34567ABRIL DE 2021

ART´ICULOS QUE SE ESTUDIAR

´AN

DEL 7 DE JUNIO AL 4 DE JULIO DE 2021

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IMAGINEMOS que vamos de excursión con un grupopor una zona peligrosa cubierta de nieve. Nos acompañaun guı́a experto que va marcando el camino con sus hue-llas sobre la nieve. De repente, dejamos de verlo, perono nos asustamos. Todo el grupo sigue las pisadas delguı́a lo mejor posible.

2 En cierto modo, los verdaderos cristianos vamos ca-minando por una zona peligrosa: este mundo malvado.Menosmal que Jehová nos ha dado un guı́a perfecto —suHijo, Jesucristo— para que sigamos “fielmente sus pa-sos” (1 Ped. 2:21). Según una obra de consulta bı́blica,Pedro estaba comparando a Jesús a un guı́a. Ası́ como unexcursionista puede seguir el camino que le marca suguı́a, nosotros podemos seguir los pasos que nos marcóJesús. Ahora bien, ¿qué son esos pasos? ¿Por qué debe-mos seguirlos? Y¿cómo podemos hacerlo?

¿QU´E SIGNIFICA SEGUIR LOS PASOS DE JES

´US?

3 ¿Qué significa seguir los pasos de alguien? En la Bi-blia, las palabras andar y pies a veces se refieren a lo quealguien hace a lo largo de su vida (Gén. 6:9; Prov. 4:26).El ejemplo de una persona se puede comparar a los pasosque da o las huellas que deja al andar. Ası́ que seguir lospasos de alguien significa seguir su ejemplo o imitarlo.

4 Entonces, ¿qué significa seguir los pasos de Jesús?En pocas palabras, imitar su ejemplo. En el texto te-

1, 2. ¿Qué ejemplo nos ayuda a entender las palabras de 1 Pedro 2:21?3. ¿Qué significa seguir los pasos de alguien?4. ¿Qué significa seguir los pasos de Jesús?

ART´ICULO

DE ESTUDIO 14

Sigamos sus pasosfielmente

“Cristo sufrió por ustedes y ası́ les puso el ejemplo para quesiguieran fielmente sus pasos” (1 PED. 2:21).

CANCI´ON 13

Cristo es nuestro modelo

AVANCE

Los verdaderos cristianostenemos que seguir los pa-sos de Jesús fielmente.En este artı́culo, veremosqué son esos pasos, porqué debemos seguirlos ycómo hacerlo.

mático, el apóstol Pedro mencionó enconcreto el buen ejemplo que Jesús nospuso al aguantar el sufrimiento. Perohaymuchas otras cosas de Jesús que po-demos imitar (1 Ped. 2:18-25). En rea-lidad, todo lo que él hizo y dijo a lolargo de su vida es un ejemplo para noso-tros.

5 Pero ¿podemos los seres humanosimperfectos seguir el ejemplo de Je-sús? Claro que sı́. Pensemos que Pedrono dijo que siguiéramos los pasos de Je-sús “perfectamente”, sino “fielmente”.Si seguimos sus pasos con cuidado, ha-ciendo todo lo que podamos dentro denuestras posibilidades, estaremos apli-cando el consejo del apóstol Juan de“seguir andando” tal como lo hizo Jesús(1 Juan 2:6).

5. Explique por qué todos podemos seguir el ejem-plo perfecto de Jesús aunque somos imperfectos.

¿POR QU´E DEBEMOS SEGUIR

LOS PASOS DE JES´US?

6 Si seguimos los pasos de Jesús, nosacercaremos a Jehová. ¿Por qué? En pri-mer lugar, porque Jesús nos dejó unejemplo extraordinario de lo que signifi-ca vivir de una manera que le agrade aDios (Juan 8:29). Ası́ que, si seguimoslos pasos de Jesús, Jehová estará con-tento. Además, tenemos la seguridad deque nuestro Padre celestial se acercará alos que se esfuerzan por ser sus amigos(Sant. 4:8).

7 En segundo lugar, Jesús imitó a su Pa-dre demanera perfecta. Por eso pudo de-cir: “El que me ha visto a mı́ ha visto alPadre también” (Juan 14:9). Imitamos aJehová cuando imitamos las cualidades yla manera de tratar a otros de Jesús; por

6, 7. ¿Por qué si seguimos los pasos de Jesús nosacercaremos a Jehová?

Podemos seguirfielmente los pasosque Jesús nos marcó.(Vea los párrafos 1 y 2).

ejemplo, la ternura con la que trató a unleproso, la empatı́a que le mostró a unamujer que tenı́a una angustiosa enferme-dad y la compasión con la que trató aquienes habı́an perdido a un ser querido(Mar. 1:40, 41; 5:25-34; Juan 11:33-35).Cuantomás nos esforzamospor ser comoJehová, más cerca estamos de él.

8 Si seguimos los pasos de Jesús, no nosdistraeremos con este mundo malvado.Su última noche en laTierra, Jesús pudodecir: “He vencido al mundo” (Juan16:33). Lo que quiso decir es que se negóa permitir que este mundo influyera ensus metas y en su manera de pensar yactuar. Se esforzó por nunca perder devista el motivo por el que habı́a veni-do a la Tierra: santificar el nombre deJehová. ¿Qué haremos nosotros? Haymuchas cosas que podrı́an distraernos.Pero, si nos concentramos en hacer lavoluntad de Jehová, como hizo Jesús,nosotros también lograremos “vencer almundo” (1 Juan 5:5).

9 Si seguimos los pasos de Jesús, ten-dremos vida eterna. Cuando un jovenrico le preguntó a Jesús qué tenı́a quehacer para conseguir la vida eterna,él le contestó: “Ven y sé mi seguidor”(Mat. 19:16-21). A algunos judı́os queno creı́an que él era el Cristo, Jesús lesdijo: “Mis ovejas [...] me siguen. Yo lesdoy vida eterna” (Juan 10:24-29).Ya Ni-codemo, un miembro del Sanedrı́n quequerı́a saber lo que Jesús enseñaba, ledijo que los que demostraran tener fe enél conseguirı́an vida eterna (Juan 3:16).

8. Explique por qué seguir los pasos de Jesús nosayudará a “vencer al mundo”.9. ¿Qué debemos hacer para no salirnos del cami-no que lleva a la vida eterna?

Demostramos fe en Jesús cuando aplica-mos lo que él enseñó con sus palabras ycon su ejemplo. Si lo hacemos, no nossaldremos del camino que lleva a la vidaeterna (Mat. 7:14).

¿C´OMO PODEMOS SEGUIR

LOS PASOS DE JES´US FIELMENTE?

10 Para poder seguir los pasos de Jesúsfielmente, primero debemos llegar a co-nocerlo (lea Juan 17:3). Llegar a cono-cer a Jesús es un proceso continuo. Te-nemos que conocerlo cada vez mejor, esdecir, aprender sobre sus cualidades, sumanera de pensar y sus normas. Sea quellevemosmucho o poco tiempo en la ver-dad, todos debemos seguir esforzándo-nos por llegar a conocer a Jehová y a suHijo.

11 Jehová nos quiere tanto que, para

10. ¿Qué debemos hacer para llegar a conocermejor a Jesús? (Juan 17:3).11. ¿Qué contienen los cuatro Evangelios?

4 LA ATALAYA

ABRIL DE 2021 5

ayudarnos a conocer a su Hijo, hizoque en su Palabra se incluyeran los cua-tro Evangelios. Estos son relatos histó-ricos de la vida y el ministerio de Je-sús. Nos cuentan lo que él dijo, hizo ysintió. Estos cuatro libros nos ayudana pensar detenidamente en su ejemplo(Heb. 12:3). Por ası́ decirlo, en ellos ve-mos los pasos de Jesús. Si analizamoslos Evangelios, podemos llegar a cono-cerlo cada vez mejor y ası́ seguir sus pa-sos fielmente.

12 No basta con leer los Evangelios parasacarles el máximo provecho. Tenemosque sacar tiempo para estudiarlos condetenimiento y meditar en lo que lee-mos (compare con Josué 1:8). Veamosdos sugerencias que pueden ayudarnos ameditar en lo que leemos en los Evange-lios y a aplicarlo.

12. ¿Cómo podemos beneficiarnos al máximo delos Evangelios?

13 Primero, darles vida a los relatos delos Evangelios. Usemos nuestra imagina-ción para ver, oı́r y sentir lo que estabapasando en aquel momento. Nos puedeser útil buscar información en las publi-caciones que nos da la organización deJehová. Analicemos el contexto del pa-saje que estamos estudiando. Busque-mos información sobre la gente, los lu-gares y lo que pasó antes y después de loque estamos leyendo. Si se trata de unrelato que aparece en otros Evangelios,comparémoslos y tal vez encontraremosdetalles interesantes que incluye un es-critor pero otro no.

14 Segundo, aplicar los relatos de losEvangelios (Juan 13:17). Después dehaber estudiado con detenimiento un

13. ¿Cómo podemos darles vida a los relatos delos Evangelios?14, 15. ¿Qué tenemos que hacer para aplicar losrelatos de los Evangelios?

Al igual que Jesús, felicitemos a otrospor darle lo mejor de sı́ mismos a Jehová.(Vea los párrafos 19 y 20).

relato de los Evangelios, preguntémonos:“¿Qué me enseña este relato? ¿Cómopuedo usarlo para ayudar a otros?”. Pen-semos en alguien en concreto a quien lepodrı́a ayudar; entonces, cuando sea elmomento oportuno, contémosle con tac-to y cariño la lección que hemos apren-dido.

15 Veamos un ejemplo de cómo poneren práctica estas dos sugerencias. Anali-zaremos el relato de la viuda pobre queJesús observó en el templo.

