EL GRUPO INSTITUYENTE DEL SUJETOY EL SUJETO INSTITUYENTE DEL GRUPO *

Analizando la obra de Enrique Pichon-Riviere, el itinera-rio que sigue en su desarrollo, nos encontramos con unautor que accede a la temtica de la intersuejetiuidad apartir de su interrogarse por la intrasubjetiuidad. Es lapregunta por el sujeto' y su acontecer, particularmente porese tipo de experiencia que se denomina psicosis lo que lollevar a interrogarse por la interaccin, el vnculo, el gru-po, su estructura y su eficacia determinante. Desde sudescubrimiento de que la enfermedad mental, esa modali-dad peculiar de significarse a s y al mundo, de interpretarla experiencia, es un emergente, es decir, tiene sus condicio-nes de produccin en ciertas formas deinteraccin fami-liar, la problemtica del ~ujeto y la temtica, del grupoquedarn definitivamente articuladas en su pensamiento entanto se reenvan recprocamente.

En la relacin teraputica, y a partir del anlisis delproceso transferencial Enrique Pichon-Riviere accede a un

* Conferencia dictada en el Centro de Investigacin y Asesoramien-to en Psicologa, en' 1984.

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mundo interno, dimensin intrasubjetiva que tiene las carac-tersticas de una trama argumental interna, de una dramti-ca en la que se articulan e interactan el self y los objetosinternos. Interaetan relacionndose con las caractersticasde una formacin grupal. En la "conducta rplica", en la"falsa conexin" de la transferencia, Enrique Pichon-Rivierevea no slo actualizarse deseos, sino como lo seala Neuy-rat, .a una relacin del pasado interrogar a esa relacin delpresente. Acceda a las formas de esa dramtica internaporque sta intentaba desplegarse en el e~pacio transicionalde la relacin teraputica, espacio del grupo. Y ese desple-garse se manifestaba por un adjudicar roles o intentar asu-mirlos, por un reeditar modelos de relacin inscriptos enese mundo interno, sostenidos en esa trama argumentaldesde la que se interpretaba la realidad. En el paciente

. psictico o neurtico esa dramtica condiciona un empo-brecimiento de la relacin sujeto-mundo, la intensidad delestereotipo revela una detencin del aprendizaje. El carcterinteraccional, grupal, dramtico de la dimensin. intrapsqui-ea haba sido adelantado por Freud a partir de las diversasformulaciones del concepto de fantasa y en particularcuando en "Psicologa de las masas y anlisis del yo"afirma: "en la vida psquica est siempre integrado el otro,como objeto, modelo, rival o ayudante".

A la vez, desde la Escuela Inglesa, de tanta influenciaentonces (fines de la dcada del '40 y dcada del '50) en elpensamiento de Enrique Pichon-Riviere se plantea que lasprimeras fantasas se experimentan como sensaciones, peroque toman ms tarde la forma de imgenes plsticas yrepresentaciones dramticas. Podemos preguntamos: qu hechos de su prctica clnica llevaban a ese psicoanalista,que tena a su disposicin esas respuestas en las que eldeseo inconsciente y la actividad pulsional aparecan comoartfices de esa dramtica, a seguirse interrogando por suorigen? Y qu lo llevaba a centrar su indagacin en losprocesos de interaccin, la dialctica entre sujetos, buscan-do las condiciones de produccin de esa dramtica, replan-

tendose el concepto de relacin de objeto y sustituyndolopor el de vnculo 1, en el que se adjudica eficacia no slo auna interrelacin fantasmtica, produccin del sujeto, sino ala accin del otro, del objeto, que se mueve de hecho haciala gratificacin o frustracin, resituando as el lugar fundan-te de la experiencia con el otro, de las relaciones reales conel contexto, en la constitucin de lo subjetivo?

Cmo llega Enrique Pichon-Riviere a elaborar la hip-tesis de que la enfermedad es un emergente, es decir unacualidad nueva que aparece en un campo interaecional yque tiene sus condiciones de produccin en un proceso deinteraccin que denominamos patogentico, siendo el queenferma portavoz de ese proceso?

