Adbusters en Español

7/23/2019 Adbusters en Espaol

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Crisis de sentido

Crepsculo de Occidente

La gran crisis del 20

La vida sin sexo rea

Economa vs. Bionoma

Cuando lo radical se ha vuelto normal

Las Grandes Ideas del

E N E S P A O L


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LinneaStrid


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THE NEW YORK TIMES, DOMINGO, 8 DE SEPTIEMBRE DE 2013


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T

omMihalek/AFP/GettyImages


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En el futuro, naturaleza

y tecnologa sern una misma cosa.


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LOS 10 MEJORES EMPLEOS PARAECOLOGISTAS EN PARO EN EL SIGLODE DETERIORO ECOLOGICO QUE

NOS ESPERA

Erik Assadourian es investigador

en el Worldwatch Institute.

Ahora que la mayor parte del sector medioambiental sin nimo de lucro

ha entrado en quiebra (despus de todo, su principal bas e de apoyo era el

supervit en manos de ricos individuos y fundaciones, gran parte del cual

se ha esfumado con el hundimiento del esquema Ponzi que era el mercado

burstil global), muchos de nosotros, ecologistas profesionales, estamos

buscando trabajo. Permitidme que os sugiera los siguientes trabajos,

todos ellos con un gran potencial de crecimiento en los aos venideros.

1) TAXISTASern pocos lo que se podrn permitir tener un coche. El transporte

pblico ir tambin a la baja, como el resto de los servicios pblicos.

Cada vez ser ms difcil desplazarse. Llevar a gente de aqu para all

en un coche, una furgoneta o un autobs proporcionar unos ingresos

garantizados. En muchos pases en desarrollo es ya un mtodo

contrastado.

2) MAESTRONo tiene ningn inconveniente: la enseanza es un empleo respetable

tanto si corren buenos como malos tiempos. Las escuelas pblicas, por

supuesto, contarn con una financiacin crnicamente insuficiente, de

modo que la enseanza podra acabar convirtindose en un empleo del

sector informal. Es posible que el trabajo compense gracias al trueque:

vivienda, comida, servicios mdicos y de dentistas, y es probable que te

las arregles para salir adelante. Tal vez hasta puedas hacer que el currculo

gire en torno a los valores ecolgicos.

3) PARTERA O COMADRONAEn tiempos de expansin o de crisis, las mujeres se quedan preadas. Sin

embargo, cada vez sern menos las personas que tengan seguro mdico

y, por lo tanto, cada vez ms elegirn tener el nio en casa. En trminos

generales, eso no es nada malo, si tenemos en cuenta los costes sociales

y medioambientales de la actual industria del parto: desde el % de

partos por cesrea en los Estados Unidos, hasta el abuso continuado del

bibern. Ambos trabajos son relativamente seguros, pero requieren una

cierta formacin.

4) PEQUEO AGRICULTORNo solo puedes plantar algo en el jardn delantero de casa o en el

prking abandonado de tu calle, sino que tambin puedes criar

animales pequeos: conejos, pollos , conejillos de Indias y, sobre

todo, insectos. La cra de grillos o de gusanos de la harina para

intercambiar con los vecinos te proporcionar una buena moneda

para el trueque. No ser una vida fcil, sobre todo con el deterioro

climtico que se avecina, pero s una parte fundamental de lo s

cimientos econmicos de cualquier familia.

5) ARTESANOEn la era del pos-consumo, se acabarn los das en que la gente se

compraba una camiseta o una silla nueva en el Walmart del barrio por

dlares. La mayora de la gente volver a llevar la ropa hasta que quede

reducida a un puado de hilos, y a hacer sillas con cajas de leche recogidas

de la calle. Los artesanos volvern a fabricar las cosas que los vecinos

necesitan. La vida del artesano ser bastante segura, ya que solo

fabricars aquello que la comunidad realmente necesite, y muy

satisfactoria, ya podrs crear cos as bellas con t us propias manos. E. F.

Schumacher estara orgulloso de ti.

6) MINERO EN UN VERTEDERONo es fcil, ni muy sano, pasar largas horas removiendo una

mezcla de sobras de alimentos, heces de beb y animales o

residuos txicos domsticos, para encontrar de vez en cuando

algn valioso trozo de metal. Aun as, piens a que, mientras

te dedicas a limpiar unos vertederos ya diezmados, estars

proporcionando materias de mejor calidad que la mayora de

lo que producen muchas de las minas que an hay, con lo que

tendrs un trabajo ecolgico y bien pagado.

7) COMADRE MORTUORIASegn se vaya desintegrando el sistema, ir muriendo ms gente, y

sern pocos lo que podrn costearse un funeral tradicional, que

cuesta a los consumidores una media de . dlares. Cada vez

ms, la gente se decantar por enterrar a sus seres queridos en casa

y sin la parafernalia comn, que solo sirve para retener los txicos: el

atad, los lquidos para embalsamar, la cmara de plstico, etctera.

Trabajar de comadre mortuoria con experiencia en ayudar a las

familias a gestionar las cargas legales que conlleva enterrar a los seres

queridos de manera natural ser a la vez til y gratificante.

