Análisis Del Discurso Segundo Parcial

INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL

CENTRO INTERDISCIPLINARIO DE CIENCIAS DE LA SALUD UNIDAD SANTO TOMÁS

LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA

UNIDAD DE APRENDIZAJE: DISCURSO Y SOCIEDAD

“Siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos”

PRESENTADO A: LUIS ARTURO VILLANUEVA MACEDO

PRESENTADO POR:

ACO JIMÉNEZ ISIS

CASTRO MARÍN CARMEN MONSERRAT

JIMÉNEZ PÉREZ MARIANA

HERNÁNDEZ VELÁZQUEZ NAYELI

GRUPO: 2PV33

FECHA DE ENTREGA: 29/ENE/2015

DISCURSO Y SOCIEDAD- Siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos

Siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos

Introducción

El reloj marca las 3:00 de la tarde. En el mejor de los casos, se puede esperar que la comida ya esté lista y que de éste modo, miles de familias mexicanas, estén dispuestas a disfrutar del saborío que engalana la mesa.

¿Cuál será el menú?... ¿Un tradicional caldo de pollo, o quizá, unas deliciosas quesadillas? Mejor me detengo ahí; no vaya siendo que les de hambre.

— ¿Que vamos a tomar? —preguntan sedientos y ansiosos…

Y aparece en escena, justo en medio de la mesa, el oscuro elíxir, quien sabe si de la eterna juventud, en presentación de 3 litros, para que alcance para todos.

Sí, la afamada, Coca-Cola.

Coca-Cola fue creada el 5 de Mayo de 1886 por John Pemberton, su inventor, quien empezó a trabajar en la fórmula a los 54 años de edad.

El consumo mundial de Coca-Cola excedía de 45.000 botellas por segundo.

La compañía se enorgullece de su historia. En sus comienzos, fue introducida comercialmente como "un tónico efectivo para el cerebro y los nervios" y como “coadyuvante en la digestión”. He ahí la razón de “elíxir”.

En 1938 fue declarada "Bebida por excelencia" en varias partes del mundo, dado el impacto que causó entre los consumidores.

Coca-Cola, un producto ampliamente accesible, un remedio patentado y una bebida con gas.

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Tomar Coca-Cola se ha vuelto un hábito, casi un ritual moderno, practicado por las sociedades contemporáneas; esto debido a sus agresivas campañas publicitarias, estructuradas de tal manera, que invitan al individuo a integrarse al ritual, y elevar la bebida a un nivel extraordinario.

Coca-Cola se ha destacado por la creatividad de sus comerciales a lo largo de los años; superhéroes, caricaturas, gente feliz y en este caso, osos polares, son los protagonistas de estos anuncios, que influyen casi de manera inmediata en la sociedad, acrecentando la popularidad del refresco.

Así pues, a partir de esto, Siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos, tiene por objeto, realizar el análisis del discurso de uno de los miles de comerciales de esta compañía refresquera, titulado “Luces del Norte”, esto con base a los trabajos del destacado profesor de lingüística francesa, Jean-Michel Adam.

Asimismo, abordaremos a Elena Calsamiglia —escritora y filóloga española—, y con ella, Amparo Tuson Valls —lingüista y antropóloga también de origen español—, quienes precisamente refieren al mismo Adam en sus aportaciones al análisis del discurso.

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Siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos

“El discurso, es socialmente constitutivo; constituye situaciones, objetos de conocimiento, identidades sociales y relaciones entre personas”

H. Calsamiglia, “Las cosas del discurso. Manual del análisis del discurso”

Breve trilogía Adam-Calsamiglia-Tusón

Para “lograr” un análisis del discurso considerable, bueno, aceptable, es menester conocer algunos conceptos, maravillosamente plasmados, en “La lingüística textual, introducción al análisis textual de los discursos”, obra del antes mencionado, Jean-Michel Adam, así como también de “Las cosas del decir, Manual de análisis del discurso” de Calsamiglia y Tuson, respectivamente.

Discurso; complejidad representada en una palabra de 8 grafías. Según Calsamiglia y Tuson, el discurso es ante todo, hablar de una práctica social, de una forma de acción entre las personas que se articula a partir del uso lingüístico contextualizado, ya sea oral o escrito.

El discurso es parte de la vida social y a la vez un instrumento que crea la vida social. Desde el punto de vista discursivo, hablar o escribir no es otra cosa que construir piezas textuales orientadas a unos fines y que se dan en interdependencia con el contexto (lingüístico, local, cognitivo y sociocultural). Nos referimos, pues, a cómo las formas lingüísticas se ponen en funcionamiento para construir formas de comunicación y de representación del mundo —real o imaginario—.

