Andrew Gray - Prisionero

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    1/226

     

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    2/226

     

    2

    Capítulo 1

    Se removió en su asiento en el teatro Dolby, agarrando el brazo y

    conteniendo la respiración mientras la música sonaba y los presentadores

    salían al escenario, la actriz en un vestido increíble que debía de haberle

    costado más que la casa de sus padres, y la estrella masculina en un smoking

    que realmente brillaba un poco bajo las luces. Se deslizaron fuera a la tribuna

    e hicieron su numerito corto antes de llegar a la presentación en cuestión. En

    ese momento, se imaginaba que su corazón estaba a dos segundos de

    detenerse. El hombre se acercó un poco más al micrófono. —Y los nominados

    a Mejor Actor son ....

    Aproximadamente un año antes ....

    KENDALL MONROE corrió fuera del escenario y entre bastidores justo

    después de que las luces se desvanecieran. Tenía dos minutos para cambiarse

    y prepararse para su próxima entrada. Ya se había quitado la camisa y los

    zapatos en uno de los corredores alguien se ocuparía de retomarlas. Corrió

    detrás de una pantalla y empujó sus pantalones abajo, luego salió de ellos yotro par ya lo estaba esperando. Le fue entregada su camisa, y cuando salió,

    ya llevaba la camisa abotonada y la corbata colocada alrededor de su cuello y

    apretada. Se fijó el cuello, y se encogió de hombros en su abrigo. Los zapatos

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    3/226

     

    3

    ya estaban delante de él, como por arte de magia, y se deslizó en ellos. Se los

    ató, y una de las personas de vestuario le dio un vistazo una vez más, antes de

    asentir con la cabeza, y Kendall se volvió hacia un rincón para esperar su

    señal.

    Salió del rincón y se encontró con su co-estrella en el centro del

    escenario, donde hicieron su última escena juntos, ella en sus brazos, y él

    guiándole a través del número de baile final. La música cesó, la besó, y luego

    la cortina se abrió y el resto del elenco se reunió con ellos, sumando sus voces

    a las de las estrellas, —entonces la música, las letras, y el baile se construyó

    en un crescendo que acabó con todo el mundo teniendo su último minuto y

    esperando a que la cortina cayese.

    Tan pronto como la tela cayó al suelo, Kendall dejó escapar un suspiro

    de alivio. Todo el mundo salió corriendo del escenario, y la cortina se levantó

    de nuevo. Los miembros del reparto se apresuraron a regresar al escenario

    desde sus arcos, y al final, Kendall y Joyce se tomaron de la mano y

    caminaron de regreso al escenario. El aplauso creció, haciéndose un eco

    atronador en las paredes del teatro. Se inclinaron juntos, y luego el resto del

    elenco se reunió a su alrededor.Kendall entrelazó las manos con Jeffrey, como siempre lo hacía en esta

    exhibición coreografiada de espontaneidad falsa, se inclinó de nuevo, lanzó

    besos a la audiencia, y luego se inclinó una vez más antes de dar un paso

    atrás y dejar que el telón bajase por última vez.

    Tan pronto como salió del escenario y se dirigió a su camerino, Kendall

    sabía que se trataba de la última vez que interpretaba al apuesto, gallardo, ya

    veces torpe Stone. La carrera había terminado, no porque que no estabanvendiendo boletos, sino debido a que los productores no habían sido lo

    suficientemente inteligentes como para dejar sus opciones abiertas cuando

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    4/226

     

    4

    habían negociado con el teatro, y otro espectáculo había reservado y estaba

    listo para empezar con los ensayos.

    Kendall cambió su traje de final por su ropa de calle. Alguien llamó a la

    puerta.

    —Entra, — Kendall dijo, y Joyce entró.

    —¿Puedes creer que en realidad estamos cerrando, —preguntó ella,

    dejándose caer en el sofá.

    —No, —dijo Kendall, sentándose a su lado. Una de las cosas que había

    descubierto cuando habían comenzado a trabajar juntos hacia meses fue que

    ninguno de los dos quería la aglomeración de gente que siempre parecía

    aparecer después de un show. Así que, o ella iba a su camerino y él iba al

    suyo, y se escondían hasta que las cosas se calmaban y podían estar en paz.

    La mayoría de los otros en el reparto y el equipo respetaban su necesidad de

    tranquilidad y su oportunidad de descomprimir. —Incluso mi agente no ha

    estado buscando muy duro, porque pensaba que los productores podrían

    encontrar una manera para que el programa continuase. Hemos vendido por

    semana, pero ahí no hay salas disponibles en este momento, así que ....

    —Lo sé, —  dijo. —Me esperaba que este compromiso se extendiesepor unos mes más al menos.

    —¿Has oído algo más sobre hacer eso del reality, —preguntó Kendall

    mientras se levantaba. Sacó una botella de la mini nevera y le quitó el corcho.

    —Sé que normalmente no hacemos esto, pero creo que merecemos celebrar

    un poco. —Kendall sirvió dos copas de champán y le dio una a Joyce.

    —Esta es por ti, —dijo, levantando su copa. —He disfrutado cada día de

    trabajo contigo.—Yo también, —dijo, y Brindaron. —Estoy lista para iniciar la filmación

    de las amas de casa de Massapequa en unas semanas. —Joyce se rió y luego

    eructó un poco. —Nunca pensé que haría uno de esos programas, pero estoy

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    5/226

     

    5

    deseando hacerlo. —Ella levantó la mano. —Te prometo no tomar todo el

    asunto muy en serio.

    Kendall se sentó y cerró los ojos por un segundo mientras dejaba que el

    vino burbujease en su garganta.

    —Voy a extrañar a bailar contigo ocho funciones a la semana. —Ella

    tomó un sorbo de su vaso. —¿Te das cuenta que eres el primer socio que he

    tenido que nunca me ha pisado el pie o me ha dado golpes en los tobillos?

    —Es una broma, —dijo Kendall y se bebió el contenido de su copa

    antes de verterse otra. Él se terminó el suyo también.

    —No, —dijo ella con una sonrisa. —Te acuerdas de que estaba en

    Mamma Mia antes de esto? Llegaba a casa después de cada actuación con un

    nuevo golpe. Mi pareja de baile siempre pensó que mis pies eran parte del

    escenario.

    Ella tomó otro trago, y Kendall escuchó. Todavía había ruido fuera,

    pero los sonidos estaban disminuyendo. Joyce terminó su copa y luego se puso

    de pie. Kendall hizo lo mismo y la abrazó con fuerza.

    —Voy a echarte de menos.

    Kendall asintió. —Por favor, llámame y quiero saber cómo va elespectáculo.

    —Y tú asegúrate de hacerme saber cómo te va en la tierra, —dijo

    Joyce, en dirección a la puerta. —Sólo sé que hay algo grande esperándote a

    la vuelta de la esquina. —Se abrazaron de nuevo, y luego se fue.

    —Eso espero, —dijo Kendall a la habitación vacía, como una especie de

    oración antes de retomar sus cosas por última vez. Empacó todo lo que había

    mantenido allí durante la carrera de la serie. Necesitó dos maletas, perofinalmente lo tenía todo, y una vez que estaba seguro de que no había dejado

    nada atrás, Kendall abrió la puerta y salió al pasillo. Caminó hasta donde sabía

    que sería capaz de encontrar al director. Los productores estaban con él.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    6/226

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    7/226

     

    7

    rápidamente. Afortunadamente, sin su traje, era rara vez reconoce, por lo que

    Kendall se dirigió a la estación de metro y descendió bajo tierra.

    Tomó un tren y encontró un asiento. Las puertas se cerraron y el tren

    comenzó a moverse. Al instante, el cansancio de estar en el escenario y activo

    durante horas lo golpeó. Pero no se atrevió a cerrar los ojos, no en el metro.

    Había cometido ese error una vez, y eso le había costado la bolsa que había

    estado llevando. No hizo contacto visual con nadie, y en su parada, saltó y

    caminó por el andén hacia la salida. Subió las escaleras y salió de la estación

    antes de caminar por la acera familiar al lado oeste de Brownstone llamó a

    casa. Kendall entró en el edificio y subió las escaleras hasta su apartamento en

    el segundo piso.

    —Estás en casa, —dijo Johnny cuando Kendall cerró la puerta. Se

    besaron en señal de saludo, y Kendall dejó sus bolsas en el suelo. —¿Cómo

    fue?

    —Todo iba bien hasta el segundo acto. Entonces pareció golpear a

    todos que se trataba de la última noche.

    Hicimos un buen espectáculo, pero creo que parte de la energía era

    simplemente diferente. Es difícil de explicar, pero las cosas no estaban bien alcien por cien. No es que el público se diera cuenta , pero lo hicimos. —Kendall

    sabía que tenía que cuidar de sus cosas, pero estaba cansado y no tenía la

    energía. Johnny, sin embargo, miró las bolsas más de una vez hasta que las

    recogió y las llevó al dormitorio. —Pueden esperar por ahora—, dijo Kendall,

    con la esperanza de que Johnny viniera sentarse a su lado y ayudarlo a

    compadecerse por unos minutos.

    —Voy a seguir adelante y hacerlo, —dijo Johnny.Kendall le oyó moverse. Debería haber sabido que Johnny no se

    conformaría hasta que todo estuviera justo donde él quería. La televisión

    estaba encendida, y Kendall empezó a ver un programa sobre el hielo era una

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    8/226

     

    8

    mierda o algo así, y pronto sus ojos se cerraron. Sintió a Johnny sentarse en

    algún momento, pero estaba demasiado cansado para moverse y no hizo

    ningún esfuerzo para acurrucarse junto a Johnny. El gesto probablemente no

    sería bien recibido de todos modos.

    —Kendall, ¿vas a dormir?

    —Probablemente, —murmuró Kendall.

    —Entonces vete a la cama, —dijo Johnny, y Kendall abrió los ojos . Se

    dio cuenta de que Johnny no había dicho —ven a la cama—, ni se ofreció para

    llevarlo a la cama, de la forma en que solía hacerlo. Kendall definitivamente se

    dio cuenta de eso, pero no estaba seguro de qué hacer al respecto. Se levantó

    y se arrastró al cuarto de baño. Se aseguró de limpiarse bien, y cepillarse los

    dientes antes de salir del cuarto de baño. En el dormitorio, se desnudó y se

    metió bajo las sábanas.

    Después de unos minutos de escuchar el sonido apagado de la

    televisión, Kendall se levantó y abrió la puerta del dormitorio. —Johnny,

    ¿vienes a la cama?— Quería que se acostara con él, necesitaba a alguien en

    una noche como esta. Algo en lo que había trabajado durante meses había

    terminado y no quería que fuera así. Estaba descolocado y dañado.—No por un tiempo—, dijo Johnny. Luego, la luz y el sonido de la

    televisión terminaron cuando Johnny la apagó. Kendall suspiró y volvió a la

    cama, los últimos sonidos que escuchó antes de irse a dormir le vino del

    teclado mientras Johnny escribía en su computadora.