8) RECOLECTOR URBANOYNo te hars rico recolectando unos pocos kilos de bellotas, nueces

y hojas de diente de len. Aun as , por muy mal que te vayan las cosas,

habrs avanzado mucho en supervivencia. La mayora de las personas

no sabe qu hacer con las bellotas para que sean comestibles.

Mientras la gente hace cola para comprar las pocas barras de pan

disponibles en el sper, t hars panqueques de harina de bellota y

saciars cmodamente el hambre c on un alimento ms nutritivo.

9) ECOPREDICADORTal vez las fundaciones dejen de subvencionarlas, pero las donaciones

a las iglesias se mantendrn tanto si los tiempos son propicios

como si no, ya que estas aportan seguridad y apoyo emocional a las

comunidades. Si el movimiento ecologista evolucionara hacia la

prestacin de servicios sociales bsicos (cuidados, ayuda econmica,

clnicas gratuitas, huertos) y utilizara dichas actividades para

promocionar una filosofa ecolgica, es posible que hallaran los

recursos necesarios para sacar adelante su esencial labor y, sobre

todo, para, en el curso de la transicin ecolgica, contribuir a crear una

nueva cultura ecocntrica capaz de producir un modelo de vida ms

sostenible en un planeta sobrecalentado.

10)POLTICO REVOLUCIONARIOTal vez ya hayas considerado la idea cuando tenas un cmodo

salario para sufragar los gastos que conlleva, pero, cuando tenas ese

cmodo salario, pensabas que no vala la pena correr los riesgos que

comporta. Ahora que los sistemas terrestres se estn desintegrando

rpidamente y una camarilla de grandes c ompaas y gobiernos

continan extrayendo combustibles fsiles de una Tierra en fase

de calentamiento, quizs ha llegado el momento de que te plantees

la adopcin de estrategias ms radicales. Tal vez podras juntarte

con un puado de amigos en paro, ocupar una cas a vaca en Detroit,

redactar un manifiesto y crear un nuevo partido poltico mientras

cuidas tu huerto urbano? Mejor an, por qu no te presentas a las

elecciones presidenciales y procuras recuperar el sistema poltico

para el %? No es una vida fcil, pero quizs a la larga llegue a

compensar.


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M

ediaNinja


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S apocalptico: Por qu lo radical se ha vuelto normal

Te inquieta pensar en cmo ser la vida en una sociedad deshecha y un plane-ta saturado? No es de extraar. La vida, tal y como la concebamos, est a puntode desaparecer. Mientras que la cultura dominante impulsa la negacin disfun-cional tmate una pastilla, vete de compras, encuentra la felicidad, existe unaestrategia ms sensata: acepta la ansiedad, asume la angustia profunda, y ponteapocalptico.

Nos hallamos ante una cascada de mltiples crisis ecolgicas. Lidiamos con unasinstituciones polticas y econmicas incapaces de asumir, mucho menos de solucio-nar, las amenazas que se ciernen sobre la familia humana y el mundo natural en suconjunto. Estamos intensificando el asalto a los ecosistemas de los que dependem-os y mermando la capacidad del mundo natural para sustentar cualquier presenciahumana a gran escala en el futuro. Cuando el mundo se oscurece, fijarse en el lado

bueno de las cosas deja de ser una virtud para con-vertirse en sntoma de irracionalidad.

En semejantes cir-cunstancias,la ansiedad se

convierte en lo

ms racional yla angustia re-sulta sana. Yano son sntomasde debilidad,sino de valenta.Es apropiado

sentir un profun-do pesar por loque estamos per-diendo y lo que yahemos perdido yquizs jams re-cuperemos. En vezde reprimir esasemociones, podem-os hacerles frente,no como individuos

aislados, sino colec-tivamente, y no


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slo por el bien de nuestra salud mental, sino para incrementar la eficacia de nues-tra forma de organizarnos en defensa de la justicia social y la sostenibilidad ecolgi-ca que an sea posible conseguir. Procesadas estas reacciones, podemos volvernosapocalpticos y empezar el trabajo de verdad.

Puede que esto suene extrao, ya que lo que normalmente se nos recomienda es quesuperemos los miedos y no cedamos a la desesperacin. Defender el apocalipticismopuede que resulte an ms raro porque normalmente se lo asocia con reaccionariosreligiosos que se preparan para el fin de los tiempos o con pesimistas laicos ob-sesionados por la supervivencia. Las personas con sensibilidad crtica, las que nospreocupamos por la justicia y la sostenibilidad, nos vemos ms bien como personasrealistas y menos propensas a caer en fantasas teolgicas ni de ciencia ficcin.

Muchos asocian apocalipsis con los raptos de delirio derivados de ciertas inter-pretaciones del Libro de las Revelaciones cristiano (o el Apocalipsis de Juan), peroconviene recordar que el significado original de la palabra no es fin del mundo. Elsignificado tanto de la palabra revelacin, del latn, como del vocablo apocalip-sis, del griego, alude al levantamiento del velo, la divulgacin de lo oculto y la llega-da de la claridad. En este contexto, hablar apocalpticamente puede ahondar nuestracomprensin de las crisis y ayudarnos a ver a travs de la maraa de ilusiones tejidapor las personas e inst ituciones del poder.

