del Nuevo Testamento significa que, aun-que para ellos ese pedazo de tierra era algo terre-nal, para nosotros es algo celestial. Como Pablodijo, hemos obtenido una herencia en él.

Nuestra HerenciaSi Canaán tipifica a Cristo y sus riquezas, en-

tonces nosotros ya estamos en Canaán. Ya estamospisando sobre Canaán. Ya estamos en Cristo. En élya hemos ganado una herencia. Esta herencia esnuestro don. Pero, en el texto hebreo existe otrapalabra utilizada para “herencia”, la cual aparece255 veces. Dentro de esas 255 veces, 210 vecesella expresa una acción de tipo militar. Por tanto,la pregunta a realizar es: ¿Cuándo el Espíritu Santousa esta palabra? Ella es utilizada precisamenteantes de que los israelitas entraran en Canaán yconquistaran la tierra. Esto nos muestra que, en lamente de Dios, la herencia es por una parte unagracia, y por otra, una recompensa. Nosotros tene-mos que poseerla. Tenemos que conquistarla. ¿Re-cuerda usted lo que Dios dijo a Josué? “Todo loque pisare la planta de vuestros pies, os lo daré enherencia”.

Sin embargo, cuando Josué y el pueblo de Is-rael pusieron sus pies sobre la tierra, notaron quehabía otras pisadas. Ellos tenían que arrojarlasfuera. Tenían que conquistar esa tierra para quefinalmente pudieran poseerla. Por tanto, en el An-tiguo Testamento, la palabra “herencia” se traducecomo “posesión” al español. El énfasis está puestoen que debemos conquistar para poseer. Ella es,por consiguiente, una recompensa.

A los ojos de Dios, por tanto, una herencia estanto un don como una recompensa. Por una parte,nosotros ya estamos en Cristo; por otra, Pablo nosdice que debemos correr hacia la meta de ser halla-dos en Él. No comprendemos estas palabras hastaque leemos el Antiguo Testamento, donde Diosnos da un cuadro tras otro, con el fin de mostrar-nos qué es una herencia. En la plenitud de lostiempos, todas las cosas en los cielos y en la tierraserán reunidas en Uno, en Cristo. Gracias a la obrade Cristo, nosotros ya hemos obtenido una heren-cia. Estamos en Cristo ¡Alabado sea el Señor! Sinembargo, él continúa trabajando aún en nosotros.Hasta su retorno, la tierra de Canaán no sólo esnuestra como un don, pues, en la misericordia deDios, debemos también esforzarnos para entrar enel reino de Dios. Cuando somos salvos por gracia,no tenemos que hacer ningún esfuerzo. Todo espor gracia. Pero, a causa de que hemos recibidotanta gracia, podemos negarnos a nosotros mismosy cargar la cruz para seguir al Señor. Así podemosganar al Señor como nuestra herencia. Cuando yoera joven, estaba asombrado con la clase de coro-nas que recibiría. Comúnmente, esperamos recibiruna corona un día. Pero, más temprano que tarde,

vemos que la corona más grande que podemosrecibir es nuestro Señor mismo. Si nosotros gana-mos al Señor, ninguna recompensa será más gran-de que eso. Así que, vemos que en él hemos obte-nido una herencia.

Por consiguiente, en 2ª de Pedro capítulo 1,aprendemos que tenemos que ser diligentes. Yatenemos una herencia, pero debemos asirnos a ellacomo si aún no la hubiésemos ganado. No signifi-ca que no la hayamos ganado. Sí, ya la hemos ga-nado; ya estamos en Cristo. Pero, existe otro ladode la herencia. Tenemos que conquistar Canaán yposeerla. Esto es lo que Pablo quiere decir cuandomenciona el obtener una herencia en Cristo. Todossabemos que Cristo es nuestra herencia. En el An-tiguo Testamento, la tierra de Canaán tipifica lasinescrutables riquezas de Cristo, según la expre-sión del libro de Efesios. Pero en el libro de He-breos, encontramos que esta herencia es una re-compensa.

La Herencia de DiosSi hemos descubierto cómo el Espíritu Santo

usa la palabra “herencia” en su primer significado,tal como se ha mencionado más arriba, comenza-remos desde el libro de Génesis, luego avanzare-mos hacia los libros de Éxodo, Deuteronomio,Josué, Jueces y el libro de Rut, y hallaremos queen nueve de diez ocasiones se refiere a la tierra deCanaán. Pero, cuando llegamos a los Salmos yavanzamos hacia los Profetas, parece como si elEspíritu cambiara su dirección. Se utiliza la mismapalabra, pero parece estar hablando de algo distin-to. En aquellos libros más tempranos, se nos cuen-ta cómo el pueblo de Israel obtuvo una herencia.Mas, cuando venimos a los Salmos y a la últimaparte del Antiguo Testamento, el Espíritu cambiade dirección y, cuando usa la misma palabra, nohabla más de ella significando a Canaán. Es comosi Dios tuviera otra parte de su obra que sacar aluz. Luego, se nos comienza a mostrar la herenciade Dios. Pero, ¿cuál es la herencia de Dios? LaBiblia nos muestra muy claramente que los escogi-dos de Dios son su herencia.

Así que, a menudo pensamos que es suficientecon que seamos salvos. Ahora hemos sido salvos.Dios nos ha dado su gracia. Estamos gozosos. Es-tamos mucho mejor que los no creyentes. Estamosen la tierra como si estuviésemos en el cielo. Pen-samos que esto es todo. Esto era lo que Abrahampensaba en un principio. Al comienzo, él no teníanada, pero Dios le dio a Isaac. Todo era gracia. Eltenía lo que siempre había deseado y estaba satis-fecho. “Isaac” significa “risa”. Ahora, Abrahampodía reír. Antes, Abraham se sentía vacío a pesarde todos los rebaños que tenía. Pero ahora, Dios lehabía dado a Isaac. Él ahora podía reír. Sin embar-go, él había olvidado preguntarse a sí mismo:¿Dios ganó lo que había deseado ganar?

Cuando Dios llamó primero a Abraham, ledijo: “Yo te bendeciré”. Isaac era la suma total deesa bendición. Cuando Abraham ponía sus ojos

A los ojos deDios, una he-rencia es tantoun don comouna recompen-sa. Por unaparte, nosotrosya estamos enCristo; porotra, Pablo nosdice que debe-mos correr ha-cia la meta deser hallados enÉl.

Page 8: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

8 aguas vivasTEMA DE PORTADA

sobre Isaac, veía toda la bendición que Dios lehabía dado. Sin la bendición de Dios, no podemosvivir. Abraham tenía ahora las bendiciones deDios. Él podía vivir. Él podía seguir la voluntad deDios. Pero la palabra de Dios no se detuvo aquí.La meta principal de Dios era hacer de Abrahamuna bendición para todas las naciones. Todas lasnaciones serían bendecidas por medio de la si-miente de Abraham. Abraham pensaba que Isaacera su meta. Pero fracasó en comprender que Diosdeseba convertirlo en una bendición para todas lasnaciones.

¿Cómo podía Abraham ser una bendición paratodas las naciones? Él no podía bendecirlas por símismo. Pero, alabado sea el Señor, él engendró aIsaac. Isaac engendró a Jacob, y así, generacióntras generación, hasta que Jesús nació en Belén.Ahora, nosotros entendemos que “la simiente deAbraham” se refería a Cristo. Esto es lo que Pablonos muestra. Así que, Isaac no era la meta. Él erasólo un medio para un fin. ¿Por qué Dios quisoque Abraham le ofreciera a Isaac? Si él no hubieseofrecido a Isaac, tampoco habría hecho de la ben-dición de Dios su único propósito. Abraham habríaobtenido su herencia, pero Dios no habría ganadola suya. Un día, cuando Jesús naciera en Belén,todas las naciones serían bendecidas por medio deJesucristo.

Muchas veces, nosotros sólo preguntamos siacaso tenemos nuestra herencia. Pensamos que elmisterio de Dios consiste en que obtendremos unaherencia. Mas, también Dios tiene una herenciaque ganar. A menos que Dios obtenga su herencia,Él no puede completar la revelación del AntiguoTestamento. Y no sólo eso, Él también nos da elNuevo Testamento para que nuestros ojos puedanser abiertos.

Cuando hablamos acerca de la herencia, inva-riablemente nuestras mentes se vuelven hacia latierra de Canaán. Cuando hablamos acerca de lostipos, pensamos que la tierra de Canaán tipificanuestra herencia. Pero, como ya he mencionado,Dios tiene un propósito eterno. Sí, es el propósitode Dios que Abraham tenga a Isaac. Pero Isaac noes ese propósito eterno. El único propósito eternoes Jesucristo. Por tanto, Abraham debía ofrecer aIsaac para comprender que Isaac tenía por propósi-to revelar a Cristo. Si el Señor nos bendice, y sinos da una herencia, el propósito es que al final Élobtenga su herencia. Hoy debemos preguntarnos:¿Ha obtenido el Señor su herencia?

Alabado sea el Señor porque nosotros ya he-mos ganado nuestra herencia; y no la perderemos.Si hoy su voluntad es que estemos junto a El, en-tonces no debemos tener temor. Sin embargo, sipudiésemos ver realmente el pleno propósito deDios, no nos atreveríamos a dejar este mundo nisiquiera un minuto antes de que él haya alcanzadosu meta en nuestras vidas. Tenemos que preguntarconstantemente si el Señor ha ganado su herencia.¿Si nuestra herencia nos trae un gran gozo, el cora-zón del Señor está satisfecho con la suya?

Por ello, cuando Pablo nos habla sobre nuestraherencia, él ora para que los ojos de nuestro cora-zón puedan ser alumbrados, para que podamosconocer la esperanza a la que hemos sido llama-dos. A continuación, la sentencia que sigue es unagran sorpresa para nosotros: él ora para que noso-tros sepamos cuales son las riquezas de la gloria desu herencia en los santos.

El Heredero de Todas las CosasAhora, aquí se levantan algunas preguntas.

¿Cuál es su herencia? ¿Cómo va a obtener Él suherencia en los santos? El Antiguo Testamento nosmuestra las figuras de las cosas por venir, para queal llegar al Nuevo Testamento podamos compren-der. Dicho de otro modo, nosotros vemos sólo unaparte, y no el cuadro completo. Como resultado,cuando leemos acerca de la tierra de Canaán, pen-samos únicamente en nosotros mismos. Cuandoleemos sobre la simiente de Abraham, pensamosen nosotros mismos. Pero, cuando Pablo lee elAntiguo Testamento, comprende que la simientede Abraham es singular y se refiere a nuestro Se-ñor Jesucristo.

¿Qué significa “la Simiente de Abraham”?Aquí significa específicamente “heredar una he-rencia”. Dios dio a Abraham una porción de tierra,pero él no tenía un hijo. Ismael no podía recibir laherencia. Los hijos de Abraham con sus concubi-nas no podían recibir la herencia. Sólo uno podíaheredar la herencia, y ése era Isaac. Así que, “lasimiente de Abraham” no se refiere sólo a su des-cendencia, sino en especial al único que heredaríala herencia.

Por esta razón, Pablo nos muestra que en esteuniverso Dios tiene un único heredero de todas lascosas. ¿Por qué creó Dios todas las cosas? He-breos 1:2 nos dice que Dios constituyó a su Hijoheredero de todo. Todas las cosas creadas en eluniverso han sido dadas a nuestro Señor. Él esheredero de todo. En el Antiguo Testamento, elpueblo de Israel fue el heredero de la tierra deCanaán. Pero, en el Nuevo Testamento, nosotrosvemos que Cristo es el heredero de todo. Así comoDios dio la tierra de Canaán al pueblo de Israel, Eldio también todas las cosas a su Hijo Jesucristo.¡Esto es verdaderamente asombroso!

Canaán dentro de CanaánLa totalidad del universo es como la tierra de

Canaán. Dios lo ha dado a su Hijo Jesucristo comosu herencia. Sin embargo, cuando leemos sobre latierra de Canaán, especialmente en el libro deJosué, ¿Podemos encontrar una porción particularde buen suelo dentro de la tierra de Canaán? Des-pués de que el pueblo de Israel entró en la tierra,comenzó a heredar la tierra que fluye leche y miel.Pero, debía existir una porción de esta tierra queera la mejor. Si la tierra de Canaán es una figuradel cielo, luego esa mejor porción sería el cielo delos cielos. A continuación, la toma de posesión deesta mejor porción de tierra conduciría al pueblo a

En el AntiguoTestamento, elpueblo de Israelfue el herederode la tierra deCanaán. Pero,en el NuevoTestamento,nosotros vemosque Cristo es elheredero detodo.

Page 9: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

9aguas vivas TEMA DE PORTADA

alcanzar la gloria. Efesios 1:18 habla de “las rique-zas de la gloria de su herencia en los santos”. Pues,la herencia otorgada al Hijo de Dios incluye todaslas cosas, al igual que en la figura se incluía latotalidad de Canaán. Pero, dentro de Canaán existeun Canaán celestial, un cielo de los cielos.

En el Antiguo Testamento, Caleb dijo a Josuécuando tenía 85 años: “Dame ahora ese monte”.La tierra que él pidió era una tierra que fluía lechey miel, pero tenía gigantes en ella. El pueblo deIsrael resultó tan atemorizado como para huir deesa porción de tierra 45 años atrás. Ahora, Calebpide esa particular porción de tierra, la más difícilde obtener. Esta porción de tierra representa a latotalidad de Canaán, porque fue éste el mismolugar donde espiaron los doce espías 45 años an-tes.

Una vez, mientras visitaba la tierra de Canaán,contraté personalmente los servicios de un guíaprivado para que me llevara hasta Hebrón. Este esen verdad un país de colinas repletas de viñas. Elguía turístico me dijo: “¿Sabía usted que este trozode tierra representa la totalidad de Canaán?”. Éstees el trozo más fértil. Ella es, de verdad, una tierraque fluye leche mezclada con miel.

Cuando usted lea la Biblia cuidadosamente,comprenderá que, cuando Jacob vino a la tierra deCanaán, él vino hasta Hebrón. Ciertamente, en laEscritura Hebrón representa a la tierra de Canaán.De la totalidad de Canaán, Caleb obtuvo la mejorporción de tierra. Cuando la planta de sus pies seposó sobre la tierra, él la conquistó. El echó fuera atodos los enemigos y ganó esta porción de tierracomo su herencia.

Hebrón es, en verdad, un lugar lleno de monta-ñas; lleno de dificultades. La palabra “Hebrón”significa “comunión”. Aquí usted puede tener lacomunión más íntima con el Señor. Así que, enCanaán existía esta mejor porción de tierra, estoes, Hebrón. Si lo traducimos al lenguaje del NuevoTestamento, debemos ir al libro de Efesios, puesallí todas las figuras mencionadas más arriba ven-drán al pensamiento. Ellas son la explicación deEfesios 1 al 3. Esta Canaán dentro de Canaán es laverdadera porción que Dios va a obtener en sussantos. En toda la creación, al igual que en la tota-lidad de Canaán, existe sólo una porción mejor, lacual Dios obtendrá en sus santos. Luego, ¿cuál essu herencia? La respuesta está dada en el últimoversículo capítulo 1: La iglesia, “la cual es su cuer-po, la plenitud de Aquel que todo lo llena entodo”.

¡Alabado sea el Señor! El Padre ha dado todaslas cosas a su Hijo. Pero, ¿cuándo veremos unaherencia que no sea solamente la plenitud de lagloria, sino también las riquezas de la gloria, paraque nuestros corazones sean satisfechos? En eltiempo en que Dios recibirá su herencia, porque suHijo no será únicamente el heredero de todas lascosas, sino que también obtendrá su Iglesia glorio-sa, tal como el pueblo de Israel no sólo conquistóla tierra de Canaán, sino que Caleb conquistó tam-

bién Hebrón dentro de Canaán. Cuando acabemosde leer el libro de Efesios, si el Espíritu Santoabrió nuestros ojos, exclamaremos con fuerza,“¡Qué gloria!”. Cristo glorificado lo ha llenadotodo en todo. La Iglesia es el cuerpo de Cristo. LaIglesia no es sino un vaso cuyo fin es ser llenadopor Cristo.

¿Qué significa ser llenado? Significa “poseerlotodo”. Cuando Cristo lo llene todo en todo, Él lle-gará a ser heredero de todo. Cuando la iglesia ex-prese verdaderamente la plenitud de Cristo, Diosobtendrá su herencia. Entonces, Él declarará lasriquezas de la gloria de su herencia en medio deluniverso.

El Poder de la Resurrección y de la AscensiónLa oración de Pablo menciona las riquezas de

la gloria de su herencia en los santos. Pero, ¿cómopodemos obtener esto? ¿Cómo podemos ver unaiglesia gloriosa antes de que el Señor retorne? Diosdesea obtener su herencia, que es la plenitud de lasriquezas de la gloria. Si hubiésemos obtenido latotalidad del universo, nos sentiríamos muy glorio-sos. Pero, nuestro Señor lo ha ganado todo. Ningu-no es más glorioso que Él. Alabado sea el Señor,pues, en esta herencia abundante, el Espíritu Santoenfatiza que su herencia en los santos no es sola-mente gloriosa, sino que es la plenitud de las ri-quezas de la gloria. ¡Qué gloria! Tal es el gloriosocuadro que nos entrega Efesios 1.

Pero, ¿cómo obtendrá Dios esta herencia?¿Cómo puede él obtener una iglesia gloriosa? Larespuesta se encuentra en la oración de Pablo: Lasupereminente grandeza de su poder para con no-sotros los que creemos. Para obtener esta herencia,para conquistar esta tierra, necesitamos ese poder.Pablo ora para que nuestros ojos sean abiertos, afin de que podamos ver cuán grande es este poder.¿Qué poder es éste? Este poder operó originalmen-te en Cristo. Es un gran poder. En este universo, elpoder nuclear es algo grande. El poder de Dios enla creación se expresa particularmente en el podernuclear. Pero, éste no es el poder más grande en eluniverso. Dos mil años atrás, había un poder mani-festado en Cristo. Ese poder es el que operó en éllevantándolo de los muertos. ¿Cuán grande es estepoder?

Alguien describió el cielo que vemos como latapa superior del interior de un ataúd, y la tierracomo la parte inferior del ataúd. Ningún hombrehabía sido capaz de salir del ataúd. Ninguno teníael poder de dejar el ataúd. Pero, alabado sea elSeñor, 2000 años atrás, después de que el Señorcompletó la obra de salvación sobre la cruz, elpoder que operaba en él lo levantó de la muerte. Élfue el primero en dejar la tumba.

¿Cómo puede Dios obtener su herencia? Existela supereminente grandeza de su poder para connosotros los que creemos. Este mismo poder queoperó en Cristo, operará también en nosotros. ¿Porqué hay una resurrección de entre los muertos?Porque el universo está moribundo. Todas las co-

El Hijo de Diosno será única-mente el here-dero de todaslas cosas, sinoque tambiénobtendrá suIglesia gloriosa,tal como elpueblo de Israelno sólo con-quistó la tierrade Canaán, sinoque Caleb con-quistó tambiénHebrón dentrode Canaán.

Page 10: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

10 aguas vivasTEMA DE PORTADA

sas se mueven en dirección a la muerte. Pero,cuando recibimos la salvación, este poder de resu-rrección opera entonces en nosotros, y la direcciónhacia la muerte se revierte. Este poder está en no-sotros hoy, no solamente conduciéndonos a vivirmejor, sino que también guiándonos a la consuma-ción del plan eterno de Dios. Este es realmente ungran poder. Esta es la forma en que Dios puedeobtener su herencia.

El proceso de la resurrección es un proceso dereversión que capacita a todas las cosas para quesean reunidas en Uno. Este proceso ya ha comen-zado hoy y operará hasta que el Señor regrese.¡Alabado sea el Señor! ¡Qué grandioso poder!¡Qué supereminente poder! Este poder no es tansólo un poder de resurrección, sino también unpoder de ascensión. Este poder de ascensión es tangrande que se encuentra por encima de todas lascosas. Cuando venimos a Efesios 4, leemos queCristo ha sido levantado para llenarlo todo en todo.Sólo a Josué le fue prometido por Dios que obten-dría toda la tierra de Canaán sobre la cual pisara laplanta de sus pies. Cuando Cristo ascendió a loalto, llevó cautiva toda la cautividad (Ef.4:8).

La totalidad del sistema solar y otras partes denuestro espacio exterior están saturados de poderesmalignos. Ahora, el Señor llevó cautiva la cautivi-dad. Dondequiera que nuestro Señor ha pisado,todo ha venido a ser suyo. Él ascendió a lo altopara poder llenarlo todo en todo. Cuanto más altoél subió, tanto más pudo llenar. El ascendió a loalto hasta alcanzar al Padre. El libro de Apocalip-sis nos permite ver que, cuando Cristo ascendió altrono del Padre, le fueron entregados todos lostítulos de propiedad del universo. Solamente él eradigno de abrir el libro con siete sellos. Esta es laforma en que nuestro Señor llegó a ser heredero detodas las cosas.

El misterio de la voluntad de DiosAhora bien, nosotros también tenemos este

poder de ascensión en nuestro interior. El poderque nos llevará hasta la gloria. Toda la creaciónestá bajo sus pies, por lo cual él se convirtió en lacabeza, sobre todas las cosas, de la Iglesia(Ef.1:22). El Espíritu nos muestra que ella es laCanaán dentro de Canaán. La iglesia es el cuerpode Cristo, la plenitud de Aquel que todo lo llena entodo. La manera en que él obtiene su herencia esla misma en que obtiene su Iglesia gloriosa. Asíque, vemos que el Señor es Señor de Señores yRey de Reyes. Y la Iglesia es el cuerpo de Cristo.¡Qué gloria! Esta es la Iglesia gloriosa.

Toda la creaciónestá bajo suspies, por lo cualél se convirtióen la cabeza,sobre todas lascosas, de laIglesia(Ef.1:22). ElEspíritu nosmuestra queella es laCanaán dentrode Canaán. Laiglesia es elcuerpo de Cris-to, la plenitudde Aquel quetodo lo llena entodo.