    Kendall se despertó unas horas más tarde. Johnny roncaba suavemente

     junto a él, y Kendall tenía un poco frío, por lo que se acurrucó a su compañero

    de casi una década y cerró los ojos de nuevo. La calidez, el confort y lasatisfacción de la piel de Johnny contra él era justo lo que necesitaba, pero

    cuando estaba a punto de dormirse, Johnny comenzó a dar vueltas y luego usó

    su peso para rodar a Kendall a su lado de la cama.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    9/226

     

    9

    El calor de Johnny desapareció mientras iba de regreso a su lado de la

    cama. —Tengo frío—, se quejó Kendall suavemente.

    —Entonces toma una manta,—  Johnny le dijo, y en unos segundos

    empezó de nuevo el suave ronquido. Kendall suspiró, empujó las mantas y

    salió de la cama. Fue al armario pequeño, tomó una manta extra y la colocó en

    su mitad de la cama, con cuidado de no ponerla sobre Johnny o estaría

    demasiado caliente. Kendall volvió a la cama y cerró los ojos. Johnny no se

    había movido, y Kendall, caliente ahora, volvió a dormirse.

    CUANDO Kendall despertó, tardó unos minutos en recordar qué día era

    y que no necesitaba ir al teatro. Domingo-Johnny debía de estar en casa, y no

    tenían que ir a ningún sitio. Oyó movimiento en la sala de estar y se deslizó

    fuera de la cama, luego se puso un par de pantalones viejos y una raída

    camiseta que era la definición misma de la comodidad. En silencio, abrió la

    puerta del dormitorio. Johnny estaba sentado en el sofá, escribiendo en sucomputadora, una expresión entrañable de concentración relajada en el rostro.

    Kendall no hizo ruido y se quedó dónde estaba, mirándolo con una

    sonrisa en su rostro.

    —¿Estás tratando de ponerme nervioso? —  Johnny preguntó, apenas

    sin levantar la vista.

    —Te estaba observando, —dijo Kendall, y se dirigió hacia el sofá y se

    sentó junto a Johnny, a continuación, apoyó la cabeza en su hombro. —Enrealidad, estaba pensando, es domingo y no tengo ningún lugar a donde ir. Yo

    No tengo que ir al teatro, y tú no tienes que ir a trabajar, así que tal vez

    podamos ir al parque o simplemente tomarnos un café en alguna parte.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    10/226

     

    10

    Johnny hizo una pausa de su trabajo. —Tengo mucho que hacer. — 

    Johnny deslizó las gafas que utilizaba para leer de cerca y las dejó en la mesa

    de café. —Tengo una fecha límite. Le prometí a Lynn que tendría este

    manuscrito por el final de la semana, y cuenta conmigo.

    —Lo sé, —dijo Kendall cuando Johnny se inclinó una vez más, cogió las

    gafas y volvió a trabajar. Lentamente Kendall frotó la espalda de Johnny. —Yo

    sólo quiero pasar algún tiempo juntos. Siempre estoy ocupado, tú trabajas

    mucho, y pensé que de un día para nosotros estaría bien.

    Johnny suspiró como si Kendall le hubiese pedido a caminar sobre

    brasas con los pies descalzos, y sin querer empujar más lejos, Kendall dejó de

    frotar y se movió hacia el otro extremo del sofá. No tenía sentido preguntar de

    nuevo, lo sabía , por lo que salió de la habitación y se dirigió al cuarto de baño.

    Se lavó los dientes, afeito, y luego ducho antes de regresar a la habitación para

    vestirse. Cuando terminó, regresó a la sala de estar. Johnny no se había

    movido y estaba sumergido de nuevo en su trabajo. En lugar de tratar de hacer

    el desayuno y tener que escuchar suspiros dramáticos y las quejas de vez en

    cuando por el ruido, Kendall agarró una chaqueta y salió del apartamento, en

    dirección a su cafetería favorita.Una vez allí, Kendall se puso en fila y esperó su turno. Había pedido su

    habitual latte y estaba sentado en una de las mesas, tratando de relajarse,

    cuando escuchó a alguien decir: —¿Dónde está Johnny?

    Él sonrió a Gina y le hizo señas para que se sentara. Vivía en el barrio, y

    habían hablado numerosas veces a lo largo de los años, por lo que se habían

    convertido en amigos. —tiene un plazo de entrega, por lo que está en casa

    trabajando, y decidí a salir por un rato para darle un poco de paz.Gina entrecerró los ojos un poco y luego tomó un sorbo de su taza. —

    ¿Las cosas no van bien? —Ella preguntó, y Kendall asintió con resignación.

    —No te puedo ocultar nada de ti, —dijo Kendall.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    11/226

     

    11

    —Nope. Pero pensé que era eso o tu programa de clausura. —Gina

    bostezó una vez y luego bebió un poco más de su café. Trabajaba en la misma

    calle en una cafetería y era más que probable que estuviese en su descanso.

    Ella tenía la edad de Kendall, pero había tenido una vida mucho más difícil. Era

     joven cuando se había quedado embarazada, Gina tenía una hija de catorce

    años de edad, Chelsea. Gina trabajaba en la tienda los fines de semana para

    poder llegar a fin de mes.

    No había sido fácil para ella. Kendall había oído todas las historias sobre

    ella en todos esos años de conocerse, al igual que Gina había escuchado

    todas las pruebas y tribulaciones por las que había pasado cuando estaba

    comenzando su carrera. —Johnny está rara en torno a ti, y... —Ella hizo una

    pausa. —Recuerdo cuando los dos eran inseparables y terminaban las frases

    del otro.

    —Estamos pasando por un difícil momento. Pero vamos a estar bien.

    Una vez que termine con su manuscrito, se podrá relajar, y voy a tener un

    poco de tiempo hasta que consiga otro trabajo, así que vamos a ser capaces

    de volver a conectar —  Kendall se dijo que, estaba actuando más

    positivamente de cómo realmente se sentía. La verdad era que no estabaseguro de cómo se sentía acerca de su relación con Johnny. No era como si

    hubiera algo malo o que estuviesen discutiendo.

    Le parecía estar creciendo aparte. Kendall sabía que algo de eso tenía

    que ver con sus horarios, pero esperaba solucionarlo pronto. —He estado

    pensando en preguntarle si quería ir de crucero o algo así unos pocos meses.

    Darnos una oportunidad de escapar.

    —Yo creo que más de una oportunidad, —dijo Gina, y luego tomó unsorbo de su taza. —Johnny es un buen hombre, y pensando en ello, los dos

    han pasado cuántos años desarrollando sus carreras? —Dejó la taza, y

    Kendall se detuvo con la taza cerca de sus labios, preguntándose cuál era su

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    12/226

     

    12

    punto. —¿Cuántos años has hecho ocho funciones a la semana, sobre todo

    por las noches, con un día libre a la semana?

    —Mucho tiempo. Hice mi primera exposición a los dieciocho años, —dijo

    Kendall, recordando el pequeño papel que había tenido.

    No había tenido muchas líneas, pero justo lo necesario para pasar una

    gran cantidad de tiempo en escena, y Kendall había tenido una gran cantidad

    de ofertas.

    —Exactamente, y tú Johnny se conocieron hace diez años más o

    menos. En toda su relación han tenido ese extraño programa, y ahora no lo

    tienen. Pero él ha construido su vida alrededor de tu horario raro. Trabajó a

    tiempo completo y escribía por las noches. Ahora sus libros han tenido éxito y

    está por su cuenta.

    —Lo sé. Los veo en los escaparates de todas las librerías —, coincidió

    Kendall.

    —Pero, ¿has leído alguno de ellos, —preguntó Gina. — Aparte de los

    primeros, ¿los has leído?

    Kendall tragó y finalmente negó con la cabeza. No había tenido tiempo

    de leerlos todos. —Entonces tal vez deberías empezar por ahí. No puedesesperar que esté todo acaramelado contigo, si no estás involucrado en su vida.

    —Dios—, dijo Kendall. —Yo no sabía que estaba siendo un verdadero

    idiota. —Se tragó el café frio y tragó saliva.

    —No lo has sido, sólo has estado ocupado. Al igual que Johnny

    probablemente no estuvo en el cierre de anoche.

     Ambos están ocupados o estaban ocupados. Pero no lo están ahora. Así

    que si quieres que las cosas cambien, probablemente necesites trabajar enello, —dijo Gina, mirando el reloj. —Tengo que regresar. —Se puso de pie, y

    Kendall hizo lo mismo. Se abrazaron, y luego se apresuró hacia la puerta.

    Kendall la vio alejarse y luego se sentó de nuevo y terminó su café.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    13/226

     

    13

    En el camino de regreso al apartamento, se detuvo en Zabar y compró

    un poco de queso, fruta fresca, y otras cosas que sabían que a Johnny le

    gustaban antes de caminar los cuatro o cinco cuadras de regreso a la casa de

    piedra rojiza.

    En el interior, se encontró con Johnny sentado en el mismo lugar,

    todavía inclinado sobre su ordenador. Estaba escribiendo a toda velocidad, y

    Kendall sabía hacer el menor ruido posible. Si las cosas no paraban, entonces

    no quería interrumpir. Guardó los comestibles y luego entró en el dormitorio,

    donde escaneó su biblioteca de uno de los libros de Johnny. Cogió uno que

    no había leído, abrió la ventana para que entrase aire fresco, y se instaló en la

    cama para leer.

    —Estás en casa,— dijo Johnny con un poco de sorpresa cuando entró

    en la habitación.

    —Sí,— dijo Kendall, levantando la vista de su libro. —Te he traído algo

    de ese queso Gouda que te gusta y algunas bayas. —Marcó su página y cerró

    el libro. Captó la mirada de Johnny y señaló sobre el colchón, esperando que

    se uniera a él. —¿Te va bien?

    —Sí, —respondió Johnny con entusiasmo. —Ha estado fluyendo rápido.— Se acercó a la cama y se apoyó más, dándole un ligero beso a Kendall.

    Kendall envolvió sus brazos alrededor del cuello de Johnny y lo arrastró

    por más, pero él se puso rígido y sólo besó ligeramente a Kendall nuevo. —

    Tengo que volver al trabajo. — Johnny se enderezó. —¿Quieres hacer la cena

    esta noche?

    —Claro, yo puedo cocinar, —dijo Kendall, y Johnny asintió y salió de la

    habitación. Pronto lo oyó tocando casi frenético las claves del equipo una vezmás. Suspirando suavemente, se levantó y fue a la cocina para conseguir una

    lata de refresco y unas galletas antes de regresar a la habitación. Esta vez se

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    14/226

     

    14

    instaló en la silla y poniendo sus pies en alto, se consoló pensando que si no

    podía pasar tiempo con Johnny, al menos podía pasar tiempo con sus historias.

