Upload
dinhdat
View
218
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
1
Apuntes Legislativos
PODER LEGISLATIVO DEL ESTADO DE GUANAJUATO
Sexagésima Segunda Legislatura 2012-2015
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES LEGISLATIVAS
90 BICENTENARIO DE LA
CONSTITUCIÓN DE APATZINGÁN
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
2
Supervisión de edición: Lic. Alfredo Sainez Araiza.
Diseño y edición de interiores: Lic. David Arturo Gutiérrez Márquez
“Bicentenario de la Constitución de Apatzingán”
LXII LEGISLATURA H. CONGRESO DEL ESTADO DE GUANAJUATO © Por esta edición: Instituto de Investigaciones Legislativas Callejón de la Condesa Núm. 7 Centro. C.P. 36000. Guanajuato. Gto., México Tel. 01 (473) 102–00–00 extensiones 6074, 6075 y 6080 www.congresogto.gob.mx Primera edición, 2014–10–15 Año 10, Número 90 ISBN: 970-9784-00-5 Impreso en México / Printed in México Esta publicación no puede ser reproducida, incluyendo el diseño de la cubierta y de páginas interiores, ni todo ni en parte, ni registrada en o transmitida por un sistema de recuperación de información, en ninguna forma, ni por ningún medio, sea mecánico, foto químico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo solicitado por escrito y autorizado por el Instituto de Investigaciones Legislativas del H. Congreso del Estado de Guanajuato. Los artículos firmados son responsabilidad de los autores y no reflejan necesariamente las directrices del Instituto.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
3
MESA DIRECTIVA Tercer Año de Ejercicio Legal
Diputada Karla Alejandrina Lanuza Hernández
PRESIDENTA
Diputado José Gerardo Zavala Procell VICEPRESIDENTE
Diputado Francisco Arreola Sánchez
PRIMER SECRETARIO
Diputado Juan Carlos Guillén Hernández SEGUNDO SECRETARIO
Diputado Adrián Camacho Trejo Luna PROSECRETARIO
JUNTA DE GOBIERNO Y COORDINACIÓN POLÍTICA
Dip. Dip. José Juventino López Ayala Presidente
Dip. Jorge Enrique Videgaray Verdad Vicepresidente
Dip. Sergio Alejandro Contreras Guerrero Vocal
Dip. José Luis Martínez Bocanegra Vocal
Dip. J. Marco Antonio Miranda Vocal
SECRETARÍA GENERAL
Lic. Jorge Arturo Espadas Galván
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
4
Pluma libre Nos interesa tu opinión,
Participa y comparte tus
conocimientos!!!
Esperamos tu valiosa colaboración con Apuntes Legislativos, solo realiza la
redacción de un tema que te interese sobre la vida legislativa del estado Guanajuato, o preséntala en la Coordinación de Investigación y Desarrollo Legislativo del Instituto de Investigaciones Legislativas del Congreso del Estado de Guanajuato. Callejón de la Condesa No. 7, Zona Centro, C.P. 36000, Guanajuato, Gto., teléfono: 01(473)1020000 extensiones 6074,6075 y 6080, o puedes enviarla a las
siguientes direcciones de correo electrónico: [email protected] [email protected]
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES LEGISLATIVAS
Dr. Carlos Torres Ramírez DIRECTOR GENERAL
Lic. Alfredo Sainez Araiza COORDINADOR DE INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO LEGISLATIVO
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
5
Índice Págs.
Presentación .............................................................................................................7
1 Bicentenario de la Promulgación del Decreto Constitucional para la
Libertad de la América Mexicana expedido en Apatzingán ...................................9
1.1 Inauguración ...............................................................................................9
Sami David David .............................................................................................9
Francisco Agustín Arroyo Vieyra ..................................................................... 10
Francisco Agustín Arroyo Vieyra ..................................................................... 14
Carlos Torres Ramírez ........................................................................................ 16
1.2 Conferencia Magistral “Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana expedido en Apatzingán” ...................................................... 18
Héctor Felipe Fix Fierro ....................................................................................... 18
1.3 Panel “Federalismo y reformas estructurales (armonización legislativa)” .......................................................................................................... 32
Luis Mendoza Cruz ......................................................................................... 32
Toribio Hernández López................................................................................ 36
Luis Mendoza Cruz ......................................................................................... 40
Edy Izaguirre Treviño ...................................................................................... 40
Sami David David ........................................................................................... 45
Jorge Alberto Huizar Ríos ............................................................................... 46
Luis Mendoza Cruz ......................................................................................... 50
Francisco González Gómez ............................................................................ 50
Luis Mendoza Cruz ......................................................................................... 54
Carlos Torres Ramírez ................................................................................... 55
1.4 Presentación del libro “Constitución de Apatzingán, Historia y Legado” ........ 58
Carlos Vital Punzo .......................................................................................... 58
2 Panel “Bicentenario de la Publicación del Decreto Constitucional para la
Libertad de la América Mexicana: ....................................................................... 60
Constitución de Apatzingán 1814– 2014” ................................................................ 60
José Eduardo Vidaurri Aréchiga .......................................................................... 60
José Luis Lara Váldes ......................................................................................... 71
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
6
3 Constitución de Apatzingán en Textos .................................................................. 82
Grecia M. Vallejo García ..................................................................................... 82
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
7
Presentación
Conmemorar el Bicentenario de la publicación del Decreto Constitucional para la Libertad de la
América Mexicana expedido en Apatzingán, el 22 de octubre de 1814, es sin duda, especial
y significativo, fundamentalmente, porque la Constitución de Apatzingán, aunque no entró
en vigor ni un solo día, tiene como antecedente los Sentimientos de la Nación, escrito por
José María Morelos y la influencia de corrientes políticas europeas y norteamericanas. Pero
sobre todo, constituye el ideario y primer conjunto de leyes que forjaron el carácter del
Estado y gobierno mexicano como nación libre, independiente y soberana; la cual fue
suscrita en el Palacio Nacional del Supremo Congreso Mexicano por notables insurgentes,
entre los que destaca el diputado guanajuatense, José María Liceaga, quien fungió como
presidente.
En este contexto, en Apuntes Legislativos reproducimos las principales actividades
conmemorativas del “Bicentenario de la Promulgación del Decreto Constitucional para la
Libertad de la América Mexicana expedido en Apatzingán” como son: la inauguración del
evento, la conferencia magistral, “Decreto Constitucional para la Libertad de la América
Mexicana expedido en Apatzingán”, dictada por el Doctor Héctor Felipe Fix Fierro y el
panel, “Federalismo y reformas estructurales (Armonización legislativa)”, a cargo de los
directores de los organismos e institutos de investigaciones legislativas; así como, la
presentación del libro La Constitución de Apatzingán. Historia y Legado, que se llevaron a cabo
en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, en el marco del X Encuentro
Nacional de la Asociación Mexicana de Institutos y Organismos de Estudios e
Investigaciones Legislativos.
Asimismo, en este tenor, se presenta el panel denominado, “Bicentenario de la
publicación del Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana:
Constitución de Apatzingán 1814 – 2014”, realizado en el Patio del Congreso del Estado de
Guanajuato, el 22 de Octubre de 2014.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
8
Finalmente, en la Sección de la Biblioteca “José Aguilar y Maya” se recomiendan tres
textos afines a la Constitución de Apatzingán, que nuestros lectores pueden consultar.
Atentamente
Coordinación de Investigación y Desarrollo Legislativo
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
9
1 Bicentenario de la Promulgación del Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana expedido en Apatzingán**
1.1 Inauguración
Sami David David*
Buenos días, amigas y amigos presentes.
El día de hoy, aquí en la Cámara de
Diputados, el Centro de Estudios de
Derecho e Investigaciones Parlamentarias
de la Cámara de Diputados les da la más
** En el marco del X Encuentro Nacional de la Asociación Mexicana de Institutos y Organismos de Estudios e Investigaciones Legislativos, celebrado el 22 de Octubre de 2014, en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. * Director General de CEDIP.
cordial bienvenida. Se congratula de que
hayan decidido realizar este congreso en
la sede de los diputados, lo que acredita
nuestra hospitalidad para una de las
organizaciones que con gran esfuerzo y
compromiso vienen apoyando el
desarrollo de los estudios parlamentarios,
a través de los respectivos centros de
estudio y de investigación que tiene en
cada uno de los estados de la República.
Saludo a don Francisco Arroyo, que
no solo es un legislador respetable y
responsable, sino estudioso de las
cuestiones jurídico-parlamentarias que
acompañan el quehacer legislativo así
como un comprometido por que se
multiplique en diferentes diseños e
instrumentos el trabajo y el quehacer
parlamentario. En la cátedra, en el
ejercicio parlamentario, en la
investigación, en los estudios históricos,
en cada una de las iniciativas que
acompañan al trabajo parlamentario del
diputado Francisco Arroyo, siempre se ve
un ejercicio profesional que mucho nos
enorgullece a quienes lo conocemos y
admiramos. Muchas gracias, Paco, por
presidir estos eventos del centro y por tu
estímulo para poderlos llevar a cabo.
Don Carlos -le reitero-, bienvenido y
qué bueno que decidieron realizar este
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
10
congreso aquí en la Cámara de
Diputados. A don Horacio, muchas
gracias por traer la representación del
gobernador de Michoacán. Bienvenido,
qué bueno que nos acompañas en estos
trabajos.
Hago esta pausa también para
decirle a don Héctor Fix que no es casual
la presencia de él en los trabajos del
centro y en los trabajos de la propia
Cámara de Diputados. Ha sido un
profesional desde el Instituto de
Investigaciones Jurídicas -o donde se
encuentre-, participando con conferencias
magistrales, sesudos trabajos de
investigación, por lo que no es novedad
que hoy nos acompañe al iniciar estos
trabajos en donde nos muestra su
capacidad y su talento en las cuestiones
jurídicas constitucionales del país.
Decía ante la provocación de don
Francisco Arroyo, que voy a batear –
como dicen los chamacos- mi
participación para insistir en este gusto
que nos da el que estén aquí, señalando
el hecho de coincidencia de llevar a cabo
este congreso con los 200 años de
celebración del Decreto Constitucional
para la Libertad de la América Mexicana,
llamada Constitución de Apatzingán.
Había preparado algunas palabras en
torno a ello pero, en toda la jornada del
día de hoy, ya ha sido dicho y dicho bien
por las señoras y los señores diputados,
motivo de celebración de estas palabras.
Por tanto, me gustaría, si no tienen
inconveniente, seguir en el programa
desarrollado, pasándole los micrófonos al
diputado Arroyo Vieyra, para que nos
brinde alguna reflexión a las que nos tiene
acostumbrados. Muchas gracias.
Francisco Agustín Arroyo Vieyra*
Muchas gracias. La verdad es que me
encuentro muy contento de estar aquí.
Estoy rodeado de amigos muy queridos.
De Sami David, un político muy hecho, un
político muy completo. Una gente que
goza del aprecio y el respeto aquí en
* Vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
11
Cámara de Diputados por la seriedad que
le imprime a sus trabajos.
Estoy muy contento también de estar
junto a Carlos Torres, que ahora preside
esta asociación. Carlos Torres el doctor
en Derecho. Nos consta porque supimos
que se fue a España a terminar y a hacer
sesudas investigaciones a efecto de
lograr su grado. Es expresidente
municipal de la ciudad de Guanajuato,
funcionario ejemplar y muy querido en la
localidad. Fue también, durante muchos
años, un colaborador muy cercano de una
gente a la que yo quiero y aprecio mucho.
Un parlamentario también de excepción,
el Lic. Miguel Montes García, quien fue
procurador del Distrito Federal, que fue
ministro de la Corte y que, como ustedes
saben, tuvo a cargo investigaciones en
momentos muy delicados y trascendentes
para la vida nacional, y ahí dio cuenta de
su profesionalismo y de su honradez
intelectual don Carlos Torres. Ahora
estamos muy contentos que sea el
encargado del instituto en el Poder
Legislativo de Guanajuato y que tenga
también la presidencia de esta
asociación.
Me siento muy contento de estar
también sentado y compartir la mesa con
don Héctor Fix. Cuando uno habla de
Héctor Fix, hombre, irremediablemente
nos vamos hacia lo procesal,
irremediablemente, nuestra memoria se
vuelca hacia quienes fueron nuestros
profesores de procesal,
fundamentalmente civil. Un día, el doctor
Jorge Carpizo me llamó y me dijo: Le
acabo de mandar la iniciativa de la Ley
Orgánica de la Comisión Nacional de los
Derechos Humanos que la acaba de
hacer don Héctor Fix-Zamudio. Así que,
cuando le hablo de don Héctor Fix
Zamudio, le estoy hablando del mejor
procesalista de América Latina. Era una
forma amable de decirme que no le podía
cambiar una coma a la Ley Orgánica y
claro, bajo esa amenaza, tuvimos un
especial cuidado de que la Ley Orgánica
de la entonces naciente Comisión
Nacional de Derechos Humanos quedara
muy bien.
Al respecto les cuento una anécdota.
Cuando nos envían la iniciativa para la
instauración de la comisión a nivel de
órgano constitucional autónomo, no
sabíamos en dónde ponerla. Esto es nos
costó mucho trabajo encontrar el artículo
constitucional para colocarla. No
sabíamos si era el capitulado de Derecho
de Víctima, no sabíamos exactamente en
dónde y se nos ocurrió —y esto fue una
idea de don Héctor Fix— ponerla como un
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
12
contrapeso del Ministerio Público, ponerlo
como un apartado B del 102. Bueno,
también estoy muy contento de estar con
Luis Mendoza, una persona a la que
queremos y apreciamos mucho, y luego
de este intercambio de obligados
cebollazos que nos damos todos en esta
Cámara de Diputados, les quiero decir
que los institutos de estudios nacen por la
necesidad que tienen las cámaras cuando
la pluralidad se instala en las mismas.
A nosotros nos tocó, en una de esas
tantas veces de estar Cámara de
Diputados y luego en Cámara de
Senadores, pero en Cámara de
Diputados, en la LVII Legislatura, que
ningún partido político tuviese mayoría.
Pues, como ningún partido político tenía
mayoría, las leyes daban por descontado
que obligadamente algún partido político
debería de tener mayoría, no confiaba o
no tenía el olfato y el espíritu de una ley
mucho más democrática y plural,
entonces no se podía formar gran
comisión y si no había gran comisión, no
había quién le sugiriera al pleno los
nombramientos hasta de la mesa
directiva, por no decir de las áreas
administrativas de la Cámara de
Diputados.
Fue entonces cuando, junto con
grandes parlamentarios mexicanos —
recuerdo como si fuera ayer a mi maestro
José Luis Lamadrid Sauza, por decirles
algunos de ellos—, tuvimos que rehacer
la Ley Orgánica del Congreso, generar los
órganos de pluralidad y generar los
órganos que nos permitieran tener una
junta de coordinación política y ya no
Comisión de Régimen Interno y
Concertación Política que olía a
negociación de baja estofa. Tuvimos que
planear una mesa directiva de largo
aliento y tuvimos que planear una serie de
instituto que nos apoyaran, entre otras
cosas, para la elaboración del
Presupuesto de Egreso de la Federación,
momento luminoso en el que la Cámara
de Diputados señorea a todos los demás
poderes públicos y a todos los órganos
constitucionales autónomos, porque,
tradicionalmente, el dictamen lo había
redactado la Secretaría de Hacienda y
teníamos nosotros que hacerlo entonces,
en Cámara de Diputados.
Así primero, la Unidad de Finanzas
Públicas, y luego tuvimos necesidad,
urgente, y lo hicimos con buen juicio, de
generar otro tipo de institutos. Se han
ganado su posicionamiento en el ámbito
de lo jurídico y en el ámbito de la opinión
pública nacional de Finanzas Públicas y el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
13
de Centro de Estudios de Investigaciones
Parlamentarias que mucha ayuda prestan
a los diputados y diputadas que, por su
personalidad, representan una parte
importante de la soberanía nacional pero
que no necesariamente tienen que tener
las herramientas técnicas para la hechura
de la Ley; en eso los asesores de los
centros nos ayudan mucho.
Sean ustedes bienvenidos a esta
Cámara de Diputados, tienen la
oportunidad de que los reciba Sami David
David quien, aparte de ser un letrado
prominente y reconocido,
fundamentalmente por los institutos
españoles, es también un hombre muy
afable, muy simpático que se da a querer
mucho y es una persona que les
recomiendo. Lo hago su amigo, porque
tener un amigo de la categoría de Sami
David, siempre ayuda para mejor proveer
en los andares de la vida.
Muchas gracias, bienvenidos,
letrados mexicanos; insignes visitantes.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
14
Francisco Agustín Arroyo Vieyra
En la memoria de mi ilustre antecesor por
Guanajuato, don José María Liceaga, y
los constituyentes de Apatzingán, que me
permito proceder con honor y con virtud a
develar esta placa conmemorativa del
decreto constitucional para la libertad de
la América Mexicana, esperando que el
espíritu de esa constitución que anima el
alma nacional tenga en nuestro trabajo un
referente obligado.
Develación de la
placa
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
16
Carlos Torres Ramírez*
Muchas gracias. Buenas tardes tengan
todos ustedes.
A nombre de la Asociación Mexicana
de Institutos, coordinaciones de Estudios
Legislativos y Parlamentarios de los
Congresos de las Entidades Federativas y
de la asamblea, quiero agradecer de
manera muy cumplida la calidad
recepción y la buena medida tomada por
el director general de CEDIP, del
licenciado Sami David quien, a través del
doctor Luis Mendoza Cruz, nos ha
convocado para cumplir así con uno de
los acuerdos asumidos el pasado marzo
en la ciudad de Guanajuato. Justamente
* Presidente de la Asociación Mexicana de Organismos e Institutos de Investigación Legislativa (AMEXIIL) y Director General del IIL del Congreso del Estado de Guanajuato.
en esta ciudad, tuvimos nuestro congreso
nacional y determinamos que, para este
día, a efecto de llevar a cabo este acto de
gran trascendencia para la historia de
nuestro país, pudiéramos reunirnos en la
casa más grande de los mexicanos de la
Cámara de Diputados del Congreso de la
Unión, a efecto de seguir en esa lucha y
en esa tarea de relación y de vinculación
con el quehacer, la investigación y el
conocimiento que anima a todos y cada
uno de ustedes como directores y como
impulsores de estas organizaciones.
