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CliLTIVO DEI, CLAVEL A PLENOAIRF, ^

El clavel puede cul!ivarse de muy distintas for-mas, según climas y circunstancias:

a) Cultivo en tiesto, qu ; se mantiene a plenoaire desdé ahril a octubre, pásando los tiestos aestufa el resto clel año, y manteniendo dentro dééstas una temperatura apro•ximada de io a i5° C.Este sistema es aplicahle ^a regiones. en que latemperatura desciende en invierno por debajod^ - 5° c.

fi) CuItivo directo en tierra en análogo perío-do (abril a octulíre) y pasando después a estufapor trasplante, aplicable también para las r.iistnasregicmes que la anterior. ^

c) Cultivó p^nnanente en bancales, limitadospor cajoneras suscr.ptiblc^ dc cubrirse c^n basti-dores-de vidrio o con persianas desd^e octubrc afebrero. Sé suele adoptar en las zonas dc,nde úni-camente algunos días. desciende la temperatttra;^í ^ grailo^s pur dehajo de ceri,,

d'^) Cultivo pertnanente cn plena tierra y alaire libre, sin protección alguna, sistema qu^ pue-de emplearsc en las zouas d':nde no hiela en tod^^el ^tño.

I:I cultiv^ del clave! en l^lena ticrra sc llcva acabo obteuiendo esquejes a fin de verano a en in-vierno en los climas cálidc^;, de las plantas de,unaño, ésquejes cuyo arraigo se l^ogra en cajoneraso estufa, y están en principios de prim3vera enperfectas condiciones de poderse plantar directa-mente en tierra. •

I,a plantación se verifica, pues, ségún los cli-mas, de marzo a mayo, y nunca después del mesjunio, sobre terreno dispuesto en caball^nes, si-tuando la^ plantas a média.ladera, par lo gpneralco^t e^cposición Medialía. Este caballón s^e modi-fica posteriormente, pasados unos meses de ]aplantación, dejando las planta,c aporcadas en elceniro de los nuevos caballones.

Ll marco de plantación cs muy variablé, segítnlas distintas zo^nas y clases de terreno, pero lomás corrientc es disponer las plantas Fn Iín^easseparadas unos So a 6o centímetios y dejandoentre plantas ^tna séparación de 30 ó 4o centíme-tras^ ^dentro de la línea. ^ ^ ^

En terrénos de buenas características es co-rriente situar dc^ 9 a i^ plantas por •metra cua-drado, ^pudienda llegarse hasta i6 ó 2o en el casude terrenos poco fértiles. .

EI clavel prefiere terreilos suéltos, rnás bien^ titrenosos c^ue ar<.illosns, ^ descte luégo c^qe tenga^t

cal en proparción outicirntc, pur c>er un .^e^uelitupreciso para esta planta.

1_a plantación efcctuada en prií^a^yra'^^a elterreno más de un año (por la genérá^ ^le quit^cea diecisiéte meses), r^prvvech'andosé^^-^ 1^^^^ 'flóre^^s',hien desde cl primer ^^erano, a únicamen.e a par-tir del invicrno siguictrte, es decir, que en estecaso se désbot,o^nan las plautas cl primer vecano,para que la floración sea más intensa en el ségun-do durante el otoño, invierno y prunsvera.

En agosto del aña siguiente a ta plantación sue-len arrancarse las plantas, que ya en años poste-riorés na darían una floración cot:veniénte. Sine^^bargo; en alguuas regianes y en diversos paísesse continúa el cultivo del•clavel más de dos años.

En los meses de noviembre a euero se. produ-cén las mejores flores, aunque en Fequei,.a canti-dad si na se verifica el forzado, y vam bajando decalidad a medida quc lléga el verano .

El desbatauado se verifica déjando ú^:icame.n-te una flor por ratna, pero esta operac?ón deheterminarse en el mes de julío si se quiere inten-sificar la producción invernal, y si se de:ean fla^-res en abundancia en el mes d e septiembre, debeacabarse en junio.

Es muy intéresante tener en cuenta la indica-ĉión anterior para evitar sorpresas desagradablés,ya que podría disminuirse la producción de fl^aren épocas de gran producción, por no haber ter-minado e] desbotonado a tiempa.

tiTO recíuicre el ctil!iv<^ c^el ^.lavcl ĉ tt^clacjos éspe-

I U^^

ciales, tíniean^ente las escardas y labo^reo del te-rreno precisos en todo cnltivo,

Kespecta a los riegus, hay que teaer en cuentaque el clavel no precisa mucha agua, sino única-mentc mauteuer un gra^lo ;uiicientP de '.iurnedady saturaciún eir el terreno, ^luc nunca supongaeaceso de agua. F^.; tatubién co^rdición muy esen-cial disponer la plautación eu sitios muy ;•ireados,donde no se produzcan atrnúsf:ras cerradas.

La producción es muy variable, p^rque depén-de del período de aprovechamietito de - la flor,más ^o menos extensa, segím las conveniencias ylas circunstancias esgeciales d^l clima. Una co-secha normal en climas templados es 1o de 40flores po^r planta, obteniéndaue, sin embarga, conbuenas variedades en muchos casos, en los climascálidas, hasta 6o flores por mata. .

Las variedades más corrientent^ent° ernpleadasen e^l cultivo Uan la de los claveles Ilamados reflo-recientes, o "rern^ntarltes", empleáudo ŝe tambiénen las zonas donde ^el cultivo ha adquirido ya unaespecialización las variedade5 de clavel nri^erica-r.a, de flor más grandc y que oe lleva por logeneral en forma de cultivo anual, arrancándolefodas l05 años, y prc^;,ándose especialmente parael forzado.

En una misma parcela de tPrrenb no debe r^-petirse el cultivo del clavel hasta pasados algunasarios; debiendo, por tan:o, inclui,rs^ este cultivaen las alternativas corrientes en la huerta o mez-clándola con otras de flor de diversas especies.

Ia ^e^ríodo de tiempo ^ue tleja 1i17rc el cultivo

^ltl clave( cu rl icrrcn^, c1^•sile tiual ^1e v• anu, enque la fl^,r tienc bajo prccio^ y peor c•alic:acl, lk>,s-ta princil,í^t de prima^era, ptr^de c^u^rse el tc-rreuo catt irir<^s cultiv^:>s de il^r, entre 1^^, cuales1>otlcrnrts ci'^.nr lus siguie.ntes:

Ylantas hulltokls, rum M lr^s glaali^olos, an^^uroites,^i^7^rcisos n i^^rás, can o sin protecci^ín er_ • i otoñct,

Parr^•lac de^tína^ia^ aí culti^•n dc flnr para cortar.

segtín• los climas, y que producen floración ato^rial o invernal, o, en todo caso, a principic, de pri-mavcra, pudiendo Icvalltarse del terreno ;•ntes dc]a plantación del clavel.

También se alterna con un cultiva de orisrnrat,^-yruQ, plantaclo en junio y con recalección en ncr-viembre, o con cultivos anuales ^a bisanralcs clefl«res de menar valor, sen^bradas én agosto o sep-tiernbre, para recolección t_mprana en primavera,como ]a reseda, ]os pensamicntos fl los alhelíes.

CUL"I'IVC> FUR'I.ADU Dl: CLAVL^L.S ^

En los climas ternplados ^basta disp^,ner lasparcelas normales del cultivo cíe clavel limitadaspar armadura de madéra empotrada quc permi-tan la colocación de simples bastidores en el ^oto^ño, que sirven para forzar la floración, presen-tando un máximo de novie^nbre a Pnero.