No obstante, hay un final que habremos de afrontar. Una vez que nos hayamos en-frentado honestamente a las crisis, podremos ocuparnos de lo que ya est tocando asu fin, que no es el mundo entero, sino los sistemas que estructuran nuestra vida enla actualidad. La vida tal y como la conocemos est, indudablemente, llegando a sufinal.

Repasemos ahora algunas de las falsas ilusiones de que somos vctimas. Algunas delas historias que nos han contado personas blancas, hombres, o ciudadanos es-tadounidenses, que ven la dominacin como algo natural y apropiado son rela-tivamente fciles de desmentir (aunque an son muchos los que se aferran a ellas).Otras aseveraciones delirantes, como la afirmacin de que el capitalismo es com-patible con los principios morales bsicos, con una democracia slida y con la sos-tenibilidad ecolgica, son ms difciles de desmontar (tal vez porque no parece haberalternativa).

Pero tal vez la ms dif cil de desbancar sea la creencia que preside la economa ex-tractiva del mundo industrial: que somos capaces de sostener indefinidamente unapresencia humana a gran escala en el planeta manteniendo los niveles actuales deconsumo del Primer Mundo. La tarea de las personas con sensibilidad social no

consiste ya nicamente en resistirse a las normas sociales opresivas y la autoridadilegtima, sino en proclamar adems una sencilla verdad que casi nadie quiere ad-mitir: la vida de alta energa/alta tecnologa de las sociedades ricas es un callejn


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sin salida. No podemos predecir con precisin los efectos de la competencia actual por losrecursos naturales o de la degradacin ecolgica en dcadas venideras, pero tratar al pla-neta como una mera mina de la que extraemos materias y un vertedero al que tirar despuslos desechos es puro ecocidio.

No podemos saber a ciencia cierta en qu momento preciso se nos acabar la fiesta, pero lafiesta ya se ha terminado.

Parece histrinico? Excesivamente alarmista? Fijmonos en cualquiera de los indicado-res decisivos de la salud de la ecosfera en la que habitamos agotamiento de aguas sub-terrneas, prdida de suelo frtil, contaminacin qumica, incremento de la toxicidad ennuestros propios cuerpos, la cantidad y la extensin de las zonas muertas de los ocanos,la aceleracin en la extincin de especies y la reduccin de la biodiversidad y plante-monos una sencilla pregunta: Hacia dnde nos dirigimos?

No olvidemos tampoco que vivimos en un mundo que se basa en el petrleo y en el que seest agotando rpidamente el petrleo barato y fcilmente accesible, lo que significa quenos enfrentamos a una reconfiguracin a gran escala de las infraestructuras de las que de-pende nuestra vida cotidiana. Mientras tanto, la desesperacin por evitar dicha reconfigu-racin nos ha llevado a una era de energa extrema y a la utilizacin de tecnologas cadavez ms peligrosas y destructivas (fracking, extraccin en aguas profundas, minera de ex-traccin de cimas de montaa, extraccin en arenas de alquitrn,etc.).

Ah, se me ha pasado por alto mencionar el indiscutible avance del calentamiento global /cambio climtico / perturbacin climtica?Vivimos en una poca en la que los cientficos hablan de momentos crticos y fronterasplanetarias, de cmo la actividad humana est lastrando la Tierra ms all de su capacidad.Hace poco, 22 cientficos de prestigio advirtieron que es probable que los humanos estemosforzando una transicin crtica de escala planetaria y corremos el riesgo de provocar unarpida e irreversible transformacin de la Tierra hasta l legar a un estado desconocido entoda la experiencia humana, y eso significa que los recursos biolgicos que ahora damospor sentados pueden verse sujetos a transformaciones rpidas e imprevisibles en cuestin deunas pocas generaciones humanas.

Tal conclusin se deriva de la ciencia y del sentido comn, no de creencias sobrenatura-les ni teoras conspiratorias. Las implicaciones sociopolticas son evidentes: no habr so-lucin a nuestros problemas mientras insistamos en salvaguardar el estilo de vida de altaenerga/alta tecnologa predominante en gran parte del mundo industrializado (y que an-helan muchos de los que, en estos momentos, se ven privados del mismo). Hay mucha gentetenaz e inflexible que, aun estando dispuesta a cuestionar otros sistemas opresivos, seagarra frreamente a esta forma de vivir. El crtico Frederic Jameson ha escrito: Es ms

fcil imaginar el fin del mundo que imaginar el fin del capitalismo, pero eso slo es par-te del problema. Para algunos es ms fcil imaginar el fin del mundo que el fin del aireacondicionado.

Es cierto que vivimos en una especie de fin de los tiempos. No es el fin del mundo el pla-neta seguir existiendo con o sin nosotros, pero s el fin de los sistemas humanos que es-tructuran nuestra poltica, nuestra economa y nuestra vida social. Apocalipsis no tienepor qu implicar fantasas de rescate celestial ni el culto a la supervivencia del ms fuerte;ser apocalptico significa ver las cosas claras y comprometernos a recuperar los valoresfundamentales.