Señor licenciado Sami David David,
muchas gracias porque usted nos recibe
aquí y muchas gracias al doctor Luis
Mendoza Cruz, porque es un gran
impulsor de este organismo, porque nos
ha llevado y nos ha infundido ése ánimo a
todos para seguir construyendo
investigación y conocimiento a través de
nuestros institutos.
Agradecer, también, desde luego, la
presencia del maestro doctor Héctor Fix
Fierro, a quien, desde luego también
como ya lo comentaba el diputado
Francisco Arroyo, aplaudimos
constantemente sus generosas
aportaciones a la ciencia jurídica y al
derecho.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
17
Comentarles brevemente, porque me
parece que debemos dar el espacio a los
doctos en la materia, que aunque ya se
haya marchado el diputado Francisco
Arroyo, que él fue uno de los impulsores
cuando fue diputado local y entonces
secretario de la Gran Comisión que
todavía se manejaba, se modificó la Ley
Orgánica del Poder Legislativo y, a partir
de ahí, él dio impulso y nacimiento al
Instituto de Investigaciones Legislativas
que hoy me honro en dirigir.
Es verdad que es un político en el
estado de Guanajuato, cuajado,
respetado, de una gran calidad jurídica
parlamentaria y moral, por lo que le ruego
al Lic. Sami David David que le haga
saber mi reconocimiento porque,
verdaderamente, es un empeñoso del
trabajo parlamentario y a eso ha dedicado
gran parte de su vida y su trayectoria
profesional.
Quiero darles a mis compañeros la
bienvenida, nuevamente nos volvemos a
concitar aquí para seguir impulsando la
necesidad, como lo hemos venido ya
platicando en otros tiempos y en otros
momentos, en buscar y conseguir que
tengamos el apoyo de nuestros diputados
para poder seguirles apoyando, para
poder seguir sirviendo al delicadísimo
trabajo de construir las leyes, de construir
el derecho, el orden jurídico.
Es decir, si nos ayudan, si nos abren
las puertas y nos apoyan con todo ello
que necesitamos para ser cada día
mejores profesionales, podemos dar en
beneficio del trabajo parlamentario
mejores resultados. Sean todos ustedes
compañeros nuevamente bienvenidos y
no me resta más que agradecer la calidez
y el apoyo que nos brinda el CEDIP en
esta mañana consciente de que los
trabajos que hoy vamos a asumir serán
muy fructíferos y nos permitirán seguir
trabajando adelante, caminando siempre
con un rumbo muy fijo, muy concreto, con
el propósito de mejorar y de apoyar
nuestra delicada tarea de investigación.
Muchas gracias a todos.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
18
1.2 Conferencia Magistral “Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana expedido en Apatzingán”
Héctor Felipe Fix Fierro*
Muy buenas tardes. Quiero manifestar
que me encuentro muy complacido de
poder participar en este Décimo
Encuentro Nacional de la Asociación
Mexicana de Institutos y Organismos de
Estudios e Investigaciones Legislativas y,
por supuesto, agradezco particularmente
la invitación de la Cámara de Diputados,
del CEDIP, del licenciado Sami David,
director general del CEDIP y del doctor
Luis Mendoza, director de Estudios
Parlamentarios de este mismo centro y a
ustedes también, la oportunidad de poder
compartir algunas reflexiones.
* Doctor e investigador titular "C" de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
Quiero confesar que yo no soy
especialista en historia constitucional y
eso implica el riesgo de que diga yo
trivialidades o barbaridades pero espero
que me guarden el secreto si así es. Sin
embargo, creo que como ciudadano y
como académico tengo un interés
particular en la historia constitucional y,
en esa medida, me parece que puedo
tratar de compartir con ustedes, desde
una perspectiva contemporánea, algunas
reflexiones que me ha suscitado la lectura
de este documento, cuyo bicentenario
estamos celebrando justamente el día de
hoy.
Creo que el tiempo no daría para dar
todo el contexto y los antecedentes y los
consecuentes de la promulgación de la
Constitución; simplemente, como les digo,
haré un repaso, una lectura con ustedes
y, al hilo de esa lectura, haré algunas
reflexiones y señalaré algunas cosas que
me parecen significativas. No sé si lograré
decir algo distinto en relación con los
discursos de la sesión solemne que ya
escuchamos; lo que sí les puedo asegurar
es que mi discurso no es político. Yo no
vine a hacer política, simplemente a hacer
algunas reflexiones de tipo académico.
Sabemos muy bien que la
Constitución de Apatzingán no es el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
19
primer documento constitucional que
estuvo vigente en México. La primera
Constitución que estuvo vigente fue la
Constitución de Cádiz, esta estuvo
vigente en dos periodos: el primero de
1812 a 1814; la suspende Fernando VII
cuando regresa al trono y después se
reestablece en 1820 y estuvo realmente
vigente hasta la Constitución Federal, se
proclama la Constitución Federal de 1824
también en el mes de octubre.
No obstante, sí es la primera
Constitución Mexicana en el sentido de
que es el primer documento constitucional
que proclama y asume la plena
independencia y soberanía de la nación
mexicana y, en ese sentido, creo que es
muy justo hacer todas estas
celebraciones y remembranzas.
Señalo también que es un documento
provisional, él mismo señala que su
objetivo es fijar la forma de gobierno que
debe regir a los pueblos de esta América,
mientras la nación libre de los enemigos
que la oprimen dicta su Constitución. Hay
una consciencia muy clara y creo que no
podría ser de otra manera, mientras dure
la lucha armada y no se logre la plena
independencia de la nación mexicana es
un documento provisional y que más
adelante se dictará una Constitución.
De manera que el Movimiento
Insurgente, como se señaló en los
discursos de hace unos momentos, trata
de legitimarse, trata de dar un
fundamento jurídico y político muy
completo a su movimiento, fijando los
principios que la orientan.
No se llama este documento
formalmente Constitución, pero si ustedes
lo revisan verán que es una Constitución
en el sentido pleno de la palabra, por las
partes que la componen y por los
elementos que contiene y, en este
sentido, es correcto que la llamemos,
aunque sea coloquialmente, Constitución
de Apatzingán.
En la primera parte, justamente,
ustedes encuentran los principios o
elementos constitucionales. El primer
artículo se refiere al tema de la religión,
sabemos bien que las primeras
Constituciones mexicanas fueron
intolerantes en este sentido, ya que solo
se aceptaba la religión católica, apostólica
y romana como única y oficial; después
se habla de la soberanía, de los
ciudadanos, de la Ley; una declaración de
derechos de igualdad, seguridad y
propiedad, y una parte que a veces se
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
20
nos olvida, las obligaciones de los
ciudadanos.
En total, la Constitución es un texto
de 242 artículos, probablemente sea de
los textos constitucionales con más
artículos de nuestra historia, divididos en
22 capítulos. Si ustedes la leen, quizás
les llame la atención que es un
documento que utiliza un lenguaje que
nos suena un poco extraño. Sí lo
entendemos, pero es un poco extraño. La
razón que a mí se me ocurre es que
estamos más acostumbrados al lenguaje
constitucional, que se elaboró después y
que viene de 1824, esta es una
Constitución que, más que establecer una
continuidad con Apatzingán, recoge la
influencia de Cádiz y del
constitucionalismo norteamericano. Así
seguirán después las Constituciones más
longevas de nuestra historia: la del 56 –
bueno, la del 57 y la de 1917. Entonces,
diríamos que la Constitución de
Apatzingán está escrita en español. Lo
podemos entender pero nos suena un
poquito en algunas fórmulas como algo
extraño.
Voy ahora a comentar algunos temas
que me motivaron a hacer un análisis del
texto. En relación con la soberanía, en el
capítulo dos, les llamará a ustedes la
atención que este está escrito más bien
como un manual de derecho
constitucional, así que, más que
establecer norma, es como una especie
de definiciones y de conceptos, ¿no?
Se dice que la soberanía es la
facultad de dictar leyes y establecer la
forma de gobierno que más convenga a
los intereses de la sociedad, de acuerdo
con las teorías de la época, es
imprescriptible e inalienable, indivisible y
tiene tres atribuciones: la facultad de
dictar leyes, la facultad de hacerlas
ejecutar y la facultad de aplicarlas a los
casos particulares, que son,
coincidentemente, las funciones
principales de los tres poderes que
conocemos. Hay un principio que
establece: Ninguna nación tiene derecho
para impedir a otra el uso libre de su
soberanía, ni siquiera el título de
conquista por la fuerza.
Es interesante también hacer notar
que la Constitución de Apatzingán se
adhiere a la teoría de la soberanía
popular o la soberanía del pueblo por
contraste con la llamada soberanía
nacional. La soberanía del pueblo es más
bien una idea que viene de Rousseau y
del constitucionalismo norteamericano,
mientras que la soberanía nacional es un
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
21
concepto que se desarrolló en las
constituciones francesas.
¿Y cuál es la diferencia? El pueblo,
pues, es el conjunto de ciudadanos o de
personas que integran una población, que
forman parte de ese orden constitucional,
digamos que son los individuos concretos
que existen en un momento determinado.
Por otro lado, la nación es una
construcción quizás un poquito
metafísica, compuesta no sólo por las
personas que componen una sociedad
política en un momento determinado, sino
las generaciones anteriores, la identidad
cultural y la identidad histórica.
Si se fijan ustedes en nuestra
Constitución actual, hemos combinado las
dos teorías, porque dice la Constitución
actual, si no mal recuerdo: La soberanía
nacional reside esencialmente en el
pueblo. Entonces, igual que en
Apatzingán, estamos combinando el
concepto de nación y el concepto de
pueblo en un sentido que me parece que
no es incompatible, simplemente hago
notar a ustedes que hay un matiz ahí que
quizás 200 años después no sea tan
importante.
Después, el capítulo que se refiere a
la Ley -pues también tiene como este
carácter pedagógico-, dice: Ley es la
expresión de la voluntad general en orden
a la felicidad común. Esta expresión se
enuncia por los actos emanados de la
representación nacional. Claramente, es
Rousseau el que está dictando esa
definición si insiste en que la Ley debe ser
igual para todos.
Y hay dos artículos que me llamaron
poderosamente la atención y que quizás
nos digan cosas importantes para el
momento actual. Si me permiten, leo el
artículo 20, que también se mencionó en
la sesión solemne, dice: La sumisión de
un ciudadano a una ley que no aprueba,
no es un comprometimiento de su razón,
ni de su libertad; es un sacrificio de la
inteligencia particular a la voluntad
general.
Está dicho de manera quizás un
poquito barroca, pero lo que significa –y
creo que es importante, porque
normalmente pensamos en la aprobación
de la Ley por la mayoría y uno dice “y qué
pasa con quienes no aprueban esta ley”–,
bueno, lo que está diciendo este artículo
es que quien no aprueba una ley tiene
derecho a no aprobarla pero sí tiene la
obligación de reconocerla, por eso dice
que es un sacrificio de la inteligencia
particular a la voluntad general; hay que
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
22
reconocer la ley que no aprobamos y al
hacerlo no estamos comprometiendo ni
nuestra razón ni nuestra libertad. Aquí el
matiz sí es distinto en relación con
Rousseau. Rousseau dice, más o menos,
que quien no coincide con la voluntad
general pues se equivocó y hay que
obligarlo a ser libre. Creo que es un
lenguaje muy distinto.
Luego el artículo 23 dice: La Ley solo
debe decretar penas muy necesarias,
proporcionadas a los delitos, y útiles a la
sociedad. Esto en un contexto de inflación
penal que vemos actualmente, ¿no?, y
que se explica, en gran parte, porque ante
la falta de eficacia de la persecución
penal casi no nos queda otra opción que,
simplemente, cambiar los códigos
penales, pues creo que es un recordatorio
importante.
Después viene, como he
mencionado, una declaración de
derechos, que es una declaración creo
muy completa. La Constitución Federal de
1824 no tuvo una declaración de
derechos porque se consideró que debía
quedar a las constituciones particulares
de los estados, y así se hizo. Hay algunos
derechos ahí que tienen que ver con la
administración de justicia.
La Constitución de Apatzingán sí
tiene esa declaración, será la primera
declaración de derechos de nuestro
constitucionalismo y tiene también una
definición, que ya se citó en la sesión
solemne y que dice: La felicidad del
pueblo y de cada uno de los ciudadanos
consiste en el goce de la igualdad,
seguridad, propiedad y libertad. La íntegra
conservación de estos derechos es el
objeto de la institución de los gobiernos y
el único fin de las asociaciones políticas.
Éste es el lenguaje de la Revolución
Francesa y de la Declaración Francesa de
los Derechos del Hombre y el Ciudadano,
¿no?, donde dice, claramente, que solo
se justifica y legitima un gobierno y una
asociación política si su propósito es la
conservación y defensa de estos
derechos.
Aunque también tiene una
formulación que es similar al artículo 1o.
de la Constitución de 1857, que –si la
memoria no me falla– dice algo así como
que el pueblo mexicano reconoce que los
derechos del hombre son la base y el
objeto de las instituciones sociales.
Entonces, no sé si en la 57 hay una
referencia consciente o no a la
Constitución de Apatzingán pero el hecho
de que utilice una fórmula semejante tiene
que ver con el origen de este lenguaje en
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
23
los documentos de la Revolución
Francesa.
Hay algún principio que también creo
que tiene relevancia actual, dice: Ningún
ciudadano podrá obtener más ventajas
que las que haya merecido por servicios
hechos al Estado. Ahora tuvimos este
tema de los salarios y prestaciones de los
servidores públicos, se ha establecido
una serie de reglas en la Constitución
vigente y, aparentemente, no hemos
logrado todavía generar un orden y un
sistema en relación con este tema.
Bien, menciono los derechos más
importantes a los que se refiere este
capítulo: que los cargos públicos son
temporales, ya se mencionó; el principio
de legalidad, dicho con bastante claridad;
el principio de la responsabilidad de los
servidores públicos; la garantía de
audiencia, con un lenguaje que nos suene
muy actual dice: Ninguno debe ser
juzgado ni sentenciado sino después de
haber sido oído legalmente; la garantía de
audiencia; la inviolabilidad del domicilio; el
derecho de propiedad y la garantía contra
la expropiación; el derecho de petición; la
libertad de cultura, industria y comercio,
entiéndase cultura como una ocupación;
la libertad de hablar, discutir y manifestar
opiniones mediante la imprenta, salvo –y
este es un elemento recurrente en las
primeras Constituciones– que se ataque
el dogma religioso, que se turbe la
tranquilidad pública o se ofenda el honor
de los ciudadanos.
Hay dos artículos que también creo
que tienen fórmulas inmejorables y muy
actuales para los tiempos que corren, el
artículo 36 dice: Las contribuciones
públicas no son extorsiones de la
sociedad, sino donaciones de los
ciudadanos para Seguridad y Defensa,
nadie paga las contribuciones con mucho
gusto o con mucha voluntad pero lo que
está insistiendo este artículo de beneficio
para una sociedad y, en verdad, los
ciudadanos deberían verlo como una
donación, como una aportación voluntaria
y no algo que se le impone de manera
arbitraria.
Después el artículo 39, que se refiere
a la educación que dice: La instrucción
como necesaria a todos los ciudadanos
debe de ser favorecida por la sociedad
con todo su poder, es un elemento muy
importante.
Pasaré ahora a comentar sobre la
forma de gobierno, no está definida en el
decreto pero se entiende que es una
reforma republicana. Ya se mencionó que
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
24
aquí no aparece por ningún lugar,
ninguna idea de monarquía, aunque sea
constitucional, ni de lograr el
reconocimiento de un monarca europeo,
en lo que sí insiste es en que el gobierno
lo establece el pueblo y que todos los
cargos públicos son temporales y
contingentes y esta es una de las ideas
que caracteriza a la república.
De acuerdo con este texto, la
América mexicana, como la denomina,
está compuesta por 17 provincias, las
enumera, las enlista, no dice nada más
sobre las provincias o sobre el gobierno
de las provincias, salvo que en la parte
final de la Constitución se refiere a
intendencias de Hacienda ante las
provincias. Bueno, esto es comprensible,
al final la única manera de sostener un
estado es con ingresos y podemos
entender que la constitución comprenda
unas disposiciones que tengan que ver
con la recaudación de ingresos.
¿Cuáles son las supremas
autoridades de acuerdo con este decreto
constitucional? En primer lugar está el
supremo congreso mexicano, que es el
cuerpo representante soberanía del
pueblo, hay un supremo del pueblo y hay
un Supremo Tribunal de Justicia.
El Supremo Congreso está
compuesto por diputados que son
elegidos uno por cada provincia, cada dos
años, no hay reelección inmediata, son
inviolables en sus opiniones, están
sujetos a juicio de residencia que era un
procedimiento que se hacía
tradicionalmente de la colonia con los
virreyes y otros funcionarios que dejaban
sus cargos. Era una especie de juicio de
responsabilidad donde se abría una
oportunidad para presentar acusaciones o
denuncias en relación con el desempeño
de esos funcionarios.
Dice: Pueden ser acusados de ciertos
delitos durante su encargo como los de
herejía y apostasía, más bien políticas, en
relación con los partidos, pero no con las
ideas religiosas. El sistema electoral es
un sistema complejo que toma un buen
número de artículos, del artículo 60 al
101, porque en esa época se establece
un sistema de elecciones indirectas hasta
en tercer grado. Este es el mismo sistema
de la Constitución de Cádiz y creo que
refleja, a pesar de todas las
proclamaciones sobre la soberanía del
pueblo, que en verdad no se confiaba
realmente en el pueblo, no hay la elección
directa de los representantes sino que se
hace por escalones, establecen juntas
electorales de parroquia, juntas
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
25
electorales de provincia, juntas
electorales de partido y, finalmente, juntas
electorales de provincia y son esos los
que finalmente deciden quienes van a
hacer los diputados en el supremo
congreso.