Efesios 1 nos revela esta iglesia gloriosa y nosdice cómo Dios obtiene su herencia. Efesios 3 nosdice que el gran poder de la resurrección y de laascensión ya está en nosotros. Esto tiene lugarsobre la tierra. Estamos viviendo sobre la tierra.Dios puede hacer todas las cosas mucho más abun-dantemente de lo que pedimos o entendemos(Ef.3:20). Por tanto, “a El sea la gloria en la iglesiaen Cristo Jesús” (Ef.3:21). Esta iglesia es la iglesiagloriosa. ¿Cuál es la misión de la iglesia? Efesios3:10 dice, “para que la multiforme sabiduría deDios sea ahora dada a conocer, por medio de laiglesia, a los principados y potestades en los luga-res celestiales”. Así que, ahora los hombres pue-den contemplar en la iglesia la sabiduría de Dios.Esta es la iglesia gloriosa “conforme al propósitoeterno” que Dios hizo en Cristo Jesús nuestro Se-ñor.

¿Cuál es el misterio de la voluntad de Dios?Encontramos la respuesta en Efesios 1 y 3. EnEfesios 1:9 lo expresa: “Dándonos a conocer elmisterio de su voluntad, según su beneplácito, elcual se había propuesto en sí mismo”. Este es Cris-to. ¿Y cuál es el deseo que se propuso en Cristo?Este es la Iglesia. En Efesios 5, vemos que existeun gran misterio que atraviesa el universo, el cuales Cristo y la Iglesia. Que el Señor pueda tenermisericordia de nosotros. Por medio de Efesios 1 y3 podemos ver ahora la iglesia gloriosa. Nosotrosoramos al Señor. ¿Por qué tenemos que mirar ha-cia lo que fue antes? Porque hemos caído y tene-mos muchos fracasos, pues hemos intentado usarnuestra fuerza para cumplir la voluntad celestial.Queremos utilizar nuestros caminos para alcanzarla iglesia gloriosa. No es nada asombroso el quetengamos un fracaso tras otro. Pero, nuestro Señornunca falla. Nosotros veremos ese día en que arri-bará el día de gloria. Que el Señor pueda edificar-nos por medio de estas palabras. Que esperemos yapresuremos la venida del día de Dios.

***Traducción del inglés: Rodrigo Abarca B.

Page 11: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

11aguas vivas TEMA DE PORTADA

La obra de los vencedores en el tiempo del fin. Su significado, sus armas y su victoriaen la consumación de esta edad.

e llama testigo a quien (o quienes) en-trega el testimonio. El vaso por cuyointermedio el testimonio de Dios es traí-do y mantenido en la tierra. En el capí-

tulo 12 de Apocalipsis hallamos a este testigo en lafigura del hijo varón que es dado a luz por la mu-jer. ¿Quién es este hijo varón? La figura del Apo-calipsis nos conduce, de inmediato, a la escena delhuerto, cuando Dios le dijo a la serpiente: “Pondréenemistad entre ti y la mujer y entre tu simiente yla simiente de ella. Esta te herirá en la cabeza y túla herirás en el calcañar”. La mujer es, a lo largode toda la Biblia, una figura de la iglesia, retratadaen sus distintos aspectos. Y aquí, en el capítulo 12,representa a la iglesia, primero en su naturaleza yposición celestial, después en su encarnación, yfinalmente en su peregrinaje a lo largo de estadispensación hasta su victoria plena sobre Satanás.El hijo varón es la simiente o descendencia de lamujer. Y esto último, en dos sentidos: primeroCristo, y, luego, los testigos que tienen la vida y eltestimonio de Cristo. Estos últimos son, asimismo,los que han vencido juntamente con Cristo (vgr.los vencedores).

La posición celestial y eterna de la iglesia estádescrita en el versículo uno: “Apareció en el cielouna gran señal: una mujer vestida del sol, con laluna debajo de sus pies y sobre su cabeza una co-rona de doce estrellas”. Aquí la iglesia se encuen-tra descrita según el eterno misterio de la voluntadde Dios, como la perfecta expresión de Cristo(vestida del sol), su palabra revelada (la luna deba-jo de sus pies) y la plenitud de los designios divi-nos para su pueblo (la corona de doce estrellas).

A continuación se nos muestra el terrible ymortal conflicto que significa la encarnación delmisterio de Dios en la tierra, pues frente a ella selevanta el dragón, la serpiente antigua, como undespiadado adversario, empeñado en impedir sumanifestación en el mundo. ¿No podemos ver des-crita aquí, primeramente, en los angustiosos dolo-res de parto de la mujer, toda la trágica, amarga ydesdichada historia del Israel terrenal y su fracaso;pero, también su persistente esperanza, mantenidaen alto por un remanente fiel a través de toda laoscura noche de su apostasía y desobediencia?¡Cuánto dolor acumulado y cuánta esperanza re-unida existe en dicha historia!

Pues aquella esperanza alcanzó finalmenteaquello que aguardaba: El Cristo fue dado a luz alfinal de su historia, cuando tan sólo unos pocosfieles todavía esperaban. Largos fueron aquellosdolores de parto que presagiaban la venida del

el hijolos testigos que traen la victoria

Cristo. Pero, cuando finalmente él llegó, el propó-sito de Israel se cumplió, y una nueva dispensacióntuvo comienzo. Todos los símbolos, tipos, figuras,profecías y promesas del Antiguo Pacto fueronreunidos, consumados y trascendidos en la personade Cristo. La sombra dio paso a la realidad; lo visi-ble a lo invisible; y lo material a lo espiritual. 1 Yno resulta exagerado decir que la venida de Cristofue pavimentada y propiciada por esa tan grandenube de testigos de la cual nos habla Hebreos capí-tulo 11. Los dolores de parto de la mujer encintanos muestran que el cumplimiento de la voluntadde Dios en este mundo se encuentra atado a la fe yal testimonio de su pueblo, y a la tremenda oposi-ción, adversidad y sufrimiento que este hecho im-plica para ellos.

Pero el Israel terrenal, una vez que Cristo fuedado a luz, dio paso a la realidad celestial y espiri-tual que tipificaba, esto es, a la iglesia.

Cristo y los vencedoresEl hijo varón, ante la mirada impotente del

dragón, fue arrebatado para Dios y para su trono.El antecedente de esto es que Cristo, el primero delos vencedores, ascendió a los cielos para recibirdel Padre la autoridad total y absoluta sobre todolo creado y tomar en sus manos la ejecución deldesignio completo de su voluntad. Él llevó tam-bién consigo a la iglesia en su ascensión y exalta-ción. Luego, en el orden físico y temporal, Cristovino de la mujer (Israel), pero en el orden espiri-

Rodrigo Abarca B.(Fragmento de un libro

en preparación).

varón:

Page 12: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

12 aguas vivasTEMA DE PORTADA

tual y eterno, la mujer (la Iglesia) nació de Cristo.Lo que encontramos aquí es el descenso de lo

celestial y eterno hasta la esfera de lo terrenal pormedio del hijo varón. Con la llegada de Cristo, através de la larga y sufrida esperanza de Israel,todos los tipos y figuras de la antigua dispensa-ción, dieron paso a la Iglesia, y la mujer celestialapareció sobre la tierra. Entonces el cuadro cam-bió. Satanás fue herido de muerte en sus pretensio-nes de dominio y autoridad sobre la cruz, no sinantes haber golpeado a Cristo en su calcañar (lamuerte física del Señor). Por ello, el dragón y susángeles aparecen siendo arrojados a la tierra.

Pero, en este punto, necesitamos volver unavez más sobre el íntimo e indisoluble lazo que unea Cristo con su Iglesia en el misterio de la voluntadde Dios.

En el capítulo 2 de Hebreos, siguiendo la líneadel Salmo 8, se afirma que el propósito divinoinvolucra la obtención de un hombre bajo cuyospies Dios pueda sujetar todas las cosas. Sin embar-go, agrega, “al presente no vemos que todas lascosas le sean sujetas (al hombre)”. Sin embargo,“vemos a Aquel que fue hecho un poco menor quelos ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de hon-ra”, puesto que todo lo que el hombre no pudorealizar debido a su caída, Cristo lo ha consumadoen su lugar. Sin embargo, la manifestación visibley temporal de su victoria eterna sobre Satanás, elpecado y la muerte, son la tarea de su Iglesia du-rante la presente edad.

Por ello, la voz que viene del cielo enfatiza elhecho de que el hijo varón no representa solamen-te a Cristo, sino a una compañía corporativa que seencuentra ligada vitalmente a él en su testimonio yvictoria sobre Satanás: “Ellos le han vencido”. Elénfasis está puesto en un sujeto plural por cuyointermedio el reino y la autoridad de Cristo se esta-blecen definitivamente en la tierra.

Dicho sujeto (o compañía corporativa) es equi-valente en función y propósito a aquella gran nubede testigos del pasado anterior a Cristo. ¿Quiénesfueron ellos? Si leemos con atención el capítulo 11de Hebreos, encontramos que se trata de aquelloshombres y mujeres que a lo largo de los siglosperseveraron en mantener fielmente un testimoniopara Dios sobre la tierra. Ellos se pararon de sulado, en medio de la oscuridad, la apostasía, laincredulidad y la indiferencia que los rodeaba, paradefender los derechos de Dios sobre esta tierra ysobre su pueblo, con la mirada puesta en la espe-ranza venidera. Allí está Noé, pregonero de justi-cia; Abraham, Isaac y Jacob, extranjeros y peregri-nos sobre la tierra, en espera de la ciudad que tienefundamentos; Moisés, enfrentando a Faraón (untipo de Satanás) y sosteniéndose como viendo alInvisible; y tantos otros que (Ver Hebreos 11:33-38). Estos testigos abrieron un camino para Cristoa través de su fe y su paciente testimonio (un testi-go es aquel que entrega un testimonio) a favor deDios y su palabra.

Del mismo modo, los testigos de la presente

dispensación son aquellos que en el día de la ruina,el fracaso y la apostasía del pueblo de Dios (lacristiandad), se mantienen en pie a favor de Dios ysu eterno propósito sobre la tierra. Quienes, ha-biendo visto el modelo celestial (el Arca en mediodel Templo), no se avienen a nada que sea menosque ello y procuran conformarse en todo a la vi-sión celestial. Su testimonio se encuentra vital-mente ligado al testimonio de Jesucristo, quien enlos días de su encarnación se convirtió en el testigofiel y verdadero de Dios en medio de los hombresy en contra de todas las huestes espirituales demaldad, pues participan tanto de sus padecimien-tos como de su autoridad para tratar con Satanás.

Una compañía representativaSu victoria en el mundo contra Satanás tiene un

triple fundamento: La sangre del Cordero, que noshabla de un total desasimiento de cualquier clasede justicia u obra propia delante de Dios y unacompleta confianza en la justicia y la obra de Cris-to. La palabra de su testimonio, que nos habla desu completa fidelidad a la revelación de Jesucristoy el propósito eterno de Dios en él, tanto en lorelativo a la meta final, como a los medios divina-mente establecidos para alcanzarla. Pues, aquí nohay lugar para nada que proceda del hombre. Y,esto último, ligado con el menosprecio de sus “al-mas” hasta la muerte, lo cual nos habla de un com-pleto quebrantamiento y desplazamiento de lavida, la fuerza y la actividad del yo u hombre natu-ral por medio de la disciplina del Espíritu y de lossufrimientos que el mismo adversario de Dios pro-voca en su intento por destruirlos.

Ellos no son, en consecuencia, la totalidad delos salvados a lo largo de la presente dispensa-ción, así como no todo Israel estaba incluido en lagran nube de testigos de Hebreos 11. Más bien,constituyen una compañía representativa de laIglesia, un contingente de avanzada, y una puntade lanza de Dios para el cumplimiento pleno de suvoluntad durante la presente dispensación. Ellos sehan adentrado profundamente en la conocimientoexperimental (no mental o conceptual) de todos losvalores de la cruz aplicados sobre el pecado, lacarne y el hombre natural; así como también en lavida de resurrección y el andar en el Espíritu, todoello experimentado en el seno de una vida corpora-tiva de relacionamiento, mutualidad, interdepen-dencia y amor. Por cierto, el propósito de Diossobrepasa largamente sus operaciones a lo largo dela presente edad, pues su Iglesia es algo que estásiendo formado y preparado para la eternidad.

No obstante, es preciso recalcar que, durante lapresente dispensación, y debido al fracaso de lacristiandad en general, Dios hace uso de un contin-gente corporativo de testigos fieles para alcanzarplenamente sus objetivos. Ellos, a lo largo de lossiglos, han ido expandiendo y completando la me-dida de Cristo en la iglesia, para traerla al centrode la voluntad de Dios que es Cristo. No se tratade cristianos especiales y distintos, sino de creyen-

Los vencedoresconstituyen unacompañía re-presentativa dela Iglesia, uncontingente deavanzada, yuna punta delanza de Diospara el cumpli-miento plenode su voluntaddurante la pre-sentedispensación.

Page 13: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

13aguas vivas TEMA DE PORTADA

tes normales en días donde todo se ha vuelto anor-mal y decadente. Todo lo que ellos obtienen deDios y quitan a Satanás es endosado a la totalidadde la iglesia. Pues el cuerpo de Cristo es uno. Ycuando un miembro recibe honra, todos los miem-bros se gozan con él, pues todos participan delconsiguiente aumento de vida divina. Por tanto, elhijo varón forma parte de la iglesia y no es, enningún sentido, una entidad distinta de ella.

La batalla del tiempo del fin¿Cómo consiguen los vencedores derrotar a

Satanás? Hemos visto la triple obra que Dios llevaa cabo en ellos. Ahora, debemos considerar susignificado más amplio.

La obra específica de Satanás en la iglesia selleva a cabo por medio del alma humana. Pablonos dice que, en el colmo del misterio de la iniqui-dad, el inicuo u hombre de pecado se sienta en eltemplo de Dios y se hace pasar por Dios. Aquí eltemplo de Dios es la iglesia (del griego “naos”;como en Ef.2:21). Lo cual significa la usurpacióndel lugar de Cristo por el hombre. El alma humanao yo natural gobernando y rigiendo la iglesia enlugar de Cristo. Esta es la esencia del “misterio dela iniquidad”.

La obra de los vencedores consiste en quitar alhombre natural, el alma humana, de en medio, ytraer a Cristo al lugar de centralidad y supremacíaen la Iglesia o casa de Dios, conforme al modelocelestial. Y esto lo consiguen por medio de laaceptación voluntaria de la obra de la cruz sobre latotalidad de su vida y actividad natural. Pues,cuando el alma, vencida y conquistada, se subordi-na completamente a la vida interior del Espíritu,entonces la autoridad de Cristo puede fluir por suintermedio para tratar, primero con su casa, y lue-go, por medio de ella, con Satanás para desalojarlode su posición de dominio e influencia en los luga-res celestiales. Por ello, Pedro nos dice que es ne-cesario que el juicio comience primero por la casade Dios.

Por esta razón, lo vencedores son los precurso-res, que, al igual que Juan el Bautista, preparan lavenida del Señor a su casa (Mal.3:1-3). Por estecamino el Arca regresará al Israel de Dios y susenemigos serán derrotados. Pues el Arca es por símisma suficiente para acabar con todos ellos. Lavictoria subsiguiente del derrotado pueblo de Israelno surgió de ellos mismos, sus capacidades o re-cursos, sino únicamente del Arca del Testimonio.

De este modo, la obra de los vencedores desen-cadena la batalla decisiva contra Satanás. “Cuandoel dragón vio que había sido arrojado a la tierra,persiguió a la mujer que había dado a luz al hijovarón”. Satanás, despojado de su posición en loslugares celestiales, se aboca por completo a la ta-rea de acabar con la iglesia sobre la tierra, puessabe que su ruina final está próxima. La escena deApocalipsis no nos muestra tanto un ordencronológico de acontecimientos preestablecidos,como los principios que gobiernan la obra de Dios

en la tierra. Esto es, que Dios se propone acabarcon la autoridad de Satanás por medio de la Igle-sia, ya que la victoria de la Iglesia no es sino laplena manifestación de la victoria que Cristo yaobtuvo en la cruz; que, ante el fracaso de la cris-tiandad en general, especialmente hacia el tiempodel fin, Dios llama a una compañía representativade testigos para reestablecer y llevar adelante sutestimonio; y que, finalmente, dicha compañíadevuelve a la iglesia al centro de la voluntad deDios, para que, en el tiempo del fin, ella se levantepara completar su tarea en la presente dispen-sación.

A lo largo de los últimos dos mil años, Dios seha procurado un testimonio y una antorcha quenunca se ha apagado del todo. A menudo persegui-dos y despreciados, los testigos de Dios han perse-verado en mantener los derechos divinos sobre latierra 2. Por ello, la furia del príncipe de este siglolos ha hecho su blanco principal: “Entonces, eldragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue ahacer guerra contra el resto de la descendencia deella, los que guardan los mandamientos de Dios ytienen el testimonio de Jesucristo”. Pero, por me-dio de ellos, el Espíritu Santo ha venido devolvien-do a los santos la totalidad de la experiencia extra-viada en el principio. Pues la vida que ellos hanobtenido en su caminar con Cristo y las victoriasalcanzadas por medio de sus padecimientos se hanido acumulando en la iglesia como un legado inde-leble e indestructible: “Oí una gran voz del cieloque me decía: Escribe: Bienaventurados... losmuertos que mueren en el Señor... si dice el Espíri-tu... porque sus obras con ellos siguen”. En estoconsiste la paciencia y la fe de los santos testigos(mártires) de Jesucristo.

Esta es la buena batalla de la fe. A medida quenos aproximemos al fin de esta dispensación, elcual está, como se ha visto, íntimamente conectadocon la obra de los vencedores, veremos surgir unacompañía cada vez más vasta y gloriosa de creyen-tes que regresarán al testimonio del principio. Yesto ocurrirá de muchos modos, en medio de unaadversidad y oposición crecientes, mientras, porotra parte, el mundo se oscurece convulsionadopor intensos y desgarradores conflictos y sufri-mientos.

Pero, aquello que será causa de dolor para elmundo, será, al mismo tiempo, causa de purifica-ción y liberación para la iglesia, que despertará,por intermedio de los vencedores, para librar laúltima batalla que pondrá fin a los reinos de estemundo y su derrotado príncipe.

***1 T.Austin-Sparks desarrolla esto muy bien en su ar-

tículo “La obra de Dios en el tiempo del fin”.2 Para una consideración más completa del signifi-

cado histórico de este hecho, recomiendo leer los tresprimeros capítulos del libro “Nuestra Misión”, de GeneEdwards.

A lo largo delos últimos dosmil años, Diosse ha procura-do un testimo-nio y una an-torcha que nun-ca se ha apaga-do del todo.

Page 14: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

14 aguas vivasTEMA DE PORTADA

La fe, el testimonio y el precio pagado por quienes nos antecedieron en la carrera de lafe es nuestro aliciente; mirar a Cristo es nuestro sostén, y el gozo puesto delante denosotros es disfrutar del reino de Cristo sobre la tierra.

nosotrostambién

Roberto Sáez F. Los que nos antecedierona lista de héroes de la fe, descrita en elcapítulo 11 de la epístola a los Hebreos,generó una gran nube de testigos o testi-monios. Las cosas que esos hombres

hicieron son para nosotros esa nube de testigos;sus hechos esperan repetirse en nosotros también,y más aún en nosotros puesto que ésos héroes per-tenecen al Antiguo Pacto. Falta añadir los héroesdel Nuevo Pacto con sus hechos, y los del desarro-llo de la historia de la iglesia en su paso a través delos siglos hasta llegar a la presente generación.

Lucas, al escribir el libro de los Hechos de losApóstoles, deja la narración de los heroicos por-tentos de la fe en el capítulo 28; el 29, y los subsi-guientes, se han estado escribiendo desde entonceshasta hoy. El autor de la epístola a los Hebreos,desde su presente, hizo una síntesis retrospectivade los héroes de la fe que habían antecedido a sugeneración destacando los hechos maravillosos ylos sufrimientos a los que se expusieron a causa desu fe. Aquellos, con pequeños destellos de revela-ción, fueron fieles e hicieron proezas; se esperaque cada generación vaya más adelante que la an-terior; por lo cual es de suma importancia que lageneración de turno conozca la historia de los que

les antecedieron, a fin de superar su marca. Paraello cuentan con el legado, esto es, la herenciaacumulada de testimonios que hablan a favor delos pioneros. La generación de turno toma esa ri-queza, se vale de ella para correr su carrera, apro-vecha la experiencia de los antecesores; sabe que amayor revelación, mayor responsabilidad, porque aquien se le da más, más se le demanda.

A nosotros nos corresponde considerar la histo-ria de las generaciones providenciales que sostu-vieron la fe en el pasado. Saber del precio queellos pagaron será para nosotros un aliciente pode-roso cuando nos toque renunciar a alguna cosa quese oponga a la carrera de la fe. Tal precio puede sermuy alto, pero, con todo, es muy inferior a la glo-ria que espera a los vencedores de la fe, esto es,reinar con Cristo. Nada de este mundo ni del uni-verso entero puede tener un valor tal, como paraapartarnos de la meta y del premio que nos espera.Y comprender que aquellos que corrieron antesque nosotros lo hicieron en peores circunstancias,y que no hay condiciones ideales para correr, puesde todos ellos se da testimonio que fueron perse-guidos, menospreciados, vituperados; pasaron porcárceles, hambrunas, incomprensiones, necesida-des e innumerables pruebas.

“Por tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube detestigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos conpaciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autory consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, me-nospreciando el oprobio, y se sentó la diestra del trono de Dios. Considerad aAquel …” (Hb.12:1-3a)

Page 15: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

15aguas vivas TEMA DE PORTADA

Para descubrir la historia de las generacionesque fueron a la vanguardia de la fe, hay que saberque su historia no siempre está registrada en elcristianismo oficial, sino en aquella línea históricaque a menudo se torna subterránea, informal einvisible a los focos de atención general. Ningunode los profetas del capítulo 11 de Hebreos gozó depopularidad en su tiempo; ninguno de ellos fueaplaudido por sus contemporáneos, como tampocolo fueron los valdenses, los anabaptistas, losmoravos, los albigenses y muchos otros. Tampoconosotros esperamos felicitaciones del mundo reli-gioso que corre al margen de la voluntad de Dios;más bien buscamos la aprobación de Dios en todaslas cosas.

