LA PUBLICACIÓN OFICIAL DE LA IGLESIA DE DIOS DE LA PROFECÍALALA BLANCA

Mayo/Junio de 2016

LA PUBLICACIÓN OFICIAL DE LA IGLESIA DE DIOS DE LA PROFECÍAL

y

AVIVAMIENTO • EL DESAFÍO DE LA CULTURA EN LA COSECHA

En vivo a las 7:00 pm hora del esteDisponible a pedido después de la transmisión

Disfrutaremos de una adoración en vivo y un mensaje del supervisor general Sam N. ClementsDisponible en inglés, español y francésPara ver la transmisión en vivo o para más información, visite www.cogop.org

Domingo, 15 de mayo de 2016

3m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

PERSONAL EDITORIAL: Editor y Publicador: Sam N. Clements • Editor Administrativo: DeWayne Hamby • Editor Asistente: Michael Á. Hernández • Traducción: Hillary Ojeda • Revisión: Departamento Mundial de Lenguajes • Diseño Gráfico: Sixto Ramírez y Perry Horner • Distribución: Josué F. Reyes y Rafael Alvino

INFORMACIÓN: Cualquier consulta o material puede ser enviado al Editor Asistente del Mensajero Ala Blanca; P.O. Box 2910; Cleveland, TN 37320-2910; teléfono (423) 559-5212; Comuníquese con nosotros escribiendo por correo electrónico a mhernandez@cogop.org; sitio web: mensajeroalablanca.net; visítenos en Facebook

El Mensajero Ala Blanca

(E.U.A.) o su equivalente en moneda nacional

DECLARACIÓN DE FE: La Iglesia de Dios de la Profecía tiene sus raíces en la iglesia establecida por Cristo y bautizada en Pentecostés. Creemos en la autoridad profética y apostólica de la Biblia como la Palabra inspirada, infalible e inequívoca del Dios Trino y en su autoridad única en materia de fe, prédica y práctica. Afirmamos que Jesucristo es Dios encarnado y consubstancial con el Padre, que nació de una virgen y vivió sin pecado. Creemos en Su poder, Su muerte vicaria y expiatoria, Su resurrección corpórea, Su ascensión al Padre y que vendrá por Su iglesia. Creemos en Su reino milenario y eterno. Creemos que Él, con la participación del Espíritu Santo, es el único medio disponible al pecador para reconciliarse con Dios. Afirmamos que Jesucristo es la cabeza de la iglesia y que ésta, Su cuerpo, es llamada a ser santa y sin mancha, a andar como Él anduvo: en amor, humildad, tolerancia, obediencia y misericordia. Creemos en la unidad de los creyentes, en la realidad del cielo y del infierno, en la resurrección de los salvos para vida eterna con Cristo y de los perdidos para condenación eterna. © Todos los derechos reservados

18 Corazones llenos de luz y sazonados con sal

Carmen Casey

20 ¿Por qué nos abstenemos de consumir bebidas embriagantes?

Marsha Robinson

22 Adorando a Dios a través de las artes creativas

Jordan Holt

24 La iglesia en una cultura pos-cristiana

Jack Anderson, hijo

26 Sal y luz Ali Feizi

31 Incorruptible DeWayne Hamby

5 .................. Segmento informativo5 Noticias

28 Puntos de oración: Mayo de 2016

Volumen 66, Número 3 Mayo/Junio de 2016

6 ..................................................... Artículos4 Jesús viene otra vez Sam N. Clements

6 Esperemos pacientemente la venida de Jesús

Richard Ramsey

8 La segunda venida de Cristo

Faithe A. Reid

10 Señales de la segunda venida de Cristo

Jorge A. Rodas

12 Un llamado al avivamiento Fernell Martínez Valenzuela 14 Desarrollando una

fe que permanece Shaun McKinley

16 El desafío de la cultura en la cosecha

Dr. Wallace Pratt

LA PUBLICACIÓN OFICIAL DE LA IGLESIA DE DIOS DE LA PROFECÍA

30 Noticias internacionales

Contenido

S

MENSAJEROSIA DDDEE DIDIDIDIOSOSOSOS DDEEEE LAIA

ALA BLANCA

Página 8

Página 12

Página 14

Página 26

Página 30

Sam N. ClementsSupervisor GeneralJesús viene otra vez

«Entonces habrá señales en el

sol, en la luna y en las estrellas, y

en la tierra angustia de las gentes,

confundidas a causa del bramido

del mar y de las olas; desfalleciendo

los hombres por el temor y la

expectación de las cosas que

sobrevendrán en la tierra; porque

las potencias de los cielos serán

conmovidas. Entonces verán al Hijo

del Hombre, que vendrá en una nube

con poder y gran gloria. Cuando estas

cosas comiencen a suceder, erguíos

y levantad vuestra cabeza, porque

vuestra redención está cerca» (Lucas

21:25-28).

¡Jesús viene otra vez! ¡Y viene

súbitamente! Viene pronto y

debemos estar listos. En Mateo 26:64,

Jesús dijo: «…desde ahora veréis al

Hijo del Hombre sentado a la diestra

del poder de Dios, y viniendo en las

nubes del cielo».

Los ángeles anunciaron que Él

volverá. El Espíritu Santo, por boca

de los apóstoles también anunció

que Jesús volverá otra vez. Pablo

dice: «Mas vosotros, hermanos,

no estáis en tinieblas, para que

aquel día os sorprenda como

ladrón» (1 Tesalonicenses 5:4). En 1

Tesalonicenses 4:16 dice: «Porque

el Señor mismo con voz de mando,

con voz de arcángel, y con trompeta

de Dios, descenderá del cielo; y

los muertos en Cristo resucitarán

primero». El último libro de la Biblia,

Apocalipsis, inicia y concluye con el

tema de Su retorno. Cada capítulo

trata este tema. Los acontecimientos

mundiales giran alrededor de Su

retorno. Jesucristo viene y nadie podrá

detenerlo.

La segunda venida de Cristo debe

ser la esperanza principal en nuestras

mentes. Es el factor clave de nuestra

fe. Cuando Él ascendió al Padre, los

ángeles le dijeron a quienes habían

estado con Él: «Varones galileos, ¿por

qué estáis mirando al cielo? Este

mismo Jesús, que ha sido tomado de

vosotros al cielo, así vendrá como le

habéis visto ir al cielo».

Cuando Él vino por primera vez,

Él se despojó a Sí mismo y tomó

forma de siervo y se hizo semejante

a los hombres. Él se hizo carne, sin

embargo, en Su segunda venida viene

vestido de la gloria de Dios. Cuando

vino por primera vez, vino como

un niño indefenso que nació en un

pesebre; sin embargo, cuando venga

por segunda vez, vendrá con poder

como el Rey de gloria, señal de Su

exaltación ante Dios Padre.

Él viene con la gloria del Padre;

viene como Rey con Sus huestes

celestiales. Él viene por Su iglesia en

gloria —Su esposa. Jesucristo —Hijo

de Dios, linaje y simiente de David, el

Hijo del Hombre (nacido de mujer),

aquel que fue crucificado y resucitó,

Aquel que es Dios y hombre —viene

otra vez. Él viene como Rey de reyes y

Señor de señores. «El que da testimonio

de estas cosas dice: Ciertamente vengo

en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús»

(Apocalipsis 22:20).

4 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

5m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

NOTICIAS DE LA ASAMBLEA

El obispo Sam Clements, supervisor general, será uno de los predicadores de la 99a Asamblea Internacional que se celebrará en julio. El obispo Clements compartirá la Palabra de Dios el miércoles por la noche y el domingo por la mañana. También estarán predicando los presbíteros generales Benjamín Feliz y Clayton Endecott; el obispo Leroy Greenaway, supervisor regional; el Dr. Lamar Vest, presidente del Seminario Teológico Pentecostal; Kirk Rising, director internacional del ministerio de jóvenes; y Branson Gibson, pastor asociado del Love Center en Nassau, Bahamas.

Disfrutaremos de un concierto especial por la Banda de las Bahamas y la Coral de la Asamblea Internacional. El grupo de adoración de la región sureste hispana de los Estados Unidos dirigirá las sesiones matutinas de adoración y el grupo de adoración de la región nordeste de los Estados Unidos dirigirá la adoración durante las sesiones de la noche. Las sesiones por la mañana se enfocarán en la oración corporativa dirigida por los

Predicadores: Sam N. Clements, Benjamín Feliz, Leroy Greenaway, Clayton Endecott y Dr. Lamar Vest

presbíteros generales Clayton Endecott, David Browder, Stephen Masilela, Gabriel Vidal y Tim Coalter.

El viernes por la tarde, nuevamente estaremos celebrando el Encuentro Misionero, un tiempo especial para los delegados de la Asamblea. Tendremos otras actividades especiales que incluye talleres el jueves por la tarde, la celebración hispana el sábado por la tarde, y un servicio de ordenación de obispos el jueves por la mañana. Tendremos actividades para los niños y jóvenes de jueves a sábado, y la sesión general el sábado por la noche consistirá de una adoración intergeneracional coordinada por Kirk Rising.

Las sesiones de negocios comenzarán el miércoles, 13 de julio, el día de apertura de la Asamblea Inter-nacional. La 99a Asamblea Internacional se celebrará el 13-17 de julio de 2016 en el Rosen Shingle Creek en Orlando, Florida. Para más información, incluyendo cómo hacer reservaciones de hotel, visite www.cogop.org/assembly.

NOTICIAS INTERNACIONALES

Milton GordonBig Sandy, Tenesí

6 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

a gran esperanza de la fe cristiana es la segunda venida de

Cristo. En 1 Tesalonicenses 4:13, Pablo le escribe a la iglesia

en Tesalónica concerniente a la segunda venida con palabras

de esperanza: «Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis

acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis

como los otros que no tienen esperanza». No podemos ignorar

las generaciones posteriores a la ascensión de Cristo a la

diestra del Padre han estado rodeadas por guerras, hambre,

enfermedades y desesperanza. Cada día los medios de

noticias nos informan sobre todo lo que está ocurriendo en el

creyentes tenemos esperanza, pues no somos como los que

no tienen esperanza. Richard Ramsey

Shepherdsville, Kentucky

La Biblia dice que entretanto Su

venida se acerca, habrá dolor en la

tierra. En Mateo 24, Jesús enumera

estos dolores: falsos cristos, guerras

y rumores de guerras, hambres,

pestilencias, terremotos y persecución.

También dice que el pecado se

multiplicará. La gente se aborrecerán

unos a otros y se levantarán falsos

profetas. El amor de muchos se

enfriará debido a la maldad que se

multiplicará en el mundo. Sin duda

alguna, todas estas cosas pueden

paralizar los corazones de la gente,

pero el creyente no debe permitir

que ninguna de estas aflicciones

atemoricen su vida. Caminemos

seguros en Él, sabiendo de que estas

cosas apuntan a Su venida.

Muchos, a través del tiempo, han

intentado predecir la fecha exacta de la

venida de Cristo. Quizá alguna de las

razones que los ha llevado y continúa

llevando a predecir fechas es el temor

que sienten por los acontecimientos

en el mundo. Otros son falsos profetas

que han tratado de establecer su

propia autoridad e influencia sobre

los creyentes temerosos. Y otros

sencillamente se han equivocado con

sus «buenas intenciones».

La teoría más reciente de algunos

gira alrededor de las «señales en los

cielos». Mark Blitz popularizó la

teoría de la luna de sangre diciendo

que el Señor probablemente volvería

en septiembre de 2015. Sin embargo,

esta no es la primera vez que algunos

profetas y maestros han intentado

ponerle fecha al rapto. En 1988 salió

un panfleto titulado, «88 razones

por qué Jesús volverá en 1988». Juan

Wesley, también predijo que «Cristo

iba a volver» en 1836. William Miller,

un predicador bautista, proclamó

que Jesucristo volvería a la tierra

en 1844 —este fue el gran chasco

del movimiento millerista. Tanto

fue su proclamación, que muchos

de sus seguidores regalaron todas

sus posesiones pero se quedaron

desolados cuando la profecía probó

ser falsa. Georg Rapp, aun en su

lecho de muerte, seguía afirmando

que el retorno de Jesús acontecería

antes de que él muriera en 1847.

Charles Taze Russell (La Atalaya,

Testigos de Jehová) afirmó que Jesús

vendría primero en 1874 y después

en 1914. Joseph Smith (líder de los

mormones) dijo que Jesús vendría

en 1891. Jerry Falwell, un predicador

fundamentalista, dijo que el retorno

del Señor acontecería entre 1999 y

2009. Jack Van Impe (televangelista)

también ha hecho varias predicciones,

con la más reciente en el 2012.