El Congreso tiene una serie de
atribuciones exclusivas y la más
importante de ellas es elegir a los
integrantes de los otros dos poderes. Le
corresponde al Supremo Congreso elegir
a los individuos del Supremo Tribunal de
Justicia así como a los del tribunal
residente.
Entonces, la Constitución de
Apatzingán establece un gobierno que
podríamos llamar “congresional”, no sé si
pudiéramos decir estrictamente
parlamentario con un ejecutivo débil, que
es un ejecutivo colegiado, integrado por
tres personas, los integrantes de este
supremo gobierno se rotan el cargo de la
presidencia cada cuatro meses. Es decir
que, en un año, cada uno de esos
integrantes ocupa la presidencia. Cada
año, sale por sorteo uno de los tres
integrantes, ninguno puede ser reelegido -
salvo que haya pasado un trienio después
de su administración- así señala un
artículo, donde menciona que ningún
individuo del supremo gobierno o del
supremo tribunal podrá pasar ni siquiera
una noche destinado para su residencia
sin que el Congreso le conceda
expresamente su permiso.
Entonces, a mí me parece simbólico
el grado de dependencia que se
establece el supremo congreso sin que el
congreso le conceda expresamente su
permiso. Aquí creo que deberíamos
reflexionar sobre este movimiento que
podríamos llamar “recurrente” en las
constituciones del Siglo XIX y de la
constitución vigente, donde se trata de
evitar el caudillismo y la dictadura. Es
decir que, desde el comienzo, hay una
desconfianza hacia los hombres fuertes,
hacia los caudillos y la manera como se
trata de evitar esta tendencia, creando
congresos y órganos legislativos fuertes.
En parte también por influencia de la
teoría constitucional que está detrás, que
son las ideas de Rousseau, quien
considera que es el Poder Legislativo -en
cuanto representante de la voluntad
general- el predominante, no hay una idea
de equilibrio de poderes, sí hay división
pero, al final, el poder más importante es
el del legislativo.
En el caso de Apatzingán, no sé qué
tanto ambas consideraciones tienen el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
26
papel, por un lado, esta influencia de las
ideas políticas y, por el otro, no sé si en el
entorno de Morelos que, claramente, era
el caudillo del movimiento revolucionario a
la idea de que hay que tratar de evitar una
apariencia de dominio de un solo hombre,
de una sola persona.
El mismo Morelos, señala que él
solamente es ciervo de la nación. Sin
embargo, está claro que la lucha armada,
en ese momento, requiere un caudillo y
cuando ese caudillo es detenido y fusilado
el movimiento de independencia
prácticamente desaparece. Queda nada
más Vicente Guerrero en las montañas de
lo que ahora es el estado que lleva su
nombre, ahí mantiene viva la llama de la
independencia, pero prácticamente se
acaba el movimiento de independencia.
La segunda constitución que intentó
moderar esta tendencia al caudillismo,
quizá por la experiencia de las dictaduras
de Santa Anna, es, como sabemos muy
bien, la Constitución de 1857. Aunque
sabemos también que, una vez aprobada
la Constitución, se dijo que no se podría
gobernar con ella, empezando por el
presidente Comonfort que la desconoció
dando un golpe de estado.
Cuando se reestableció la
Constitución, después de la invasión
francesa, el presidente Juárez trató de
moderar el poder del Congreso y el
Congreso estuvo a punto de destituirlo -
eso lo sabe poca gente- y, al final, cuando
llega el gobierno de Porfirio Díaz y la
dictadura porfirista, sabemos que don
Porfirio puso la Constitución sobre un
pedestal, pero realmente gobernó sin ella.
Eso, a través de la influencia de don
Emilio Rabasa, tuvo mucho impacto en el
Congreso constituyente de 1916 y 1917
que, nuevamente de acuerdo con el
proyecto de Venustiano Carranza, trata
de fortalecer las atribuciones del
presidente de la república respecto del
Congreso y después en los años treinta,
nuevamente, se apuntala el poder
presidencial.
Don Emilio Rabasa tiene una obra
muy conocida, un clásico del derecho
constitucional mexicano, en el que
prácticamente le echa la culpa a la
Constitución de 1857 por el hecho de que
don Porfirio haya gobernado realmente
fuera del orden constitucional.
Ahora estamos otra vez quizás un
poco en el regreso. Hemos logrado
moderar el poder presidencial, hemos
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
27
creado toda una serie de organismos
autónomos que son desprendimientos de
la esfera del Poder Ejecutivo; realmente
eso es lo que es.
El Congreso, indudablemente, ha
asumido un papel mucho más visible y
protagónico, sin embargo, perdón que lo
diga aquí en la Cámara de Diputados, a
mí me parece que todavía no acaba de
consolidarse ese papel de
responsabilidad, de control, de orientación
que deberían tener los congresos.
De hecho, justamente como
mencionaba el diputado Arroyo, el hecho
de contar ahora con una infraestructura
de apoyo con institutos de investigaciones
legislativas y parlamentarias, es un
modelo sobre el que hay que seguir; pero
a mí me parece que no acaba de
consolidarse, porque siento que vienen y
van las legislaturas y estas instituciones o
centros de apoyo no se concretan al cien
por ciento porque tienen luego muchos
cambios. Debería de ser uno de los
elementos permanentes de la vida
legislativa, frente a los cambios que se
van dando en la composición de los
órganos legislativos propiamente útiles.
En el capítulo que se refiere a la
sanción y promulgación de las leyes, al
menos se le da al supremo gobierno y al
Supremo Tribunal de Justicia la facultad
de objetar, dice textualmente: representar
en contra las leyes que se estén
discutiendo en el Congreso.
Está claro que el supremo gobierno y
el Supremo Tribunal son órganos
dependientes y subordinados al Congreso
pero, al menos, se les da la posibilidad de
exponer sus puntos de vista y sus
objeciones respecto de lo que se está
discutiendo en el Congreso.
Si esas objeciones son fundadas,
dice la Constitución de Apatzingán, la Ley
se suprime y no puede ser propuesta otra
vez antes de seis meses pero si el
Congreso considera que no son
fundadas, entonces no se logra el
propósito de evitar su promulgación.
En relación con el supremo gobierno,
me parece que no tiene atribuciones
particularmente relevantes, que es
interesante que se le establecen
prohibiciones expresas como, por
ejemplo, en el artículo 166, se prohíbe
arrestar a un ciudadano por más de 48
horas, dentro de cuyo término deberá
remitir el detenido al tribunal competente
con lo que se hubiere actuado, que me
parece que es algo que tenemos similar
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
28
ahora en relación con el Ministerio
Público, que solo tiene un plazo muy
estricto para retener a una persona, sin
que sea presentada ante la autoridad
judicial.
Luego el artículo 169 que dice que se
prohíbe al supremo gobierno dispensar la
observancia de las leyes bajo pretexto de
equidad ni interpretarlas en los casos
dudosos; el principio de legalidad es tan
estricto y, de acuerdo con las ideas de la
época, ni siquiera una autoridad que no
sea el Congreso puede interpretar los
casos dudosos en relación con la Ley.
En relación con el Supremo Tribunal
de Justicia, dice que, por ahora, se
compone de cinco individuos y este
número lo puede aumentar el Congreso.
Tiene una presidencia en la que se turnan
cada tres meses y se renueva por
completo cada tres años. Los integrantes
del Supremo Tribunal no pueden ser
reelectos hasta pasada un trienio.
Dentro de sus atribuciones, están las
normales de un supremo tribunal, en
relación con los individuos, con los otros
poderes, se refieren a los recursos de
fuerza que provienen de los tribunales
eclesiásticos, las competencias entre
tribunales y la resolución de causas
civiles y criminales en segunda o tercera
instancia.
Me parece relevante el artículo 202
que dice: “en el Supremo Tribunal de
Justicia no se pagarán derechos”. Aquí se
está proclamando la gratuidad de la
justicia, al menos la que imparte este
supremo tribunal.
En la Constitución también se
establecen juzgados inferiores de
distintos niveles; se habla de jueces
nacionales de partido, nombrados por el
supremo gobierno, en tanto los elijan los
mismos pueblos.
Luego, en el artículo 212 y en el
siguiente, se regula lo relativo al tribunal
de residencia, que es encargado, como
les he dicho, de hacer un procedimiento
por el cual se revisa el desempeño de una
autoridad una vez que dejan el cargo. El
tribunal está compuesto por siete
individuos que nombra el Congreso -se
elige uno por cada provincia- y se
renueva cada dos años. Las causas del
tribunal de residencia tienen que ver con
los individuos del Congreso, del supremo
gobierno y del supremo tribunal de
justicia.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
29
Finalmente, los capítulos finales de la
Constitución, hablan de la representación
nacional, es decir, los constituyentes de
Apatzingán están conscientes de que su
representación es imperfecta, porque
dado el estado de guerra no se pueden
realizar elecciones regulares que
permitan designar a los representantes
nacionales.
Entonces, al final de la Constitución,
se dice que, una vez que se consolide la
independencia nacional, el Congreso
tomará las medidas para que se pueda
integrar de manera efectiva esa
representación.
Otro capítulo se refiere a la
observancia del decreto y, finalmente, a la
sanción y promulgación del decreto, que
es una parte que realmente
correspondería en la actualidad a los
artículos transitorios. Entonces, a grandes
rasgos, esto que les he mencionado es lo
que describe el contenido y el alcance de
esta Constitución que llamamos de
Apatzingán y que, efectivamente, es una
verdadera Constitución.
Desde el punto de vista actual, ¿qué
podemos concluir sobre su importancia,
sobre la herencia? Les mencionaba que
me parece que sí se corta la línea de
continuidad entre la Constitución de
Apatzingán y los documentos
constitucionales de la época
independiente, la razón es sencilla,
quienes hicieron la consumación de la
independencia tenían un vínculo con el
movimiento de Morelos solo de manera
parcial.
Entonces ahí entraron otros
elementos, otras consideraciones, otras
influencias. Al final, había que acomodar
otros intereses y otros grupos, digamos,
el discurso nacional de Morelos y de sus
compañeros explicita que ellos
representan a la nación pero la verdad es
que una parte de la nación no existía o no
estaba de acuerdo con la gesta de
independencia, por la sencilla razón de
que ellos seguían formando parte del
orden colonial y reconocían a las
autoridades españolas.
Entonces creo que hay que tener
conciencia de que se da esta ruptura. No
quisiera decir “ruptura”, pero esta falta de
liga y de continuidad. En ese sentido, creo
que como texto no es especialmente
influyente en las constituciones
posteriores pero sí, como ustedes han
escuchado, es un documento de gran
actualidad y relevancia. Como se dijo en
los discursos de la sesión solemne,
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
30
representa un ideario que todavía está
por cumplirse en muchísimos elementos.
Me parece que tiene un valor pedagógico.
Algunas de las fórmulas que les he
leído me gustan mucho casi como
principios para un programa político en el
sentido de que ahí sí podemos ver que sí
tenemos una continuidad y que podemos
entender muy bien los objetivos y el
programa de la Constitución de
Apatzingán.
Es una constitución avanzada en
muchos aspectos. Se mencionó, por
ejemplo, la concesión del derecho del
voto, que en esa época era muy
restringido. Obviamente, los
constituyentes de Apatzingán tratan de
extender lo más posible la idea de la
ciudadanía porque esa es una manera de
legitimarse y de obtener apoyos.
Finalmente, para terminar esta
reflexión y no cansarles mucho más,
quisiera comentarles que, con la
Constitución de Apatzingán, me parece
que comienza algo que es el hilo
conductor de nuestro constitucionalismo
desde esa época y es que, en realidad,
las constituciones han servido para
inventar un país que no existe todavía.
Tomando la expresión de un colega
mío, el doctor Sergio López Ayllón, él
dice: “La Ley en México sirve para instituir
pero no para regular”. Esto sea en el
sentido de que diseñamos primero en la
Ley una situación a la que después
tratamos de aproximarnos. Esto es visible
en la Constitución de Apatzingán porque
diseña un país que no existe en ese
momento, no hay una nación mexicana.
La nación mexicana, con suerte, empieza
a forjarse después de la invasión francesa
y, si me permiten ir más allá, no tendrá
mucho más de 100 años de existir
realmente con esta conciencia de nación,
de país.
Por eso, si me permiten una
exageración más, yo digo que México es
un país que inventaron los abogados,
porque son los abogados los que
diseñaron todos estos documentos, de
acuerdo con las ideas de la época. Ellos
diseñan una visión de la modernidad que
muchas veces no tiene que ver con el
país real y esto es algo que se ha dicho
mucho, por ejemplo, de los constituyentes
de 1856 y 1857. Que haya sido
brillantísimo, no hay duda, quizá fue de
hecho el más brillante de nuestra historia
constitucional pero, al final, es una
constitución que fracasa —y eso hay que
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
31
decirlo— al menos en las primeras
décadas después de su promulgación.
Sin embargo, la buena noticia es que
ese país -que en su momento diseñan los
constituyentes de Apatzingán y los que
vinieron después-, en ese momento, no
existe pero ya existe ahora y tenemos la
esperanza y seguimos legislando con
esta idea de que lo que vamos creando
en el papel va a tener realidad y una
realidad permanente y visible con el
tiempo. No sabemos cuánto tiempo,
sabemos que nos falta mucho todavía por
lograr pero, en la gran narrativa de la
historia humana, doscientos años es
prácticamente nada. Muchas gracias.
.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
32
1.3 Panel “Federalismo y reformas estructurales (armonización legislativa)”**
Luis Mendoza Cruz*
Qué tal colegas de institutos, amigos
todos, público que tan amablemente nos
acompaña en esta ocasión.
Evidentemente, un acontecimiento
como este y cuyo contexto estamos
realizando en el X Encuentro Nacional de
Institutos de Investigación y de Estudios
** En el Panel participan los directores de los organismos e institutos de investigaciones legislativas: Toribio Hernández López, encargado del despacho de la dirección del Instituto de Investigaciones Legislativas del estado de Aguascalientes; el licenciado Jorge Alberto Huízar Ríos, Vocal Ejecutivo del Instituto de Estudios Legislativos del estado de México, y el doctor Edy Izaguirre Treviño, Coordinador del Instituto de Investigaciones Parlamentarias del estado de Tamaulipas. * Doctor, moderador de panel y Director de Estudios Parlamentarios del CEDIP.
Jurídicos Mexicanos, de los congresos de
todo el país, no puede más que
emocionarnos. Esto es algo que nos lleva
a meditar, a reflexionar en algo que el
doctor Fix señalaba al cierre de su
exposición, que es cómo es que se
imaginaron, hace 200 años, un país que
no existía y pensaron que era posible un
país libre, soberano, independiente,
cuando las ideas que les daban sustento
apenas estaban llegando a nuestro país y
que después serían abrasadas con gran
vigor por los mexicanos.
Ese es el sentido que tiene esta
efeméride, que la idea por vez primera de
un país independiente y soberano -y que
ahora es México-, ahí tiene sus
elementos, sus bases.
Yo diferiría de lo que dice el doctor
Fix de que hubo una discontinuidad entre
Apatzingán y los siguientes
constitucionalismos. Hemos realizado
algunas investigaciones donde lo que se
ve es que hay una continuidad. Tan
simple como esto. En uno de sus últimos
actos, antes de que el Congreso
Constituyente se dispersara, nombró en el
triunvirato presidencial, que era la fórmula
establecida, nombró como parte de esa
presidencia colegiada a Vicente Guerrero,
al General Arias y al General Guadalupe
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
33
Victoria que, si recordamos un poco
nuestra historia, fueron el primero
presidente y el segundo presidente de la
república mexicana a partir de 1924.
Si ellos traían ya este venero
libertario, estas ideas de derechos y
soberanía y de independencia, que les
fueron trasmitidas por Morelos en el
Decreto para la Libertad de la América
Mexicana… bueno, pues ahí está la línea
de continuidad, que es cierto también, hay
que coincidir con el doctor Fix. Se
construyó prácticamente durante esos
100 años, que van de 1814 a1917, que ya
tenemos una versión mucho más definida
del proyecto nacional mexicano.
Más allá de estas reflexiones, vamos
a dar paso a un panel con los institutos
legislativos un poco para pensar en el
país que ahora estamos pensando; lo que
llamamos armonización legislativa. Es
claro para todos, hoy México está
cambiando. Acabamos de asistir a un
ciclo de reformas constitucionales como
no se había visto en décadas. Hay
cambios profundos que nos llevan a
transformar buena parte de lo que éramos
hace 15 años. Si México está cambiando,
estamos viendo hacia el futuro, hacia un
país en el que nos gustaría estar. Vemos
los problemas de seguridad que aquejan
a algunas entidades y, la verdad, no es
algo que nos llame a enorgullecernos de
ello. Hay preocupación institucional, del
gobierno de la república, el Congreso de
la Unión, de los congresos de los estados
para crear… devolver a la nación la
seguridad y devolver la confianza a los
ciudadanos.
Hay ahorita una gran iniciativa
anticorrupción. Que están otra vez
convergiendo hacia ella los principales
partidos políticos precisamente para
poner un hasta aquí a eso, que es un
gran cáncer nacional, y que tiene que ver
con el fin de la impunidad… si podemos
combatir la corrupción estaríamos
también combatiendo la impunidad. En
fin.
¿Todo esto a través de dónde se
hace? A través de lo que el doctor Fix
también nos señalaba, a través del
Derecho, del cuerpo jurídico que nos
rige… es a través de donde se han
conducido los cambios institucionales que
estamos hoy viviendo. Por ello, nuestra
Constitución ha podido procesar a través
de esos cambios -que ahorita son
bastantes- pero que nos llevarán muy
pronto a estar en un país de los
optimistas, en un mejor país. La
Constitución nos permite hacer esos
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
34
cambios. Y el método de cambio, que es
la Reforma Constitucional, permite
constituir mayorías para que las reformas
puedan funcionar.