El río de DiosEl testimonio de Dios ha corrido a través de los

siglos de generación en generación sin parar; aveces visible al mundo pero la mayoría de las ve-ces oculto al mundo. Es como el río de Dios quecorría por el desierto bajo la arena junto al pueblode Israel. Cuando se detuvieron en Beer, invocarona Dios diciendo: “Sube, oh pozo”, y las aguas bro-taron desde el suelo. El río de Dios venía en laroca que los seguía; el río de Dios viajaba conellos y la roca era Cristo – dirá Pablo a losCorintios. Ese río no ha parado de fluir. Es a eserío que se refería el Señor Jesús cuando alzó la vozen la fiesta de los tabernáculos para decir: “Si al-guno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree enmí, como dice la Escritura, de su interior correránríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que ha-bían de recibir los que creyesen en él”(Jn.7:37-38).

Es una tremenda gracia de Dios encontrarse eneste río. En sus aguas han nadado los hombresprovidenciales que Dios se ha dispuesto en cadageneración. En este punto, nadie es original: lo quehoy sostenemos mediante la fe estuvo en otros.Cada generación parte con el legado de los que lesprecedieron. Desde ahí les tocará traspasar el bas-tón del testimonio a la generación siguiente. Unaforma de medir la eficacia de la obra en la queestamos empeñados es ver si la generación queviene detrás está en pie o ya la perdimos.

El río de Dios es cada vez más caudaloso, másprofundo e incontenible; algunos han querido po-nerle nombres o compuertas para gloriarse, comosi el río hubiese brotado desde ellos; pero el río esde Dios y brota de la roca que es Cristo y siempredesbordará y sobrepasará a los hombres. No sesujetará jamás a los diques denominacionales o delos sistemas, ni tampoco a los diques que preten-den estructurar los ‘generales’ de Dios (hombresde carácter autoritario que pretenden adueñarse dela obra de Dios).

Nadar en las aguas que gustaron los que nosantecedieron es ver lo que ellos vieron, vivir oexperimentar los cauces que el río de Dios lesabrió, leer sus escritos. ¡Qué privilegio es encon-trarse con libros que contienen tanta riqueza, como

si fuesen grano puro! ¡Qué delicioso es leer a losmás relevantes de las más recientes generaciones,tales como: C.H.Mackintosh, Andrew Murray,Austin-Sparks, Jessie Penn-Lewis, F.B. Meyer,Watchman Nee, Charles G. Trumbull, por nombrarsólo a algunos. Por otro lado ¡hay tanto libro hoyque se ha escrito con un mero afán comercial!¡Hay tantos autores que sólo buscan su propia glo-ria! ¡Tanta literatura con un lenguaje forzado ydistorsionado! ¡Tantos que ponen anteojeras a loshermanos instruyéndoles con literatura sesgada poruna doctrina particular! – lo cual es propio de unasecta. Dios nos conceda ojos ungidos para discer-nir espiritualmente a la generación que nos prece-dió, observar la obra que dejaron. Ellos pasaron,pero sus obras son nuestra nube de testigos, nues-tra herencia y nuestro legado. Nosotros tambiéncorramos, despojémonos de todo peso y del peca-do, con los ojos puestos en Jesús, considerando sussufrimientos.

El gozo puesto delante¿Cuál sería el gozo puesto delante del Señor

Jesús por el cual estuvo dispuesto a sufrir la cruzy menospreciar el oprobio? El sentarse a la diestradel Padre era algo que lo tuvo desde la eternidad,no sólo a su diestra sino en su seno desde siempre.Pero como el Hijo del Hombre, era algo nuevo, yaque para llegar allí tenía que ser perfeccionado porlas aflicciones para aprender la obediencia; esto es,hacer la voluntad de Dios como hombre, cosa quejamás ninguno de los hijos de los hombres habíalogrado. En esto estaba implícita la obra de llevarconsigo a sus muchos hermanos. Ambas cosasestaban enquistadas en el corazón de Jesús, puestoque el agrado del Padre estaba en tener a los mu-chos hijos con Jesús en su gloria. Delante de Jesúsestaba la iglesia exaltada con él en lugares celestia-les. Para ello debía sufrir la cruz, pero finalmentevería el fruto de la aflicción de su alma y quedaríasatisfecho. Jesús vio que la iglesia con él en lagloria era el gozo más inefable y glorioso que sepueda experimentar, por lo cual estuvo dispuesto apadecer el escarnio, la vergüenza, la burla, el opro-bio; lo cual fue más duro para él que para cual-quier hombre.

Si para el Hijo de Dios, el gozo puesto delantede él era llegar al trono, y sentarse a la diestra delPadre con los muchos hijos de Dios, ¿cuál será elgozo puesto delante de la iglesia? Este gozo ha deser tan importante que la iglesia, al igual que suSeñor, esté dispuesta a sufrir la cruz y el oprobiocon tal de conseguir el cumplimiento pleno de esegozo. Este gozo es reinar con Cristo. La salvaciónes una cosa, pero reinar con él es algo que se leofrece a los salvados. No estamos corriendo lacarrera para conseguir la salvación sino precisa-mente porque somos salvos es que estamos en lacarrera. La meta no es la vida eterna, sino el reino.Puesto que la vida eterna se le otorga por gracia ypor fe a los salvados en el inicio de la carrera, nopuede ser que la meta sea la vida eterna. Jesús

El testimonio deDios ha corridoa través de lossiglos de gene-ración en gene-ración sin pa-rar; a veces vi-sible al mundopero la mayoríade las vecesoculto al mun-do.

Page 16: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

16 aguas vivasTEMA DE PORTADA

dijo: “Ninguno que poniendo su mano en el aradomira hacia atrás, es apto para el reino de Dios”(Lc.9:62). Para ser salvo nadie es apto; en realidadtodos éramos ineptos y es que para ser salvos no sedemanda ninguna aptitud; es obvio que necesitába-mos salvación porque éramos del todo ineptos.Ahora que Dios “nos hizo aptos para participar dela herencia de los santos en luz”(Col.1:12), tene-mos por meta llegar a participar de la gloria denuestro Señor Jesucristo cuando venga a tomar losreinos del mundo. “... Y reinarán sobre la tierra”cantaron los 24 ancianos de Apocalipsis 5. Ese díaaún no ha llegado; mientras tanto nos humillamossabiendo que aún no es el día de nuestra corona-ción; pero “cuando Cristo, nuestra vida, se mani-fieste, entonces vosotros también seréis manifesta-dos con él en gloria” (Col.3:4)

Es legítimo tener este gozo puesto delante; esde gran ayuda para mantenernos vigentes en lacarrera. Que nada ni nadie nos quite esta gloria departicipar con Cristo en su reino. Las promesas delSeñor son un gran estímulo: “Al que venciere... ledaré autoridad sobre las naciones” (Ap.2:26). “Alque venciere, le daré que se siente conmigo en mitrono” (Ap.3:21).

Los vencedoresA la meta sólo llegan los vencedores. Esto se

puede apreciar en los mensajes que el Señor Jesúsle entrega las iglesias de Asia a través del apóstolJuan. Al final de cada mensaje aparece una prome-sa a los vencedores. Creemos que estas iglesiasson representativas del estado de las iglesias entodos los tiempos. De cada una de ellas habrá ven-cedores; eso implica que sólo un remanente tendráel mérito de “vencedores”. Siempre ha sido así enla historia de los héroes de la fe: unos pocos ven-cen por el resto. Así fue con Gedeón y los 300

CITAS ESCOGIDAS

“La mejor manera de mantener fuera alenemigo es mantener a Cristo en el cen-tro.” (A.W. Tozer).

“Los hombres son el método de Dios.La iglesia está procurando mejores mé-todos; ¡Dios está procurando mejores

hombres!” (E.M. Bounds).

“Mientras hablamos de la segunda venida de Cristo, la mitaddel mundo nunca ha escuchado de la primera.” (Oswald J.Smith).

“Antes los cálices eran de madera y los pastores de oro, hoytenemos cálices de oro y pastores de madera.” (Savonarola).

“Nuestro amor para con Dios es probado por esto: ¿lo busca-mos a Él, o buscamos sus dones?” (Madame Guyon).

“Dios no encuentra sitio en nosotros para derramar Su amor,porque estamos llenos de nosotros mismos.” (Agustín de Hipona).

“No permitas que tu felicidad dependa de algo que puedesperder, sino del Amado, el que permanece.” (C. S. Lewis).

“En el ejército de Dios no hay soldados desconocidos.” (Anóni-mo).

“El secreto de la victoria y el reposo es rendición y fe. Cristo ennosotros y Cristo sobre nosotros como Señor absoluto”.(Handley Moule).

“Cristo no envía a nadie vacío, a no ser a los que están muyllenos de sí mismos”. (Anónimo).

“Puedes intentar servir a Dios sin amarle, pero no puedes amara Dios sin servirle”. (Anónimo).

seleccionados de entre 32.000. No significa quesólo los 300 ganaron la batalla; la ganó Israel – eltriunfo le fue contado a todo Israel. Con los vence-dores del tiempo del fin pasará lo mismo; su victo-ria será representativa del triunfo de los cristianosde todos los tiempos, pues llegarán al último tramode la carrera con el bastón del testimonio que ha-brá pasado de generación en generación enriqueci-do, aumentado y vigorizado por las revelaciones yproezas de la fe que Dios fue realizando en cadatiempo. La gloria de vencer no es sólo de los quellegan al final de una carrera de postas, sino detodo el equipo que participó desde el comienzohasta el final. La llegada triunfal de unos pocosserá la victoria de toda la iglesia a través de lossiglos.

A cada generación le es impuesta la necesidadde recibir el legado de la generación anterior, a finde llegar más lejos con el testimonio. Poner los ojosen Jesús es ver qué dirección, qué proezas y qué mar-cas entregó el Señor de la carrera a los que corrieronantes que nosotros, puesto que él es el autor yconsumador de la fe. Poner los ojos en Jesús es sa-ber que él mismo es la carrera, la meta y el premio.Él es el autor de la carrera de la fe porque él le dio elinicio y es el consumador porque sacará con éxito sucarrera hasta el fin.

Puesto que al parecer seremos la última genera-ción en pie sobre la tierra (tal vez estemos en piecuando él venga), en tal caso, nos toca correr el últi-mo tramo. Digamos como los que nos precedieron:“Nosotros también, con tal de reinar con Cristo, pa-guemos el precio. Corramos como ellos, lleguemoslo más lejos posible, hagamos proezas en el nombrede nuestro Dios, levantemos bandera de victoria enel nombre de nuestro Rey Jesús, suframos penalida-des. Como ellos, nosotros también”.

***

La gloria devencer no essólo de los quellegan al finalde una carrerade postas, sinode todo el equi-po que partici-pó desde el co-mienzo hasta elfinal.

Page 17: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

17aguas vivas

generación

TEMA DE PORTADA

Tal vez seamos la última generación de esta era. ¿Cuál es nuestra responsabilidadcomo la generación más privilegiada, por la cantidad de revelación histórica acumula-da, y por la cercanía del retorno del Señor?

última

Eliseo Apablaza F.(Síntesis de un mensaje oral).

i observamos la historia de la iglesia, nosdamos cuenta de que es una historia li-neal y no cíclica. Esto es así porque elpropósito de Dios no contempla círculos,

sino una dirección clara y sostenida desde un prin-cipio y hasta un fin.

El plan de Dios abarca desde la eternidad pasa-da y hasta la eternidad futura, teniendo un hiloconductor, que es el logro de un propósito: queJesucristo tenga en todo la preeminencia. Esta es lameta de la historia. Como dice en Colosenses, queCristo sea el todo en todos. Cristo, su exaltación ysu gloria es el centro de toda la atención de Dios yes la suma y el fin de toda la historia.

Las generacionesLos estudiosos de la Biblia coinciden en deli-

mitar grandes períodos en la historia de la fe – lasdispensaciones – y también en reconocer ciertasetapas más pequeñas dentro de esasdispensaciones – por ejemplo, las etapas en la his-toria de la iglesia representados en las iglesias deApocalipsis. Sin embargo, en esta oportunidad nohablaremos ni de unas ni de otras, sino de unosperíodos más pequeños – las generaciones.

¿Qué es una generación? Una generación estáconstituida por los hombres y mujeres que coinci-den en el tiempo y que, por lo tanto, compartenexperiencias –y responsabilidades– comunes.

Cada generación tiene una misión. Para cadageneración hay un propósito según la economía deDios, y ese propósito específico es ayudar a que elpropósito eterno, el gran propósito de Dios, avanceen el tramo que corresponde hasta su consecución

final. Cada generación tiene la responsabilidadespecífica de recuperar algún aspecto de la revela-ción de Dios, para que al fin de los tiempos, en laconsumación de todas las cosas, la iglesia esté encondiciones de participar en forma decisiva en loseventos finales.

Dos clases de generaciones La responsabilidad de cada generación es in-

mensa. Ella no puede repetir lo que hizo la genera-ción anterior. Si así fuera, bastaría con tomar laexperiencia de la generación anterior y replicarla.Sin embargo, no es así, pues implica poner el oídomuy atento para saber qué es lo que Dios tiene quedecirle a esa generación en particular, cuál es lavisión para ese tiempo en particular. No todas lasgeneraciones han colaborado con el desarrollo delpropósito de Dios. Hay generaciones de fe y haygeneraciones de incredulidad.

Observamos en la historia grandes cambios deuna generación a otra. En la Biblia, hallamos porejemplo que la generación de Josué fue una gene-ración de fe, no así la siguiente (Jueces 2:10-13).Ésta generación cayó en una tremenda apostasía.Asimismo, la generación de David fue una genera-ción fiel, pero no así las generaciones siguientes.Tras el pecado de Salomón, Roboam cosechó ladivisión del reino, y de nuevo la apostasía. (1 Re-yes 12).

En la historia de la iglesia ocurre algo similar.Los primeros testimonios de la iglesia posbíblicaen el siglo II son muy pálidos comparados con losdel siglo I. Más tarde, Lutero formó parte de unageneración de fe, pero la generación siguiente no

tal vezla

Page 18: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

18 aguas vivasTEMA DE PORTADA

Cada genera-ción debe tenersu propia fe, yrecorrer su pro-pio camino.Cada genera-ción debe reci-bir una visiónespecífica delpropósito deDios para ella.

heredó esa fe. Ellos conservaron los escritos deLutero, pero al Dios de Lutero no conocieron. Yano les interesaba conocer la voluntad de Dios enparticular para ellos, sino sólo interpretar correcta-mente lo que escribió Lutero.

Dios está limitado por el hombreAsí pues, cada generación que no conoce a

Dios no puede colaborar con su propósito, aunquehaya vivido a continuación de una generación fiel.Aún más, en las generaciones de distorsión el pro-pósito de Dios sufre un menoscabo y tendrá Diosque esperar a que venga otra generación de hom-bres que sí estén dispuestos a colaborar con Élpara que su propósito avance.

Ahora bien, ¿por qué la gloria de Dios se sueleperder tan rápidamente de una generación a otra?¿Acaso Dios no podría hacerla perdurar? Lo quesucede es que Dios actúa sobre la tierra limitadopor el hombre, y, en lo que respecta a las genera-ciones, por la duración de la vida de los hombres.¿Cuánto vive un hombre? A lo más 70 u 80 años;pero la vida útil del hombre no pasa de los cuaren-ta o cincuenta años. Así que Dios está limitado porlos años de vida de los hombres, que son tambiénlos años de vida de una generación.

La fe que alcanza una generación no sigue lasleyes de la herencia natural. Cada generación debetener su propia fe, y recorrer su propio camino.Cada persona debe experimentar un encuentropersonal con Dios y cada generación debe recibiruna visión específica del propósito de Dios paraella. A cada generación deben abrírsele los cielos ysus ojos tienen que ser limpiados para poder ver loque Dios quiere. Si así no fuere, el testimonio deuna generación fiel se puede transformar en unremedo inútil. El río de Dios llega a ser un estan-que en sus corazones. Todo se vuelve un moldevacío, un odre sin vino, una sombra sin sustancia,una mera tradición humana. Cosas todas que no lesirven a Dios.

¿Qué clase de generación somos?Ahora bien, el asunto al cual queremos llegar

es: ¿Qué hay de nosotros? ¿Qué tipo de generaciónsomos? Hay generaciones y generaciones. Asícomo hay generaciones fieles, en que algún acentodel propósito de Dios o de la revelación de Jesu-cristo es agregado, también hay otras generacionesque son de deterioro. Una generación fiel es aque-lla que tiene visión. Una de deterioro es aquellaque no tiene visión. Una generación fiel es aquellaque conoce a Dios de verdad. Una de deterioroconoce a Dios sólo de oídas.

Nosotros, que vivimos en el vértice del sigloXX y XXI, ¿somos una generación que conoce alSeñor, que ha visto sus obras –mejor, que conocesus caminos–, o somos una generación contumazy rebelde “que no dispuso su corazón, ni fue fielpara con Dios su Espíritu”? (Salmo 68:8). ¿O unageneración mentirosa que se enfervoriza con losídolos debajo de todo árbol frondoso? (Isaías 57:4-

5) ¿O una generación indiferente a la flauta y laendecha, que tiene sus sentidos adormecidos,como la generación del Señor Jesús? (Mateo11:16-17).

La generación del Señor Jesús fue tan deprava-da, que no supo ver la gloria que se escondía trasel velo de ese Hombre galileo. Vieron sólo al hijode José, el carpintero. Porque los ojos inmundos yperversos no pueden ver más allá del primer aspec-to que ofrecen las cosas. Esa generación “mala yadúltera” pedía señales y milagros, “pero señal nole será dada – les dijo el Señor – sino la señal delprofeta Jonás”. ¿Quién pudo ver esa señal? Estabavelada para ellos. Ellos podían mirar las cosas ex-ternas, el aspecto del cielo – cuando iba a llover ocuando iba a hacer calor – pero las señales de lostiempos, esto es, al Cristo que estaba delante desus ojos, no pudieron reconocer.

La palabra griega que se traduce como “señal”puede también traducirse como “signo”. Y un sig-no es aquello aparentemente insignificante quetiene más allá otro significado. Así es en este caso.La generación mala y adúltera podía ver las cosascomo “aspecto” (como algo externo), pero nocomo “signo” o “señal” (con un significado espiri-tual). Y cuando el Señor les mostró la señal delprofeta Jonás, es decir, su muerte, su permanenciaen el interior de la tierra y su resurrección, ellos nola pudieron ver. Ellos sabían distinguir el aspectodel cielo, pero no las señales de los tiempos.

¿Qué tipo de generación somos nosotros? Nopodemos adoptar una postura determinista y decir:“Oh, nosotros estuvimos en una posición mejor yahora miren cómo estamos” ¡Eso sería fatalismo!Ni podemos decir tampoco: “Si tuviéramos esto oaquello, entonces podremos llegar a ser una gene-ración que colabore con Dios” ¡Eso sería incredu-lidad!

No nos preguntemos: “¿Qué generación esta-mos destinados a ser?” (Como si fuésemos un ju-guete en manos de un destino inexorable), sinomás bien, “¿qué generación estamos dispuestos aser?”

Porque nosotros seremos la generación queestemos dispuestos a ser. Delante de nosotros tene-mos dos caminos: el vivir para Dios o el vivir paranosotros. Vivir para Dios es servir al propósito deDios para esta generación. Vivir para nosotrossignificaría quedar solos, marchitos; significaría lamás grande frustración. Significaría también lamás grande pérdida para Dios, quien ha invertidoen nosotros tanto tiempo y paciencia.

Si fracasamos hoy, a nadie podremos echarle laculpa. No podremos culpar a quienes nos precedie-ron por habernos dado un mal ejemplo. ¡No! Por-que nosotros mismos conocemos a Dios y somosresponsables de lo que habremos de ser. El granproblema, la gran causa de nuestro fracaso, somosnosotros mismos. El principal enemigo de la obrade Dios es mi propio corazón no arrepentido, es elemperador que tiene su trono en mi corazón. Estees mi propio Papa –decía Lutero –, el “yo”. No

Page 19: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

19aguas vivas TEMA DE PORTADA

pensemos que hubo circunstancias más favorablesen el pasado para servir a Dios. No dependemos delas circunstancias, porque “a los que aman a Dios,todas las cosas les ayudan a bien” (Rom. 8:28), y“tiempo y ocasión acontecen a todos” (Ecl.9:11b). No es mi circunstancia la que necesita uncambio, sino yo. Tenemos que despojar al “yo” desu trono, desconocer sus derechos, hacer violenciaal tirano que todo lo reclama para sí. Esta es unaobra que ni Dios ni nadie hará por mí.

Somos, tal vez, la última generación de estaera. La higuera –Israel– ya está retoñando. El vera-no está cerca. La generación que está siendo testi-go de esto puede ser la última (Mateo 24:32-34).

Tenemos las condiciones inmejorablesSi miramos hacia atrás en la historia vemos el

legado de quienes nos precedieron. Cuánta expe-riencia acumulada, qué abundancia de revelación,cuántas lecciones; pero también cuántos errores,cuántos énfasis desmesurados, cuánta distorsión.Por la experiencia acumulada y por la cercanía dela Venida del Señor, nuestra posición es única yprivilegiada.

Al mirar atrás vemos tiempos de distorsión,grandes períodos en que los hijos de Dios tuvieronel odre sin el vino o tuvieron el vino sin el odre.Hoy, estamos en condiciones inmejorables. Tene-mos el odre y tenemos también el vino. No esta-mos en la esterilidad de un conocimiento mera-mente doctrinal, ni exponiendo al derroche el vinodel Espíritu. Tenemos el odre nuevo (la iglesiacomo cuerpo), que puede contener eficazmente lagloria de la revelación de Dios por el Espíritu.Siendo así, no habrá pérdida. (Mateo 9:17).

Estamos en una inmejorable posición y oportu-nidad para servir a Dios. Conocemos a Cristo;conocemos su iglesia: tenemos ilimitadas posibili-dades de aprendizaje y de servicio. Todo el caudalde revelación que nos viene del pasado puede sernuestro por el Espíritu Santo. Pero si, en cambio,nuestro corazón es obstinado y vanaglorioso, sólopercibiremos los moldes, los métodos y los siste-mas, y no recibiremos la abundancia de vida queviene de atrás.

Todo lo que hemos visto y vivido hasta ahoraes nada menos que una preparación para todas lascosas que hemos señalado. Dios está buscandogente con la cual realizar todas estas cosas glorio-sas, y con la cual reinar. Dios está sometiendo a lossuyos a un fuerte entrenamiento para hacerlos par-tícipes de estos eventos. El entrenamiento es aveces duro, y algunos han sido reprobados. Loprimero que se ha de aprender es a negarse a símismo. Porque cuando uno se ama a sí mismo, nopuede ser aprobado por Dios. Lo segundo, esaprender a vivir la vida del cuerpo, con todas suslecciones y restricciones. Si no se aprende esto quees básico, no hay posibilidad. Los que han sidoreprobados han demostrado que no estuvierondispuestos a aceptarlo.

