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Amartya Sen: Desarrollo y libertad (1) http://www.dilemata.net/index.php/Desarrollo-humano/amartya-sen-desarrollo-y-libertad-1.htmlDesarrollo humano Publicado por Ricardo Parellada Martes 04 de Noviembre de 2008 18:11 Oir este artículo
Por Isabel Romero
El economista Amartya Sen, en su libro ‘Desarrollo y Libertad’, concibe el desarrollo como “un proceso integrado de expansión de las libertades fundamentales relacionadas entre sí, que integra las consideraciones económicas, sociales y políticas y permite reconocer el papel de los valores sociales y de las costumbres vigentes”. Y para ello, se aferra a la idea de que “las libertades no sólo son el fin principal del desarrollo, sino que se encuentran, además, entre sus principales medios”. Reconociendo a su vez la importancia de las relaciones entre los distintos tipos de libertades.
Como ejemplos, cita las siguientes relaciones:
• La falta de libertad económica, en forma de extrema pobreza, puede hacer de una persona víctima indefensa de la violación de otros tipos de libertad, como falta de libertad social, de la misma forma que la falta de libertad social o política también puede fomentar la falta de libertad económica. Ej.: el paro.
Ejemplos que también apoya con la reflexión sobre la relación entre la renta y los logros, es decir, entre la riqueza económica y la capacidad de vivir como queramos. Para ello pone otro ejemplo, en el que Maitreyee, a la que ofrecen tener toda la riqueza que quiere se cuestiona: ¿Para qué me sirve una cosa con la que no voy a volverme inmortal? En su respuesta, Amartya Sen recurre a Aristóles y a su Ética a Nicómano:“la riqueza no es más que un instrumento para conseguir algún otro fin”. Desechando así, una vez más, la idea de que el desarrollo depende exclusivamente del crecimiento económico. “El desarrollo debe ir más allá del crecimiento económico, ya que éste es un instrumento para conseguir otro fin”. Y vuelve a dejar claro su concepción de la libertad, en la que se incluyen tanto los procesos que hacen posible la libertad de acción y de decisión como las oportunidades reales que tienen los individuos.
Otra de sus aportaciones es que “hay que establecer la distinción entre los “resultados finales” (que no tienen en cuenta el proceso por el que se consiguen) y los “resultados globales” (que tienen en cuenta los procesos empleados para llegar a los resultados finales). Y ante esta afirmación propone evaluar los resultados del desarrollo desde la perspectiva de la eliminación de la falta de libertades que sufren los miembros de la sociedad.
Para completar el tema, me centro otra de las cuestiones que muchos se preguntan: ¿El desarrollo humano es un lujo que sólo pueden permitirse los países más ricos? Amartya Sen se atreve a responder: “Lo esencial es que la influencia del crecimiento económico depende mucho de cómo se utilicen los frutos de dicho crecimiento económico. Y cita como ejemplo el hecho de que la esperanza de vida en Kerala, en
comparación a su renta per cápita, es mucho mayor a la de Gabón, Brasil o Sudáfrica, países con una renta per cápita mayor. Otro ejemplo es el estudio que refleja que los afroamericanos sufren una privación desde el punto de vista de la renta per cápita frente a los americanos blancos, y además sufren más privaciones en términos absolutos que los indios de baja renta de Kerala (tanto hombres y mujeres) y los chinos (en el caso de los hombres) en lo que se refiere a vivir hasta edades avanzadas. Hechos que nuevamente le sirven para afirmar que “estos contrastes tienen una considerable relevancia para la política económica y social y ponen de relieve la importancia del proceso impulsado por la política social”, a la hora de estudiar el desarrollo.
Para finalizar, de sus ideas extraigo las siguientes conclusiones:
• El aumento de la libertad del hombre es tanto el principal objetivo del desarrollo como su medio primordial. • El objetivo del desarrollo está relacionado con la valoración de las libertades reales de que gozan los individuos. • Esas capacidades individuales dependen de los sistemas económicos, políticos y sociales.• Los individuos han de verse como seres que participan activamente en la configuración de su propio destino, no como meros receptores pasivos. • El Estado y la sociedad deben salvaguardar las capacidades humanas, crear buenos mecanismos institucionales.
Sin embargo, hay una afirmación que Amartya Sen hace y que yo me planteo bastante: “Una economía pobre puede tener menos dinero para gastar en sanidad y en educación, pero también necesita menos dinero para prestar esos mismos servicios, que costarían mucho más en los países más ricos”.
¿Cómo puede ser esto? ¿A costa de qué? Porque puede que la sanidad y la educación les llegue a todo el mundo… Pero si no se invierte en máquinas, en investigación, siempre habrá un retraso con respecto a los países ricos, por eso tal vez cueste menos en unos y más en otros. Y ¿qué es mejor?
Comments (4) Desarrollo, decrecimiento y crisis 4 Lunes 19 de Enero de 2009 16:33 ricardo
Me parece que la presentación breve de la noción de desarrollo y de algunas ideas de Sen de I. Romero son adecuadas y suficientes para plantear problemas de gran relevancia en estos momentos de crisis económica. Una vez que aprendemos la desconexión frecuente entre indicadores económicos e indicadores de bienestar, no debemos dejar de insistir en que no se identifiquen unos y otros. En el contexto actual, debemos exigir que no se consideren definitivos (¿para qué?) los datos sobre el crecimiento o el decrecimiento del PIB. Debemos demandar que los políticos, los economistas y los medios de comunicación aborden de maneras comprensibles para la opinión pública cuestiones como las siguientes: ¿cómo se mide el crecimiento?, ¿el crecimiento significa bienestar?, ¿conlleva la atención a las necesidades básicas?, ¿no se
puede aprovechar la crisis del automóvil para reconducir su modelo industrial y reducir su impacto ecológico negativo?, ¿no se puede aprovechar el parón del consumo para buscar patrones más razonables y sostenibles?
Parece imprescindible plantear el debate a fondo sobre el decrecimiento (señalado por Irina) o, al menos, sobre la viabilidad y el aprovechamiento de una estabilización de la rente por habitantes en contextos de desarrollo alto para la atención a lo prioritario, que no es efecto automático del crecimiento económico.