LA VIUDA POBRE EN EL TEMPLO16 Darle vida al relato (lea Marcos

12:41). Visualicemos la escena. Es el11 de nisán del año 33. Queda menos deuna semana para la muerte de Jesús, y élha estado gran parte del dı́a enseñandoen el templo. Los lı́deres religiosos quese oponen a él han estado poniéndolo aprueba. Algunos han cuestionado su au-toridad y otros han tratado de acorralar-lo haciéndole preguntas para entrampar-lo (Mar. 11:27-33; 12:13-34). EntoncesJesús se va a otra parte del templo, posi-blemente a la zona conocida como el pa-tio de las mujeres. Puede ver las arcasdel tesoro a lo largo de los muros del pa-tio. Se sienta y empieza a observar ala gente que echa sus contribuciones.Ve a muchos ricos echar muchas mone-das. Tal vez está lo suficientemente cer-ca como para oı́r el ruido de las monedascuando caen en las arcas.

17 (Lea Marcos 12:42). Poco des-pués, Jesús se fija en una mujer po-

16. Describa la escena que se cuenta en Mar-cos 12:41.17. ¿Qué hizo la viuda pobre mencionada en Mar-cos 12:42?

bre, “una viuda necesitada” (Luc. 21:2).La vida no es nada fácil para ella; casi se-guro que el dinero no le llega ni para vi-vir. Aun ası́, se acerca a una de las ar-cas y, tratando de no llamar la atención,echa dos moneditas, que tal vez apenashagan ruido al caer. Pero Jesús sı́ sabe loque acaba de echar: dos leptones, la mo-neda de menos valor de aquella época.Eso no daba ni para comprar un gorrión,que estaba entre las aves más baratasque se vendı́an como alimento.

18 (Lea Marcos 12:43, 44). Jesús estámuy impresionado por lo que hace estaviuda. Ası́ que llama a sus discı́pulos,hace que se fijen en ella y les dice: “Estaviuda pobre echó en las arcas del tesoromás que todos los demás”. A continua-ción, les explica: “Todos ellos [especial-mente los ricos] dan de lo que les sobra;pero ella, que es tan pobre, lo echó todo,todo lo que tenı́a para vivir”. Ese dı́a,al echar hasta su última moneda, estafiel mujer demostró que confiaba en queJehová la cuidarı́a (Sal. 26:3).

19 Aplicar el relato. Preguntémonos:“¿Qué puedo aprender de lo que Jesúsdijo sobre la viuda pobre?”. Pensemos enella. Sin duda, le habrı́a gustado darlemás a Jehová. Aun ası́, hizo todo lo quepudo; le dio a Jehová lo mejor. Y Je-sús sabı́a que lo que ella contribuyó te-nı́a mucho valor para su Padre. Esto nosenseña una importante lección: que aJehová le agrada que le demos lo mejor,que le sirvamos con todo el corazón ycon toda el alma (Mat. 22:37; Col. 3:23).

18. Según Marcos 12:43, 44, ¿qué dijo Jesús so-bre la contribución de la viuda?19. ¿Qué importante lección podemos aprenderde lo que Jesús dijo sobre la viuda pobre?

6 LA ATALAYA

Le hace feliz que hagamos todo lo quepodemos. Y eso incluye la cantidad detiempo y las energı́as que dedicamos aadorarlo, por ejemplo, cuando predica-mos y cuando vamos a las reuniones.

20 ¿Cómo podemos aplicar lo que he-mos aprendido del relato de la viuda?Pensemos en ciertos hermanos a los queles harı́a bien que les recordáramos queJehová está contento con lo que hacen.Por ejemplo, ¿conocemos a alguna her-mana mayor que se sienta culpable oinútil porque ya no puede hacer tantocomo antes en la predicación debido asus achaques? ¿O sabemos de algún her-mano que tenga una enfermedad cróni-ca y dolorosa, y que lo desanime no po-der ir a todas las reuniones? Podemosayudarlos diciéndoles unas palabras deánimo (Efes. 4:29). Contémosles la con-movedora lección que hemos aprendidodel relato de la viuda pobre. Lo que lesdigamos les recordará que Jehová estácontento si hacemos todo lo que pode-mos (Prov. 15:23; 1 Tes. 5:11). Cuando

20. ¿Cómo podemos aplicar lo que hemos apren-dido del relato de la viuda? Dé algún ejemplo.

felicitamos a otros por darle a Jehová lomejor de sı́ mismos —aunque les parezcapoca cosa—, estamos siguiendo los pa-sos de Jesús fielmente.

21 Estamos muy agradecidos de que enlos Evangelios haya tantos detalles sobrela vida de Jesús y ası́ podamos seguir suspasos fielmente. ¿Verdad que serı́a bue-na idea emprender un proyecto de estu-dio personal o en familia sobre los Evan-gelios? Para sacarle el máximo beneficioa un proyecto ası́, tenemos que darlesvida a los relatos y aplicarlos. Por otrolado, además de imitar lo que Jesús hizo,es muy importante que escuchemos loque dijo. En el próximo artı́culo, analiza-remos lo que podemos aprender de loque Jesús dijo cuando estaba colgado enel madero.

21. ¿Qué está usted decidido a hacer?

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DESCRIPCI´ON DE LAS IM

´AGENES. Páginas 4 y 5:

Una hermana medita en lo que Jesús dijo de laviuda pobre y después felicita a una hermana ma-yor por servir a Jehová de toda alma.

¿QU´E RESPONDER

´IA?

˛ ¿Qué significa seguir los pa-sos de Jesús?

˛ ¿Por qué debemos seguirlos pasos de Jesús?

˛ ¿Cómo podemos sacarle elmáximo beneficio al estudiode los Evangelios?

CANCI´ON 15

Alabemos al Primogénito de Jehová

ES EL 14 de nisán del año 33. Después de acusarlo falsa-mente y condenarlo por un delito que no ha cometido,los enemigos de Jesús se burlan de él, lo torturan sin pie-dad y lo clavan en un madero. Con las manos y los piesatravesados, cada vez que respira y cada vez que hablasiente un terrible dolor. Pero no puede quedarse callado,pues tiene cosas importantes que decir.

2 Analicemos lo que Jesús dijo cuando estaba colgadoen el madero y lo que podemos aprender de sus palabras.Dicho de otra manera: vamos a escucharlo (Mat. 17:5).

“PADRE, PERD´ONALOS”

3 Lo que dijo Jesús. Después de que lo clavaron en elmadero, Jesús le pidió a Jehová: “Padre, perdónalos”.¿A quiénes se referı́a? Lo que dijo a continuación nos dauna pista: “No saben lo que hacen” (Luc. 23:33, 34). Pro-bablemente se referı́a a los soldados romanos que le ha-bı́an atravesado las manos y los pies. No sabı́an quién eraél en realidad. Puede que también se refiriera a algunasde las personas que antes habı́an exigido su muerte peroque más tarde pondrı́an su fe en él (Hech. 2:36-38). Je-sús no permitió que las injusticias que habı́a sufrido lollenaran de rencor y amargura (1 Ped. 2:23). Al contra-rio, le pidió a Jehová que perdonara a los responsablesde su muerte.

1, 2. ¿En qué circunstancias dijo Jesús sus últimas palabras antes demorir?3. ¿A quiénes se referı́a Jesús cuando dijo: “Padre, perdónalos”?

ART´ICULO

DE ESTUDIO 15

¿Qué aprendemosde las últimaspalabras de Jesús?“Este es mi Hijo amado; él tiene mi aprobación. Escúchenlo”(MAT. 17:5).

CANCI´ON 17

“Quiero”

AVANCE

Como dice Mateo 17:5,Jehová quiere que escu-chemos a su Hijo. En esteartı́culo, analizaremos loque podemos aprender delo que Jesús dijo cuandoestaba colgado en el ma-dero.

8

4 Lo que aprendemos. Igual que Jesús,tenemos que estar dispuestos a perdo-nar a los demás (Col. 3:13). Es posibleque algunas personas —incluidos fami-liares nuestros— se pongan en nuestracontra porque no comprenden nuestrascreencias y nuestramanera de vivir. Pue-de que digan mentiras sobre nosotros,nos humillen delante de otros, rompannuestras publicaciones o hasta nos ame-nacen con hacernos daño en sentido fı́-sico. En vez de guardarles rencor, po-demos pedirle a Jehová que les abralos ojos para que algún dı́a acepten laverdad (Mat. 5:44, 45). A veces puedeser difı́cil perdonar, sobre todo si noshan tratado muy mal. Pero, si permiti-mos que la amargura y el rencor nos en-venenen el corazón, nos perjudicamosnosotros mismos. Una hermana expli-ca: “Entiendo que perdonar a los de-más no significa que apruebe su manerade actuar o que permita que se aprove-chen de mı́; significa que decido desha-cerme del rencor” (Sal. 37:8). Cuandodecidimos perdonar, elegimos no dejarque las cosas negativas nos amarguen lavida (Efes. 4:31, 32).

“ESTAR´AS CONMIGO EN EL PARA

´ISO”

5 Lo que dijo Jesús. Junto a Jesús, fi-jaron en maderos a dos delincuentes.Al principio, los dos también se burlaronde él (Mat. 27:44). Pero después unodejó de hacerlo, pues se dio cuenta deque Jesús no habı́a hecho “nada malo”(Luc. 23:40, 41). Y no solo eso; tam-

4. ¿Qué nos enseñó Jesús al estar dispuesto aperdonar a sus enemigos?5. ¿Qué le prometió Jesús a uno de los delincuen-tes que estaban a su lado, y por qué le hizo esapromesa?

bién demostró que creı́a que Jesús resu-citarı́a y llegarı́a a ser rey. Le dijo: “Je-sús, acuérdate de mı́ cuando entres entu Reino” (Luc. 23:42). Está claro quetenı́a mucha fe. Jesús le contestó: “Yote aseguro hoy: estarás conmigo en elParaı́so”, no en el Reino (Luc. 23:43).La frase “estarás conmigo” indica queera una promesamuypersonal. Jesús sa-bı́a que su Padre es misericordioso; poreso pudo darle esperanza a aquel delin-cuente poco antes de que muriera (Sal.103:8).