En las climas frío^s es precisa disponei I cul-tivo bajo estufas fijas, bien directamen:e en lostablares dé estas estufas, bastando rellennrlos con2o a 25 cen^tí^netros de tie7rra vegetal, o disponerel cultivo é^ tierra ba'jo la instalaciín de grandesestufas.

El mejor mantillo destinado al caltivu del cla-vel es él formado con tiérra de hojas, a^a que seha rnezclado estiércal y cal, y 4ñadiendó úbonos abase de 9^arinas de huesos o gallinaza.

" La distancia de plantación én el caso de ir di-rectamente sobre los tablares o mesetas le la es-tu6a, es de 2o centímefros a marc^ real. En elcaso de ir el .cultiv^a en tierra, sé sigucn ias dis-tancias indicadas para el cúltivo a plena aire.

En el cultivo forzado' se su:len colocar íos e ŝ-quejes en agoŝto, manteniendo la temperatura ^en-tré 1aS Io y i2°, cuanda ya se trata de pluntaçiónde esquejes arraigados. Para este cultivo no de-ben aglicarse temperaturas altas, pues al clavelúnicamemte le va bien el ealor natural dcl veranoy muĉha airéación, siendo preciso tener cuidadode efectuar pulverizaciones preventiva,s contra elataque de pulgo^nes y arañas a base de jugo de

Ial^acv y tambiéu con caldos cúpr^c^s, cu_no pre-vc^ntivo de otras enfermedacíes.

Un cuidado especial que reqttiere el cu'.tivo délclavel es el enttrtorado, pues °n muchos casos lasramas se tuercen y cnroscan, dificultando el bucndc^sarrollo cíc 1as flo^res y:u recogtda.

C^om^o sistemas de entutorado se pueden em-p;l^ear alambres circulares de vario^s pisos, quesvstienen la vegétación de cacía mata o de cadadas matas, o también una red horizantal de hilastendidos entre vástagos de hierrás situados segúnlas líneas de plantación. ^

En los cultivos de variedades reflarecientes noés preciso en muchos casos el éntutorado.

Las variedades de claveles re#lorecientes má^stailizadas en Europa céntral para el forzado ^so.nIa A.g^a^dir, de color nosa;^ :a F:^dwe^ss, de colorblanco; la S^a^joutWa, de co?or rojo oscura^, y laD!enctscJue .SJ^^ger, de flores ^ de eolor escattata. EnItalía d^estac^ la Salf,ev~mo.

Entre las variedades de ciavel ame-:cano seclestacan las Wh^it^e Perrfe^ct^iqn, de flores de co-lor blanco; la Wi^n^>"sb,r, de floies de color rosa, yla B^,eac^n, de fic;res de color roj^, que sé.llevanen cultivo anual.

CULTIVO DE LA ROSA PARA C^^RTAI:A PLENO ,A1RE

^^

En el cultivo del ror,al para flor cortada, y sise qŭieren tenér buenos rendimientos, es préci-so escoger terrenos apmpiatio^. qu,^ son los arci-

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llo-areuu^us, ricus cu ral. l^l cul^tiv,u dc Ia rus^iprefiere terrenoc, algo más fu rtes qut ei cu]tivodel clavel.

I.a plantación de las matas dcl rosal c1cbF ha-cerse en primavera cuauclc^ el suelo se ha calenta-do ya un' poc'^, y por tanto en fccl^a va^:^thle se-gún las region^ s.

Cuandv el clima sea mu^^ temp:ado, o pttcdeiicubrirse con facilidad de las héladds es :u;as lasplantas de rosal, es m᧠aconsejablé la p!antaciónen otoño. ^

En esta época :uelen podarse enérgtcaméntelos rosales, para qué durante ^l invie^rno vayan

^ tomando fuerza las yemas, efectuándo ia planta-ción, coano hemas dicho, dtrectamente en otoño

^, en los climas no excesivamentP fríos.Son aconsejables para este cult:vo loti llama-

dos "rosalés híbridos dé té", que reúner^ ias con-dicianes de las flores d^ ]argos pedúnculos ygran resistencia y buen aroma y- colorido, asícomo formas en la flo^r de gran perfeceión. Mu-cho más délicados son ]os "rósales de té" y]osreflorecientes. .

Aunque el marco de plantación dépende, natu-ralrnente, d^e^l vigor d^e la variedad, el más ^^-rrie^,te suele sér el de 4o par 50, es decir, 50ce^ntímetros dé separación entre las líneas y 40centímetros erttre plantas, efectuando la planta-ción de mo^do.que quedé ligeramente cubierto conla tierra el cuélla de la planta donde s^ ha veri-ficado el injerta d^e ^e^scudete.

Los primer^o5 botones dan lugar siempre a flo-

Rc,^a híbrid^l tlc té.

I'f.llYlflll fIINA `(

res de paco valor, y por cllo debcn cortarsc aulésdc su desarrullo, provocando así una mayor for-taleza de ]a vegetación posterior. Como ^e1 golpeintenso de íloración se verifica, naturalmentc, enlo^s meses de ma^^o y junio, y en el resta aparecenflore^s c?n mucha menor profusión, se precisacanducir la vegetación de tal forma qué se esca-lone gradualmente la floración, siendo éste unode los principales objetivos del cultivo.

Para ello se suele dividir la plantación en tnespartes; desbatonando las primeras parcelas alaparecer los primeros botones. El segundo grupode parcélas se d^esbotona quince; días después y eltercer lohe sé dleja sin desbotonar, y con e11o ha-cemos que la cosecha s;á unifarme dentro del nar-mal período d^e floración que: la planta t'ven^ apleno aire.

El rosal suelc dar un sG'^gundo g•ulpé de flor enel atoña, y para escalonarlo se sigue ^el mismosi^stema.

Si a mediados de agosto se quitan los botoniesformados para este segundo períoda de floración,podem•os tenér flones a fines de •octuhre. ,

Como en muchos caso^ los primeros fríos denoviembre apanecen cuand•a la plantacián presen-ta aún numérosos botanes de flor, cahe aplicarestufas móviles para apravechar esb4 íiltima pé-ríodo haciendo siempre previamente un estudiode si ^résulta sufici^entemente remunerador el cul-áivo para ^el gasto quie^ la operación precis:a.

^ Lo es en todo^ casa cuand•a el forzado se inicia

dcsde el v^rai^o, couw veremos al tratar del for-zado de ^esta planta.

Se precisa en todo n^omeQ^ta na descuidar elabonado intens^_, mantenicndo cn cl térrcno calsufici^ente, pnes este: elemento no sólo tie,ne in-fluencia ^en ei désarro^lla de la vegetación, sina iti-cluŝo en el tono de color dc, la rosa, actnand^ucon;o intensificador, de tal forma que nefuerzatcrs c^alores oscuras y aclara Ias débiles. En kIcaso de flor de variedadés dé flone^s amarillas orosas^, dle^be tenerse esto muy ^en cuenta para nopasar del contenido ^estrictamente preciso dé calen el suelo, que puede llegar a hacer perder élcolor a las flores.

Acabada la floración, y en '^el més de noviembreen l^os climas fríos, es preciso cubrir con pajizoso ratmajes de caníferas las pi^es de rosal, paraevitarl•os los daños de 1a hélada.

Llegado el principio de la primavera sé podanenérgicamente, rebajándolas hasta d^ejarles úní-cam^ente dos o tres yemas que facilitén la rápidabratación y stiprimiendo bo^da la madera débil.Las variédades muy vigorosas se ^adan a un 4er-cio de la longitud de las ramas, pt^s no resistenpodas enérgicas.