Sobre el desarrollo humano 3 Sábado 17 de Enero de 2009 16:56 Beatriz Ortiz
El ejemplo aportado por Sen sobre la mayor esperanza de vida en la provincia de Kerala (India) en comparación con la de otros países cuya renta per cápita es más alta (como la de Gabón, Brasil o Sudáfrica) me parece un claro ejemplo de que el desarrollo humano no es algo que sólo puedan permitirse los países ricos. Las prioridades a la hora de invertir los frutos del crecimiento económico son fundamentales para el desarrollo. La prioridad puede ser favorecer un desarrollo humano de la población y no utilizar el crecimiento económico sólo para fomentar más el crecimiento económico. Es decir, este ejemplo muestra que existen otro enfoques del desarrollo alejadas del enfoque economicista y que han sido empíricamente demostrables (al caso de Kerala se suma el de la provincia argentina de Neuquén). Estos nuevos enfoques se centran en la satisfacción de las necesidades humanas como prioridad ética y requisito fundamental para el funcionamiento de la economía y son posibles a pesar de que exista una renta baja siempre y cuando los gobernantes estén comprometidos con el bienestar de su población y no con el enriquecimiento de sus bolsillos, de las empresas nacionales o transnacionales (que es lo que suele pasar). El hecho de fomentar el desarrollo humano de esta manera me hace pensar que también sería posible que a partir de ahí el propio país pueda desarrollarse “a su manera” con el impulso del desarrollo humano de sus ciudadanos puesto que permitiría que fueran los protagonistas de su propio desarrollo. Al mismo tiempo, este desarrollo sería integral ya que el propio desarrollo humano impulsaría el desarrollo del resto de los sectores por lo que no se generarían “distintas velocidades”.
Artículo: Kerala y Neuquén: dos oasis de desarrollo humano
Sobre el desarrollo "en general" 2 Sábado 03 de Enero de 2009 13:32 Irina
Muchas veces hablamos de cómo todos y todas tendríamos que tener un desarrollo similar. Pero, ¿puede esto ser real? No estamos hablando, creo, de metas realistas para todos los países puesto que medimos lo que es el desarrollo todavía desde una perspectiva economicista que es imposible de alcanzar para todos. De hecho, se habla del "decrecimiento" necesario que tendríamos que hacer para nosotros mismos (los países desarrollados) poder vivir y sobrevivir a una serie de contradicciones internas que
parece no queremos ver pero que son muy importantes.
Puede que las teorías de las capacidades, pues ya hemos visto que existen distintas versiones y conversaciones en torno a ellas, nos ayuden a implementar mejor la concepción de desarrollo en todo el mundo. Estoy de acuerdo en que los conocimientos que tenemos no tienen por qué ser los mejores ni los más válidos para todos. Y que, bajo una capa de menosprecio, no permitimos que sus concepciones de desarrollo impregnen las nuestras, o bien las disfrazamos para que parezcan "nuestros" progresos (veáse la variedad agrícola que nos han otorgado durante siglos los países que nosotros denominamos no desarrollados, que tenemos que "salvar", pero que producían de una forma de la que ahora está aprendiendo, o más bien robando, la denominada agrotecnología).
Desarrollo, conocimiento y circunstancias socioculturales específicas 1 Jueves 06 de Noviembre de 2008 03:34 Félix Redondo Casado En cuanto a la última pregunta que plantea Isabel Romero parece evidente que el desarrollo tiene diferente grado de dificultad para cada uno de los países. Pero también podemos añadir que los más desarrollados cuentan con una posición privilegiada con respecto a los menos. Esto implica que los países más pobres necesiten de unos conocimientos cada vez más técnicos y precisos que les permitan poder desarrollar una industria propia. El problema que planteo es que estos conocimientos que generan los países avanzados no implican una validez automática para todas las sociedades del mundo. Es necesario que cada comunidad cultural adapte los avances científicos a su realidad social. Y ello, es ciertamente difícil, en la medida en que cada sociedad tiene unas circunstancias muy específicas, puesto que el desarrollo, entendido como una suma de variables -sociales, educativas, culturales, políticas...- no es homogéneo para todos.
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Amartya SenDe Wikipedia, la enciclopedia libre
Saltar a navegación, búsquedahttp://es.wikipedia.org/wiki/Amartya_Sen
Amartya Sen.
Amartya Kumar Sen (अअअअअअ अ अअअअअ अअअ) (* 3 de noviembre de 1933 en Shantiniketan, India) es un economista bengalí, conocido por sus trabajos sobre las hambrunas, la teoría del desarrollo humano, la economía del bienestar y los mecanismos subyacentes de la pobreza. Recibió el premio Nobel de Economía en 1998 y el Bharat Ratna en 1999 por su trabajo en el campo de la matemática económica.
Contenido
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• 1 Biografía • 2 El concepto de capacidad • 3 Publicaciones de Amartya Sen
o 3.1 Ediciones en español • 4 Publicaciones sobre Amartya Sen • 5 Véase también
• 6 Enlaces externos
Biografía [editar]
Estudió en la India antes de trasladarse al Trinity College de Cambridge, donde se licenció en 1956 y se doctoró en 1959. Fue profesor de economía en las universidades de Calcuta, Delhi, Oxford y Harvard. Entre 1997 y 2004 fue doctor del Trinity College de Cambridge. En enero de 2004 volvió a Harvard, donde imparte clases actualmente.
A finales de la década de los 60 y principios de los 70, los escritos de Sen ayudaron a definir el campo de la elección social. Su contribución en la teoría social de Kenneth
Arrow fue mostrar en qué condiciones el teorema de imposibilidad de Arrow puede ser útil para extender y enriquecer el campo de la elección social.
La obra más reconocida de Sen es su ensayo Pobreza y hambruna: un ensayo sobre el derecho y la privación (Poverty and Famines: An Essay on Entitlements and Deprivation) de 1981, en el cual demostró que el hambre no es consecuencia de la falta de alimentos, sino de desigualdades en los mecanismos de distribución de alimentos. Aparte de su investigación sobre las causas de las hambrunas, su trabajo en el campo del desarrollo económico ha tenido mucha influencia en la formulación del índice de desarrollo humano (IDH) de las Naciones Unidas.
Sen es una excepción entre los economistas del siglo XX por su insistencia en preguntarse cuestiones de valores, abandonadas en la discusión económica "seria". Planteó uno de los mayores desafíos al modelo económico, que sitúa el interés propio como un factor fundamental de la motivación humana.
Si bien su escuela continúa siendo minoritaria, ha ayudado a redirigir planes de desarrollo y hasta políticas de las Naciones Unidas.
El concepto de capacidad [editar]
El más revolucionario de los aportes de Sen en el desarrollo de los indicadores económicos y sociales es el concepto de capacidad.
Un gobierno tiene que ser juzgado en función de las capacidades concretas de sus ciudadanos. Por ejemplo, en los Estados Unidos, los ciudadanos tienen el derecho constitucional a votar. Para Sen esto no significa nada; él se pregunta si se reúnen todas las condiciones para que los ciudadanos puedan ejercer la capacidad de votar. Estas condiciones pueden ser de muchos tipos, desde el acceso a la educación hasta el hecho de que los ciudadanos tengan medios de transporte para tener acceso a las urnas. Sólo cuando estas barreras estén superadas se puede decir que el ciudadano puede ejercer su elección personal.
Su aproximación basada en las capacidades se enfoca en la libertad positiva, que es la capacidad real de una persona de ser o de hacer algo, en vez de la libertad negativa, que es común en economía y se centra simplemente en la no interferencia. En la hambruna de Bengala, la libertad negativa de los trabajadores rurales para comprar alimento no se vio afectada. Sin embargo, murieron de hambre porque no estaban positivamente libres para hacer cualquier cosa: ellos no tenían la libertad de alimentarse ni la capacidad de escapar de la muerte.