Desde entonces, no ha hecho más

predicciones. La lista es bastante

larga e incluye psíquicos, teóricos,

maestros, profetas, predicadores,

etc.; sin embargo, ninguno ha

acertado. Desafortunadamente,

algunos seguidores de estos maestros

han renunciado a sus trabajos y

vendido sus propiedades. Muchos

lamentablemente han tomado las

palabras de Jesús livianamente. Mateo

24:36 dice: “Pero del día y la hora

nadie sabe, ni aun los ángeles de los

cielos, sino sólo mi Padre”. Y Hechos

1:7 nos dice: “Y les dijo: No os toca

a vosotros saber los tiempos o las

sazones, que el Padre puso en su sola

potestad”. Estos y otros versículos nos

animan a tener fe y anticipar la venida

de Jesús para establecer Su reino; pero

no hay fecha. Jesús nos llama a confiar

en Él, y a “[ocuparnos] entre tanto

[viene]” (Lucas 19:13).

El mensaje de la «Segunda

Venida» es la mejor motivación para

el evangelismo. Esta promesa debe

impulsar a ganar almas para el reino

de Dios. El mensaje del Evangelio se

enfoca en la cruz, pero está incompleto

sin el mensaje de la Segunda Venida:

“Y estando ellos con los ojos

puestos en el cielo, entre tanto que él

se iba, he aquí se pusieron junto a ellos

dos varones con vestiduras blancas,

los cuales también les dijeron: Varones

galileos, ¿por qué estáis mirando al

cielo? Este mismo Jesús, que ha sido

tomado de vosotros al cielo, así vendrá

como le habéis visto ir al cielo” (Hechos

1:10, 11).

Esta es una poderosa promesa:

¡Jesús viene otra vez! La doctrina de la

Segunda Venida debe:

1. Motivarnos a tener una relación

con Jesús y obedecer Su Palabra.

2. Impulsarnos a compartir la fe con

todos y expandir el reino de Dios.

3. Impartirnos esperanza en tiempo

de angustia y temor.

Pablo concluye diciéndole a los

tesalonicenses: “Por tanto, alentaos los

unos a los otros con estas palabras”

(1 Tesalonicenses 4:18). Si hemos

sido redimidos por la sangre de

Cristo y sabemos que Jesús venció la

muerte y está a la diestra del Padre,

entonces el mensaje de Su regreso debe

impartirnos consuelo y alegría. ¡Él

volverá! Hoy más que nunca creo esta

promesa. Quizá la mejor manera de

vivir nuestra fe es vivir cada día como

si Él está en camino.

______________

1 https://en.wikipedia.org/wiki/Great_Disappointment

2 https://en.wikipedia.org/wiki/Predictions_and_claims_for_the_Second_Coming_of_Christ

7m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

también estéis».

Las palabras de Jesús se cumplirán tal y como Él las dijo. Él fue a preparar una morada eterna para Su pueblo. Dios no miente. También nos envió a Jesús como nuestro Maestro, y Su Palabra es nuestra guía de instrucción. Así que, tenemos la plena certeza de que Jesús volverá por nosotros. Mateo 24:14; 36-39 dice:

«Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin…Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre. Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre».

Este pasaje bíblico no se refiere al fin literal del mundo, sino al final de los tiempos. Dicho de otra manera, se avecinan grandes cambios ante nosotros. No sabemos cuándo va a suceder, por tanto, tenemos que estar preparados.

No dude que Jesús viene otra vez

Hay varias escuelas de pensamiento con respecto a la segunda venida de Cristo. Entre éstas están el premilenarismo/pretribulación, y mid-tribulacionismo y pos-tribulacionismo. Muchos cristianos creen en la venida premilenaria de Cristo, lo cual significa que vendrá antes de Su reinado milenario. Por otro lado, hay quienes dicen que no volverá. La razón por la cual algunos dudan de Su segunda venida es porque han decidido ignorar esta verdad y prefieren continuar con su vida de pecado. Las Escrituras nos dicen en Mateo 24:42-44:

«Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no

Mientras muchos hablan de predicciones, visiones y sueños, ¿cuál es la realidad sobre la segunda venida de Cristo? La realidad es que Jesús viene pronto. En los tiempos de Julio César, César Augusto (César Octaviano),

Herodes Antipas, Poncio Pilato y otros, sucedieron muchas cosas que provocaron consternación. Los impuestos eran altos, la expectativa de vida era corta y el comportamiento vergonzoso era una práctica común. Todo esto traza hasta los días de Sodoma y Gomorra, donde el pecado era tanto que Dios decidió destruir la ciudad.

Desafortunadamente, no podemos decir lo contrario en nuestros tiempos; el pecado continúa plagando nuestra sociedad, y aquellos que desconocen que Cristo ha de volver les es necesario leer la historia. Veamos algunos detalles: ¿Ha respondido Dios siempre al pecado? Sí. ¿Ha demostrado Su ira destruyendo al impío y el comportamiento pecaminoso? Sí, lo ha hecho. ¿Nos prometió Jesús que se iba, pero que volvería? Sí, lo hizo. Además, antes de ascender al cielo nos dejó instrucciones claras y esperanzadoras. Nos dijo que habría señales en el cielo y en la tierra y que siempre nos prepararía antes de cualquier suceso.

Razones por las cuales Jesús vino a la tierra

Desde el principio, Jesús le explicó a Sus discípulos Su misión en la tierra. Él les dijo que vino no a los sanos, sino a los enfermos. Él vino a salvar a los perdidos. Es menester que la iglesia procure diligentemente recuperar la misión de predicar el Evangelio a los perdidos. Debemos orar con urgencia por aquellos que el Señor está llamando. También les dijo a Sus discípulos que vendría otra vez. Juan 14:2, 3 nos dice:

«En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para

vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez,

y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros

8 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

LASEGUNDA VENIDA

DE CRISTO

Faithe A. ReidOcala, Florida

el hedor del pecado. Cuando el pecado se multiplique aun más, sabremos que Su venida está a las puertas para llevarse a Su pueblo amado de esta tierra. Él rescató a Lot; se imagina usted ese momento cuando Él levante a los millones de cristianos que están orando y esperando Su regreso. Dios responderá las oraciones de Su pueblo. Joel 2:28-32 dice:

«Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días. Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo. El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Jehová. Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo; porque en el monte de Sion y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado».

En conclusión, el Señor me ha dado visiones de cosas derritiéndose y lava corriendo por la calles. ¡Él viene pronto! Los cristianos estamos a la expectativa, pero también debemos conscientizar a los pecadores. Jesús viene otra vez. Sí, Jesús viene otra vez, pero ¿realmente está usted listo para recibirlo? ¿Le ha pedido a Dios que perdone todos sus pecados? ¿Le está sirviendo de verdad? Iglesia, ¡prepárate! Mundo, ¡prepárate! ¡Jesús viene pronto! La Biblia declara en 1 Corintios 15:51-58:

«He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.»

dejaría minar su casa. Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis».

En otras palabras, Jesús viene otra vez, ya sea que la gente decida creer o no. Pero nosotros, los creyentes, tenemos la certeza de que Él viene por Su iglesia.

Sueños, visiones, profecías

Hace algunos años, trabajaba como escritora de Yahoo Voices, una plataforma cibernética para escritores aspirantes. Recién comenzaba a escribir en esta plataforma y a ganar lectores. Recuerdo que en mayo de ese año algunos predijeron que el mundo se iba a acabar porque el calendario maya estaba terminando. Algunos hasta vendieron todas sus pertenencias en espera del fin. Muchas personas se aferraron a esta predicción porque salió de los labios de un locutor cristiano muy conocido. Pero el mundo no se acabó como se había profetizado y muchos estaban desilusionados y querían respuestas. En medio de todo esto, el Espíritu Santo me impulsó a escribir algo con respecto a la situación. Inmediatamente encendí mi computadora y comencé a escribir una explicación del porqué el mundo no se había acabado como fue profetizado. Por supuesto, no tenía ninguna idea de lo que ocurriría después. Al próximo día descubrí que más de 2,000 personas habían leído mi artículo. A medida que pasaban los meses el número de lectores continuaba aumentando. Para el momento en que fue removida la plataforma miles de personas habían leído la publicación.

Sin lugar a dudas, el mundo necesita que la comunidad cristiana le dé respuestas tocante a sus muchas preguntas. Necesitan saber qué les espera después de la muerte; quieren saber más de la Biblia, aunque muchos expresan no estar listos para cambiar sus vidas. Por encima de todo esto, todo creyente debe estar preparado para decirle al mundo que tenemos plena confianza que Jesús volverá. Tenemos la confianza de que Su promesa se cumplirá. Hay señales en el cielo y en la tierra. Por ejemplo, lo que algunos científicos llaman «el calentamiento global» es para nosotros una señal que nos demuestra que ha habido un cambio, y debemos estar alerta. También hay reportes alrededor del mundo de que Jesús se les ha aparecido a musulmanes confirmándoles de que Él es el Mesías. Muchas personas están teniendo encuentros con Dios. Como consecuencia, sus vidas están cambiando a través de experiencias sobrenaturales dirigidas por Dios. Continuamente recibimos testimonios poderosos de misioneros alrededor del mundo que nos deben levantar y movernos hacia la búsqueda más de Dios. Necesitamos volver a la oración y la búsqueda de la presencia de Dios.

La Biblia dice que como en los días de Noé así será la venida de Jesús. La gente estaba cómoda en sus placeres y pecados. Hermanos y hermanas, ¡despertemos! Aunque muchos adoramos a Dios y el perfume de nuestra adoración le es agradable, no es suficiente para borrar por completo

m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t 9

«Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes» (Mateo 24:24, 25). «Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición (anticristo)» (2 Tesalonicenses 2:1-3).

M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 610

Jorge A. RodasManagua, Nicaragua

L a gran expectativa que tienen muchos cristianos es el anuncio del gran maranatha o Cristo viene, como una panacea para escapar de los problemas de la vida. Debemos ante todo estar preparados espiritualmente, viviendo en

santidad y comprometidos a predicar el Evangelio. La doctrina de los acontecimientos finales (Escatología) incluye entre otros temas: el toque de la final trompeta, la primera resurrección, el rapto o traslado de la iglesia al cielo, las bodas del Cordero, la gran cena, la gran tribulación, los dos testigos y su ascensión al cielo, la segunda venida de Cristo, el Armagedón, el milenio, la segunda resurrección (los malos), el juicio final, el nuevo cielo y la nueva tierra. Sin embargo, hay diversas interpretaciones pero sólo la Biblia contiene enseñanzas verdaderas, claras y detalladas con respecto a la parusía.

Jesús lo advirtió cuando dijo que vendrían falsos profetas diciendo: «Mirad, aquí está el Cristo» (Mateo 24:23, 26). Algunos falsos profetas en tiempos de Pablo propusieron supuesta fecha, tiempo y lugar. El engaño y la expectación siempre ha existido, y los que están dormidos deben despertar. La iglesia en Tesalónica estaba muy animada y todos esperaban el regreso de Jesús en un futuro cercano; pero de que ya lo dieran por sentado, o que los días estaban contados, era otra cosa. Pedro nos advierte diciendo: «Vendrán burladores [que pondrán en duda su venida]». También hace mención del tiempo de la creación [en el verso 8] diciendo: «Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día» (2 Pedro 3:1, 3, 5, 8).

El calendario de Dios difiere del nuestro. La frase «es como» no necesariamente indica que es o será así, por diferir en la convergencia. Él se reserva el derecho de usar algún pronóstico y Su propia hermenéutica, debido a que Su interpretación difiere de la nuestra. Él le revela a Sus siervos cómo discernir, ver y leer entre líneas figuras retóricas y simbolismos de parábolas, metáforas, o sinécdoques, etc. El profeta Isaías escribió: «Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová» (Isaías 55:8). Existen diversos calendarios en el mundo y los científicos tratan de que al menos al final del año coincidan. Quizá por eso el Señor se reserva el derecho de dar una fecha sobre Su segunda venida. Quienes ponen fecha lo hacen con fines financieros.