La, plantación se vérifica con plantas injertadassabre r•osa canina en escud^ete, en juli^a o agosto,siendo las variedades más ^récomenda.bles, comounivlersalmente conacidas, las siguientes :

Dé flor raja: Hc^d'd^ey-ked StWr y Etorile ^Hallm,n^le.

• llc fl^^r c^-1^^r ru^a: lSiue-rliĴj-C^uluuibia ^^ :1rca-b^lla.

llc color aniarillc^ ^^ r^„ado : Orlcr•lin ^• R7n^!faan,eI^ictA•u-f I ^^.

T)e color anilrillu: .ti^^^u^^^•nrr dr C7aualirrs 1'^°rrtcl

v Golctc^^t (^htir lia. ^D^e cul^^r l,lanc^^: I^rarr lícr,rl D^ricscltki y I^ais^^-

rin :°l ^cyust^^ I •íktoritY.

D^e color rujo y aniarillu^: Las An^y^^lcs y IIIa-da^^rtt,e Ediou+^r,ct HKw^rivlt. -

Es de gran interés la expanr,ión de varíedadescatalanas, algunas d^e valor internacional reccna-cido, coma la D:^qi+esa de F^^^arairuta.

GUL'1'IVO F(')12Z.1ll0 DE ROSAS

El cultivo nornial dcl r^>sal ^ara ^ flor cortadaprodu^e flores desd^^ la prim^avera al final deo^to^io, pero únicamente alguna flar en inviernoen las climas cálidos, donde no hiela jamás. El

• mayor inberés ha d1e^ ser, }aar ]o ^^tanto, praducirgran cantidad de tadas en los meses de invierno,en lo^s que el precio es elcvaclo.

El forzado ^lel ro^al ha sida sicmpre clifícil,experimentanclo fundamentales variacíones a tra-vés de 1os aiios, y la razón principal cle esa d^ifi-cuitad re^side ^en tener que realizarl^os con plantasde variedadee injertadas sabre el rosal -salvaj^e(ro^sa canina), qui^ es un patrón tarcia en la brota-ción anual de sta vegetación y que, hor tan'.o, seapon^e a dicho^ forzado, no pudienclo <^htenerseflares ^en eanticlacl antes del mes cle enr.^ro^.

l:ecicttlentcute, Qesd,e ltace vari.,^ aitus, se Itanhccho ^.nsa^-^^s cle lorzad^^ en cli^^er^sr^s países cotihlcno^ é^ito can v^triedades lrtuicas cle pie^ }' coninjzrlos re<tlizados s^.^hre Rusct .llaazt^^tti, clau^ionittchos tt^cjures resulta<los cste ítltitno u^étodo.

T.oá r^^.;rilu lratic^.^s ^le l^i^.^ se caltivan sol^r^ 1-sl^a^^cr^les tle Ias estuia^ para lx^rler elarles el calursttficienbe cti ]a tierra escasa tle clue ^li^puucn, ^cr^^l^rr^ducr^tl flt^res de pedúnctilos floralis dÉbiles.

Pléna éxito se ha logradr^ con lus injertos so-bre Rotscz Il^la+rae^tti, que, coti uti pei•íodo itluy cc^rtode reposo, brota rápidament^e ei^ primavera, pu-ciietrd^rr 1legar a darse cinco cortes d^.^ r^:sas ^encacla aito de cttltivo. ^ '

I^I grupo cle I^'cu+cr^ l'er!rrwti^r^tra^ sc suclc injeriarsuttre I2us^n ^^d^ratn. ^ ^

I^s inj,ertcs suc'.en hacer^,e Kn febrero, hudieti-^I^^ cr:uteuzar el ttasptante ^en abril cte^ las plantasínjertadas sobre ^planchue[as, en las que puedencolcxarse cajottieras o, sobre las yue exi^stc, unains:alacií>n d;e estufas [ijas. C^al^e tantbién cudocat'

.cq el período^ aclecuacío, ^nbre las ^at-cel^as planta-das, estufas tnóviles del tnod^elo quc se de^crib^rn el cahítulo correspondicnte a estufas.

Teniendo ett cuenta que ^t^l resal forzaclo pasatod<^ el ^aña hajo 'vidri^o, es hreciso darle artifi-cialmenté un reposo veg,etativo, que se ^abtiernem^tutenicndo ]a ^hut^ledad de la atmósfera, pet=o_disminuyettdo ^o^nsidĉ rableturnt^; ]os riegos ^cn c^lv,eran.^, ft^rtaléciéud^ase así ]as plantas, yué dattcíespués vegetación vigorosa y Lellas flores. Du-rante este ^eríorlo cle ne^osn n^ si• corictn las f^n-

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red y se ar^a<le cl alx^n.,^ preci.o para el próximoiorzada. .

S^e tiene también buen cuidado de prevenir ycombatir las ^cnfcrnredadcs, para reunir todas lascondiciones l^recisa^ a tma vcgetación perfecta enel invicrn^^.

I.a tcmperatura más aclecuacla cn las ^c^tufas ucajoneras de cultiv.^^ forzad^o^ de rasas varía de ]c^r2 a rf3° C., si bi^en puedé bajar algo en los díasen que el terreno se conserva caliente por no ha-ber descendido bruscam^e^^nte^ la temperatura éxte-rior 1os días anberiores.

El po5ible ^equilibrio de ^temperatura entre élsuelo y la atmósféra produce los m^Pj^ores nesulta-dos, pues la planta no puede seguir icl impulso dévegetación que le picle la Gemperatura d^el aire sila absorción del suelo se produce leutamenté, porestar éste a haja ten^peratura.

En nucstro país no son de temer estc^ clesequi-librios, pucs.el terreno rara vez se eufría aprecia-blemente en sus capas internas, y la frialdad de lasuperficie s^e compensa directanr;nte po^r la ^tém-peratura dé la atmcísfr:ra artificial que creamoseu la estufa.

Dande se presenta este peligro^ se hacen insta-lacionies de tuberías enterradas, qui^ réciben airecáliente. Gcrn ^estos sist^mas de cultivo y régu'an-d^o perfeciamente las fechas de comiénzo d^e^l f^or-zado y 1a calefacción, sobre las que es imp^sib'^edar datos concre'os por variar én cacla caso, hel^-^ran ^raclucciones grandes cle flor ^^rt n^^vienl-

brc, diciembre y enera, cuando la rasa tíen^e másprecio.

En el forzado an^ericano se emplean plantasprocédénbes de estaquillas ^o de inj^^rtos que^ sel^^sanj a ties^to una vez arraigadas, y de abril ajuni•a se plantan en estufas fn plena tierra o entablares borcleados d,e bastidares, sabre los quepweden colocars ĉ pratecci+,Iles. Después de la re-cogida suelen dejar un reposa de cinco a seis se-^nanas, para vig^arizar la próxima vreg^etación.

Las ^ternperaturas empleadas en este farzadoaméricano suél^en ser de i8 a 24° C., en el invier-na, duranbe^ el ^día, y d^e^ i2 a i4° C. por Ia noc1^.

En eI forzado seguida en Bélgica se utilizanínjertos de año y•tne^di•a sobre escaramuj4, pIan-tándolos en el ínviern^a, sín podar, y^e:féctuandaésta poda +en marzo t^odos las años a unas tr+esyen^as, eliminanda a la madera de+ dos añc^s.

El marco de plantación en el terreno e^s de 30por 40, és d^erir, 4o centímetros entne plantas y30 ^eiltré líneas, después de ttna buena ca^a y unbuen estercalado, y no comenzando eI farzadohasta tres año^s después d,e efectuada la plantasçión, haciéndal^a un año antes cuando sie tiéne laseguridad de que Ia madéra d^el r•asal está fuer-temente agostada y las plantas son vigono•sas.Antes de forzar su^elen dar un buen riega canpurín, o sca ]as d^eyecciones líquidas de los ^estér-coleras.