Su prctica teraputica, particularmente en el campo dela llamada "urgencia" psiquitrica lo contactaba no slocon el paciente en crisis, sino con su grupo familiar, tam-bin en crisis. Y en este grupo la situacin de crisis, laemergencia de la enfermedad en uno de sus integrantesdes-cubre con toda crudeza los mecanismos de interaccin.La crisis funciona como analizador, en el sentido de quepermite explicitaciones de lo hasta all encubierto o implci-to. Qu queda al descubierto? Las formas de comunica-cin, el sistema de fantasas que organiza la interaccingrupal, la adjudicacin y asuncin de roles, las formas de lamutua representacin intema, las alianzas y exclusiones, lossecretos grupales, las proyecciones masivas, las depositacio-nes, el destino de la necesidad de los integrantes, que eshabitualmente un destino de negacin o frustracin sistem-tica. El mecanismo de segregacin que comienza a estructu-rarse y que da cuenta de que el portavoz empieza a sersignificado por los otros como el portador de lo siniestro,

1 Vnculo: estructura compleja que incuye un sujeto, un objeto,su mutua interrelacin y procesos de comunicacin y aprendizaje.(Pichon-Riviere, E., El proceso grupal, Ed. Nueva Visin).

de lo que "debiendo permanecer oculto se ha manifestado".Ese contacto le permite establecer ciertas correspondencias;algunas hiptesis acerca de una relacin de causalidad dia-lctica, no lineal, no especular, entre el acontecer del pa-ciente y el acontecer del grupo 2. Ese contacto espontneoes tan revelador que Enrique Pichon-Riviere lo transformaen recurso tcnico, y ya en ese encuadre una investigacinsistemtica de esas relaciones pone de manifiesto los nexosentre ese sistema interno, esa dramtica (mundo interno delportavoz) y la interaccin grupal. Grupo familiar y pacienteaparecen articulados en un sistema o "gestalt", en unarelacin cambiante de figura y fondo. Esto es: esa investiga-cin sistemtiCa, dada ya en el abordaje grupal familiar delproceso del enfermarse, revela relaciones de causalidad dia-lctica entre la estructura y dinmica de ese grupo familiary la estructura y dinmica del mundo interno del portavoz.

Esto conduce a Enrique Pichon-Riviere a caracterizar aese mundo interno, a esa trama argumental como recons-truccin fantaseada de la trama de relaciones en la queemerge, trama que es escenario de su experiencia y ladetermina, la significa, la organiza. As el mergente de laenfermedad, ese delirio, ese discurso psictico, ese snto-ma, remite como signo a un proceso interaccional, con unpresente y con una historia, proceso que ha operado comocondicin de produccin de esa estructura (la del grupointerno) y de la actual quiebra entre grupo interno ygrupo externo. La enfermedad es indicador, denunciantedel funcionamiento de esa estructura grupal.

2 La posicin de Enrique Pichon-Riviere no puede ser identificadacon la antipsiquiatra; la antlpsiquiatra idealiza la enfermedad, o la 1niega. La denuncia se define lcida. Para Enrique Pichon-Riviere laenfermedad es ruptura con la realidad, denuncia ciega, que no sabeque denuncia. Lo que se idealiza 'no puede ser transformado, rescata-mos el valor de la crisis como posibilidad de cambio, de desestructu-racin de lo previo. Se trata de no simplificar la complejidad de lopsquico, la relacin mundo interno-mundo externo es dialctica, nomecnica.

Eso lo lleva a pensar que esa conducta no tiene slo unsentido intrapsquico sino que es esencialmente relacionalaun la aparentemente ms aislada, y en tanto relacional e~tambin 9ireccional. Es seal, respuesta en un cdigo grupalcuyas claves deben ser descifradas. Y que ese desciframientoslo puede darse en el contexto de la red vincular en la quese configura.