Ahí lo ven, algunos de los temas que
se han legislado últimamente están en un
proceso de consulta popular. Que
también fue un tema recientemente
legislado e innovado. Estoy más que
seguro que ese mecanismo de la consulta
popular habrá de ratificar lo que ya la
representación ha podido darle forma.
Porque la representación nacional
también proviene de un cuerpo electoral
universal. Esto es, ahora sí los
legisladores, a diferencia de hace 200
años, son electos en sus distritos. Vivimos
en una pluralidad evidente. Esta mesa es
prueba de ello. Aquí hay representantes
de congresos de los diferentes partidos.
Vivimos una diversidad evidente. Yo creo
que los cambios, como han sido
procesados en el Congreso y luego
validados por los Congresos de las
entidades, pues habrán de ser
refrendados en el proceso de consulta
popular, en los segmentos en que han
sido sometidos para ello.
Por ello, pensamos que este tema de
cómo se procesan temas nacionales y
luego cómo deben ser conducidos en las
legislaturas estatales, pues creemos que
es muy importante. En unos minutos
habremos de estar distribuyendo versión
muy innovadora de la Constitución. Este
es un formato de bolsillo, para que se
pueda portar y consultar de una manera
amigable. Es una Constitución que puede
tener uno en el escritorio. Incluso el
escritorio. Trae ya integradas en el cuerpo
las reformas constitucionales.
Precisamente, para que nos sirva de base
para poder dialogar de qué forma los
cambios constitucionales se viven o se
procesan en los estados, en las
entidades, porque todas las entidades son
parte de la nación, son las células que
integran este gran conglomerado; y
evidentemente han sido parte, a través de
la representación nacional y luego, con el
proceso de validación o refrendo
constitucional, han sido parte también de
dichos cambios.
Puedo enumerar. En materia de
justicia hay una propuesta de una Fiscalía
General de la República, que también en
este momento se va a legislar dentro de
la forma del Sistema Nacional contra la
Corrupción que está sobre la mesa como
un elemento de discusión. Hemos hecho
una reforma en materia de
telecomunicaciones, precisamente para
identificar el acceso a los modernos
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
35
medios de comunicación, que son parte
integral de la vida cotidiana. No hay
alguno de nosotros que no porte un medio
de comunicación digital. Nos hace ser
parte en todo momento de esa gran aldea
global que ahora es el mundo. Estamos
en comunicación instantánea con todo el
mundo. Lo que sucede en cualquier parte
nos permite interactuar o tomar una
decisión frente a ello. Por ello es la
importancia de una reforma como la que
se propuso. Habrá de llevarnos a más
pluralidad, a más diversidad y a la vez a
más diálogo y a más formación de
acuerdos sustantivos.
Una reforma energética profunda. La
parte energética ha sido algo esencial
para el ideal de soberanía nacional. Es
una reforma energética que propone
mantener… ahí lo van a ver ustedes en la
Constitución… mantener para la nación la
propiedad absoluta de los hidrocarburos.
Lo que hace es propiciar la participación
de los particulares en algunos segmentos,
para que, en nombre del Estado, los
hidrocarburos y luego los integren al
Estado. Es hacer que más trabajen en la
misma dirección, que es fortalecer las
finanzas públicas, proveer recursos para
las políticas públicas y proveer recursos
también para las entidades federativas y
los municipios, que a la vez mejoren la
calidad de vida de todos los mexicanos.
Una reforma del sistema de justicia
penal que va corriendo desde hace ocho
años y ahorita se va materializando por
ejemplo en un nuevo Código Procesal
Penal. En un futuro, quizá inmediato, en
una Ley General Penal; una ley que es
algo que los estados pidieron que fuera
esa la forma y no un código, ¿por qué?
Porque los estados necesitan incluir su
especificidad dentro de esos grandes
acuerdos nacionales, que al menos en lo
que es la materia penal sí hay
especificidades locales que deben ser
consideradas.
En fin, muchos son los temas que
podemos discutir. Por eso es la idea de
tener este panel reflexivo que, más allá de
los materiales que podamos hoy llevarnos
es simplemente conocer y saber de tener
a mano de nosotros o de ustedes a los
institutos de investigación legislativa de
cada una de las entidades. Cómo
perciben las reformas y cómo, de alguna
otra forma, nos articulamos para
armonizar estos cambios.
Empezamos las intervenciones con el
Lic. Toribio Hernández López, quien es el
encargado de despacho de la Dirección
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
36
del Instituto de Investigaciones
Legislativas de Aguascalientes.
Esperamos que sea un formato ágil, de 5
a 10 minutos, para irnos al siguiente
momento, que es la presentación de un
libro sobre la efeméride que hoy nos
reúne, y después poder hacer una pausa
para comer. Adelante.
Toribio Hernández López*
Doctor Carlos Torres Ramírez, presidente
de nuestra asociación; doctor Luis
Mendoza Cruz, director del Centro de
Estudios de Derecho e Investigación
Parlamentaria; compañeros de los
estados de la República, señoras y
señores.
Voy a iniciar con el final, con la
propuesta. La propuesta que exponemos
en esta mesa es la siguiente: Existe la
necesidad de institucionalizar al nuevo
federalismo mexicano.
Antes de iniciar con el tema, una
reflexión. En la historia de México hay tres
momentos fundacionales en que las
provincias se levantaron para crear
nuevas instituciones. Por eso creemos
que ahora estamos en otro momento.
* Encargado del Despacho de la Dirección del instituto de Investigaciones Legislativas del H.
Congreso del Estado de Aguascalientes.
El primer momento es la Guerra de
Independencia que se origina y desarrolla
en la provincia en los pueblos y ciudades
como Querétaro, San Miguel Allende,
Dolores Hidalgo, etcétera.
Este movimiento popular culmina,
precisamente, con la Constitución de
Apatzingán, que hoy estamos
conmemorando. En Apatzingán se
consolida la idea primigenia de una nueva
nación conformada, como ya se dijo, por
17 provincias.
Hidalgo esgrimió la legalidad al ser
invadida a España y usurpada la
monarquía, sin embargo Morelos aboga
por la completa independencia. Él como
religioso se fundamenta en la Biblia, en la
huida de Egipto, en el Éxodo, que es una
enseñanza de un derecho natural de los
pueblos, de emanciparse de la opresión.
Morelos habla de un nuevo pueblo
elegido, ya no éramos súbditos de
España, éramos mexicanos sometidos
por una nación extranjera. La posterior
consumación de independencia fue una
contrarrevolución de las élites centrales
por conservar sus privilegios.
El segundo momento fundacional se
da con la creación de la República
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
37
Federal, porque en México el proceso del
federalismo operó de la periferia al centro,
el movimiento federalista de las entonces
provincias fue natural, sin imposición
artificial o el consentimiento del centro
que incluso el centro llegó a combatirlo.
Al momento de la independencia, se
habían consolidado varias regiones,
debido a un proceso de territorialidad que
se vino dando desde la creación de las
audiencias, un ejemplo de esto lo
tenemos en 1817 cuando la audiencia de
Nueva Galicia expresó abiertamente su
deseo de lograr la independencia del
gobierno central de México.
Este regionalismo pudo haber
fragmentado el territorio nacional a la
caída del imperio de Iturbide en 1823. El
gran Imperio de Anáhuac se desvaneció
por la arrogancia despótica del emperador
que quiso gobernar de manera
unipersonal y centralizada.
Entonces las diputaciones
provinciales y los ayuntamientos
terminaron por confabularse junto con el
Ejército para establecer la República el 6
de diciembre de 1822. Es precisamente
en este momento en que se inicia un
activo movimiento encabezado por las
provincias de Yucatán, Guadalajara,
Oaxaca, Querétaro y Zacatecas, para
exigir que la Constitución que expidiera el
nuevo congreso creara un sistema
republicano y federal, amagando inclusive
que en caso de negarse a hacerlo, las
provincias disidentes no se integrarían a
la nueva nación y se asumirían como
estados libres y soberanos.
El tercer momento fue la Revolución
Carrancista, con el Plan de Guadalupe, la
Convención de Aguascalientes y el
Constituyentes del 17. Luego del golpe de
estado de Victoriano Huerta, el Congreso
Coahuilense desconoce al Gobierno
Federal.
Dicho acto es significativo para el
federalismo mexicano en virtud de que la
provincia se levanta para exigir al
gobierno central el apego al pacto federal,
otros gobiernos estatales,
paulatinamente, se unen al movimiento
reafirmando así su esencia provinciana
contra el gobierno central. El sistema
federal entonces más que discutido, fue
reafirmado en la Constitución de 1917.
Luego de esta digresión sobre
nuestro tema, entramos al planteamiento
del problema de por qué es necesario
institucionalizar el nuevo federalismo.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
38
En la actualidad estamos sufriendo
una serie de embates centralizadores,
pocas voces se alzan en la provincia para
protestar contra ello, lo cual resulta muy
extraño. Por ejemplo, ya lo mencionó aquí
el doctor, un código procedimental, penal
único. La propuesta de desaparecer los
institutos electorales locales, que al último
quedó una fórmula mixta.
El establecimiento de una
contabilidad única, una política única en
materia electoral, la intervención de la
Comisión Nacional de Derechos
Humanos, en asuntos locales, la
intervención del IFAI en asuntos locales,
la regulación federal del gasto público y
en materia de empréstitos, ahora está en
proyecto la pretensión de una unidad
anticorrupción única. Es decir, se está
quitando autonomía a los congresos
locales y a los poderes locales porque
considera que no tiene la capacidad para
autorregularse.
Los casos más palpables en este
momento son la intervención federal, la
virtual desaparición de poderes en
Michoacán y la idea de decretarlos en
Guerrero. Esto en ejercicio de la llamada
“garantía federal”, mediante la
intervención ejecutiva, prevista en nuestra
Constitución pero que nunca ha sido
reglamentada siendo que la propia
Constitución exige que se debe expedir
una ley reglamentaria de esas materias.
Todo ello nos lleva a reflexionar si es
necesario en este momento replantear
nuestro sistema federal, ya que resultado
de múltiples reformas constitucionales, se
ha alejado del modelo dualista de
distribución rígida de competencias para
constituirse en un modelo complejo,
basado en la coparticipación, la
concurrencia o el entrecruzamiento de las
competencias.
Tales reformas constitucionales han
ido dejando a las entidades federativas
una órbita de actividad cada vez más
reducida, ampliándose por contrapartida
la de las autoridades federales, lo que ha
propiciado el tránsito de un federalismo
competencial a un federalismo orgánico.
Sin embargo, este tránsito no ha
venido acompañado de la definición de
principios rectores de un nuevo
federalismo, parece que en realidad se
está dando un proceso de
descentralización envuelto en un lenguaje
ambiguo, mientras el poder central
incrementa su aparato burocrático y éste
se lleva a las entidades federativas y a los
municipios, a los cuales se sujeta cada
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
39
vez más a través de programas de
coordinación, minando así su capacidad
de toma de decisiones, se critica la
ineficiencia de los entes locales en lugar
de fortalecerlos y apoyarse en ellos. Por
un lado, se les exige más, y por el otro, se
les priva de facultades propias y
exclusivas.
Por ejemplo, en materia fiscal se dice
que los gobernadores no hacen un
esfuerzo recaudatorio por el desgaste
político que esto implica y que sólo estiran
la mano pidiendo más y más recursos sin
que rindan cuentas de en qué y cómo lo
gastan.
Lo mismo seguridad pública, donde el
gobierno federales les exige que asuman
su responsabilidad y se echan la pelota
unos a otros, como en el caso que
estamos viendo en Guerrero, pero, por
otro lado, la federación asume más
funciones, como en materia de secuestro,
de trata de personas y luego no tiene la
capacidad para enfrentar la problemática
y exige la colaboración de los estados,
incluso, de manera obligatoria, como en el
caso de narcomenudeo.
La cooperación forzosa no es
cooperación, es sujeción de un orden de
gobierno a otro. Entonces, como estamos
viendo este embate centralizador nos
obliga a replantear, de manera forzosa,
un nuevo federalismo mexicano, por lo
tanto, nuestra propuesta concreta es, que
con tales antecedentes y bajo las
premisas anunciadas es necesario
replantear un nuevo federalismo.
Resulta fundamental la transferencia
de facultades que implique también la
transferencia de recursos, así como los
estados fueron los impulsores del
federalismo, ha llegado la hora de que
nuevamente retomen los estados la
iniciativa, una iniciativa fundacional y
vayan en contra de la inercia
centralizadora, promovida en los últimos
años, no combatiendo al gobierno federal,
sino planteando una propuesta
inteligente, sin egoísmos estériles que
produzca un mayor equilibrio entre los
órdenes de gobierno.
Estamos en un momento justo para
replantear un nuevo federalismo. De
hecho, tenemos un nuevo federalismo, un
federalismo diferente, siempre ha sido
diferente porque está en constante
evolución, pero ahora con la realidad
vigente resulta necesario hacer ajustes
normativos que justifiquen lo que está
pasando y que lo orienten hacia una
mayor racionalidad, con instituciones que
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
40
propicien una mayor racionalidad, con
instituciones que propicien una mayor
correspondencia y que los cambios al
sistema no se den por simple inercia,
como está sucediendo en la actualidad,
sino que se planteen nuevos principios
rectores.
Muchas gracias.
Luis Mendoza Cruz
Muchas gracias, al licenciado Hernández
López, por su participación.
Indudablemente, esta idea sustantiva
sobre el nuevo federalismo es algo en lo
que muchos hemos estado pensando y
que aquí lo seguiremos reflexionando al
respecto.
Tiene ahora la palabra el doctor Edy
Izaguirre Treviño, quien es el coordinador
del Instituto de Investigaciones
Parlamentarias del estado de Tamaulipas,
para continuar con este diálogo.
Edy Izaguirre Treviño*
Muchas gracias, doctor Luis Mendoza.
Buenas tardes a todos, compañeras y
compañeros invitados. Qué tema tan
oportuno pone don Luis Mendoza en el
* Coordinador del Instituto de Investigaciones Parlamentarias del H. Congreso de Tamaulipas.
programa del día, en el sentido de platicar
sobre las reformas estructurales y el
nuevo federalismo que se está
construyendo.
Lo decía el presidente de la
república, el licenciado Enrique Peña
Nieto, en su informe, se trastocó 58
artículos de la Constitución y se emitieron
casi nuevas 30 leyes, y la mayoría de
ellas leyes generales, lo que implica que
se está redistribuyendo la competencia
entre federación, estados y municipios.
Está la teoría de federalismo versus
centralismo, sin embargo, creo que
estamos ante la presencia de un nuevo
federalismo como proyecto de nación,
donde los estados forman un todo que se
llama Estados Unidos Mexicanos y se
pueda proyectar bajo una misma línea,
bajo un mismo desarrollo institucional el
proyecto de nación.
Creo que si analizamos desde el
origen de estas reformas, que es el Pacto
por México, nos damos cuenta que la idea
es desactivar la economía, fortalecer los
derechos, fortalecer las instituciones y
abonar a la participación ciudadana, y
creo que viéndolo así estamos
construyendo un nuevo federalismo. Un
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
41
federalismo más uniforme, un federalismo
más unificado.
A mí me gustaría que, por supuesto,
frente a estas 58 reformas que
trastocaron diversos temas, como es la
reforma educativa, telecomunicaciones,
transparencia, la materia penal, materia
energética, y por supuesto, la materia
política electoral, que se vaya haciendo el
compromiso frente al centenario de la
Constitución, ya no moverle tanto a la
Constitución, sino aprovechar esta
coyuntura histórica, como hoy se
aprovecha aquí frente a esta Constitución,
para difundir la Constitución entre todos
los ciudadanos de la república, entre los
jóvenes, entre los profesionistas, entre los
adultos, para que estemos enterados,
empapados del proyecto constitucional
sobre el cual desempeñamos la vida
diaria los ciudadanos.
Voy a enfocarme más a la materia
política electoral, como para tocar este
asunto y decir cuáles son las nuevas
competencias a la que está sujeta ahora
la federación y los estados.
Fíjense nada más en materia política
electoral se trastocaron 31 artículos de la
Constitución. Se habla que es el decreto
número 206 de reformas a la Constitución
y que se suman más de 600 alteraciones
a los párrafos de la Constitución de 1917,
ya no hablamos de una Constitución tan
original, sólo quedan 27 y 28 de la
Constitución Política de 1917 sin
reformarse, lo que implica que si se
reformaron 58 artículos en esto que
hemos llamado reformas estructurales,
reformamos más de la mitad del
contenido constitucional y a esto
agréguenle que ya se había movido a
finales de… anterior, con la reforma
penal, con la reforma de amparo y con la
reforma de derechos humanos, estamos
frente a un nuevo federalismo, en
consecuencia estamos ante un nuevo
federalismo.
Venimos acabando lo que
empezamos desde 2008 y que
completará con la reforma política el
Distrito Federal y creo que con esta nueva
idea de la reforma constitucional
anticorrupción, que han puesto en la
agenda y que también viene desde el
Pacto por México. Bien.
En esta Reforma Electoral se
trastocaron 31 artículos, se los
comentaba hace un momento, y se
expidieron cuatro nuevas leyes generales,
la Ley General de Instituciones y
Procedimientos Electorales, la Ley
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
42
General de Partidos Políticos, la Ley
General en Materia de Delitos Electorales,
queda pendiente la de propaganda
gubernamental y la Ley del Derecho de
Réplica, que también estaría pendiente
para ser abordado, y estas reformas
impactan de manera importante en las
legislaturas de los estados.