6 Lo que aprendemos. Jesús es el vivoreflejo de su Padre (Heb. 1:3). Jehovádesea perdonarnos y mostrarnos miseri-cordia si nos arrepentimos sinceramentede las cosas malas que hicimos en el pa-sado y tenemos fe en el sacrificio deJesucristo (1 Juan 1:7). Pero ¿qué po-demos hacer si a veces se nos hace difı́-cil creer que Jehová perdonará nuestroserrores del pasado? Pensemos en lo si-guiente: poco antes de morir, Jesús lemostró misericordia al delincuente querecién comenzaba a demostrar fe. En-tonces, ¿cómo no les va a mostrar mise-ricordia Jehová a sus siervos fieles, quese esfuerzan al máximo por obedecerlo?(Sal. 51:1; 1 Juan 2:1, 2).

“AH´I TIENES A TU HIJO”,

“AH´I TIENES A TU MADRE”

7 Lo que dijo Jesús (lea Juan 19:26, 27). Jesús querı́a que su madre,que posiblemente era viuda, estuvierabien atendida. Una vez que él muriera,

6. ¿Qué aprendemos de lo que Jesús le dijo al de-lincuente?7. Según Juan 19:26, 27, ¿qué les dijo Jesús a Ma-rı́a y a Juan, y por qué?

ABRIL DE 2021 9

sus hermanos podrı́an satisfacer sus ne-cesidades materiales. Pero, al parecer,ellos todavı́a no eran discı́pulos. Ası́ que,¿quién se encargarı́a de las necesidadesespirituales de Marı́a? Juan era un após-tol fiel y uno de los mejores amigos deJesús. Para Jesús, quienes adoraban aJehová eran como su familia en senti-do espiritual (Mat. 12:46-50). Por eso,

como amaba a su madre y le preocupabasu bienestar, Jesús le confió su cuidadoa Juan, pues sabı́a que él la ayudarı́a aseguir sirviendo a Jehová. Le dijo a Ma-rı́a: “Ahı́ tienes a tu hijo”, y luego le dijoa Juan: “Ahı́ tienes a tu madre”. A partirde aquel momento, Marı́a vio a Juancomo si fuera su hijo y él cuidó de ellacomo si fuera su madre. Jesús le mostró

10 LA ATALAYA

1. “Padre, perdónalos”.Debemos estar dispuestos a perdonara los demás.

2. “Estarás conmigo en el Paraı́so”.Jehová desea mostrarnos misericordia.

3. “Ahı́ tienes a tu hijo”, “Ahı́ tienesa tu madre”.Tenemos una maravillosafamilia espiritual.

4. “Dios mı́o, ¿por qué me hasabandonado?”.Jehová no siempre nos protegeráde las pruebas.

5. “Tengo sed”.Pedir ayuda no es señal de debilidad.

6. “¡Se ha cumplido!”.Debemos estar decididos a mantenernosleales todos los dı́as.

7. “En tus manos encomiendo mi espı́ritu”.Tenemos la seguridad de que Jehovános resucitará si morimos.

Lo que nos enseñansus últimas palabras

ABRIL DE 2021 11

un gran amor a la mujer que con tantocariño lo habı́a cuidado desde el dı́a enque nació y que ahora estaba junto a élen el dı́a de su muerte.

8 Lo que aprendemos. Es posible queestemosmás unidos a los hermanos de lacongregación que a nuestra familia di-recta. Puede que algunos parientes sepongan en nuestra contra o hasta nosabandonen. Pero, como Jesús prometió,si nos mantenemos cerca de Jehová y desu organización, recibiremos “100 vecesmás” de lo que perdamos. Muchos llega-rán a ser como hijos, hijas, madres opadres para nosotros (Mar. 10:29, 30).¿Cómo nos sentimos al formar parte deuna familia espiritual que está unida por-que todos tenemos fe y amamos a Jeho-vá y a los hermanos? (Col. 3:14; 1 Ped.2:17).

“DIOS M´IO, ¿POR QU

´E

ME HAS ABANDONADO?”9 Lo que dijo Jesús. Poco antes de mo-

rir, Jesús gritó: “Dios mı́o, Dios mı́o,¿por qué me has abandonado?” (Mat.27:46). La Biblia no explica por quédijo Jesús esas palabras. Pero pense-mos en lo que nos enseñan. Por unlado, al decirlas, Jesús estaba cumplien-do la profecı́a que se encuentra en Sal-mo 22:1.� Por otro lado, sus palabrasdejan claro que Jehová no puso “un cer-co protector” alrededor de su Hijo (Job1:10). Jesús comprendió que su Padre lo

� En la sección “Preguntas de los lectores” de este nú-mero se analizan algunas posibles razones por las queJesús citó las palabras de Salmo 22:1.

8. ¿Qué aprendemos de lo que Jesús les dijo a Ma-rı́a y a Juan?9. ¿Qué nos enseñan las palabras de Jesús regis-tradas en Mateo 27:46?

habı́a dejado por completo en manos desus enemigos para que él pudiera demos-trar su fe hasta la muerte, como ningúnotro ser humano ha sido probado jamás.Además, con aquellas palabras confir-mó que no habı́a cometido ningún delitoque mereciera la muerte.

10 Lo que aprendemos. Una lección esque no debemos esperar que Jehová nosproteja de las pruebas. Igual que Jesús,tenemos que estar preparados para serfieles hasta la muerte si fuera necesa-rio (Mat. 16:24, 25). Pero sabemos queDios no permitirá que seamos probadosmás allá de lo que podamos soportar(1 Cor. 10:13). Otra lección que apren-demos es que, igual que Jesús, tal vezsuframos injusticias (1 Ped. 2:19, 20).La gente no se pone en contra nuestraporque hayamos hecho algo malo, sinoporque no somos parte del mundo y da-mos testimonio de la verdad (Juan 17:14;1 Ped. 4:15, 16). Jesús entendı́a por quéJehová estaba permitiendo que sufrie-ra. En cambio, algunos siervos fieles, alpasar por pruebas, se han preguntadopor qué Jehová permitı́a lo que estabapasando (Hab. 1:3). Como es misericor-dioso y paciente, Jehová entiende queno es que les falte fe, sino que necesi-tan el consuelo que solo él puede darles(2 Cor. 1:3, 4).

“TENGO SED”11 Lo que dijo Jesús (lea Juan 19:28).

¿Por qué dijo Jesús que tenı́a sed? Paraque ası́ se cumpliera la profecı́a que

10. ¿Qué lecciones aprendemos de lo que Jesús ledijo a su Padre?11. ¿Por qué dijo Jesús las palabras que leemos enJuan 19:28?

12 LA ATALAYA

encontramos en Salmo 22:15, que dice:“Mi fuerza se ha secado como una vasi-ja de barro; la lengua se me pega a lasencı́as”. Además, teniendo en cuenta elterrible dolor que sentı́a al estar colgadoen el madero, y después de todo lo quehabı́a sufrido, es lógico que tuviera mu-cha sed. Necesitaba ayuda para calmarla.

12 Lo que aprendemos. Jesús no pensa-ba que expresar cómo se sentı́a fueraseñal de debilidad, y nosotros tampocodeberı́amos pensarlo. Puede que, por logeneral, no nos sintamos cómodos ha-blándoles a otros de lo que necesitamos.Pero, si en algún momento necesitamosayuda, no dudemos en pedirla. Por ejem-plo, si somos mayores o estamos enfer-mos, quizás tengamos que pedirle a unamigo que nos lleve a hacer alguna com-pra o a una cita médica. Si nos sentimosdesanimados, tal vez tengamos que pe-dirle a un anciano o a otro hermano ma-duro que nos escuche o que nos diga“una buena palabra” que nos dé áni-mo (Prov. 12:25). Recordemos que nues-tros hermanos nos quieren y desean ayu-darnos “en tiempos de angustia” (Prov.17:17). Pero no pueden leernos la mente,ası́ que no sabrán que necesitamos ayudaa menos que se lo digamos.

“¡SE HA CUMPLIDO!”13 Lo que dijo Jesús. Más o menos a las

tres de la tarde del 14 de nisán, Jesúsdijo: “¡Se ha cumplido!” (Juan 19:30).Unos momentos antes de morir, Jesússupo que habı́a hecho todo lo que Jeho-

12. ¿Qué aprendemos de que Jesús dijera que te-nı́a sed?13. ¿Qué consiguió Jesús al mantenerse leal has-ta la muerte?

vá querı́a que hiciera. ¿Qué consiguió almantenerse leal hasta la muerte? Prime-ro, dejó claro que Satanás es unmentiro-so, pues demostró que un ser humanoperfecto podı́a ser totalmente fiel a pe-sar de los esfuerzos de Satanás. Segun-do, dio su vida como rescate. Gracias asu sacrificio, los seres humanos imper-fectos pueden tener una buena relacióncon Dios y la esperanza de vivir parasiempre. Y, tercero, Jesús defendió lasoberanı́a de Jehová y el buen nombrede su Padre.

14 Lo que aprendemos. Debemos estardecididos a mantenernos leales todoslos dı́as. Veamos lo que dijo el hermanoMaxwell Friend, que era profesor de laEscuela Bı́blica de Galaad de la Watch-tower. En una asamblea internacional,dijo lo siguiente en un discurso sobre lalealtad: “No dejes para mañana lo quepuedas hacer o decir hoy. ¿Estás segurode que habrá un mañana? Vive cada dı́acomo si fuera tu última oportunidad dedemostrar que eres digno de vivir parasiempre”. Como dijo el hermano, viva-mos cada dı́a como si fuera nuestra últi-ma oportunidad de mantenernos leales.Ası́, aun si morimos, podremos decirle aJehová: “He hecho todo lo posible porserte leal, por demostrar que Satanás esun mentiroso, y por vindicar tu nombrey tu soberanı́a”.

“EN TUS MANOSENCOMIENDO MI ESP

´IRITU”

15 Lo que dijo Jesús (lea Lucas 23:46).Lleno de confianza, Jesús dijo: “¡Padre,

14. Explique cómo debemos vivir cada dı́a.15. Según Lucas 23:46, ¿de qué estaba convenci-do Jesús?

en tus manos encomiendo mi espı́ritu!”.Sabı́a que su futuro dependı́a de Jehováy estaba convencido de que su Padre seacordarı́a de él.