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Los modos de organización del discurso

Las secuencias seleccionadas por Adam para constituir el modelo prototípico, coinciden en su nomenclatura con lo que otros autores llaman modos de organización del discurso y se relacionan con funciones textuales que iremos desarrollando.

Dichas secuencias prototípicas se entenderán como esquematizaciones de los modos fundamentales de construir los discursos; los textos pueden o no presentar más de una articulación, es decir, más de un modo de organización textual.

Los 5 modos de organización del discurso según Adam, son:

La narración La descripción La argumentación La explicación El diálogo

Y bien, abordaremos acerca de cada uno de estos modos.

El primero, la narración, es una de las formas de expresión más utilizadas por las personas. A menudo, cuando a alguien —principalmente un niño o niña— se le pide una definición o una explicación, utilizando la pregunta ¿Qué es…? Empieza su respuesta diciendo: Es cuando… Este hecho tan familiar no hace sino mostrar que la narración es una forma tan íntimamente instaurada en nuestra manera de comprender el mundo, de acercarnos a lo que no conocemos y de dar cuenta de lo que ya sabemos que domina sobre otras formas más distantes y objetivas como pueden ser la definición o la explicación. Narramos para informar, para cotillear, para argumentar, para persuadir, para divertir, para crear intriga, para entretener…

También se conoce como esquema narrativo2.

Como consecuencia dominante o envolvente, el ser humano entendido como ser cultural y social, ha recurrido a la narración cuando ha necesitado de explicar los orígenes de su grupo o cuando ha necesitado explicarse a sí mismo y a los otros. Mitos, leyendas, poemas épicos o cantares, son ejemplos de ésta.

Malcuori, M. (1997) La secuencia textual; Editorial: Acquarone. España. P. 52 Ibídem.

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Asimismo, el relato radiofónico, la novela, el cinematográfico, la serie de televisión, y otros géneros, son muestra de la pervivencia de la narración y de su capacidad para adaptarse a los diferentes medios o soportes de difusión como la radio, el cine, el video y la televisión.

La narración aparece en los medios de comunicación, dentro de géneros periodísticos como la noticia, el reportaje, el suceso, la crónica… En televisión, en forma de spots publicitarios, comerciales y anuncios. En el ámbito académico constituye un recurso didáctico para ejemplificar e instruir.

El segundo, la descripción, representa lingüísticamente el mundo real o imaginado: en el ámbito humano —personal y social—y sus esferas de actividad; en el ámbito creado por los humanos: construcciones, aparatos y artefactos; y en el ámbito natural: rocas y montañas, animales, plantas y paisajes.

Con la descripción expresamos la manera de percibir el mundo a través de los sentidos —lo que vemos, oímos, olemos, tocamos y gustamos—, y a través de nuestra mente que recuerda, asocia, imagina e interpreta.

Nuestra cultura ha favorecido el sentido de la vista como sentido privilegiado para la representación de la realidad: por eso decimos que la descripción representa la diferenciación y la relación de lo que percibimos en el espacio y se ha asociado con la representación de escenas a través del dibujo, la pintura, la fotografía o el film.

La descripción se aplica tanto a estados como procesos y se realiza según una perspectiva o punto de vista determinados, en amplio abanico que se presenta desde el ángulo más objetivo al más subjetivo.

Toda descripción está condicionada por el contexto en que aparece la comunicación: La relación entre los interlocutores, el contrato comunicativo que se establece, el conocimiento compartido que se presupone.

También es un esquema descriptivo3.

El propósito que se pretende (ya sea persuadir, convencer, criticar, informar, burlarse o conmover) orienta la descripción, cuya función puede ser predominante informativa o bien expresiva, argumentativa o directa.

3 Íbid p. 6

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El contenido responde preguntas, explícitas o implícitas, Del tipo: ¿Qué es? ¿Cómo es? ¿Qué partes tiene? ¿Para qué sirve? ¿Qué hace? ¿Cómo se comporta? ¿A qué se parece?... Todo ello forma parte de la configuración pragmática.

El tercero, la explicación, parte de un supuesto previo: esta se puede entender como un conjunto de datos sobre el tema, obtenidos por la vía de la experiencia o por la vía de la reflexión —en este caso los datos están organizados dentro de un sistema—, adquiridos de forma directa o de forma indirecta. Para que una persona pueda proporcionar información ha de estar enterada o ha de buscarle en las fuentes apropiadas.

Que un discurso éste orientado fundamentalmente a proporcionar información, implica que se use el lenguaje con una función referencial —que se centre en el objeto tratado y que predomine sustancialmente sobre las demás funciones (expresiva, directiva, argumentativa o fática).

La comunicación de una información se asocia normalmente a la objetividad, la neutralidad y la verdad.