    Debió de leer durante unas horas. El tiempo pareció volar cuando entró

    en el libro. Johnny escribía historias de aventuras alrededor de la búsqueda de

    objetos o fragmentos de conocimiento famosos. Cuando se conocieron, Johnny

    Todavía estado en la universidad terminando una maestría en historia.

    Había planeado ir a por su doctorado y luego enseñar a nivel universitario.

    Unos meses después de que se hubiesen mudado a vivir juntos, Johnny dejó

    caer un fajo de impresos de computadora sobre la mesa y le pidió a Kendall

    que los leyera. Era la primera mitad de su primera novela. La había iniciado

    como un capricho durante un descanso de la escuela, y para cuando tenía su

    título de maestría, el libro estaba terminado. Había cometido el error de

    mostrárselo a uno de sus profesores, que lo había considerado un trabajo trivial

    y bajo para un verdadero historiador. Johnny casi se había dado por vencido,

    pero Kendall le había empujado, y para cuando Johnny había comenzado su

    trabajo de curso para su doctorado, tenía un agente, y para el final del primer

    semestre, un contrato. Una vez que el libro fue publicado, subió como la

    espuma, y Johnny Harker se convirtió en una sensación. Escribió dos libros alaño todos en las listas de libros más vendidos. Al leer uno de los libros de

    Johnny por primera vez en mucho tiempo, Kendall entendió por qué.

    —Sal quiere que le llames, —Johnny lo llamó desde la otra habitación.

    Kendall no había oído el teléfono.

    —Él llamó mientras estabas fuera, pero se me olvidó hasta ahora.— 

    Johnny no dijo nada más, y el ruido del teclado comenzó de nuevo. Kendall

    apretó los puños en señal de frustración. Se incorporó y caminó a la puerta deldormitorio, listo para gritarle a Johnny, pero se contuvo. Solo conseguiría que

    Johnny se molestase y luego perdería su tren de pensamiento, por lo

    que caminaría del salón hasta la habitación pisando fuerte hasta que aclarase

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    15/226

     

    15

    sus ideas. —Lo siento—, dijo Johnny de nuevo y continuó escribiendo. Kendall

    arrebató el teléfono de la mesita de noche y marcó el número de su agente,

    comprobando la hora en su teléfono.

    —Sal, soy Kendall, —dijo cuando el hombre más rudo contestó al

    teléfono. Era uno de esos viejos agentes que fumaban, comían y bebían

    demasiado, pero conocían a cada persona en la ciudad.

    —Ya era hora de que me llamaras, chico. Ya estaba a punto de pasarle

    esta oportunidad a otra persona. —Sal siempre decía mierdas así.

    —Sí, claro que ibas a hacerlo, y yo estaba a punto de ver si podía

    hacerme con un agente de bienes. Ahora que pasamos por las bromas, ¿qué

    pasa? Y ¿por qué estás en la oficina en domingo? ¿No va siendo hora de que

    visites el cementerio para elegir tu parcela?

    Sal rió de buena gana. —No, pero puedo tomar la tuya si no aprendes

    un poco de respeto. Por supuesto, la indignación era falsa. Kendall amaba a

    Sal casi como a un padre, era el mejor, y había guiado su carrera con

    destreza, asegurándose de que Kendall sólo tomaba las obras correctas. Por

    supuesto que habían discutido en ocasiones, pero Sal por lo general tenía

    razón. —Entonces, ¿cómo está tu socio? ¿Está en medio de escribir otrobestseller? Ethel lee cada uno de sus libros.

    —Me aseguraré de decírselo, y sí, eso espero. Está en una fecha límite,

    y el mundo puede detenerse que no se daría cuenta, a menos que de alguna

    manera hiciese que su ordenador no funcionase. Así que porque estás

    trabajando en domingo?

    —Tú, hijo. Parece que finalmente se ha corrido la voz de que el

    espectáculo se ha cerrado y que eres libre. He estado recibiendo llamadasdesde esta mañana, y tenemos algunas ofertas, grandes ofertas. Podría haber

    elegido entre el fantasma de la opera o uno de los padres en Mamma Mia.

    Pero yo les dije a todos que no.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    16/226

     

    16

    —¡Sal! —Kendall dijo con sorpresa. —Me estás matando.

    —No, no lo estoy. Estás más allá de eso ahora. Se originan los roles, no

    sigues a otros. Por supuesto, no hay nuevos roles en estos momentos. Las

    cosas están bastante estancadas.

    —Bueno, entonces por lo que has hecho, no puedo trabajar. ¿Es eso

    lo que me estás diciendo? —Kendall mantuvo la voz baja porque no quería

    interrumpir a Johnny, de lo contrario habría estado gritando a pleno pulmón.

    —No permitas que tus bragas den un giro, o cualquier tipo de ropa

    interior que tengáis en los cajones los chicos gays. Te sostenía por algo

    realmente bueno, y me llamaron esta mañana. —Parecía tener algo bueno.

    ¿Una Llamada de quién?

    —Hollywood, —dijo Sal. —Una de las unidades de Disney tiene un script

    que han tenido guardado durante un tiempo porque no han sido capaces de

    encontrar a la persona adecuada para el papel principal. Mira, necesitan a

    alguien con el físico, pero también alguien que puede aportar un carácter en

    profundidad a la vida y mostrar una variedad de emociones en menos de dos

    horas. Los convencí de que lo que realmente necesitaban era un actor de

    teatro, alguien con presencia y la capacidad de mantener la audiencia con elhueco de un dedo o la elevación de las cejas. Y ése eres tú. Ellos amaron las

    cosas que les envié y les encantó tu presencia en el escenario.

    —Está bien, pero yo nunca he trabajado en una película anteriormente.

    Sólo he hecho teatro en vivo y lo sabes, —Kendall dijo con el estómago turbio

    en una mezcla de emoción y miedo.

    —Sí, y lo saben. Esta no es una superproducción de gran presupuesto.

    Es una película pequeña, pero tiene el potencial para convertirse en enorme.También necesitan a alguien que pueda llevar una escena solo, porque una

    gran parte de la película se centrará sólo a ti.

    —¿Y cómo se llama esta película?

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    17/226

     

    17

    —Varado. Me enviaron una copia del guion, y he hecho una copia te la

    mandaré con un mensajero esta tarde. Yo realmente creo que deberías hacer

    esto. Si no te gusta hacer películas, entonces puedes volver a Broadway, pero

    este es el siguiente paso para ti. Tienes un montón de papeles aquí, y la

    comunidad no es grande.

    —Dímelo a mí es casi incestuosa, —coincidió Kendall.

    —Sí. Así que ve el resto del mundo. Ellos te quieren en Hollywood en

    una semana, y empiezan a grabar en dos. Te debe tomar alrededor de tres

    meses para rodar toda la película, y para entonces, si lo deseas, habrá un

    montón de papeles disponibles aquí si quieres.

    —No estoy seguro de esto, —dijo Kendall. —Yo no tengo que trabajar.

    Puedo esperar aquí unos cuantos meses. —Él y Johnny podrían pasar algún

    tiempo juntos.

    —No, hijo. Sabes que es trabajar o morir. Hacer esto será bueno para ti,

    —dijo Sal en su forma brusca. Cuando Kendall vaciló, Sal continuó. —Mira, te

    he visto en el escenario, ¿recuerdas? Tienes que jugar a la fila de atrás, pero

    siempre haces esas pequeñas cosas en tus actuaciones para los de la

    primera fila. Bueno, eso es lo que quieren. Esos pequeños gestos que siempreincluyes son los que serán vistos y recordados.

    Toma la oportunidad, chico, por el amor de Dios. Porque si yo estuviera

    en tu lugar, estaría en un avión tan rápido...

    —Está bien, Sal, me diste tu punto. Déjame ver la secuencia de

    comandos.

    —Está bien, estaré aquí mañana. Me darás tu contestación. Saluda a

    Johnny por mí y recoge el paquete. Esperaré tu llamada. —Sal colgó, yKendall se quedó mirando el teléfono durante un segundo antes de tirarlo en la

    cama y caminar a la sala de estar.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    18/226

     

    18

    Johnny tenía sus brazos sobre su cabeza, moviendo su cuerpo de un

    lado a otro, muy probablemente en un esfuerzo por resolver las torceduras.

    Pero en cuestión de segundos, la imagen que le llegó a Kendall fue las de un

     joven Johnny haciendo el mismo movimiento, pero en lugar de para resolver las

    torceduras, retorciéndose en el colchón, rogando y gimiendo, mientras Kendall

    lo recibía sin piedad. Maldita sea, Johnny había sido hermoso, infierno, él

    todavía lo era, y más aún cuando lo cabalgaba, Kendall estuvo tentado de ir

    andando hacia Johnny, tirarse por encima de su cabeza, y recordarle a

    Johnny lo divertido que era estar juntos. —¿Qué dijo Sal? —Johnny preguntó,

    con sus brazos hacia abajo y colocando los dedos sobre las teclas, dispuesto

    a empezar de nuevo.

    —Él me llamó para decirme acerca de una oferta, —dijo Kendall.

    —¿Así que era para eso, y cuando empiezas? —Johnny preguntó y

    comenzó a escribir de nuevo, la atención en su pantalla.

    —Bueno, en realidad, se llama Voy desnudándome para ti y necesito

    desnudarme en el escenario y pasear por un campo de batalla, mientras que

    finjo tener relaciones sexuales con caballeros. Una especie de Equus con The

    Full Monty.—Eso está bien, —dijo Johnny, sin dejar de trabajar.

    —Johnny, —Kendall se rompió, y finalmente Johnny dejó de teclear. —

    No estabas escuchándome. —Kendall se acercó y se sentó junto a Johnny en

    el sofá. —Lo primero, es que realmente deberías tener un mejor lugar para

    trabajar.

    Johnny puso ojos e hizo un poco de movimiento -para arriba con el

    dedo. —En segundo lugar, Sal llamó con algo que ofrecerme, pero no es unespectáculo. Quieren que haga una película. Un mensajero me traerá el guion

    esta tarde, y yo necesito hacerles saber mi respuesta mañana. —No estoy

    seguro de cómo vas a reaccionar Johnny, Kendall contuvo el aliento. —Puedo

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    19/226

     

    19

    esperar por un espectáculo aquí en la ciudad, en su lugar. Debe haber algunas

    aperturas y oportunidades en los próximos meses-en cualquier momento —,

    explicó en un apuro.

    —Creo que deberías hacerlo, —dijo Johnny. —Lee el guion primero,

    para asegurarte de que te interesa, y luego ir a por ello —. Johnny volvió a su

    equipo, pero no comenzó a escribir de inmediato. —¿Cuándo te vas y cuánto

    tiempo crees que estarás fuera ? —preguntó Johnny, de la misma manera en

    que le habría preguntado cuanto iba a tardar en la tienda de comestibles.