Para un ejemplo práctico del concepto de capacidad, véase el libro Mujeres y desarrollo humano, de Martha Nussbaum.
Publicaciones de Amartya Sen [editar]
• Pobreza y hambruna: un ensayo sobre el derecho y la privación (Poverty and Famines: An Essay on Entitlements and Deprivation), Oxford, Clarendon Press, 1982.
• Opción, bienestar y medidas (Choice, Welfare and Measurement), Oxford, Basil Blackwell, 1982.
• Economía y derecho de alimentación (Food Economics and Entitlements), Helsinki, Wider Working Paper 1, 1986.
• Sobre ética y economía (On Ethics and Economics), Oxford, Basil Blackwell, 1987 (edición española: Alianza Editorial, ISBN 84-206-6735-8).
• Desarrollo como libertad (Development as Freedom), Oxford, Oxford University Press, 1999.
Ediciones en español [editar]
• Sen, Amartya Kumar (2007). La argumentación india. Editorial Gedisa. ISBN 978-84-7432-832-5.
• Sen, Amartya Kumar (1997). Bienestar, justicia y mercado. Ediciones Paidós Ibérica. ISBN 978-84-493-0362-3.
• Sen, Amartya Kumar (2000). Desarrollo y libertad. Editorial Planeta. ISBN 978-84-08-03524-4.
• Sen, Amartya Kumar (1976). Elección colectiva y bienestar social. Alianza Editorial. ISBN 978-84-206-2154-8.
• Sen, Amartya Kumar (2007). Identidad y violencia: la ilusión del destino. Katz Barpal Editores. ISBN 978-84-935432-7-3.
• Sen, Amartya Kumar (2001). El nivel de vida. Editorial Complutense. ISBN 978-84-7491-604-1.
• Sen, Amartya Kumar (1995). Nueva economía del bienestar. Universidad de Valencia. Servicio de Publicaciones. ISBN 978-84-370-2317-5.
• Sen, Amartya Kumar (1995). Nuevo examen de la desigualdad. Alianza Editorial, S.A.. ISBN 978-84-206-6814-7.
• Sen, Amartya Kumar (2004). Nuevo examen de la desigualdad. Alianza Editorial, S.A.. ISBN 978-84-206-2951-3.
• Sen, Amartya Kumar; Stiglitz, Joseph Eugene; Zubero Beascoechea, Imanol (2007). Se busca trabajo decente. Ediciones Hoac. ISBN 978-84-85121-94-6.
• Sen, Amartya Kumar (2003). Sobre ética y economía. Alianza Editorial, S.A.. ISBN 978-84-206-6735-5.
• Sen, Amartya Kumar (1979). Sobre la desigualdad económica. Editorial Crítica. ISBN 978-84-7423-107-6.
• Sen, Amartya Kumar (2006). El valor de la democracia. Ediciones de Intervención Cultural. ISBN 978-84-96356-57-3.
Publicaciones sobre Amartya Sen [editar]
• Cortina, Adela; Pereira, Gustavo (2009). Pobreza y libertad. Erradicar la pobreza desde el enfoque de Amartya Sen. Tecnos. ISBN 978-84-309-4830-7.
• Sánchez Garrido, Pablo (2008). Raíces intelectuales de Amartya Sen: Aristóteles, Adam Smith y Karl Marx . Centro de Estudios Políticos y Constitucionales. ISBN 978-84-25914-23-2.
Véase también [editar]
• Filosofía de la economía • Índice de Atkinson • Liberalismo • Teoría del desarrollo
Enlaces externos [editar]
• Wikimedia Commons alberga contenido multimedia sobre Amartya Sen.Commons
• Debates sobre teorías del capital por Amartya Sen (pdf)• La democracia como valor universal por Amartya Sen (pdf)• El futuro de Estado del bienestar por Amartya Sen• Globalmente resignados por Amartya Sen (pdf)• Juicios sobre la globalización por Amartya Sen• Justicia global. Más allá de la equidad internacional por Amartya Sen• Seguridad humana ahora Entrevista con Amartya Sen• Sobre Amartya Sen Enlaces y artículos de Amartya Sen (pdf)
Obtenido de "http://es.wikipedia.org/wiki/Amartya_Sen"Categorías: Economistas de la India | Liberales | Nacidos en 1933 | Premio Nobel de Economía | Socialdemocracia
http://patflowerpower.blogspot.com/ http://lafanzine.blogspot.com/
viernes 25 de septiembre de 2009
IDENTIDAD Y VIOLENCIA La ilusión del destino- AMARTYA SEN -.UN MUNDO DESBOCADO-ANTHONY GIDDENS -.PATRICIA MAESTRO CUETO
COMENTARIO / RESUMEN:
IDENTIDAD Y VIOLENCIA (LA ILUSIÓN DEL DESTINO) AMARTYA SEN.
Comienza con la idea del concepto de “identidad”, que como casi
todos los conceptos, no es visto con único sentido en la sociedad
mundial. Según Sen, el sentido de identidad puede ser positivo, es
decir, fuente de orgullo, alegría, fuerza y confianza; por lo que suele
recibir una admiración amplia y generalizada en diversos ámbitos:
desde amar al prójimo hasta teorías del capital social y la
autodefinición comunitaria. O bien negativo, pues la identidad
también puede matar.
Sentir que perteneces a una categoría social llevada al extremo
puede conllevar una percepción de distancia y de divergencia
respecto de otros grupos. E incluso llegar a transformar al sujeto. En
palabras del autor: “la violencia se fomenta mediante la imposición
de identidades singulares y beligerantes en gente crédula”.
Así mismo, también nos dice que concentrarnos en identidades
particulares puede fomentar nuestros lazos y conseguir hacer muchas
cosas por lo demás. Y, por otro lado, hacer que seamos más
egocéntricos, estando sumergidos en nuestras vidas sin mirar lo que
hay alrededor.
El tema del capital social, profundizado por Robert Putman,
expresa que dentro de una comunidad social, si te identificas con los
demás, probablemente la vida de todos sea mejor dentro de esa
comunidad, pues el sentido de pertenencia a una comunidad es
considerado un recurso, como el capital. Y puede excluir a mucha
gente mientras acepta sin contemplaciones a otra.
Curiosamente, las identidades dicotomizadas socialmente y
gracias a sus “líderes” que descomponen los conceptos de libertad y
democracia en la mente de sus soldados, recurren a métodos
antidemocráticos y contrarios a los derechos humanos, que deberían
(en teoría y en práctica) ser universales, por una concepción
totalmente errónea:”SON UNA RAZA DISTINTA DE LA NUESTRA”
•SON=Ellos=Excluyente.