Pensemos en la preparación de un príncipe que

está destinado a un trono terrenal. Tiene los mejo-res maestros, es sometido a las más ricas experien-cias, su preparación es rigurosa, porque un rey nopuede fallar. ¿Puede ser menos la preparaciónnuestra, la que el Espíritu Santo realiza cada día?¿Qué está haciendo el Espíritu Santo, sino produ-cir en nosotros un carácter de príncipes y gober-nantes, el carácter del Rey de reyes para el tiempoque viene? Estos largos años de sufrimientos y depreparación no han sido en vano. ¿Acaso la amo-rosa disciplina que se ejerce en la iglesia no persi-gue este mismo fin? ¿No es una preparación atentade Dios para que podamos participar de su gloriamañana?

Este es nuestro tramoCon todo, aunque fuéremos la última genera-

ción, para Dios y su propósito eterno somos sólouna generación más. Si fracasamos, será nuestrofracaso, no el de Dios. Si fracasamos, Él todavíatiene más opciones, tal vez otra generación, u otroshombres entre los cuales puede hallar lo que bus-ca. En cambio, para nosotros este es un asunto devida o muerte. Tenemos una sola vida. (Heb.9:27).En nuestra fragilidad y pequeñez, nos correspondeun solo tramo en esta gran posta de Dios. ParaDios, este es tan sólo un tramo (aunque bien puedeser el último), pero para nosotros es toda nuestracarrera. Así que, ¡adelante, cristianos, este es vues-tro día! ¡Mientras alentéis vida, este es el día devuestra carrera!

Queda poco, muy poco. No hay tiempo queperder. La noche está avanzada, se acerca el día.Estamos concluyendo ya la cuarta vigilia de lanoche. La travesía se torna a veces fatigosa, elviento nos es contrario. El agua amenaza conanegarnos. Pero, ¡mira!, el Señor se acerca, y nosdice: “No temáis, yo soy” (Mr. 6:46-51)

¿Seguiremos lamentando derrotas pasadas? ¿Opensando que Dios nos ha desechado? La mujer deManoa le dijo a su marido: “Si el Señor nos hubie-ra querido desechar, no nos hubiera mostradotodas estas cosas ni ahora nos estaría hablandoesto” (Juec.13:22-23). Dios tampoco nos habríamostrado su gloria a nosotros. No nos estaría di-ciendo que tiene un propósito con el cual nosotrospodemos colaborar. Porque Dios no se ríe de sushijos. No nos alienta para dejarnos luego tendidosen el camino.

Tenemos que hacer preparativos. Tenemos queestablecer un nuevo orden en las prioridades denuestra vida. Limpiémonos de todas las cosas quese oponen a Cristo, para que Él pueda expresar, através de nosotros, su gloria, y para que a través denosotros se avance un poco más en la culminaciónde su propósito eterno, en lo que respecta a estageneración.

Somos, tal vez, la última generación. Que elSeñor nos abra los ojos para tomar conciencia delo que esto significa. Amén.

***

Todo el caudalde revelaciónque nos vienedel pasado pue-de ser nuestropor el EspírituSanto. Pero sinuestro corazónes obstinado yvanaglorioso,sólo percibire-mos los mol-des, los méto-dos y los siste-mas, y no reci-biremos laabundancia devida que vienede atrás.

Page 20: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

20 aguas vivasMISCELÁNEA

perfilesAl revés

Se cuenta que luego de finalizar una campaña, el evangelista D.L.Moody envió un cable a su esposa diciendo: “Hoy, tres personas ymedia recibieron al Señor”. Al regresar a su casa la esposa le dijo:

— ¿Así que tres adultos y un niño se convirtieron a Cristo?— No – replicó Moody – fueron tres niños y un adulto.Es que cuando se convierte un niño, tiene toda su vida para com-

partir con otros su nueva vida en Cristo, en cambio, cuando se con-vierte un adulto, la mitad de su vida ya ha quedado atrás.

Citado por Luis Palau, en Latinoamérica y las misiones mundiales.

El que busca, hallaUn misionero muy conocido fue invitado a cenar junto con un gober-

nador de la India, en casa de un señor importante. Durante la conver-sación, el gobernador dijo:

— Usted pretende haber visto centenas de convertidos en la India.Yo llevo viviendo aquí muchos años y ¡nunca he visto ni uno!

El misionero le preguntó:— Señor, ¿ha visto usted algún tigre en la India?— Seguro, fui a cazar y yo mismo maté a muchos.— Pues bien – replicó el misionero – yo nunca he visto un tigre en la

India; usted vio lo que buscaba, y yo también.Revista “Creced”

EpitafioEn el otoño de 1753, Juan Wesley cayó gravemente enfermo. Todo

parecía indicar su muerte próxima. Entonces Wesley mismo se prepa-ró el epitafio “para evitar – decía él – viles panegíricos”. El epitafiodecía así: “Aquí yace el cuerpo de Juan Wesley, tizón arrebatado delfuego: murió de consunción a los 51 años de edad sin dejar a sumuerte, después de pagadas sus cuentas, ni diez libras; su oraciónera: Dios, ten misericordia de mí, siervo inútil.”

Mateo Lelièvre: Juan Wesley, su vida y obra

La palabra precisaUn misionero en Africa se encontró con una gran dificultad mientras

trataba de traducir el Evangelio de Juan al dialecto local. Enfrentabael problema de encontrar una palabra para comunicar la idea de creer.Se esforzaba mucho, pero siempre tenía que dejar un espacio enblanco cuando llegaba a esa palabra en particular.

Entonces un día, alguien llegó al campamento corriendo y jadeandodespués de haber recorrido una gran distancia con un mensaje muyimportante. Cuando hubo contado su historia abruptamente, se des-plomó completamente exhausto en una hamaca cercana. Dijo en vozbaja una breve frase que parecía expresar tanto su gran cansanciocomo su contentamiento por encontrar tan exquisito lugar para relajar-se.

El misionero, que nunca antes había escuchado esas palabras,preguntó a un espectador qué había dicho el que llegó corriendo.

—Oh, lo que está diciendo es: “He llegado al final de mis fuerzas,por tanto, echo todo mi peso aquí.”

El misionero exclamó:—¡Alabado sea Dios! Esa es la misma expresión que necesito para

la palabra creer.Y así pudo terminar su traducción.

H.G.B. en Nuestro Pan Diario, Vol. V.

Estar crucificadoSegún un relato del fallecido A. W. Tozer, un recién convertido se

aproximó a un cristiano más antiguo y le hizo la siguiente pregunta:— ¿Qué significa estar crucificado?— Estar crucificado implica tres cosas. Primero, el crucificado tiene

los ojos siempre vueltos para una sola dirección; segundo, él no pue-de volver atrás; tercero, él no tiene más planes propios.

“Fé para Hoje”, Nº 13, 2001.

Erudito piadosoJohann A. Bengel (1687-1751) fue un gran estudioso de la Biblia,

bien conocido en la Historia. Con su fe firme en la plena inspiración yabsoluta autoridad de la Biblia, él se sentía perplejo ante el grannúmero de variaciones en el texto del Nuevo Testamento, y con suhumildad y perseverancia características, comenzó inmediatamente ainvestigar el asunto. Bengel consiguió todas las ediciones,manuscritos y traducciones a su alcance; en 1734, veintiún añosdespués de haber sido nombrado profesor del Seminario deDenkendorf, él publicó su texto del Nuevo Testamento y un‘Apparatus Criticus’, que se convirtió en el punto de partida de toda lacrítica textual moderna del Nuevo Testamento. Esta obra crítica fueseguida por una exegética, ‘Gnomon Novi Testamenti’, que fue mástarde traducida al alemán e inglés y que permanece hasta hoy comoun tesoro de interpretación.

Impresionado por su extraordinaria erudición y vida espiritual, unode sus contemporáneos decidió ocultarse en su sala de estudios paradescubrir cuál era el secreto de su espiritualidad. Lo que estehuésped no convidado vio y oyó fue cómo él oraba ardiente eincesantemente. Aquel estudioso de la Biblia, lleno de la vidaespiritual, después de haber escrito por algún tiempo, se levantaba yoraba: “¡Oh, Señor Jesús! ¡Entre mí y ti todavía existe íntimacomunión.”

Revista “À Maturidade”, Nº 2, 1978.

Es más fácil caerEn una ocasión, una joven se encontró con C.H. Spurgeon y le

preguntó si podía ser amiga de un joven incrédulo. Le dijo que supropósito era llevarlo a Cristo y hacerse su novia muy luego.Spurgeon entonces pidió a la joven que se subiese a una mesa alta.Spurgeon, ya bien avanzado en edad, dijo a la joven que tomara sumano e hiciera lo mejor que pudiese para alzarlo encima de la mesa.Ella intentó, pero naturalmente no pudo hacerlo. Entonces Spurgeoninvirtió la situación y le dijo que la tiraría para abajo. Con apenas untirón, ella cayó. Spurgeon entonces dijo: “Es fácil ser tirados paraabajo, pero difícil ser tirados para arriba”. Así la pregunta de aquellajoven hermana quedó resuelta.

Citada por W. Nee, en “La amistad”

El mensaje póstumoWatchman Nee murió a los 69 años de edad, el 30 de mayo de

1972, tras veinte años de confinamiento en cárceles y haciendas detrabajos forzados en China. Durante su confinamiento no tuvo accesoa ninguna Biblia, ni podía escribir ni recibir cartas con contenido reli-gioso. Sus últimas breves notas enviadas a algunos familiares nohacen ninguna referencia a Dios o al Señor Jesucristo. Sin embargo,cuando murió, su carcelero descubrió debajo de la almohada de sucamarote un pedazo de papel que tenía varias líneas con palabrasgrandes, escritas con mano trémula. Aquel papel decía: “Cristo es elHijo de Dios que murió para la redención de los pecadores y resucitótres días después. Esa es la mayor verdad del universo. Muero porcausa de mi fe en Cristo. Watchman Nee.” Sus últimas notas a susfamiliares fueron firmadas por su nombre íntimo de infancia Shu-tsu,pero ésta postrera declaración, tal vez la única escrita en sus veinteaños de encierro en que declara la gloria de su fe no negada, llevabael nombre con que sirvió al Señor y con el que habría de ser conoci-do en el mundo entero.

Adaptado de Biografía de Watchman Nee, por Witness Lee

Page 21: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

21aguas vivas LEGADO

del Espíritucorriente

i nos remontamos a los movimientos deDios a lo largo de la historia del hombre,podemos ver el fluir de la actividad divi-na transmitiéndose de generación en ge-

neración; y podemos verlo en esta generación —todavía ininterrumpido, todavía regularmente pro-gresivo.

Tiempo atrás, quedé profundamente impresiona-do meditando sobre unos escritos de Wesley. Dioshizo cosas tan poderosas por su intermedio que seduda si los efectos de su obra podrían ser igualadoshoy; pero el hecho es que Dios ha seguido avanzan-do desde los días de Wesley. El fluir del Espíritu vasiempre adelante. La corriente del Espíritu es siem-pre más profunda.

Aquí hay un principio digno de ser notado. Siusted en su día y su generación responde totalmen-te a los requerimientos de Dios, usted encontraráque es llevado hacia adelante en la corriente de Supropósito. En cambio, si usted se aferra al pasado,queriendo que Dios haga como Él hizo antes; de-seando que Él repita algo que en su estimación esde alto valor espiritual, usted se encontrará fuerade la corriente de sus movimientos. Ser un Luteroen el siglo XVI era una cosa buena, pero ser unLutero en el siglo XX no supliría la necesidad. Serun Wesley era de gran valor para el Señor en el si-glo XVIII, pero ello sería inadecuado en el sigloXX. Cada instrumento que Dios levanta tiene unafunción específica, y su contribución a la Iglesiasuple la necesidad de cada hora; pero no serviríapara edificarla en una etapa posterior de su desa-rrollo.

Lamentablemente, muchas personas no logranreconocer el fluir progresivo de la corriente viva alo largo de la historia de la Iglesia. Nosotros que es-tamos sobre la tierra hoy día hemos heredado laenorme riqueza de los santos que ya han hecho sucontribución. Nosotros no podemos sobrestimar lagrandeza de nuestra herencia, y tampoco podemosser suficientemente agradecidos a Dios por ello.Pero si hoy usted intenta ser un Lutero o un Wesley,usted será un fracaso total. Usted quedará corto en

el propósito de Dios para esta generación, porqueestará volviendo hacia atrás, mientras la corrientedel Espíritu fluye regularmente hacia adelante. Latendencia entera de la Biblia, de Génesis a Apoca-lipsis, es una tendencia a ir hacia adelante. De prin-cipio a fin, el registro bíblico es un desdoblamientoprogresivo de los movimientos de Dios.

De Hechos a HebreosUna vez un hermano me preguntó sobre el sig-

nificado de la epístola a los Hebreos. Le preguntési él había notado alguna diferencia significativaentre aquel libro y el libro de los Hechos. Aun enel libro de los Hechos se advierte claramente la na-turaleza progresiva de la actividad divina; pero larevelación a través de la epístola a los Hebreosmuestra un mayor avance todavía en el desdobla-miento del propósito de Dios. El avance espiritualen Hechos es evidente, según el programa mostra-do claramente en el primer capítulo: «En Jerusa-lén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo últimode la tierra.» De Judea la corriente fluyó hastaSamaria; pero habiendo alcanzado Samaria ella nose detuvo allí; sino que fluyó hasta Roma, y tuvocomo destino lo último de la tierra.

Aunque nosotros podamos mirar el avance re-gular del propósito divino a lo largo del libro deHechos, todavía hacia el final del libro encontra-mos que el concepto “cristiano” no ha sido com-pletamente clarificado. Sin embargo, cuando lee-mos la epístola a los Hebreos vemos que el cristia-no ya ha salido de una etapa de transición y su per-sonalidad ha llegado a ser totalmente definida. Enlos Hechos, él es tanto judío como cristiano. Él tie-ne comunión con otros cristianos fuera del templo;sin embargo, todavía visita el templo. Pero cuandovenimos al libro de Hebreos encontramos que élno es más judío y cristiano; es simplemente cristia-no. Y él nunca más se encuentra con sus amigoscristianos a veces dentro del templo, y a veces fue-ra del templo. Lo que él podía hacer cuando el Es-píritu recién había sido derramado en Jerusalén, nolo puede hacer ahora que la corriente del Espíritu

Watchman Nee(1903-1972)

la

Al estudiar la historia de la iglesia podemos observar las huellas de Dios. Su caminarha sido incesante, su propósito ha avanzado, y constantemente está escogiendo per-sonas con quienes avanzar en ese propósito.

Page 22: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

22 aguas vivasLEGADO

está yendo hacia adelante a los finales de la tierra.En Hebreos encontramos que el cristiano ha aban-donado el templo por «el verdadero tabernáculoque levantó el Señor, y no el hombre», y ha aban-donado los muchos sacrificios por la “única ofren-da» por la cual el creyente es hecho “perfecto parasiempre.»

En Hechos leemos que Pablo entró en el templopara hacer un voto. No concluyamos tan rápidamen-te que él estuvo equivocado. No nos atrevemos aaplicar el último estándar de Dios para sus santos encada época, porque el movimiento de Dios hacia suúltima meta es progresivo. Lo que se requiere de us-ted y de mí hoy no es que logremos ese últimoestándar, sino que nuestra medida corresponda a laetapa alcanzada en el desarrollo del propósito divi-no en el tiempo presente. Usted y yo debemos serhallados en el punto en que la corriente del Espírituha llegado en el día de hoy –no la etapa alcanzadaen alguna fecha del pasado, ni la etapa que alcanza-rá en alguna fecha futura. Estuvo bien para Pablopurificarse en el templo conforme al Antiguo Pacto;pero lo que estuvo bien en ese tiempo habría estadoerrado más tarde. Por lo tanto, el escritor de He-breos explica que la realización del propósito deDios en establecer el Nuevo Pacto consistió en laabolición completa del antiguo orden, al cual loscreyentes judíos se aferraron tan tenazmente. Unavez que el Antiguo Pacto hubo servido al propósitode Dios tuvo que ceder su lugar al Nuevo.

El libro de los Hechos es progresivo de princi-pio a fin, y cuando el registro se cierra con el capí-tulo 28, el movimiento del Espíritu no cesa; la co-rriente sigue fluyendo a través de las generacionesvenideras, y todo el tiempo Dios continúa levan-tando instrumentos que harán la contribución espe-cífica necesaria en la etapa específica que el Espí-ritu ha alcanzado en Su poderoso movimiento ha-cia adelante.

Dios persigue un propósitoEn el Antiguo Testamento vemos que en cual-

quier lugar donde la bondad de Dios se posó allíno hubo esterilidad. Dios tuvo el propósito de te-ner una «simiente»; para que en ninguna genera-ción él sufriera la ruptura de la línea genealó-gica,porque para asegurar Su propósito necesitó la per-petuación de aquella simiente. Por esta razón de-pendemos de nuestros antepasados espirituales.Pero no sólo tenemos que aceptar la herencia quenos viene de ellos; tenemos la solemne responsabi-lidad de pasarla a otros. La pregunta hoy no es:¿Fluirá la corriente del Espíritu en nuestra genera-ción?, sino: ¿Estaremos usted y yo en esa corrien-te? Si no logramos cumplir los requerimientos delpropósito de Dios para este tiempo presente, Él en-contrará otros que suplan Su necesidad. ¿Dóndeestá el sello del Espíritu hoy? ¿Dónde está la auto-ridad espiritual hoy? ¿Está con nosotros o no?Sólo si tenemos la autoridad del Espíritu seremoshallados en esa corriente que avanza hacia adelan-te.

Explorando la historia mundial y la historia dela Iglesia vemos los caminos de Dios mientras Élpersigue Su propósito. Él levantó un Lutero cuan-do necesitó un Lutero, y aunque Lutero tuviera susdebilidades, él era el instrumento adecuado a la ne-cesidad divina de esa época. Usted y yo debemosmucho a Dios por Martín Lutero, ya que somos elfruto de sus labores. Él en su día ofreció un cami-no libre a la corriente del Espíritu para que siguierasu curso; y nosotros, que hemos sido alcanzadospor la misma corriente, tenemos el privilegio deofrecernos a Dios para que Él pueda avanzar unpoco más allá en Su curso. Si Él puede abrirsepaso a través de estas vidas, eso será nuestra ma-yor gloria. Si no, Él dará la vuelta en otra direc-ción; pero eso significará una pérdida trágica paranosotros. La corriente espiritual puede estar co-rriendo por este curso actualmente, pero dóndefluirá en diez años más, no podemos saber. Debe-mos aceptar que sea así. Cada día el Espíritu evitaa uno y usa a otro. Si le resistimos hoy, Él tendráque abrirse paso en otro lugar. ¡Qué solemne pen-samiento!

Desafiados por nuestra herenciaDesde los siglos de oscurantismo, cuando la luz

que alumbró la iglesia temprana había sido en granparte apagada, el Espíritu Santo ha estado activorecuperando verdades perdidas por medio de uninstrumento u otro, para que ahora el cuerpo enterode verdad esté recuperado en la Iglesia. Hace másde un siglo la necesidad de un ministerio corporati-vo llamó la atención de los santos, y más reciente-mente, esta verdad ha sido enormemente acentua-da; pero ha habido una carencia triste en la realiza-ción práctica de lo que sabemos. La recuperaciónde la doctrina acerca del ministerio corporativo esuna cosa; la realidad del ministerio corporativo ex-presado a través de la vida de la iglesia es otra cosamuy diferente. Como es nuestro privilegio el serlos herederos de la riqueza enorme que ha sido re-cuperada a lo largo de los últimos siglos, nosotrosque vivimos en este siglo XX debemos asumir laresponsabilidad a la que nos desafía una herenciatan rica. Toda esta riqueza ha sido puesta a nuestradisposición no simplemente para nuestro enrique-cimiento, sino para el adelanto del evangelio.Nuestra herencia del cuerpo entero de verdad nosdesafía a un ministerio corporativo que abrazarácada aspecto de la verdad.

Cuando un amplio ministerio corporativo hayasido asegurado, creemos que proporcionará unacondición para la Venida del Señor. No es sólo laproclamación de la verdad entera que se necesitahoy; es la liberación de la realidad espiritual que laverdad expresa, y que sólo puede ser realizadocuando aceptamos ser llevados adelante por la co-rriente poderosa del Espíritu.

***

(Tomado de “Twelve Baskets Full”,en http://www.cdlf.org/ftp. Trad. Andrew Webb)

La preguntahoy no es:¿Fluirá la co-rriente del Espí-ritu en nuestrageneración?,sino: ¿Estare-mos usted y yoen esa corrien-te?

Page 23: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

23aguas vivas LEGADO

T. Austin-Sparks(1889-1971)

Las particulares condiciones de un tiempo finaln estos días, estamos siendo conducidosa tomar nota de que vivimos en un tiem-po final, y de que Dios hace una obracaracterística en un tiempo como éste.

Las cosas se vuelven muy difíciles y extrañas. To-das ellas parecen arrojadas hacia un estado de tur-bación, conflicto, agitación e intensa presión. Lasgrandes contradicciones que enfrenta el universoimpactan de una manera muy intensa y terriblesobre lo que es de Dios y sobre aquellos que lepertenecen a él. Interiormente, sentimos que elcamino se hace cada vez más estrecho. “Frustra-ción” es la palabra que parece prevalecer, mientrasque todo a nuestro alrededor se encuentra en unasituación desde donde emergen serias y grandesinterrogantes en cuanto al futuro. Entonces, sevuelve más persistente en la experiencia del verda-dero pueblo de Dios el deseo de claudicar y aban-donarlo todo. Las formas en que esto opera sonnumerosas, pero el efecto total es la paralización yel abandono del mandato de Dios, hasta llegar a unestancamiento total. En consecuencia, es esto loque gobernará nuestro estudio en esta ocasión: Elque estamos en un tiempo final, y que, en el tiem-po del fin la obra de Dios asume una forma parti-cular y una naturaleza especial. Obviamente, sevuelve de una necesidad e importancia supremaque el pueblo del Señor conozca el tiempo en elcual vive, los sucesos que acontecen en él, y lo

que Dios puede hacer en tal tiempo.Ahora, este asunto del tiempo final y la obra de

Dios en él, es traído a luz muy clara y plenamentepor Simeón y Ana. No existe duda de que ellosrepresentan primeramente un tiempo final – elfinal de un tiempo dispensacional y también elfinal del tiempo con respecto a su propia edad,porque ambos se encontraban avanzados en años.Y, en consecuencia, también ellos representan elservicio a Dios en un tiempo similar. Simeón usóestas palabras sobre sí mismo: “Ahora, Señor des-pides a tu siervo en paz, de acuerdo a tu palabra”.“Tu siervo”. Ana se encontraba continuamente enel templo, sin cesar, en ayunos y súplicas de nochey de día; una profetisa ocupada de este modo en lacasa de Dios. Y si esto no es un cuadro de servicio,¿qué es, entonces?