El sujeto se comporta en un contexto que es, comodecamos, horizonte de su experiencia, organizador y deter-minante de la misma, slo en ese contexto esa conductaadquiere entonces significatividad y coher~ncia.

Esto nos conduce a una aparente paradoja: que paracomprender lo intrasubjetivo debemos, en gran medida,descentramos de esa intrasubjetividad, focalizando la inter-subjetividad que la determina. Lo requerido ser entonces elanlisis de la dialctica ntre grupo interno y grupo exter-no, entre lo intrasubjetivo y lo intersubjetivo, en la indaga-cin de la complejidad de causas internas y condicionesexternas.

El descubrimiento de la eficacia de la interaccin quepuede generar patologa o por el contrario, promover elaprendizaje, el desarrollo de identidad, la fortaleza yoica,llevan a Enrique Pichon-Riviere a un camino de investiga-cin, en el que se interrogar por el lugar del otro, delvnculo, del grupo, de las instituciones y de las relacionessociales en la constitucin de lo subjetivo. Esta investiga-cin culminar en una concepcin del sujeto como "social ehistricamente determinado", que es en cada aqu y ahorala sntesis, el punto de llegada de una historia vincular ysocial. El sujeto se constituye como tal en una relacindialctica con el mundo, relacin que tiene su motor en lanecesidad. Necesidad que lo vuelca sobre el mundo en buscade la fuente de gratificacin.

Pero el mundo para el sujeto humano se da a suexperiencia entretejido de vnculos y relaciones sociales,que determinan a esos vnculos. Son estos vnculos y rela-ciones entonces los que configuran la subjetividad.

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Para Enrique Pichon-Riviere el sujeto es en primer tr-mino sujeto de la necesidad, y desde all accede a lasrepresentaciones, las significaciones sociales, las normas. Esatransformacin del sujeto de la necesidad en sujeto de lasignificacin tiene como escenario e instrumento la interac-cin, el vnculo, el grupo. Dice Enrique Pichon-Riviere: "Elhombre es un ser de necesidades que slo se satisfacensocialmente en relaciones que lo determinan, nada hay en lque no sea resultado de la interaccin entre individuos,grupos y clases" . Pero ese sujeto, en tanto sujeto de lanecesidad, lo es tambin de la praxis. Es actor, productor,protagonista de su historia vincular y social. Jerarquizadesde aqu el problema de la accin, y se replantea latemtica de la cura, elaborando un criterio de salud, a laque caracteriza como "adaptacin activa a la realidad",aprendizaje, relacin de modificabn recproca, de mutuatransformacin de s y del contexto.

El sujeto para Enrique Pichon- Riviere, si bien emer-gente, producido, configurado y determinado desde lo vin-cular social, no es slo el sub-jectum de la necesidad; entanto sujeto de la accin destinada a satisfacerla, es sujetodel pro-jeetum, de la accin transformadora, de la creati-vidad.

La sujecin a la r:ecesidad, como punto de partida deuna accin destinada a satisfacerla, es condicin de unapraxis, en la que el sujeto se proyecta sobre el mundo, searticula con otros en un hacer, en una tarea. Este hacer conotros, esta interaccin en funcin de la necesidad es rasgoesencial y fundan te de esa estructura que denominamosgrupo.

Sealamos hasta aqu que el grupo instituye al sujeto,que como dice Ren Kaes, el grupo es apoyo del psiquismo.Apuntaremos a mostrar cmo el sujeto de la praxis y de larepresentacin a su vez instituye al grupo. Cmo se da ladialctica entre funcin instituyerite del grupo en el sujetoy del sujeto en el grupo.

Enrique Pichon-Riviere define al grupo como "conjunto

restringido de personas, que ligadas por constantes de tiem-po y espacio y articuladas por su mutua representacininterna, se proponen en forma explcita o implcita unatarea que constituye su finalidad, interactuando a travs decomplejos mecanismos de adjudicacin y asuncin de ro-les" .