•RAZA=Término a veces despectivo en la historia mundial.
•DISTINTA=Diferente, no igual.
•NUESTRA=De nosotros->Afianza lazos internos.
Cuando realmente, no tienen en cuenta que la verdad única es que
todos pertenecemos a la RAZA HUMANA. Sen se pregunta por un
remedio contra la identidad, pero también tiene en cuenta que la
identidad en sí no es buena ni mala, lo único a lo que podemos
atribuir estos términos a es a la manera en que usamos la identidad.
Llega a la conclusión de que debemos desafiarla con identidades
competidoras, es decir, la elección de nuestras identidades.
Es complicado, cuando desde el mundo intelectual
(supuestamente más avanzado) se respalda la identidad como por
ejemplo lo hacen los comunitaristas cuando dicen que la identidad de
comunidad es cuestión de autorrealización, dejando la elección a un
lado (como si no pudiéramos elegir y todo viniese ya
predeterminado), y casi dirían innata, pues para ellos “no hay
necesidad de que la voluntad humana participe”. Rutinariamente
pertenecemos a muchos grupos sociales y con ellos vamos formando
nuestra propia identidad, no es una sola en especial, sino la mezcla
de todas ellas. No debemos permitir que una sola de las categorías
sea la única que nos defina.
Tenemos libertad para priorizar nuestras lealtades a las diferentes
categorías/grupos sociales a los que queremos pertenecer, y esa
libertad es lo más importante (una vez un profesor que tuve me dijo
que todos los días podemos decidir quiénes somos con nuestras
acciones). Pero no todo es tan bonito, la libertad también tiene
restricciones que la coaccionan. Aún siendo así podemos elegir dentro
de esas restricciones, debemos decidir qué importancia adjudicamos
a una identidad respecto de las demás a las que podemos pertenecer.
Según Sen, más difícil que saber quién queremos ser, es hacerles
saber a los demás quiénes somos. Sinceramente no estoy convencida
de que eso sea importante, creo que los demás te verán como
quieran verte y que sólo la conversación de tu a tu, y el tiempo,
pueden demostrar cómo creen los demás que eres y cómo crees tú
que son los demás. Así que, lo único que puedes hacer es esperar que
los demás confíen en ti el tiempo suficiente para poder demostrarles
cómo eres. Lo malo esque en este mundo tan masificado en el que
parece que todos tienen prisa, a menudo no se le dedica demasiado
tiempo a conocer a los demás y ni tan siquiera a ti mismo. Algunos
jóvenes, adoptan una u otra identidad y la llevan al límite, por
ejemplo, identidades que no conocen realmente, identidades ligadas
a sucesos históricos y políticos que no han vivido y que se creen con
derecho a hacer perdurar. Tal vez sea la edad, la incultura, la
inocencia, el ambiente…realmente no lo sé. Amartya dice que atribuir
determinadas características a un grupo específico puede acabar con
su persecución y muerte. Lo que nos lleva a tener en cuenta la
importancia una vez más, de la elección y el razonamiento en la
reflexión de la identidad.
Suponer que las elecciones no son posibles implica la aceptación
acrítica de la conducta conformista que protege a las viejas
costumbres y prácticas del examen inteligente. Muchas de éstas
prácticas aún sobreviven, como la discriminación sexista o la racial,
por esquemas anticuados no sometidos a crítica racional.
Nos queda la esperanza de que la racionalidad y el sentido común,
alejados de los esquemas tradicionales, hagan desaparecer estas
atrocidades. Amartya tiene fe en ello, nos remite a 1874 cuando
Stuart Mill publicó “el sometimiento de las mujeres”, que en aquel
momento se consideró como prueba final de su excentricidad y que
hoy tenemos claro que ese sometimiento existió y aún existe.
Otra polémica supone la tesis del “choque de civilizaciones” de
Huntington que depende únicamente de una sola categorización y su
poder, a la que incorpora también las diferencias religiosas. Hay
muchas otras categorías a las que uno puede pertenecer y la religión
no tiene porqué ser una de ellas, si bien a lo largo de la historia del
ser humano ha tenido relevancia, hoy (como siempre) somos algo
más que una u otra fe y si nos dedicamos a dar importancia a la
religión como elemento disgregador, lo único que conseguiremos será
darle importancia a algo que no la tiene a nivel político. No somos “un
conjunto de casilleros rígidos”. Y mucho menos podemos
considerarnos de una civilización u otra, pues en realidad las
civilizaciones no serían tales sin el paso del hombre por el mundo.
Parece que nos empeñamos en crear fronteras y muros que no hacen
otra cosa salvo coartar la libertad del ciudadano del mundo.
Es curioso como el punto de partida parece ser el mismo tanto
para los “diálogos entre civilizaciones”, como para las tesis de un
choque de ellas, y ese, es que hay una división que debería ser
“univisión”, es decir, pensar el mundo como una sola civilización
humana o como un conjunto de ciudadanos cosmopolitas.
Cada persona se ve a sí misma de diferentes modos. Y los demás
tendemos a encasillarlas, a encarcelarlas en una sola identidad,
fomentando así las partes diferentes o comunes entre nosotros. Ese
fomento puede llevarnos odiar o amar a los demás, basándonos en un
prejuicio sobre el que construimos toda una personalidad. Atribuimos
a la historia compartida un sentido de filiación, como si el haber
vivido en las mismas circunstancias o tiempos nos uniera a aquellos
que los han compartido y separaran de los demás. Esas mismas
circunstancias a veces (como en Ortega) tienen un carácter de
coacción, que no dejan al individuo SER libremente.
No hay que dejarse caer en los reduccionismos ni “indiferencia
hacia la identidad” ni “filiación singular” claro que tenemos nuestras
lealtades, pero también somos seres racionales con capacidad de
crítica y elección. A mi parecer el ser humano es sedentario en sus
costumbres pero no está restringido por ellas, sino que puede
“nomadizárse” en cualquier momento, dejando de lado sus ataduras
y liberando su mente para convertirse en un narrador
omniscientemente viajero y valeroso vagar por la sociedad en busca
de respuestas.
Sen recure a las diferentes identidades de una persona, creo que
cada persona tiene su propia identidad, compuesta de diferentes
identidades, cada una, con menor o mayor intensidad.
El autor dice que hay ocasiones en las que debemos plantear las
diferentes opciones que tenemos y decantarnos por alguna, y que esa
decisión dependerá del valor que adjudicamos a esas identidades.
Cuando en realidad cada día tomamos miles de decisiones y no todas
ellas de modo consciente ¿Quiere decir esto que identidades que
nuestro inconsciente ha asimilado de un modo más intenso, tienen
poder para elegir?¿Tienen estas identidades inconscientes algo que
ver con la masificación social y mediática?
Todo trata de influencias, y como elegimos dentro de restricciones
particulares, la manera que tenemos de vernos puede influir tanto
como las influencias externas sobre nuestra razón práctica, pero no
sabemos en qué dirección. Por ese motivo la necesidad de pensar se
introduce de modo decisivo en las elecciones basadas en la identidad.