La plenitud de la edad madura vivida con lafrescura de la vida nueva

En primer lugar, voy a considerar el factoredad. Permítanme decir de una vez que, aunquevoy a hablar sobre la vejez, mi mensaje estará diri-gido principalmente a la gente joven. Si esto nosuena muy bondadoso o justo para el resto, déjen-me planteárselos de esta forma: la edad no es sóloun asunto de años. Usted puede ser todavía jovenen cuanto a sus años, pero estar muy adelante deellos, o puede ser un viejo en relación a sus años yestar muy atrás de ellos. Este es un asunto espiri-

en el tiempo del fin

obrala

Lectura: Lucas 2:25-38

Simeón y el niño Jesús en brazos: una alegoría de dos dispensaciones que se unen,una que termina y otra que comienza. Una tiene las sombras, la otra, la realidad. Heaquí también una metáfora del fin de esta era.

de Dios

Page 24: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

24 aguas vivasLEGADO

tual. Pues, el factor de la edad, representado aquípor Simeón y Ana, corresponde a la palabra deHebreos 8:13. “y lo que se da por viejo y se enve-jece, está próximo a desaparecer”; y nuevamenteen 1 Co. 10:11 “A quienes han alcanzado los finesde los siglos”. Esto nos hace muy viejos, ¿No esasí?

Ahora, ¿cuál es la figura que está ante noso-tros? Tenemos a un hombre anciano con un niñoen sus brazos, ligando de una sola vez un final yun comienzo; un fin que está siendo entregado aun inicio, y un inicio que captura toda la plenitudrepresentada por lo viejo. Es lo viejo dando paso alo nuevo. Si captamos el pensamiento divino, elsentido espiritual de esto – un hombre anciano conun niño en sus brazos – veremos de inmediato que,desde el punto de vista de Dios, este es un princi-pio divino. La edad no implica disminución, con-tracción, decadencia o pérdida de valor. Esta no esla idea de Dios acerca de la vejez. Hay un pasajeen Isaías que dice (Is. 65:20): “El niño morirá decien años”. Existe un estado, una condición, unreino en el cual un niño morirá de cien años.

Significa que aquí hay un principio – y queexiste un reino en el cual la vejez tiene al niñopresente en sus brazos. A los cien años de edad, elniño no se ha marchado y es todavía un niño. Elpensamiento divino acerca de la edad madura im-plica más bien una plenitud y enriquecimientosorientados hacia lo que aún debe ser, y vinculadoscon lo que ha de llegar, para dejar provista unaherencia. No simplemente un desaparecer, lleván-dose todas las cosas consigo, que sea el fin detodo; sino el tener algo muy rico y pleno que serátransmitido, expresado y compartido en una com-pleta novedad, frescura y juventud. Todos los valo-res de una larga historia traídos de una maneranueva. Esto es lo que encontramos aquí.

Ustedes ya conocen los lugares en la Biblia quenos hablan sobre la infancia ligada con la vejez¡Cuánto se saca de este principio espiritual en rela-ción a Abraham e Isaac! Cuando Abraham eraviejo, nació Isaac. Este hecho sirve para expresarlo siguiente: cuando exista una gran acumulaciónde historia y sabiduría espiritual, Dios la reprodu-cirá, y le dará forma nuevamente e, inclusive, aúnotra vez más. “En Isaac te será dada descenden-cia” (Gn. 21:12). O, de nuevo, Jacob y Benjamín,el hijo de su vejez; y todo cuanto representa Benja-mín espiritualmente. Luego, tenemos el caso deElí, que era muy viejo, y el niño Samuel. No essólo una hermosa figura, sino también algo muysignificativo el que este niño esté al lado del ancia-no Elí. Dios recomienza aquí, justo a la vista dealgo que en sí mismo iba a quedar atrás, pero to-mando de ello todos los valores espirituales paratraerlos y reproducirlos en toda su intrínseca rique-za. Volvemos aquí a los ancianos Simeón y Ana(por medio de ciertos cálculos, llegamos a la con-clusión de que Ana tenía 106 años en ese momen-to), y estos dos con un bebé. Para Dios esto no esun fin; es mucho más que eso.

Todos los valores espirituales anteriores estánahora centrados en Cristo

Así que, el asunto global representado porSimeón y Ana es la plenitud alcanzada por mediode un cumplimiento cabal. Primeramente, se com-pletó una fase, se reunieron todos los valores espi-rituales pasados que ambos representaban, paraadentrarse luego en un orden espiritual totalmentenuevo: el orden de Cristo.

Simeón habla claramente de esta transición,mencionada en el primer capítulo de la carta a losHebreos: “Dios, habiendo hablado muchas veces yde muchas maneras a los padres por los profetas,en estos postreros días nos ha hablado por elHijo”. Es una transición desde lo fragmentario, loparcial, lo ocasional, lo diverso hacia lo total, loinclusivo-unitario y lo final. Esto es lo que repre-senta la transición. Levantar al niño, el Cristo, sos-teniéndolo en sus brazos era, en figura, reunir sim-plemente todo lo que había sido de Dios en el pa-sado, centrándolo ahora en Cristo, contemplandocómo él lo tomaba en posesión para cumplirlo ytrascenderlo.

Vemos a Simeón vinculado al pasado. Ahora,algo estaba ocurriendo con la venida de este niño,esto es, con la venida del Cristo. No deja de tenerun cierto significado que el evangelio de Mateohubiese sido sacado del orden cronológico y pues-to en primer lugar en el Nuevo Testamento. En eseevangelio, una y otra vez, Mateo utiliza esta frase,“Para que las Escrituras se cumpliesen” o “Paraque se cumpla lo que se había dicho por el profe-ta”. Ello es característico del evangelio de Mateo.Él apunta hacia atrás, a todas las Escrituras quemiraban hacia este Cristo, en quien hallarían sucumplimiento, realización, finalidad y trascenden-cia. Todas las esperanzas, todas las expectativas,todas las promesas, todas las sombras y toda laprofecía estaban reunidas en las manos de Simeónel día en que tomó al niño. La Esperanza de Israelestaba en sus brazos. ¡Qué larga esperanza! ¡Quéconfirmada esperanza! Incluso a través de todossus fracasos, cuando una negra y oscura desespe-ranza parecía haberse cernido sobre ellos y llora-ban porque el camino del Señor se les había ocul-tado y la justicia de Dios los había pasado por alto,aún entonces acariciaron una esperanza. A travésde todos sus fracasos, de todos sus sufrimientos,todavía se aferraron a la esperanza de que algomás debía venir. En medio de todos los juicios quehabían caído sobre ellos desde el cielo por suspecados, aún se aferraron a las promesas y creye-ron que un día verían la salvación del Señor. ¡Oh,todo se encuentra aquí, en las manos de Simeón!Todo aquel pasado se encuentra presente aquí,sobre esos brazos. El Pequeño es la respuesta atodas las cosas ¡La Esperanza de Israel!

Esta expectación y espera había alcanzado suconsumación precisamente en estos dos, quienesjunto a otros esperaban la consolación de Israel, laredención de Jerusalén. Ellos observaban, en díasde escasas perspectivas y, en apariencia,

Levantar alniño, el Cristo,sosteniéndoloen sus brazosera, en figura,reunir simple-mente todo loque había sidode Dios en elpasado, cen-trándolo ahoraen Cristo.

Page 25: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

25aguas vivas LEGADO

desesperanzadoras. Pero, con todo, había quienesaún esperaban, aún creían, aún se aferraban. Yaquí, en un día como ese, Simeón se paraba soste-niendo en sus brazos el cumplimiento de todas lasesperanzas y las expectativas y las promesas: sos-teniendo la completa encarnación del pensamientototal de Dios. Simeón cargaba todo esto sobre susmanos, y en sus palabras, actitud y espíritu, uste-des lo pueden ver proyectándolo hacia el futuro yenviándolo hacia delante. “Este niño está puestopara...”. Todo el futuro será afectado por Él. Es unmomento grandioso.

Todos los tipos y sistemas trascendidos porCristo en persona

Ah, pero noten, esto trajo consigo undesmantelamiento de todo el andamiaje de lossistemas terrenales. No era ya más lo que prefigu-raba a Cristo; era Cristo mismo. Todo lo que res-tringía a Cristo se acabó en ese momento. ¡Quémomento aquél! El encasillamiento de los tipos,figuras, símbolos y profecías, y el sistema comple-to del judaísmo, la totalidad de aquella estructura,se hizo añicos y se derrumbó ese día, pues la mani-fiesta realidad de todo lo que era inherente e intrín-seco del pasado estaba ahora en manos de Simeón,a fin de pasar al futuro. Era una crisis, un cambiode dispensación. Un paso desde lo que fue mera-mente un sistema terrenal en relación con Cristo, aCristo mismo: Y esto no es poca cosa, pues es laseñal del tiempo del fin.

Contemplemos hasta dónde hemos llegado:Cristo mismo emergiendo del entramado de lascosas, de todo el andamiaje de las edades pasadas,de todo lo figurativo, tipológico y simbólico, ytrascendiéndolo en su propia Persona. Hay unaabsoluta diferencia entre él mismo y las cosas queson suyas. Hasta ese momento, el pueblo de Dioshabía estado ocupado con las cosas concernientesa Cristo: ahora habrían de ocuparse de Cristo mis-mo. Era un momento grandioso. Y esto es lo queocurrirá también en un tiempo final. Este es elpunto. Un tiempo final implica la transición de unmontón de cosas que tienen que ver con Cristo, aCristo mismo; una transición desde un marco decosas exterior hacia lo que es esencial e intrínseco;una transición desde todas las obras y cosas rela-cionadas con Cristo, hacia aquello que importa unconocimiento personal de él mismo. Todo lo de-más va a ser desmantelado, y nosotros ya estamosen el día en que este desmantelamiento en verdadha comenzado. El asunto principal va a ser (¿Pue-do ponerlo de esta manera?): ¿Cuánto tenemosactualmente en nuestras manos de Cristo mismo?O, ¿Cuán ocupados estamos con las cosas concer-nientes a él, con lo que meramente rodea a Cristo?

La obra de transición se efectuará, porque estees el movimiento característico de un tiempo final.Yo lo veo claramente aquí: La figura profética deese otro tiempo final que tenemos en el libro deApocalipsis, cuando el hijo varón es dado a luz, ylas últimas cosas están a la vista. En un tiempo

como ése, todas las cosas serán probadas y desafia-das por las fuerzas que serán soltadas desde el in-fierno. Comenzó aquí, con la aparición del primerhijo varón, el Señor Jesús, la liberación las fuerzassatánicas e infernales que han estado operando demanera continua a lo largo de toda esta dispensa-ción. Herodes las escuchó y sacó su espada paracausar una masacre terrible, en un intento por lo-grar la muerte del Primero. Y desde ese tiempo enadelante, el infierno está desatado (y ha estadocontinuamente desatado) no en contra de un siste-ma, sino de una persona viva. En consecuencia,vemos aquí presentado al hijo varón y las tremen-das reacciones que de inmediato este hecho provo-ca.

Pasamos ahora a Apocalipsis 12, y vemos allíuna compañía corporativa denominada “el hijovarón” (es corporativa porque las palabras son: “yellos le han vencido por medio de la sangre delCordero”). Esta es la contraparte corporativa de loindividual y de lo personal. Cuando esta expresióncorporativa del hijo varón es presentada en Apoca-lipsis, ¿Qué encuentra usted? La más violenta re-acción de las fuerzas del mal para destruir todaslas cosas que testifican de Cristo.

La obra de Dios en el tiempo final – Todo sevuelve esencialmente espiritual

Ahora bien, ¿En qué consiste el servicio a Diosen un tiempo final? A medida que hemos avanza-do, seguramente hemos notado una o dos cosas. Laobra particular de Dios en el tiempo del fin es, enprincipio, la constitución de una nueva e inclusivadispensación espiritual; una nueva edad cuya natu-raleza es total y esencialmente espiritual. Hebreos12:27 dice: “Aún una vez, indica la remoción delas cosas movibles, como cosas hechas, para quequeden las inconmovibles”. La palabra ‘remoción’significa, en verdad, transferir o transponer algohacia otro y distinto fundamento. El hecho de queesto ocurra al final de la carta a los Hebreos essignificativo, porque esta carta está, precisamente,llena del sistema terrenal del judaísmo, con todassus formas, su ritual, su composición y constitu-ción. Todo lo terrenal, aun lo relacionado conDios, va a ser removido y transferido a otro funda-mento (un fundamento celestial y espiritual); y,cuando las cosas comienzan a ocurrir sobre el te-rreno de un tiempo final, este es el hecho que ca-racteriza lo que comienza a tomar lugar. Lo terre-nal tendrá que forzosamente dar lugar a lo celes-tial, lo temporal a lo espiritual y lo exterior a lointerior. Entonces, será probado cuánto de lo quetenemos puede ser transferido, porque hay muchascosas que no van a ser transferidas, “la carne y lasangre no pueden heredar el reino de Dios”. Estosignifica e implica que hay todo un orden de lacreación que no va a formar parte del orden eterno.Pasará. Todo va a ser trasladado a otro fundamen-to, y este proceso se intensifica en un tiempo final.¿Puede usted verlo?

Déjeme simplificarlo. Dios se va a ocupar, por

Hasta ese mo-mento, el pue-blo de Dios ha-bía estado ocu-pado con lascosas concer-nientes a Cris-to: ahora ha-brían de ocu-parse de Cristomismo. Era unmomento gran-dioso. Y esto eslo que ocurrirátambién en untiempo final.

Page 26: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

26 aguas vivasLEGADO

medio de la pura fuerza de las circunstancias, deque cualquier cosa que sea meramente temporal sevaya y tan sólo lo que es espiritual permanezca.Por lo tanto, deberán intensificarse los procesosque sacarán a luz lo espiritual. ¿Estamos en estepunto? Yo no sé cuál es su experiencia, pero tocan-do a unos y a otros aquí y allá, encuentro que exis-te un poco de comprensión real acerca de esto.Nunca habíamos experimentado tales conflictosespirituales, presiones y dificultades como los queexperimentamos ahora. Pareciera que las cosasestán yendo más allá de toda medida. ¿No podríaser ésta la explicación? El Señor parece estar con-centrándose en sacar a luz todos los valores espiri-tuales, formando hombres y mujeres espirituales, ysi no me equivoco (y no reclamo poseer ningúndon de profecía en el sentido predictivo) vamos aver, y ya estamos viendo, la remoción de muchascosas externas de las cuales los cristianos han esta-do dependiendo, como si esas cosas constituyeransu vida cristiana. Seremos forzados a retornar allugar donde una sola pregunta nos confronta:¿Después de todo, qué es lo que he ganado delSeñor mismo? Y no, ¿Qué puedo hacer, a dóndepuedo ir o qué puedo obtener? Creo que ésta esuna pregunta muy apropiada y vigente en muchaspartes del mundo precisamente ahora, y que va air incrementándose hasta que todas las cosas exte-riores lleguen a su fin. Ahora, ésta es la prueba:¿Qué tengo en mis manos?

La obra de Dios en el tiempo del fin incluyetodos los valores anteriores

Sí, la constitución de una dispensación nueva yespiritual. Pero, utilizo también la palabra‘inclusiva’: es decir, la herencia de todos los valo-res que Dios ya ha otorgado. Este es, subráyelousted, un principio dispensacional. La historia es-piritual vuelve sobre sí misma, regresa al últimopunto de plenitud. Quizás usted no logre asir loque quiero decir con esto. Si se ha llegado a unestado de declinación, ya sea en nuestra propiavida espiritual o en la vida de la iglesia, tarde otemprano nos veremos forzados a retroceder hastael punto donde abandonamos la medida plena deDios. ¿No ve usted lo que está sucediendo? Hoy lopodemos observar en varios ejemplos. Tomemos elasunto de la literatura. Existe una creciente deman-da por las obras antiguas. Los editores se hallanfrente a una gran demanda por lo del pasado, y loestán introduciendo en el mercado. Las estanteríashan estado llenas de materiales cristianos superfi-ciales y baratos, con cubiertas llamativas, y ha lle-gado el tiempo en que las personas se están dandocuenta de que esto no satisface sus necesidades, yla demanda por algo más está surgiendo. La exi-gencia recae sobre algunos de los libros que for-maron a las pasadas generaciones. Esto está suce-diendo. La historia está volviendo sobre sí misma.Ha habido decadencia, pérdida, superficialidad,frivolidad y baja calidad en la cristiandad, y la igle-sia va a perecer por falta de alimento sólido, a me-

nos que éste le sea provisto. El clamor es: “Regre-semos a lo que había primero”. Esto está sucedien-do de muchas maneras. Es un principiodispensacional. Si Dios realmente ha dado algo,eso nunca se perderá. El tiempo lo vindicará. Tar-de o temprano regresaremos a ello. Seremos traí-dos de vuelta a la plena vivencia de lo que Diosnos ha dado. Aquí es donde lo nuevo retoma loviejo.

Un día triste y vano (uno que no pondrá en pielas cosas) es aquel cuando piensas que puedesprescindir de la experiencia. Si los jóvenes supo-nen que pueden tener poco respeto por aquellosque ya han pasado por el fuego y se hanencanecido en el servicio de Dios, en el aprendiza-je de conocer al Señor, y que pueden ponerlos a unlado como a números secundarios, vendrá un díalamentable para el futuro. A pesar de todo lo quese necesita de la nueva generación, no pensemosque ella puede producir todo el pasado en su pro-pio tiempo de vida. Dios los traerá de regreso ha-cia lo que ha sido antes de ellos. No consideres alos siervos de Dios como números secundarios.Ellos están muy al día. Simeón estaba muy al díacuando trajo toda la abundancia, la riqueza y laplenitud del pasado en sus manos y, al hablar, latraspasó a lo nuevo, al niño, quien lo retomó todo,y quien más tarde confesó que él lo había asumidotodo: “No penséis que yo he venido para abrogarla ley o los profetas: no vine a abrogar sino acumplir” (Mt. 5:17). Siempre ocurren, tarde o tem-prano, reacciones contra lo barato y lo superficial,y esto usualmente bajo la coacción, compulsión ysensación de que es imposible seguir adelante sinalgo más pleno.

La infancia en brazos de la vejez. Y la infanciadependiendo de aquellos brazos. Pienso que noestoy yendo demasiado lejos al decir que aquí, enel sostener al niño Cristo sobre esos brazos, existeeste significado: que para cumplir su ministerio ysu vida, el Cristo dependió mucho del pasado, detodo cuanto Dios había hecho antes. La única Bi-blia que él tenía era el Antiguo Testamento. ¡Cristovivió por él! Cuando dice: “Porque no sólo de panvivirá el hombre, sino de toda palabra que sale dela boca de Dios”, estaba hablando de la única Bi-blia que tenía, la Palabra de Dios, el Antiguo Tes-tamento. Pueden ver cómo el Antiguo Testamentoes utilizado en el Nuevo. No es sino otro aspectode esto mismo. Uno de los estudios más enriquece-dores y una de de las líneas más productivas deinvestigación consiste en marcar dónde el AntiguoTestamento se encuentra en el Nuevo (porque seencuentra ahí) y ver el uso que se hace de él. Sí,ésta es una tremenda realidad: que todo lo que esnuevo depende de lo que ya ha sido anteriormente.

El valor permanente de toda obra de DiosVamos a terminar por ahora recalcando esto.

Debemos vivir y trabajar con nuestros ojos puestossobre el valor ulterior de nuestras vidas. Gracias aDios porque esto puede ser así. La vida sería un

Si Dios real-mente ha dadoalgo, eso nuncase perderá. Eltiempo lo vindi-cará. Tarde otemprano re-gresaremos aello. Seremostraídos de vuel-ta a la plena vi-vencia de loque Dios nos hadado. Aquí esdonde lo nuevoretoma lo viejo.

Page 27: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

27aguas vivas LEGADO

No os atreváis, pintores

BOCADILLOS DE LA MESA DEL REY

La más excelsa figura jamás vista, el Hombre por antonoma-sia, ha sido una y otra vez, objeto de la inspiración de pintoresde variada talla, y con distinto propósito y suerte.

Hay Cristos simbólicos, objetivos, realistas, y otros estilizadoscasi como esperpentos. Los hay bizantinos, los hay románicos.Ellos corresponden, bien a un ideal de época, o una estrecha vi-sión particular.

Últimamente, los hay también a la medida de la época, deli-cados como féminas, figuras ‘unisex’ de raro gusto, verdaderos‘modelos’ de belleza ambigua, inspirados por mentes que cono-cen a los desviados hombres de hoy, pero que no conocen alCristo de Dios.

¿Estuvo alguno de ellos en el secreto de Dios para que Él lerevelara a su Cristo? ¿Estuvo alguno de ellos en las agonías delCristo, para que saliese de allí con una visión verdadera? Antesde esgrimir sus pinceles, ¿se detuvieron para quitarse el calzadode sus pies y consultar a Dios acerca de lo que pensaban hacer?¿Temieron, acaso, llevar al lienzo la figura de aquél es el mismísimoBendito de Dios encarnado, Poder, Sabiduría y Gloria de Dios?

No, sin duda, ninguno estuvo en el secreto, ni temieron, nise descalzaron, ni pidieron. Pero en su ignorancia, en su preten-sión, se atrevieron. Y sus pinceles se embadurnaron para juicio.

No os atreváis, pintores, a plasmar en tela burda el rostroinefable de Aquél que amamos sin haberle visto. De Aquél enquien creyendo, sin verlo, nos alegramos con gozo inefable yglorioso.