Es decir, en la construcción del nuevo
federalismo, porque no solamente
impactó lo que fue parte de la reforma
constitucional, como podríamos estar
hablando de la reelección de diputados,
de la reelección de integrantes de los
ayuntamientos, a lo mejor ya estados se
comienzan a atrever a la autonomía de
las fiscalías generales estatales, sino que
resultan más obligaciones de regular en
los estados de las leyes generales de
partidos políticos y de las leyes generales
de instituciones y procedimientos
electorales, así como el de la Ley General
de Delitos Electorales. Es decir, en lo que
va, en lo que se refiere a la reforma
política electoral, no solamente las
competencias, las nuevas competencias
en el sistema federal electoral se
establecieron en la Constitución, sino que
en las leyes generales se establecieron
también un número importante de
competencias.
Yo creo que en la reforma política-
electoral, los que nos gusta la materia
electoral, y cuando dije materia política-
electoral vi varias caras de nuestros
compañeros y del público que sonrieron.
Sabemos que no tenemos el sentimiento
de una reforma acabada. Nos queda esa
duda de qué sigue en materia político-
electoral, en un sentido que ni se
centralizó totalmente la función electoral,
pero tampoco se centralizó, sino como ya
lo han dicho algunos expertos, quedó una
especie de mixtura ahí entre el Instituto
Nacional Electoral y los nuevos o los
nuevos organismos electorales y locales.
En ese sentido, porque sé que hay
que respetar el tiempo, solo mencionaré
los temas que en general contenía la
reforma político-electoral, como era la
autonomía del Ceneval, este órgano que
hace la medición de la pobreza para
pasar de una dependencia y de un
organismo descentralizado a un órgano
constitucional autónomo.
Los gobiernos de coalición, aunque
esta reforma entre en vigor hasta 2024, la
autonomía de la Procuraduría General de
la República en una fiscalía, que ojo, está
el tema de la anticorrupción ahí, en la
agenda política, pero ya en el 112 dice
que la Fiscalía General de la República
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
43
contendrá dos unidades especializadas o
fiscalías especializadas, una en materia
de derechos electorales y otra en materia
de corrupción.
Está el Plan Nacional de Desarrollo -
que lo aprobaría la Cámara de Diputados
y la Estrategia Nacional de Seguridad
Pública-, la reelección de legisladores, de
senadores por una ocasión y diputados,
hasta por tres ocasiones más, que juntos
son doce años por cada uno, siendo
senador o diputado y este empieza en el
2018.
En lo electoral, aterrizándolo al tema
federal y local se establece la paridad de
género, que es una gran oportunidad para
las mujeres en política, porque no
solamente exige equidad de género en la
integración de los congresos, sino que,
por ejemplo, la Constitución del Estado de
Tamaulipas dice que los partidos políticos
buscarán la paridad de género en la
integración de la legislatura y en la
integración de las candidaturas a
ayuntamientos. Pero la Ley General de
Partidos Políticos también obliga a estos
institutos a que en su estructura tengan
un número similar de hombres y mujeres
en la estructura orgánica, también
privilegiando la participación de la mujer
en política.
Entonces, creo que esto es una
reforma que viene a fortalecer mucho el
papel de la mujer en la política desde la
cancha constitucional y también desde el
ámbito de las leyes generales. Cambia la
denominación, como ustedes lo saben,
del Instituto Federal a Instituto Nacional
Electoral.
Yo siempre he dicho, he sostenido
buscando algún fundamento teórico y otro
práctico, otra experiencia es que las
instituciones en este país tardan unos
diez años en consolidarse, que el IFE era
una institución muy consolidada y que a lo
mejor no había necesidad de cambiarle el
nombre, pero bueno, ya también tenemos
muy arraigado el nombre del Instituto
Nacional Electoral.
Cambia la designación de consejeros
electorales, no mucho, pero pasa de ser
de nueva a once una integración similar a
la que tiene la Suprema Corte de Justicia
de la Nación.
Tiene atribuciones para conocer de
procesos locales, que ya estaba eso en la
Constitución y que mediante convenio
podían asumir, el Instituto Federal
Electoral una elección local, pero tenía
que ser solicitada a través de los
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
44
consejeros electorales de los estados,
con la novedad de que ahora a los
consejeros electorales los designa el
Instituto Nacional Electoral.
En este tema veo que a veces se
alertan, en la mesa que he escuchado de
debates de partidos políticos, pero no va
a estar atrayendo una elección local el
Instituto Federal Electoral, pues él mismo
designó a esos consejeros electorales de
los famosos, ahora también puede legar
responsabilidad.
Existen nuevas causas de nulidad de
una elección federal. Creo, de las OPLES
que he revisado, don Luis Mendoza
también ha revisado un número
importante por sus estudios. No he leído
otra Constitución del mundo que contenga
las causas de nulidad de una elección en
la Constitución. Vaya que, por una
materia que imparto de Derecho
Constitucional Comparado, tengo que
estar leyendo constantemente las
condiciones de otros países. Tampoco
encuentro el concepto de delincuencia
organizada y nosotros lo tenemos en la
Constitución.
Hay una atribución ahora para las
autoridades locales, ahora la designación
de los consejeros locales la hace el
Instituto Nacional Electoral previa
convocatoria pública, siete años, siete
consejeros y el Senado de la República
designa a los magistrados electorales que
dice la Constitución en el 116, que serán
número impar y la Ley General de
Instituciones y Procedimientos locales
dice que serán tres o cinco magistrados.
Aquí sí creo que hay una trastocada
ahí, al sistema federal, porque el Senado
de la República designa a los magistrados
electorales y un órgano nacional designa
los consejeros electorales de los OPLES,
los organismos públicos locales en
materia electoral.
Creo que ahí el tema sí se ha puesto
que ni se centralizó la función ni se
federalizó, y yo creo que ahí es una
atribución todavía que al tiempo veremos
un nuevo procedimiento de designación,
salvo que en lo que están a prueba
ahorita, que son los procesos electorales
que hay. Resulte muy profesionalizado
este nuevo mecanismo del Instituto
Nacional Electoral, no sobre todo porque
el procedimiento tan profesional, tan
transparente, tan imparcial que ha hecho
el Instituto Nacional Electoral sino porque
de acuerdo a las leyes generales, quienes
participen en la materia electoral ya no
son órganos ciudadanizados, sino
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
45
ciudadanos verdaderamente peritos en
materia electoral.
Hay un cambio de fecha para la
jornada electoral, que ahora los estados,
como es Tamaulipas el ejemplo, que no
teníamos una elección federal, una
elección local empatada con la federal,
ahora estamos obligados a empatar una
en el próximo proceso electoral.
Entonces, todo este tipo de temas
están en los congresos locales, sobre
todo en aquellos que no tienen elección
este año y que están ahorita armonizando
o construyendo su elección local.
Definitivamente, en este tema de la
federalización, derivado de las reformas
estructurales, hay muchos temas que
hacen ruido. Yo me decanto por la idea
con la que hacía la introducción. Creo que
estamos hablando de un nuevo
constitucionalismo, creo que estamos
hablando de un nuevo federalismo donde
se está unificando y señalando
literalmente, en diversas leyes, cuál es la
atribución en cada una de las autoridades
en los niveles federal, estatal y municipal,
encauzado o encaminado a un nuevo
proyecto de nación o a una nueva
consolidación del constitucionalismo del
Siglo XXI.
Sé que estamos sobre el tiempo.
Muchas gracias. Espero al final poder
tener alguna reflexión con ustedes si así
lo desean. Doctor.
Sami David David*
Muchas gracias al buen amigo Izaguirre.
Sin duda, yo también coincido,
estamos pasando un federalismo
integrador, decimonónico, que nos ha
acostumbrado como a cuidar una
coexistencia de islas a una forma de
federalismo moderno, que en el mundo de
la teoría se conoce como federalismo
compartido, que son los que funcionan en
sociedades más complejas como
Alemania, a Canadá. Incluso como
algunas monarquías de Reino Unido y de
España.
Se los comento así muy rápido, en
Reino Unido acabamos de ver que fueron
a un referéndum, Escocia hacia la
separación y la voluntad de los
ciudadanos fue permanecer en el Reino
Unido. ¿Por qué? porque la visión que
tenemos en este momento es que gana
más esa entidad nacional escocesa
* Director General del CEDIP
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
46
perteneciendo a un conglomerado más
grande, más fuerte y más sólido.
En España, yo acabo de estar en
España, en Cataluña hay otra moción de
ese tipo y ahí hay un chiste que les
platico, es muy rápido. Que es que decían
que si procediera la autonomía catalana,
contra quién jugaría el Barcelona.
Es también un sentir. Yo estuve
exactamente en Cataluña. Es un sentir de
muchos catalanes el decir, han ganado
mucho más perteneciendo ahorita a
España y la Unión Europea, qué es lo que
pudiera suceder si se separaran y les
pasara lo que alguna pequeña república
ha sucedido por ahí, que se han
disgregado.
En fin, le daré el uso de la palabra
ahora al licenciado Jorge Alberto Huizar
Ríos, bienvenido aquí al nuevo vocal
ejecutivo del Instituto de Estudios
Legislativos del Congreso del Estado de
México. Adelante.
Jorge Alberto Huizar Ríos*
Muchas gracias al doctor Luis Mendoza
Cruz, por recibirnos aquí en el Congreso
* Vocal Ejecutivo del Instituto de Estudios Legislativos del Estado de México.
de la Unión, en la Cámara de Diputados,
también a mi presidente, al doctor Carlos
Torres Ramírez, muchas gracias por tu
labor, por preocuparte siempre de que
estemos integrados, de que estudiemos,
de que cumplamos a cabalidad con
nuestras funciones.
Muy bien, en cuestión de federalismo
en México, tengo una opinión muy
particular, es muy chistoso como nace el
sistema federal en nuestro país. Vivimos
en una colonia unificada, completamente
más o menos homogénea, viene nuestro
primer emperador Agustín Primero de
Iturbide, emperador de México, hay
problemas en las provincias como ya bien
lo señaló nuestro compañero de
Aguascalientes, y se ve la necesidad o
así no lo ha señalado la historia o no los
quieren hacer creer, de convertirnos en
un sistema federal, un sistema federal
que a lo mejor no pueden estar de
acuerdo conmigo, pero se parece muy
poco al que describía Tocqueville, me
parece que es muy similar al que
describió Hans Kelsen.
Más que nada para la formación de
un nuevo país, es para descentralizar
administrativamente la nación. Los
mismos problemas que vimos en el Siglo
XIX son la misma preocupación que
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
47
vemos ahorita en el Siglo XXI y quizá la
misma del Siglo XX. Caciques locales que
han cambiado de nombre, ahora son
gobernadores que manejan a sus estados
a su antojo, y su pretexto de ello, hay una
vuelta al centralismo, que habría que ver
a lo mejor yo diciendo muy
respetuosamente de mis compañeros, no
se trata de un nuevo federalismo, sino
que puede ser un regreso muy peligroso a
la concentración de poder, y vaya que si
este país tiene una experiencia muy
lamentable en el centralismo, cuando
hemos vivido en él.
La división de poderes yo creo que es
importante, no podemos hablar de un
sistema federal ni republicanos si no
hablamos de la división de poderes, y de
que esta sea auténtica. Mucho se ha
señalado aquí de los errores de Fausto
Vallejo, de los que estamos viviendo
ahorita con Aguirre en Guerrero, en
donde no solo no aparecen los 43
estudiantes, sino que hay fosas en donde
los estudiantes no están, y no aquí
gracias al mexicano, Emilio Azcárraga,
aquí no se dice que la Comunidad
Internacional, la imagen de Peña Nieto y
desgraciadamente de nosotros los
mexicanos es muy penosa, muy penosa.
Acabo de ver una caricatura, un
cartón periodístico en donde, haciendo
una broma muy pesada, está Enrique
Peña Nieto agarrando un charrito que es
la imagen que tienen de nosotros, y el
charrito está muerto y arriba dice
Saving México. Así nos están salvando,
no eran fundamentales ni necesarias,
perdón, las reformas estructurales, no lo
eran todo, falta, yo creo, pericia en el
gobierno y hay una evidente falta de
gobernabilidad en nuestro país, el país se
ha salido de las manos.
Hablar de federalismo ahorita -
haciendo mención a los problemas de
Michoacán y Guerrero-, mucho se explica
porque el municipio es pobre, el estado
no es tan pobre y la federación se vive
bien. Pues, incluso entre nosotros, los
servidores públicos, cuando platicas que
trabajas en un municipio “no -y perdón lo
coloquial-, es que estás en la barriada de
la política”, cuando trabajas en el
gobierno del estado estás en la clase
media y cuando te toca trabajar en la
federación estas muy bien. Así se denota
o nos damos cuenta por este sistema de
recaudación en donde la federación se
lleva todo, tenemos municipios
empobrecidos que le pagan muy poco a
los policías, y que tenemos una policía, ya
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
48
hasta el presidente municipal coactado
por el narcotráfico.
A mí me parece que, en el caso
particular de Guerrero, de manera no tan
exitosa en el ámbito internacional pero sí
en el local, el Gobierno Federal se ha
sabido lavar muy bien las manos y el PRD
está arrogándose culpas que no son
suyas del todo. Hay una responsabilidad
compartida entre la federación y el
gobierno estatal por lo que pasó en
Ayotzinapa y por lo que está pasando
dentro de Guerrero.
Es cierto, estas reformas que son 81
a diversas leyes secundarias, 58 a la
Constitución, 3 nuevas instituciones y
supuestamente 13 fortalecidas, han
impacto no necesariamente de manera
positiva nuestro sistema federalista.
El Código Nacional de
Procedimientos Penales, a lo mejor ayuda
a otras entidades federativas, al estado
de México y a Chihuahua no tanto, ya
tenemos experiencias nosotros o
teníamos experiencias exitosas en
materia oral penal, pero ahora vamos
para atrás. Habíamos adelantado mucho
en materia, por ejemplo, de justicia
restaurativa, en donde no nos deteníamos
como lo hace el Código Nacional, en la
mediación y la conciliación, sino que nos
íbamos más allá en readaptar al
delincuente, darle terapia psicológica,
tratamiento en materia de adicciones, que
efectivamente fuera a reparar el daño y, si
fuera el caso, ir a solicitar u ofrecer una
disculpa a la víctima.
Que parte del trabajo comunitario se
prestará en el lugar donde el causo daño,
con menoscabo o lesión a los derechos
patrimoniales o a la integridad personal
de las víctimas. Tampoco ayuda a un
estado como Sonora, en donde tiene ya
incluso previsto una mediación, una
conciliación penitenciaria.
Vemos muchos defectos en o lo
hemos analizado, no es materia de este
panel, en el Código Nacional de
Procedimientos Penales, producto de
esto, que ya tenemos tiempo viviendo y
aplicando una legislación en materia de
juicios orales penales, pero ahora
pasamos al ámbito electoral, su pretexto
de que en el Senado de la República, los
estados que componen la federación
mexicana están representanticos, ahí se
disculpan y miren los estados que están
aquí representados, les acabamos de
nombrar a sus magistrados de los
tribunales electorales locales, que por
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
49
cierto ya no pertenecen a los poderes, al
poder judicial de cada uno de los estados.
Aquí suceden unas cosas muy
chistosas, en el estado de México, con la
reforma Peña Nieto, cualquier persona
puede ser magistrado, y me ha tocado
cuando fui abogado de un grupo
parlamentario, ir a platicar con algunos
magistrados, hablándoles de la cosa
juzgada refleja, y parecía que les estaba
hablando en alemán.
Imagínense, me decían, es que no
está en el Código, le digo, por supuesto
que no señoría, porque es creación
jurisprudencia, pero el señor se me
quedaba viendo como lo hace Homero
Simpson cuando trata de dar una
explicación en las caricaturas, realmente,
el señor no sabía nada. Ojalá que eso no
pase en un asunto tan grave, tan
delicado, como son las elecciones, sería
lamentable.
En materia de la conformación de los
órganos administrativos electorales, en
los institutos electorales de los estados no
nos preocupa quienes están ocupando los
cargos sino quienes no quedaron y, de
manera sospechosa -y hay por ahí una
consejera electoral, que incluso ya fue
materia de alguna columna en el diario
reforma-, señala que hubo deficiencias
graves.
Yo creo que como órganos técnicos
especializados de nuestras legislaturas
tenemos que decirles a nuestros
legisladores que hay que repensar, si es
necesario continuar por este camino.
Hoy se ha puesto a la mesa una
consulta popular para ver si se quitan los
diputados de representación proporcional,
y los diputados de lista por cada partido
político. Esto implicaría echar para atrás
la alternancia en el poder, el pluralismo
político y, por ende, aunadas a las
reformas estructurales estaríamos
hablando de la concentración del poder
en muy pocas manos.
Además, si la memoria no me falla,
en el Siglo XIX, y el poder lo tuviera la
Iglesia, el Ejército y algunos criollos fue la
materia de discordia más grande que
generaron los cambios, so pretexto para
irnos a la federación o irnos al
centralismo.
Creo que hay que señalar esto. El
centralismo sí es peligroso, sí conserva el
poder en muy pocas manos; imagínense
ahorita, que desapareciera la oposición
aquí, en la Cámara de Diputados y en el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
50
Senado de la República. Ya lo hemos
visto en los estados, y hemos visto que no
tener fórmulas de representación lo más
puras posibles ha ocasionado que estos
cacicazgos crezcan.
Ahora, imagínense este cacicazgo en
el ámbito nacional. Tendríamos un
emperador despótico que gobernaría con
un pequeño grupo de personas; creo que
es necesario repensar hacia dónde
vamos, y conforme a ello generar algún
otro tipo de federalismo, quizás sí, muy a
la mexicana, pero sí hay que verlo con
una conciencia crítica, y no consintiendo
reformas por moda, o por imitación.
Los mexicanos vivimos de otra
manera muy particular. Muchas gracias.
Luis Mendoza Cruz
Muchas gracias al licenciado Jorge
Alberto Huizar Ríos.
Corresponde ahora al arquitecto
Francisco González Gómez, titular del
Instituto de Investigaciones
Parlamentarias de la Asamblea
Legislativa del Distrito Federal. Tiene
usted la palabra.