A menudo la gente piensa en su territorio-comunidad como una
extensión del yo. Versiones del pensamiento comunitarista suponen
que la identidad con la propia comunidad debe ser la identidad
dominante que tiene una persona. Esto se relaciona con dos
razonamientos:
-1.Que una persona no puede concebir otras identidades
independientes a la comunidad y que a su vez ésta determina sus
patrones de razonamiento y ética que tiene a su disposición.
-2.Que dice que la identidad es cuestión de descubrimiento y que
la identidad comunitaria si se hicieran comprobaciones saldría
victoriosa en cuanto a importancia.
Respecto a la segunda tesis, Sen nos dice que no podemos
“descubrir” cuál es la verdadera identidad de cada uno, sino que
debemos, mediante decisiones (qué y cómo) dar cavidad a nuestras
diferentes lealtades en la vida. Y darnos cuenta de que la comunidad
no puede resolver quienes somos, sino que debemos tener a las
influencias como lo que son, influencias. Descubrir algo de uno
mismo, no implica que ese descubrimiento nos exima de la elección.
Volviendo a la problemática de la tesis de Huntington, Sen nos
muestra como incluso el punto de partida del autor de la teoría del
choque de civilizaciones está equivocado. Porque parte de la idea de
que se puede dividir a los habitantes del mundo en distintas
civilizaciones a las que “pertenecemos”. Desde la perspectiva de
Huntington, “las relaciones entre las diferentes personas del mundo
pueden verse, de modo reduccionista, como relaciones entre las
respectivas civilizaciones a las que supuestamente pertenecen”. Hay
que ser cuidadosos pues incluso quien se opone a esta tesis, si lo
hace partiendo desde el mismo punto de vista, reduciéndolo todo a
clasificaciones en civilizaciones, pueden contribuir a su sustento. El
camino hacia el entendimiento de la población mundial no es la
división civilizacional, que además de ir en contra de nuestra
humanidad compartida, debilita el resto de nuestras identidades. “La
pobreza descriptiva del enfoque va más allá de su errónea confianza
en la singularidad”. Huntington dice que Occidente era Occidente
antes de ser moderno, alegando “un sentido de individualismo y una
tradición de derechos y libertades individuales únicos entre las
sociedades civilizadas” pero en realidad en el análisis cultural de
Occidente la idea de la división de civilizaciones no está tan
arraigada. Un ejemplo de ello lo tenemos en” la decadencia de
Occidente” de Oswald Spengler en el que sostiene que podríamos
imaginar a los filósofos clásicos: Sócrates, Epicuro y Diógenes
sentados en la ribera del Ganges, mientras que en una gran ciudad
occidental sería un tonto sin importancia.
De la misma manera, la tesis de Huntington no se sostiene
empíricamente, aunque si que es veraz que la tolerancia y la libertad
son los principales logros de la Europa moderna. Aún así no podemos
ver una línea divisoria única y milenaria. Según Sen, la defensa de la
libertad y la tolerancia ha sido mundial, y no solo occidental como
propone Huntington. A menudo se ha considerado que la democracia
es una idea occidental, que nada tiene que ver con el mundo no
occidental y del mismo modo, se manifiestan dudas acerca de que las
naciones occidentales puedan “imponer” la democracia. De todas
formas, la idea de imposición implica pensar que la democracia
pertenece a Occidente, esencialmente occidental, con su origen y
florecimiento solo en Occidente.
No hay duda de que los conceptos modernos de democracia y
deliberación pública han sido influenciados por lo análisis y las
experiencias europeas (ilustración) y estadounidenses en los últimos
siglos. Muy extraño sería extrapolar estas experiencias recientes al
pasado para construir una dicotomía esencial entre Occidente y no
Occidente. La creencia en la naturaleza occidental de la democracia
se vincula a la primera democracia de Grecia, la que fue
trascendental, pero Sen desconfía de los siguientes pasos de la
democracia hasta llegar a nuestros días y a la suposición de que ésta
es tan solo occidental o europea. Y nos da tres razones:
-1. Arbitrariedad de la clasificación de las civilizaciones en
términos raciales.
-2. El modo de retomar la democracia griega: no hay datos de que
este modelo fuese recogido por los países al oeste de Grecia y roma.
Mientras que en Asia si que incorporaron elementos de ella.
-3. La democracia no solo son votos y elecciones, también
razonamiento y deliberación públicos.
La idea de democracia es perteneciente a todo el mundo, no solo
al mundo occidental.
Hay que tener en cuenta que el Renacimiento y la Ilustración
europeos, tuvieron un gran aporte de las ciencias no occidentales,
aunque también es cierto que ha habido en los últimos siglos un gran
progreso de ideas y conocimientos en Europa y Estados Unidos. Sen
le concede crédito al mundo occidental por sus logros en el
Renacimiento, la Ilustración y la Revolución Industrial por transformar
la naturaleza de la civilización mundial. Pero califica de grave ilusión
pensar que fue tan solo Occidente, quien trajo el florecimiento.
Amartya piensa que la creencia en la división civilizacional es
imperfecta por dos razones:
-1. El problema metodológico: en el que se presupone que la
identidad de civilización debe enterrar las otras identidades del
sujeto. Pues aquellos que fomentan la violencia sectaria, tratan de
imponer una sola identidad disgregadora.
-2. La división entre civilizaciones se basa en descripciones toscas
y ningún conocimiento histórico.
Las recientes tesis del choque de civilizaciones, tienden a basarse
en la diferencia de religión como la característica central de las
diferentes culturas. Además de concebir a los humanos en una sola
filiación y no considerar la interrelación entre las supuestas diferentes
civilizaciones, estas teorías fallan también al no considerar la
heterogeneidad de las religiones que tienen todos los países y casi
todas las civilizaciones. No podemos asignar una religión única a una
civilización o país y mucho menos considerarlo como lo más
importante.
Actualmente, es muy común en el análisis cultural considerar a los
individuos según sus filiaciones religiosas. Pero ¿Es una manera útil
de comprender la humanidad? Definitivamente no. Cae el en mismo
error, no se puede ver al ser humano en una única filiación. Según
Sen:”la necesidad crucial de registrar las identidades plurales de las
personas y su elección de prioridades tiene más valor que el
reemplazo de las clasificaciones civilizacionales por una
categorización basada en la religión”. Cada vez es más común el uso
de las identidades religiosas como principio esencial de clasificación,
y esto genera mucha torpeza en el análisis social y una gran pérdida
de comprensión, pues una cosa es las diversas lealtades de una
persona y otra, su identidad religiosa en particular. Centrarse tan solo
en la religión de una persona hace que nos perdamos el resto de sí y
sus preocupaciones.