Los modelos de estufas móviles indicaclo^s enel capítula de estufas, y qtue se empléan ^en el far-iaclo helga, se co^locan a partir d^^l r$ dé cliciein-

^ 1 ?U

bre y c^ai distintas icrh^^s, sr};ítn lus^ l^criuclos clcfloracic^n invcrnal quc se hayan csc^:gi^lo.

Ha^- quc tener c^n cuci^ta ^{uc por tratarsc dcinjcr!o ,abrc Rosa caninc^, nu suelén ],roclucirscflores abundantes hasta c,] nu^s de fel^rer+, 1^ má^pronto. . ^

La ahlicación d^e ]a téml^icratura sr ;i^^uc se^;tíudos métocíos, qtue cuenfan ambos cou l,articlarivs:

u) Dando una teniperatura de ^o a^^° des-de el primer uiomento y ciurante cuatro a sei^dlas, y hajando después a la temperatura norma]de T5 a. i73° grados duranté ^el día y io a i^° du-rante la noehe toclo el tic:mpo del forzaclu y hastasu finai.

b)^ Empezando c^^n to a i2" clurante c] clí^i y• algo menos durante la ncxhe, durantc tui períod+^

cle cliez a yuince díac;, y aumeutando^ después gra--dualn^iente hasla los T8 ó^^". r}ue se nianti,^nenh,asta c^I final.

.lcabado el forraclc^. )^ ^Iuiiadas ]as^ catufas, screbajan las matas, dejáuclulas hasta cl otoña eninvi^erna, v^lviendo a i^orzar la u^isma parccla alcabo de los dos añris, t^ues^uo r^_sisten^forzadusauuales continuados.

Una misina planta n^^ se fuer^a más qu^ clos otr^ ^^eocs, arrancándo^la d^espués.

Las variedacles cle rosal empléc^das en el fvr-zado s^an Jas mismas que luemos indicaclu paraPléno aire, que sc ^restau a esre^ culti^^o,

kJl

CC1.T1^'(^ llLL CI^IS^1N'lE^TC) 1':11^.1^ 7^ 1.OR C^)RT.^D:1

la crisautcmu cs una de Iri^ ^,lantas cl^ tua)'ur^^alur ornameutai, p^^^r su 1'lor, 1,er^^, yue exige uttcultivu cuidaclos^^• ^• clelica^lu si >r rlttier^ ]legara hucnos resultados.

1.a c]ificultacl de1 cultiv^^ cunsiste e^^^ncialntcntcen la manera de conducir la flaraeión, y^a que ^cpresenta una cliferenria marcaclísima ^entre el va-lox de las flores pert^enecientes a una misma plan-ta según la ^elasé cíe botón de que prc>crdan.

Una segunda dificultad para el éxit:a en estecultivo es la eircunstancia de tener ^I más altuprecia en una ferha concreta 3r d^etertuinada, quees el primero d^e no^yientbr^e, fiesta d:e^ Tados lusSaut^o^ŝ , ^día en el que la venta de crisantemas pr^-sertta un ntáaimo, variandrr e^tractrdinariamcutelos pneeios antes y cí.espués de ^csa jecb^a.

I?ste cultiva puécl^e llevarse en <r.,tufa fría enlos clintas extremados, ^e incluso ^lírectam^ente, apleno aire, én los climas templael<^s )- cálicío^s, Fxi-gienclo tánicameaite su multiplicaciún la proteccióncl^e una estufa o cajon^cra dc:nĉle se coloquen lasestarluillas o esquejes, ya que el cultiva conipren-dc de marzo a noviembre y, por tanto, que^da eli-minada la estación más f ríá.

De ntarzo a abrit arrai^an ios esclu^cjcs p^rtéc-ta^ntent^e, pasanda ^é^n ^ may^«^ a ticrra o a ti^esto, yna sienda pla.ntas que prc^iseu tuucha calur.

Eu el mes de juli^a, al comenzar a formarse lost^,o!on^e.^, r.e hace él abvnacln^ campleto, y Post^rior-

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mento, al caba de un mes, se da otro abonado, emel que dominan él ácido fosfórica y la _cal, ele-mento^s destacados para favorecer él desarrollo delas f]ones. La proparción de cal en fortna de car-banato suele ser de dos a tres kilos por métrocúbico dc tierra.

Especialísima atencióu se da en este cultivo alc^ pinzamientos o despttntes y al de^sbatr^nado,pwes con éstas d^os operaciones ha de canducirsela planta de tal forn^a que ;produzca las mejoresflones a primeros dé n^ovi^embre.

Mediatite las despuntes, g^eneralmente éf^ectua-dos en el mes de jumia, se logran una ramificaciónmás vigorosa y una vegétación más apretada ytnenos alarg>ada d^e las plantas, y médiante el des-botonado se suprimen aquellos bot^ones qua no^sdarían flores de pear calidad y antes de tiempa,déjanda únicamente aquellos que én la época pre^-vista iLO^s producaen pocas flore^s, pero de exce^lentecalidad.

l:s tan enérgico el desbotomada del crisant^en^o,que se suelen dejar o una flor por cada rsama oéxĉlusivamente una flor en cada planta, cuandose pretende^ 1legar a flonErs . de gran valor po^r suextra;ordinaria tama"nc^.

Para comprender bi^en la tnanera de eféctuarel desbotanado, hay que définir perfie^ctam^entei lasdiferentes clases dé ba,toncs florales que sc pre-sentan en lro^s crisantem^os.

Sigui^e^nd^o el adjunta ésquema, vemas que laplanta de crisantetno empieza por formar un bo-tót^ central, ^ué recihe e( ^ot»hre d.e bntó^t ^►'i^rta-

v^^r^al, por su ten^prana. aparicióii, ramiiicán^lea^a arnbos lad^o^s, dande se han de c.riginar nuev^brabe^s y bót,ones florales. ^

Sui^^rimienda el bo^tón pr^irnaz+^^ral, esUa ramifi-

Esquenia de ta formación cie botones en el crisantemo :I, botón primaverai; II, primer botón coraia; TII, sc-

guncío botón corona; IV, botón terminal.

cación sé verifi^a com mayo^r vigar, po^r n:o absor-ber ac^uél elcanentos nutritivos, y sé forma^ otros

hvtunes cu cata^ ratuiticaciuucs, c^u^. cc:cil,cn cln^+mbre cle ^u-inu^r bot^a r,^rcnr^w, que prr,clt^ccn fln-res dé buena caliclad cn algunas varieclad^ s, l^eroinferiores a las de los segundos bofones ril,^u-cci-clos más tarde en la ratniñcaciím en otra^^< v<iric-clades.

I^n cste últitiiu ca^o^, l,or taut^:^, rs l^rcci,^^ ^^^li-minar ^tanlbién en un ségundo dcl lw,tonatl„ cl 1>ri-tuer botóu corúna, dejancia qu^ se f^>rnicu vil;c.^r -samente en cacia ^rama los denominados sc^^uat^ic^bot^n. c+op^ou^, tjue prcducen, po^r lo g^t neral, contoya ^enics dicho, fhres dé alts, calidaci.

Tanto los prímeros botones corona c auci lossegundos, 11^evan ramifiĉacioaúes vegetativas cn subase, péro nunca botones florales. Ia tínicr, quefc^rtna botoncs floraleh adyacentcs es cl cleuuini-.nado ^^tcí^ ter^^^nal, que ya es e] últini^^ bro^t^^fló^.ral de la rama. ^

Ln algunas varicdades, el botóu quc ,c cleja>ánieamente en cada ratna para ]a produccibn cleflor ^es est.e l^otón berminal, suprituicndo l^os l>^:-tc>nes coro^na anteriorés, y]s^^s adyacentes al ter-minal.