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En primer lugar, debemos recalcar el valor de nuestro trabajo en pro de la justicia yla sostenibilidad, aun sin la garanta de poder cambiar la desastrosa trayectoria dela sociedad contempornea. Asumimos proyectos, aun sabiendo que pueden fracasar,porque es lo correcto y, al asumirlos, creamos nuevas oportunidades tanto para no-sotros mismos como para el mundo, al igual que, aun siendo conscientes de que todosmoriremos algn da, seguimos levantndonos cada maana: una evaluacin sincera

de la realidad planetaria no tiene por qu paralizarnos.

As pues, abandonemos tpicos tan manidos como: El pueblo har lo correcto siconoce la verdad o los movimientos sociales del pasado demuestran que nada esimposible.

No existe ninguna prueba de que ser conscientes de una injusticia incite automtica-mente a la ciudadana a corregirla. Cuando las personas creen que la injusticia es unmal necesario para mantener su comodidad material, algunas aceptan las condicio-nes sin rechistar.

Los movimientos sociales centrados en temas raciales, de gnero y de orientacinsexual han conseguido cambiar leyes y prcticas opresivas y, en menor grado, alter-ar creencias muy arraigadas. Sin embargo, los movimientos que celebramos ms amenudo, como la lucha por los derechos civiles tras la Segunda Guerra Mundial, op-eraban dentro de una cultura que daba por garantizada la continuidad de la expan-sin econmica. Ahora vivimos en una era de contraccin permanente, en la que cadavez habr menos de todo, y no ms. Presionar a un grupo dominante para que renun-cie a ciertos privilegios cuando hay expectativas de abundancia ilimitada para todoses un proyecto muy distinto a hacerlo cuando existe una dura competencia por aca-parar recursos. Eso no quiere decir que seamos incapaces de avanzar en nuestro afnde justicia y sostenibilidad, pero tampoco debemos caer en el simplismo de creer que

ambas llegarn inevitablemente.

Otro tpico a desechar es el clich de que la necesidad necesariamente agudiza el in-genio y estimula la innovacin. Durante la era industrial, y gracias a la explotacinde nuevos suministros de energa concentrada, la humanidad ha generado una can-tidad inaudita de innovacin tecnolgica en poco tiempo. Pero eso no es garanta deque exista una solucin tecnolgica para cada uno de nuestros problemas; vivimos enun sistema con lmites fsicos y todas las pruebas apuntan a que estamos muy cercade esos lmites. El fundamentalismo tecnolgico dcese de esa creencia cuasi-reli-giosa que mantiene que la aplicacin de la tecnologa ms avanzada siempre es apro-piada, y que todo problema provocado por cualquier consecuencia no intencionada se

puede remediar con ms tecnologa es una promesa tan vaca como cualquier otrofundamentalismo.

Si todo esto nos resulta insoportable, es sencillamente porque lo es. Nos enfrentamosa nuevos retos, cada vez ms amplios. En ningn momento de la historia de la hu-manidad nos habamos enfrentado a tantas catstrofes potenciales de alcance global;

jams nos habamos visto amenazados por tantas crisis sociales y ecolgicas simul-tneamente; jams habamos tenido tal abundancia de informacin sobre las amena-zas que debemos asimilar.


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Es fcil disimular nuestra propia incapacidad de enfrentarnos a la situacin proyectndo-la sobre los dems. Cuando alguien me dice: Estoy de acuerdo con el diagnstico que hacer,pero la gente no ser capaz de asimilarlo, entiendo que lo que esa persona me est diciendoen realidad es: Yo soy incapaz de asimilarlo. Sin embargo, asimilarlo es, a f in de cuentas, lanica opcin sensata.

Los polticos establecidos continuarn protegiendo los sistemas de poder existentes; los di-rectivos de empresas seguirn maximizando las ganancias sin importarles nada ms, y lamayora de la gente continuar evitando estos temas. La tarea de quienes poseen una sensibi-lidad crtica quienes defienden continuamente la justicia y la sostenibilidad, incluso cuan-do resulta difcil es no echarse atrs por el simple hecho de que el mundo se ha vuelto msominoso.

La adopcin de este esquema apocalptico no supone separarse de la sociedad convencionalni dejar de lado proyectos que busquen un mundo ms justo dentro de los sistemas existentes.Soy profesor en una universidad que no comparte ni mis valores ni mi anlisis, y aun as, sigoenseando all. En mi comunidad, formo parte de un grupo que ayuda a la gente a crear co-operativas que operarn dentro de un sistema capital ista que, a mi modo de ver, es un cal le-

jn sin salida. Pertenezco a una parroquia que lucha por radicalizar el cristianismo sin dejarde formar parte de una confesin religiosa cautelosa y, a menudo, cobarde.