16 Lo que aprendemos. Estemos dis-puestos a poner nuestra vida en las ma-nos de Jehová. Para hacer eso, debemosconfiar en él con todo nuestro cora-zón (Prov. 3:5). Pensemos en el ejemplode Joshua, un joven Testigo que tenı́a15 años y sufrı́a una enfermedad termi-nal. Se negó a aceptar tratamientos mé-dicos que iban en contra de las leyes deDios. Poco antes de morir, le dijo a sumamá: “Estoy en las manos de Jehová”.Y añadió: “Puedo decirte esto con todacerteza, mamá: sé que Jehová me resuci-tará.

´El ha visto mi corazón y sabe que lo

amo de veras”.� Todos deberı́amos pre-guntarnos: “Si me enfrento a una prueba

� Vea el artı́culo “La fe de Joshua: una victoria para losderechos del niño”, de la revista ¡Despertad! del 22 deenero de 1995.

16. ¿Qué aprendemos del ejemplo de Joshua?

ymi vida está en peligro, ¿memantendréleal y confiaré en que Jehová me recor-dará y me resucitará?”.

17 Sin duda, las últimas palabras de Je-sús nos enseñan lecciones importantes.Nos recuerdan que tenemos que perdo-nar a los demás y confiar en que Jeho-vá nos perdonará. Tenemos el honorde pertenecer a una maravillosa fami-lia espiritual que está ahı́ para ayudar-nos. Pero, cuando necesitemos ayuda,debemos pedirla. Sabemos que Jehovános ayudará a soportar cualquier prue-ba. Entendemos lo importante que es vi-vir cada dı́a como si fuera nuestra últimaoportunidad de mostrar nuestra lealtady tenemos la seguridad de que Jehovános resucitará si morimos.

18 Si ponemos en práctica todas es-tas lecciones, estaremos haciendo lo queJehová dijo respecto a su Hijo: “Escú-chenlo” (Mat. 17:5).

17, 18. ¿Qué lecciones hemos aprendido? (Veatambién el recuadro “Lo que nos enseñan sus últi-mas palabras”).

¿QU´E LECCIONES HEMOS APRENDIDO DE LO QUE JES

´US DIJO EN ESTOS PASAJES?

˛ Lucas 23:34, 43, 46. ˛ Mateo 27:46. ˛ Juan 19:26-28, 30.

CANCI´ON 126

Siempre fuertes, fieles y firmes

14

CUANDO Adán —que era perfecto— pecó, perdió laoportunidad de que tanto él como los hijos que tuvieravivieran para siempre. Lo que Adán hizo no tenı́a excusa,pues pecó voluntariamente. Merecı́a morir. Pero ¿y sushijos? Ellos no tenı́an nada que ver en el pecado de Adán(Rom. 5:12, 14). ¿Se podrı́a hacer algo para rescatarlos dela pena de muerte? Claro que sı́. Poco después de queAdán pecara, Jehová fue revelando cómo rescatarı́a a losmillones de descendientes de Adán de la maldición delpecado y la muerte (Gén. 3:15). En su debido momento,Jehová enviarı́a a su Hijo desde el cielo “para dar su vidacomo rescate a cambio demuchas personas” (Mar. 10:45;Juan 6:51).

2 ¿Qué es el rescate? En las Escrituras Griegas Cristia-nas, es el precio que Jesús pagó para recuperar lo queAdán habı́a perdido (1 Cor. 15:22). ¿Por qué lo necesita-mos? Porque, según la Ley, la norma de justicia de Jeho-vá exigı́a que se diera “vida por vida” (

´Ex. 21:23, 24).

Adán perdió su vida humana perfecta. Ası́ que, paracumplir con la norma de justicia divina, Jesús tenı́a quedar su vida humana perfecta (Rom. 5:17). De esta mane-ra, llega a ser el “Padre Eterno” de todos los que ponensu fe en el rescate (Is. 9:6; Rom. 3:23, 24).

3 Jesús estuvo dispuesto a sacrificar su vida por el granamor que siente por su Padre y por nosotros (lea Juan14:31; 15:13). Ese mismo amor lo motivó a ser leal hastala muerte y a hacer la voluntad de su Padre. Gracias a

1, 2. ¿Qué es el rescate, y por qué lo necesitamos?3. Según Juan 14:31 y 15:13, ¿por qué estuvo Jesús dispuesto a sacri-ficar su vida humana perfecta?

ART´ICULO

DE ESTUDIO 16

Demos siempre graciaspor el rescate“El Hijo del Hombre vino [...] para dar su vida como rescatea cambio de muchas personas” (MAR. 10:45).

CANCI´ON 18

Gracias por el rescate

AVANCE

¿Por qué tuvo quepasar Jesús por una muer-te cruel? Este artı́culo con-testará esta pregunta yaumentará nuestra grati-tud por el rescate.

Pensemos en todo lo que Jesússufrió para pagar el rescate.(Vea el párrafo 4).

16 LA ATALAYA

eso, se cumplirá el propósito original deJehová para los seres humanos y parala Tierra. En este artı́culo, veremos porqué Dios permitió que Jesús sufrieratanto antes de morir. También repasare-mos brevemente el ejemplo de un escri-tor bı́blico que agradecı́a profundamen-te el rescate.Y, por último, analizaremoscómo nosotros también podemos de-mostrar nuestra gratitud y valorar cadavez más el sacrificio que Jehová y Jesúshicieron por nosotros.

¿POR QU´E PERMITI

´O DIOS

QUE JES´US SUFRIERA?

4 Tratemos de imaginar cómo fue el úl-timo dı́a de Jesús en la Tierra. Se dejóapresar y golpear sin piedad por los sol-dados romanos a pesar de que podı́a ha-ber llamado a varias legiones de ángelespara que lo protegieran (Mat. 26:52-54;Juan 18:3; 19:1). Lo azotaron con un lá-tigo que le desgarraba la carne. Después,le hicieron cargar con un pesado postesobre su espalda ensangrentada. Jesúscomenzó a arrastrar el madero hasta ellugar de la ejecución. Pero enseguida lossoldados romanos obligaron a un hom-bre a cargarlo por él (Mat. 27:32). Cuan-do por fin Jesús llegó al lugar dondemo-rirı́a, sus verdugos le clavaron las manosy los pies al madero. El peso de su cuer-po le abrı́a todavı́a más las heridas de losclavos. Mientras sus amigos y su madresufrı́an y lloraban, los gobernantes ju-dı́os se burlaban de Jesús (Luc. 23:32-38; Juan 19:25). Esta agonı́a se prolongódurante horas. Su corazón y sus pulmo-nes estaban al lı́mite de sus fuerzas, ycada vez le costaba más respirar. Sabien-

4. Describa cómo murió Jesús.

do que habı́a sido leal, con su últimoaliento oró a Jehová. Entonces, inclinóla cabeza y entregó su vida (Mar. 15:37;Luc. 23:46; Juan 10:17, 18; 19:30). ¡Quémuerte tan lenta, dolorosa y humillante!

5 Para Jesús, lo peor no fue la manerade morir, sino la acusación por la que loejecutaron. Lo acusaron falsamente deblasfemia, es decir, faltarle el respeto aDios o a su nombre (Mat. 26:64-66).La idea de ser acusado de blasfemia ator-mentaba tanto a Jesús que esperaba quesu Padre lo librara de esa humillación(Mat. 26:38, 39, 42). ¿Por qué permitióJehová que su querido Hijo sufriera ymuriera? Veamos tres razones.

6 En primer lugar, Jesús tenı́a que sercolgado en un madero para liberar a losjudı́os de una maldición (Gál. 3:10, 13).Recibieron esa maldición porque habı́anprometido obedecer la Ley de Dios yno lo habı́an hecho. A esta se le añadı́a lacondena que habı́an heredado por el pe-cado de Adán (Rom. 5:12). La Ley queDios le habı́a dado a Israel establecı́aque un hombre que cometı́a un pecadoque merecı́a la pena de muerte tenı́a queser ejecutado. Después, en algunos ca-sos, el cadáver se colgaba en un madero(Deut. 21:22, 23; 27:26).� Ası́ que, al sercolgado en un madero, Jesús hizo posi-ble que la misma nación que lo habı́a re-chazado se beneficiara de su sacrificio.

� Los romanos tenı́an la costumbre de clavar o atar a unmadero a los condenados mientras todavı́a estaban vi-vos. Jehová permitió que su Hijo muriera de esta ma-nera.

5. Para Jesús, ¿qué era peor que la manera en quemurió?6. ¿Por qué tenı́a que ser colgado Jesús en un ma-dero?

ABRIL DE 2021 17

7 En segundo lugar, Dios permitió quesu Hijo sufriera a fin de prepararlo parasu papel de Sumo Sacerdote. Jesús ex-perimentó lo difı́cil que es obedecer aDios al pasar por pruebas severas. Sintiótanta presión que tuvo que pedir ayu-da en oración “con fuertes clamores ylágrimas”. Sin duda, después de pasarpor una angustia emocional tan intensa,Jesús nos comprende y “está capacita-do para ayudar a los que son puestos aprueba”. Qué agradecidos estamos deque Jehová haya nombrado a un SumoSacerdote que “pueda compadecerse denuestras debilidades” (Heb. 2:17, 18; 4:14-16; 5:7-10).

8 En tercer lugar, Jehová permitió queJesús sufriera tanto para respondera esta importante pregunta: ¿puedenlos seres humanos mantenerse leales aJehová hasta bajo las pruebas más du-ras? Satanás dice que no, pues afirmaque servimos a Dios por egoı́smo. Ade-más, cree que, al igual que nuestro ante-pasado Adán, no amamos a Jehová (Job1:9-11; 2:4, 5). Como Jehová estaba con-vencido de que su Hijo serı́a leal, per-mitió que Jesús fuera probado hasta ellı́mite. Con su lealtad, Jesús demostróque Satanás es un mentiroso.