Hay diferencias en el comportamiento social de las personas que
pertenecen a una misma religión, pero no deben verse simplemente
como rasgos de un nuevo fenómeno producto de la modernidad, sino
como una decisión de estilo de vida. Las actitudes ante la tolerancia
religiosa han tenido una gran importancia en la historia del mundo,
aunque se puede encontrar muchas diferencias entre las personas de
una misma religión, pues ser de una religión u otra no supone una
identidad capaz de abarcar todos los aspectos de la vida de una
persona. Un individuo tiene la suficiente libertad independientemente
de la fe que tenga, para tomar sus propias decisiones.
También hay que distinguir entre:
-1. Ver a una persona en términos de su religión unicamente.
-2. Comprender y tomar en cuenta las filiaciones que esa persona
pueda tener.
Y hay también razones para hacerlo:
-1. El valor del conocimiento de lo que está pasando. Comprender
las consecuencias de los pensamientos y las acciones, que consiste
en no confundir “el papel de una identidad religiosa particular y las
diversas prioridades que una persona de esa religión particular podría
elegir.
-2. La distinción es importante contra la politización de la religión
en un mundo cada vez más polarizado.
-3. Nos permite comprender mejor lo que pasa dentro de los países
encasillados religiosamente por lo demás, como si con esa casilla se
pudiese explicar los desarrollos intelectuales que hoy tiene allí.
-4. Hay que tenerla en cuenta en las batallas contra el terrorismo
que se dan hoy y que tienen efectos muy contraproducentes.
El terrorismo y los conflictos crean en la sociedad actual una gran
ansiedad, pues las amenazas son reales y hay que hacer algo para
superar éstos peligros. Han sido tomadas medidas de intervención
militar que poco o nada han ayudado. Pero aquí hay aspectos más
interesantes del enfoque global como la consideración de políticas
públicas relacionadas con la cultura y la sociedad civil. La división
religiosa del mundo da como resultado una concepción falsa de los
pueblos y sus relaciones e intensifica las distinciones particulares y
que excluye lo verdaderamente importante.
El efecto del enfoque político y de las políticas institucionales en la
religión ha sido fortalecer la voz de las autoridades religiosas,
quitándosela a los movimientos e instituciones que no lo son. Pensar
el ser humano en una única singularidad identificativa hace
dificultosa la superación del terrorismo y la creación de un mundo sin
violencia de base ideológica. Y que los reclutadores de terroristas
pretendan hacer olvidar, las otras identidades de los reclutas y el
deber (y derecho) de tomar decisiones acerca de moralidad y política
además de la responsabilidad que conlleva, no ayuda nada. “Al
desacreditar las identidades política y social por oposición a la
identidad religiosa, la sociedad civil ha sido la perdedora,
precisamente en un momento en que existe una apremiante
necesidad de fortalecerla”.
Muchos son los que reniegan del occidentalismo y de las ideas
occidentales. Esto es debido en parte al colonialismo, pues durante
siglos, el imperialismo occidental generó una obsesión con Occidente
que se manifestaba en imitación u hostilidad. También hay que
reconocer los graves abusos a los que fueron sometidos, como el
maltrato, la explotación o la humillación, junto con un sentimiento de
inferioridad, que hoy animan a los antioccidentalistas. Pero debemos
darnos cuenta de que el ojo por ojo no sirve de nada y que llevar una
vida dominada por el resentimiento es injusto para con uno mismo.
Según Sen, la mente colonizada se obsesiona parasitariamente con
sus potencias coloniales y esto es malo para la autocomprensión,
creando una “autopercepción reactiva” que se inmiscuye en los
asuntos actuales y provocando:
-1.innecesariamente alentar una hostilidad hacia ideas mundiales
que se creen tan solo occidentales.
-2.la lectura errónea de la historia científica e intelectual.
-3.incrementar el fundamentalismo religioso y el terrorismo
internacional.
Estos puntos de vista “antioccidentales” realmente son un intento
de independización del dominio colonial que puede verse como una
especia de venganza de Occidente y la búsqueda de justicia. Más
positivamente puede manifestarse intentando alcanzar Occidente.
Una reacción a la afirmación de que Occidente es la cuna de la
libertad y la democracia, se define como “valores asiáticos” que se
supone atesoran la disciplina y el orden.
Por otra parte Amartya cuenta que el ministro de Relaciones
Exteriores de Singapur advirtió que “el reconocimiento universal del
ideal de derechos humanos puede ser dañino si el universalismo es
utilizado para negar o enmascarar la diversidad”. Pero a mí no me
queda muy claro, qué es más importante la diversidad o los derechos
humanos, primero hay que proteger la integridad de los seres
humanos y luego la diversidad, no me parecen permisibles algunos
aspectos de ciertas culturas y realmente no me vale con decir:¿qué
problema hay? Es su cultura…no me parece normal la circuncisión
femenina, ni la lapidación pública, de hecho creo que los derechos
humanos son UNIVERSALES y están por encima de la cultura de cada
uno. Es como si yo ahora (en nombre de un supuesto dios) escribo un
libro donde ponga que hay que cortar el glande a todos los hombres.
En el último siglo el continente más turbulento ha sido África, pues
ha tenido que sufrir la dominación occidental y su papel
obstaculizante del desarrollo y crecimiento de las economías
africanas (límites artificiales, mercados de exportación y el peso de
las deudas) además de la guerra fría que se libró allí con sus
correspondientes dictadores apoyados pos superpotencias. Por suerte
esto está cambiando gracias al postapartheid. Pero la presencia
militar de Occidente en África ahora es como principal proveedor de
armas (la mitad estadounidenses) usadas, en su mayoría, para
perpetuar conflictos internos que tienen graves consecuencias en el
sistema de gobierno, la sociedad y sobre todo en el campo
económico. “La necesidad de poner límites al comercio masivo
internacional de armas es extremadamente imperiosa”.
La esencia antioccidental de los movimientos fundamentalista
depende, según Amartya, de Occidente, pues verse a sí mismo como
el “otro” provoca el fomento de valores contra las concepciones e
intereses occidentales y hace que los antioccidentalistas olviden otros
aspectos de sí mismos. Algunos de estos movimientos
fundamentalistas islámicos se fabrican una visión negativa de
Occidente.
El mundo ha legado, según Sen, a la conclusión de que la cultura
importa. Pero “cuando se combina una percepción vaga de la cultura
con el fatalismo acerca del poder dominante de la cultura, nos vemos
llevados a ser esclavos imaginarios de una fuerza ilusoria”. No
obstante las generalizaciones culturales simples son peligrosas, por
su eficacia al determinar nuestra manera de pensar. Esa peligrosidad
radica en la abundancia de las generalizaciones que están tanto en
las convicciones populares, como en la comunicación informal.
De éstas generalizaciones nacen creencias implícitas y
distorsionadas, y cuando hay una correlación accidental entre el
prejuicio cultural y la observación social, nace una teoría, y es posible
que se niegue a morir. “Las teorías tienen vida propia,
independientemente del mundo fenoménico realmente observable.