Soy apocalptico, pero no me interesa una retrica vaca extrada de movimientos revolu-cionarios de antao. S, necesitamos una revolucin, muchas revoluciones, pero la estrategiaan no est clara. Por tanto, mientras trabajamos pacientemente en proyectos reformistas,podemos seguir ofreciendo un anlisis radical y experimentando con nuevas formas de traba-

jar juntos. Podemos contribuir a reforzar las redes e instituciones que pueden servir de basepara efectuar los cambios radicales que son precisos sin dejar de implicarnos en la educaciny el activismo en el mbito local con el fin alcanzar objetivos ms modestos e inmediatos. Enesos espacios podemos articular, y vivir, a da de hoy los valores de la solidaridad y la igual-dad que siempre sern esenciales.

Adoptar una visin apocalptica no es abandonar la esperanza, sino reafirmar la vida. Comodijo James Baldwin hace unas dcadas, debemos recordar que la vida es el nico punto dereferencia y que la vida es peligrosa y, sin la alegre aceptacin de tal peligro, nunca habr se-guridad para nadie, jams y en ningn lugar. Evadirnos de la dura realidad de nuestro mo-mento histrico no nos garantiza seguridad alguna; tan slo sirve para erosionar el potencialtransformador de las luchas por la justicia y la sostenibilidad.

Tal y como dijo Baldwin de manera tan aguda en ese mismo ensayo de 1962: No todo a loque nos enfrentamos puede cambiarse, pero no podemos cambiar nada hasta que nos enfren-

temos a ello.

Es hora de ponernos apocalpticos, o quitarnos de en medio.


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,SpencerMcKay

EDITORIAL:KalleLasn, Darren Fleet,StefanieKrasnow,KyleRobertson

COLABORADORES: AndrewMills, Dmitr i Orlov,CliveHamilton,Erik Assadourian

VISIONARIO: PedroInoue

DEPARTAMENTODEARTES:NatalieHawryshkewich,LeahMcinnis

DISEADOR WEB:Abdul Rehman Khawar

INTERNETPEOPLE: KarimRatib,Jeremy Teale,Kyle Robertson

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VOLUNTARIOS: KevinEstrada, MikeRae,Allison Thompson, SashaLakic,Shaun Friesen,Elisabeth Hope, Spencer McKay

EDITOR: KalleLasn, Bill Schmalz

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IMPRENTA: Quad Graphics

E D IC I NE NESPA OL

EDITOR ENESPAOL: DavidLealGarca

EDITOR ASOCIADO: Joan QuesadaNavidad

TRADUCTORESPRINCIPALESJoan QuesadaNavidadDavid Leal GarcaOmarPrieto Mndez

DESARROLLADORWEB: CsarGonzlez Gutirrez

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ILUSTRADORASOCIADO:Santi Erill

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Sehatenidoelmximo cuidado para citara lospropietariosdel copyright de lasimgenesy textos empleados. Noobstante, pedimosdisculpas si hemos omitido algunencasodeserinformados, serealizarn inmediatamente las correccionesoportunas.


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JuanGenoves


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Las noches son distintas ahora. La

respiracin profunda y regular de Lillian es lo

nico que se distingue en medio de este silencio

fantasmagrico . No estoy acostumbrado a

tanto silencio. Yo no consigo dormirme.

Me quedo levanto y miro los fuegos en la otra

orilla del lago. Miro para ver si el mundo

comienza de nuevo.

Ao

nejodel co


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La radio de la BBC... Internet solo

funciona algunos minutos aqu yall... Es difcil saber lo que ha

pasado... quin se ha llevado la peor

parte... cuntos han muerto...

Tal vez sean 1.000 o 2.000 millones...

Acaso ms?

Las guerras nucleares arrasan Oriente

Medio, Pakistn, la India... Hordas de

gente huyen hacia Europa... Los chinos

huyen en direccin a Siberia...Japn ha cerrado las puertas... Australia

ha sido tomada... No hay muestras de

piedad. De momento, Osoyoos parece el mejor

lugar posible donde estar ahora...


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Lil y yo por fin hemos encontrado al grupo de Rainbow.

Ay, amigo, poco recuerdan ya al arco iris. Han agotado

prcticamente todas las provisiones. Y cuando la comida

comenz a escasear, se acab el buen rollo. Rpidamente,

la cosa empez a parecerse ms a una secta. He tenido un

encontronazo con uno de los lderes de segundo orden

al darme cuenta de que me haba desaparecido la bolsa.Despus de la pelea, han celebrado algo as como un

juicio sanador. Han dicho que poda pedir disculpas... y

desapegarmede mi bolsa, incluidas las pocas cosas que

una vez fueron de mi madre, porque todos tenemos que

compartir. Si no, la otra opcin era el destierro. Tena

la navaja en la mano, y mientras me hablaban se la he

mostrado. Poco despus nos hemos largado de all.

Cada semana ms o menos, un enorme

bombardero sobrevuela la granja a muy escasa

altura, como solan hacer los aviones de pasajerosdiez minutos antes de aterrizar. No estoy seguro de

qu estn haciendo ni a dnde van.

Hay mucha gente completamente

desolada, personas que parecen

incapaces de sacudirse de encima

la nostalgia del comfort de la

vida moderna. Estn sufriendo

mucho. La mayora tienen

problemas para trabajar

Pisan el suelo como si fueran

espantajos. Son incapaces de

acostumbrarse a vivir

con las uas sucias.