Francisco González Gómez*
Ante todo, mi solidaridad con las palabras
del licenciado Huizar, las comparto,
porque el problema que estamos viviendo
es una cuestión similar a la que se
planteó en Apatzingán.
Se hace una Constitución que no
corresponde a la situación específica del
país y ahora nos hemos encontrado con
unos cambios constitucionales, que no
corresponden ya, a la que se hizo en
1917. De esa Constitución hay cuatro o
cinco artículos que no han sido tocados…
Entonces, prácticamente no queda
nada de la Constitución del 17. Cuatro o
cinco artículos que no han sido
modificados, el resto han sido modificado,
entonces, estamos ante otro país y ante
otro proyecto de nación — aquí disculpen,
todos lo sabemos— lo jurídico está
condicionado por lo político. Lo jurídico
finalmente es una expresión de una
correlación de fuerzas sociales, y en este
caso, nosotros nos estamos encontrando
con que sin que haya habido una
revolución armada, a menos de que
entendamos que la guerra de Calderón
fue eso.
* Titular del Instituto de Investigaciones Parlamentarias de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
51
A menos que entendamos eso, nos
han impuesto una visión de país que no
es la que se originó en la Constitución del
17. Dicen bien los compañeros que me
han antecedido; el compañero de
Tamaulipas, dice de manera correcta —
31 cambios constitucionales, en lo que se
refiere a elecciones, y junto con eso ene
cambios en todos los…
De acuerdo con esto —y este es el
problema principal que se nos está
planteando para reordenar el sistema
político y reordenar la Constitución es ya
no va a intervenir el Estado en la
economía vamos a acabar con esa
importante aportación que se hizo en
1917, y que nos permitió construir un país
viable desde la época de los gobiernos de
los… hasta finales del Siglo XX— porque
lo que nos estamos planteando,
efectivamente hasta ahorita está
demostrando que no es un estado viable.
Es un estado dominado por poderes
fácticos, lo dicen bien, por caciques, por
gobernadores, que luego descubrimos
que de una forma o de otra son
copartícipes o cómplices o encubridores
de la delincuencia organizada. Para
vergüenza nuestra, tenemos que
reconocer que un gobernador de un
estado del norte de Tamaulipas,
Yarrington está consignado con un juicio
en Estados Unidos, y tiene —parece
ser— orden de aprehensión o de
presentación en un tribunal, por
narcotráfico, por crimen organizado.
Eso va acompañado, esa
descentralización del poder real con un
intento de centralización también política
real. ¿En qué parte de la Constitución se
establece que el señor presidente puede
mandar a un responsable a hacerse cargo
del gobierno de un estado, como es el
caso de Michoacán? Porque lo demás, de
que nada más va a apoyar y eso es
política, ficción, y jurisdicción ficción.
Eso va a pasar permanentemente, lo
señala muy bien el compañero de
Aguascalientes. En un proceso real de
centralización del poder real,
independientemente de lo que digan las
leyes; que es el problema de la
Constitución de Apatzingán, porque ni
citando una autoridad que pudiera ayudar
a construir el país, la Constitución de
Apatzingán nos presenta un Poder
Ejecutivo totalmente débil subordinado a
un Poder Legislativo que en ese momento
no había sido electo por nadie.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
52
Ese mismo problema se nos repite en
las demás constituciones, desde luego
está el conflicto por ejemplo, de los
centralistas y las bases orgánicas, y los
descentralistas, de los federalistas, en
1824, pero que culmina en 1857 por una
Constitución en la cual se le da todo el
poder al Legislativo, incluyendo, sin
Cámara de Senadores, y se restringe
absolutamente el poder al Ejecutivo.
Esto nos sucede en 1857 y, en la
práctica, ¿qué va a suceder? Que Juárez
gobierna por decreto, y se brinca la
Constitución del 57. Entonces,
necesitamos una Constitución y un
sistema político que refleje,
efectivamente, una correlación real de
fuerzas y un control de Poderes; no lo
existe actualmente, no podemos decir que
la Cámara de Diputados controla
realmente al Ejecutivo ni siquiera se hace
un análisis que permita sancionar al
Ejecutivo por las violaciones a la Ley de
Ingresos.
El análisis de la cuenta pública, como
lo veíamos el año pasado no implica
sanciones para que el Ejecutivo, si lo violó
o dispuso de una manera inapropiada en
los recursos rinda cuentas. No es factible,
y esto ¿a qué nos conduce? Nos conduce
a una crisis política que es la que
estamos empezando a vivir, porque esto
va a durar.
Dice bien el licenciado Huizar, que en
el mundo internacional estamos
derrumbados. Para poner un ejemplo,
¿no se hablaba en el Financial Times, y
en The Economist, de que era el
Momento mexicano con las reformas
estructurales? ¿Qué sucede cuando va el
licenciado Peña Nieto a Davos, donde se
juntan los que realmente mandan en el
mundo? Informan de las reformas
estructurales, se para el presidente que
organiza el Foro de Davos, dice —qué
bien, qué bueno que hicieron las
reformas.
Pero señor presidente, el problema
de México es la seguridad. Y ante el
mundo, ante los representantes de todos
los países lo regañan por la seguridad
sale furioso, Peña Nieto. Ahí está en
YouTube un video chiquito ¿Y qué
sucede, si eso sucede a principios de
año? Vivimos una crisis espectacular de
seguridad, y una crisis política.
Efectivamente, donde, cómo es
posible que el mismo presidente lo
planee, aunque sea a nivel de chantaje,
que va a reducir el número de diputados
de oposición, que se logran a través de
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
53
los diputados de partido. Por qué no
amplía —que es el problema principal—
efectivamente el respeto al voto y que se
logre efectivamente la participación
popular. Probablemente él no estaría ahí,
probablemente sí. Cualquier cosa que
digamos ahí sería política-ficción. Pero la
realidad es que necesitamos el respeto,
como una cuestión central el respeto al
voto y, en ese sentido, promover la
participación ciudadana.
Mientras no haya respeto al voto,
¿cuál participación ciudadana? Siguen
yendo, siguen estando en la
representación desgraciadamente un
sector importante —no todos— de
representantes populares que
representan a los poderes fácticos.
Ahora con el proceso de reelección,
¿va a permitirse efectivamente que los
ciudadanos tengamos control sobre
nuestros representantes en las Cámaras?
No, porque la televisión los borra, como lo
hicieron a este panista Creel,
descendiente de Zuloaga. Lo borraron,
simplemente como no lo… lo agarraron y
lo borraron, o no los exhiben o promueven
realmente a los que están con ellos. O
ahora ya tenemos bancada de Televisa y
de TV Azteca, en el Senado y en la
Cámara de Diputados. Esa es la
democracia que estamos construyendo,
esa es lo que va a representar la
Constitución, una Constitución totalmente
ajena a la voluntad popular, en la medida
en la que no ha sido sancionada por un
Congreso realmente representativo.
Creo que nosotros tenemos que
reflexionar. Allá en la Asamblea de
Representantes, en el instituto que tengo
el honor de Presidir hicimos un análisis de
la… no es esto, está muy largo y
efectivamente, es un análisis legal. No
está mal, lo hicimos entre varios
compañeros y bueno, pero no es ese el
problema, el problema es que creo que
nosotros, que tenemos una
responsabilidad frente a los legisladores
y, ¿por qué no? También frente al pueblo.
Es la ansiedad de replantearnos en
términos reales la crisis política en la que
se acelera la vida política del país.
Si vemos los noticieros, si vemos al
señor presidente hablar —pa que vean
que soy respetuoso de la figura
presidencial— al señor presidente, vemos
que estamos… Está hablando de otro
país, ya no tiene nada que ver con lo que
se vive día a día.
Nosotros, como institutos, que
estamos obligados a estudiar las leyes,
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
54
pero también estamos obligados a
estudiar la realidad y a qué se refieren
nuestras leyes. Creo que es parte de
nuestro deber hacer, destacar esa grave
situación y que nuestros legisladores que
ya deberían de haber tomado conciencia,
comprendan la magnitud de la misma y
que hay opciones. Creo que la primera
pasa fundamental por el respeto del voto
popular. Disculpen si me alargué.
Muchas gracias al doctor.
Luis Mendoza Cruz
Muchas gracias a Héctor Francisco
González Gómez, del Instituto de
Investigaciones Parlamentarias de la
Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Indudablemente, como hemos
percibido hay pluralidad en la mesa, que
es el mismo reflejo del pluralismo del
país. También la diversidad de
planteamientos que se escucharon
revelan precisamente algo que a veces
nos cuesta trabajo ver, que es la vitalidad
de lo diverso. O sea, pensar distinto no
nos hace diferentes, al contrario, nos
hace buscar aquellos espacios donde
podemos seguir coexistiendo y seguir
construyendo puntos de este país, que es
el país que tenemos, además.
Pensando diferente, tampoco es algo
que nos esté negado a todos. Todos
queremos un mejor país, efectivamente, y
creo que todos, desde la fracción que nos
da el voto popular, que hay que decirlo,
que sí se cuenta, se ha recontado y se ha
vuelto a contar y de eso ha dado
representación, pues cada uno aporta y
construye en la medida en que los
acuerdos de las distintas fuerzas lo van
posibilitando. Es al país al que queremos
llegar.
Concluiríamos esta mesa. Como les
comenté, no se trataba aquí de llegar a
ninguna conclusión, es como un aperitivo
para abrir un tema que es enorme, que es
grandioso además y que en el mundo
también se está estudiando.
Aquí creo que hay en el mundo, al
menos en los países que son
federaciones, incluso hay monarquías
federales, la española, por ejemplo, es
una monarquía federal. Ellos siguen
estudiando la forma en que hace que
precisamente los diversos puedan
coexistir en un todo nacional.
Le pediríamos a nuestro presidente
de AMEXIIL, al doctor Carlos Torres
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
55
Ramírez, si nos hiciera favor de concluir
la mesa.
Carlos Torres Ramírez*
Muchas gracias, doctor Luis Mendoza.
Prácticamente, para los efectos de hacer
entrega de reconocimientos,
simplemente, no con el propósito de
recapitular, porque ya lo has hecho muy
bien, Luis, sino con el propósito de que
nos pudiésemos quedar a la luz de todo lo
que aquí se ha dicho con una reflexión,
una reflexión que me parece tendríamos
el deber ético de realizar a la luz de este
tema del federalismo.
Pareciera que los problemas que se
ciernen sobre el federalismo están
apenas ocurriendo en este año de 2014,
de 2013, pero la realidad de las cosas es
que estos problemas que ahora están
haciendo crisis no son de un año ni de
dos, son el producto de décadas pasadas,
en donde no se hicieron bien muchas
cosas. Hubo muchos gobiernos que no
han cumplido con su responsabilidad,
hubo presidentes de la República que no
cumplieron con su responsabilidad y que
probablemente es el tiempo y el momento
de estar levantando la quebrazón, de
* Presidente de AMEXIIL y director del IIL del Congreso del Estado de Guanajuato.
aquel país, de aquellas instituciones que
nos habían dejado, maltrechas, y que
faltaba que alguien viniera y soplara sobre
ellas a los efectos de que nos
quedásemos inmersos en tan lamentable
y gravísima crisis de condición de estado
en la que ahora nos encontramos.
Creo que hay que ser muy
responsables en este tema, no cerrando
los ojos, más bien viendo si los que
cuestionan son detractores, ojalá
arrimaran el hombro para sacar a este
país de esta grave problemática que
tenemos.
No vemos cómo quiénes puedan,
aquellos que piensan distinto y diferente,
ofrecer hasta hoy el hombro para resolver
los problemas. Me parece que eso
tampoco es ético dentro del concepto de
ciudadanía, del concepto de político, de
concepto de hombre de competentes para
resolver los temas más graves de este
país.
Sí debemos repensar nuestro
federalismo, eso me queda muy claro.
Creo que todos en eso hemos coincidido.
Sí estoy totalmente de acuerdo en que
hay cosas que se tienen que cambiar. Sí
tampoco estoy porque haya un
centralismo, pero la verdad de las cosas
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
56
es que ha hecho crisis en este país la
crisis de antaño. Lo que no se hizo antes,
las instituciones que no se cambiaron a
tiempo y que se habla mucho de
delincuencia organizada derivada del
narcotráfico, pero no estamos hablando
de la delincuencia organizada derivado de
las altas esferas del poder, en todas las
entidades de la República.
Habrá algunas que son excepciones
y eso ha motivado, lamentablemente,
cuando vemos aquí mismo en el Distrito
Federal, cuando nos vamos a Nuevo
León, cuando nos vamos a
Aguascalientes, cuando nos vamos a
Tamaulipas, a cualquier estado y no
vemos cuáles son las acciones para que
exista una serie de mecanismos y
estrategias que no generen esa tentación
al poder central para que trate a los
estados como si fueran menores de edad,
porque no han sabido conducirse
adecuadamente.
Lamentablemente, ahí se han
cocinado gran parte de los abusos que
entonces ahora el centro está tratando de
llevárselos y retraerlos.
Simplemente es la reflexión que
quería dejar con ustedes de que tenemos
mucho qué trabajar, que nosotros —bien
lo decía el arquitecto— como institutos
debemos seguir trabajando muy fuerte
para formular propuestas, más allá de
propuestas que tengan tinte o contenido
político, propuestas muy bien armadas
desde el punto de vista jurídico, desde el
punto de vista social, desde el punto de
vista económico para poder llamar la
atención de nuestros diputados y que
puedan ellos realizar un cambio
estructural a las instituciones que hoy
tenemos en suerte seguir adelante.
No quiero cansarlos más, es
momento de reconocer a los panelistas
sus aportaciones que desde luego nos
inquietan, nos inquietan mucho y nos
obligan a repensar y recrear nuestras
instituciones.
No sin antes, llamar al arquitecto
Francisco González Gómez a efecto de
entregarle un reconocimiento por su
intervención en este panel, porque
siempre lo hemos considerado un
compañero muy inquieto y muy
propositivo.
Al doctor Edy Izaguirre Treviño,
compañero nuestro, muy encantado de
haber tenido tu participación y desde
luego a Jorge Alberto Guizar Ríos
también y por último al licenciado Toribio
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
57
Hernández López por su destacada
ilustración que ha compartido con
nosotros.
En esas condiciones le dejo al doctor
Luis Mendoza el uso de la palabra, para
continuar con nuestra actividad.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
58
1.4 Presentación del libro “Constitución de Apatzingán, Historia y Legado”
Carlos Vital Punzo*
Hoy Celebramos el Bicentenario de la
Promulgación del Decreto Constitucional
Para la Libertad de la América Mexicana,
mejor conocido como la Constitución de
Apatzingán.
Este aniversario presenta una gran
oportunidad para que los mexicanos
tengamos un reencuentro con nuestra
memoria y reflexionemos sobre lo que
este suceso ha significado para la vida
política de nuestro país.
Sin duda, por su historia y tradición
libertaria, Michoacán desempeña un
papel central en la rememoración de
dicho evento. No debemos olvidar que fue
la mente de José María Morelos de donde
* Director del Instituto de Investigaciones Legislativas del Congreso del Estado de Michoacán.
emanaron los Sentimientos de la Nación,
texto fundamental de nuestro proceso de
emancipación que fue conocido por los
legisladores insurgentes y cuyas ideas y
principios aun sirven de guía al pueblo de
México en su búsqueda por la anhelada
justicia social.
Así mismo fue en dicho Congreso
donde participaron ya como diputados, ya
como secretarios del mismo grupo de
personas famosas, especialmente en las
letras, que vivieron en la misma época de
personajes michoacanos, formados
algunos de ellos en el Colegio de San
Nicolás, quienes con su trabajo legislativo
y sus ideales patrióticos consolidaron el
proyecto encaminado a establecer un
gobierno de tipo representativo, bajo el
principio de la soberanía popular
cimentada en la separación de poderes.
Entre ellos podemos mencionar a: José
María Morelos y Pavón, José Sixto
Berduzco Macías, José Ignacio Antonio
López-Rayón y López-Aguado, José
Sotero Castañeda Calderón y Manuel
Alderete y Soria; y por si fuera poco, fue
en la provincia de Michoacán en donde se
expidieron Importantes manifiestos,
proclamas y planes políticos por medio de
los cuales se difundió el ideal de la
Independencia.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
59
Fue también en tierras michoacanas
donde se institucionalizo el gobierno de la
insurgencia través de la promulgación del
Decreto Constitucional de Apatzingán, la
instalación del Supremo Tribunal de
Justicia en Ario y la instalación de la Junta
Subalterna Gubernativa Provisional en
Taretan, que tuvo entre otras sedes a
Uruapan y Jaujilla, esta última en un sitio
fortificado en la Ciénega de Zacapu.
Confiamos en que esta obra será
valorada, no solo por los aportes que se
hacen para el mejor conocimiento de
nuestro pasado y de nuestras
instituciones político-legislativas, sino
también por las claves que ofrece para
una mejor comprensión de algunos
problemas del presente, como es el
debilitamiento de la identidad que ha
provocado la descomposición del tejido
social y que las autoridades federales y
estatales están tratando de revertir a
partir de diversos programas de gobierno.
Esperemos que la lectura de los textos
que conforman este libro sea una
contribución a fomentar los valores
cívicos y se fortalezca la identidad de los
mexicanos mediante el conocimiento de
su propia historia.
Estamos convencidos que las ideas,
valores y enseñanzas que nos legaron los
diputados del Supremo Congreso
Mexicano siguen vigentes, y es por eso,
muy necesario difundirlas.
Queremos dejar asentado que esta
obra, La Constitución de Apatzingán.
Historia y Legado, es una aportación de la
Comisión Especial para los festejos del
Bicentenario del Congreso de Michoacán,
el Archivo General de la Nación y la
Universidad Michoacana de San Nicolás
de Hidalgo.