UN ESCRITOR B´IBLICO QUE AGRADEC

´IA

PROFUNDAMENTE EL RESCATE9 La enseñanza del rescate ha fortale-

cido la fe de muchos cristianos. Han se-guido predicando a pesar de la oposición

7. ¿Cuál es la segunda razón por la que Dios per-mitió que su Hijo sufriera?8. ¿Cuál es la tercera razón por la que Dios permi-tió que Jesús fuera probado hasta el lı́mite?9. ¿Qué ejemplo nos puso el apóstol Juan?

y, durante toda su vida, han aguantadodiferentes pruebas. Veamos el ejemplodel apóstol Juan. Predicó lealmente laverdad acerca de Cristo y del rescate se-guramente por más de 60 años. Tenı́acasi 100 años de edad cuando el Imperioromano lo consideró tal amenaza que loexiliaron a la isla de Patmos. ¿Cuál fue sudelito? “Hablar acerca de Dios” y “dartestimonio acerca de Jesús” (Apoc. 1:9).¡Qué ejemplo tan extraordinario de fe yaguante!

10 En los libros bı́blicos que escribió,Juan expresa su profundo amor por Je-sús y su gratitud por el rescate. En ellos,hace más de 100 referencias al rescate oa sus beneficios. Por ejemplo, escribió:“Si alguno comete un pecado, tenemosun ayudante que está junto al Padre: Je-sucristo, uno que es justo” (1 Juan 2:1, 2). Además, destacó la importancia de“dar testimonio acerca de Jesús” (Apoc.19:10). Está claro que Juan agradecı́aprofundamente el rescate. ¿Cómo pode-mos demostrar que sentimos lo mismo?

¿C´OMO PODEMOS DEMOSTRAR

NUESTRA GRATITUD POR EL RESCATE?11 Resistamos la tentación de pecar.

Si de verdad agradecemos el rescate,no pensaremos: “No hace falta que meresista a la tentación. Puedo pecar y des-pués pedir perdón”. En vez de eso, cuan-do nos enfrentemos a la tentación dehacer algo malo, diremos: “¡No! ¿Cómopodrı́a hacer algo ası́ después de todo loque Jehová y Jesús han hecho por mı́?”.

10. ¿Cómo mostró Juan su gratitud por el rescateen los libros bı́blicos que escribió?11. ¿Qué puede ayudarnos a no caer en la tenta-ción?

18 LA ATALAYA

Aparte de eso, podemos pedirle fuerzasa Jehová y rogarle: “No nos dejes caer enla tentación” (Mat. 6:13).

12 Amemos a nuestros hermanos. Cuan-do lo hacemos, también demostramosgratitud por el rescate, ya que Jesúsno dio su vida solo por nosotros, sinotambién por nuestros hermanos. Si él es-tuvo dispuesto a morir por ellos, es por-que los ama mucho (lea 1 Juan 3:16-18). Lamanera en que los tratamos es unreflejo de nuestro amor por ellos (Efes.4:29, 31-5:2). Los ayudamos cuando es-tán enfermos o cuando están pasandopor duras pruebas, como por ejemplo undesastre natural. Pero ¿cómo debemosreaccionar cuando un hermano hace odice algo que nos ofende?

13 ¿Tenemos la tendencia a guardarrencor a quienes nos ofenden? (Lev.19:18). Si es ası́, pongamos en prácticaeste consejo: “Sigan soportándose unosa otros y perdonándose con generosi-dad incluso si alguno tiene una razón

12. ¿Cómo podemos seguir el consejo que leemosen 1 Juan 3:16-18?13. ¿Por qué debemos perdonar?

para quejarse de otro. Jehová los perdo-nó con generosidad a ustedes, ası́ quehagan ustedes igual” (Col. 3:13). Cadavez que perdonamos a un hermano, ledemostramos a nuestro Padre celestialque agradecemos el rescate de verdad.¿Cómo podemos valorar cada vez máseste regalo de Dios?

¿C´OMO PODEMOS VALORAR

CADA VEZ M´AS EL RESCATE?

14 Démosle gracias a Jehová por el res-cate. Joanna, una hermana de 83 añosque vive en la India, dice: “Creo quees importante mencionar el rescate enmis oraciones cada dı́a y darle graciasa Jehová por él”. En nuestras oracio-nes personales, pensemos en los erroresque hemos cometido durante el dı́a ypidámosle a Jehová que nos perdone.Aunque, si hemos cometido un pecadograve, también tendremos que pedirlesayuda a los ancianos. Ellos nos escucha-rán y nos aconsejarán con cariño usandola Biblia. Además, orarán con nosotros yle pedirán a Jehová que nos perdonegracias al sacrificio de Jesús para que

14. ¿Qué nos ayudará a valorar más el rescate?

Si valoramos elrescate de verdad,resistiremos latentación de pecar.(Vea el párrafo 11).

nos podamos recuperar espiritualmente(Sant. 5:14-16).

15 Meditemos en el rescate. Una herma-na de 73 años llamada Rajamani dice:“Cuando leo todo lo que Jesús sufrió,los ojos se me llenan de lágrimas”. Puedeque nosotros también nos emocionemosal pensar en lo mucho que sufrió el Hijode Dios. Pero, cuantomás meditemos enel sacrificio que Jesús hizo, más los ama-remos a él y a su Padre. A fin de conse-guir esto, ¿por qué no incluimos el resca-te en nuestro estudio personal?

16 Enseñemos a otros sobre el rescate.Cada vez que les hablamos a otros sobreel rescate, lo valoramos más. Tenemosmuy buenas herramientas para explicarpor qué Jesús tuvo que morir por noso-tros. Por ejemplo, podemos usar la lec-ción 4 del folleto Buenas noticias de partede Dios, que se titula “¿Quién es Jesu-cristo?”. O podemos usar el capı́tulo 5del libro ¿Qué nos enseña la Biblia?, titula-do “El rescate, el mayor regalo de Dios”.Ycada año nuestra gratitud por el resca-

15. ¿Por qué deberı́amos apartar tiempo para leersobre el rescate y meditar en él?16. ¿Cómo nos beneficia enseñarles a otros sobreel rescate? (Vea la imagen de la portada).

te aumenta al asistir a la Conmemora-ción de la muerte de Jesús y al invitarcon entusiasmo a otros a hacer lo mis-mo. ¡Qué honor es que Jehová nos hayaencargado enseñarles a otros sobre suHijo!

17 Estamos convencidos de que tene-mos buenas razones para valorar el res-cate y no dejar de sentirnos agradecidospor él. El rescate hace posible que ten-gamos una buena amistad con Jehováaunque seamos imperfectos. Gracias alrescate, se desharán por completo lasobras del Diablo (1 Juan 3:8). Además,se llevará a cabo el propósito original deJehová de que la Tierra sea un paraı́so yde que todos lo amen y le sirvan. Ası́ quebusquemos cada dı́a maneras de mostrarnuestra gratitud por el rescate, el mayorregalo de Dios para la humanidad.

17. ¿Por qué es el rescate el mayor regalo de Diospara la humanidad?

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DESCRIPCI´ON DE LAS IM

´AGENES. Página 18: Un

hermano resiste la tentación de mirar imágenesinapropiadas; otro, la de fumar tabaco, y otro, lade aceptar un soborno.

¿QU´E RESPONDER

´IA?

˛ ¿Qué es el rescate? ˛ ¿Por qué tuvo que sufriry morir Jesús?

˛ ¿Cómo podemos valorarcada vez más el rescate?

CANCI´ON 20

Enviaste a Jesús, tu Hijo amado

20

¡QU´E felices nos hace saber que “Jehová está encantado

con su pueblo”! (Sal. 149:4).´El se fija en nuestras buenas

cualidades, ve nuestro potencial y nos regala su amistad.Mientras le seamos fieles, siempre estará cerca de noso-tros (Juan 6:44).

2 Puede que alguien diga: “Yo sé que Jehová ama a supueblo en general, pero ¿cómo sé que me ama a mı́?”.¿Por qué puede ser que algunos hermanos se hagan esapregunta? Veamos lo que dice Oksana,� que tuvo una in-fancia muy dura: “Cuando me bauticé y me hice precur-sora, me sentı́a muy feliz. Pero 15 años después empeza-ron a invadirme recuerdos muy dolorosos. Llegué a laconclusión de que ya no tenı́a la aprobación de Jehová yde que nomerecı́a queme amara”. Una precursora llama-da Yua, que también tuvo una infancia difı́cil, cuenta:“Le dediqué mi vida a Jehová porque querı́a hacerlo fe-liz, pero estaba convencida de que él nunca podrı́a que-rerme”.

3 Al igual que estas dos fieles hermanas, puede que no-sotros amemos profundamente a Jehová pero nos cues-te creer que él nos ama. En este artı́culo responderemosestas dos preguntas: ¿por qué debemos convencernos deque él realmente nos ama? y¿qué podemos hacer cuandonos invadan los sentimientos negativos?

� Se han cambiado algunos nombres.

1. ¿Qué ve Jehová cuando observa a su pueblo?2. ¿Por qué les cuesta a algunos hermanos creer que Jehová los ama?3. ¿Qué preguntas responderemos en este artı́culo?

ART´ICULO

DE ESTUDIO 17

Jehová ama a cada unode sus siervos“Jehová está encantado con su pueblo” (SAL. 149:4).

CANCI´ON 108

El amor leal de Jehová

AVANCE

A algunos de nuestros her-manos les cuesta creerque Jehová los ama.En este artı́culo, analizare-mos por qué podemos es-tar seguros de que Jehovános ama a cada uno de no-sotros. También veremoscómo superar cualquierduda que tengamos al res-pecto.

DUDAR DEL AMOR DE JEHOV´A

ES PELIGROSO4 Si estamos convencidos de que Jeho-

vá nos ama, nos sentiremos impulsadosa darle lo mejor de nosotros, sin impor-tar las dificultades que pasemos en lavida. Pero, si dudamos de su amor, nos“faltarán las fuerzas” (Prov. 24:10). Y, sinos desanimamos y empezamos a creerque Jehová no nos ama, estaremos inde-fensos ante los ataques de Satanás (Efes.6:16).