    Kendall no estaba seguro de cómo se sentía al respecto.

    —Ellos quieren una respuesta para mañana, y tendría que viajar a Los

     Ángeles en una semana, probablemente, para negociar el contrato. El rodaje

    está programado para comenzar una semana más tarde, y estaría unos tres

    meses.

    Kendall tomó la mano de Johnny. —Podrías venir conmigo. Tendría un

    remolque, y podrías trabajar allí.

    Johnny negó con la cabeza. —Tengo que estar aquí. Las bibliotecas de

    investigación que conozco están aquí, y tengo acceso a las bibliotecas de

    Columbia. Fuera de allí, estaría lejos de todo lo que necesito para trabajar.Serían sólo tres meses y luego volverías. Por entonces yo tendría mi próximo

    libro descrito, investigado, y sobre todo escrito. Podría estar a la cabeza, y

    podríamos tomar unas vacaciones o algo así, tal vez. —Johnny se volvió hacia

    el ordenador. —Siempre he pensado que deberías de hacer películas. Eres lo

    suficientemente bueno, más que bueno para eso. —Se volvió hacia él, y

    Kendall vio un atisbo de la emoción que habían compartido después de que

    había conseguido su primer papel importante. Por supuesto, la celebración deesa noche había terminado en el dormitorio, y había sido fuerte lo suficiente

    como para ser la comidilla de la escalera a la mañana siguiente. De alguna

    manera pensó que no sería así esta noche.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    20/226

     

    20

    —¿Quieres venir a verme mientras estoy ahí, —preguntó Kendall, y

    Johnny apartó las manos del teclado.

    —Por supuesto que iré a visitarte una o dos veces mientras estés allí.

    Pero sospecho que vas a estar ocupado casi todos los días a todas horas. Pero

    definitivamente voy a ir. —Johnny sonrió y luego se puso de pie, tirando de

    Kendall en un abrazo. —Hay grandes bibliotecas por ahí que puedo visitar con

    fines de investigación. — Kendall regresó el abrazo de Johnny, pero su corazón

    no estaba en él. —Gracias, creo, — murmuró.

    Johnny estuvo en silencio durante unos segundos. —No quise decirlo de

    la forma en que sonó. Pensé que, mientras estuvieras trabajando, podría ir a

    algunas bibliotecas y hacer algunas investigaciones.

    —He estado contigo el tiempo suficiente para saber lo que querías

    decir.— Kendall dio un paso atrás. —Es sólo que voy a estar fuera durante

    meses, y no pareces decepcionado.

    Johnny volvió a sentarse. —Pero no va a ser tan diferente. Yo trabajo

    durante el día y por la noche. Voy al cine por la tarde y trabajo hasta seis días

    a la semana. En realidad no nos vemos muy a menudo ahora. Claro, te voy a

    echar de menos, y te extrañare . Pero como he dicho, vas a hacer la película yvoy a terminar otro libro, y luego podremos tomar unas vacaciones. —Johnny

    tenía esa mirada lejana que significaba que sus personajes hablaban con él.

    —Cariño, realmente tengo que hacer esto. Entonces esta noche podremos

    pasar algún tiempo juntos.

    El timbre de la puerta sonó. Kendall lo odió, pero sabía que

    probablemente era el mensajero, por lo que se dio la vuelta y salió del

    apartamento, luego tomó las escaleras a la planta principal. Efectivamente, viouna bicicleta con un mensajero esperando fuera de la puerta. Tomó el paquete

    y le dio al niño una propina antes de que la puerta se cerrase herméticamente

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    21/226

     

    21

    y volviera al apartamento. Johnny estaba de vuelta en el trabajo, inmerso en

    su historia, y Kendall sabía que tenía que dejarlo trabajar.

     Abrió el sobre y sacó el guion de Varado, luego tiró el envoltorio.

    Se sentó en una de las sillas, el chasquido de las teclas del ordenador

    acompañándole mientras empezaba a leer.

     Apenas se movió durante casi dos horas mientras leía el guion de

    principio a fin. En el momento en que terminó, tenía una idea excelente sobre la

    historia.

    — Así que, ¿qué te parece? —Preguntó Johnny. La tapa de su equipo se

    cerró y Johnny le entregó un vaso de té helado. —Pensé que podrías necesitar

    algo de beber.

    —Sí, creo que sí—, dijo Kendall mientras tomaba el vaso y se bebía la

    mitad. —Esto es ....—  Kendall tomó aire. —Creo que esto podría ser muy

    poderoso, pero no sé si puedo hacerlo. — Abrió el guion y encontró las páginas

    que quería. —El personaje principal se queda varado en un coche. Sabes que

    soy claustrofóbico, y me quieren esposar en un coche durante horas y horas.

    —Kendall ya podía sentir el sudor que amenazaba con romper todo

    pensamiento.Johnny lo leyó durante unos minutos. —Hey, piensa en ello. El coche

    sólo será una parte de un automóvil, porque tienen que filmarlo. Así, mientras

    que parecerá que estás atrapado en un auto, no será verdad. —Johnny le

    entregó la copia. —Creo que estás tratando de encontrar excusas para no

    tener que hacerlo.— Johnny se sentó junto a él. — Aquí en Nueva York, eres un

    pez gordo. Todo el mundo sabe quién eres, y sí, se puede conseguir casi

    cualquier cosa que desees. Pero esto sería como empezar de nuevo. Deberíassentirte excitado, sin miedo.

    —¿Estás tratando de deshacerte de mí, —preguntó Kendall.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    22/226

     

    22

    —No. Sólo te estoy devolviendo el favor. Me animaste con mi primer

    libro, y ahora es el momento de que yo haga lo mismo por ti. Necesitas

    extender tus alas. —Johnny ligeramente le acarició la pierna y luego se inclinó

    y lo besó suavemente. Kendall esperaba algo un poco más caliente, y trató de

    tirar de Johnny cerca, pero se apartó. —Tengo una cita con uno de los

    bibliotecarios de Columbia.—  Johnny lo miró a los ojos . —Sólo voy a estar

    fuera durante un par de horas, y cuando vuelva, podemos cenar juntos. Te lo

    prometo.

    —En un domingo por la tarde, —preguntó Kendall, pero Johnny ya se

    había levantado y se iba. Agarró la chaqueta y salió a toda prisa de la vivienda.

    Kendall no sabía qué diablos hacer, por lo que regresó al dormitorio y abrió el

    libro que había empezado antes. Pero no podía concentrarse.

    El teléfono celular sonó, y espetó el libro cerrado encontrando el

    teléfono de Johnny. Respondió para detener su zumbido incesante. —Hola—,

    dijo Kendall tentativamente.

    —Johnny, —preguntó una voz masculina joven.

    —No, soy Kendall, ¿puedo ayudarle?

    La línea quedó en silencio unos segundos. —No, está bien. Lo veré mástarde. —La llamada se desconectó, y Kendall miró el número parpadeando.

    Dejó el teléfono en la mesa de café y estaba a punto de volver a su lectura,

    pero en cambio, tomó el teléfono de nuevo y miró el historial de llamadas. Si

    bien no había nombre en la guía, Johnny había estado recibiendo llamadas del

    mismo número cada pocos días durante al menos el último mes o así. Kendall

    cerró el teléfono y lo puso de vuelta donde lo había encontrado.

    Necesitaba algo que hacer, por lo que decidió comenzar la cena. Cortólas verduras y las preparó para cocinar. Aliñó la carne que había comprado

    anteriormente y dejó que se asentase para que tomase un poco de sabor, y

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    23/226

     

    23

    Peló las patatas antes de prepararlas para hervir. Todo el tiempo,

    Kendall se encontró mirando cada uno segundos el teléfono de Johnny, y

    finalmente se permitió darle voz a lo que temía: ¿Estaba Johnny teniendo una

    aventura? Al menos eso explicaría la falta total de interés. Dios, no quería

    pensar así, y su corazón le dolía. Él amaba a Johnny, y lo necesitaba. Johnny

    era su ancla, su roca.

    Siempre lo había sido.

    Habían estado creciendo aparte, podía ver eso. Pero tal vez era sólo un

    producto de sus vidas ocupadas y meses o años en muy diferentes horarios.

    Su teléfono sonó, y Kendall esperaba que fuera Johnny. No hubo suerte.

    —Oye, Sal —, dijo Kendall cuando contestó.

    —¿Tienes el guion?

    —Sí, y lo leí, —dijo Kendall.

    —Bueno. Quería asegurarme. Necesitan una respuesta mañana —, le

    dijo Sal y Kendall asintió.

    —Lo sé, y la tendrás. Tengo que pensar las cosas. Sé cómo te sientes, y

    yo estoy pensándomelo muy bien, —Kendall dijo mientras se acercaba a la

    ventana, mirando hacia la calle relativamente tranquila a continuación. —Tengoque ser honesto, estoy nervioso por hacerlo.

    —Por supuesto que sí, —dijo Sal. Kendall se instaló en el banco y miró a

    la gente y a los coches que pasaban por la estrecha calle. —Esto va a ser

    diferente con toda la gente nueva, pero sé que es momento de que lo hagas.

    He representado a muchas personas que han pasado desde Broadway a

    Hollywood durante mi carrera, y rara vez se alguno de ellos recibió un vehículo

    perfecto para hacer la transición como el que tú tienes.—Pero, Sal, van a encerrarme en un coche, —Kendall dijo mientras

    observaba la mitad de la ventana.

    —Lo sé. ¿No es maravilloso?

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    24/226

     

    24

    —¡Sal! — Kendall gritó.

    —No hables en ese tono conmigo. Sé cómo te sientes acerca de los

    espacios cerrados, pero es por eso que es perfecto para ti. Usa ese miedo en

    la película. Que vean lo que te hace y tu carácter. No huyas de él, abrázalo.

    Confía en mí —, dijo Sal y Kendall suspiró suavemente. —Te dije que era

    perfecto.

    —Si tú lo dices, — Kendall vio que un taxi se detenía delante del edificio.

    —Como te he dicho, me asegurare de llamarte el lunes por la mañana. —Se

    abrió la puerta, y Johnny salió. —Me tengo que ir. Johnny acaba de llegar de la

    biblioteca, y tengo que preparar la cena.

    —Tenéis prevista una gran noche de celebración, —preguntó Sal.

    La sonrisa de Kendall con el pensamiento duró hasta que vio a otro

    hombre inclinarse fuera del coche. Parecía estar hablando con Johnny. El otro

    hombre desapareció de la vista de nuevo en el coche, y Kendall vio a Johnny

    desaparecer en el interior del vehículo durante unos segundos y luego de

    vuelta otra vez. Johnny cerró la puerta del taxi, y Kendall podría haber jurado

    que vio una enorme sonrisa en el rostro de Johnny antes de desaparecer de la

    vista.—Kendall, ¿estás ahí? —Preguntó Sal.