Nos os atreváis, pintores, a profanar su imagen, que sólo alEspíritu Santo es dado grabarlo en los pliegues más íntimos delcorazón de sus escogidos.

Nos os atreváis, pintores, a hurgar en los arcanos de Dios,ni a pisotear lo que el Padre ha querido esconder. Que su Cristoquede escondido todavía de los profanos ojos, para que los quede verdad quieran conocerle le busquen con los ojos del espíri-tu, en el seno del Padre, único lugar donde en verdad le halla-rán.

Nos os atreváis, pintores, que vuestros pinceles, en otrasfiguras impíamente embelesados, sean usados en pintar elrostro mismo de Dios.

“Eres el más hermoso de los hijos de los hombres” (Salmo 45:2a)

intolerable enigma si todo lo que hubiésemosaprendido a través del sufrimiento y la disciplinamuriera con nosotros y nada quedara de ello. No,esto no debe ser todo. Hay un valor futuro y debe-ríamos vivir –recalco– y servir con nuestra vistapuesta en la herencia que vamos a dejar más alláde nuestra propia época. Pues, sobre el principiode que Dios vindica todo lo que él mismo ha he-cho, dado, y vuelto necesario, lo que él está obran-do en ti y en mí ahora, también lo hará necesariopara su nueva dispensación. Esa nueva dispen-sación va a ser constituida sobre la base de lo queÉl está obrando en sus santos ahora. Este es unprincipio del Nuevo Testamento. Lo que él estáhaciendo en la iglesia hoy será la riqueza de lasedades venideras. Lo que él está haciendo en noso-tros –no es una presunción decirlo– va a ser lavida misma para algunos más allá de nuestro tiem-po. Así que, no deberíamos pensar en esta vidacomo algo que debe ser ganado completamente, ovivido completamente para nosotros mismos,

como un fin en sí misma. Ella es algo que seráhallado otra vez, para la gloria de Dios, en el futu-ro: en el traspaso de todo lo que ha venido deDios, lo cual no muere jamás, sino que es preser-vado eternamente por él, y que será necesario otravez. Me pregunto si este es un pensamiento nuevopara ti. Es decir, que cuanto el Señor está haciendoen ti, al expandir la medida de Cristo en ti, va sernecesario por un largo tiempo después de que ha-yas partido. Es un principio, una ley, el que cual-quier cosa que Dios haga será necesaria para siem-pre.

Lo dejaremos hasta aquí por ahora, y pedimosal Señor que nos ejercite muy poderosamente en elasunto del intrínseco valor del conocimiento de élmismo en el tiempo que viene, a través de estatransición hacia la cual nos hemos adentrado tanseriamente.

***Tomado de www.austin-sparks.net

Trad. Dalia de Schubert, Rodrigo Abarca B.

Page 28: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

28 aguas vivasLEGADO

Escuchar cuando está oscuroiempre que Dios da una visión a un santo, lo pone, como si estu-viera en la sombra de Su mano, y el deber del santo es estar quietoy escuchar. Hay una oscuridad que proviene del exceso de luz, yentonces es el momento de escuchar. Génesis 16 es una ilustración

acerca de escuchar los buenos consejos cuando está oscuro, en vez de esperarque Dios envíe la luz. Cuando Dios concede una visión y luego hay oscuri-dad, espera. Dios obrará en ti de acuerdo con la visión que te ha dado, si es-peras Su tiempo. Nunca trates de ayudar a Dios a cumplir Su palabra.Abraham pasó por trece años de silencio, pero en esos años toda su suficien-cia fue destruida; no quedándole ninguna posibilidad para confiar en su pro-pia manera de pensar. Estos años de silencio fueron un tiempo de disciplina,no de reprobación. Nunca trates de producir tu propio gozo y confianza; es-pera en Dios y Él lo hará. (Comp. Isaías 1:10-11).

«Donde no hay visión, el pueblo se extravía ...» (Prov.29:18 a, NVI) – dice el rey Sa-bio. He aquí una recopilación de pensamientos sobre el tema, del conocido ministroescocés.

Oswald Chambers (1874-1917)

reflexiones

visiónsobre la

Consagrado a una PersonaLa visión que tuvo Pablo en el camino a Da-

masco no fue una emoción pasajera, sino una vi-sión que tenía direcciones muy claras y enfáticaspara él, y dice: “No fui rebelde a la visión celes-tial”. El Señor le dijo, en realidad, a Pablo: “Todatu vida será dominada por Mí; no tendrás ningúnfin, ninguna meta, ningún propósito sino el mío”.“Instrumento escogido me es éste”.

Cuando somos nacidos de nuevo, si en realidadsomos espirituales, todos tenemos visiones de loque Dios quiere que seamos, y la gran cosa esaprender a no ser desobedientes a la visión; nodecir que no puede ser alcanzada. No es suficientesaber que Dios ha redimido al mundo, y saber queel Espíritu Santo puede hacer todo lo que Jesúshizo efectivo en mí; debo tener la base de una rela-ción personal con Él. A Pablo no se le dio un men-saje o una doctrina para que la proclamara; se leintrodujo en una relación personal viva y dominan-te, “ponerte por ministro y testigo” (Hech.26:16).No hay nada allí fuera de la relación personal. Pa-blo estaba consagrado a una Persona, no a unacausa. Pertenecía absolutamente a Jesucristo, y noveía otra cosa; no vivía otra cosa más. “No mepropuse saber algo entre vosotros, sino a Jesucris-to, y a éste crucificado”.

Visión vs. Sentido comúnEs más fácil servir a Dios sin una visión, más

fácil trabajar para Dios sin un llamado, porqueentonces no eres molestado por lo que Dios exige;el sentido común es tu guía, revestido de un senti-miento cristiano. Prosperarás más y tendrás máséxito, más tranquilidad de corazón, si nunca te dascuenta del llamado de Dios. Pero una vez que reci-bes una comisión de Jesucristo, la memoria de loque Dios quiere vendrá como un acicate: ya nopodrás trabajar para Él sobre la base del sentidocomún.

¿Qué es lo que realmente tengo por precioso?Si no he sido asido por Jesucristo, contaré el servi-cio precioso, el tiempo dado a Dios precioso, mivida preciosa para mí mismo. Pablo dice que esti-ma su vida preciosa, solamente con el fin de cum-plir el ministerio que había recibido; rehusó em-plear su energía en cualquier otra cosa. Hechos20:24 declara el casi sublime fastidio de Pablo alpedírsele que se considerara a sí mismo; era abso-lutamente indiferente a cualquiera otra considera-ción que no fuera la de cumplir el ministerio quehabía recibido. El trabajo práctico podrá ser uncompetidor contra la entrega a Dios, porque eltrabajo práctico se basa en este argumento: “Re-cuerda cuán útil eres aquí”, o “Piensa de cuántovalor serías en esa clase especial de trabajo”. Esaactitud no toma a Jesucristo como el Guía respectoa dónde deberíamos ir, sino a nuestro criterio res-pecto en dónde seríamos de más utilidad. Nuncaconsideres si eres de utilidad; pero siempre consi-dera que no eres tuyo, sino de Él.

Lo sumo nuestro por lo supremo de DiosSi perdemos la visión sólo nosotros somos res-

ponsables, y la manera en que perdemos esta vi-sión es por un escape espiritual. Si no llevamosnuestra creencia acerca de Dios a fines prácticosfenece la visión que Dios nos ha dado. La únicamanera de ser obedientes a la visión celestial esdar lo sumo nuestro por lo supremo de Dios, y estopuede hacerse tan sólo recordando la visión conti-

Page 29: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

29aguas vivas LEGADO

nua y resueltamente. La prueba de que hemos sidoobedientes a la visión celestial se halla en los se-senta segundos de cada minuto y en los sesentaminutos de cada hora, y no en nuestros tiempos deoración y reuniones devocionales.

“Aunque se tardare, espérala”. No podemoslograr una visión, tenemos que vivir en la inspira-ción de ella hasta que se realice. Nos volvemos tanprácticos que olvidamos la visión. Al principiovimos la visión, pero no la esperamos; corremos altrabajo práctico, y cuando la visión se cumplió, nola vimos. Esperar la visión que se tarda es la prue-ba de nuestra lealtad a Dios. Es a riesgo del bien-estar de nuestra alma que nos engolfamos en eltrabajo práctico y pasamos por alto el cumplimien-to de la visión.

Está alerta a los ciclones de Dios. La únicamanera en que Dios siembra sus santos es por Sutorbellino. ¿Vas a resultar una vaina vacía? Depen-derá que estés viviendo realmente o no a la luz delo que has visto. Deja que Dios te saque, y no sal-gas hasta que Él te haya sacado. Si eliges tu propiolugar, resultará una vaina vacía. Si Dios te siem-bra, darás fruto.

Es esencial practicar nuestro andar a la luz dela visión.

El peligro del relajamientoSiempre se sabe cuando la visión es de Dios a

causa de la inspiración que la acompaña; las cosasse presentan a la vida con grandeza y a manera detónico, porque todo está vigorizado por Dios. SiDios te da espiritualmente un tiempo de tentaciónen el desierto, como se lo dio a Su Hijo en reali-dad, sin una sola palabra Suya, sosténte; y el poderde sostenerte está allí porque ves a Dios.

La prueba de que hemos tenido la visión es queestamos tratando de obtener más de lo que hemosabarcado. Es una cosa mala el estar satisfecho es-piritualmente. “¿Qué pagaré a Jehová?” dijo elsalmista. “Tomaré la copa de la salvación”. Tene-mos la tendencia de buscar satisfacción en noso-tros mismos. “Ahora tengo la cosa asegurada; aho-ra estoy enteramente santificado; ahora puedo sos-tenerme”. Instantáneamente estamos en caminodel desastre. Debemos siempre tratar de obtenermás de lo que hemos alcanzado. “No que ya lohaya alcanzado, ni que ya sea perfecto”. Si tene-mos solamente lo que hemos experimentado, notenemos nada; si tenemos la inspiración de la vi-sión de Dios, tenemos más de lo que podemosexperimentar. Guárdate del peligro de un relaja-miento espiritual.

Ideal vs. VisiónHay diferencia entre un ideal y una visión. Un

ideal no tiene ninguna inspiración moral; una vi-sión la tiene. La gente que se entrega a ideales,rara vez hace algo. El concepto que tiene un hom-bre con respecto a la Deidad puede ser usado parajustificar el deliberado descuido de su deber. Jonásalegó que como Dios era un Dios de justicia y mi-

sericordia, todo saldría bien. Podré tener un con-cepto justo de Dios y esa podrá ser precisamente larazón por lo cual no haga mi deber. Pero donde-quiera que hay visión, allí también hay una vidarecta, porque la visión imparte incentivo moral.

Los ideales pueden adormecer y conducir a laruina. Examínate espiritualmente y ve si tienes tansolo ideales o si tienes visión.

“Donde no hay visión, el pueblo se extravía”(Prov.29:18a, NVI). Una vez que perdemos devista a Dios, empezamos a descuidarnos; hacemosa un lado ciertas restricciones, dejamos la oración,desechamos la visión de Dios en las cosas peque-ñas y empezamos a obrar de acuerdo con nuestrapropia iniciativa, sin esperar que intervenga Dios,estamos en la senda descendente; hemos perdidola visión. ¿Es nuestra actitud hoy día una actitudque dimana de nuestra visión de Dios? ¿Estamosesperando que haga cosas mayores de las que ja-más ha hecho? ¿Hay frescura y vigor en nuestravida espiritual?

En el valle de la humillaciónSiempre tenemos visiones antes de que algo se

convierta en realidad. Cuando nos damos cuentade que aunque la visión es verdadera, no es real ennosotros, entonces es el momento cuando Satanásviene con sus tentaciones y tenemos la tendenciade decir que no vale la pena seguir adelante. Envez de que la visión se realice, lo que sucede esque llega el valle de humillación. (Is.35:7).

Dios nos da la visión, luego nos hace descenderal valle para batirnos hasta darnos la forma de lavisión, y es en el valle donde tantos de nosotrosdesfallecemos y cedemos. Toda visión se realizarási tenemos paciencia. ¡Piensa en el tiempo ilimita-do de que dispone Dios! Nunca tiene afán. Noso-tros siempre estamos frenéticamente afanados. Ala luz de la gloria de la visión salimos para haceralgo, pero la visión no es real en nosotros todavía,y Dios tiene que llevarnos al valle, y hacernos pa-sar por los fuegos y los ríos para modelarnos afuerza de golpes hasta que lleguemos al lugar don-de puede confiarnos la verdadera realidad. Desdeque tuvimos la visión, Dios ha estado trabajandomodelándonos según el ideal; y una y otra vez nosescapamos de Su mano y tratamos de batirnos se-gún nuestro propio molde.

La visión no es un castillo en el aire, sino uncuadro de lo que Dios quiere que seas. Deja que teponga en Su rueda y te voltee como quiera; y tancierto como Dios es Dios y tú eres tú, saldrás exac-tamente de acuerdo con la visión. No te desanimesdurante el proceso. Si has tenido alguna vez lavisión de Dios, puedes tratar tanto como quieras desentirte satisfecho en un nivel más bajo; pero Diosnunca te lo permitirá.

***

Tomado de “My Utmost for His Highest”,en http://www.myutmost.org/

La visión no esun castillo en elaire, sino uncuadro de loque Dios quiereque seas. Dejaque te pongaen Su rueda yte voltee comoquiera; y tancierto comoDios es Dios ytú eres tú, sal-drás exacta-mente deacuerdo con lavisión.

Page 30: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

30 aguas vivasLEGADO

Cuando los que iban adelante ya no están,surge la pregunta inevitable.

l principio de nuestra vida cristiana lasenda parece estar claramente definidapara nosotros. Debemos seguir las pisa-das de otros, depender de sus máximas,

seguir sus consejos, hasta que de repente nos halla-mos a la cabeza de la marcha, sin huellas delantede nosotros por toda la expansión del desierto. Essólo cuando los años han pasado sobre nuestracabeza cuando este sentido de que estamos sincamino, nos oprime.

En semejantes ocasiones, los labios de Cristocontestan: “Yo soy el camino”. En todas partes delos Hechos de los apóstoles hallamos que el térmi-no casi invariable por el cual el Evangelio era co-nocido, era “El camino”, como si los primeroscreyentes estuvieran embriagados con el éxtasisdel sentimiento de que al fin habían descubierto elcurso de la vida bendita, la senda que los llevaríapor las perplejidades de la tierra y los traería a laciudad de Dios. Y si hubiéramos suplicado a cual-quiera de ellos que diera un equivalente del térmi-no que empleaba tan constantemente, habría con-testado, sin vacilar ni un momento, JESÚS. Proba-blemente no haya mejor manera de cerciorarnosdel verdadero método de vida que preguntarnoscómo Jesús habría obrado bajo circunstancias se-mejantes. Su temple, su manera de mirar las cosas,su voluntad, resuelven todas las perplejidades.

Cuando el pueblo salió de Egipto, el Señorprecedía la marcha en la nube Shekinah que semovía suavemente sobre el arca. Cuando ésta seadelantaba, levantaban sus tiendas y seguían; cuan-do se paraba, ellos se detenían y tendían el campa-mento. Era la única guía visible y estable a travésde aquel desierto sin caminos. No había nada deesto cuando Esdras condujo el primer destacamen-to de desterrados de Babilonia a Sion; pero, aun-que invisible, el divino guía estaba igualmente enfrente de la marcha. Así es, también, en la expe-riencia diaria. Cuando el camino se divide, cuandola senda se pierde en la hierba, cuando la expan-sión del desierto se extiende delante sin una sendamarcada, párate; haz una observación; haz callartodas las voces en la presencia de Cristo; preguntalo que Él querría que se hiciera. Acuérdate de queel Buen Pastor, cuando echa fuera sus ovejas, vadelante de ellas y ellas le siguen. Jesús siempre vadelante de nosotros en cada llamamiento al deber,en cada demanda de abnegación, en cada llama-miento para consolar, ayudar, y salvar. Teniendo aDios detrás como Retaguardia, y a Dios en frentecomo Conductor, y a Dios guiándonos con cánti-cos de liberación, no puede haber duda de que alfin llegaremos a aquella Sion en que no hay desier-tos, y cuyos muros nunca han sido sacudidos por elataque de hombres armados.

Tomado de Cristo en IsaíasF.B. Meyer(1847-1929)

¿cuál esel camino?

Page 31: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

31aguas vivas ESCRITURAS

gapao” y “Fileo” son dos ver-bos griegos que se traducenhabitualmente como “amar”.De “agapao” proviene el sus-

tantivo “ágape” que significa “amor” encastellano. “Fileo”, por su parte, viene de“filos”, que se traduce “amigo” en español.Aunque ambos verbos pueden traducirsecomo “amar”, la verdad es que no sonsinónimos. En efecto, “agapao” y “fileo”denotan dos clases de amores diferentesy, en rigor, sólo “agapao” debieratraducirse por “amar” mientras que “fileo”debiera traducirse, más bien, como “que-rer”. Más aún, cuando en la revelación delNuevo Testamento ambos verbos adquie-ren una connotación especial.

Los escritores del Nuevo Testamentoreservan el verbo “agapao” preferente-mente para referirse al amor de Dios, entanto que “fileo” aparece más bien enrelación con el amor humano. De estamanera, pareciera que la intención de losescritores inspirados del Nuevo Testa-mento es establecer que solamente lanaturaleza divina es capaz de conjugar elverbo “agapao”. La naturaleza humana,en cambio, tendría como máximo poten-cial únicamente el amor “fileo”.

Veamos, entonces, esta limitación dela naturaleza humana y por qué “fileo”debiera traducirse más bien como “que-rer”, en lugar de “amar”. La vida del após-tol Pedro ilustrará perfectamente estasituación. En el evangelio de Juan, Jesu-cristo enseñó una máxima tremenda; éldijo: “Nadie tiene mayor amor (gr. ágape)que éste: Que alguien ponga su alma afavor de sus amigos” (15:13). De estetexto se desprenden dos cosas: 1) Elamor “ágape” es el mayor amor; y 2) Elamor “ágape” halla su máxima expresiónen el acto de dar la vida (poner el alma).El punto es que Jesucristo afirma cuatroveces en este evangelio que él da la vida(el alma) en favor de sus ovejas(10:11,15,17,18); por eso dice: “Yo soy elbuen pastor” y “Por eso me ama el Pa-dre”.

Ahora bien, durante la última noche

Desde el griego...

Rubén Chacón V.

agapaofileo

que pasó Jesús con sus discípulos (Juan13), él, anticipando el momento de lacruz, advierte a sus discípulos que adon-de él va, ellos no pueden ir. “¿Y a dóndevas, Señor?” –preguntó entonces SimónPedro. Jesús le reitera: “Adonde yo voy,no puedes seguirme ahora, pero me se-guirás más tarde”. Pedro entonces, en unsincero intento por imitar a su Maestroinsiste en la pregunta: “¿Por qué no pue-do seguirte ahora? Mi vida daré por ti”.Jesús replica: “¿Tu vida pondrás por mí?De cierto, de cierto te digo: No cantará elgallo, sin que me hayas negado tres ve-ces”.

Sólo un hombre que no se conoce a símismo podía atreverse a decir: “¡Mi vidadaré por ti!”. Pero como Jesús estabaresuelto a que Pedro más adelante sípudiera seguirlo, permitiría que éste su-friera el revés más grande de su vida.Para que algún día Pedro llegara a estarcapacitado para seguir a Cristo hasta lamuerte, debía necesariamente ser que-brantado. Y, en efecto, cuando aquellanoche aún no terminaba, Pedro ya habíanegado a su Señor. Para Pedro todo elintento de imitar a su Maestro terminó enun lloro amargo (Mt. 26: 75).

Cuando el Señor Jesucristo resucitó,volvió a encontrarse con Pedro y tuvo unanueva conversación con él (Juan 21:15-19). Esta vez sería el Señor el que haríalas preguntas: “Simón, hijo de Jonás, ¿Meamas más que éstos? Le respondió: Sí,Señor; tú sabes que te amo”. Lo intere-sante es que cuando Jesús pregunta ¿meamas? está usando el verbo “agapao”;Pedro, en cambio, cuando responde “teamo” usa el verbo “fileo”. ¿Qué ha pasa-do? Lo que ha pasado es que Pedro haaprendido la lección. Él, todavía no tieneese amor mayor que hace poner la vidapor los amigos. El Señor lo sabe y ahoratambién lo sabe Pedro.

Vuelve el Señor a preguntarle porsegunda vez: “Simón, hijo de Jonás, ¿meamas? Pedro le respondió: Sí, Señor; túsabes que te amo”. Nuevamente el Señorpregunta con el verbo “agapao” y, otra

vez, Pedro responde con el verbo “fileo”.El Señor busca asegurarse que Pedroefectivamente haya aprendido la lección.Pero ¿qué quiere decir Pedro al respon-der con el verbo “fileo”? Este verbo setraduce, a veces, como “besar” (Mt.26:48; Mr. 14:44; Lc. 22:47). “Fileo” esmostrar cariño; es tener afecto por al-guien. Por eso, las versiones modernasde la Biblia cambian la expresión de Pe-dro “te amo” por “te quiero”. “Fileo” es“querer”, es un deseo. En definitiva, loque Pedro quiere decir con su respuestaes: “Sí, Señor; deseo amarte”; “Sí, Señor;quiero amarte”. Esto, es lo máximo que lanaturaleza humana puede ofrecer. Elamor “ágape” es únicamente fruto delEspíritu.

Pero volvamos al relato. Jesucristo lepregunta la tercera vez: “Simón, hijo deJonás, ¿me amas? Pedro se entristecióde que le dijese la tercera vez: ¿Meamas?”. A primera vista pareciera que latristeza de Pedro se debió al hecho deque el Señor preguntara por tercera vezlo mismo. Pero no es así. La tristeza dePedro se debió a que la tercera vez elSeñor usó el verbo “fileo” y no el verbo“agapao”. En otras palabras, la tristezade Pedro se debió al hecho de que elSeñor ‘puso el dedo en la llaga’.Parafraseando, el Señor preguntó la ter-cera vez: “Simón, hijo de Jonás, segúntus propias palabras, ¿tú solamente metienes cariño?”; “Simón, hijo de Jonás,¿de tus palabras debo entender entoncesque sólo me tienes afecto?”. Pedro, en-tristecido al verse enfrentado con su po-bre realidad humana, no dice esta terceravez: “Sí”, sino: “Señor, tú lo sabes todo; túconoces que sólo te quiero”.