Yor lo ge^1ienal, podenlos reducir a dos los sistr-mas de cultivo del crisantetu^ c^an fin co,mercial:^e^l prim^ero cansiste ^en dejar úuicamen!^e ^el llotóntermit^al y el ségundo eu dejar el segund^o^ 1> ;^tóncorana.

Dejar reducida ía flu^ración a lcrs L,^tuttc^ tcr-minalés supon^e siempre un retrasa en ^sta y, portanta, ^es pr^eciso tenerlo IIIUy ^en cuenta para me-diC hien el m^omento en ríue hav due efe^ ĉtuar t^l

desl>ot^ ua^lu, l^ara t:^ner las Ílurc, rn ^^rfeclo es-tadu ^^en época op^irtuna.

Son num.rosísin^as ]as varietlades del crisante-m^o rlue cada ano se ^:btienen cc^2n^^^ novedades parac•1 cultivu cum^^rcial, ^• aquí sólo nas liinitaremo^.^t^ relaci^.^nar ias vciriecla^l.°s ^nás cletitacadas •en losiíltiino^s ^tños.

Para cultivu del hri,^a^^^r butú^i cvrr^na, son va-riexiades int;e resantes : ^l^l c^ri^rmr^ Iiané. Obe^rrrtlnry^,Mashcw Tt^ckar, M^ino Dcwás y Iictis^i-i.n.

Para desarrollo d^el segurado Uo^tó^n rov-^n^a: No-bel, GcMt^rey's Yriad^c, Pri,ncc^sse Mau-y y Mtiller.

Para cultivo indiferente de uno u atro: Rmyant71^dhlt, Maid'^m^e Lennov^rsia.rud y Taktia. ..

Casi todas "las varierlades destacadas puedencultivars^e a. b^o^tó^n tev^^rruirecat euando se quieren ob-tener ejen^plares <le gran tatnañó.

CLLTIVO DE LA DALIA PAFA FLORCORTADA

Lslc^ planta produce flares que nu alcanzan^ra^ides precios, pe'r^a dan gran canticlací ^i cl .verano y olofiu, y sti cultivo se ]leva de moclosén;cillo, lo misnio pai-a fin comercial que parajardinería, co'a^cando Ios tubérculos cii tierra en ^el meis d^ febrero y escalonanda la plantaciónpara praduci^r también una flomción escalomada ,en vérano y atoñ^o.

Los ^ŭbércúl^s s^e mantienen en tierra hastanlcwiémbre, sacánd^o^loŝ a los priineras fríos, yaque n^o saportan la helacta en pl^ena tierra, y^^uar-

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dándalus, una v^:z biesi liinpios de tierra, eu wialmacén bien seco, enterrados en cajom.^es dearena.

La floración sé Procluce d^c junin^ 1 r•ctubrc, yel proc^edimienGo de multiplicación es e^l cle cíivi-sión de mata ^o ^l esquejada en ei mes ĉle marzoo abril, empl^eándose ímicamen!c ia sc^milla en elcaso de querer obterrer ño•vedades p:r cruzamien-tos artificiales.^

I?s la especie originaria, Da7tia v^►~i^lrílfs, se^ hand^ea-ivad^o otras que han recibido ^1 nrnnbre deDa1tia hyb^ida, con multitud de razas y varie-dades,

i,as clases má5 corrientes dé dalias san las si-guientes: de fbo^r simple, est.nelladas, decarativas,enanas o pompones, de^ flor cactus, de collar.

Uentro de estas cla^es, la feamdación artifi-cial produce^ multitud de novedades ^en calarid^a yfo^rma de las floTes, que hañ te^nido ,también muydiverso valor comércial.

Las de flor simp)te^ y de collav suélen ser lasmás emplead^s ^en' jarcíinerí^, así vama las deca-rativas de flar dobl^.

La^ ^estrelladas, enanas ^y de flor cactus so^nlas más cultivadas para la vénta de fl^o^r cortada,

. obteniéndose éjemplanee^ de gran ^tamaño.

CULTIVOS FLORALES EN TIE^STO

Tres ejemplos d^e cultiva flaral en tiesta sanel ccácclahmein, la ^ca1^e^Id^ y la cv>wep'^uriaa•.

-,..>>._

CULTIVO DEL Ci(,`LAMEN

Una de^ las plantas de tiésta más destacadaspara cu1tivo convercial es, sin duda, él cycla^m+c^^apen-si+eu+na, de^ cuya especie pro^viene un numerosogrupo de razas y variedades, que tienen un inte^réscomercial cléstacad^a cultivándase c^amo plantaanual aun cuando ^1 ciclamen nr^ ]o sea lwr na-turaleza.

Entne las razas más c,onocidas d^e la especie ci-tad"a se encuéi^t^ran las siguientes : gz^+a^nteu,m ysaL»alo^,ewm,, de florés grandes, que pued+en tenerun s^olo oolor o c^star bordeadas de tano más cla-ro; 1a ,Q^¢>̀1nb,. qu^e tiene los márgénés de Ia florfituamemte franjeados, y qúu también tiene varié-dades de un solo color a no; la orokokó, de varioscolores y con márge>ties onduladas, y, gor últim^a,la de flbir k^o'l^e, de gran valor ornamenfal, aun-que ^en ésta especi,e^ el anáximo valar oomerciallo tienen aun l^s variedades de, flor sencilla.

El cultivo eomercial del ciclamen sé Ileva acabo partieniio cada año de ]a s^e^milla y tratándoloooma planta anual. Hay que ^t.enér ^en^ cuenta que^el fin perseguido en €^1 cultivo es la vénta de plan-ta de ti^sto.

La si,embra se verifica en lá priméra d^ecéna deseptiembre, por la camún en teirrinas preparadasoon una mezcla de ^.í^eri^a de brezo y arena a par-t^s igual^es esparciendo uniformement^ la semillay me^ganda oom pulverizador fino. Laŝ térrinas secubrén con un vidria y se oalocan en una ^estufaa 20° C.

Et nepica<lo, uua vez crccidca el e^rmillero, sehace a taconera, colocando las plantitas a cuatracentímétros dé distancia a marco real y sabre unamezcla dé tierra constituída por clos partes debrezo, una de ^nantillo y roedia de arena fina.

El segunda trasplante se hace a tiest^ de cin-co a seis centímetros, colucados en cama caliente,debiendo estar el ambiente saturada de mado co^rtinuo de humedad..

Lbs riegos se continúan hasta fP^brera o mar-zo, atreando intensamente a partir dé éste tíltim^>rt^s.

En el mes de ma}'o se s,ue^te hacer otro trasplan-te a tiestos dé 8 a ro centímétros, réllienocs de lamisma tierra antes déscrita y cantinuand^a tam-bién en cama calientc^, mantenienda cerradas las ,caj^aneras durante ^ccho días y ai^neando dé nuévodespués hasta abrir del toclo cuando han pasadoquince o v^einGe^ días del trasplante y añadiendoal tiesto alga d^e tnantilla.

A primerros de agost^a se hacé un nuév^a tras- ^plant^ a tiestos de i^ a t4 centímétros, dandotambién tm abortado con astiércol desconnpuestov^inte ^o veinticincrn clías d^espués de éféctuada 1aoperación.