Cuando realizamos una demanda de información requerimos que se base en un conocimiento de la realidad y buscamos que éste sea fiable, tanto para resolver una cuestión que afecte a la vida cotidiana como para solucionar un problema relativo al conocimiento organizado sobre el mundo natural y social.

Desde luego, es un esquema explicativo4.

El cuarto, la argumentación, aparece en muchas de las actividades discursivas características de la vida social pública o privada.

Se argumenta en la conversación cotidiana, en una entrevista para conseguir un empleo, en una tertulia, en una mesa redonda, en un debate, en un coloquio, en un juicio, en una asamblea, en un mitin, en una alocución parlamentaria, en la publicidad, en un articulo editorial, en uno de opinión, en una crítica de arte, de cine…

Se argumenta, en fin, en cualquier situación en la que se quiere convencer o persuadir de algo a una audiencia, ya esté formada por una única persona o por toda una colectividad.

4 Íbid p. 7

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En un sentido amplio, la argumentación es una práctica discursiva que responde a una función comunicativa: la que se orienta hacia el receptor para lograr su adhesión.

En otras palabras, es un esquema argumentativo5.

El quinto, el diálogo, es la forma más básica de comunicación humana, responde a una conversación entre 2 o más individuos y que exponen sus ideas o afectos de modo alternativo para intercambiar posturas.

En ese sentido, un diálogo es también una discusión o contacto que surge con el propósito de lograr un acuerdo.

Además de estar en otras formas discursivas, el diálogo aparece en teatro, cine, novela, cuento y quizá poesía.

Claro, es un esquema dialogal6.

5 Íbid p. 76 Íbid p. 7

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El discurso y su análisis; elixir al descubierto

Una vez identificados lo modos del discurso, procede realizar el análisis de éste con base al comercial “Luces del Norte” de la compañía refresquera más influyente de todos los tiempos, y de la cual se habló con anterioridad Coca-Cola.

Para ello, emplearemos el primer modo, es decir, la narración.

Como anteriormente se dijo, la narración constituye una de las formas de expresión más utilizadas por las personas.

Dicho en otras palabras, la narración o el esquema narrativo es un conjunto de proposiciones, ordenadas según una estructura más o menos convencional, que presenta a uno o más sujetos como agentes o pacientes de una acción de cuyo proceso y consumación, la secuencia narrativa se ocupa.

La acción, dotada de cierta unidad, se descompone en una serie de acontecimientos de la que se hace cargo un conjunto estructurado de enunciados en relación temporo-causal.

La unidad de acción (estado inicial-transformación-consumación) junto con la presentación de cierta intriga, distinguen el esquema narrativo de la cronología y de la descripción de acciones.

Ya que nos hemos aventurado en utilizar la narración como medio para el análisis del discurso de éste comercial, he aquí un elemento sumamente importante de ésta:

Si atendemos a la estructura interna de la secuencia narrativa, podemos distinguir, siguiendo a Adam, 6 constituyentes básicos: temporalidad, unidad temática, transformación, unidad de acción y causalidad.

El 6° constituyente, surge de los 5 anteriores, se llama, superestructura narrativa.

Dicho esto, el análisis del discurso es el siguiente: Hay que reafirmar que la secuencia del comercial es NARRATIVA, y regresando a los 6 constituyentes, tenemos que:

En la Temporalidad existe una sucesión de acontecimientos en un tiempo que transcurre, que avanza.

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Al inicio del comercial, se percibe un oso polar que se incorpora con otros osos; éstos se encuentran sentados sobre la gélida superficie del Polo Norte, volteando al cielo, a la espera de un espectáculo natural y nocturno, una aurora boreal.

En la Unidad Temática, es decir, lo que une a los acontecimientos que pasan en el tiempo, se muestra un Sujeto-Actor, ya sea animado o inanimado, individual o colectivo, agente o paciente.

En éste caso, el Sujeto-Actor, es él oso, que se incorpora al grupo y se muestra feliz con la Coca-Cola, al finalizar el comercial.

Respecto a la Transformación, los estados o predicados cambian, por ejemplo, de tristeza a alegría, de desgracia a felicidad, de plenitud a vacío, de pobreza a riqueza, etc.

La transformación se observa porque inicialmente en el cielo, no aparecía el espectáculo nocturno de la aurora boreal, y los osos permanecían sentados únicamente observando. Posteriormente comienza la aurora boreal y aparecen nuevamente dichos osos, cada uno con su respectiva Coca-Cola.

En la Unidad de Acción existe un proceso integrador de todos los acontecimientos. A partir de una situación inicial se llega a una situación final a través del proceso de transformación.

El protagonista, el oso, se incorpora al sitio o al lugar en el cual ocurrirá la acción principal; es decir, la aurora boreal.Y un resultado que hace felices, no sólo al oso protagonista, sino al resto de los osos: beber Coca-Cola.