Las supuestas fechas del fin o la venida del Señor solo causan temor y confusión para obtener ganancias y hacer caer a los insensatos e ingenuos que no estudian la Biblia. Así sucedió con el fenómeno informático del Y2K (las siglas en inglés «Y2» significan año 2000, y «K» es la abreviatura de kilo que significa mil). Este fenómeno provocó una alarma innecesaria por causa de un dígito que le faltaría a la programación de las computadoras cuando llegara al año 2000. Otra alarma fue el «fenómeno de 2012», una creencia escatológica que sostenía que el día del solsticio de diciembre del año 2012 ocurriría el fin del mundo. El solsticio sucedió el 21 de diciembre de 2012 a las 11:12 UTC (tiempo universal coordinado) sin que ocurriese nada especial.

La NASA comparó los temores sobre el 2012 con el temor que se acabaría el mundo el 31 de diciembre de 1999. (El problema del año 2000). Otro que fracasó fue el pastor Harold Egbert Camping, quien afirmó que la venida del Señor sería el 21 de mayo de 2011, y él murió en el 2013. Igual pasó con el predicador William Miller, quien anunció el fin del mundo en 1843 y 1844, obviamente todos fallaron. Así sucesivamente muchos otros, tanto cristianos como científicos y religiosos, han dado fechas. Nostradamus predijo algunas cosas que se cumplieron, pero la

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mayoría no, y muchos siguen creyendo que se van a cumplir. Dios afirmó contundentemente que el Hijo del Hombre (Cristo) regresaría pero nunca dio una fecha. ¿Estamos preparados para recibir al Señor hoy?

Previamente al evento del rapto o arrebatamiento de la iglesia, todos los muertos en Cristo resucitarán en la primera resurrección. Usted y yo, si Dios quiere que aún estemos vivos y perseverando fielmente en la fe, juntos seremos transformados en cuerpos incorruptibles de gloria, y en un abrir y cerrar de ojos seremos levantados en los aires hasta las nubes, y nos encontraremos con nuestro Señor Jesucristo. Volaremos con el Señor a celebrar las bodas del Cordero en el cielo (Mateo 24:27, 28; 1 Corintios 15:51, 52; 1 Tesalonicenses 4:15-17). Millones en el mundo se quedarán con el anticristo, y los que mueran en pecado resucitarán en la segunda resurrección después del reinado milenial de Cristo sobre la tierra (Isaías 26:19; Daniel 12:2; Juan 5:28, 29; Hechos 24:15; Apocalipsis 20:5, 6).

Es interesante que la segunda venida es mencionada más de trescientas veces en el Nuevo Testamento. Pablo se refiere a ella en sus epístolas aproximadamente cincuenta veces. Véase 1 y 2 Tesalonicenses (cartas completas), capítulos completos como Mateo 24, Marcos 13, y 2 Pedro 3. Esta es una de las doctrinas más importantes del Nuevo Testamento. Su venida será: a) personal (1 Tesalonicenses 4:16), b) literal (Hechos 1:10, 11), c) visible (Filipenses 3:20), d) gloriosa (Mateo 25:31). Dependiendo de la corriente teológica puede ser: amilenialista (sin), premilenialista (antes), o posmilenialista (posterior). La más aceptada entre las iglesias que son de corriente wesleyana arminiana es la premilenialista. Cristo vendrá y levantará Su iglesia, antes de iniciar la gran tribulación.

La preocupación de muchos está enfocada en recibir su galardón y disfrutar de una eternidad gozosa, pero ignoran las demandas y el sacrificio que debemos hacer para alcanzarla. Jesucristo tiene una agenda bien sincronizada y Su prioridad es que nadie se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento para ser salvos y evitar ser lanzados al horrible infierno y el lago que arde con fuego y azufre. Los pecadores tendrán la conciencia cauterizada, sus corazones petrificados, y por su equívoca decisión se perderán. Dios está acelerando los tiempos, y nos ha llamado a predicarle a los perdidos, a estar preparados y a vivir en santidad.

La segunda venida de Cristo tendrá dos fases: Primero, Cristo vendrá personalmente a recibir en el aire a Su iglesia (Su esposa desposada) en el arrebatamiento. Eso se conoce como la parusía, que significa la presencia física de Cristo. En otras palabras, es tomar lo Suyo súbitamente. La segunda fase será después que se haya realizado los siete años de: las bodas del Cordero, la gran cena del Señor en el cielo, y la gran tribulación donde haya gobernado el anticristo en esta tierra. Cristo vendrá del cielo con Su iglesia y cumplirá el segundo advenimiento, y peleará y vencerá al temible anticristo que será encarcelado por mil años. Finalmente, Cristo y Su iglesia gobernarán por mil años sobre los malos.

«Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor» 1 Tesalonisenses 4:15-18. La venida del Señor está cerca.

12 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

Fernel Martínez Valenzuela Quito, Ecuador

El avivamiento de Juan el Bautista

produjo un profundo espíritu de

arrepentimiento y conversión. Su

mensaje fue sencillo pero efectivo,

«Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado» (Mateo 3:2).

13m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

En una época de incertidumbre donde la

economía tiene comportamientos impredecibles

y el horizonte político vaticina un pesimismo

mundial, la iglesia es llamada a ser la luz del

mundo y la sal de la tierra (Mateo 5:13-16).

Sin embargo, hoy más que en cualquier otro tiempo los

grandes líderes religiosos proyectan mensajes ambiguos

que oscilan entre un optimismo insatisfactorio y un pasado

esperanzador.

Por un lado, está la idea del gran avivamiento de los

últimos tiempos, que en algunos lugares se afirma ha llegado

y en otros se espera por esa atmósfera celestial. De otro lado,

están aquellos que piensan con nostalgia aquellas épocas

doradas donde hombres sencillos lograron erigir un clima de

gloria bajo el sello indudable del Espíritu Santo.

Al escavar un poco en esos siglos pasados, saltan de

inmediato hombres como el inglés John Wesley, quien

literalmente salvó a su nación de una guerra civil como

ocurrió en Francia, también es posible mencionar al

«príncipe de los predicadores», Charles Spurgeon, y al joven

galés Evans Roberts, quienes hicieron de sus países ríos del

Espíritu Santo.

Aunque el espíritu de quien lee las vidas de estos hombres

indudablemente es impactado, no es sensato tratar de igualar

los tiempos y con nostalgia inclinarse por aquellos, sino más

bien, sentirse retado para que nuestras generaciones sean

intervenidas por el Espíritu Santo. No obstante, tampoco es

saludable crear falsas expectativas, basado en un Evangelio

sensacionalista que gusta y motiva pero no cambia vidas. De

aquí la inmensa necesidad de una iglesia despierta para que la

luz de Cristo le resplandezca (Efesios 5:18).

Un avivamiento genuino es el deseo de Dios para los Suyos;

el libro de Joel y Habacuc ya lo anunciaban, Jesús lo prometía y

los primitivos hermanos ya lo vivían. Experimentar y disfrutar

de un genuino avivamiento no es algo solamente de los siglos

pasados, es también del ahora, es a lo que fuimos llamados. Las

Sagradas Escrituras hacen referencia a uno de los más grandes

avivamientos de todos los tiempos: el avivamiento de Juan el

Bautista.

Habían pasado cuatrocientos años de oscuridad y/o

silencio de Dios, las ritualidades y autoridades religiosas

seguían ministrando en nombre de Dios, pero Él no estaba

presente. El mundo de las tinieblas dominaba a esa generación,

la decadencia social era tangible y el desenfreno moral

apresuraba la tragedia a la que toda nación está sujeta cuando

da la espalda a Dios. En este contexto emerge un hombre

escogido desde antes de nacer para abrir una senda que hiciera

«volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón

de los hijos hacia los padres» (Malaquías 4:6), y que allanara el

camino del Hijo de Dios. Es en este tiempo que se produce el

avivamiento de Juan el Bautista.

Este avivamiento tiene tres características que identifican

un genuino despertar. En primer lugar, produjo que la voz de

Dios, silenciada por un prolongado tiempo, volviera a resonar

claramente. La voz de Dios no es otra cosa que el eco de los

latidos de Su corazón, es el plan de Dios para la necesidad del

hombre. El profeta Isaías se refiere a Juan como «voz que clama

en el desierto» (Isaías 40:3), pues es en medio de la necesidad

donde la voz de Dios retumba. Por ello, es pertinente hacer un

alto y preguntar aquí ¿qué voz estamos escuchando y a qué voz

estamos obedeciendo? La intimidad con el Espíritu Santo y la

Biblia son las únicas fuentes que nos aseguran estar atendiendo

los deseos de Dios. Es urgente volver a los principios bíblicos, a

la oración intensa y al ayuno de humillación.

En segundo lugar, el avivamiento de Juan el Bautista

produjo un profundo espíritu de arrepentimiento y conversión.

Su mensaje fue sencillo pero efectivo, «Arrepentíos, porque

el reino de los cielos se ha acercado» (Mateo 3:2). Juan no

hizo milagros registrados, pero produjo la marca indeleble

de un genuino avivamiento, convicción de pecado y nuevo

nacimiento. En tercer lugar, este avivamiento fue presidido

por Juan alrededor de seis meses; sin embargo, no cesó con su

muerte, porque dirigió a la gente hacia Cristo. Esto indica que

un despertamiento no debe ser personalista sino espiritual, es

decir, es el Espíritu Santo el autor y Cristo el protagonista.

Finalmente, con las contundentes palabras de Juan el

Bautista, «Es necesario que ÉL (Cristo) crezca, pero que YO

mengüe» (Juan 3:30). Dios llama a la iglesia a un genuino

avivamiento.

Un día de primavera, hace

algunos años, mi hija mayor

y yo fuimos al parque de la

comunidad. Recuerdo que

fue un día muy especial para

mi pequeña de tan solo tres años. Ella jugó

y recorrió cada centímetro del parque. Días

después, mientras oraba, vino a mi mente

ese día; pero en mi visión la veía que era

perseguida por un animal semejante a un

león. Inmediatamente comencé a orar por

ella, y el Señor trajo a mi mente 1 Pedro

5:8: «Sed sobrios, y velad; porque vuestro

adversario el diablo, como león rugiente,

anda alrededor buscando a quien devorar».No es nada nuevo decir que el mundo

está cambiando, aunque sí podemos afirmar que lo está haciendo a pasos agigantados. Esto lo vemos en los cambios que han y están ocurriendo en la cultura,

particularmente en asuntos de moralidad sexual. Los cambios en la sociedad son drásticos de un año para otro. Con todo esto, fácilmente nos podemos sentir abrumados, pensando que quizá nuestros niños jamás podrán sobrevivir en esta sociedad. La tarea quizá parezca imposible, pues nuestra fe, principios y estándares son probados de diferentes maneras. Sin embargo, tenemos la responsabilidad de asegurarnos que el enemigo no devore el presente ni el futuro de nuestros niños con sus mentiras que plagan a esta sociedad. Pero ¿cómo fortalecemos la fe de nuestros niños en Dios para que en retorno impacte la cultura?

Debemos aceptar nuestro desafíoComo padres, familia extendida,

líderes del ministerio de niños y mentores, tenemos la responsabilidad de entrenar

a nuestros niños para que tengan una cosmovisión bíblica y sana cimentada en la Palabra de Dios. Aunque vivimos en una cultura frágil, sufrida y confusa podemos, a través del Espíritu Santo, ayudar a nuestros niños a desarrollar una fe sólida. A menudo fallamos en estos dos aspectos: 1) Relegamos a un segundo plano la prioridad de desarrollar en ellos una fe sólida, y 2) carecemos de las herramientas para entrenar correctamente a nuestros niños a vivir su fe en esta sociedad inmoral.

Tome como prioridad cimentarlos en la fe

Sin duda alguna, la formación de la fe debe comenzar en el hogar. Si queremos que nuestros hijos desarrollen una fe que influencie sus vidas y el mundo que les rodea, nuestros hogares deben de

14 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

DESARROLLANDO UNA FE QUE PERMANECE

15m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

modelar esta clase de fe. Las familias deben encontrar alguna manera de integrar la oración y el estudio bíblico diariamente en el hogar. Esta práctica puede también incluir momentos de diálogo y testimonios. Usted necesita dedicarle tiempo a esto, pero le aseguro que la inversión le traerá muchos beneficios. Proverbios 22:6 nos recuerda la promesa de Dios: «Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él».

Las iglesias y los ministerios locales también tienen un papel importante en la formación de la fe en los niños. Ellos también tienen la responsabilidad de apoyar a las familias a través de este proceso, así como abrazar el valor de los niños para Dios y su lugar en Su reino. A Dios le interesa la salvación y formación de los niños, por lo tanto, el evangelismo y discipulado deben ser una prioridad en cada iglesia.