5 Algunos cristianos fieles han empe-zado a dudar de que le importen aJehová y por eso su fe se ha debilitado.Un anciano llamado James dice: “Aun-que servı́a en Betel y disfrutaba predi-cando en una congregación de otro idio-ma, me preguntaba si Jehová realmenteaceptaba mis sacrificios. En cierto mo-mento llegué a dudar de que estuvie-ra escuchando mis oraciones”. Eva, quetambién sirve a tiempo completo, expli-

4. ¿Por qué es peligroso dudar del amor deJehová?5. ¿Qué les ha pasado a algunos hermanos quedudaban del amor de Dios?

ca: “Me di cuenta de que dudar del amorde Jehová es peligroso porque hace quedejes de tener ganas de hacer cosas porél y pierdas la alegrı́a de servirle. Entrasen un cı́rculo vicioso”. Y Michael, que esprecursor regular y anciano, dice: “Sino crees que Dios se preocupa por ti,poco a poco te vas alejando de él”.

6 Estos comentarios nos ayudan a en-tender por qué es tan peligroso dudardel amor de Dios. ¿Qué debemos ha-cer cuando nos invadan los sentimien-tos negativos? Sacarlos de inmediatode nuestra cabeza. Pidámosle a Jehováque nos dé su paz y que proteja nuestrocorazón y nuestramente para que poda-mos librarnos de los “pensamientos in-quietantes” (Sal. 139:23; nota; Filip. 4:6, 7).Yno olvidemos que hay otros cris-tianos fieles que también están luchan-do con sentimientos negativos. Inclusoalgunos siervos de Jehová del pasadose sintieron ası́. Veamos lo que pode-mos aprender del ejemplo del apóstolPablo.

6. ¿Qué debemos hacer cuando nos invadan lossentimientos negativos?

Nuestro Padre celestialestá encantado concada uno de nosotros.(Vea el párrafo 1).

22 LA ATALAYA

LO QUE APRENDEMOSDEL EJEMPLO DE PABLO

7 ¿Cargamos con tantas responsabilida-des que aveces sentimos que no podemoscon todas? Ası́ mismo se sintió el após-tol Pablo. Él dijo que estaba preocupadono por una congregación, sino “por to-das las congregaciones” (2 Cor. 11:23-28). ¿Sufrimos alguna enfermedad cróni-ca que a menudo nos roba la alegrı́a?Pablo estabamuy frustrado porque no lo-graba deshacerse de cierta “espina en lacarne”, tal vez algún problema de salud(2 Cor. 12:7-10). ¿Nos sentimos desani-mados por nuestras imperfecciones? Pa-blo a veces también. Dijo que era muydesdichado porque todo el tiempo tenı́aque luchar para hacer lo que es correcto(Rom. 7:21-24).

8 A pesar de tantas pruebas y dificulta-des, Pablo continuó sirviendo a Jehová.¿De dónde sacó las fuerzas? Aunque te-nı́a muy presentes sus defectos, tenı́a unafe inquebrantable en el rescate. Además,conocı́a muy bien la promesa de Jesús deque todo aquel que demuestre tener fe en7. ¿Qué problemas tenı́a Pablo?8. ¿Qué ayudó a Pablo a continuar sirviendo aJehová a pesar de los problemas?

él tendrá vida eterna (Juan 3:16; Rom.6:23). No habı́a ninguna duda de que Pa-blo tenı́a fe en el rescate. Estaba con-vencido de que Jehová está dispuesto aperdonar incluso a aquellos que han co-metido un pecado grave si están arrepen-tidos (Sal. 86:5).

9 Pablo tenı́a fe en que Dios lo amabamucho porque sabı́a que Dios habı́a en-viado a Jesús a morir por él. Fijémonosen las palabras tan reconfortantes queencontramos al final de Gálatas 2:20(léalo). Pablo dijo: “El Hijo de Dios [...]me amó y se entregó por mı́”. Pablono pensaba que el amor de Dios por éltuviera un lı́mite, como si dijera: “En-tiendo por qué Jehová quiere a mis her-manos, pero es imposible que me quieraa mı́”. De hecho, les recordó a los roma-nos: “Cuando todavı́a éramos pecado-res, Cristo murió por nosotros” (Rom.5:8). El amor de Dios no tiene lı́mites.

10 (Lea Romanos 8:38, 39). Pablo es-taba totalmente convencido del poderdel amor de Dios. Escribió que nada “po-drá separarnos del amor de Dios”. Sa-

9. ¿Qué nos enseñan las palabras de Pablo regis-tradas en Gálatas 2:20?10. ¿Qué nos enseña Romanos 8:38, 39?

Lo que cuenta paraDios es lo quehagamos ahoray en el futuro,no los erroresque cometimosen el pasado.(Vea el párrafo 11).

bı́a que Jehová habı́a sido muy pacientecon la nación de Israel. Y también sabı́aque le habı́a mostrado misericordia a él.En pocas palabras, Pablo estaba dicien-do: “Si Jehová envió a su Hijo a morirpor mı́, no tengo motivos para dudar deque me quiera” (Rom. 8:32).

11 (Lea 1 Timoteo 1:12-15). Seguroque a veces Pablo se sentı́a muy culpablepor su pasado. Dijo que era “el peor” delos pecadores, y con razón. Antes deconocer la verdad, persiguió cruelmen-te a los cristianos en muchas ciudades,metió a algunos en la cárcel y apoyóla ejecución de otros (Hech. 26:10, 11).Imaginemos que en el pasado apoyó laejecución de un matrimonio cristiano yahora conocı́a a su hijo. ¿Cómo se habrı́asentido? Pablo lamentaba sus errores,pero sabı́a que no podı́a cambiar el pasa-do. Se convenció de que Cristo habı́amuerto por él y escribió con confianza:“Por la bondad inmerecida de Dios soylo que soy” (1 Cor. 15:3, 10). ¿Qué apren-demos? Que tenemos que convencernosde que Cristo murió por cada uno de no-sotros y ası́ hizo posible que tengamosuna amistad personal con Jehová (Hech.3:19). Lo que cuenta para Dios es lo quehagamos ahora y en el futuro, no loserrores que cometimos en el pasado, sinimportar si en ese momento éramos tes-tigos de Jehová o no (Is. 1:18).

12 A veces, nuestro corazón imper-fecto puede engañarnos y hacernos

11. Aunque Pablo habı́a cometido pecados, comolos mencionados en 1 Timoteo 1:12-15, ¿por quéestaba seguro de que Dios lo amaba?12. Según 1 Juan 3:19, 20, ¿qué debemos hacer sisentimos que no valemos para nada o que no me-recemos que nos amen?

˘ “Cuando me concentro en mi estudio de laBiblia, estoy pensando en Jehová y en losdemás” (Michael).

˘ “Mantener una buena rutina espiritualmeha ayudado a rechazar los pensamientosnegativos. Aunque no siempre tenga ganasde leer o de estudiar la Biblia, cuando lo hago,permito que Jehová me recuerde que mequiere” (Kevin).

˘ “Me gusta leer el libro de los Salmos.Mi favorito es el Salmo 27. Una y otra vez leolos versı́culos 1 a 6, 10 y 12 a 14, y medito enellos” (Oksana).

˘ “Me esfuerzo por comenzar cada dı́a leyendola Biblia y dedicando un ratito a orar. En laPalabra de Dios siempre encuentro algo queme da justo lo que necesito” (James).

˘ “Después de estudiar su Palabra es cuandome siento más cerca de Jehová y cuando micorazón se siente más en calma. Jehová mefortalece y me da su paz. Estudiar la Palabrade Dios me convence de que Jehová no seolvida de mı́” (Seiji).

Cómo los ayudala Palabra de Dios

24 LA ATALAYA

sentir que no servimos para nada o queno merecemos que nos quieran (lea1 Juan 3:19, 20). Por eso, tal vez llegue-mos a pensar que el sacrificio de Je-sús no puede cubrir nuestros pecados.Cuando nos sintamos ası́, recordemosque “Dios es más grande que nuestro co-razón”. Aunque sintamos que nuestroPadre celestial no nos ama ni nos per-dona, la realidad es que sı́ nos ama ysı́ nos perdona. Tenemos que convencera nuestro corazón para que lo acepte.Para lograrlo, tenemos que estudiar suPalabra todos los dı́as, orar con frecuen-cia y pasar tiempo con los hermanos demanera regular. Veamos por qué son tanimportantes estas tres cosas.

C´OMO NOS AYUDAN EL ESTUDIO,

LA ORACI´ON Y NUESTROS HERMANOS

13 Estudiar la Palabra de Dios todos losdı́as. Si lo hacemos, conoceremos cada13. ¿Cómo nos ayuda estudiar la Palabra de Dios?(Vea también el recuadro “Cómo los ayuda la Pala-bra de Dios”).

vez mejor la hermosa personalidad deJehová y nos daremos cuenta de lo mu-cho que nos quiere. Meditar cada dı́a enla Biblia nos ayudará a pensar con másclaridad y “rectificar las cosas” en nues-tra mente y nuestro corazón (2 Tim.3:16). Un anciano llamado Kevin, queluchaba con su baja autoestima, dice:“Leer el Salmo 103 y meditar en él me haayudado a ver las cosas como son y a en-tender lo que Jehová piensa de mı́ enrealidad”. Eva, mencionada en el párra-fo 5, explica: “Al terminar el dı́a, dedicoun ratito a meditar tranquilamente encómo ve Jehová las cosas. Eso le da paza mi corazón y fortalece mi fe”.

14 Orar con frecuencia (1 Tes. 5:17).Las buenas amistades se basan en la co-municación sincera y frecuente, y estotambién es cierto en el caso de Jehová.Cuando le contamos lo que sentimos, loque pensamos y lo que nos preocupa,le demostramos que confiamos en él yque sabemos que nos ama (Sal. 94:17-19;1 Juan 5:14, 15). Yua, mencionada en elsegundo párrafo, cuenta: “Cuando oro,trato de no limitarme a contarle a Jeho-vá lo que he hecho ese dı́a. Le abro micorazón y le cuento todo lo que siento.En vez de ver a Jehová como el presiden-te de una compañı́a, poco a poco heaprendido a verlo como un padre que deveras ama a sus hijos”. (Vea el recuadro“¿Lo ha leı́do?”).