No parecen muy interesados en nosotros, y vuelan

todos en la misma direccin. El gobierno intent

controlar el campo cuando todo se vino abajo, pero

al poco tiempo renunciaron a hacerlo. No s lo que

est pasando en las ciudades, pero dudo que sea nada

bueno. Gracias a Dios que ya no estoy all atrapado.


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Foucault... Demasiado denso. Sus teoras sobre el

poder tuvieron sentido en su tiempo, pero todos

sabemos que Vigilar y castigarno era ms que la

proyeccin de su obsesin por el sadomasoquismo.

Baudrillard... Demasiado obtuso. Lacan... Puras

sandeces. Derrida... Actualmente irrelevante.

Wittgenstein... Creo que sigue funcionando,

sobre todo, lo que escribi sobre la muerte y la

eternidad en el Tractatus. Descartes... Demasiado

cristiano. El positivismo lgico... Una broma sin

gracia. Heidegger tuvo buenas intuiciones en el

tiempo que pas solo en su casa del bosque...

Lstima que fuera nazi.

Es posible trazar una lnea que recorre a todosesos hombres blancos ya fallecidos y que conduce

hacia la abstraccin de la mente de la carne,

del ser de la tierra, de la humanidad de su alma.

Eran la clase de filsofos de la que Nietzsche

se burlaba, personas "en guerra" con la vida.

Friedrich tena razn cuando deca que "desde que

ha habido hombres, el hombre ha gozado muy poco

de s mismo. Y ese es precisamente nuestro pecado

original! As habl Zaratustra".

Rumi, Hafiz, Camus, Nietzsche... han sido sin duda

los pensadores ms genuinos. Tenan los pies

en la tierra... Contemplaban el vaco con la

frente alta y se rean... Se movan alegremente

en el terreno que existe ms all del bien y del

mal... El nico consuelo que me queda son esosespritus libres, sin pelos en la lengua.

L

eahMcInnis

irrelevante

muyrelevante

enparte

irrelevante

todava

relevante

relevante


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Me siento perdido, y tengo miedo. No s qu hacer. Todos

estamos confusos estos das. No tenemos ancianos

sabios que nos tomen de la mano y nos guen por el

camino lleno de trampas que tenemos adelante. Qu

hroes podemos tomar como modelo? Cul de ellos halogrado derrotar a un demonio de estas dimensiones?

Las tragedias griegas nos mostraron lo frgiles que

somos en manos del deseo, y Hamlet nos ense que

pensar demasiado lleva a la inaccin. La Odisea nos

ense la importancia de la humildad, y la Biblia nos

advirti una y otra vez contra los males que acarrean

la codicia, la corrupcin, la injusticia y el odio. El

Corn nos ense la importancia de los lmites, y el

Bhagavad Gita nos mostr la importancia del deber y

el sacrificio. Y aun as, ahora mismo... no hay ningnorculo... ningn depositario de la antigua sabidura...

que pueda guiarnos en estos tiempos de oscuridad.

Tenemos una autntica sanadora entre nosotros! Esuna anciana nica. No s cmo pudimos sobrevivir

antes del cataclismo sin alguien como ella. Me aplica

hierbas del jardn sobre los cortes y las heridas, y me

aconseja lo que debo comer segn los matices de color

del iris. Me toma el pulso y me dice que debera rer

ms y volver a comer carne. Hace unos das, me mir

la lengua y me dijo que deba hacer el amor con Lil a

diario, al alba, durante un mes. Mi antiguo psiclogo

jams me dijo nada igual. Cuando Lil tiene ataques de

ansiedad, no solo sabe cmo calmarla, sino que la

transporta a una nueva dimensin del conocimiento.

El otro da me torc el tobillo y, mientras me curaba,

era como si me curara todas las partes del cuerpo que

alguna vez me he torcido, me he magullado o me he

roto en mi vida. De verdad. Nos ensea a curar todo

tipo de dolores y a hacer bien la digestin, a curar las

infecciones y la ua encarnada del dedo del pie. Pero,

sobre todo, nos transmite la sabidura necesaria para

saber vivir y saber morir.


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20 DE ABRIL DE 2030

Elplanetahasidotestigodetantosaos,dcadasyeonesdeguerrasdereligin... portodoelOrienteMedioyAsia... lasconquistas... lascruzadas... Esunalacerantevergenzaquelasgrandesreligionesdelmundoquedominaronlavidaespiritual

durantemilesdeaosnofuerancapacesdeversereflejadaslasunasenlasotras.Todasellassevalandemetforasdiferentes

paratransmitirnosunamismaverdadesencial,quees,afindecuentas,cmovivirunavidabuenayhonesta. Amaranuestros

vecinos, vivirconintegridad, serfielesalapalabradada,compartirconelquevienedefuera,llevarunaexistenciadegratitud... Yapesaratodo,inclusocuandolacrisis

existencialcolectivaalcanzsuaterradoracima, ningunadeellasfuecapazdeofrecerunanarrativaunificadoraquepudiera

sacarnosdelaoscuridadenquenosestbamossumiendo.Porqunopodanlasdiferentestradicionesespiritualesfundirseenunasola? PorDios, qudemoniosimpedaquesunesychies,hindesybudistas,catlicosyprotestantes,judosy

musulmanessetendieranlosbrazoslosunosalosotros? Porquvolvieronlaespaldaalpreciosoregaloquerecibierondemanodelosprofetasyestuvierondosmilaosmasacrndoseentres?