Esta cultura siempre ha tratado de definir la identidad de los niños. Dice que las circunstancias, el ambiente y el pasado son las realidades que definen su identidad, por tanto es maleable, y puede cambiar o ser alterada. Nuestros niños deben comprender que su identidad está cimentada en Cristo, y que eso no cambiará. Su identidad no está cimentada en una lista de reglas y requisitos, sino en quién es Jesús y quiénes son ellos en Él.

Nuestros niños fueron creados por Dios, son un reflejo de Su imagen y tienen la capacidad de amarlo a Él. Él los perdona, protege y valora. Él es su Creador, por lo tanto, los conoce y les da dirección para que vivan dignamente en medio de esta cultura impía e inmoral.

A temprana edad, los niños deben saber que Dios los creó, que Él los ama y desea ser su Amigo. Este nivel básico es en realidad el fundamento de su identidad sobre el cual se añadirán otras verdades bíblicas. Es muy importante que a menudo les recordemos estas verdades apoyadas con escrituras e historias bíblicas.

Comparta la Palabra de DiosCada etapa de la vida de un niño

es una oportunidad para hacer crecer su identidad en Cristo por medio de la

enseñanza de la Palabra de Dios —el fundamento sobre el cual tomar decisiones correctas. Para lograr esto debemos impartirles un entendimiento claro de las Escrituras, enseñándoles qué dice el Señor y por qué lo dice.

Es esencial que en el hogar se practique la lectura bíblica, devocionales o la lectura de historias bíblicas apropiadas para su edad. La lectura de la Palabra de Dios debe ser una práctica diaria para que los niños sean edificados en ella. Los padres deben modelar esta devoción por la Palabra de Dios. Otra manera de enseñarles la Palabra es a través de la memorización bíblica. Puede escoger un versículo y fijar una fecha para una semana, un mes, etc.

No basta con decirle a nuestros niños que los «niños buenos» deben seguir las enseñanzas bíblicas. Ellos necesitan comprender que hacemos estas cosas porque somos seguidores de Jesús, y por consiguiente, vivimos de diferente manera que el mundo. Ellos conocerán la verdad de la Palabra de Dios a través de la lectura y reflexión personal o congregacional.

Comunique con transparencia la condición del mundo

Desafortunadamente, el tiempo y la experiencia nos han enseñado que infundir un nivel de superioridad moral a nuestros niños no es suficiente. Este enfoque, en muchos casos, lo único que ha hecho es impulsar a los niños hacia la soberbia. En lugar, debemos ayudarlos a comprender la verdad fundamental que se encuentra en Romanos 3:23: «Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios». Ellos necesitan saber que todos hemos pecado; no teníamos esperanza, pero Dios nos salvó. Necesitan saber que esa es la condición del mundo —está hundido en tinieblas. También debemos recalcarles que hemos experimentado (y continuaremos experimentando) el perdón y la restauración de Cristo y tenemos que compartirlo con los demás.

Por otra parte, es necesario escoger cuidadosamente las palabras para referirnos a la cultura actual. ¿Qué palabras utilizamos para referirnos a la

gente, estilos de vida, los medios y más? ¿Oramos por estas personas? El lenguaje correcto con el cual nos referimos a la gente es una herramienta de enseñanza para que nuestros niños aprendan sobre la misericordia del Padre hacia el mundo.

Motívelos a resplandecerLlevo un año orando constantemente

para que mis hijas y los niños a quienes les ministro lleguen a «[ser] irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual [resplandezcan] como luminares en el mundo» (Filipenses 2:14, 15).

Una de las herramientas sutiles que el diablo utiliza con cada generación es el conformismo. Recuerdo que de niño y de adolescente me paralizaba el temor cuando sentía que «no encajaba» en ningún grupo. Los niños necesitan saber que el conformarse al mundo no trae ningún beneficio. Afírmeles constantemente que debemos conformarnos a la imagen de Cristo, y no a la imagen falsa que el mundo quiere que reflejemos.

Sea ejemplo del perdón y la sanidad de Dios

A decir verdad, todos hemos cometido errores que no queremos que nuestros hijos sepan. Tememos que si estos errores salen a la luz seremos vistos como débiles e hipócritas. Pero necesitan saber que hemos enfrentado tentación en nuestras vidas y a veces hemos cedido. Solo cuando crea apropiado y sea dirigido por el Espíritu Santo comparta con ellos sus luchas personales.

La Biblia nos recuerda: «Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable» (1 Pedro 2:9).

Enséñeles a abrazar con certeza y con valor la singularidad de ser un hijo/a de Dios en este mundo. Recuerde que deben aprender cuál es su identidad en Cristo y entender que la vida que Él tiene para ellos es mucho mejor que la que ofrece esta sociedad inmoral.

—Shaun McKinley, Cleveland, Tenesí

A principios del decenio

de 1980, James Baker —

Secretario de Estado de los

EE.UU.— expresó ser un

siervo de Cristo. Antes de

ser nombrado por el presidente Ronald Reagan

para servir en su gabinete presidencial, había

practicado leyes en Houston, Texas, y creía

tener un fundamento bíblico sólido. Pero en

un desayuno presidencial en el que tuvo la

oportunidad de testificar sobre su fe ante varios

embajadores y líderes del mundo, confesó que

realmente no conocía la esencia del Evangelio

de Cristo. Cuando su primera esposa fue

diagnosticada con cáncer y murió, él entonces

comenzó a pensar sobre la muerte, la eternidad

y Dios. Al año siguiente conoció y se casó con

su segunda esposa, Susan, quien ya tenía una

verdadera relación personal con Jesucristo.

Un día mientras meditaba se dio cuenta que

realmente carecía de una verdadera relación con

Dios y dijo estas palabras: «Entiendo que jamás

mereceré el amor de Dios. Él me amó aun antes

de que fuera formado en el vientre de mi madre.

Dios me mostró Su amor cuando Cristo murió

en la cruz». Tras pronunciar estas palabras se

arrodilló y aceptó a Jesús como su Salvador.

Este fue el resultado inmediato: Como

Secretario de Estado de los EE.UU., tenía que

tratar ciertos temas con el Secretario de Asuntos

Exteriores de Rusia, Eduard Shevardnadze. A él

le agradaba Shevardnadze, pero le preocupaba

su condición espiritual. Así que, tras aceptar

a Jesucristo como su Salvador, lo primero que

pensó fue ganar a Shevardnadze para Cristo.

En 1990, después de un evento diplomático,

lo invitó a su rancho en Wyoming. Durante

la cena le entregó un par de botas vaqueras

como regalo, y Shevardnadze lo sorprendió

16 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

Dr. Wallace PrattSalem, Oregón

entregándole un obsequio también —un cuadro

de Jesús lavando los pies de Sus discípulos. Tras

entregarle el obsequio Shevardnadze le dijo: «Sr.

secretario, aun los comunistas están cambiando

de parecer en cuanto a las cosas espirituales».

Tiempo después salieron los dos a pescar, y Baker

comenzó a manifestarle sus prejuicios culturales

y le habló abiertamente acerca de Jesús. Minutos

después Eduard Shevardnadze recibió a Jesucristo

como su Salvador. No se supone que se hable

de creencias religiosas personales en círculos

diplomáticos, pero Baker dijo estas palabras:

«Cuando uno está lleno del amor de Jesucristo,

también quiere que otros lo conozcan».1

En la cultura occidental, la idea de

compartir a Jesucristo con un comunista

ortodoxo ruso como Eduard Shevardnadze

parece algo imposible. Pero Pablo escribe en

Gálatas 3:26-29:

«Pues todos sois hijos de Dios por la fe en

Cristo Jesús; porque todos los que habéis

sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis

revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay

esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque

todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si

vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de

Abraham sois, y herederos según la promesa».

Pablo entendió que su llamado era

compartir el Evangelio con toda persona, sin

importar su raza, cultura, género o estatus

social. Ante este gran desafío, ¿cuántos de

nosotros realmente comprendemos la verdadera

dimensión de nuestra misión? ¿Estamos

dispuestos a aceptar este desafío con toda

nuestra mente, alma y cuerpo? A medida que

consideramos esta responsabilidad, observemos

a continuación el alcance tripartito de nuestro

desafío.

Comprendiendo el alcance de la cosecha

Mientras estudiaba en la Colorado

Christian University en 1988, también serví

como coordinador estatal de convenciones

para el supervisor de estado. Se acercaba la

convención y él me pidió que encontrara un

lugar donde celebrarla y afortunadamente

se pudo llevar a cabo en la capilla de la

universidad. Un día, durante la convención,

tuve la oportunidad de conversar con Félix

García, director del Departamento Mundial de

Lenguajes de nuestras Oficinas Internacionales.

Mientras conversábamos durante los recesos, le

manifesté mi deseo de ir a la Unión Soviética (la

Rusia de hoy) y predicar el Evangelio. En aquel

tiempo muchos se hubieran reído de mí, pero el

hermano Félix no se rió, ni tampoco me dio una

lista de razones por las cuales sería imposible

ir, más bien, me respondió respetuosamente,

diciendo: «Wallace, creo que este deseo que

tienes viene de Dios, y Él te dará la oportunidad.

Y si de alguna manera yo puedo ayudarte a

cumplir tu deseo de trabajar en la cosecha allí,

yo haré lo que pueda para ayudarte». Concluyó

la convención y jamás tuvimos la oportunidad

de hablar nuevamente sobre el tema. Mi

amigo Félix murió poco después. Tres años

después, Hank O’neal —un caballero de alta

estatura—, se acercó a mí y me recordó aquella

conversación que había tenido con el obispo

García. El resto es historia; Dios me abrió las

puertas en cinco naciones de la antigua Unión

Soviética. He estado más de 35 veces en los

últimos 24 años laborando en las misiones.

Las misiones mundiales no requieren

mudarse al extranjero permanentemente, ni

tampoco mucho dinero. Simplemente se requiere

un corazón con una pasión por compartir

EL DESAFÍO DE LA CULTURA EN LA COSECHA

17m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

el Evangelio a toda cultura y nación. Esta

compasión me ha hecho comprender que una

persona no puede aceptar realmente el desafío

de la Gran Comisión ni entender el completo

alcance de su impacto hasta que esté dispuesto a

poner a un lado su propio mundo pequeño (sus

intereses cotidianos). Se requiere que realmente

abramos nuestros ojos para ver que los «campos

están blancos para la siega» (Juan 4:35). Es

esta pasión y visión la que nos impulsa a orar,

ofrendar y trabajar para la cosecha.

Comprendiendo el alcance de la dinámica cultural

Durante un viaje misionero que realicé

a Hungría en diciembre, leí un libro sobre

la cultura hispana titulado, Santa Biblia: The

Bible Through Hispanic Eyes (Santa Biblia: la

Biblia a través de ojos hispanos). Mientras leía el

libro llegué a un párrafo que tocó mi corazón

profundamente. Dice el escritor «Es cierto, el

viejo centro cree saber mejor, e incluso la periferia

se inclina ante él; pero también es cierto que el

centro juega un papel importante para corregir

cosas en la periferia. Por consiguiente, la iglesia

en Jerusalén envió a Pedro y Juan a Samaria para

evaluar el trabajo de Felipe, y encontraron que

tenían algo valioso que aportar a su ministerio.

Pero a menudo es la periferia que impulsa al

centro a nuevos descubrimientos»2. Ciertamente

nos encontramos en una encrucijada ministerial

muy seria en la cual las influencias culturales y la

diversidad racial son una realidad en todo rincón

del mundo. Esto nos presenta un gran desafío.

Necesitamos empaparnos de la cultura para

saber cómo alcanzar a las etnias para Cristo. Este

desafío es mucho más que meramente presentar

el Evangelio a quienes no se parecen a nosotros,

ni piensan o hablan como nosotros. Esto significa

que necesitamos aprender más sobre su historia

y trasfondo cultural para poder ganarlos para

Cristo y que asistan a nuestras iglesias. El desafío

ante nosotros no es amalgamarlos a nuestra

cultura, lengua o manera de pensar. Más bien,

es vital que conozcamos sus valores culturales,

prioridades, preferencias e historia, si realmente

deseamos tener un impacto espiritual en sus

vidas y familias.

Cuando Jesús se encontró con la mujer

sirofenicia que Lo buscaba para que echara

fuera un demonio de su hija (Marcos 7:24-30),

Él le respondió con la verdad. La respuesta

que Jesús le dio reveló Su misión periférica.