15 Pasar tiempo con nuestros hermanos.Ellos son un regalo de Jehová (Sant.1:17). Nuestro Padre celestial demuestra

14. ¿Cómo nos ayuda la oración?15. ¿Cómo demuestra Jehová que se interesa porcada uno de nosotros?

¿Se ha beneficiado del libro Acerquémonosa Jehová? Si no, ¿por qué no se proponeleerlo durante su estudio personal? Unalectora de California (Estados Unidos)explicó: “Quiero decirles que mi vida y mirelación con nuestro Padre celestial se hanenriquecido al leer este libro y meditar ensu contenido. Ahora siento que Jehová esmi amigo. [...] Mi corazón desborda amorpor Jehová, y sé que esta obra es uno de losmotivos”.

¿Lo ha leı́do?

que se interesa por cada uno de noso-tros al suministrarnos una familia espiri-tual de hermanos que nos “ama en todomomento” (Prov. 17:17). En su carta alos colosenses, Pablomencionó a ciertoscristianos que lo habı́an ayudado y dijoque se habı́an “convertido en una fuentede gran consuelo” para él (Col. 4:10, 11).El propio Jesucristo necesitó y agrade-ció el apoyo que recibió de sus amigos,tanto ángeles como seres humanos (Luc.22:28, 43).

16 ¿Buscamos y aceptamos la ayuda denuestros hermanos de la congregación?Contarle a un hermano maduro lo quenos preocupa no es una señal de debili-dad; de hecho, puede ser una protec-ción. Pensemos en lo que dice James,mencionado en el párrafo 5: “Tenerbuenas amistades con cristianos madu-ros ha sido para mı́ un salvavidas. Cuan-do me invaden los sentimientos negati-vos, esos queridos amigos me escuchancon paciencia y me recuerdan que mequieren. Mediante ellos percibo queJehová me ama y se preocupa por mı́”.¡Qué importante es que tengamos bue-nos amigos en la congregación!

16. ¿Cómo nos ayudan nuestros hermanos a acer-carnos a Jehová?

PERMANEZCAMOSEN EL AMOR DE JEHOV

´A

17 Satanás quiere que nos rindamosy dejemos de hacer lo que es correc-to. Quiere que pensemos que Jeho-vá no nos quiere y no nos considerasuficientemente buenos para salvarnos.Pero, como hemos visto, no hay nadamás lejos de la realidad.

18 Jehová nos ama y valora muchoa cada uno de sus siervos. Si lo obe-decemos, siempre permaneceremos ensu amor, igual que Jesús (Juan 15:10).Ası́ que no hagamos caso a Satanás nia nuestro corazón cuando nos intentenconvencer de que Jehová no nos quiere.En vez de eso, hagamos caso a Jehová,que se fija en las cosas buenas que tene-mos cada uno de nosotros. Convenzá-monos de que él “está encantado con supueblo”, incluido usted.

17, 18. ¿A quién debemos hacer caso, y por qué?

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DESCRIPCI´ON DE LAS IM

´AGENES. Página 22:

Antes de conocer la verdad, Pablo hizo que metie-ran a muchos cristianos en prisión. Cuando acep-tó lo que Jesús habı́a hecho por él, cambió y em-pezó a animar a sus hermanos. Algunos de estostal vez eran familiares de aquellos a los que habı́aperseguido.

¿QU´E CONTESTAR

´IA?

˛ ¿Por qué debemos resolvercualquier duda de que Jeho-vá nos ama?

˛ ¿Qué aprendemos del após-tol Pablo y de muchos sier-vos de Jehová de la actuali-dad?

˛ ¿Cómo nos ayudan el es-tudio de la Biblia, la oracióny nuestros hermanos?

CANCI´ON 141

El maravilloso regalo de la vida

PIERDO EL ENTUSIASMOPor desgracia, al entrar en la adolescencia,se enfrió mi amistad con Jehová. Me pare-cı́a que mis compañeros de escuela tenı́anuna libertad casi ilimitada, y yo tambiénquerı́a tener esa libertad. Sentı́a que lasnormas de mis padres y de la Biblia eran de-masiado estrictas, y veı́a las actividades es-pirituales como una carga. Aunque nuncadudé de la existencia de Jehová, empecé asentir un gran vacı́o espiritual.

No llegué a ser inactiva, pero hacı́a lo mı́-nimo en el ministerio para guardar las apa-riencias. Cuando iba a predicar, nunca mepreparaba, ası́ que me resultaba difı́cil ini-ciar o mantener una conversación. Comoresultado, no tenı́a revisitas ni cursos bı́bli-cos y no disfrutaba de la predicación, lo quehizo que tuviera una actitud todavı́a másnegativa. Me preguntaba: “¿Cómo puede al-guien hacer esto semana tras semana, mestras mes?”.

A los 17, me morı́a de ganas de ser inde-pendiente. Ası́ que hice las maletas y me

BIOGRAF´IA

“¡Ahorame encantapredicar!”RELATADA POR VANESSA VICINI

ME CRIE en Balcluta, una pequeñaciudad situada en la isla Sur deNueva Zelanda. De niña, me sentı́acerca de Jehová y me encantaba serTestigo. Me gustaba mucho ir a lasreuniones, y en la congregación mesentı́a segura y feliz. Aunque eratı́mida, disfrutaba de predicar todaslas semanas. No tenı́a problema enpredicarles a mis compañeros deescuela y a otras personas. Estabaorgullosa de ser testigo de Jehová, ya los 11 años dediqué mi vida a Dios.

26 LA ATALAYA

mudé a Australia. Mis padres se quedaronpreocupados, pero confiaban en que allı́ yoseguirı́a con mi rutina espiritual.

En Australia, mi espiritualidad fue de malen peor. Faltaba a muchas reuniones y mejuntaba con otros jóvenes que, igual queyo, iban una noche a la reunión pero la si-guiente salı́an a beber y a bailar. Ahora medoy cuenta de que tenı́a un pie en la verdady otro en el mundo, pero en el fondo sentı́aque no encajaba en ninguno.

UNA IMPORTANTE LECCI´ON

QUE NO ME ESPERABAUnos dos años después, conocı́ a una

hermana que, sin darse cuenta, hizo queme replanteara lo que estaba haciendo conmi vida. Yo vivı́a en una casa en la que habı́acinco hermanas solteras, e invitamos aquedarse con nosotras durante una sema-na al superintendente de circuito y a su es-posa, Tamara. Mientras él atendı́a asuntos

de la congregación, Tamara pasaba tiempocon nosotras y nos reı́amos mucho juntas.Eso me gustó. No me esperaba que unapersona tan espiritual pudiera ser tan diver-tida, sencilla y natural.

Tamara amaba tanto la verdad y el minis-terio que su entusiasmo era contagioso. Erafeliz dándole a Jehová lo mejor, mientrasque yo me sentı́a infeliz haciendo lo mı́nimo.Su actitud positiva y alegre me dejó huella.Su ejemplo me recordó una importante ver-dad: Jehová desea que todos le sirvamos“con alegrı́a” y “con gritos de felicidad”(Sal. 100:2).

REAVIVO MI AMORPOR EL MINISTERIO

Querı́a sentir la misma alegrı́a que Ta-mara, pero para ello tenı́a que hacer algu-nos cambios importantes. Me tomó tiempo,pero al final empecé a dar pequeños pasos.Comencé a prepararme para el ministerioy a hacer el precursorado auxiliar de vez encuando. Esto me ayudó a ponerme menosnerviosa y a tener más seguridad en mı́

Predicando en Gleno(Timor Oriental).

Con Alex, a punto de viajar a territorio no asignadopara distribuir invitaciones para la Conmemoración.

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28 LA ATALAYA

misma. Como usaba más la Biblia, me sen-tı́a más contenta. Pronto decidı́ ser precur-sora auxiliar todos los meses.

Empecé a hacer amigos de todas las eda-des que estaban bien espiritualmente y quedisfrutaban sirviendo a Jehová. Su buenejemplo me ayudó a examinar mis priorida-des y a tener buenos hábitos de estudio.Cada vez disfrutaba más de la predicación,y al final me hice precursora regular. Porprimera vez en años, me sentı́a feliz y a gus-to en la congregación.

ENCUENTRO UN COMPA˜NERO DE

PRECURSORADO PARA TODA LA VIDAUn año después, conocı́ a Alex, un

hermano bueno y atento que amaba aJehová y el ministerio. Era siervo ministe-rial y llevaba seis años de precursor. Tam-bién habı́a estado predicando algunos me-ses en Malaui, donde hacı́an falta máspublicadores. Allı́ pasó tiempo con algunos

misioneros, que le dejaron un buen ejemploy lo animaron a seguir buscando primero elReino.

En el 2003, Alex y yo nos casamos, y jun-tos seguimos sirviendo a tiempo completo.Hemos aprendido muchas lecciones valio-sas, y Jehová nos ha bendecido de muchasmaneras.

RECIBIMOS M´AS BENDICIONES

En el 2009, nos invitaron a ser misione-ros en Timor Oriental, un pequeño paı́sque está cerca de Indonesia. Estábamossorprendidos, ilusionados y al mismo tiem-po asustados. Cinco meses más tarde, lle-gamos a Dili, la capital.