Este es un homenaje a los primeros
representantes que sancionaron hace
doscientos años ese decreto
constitucional.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
60
2 Panel “Bicentenario de la Publicación del Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana: Constitución de Apatzingán 1814–
2014”**
José Eduardo Vidaurri Aréchiga*
Muchas gracias por la invitación al
Honorable Congreso del Estado y
naturalmente también a Luis Ernesto
Camarillo, nuestro presidente del Colegio
de Historiadores de Guanajuato, por
haberse dado a la tarea de organizar éste
panel con el propósito de celebrar tan
importante acontecimiento, el
Bicentenario de nuestra primera
constitución, la de Apatzingán de 1814,
aunque la emisión del “Decreto
Constitucional para la Libertad de la América
Mexicana” se dio en una etapa de
** Panel realizado en el Patio del Congreso del Estado de Guanajuato, el día 22 de Octubre de 2014. * Doctor, profesor e investigador del Departamento de Gestión y Dirección de Empresas de la Universidad de Guanajuato, e integrante del Colegio de Historiadores de Guanajuato, A.C.
rebeldía, en medio de la guerra de
independencia, y aunque sabemos que
después de ésta constitución se firmó el
decreto que establecía formalmente
nuestra independencia, la constitución de
Apatzingán nunca estuvo en vigor.
Las circunstancias que todos
conocemos en el proceso de la Guerra de
Independencia, el asedio a las tropas
insurgentes de José María Morelos y
Pavón, y el repunte en esa época 1815 de
las fuerzas realistas, pues provocó que el
Decreto Constitucional pasara
desapercibido y, el hecho de la
proclamación de nuestra independencia
se logra consumar a partir de una
“inversión” de los intereses de un grupo
de realistas que logran formalizar la
Independencia Nacional.
En ese sentido, a mí me gustaría
comentar algunas cosas sobre ésta idea,
del cómo se fue forjando el
constitucionalismo mexicano, cómo se fue
forjando la idea de la constitución dentro
del movimiento insurgente que buscaba la
independencia nacional.
Me gustaría hacer una especie de
recorrido panorámico a partir de algunos
de los hitos en esta historia, cómo se
logró esbozar, ensayar y construir una
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
61
constitución, y pues para ello propongo
partir de los acontecimientos que
ocurrieron en el último tramo de la
segunda mitad del Siglo XVIII.
Sabemos que el colonialismo español
buscaba resolver, de alguna forma, el
problema fundamental de la existencia del
hombre americano, es digamos, una de
sus grandes bondades de sus grandes
cualidades un colonialismo “humanista”,
pero también como colonialismo tuvo
defectos, uno de ellos fue el hecho de
desconocer formalmente los derechos
políticos y casi la totalidad de los
derechos que han sido consagrados
formalmente para la humanidad, me
refiero a la libertad de conciencia, la
libertad de enseñanza o la libertad del
pensamiento entre otros.
En esa forma nosotros podemos ver
como ese colonialismo llegó hacia el Siglo
XVIII enfrentando una crisis de su ya muy
arraigado posicionamiento tradicionalista
y conservadurismo. Enfrentando lo que la
ilustración estaba proponiendo que era,
formalmente, una revolución del
pensamiento.
Fue esa una época que se
caracterizó por depositar la confianza en
el hombre y en la razón, es decir,
sustituyó una cosmovisión que estaba en
decadencia y que era formalmente
significativa para el caso de dos países
como son Francia y España.
Entonces, estamos observando en
esa segunda mitad del Siglo XVIII, la
creación de un mundo político nuevo, se
impuso la idea de abandonar la fe en la
tradición como el principio rector del
mundo social, del mundo político y del
mundo jurídico, y era ese un
acontecimiento importante porque
señalaba el surgimiento de la idea de los
derechos naturales del hombre y del
ciudadano. Esta idea será, justamente, la
idea que de alguna manera va a estar en
el centro de toda mi intervención.
¿Qué pasaba entonces en el Siglo
XVIII, el fenómeno social de la ilustración,
con la Revolución Francesa y sus
impactos en América? En principio
podemos resaltar que uno de los
principales impactos derivó de la
negación de un “derecho divino” de los
reyes, o de un supuesto “derecho divino”
de los reyes, más aún, la negación del
derecho a gobernar de esos propios
reyes, representó en el Siglo XVIII la
apertura de las puertas a un terreno
inédito, se abría la etapa del gobierno de
los gobernados, o como lo podríamos
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
62
sintetizar en otras palabras: “El gobierno
de los hombres por los hombres”.
Eso también tiene que ver con un
derrumbe del absolutismo y con el
advenimiento o el principio de lo que
sigue caracterizando hasta hoy en día
nuestras sociedades, el principio
fundamental que es la democracia, como
estilo de vida.
El hombre entonces, en la época de
la ilustración, es el punto de partida, es el
centro de toda organización social y
política. Estamos refiriendo como el Siglo
XVIII estaba perfilando esa democracia
individualista, esta democracia liberal.
Pero ¿Cuáles son las ideas centrales
de esta democracia individualista y
democracia liberal? La construcción de
una doctrina que definió que la soberanía
radica en el pueblo y la teoría que ya
mencionamos, de los derechos naturales
del hombre. Es una expresión política,
una expresión jurídica sobre el retorno del
hombre asimismo.
En esa etapa vamos a poder
detectar, entonces, que se da el
nacimiento de las constituciones, el
nacimiento del derecho constitucional
contemporáneo y, un asunto de esas
dimensiones, tanto las constituciones
como el derecho constitucional es un
asunto que procede de esa época, del
Siglo XVIII, y que se enraizó
prácticamente en todos los países a partir
del Siglo XIX y su sentido sería el de
construir un derecho al servicio de la
igualdad y de la libertad.
Otra vez, si volvemos a recuperar
esta idea se trata de un derecho al
servicio del hombre.
¿Qué busca garantizar este derecho
al servicio de la igualdad y de la libertad?
Justamente esas dos premisas, un
constitucionalismo entendido como una
filosofía de poder que eleva al derecho
sobre el poder, es decir, no el poder para
el rey o el poder del rey para de alguna
manera, si le podemos llamar así, legislar,
que no era precisamente la acción que
desarrollaba, sino que decretaba,
mandaba, ordenaba, y elevar entonces
esto a un rango de ideas completamente
distinto.
Se transformó al Estado en la
organización del poder coactivo del
derecho, en una organización destinada a
garantizar la vigencia y la efectividad de
un nuevo ideal y de un nuevo orden
jurídico.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
63
Pero, esto es algo que de alguna
manera representaba una novedad y que
se insertaba, perfectamente bien, en las
condiciones de nuestra independencia, de
nuestra lucha por la independencia
nacional.
¿Cuáles eran las causas, las razones
para que se buscara la independencia?
Ya sabemos que fundamentalmente esa
búsqueda tiene que ver con una idea de
justicia social, recordando que para esa
época era innegable la existencia de una
estructura social estratificada por
estamentos de origen étnico y una
desigual distribución de la riqueza.
La existencia de una clase social
gobernante integrada, fundamentalmente,
por los españoles y el alto clero por una
parte y un sector social, el de los criollos,
por la otra, que estaba excluido
sistemáticamente de los altos mandos, un
sector social que se siente postergado y
que reclama un derecho natural al
gobierno de su tierra. Ese sometimiento a
la imposición de autoridades que venían
desde la metrópoli.
Ya las representaciones que se
estaban haciendo desde 1771, en el
sentido de que los criollos deberían tener
preferencia en los puestos importantes en
sustitución de los europeos, y que eran
dirigidas al rey Carlos III, dan evidencia
de ese encono.
Podemos referir también la
inconformidad con la política absolutista
de los reyes Borbones, inconformidad que
fortalece la idea de que era necesario
transformar ese orden jurídico y, creo que
todo tiene que ver, o se agrava con lo que
ocurriría en España hacia 1808, con la
invasión de Napoleón a la península y la
ocupación de la Metrópoli, la abdicación
de los monarcas, con el encarcelamiento
del rey, el temor de pasar a ser
controlados por manos extranjeras y,
como consecuencia el surgimiento de dos
partidos o de dos posiciones que de
alguna manera tratarían de resolver esa
ausencia de autoridad en la monarquía
española.
Los “partidos” en la Nueva España
Por una parte vamos a encontrar, si lo
queremos ver en ese sentido de tomar
partido por una causa o una vía, “el
partido español”, que consideraba que
toda novedad resultaría peligrosa, que
convendría más cuidar el patrimonio sin
alterarlo y que apuntaba hacia el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
64
mantenimiento de una política estática –
inmóvil-.
Por la otra parte surge “el partido
criollo” que estaba acostumbrado a
enfrentar ese rechazo sistemático cuando
pretendía ocupar posiciones importantes,
que enfrentaba el reto de gobernar en una
situación inédita, que visualiza también el
recurso de apelar que a una serie de
medidas en desuso y que tiene, sobre
todo, la posibilidad de transformar el
orden social.
En esa posibilidad de transformar el
orden social se recuperó, como eje de sus
demandas, el concepto de soberanía, que
sería “el asunto” y que venía ya
influenciado por las ideas del
pensamiento jus naturalista (hay que
decirlo, al principio muy moderado), pero
que en la medida en que el movimiento
de independencia o el movimiento
insurgente se fue haciendo más presente
en la mayor parte del territorio de la
Nueva España, se fue también
radicalizando.
“Las juntas”
Representan un primer esfuerzo que se
hace para la integración de las
voluntades, las famosas juntas españolas
son la representación popular y viva de un
proceso de liberación, representan el
ejercicio de la facultad de
autodeterminación, es decir, estamos
hablando aquí de una acción importante
que podemos expresar como el acto
constitutivo de la nación, en el sentido de
establecerse o erigirse como tal.
La nación, vía las juntas, tratando de
recuperar el poder que no podía ejercer el
rey, entonces el pueblo se constituyó
como nación, luego de ahí, aunque la
transparencia es más que clara, vale la
pena resaltarlo, empezará a desarrollarse
desde entonces esa idea de constitución,
esa idea de conformarse de darse forma
como una estructura diferente. Para
nuestro caso resulta significativa, por
ejemplo, la acción del “partido criollo” del
Ayuntamiento de la Ciudad de México y
concretamente el papel de Juan
Francisco Azcárate, Primo de Verdad,
José Antonio Cristo y Jacobo Villaurrutia.
Sabemos también que, por efectos
del frustrado proyecto del sector criollo del
Ayuntamiento de la Ciudad de México,
hubo un conjunto de conspiraciones,
mismas que condujeron al estallido de la
lucha por la independencia a partir de
septiembre de 1810, y que sabemos fue
una lucha por hacer valer los derechos
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
65
del hombre, los esfuerzos de la guerra de
independencia en su primera etapa, no
tendrán otra intención más que crear o
unir, bajo una misma causa, a la auténtica
nación, y podemos decir que se trataba
de un cambio profundo que podemos
denominar como fundamental.
Otra vez encontramos la idea de
fundamentar, constituir o construir una
nación, la idea de crear un estado de
derecho para una nación con bases
completamente distintas a las que
establecía la monarquía española. La
lucha por la independencia fue un
movimiento que desde sus inicios
buscaba transformar el estado, la
sociedad y la cultura.
También, me parece importante
resaltar esto, la lucha por la
independencia encarna una idea en
evolución, de lo que en un principio
representaba, un sentimiento y podemos
expresar mejor en -la idea la nación- a la
construcción de una realidad, -la nación-.
Morelos será el caso más concreto
porque, ya sabemos, logrará expresar en
un primer documento esos principios
fundamentales del movimiento insurgente:
“Los sentimientos de la nación” y, luego,
logrará concretar formalmente a través de
la Constitución de Apatzingán un estatuto
jurídico que le da forma, que le da sentido
a todo este movimiento de independencia.
Y Aunque después pasó lo que todos
sabemos: la disolución del congreso, la
persecución del personaje y la captura,
muerte y el fin de todo ese proyecto.
¿Cómo podemos sostener todo esto?
Creo que si recuperamos algunos
aspectos de la primera etapa, por
ejemplo, cuando Miguel Hidalgo e Ignacio
Allende, se insurreccionan, en el principio
sus discursos van a estar acompañados
de la idea de que estaban expresándose -
en nombre de la nación- “para de
defender sus derechos”, “para ser
independientes de España”, “para
gobernarnos por nosotros mismos”.
Estos asuntos los podemos detectar
perfectamente bien al menos en dos
documentos muy tempranos, primero en
la carta que Miguel Hidalgo manda al
intendente Juan Antonio de Riaño desde
Celaya, y segundo en la “carta de
intimación” que Hidalgo remite al mismo
intendente Riaño desde la Hacienda de
Burras, ahí ya estaba esbozando el
programa de un gobierno basado en la
soberanía y la elección de
representantes.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
66
Insertamos el contenido de la carta
referida para que la lectura de la misma
nos auxilie en la mejor comprensión de
algunos de los puntos que venimos
comentando:
“Cuartel general en la Hacienda de
Burras, 28 de septiembre de 1810
El numeroso ejército que comando me eligió
por Capitán General y Protector de la Nación
en los campos de Celaya. La misma ciudad a
presencia de cincuenta mil hombres ratificó
esta elección, que han hecho todos los lugares
por donde he pasado: lo dará a conocer a
vuestra señoría que estoy legítimamente
autorizado por mi nación para los proyectos
benéficos que me han parecido necesarios a su
favor. Estos son igualmente útiles y favorables
a los americanos y a los europeos que se han
hecho ánimo de residir en este reino; y se
reducen a proclamar la independencia y
libertad de la nación. Por consiguiente, yo no
veo a los europeos como enemigos, sino
solamente como a un obstáculo que embaraza
el buen éxito de nuestra empresa.
Vuestra señoría se servirá manifestar
estas ideas a los europeos que se han reunido
en esa alhóndiga, para que resuelvan si se
declaran por enemigos, o convienen en quedar
en calidad de prisioneros, recibiendo un trato
humano y benigno, como lo están
experimentando los que traemos en nuestra
compañía, hasta que se consiga la insinuada
libertad e independencia, en cuyo caso
entrarán en la clase de ciudadanos, quedando
con derecho a que se les restituyan los bienes
de que por ahora, para las urgencias de la
nación, nos serviremos. Si por el contrario, no
accedieran a esta solicitud, aplicaré todas las
fueras y ardides para destruirlos sin que les
quede esperanza de cuartel.
Dios guarde a vuestra señoría muchos
años, como desea su atento servidor.
Miguel Hidalgo y Costilla
Capitán General de América”
Miguel Hidalgo, en diversas acciones,
trató de limitar los poderes públicos,
encaminó sus esfuerzos al disfrute de las
garantías individuales. al efecto podemos
referir los decretos que hizo, por ejemplo,
contra la esclavitud, contra las gabelas,
contra el uso del papel sellado, o sobre la
devolución de tierras a los pueblos
indígenas, lo que Hidalgo estaba
haciendo era, de alguna manera, perfilar
o esbozar una “constitución”.
Luego de la captura, prisión y
fusilamiento de Hidalgo, el movimiento
quedó en manos de Ignacio López Rayón,
quien pasó de ese “esbozo” al “ensayo”
de un proyecto de formalización de esa
idea de constitución.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
67
López Rayón ensayó el primer
gobierno nacional independiente ¿Cómo
lo ensayó? Sabemos al respecto que con
la organización de la Suprema Junta
Nacional Americana que organizó en
agosto en Zitácuaro, una junta que estaba
inspirada en Las Juntas Españolas y en
algunas otras juntas que se estaban
integrando en América Latina como la
“Suprema Junta Gubernativa de Quito”, o
la “Junta Suprema de Caracas”, mediante
las cuales estaban tratando de darle una
formalidad a los movimientos insurgentes,
buscaban otorgarles un soporte
ideológico y dejar así de ser vistos de
solamente como una insurrección “en
bola”.
La junta de Zitácuaro, fue un
esfuerzo, desde mi punto de vista, muy
significativo para tratar de ordenar las
cosas en medio de la guerra y en medio
del desacuerdo entre los levantados. En
ese momento de la guerra nadie sabía o
nadie quería reconocer si realmente
López Rayón era el heredero del
movimiento o si tenía que ser otro
personaje.
Además hay que añadir, como
consideración, que en ese momento ya
estaba perfectamente desarrollada la idea
de la “guerra de guerrillas”, es decir, eran
múltiples los grupos guerrilleros que
estaban actuando en diferentes frentes, al
menos en toda la región del Bajío y del
centro de la Nueva España, por lo que el
desacuerdo y la descalificación entre
algunos era un aspecto a resolver.
Pero Rayón junto con José María
Liceaga y José Sixto Verduzco entre
otros, sientan las bases de la
organización nacional, a partir de ese
proyecto de constitución que conocemos
como los Elementos Constitucionales.
“La independencia de América es
demasiado justa, aun cuando en España no
hubiera sustituido al gobierno de los
Borbones, el de unas juntas a todas luces
nulas”.
El texto de los Elementos
Constitucionales, de López Rayón,
integraba 38 puntos, de los cuales
podemos referir, rápidamente, algunos de
ellos:
El primero la idea de independencia
nacional, el segundo la intolerancia
religiosa, el tercero la soberanía popular
depositada en Fernando VII y ejercida por
el Supremo Congreso Nacional
americano, cuarto la división de poderes,
el quinto las figuras de gobierno que se
reconocerían tales como la Suprema
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
68
Junta, el Consejo de estado con
ministerios de Gracia y Justicia, Guerra y
Hacienda y, la figura del protector
nacional que sería el ejecutivo. Un sexto
aspecto fue la prohibición de la esclavitud
y la tortura y, algunos otros como la
libertad de imprenta o la inviolabilidad del
domicilio. Y todo esto que estaba
desarrollándose en 1812, muy temprano
para algunos, para empezar hacer este
ejercicio constitucional.
Ahora tomemos en consideración las
muchas dificultades que tenían Ignacio
López Rayón y José María Morelos y
Pavón, porque al parecer López Rayón se
mostraba muy celoso y en extremo
fiscalizador de las acciones de Morelos,
siempre tratando de verificar en qué se
estaba gastando el dinero Morelos, y
cuánta gente tenía y cómo estaba
actuando, una cauda de desacuerdos.