Toda definicin, en tanto intenta conceptualizar la esen-cia de un proceso, alude a los principios que rigen laemergencia y desarrollo de ese proceso. Llamamos' a esosprincipios "organizadores internos". Cules seran entoncespara Enrique Pichon-Riviere los principios organizadores in-ternos de la: estructura grupal, sus rasgos determinantes?Un complejo de necesidades-objetiva-tarea y la mutua re-presentacin interna. El grupo se constituye a partir de lasnecesidades de los integrantes y en la mutua representacininterna.

Cada sujeto se incluye en una dialctica, en 'Jn interjue-go con otros a partir de una contradiccin interna entrenecesidad y satisfaccin, contradiccin que slo puede re-solverse en una experiencia, en una relacin con otro. Deall que el vnculo como unidad iIlteraccional bsica y elgrupo como trama vincular constituyan a la vez escenario einstrumento de resolucin de necesidades. Esto tiene unahistoricidad individual y social. El otro o los otros aparecenintrincados en el interjuego necesidad-satisfaccin, en unared de expectativas, adquiriendo entonces significatividad.Esto tiene como consecuencia que la accin hacia el otroen tanto fundada en la necesidad, sea direccional, intencio-nal. Tiene un objetivo que podr o no ser explcito. Laaccin hacia el otro, como bsqueda del objeto para logrargratificacin o evitar la privacin, tiene siempre una fina-lidad. Por eso es que Enrique Pichon-Riviere sostiene que"no hay vnculo y en consecuencia grupo sin tm:ea"; yaque toda relacin se establece con un sentido de operativi-dad, logrado o no. Dentro de esta constelacin necesi-dad-objetiva-tarea que da lugar a la constitucin de ungrupo, que organiza internamente esa red interaccional, po~

demos caracterizar al objetivo como aquello que, definidodesde la necesidad, significara su satisfaccin, aquello de loque se carece y a lo que se tiende. La tarea a su ve;!:podraentenderse como el proceso, el conjunto de acciones desti-nadas al logro del objetivo; la tarea se plantea desde lanecesidad y es la transformacin de esa ausencia, de esacarencia en aquello que la satisface. Implica necesariamentetransformacin de la realidad interna y externa. Para Enri-que Pichon-Riviere el grupo se plantea como una estructurade accin, de operacin; de all que todo grupo sea enesencia una estructura operativa. Esta concepcin del grupotiene consecuencias a nivel metodolgico. La tcnica degrupo operativo apunta a centrar la interaccin en el reco-nocimiento de las necesidades, elaboracin de un proyectoy desarrollo de la tarea, potencializndose la accin grupalen tanto se visualicen, aborden y resuelvan las contradiccio-nes que emergen en la marcha hacia el objetivo grupal.

La interaccin no es slo un proceso motivado, fundadoen la necesidad y con una illtencionalidad. Es tambin unproceso eficaz. Uno de sus efectos, el ms significativo, esla constitucin, modificacin o reestructuracin del mundointerno de los sujetos comprometidos en ese proceso. Laaccin en el mundo externo, la relacin, la experiencia conel otro se inscribe en una dimensin intrasujeto, alcanzaotro nivel de existencia como huella, como registro de laexperiencia en el escenario. interno o mundo interno. Elvnculo se instituye como tal cuando cada. sujeto, cadaactor reconstruye en su interioridad, la trama relacional dela que participa. En la interioridad de cada uno de los in-tegrantes de la red interaccional se inscribe, adquiriendoentonces otra vigencia, otra calidad, la situacin que articu-la un complejo de actores, necesidades y objetivos quedefinen un proyecto y en consecuencia una tarea. Estainscripcin de la trama interaccional en cada uno de lossujetos, efectivizada en la mutua representacin interna ointemalizacin recproca, coherentiza y estructura esatrama. Le da su carcter de sistema.