Tuvimos que adaptarnos a muchas cosasnuevas: la cultura, el idioma, la comida y lascondiciones de vida. Al predicar, a menudoencontrábamos a personas que eran vı́cti-mas de la pobreza, la escasa educación y laopresión. Y conocimos a muchos que tenı́an

A. De camino al territorio.

B. Mostrando un video de Caleb y Sofı́aa unos alegres niños timorenses.

A

B

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cicatrices fı́sicas y emocionales por culpade la guerra y la violencia.�

¡La predicación era increı́ble! Por ejemplo,un dı́a encontré a una niña de 13 años llama-da Marı́a, que estaba muy triste.� Su madrehabı́a muerto unos años antes, y casi nuncaveı́a a su padre. Como muchos niños de suedad, Marı́a estaba sin rumbo en la vida. Re-cuerdo una ocasión en la que me contó entrelágrimas cómo se sentı́a. Pero yo no entendı́alo que me decı́a, porque todavı́a no hablababien el idioma. Ası́ que hice una oración y lepedı́ a Jehová que me ayudara a animarla.Entonces empecé a leerle algunos textos dela Biblia para consolarla. En los siguientesaños, vi cómo la verdad transformaba la acti-tud, la apariencia y la vida de Marı́a. Se bauti-zó y ahora dirige sus propios cursos de la Bi-blia. Tiene una gran familia espiritual y sesiente querida.

Sin duda, Jehová está bendiciendo lapredicación en Timor Oriental. Aunque lamayorı́a de los publicadores se han bautiza-do en los últimos 10 años, muchos son pre-cursores, siervos ministeriales o ancianos.Otros sirven en la Oficina Remota de Tra-ducción y colaboran en la traducción denuestras publicaciones a los idiomas loca-les. Me hacı́a muy feliz oı́r sus voces cantan-do en las reuniones, ver sus sonrisas y ob-servar su crecimiento espiritual.

NO PODR´IA IMAGINAR

UNA VIDA M´AS FELIZ

La vida enTimor Oriental era muy diferentea la vida en Australia. Pero en ningún otro si-tio habrı́a sido más feliz. A veces, ı́bamos enun pequeño autobús lleno de personas quevenı́an de comprar pescado seco y montonesde verduras del mercado local. Algunos dı́as,dábamos clases de la Biblia en casas peque-

� Desde 1975, Timor Oriental sufrió una guerra que durómás de 20 años, relacionada con la lucha por la inde-pendencia polı́tica.� Se ha cambiado el nombre.

ñas en las que hacı́a mucho calor, el piso erade tierra y habı́a gallinas correteando alrede-dor. A pesar de las dificultades, muchas ve-ces pensé: “¡Es increı́ble estar aquı́!”.

Cuando pienso en el pasado, me sientomuy agradecida de que mis padres se esfor-zaran por enseñarme sobre Jehová y meapoyaran, hasta en mi difı́cil adolescencia.Las palabras de Proverbios 22:6 se han cum-plido en mi caso. Mamá y papá están orgullo-sos de Alex y de mı́. Están muy contentos dever cómo Jehová nos utiliza. Desde el 2016,servimos en la obra de circuito en el territorioque supervisa la sucursal de Australasia.

Me parece mentira que llegara a ver elministerio como una carga, porque ¡ahorame encanta predicar! Me he dado cuenta deque la verdadera felicidad depende de servira Jehová con todo el corazón, sin importarlos problemas que tengamos en la vida. Losúltimos 18 años que he pasado sirviendo aJehová junto a Alex han sido los más felicesde mi vida. Ahora veo que David tenı́a razóncuando le dijo a Jehová: “Todos los que serefugian en ti estarán felices; siempre grita-rán de alegrı́a [...], y los que aman tu nom-bre se alegrarán gracias a ti” (Sal. 5:11).

Enseñar de la Biblia a estas personastan humildes nos hace felices.

30 LA ATALAYA

ˇ Según Mateo 27:46, justo antes de morir,Jesús dijo: “Dios mı́o, Dios mı́o, ¿por qué mehas abandonado?”. De esta manera, Jesúscumplió lo que David profetizó en Salmo 22:1(Mar. 15:34). Jesús no citó esas palabrasporque estuviera decepcionado o porquepor un momento hubiera perdido la fe.

´El en-

tendı́a perfectamente por qué tenı́a que mo-rir y estaba dispuesto a hacerlo (Mat. 16:21;20:28). También sabı́a que Jehová tendrı́aque eliminar cualquier “cerco protector” alre-dedor de él en el momento de su muerte(Job 1:10) Ası́ Jehová permitió que Jesús de-mostrara más allá de toda duda que se man-tendrı́a fiel sin importar lo dura que fuera sumuerte (Mar. 14:35, 36).

Entonces, ¿por qué dijo Jesús aquellaspalabras? No podemos ser dogmáticos,pero veamos algunas posibilidades.�

Con esas palabras, puede que Jesús es-tuviera enfatizando que Jehová no iba aintervenir para impedir que lo mataran.´El tenı́a que pagar el rescate sin la ayuda deJehová. Era completamente humano y de-bı́a morir para que “probara la muerte portodos” (Heb. 2:9).

Tal vez Jesús citó unas pocas palabrasdel Salmo 22 para que las personas recor-daran el salmo entero. En aquella época,

� Vea también en estemismo número los párrafos 9 y 10del artı́culo “¿Qué aprendemos de las últimas palabrasde Jesús?”.

PREGUNTAS DE LOS LECTORES

¿Por qué justo antes de morir Jesús citólas palabras de David que leemos en Salmo 22:1?

ABRIL DE 2021 31

era habitual que los judı́os se aprendierande memoria la letra de muchos salmos. Ası́que, si les recordaban un versı́culo, de ma-nera natural les vendrı́a a la mente todo elsalmo. Si esa era la intención de Jesús, en-tonces estaba ayudando a los discı́pulos ju-dı́os a recordar las numerosas profecı́asque habı́a en este salmo sobre su muerte(Sal. 22:7, 8, 15, 16, 18, 24). Además, haciael final del salmo, se explica que “la autori-dad real” de Jehová triunfarı́a y se extende-rı́a hasta “los confines de la tierra” (Sal. 22:27-31).

Al citar estas palabras de David, Jesúsquizás estaba defendiendo su inocencia.Antes de ser asesinado, Jesús tuvo que so-portar que lo condenaran por blasfemia enun juicio ilegal (Mat. 26:65, 66). Lo juzgaronde manera apresurada, por la noche y sal-tándose las normas legales (Mat. 26:59;Mar. 14:56-59). Al citar esas palabras enforma de pregunta retórica, Jesús tal vezestaba destacando que no habı́a hechonada para merecer ese castigo.

Es posible que Jesús también les es-tuviera recordando a otros que el hechode que David —el escritor de este salmo—estuviera sufriendo no implicaba que hu-biera perdido la aprobación de Jehová.David no habı́a perdido la fe, pues despuésde hacer aquella pregunta dijo que confia-ba en que Dios puede salvar a sus siervos, yJehová continuó bendiciéndolo (Sal. 22:23,24, 27). De manera parecida, el hecho deque Jesús, el “Hijo de David”, estuvierasufriendo en el madero, no significaba queJehová le hubiera quitado su aprobación(Mat. 21:9).

También puede ser que Jesús estuvieraexpresando lo mucho que le dolı́a queJehová tuviera que retirarle su protec-ción para que pudiera demostrar por com-pleto su integridad. Después de que Adány Eva se rebelaran, se hizo necesario queJesús sufriera y muriera. Pero eso no forma-

ba parte del propósito original de Jehová.Jesús no habı́a hecho nada malo, pero te-nı́a que sufrir y morir para responder a Sa-tanás, y para pagar el rescate y recuperar loque el ser humano habı́a perdido (Mar. 8:31;1 Ped. 2:21-24). Esto solo serı́a posible siJehová le retiraba su protección por un mo-mento por primera vez en su vida.

Otra posibilidad es que Jesús estuvieraintentando ayudar a sus seguidores a cen-trarse en la razón por la que Jehová per-mitió que muriera de aquella manera.� Je-sús sabı́a que su muerte en un maderocomo un delincuente harı́a tropezar a mu-chos (1 Cor. 1:23). Si se centraban en el ver-dadero motivo de su muerte, sus seguido-res comprenderı́an su verdadero significado(Gál. 3:13, 14). Entonces, no lo verı́an comoun delincuente, sino como su Salvador.

Sea cual sea el motivo por el que Jesúscitó aquellas palabras, él sabı́a que al moriren el madero estaba haciendo la voluntadde Jehová. Poco después de citarlas, ex-clamó: “¡Se ha cumplido!” (Juan 19:30; Luc.22:37). Sı́, Jehová tuvo que quitarle suprotección por un instante para que pudie-ra cumplir todo lo que habı́a venido a hacera la Tierra. Esto también hizo posible que secumplieran “todas las cosas escritas” sobreél “en la Ley de Moisés, en los Profetas y enlos Salmos” (Luc. 24:44).

� Durante su ministerio, Jesús a veces dijo cosas ohizo preguntas no necesariamente para reflejar lo que élsentı́a, sino para hacer que sus discı́pulos dijeran lo quepensaban (Mar. 7:24-27; Juan 6:1-5; vea La Atalaya del15 de octubre de 2010, páginas 4 y 5).

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The Watchtower (ISSN 0043-1087) April 2021 is published by WatchtowerBible and Tract Society of New York, Inc.; Harold L. Corkern, President; MarkL. Questell, Secretary-Treasurer; 1000 Red Mills Road, Wallkill, NY 12589-3299.La Atalaya (abril de 2021) es una publicación editada en España porTestigos Cristianos de Jehová, Ctra. Torrejón-Ajalvir, km 5, 28864 Ajalvir (Madrid).˘ 2021 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania. Hecho en España.

34567̇Abril de 2021 � Vol. 142, núm. 5 ESPA

˜NOL

Esta publicación se distribuye como parte de una obra mundial deeducación bı́blica que se sostiene con donativos. Prohibida su venta.Si desea hacer un donativo, visite donate.jw.org.

A menos que se indique lo contrario, las citas bı́blicas se han tomado dela versión en lenguaje moderno La Biblia. Traducción del Nuevo Mundo.

IMAGEN DE LA PORTADA:Por medio de una comida sencilla, Jesúsles mostró a sus discı́pulos cómo recordarsu sacrificio (vea el artı́culo de estudio 16,párrafo 16).

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Artı́culo de estudio 17(del 28 de junio al 4 de julio) 20Jehová ama a cada uno de sus siervos��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������

BIOGRAF´IA 26

“¡Ahora me encanta predicar!”��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������

PREGUNTAS DE LOS LECTORES 30

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