A fin de alcanzar a este grupo de personas

segregadas del centro de Jerusalén (los judíos),

Jesús tuvo que derribar los viejos prejuicios, las

prácticas discriminatorias y la teología arcaica

que los ataban. Si nosotros vamos a abrirles las

puertas a las etnias que nuestros ministerios

preferenciales han ignorado, entonces tenemos

que rescatar a las prostitutas y entrar a los

hogares de aquellos que algunos consideran

indignos del reino de Dios. Ante la realidad de

los países y la inmigración mundial, el reino

de Dios necesita moverse hacia la periferia —

movernos del centro hacia afuera— o reevaluar

nuestras nociones pasadas sobre el evangelismo

e incluir a aquellos que por mucho tiempo han

sido excluidos debido a las barreras raciales y

culturales. Se requiere de nosotros un corazón

de siervo como el de Jesús para alcanzar a todo

grupo de personas que sufre pobreza espiritual.

Comprendiendo el alcance del evangelismo comunitario

Una noche de verano en 1995 fui a visitar

una pareja que vivía cerca de nuestra iglesia

en Phoenix. Mientras visitaba a esta hermosa

familia que jamás había asistido a nuestra

iglesia, sentí compartir con ellos el Evangelio.

Esa noche siete personas entregaron sus vidas

al Señor. Pronto me di cuenta que tenían

hambre de Dios. También había en ellos un

gran deseo de alcanzar a su comunidad para

Cristo. Nunca olvidaré las conversaciones que

tuve con ellos. Cada martes que me reunía para

enseñarles podía ver la pasión que poseían

por ayudar a su vecindad. Estoy seguro que

hay pastores que desearían tener personas

como esta familia. Personas con un gran celo,

devoción y disposición por ayudar a la gente

personas a su alrededor independientemente de

la raza, cultura o lengua. Esta hermosa familia

se comprometió con Jesucristo y se dieron a la

tarea de evangelizar y mejorar su comunidad.

Las misiones mundiales sólo serán un

esfuerzo humanitario si carece de una misma

pasión por alcanzar su vecindario y comunidad

con el Evangelio. Le doy gracias a Dios por

todos aquellos que han ayudado en la cosecha

en otras naciones. Pero también doy gracias a

Dios por todos aquellos que hacen lo imposible

por alcanzar a toda su comunidad. Nuestra

misión no es concentrarnos sólo en nuestra

propia etnia, es también hispana, afroamericana

y asiática, etc. ¡La misión de la iglesia es

alcanzar a toda persona! Debemos desafiar a

toda persona en el reino de Dios a no solo ser

un miembro de la iglesia, sino también a que

se esfuerce por alcanzar a su vecindad para el

Señor. Deje de pensar en las imposibilidades

y muévase hacia adelante porque sí podemos.

Cuando estudiamos la vida de Jesús vemos

claramente que Su misión no era construir un

hermoso templo, tener un gran número de

seguidores, ni tampoco establecer una buena

organización; Su misión era alcanzar a los

perdidos en Su comunidad —a la samaritana

en el pozo, a la prostituta en la calle, al hombre

de pequeña estatura en el sicómoro, al cojo en

el estanque, al hombre endemoniado y desnudo

que vivía en una cueva, y al ladrón condenado a

morir en una cruz. Él penetró en toda cultura y

comunidad.

Entiendo que cuando Noé construyó el arca

no tenía prueba de que iba a llover, tampoco tenía

nada que le asegurara que la gente obedecería su

llamado, ni las finanzas necesarias para sufragar

la tarea, pero él se movió en fe (Hebreos 11:7).

Le tomó 100 años de arduo trabajo y persistencia

para alcanzar su meta, pero se convirtió en un

hombre de fe que salvó al mundo. Sin lugar

a dudas, creo que su comunidad necesita el

mismo esfuerzo para salvarla que la comunidad

en los tiempos de Noé. Quizá viva en Chicago,

Islamabad, Manila, Londres, São Paulo o

Johannesburgo o cualquier otra ciudad en el

mundo, pero creo que Dios le colocó allí en este

preciso momento para cumplir Su propósito

divino. Le insto a salir en fe a alcanzar a sus

vecinos y luego deje que el Espíritu de Dios se

encargue de hacer entrar a las personas en el arca.

A los 12 años de edad, Robert Louis

Stevenson (quien después se convirtió en

un gigante de la literatura) hizo una gran

declaración luego de ver como un hombre

encendía los faroles de gas que habían en la

calle. Mientras el observaba de repente entró

la niñera y le preguntó porqué miraba por

la ventana. «¡Estoy viendo como un hombre

hace agujeros en la oscuridad!»3, le respondió.

¡Qué maravillosa declaración! Este debe ser

nuestro desafío. Esta debe ser la misión de

todo hijo de Dios. ¡Debemos hacer agujeros

en la oscuridad!, ya bien sea en Lagos o Nueva

York. ¡Comprométase a hacer agujeros en la

oscuridad!

___________________1 James A. Baker, My friend, Eduard Shevardnadze (Mi

amigo, Eduard Shevardnadze), Washington DC: The

Washington Post, 8 de julio de 2014, Sección 3, página 2.

2 Justo L. González, Santa Biblia: The Bible through

Hispanic Eyes [Santa Biblia: La Biblia a través de ojos

hispanos], Nashville, TN: Abingdon Press, 1996, página 52.

3 Robert Louis Stevenson, Punching Holes in the Darkness

(Haciendo agujeros en la oscuridad), Harrison, AR: Ron

Hutchcraft Ministries, 10 de febrero de 2010, Sección 1,

página 1.

M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 618

Sólo los corazones llenos de luz y sazonados con sal son los que pueden compartir el amor de Dios con el mundo

que tanto lo necesita.

Sin embargo, ¿cómo podemos ser «sal y luz» en un mundo cada vez más intolerante hacia la fe? Consideremos los

siguientes pasajes para responder a esta pregunta:

«Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas,

sino que tendrá la luz de la vida» (Juan 8:12).

«Vosotros sois la luz del mundo» (Mateo 5:14).

«Vosotros sois la sal de la tierra» (Mateo 5:13).

Carmen Casey Queensland, Australia

«El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que

en él hay…Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los

hombres…para que busquen a Dios, si en alguna manera,

palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos

de cada uno de nosotros» (Hechos 17:24-27).

«Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios

tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece

en amor, permanece en Dios, y Dios en él. En esto se ha

perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos

confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos

nosotros en este mundo» (1 Juan 14:16, 17).

«Amar es estar rodeado de luz, no de la oscuridad»1, expresó

la madre Teresa de Calcuta.

Imagine por un momento que su rostro brilla más que el sol

o alguna otra estrella mucho más grande. Pero por más penetrante

que sea su luz, siempre estará corto del intenso resplandor de Dios,

el Padre de las luces. Ahora imagine un grano de sal; no hay nada

más sencillo o básico que esto. Sin embargo, la sal es uno de los

elementos más útiles y abundantes de la tierra. Ahora, tome los

dos componentes y pregúntese: ¿Qué sería el mundo sin la luz y

la sal? ¿Cuánto ha contribuido el hombre para suplir esta luz y sal

que tanto necesitamos? Es evidente que el hombre no puede crear

ni tampoco reproducir la luz o la sal que viene de Dios. Asimismo,

el amor de Dios es el único que fluye y llena los corazones, mentes,

almas y espíritus de aquellos que lo reciben.

Tal como leímos en los versículos anteriores, Dios requiere

que nos llenemos de Su amor. Dios nos amó tanto que envió a Su

Hijo para que este mundo desesperado, oscuro e insípido pueda

experimentar el verdadero amor que transforma. Nuestro ministerio

en esta tierra no es otra cosa que compartir el amor de Dios. Las

personas que tienen una relación con Dios brillarán aun más a

medida que el verdadero amor sea perfeccionado en ellos. La

esencia de un discípulo enamorado de Cristo es ser un faro de luz

que brille con la verdad, y sal que preserve y dé sabor a la tierra.

La Biblia dice que la razón de nuestra existencia es buscar

a Dios, y aunque Él nos pide que Lo busquemos, también se

complace en tocar a nuestra puerta. Jesús dijo: «He aquí, yo estoy a

la puerta y llamo». De la misma manera que Dios nos cuida y nos

honra, debemos amarlo y pedirle que more en nuestro corazón. Si

realmente hemos de ser la sal y la luz del mundo, debemos mantener

una relación íntima con Dios. No puede ser una relación a medias.

Dios pide el todo de nosotros.

Observe que debido a que siempre llevamos en nuestro corazón

a las personas que amamos, no se nos dificulta definir nuestros

valores. Nuestros sentidos buscan llenar el verdadero anhelo de

nuestro corazón: La vista, el oído, el gusto, etc. ¿Qué no haríamos

nosotros por ver, tocar, oler o escuchar la voz de una persona que

amamos? ¿Cuánto más a Dios, nuestro Padre celestial? Debemos

amarlo con todo nuestro corazón, mente, alma y espíritu. Este es el

amor que nos transforma a nosotros y al mundo que nos rodea.

El amor, al igual que la luz y la sal, trae vida y es valioso. De

manera que, el amor de Dios es el elemento más valioso que este

mundo conocerá.

Jesús sintió la necesidad de preguntarle a Pedro tres veces:

«¿Me amas?» ¿Qué vara de medición podemos utilizar hoy

día para medir nuestro amor? La mejor manera para medirlo

lo es nuestra obediencia: «¿Hasta qué punto estoy dispuesto a

obedecer?» Este mundo necesita conocer el verdadero amor y

nosotros, los creyentes, nunca debemos dejar de amar a Dios y a

nuestro prójimo. Es esencial que mantengamos una relación de

amor recíproco con el Señor para ser luz y sal en el mundo.

El amor es una luz que revela la verdad de toda persona.

El amor penetra la niebla y la suciedad del pecado. El amor es

lo contrario al egoísmo que domina al mundo. Algunos dicen

que el amor altera el concepto de la realidad de una persona; sin

embargo, la Biblia dice que ilumina o alumbra como ninguna

otra luz. El amor es fuego que consume la lujuria, glotonería,

avaricia, pereza, ira, envidia y nuestro ego si lo permitimos.

El egoísmo lleva a una vida insípida, y solo cuando la persona

aparta sus ojos de las luces artificiales de este mundo es que podrá

encontrar verdaderamente a la Estrella de la Mañana —a Cristo.

Todo aquello que opaque o robe el resplandor de la luz debe ser

removido a fin de que se pueda brillar con gozo. De más está decir,

que toda acción egoísta opaca la luz de Cristo en nosotros.

La sal sazona y provee sabor. Y así como la sal sazona, el amor

expone lo que hay en nuestro corazón. Sin embargo, Dios nos

ha llamado a amar por encima de nuestras diferencias. Debemos

practicarlo si realmente somos la luz de Cristo. Nuestra luz debe

brillar con tanta intensidad que debe servir como guía y consuelo

para aquellos que le temen a la oscuridad.

El mundo necesita de Dios y de Su amor así como la vida

necesita la sal, pero lamentablemente, sigue anhelando el azúcar

en lugar de la sal. Y peor aun, a veces la iglesia en lugar de sal

reparte azúcar. Nunca podremos influenciar al mundo tratando

de imitarlo. La sal tiene que hacer contacto con la comida para

modo de alterar su sabor, asimismo, debemos nosotros estar

dispuestos a compartir nuestro amor de manera que permanezca

e impacte las vidas alrededor nuestro. El reino de Dios está

entre nosotros; en corazones sazonados con el amor de Dios. El

filósofo griego Pitágoras dijo: «La sal nace de los progenitores

más puros —el sol y la mar».2 Asimismo, el amor que transforma

al mundo proviene de la luz de la verdad y del mar de la Palabra

de Dios.

Si Dios es amor y Él nos creó a cada uno por amor, —para

buscarlo y permanecer en Él—, entonces el amor es suficiente. Ser

amado por Dios es suficiente para amarlo en retorno y amar al

mundo. Vivimos en un mundo que no aprecia la provisión de la sal

y la luz, pero nosotros debemos continuar siendo la luz y la sal de

Dios en la tierra.