A veces, dice Amartya, el fanatismo cultural y la tiranía política
se convierte en algo inseparable. Las diferencias entre gobernador y
gobernado combinadas con el prejuicio cultural, pueden usarse para
justificar los fallos de gobierno y las políticas públicas. Esto ocurre
porque estamos acostumbrados a no culpar al gobierno, sino a la
cultura de los ciudadanos.
Los factores culturales no funcionan aislados de las influencias
políticas, económicas y sociales, y además pueden cambiar. No cabe
duda en que las cuestiones culturales contribuyen en nuestra
concepción del mundo y que esta concepción incluye el proceso de
desarrollo y la naturaleza de nuestra identidad.
Tenemos que aprender a separar la cultura de la ilusión del
destino, pues según el autor, facilita la comprensión del cambio social
cuando lo situamos junto a procesos sociales interactivos e
influencias. Así como la educación tiene influencia sobre la cultura, la
cultura puede tener impacto en las políticas educacionales. La
interacción entre culturas y experiencias pueden traer consigo
grandes efectos prácticos. En éste sentido, hay que fijar nuestra
atención en las interrelaciones culturales pues puede, visto con
amplitud, ser el modo de fomentar nuestra comprensión del cambio y
el desarrollo.La ilusión del destino puede ser muy debilitante porque
genera un sentimiento de fatalismo y resignación entre los individuos
no favorecidos.
La cultura que poseamos tiene una gran influencia en nuestra
forma de pensar, actuar, e incluso, en nuestra calidad de vida. Y
también puede influir en nuestro sentido de identidad. La cultura no
es algo inexorable, ni un determinante crítico y tiene una estrecha
relación con los problemas sociales.
Nuestras identidades culturales no están aisladas de otras
influencias sobre nuestras precepciones y prioridades. La cultura
importa, pero los demás aspectos de una persona como la raza, la
clase, el género, la profesión, la política…también. Además la cultura
no es un atributo homogéneo. Quienes están a favor del
determinismo cultural, piensan una cultura como homogénea, sin
darse cuenta de que hay más cosas que la cultura y de que de todos
modos ésta no es exactamente la misma para todos ( aunque vivas
en el mismo marco cultural que el vecino, no tienes porque actuar o
pensar de igual modo). No hay que pensar la cultura como algo
sólido, sino con liquidez, pues ésta no es estática y no puede
considerarse como algo aislado, sino como algo relacionado con las
demás influencias.
También hay que distinguir entre la idea de “libertad cultural”,
en la que destaca nuestra libertad para continuar con nuestras
prioridades o cambiarlas, y la de “valorar la conservación cultural”
que ahora es cuestión de la retórica del multiculturalismo. Tenemos
que hacer un examen de la relación entre la libertad cultural y las
prioridades del multiculturalismo. Hoy en día en multiculturalismo ha
ganado mucho poder como eslogan. Necesitamos distinguir la
importancia de la libertad cultural y la celebración de cualquier forma
de herencia cultural.
A menudo la atención se ha centrado en la necesidad de la
conservación de la cultura y esque la libertad cultural puede incluir la
crítica de las tradiciones pasadas. En palabras del autor:”Si la libertad
de la decisión humana es importante, los resultados de un ejercicio
razonado de esa libertad debe ser valorados, y no negados en
nombre de un impuesto e incuestionado conservacionismo. El vínculo
crítico incluye nuestra habilidad de considerar opciones alternativas,
de comprender qué elecciones abarca y, luego, decidir qué podemos
elegir”.
Debemos ver la diversidad como un abanico de posibles
elecciones, pues poder elegir es importante para la libertad cultural.
Pero tenemos que ver de qué forma está esa diversidad.
La libertad no es un comodín para justificar todo, hay que
evaluar cómo se utilizaría esa posibilidad de elección si ésta estuviera
dentro del abanico. Y del mismo modo, tenemos que dejar que cada
uno encuentre, gracias a su propia razón y crítica, su propia elección
y ese abanico tiene que estar a los ojos de toda persona, sea como
sea, viva donde viva, tenga la edad que tenga. La educación debería
abrirlo para poder elegir lo que queramos ser y no convertirnos al
dogmatismo nada más nacer. Una persona debería poder ser como
eligiese ser.
Otro tema, son las enormes desigualdades de oportunidades de
las personas, que han hecho despertar el escepticismo hacia la
globalización y su capacidad para atender los intereses de los
desamparados. Hay quien percibe en estas desigualdades el fracaso
del intento de una identidad global y la introducción de una fuerza
moral conjunta con ella. No debemos según Amartya echarle toda la
culpa a la globalización, los fracasos son también de acuerdos
sociales, políticos y económicos.
Aunque los movimientos antiglobalización aportan debates
públicos que ayudan a la persona de a pie a cuestionarse la sociedad
e intentar superar los problemas existentes y de esta forma usar
(algo muy en des-uso) la principal característica de la democracia, el
razonamiento público.
Anthony Giddens en su libro “un mundo desbocado”, también
nos habla de la globalización y sus efectos. Divide en dos grupos
opuestos las posturas acerca de la globalización:
-Los escépticos: que no creen que la globalización exista.
-Los radicales: en donde se sitúa él mismo, que piensan que su
existencia es real y que es evidente que existe.
Ambos autores coinciden en que la globalización puesta en
práctica, se convierte en una paradoja que actúa al contrario de cómo
debería actuar, esto es:
-Para Sen, el movimiento antiglobalización se convierte en
global cuando el descontento traspasa fronteras y genera la
participación de todo el mundo.
-Para Giddens, estamos ante una “colonización inversa” que
nunca antes se había dado y que consiste en que países no
occidentales influyen en algunos aspectos de Occidente. Además de
la aparición de las sociedades cosmopolitas que surgen de la
heterogeneidad de influencias.
Dentro de la globalización, hay una serie de interacciones
globales, que van desde la expansión de influencias científicas y
culturales, hasta las relaciones económicas y comerciales en todo el
mundo. El rechazo a éste modelo, conlleva la eliminación de los
movimientos de ideas, la comprensión y el conocimiento.
Normalmente la globalización, es percibida como un proceso de
occidentalización,(incluso de americanización, según Giddens) pero
este proceso a su vez puede ser percibido como una especie de
regalo de Occidente, o como una continuación del imperialismo
occidental. Pero Sen dice que no se trata de un nuevo fenómeno sino
que siempre ha existido, desde que el hombre viaja.
Existe en el mundo actual una fuerte demanda de
multiculturalismo. El crecimiento de interacciones globales, ha puesto
en relación las diferentes culturas y sus prácticas. Y esta hibridación
hace casi imposible identificar una “cultura local” como originaria. Es
importante distinguir entre “multiculturalismo” y “monoculturalismo
plural”. La gran diferencia es el modo que tiene de coexistir dentro de
un mismo espacio las personas de distintas culturas entre ellas: si la
relación es fluida y las dos partes aprenden de los dos es
“multiculturalismo”, mientras que si se mantienen alejados y no hay
ningún tipo de intercambio entre ellos es “monoculturalismo plural”.