No obstante, en los siguientes días lavida de Pedro cambiaría maravillosamen-te. Este sería lleno del Espíritu Santo ydel amor (gr. ágape) de Dios (cf. Rm. 5:5).La historia bíblica dice que Pedro amó alSeñor Jesucristo con todo su ser, y lahistoria secular afirma que dio la vida porsu Señor: Murió crucificado. Amén.

***

y

Page 32: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

32 aguas vivasSEMBLANZAS

l leer los escritos de T.Austin-Sparks,hay una cosa que se hace clara, y es lapoca atención que se da a sí mismo o asu vida. En lugar de esto, toda la aten-

ción es dada a Cristo. Nuestra atención es desviadacontinuamente del mensajero hacia Él, que es elMensaje. No obstante, para aquellos a quienes lesinteresa la vida del mensajero y el trabajo de Diosen él, he aquí un breve resumen.

Theodore Austin-Sparks nació en Londres en1889, y fue educado en Escocia. Su madre amabaal Señor, y dio a su hijo un gran ejemplo de pie-dad.

Su vida cristiana comenzó en 1906, cuando éltenía 17 años. Caminaba abatido por una calle deGlasgow un domingo por la tarde, cuando se detu-vo a escuchar a algunos jóvenes cristianos quetestificaban al aire libre. Aquella noche él confiósu vida al Salvador, y el domingo siguiente se en-contró él mismo dando unas palabras de testimo-nio con los jóvenes en esa reunión al aire libre.Fue el comienzo de una vida de predicación delEvangelio que duró sesenta y cinco años.

En ese tiempo, el pueblo evangélico estabatodavía bajo la fuerte influencia del avivamientoque hubo en Gales en 1904-1905, que ahora semanifestaba en una búsqueda de una experienciamás profunda con el Señor Jesucristo. Fue en estecontexto espiritual que el joven T. Austin-Sparksdio sus primeros pasos como cristiano. Él siempreleía mucho, en su deseo de tener algún entendi-miento espiritual, y por sobre todo, estudiaba suBiblia, siempre buscando ardientemente los teso-ros nuevos y viejos que en ella pueden ser halla-dos.

En aquellos días, uno de los mayores predica-dores de Inglaterra, G. Campbell Morgan, desean-do ayudar a un grupo de jóvenes en el estudio de la

Palabra, comenzó a tener reuniones con ellos todoslos viernes. Por 52 semanas, Campbell Morgan sereunió con ellos y los preparó para el servicio cris-tiano. Entre sus alumnos más aventajados estaba T.Austin-Sparks. Por esa razón, él pasó a ser muyrequerido como expositor en conferencias. Su en-señanza bíblica era bien original en la época, espe-cialmente en relación a los esbozos de los libros dela Biblia, o a los esbozos de la Biblia como untodo.

El cielo abiertoEntre 1912 y 1926 fue pastor de tres iglesias

evangélicas en Londres. Por largo tiempo, buscó lacomunión con otros pastores, como GeorgePatterson y George Taylor, con quienes oraba to-dos los martes al mediodía. Cierta vez, mientrasministraba en una iglesia bautista, él vio venir unatremenda transformación sobre toda la congrega-ción. Uno tras otro, los conocidos fueron siendosalvados. Pero Austin-Sparks, pese a ser un jovenbastante conocido y tener mucho futuro, sentía unatremenda pobreza en su vida. Él sentía que estabapredicando cosas que, en realidad, no eran su ex-periencia. Él no tenía dudas de que había nacidode nuevo, de que Dios lo había salvado, de quehabía sido justificado, de que el Espíritu Santo erarealmente el Espíritu de Dios, de que Cristo era elUngido, pero él sentía que estaba predicando cosasque él mismo no experimentaba. Sentía que profe-tizaba mucho pero que poseía muy poco. Por natu-raleza, él era alguien que se entregaba completa-mente a lo que creía, nunca se contentaba con unaposición intermedia. Gradualmente una tremendatensión comenzó a crecer dentro de él. Comenzó asentirse un fracaso.

Entonces, cierto día, él le dijo a su esposa:“Voy a mi estudio. No quiero que nadie me inte-

pregonerode Cristo

Pocas vidas cristianas han sido más fructíferas que la de Theodore Austin-Sparks. Yesto, no porque fuera una clase especial de cristiano, especialmente dotado personal ohumanamente, sino por su pasión –tal vez, obsesión– por Cristo, de quien fue un fielheraldo y testigo por más de sesenta años.

Page 33: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

33aguas vivas SEMBLANZAS

rrumpa. No importa lo que suceda, yo no saldrédel cuarto hasta que tenga decidido qué caminovoy a tomar”. Él sentía inmensamente la necesidadde que el Señor lo encontrase de una forma nueva,o no podría continuar su ministerio. Había llegadoal final de sí mismo. Encerrado en aquel cuartopasó la mayor parte del día, quieto delante del Se-ñor.

En un momento, comenzó a leer la epístola alos Romanos, pero nada sucedía. Él la conocíamuy bien, pues la había enseñado muchas veces.Nada de nuevo le mostraba ahora, hasta que llegóal capítulo 6. Él mismo diría después: “Fue comosi el cielo se hubiese abierto, y la luz brilló en micorazón”. Por primera vez él comprendió que ha-bía sido crucificado con Cristo y que el EspírituSanto estaba en él y sobre él para reproducir lanaturaleza de Cristo. Eso revolucionó completa-mente su vida. Cuando salió de aquel cuarto, él eraun hombre transformado. Ahora realmente comen-zó a predicar a Cristo, a magnificar al Señor Jesús.

Luego comenzó a enseñar lo que llamaba “elcamino de la cruz”, dando gran énfasis a la necesi-dad de la operación subjetiva de la cruz en la vidadel creyente. Él predicaba un evangelio de unaplena salvación a través de la sola fe en el sacrifi-cio de Cristo, y enfatizaba que el hombre que co-noce la purificación por la sangre de Jesús debetambién permitir que la misma cruz opere en lasprofundidades de su alma para libertarlo de sí mis-mo, y llevarlo a un caminar más espiritual conDios. Él mismo había pasado por una crisis y acep-tó el veredicto de la cruz sobre su vieja naturaleza,percibiendo que esa crisis fue el comienzo paradisfrutar completamente la nueva vida de Cristo,experiencia tan grandiosa, que él la describía comoun “cielo abierto”.

RechazamientoSparks recibió gran ayuda espiritual de la Sra.

Jessie Penn-Lewis, a quien el Señor le diera unclaro entendimiento sobre la necesidad de la ope-ración interior de la cruz en la vida del creyente.Gracias a ella, Sparks se libró también de un pre-juicio anterior que tenía contra cualquier cosa queestuviera relacionada con una “vida más profun-da”. Sparks se tornó un predicador y maestro muyquerido y popular en medio del llamado “movi-miento Vencedor”.

Sparks veía que no hay otro camino para expe-rimentar plenamente la voluntad de Dios, a no sera través de la unión con Cristo en Su muerte.Siempre volviendo a la enseñanza de Romanos 6,era convencido de que tal unión es el medio seguropara conocer el poder de la resurrección de Cristo.

Sin embargo, la experiencia que Sparks tenía,en vez de abrirle las puertas para todos los púlpi-tos, le cerró la mayoría de ellas. Los líderes letemían, pues hallaban que algo extraño le habíasucedido, algo peligroso, algo errado. Y así co-menzaron a oponérsele.

Hubo un momento en que él se quedó en la

calle, sin casa donde morar con su esposa e hijos.Pero el Señor luego le proveyó una morada en lacalle Honor Oak. Una señora que servía al Señorcomo misionera en la India y había sido grande-mente ayudada a través de su ministerio, oyó decirde una gran escuela en la calle Honor Oak queestaba a la venta. Entonces compró la propiedad yla dio a la iglesia. El local de esa escuela vino a serun local de comunión cristiana, sede de la“Christian Fellowship Center” (Centro de Comu-nión Cristiana), y de las Conferencias “HonorOak”. Allí se realizaban estas conferencias tres ocuatro veces al año, a las cuales venían personasde todas partes.

“Honor Oak”Desde allí, y por un período de cuarenta y cin-

co años, Austin-Sparks ejerció una amplia y pro-funda influencia entre los cristianos de todas lasconfesiones y de diversos países. Muchos llegabana la calle “Honor Oak” para escucharlo, y parainvitarlo, a su vez, a dictar conferencias en muchoslugares.

Austin-Sparks se mantuvo en estrecho contactocon otros obreros cristianos como Bakht Singh, dela India y Watchman Nee, de China. Con este últi-mo tuvo una verdadera amistad, que se vio refor-zada durante el año de estadía de éste en Londres,en 1938. Algún tiempo antes, Nee había leído al-gunos escritos suyos y había sido grandementeayudado por ellos. Algunos creen que Nee consi-deraba a Sparks como su mentor espiritual. Sparks,a la sazón de 49 años, se sentía muy a gusto conese joven creyente chino –de sólo 35– tan aventa-jado en el conocimiento de las Escrituras.

Poco después, sin embargo, comenzó la 2ªGuerra Mundial y aquellas conferencias cesaron,pues el mundo todo estaba en turbulencia. Aun así,al terminar la Guerra hubo un período maravillosoen la historia de aquella obra y ministerio. De 1946hasta 1950 hubo conferencias llenas de la presen-cia del Señor.

SufrimientosPor diversas razones, muchos sufrimientos

vinieron a la vida de T. Austin-Sparks. A pesar deaparentar estar muy bien, el hermano Spaks sufríamucho por causa de su precaria condición de sa-lud, con dolorosas úlceras gástricas, causadas talvez por el hecho de ser tan reservado e introverti-do. Frecuentemente él se postraba por el dolor yquedaba incapacitado de continuar la obra. Contodo, una y otra vez él se levantaba, algunas vecesmuy debilitado por la enfermedad, y el Señor lousaba poderosamente. Algunas de las mejores con-ferencias fueron exactamente en épocas en que élpasaba por muchos dolores. Por eso, generalmen-te él hablaba sentado. El medio que Dios usó paradarle alivio fue a través de una cirugía en el estó-mago, lo que le trajo gran mejoría física, y más deveinte años de una vida activa por el Señor en mu-chos lugares.

“Voy a mi estu-dio. No quieroque nadie meinterrumpa.No importa loque suceda, yono saldré delcuarto hastaque tenga deci-dido qué cami-no voy a to-mar”. –Habíallegado al finalde sí mismo.

Page 34: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

34 aguas vivas

Por varias razones, muchos otros sufrimientosvinieron a su vida. Él creía que, si por un lado lacruz envuelve sufrimiento, por otro lado, ella estambién el secreto de la gracia abundante. Por ellael creyente es llevado a un disfrute más amplio dela vida de resurrección, y también a una verdaderaintegración en la comunión de la Iglesia, que es elCuerpo de Cristo. Él reconocía la gran ayuda quesignificaba para él la oración de los hermanos, yellos, a su vez, reconocían el impacto espiritualque tales sufrimientos producían en ellos.

La oposición que enfrentaba Sparks era increí-ble. Libros y panfletos se escribían contra él; pre-dicadores predicaban contra él, lo que le dabafama de ser un falso maestro, lleno de ardides.Este aislamiento total en que lo colocaban era, detodas maneras, la prueba más dura que él soporta-ba. Todos los años él asistía a la Convención deKeswick. Allí, tras la plataforma estaba escrito:“Todos somos uno en Cristo”; sin embargo, solíaser ignorado por aquellos que alguna vez habíanservido a su lado. No le dirigían ni una sola pala-bra, y le volvían la espalda. Eso era para él muchomás difícil de ser soportado que todos los otrosproblemas.

Algunas dificultades con el local de comunión“Honor Oak” hicieron que las conferencias allícesaran. Él mismo, no obstante, continuó con loshermanos, guardando intactos los lazos de la co-munión, mostrando un interés lleno de amor paracon la nueva generación, siempre compartiendocon ellos sobre adoración y oración. De hecho, laoración caracterizaba su vida aún más que la predi-cación.

Sin ‘copyright’Uno de los principales instrumentos de su mi-

nisterio, fue la revista bimestral “A Witness and ATestimony” (Un testigo y un testimonio) –“estepequeño periódico” como le llamaba él –, en quepublicó muchas de sus enseñanzas, junto con lasde otros obreros, como los ya citados, y F.B.Meyer, A.W. Tozer, Andrew Murray, De VernFromke, Jessie Penn-Lewis, G.H. Lang y StephenKaung, para citar los más conocidos. Muchos delos artículos de esta revista jamás se han vuelto apublicar. El clamor que presentan sus mensajesuna y otra vez es que los creyentes crezcan en elconocimiento pleno de Cristo, conocerlo a Élcomo el único, el todo en todo, la Cabeza de todo.Desde el principio de la publicación de “A Witnessand A Testimony” él rechazó adscribirse a algúnmovimiento, organización o misión, o a un cuerpoaislado de cristianos, porque consideraba que suministerio estaba dirigido a “todos los santos”. Élnunca pudo pensar en cristianos aislados, ni enasambleas de grupos aislados, sino que intentómantener siempre ante él el propósito divino de laredención, que es la incorporación de todos loscreyentes como miembros vivos de un cuerpo.

T. Austin-Sparks escribió alrededor de un cen-tenar de libros, y compartió muchos mensajes que

aún se hallan grabados en cintas, pero, por deseoexpreso suyo, nada de ese material tiene ‘copyrig-ht’ o derechos de autor, porque consideraba que loque le había sido dado por el Espíritu de Dios de-bía ser compartido libremente con todo el Cuerpode Cristo.

Algunos énfasis de su ministerioSparks siempre utilizaba algunas frases que, en

la época, prácticamente no eran oídas en otro lu-gar. Una de ellas era que “la iglesia es el cuerpo deCristo”, otra era que “precisamos tener una vida decuerpo”, que “los miembros de Cristo son miem-bros los unos de los otros”. Cierta vez él dijo: “Po-demos tomar la iglesia, que es el Cuerpo de nues-tro Señor Jesús, unida a la Cabeza que está a ladiestra de Dios, y reducirla a algo terreno, hacer deella una organización humana”. Todas estas fraseseran consideradas muy extrañas. En el mundo cris-tiano de entonces se hablaba sobre conversión,sobre estudio bíblico, sobre oración, sobre testimo-nio, sobre misiones, sobre vida victoriosa, peronada se oía sobre la Iglesia, sobre el Cuerpo deCristo, sobre el ser miembros los unos de los otros.Él era una voz profética solitaria. Por eso fue aisla-do, rechazado y calumniado.

Uno de los énfasis de su ministerio fue “la uni-versalidad y la centralidad de la cruz”. Para él,todo comenzaba con la cruz, venía a través de lacruz, y nada era seguro aparte de la cruz. Él acos-tumbraba decir que ningún hijo de Dios está segu-ro, hasta que le entregue su vida a Él. Que ningúnhijo de Dios realmente le sirve, hasta que le entre-gue su vida a Él. Ninguna comunión entre el pue-blo de Dios es segura, hasta que ellos hayan entre-gado sus vidas a Él. Todo vuelto hacia el altar.

Otro énfasis era “la preeminencia del SeñorJesús”. Para él el Señor Jesús era el inicio y el finde todo. El Alfa y la Omega, el Primero y el Últi-mo. Él veía que todo está en Cristo, toda la nuevacreación, el nuevo hombre, todo. Tal vez uno desus primeros libros – “La centralidad y supremacíadel Señor Jesucristo” – sea lo que mejor caracteri-ce toda su vida y ministerio. “¿Dónde está el Se-ñor?” – decía siempre. “¿Dónde está el Señor en lavida de esa persona?”, “¿dónde está el Señor en elservicio de esa persona?”, “¿dónde está el Señoren el ministerio de esa persona?”. Él acostumbrabadecir: “Si nosotros quisiéramos que venga luz deltrono de Dios, sólo hay que hacer una cosa: Darleal Señor Jesús el lugar que el Padre le dio. Esa esla forma de ser preservados de errores, de compro-misos, de desvíos, y de ser librados de comenzaren el Espíritu y terminar en la carne.”

Austin-Sparks veía la iglesia como “la casaespiritual de Dios”, como la novia de Cristo, comoel Cuerpo del Señor Jesús. Su entendimiento sobrela iglesia era muy claro. Él creía en la casa espiri-tual de Dios de la cual somos piedras vivas, edifi-cados juntos, y que debemos crecer como templodedicado al Señor, para habitación de Dios en elEspíritu. “Esto – decía – es el corazón de la histo-

SEMBLANZAS

Desde el princi-pio de la publi-cación de “AWitness and ATestimony” élrechazó adscri-birse a algúnmovimiento, or-ganización omisión, o a uncuerpo aisladode cristianos,porque conside-raba que su mi-nisterio estabadirigido a “to-dos los santos”.

Page 35: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

35aguas vivas

ria, el corazón de la redención.” Él también acos-tumbraba decir: “Hay algo mayor que la salva-ción”, por lo cual muchos se airaban contra él, ydecían que hablar de ese modo no era bíblico. PeroSparks siempre respondía: “La salvación no es elfin, sino el medio para el fin. El fin que el Señortiene es su habitación, es su casa espiritual, su ha-bitación en el Espíritu, y la salvación es el mediopara colocarnos en esa casa espiritual de Dios”.

Todavía otro énfasis de su ministerio era la“batalla por la vida”. Él acostumbraba decir que“si hay alguna vida espiritual en usted, todo el in-fierno se va a levantar para extinguirla. Si hay vidaespiritual en su ministerio, todo el infierno se va alevantar para acabar con él. Si hay vida espiritualen la comunión de los cristianos, todo el infiernose va a levantar contra ella. Tenemos que aprendercómo pelear la buena batalla de la fe y echar manode la vida eterna. Tenemos que aprender cómomantenernos en vida.”

Una y otra vez él decía que todo lo que es rela-cionado con Dios es vida. Vida, más vida, vidaabundante. No muerte, sino vida. Hasta la mismamuerte de cruz es para traernos la vida, y cuantomás conocemos la muerte de Cristo, más debemosconocer la vida de Cristo. Por tanto, esa es unabatalla por la vida.

Un último énfasis era la “intercesión”. Él acos-tumbraba decir que “el llamamiento real de la igle-sia es para interceder. Intercesión es mucho másque oración. Cualquiera puede orar, pero ustednecesita tener una madurez mínima para poder ver,para poder pasar por dolores de parto, para quehaya nacimiento. Intercesión no requiere sus la-bios, sino requiere todo su ser. No requiere diezminutos de su día, ni una hora, sino requiere deusted veinticuatro horas cada día. Es la oraciónincesante.” Su vida fue una constante batalla deoración, en que cogía literalmente a los enemigosinvisibles de la voluntad de Dios para traerlos cau-tivos, oración que alternaba con aquella clase espe-cial de oración en que se ofrece a Dios la alabanzay la adoración debida a su Nombre.

Magnificaba al SeñorAustin-Sparks fue un gran hombre, y los gran-

des hombres también tienen fallas. Él poseía debi-lidades, mas la impresión que quedaba en quienesle conocían no eran esas debilidades, sino el hechode que él siempre magnificaba al Señor Jesús, nosólo con sus palabras, sino con su vida. Su propiapresencia traía algo del Señor Jesús. Siempre queél llegaba o hablaba, se recibía la convicción decuán grandioso es el Señor Jesús. Él siempremagnificaba al Señor Jesús. Eso fue algo que elSeñor hizo en él de tal forma que su presencia y suministerio glorificaban al Señor.

Otra impresión que él dejó fue de alguien quesiempre estaba prosiguiendo. Nunca parecía que élestaba estacionado sino siempre prosiguiendo. Esoera sentido por su presencia y por su ministerio. Élacostumbraba decir: “¡No paremos! ¡Vamos ade-

lante, prosigamos! El Señor todavía tiene más luzy más verdad para hacer brotar de Su Palabra. Pro-siga, prosiga a todo aquello para lo que el Señor leconquistó”. Otra impresión que él dejó es de que élsiempre parecía ministrar bajo la unción. Ese eraun secreto que este hermano poseía. Él sabía cómopermanecer bajo la unción, para no dar comidamuerta, para no dar lo que él pensaba, sino paradar siempre aquello que Dios le había dado. Aunotra impresión que quedó de su vida es una grandeterminación en cumplir aquello que Dios le ha-bía dado para hacer. En muchas situaciones queacontecían para hacerlo desanimar y detenerse, élsentía que no podía dejar a Satanás vencer – erauna batalla por la vida.

Al final de su vida, T. Austin-Sparks estabasolo. Había muy pocas personas con él. CampbellMorgan, Jessie Penn-Lewis, F.B. Meyer y A.B.Simpson tuvieron gran influencia en su vida. Mu-chas veces y de muchas formas F.B. Meyer trajo aSparks a una relación más profunda con el Señor.Meyer acostumbraba a decir que Sparks era unavoz solitaria profética en un desierto espiritual,llamando al pueblo de Dios de vuelta a la realidad,a lo que es genuino, al propio Señor Jesús.

En abril de 1971, el hermano Sparks partió adescansar, a la espera de la resurrección.

La medida de un ministerioSi la medida del ministerio de un hombre se

mide en relación a cuánto él exaltó a Cristo, enton-ces Austin-Sparks no admite comparación. Cierta-mente, sus escritos hablan poco del Cristo deGalilea, pero él ha mostrado hermosamente al Se-ñor resucitado y entronizado. Incluso más, al mos-trar al insuperable Cristo dentro de nosotros. Lalínea de oro que une todos sus escritos es la exalta-ción de su Señor. Alguien ha dado el siguientetestimonio: “Él nos ha dado más visión espiritualde Cristo que quizá cualquier otro hombre en losúltimos 1700 años”.

Después de la muerte de Austin-Sparks en1971, un hermano escribió: “Quizá uno de susprimeros libros puede darnos un mejor indicio desu vida entera y de su ministerio: “La centralidad ysupremacía del Señor Jesucristo”. Aquí fue dondeempezó y fue aquí donde él terminó, porque fuenotorio en sus últimos años que él perdió el interésen todas las cosas y concentró su atención en lapersona de Cristo. Este era el objetivo de su vida yde todas sus predicaciones y enseñanzas”.