_________________1 Frases de la Madre Teresa: http://www.azquotes.com/quote/562900 (fuente en inglés)2 Frase de Pitágoras: https://en.wikiquote.org/wiki/Pythagoras (fuente en inglés)

19m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

20 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

Marsha RobinsonCleveland, Tenesí

m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t 21

¿Alguna vez se ha preguntado qué tiene de malo consumir bebidas embriagantes? Millones de personas las consumen a diario. La Iglesia de Dios de la Profecía enseña y practica la abstinencia del consumo de bebidas embriagantes. Los hombres y mujeres llenos del Espíritu Santo basan esta creencia en las enseñanzas bíblicas, tales como: «No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu» (Efesios 5:18), y «El vino es escarnecedor, la sidra alborotadora, y cualquiera que por ellos yerra no es sabio» (Proverbios 20:1). Podemos encontrar muchas más amonestaciones en las Escrituras con respecto al consumo de bebidas embriagantes, y hay diferentes argumentos con respecto a cada una de ellas. ¿Hay razones para abstenerse de consumir bebidas embriagantes? ¿Tiene lugar el sentido común en esta clase de debate? A continuación algunas razones para vivir una vida libre del consumo de bebidas embriagantes:

• El alcohol es un depresivo. Cualquier cosa que pueda causar depresión debe ser evitado. «Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza» (Gálatas 5:22, 23). Fruto significa el «producto de la labor». El operador aquí es el Espíritu Santo. De manera que, si una persona consume algún embriagante está resistiendo a Dios. Es importante que en todo tiempo le permitamos al Espíritu Santo que obre y dirija nuestras vidas.

• Muchos inconversos creen que los cristianos no deben consumir bebidas embriagantes. El consumo de bebidas embriagantes por parte de un creyente limita en gran manera la oportunidad de influenciar positivamente la vida de un impío. Sin lugar a dudas, perdemos nuestra influencia. Dice 1 Pedro 2:11, 12: «Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la

visitación, al considerar vuestras buenas obras».

• ¿Quiero yo que mis hijos sigan mi mal ejemplo? ¿Vale la pena consumir bebidas embriagantes a expensas de que mis hijos se vuelvan alcohólicos?

• Muéstreme una familia que haya tenido una experiencia positiva como resultado del consumo de bebidas embriagantes. No podrá encontrar ni una.

• Jamás he escuchado a alguien decir: «¡Me siento muy cerca de Dios cuando me emborracho!»

• Perdemos el pudor. La Biblia dice: «Ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias» (Efesios 5:4).

• Las bebidas embriagantes son una droga que altera el estado mental.

• Las bebidas embriagantes son adictivas.

• Las bebidas embriagantes son agentes anestésicos para el dolor y la pena. La Biblia nos dice que llevemos a Dios nuestras aflicciones. «Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido» (Isaías 53:4). Romanos 15:13 nos dice: «Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo».

• Las bebidas embriagantes matan las células cerebrales.

• El consumo de bebidas embriagantes contribuye a enfermedades hepáticas, pancreatitis, ciertas formas de cáncer y enfermedades cardíacas.

• La Biblia dice que los borrachos no heredarán el reino de Dios. No se arriesgue a cruzar esa línea, especialmente porque su destino eterno está en juego.

• Las bebidas embriagantes son un desperdicio de dinero, dones, talentos y propósito.

• Las bebidas embriagantes destruyen vidas, deterioran la salud, y disipan sueños.

• Las bebidas embriagantes han destruido

muchísimos matrimonios.

• Las bebidas embriagantes inducen al mal comportamiento. Son el factor principal en el 50 por ciento de delitos violentos.

• La Biblia nos llama a estar atentos; las bebidas embriagantes debilitan el reflejo y el tiempo para reaccionar.

• ¿Qué tal si decido beber sólo un poquito? ¿Qué tal si veo solo unas pocas páginas de pornografía o consumo un poquito de heroína a la semana? ¿Cuántas veces tengo que mentir para ser considerado un mentiroso? ¿Qué tal si adultero sólo de vez en cuando?

• Los cristianos han sido llamados a vivir una vida de total entrega a Dios y separación del mundo.

• Las bebidas embriagantes entorpecen la mente. Nos pueden hacer olvidar quiénes somos y cuáles son nuestras obligaciones.

• Muchísimas personas ebrias se ponen tras el volante, y no aceptan estar ebrios hasta que los detiene una patrulla y no pasan la prueba de sobriedad. Pocas veces una persona ebria reconoce que lo está. ¡Los cristianos no deben emborracharse!

• Las bebidas embriagantes llenan la mente de pensamientos impuros.

• Las bebidas embriagantes no inspiran a nadie a vivir una vida con mayor dedicación y disciplina; hacen lo contrario.

• Según la Organización Mundial de la Salud, hay alrededor de 140 millones de alcohólicos en todo el mundo, la mayoría de los cuales no recibe ninguna clase de ayuda o tratamiento. El alcohol es la causa de 1.8 millones de fatalidades al año, y es la tercera causa de muerte en los países bajo desarrollo. Las bebidas embriagantes con como una serpiente que muerde (Proverbio 23:32). Las posibilidades de salir ileso no existen. Recordemos que el vino es escarnecedor de aquellos que lo consumen (Proverbios 20:1) y su recompensa es dolor, rencillas, quejas y heridas (Proverbios 23:29, 30).

Las bebidas embriagantes no inspiran a nadie a vivir una vida con mayor dedicación y disciplina; hacen lo contrario.

22 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

Jordan HoltCleveland, Tenesí

Adorando a Dios a través de las artes creativas

La historia de la iglesia está mezclada con el arte. Podemos ver su influencia durante la era del renacimiento italiano en el cual el cristianismo inspiró en gran manera y la iglesia comisionó la mayoría de las obras de arte que forman parte de la civilización occidental, aunque los peregrinos puritanos la rechazaron y la etiquetaron como un ejemplo de vanidad.

Sin embargo, esta perspectiva puritana quedó en el pasado. El siglo XX en particular vio nacer a muchos pioneros cristianos que forjaron un camino para las artes en la iglesia. La música estuvo a la vanguardia de esta carga, y su composición y desempeño a través del tiempo ha sido y es un elemento vital en las iglesias evangélicas de todo trasfondo y tamaño.

Al igual que la música, también otras artes creativas han venido a formar

parte de los programas de la iglesia local. El teatro ha aumentado entre los jóvenes considerablemente al punto que muchos grupos de jóvenes lo utilizan como un nuevo método de ministerio y una oportunidad para el compañerismo y crecimiento —sin mencionar el valor de aprender algo nuevo. El diseño gráfico y videoarte también han sido incluidos en las funciones de la iglesia. Han mostrado ser de gran beneficio en la presentación sermónica y para diseñar o crear folletos para la promoción de eventos de la iglesia. La mayoría de estos medios son dirigidos primordialmente por voluntarios, quienes posiblemente no tendrían esta oportunidad fuera de la iglesia. La iglesia debe proveerle una fuente de oportunidades a sus congregantes para que experimenten cosas nuevas. Seguramente a muchos de nosotros se

nos dio la oportunidad cuando éramos jóvenes de tocar algún instrumento, crear las ayudas visuales para la EBV o participar en un drama.

Nuestra iglesia nos dio la oportunidad para crecer personalmente y nos motivó en gran manera. No hay nada malo con intentar, pues solamente haciéndolo sabremos si podemos o no. Ya sea que una persona cante un himno o diseñe el boletín de anuncios del domingo, la iglesia debe siempre servir como un agente facilitador y motivador. No es aconsejable esperar hasta que algo no funcione propiamente para entonces buscar maneras para mejorar. La iglesia debe siempre estar a la vanguardia de la excelencia.

En su ensayo titulado, Art and the Bible (El arte y la Biblia), Francis Schaeffer critica a la iglesia moderna de ignorar los aspectos artísticos de la cultura, diciendo:

«A pesar de que hablamos constantemente del señorío de Cristo, hemos limitado su alcance a una pequeña área de la realidad». En palabras de Schaeffer hemos restringido la función de la iglesia a asuntos estrictamente religiosos, olvidando el arte y otros aspectos fundamentales de la humanidad.

Génesis 1:27 nos dice que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios, sin embargo, hemos tenido problemas para incorporar el aspecto artístico del Creador —esa misma faceta responsable por la hermosura y las maravillas de la naturaleza.

Afortunadamente, hemos progresado bastante, aunque ha sido despacio. Pero aún continuamos luchando por recuperarnos de los errores serios, aunque bien intencionados, de la antigua iglesia americana, y hay obstáculos que necesitamos superar.

Aunque las artes visuales están cobrando importancia en nuestras iglesias, muy a menudo nuestro interés se ha enfocado en su utilidad —como herramientas para el evangelismo—, en lugar del valor intrínseco que obtenemos de ellas. Sin lugar a dudas, traer almas a nuestras iglesias es nuestra máxima prioridad, pero no debemos olvidar que el señorío de Cristo abarca a la persona completa, y la función de la iglesia va más allá que solamente atraer visitas. La iglesia nos discipula, entrena y ayuda a reflejar mejor a Cristo. Si el arte, la creatividad y la belleza son aspectos de la imagen de Dios que llevamos todos, ¿acaso no debe la iglesia enfatizar estas cosas también? ¿Acaso no cree usted que nos pueden ser útiles también en otras áreas de la iglesia, aparte de servir como una herramienta para atraer a las visitas?

Las artes creativas tienen un significado más profundo del que conocemos. Nuestra perspectiva de ellas —como una herramienta o algo valioso— tiene la capacidad de influenciar nuestros pensamientos y comportamiento. Yo doy fe de esta influencia en mi caminar cristiano.

Recuerdo que de adolescente (tiempo en que luché con mi llamado y vocación) me acerqué a mi líder de jóvenes mientras él y un grupo de personas preparaban las ayudas visuales para nuestra escuelita bíblica de verano. No era un músico, y a menudo luché con cuál era mi función en la iglesia —pues mi talento era el dibujo. Mi pasión por dibujar el Hombre Araña y hacer videos con mis figurines de superhéroes no me parecía que fuera un talento que pudiera utilizar para el bien del reino.

Durante la conversación le pregunté (a mi líder) si un dibujante tenía algún lugar en la iglesia, a lo cual él simplemente señaló hacia el escenario de la escuelita bíblica de verano como diciéndome busca la manera de encajar tu talento con esto. Esa no era la respuesta que esperaba; salí de aquel lugar bastante desanimado. Quizá yo mismo tuve la culpa de su respuesta por no haber hecho la pregunta correctamente.

Yo quería saber si podía dibujar murales para la iglesia. Quería saber cómo utilizar mi amor por el arte para bendecir a la iglesia. Pero no solo crear arte para promocionar eventos, etc., para la iglesia, sino ¿cómo podía utilizar mi pasión por el arte para adorar y servir?

Me sentí desanimado. Lamentablemente, pasaron los años y no encontré una respuesta que me satisfaciera, por lo que me enfoqué en crear videos publicitarios. Realmente no veía en el futuro cercano una oportunidad dentro de la iglesia para usar mi talento, más allá de las caricaturas cristianas que había visto o los folletos para evangelismo (con dibujos) que suelen dejar en algunos lugares públicos.

Un domingo, durante mis años universitarios, visité una célula que unos amigos habían comenzado. Fue un servicio poco convencional en la sala de una pequeña casa cerca del recinto universitario. Después del breve devocional, para mi sorpresa el grupo se dividió, algunos se quedaron en la sala y otros se fueron a la cocina donde habían unas personas pintando. A mí me dijeron que podía leer la Biblia, orar o participar en la música. Honestamente me sentí un poco escéptico. Toda mi vida había sido expuesto a cierto estilo de adoración (música, predicación, llamado al altar), y aunque sentía un amor profundo por el arte, no creía que a través de ello podía adorar y servir.

Desafortunadamente, este concepto erróneo sobre el arte ha sido fomentado en las iglesias locales, aunque de ninguna manera ha sido intencional u hostil, o arraigado en algún pensamiento malévolo. Más bien, ha sido un descuido u omisión como consecuencia de nuestra historia y cultura heredada. Estoy plenamente seguro que las iglesias locales no están en contra de implementar las artes creativas en sus programas. Por el contrario, su amor y apoyo nos ha encaminado hacia este cambio. Por más de cinco décadas, hemos estado corrigiendo el desbalance y buscando restaurar un aspecto importante de nuestra

23m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t

percepción acerca de nuestro Creador. Este aspecto «creativo» casi estaba en el olvido, pero confío que dentro de poco tiempo el uso del arte creativo en la iglesia trascenderá de simplemente utilidad, e incluirá métodos más artísticos en la adoración.

En las escuelas de arte se enseña sobre el arte cristiano del Renacimiento que incluye materias como el Crucificado de Brunelleschi, La Creación de Adán por Miguel Ángel o La Ultima Cena por Leonardo DaVinci. Éstos influenciaron el arte en el mundo occidental de su era.