EsestaEdadOscuraenlaqueestamosentrandoahoraunasuertedeacertijoexistencial,otrogranexamenespiritualporelquehabremosdepasa

rparaundapoderverlaluzporfin?...Hayalgnsecretodefinitivoquealfinalnosserrevelado?


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Embrace[Abrazo](1982),RobertMa

pplethorpe


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Enesteocasofinaldela ciencia,heestadobuscando

laPartculadeDiosenlaspartesmsnfimasde

materiasobrelasquehemossidocapacesdeposar

nuestrosojosauxiliares... enbuscadealgoque

puedaexplicartodoesto...masa,gravedad,movimiento,

fuerzanuclearfuerteydbil,nuestrosorgenes. Todo

esconsecuenciadeeseobstinadodeseo,tanhumano,

dehallarrespuestas a cosasquejamssabremos...

cosasquetalvezno nosseadadosaber.Est

prohibidoatisbartraslapuertadeDios.Sin

embargo,parececlaroquenuncadejaremosdeintentar

entreverquhayall, nunca dejaremosdeintentar

comprenderlas cosas,jamsdejaremosdellamar alas

puertasdelconocimiento,nodejaremos dehacernos

preguntar... Quinessomos? Dedndevenimos?

Adndevamos? Tenemoslibrealbedro?Somos

capaces,almenosaveces,devislumbrarlarealidad?

ExisteDios? Sientealgnintersporm? Oacaso

nosotrosmismossomosdioses? Estospocoscientosde

milesdeaosdeevolucin,esteviajepicodela

humanidadenquehemosestadoenfrascados,representa

algntipodeprogreso?Osomosmsbiencomoun

montn dehormigasmadereras,yhacemosloquenos

esdictado,merodeando entornoauncmulode

suciedad,condenadosaarruinarnuestropropionidoy

sufrirunamuerteinsignificante,solos,enalgn

lugardelavastaextensindetodoloqueexiste?

EliasCarlson


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20 DE AGOSTO DE 2032

Muchos de nosotros empezamos el da poniendo el radiocasete.

Siempre suena la misma cancin, una vez tras otra: Monotone

Silence, de Yves Klein. Despus del cataclismo, se oa por

todas partes.

Primero, en las emisoras de radio estudiantiles...

Despus, en las concentraciones espontneas de gente que

surgan en Nueva York, y luego en San Francisco, en Austin, en

Toronto, Montreal y Chicago. La gente se sentaba en crculo.

Alguien empezaba a tararearla, y otra persona se sumaba a ella,

y despus otra, y otra. Antes de que te dieras cuenta, todo

el mundo la tarareaba. Apoyado en un desconocido. Dndole

la mano a un anciano. Con los ojos cerrados o con la mirada

perdida. El primer xito musical de la nueva Tierra. Son

veinte minutos de una orquesta entera y un coro que hacen

sonar un re, seguidos de veinte minutos de silencio.

Dicen que cuando se interpretpor primera vez, en 1900,

todo el pblico se echa llorar incontroladamente. El

silencio es algo real. No es nada. Yves deca que el

silencio es la parte ms importante del sonido, algo que todos

hemos perdido de vista en algn momento.

Sin principio. Sin final. Un acorde que posee toda la

emocin y la intensidad de una estructura simple... vertida

en la angustia fsica de veinte minutos. Te vienen a la mente

nuevas canciones. Oyes palabras y melodas... donde antes

creas que no haba nada. Y de repente todo se rompe. Se

detiene abruptamente. Todas las notas del mundo estn en

tu cabeza y no se mueve ni una sola cuerda, ni un solo aliento

empuja el aire. Creo que Yves tuvo una gran idea, pero poco

despus va y se muere de un ataque al corazn. Tena 34 aos.

El otro da tena puesto a Yves en el coche. Pasjunto a otro

coche, abandonado, de la misma marca y modelo que el mo. Me

par. Consegu quitarle las dos ruedas traseras. Despus, romp

la ventanilla del conductor y echun vistazo al interior.

No haba ms que papeles y basura. Me sent mal conmigo

pensando que las personas que lo haban dejado all tal vez

tenan la intencin de volver. Pero nadie vuelve nunca. Extraje

el combustible que quedaba en el depsito y lo guarden una

jarra de leche. Eran unos tres litros. La tapa del motor

estaba levantada. Deba de habrseles roto una correa.

Me llevlas bujas tambin. No spor quno se llevaron

el combustible. Durante todo el tiempo, la msica del

radiocasete modificado que llevo en el coche no paraba de

sonar a todo volumen. En el momento del crescendo que da

paso al silencio, llor.