A fines dr octttbre o primeros de noviembr^etienen ya las plantas el désarralla ade ĉuad^a parala venta y aparre+cen los batones fl^o^ral^s oon va-riación de días, s^egtán los climas. La temperatu-

• tn del interior de^ la estufa débé ser de unos i^ at5°, y tínicamentre, si se quiere forzar adelaittan-d^o la flaración, se cal•venta a 20 ó 25° C., tenien-

Ilu cttidaclv clc Iuantrurr uua lucrt^• Itinti^sitldd^ ^^'rn la estufa. ^

A partir de noviembre o diciembt^, la t`1QracitS^nsc intensifica, obteniéndck;e iloraciotre3^' ĉompittasIle cnérc^ a marz^o, que suelen vend^rSé,^rsiend©l>nrciso cn algunos casos, y en pjempiareawigoro-sos, hacer un tra^plante en noviembr°, antes cíe

- empezar la f1^^ración, a tiest^s de i8 a^o cea^-t ímetros.

Las plantas más fiiertks forman una tnasa ve-getativa de más de 3o centímetrcrs de diámetra,con númerc^as f lores, que llegan a 40 ó 5o parplanta, y presentanda algunos batones más sinahrír. En algunos ejemplares llevados en ti^éstasgrat^d:^s se llega a 8o f6ores y más. ,

í,as^ plantas más vigarosas se empleati comop^^rtasemillas y son fecundadas artificialmenté,pués nos han de dar la semilla suficient^e para elnuev.o aiio.

Llevándose el cultiva de^l cicla^neni primera-mente en cajoneras y en el último pleríodo en e^-tufa, pu^e^dé calcula•rse due ^i.ooo plantas de^ cicla-m^en destinadas a la venta nos acuparán d^sde elnres de febrer^^ al de mayo siéte cajcme^ras de di-mern;i.n^nes c14 r,óo por i metro, a partir del pri-n^er trasplante, y durante junio y julio, cLr i8 a 20cajoneras; en el segundb traspiante, de ago^stoá crctubre, 25 cajoneras, y al pasar a^estufa hastala venta requi^eren una superfici^e aproxiñ^ada defio a 65 metros cuadrados.

Un cuidad.o eepecial que debe te,nerse en estecnltivo ^e^s ir dejanrlo Ilue el l^eclueño tuhércttloPLORICpLTIIRA 9

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^lue [^,rlna la platita va^^a qucdantla cn cada lras-planbai cada vez más some;r:;^ y cercano^ a la su-perficie del tiesto.

Para cultivo del aficirntad^, y no con fin co-mercial, se suelén ^err^plear estos tubércul^as cada.g»la,^ pur ser m^^ rápi^ío el tipo vegetativo qu^eentplt^do la semilla, y cu este caso e^s pre^ciso darrrpaso a las plantas clespués cle la floración, su-primiendo los ríegnh y cíejando marchitarse^ tasho,jas p^co a paco, hasta due, seca la plauta, sccortan las hojas secas y se saca el ^tubércula, ctt-yas raíces son cortadas, poniéndolos en tiest^^más pequeñas y ie^mpézandia al tie^t^poi de madópr^ogr^esivo otra vez ^el cultiva.

C[:LTIVO DE LAS CAI,CEOLARIAS

En cul2ivo oomercial, ]a especie cultivada es laCcd,c^olari^r Jaylw^i,dn•, com,a planta anual, pués taCa^ceol^cvria rugosrn es cultivacla como vivaz.

La siémbra se verifica de junio a agost^a, paraciar f?oración d^e^ abril a junia del aña sigui^ente.La finura de la setuilla aconseja mezclarla preNia-mente con arena, para su facilidad y distribuciónal s^eanillar en terrinas sobré tierra die breza.

I^o^s r.epicad^c^s se hacen también a teirrina y,çuando las plantas adquierén desarnalla suficíen-te, a tiesto, debienda manóenersé ]as ^tierrinas a lasoml^ra, pero aire^.das fre^cuéntenlente una vezpasados los priméros días de la si^e^mbra o tras-planté.

La mezcla más co^rri^entemente empleada a par-tir del segttnd' ?^ irasplante a tiesto eistá' aanstituí-

1'ríui^ilu drnfirulut^i, (^lanta ^le cttlti^^o cn ticsto.

da l^ur uu terci^^ ^le ti^rra de césl)rd, un tercio demantillo de h•ojas y ttn tcrcio de a.rena.

A ^esta planta le can^^ieTe tma teml)eratura muyInoderada, pudiendo ]lévarse en caj^oneras o etit^stufa, y Iínicamente e, preciso tcn^r cuidad':> deque la htm^edad çea abundante ^en la primavera,antcs de l;i flol^ICión.

CULTIVO DI: LAS CINERARIAS

La ^espe^eio cultivada ocn fin comércial és laCtneotcrria laybr+^da, cuyas variedades grcros^dif^ar^a y.ple^riásima, qu^e, com+a su nombre lo indica, tienenuna•grandes flores y la ^atra ilares da^bles, son l^sda mayor valor para el cultivo.

Ias si^embras se verifican dei junio^ a agost^o,pudiendta incluso s^embrarse en mayo para esca-l+onar sufici^entemente la floración en la próximaprimavera, ya que las cinera^rias sem^braclas tem-prano florec^eu en febrqro o marzo, y las proce-dentes de siembras tardías, de abril a mayo.

^hay si^embras se hacem ^en terrinas, Gon unamezcla a part^es iguales de mantillo y arena, y, apartir del segundo trasp'.ante, la mezcla empleadasuele ser un• ten-ci^a de ti^erra de césped, un terciod:e tierra de brezb y un tercia de man'tillo común.

Durante el verano deben abrigars^e^ las plantasy darles sombra, añadiemdo aborroes líquidos d^es-pués de cada trasplante.

Es una planta de gran valor por su fl^o^racióntemp.rana en primavera y par la persist^encia d;esu floraci<ín durante esta estación, siempré que se

ctúciertt las plantas adquiriclas para cl decorado deinteriore^s. ' ^

rl^c^nuccio:v ^E I>l..^ti ^^.i vlvazDE 1^ LUI:

La ^expiotación de pl^antas oa^nameutales com-prende, como ya hemos indicado, ito sólo la pro-ducción de flares cortadas o de se^nilla, sino tam-bién la pno^luccíón de plantas ornamentales dés-tinadas a los jardíne^s.

Aunqu^ este es un aspec:^a cbe la floriculturaqu^° no vames a tratar en este trabajo, sí cre:emosintéresante dar a conocer ligcirairi^ente la farma deproducir planta de flar destinada a lc^s jardin^.

L.as • plantas anuales y bisanualés, como petu-nias; geranios, damasquinas, caléndulas, alhelíes ytantas .atras, suelen s^er producidas cn el pro^iojardín par semillados sencillos efectuadc^ en ca-joneras más ^o menos prot•egidas según la ^esta^ción,y directamente trasplantadas al jardín, pa•ra cum-plir allí su fin ornamenital.

En ^estas especies no su^elé ser c,^rrienbe dedicarexplotáciones a 1^ pne^íucción de planta, Sino tíni-camente a la de scnnilla, de^crita ^en otro capítulode esté trabajo; pena, sin emba^rgb, la producciónde planta vivaz, aun siendo también posible po^rel aficionado propieta•ria dcl jarclín, es inucho máscorriente^ que éste adquiera en una ^expl^ataciónflorícola la planta déstinada a ctthrir l^c^s macizosde su jardín.

La pruducción dc 1>lanta vi^-az <^ruaui^eutalconstitu}•e, 1>ues, un fin com^erciaL

Se encuentrau ^cntre las especies vivac^s inulti-tud de p'.autas ornamentale^; que adarnan corri^en-tem^:nte los jardines }' quc cacía ^•ez son tnás vc^]icitadas eti éstos l^r p^^'^seer cualidadcs tnuy es-timablcs.