Finalmente, en la Causalidad hay “intriga”, que se crea a través de las relaciones causales entre los acontecimientos. De éste quinto constituyente, se deriva el sexto que antes mencionábamos: Superestructura Narrativa; la cual se compone de:

Situación inicial, que marca el comienzo de los demás acontecimientos, dentro del comercial.

Un oso llega junto al resto de los osos y está a la espera de observar la aurora boreal.

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Complicación, que es la espera o expectativa de que ocurra un acontecimiento.

Los osos están a la espera de que ocurra la aurora boreal.

Acción principal de la historia, donde después de la situación inicial y la complicación, ocurre el fenómeno esperado.

Entonces comienza el espectáculo de luces, de la famosa aurora boreal, y todos los osos lo miran con asombro.

Resolución, donde se conjunta la acción principal, con el producto que se quiere publicitar.

Mientras la aurora boreal acontece, todos los osos beben el elixir.

Por último, está la moraleja, que es el mensaje final que el comercial quería transmitir realmente.

Beber Coca-Cola, les da felicidad, te da felicidad. Y bien, éste fue el análisis del discurso de este comercial; es bien sabido que para cada anuncio, spot, comercial o cualquier tipo de publicidad, existe un modo de organización del discurso y esto no significa que un modo sea mejor que otro, no.

Significa que, dada su diversidad, su estudio y su amplitud e incluso dada su complejidad, te permitirá reforzar y entender el discurso que el comercial realmente expresa; va más allá de lo que observamos a simple vista.

Al final del día, “Luces del norte” se muestra como unificación, compañerismo, entre los osos por supuesto, como quedarse en grupo para observar algo bello. Bello. Todo es belleza, alegría, sonrisa, e incluso, groseramente, perfección.

El escenario, es decir, el Polo Norte, los osos, animales que quizá provoquen ternura, el fenómeno de la aurora boreal, y demás, son elementos empleados por este anuncio que increíblemente, sirve para enaltecer la fama del oscuro elíxir, de ésta bebida, Coca-Cola.

Todo está bien en el comercial; no hay problemas, no hay indicios de beligerancia. Todo, de principio a fin se muestra como una gama de plenitud, de felicidad.

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Entonces, si los osos pueden unirse para un acontecimiento importante, si los osos pueden ser felices y sonrientes, ¿Por qué los hombres no? También pueden juntarse, no solo con motivo de auroras boreales, sino estar con sus amigos, charlar y demás; es decir también pueden sonreír y ser felices como el oso.

Pequeño detalle, necesitas tu botella de Coca-Cola, ¿Qué importa la presentación?, medio litro, un litro, o tamaño familiar. Coca-Cola al final.

“Luces del Norte” un comercial analizado de forma narrativa, para darse cuenta que Coca-Cola es felicidad, y sí, que la compres, la consumas, si quieres formar parte de esa felicidad.

Y si no quieres formar parte de esa felicidad, y no quieres comprarla, no importa.

Finalmente, si algún día te arrepientes y quieres ser feliz, corre a la “tiendita de la esquina” y compra una.

No te preocupes, sí hay; hasta en el pueblo más recóndito, en paupérrimas condiciones, habrá este producto. Y, ¿Por qué? Porque siempre que se deseé, habrá oscuro elíxir para todos.

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Referencias

1. Adam, J. M. (1996). «(Proto) Tipos: “La lingüística textual, introducción al análisis textual de los discursos”, 10, pp. 9-22.

2. Adam, J. M. (1997). «Los textos: heterogeneidad y complejidad». En Cantero, F.J., Mendoza, A. y Romea, C. (eds.). Didáctica de la lengua y la literatura para una sociedad plurilingüe del siglo XXI. Barcelona: Universitat de Barcelona, pp. 3-12.

3. Calsamiglia, H. y Tusón, A. (1999). Las cosas del decir. Manual de análisis del discurso. Madrid: Ariel.

Referencias de internet

1. Malcuori, M.. (1997). La secuencia textual. España: Acquarone, https://www.google.com.mx/search?q=Marisa+Malcuori:+La+Secuencia+Textual&gws_rd=cr&ei=02vKVK76IpGcygTqhoGQBghjasjo654224f

2. Calsamiglia, H. y Tusón, A. (1999). Las cosas del decir. Manual de análisis del discurso. Madrid: Ariel. https://www.google.com.mx/search?q=las+cosas+del+decir,+manual+del+analisis+del+discurso&gws_rd=cr&ei=nZDIVI_PBcGrgwSMvYCgBQ

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https://www.google.com.mx/search?q=Marisa+Malcuori:+La+Secuencia+Textual&gws_rd=cr&ei=02vKVK76IpGcygTqhoGQBghjasjo654224f




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