    —Estoy aquí, —dijo. —Dile a la gente en Hollywood que lo haré. —Dijo

    Kendall. Tal vez tres o cuatro meses fuera de allí para explorar un poco y

    averiguar lo que realmente quería no era tan mala idea después de todo.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    25/226

     

    25

    Capítulo 2

    Una semana después, Kendall le dijo adiós a Johnny, que para

    satisfacción de Kendall, parecía triste con su salida. Kendall había visto

    algunas llamadas misteriosas que Johnny recibía durante el día y siempre

    salía corriendo justo después, con la excusa de tener que ir a la biblioteca para

    una cita que había olvidado. Kendall no había dicho nada, porque a pesar de

    que estaba cada vez más convencido sobre el motivo de estas llamadas, no

    había querido forzar la situación justo antes de irse. Kendall también sabía que

    era porque seguía esperando estar equivocado. Después de todo, había

    estado fuera casi todas las tardes durante la mayor parte de su relación. Tal

    vez se trataba de una rutina regular que la investigación de los libros de

    Johnny involucraba.

    Johnny le había llevado al aeropuerto, y le dijo que iría a visitarlo en unmes más o menos. Después de un abrazo que, para alivio de Kendall, duró

    más de lo necesario, se puso en línea en La Guardia, y después de esperar,

    pasó por la seguridad y, a continuación, volvió a esperar, se subió al avión y

    voló todo el país en su camino a Los Angeles. El vuelo en sí fue largo y

    aburrido, pero Kendall tenía su copia del guion, pasó algún tiempo adicional

    leyendo, así como uno de los libros de Johnny. —Lo he leído, — la señora en

    el asiento junto a él dijo en un momento. —Es muy bueno.—Lo estoy disfrutando—, dijo Kendall. —Fue un regalo del autor.

    Los ojos de la mujer se iluminaron y estuvo a punto de rebotar en su

    asiento. Debido a su vida pública, ninguno de ellos había hablado abiertamente

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    26/226

     

    26

    sobre su relación. Sus amigos lo sabían, pero ninguno de ellos se manifestaba

    en desfiles ni nada así. —Sí. Él es un amigo especial —, dijo Kendall, dejando

    las cosas así. Johnny siempre había dicho que los lectores son lectores y él no

    quería molestar a ninguno de ellos , así que no había nada de Kendall en la

    biografía impresa, al igual que no había nada en Johnny en la biografía

    Playbill de Kendall. Ambos habían acordado hacía mucho tiempo que su vida

    privada era sólo eso: privada.

    Kendall volvió a su libro, y fue recompensado por mantener la boca

    cerrada cuando la mujer sacó su propio libro de su bolso-uno de esos —de

    autoayuda a través de la oración— . Kendall sonrió y asintió con la cabeza, sin

    dejar de leer hasta que terminó el libro al mismo tiempo que las azafatas

    preparaban el avión para el aterrizaje.

    Le habían dicho que un coche sería enviado a por él, y una vez que

    desembarcó y tomó las escaleras mecánicas para retomar su equipaje, un

    hombre de librea estaba esperando con su nombre en una pequeña señal. —

    Ese soy yo. —Dijo Kendall.

    —Muy bien, —dijo el chofer. —Le voy a ayudar con su equipaje y lo

    llevaré a su hotel.Kendall asintió con la cabeza y se dirigió hacia el carrusel del equipaje.

    Consiguió su equipaje, y el conductor puso las bolsas en un carro y abrió el

    camino al exterior. Otro hombre, elegantemente vestido, estaba al lado de una

    limusina. La puerta se abrió para él, y Kendall se subió en la parte trasera. Los

    asientos eran lujosos y cómodos después de los asientos duros del avión.

    Había un bar lleno y una iluminación suave y música si la quería. Él oyó como

    su equipaje era colocado en el maletero y cerraban el maletero. Después deunos momentos, el vehículo comenzó a moverse , y Kendall se recostó y cerró

    los ojos. El vuelo había sido largo y había oído hablar del tráfico de Los

     Angeles, por lo que se preparó. Sabía que tenía que descansar, pero en su

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    27/226

     

    27

    lugar pasó el tiempo mirando por las ventanas como las palmeras y colinas

    verde-marrón salpicadas de casas pasaban por delante de él, ya que avanzaba

    por la autopista.

    Finalmente, salieron de la autopista e hicieron una serie de giros que

    dejaron a Kendall perdido completamente hasta que se detuvieron bajo el

    pórtico de un hotel. La puerta fue abierta por uno de los conductores y Kendall

    salió, inmediatamente deseando tener las gafas de sol. —Vamos a llevar su

    equipaje —, el hombre elegantemente vestido le dijo.

    —Gracias,— Kendall respondió y se dirigió al hotel. No estaba seguro de

    lo que había estado esperando.

    El hotel estaba muy bien, pero esto era Hollywood, y había estado

    esperando un gran hall de entrada, lámparas de araña, tal vez incluso estrellas

    caminando a través del vestíbulo con brillantes vestidos, no un hotel agradable

    pero normal con gente normal caminando por todas partes. —Kendall Monroe

    —, le dijo a la recepcionista.

    —Por supuesto, le estábamos esperando, —dijo con una sonrisa y

    asintió con la cabeza a uno de los botones, quien tomó el equipaje de Kendall

    del conductor. —Yo sólo necesito una tarjeta de crédito para imprevistos—,explicó, y Kendall se la dio.

    —Estaremos esperándolo, señor,— dijo en voz muy baja el conductor.

    —Los productores y el director lo esperan en el estudio en —-miró su reloj-— 

    dos horas.

    —Gracias.... —Kendall le tendió la mano.

    —Juan—, dijo, estrechando la mano de Kendall. —Soy uno de los

    ayudantes del director, —explicó Juan.—Bueno, en realidad, soy el asistente del asistente del Sr. Davidson.— 

    —Es un placer conocerte, Juan, —dijo Kendall.

    —el placer es mío, señor Monroe.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    28/226

     

    28

    —Kendall, por favor, —le corrigió y se volvió a la recepcionista, que

    tenía cosas para que firmara. Lo hizo donde le indicó, escuchando mientras se

    lo explicaba todo. Kendall tomó sus llaves y la tarjeta, y el botones y Juan le

    siguieron hasta el ascensor.

    —¿En qué habitación está usted, señor? —Preguntó el botones, y

    Kendall le dijo el número. Bajaron del ascensor , y el botones les llevó a la

    habitación, y luego tomó la llave de Kendall y abrió la puerta.

    Llevaba su equipaje y lo puso en el suelo, explicó dónde estaba todo , y

    abrió la cortinas. Kendall quedó cautivado inmediatamente con la vista a la

    ciudad en frente de él, que se extendía hasta donde le alcanzaba la vista.

    En el momento en que se dio la vuelta, el botones había desaparecido y

    sólo quedaba Juan cerca de la puerta. —desempaquetaré mis cosas y nos

    podemos ir. Podría ver algo a mi alrededor antes de que tenga que ir a la

    reunión —. Kendall indicó Juan hacia una de las sillas y empezó a desempacar.

    La tarea no le tomó mucho tiempo, y Kendall notó que Juan lo observaba de

    cerca. —¿Hay algún problema?— Kendall preguntó mientras cerraba el cajón.

    —No, —dijo Juan. —Es que todavía estamos a tiempo. —Juan se

    levantó y se acercó. —Eres un hombre muy guapo —, añadió, su acento ahoramás fuerte. —Me dijeron que hiciera cualquier cosa que pudiera ayudarte a

    sentirte más cómodo. —Juan dio un paso más cerca, entrando en el espacio

    personal de Kendall. Puso su mano en el pecho de Kendall. —Como he dicho,

    eres muy guapo.

    —Juan, —dijo Kendall, colocando su mano sobre Juan de y luego,

    lentamente, la retiró.

    —¿Tú no eres gay? —Preguntó Juan, dando un paso atrás.—No es eso, —dijo Kendall. —Tengo a alguien en mi vida. —No estaba

    seguro de lo que él y Johnny eran en ese momento. Aunque pensase que

    Johnny le estaba engañando, no tenía ninguna prueba, por lo que no lo

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    29/226

     

    29

    engañaría. Incluso con los ojos color marrón oscuro de Juan y el toque de

     joven, viril muscular bajo su luz y la camisa blanca fluyendo haciéndolo

    condenadamente tentador. —eres un hombre guapo también, Juan, y estoy

    muy halagado, pero esta no es la forma en la que yo quiero empezar las cosas

    por aquí. —Dios, esto no era en absoluto lo que había estado esperando.

    Juan dirigió su mirada al suelo. —Voy a esperar fuera hasta que estés

    listo.

    —No es necesario—, dijo Kendall, guardando la última de sus cosas. —

    Podemos irnos ahora.—  Estaba tratando de actuar como si nada hubiera

    pasado. Después de todo, había cosas peores que recibir una proposición de

    un hombre joven con ojos profundos y un cuerpo que se movía con la gracia de

    un bailarín. Llegaron al ascensor y entraron en silencio.

    —¿Quieres que ir delante ahora ?—, Preguntó Juan, y Kendall puso

    ojos.

    —No, —dijo, entrando en la parte de atrás de la limusina. Juan lo siguió,

    y el conductor cerró la puerta. —Entonces, ¿qué se supone que sucederá una

    vez que lleguemos al estudio?

    —Bueno, se supone que debes cumplir con los productores y el director.Si hay tiempo, puedo mostrarte el aparcamiento un poco. Parte de la película

    se rodará en un plató, pero por lo que he oído, algunas escenas del coche se

    rodarán en el desierto al oeste de aquí. Se habló de que el Sr. Davidson iba a

    pasar algún tiempo, explorando lugares, pero no sé si se ha decidido algo

    todavía.

    —Está bien, —dijo Kendall y se volvió para mirar el paisaje que pasaba

    fuera de la ventana. —¿Cómo lo voy saber, cuando se supone que debo estardónde ? Sólo he hecho teatro, y eso es muy fácil.

    Nos dicen la hora para presentarse, y lo hacemos. Siempre es el mismo

    teatro, día tras día.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    30/226

     

    30

    —Dios, debe ser aburrido—, dijo Juan con un amago de sonrisa. —El

    equipo de producción te mantendrá informado, y por supuesto el director,

    también. —Juan se movió ligeramente en su asiento. —Vas a hacerlo muy

    bien. La cosa es que no dejes que te sacudan.

    —¿Por qué? —Preguntó Kendall y Juan se movió un poco más cerca.

    —Mira, parece que hay una... diferencia de opinión acerca de ti. Así que

    varias personas podrían tratar de sacudirte a ver de lo que estás hecho.

    —¿Algo así como hacerle trastadas al nuevo?—  Preguntó Kendall.