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7 DE JULIO

Se estproduciendo un cambio de paradigma en la teora

econmica. Ya era hora! Lstima que haya sido necesaria que

todo el sistema global colapsara para llegar hasta aqu. No

dejamos de sacudir la cabeza, perplejos, y de preguntarnos

por qufuimos incapaces de pararlo, por quno dejamos de

seguirles la corriente a todos esos frikis de la lgica,

apocalpticos economistas neoclsicos como Friedman, Hayek,

Mankiw, hasta que todo estallen sus mentes fras, serenas

y calculadoras. Despus, a sus rostros ptreos y sus teoras

obstinadas no les quedms remedio que ceder y darse por

vencidas. Por fin, el Crecimiento ha dejado de ser Dios. El

progreso se entiende ahora como un tema espiritual tanto como

una cuestin matemtica. Una verdadera concepcin de los costesha venido a suplantar al equilibrio como premisa bsica de la

economa. Los precios de los productos estn siendo revisados

para que reflejen su verdadero coste ecolgico. Se celebran

reuniones de bionoma en todos los grandes centros urbanos.

Estas comienzan siempre como debe ser, con un minuto de

silencio...una forma sobria de decir: por si alguna vez nos

olvidamos de esto. Ojalpudiera olvidarlo. Esa muerte lenta,

el colapso, los disturbios y las guerras por los alimentos.

Lil contina teniendo pesadillas. Ojala viviera lo suficiente

para ver si, realmente, existe otra forma de cambiar a mejor

que no implique atravesar por graves crisis. Aun as, al

menos ahora podemos decir, por fin, que los viejos personajes

de Wall Street son cosa del pasado. La usura ha vuelto a ser

tab. Aqu, en Osoyoos, la hemos prohibido del todo, y hemos

comenzado a construir algo completamente nuevo. Si hemos de

salir de esta con vida, ases como hay que empezar.


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2 DELil y yo por fin hemos venido a San Francisco. El MoMA que hay aqu

estmucho ms dejado que antes. Solo hay dos guardas en la puerta.

La tienda de souvenirs parece ser lo nico que se mantiene en buen

estado. Ahora que han desaparecido todas las pinturas abstractas que

tanta fascinacin causaban en la poca anterior al colapso, el

aspecto es completamente diferente. Le he preguntado a uno de los

encargados del museo dnde han ido a parar. Algunas se conservan

en los almacenes de Nueva York, y en la Tate guardan tambin un

puado de ellas. Otras se acumulan en colecciones privadas de

gente que espera que un da vuelvan a tener algn valor. Sin embargo,

cuesta encontrar a un artista o a un verdadero coleccionista que

sienta algn respeto por el arte de esa poca. Las piezas de entonces

se buscan solamente como artefactos de una cultura en decadencia.

Al final, todo el mundo estde acuerdo: la abstraccin era el ltimo

aliento de una imaginacin moribunda, de una esttica abocada a un

callejn sin salida que primero paspor el rocknroll y continucon

Grand Theft Auto y las palomitas al microondas (os acordis?).

Me gusta estar aqu y comprobar que el mundo del arte avanza en

nuevas e intrpidas direcciones. El cambio se nota en todas partes.

Fuera de las paredes de los museos, la msica se interpreta con

coros al completo. En su mayor parte, se trata de cantos

gregorianos. Los artesanos estn renaciendo en todos los

lugares. Ser artista ahora es ser parte del mundo, en lugar de

situarse en algn lugar externo a este y contemplarlo desde all...

El arte ya no consiste nicamente en poner pintura sobre un lienzo

y colgarlo en una enorme pared blanca. Bienvenidos, por fin,

a la desmaterializacin, a la espiritualizacin, del arte. En el

MoMA de San Francisco, ahora el arte se puede degustar. El edificio

es un parque de juegos. Las fuentes para beber son como toboganesde agua que estuviera esperando a salir. Por todas partes, te

salen al paso caras y cuerpos, personas y objetos en movimiento

que entran, se pasean y se acercan a ti de maneras provocativas...

A veces son sorprendentes o revoltosos... Otras veces siguen una

coreografa y resultan artsticos... A veces, incluso, pueden resultar

algo intimidatorios si no ests acostumbrado. Me recuerdan mucho

a los primeros artistas performativos, como Tino Sehgal y Marina

Abramovic, que triunfaban antes de que todo se hundiera.

Lil y yo hemos dado una vuelta y nos hemos quedado apabullados.

No parbamos de preguntarnos:

De verdad esto es arte?

, lo que

a mme provocaba una revelacin tras otra, del mismo modo que, en

una poca anterior, el Cuadrado Negrode Malevich o las latas de sopa

de Warhol me haban hecho reformular la perspectiva que entonces tena

sobre el arte. Pero eso pashace muchos aos. Ahora, la experiencia

es menos cerebral, ms visceral y manipulativa... Cara a cara,

mirndose a los ojos, mentes y cuerpos conectados aquy ahora. Tengo

la sensacin de que estsurgiendo un nuevo sentido... Arte viviente...

Nos muestra cmo vivir. Nos ensea a rescatar algo esencial que todos

habamos perdido en alguna parte con la abstraccin: la gratitud.

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