Aunque si bien es cierto que esta no fue una era perfecta para el comportamiento eclesial, sin duda alguna, el cristianismo se entrelazó con excelencia en el arte. ¿Acaso no le parece lógico pensar que aquellos que estamos conectados con el Creador seamos más creativos? ¿Acaso no es lógico que los creyentes que valoran y prioritizan la fe y el amor tengan el deseo de crear y apreciar más las cosas hermosas que Dios creó? Bien lo dijo David al contemplar los cielos, «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos».

Vale la pena imitar por medio del arte las cosas hermosas de la creación de Dios, así como mis hijas se sientan a mi lado a pintar con sus crayones mientras yo trabajo en mi mesa de dibujo. Podemos utilizar el arte para alentar, animar e inspirarnos unos a otros, y sencillamente celebrar la belleza y creatividad, así como lo hemos hecho con la música.

Es mi deseo que el arte sea incorporado en nuestras iglesias, aunque aún existe la incógnita de cómo hacerlo. Yo mismo quiero aprender más cómo integrar las artes creativas en la iglesia y en la adoración. Quizá usted puede comenzar pidiéndole a los «artistas» en su congregación (le aseguro que si tiene músicos tiene diseñadores/pintores) que compartan algunas obras de arte para exhibirlas en la iglesia. También puede pedirle al grupo de músicos que ofrezcan algunas clases durante la semana sobre cómo aplicar las artes creativas en la adoración.

Recuerde que quizá no haya perfección; usted simplemente provea un lugar donde aprender, cometer errores y sencillamente crecer. Utilicemos las artes creativas para todos los propósitos de la iglesia —es una herramienta evangelística por naturaleza. Su utilidad es un subproducto de su naturaleza, no el propósito. Las artes creativas pertenecen bajo el señorío de Jesucristo.

24 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

Jack Anderson, hijo

Battle Creek, Michigan

EN UNA CULTURA POS-CRISTIANA

S Sin lugar a duda, hemos experimentado un cambio dramático

en la cultura. Desafortunadamente, este cambio no ha sido

positivo para la iglesia. De acuerdo a George Barna (y otros)

vivimos en «una cultura pos-cristiana en Norteamérica».1

En su libro, A Mainline Turnaround (Un cambio de lo

tradicional), Lyle Schaller dice que los sistemas eclesiales que

fueron desarrollados y tuvieron éxito a mediados de la década

de 1990 hoy en día no son efectivos. Esto se debe a que la

sociedad ha cambiado. La tecnología y la cultura han cambiado.2

La respuesta es bastante sencilla y obvia. La iglesia fácilmente

puede culpar a la sociedad y cultura por crear tantos cambios y

múltiples problemas. Uno de los grandes problemas que tiene

la iglesia es que ya no vivimos en una cultura que acepta el

cristianismo.

Afortunadamente nací después que se inventara el sistema de

plomería interior, el cual nos brinda mucha comodidad que en

los «días de antaño» cuando se tenía que salir afuera para usar el

baño (letrina). Asimismo, estoy seguro que muchos de nosotros

que utilizamos lentes para ver estamos muy agradecidos con

la tecnología por ayudarnos con nuestros problemas ópticos.

m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t 25

escuchado algunos cristianos decir: «No entiendo cómo algunos sobreviven sin Dios en sus vidas». ¿Lo ha pensado usted? Hay personas que no tienen a Dios en sus vidas y creen sobreponerse a sus problemas con licor, drogas ilícitas, con un amante o cualquier otra cosa. De alguna manera creen superar sus problemas. Algunos de ellos son parte del 10 por ciento que nunca ha asistido a una iglesia, y otros son parte del 33 por ciento que se ha alejado de la iglesia.6

Como bien hemos mencionado anteriormente, existen diferentes cosmovisiones, pero «el principio general de la cosmovisión cristiana reconcilia todas estas diferencias por medio de la Biblia la cual da la última palabra en asuntos morales, fe y práctica».7 Como seguidores de Jesucristo, nuestra cosmovisión está anclada en el fundamento de las Escrituras, la cual nos ayuda a entender la relación de Dios con la humanidad y Su amor inagotable. También es nuestra regla de vida como pueblo de Dios. Dios nos demostró Su amor a través de la vida, muerte y resurrección de Jesucristo.

Dejar a Dios y la autoridad de las Escrituras fuera de nuestra cosmovisión, nos hace sin fundamento, aunque hayamos memorizado algunos pasajes bíblicos.

Muchos de nosotros crecimos en una

cultura que aceptaba a los cristianos. Ser

creyente no era visto con tanto desprecio.

Había oración en las escuelas, el aborto y

el matrimonio homosexual era ilegal y los

únicos lugares que abrían los domingos

eran las iglesias. Ciertamente crecimos

en un tiempo con bastante libertad.

Hoy día anhelamos poder vivir en una

sociedad que no desprecie a los creyentes;

vivir sin aflicciones. Sin embargo,

no confundamos el rechazo con el

sufrimiento. El ser rechazado u ofendido

no es sinónimo de persecución por la

causa de Cristo. Sí, nos incomoda el trato

que la sociedad nos da a los creyentes,

pero en medio de toda esta negatividad u

oposición, debemos cada día solidificar

más nuestra fe.

El desafío de la iglesia en esta cultura pos-cristiana es buscar maneras para compartir el Evangelio con aquellos que resisten a los creyentes y su mensaje. Este es un gran desafío, y confieso que yo mismo no he encontrado la forma para hacerlo. Pero vamos a tomar este desafío con fe y valor confiando en la dirección del Espíritu Santo. Es importante entender que condenar y criticar la cultura y la gente cuya cosmovisión es diferente a la nuestra no es efectivo. Aunque no estemos de acuerdo con otras cosmovisiones, debemos esforzarnos por conocerlas con el fin de establecer relación con quienes se aferran a ellas.

Utilizando la Semana Santa como una analogía, es posible que por algún tiempo la iglesia disfrutó de la alabanza y aceptación de la sociedad, así como el Señor Jesús el Domingo de Ramos. Sin embargo, ahora en esta era pos-cristiana, al igual que nuestro Salvador en el jardín de Getsemaní, nos encontramos pensando en el sufrimiento que nos espera. La cultura ha cambiado. La sociedad que en algún tiempo «abrazó» el cristianismo hoy grita: «¡Crucifíquenlo!» Como seguidores de Jesucristo, ¿en realidad esperábamos otro trato? Así como Cristo murió por aquellos que lo crucificaron, nosotros debemos proclamar Su mensaje a todos.

_____________

1 George Barna y David Kinnaman, eds., Churchless:

Understanding Today’s Unchurched and How to

Connect with Them [Sin iglesias: Comprendiendo

a las personas que no asisten a la iglesia y cómo

relacionarse con ellos] (Austin: Tyndale, 2014), 15.

2 Lyle E. Schaller, A Mainline Turnaround: Strategies

for Congregations and Denominations [Un

cambio de lo tradicional: Estrategias para las

congregaciones y denominaciones] (Nashville:

Abingdon, 2005).

3 Barna, 6-8.

4 David Kinnaman, «Millenials and the Bible» (Los mileniales y la Biblia), revista Leadership Journal

(Summer 2015): 24.

5 J.P. Moreland y William Lane Craig, Philosophical

Foundations for a Christian Worldview [Bases

filosóficas para una cosmovisión cristiana]

(Nashville: Abingdon, 2005).

6 Barna, 6, 7.

7 John S. Burns, John R. Shoup y Donald C.

Simmons, hijo, eds., Organizational Leadership:

Foundations & Practices for Christians [Liderazgo

organizacional: Bases y prácticas para los

cristianos] (Downers Grove: InterVarsity, 2014), 52.

Posiblemente, sin estos avances viviríamos tropezando con las cosas. Gracias sean dadas a Dios por todo esto.

El punto que deseo que usted y yo entendamos es que aunque la iglesia quiera culpar a la sociedad o la cultura por su estado debilitado, no es en su totalidad responsable, aunque como bien dice Schaller no podemos ignorar el impacto que la cultura ha tenido en la iglesia. Schaller también dice que las iglesias que reconocen y modifican y se adaptan a los tiempos son iglesias que tienen éxito.

De ninguna manera estoy diciendo que debemos cambiar el Evangelio o nuestra doctrina, sino que busquemos maneras de alcanzar a aquellos que no son como nosotros. A decir verdad, es bastante ancho el puente que nos separa. Las encuestas muestran que el 10 por ciento de los adultos norteamericanos «nunca han asistido a un servicio cristiano», y esta cifra va en aumento.3 A los creyentes se les hace difícil entender la manera de pensar de aquellos que no conocen a Dios. La diferencia entre la iglesia y el mundo tiene que ver con asuntos relacionados con la política, ciencia, valores morales y Dios.

David Kinnaman, en su artículo en la revista Leadership Journal, dice: «Muchos mileniales (personas entre 18-31 años) se están alejando de la religión. Peor aun, la opinión que tienen sobre la Biblia se ha movido de la indiferencia a escepticismo».4 Las encuestas revelan que entre más joven es la persona, mayor es su resistencia y escepticismo a la Biblia.

Esto tiene mucho que ver con la cosmovisión de un individuo. Este concepto se le adjudica a Immanuel Kant (1724-1804). Una definición moderna sería: «Un conjunto de creencias que usted considera verdaderas y por las cuales rige su vida».5 Todos tenemos una cosmovisión que nos ayuda a ver la realidad de la vida. Debo decir que hay diferentes cosmovisiones. Algunas incluyen a Dios y otras no. Nuestra cosmovisión personal de cómo opera el mundo (con o sin Dios) tiene un impacto directo en la manera en que vivimos. Estoy seguro que más de una vez hemos

26

Jesús utilizó las historias y las

parábolas como métodos de

enseñanza. Cada una de Sus

enseñanzas eran relevantes a

la cultura y fáciles de entender.

«Vosotros sois [la sal y la luz] de la

tierra», le dijo a Sus seguidores en el

Sermón del monte. En otras palabras,

debemos ser agentes de cambio en

el mundo. Las analogías cobran un

significado más profundo cuando

conocemos su significado. Veamos a

continuación:

SalEn un clima árido y caliente

como el del Oriente Medio, la sal era utilizada para preservar la comida durante largos períodos de tiempo. Se acostumbraba preservar la carne para que el calor no la dañara. ¿Cómo preserva la sal la comida? La sal absorbe la humedad de los alimentos y evita el desarrollo de bacterias. La sal conserva. Así como la sal, nuestro rol como creyentes en este mundo pecaminoso es servir de catalizador para propiciar el cambio. En ocasiones, Dios nos coloca en situaciones donde podemos hacer una diferencia. Por ejemplo, el grupo de amigos con quienes pasamos tiempo, los lugares que frecuentamos, las actividades en las cuales participamos, etc. Tenemos acceso a las personas y lugares que otros no tienen.

En los tiempos bíblicos, la sal era consideraba una materia prima muy valiosa y preciosa. La palabra «salario» proviene del latín «salārium». Una porción del salario de un soldado

m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t 27

romano era designada para comprar sal. Los cristianos fuimos comprados al más alto precio —la muerte de Jesús en la cruz del Calvario. Cristo nos ama tanto que entregó Su vida por nosotros y esta es razón suficiente para que le honremos en palabra, conducta y pureza. No somos dueños de nuestra vida porque Jesús pagó un precio alto por nosotros.

Así como la sal y pimienta le añaden sabor a nuestra comida, nosotros tenemos poder para sazonar el mundo con nuestro amor, con la verdad y con nuestro alcance. Amar a otros es difícil porque tenemos que poner sus deseos por encima de los nuestros. Tenemos que sacrificar nuestra propia comodidad para que otros puedan comer, tengan dónde dormir, y agua potable para beber. Recientemente escuché un mensaje que me inspiró: Sólo podemos crecer cuando estamos fuera de nuestra zona de confort. Cuando nos salimos de nuestra propia comodidad, podemos ver a Dios reflejado en otros. La Biblia nos dice claramente que la muerte y la vida están en el poder de la lengua (Proverbios 18:21). En lugar de quejarnos, utilicemos nuestras palabras para expresar palabras de gratitud (Colosenses 3:17).

¿Qué significa ser la sal de la tierra en un mundo lleno de tinieblas y pecado? No tenemos que buscar mucho para ver que esta sociedad ha adoptado un comportamiento anti-bíblico, e incluso lo promueve. No perdamos ánimo ante el mal.