    Recordó las bromas del elenco en su primera vez como protagonista. No eran

    maliciosos, sólo fueron unas pocas bromas. Había esperado ese tipo de cosa.

    —Sí, probablemente—, dijo Juan en serio, y Kendall tuvo la sensación

    de que todo lo que estaba pasando era mucho más grande y probablemente

    iba mucho más allá de bromas inofensivas. —Como he dicho, no dejes que te

    sacudan.

    —Voy a hacer mi mejor esfuerzo, —dijo Kendall. Había pasado los

    últimos quince años en torno a personas con graves rencillas, egos y

    requisitos menores. Pensó que podía manejar cualquier cosa que estas

    personas le arrojaran. Pero a partir de la expresión de duda en el rostro deJuan, el asistente del asistente no lo creía. —No te preocupes. Pasé años

    tratando con directores temperamentales y coprotagonistas en Broadway.

    —Si tú lo dices, —Juan dijo y luego llegó hasta el asiento de al lado.

     Abrió una aplicación en su smartphone. —Como he dicho, tienes que reunirte

    con los productores y el director. Más tarde, tienes la cita con el vestuario para

    que puedan tomarte todas las medidas. Después de eso, nos detendremos en

    maquillaje para que puedan echar un vistazo a tu cara y tono de la piel.Después de eso, es la cinematografía, donde te pondremos delante de la

    cámara para que puedan ver la luz, los filtros y otros efectos que funcionan

    mejor para ti.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    31/226

     

    31

    —¿Hay algún tipo de prueba de pantalla en el programa? En cierto

    modo me imaginé que querrían verme frente a una cámara antes de

    contratarme.

    Juan lo miró con recelo. —Ellos lo hicieron. Según tengo entendido,

    hiciste un especial de televisión hace un año para promover uno de tus shows.

    Por lo que vi, la cámara te quiere.

    —Está bien, —dijo Kendall, tratando de recordar ese show. No habían

    sido más de cinco minutos, y todo lo que había hecho fue a hablar con uno de

    los anfitriones y realizar una de las canciones del espectáculo. Parecía que se

    basaban muchas decisiones en unos pocos minutos, pero de nuevo, esta gente

    sabía lo que estaban haciendo. Por lo menos, esperaba que lo hicieran. El

    coche se detuvo, y Kendall se asomó.

    Parecían haberse detenido en una puerta.

    —Estamos entrando en el estudio, —dijo Juan, y después de un minuto

    les abrieron y entraron por lo que parecía ser un camino, pero la mayoría del

    tráfico parecían ser carritos de golf. Viajaron lentamente, probablemente

    atrapados detrás de uno de los carros. Finalmente se detuvieron. La puerta se

    abrió, y Kendall salió del vehículo grande, seguido por Juan. Unas cuantaspersonas se detuvieron para mirar, pero se movieron rápidamente. —están

    comprobando si eres alguien.

    —¿Qué? —Preguntó Kendall.

    —Están comprobando si te reconocen. Muchas de las personas de todo

    el personal son de estudio o extras, y a veces se detienen a ver si reconocen a

    alguien famoso.

    Kendall, obviamente, no llamó su atención por mucho tiempo, porquecada uno siguió su camino. Juan caminó alrededor del coche y habló con el

    conductor. Luego caminó hacia donde Kendall estaba esperando y estiró la

    cabeza para mirar todo a su alrededor. Había muy poco que ver, sobre todo lo

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    32/226

     

    32

    que conjeturó eran platós, grandes edificios que parecían iguales, pintados del

    mismo tono blanquecino.

    —Yo esperaba que fuera más... interesante, —dijo Kendall, y Juan se

    echó a reír.

    — Aquí, la magia sucede en el interior, y hay zonas más interesantes.

     Algunos de los estudios siguen manteniendo sus backlots, como en Universal,

    y se alquilan para diversas películas. Todo es un negocio, y todo lo que está

    aquí es para hacer películas o programas de televisión, se espera que hagan

    dinero. —Juan rió.

    —Tenemos algo de tiempo. Puedo mostrarte todo un poco, si quieres. —

    Juan empezó a caminar, y Kendall lo siguió.

    —Si ves que están filmando, simplemente guarda silencio, y hagas lo

    que hagas, quédate fuera de la toma.— Anduvieron perdidos por la calle de

    platós hasta que llegaron a la parte de atrás. —Ese es el set de rodaje.

    —Se ve como una especie de ciudad hueca, —dijo Kendall. Por

    supuesto, ¿qué otra cosa iba a esperar? —Son como escenografías, sólo que

    grandes.

    —Exactamente. El frente está vestido para la película, y nadie más queel equipo llega a ver la parte de atrás, así que eso de la izquierda se queda tal

    y como lo ves. La mayor parte de lo que se ve como los edificios en las

    películas son sólo un marco. La mayoría de los disparos sucede en estudios

    de sonido, ya que es mucho más fácil de controlar todo. No hay problemas de

    tiempo, y la luz es sólo de la forma en que se desee. Pero a veces no es

    posible, por lo que entonces las películas se filman en exteriores.

    Para Varado, ha habido gente buscando locaciones por un mes o más.Pero el señor Davidson necesita que estén bien.

    Kendall asintió y se dirigió de vuelta por donde habían venido. —Hace

    un poco de calor —, señaló Kendall, y se trasladó a la sombra de los grandes

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    33/226

     

    33

    edificios, donde se estaba más fresquito. No quería ser un sudoroso lío en la

    reunión.

    —Lo siento, debería haber estado prestando atención—, dijo Juan, y

    luego se detuvo. —Mira, no le dirás al Sr. Davidson acerca de lo que pasó... ya

    sabes, en el hotel. Él probablemente me despediría... no es que él realmente

    sepa quién soy, todavía —.

    —Juan, te lo prometo. Si las cosas hubieran sido diferentes,

    probablemente habría tomado tu oferta, —dijo Kendall. —Pero no puedo. Te

    mereces más que.... —Kendall tragó y luego dijo—: Que lo que estabas

    ofreciendo.— No quería presumir nada, pero Kendall tenía la idea de que no

    era el primer chico al que Juan le hacía proposiciones así.

    —¿Qué más hay? —Juan le preguntó con una sonrisa maliciosa, la

    versión adulta de un niño en Navidad por la mañana.

    —Me encanta—, dijo Kendall. — Alguien que sea tuyo, y tú seas su

    único.— Hizo una pausa y pensó en Johnny, sonriéndole a una imagen mental

    de él, inclinado sobre su ordenador, mirando fijamente a la pantalla. Entonces

    Johnny miró hacia arriba y sonrió a Kendall, con la sonrisa que era sólo para él.

    Hacía mucho tiempo que no había visto esa mirada. Kendall estaba tratando derecordar exactamente cuánto tiempo cuando Juan suavemente se aclaró la

    garganta.

    —La reunión, —dijo Kendall, y siguió a Juan.

    —Vamos dentro, —dijo Juan. —Deben estar esperándote.

    —¿No vienes?— Kendall preguntó mientras caminaba hacia la puerta y

    Juan se quedaba atrás.

    —Dios, no. Tengo que volver con mi jefe, y para esto, estás por tupropia cuenta. —Juan se rió entre dientes, y Kendall abrió la puerta, caminando

    dentro de lo que parecía ser el área de una oficina pequeña.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    34/226

     

    34

    —¿Puedo ayudarle? —La recepcionista le preguntó mientras lo miraba

    y luego volvía a la pantalla de su ordenador. Obviamente, ella no pensaba que

    tenía derecho a su atención. —Si usted no tiene una cita, puede tomar asiento,

    podrían verlo hoy, de lo contrario.... —Ella nunca miró hacia arriba.

    —Soy Kendall Monroe, y creo que me esperan, —dijo Kendall en su

    mejor acento altivo de Nueva York . Se había encontrado con un buen número

    de funcionarios engreídos en su carrera.

    —Oh,—  dijo, con los ojos muy abiertos. Eso, obviamente, le llamó la

    atención. —Por favor, póngase cómodo. Voy a hacerles saber que está aquí.

    —Se levantó y se alejó a toda prisa por una puerta detrás del escritorio. Kendall

    miró a su alrededor. El lugar no parecía más elegante que las casas móviles

    de la grandeza de Hollywood.

    Kendall se preguntó en qué se estaba metiendo. ¿Era esta una película

    de las que se hacían con una cinta de zapatos? Si le habían ofrecido dinero a

    Sal todo estaría bien, pero quién sabe. Ella regresó y Kendall oyó una

    acalorada discusión

    —No me importa. No pregunté por él —, dijo una voz de mando, y luego

    la puerta se cerró, cortando el ruido.—Va a ser sólo un minuto. ¿Puedo ofrécele algo? ¿Café, Perrier? —

    Ofreció ella, con un cambio de tono completo.

    Kendall se puso de pie. —No, gracias.... —Le tendió la mano, y ella lo

    miró por un segundo.

    —Cassandra, —finalmente le dijo, tomando la mano de Kendall. Kendall

    había descubierto hace mucho tiempo que los asistentes, secretarias y

    recepcionistas en el negocio del entretenimiento ejercían su propio tipo depoder. Más de una vez, Kendall había conseguido una ventaja sobre la

    competencia simplemente porque lo sabía y estaba en términos amistosos con

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    35/226

     

    35

    la asistente de un productor. Él también había encontrado que le tomaba muy

    poco esfuerzo ser amable y ver a la gente que otros tienden a pasar por alto.

    — A pesar de la discusión que he oído, un cinturón o algo así podría

    estar en orden antes de que me echen a los leones. —Él se rió y Cassandra

    hizo lo mismo mientras se sentaba en su escritorio.

    —Todos son ruido y pocas nueces, —dijo mientras se sentaba de nuevo.

    Luego se inclinó sobre el escritorio. —Parece un buen tipo, así que sea lo que

    sea que hagas, no dejes que te presionen.

    Kendall sacudió la cabeza un poco. Él había conocido a dos personas

    hasta el momento, y los dos le habían dicho lo mismo.

    —Gracias, —dijo, y Cassandra contestó el teléfono y luego colgó sin

    decir una palabra.

    —Puedes pasar, —le dijo ella, haciendo un gesto hacia la puerta. —

    Buena suerte.

    —Gracias, — dijo Kendall y abrió la puerta a una sala de conferencias.

    Tres hombres lo miraron cuando entró, y una vez que hubo cerrado la puerta,

    se pusieron de pie.