El proceso de interiorizacin recproca como instanciaconstitutiYa del grupo fue estudiado en primer trmino porSartre. En Crtica de la Razn Dialctica afirma que elgrupo se constituye como tal cuando todos y cada uno delos integrantes sintetiza, totaliza en su interioridad el con-junto de relaciones en el que est incluido. Se denomina aeste proceso configurador sntesis policntrica o to taliza-cin. Desde all y desde su hacer el sujeto se convierte enagente de constitucin del grupo, instituye al grupo. En eseproceso instituyen te se liga con todos y cada uno porrelaciones de interioridad :r,ecproca, o como dice Laing, porrelaciones de co-inherencia.

Podemos decir que a partir de esta mutua representa-cin interna, segn Enrique Pichon-Riviere, se configura un"lugar" del grupo, que no es su mbito espacial, sino laestructura representacional que se apoya en todos y cadauno de los miembros del mismo. Esa estructura representa-cional no es slo efecto de la interaccin, ser de all enms tambin determinante de la misma; es la que sostiene,como interjuego de fantasas, los mecanismos de adjudica-cin y asuncin de roles. En esa mutua representacininterna se apoyan los sentimientos de pertenencia grupal,esa vivencia de contar con los otros que permite la planifi-cacin conjunta.

Esa internalizacin recproca o mutua r~presentacininterna no es inerte; es proceso que continan desarrollandotodos y cada uno de los integrantes; la praxis grupal consis-te no slo en un hacer, es tambin esa sntesis activa, poreso el grupo es acto, es proceso permanente.

"El nosotros del grupo -dice Sartre-- es un nosotrosprctico, no ontolgico". Con esto afirmamos que el grupono es un sujeto, sino un sistema de sujetos fundado en supraxis. Esa estructura es construccin de los sujetos, yconstruccin permanente. Enrique Pichon-Riviere dice "elgrupo es gestalt-gestaltung, estructura-estructurando", y conesto podemos retomar la idea ya planteada: la de la dialc-tica de la funcin instituyente del grupo en el sujeto.

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Sujeto constantemente determinado por ese proceso interac-cional, y del sujeto en el grupo, al que hace, configura concada acto, con cada representacin.

He intentado demostrar aqu que el grupo es estructuraen movimiento en que lo mltiple se unifica, adquierecoherencia interna a partir de dos principios organizadoresque operan con interdependencia, a) necesidades, objetivo ytarea, y b) la mutua representacin interna, internalizacinrecproca, por la que adquiere vigencia interna, en todos ycada uno, la situacin interaccional en su complejidad.Sntesis que tiene como agente a cada integrante, sntesisque es a la vez proceso y producto, siempre en movimiento,siempre en totalizacin, nunca acabada. Y que el sujeto es ala vez productor de ese proceso y su emergente, determina-do y determinante, instituido e instituyente.

Freud, S. "Psicologa de las masas y anlisis del yo", O.C., TomoXVIII, Ed. Amorrortu, 1979.

Pichon-Riviere, E., "Prlogo" en El proceso grupal, Ed. Nueva Vi-sin, 1975.

Pichon-Riviere, E., "Estructura de una Escuela destinada a la for-macin de psiclogos sociales" en El proceso grupal, Ed. Nue-va Visin, 1975.

Pichon-Riviere, "Aportaciones a la didctica de la psicologa social"(en colaboracin con Ana P. de Quiroga), en El proceso grupal,Ed. Nueva Visin. 1975.

Sartre, J.P., Crtica de l"arazn dialctica, Tomo II, Ed. Losada.Kaes, R., El aparato psquico grupal, Gedisa, 1977.Kaes, R., "El apoyo grupal del psiquismo individual", Revista te-

mas de psicologa social", NQ Extraordinario, 1981.Quiroga, Ana P. de, "El concepto de grupo y los principios organiza-

dores de la estructura grupal en el pensamiento de E. Pichon-Riviere", en este mismo volumen.

Quiroga, Ana P. de, "La concepcin del sujeto en el pensamiento deE. Pichon-Riviere", en este mismo volumen.