Así como la sal extrae las impurezas, nuestra fe tiene el poder de penetrar el corazón de las personas. La fe pone de manifiesto sus necesidades de oración, su hambre de Dios y hasta su enojo con Dios. Le animo a ceñirse de toda la armadura de Dios (Efesios 6:10-18), dedique tiempo a la lectura de la Palabra y pídale a Dios sabiduría. Recuerde que la Palabra de Dios es

viva y eficaz (Hebreos 4:12). ¡No claudique ante los retos, porque Dios está con usted!

LuzTodos los seres humanos

nacemos con el pecado original —

con una tendencia natural egoísta,

engañosa y perversa. El corazón es

engañoso (Jeremías 17:9) y creo que

hasta nos engañamos a nosotros

mismos, pensando que «somos

buenas personas» (Proverbios 21:2).

No hay duda de que las tinieblas

ocultan muchas cosas, entre ellas

actos repugnantes que hacen algunas

personas y las esconden por vergüenza

o porque simplemente no quieren que

sus familiares lo sepan. Muchas de

estas cosas las hacen en secreto por

vergüenza o descrédito. Pero usted

no se desanime, porque aunque el

mundo vive en oscuridad, jamás puede

ahogar la luz (Juan 1:5). La luz, literal

y figurativamente, expone las cosas

ocultas en la oscuridad.

Cuando le pedimos a Dios que

perdone nuestros pecados y confiamos

en Él, Su presencia (Espíritu Santo)

llena nuestras vidas. Los pecados que

cometimos fueron perdonados y no nos

atan más. Nuestra relación con Dios

se fortalece a través de la oración, la

lectura de la Palabra y la comunión con

otros creyentes.

Somos la luz del mundo cuando

demostramos nuestra fe a través de

nuestras palabras y acciones. Jesús dice

en Mateo 5:14: «Una ciudad asentada

sobre un monte no se puede esconder».

Si en alguna ocasión usted ha tenido la

oportunidad de volar (en avión) en la

noche seguramente ha podido divisar

las grandes ciudades por el alumbrado

de los edificios, los semáforos y tránsito

vehicular. ¡La luz de nuestra fe no

puede ni debe ser ocultada!

Recuerdo que de niño salíamos

a acampar con mi familia. La única

fuente de luz en la noche era una

fogata. Este fuego se convertía en el

centro de nuestro mundo durante la

noche porque nos calentaba físicamente

y creaba un sentido de intimidad.

Me imagino que en los tiempos

bíblicos, cuando caía el sol, las

actividades giraban alrededor de las

lámparas que había en las casas. Así

que, podemos decir que la luz aparte de

ser un recurso valioso, especialmente

si dependemos de lámparas, velas o

una fogata para alumbrarnos, también

proporciona la unidad. Sería un

desperdicio no utilizar este valioso

recurso (Mateo 5:15).

Así como la luz material alumbra,

los cristianos debemos ser la luz de

Cristo y conducir a otros a Dios (Mateo

5:16). Los frutos del Espíritu (Gálatas

5:22, 23) que operan en el creyente

manifiestan el poder de Dios. No me

malinterprete: No «hagamos cosas

buenas» solo para recibir alabanzas

de la gente, más bien obedezcamos

la Palabra de Dios, porque es una

expresión de nuestro amor por Él.

Como hemos mencionado

anteriormente, el mundo está en

tinieblas y día tras día va de mal en

peor. Sin embargo, recordemos que aun

en los lugares más oscuros una pequeña

chispa de luz puede hacer la diferencia.

¡Camine sin temor! Camine con

confianza sabiendo que Dios siempre

está con Sus hijos. La Palabra de Dios

nos dice que Jesucristo vencerá al final.

A pesar del dolor y el sufrimiento en

esta vida, podemos caminar sabiendo

que Cristo ha vencido al mundo.

Ali Feizi

Burnaby, Columbia

Británica

• Recuperar algo perdido o muerto (Salmo 118:17).

• Salir de un estado de apatía y letargo (Efesios 5:14-20).

• Aguardar los mandamientos de Dios que han sido olvidados (Salmo 27:14).

• Revitalizar (Salmo 27:11).

• Restaurar conciencia del poder y la verdad de Dios (2 Crónicas 7:14, 15).

Recursos adicionales para la oración

• The Quest for Revival (La búsqueda del avivamiento), por Ron McIntosh (Harrison House Publications, ISBN: 1577940539).

• Praying with Purpose (Orando con propósito), por E.M. Bounds (Wilder Publications, ISBN: 1604593822).

En Mateo 24, Jesús le habló a Sus discípulos sobre las señales de los últimos días y qué cosas podían esperar antes de Su venida. Este pasaje es un reflejo de los días en los cuales vivimos. Jesús dijo en Mateo 24:36:

«Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre».

Teniendo en mente que la venida de Jesús está hoy más cerca que nunca, deseamos dedicar este mes a la oración para pedirle a Dios que nos envíe un avivamiento de oración que renueve y restaure. ¡No podemos perder la esperanza de un avivamiento! Muchos creyentes e iglesias cristianas han entrado en un «modo de supervivencia», y la supervivencia siempre será un enemigo del avivamiento.

Guías de oraciónA medida que oremos este mes exploraremos el

significado de la palabra «avivar». Mientras lee estos puntos, pídale al Padre que traiga un avivamiento genuino personal, familiar y congregacional. «Avivar» significa:

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La venida del Señor

Puntos de oración: Mayo 2016 Contribuyente: Ina Dilldine

m e n s a j e r o a l a b l a n c a . n e t 29

30 M e n s a j e r o A l a B l a n c a m a y o / j u n i o d e 2 0 1 6

El ministerio del Fondo Ayude a un Niño continúa apoyando mensualmente a los orfanatos, programas de educación, proyectos de construcción y celebraciones en días festivos para nuestros niños en Bielorrusia, Bulgaria, Haití, India, Indonesia, Mali, Myanmar, Nepal, Paraguay, Filipinas, Ruanda, Sri Lanka, Uganda y Ucrania. Constantemente recibimos testimonios de los ministerios en estas naciones, pero en esta ocasión queremos destacar el progreso de la construcción en el campus del hogar de niños en Haití.

La obra en Haití ha sido bendecida a través de la colaboración de la Global Aid Network (GAiN, por sus siglas en inglés) de Alemania y su compromiso de ayudar a reconstruir un centro para niños después de los estragos que dejó el terremoto de 2010. Durante el 2014, se construyeron nuevos dormitorios los cuales inmediatamente fueron ocupados por los niños. En febrero de 2015, GAiN recibió una subvención del gobierno alemán para construir un nuevo jardín infantil en el campus para nuestros niños y los de la comunidad. A finales del año pasado un equipo voluntario de construcción dirigido por el obispo Tim McCaleb, completó el techo del nuevo salón de actividades ubicado en medio de los dos dormitorios.

Mientras llegaban los miembros del comité directivo para la reunión anual a finales de enero de 2016, tuvimos la oportunidad de ver el jardín infantil completado, mientras se preparaban para la celebración del día siguiente.

Al día siguiente, nos reunimos para inaugurar el nuevo edificio para la gloria y obra del Señor. Los niños nos deleitaron con cantos especiales, y el supervisor nacional, el obispo Dorlean, nos dirigió en una oración de dedicación, luego de lo cual se abrieron las puertas para los niños, maestros, el personal y visitas.

La construcción del nuevo jardín infantil fue un proyecto en conjunto entre el Global Aid Network de Alemania, el gobierno alemán y la Iglesia de Dios de la Profecía. El edificio cuenta con tres salones y dos oficinas, una de cuales será para los maestros y la otra una biblioteca y almacén. Queremos darle las gracias al Ministerio de Niños y su proyecto de la Mano que Ayuda para Niños por la donación de libros para la biblioteca. El jardín infantil no solo le servirá a los niños del orfanato, sino también a los niños de la comunidad alrededor quienes no tendrían esta oportunidad sin nuestra escuela.

Tenemos plena confianza de que la construcción ha cumplido con las expectativas del gobierno alemán, y confiamos que sea considerada como un ejemplo para poder recibir otra subvención para la reconstrucción de la escuela. Por favor ore con nosotros pidiéndole a Dios que obre en este asunto. Les compartimos algunas imágenes del día que inauguramos el edificio, prueba de que Dios continúa dirigiéndonos en la reconstrucción del orfanato Ca-Ira.

Dedicación del nuevo jardín

infantil en el orfanato

de Haití

NOTICIAS INTERNACIONALES

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gracias a Dios por esa luz en el camino de mi vida. Muy pronto ella y yo estaremos demasiados viejos para revivir esa experiencia, pero estamos seguros que siempre guardaremos el recuerdo.

Todos caminamos por esta senda de la vida hacia un mismo destino. Al menos que suene la trompeta y seamos transformados y arrebatados sin experimentar la muerte, todos llegaremos a este destino tarde o temprano. Nuestra vida es finita. Durante nuestros primeros años de vida, sólo tenemos un conocimiento limitado de las realidades de la vida. La realidad es que no entendemos lo que es la muerte hasta que no experimentamos la pérdida de algún amigo. Es entonces que nos preguntamos qué nos depara después de la muerte.

A medida que avanzamos en este camino, muchas de las personas que conocemos y amamos irán a su descanso eterno. Cuando éramos niños, la muerte parecía algo muy lejano. Quizá cuando alguien moría, nuestros padres nos tenían que explicar quién era el difunto (un primo segundo que viste cuando tenías dos años). Sin embargo, a medida que envejecemos, la pérdida de un ser querido se convierte en algo más personal, y comenzamos a pensar en el cielo como un lugar de reunión familiar. Aún conservo en mi lista de contactos algunos nombres de personas que ya no están en la tierra. A veces, sin pensar, les he marcado para pedirles algún buen consejo, y de repente me doy cuenta que ya no están aquí.

En medio de toda esta incertidumbre y

IncorruptibleA veces quisiera congelar el tiempo y

preservarlo para que dure un poco más. ¿Alguna vez ha pensado usted lo mismo?

Recuerdo bien claro que una mañana desperté, y lo primero que vi fue la hermosa sonrisa de mi pequeña hija. Los rayos del amanecer entraban por mi ventana iluminando su pequeño rostro. Debo decir que he tenido la oportunidad de contemplar la hermosura del parque natural del Gran Cañón en Colorado y las aguas turquesas del mar Caribe ante un hermoso atardecer; sin embargo, el rostro resplandeciente y alegre de mi preciosa pequeña es una de las cosas más hermosas que he visto en mi vida. Ese día grabé su imagen en mi mente, en vez de tomar la cámara y fotografiarla. La verdad es que una fotografía jamás podrá mostrar o describir perfectamente la hermosura que contemplaron mis ojos.

El tiempo no se detiene, solo deja sus huellas en todos nosotros, y pasa, separándonos de los gloriosos momentos como el que experimenté aquella mañana. Pasarán días, semanas, años y me saldrán arrugas y canas con el pasar del tiempo; no obstante, siempre guardaré esa imagen en mi mente, y le doy

desesperación sobre qué sucederá con nosotros, con nuestros cuerpos corruptibles y con las personas que amamos, Jesús nos manda a no tener miedo. No dice que moriremos eternamente, sino que sólo dormiremos. Cerraremos nuestros ojos y despertaremos en un cuerpo glorificado y renovado, en un mundo nuevo y libre de las restricciones del tiempo y la carne. No habrá dolor, muerte, arrugas, enfermedades, ni despedidas.

«He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria» (1 Corintios 15:51-54).

¿Se imagina lo maravilloso que será el cielo?

DeWayne Hamby

Editor Administrativo

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13 – 17 de julio de 2016 • ROSEN SHINGLE CREEK, ORLANDO, FLORIDALas reservaciones de hotel se pueden efectuar ahora.

Los siguientes dos hoteles están disponibles para que haga su reservación para la Asamblea. Ambos ofrecen wifi y estacionamiento gratuito, y habrá transportación para la Asamblea desde su localidad. Cuando llame para hacer su

reservación mencione que es un delegado de la Asamblea Internacional de la Iglesia de Dios de la Profecía:

Hilton Garden Inn Orlando at SeaWorld6850 Westwood Blvd

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Avanti Resort Orlando8738 International Drive

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Situado a 2.8 millas (4.5 km) del Rosen Shingle Creek

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1-855-828-2684. Diga que es delegado de la Asamblea Internacional de la Iglesia de Dios de la Profecía.

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P.O. BOX 2910

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