    —Kendall, —uno de los hombres dijo, caminando alrededor de la mesa.—Es un placer conocerte. Soy Robert Starr, y Este es Barty Lippert. Somos los

    productores de Varado —. Tomó la mano de Kendall y la sacudió

    calurosamente. —Barty y yo vimos tu último espectáculo, cuando estábamos

    en Nueva York—, dijo mientras miraba al otro hombre, —hace dos o tres

    meses. Fue fabuloso, y cuando nos enteramos de que en realidad se cerraba el

    espectáculo, sabíamos que teníamos que conseguirte antes de que alguien

    más lo hiciera. —Él sonrió, pareciendo recuperarse con tanta energía queKendall no pudo evitar sonreír también. Luego se volvió hacia el tercer hombre

    en la habitación. —Y este paquete de alegría es nuestro director, Lyman

    Davidson.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    36/226

     

    36

    —Es un placer conocerte, —dijo Davidson sin una pizca de sinceridad.

    Tampoco le ofreció la mano.

    Robert le indicó una silla y Kendall se sentó.

    —Has leído el guion, —preguntó Robert.

    —Sí. He recibido una copia de mi agente.

    —¿Entonces lo has leído? —Repitió, y Kendall asintió con la cabeza,

    recostándose en su silla. —¿Qué pensaste de él?

    —Partes de él son interesantes, —dijo Kendall honestamente, y los tres

    hombres se miraron entre sí.

    Me gusta mucho la idea de explorar las emociones de Parker que está

    encerrado en el coche. —Su pierna temblaba bajo la mesa ante la idea de estar

    encerrado en un coche, pero, como había examinado la secuencia de

    comandos en el avión, se había dado cuenta de que Sal tenía razón y que

    podía usar ese miedo en el personaje.

    —Mira, —Lyman espetó mientras se inclinaba sobre la mesa. —Yo creo

    en poner las cartas sobre la mesa —dijo con un acento australiano. Hubiera

    sido lindo si no fuera por el fuego que salía de sus ojos.

    —Ellos son los productores y te eligieron para este papel. Lo entiendo.Pero esta es mi película y se hará lo que yo digo. Yo soy el director, y es mi

    visión de la película la que tendrá la pantalla, no un baile de Broadway.

    Kendall miró a los otros dos hombres, que se habían quedado en

    silencio, sus elogios y la pelusa de extinción en la vid. —No eres más que un

    haz de luz del sol, ¿no es así?—, Dijo Kendall, y se inclinó sobre la mesa.

    Pienso que tengo que dejar algo claro. He trabajado con todo tipo de

    directores. Algunos de ellos eran fáciles de tratar, y algunos los más grandesidiotas en el negocio, y hay una cosa que sé: los espectáculos dirigidos por

    pendejos se cierran rápido, porque hacen una mierda en el escenario. O, en

    tu caso, en la película.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    37/226

     

    37

    Mira, mi agente me dijo quién era el director, y me pasé la última

    semana observando cada una de sus películas. —Kendall vio la sonrisa de

    Lyman. —Y eran interesantes, porque son un reflejo de ti. La mierda llega a

    lo grande. Sus personajes están todos enojados, incluso cuando no es

    necesario.

    Kendall se encontró con la mirada pétrea del director con una de las

    suyas. —Los directores que trabajaron con su elenco y sacaron las mejores

    actuaciones que pudieron del conjunto? Esos shows corrieron por años.

    —Robert, Barty, simplemente no creo que esto vaya a funcionar, —dijo

    Lyman a los otros dos hombres, y Kendall se puso de pie.

    —Eso está perfectamente bien, —dijo Kendall. —Sólo me pagan y yo

    seguiré mi camino.

    —¿Qué pago? —Dijeron los productores.

    —Oh sí, lean el contrato. Yo lo hice. Se afirma en la página ocho la

    cantidad por la que seré compensado por esta película, con los dos primeros

    cien mil abonados el primer día. Estoy aquí, estoy trabajando, este es mi

    primer día. Así que háganme un cheque y me vuelvo a Nueva York. —Los tres

    hombres se quedaron en blanco. —Sí, soy de Nueva York, y podría parecerque soy un granjero, pero no lo soy. Soy un profesional, y doy en cada función

    lo mejor que puedo. También trato a todos con respeto —, dijo Kendall,

    volviendo la mirada a Lyman.

    — Así que si quieres que trabajemos juntos, me tratas con el mismo

    respeto que quieres de todos los demás, y vamos a hacer una gran película. —

    Kendall se sentó y dejamos que su mirada se moviera de un hombre a otro.

    —Esto va a ser perfecto, —dijo Robert con más entusiasmo del quehabía tenido antes. Luego se puso de pie, junto con Barty, y salieron de la

    habitación. Era evidente que estaban esperando una explosión del director y

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    38/226

     

    38

    querían estar fuera de la habitación cuando ocurriera . La puerta se cerró, y

    Lyman se puso de pie, mirándolo sobre la mesa.

    —¿Cómo te atreves? —Gritó. —Esas películas....

    —Era justo lo que dije. Eran buenas y yo disfruté de cada una de ellas,

    pero te dije la verdad —Kendall dijo, poniéndose de pie, así, cumplía con la

    mirada del director. —Ni siquiera me conoces. Te has hecho suposiciones

    acerca de mí y ya habías tomado una decisión antes de que yo llegase aquí.

    Lyman resopló por la nariz. —Entonces, ¿qué quieres decir?

    —Me contrataron porque puedo llevar este personaje a la vida, y lo haré,

    si me dejas. —Kendall suavizó su tono de voz, pero lo mantuvo firme.

    —Vamos a verlo, —dijo Lyman sin romper la mirada de Kendall. —Hay

    algunas revisiones que se realizan para el guion. Me aseguraré de que una

    copia te llegue esta noche.

    Kendall asintió. —Diles que presten especial atención a las páginas

    cincuenta y seis-ochenta. El diálogo se desprende como particularmente poco

    natural y juega en algunos supuestos que no son lo suficientemente fuertes. Te

    puedo dar las líneas exactas si las necesitas. —Por fin rompieron el duelo de

    miradas y Kendall volvió a sentarse.—Creo que hemos terminado aquí, —dijo Lyman, y se dirigió a la puerta.

    —Estoy reservándome el juicio, pero nos vemos mañana por la mañana.

    Vamos a ir a una localización a las ocho de la mañana. Mi asistente te enviará

    un auto. —Lyman abrió la puerta y los dos productores volvieron a entrar.

    Kendall dijo adiós a los tres hombres y salió de la habitación.

    —Todavía estás con nosotros, —preguntó Cassandra, y Kendall sonrió.

    —Creo que sí, —respondió y salió de la oficina. El coche todavía estabaaparcado fuera, y el conductor abrió la puerta para que Kendall pudiera trepar

    al interior.

    —¿De vuelta al hotel, señor? —Preguntó el conductor.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    39/226

     

    39

    —¿Tiene que estar en alguna parte? —Kendall preguntó al conductor.

    —No. Estoy a su disposición por todo día, —respondió.

    —Entonces, ¿podrías…? —Kendall comenzó, pero fue interrumpido por

    un golpe en la ventana. Kendall abrió la puerta y vio a Juan de pie fuera.

    Kendall le indicó el interior y luego se volvió hacia el conductor. —¿Me podría

    mostrar la ciudad?

    —Por supuesto, ¿qué le gustaría ver —Preguntó, y Kendall se volvió

    hacia Juan.

    —Llévanos a Hollywood, —dijo Juan, y el conductor se dio la vuelta y el

    coche comenzó a moverse. —¿Cómo te fue? —Preguntó Juan.

    —No estoy seguro, —respondió Kendall y Juan lo miró como si esperara

    que Kendall dijera algo más. —¿Hiciste todo lo necesario?

    —Supongo, —dijo Juan, tirando de un iPhone de su bolsillo. Respondió

    un texto y luego lo metió de nuevo en sus pantalones.

    El teléfono de Kendall sonó, y lo sacó. —Hola, Sal —, dijo.

    —He oído que les diste una gran impresión—, Sal le dijo sin ninguna de

    sus bromas habituales.

    —El director estaba siendo un imbécil total, así que utilicé la influenciade la que hablamos. Realmente te debo una por eso, —dijo Kendall. —Creo

    que hemos llegado a algún tipo de entendimiento, incluso si se trata de una

    guerra fría. Al menos él sabe que no me voy a arrodillar y besar sus botas. —

    Kendall miró a Juan y lo vio colgando de cada palabra. —¿Cómo te has

    enterado ya?

    —Barty y yo somos viejos amigos. Los encontró a los dos interesantes,

    —explicó Sal. —Ten cuidado con esos dos. Robert hace todo lo de hablar, peroes Barty es el que tiene el dinero y el poder real. Le impresionaste. Por lo

    tanto, bien hecho, pero recuerda que necesitas trabajar con Davidson, y

    puede ser un bastardo vengativo cuando quiere serlo.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    40/226

     

    40

    —Entiendo, —Kendall dijo cuándo la limusina se detuvo

    momentáneamente por una luz roja en un semáforo. —Se supone que debo

    ver ubicaciones mañana. Así que sospecho que lo averiguare entonces.

    —Supongo que lo haré, —dijo Sal y luego colgó. Kendall desconecto

    también y puso su teléfono en el bolsillo , miró por la ventana y observó el

    paisaje.

    El conductor se detuvo en Hollywood Boulevard, y Kendall saltó de la

    limusina. Juan se dedicó a los arreglos con el conductor, y luego pasearon por

    todo el Paseo de la Fama. Kendall no podía dejar de leer todos los nombres de

    todas las estrellas incrustadas en la acera. En un momento se sacó su teléfono

    y marcó a Johnny. —¿Sabes una cosa, estoy de pie junto a Lucille Ball,— dijo

    Kendall tan pronto como se hizo la conexión.

    —Johnny, te he cogido el teléfono—, oyó a un extraño decir, y el

    corazón de Kendall se sumergió en el estómago.

    —Hola, —dijo Johnny.

    —¿Quién era?— Kendall pidió un poco más duro de lo que pretendía.

    —Sólo un asistente de investigación de Columbia,— Johnny susurró. —

    ¿te va todo bien allí?—Sí, —respondió Kendall. —Me reuní con el director y los productores

    esta mañana. Mañana tengo que ir con el director a ver lugares. —Quería

    decirle que lo extrañaba y lo necesitaba, pero no podía, la persistente duda de

    su interior lo detenía. —No quería llamar demasiado tarde.

    —Voy a estar trabajando la mayor parte de la noche—, dijo Johnny. —

    Que tengas un buen viaje para buscar locaciones y hablar contigo muy pronto.

    —Está bien—, dijo Kendall y colgó el teléfono. Cuando lo hizo, vio lahora. Le tomó un unos segundos recordar que el reloj de su teléfono estaba

    establecido a la hora local. Él hizo algunos cálculos rápidos y se dio cuenta de

    que era las ocho y media en su casa. —La investigación, mi....

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    41/226

     

    41

    —¿Es algo malo? —Juan dijo detrás de él.