No podemos predeterminar a alguien basándonos en la
comunidad a la que “pertenezca”.
Mi conclusión de todos estos temas, es que debemos estar
abiertos a todo y a todos, aprender a utilizar nuestro sentido crítico
(no solo con los otros, sino con nosotros mismos, que en el fondo es
lo mismo) e ir elaborando nuestra propia visión del mundo, dejando a
un lado los prejuicios aprendidos hasta ahora e intentando entender
el funcionamiento de nuestro hogar para, quién sabe, algún día, ser
capaz de abrir la mente (y el abanico) a otras personas.
Un largo camino empieza… (“caminante, no hay camino, se
hace camino al andar”.)
FILOSOFÍA DE LAS CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS
1º FILOSOFÍA
UNIVERSIDAD DE VALLADOLID
2008
Publicado por Pat.FloWeR.PoWeR. en viernes, septiembre 25, 2009
Conceptos de Pobreza: Algunas Aproximaciones
A. La Pobreza y las Capacidades: Enfoque de Amartya Sen
Para Amartya Sen (1998): Las “capacidades” comprenden todo aquello que permiten a una persona estar bien nutrido/a, escribir, leer y comunicarse, tomar parte de la vida comunitaria; forma parte de estas “capacidades”.
Sen señala que las Necesidades Básicas constituyen una parte de las capacidades, pero que estas se refieren a algo mucho más amplio. El número de opciones que las personas tienen y la libertad de elección sobre estas opciones también contribuye al bienestar humano. De esta forma, desde el enfoque de las capacidades, se postula que más libertad, y más capacidad de elección tienen un efecto directo sobre el bienestar, incrementándolo.
El Bienestar Humano consiste en desarrollar las capacidades de las personas. Entonces, es posible hablar de desarrollo cuando, las personas son capaces de hacer más cosas, no cuando estas son capaces de comprar más bienes o servicios.
En segundo lugar Sen estableció que las cuestiones de género son parte integral de los procesos de desarrollo. Desmintió que bajos niveles de desarrollo económico afectasen de igual manera a hombres y a mujeres y que las políticas de desarrollo son neutrales en cuanto al género.
Para él (y así lo demuestra empíricamente) el hambre no se produce por una insuficiente producción de alimentos. Las hambrunas pueden ser los resultados de una insuficiente producción, pero esta es consecuencia de unos pobres o injustos mecanismos de distribución. Así Sen señala que los problemas de distribución son en mayor medida la causa del hambre, contradiciendo los principios de la teoría económica tradicional.
“Capital Humano y Capacidad Humana”
Amartya Sen: También centra su análisis en la acumulación de “Capital Humano” y en la expansión de la “Capacidad Humana”. El primer concepto se encuentra en el carácter de agentes (agency) de los seres humanos, que por medio de sus habilidades, conocimientos y esfuerzos, aumentan las posibilidades de producción y el segundo se centra en su habilidad para llevar el tipo de vida que consideran valiosa e incrementar sus posibilidades reales de elección. Ambas perspectivas están relacionadas porque se ocupan del papel de los seres humanos y en particular de las habilidades efectivas que éstos logran y adquieren.
“Las Distintas Caras de la Pobreza”
Sen también señala en la revista el País que: Aquellos a quienes les gusta el camino recto tienden a resistirse a ampliar la definición de pobreza. ¿Por qué no mirar simplemente los ingresos y plantear preguntas como: “Cuantas personas viven con menos de digamos uno o dos dólares diarios”? Este análisis restringido toma entonces la forma sencilla de predecir tendencias y contar a los pobres. Pero las vidas humanas se pueden empobrecer de muchas maneras. Los ciudadanos sin libertad política ya sean ricos o pobres están privados de un componente básico del buen vivir. Lo mismo se puede decir de las privaciones sociales como el analfabetismo, la falta de sanidad, etc.
De hecho, el poder protector de la democracia para proporcionar seguridad se extiende mucho más allá de la prevención de las hambrunas. Es posible que la democracia, que es valiosa por derecho propio no sea siempre especialmente eficaz desde el punto de vista económico, pero adquiera su importancia cuando la crisis amenaza y los económicamente desposeídos necesitan la voz que la democracia les da.
Si tengo esperanza en el futuro es porque veo la exigencia cada vez más manifiesta de democracia en el mundo y la convicción cada vez mayor de que la justicia social es necesaria. Debemos tener una perspectiva de la pobreza suficientemente amplia como para asegurarnos de que los pobres tienen una razón para la esperanza.
En Síntesis: Se aludió al concepto de Amartya Sen respecto a que la pobreza es “absoluta en el plano de las capacidades y relativa en el plano de los productos básicos. En respuesta a la pregunta de Malasia sobre la redefinición de la línea de pobreza para reflejar un mayor balance entre características absolutas y relativas al dar mayor peso a las medidas de las capacidades, se aclaró que la pobreza es el fracaso de un individuo para lograr un conjunto relevante de un inadecuado empleo de los recursos.
El enfoque que tiene Amartya Sen acerca del problema social de la pobreza es muy interesante, en la medida que él nos propone una dimensión de la pobreza que los métodos y definiciones tradicionales no consideran y que es particularmente interesante que un economista premio Nóbel lo plantee, y esta
nueva dimensión es en concreto la ampliación de las capacidades de los individuos que les permiten hacer y desarrollarse ellos como individuos y no definirlos por la cantidad de dinero que poseen a nivel individual o familiar; lo cual les permitiría comprar determinada cantidad de bienes o acceder a ciertos servicios considerados como básicos; sino que nos permite ahondar en aspectos tales como: la calidad de la educación, el nivel de desarrollo intelectual de individuo y por que no ir mas allá del simple concepto burgués de la “Libertad y Democracia”, donde los pobres tengan no solo derecho a protestar y votar en cada elección de sus autoridades; sino capacidad critica y reflexiva que les permita participar activamente en las decisiones de estado que afectan su calidad de vida y expectativas de desarrollo.
Dentro de esta óptica nosotros consideramos que la pobreza va mas allá de los aspectos materiales y las necesidades inmediatas, y que esta abarca aspectos tan importantes como el desarrollo de las capacidades sí, pero también de una personalidad definida del individuo que le permita tener un grado de conciencia que sea el camino para una mayor participación y desarrollo de sus habilidades, lo cual necesariamente se vera reflejado en un incremento de la productividad individual, familiar y de la sociedad en su conjunto; cuando ubiquemos a las personas en el lugar donde ellas logran su máximo desarrollo; pero también no podemos dejar de lado que para lograr esto se deben de dar condiciones mínimas para el desarrollo de los individuos como son: educación de calidad, una adecuada nutrición infantil y acceso universal a la salud de calidad.