^13ntr^ éstas s^é encuentran cumo destacaclas elno precisar sennillados anuales, sino coa^^ervar suntata ^en tierra año tras arnn+ en •el mismo lugardel jardín, produciendio^ fl^oraciones nprmales cadaaño, y, además, n^cesitar muy pocas cuidad^os du-ranté la v^egetación, que se re^íucen +al erttutoradode las matas y la supresión _ d^e^ íl^c!i-es marc5li^t^ats,para tt^antener cl jardín siempre cn lrcríecta flo-ración.

El dcisarrollo adyuirido en lus tíltimUS ^ailos porel jardín cl^cno^uiinado cl^e vivaces hace muy iub,-resante estudiar ]a p^^duccíón cl^e ^esta rlase duplantas.

Las cualid^ades más apreciadas para su coloca-ción ^en el jarcíín e;on la altura que alcanza su ve-getación y la duración }' ép,:^ca de su floración.

Con arreglo a estos factorei^, se pttecl^° haceruna clasificación de vivaces eri ^nanas, de tamañ^^medi^a y de gran tamaño.

Entre las primeras, qu•e• alcanzan sóla dé io a25 aentímetros de altura cm ^u vegetación, se en-^uentra el "cestillo de ^oGro", "flor del vienta","hierba julia",' "carroncha", "mosa de n^a.vidad' ;"flor d^e^ fuego enana", "magarza", "aubrietia","linaria" y "verónica".

L^ntrc^ las vivaces d^e talnair^^ n^,edia sé éncuen-tra la "bíerba becerra", las "manzanillas", la"agnileña o pajarilla", las "ma^rgaritas" d^e^ ta-mañv meclio, 7a "camlkmilla" vivaz, ]a "centáu-rea" o"fbe^r de cuernv", la "eufvrbia.", la "fun-1<la", el `'llll0 nrnatllélltal". 1F1 "tlOr (lie laZa^", ^.'1"zaparo^^ de Vemus" y^ la "flor de fuego", que al-canzan v^egetacio^nes ooniprendidar entre los 4o afio oentímetrc^s.

Por últim^a, ^entne ]as vivacés de gran tamaño,qué crnnprenden las dei vegetaciones de uno a dosmetlio^s de altura, ^están los "acónitas", "chupa-lilleúe$", "a./'ittll)CS", "péanías", "C^f,rnsu^ldas" O"cl^lfinias" y "reinas Inargaritas".

Su cultivo, a parcir cle la seluilla, colisiste eniformar matas de fuerza suficieufc para poder ca-locarlas en ^el jardín y téner fl^c•racíón abundant;ea partir del primer aiio dá ]a plantación.

Lc^s sennílladcr^, esquejados y sucesivos tras-plantes se^ verifican de ^análog^o móda a cennó he-mos d^escrito én gélroeral para tadas las plantas,arnamentales, y lcis cuidados ^e reducen a pt+o^cu-,rar no florezcan abtmdantemetlte antes de la v^en-ta, para favoreaer el désarrvlla de^ la mata a cos-ta de la supresióu de ]as flores, ya que hay quietener muy en cueu^ta que en la producción d^eplanta lo qué nb^s inténesa es fo^rnlar pi^es vig^ara-sos ^lo antes posiblc..

Obtenidas matas fuertes, cada una par divisiónsimp1e^ err el pe+ríod^a de repaso, es d^e^cir, de di^c^embré a marza, n^ois producen plantas aptas parala venta al final de eslc perívdo.

;f i

1'urcl^en inrluir,e en el l;rul,u clri las vivace, I,i;],lantas bnll„asa,.^ ^^ rirr,m,íticas, ron^^^ Irrlij^aa^,e•.c,ja<-^irrp^us, ^n^m•^-i.co.c, ^^rr^yri,r ^• r/luelin^lrs, ^lu•^ cn 1^^^

Campc^ ccilti^^aclo clc narcisos.

climas templados v cáli^l^^^^s s^e niantienen du^r^antctodo el añ^o ^cn el t^n•renc^, ^,ii^ necesidail d^^^ pr^^-tección en las estaciunes frías, 1^reKlucienclo iloresmuy tempranas qtue dec'^ran lus jardiires cuuio^t;odavía ninguna c^tra^ planta ha dadu 11orc,.

En los climas frí^os estos bull^s tiency^ ^lue sersaca.das de tierra al empezar las heladas, guar-dándnse eu cajc^res con ^u-cnrc. d^il ^nisnt^ mc,^l^_^

indicado para las dalias, y. colc.^cáttclobe tnuy tetn-prano e.n primavera dc nuevo cn tierra. Como laflo^racicín acaba antes de entrar en v^erano, suel^:en muchos casr,s sacarse de tienra las Ltilbos in-cluso én eG^ta élwca, para evitar se consuman a]n^c^ tener wegétación exterior que cortnpens° la des-asimilació^n producida en dichos bttlbtis.

I,os titl1^né^s y los gladialos se cultivan tambiéupara f1o^r cortada, pudie^ndo inclu^sc^ farzarse encajonéras o estufas, qu: ímicamente tiet^e7v parfin adé'antar al invi^erno la floración, q ŭe narnral-mente se prcduce en principi^o de primare^ra.

EI gdaqdvaAa st.uele ser itrteresante pará incluirloen alternativas floral^zs én ]as huertas y explo'a-diane^ destinadas sl cultivo de• flor cortada. EItrcGipám presenta tnay^res dificultades por degene-rar fácilnvente eai nuéstr^s climas, qu^^ son inade-cuados para su cultivo, par lo general, coma tam-bién las terrerrc+s.

PRODUCCION llE SE141ILLA

1Vluchas semillas dc 1>latl'as ornamerltales sepr:c^duoe7i con facilidad extraardinaria y n^^ re-sulta remunerad^ar, por su bajo valar en ^e^t nv^r-cado, d^ed^carse industrialmentc a la obtención deellas con parcelas espéciales. Sin em^bargo otrassí sdn de interés, por su demanda ^e^n ^el c!^nn^er-cio y por precisar eoaiocimiesit^us y cuidadc^ algoespecia^les para l^ograr producirlas con rendimien-dos ecamómie^rs. '

• I:ntne Tas planta^ ^tnuales a bisanuales,• scxil dé

inlerés ^las de esp^'cie^^s qu^ difíci^l^nente pucŭenmultiplicarse por esrlueje, coma Re.rn^fas, Ca^r^ipá-atultts, Margrnr+ílccs y P^e»s^rartiécratos.

Yntre ]as cc^nsideracl^us ccm^^ vivac+es, cultiva-das como anualcs l^or si^milla: Po•iau^az^ea•as, Glc^xír^i^as y C^clá,nccna.^^s.

Yor últirno, las d^°corativas, par su fo.llajc, r_omoArnlias y Asparv^a.^ars.

Se precisan ^reunir determinacias condicio^nesclimáticas para que el períodoi dé la fecundaciónfloral se caracterice^ por tr.^ntperat'uras apacibl^e^s ydías claros, sin f,rías ni anarmalidades atmosfé-ricas frecuentes.

Son préfeñbles Ic^; terre^vas llan^rs, que se di-viden en parcelas alargadas, una para cada vari^e-dad d^ntro de la ^especie, liulitándr.5e a pocas deéstas.