    —No, —él mintió, colocando el teléfono en el bolsillo. —¿Crees que

    podríamos conseguir algo de comer? Tengo hambre, y luego quiero volver al

    hotel. Este cambio de hora me tiene descolocado, y tengo que estar listo y

    despierto en la mañana. —dijo Kendall Todo lo que necesitaba para estar en la

    cima de su juego alrededor del director.

    —No quieres comer y luego ir a algunos de los clubes? Sunset

    Boulevard se encuentra a pocas cuadras de distancia, y hay algunos de los

    mejores clubs de la ciudad, —Juan le dijo.

    —No, gracias. Me van a enviar el guion revisado, así que tengo un

    trabajo que hacer. —Lo que Kendall necesitaba era un poco de tiempo a solas

    para pensar, no un club lleno de extraños. —Tal vez otra noche, sin embargo.

    —Kendall miró hacia arriba y abajo del bulevar, y a medida que el sol se ponía

    detrás de las montañas, las luces de las señales añadían una cualidad

    llamativa a todo lo que le rodeaba dándole encanto a los alrededores. —

    ¿Podemos ir a un lugar que sea tranquilo, donde pueda conseguir un buen

    filete de carne?

    —Está bien, —dijo Juan escéptico y pidió el coche. Llegó unos minutosmás tarde, y Juan le dio al conductor la información acerca de la cena, Kendall

    se acomodó en el asiento de la limusina. Llegaron a un restaurante y tuvieron

    una agradable cena. Él y Juan charlaron un poco. — A Johnny le encantaría

    este lugar —, dijo Kendall en un punto y luego condujo rápidamente la

    conversación en otra dirección.

    Después de la cena, fueron de regreso al hotel y le dijo buenas noches

    a Juan. —El coche estará aquí a las siete, — Juan le recordó. Kendall le dio lasgracias por toda su ayuda y luego entró en el hotel. Se detuvo en el escritorio,

    donde le dieron un sobre grande, y luego se dirigió a su habitación, donde se

    instaló en el sofá con el guion.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    42/226

     

    42

    Después de una hora le costaba concentrarse y se dio cuenta de lo que

    era. Siempre cuando leía un nuevo guion, se instalaba en el sofá en casa,

    acurrucado cerca de Johnny mientras trabajaba. No había nada que pudiera

    hacer con eso ahora, y no estaba seguro de que tendría un Johnny para ir a

    casa. Empujando sus temores y dudas fuera de su mente, Kendall se

    concentró en el guion para que pudiera estar listo en la mañana.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    43/226

     

    43

    Capítulo 3

    KENDALL dio vueltas por la mayor parte de la noche. La cama no se

    sentía bien, sin importar en qué dirección se encontrara, y más de una vez se

    dio la vuelta para poner un brazo alrededor de Johnny y encontrarse con una

    cama vacía.

    Por supuesto, se despertó en ese momento y trató de acomodarse otra

    vez. Pero su mente empezó a ir a través de sus sospechas y acabó

    despierto una vez más. Una vez, durante la noche incluso fue tan lejos como

    para tomar su teléfono para llamar a Johnny, sólo para escuchar su voz y

    preguntarle lo que necesitaba saber. Pero no lo hizo.

    El cambio de hora le permitió dormir un poco, y estaba esperando abajo

    cuando el coche llegó.

    Se unió a Juan en el asiento trasero y fue, medio dormido, a donde se

    iba a reunir con el director.Kendall había sospechado que iban al estudio, pero la limusina se

    detuvo en un estacionamiento.

    Kendall salió y vio a Lyman de pie con otro hombre cerca de una gran

    SUV. Kendall vio a otro hombre de pie. —Ese es el director de fotografía, Guy

    Reynolds,— Juan dijo cuando salió.

    Kendall asintió. Los dos hombres parecían enfrascados en una

    conversación en torno a un mapa, y no quería interrumpirlos. —¿Los actoressuelen ir cuando exploran los lugares?

    Juan se encogió de hombros. —No lo sé. Cada director hace las cosas a

    su manera, pero creo que lo hacen.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    44/226

     

    44

    —Maravilloso,— Kendall murmuró, resistiendo el impulso de abanicarse,

    el sudor brotando en su piel. Hacía calor ya, y el sol no había salido del todo,

    iba a hacer aún más calor . Los otros miraron hacia arriba dejando su

    conversación, y Kendall se acercó.

    —Excelente, —Lyman dijo cuándo Kendall se acercó. —Tenemos lo

    necesario en la parte de atrás. —Lyman entregó el mapa a otro hombre que lo

    dobló. —Kendall, este es Guy, él será nuestro director de fotografía principal.

    Reynolds, esta es nuestra ventaja, Kendall Monroe.

    Se estrecharon las manos. —Es un placer conocerte —, dijo Guy y luego

    se volvió hacia el director. Parecía tener la misma pregunta que Kendall tenía.

    —Esta va a ser una película muy involucrada—, dijo Lyman para

    ambos. —El paisaje es desolado y duras condiciones jugarán un papel casi tan

    grande en la película como los personajes, así que quiero que Kendall

    realmente lo experimente antes de empezar el rodaje. —Eso pareció satisfacer

    al individuo, y todos se dirigieron hacia el vehículo.

    —Volveremos aquí sobre las siete, —le dijo Lyman a Juan, quien

    asintió con la cabeza y se dirigió hacia la comodidad de la limusina con aire

    acondicionado. Kendall se acercó a la camioneta y se subió en el asientotrasero. Los demás subieron también, así, y pronto estaban por la autopista.

    —Ya hemos tenido gente viendo estos lugares, y hemos visto la mayoría

    de ellos, —dijo Lyman mientras conducía. Kendall notó que el acento del

    director parecía ir y venir, y se preguntó cuánto era una afectación.

    — Así que hay que verlos y tomar una decisión final—, preguntó Kendall.

    —Exactamente. El tipo ha reducido la lista a cinco lugares. Vamos a ver

    tres de ellos ahora. Los otros dos están más lejos y serían muy costosos parasu uso. Así que si no vemos nada que nos guste hoy, Guy y yo seguiremos

    buscando mañana.

    —¿No te va esto un poco tarde? —Preguntó Kendall.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    45/226

     

    45

    Lyman suspiró. —Todo en esta película parece ir un poco tarde. Por lo

    que una vez que el dinero quedó aprobado y los cheques emitidos,

    necesitamos movernos. Así que hoy y mañana echaremos un vistazo a los

    lugares. Entonces vamos a hacer los preparativos finales, y la próxima semana

    vamos a empezar el trabajo en el estudio, mientras que el equipo lo prepara

    todo en la ubicación.

    Kendall asintió con la cabeza y se echó hacia atrás, escuchando

    mientras los dos hombres hablaban sobre todo lo que necesitarían y la

    sensación que querían para cada uno de los escenarios. Trató de poner

    atención, pero no podía seguir mucho de lo que decían, por lo que miró por la

    ventana. Después de cinco minutos, la escena fuera de la ventana no tenía

    ningún interés para él. Sacó su teléfono y se sorprendió al ver que aún tenía

    servicio. Marcó el número de Johnny, pero la llamada fue al buzón de voz, por

    lo que dejó un mensaje. —Hola, soy yo. Sólo quería hablar contigo. Voy a

    buscar locaciones hoy y no sé cuánto tiempo vamos a estar fuera. Espero que

    la escritura vaya bien. Te echo de menos. —Kendall agregó la última parte

    rápidamente y luego colgó. La conversación en la delantera no se había

    detenido, y puesto que no le estaban prestando atención, Kendall se recostóen el asiento. Sus pensamientos al instante se volvieron hacia Johnny, un joven

    Johnny.... Él y Johnny se habían conocido en la fiesta de un amigo. Kendall

    cerró los ojos, y pudo ver a Johnny cuando entró, la encarnación del pobre

    estudiante universitario.

    JOHNNY se había puesto sus mejores galas para la fiesta, pero

    definitivamente habían visto días mejores. La fiesta se inició en la tarde y

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    46/226

     

    46

    probablemente seguiría hasta las primeras horas de la mañana, pero Kendall

    tenía que hacer un show en unas pocas horas, así que bebía Coca-Cola Light

    y hablaba con la gente. Kendall vio a Johnny tan pronto como entró en la

    habitación. Alto, con una mata de pelo rubio que parecía ir a todas partes ,

    como estaba de moda. Parecía perdido y fuera de lugar mientras se movía a

    través de las otras personas, sin hacer contacto visual con nadie, y habría

    pasado a Kendall si accidentalmente no se hubiera interpuesto en su camino

    intencionalmente. Lo que Kendall no calculó fue que Johnny lo tiraría de culo.

    —Oh, Dios, lo siento,—  Johnny había dicho, tomando la mano de

    Kendall para ayudarlo a levantarse.

    —Fue mi culpa—, dijo Kendall honestamente cuando su anfitriona lo

    secó rápidamente. Afortunadamente, su vaso había estado casi vacío. —Lo

    siento —, le dijo a June cuando terminó.

    —No hay problema, cariño,— dijo ella. June llamaba a todos “amor ”  o

    “querido” con el más lindo acento húngaro. Dios, amaba la diversidad de esta

    ciudad. —Johnny, lo hizo —, dijo, echando los brazos alrededor del hombre

    sorprendido. Kendall se enteraría más tarde de que la familia de Johnny no

    demostraba afecto de ninguna manera y ese tipo de cosas siempre le habíasorprendido. A veces todavía lo hacía.

    KENDALL sonrió mientras viajaba en la camioneta, pero no abrió los

    ojos.

    —¿conoces a Kendall—, preguntó con una risita traviesa. —Él es unamor real y en la actualidad está en algún espectáculo de Broadway del que

    no me acuerdo, pero es brillante. —Ella le sonrió a ambos y se fue.

  • 8/18/2019 Andrew Gray - Prisionero

    47/226

     

    47

    — Así que eres brillante, eh,—  Johnny le dijo y le dio una sonrisa que

    Kendall recordaría siempre.

    —Si ella lo dice, —respondió Kendall. —No creo que jamás haya visto

    realmente el show. Pero si me crees a mí-estoy genial. — Añadió la última

    parte con el acento de June, y Johnny casi resopló su bebida por la nariz.

    —No me puedes hacer reír cuando estoy bebiendo, —Johnny le dijo, y

    Kendall tomó una servilleta y le limpió la camisa a Johnny. Incluso le limpió

    manchas que no estaban allí, y la risa de Johnny le dijo que lo sabía. —

    Háblame de este espectáculo tuyo, —dijo Johnny mientras lanzaba las

    servilletas húmedas a la basura. Kendall le obsequió con historias sobre el

    programa y su participación en el. Entonces Johnny le dijo todo sobre su

    trabajo de posgrado en la historia, en concreto el Renacimiento, lo que les

    trasladó a una discusión sobre arte, algo que ambos amaban.

     Antes de que Kendall se diera cuenta, la tarde casi había desaparecido.

    D