En su servicio fúnebre hubo centenares quedijeron sinceramente que el hermano Sparks leshabía ayudado a conocer a Cristo de una maneramás plena y satisfactoria. Si alguien puede hacerque los hombres comprendan algo más del valor ymaravilla de Cristo para que le amen más y le sir-van mejor, entonces el tal no habrá vivido en vano.

***Fuentes:“À Maturidade”, www.austin-sparks.net,“O Testemunho do Senhor e a Necessidade do

Mundo”.

SEMBLANZAS

Si la medida delministerio deun hombre semide en rela-ción a cuánto élexaltó a Cristo,entoncesAustin-Sparksno admite com-paración.

Page 36: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

36 aguas vivas

Los dos mejores librosHace muchos años había una escritora brillante en su juventud.

Se casó, y después de unos años fue a ver a una antigua amigadel college y ésta le dijo: “Querida. No he recibido ningún libro tuyodesde hace años. Creo que es una lástima que dejaras de escri-birlos.” A lo cual ella contestó: “No he dejado de escribirlos. He es-crito dos más.” “¿Cómo se llaman?”, preguntó la amiga. “Ethel yAlberto, son mis dos hijos”. “¿Tus dos hijos?” “Sí, y estoy tratandode escribir algo vivo en ellos para que todo el mundo sepa quehan estado con Jesús.”

G. Campbell Morgan, en Los triunfos de la fe

Estar cercaCuando servía en Paraguay, un indio ‘maka’ llamado Rafael vino

a sentarse en mi terraza. Yo estaba cenando, pero salí a ver loque deseaba. Él me respondió:

— “Ham, henek met”.Le pregunté de nuevo qué podía hacer por él, pero la respuesta

fue la misma. Yo entendía lo que estaba diciendo, pero no su im-portancia. Él dijo: “No deseo nada; sólo quiero estar cerca.”

Más tarde compartí el incidente con un antiguo misionero local.Él me explicó que era la forma de Rafael de honrarme. Él de ver-dad no necesitaba nada, sólo quería sentarse en mi terraza. Consólo estar cerca de mí se sentía satisfecho.

— “¿Qué te trae aquí, hijo mío?”, pregunta el Señor.— “Ham, henek met.”¿No revela esto el corazón de la adoración verdadera?

Stuart Sacks, en “Christianity Today”

El derecho del maestroCierto inglés muy rico había agregado a su valiosa colección un

violín raro que era codiciado por Fritz Kreisler, el célebre virtuoso.Cuando el propietario persistió en su rechazo de separarse delinstrumento, Kreisler pidió permiso para tocarlo aunque fuese unasola vez. La oportunidad le fue concedida y él tocó como sólo ungenio puede tocar. Se olvidó de sí mismo, derramando su alma enla música. El inglés permaneció como encantado hasta que lamúsica cesó.

—Tome el violín – exclamó él – es suyo. Yo no tengo el derechode quedarme con él, pues debe pertenecer al hombre que puedetocarlo como usted lo tocó.

En un sentido, un instrumento ¿no debe pertenecer al maestroque puede sacar de él la música más delicada? Y su vida y la mía¿no deberían pertenecer a Cristo, el Maestro que puede extraer deellas las más excelentes armonías?

Revista À Maturidade, Nº 10, 1982.

El secreto del campesinoUn campesino era conocido por su generosidad, pero sus

amigos no podían entender cómo podía dar tanto y seguir tanpróspero. Un día un portavoz de sus amigos le dijo:

— No podemos entender cómo es que dando más que el restode nosotros siempre pareces tener más que dar.

— Oh, la explicación es sencilla – dijo el campesino —, yo paleola bodega de Dios, y Él palea mi bodega, pero Él tiene una palamás grande.

Tomado de La gracia de dar, de Stephen Olford

Un idioma comúnCuenta el hermano Andrés, de nacionalidad holandesa, que en

uno de sus viajes tras la Cortina de Hierro con contrabando deBiblias, se encontró en Rumania en una oficina con dosdirigentes cristianos. Pero al momento de hablar, no pudieronentenderse porque, aunque los tres hablaban varios idiomas,ninguno era común a los tres.

De pronto, Andrés vio encima del escritorio de ellos unagastada Biblia. Entonces se le ocurrió una idea: sacó de subolsillo su pequeña Biblia y buscó 1ª Corintios 16:20: “Ossaludan todos los hermanos. Saludaos los unos a los otros conósculo santo.” Sostuvo la Biblia y señaló el nombre del libro,reconocible en cualquier idioma, y el número del capítulo yversículo. Los rostros de sus interlocutores se iluminaron deinmediato. Rápidamente encontraron el versículo en sus Biblias,lo leyeron y se sonrieron. Era Proverbios 25:25: “Como el aguafría al alma sedienta, así son las buenas nuevas de lejanastierras.”

Así comenzó un interesante y novedoso diálogo, en que serieron hasta llorar: Habían encontrado un idioma común.

El hermano Andrés, en El contrabandista de Dios

Las enfermas siguen a cualquieraEn cierta localidad había un pastor que tenía la vieja costumbre

de llamar a sus ovejas por sus nombres.Un día fue un amigo a verle y le dijo:—Déjame que me vista con tus ropas y que lleve tu cayado, y

entonces llamaré a las ovejas a ver si me siguen.Luego de disfrazado con la ropa del pastor, comenzó a llamar

por nombre a las ovejas, pero todas comenzaron a huir.Entonces le preguntó al pastor:—¿No habrá ninguna que me siga?A lo que el hombre contestó:—Sí, algunas de ellas te han de seguir.Las ovejas enfermas siguen a cualquiera.

(D.L. Moody)

Más vale que corrasEn un artículo que Herb Caen escribió para un

periódico: “En Africa, todas las mañanasdespierta una gacela. Ella sabe que debe corrermás rápido que el león más rápido, o de locontrario, la matan. Todas las mañanasdespierta un león. El sabe que debe corrermás que la gacela más lenta, osi no se muere de hambre. Noimporta si eres león ogacela: cuando sale el sol,más vale que corras.

Todo creyente en Cristoestá involucrado en unaguerra espiritual diaria. Portanto, no podemos darnosel lujo de empezar el díacomplacidamente.”

David C. Egner,en Nuestro Pan Diario.

anecdotario

MISCELÁNEA

Page 37: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

37aguas vivas

l pasaje de Timoteo en el cual aparecenestos versículos pareciera reducir a lasmujeres creyentes al silencio, a la suje-ción y a la pasividad. Pareciera eximir a

las mujeres de todo servicio en medio de la Casade Dios. Sin embargo, precisamente este versículo10 es un llamado muy fuerte a las mujeres de Diosa la acción, a una participación activa.

El hecho de que profesen piedad, es decir, queposean una comunión verdadera –de corazón– conDios, las pone en el camino y en la dirección co-rrecta para hacer buenas obras. ¿Qué correspondeque hagan las mujeres piadosas? ¡Que se atavíencon buenas obras! La expresión “como correspon-de a …” da por sentado que es propio de las muje-res vestirse de buenas obras.

Una errónea interpretación de la doctrina de lasalvación por gracia y no por obras ha llevado amuchos a pensar que, puesto que no necesitaronhacer nada para su salvación, no necesitan hacernada después de su salvación.

Sin embargo, Efesios 2:9-10 nos aclara esteasunto al decir que fuimos creados “para buenasobras”. Aunque fuimos salvos por fe, y “no porobras, para que nadie se gloríe”, la consecuencianormal de la fe y la salvación son las “buenasobras”. Aquí en Efesios somos llevados primero alos lugares celestiales para sentarnos juntamentecon Cristo, y asumir una posición de descanso,pero luego se nos trae a la tierra para que hagamosbuenas obras.

¿Qué obras? Pareciera que, al no autorizárselea hablar ni a enseñar a la mujer en la iglesia (a losvarones, se entiende), no quedara mucho que ellapueda hacer. Sin embargo, no es así.

La piedad genuina es algo que se vive, no tantoque se habla. Por tanto, una mujer piadosa esaquella que, aunque sea en silencio, y casi sin quese advierta, está sirviendo a Dios, y vistiéndosecon buenas obras.

Las buenas obras son más bellas que el mejorpeinado, y más elegantes que el más escogido delos vestidos. Una mujer estará desnuda delante deDios si no se atavía con buenas obras. Su vestidono será el lino fino de las “acciones justas” de lossantos (Ap.19:8), sino el vestido tosco y descolori-do de la negligencia y la esterilidad. Tenemos quever que las buenas obras de 1ª Timoteo 2:10 sonlas mismas ‘acciones justas’ de Apocalipsis 19:8.

Dos clases de servicioGeneralizando, podemos decir que los varones

sirven a Dios hablando y haciendo; las mujeres, encambio, sirven mejor a Dios haciendo que hablan-do. Cuando la mujer habla, fácilmente va más alláde lo que debe, por eso la Escritura pone resguar-dos a la boca de la mujer (1ª Tim.3:11; 5:13; Tito2:3). Pero cuando una mujer obra más que habla,es una mujer de Dios.

1ª Pedro 3:1-4 nos destaca dos cosas importan-tes respecto de la mujer: a) la predicación sin pala-bras de una mujer cuyo marido no es creyente.Aquí la mujer realiza una buena obra, no ‘hablan-do’ sino ‘haciendo’. b) el atavío de una mujer deDios es el del corazón, en una índole afable y apa-cible. Esto coincide con el pasaje de Timoteo.

Dos vestidosA la luz de Timoteo y Pedro, podemos concluir

que la mujer de Dios posee dos vestidos: uno son

Las mujeres de Dios tienen una esfera de servicio riquísima en la casa de Dios, queva más allá de las palabras.

“Asimismo, que las mujeres se atavíen … con buenas obras, como correspon-de a mujeres que profesan piedad” (1ª Tim.2:9-10)

MUJER

piadosasmujeres

Page 38: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

38 aguas vivasMUJER

sus buenas obras (mencionado en Timoteo), y elotro es su carácter manso y apacible (mencionadoen Pedro).

Ambos vestidos son el atavío, el adorno perfec-to, de una mujer de Dios. A la mujer le importamucho su vestido. Así pues, cada vez que una mu-jer de Dios piense en un vestido nuevo, acuérdesede estos dos vestidos que Dios ha dispuesto paraella. Ambos se obtienen sin palabras, modesta-mente. Uno constituye su belleza interior, y el otro,su belleza exterior.

Restricciones a su naturalezaUna mujer enfrenta dos grandes dificultades,

porque implican luchar contra su naturaleza: unaes domar su lengua, y la otra es poner sobriedad ensu atavío.

El orden de Dios para ella implica modificardrásticamente estos dos impulsos naturales, paraproducir un fruto esencialmente espiritual.

Así que, cuando una mujer de Dios esté siendotentada a hablar en demasía piense que el más dul-ce fruto espiritual lo puede producir sin palabras.Asimismo, cuando esté siendo tentada a exacerbarsu atavío externo, recuerde que los vestidos quemás agradan a Dios no se hacen con una tela cos-

tosa, sino que son el fruto de una piedad internamanifestada en hechos concretos externamente.

¿Qué obras son las buenas obras?Digámoslo una vez más: las buenas obras no

son para decirlas, sino para hacerlas. Ahora bien,si miramos 1ª Timoteo 5:10 encontramos una listade requisitos que debían tener las viudas para serayudadas por la iglesia. Esta es precisamente unalista de buenas obras para todas las mujeres piado-sas. En Mateo 25:34-40 hay también un listado deacciones de misericordia hacia los necesitados enla casa de Dios. Su aplicación es riquísima, puescada una de ellas puede interpretarse en sentidoespiritual y también enun sentido literal.

Así, la mujer de Diosque desee ejercitarse en lapiedad, no carecerá deoportunidades para hacer-lo. Porque Dios ha provis-to para cada uno de sushijos una esfera de servicioamplia y fructífera.

***

PARA MEDITAR

Tres clases de bendicionesLas bendiciones espirituales en los

lugares celestiales que son nuestras enCristo pueden dividirse en tres clases:

La primera la componen aquellos quellegan a nosotros inmediatamente des-pués de que creemos para salvación, ta-les como el perdón, la justificación, la re-generación, el ser hechos hijos de Diosy el ser bautizados en el Cuerpo de Cris-

to. ¡En Cristo, poseemos estas cosas aun antes de saber que sonnuestras!

La segunda clase la componen aquellas riquezas que son nues-tras por herencia, pero que no podemos disfrutar verdaderamente hastaque el Señor regrese. Esto incluye la perfección mental y moral, laglorificación de nuestros cuerpos, la completa restauración de la ima-gen divina en nuestras personalidades redimidas y la admisión a lamisma presencia de Dios para experimentar para siempre esta beatíficavisión. ¡Estos tesoros son nuestros con tanta seguridad como si losposeyésemos ahora!

La tercera clase consiste en tesoros espirituales que son nuestrospor la expiación de la sangre de Jesús, pero que no podremos poseera menos que realicemos un decidido esfuerzo por poseerlos. Estosson, la liberación de los pecados de la carne, la victoria sobre el yo, elfluir constante del Espíritu Santo en nuestra personalidad, los frutosen nuestro servicio cristiano, la conciencia de la presencia de Dios, elcrecimiento en la gracia, una creciente conciencia de unidad con Dios,y un espíritu inquebrantable de adoración. Estas cosas son para noso-tros lo que era la tierra prometida para Israel, se pueden conquistar deacuerdo a nuestra fe y valor.

A.W. Tozer, en Manantiales de lo alto

La complacencia del hombre comúnEn una cultura declinante, una de sus características es que

la gente común no se da cuenta de lo que está sucediendo. Sola-mente los que saben y pueden leer las señales de decadenciaestán planteando las preguntas que todavía no tienen respuesta.Juan Pueblo se siente cómodo en su complacencia y tan des-preocupado en cuanto a los asuntos mundiales, como un pez deestaño en una caja de revistas atrasadas. No hace preguntas,porque los beneficios sociales del gobierno le dan un falso senti-do de seguridad. Este es su problema y su tragedia. El hombremoderno se ha convertido en espectador de los acontecimientosmundiales, observando en su pantalla de televisión, sin compro-meterse. Mira desfilar ante sus ojos los ominosos acontecimien-tos de nuestra época, mientras bebe cerveza cómodamente sen-tado. No parece comprender lo que está sucediendo. No entiendeque este mundo está en llamas y que él está a punto de quemarsetambién. Billy Graham, en El mundo en llamas

El valle de sombra de muerteEs un gran arte aprender a caminar por lugares sombríos. No

te apures. En las sombras se aprenden lecciones que no se pue-den aprender a plena luz. Descubrirás alguno de los ministeriosdel Señor que no habías tenido oportunidad de conocer. Su vara ysu cayado te infundirán aliento. Una para guiarte, la otra para pro-tegerte. La oveja que se encuentre más cerca de su pastor cono-cerá de ambos. Cuando entramos al valle de sombra de muerte,nos acercamos tanto a él que lo miramos cara a cara y no deci-mos “El está conmigo”, sino “Tú estás conmigo”, porque lo otro esmuy formal, poco íntimo. La necesidad que tenemos de Cristo ysu utilidad la vemos mejor en las pruebas.”

W.Y. Fullerton, citado en Gethsemaní Nº 32

Page 39: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario

39aguas vivas

está a la venta en lassiguientes librerías

chilenas:

“SEMBRADOR”Pedro Montt 66,

Fono 239411SAN ANTONIO

“PENIEL”Rosas 1151 · Fono 6727414

SANTIAGO

“PENIEL”Avda. Apoquindo 5701

Fono 2125182Las Condes · SANTIAGO

“GÉNESIS”Isabel Riquelme 931, Local 56

CHILLÁN

“LA CRUZADA”Maipú 470

Fono 229022 · CONCEPCIÓN

“LUZ DIVINA”Galería Las Camelias

M. Montt 573, Local 203, 2º NivelCORONEL

“MARANATA”PRAT 149, Fono 714866

ANGOL

“LA CRUZADA”Aldunate 265

Fono 234688 · TEMUCO

“SALOMÓN”Galería Picarte 461, Local 10.

Fono 246676 · VALDIVIA

“BUENAS NOTICIAS”O’Higgins 854

Fono 246535 · OSORNO

“ENCUENTRO”Benavente 575, Local 7

Fono 260166PUERTO MONTT

“PAN DE VIDA”Gabriela Mistral 447

Fono 635972CASTRO

aguasvivas

cartas de nuestros lectores

Por razones de espacio, las cartas han sido resumidas.Toda bendición procede de Dios; por tanto, toda la gloria es para Dios

Recomendar el WebsiteVisité vuestro Website. Wao! Estoy muy impresiona-

da... Ya veo que ustedes hacen un equipo de trabajo exce-lente. ¡Aleluya, a Dios sea la gloria! Me gustó mucho, so-bre todo la sección de canciones (¿Se pueden bajar paradeleite privado en CD?); la de Evangelio, y la de Consulta.En fin todo me gustó, pero esas fueron mis favoritas. Voy arecomendar vuestro Website a todos mis contactos paraque visiten vuestro maravilloso trabajo.

Un abrazo en el amor de Dios,Nancy García, Puerto Rico

Cantos que tocan el corazónEn otra página web me encontré con un link hacia la

página de Aguas Vivas y me encantaron los cantos, enverdad tocaron mi corazón. Por favor, háganme saber endónde los puedo encontrar aquí en Estados Unidos o si esque hay alguna manera en que yo se los pueda comprardesde aquí. Cualquier gasto de envío yo lo pago, pero porfavor ayúdenme a conseguirlos. Que el Señor Jesucristolos siga bendiciendo. Se despide de ustedes su hermanaen Cristo Jesús,

Maria del Rosario Gallegos, Estados Unidos

Estudios con unciónEn el amor de Nuestro Señor Jesucristo, les manifiesto

que la Revista Aguas Vivas ha sido para mí de gran bendi-ción. Los estudios que se encuentran en ella son de mu-cha unción poderosa; al darle lectura mis lágrimas hanrodado por mis mejillas. Como ejemplo de ello, leí el libro«Conforme al Modelo» y, hermanos, eso es muy precioso.¡Aleluya! También leí el tema «El Primer Amor» tomado delCantar de los Cantares. ¡Gloria sea a Dios!

Deseo, si es posible, enviarme la revista por correonormal, ya que me gustaría recibirla en mi casa.

Cristóbal González, Diriamba-Carazo, Nicaragua.

Desde la Radio RRBMe llegó un mail indicando dirección de su página

Web. Al estar visitándoles, me llamó mucho la atención lamúsica que tienen allí. Me gustaría saber si pueden facili-tar esta música en forma de CD para usarla en nuestraRed RRB. También pido el favor de enviar textos y acordespara guitarra. Desde ya, muy agradecido por su gentileza.

Bajo la sombra del TodopoderosoJuan López, Director de Emisoras RRB www.bbnradio.org

Charlotte, NC, USA

¿Por qué tanta demora?Visito frecuentemente su página en la red, la que ha

sido de gran bendición en mi vida. Es maravilloso poderencontrar un remanso de paz en este lugar, que el serhumano también utiliza para fines muy perversos. Quisiera

CARTAS

COLABORE CON «AGUAS VIVAS»¿Ha estado leyendo algo edificante en algún libro, periódico, revista o página Web cristianos? ¡Comparta la bendición con los demás! Agradeceremos suscolaboraciones para las secciones “Perfiles”, “Citas escogidas”, “Para Meditar”, “Parábolas”, y “Anecdotario” de “Aguas Vivas”. Al hacerlo, por favor, adjunte losdatos de la fuente, y sus propios datos personales (nombre, ciudad, país). Enviar a: [email protected] ¡Muchos le agradecerán!

consultar el porqué de tanta demora en transcribir los“Mensajes desde Centenario”, ya que el último data dehace un mes. ¿Sería posible tenerlos más pronto en lared? Gracias por poner a nuestro alcance libros tan mara-villosos como «Los amigos también tienen que morir» o«Las riquezas de su gracia». El Señor les colme de bendi-ciones hoy y siempre por el privilegio que tienen de poderexpresar su palabra de manera tan clara, y tan llena deamor.

Les saludo respetuosamente esperando una buenaacogida a esta.

Mª Eugenia Soto Santibáñez, Chile

Sin mezquindadEs un placer, hermanos, estar nuevamente en contacto

con Uds. desde el otro lado de la cordillera. Gracias por lagenerosidad que despierta vuestro corazón al enviarmecada edición impresa de “Aguas Vivas”. Espero en el 2003continuar recibiendo el riquísimo material que ustedesrealizan, compartiendo el amor de Jesucristo a través decada nota, que bendice a tantos hermanos en todo elplaneta.

Suyo en el Amor de CristoLuis Rivero, Ministerio Radial “En Compañía de Jesús”

Buenos Aires - Argentina

Compañeras de viajeDeseo felicitarles de todo corazón. El trabajo en español

y en inglés eleva la categoría del material que se estáentregando y que se necesita. La Iglesia de Cristo la requiere.Todos los temas entregados son de mucho valor espiritual.En un Ministerio de tanto viaje como el que el Señor nos hadado, sus revistas son mis buenas compañeras de viaje.

Dios les bendiga ricamente,Ps. Miguel Angel Escobar

Terraglobe Ministries International

Centrados en CristoDeseo felicitarles por su excelente labor en pro del

evangelio y de ministrar a las personas a través de suprestigiosa revista “Aguas Vivas”, así por el gran numerode edificantes mensajes que publican en Internet. Lo quemás me ha llamado la atención es que Uds. son cristianosbastante centrados en Cristo, en sus enseñanzas y en loque espera de nosotros en la actualidad. También meagrada mucho el hecho que abran sus puertas a todos loscristianos del mundo, no importando su denominación.

Sigan por favor adelante con su excelente labor, yaque es muy necesaria en estos tiempos. Gracias porprestarse a ser un poderoso instrumento en las manos deDios para que el mundo conozca de manera acertada yverdadera a Dios, a Cristo, y su revelación en la Biblia.

Carlos Robles Castro, Guadalajara, México

¡Renueve su suscripción de “Aguas Vivas” para el año 2003!En Chile: $6.000 anual, 6 ejemplares (incluye correo aéreo)

Contactarse con Jorge Geisse Dumont, Fono (45)343429, Fax (45)642904 o por correo, a la casilla 3050, Temuco, Chile.

Page 40: 2 PRESENTACIÓN vivas · 2 aguas PRESENTACIÓN vivas Además: Parábolas (05) · Citas escogidas (16) Perfiles (20) · Bocadillos de la mesa del Rey (27) Desde el griego (31) · Anecdotario