Det^e,n tenersc in cuen!a las siguientes indica-ciones.

al) Plantar a n^a^rco nrás bi^eu^ anrp^li^a, paralograr plantas ro^bustas, eseogiendo días prapiciaspara ia sie7nbra, coincidiendo el desarrcllo dti laplanta con da estación favarable, es decir, que eneste caso, ^^ siendo preciso cuidar de la ^btenciónc1e^ fl^ares en fechas cb.'te^r,rr^iniadas para el corte Fr^n:oméntos de altci precio, debe atender^se más aun perfecto y fácif ^desarralla d^,^ la planta y fácilcumplimiento de ^las funciones nepnoducbaras.

b) Hay que abonar rnuy abundantemeñt'e,sienda muy co^rri;Pnte agregar en las labares pre-parató^rias c^ntidades dé etstiércal descompuesba ybien maoerada, ^ue llegan a 30o quintales métri-

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cos par ttect;írea, y añad,ietvdr^, adt^más, cantida-des también fuertes de sales mi^ue^ralés, espe^cial-ni^ente fosfóricas y po2ásicas, que son las que másinfluencia tietven en la fai3nación d^e^ los frutos, y,po^r tan,to, de las semilla^s.

Suele adminis^trarse el ah,^no tuineral véinte otreinta días después de la plantación.

Para que 1as vra,riedadés d^d fl^ar d^obiE continúenprcduciénd^ala ean ^e1 misma gnada de .17elleza, eincluso con< igua,l pnaparción, precísase abundan-t^ abanado. La falta dé eletnentos hace que larluplicación, se haga más imperferta, e incluso l^osej^eniplatieqs qu^ presentarían dupiicación inoom-plet^a apane^cen eomo de fl^ar sencilla.

Aun cuando la ciuplicación de la ftor es cua-^idad liereditaria residét^te en el ĉompl,eja cromia-sómioa de ^la variedad, la manif^estación^ externa.viene natabl^n^ertttt^ influída pcxr la fértilidad delkertreno. •

Ic) Déntro de una parcela destinada a la re-colección de semillas se sopararán únicamentepara esté obj^e^bo. ^loŝ pí^els de planta que mostrai`ondurante todo^ ^el desarrollo vegé't^a,tiv^a claramente7as. cairacterísticas propias de 'la variedad, arran-cand^a los d^emás.

" Esto requíere una canstante y minuciosa obser-vación de cada parc^efla ^ xtirpando ^Las éjemPlaresdébiles o atvarmalés.

id) Las riegos han dé s^er cuidad^c^sísim^os, puesel excesa de ragua es francamente desfavorable ala producción de semillas, atinqué ^las plan't^as ma-

•

dr:^ no d^.+be'n sufri.r sed. Por tantn, la observa-ción del t^: rrcrb^;^ nus dará la planta en el rieg^a.

c) Cuando caídos lcs órganas florales ya tu^ar-chitos, apareae^ la maduración del fruta, y las se-millas en él eanteniclas, hay que reducir consicíe-rablem^7it!' 'los rytgos, para con e1>Io contribuir aese pn resc> d^e desecación de la plan:a, pues si nol^r,^^'ongaríamas exoe5ivarnente ese éstado con de-trimento d- la nutrición del fruto.

La disminución cle ]os riég^os ha de hacerse dernoclo gradual coa^ ía vista fija ^e^n el estado de lUsfru ^-^s y ]a planta.

f) La recoléceióru de 1^ frutos secos ecn sussemiliar en pz+rfecto ^e,stado de madun:rc ha. de ha-c©r^se diariamenté ya que lo genen3l es qtue' en unmismo pie dé planta vayan simultáneamenbci apa-reci^^ndo frtrtas maduros y fecundándos^e flores,prc ŝen.and^^ tc^la la gama d^ estados intermedios.

g) En las inflo^rescéncia,s np todas las fl^aresdan semillas del misnra valor, y, por ^e+jempfo, eñlas compuéstas (daDias, xi^rrazias, asict^ y^risa+rute-^r^^os) las flones situadas en Ja parte intermediadel capítulo ^o disoe^, pncducen mejbres semillasque ias si^ uodas én ^e^l borde o en ^ell centra de1mismo. .

I:n las inflarescencias én espiga, panoja ^a ra-cimo suelEn ser m^ejores producúosas las flores de]a base que ]as de la extneanidad.

h) Las f 1c^res que aparecén a^l principio delperiodo normal dé flaración cie 'la variedad ^produ-c:^ert mejores s^cmillas que las últimas ,e^ interxnc ►dias. ^ .

i) l.,t lccttu^l.aci^irt c^i}^c itú^l,t^lr.^,^, r; u^li„antcs ya d^^ la hlantaci6n, ya tlue si sti culliva paralrr^,ducci^ín rle ti^•ntiila ntrís d^:w ttníi ^^ariedad de^•a^1a eslrecic, e^ Fáril se r^erifiquen crttzatni^ntasurttttrali^.< ctttre t•lla^, ^ si clran ^ie col^^rirlu <lii:-

1'ar^^cla clc c^btenciún <^^^ :cmilla dc tuli^^;íir,

rente rn las ilrrnrs u t:;Rra caracterís.:ica que prc^-cisamente nos interesaba diferen^ciar, l>erd^,•ríattto,.el valor d^ la simiente, {{ue ste•ía irrtpura ^• darír+plan>~a^s con flc^res de cc,lr^res vttrios ^c^n l,rt,{^ur-ciaues cliterentr^s.

C^•tLe únicamentc hacer dos c^^•sas: bien seu^br^ry plaai.1ar, Si ello eis posible, con ttn heríodo tli fe- 're7icial suficienbe las dos o tres ^c>I mí'ts ^•atrie^dad^^s,cie tal forma que esté.n al>tas para fecun^clar eu pe-ríodos diferetttes tantl^ién, haciend^o itnl^ ^sible e•1cruce, o bi^n Proteger todas las plan::as madres

cu►t Uule^w dc ^pcl u gasa, realizandu iu•ti(ici.^l-ment^a la polinización.

Siempre que sea pnsib'.a, ios más cómodni y écan<ímico el primer método, limirtándose el segundoal caso de desear la obteaición de ^^ari^edades nu^e-vas pór fecundación dirigida por ^a nxano de]hcrtnbre^.

>3 1 ali^^jamiento de las parcelas e, una variante 'imperfecta del primer método, due ,c^tá sietnpneexpuesta a fracasos por 1a pu^^esencia de insecta ►s ovientps favor,ecedores de ]os cruzamien^tos natu-rales. ^

j) Una ve^z ;ecogidos 1'c^s fnttos, se abren porligera presión éntre los ded^cls, y]as semillas sedejan seicar completamente ex'tendiéndolas sobmun papel ern la mesa d,c4 a^lmacén, y después d^ unpa.r de^ días se pasan a saeos clé tela o frascu^s clevidrio, o bien directa^mente a los s+^^bres destinad^osa la venta, etiquc2ad^as cemven've^nitetnente.

k) El local de conserv^ación de las semillasdebe se'r beco y ventilado, a cubierto ^e^n absolutode ]:a humeclaci.

1) Es del maytir interés para el cultivad^^^r d^eplantas con des'tino a praducción de^ semiha ha-cer una minuci^osa observación ^dé las fechas Gam-r,rendidas ^ntre ]a fectuidación de las flore^s y latnadurez del fruto, aparición de las primeras florr^es, final de la floración, cobc^r y caracCerísticasdel fruto madwna en cada e^specie y variéde.d, mo-mento en quh puede realizars^e la fecund^ación aen

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las ilut-es y raracterí;ti^2i.5 clel .^^[i^;ttia ftaral tu^ese mcm^ento, aspecta qu^ debe tener ^ed polenpara fecun^dar y tantas ^atras observacione^s quernntribuyan al ési^t^o y fctcilidad de :c^ste apr^ave-chamiento.