Morelos fue muy paciente al principio
de su actuación, pero luego determinó
pues que tendría que dejar de considerar
en todo López Rayón, y eso fue lo que le
permitió convertirse realmente en el jefe
del movimiento insurgente.
Para ello, convocó en su calidad de
cuarto miembro de la Suprema Junta, en
junio de 1813, a la integración de un
Congreso que se reuniría ahí mismo en
Chilpancingo.
Morelos estaba llamando, a partir del
reconocimiento a los integrantes de esa
Suprema Junta para que se integraran,
pero ahora en esta figura de Congreso en
Chilpancingo, la integración ocurrió el 14
de septiembre de 1813, con un conjunto
de diputados que fueron electos en las
zonas que eran controladas por los
insurgentes.
En las zonas que estaban
controladas por los realistas, el propio
Morelos determinaría quién sería el
representante, así que dispuso que los
altos jefes del ejército expresaran su
opinión y definieran quiénes serían los
cuatro más importantes generales de este
movimiento insurgente, quedando como
sabemos Ignacio López Rayón, José
María Liceaga, José Sixto Verduzco y el
propio José María Morelos.
Una vez que se instaló el Congreso,
Morelos dio a conocer la disposición de
que la función principal era el redactar un
reglamento para el propio Congreso y les
definió como tarea específica el redactar
una constitución.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
69
Aquí observamos cómo empezó otra
importante etapa del proceso
constitucionalista nacional, el de convertir
lo que en origen eran los elementos
constitucionales, esa especie de ensayo
en una primera Constitución, él da ya el
propósito, luego de que Hidalgo esbozo y
Rayón ensayó, de crear una constitución.
Fue el propio Morelos quien al
principio de los trabajos de ese Congreso
leyó su documento “Los Sentimientos de
la Nación”, otra vez volvemos a insistir la
evolución de lo que era un sentimiento a
convertirla en una verdadera realidad, la
construcción de la nación mediante su
constitución.
Y ahí en “Los Sentimientos de la
Nación” destacan 22 puntos de los que
integraron ese documento, Morelos
estaba dando a conocer cuáles deben
ser los aspectos básicos que servirían
para la redacción de la Constitución.
Se vuelven a repetir prácticamente
los que estaban en los elementos
constitucionales, se agregan algunos
como la igualdad de todos los ciudadanos
ante la Ley, el reconocimiento al derecho
de propiedad, la inviolabilidad del
domicilio, la racionalidad de los impuestos
y la idea de que toda Ley es “superior” a
todo hombre y “las que dicte el congreso
deberán ser tales que obliguen a la
constancia y al patriotismo, moderen la
opulencia, la indigencia”, en fin, toda esa
formación de un humanismo fuerte en
Morelos.
Hacia septiembre de 1813, sabemos
que Morelos fue designado generalísimo
y depositario del poder ejecutivo. Recibió
el tratamiento de “Alteza” aunque él lo
cambió por el de “Siervo de la Nación”, y
el 6 de noviembre de 1813, se firmó el
acta de independencia de la América
Septentrional, hecho que significaba
formalmente el reflejo político y legal del
deseo de independencia, es decir, la
expresión definitiva del deseo de
autonomía. El documento lo signaron,
entre otros, Andrés Quintana Roo, José
Manuel Herrera, Carlos María
Bustamante, José Sixto Verduzco, José
María Liceaga, Cornelio Ortíz de Zarate e
Ignacio López Rayón.
Finalmente, el 22 de octubre de 1814,
se expidió el Decreto Constitucional para la
Libertad de la América Mexicana del que
estamos conmemorando hoy su
doscientos aniversario. La Constitución de
Apatzingán se conformó de 242 artículos,
dos apartados, el primero de los principios
o de los elementos constitucionales, el
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
70
segundo el de la forma de gobierno, se
divide entonces también en 28 capítulos,
seis que corresponden al apartado
primero y veintidós que corresponden al
apartado segundo.
Fue esta una constitución que se
reconocía con carácter provisional y que
sería sustituida después por una
constitución permanente y fue sancionada
o aprobada por representación basada en
la población, es decir, en representación
de la nación.
El Decreto constitucional de 1814
muestra que el movimiento insurgente,
como decíamos al principio, no fue
solamente un alboroto, sino que fue todo
un proceso de evolución efectiva de ideas
que van desde las denuncias y demandas
“sueltas” que hace el propio Miguel
Hidalgo en nombre de la nación, algunos
decretos aislados que hizo en Valladolid,
Guadalajara y que pasan en otra etapa a
la conformación de unos elementos
constitucionales, para, finalmente,
concluir con la creación de ese nuestro
primer estatuto fundacional o Constitución
que sienta las bases para la construcción
de una nación libre y soberana.
Me parece pues, que habrá que tener
en consideración las bases con las que se
constituye el Estado mexicano, que son
prácticamente estos primeros
documentos y permean en la Constitución
del 24, el reconocimiento de la religión
católica como única, la independencia
absoluta de la Nueva España, la creación
de un gobierno independiente
absolutamente de la Nueva España, y la
definición de algunos criterios como es la
división de poderes muy provisionales
que se hace a sabiendas de que podía
ser sustituido más adelante.
A la captura y muerte de Morelos
sobreviene también un receso, una
interrupción de la lucha por la
independencia que sería reactivada
después por la participación de Francisco
Xavier Mina, “la guerra de guerrillas” y la
perseverancia de algunos insurgentes
que mantuvieron vivo el ideal
independentista, luego vino la posibilidad
de Agustín de Iturbide de formalizar la
independencia, quien no tenía una idea
constitucionalista -hay que decirlo- su
proyecto era más bien imperialista, que
fue moderado después por la
reinstalación de un Congreso formal, en
donde estaban algunos de los personajes
que estuvieron trabajando antes en los
elementos constitucionales.
Muchas gracias.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
71
José Luis Lara Váldes*
Buenos días. Ya mis compañeros de la
mesa que me han precedido han entrado
en materia de la razón de nuestra
reunión, no la reiteraré. Pero si quiero
dejar un saludo muy atento a las señoras
diputadas y a los señores diputados de la
LXII Legislatura, que nos han permitido
realizar este acto de cultura ciudadana,
de cultura cívica basada en el
conocimiento histórico.
Los historiadores de Guanajuato
hemos tenido la fortuna de ser apoyados
en otra épocas por otras legislaturas,
tanto federales como estatales, hemos
logrado impulsar congresos y
* Doctor y profesor con perfil PROMEP a partir de 2011 e integrante del Cuerpo Académico de Estudios Históricos 63UGTO y profesor del Departamento de Historia/División de Ciencias Sociales y Humanidades, e integrante del Colegio de Historiadores del estado de Guanajuato, A.C.
conferencias en distintos municipios y ahí
es donde hemos aprendido, escuchando
a los especialistas y luego hemos podido
publicar algunas de estas actividades.
Justo es decirlo entonces que tanto el
Colegio de Historiadores de Guanajuato,
como las instituciones republicanas que
nos sustentan a la sociedad, hemos
generado este conocimiento para ampliar
el que ya ha venido siendo acumulado.
El día de hoy, asimismo como
ustedes han escuchado a mi compañero
Eduardo Vidaurri, hay nuevas ideas. Hay
nuevos enfoques que no se van a
encontrar o no los van a encontrar
ustedes en las historias más conocidas
del movimiento de independencia.
También hacia allá se dirige mi
participación, “Emblemática y
Constitucionalismo”, por todo lo que ya se
ha venido mencionando. Yo daré algunos
elementos de imágenes que hubo desde
un principio, los comentaré y al final
mostraré algunas tablas para comparar
con base en los estudios que hizo Ernesto
de la Torre Villar, y abreviar cuáles son
las semejanzas o acaso mismas
circunstancias históricas que
determinaron una propuesta, una
normativa, tanto en Cádiz, como en
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
72
Apatzingán y los documentos
constitutivos franceses.
Para no aburrirlos, ya que esto puede
ser muy largo voy a proponer que esta
presentación se quede aquí y ustedes los
ciudadanos la puedan solicitar; ya nos
dirán de qué manera y a quién hay que
dirigirse para solicitar copia de esta
misma presentación. Así que cuando
vean letras por ahí no se aburran, no hay
que leerlas, si no alcanzó yo a explicarlas
con claridad ya después ustedes harán la
tarea de leerlas y entenderlas.
Se pueden comunicar con nosotros al
Colegio de Historiadores, donde con
mucho gusto, esto que hoy es sólo un
acto cívico, se podrá convertir en un
debate, ¿Por qué no?
Me parece también muy conveniente,
muy pertinente mencionar que hay
historias que no otorgan mérito a los
acontecimientos que no culminaron
exitosamente.
Se ha escuchado y también se ha
sostenido que ni la lucha de Miguel
Hidalgo, ni la de José María Morelos, son
tan heroicas como se dice ya que no
tuvieron éxito. Hemos escuchado decir
que la historia de México está llena de
estas inconsistencias.
Por ésta razón a mí me ha interesado
seguir la línea de la emblemática, ya que
a final de cuentas es la expresión de
ideales que se quedan en el tiempo hasta
que logran concretarse en hechos
sociales reales, y es el primer caso que
vamos a ver.
Cuando en 1815, se promulga el
decreto del Congreso de Apatzingán, por
supuesto, que refrenda Morelos, para la
creación del escudo nacional, que es el
que todos tenemos y el que está ahí a la
vista. El emblema de México -
Tenochtitlán o como se consideraba
entonces del Anáhuac, del reino del
Anáhuac.
Sólo que aquí ya están agregando
otro símbolo muy anhelado, el símbolo del
constitucionalismo liberal europeo, el
“gorro frigio” sobre un nopal que en cada
penca tiene los nombres de las entidades
federativas con las que se integraron la
naciente república mexicana. A los pies
del nopal, las armas de guerra, pero si
observan son justamente las
prehispánicas, con las que habrían hecho
resistencia fallida a las armas de guerra
de los europeos de la conquista.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
73
Así que este momento de la
insurgencia que ya se convierte en
independencia va a retomar, aquel ideal
antiguo del Anáhuac, para traernos el
emblema de la nueva patria. Por eso nos
llamamos México, porque estamos
tomando el símbolo de la fundación de
México - Tenochtitlán.
Otro elemento importante que
conviene mencionar en este lugar, tiene
que ver con la celebración del 16 de
septiembre. Propuso Morelos desde 1813
como la fecha en que se celebre la
liberación, la independencia, nuestra
independencia y con esto espero que
superen aquello que se ha dicho que en
realidad es un capricho de Porfirio Diaz
de que se celebrará el día 16 de
septiembre. Quienes así lo han dicho no
han averiguado más a fondo y ya está en
las propuestas que hizo llegar José María
Morelos en Chilpancingo el año de 1813.
La celebración tiene que ver
entonces con los emblemas, con la
imaginación con el imaginario social.
Nos menciona Ernesto Lemoine
Villicaña, que toda esta lucha que sucedió
entre 1813 y 1814, -que Eduardo nos ha
reseñado – es a la vez mientras los que
toman las armas se están atacando a las
posiciones realistas o defendiéndose de
los realistas; los que tienen las armas del
intelecto, esto es los nombrados
diputados tienen que andar
escondiéndose de un sitio a otro, mientras
se ponen de acuerdo cuáles serán la
norma, los artículos que irán configurando
ese primer documento con el que se
constituirá a la nueva nación.
De ahí el término constitución,
constituyentes, dice Leomine, que la
comisión encargada de presentar el
proyecto de nuestra constitución interina,
se da prisa para poner sus trabajos en
estado de ser examinados y “en breves
días veréis ¡oh! pueblos de América la
carta sagrada de libertad que el congreso
pondrá en vuestras manos”.
Están pues de un lugar a otro,
procurando darle formalidad a este
documento, que también debo
mencionarlo así, ha sido criticada por lo
mismo, que fue improvisado, que fue
realizado por individuos que no tenían
ninguna preparación, ninguna experiencia
en la legislación; no seamos injustos, eso
se estaba apenas construyendo, el poder
legislativo está surgiendo entonces, no
había ninguna experiencia.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
74
Por esa razón, ellos los
constituyentes de Apatzingán formulan,
establecen lo que va a ser el método aún
hoy en día vigente del constitucionalismo,
el derecho comparado, se basa en lo que
ha sido promulgado en otros estados y en
otros tiempos para encontrar lo que
conviene a este momento.
También ahí hay que reconocer al
movimiento constitucionalista de
Apatzingán, que nos va a dar la pauta a
seguir en el Siglo XIX y aun en el Siglo
XX.
El otro elemento que voy a mencionar
es el del poder judicial, porque en éste
año estamos celebrando el bicentenario
de su establecimiento. El supremo
tribunal establecido por Apatzingán en
1814, sin embargo, ahí también es justo,
es conveniente referir una secuela o una
precuela que estaba sucediendo antes de
1814.
De los tres poderes que nos van a
caracterizar como republicanos, el
ejecutivo, el legislativo y el judicial, el
judicial era el único que ya tenía
presencia y ya había fundamentado un
orden legal o de eso se trataba.
Con mayor razón cuando se buscó
en las normativas antiguas europeas y se
encontró el derecho del conquistado,
aquellos pueblos conquistados que se
avenían a recibir el manto de su majestad
el rey, en este caso el rey de España.
También, recibían la autorización de
un orden legal propio republicano y
surgen para nuestra América la republica
de indios y la república de españoles y lo
que primero se les reconoce es la
autoridad, el poder de ejercer un derecho,
el derecho de la justicia.
Así que los conquistados van a tener
un territorio y unas autoridades que ellos
mismos van a elegir. Esto es un punto no
muy discutido aún, pero se antoja para el
derecho electoral justamente, ya que
tendríamos que ir a conocer de qué
manera los pueblos de indios eligieron a
sus gobernantes, a sus alguaciles, a sus
alcaldes, porque los alcaldes se tenían
que ver también con la administración de
la justicia.
El alcalde mayor era además el
corregidor por nombramiento real y los
demás alcaldes se hacían cargo de los
otros asuntos que tenían que ver con los
juzgados. La vara de la justicia es lo que
va a distinguir aquellos indios que eran
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
75
electos como gobernadores por los
distintos pueblos que hubo. Esta vara
deviene de otra imagen muy europea la
del árbol, el árbol de la justicia que a su
vez es el que va a ser el que dé el
emblema del derecho de la columna.
La representación que tenemos que
es de un libro del año de 1610 nos está
expresando un viejo emblema del árbol
de la justicia, flanqueados por las cuatro
virtudes cardinales y al centro debe de
estar el derecho, debe de estar la justicia.
La columna representa la administración
de justicia, el equilibrio, la estabilidad, une
lo alto y lo bajo, fija el lugar de cada cosa
como lo hace el juez, y el juez es el
alcalde. Cada alcalde asumía esas
funciones de juzgador.
Pero miren que interesante que para
los usos y costumbres de la Nueva
España, se sustituye el árbol por el nopal
y aquí está entonces que la justicia la van
hacer simbolizar al hacer llegar el
nombramiento al gobernador después de
haber sido notificada la autoridad de que
el señor, tal había sido electo gobernador
por el siguiente periodo, le llegaba el
nombramiento y como sello un nopal,
para que lo utilizará y su vara de justicia.
Ese es un emblema que quiero
destacar en nuestro escudo nacional, de
qué manera el nopal se va a conservar,
porque es el ideal, es el anhelo de la
justicia del derecho como debe de ser,
decimos ahora un estado de derecho.
La significación del Anáhuac, de los
campos de batalla a sello insurgente. El
emblema del Anáhuac que en Apatzingán
va a ser el emblema de la patria en la
Constitución de 1824 sostenida por la
columna de la justicia.
Cuando el constituyente de 1824
resuelve cuál va a ser el símbolo de la
nación, se elige el mismo que había
propuesto José María Morelos en
Apatzingán que es el que vemos ahí ya
en la portada del libro de las
constituciones de los Estados Unidos
Mexicanos, es la de 1824, sólo que aquí
ya tiene otra de las características sin las
armas de guerra prehispánicas y con los
laureles bajados a la parte inferior, pero
es la misma simbología, exceptuando “el
gorro frigio”, en resplandor porque al final
de cuentas ya se había logrado una
constitución. La constitución de un estado
ya tenía un acta constitutiva que fue dada
en 1824.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
76
Pero vemos también que los
antecedentes del imaginario social, ya
José María Morelos había hecho presente
este mismo emblema en su sello de
insurgente, desde que recibió la comisión
de Miguel Hidalgo, desde ahí hizo uso de
éste emblema donde vuelve a estar el
águila del Anáhuac, no está el nopal, pero
están las armas, están los pendones está
todo lo que significa el llamado a la
insurgencia.
¿De dónde toma Jose María Morelos
está idea, éste ideal? Pues del pendón
insurgente que mandó hacer Ignacio
Allende, para el levantamiento planeado
el 29 de septiembre de 1810.
Como es conocido, habiendo sido
denunciados Aldama y Allende, acudieron
a Dolores Hidalgo para convenir con
Miguel Hidalgo pasos a seguir y es ahí
donde se origina el levantamiento 15 a 16
de septiembre por lo que los pendones
que encabezarían la insurgencia se
quedan en San Miguel, y el pendón que
va a tomar Miguel Hidalgo es el de la
Virgen de Guadalupe al pasar por
Atotonilco.
Al llegar los capitanes a San Miguel
el Grande retoman la idea original y éstas
son las banderas que fueron tomadas en
el Monte de las Cruces y posteriormente
recuperadas muy recientemente, al
menos para el conocimiento histórico por
Martha Terán, en uno de los congresos
itinerantes que hicimos en San Miguel de
Allende, justamente nos mostró la
existencia de este hecho histórico todavía
inédito, todavía no muy conocido, por lo
cual va bien que ustedes ya se enteren y
afortunadamente ha sido muy publicado
en varias partes.
Volviendo al punto central,
observarán entonces como dos de estos
pendones tienen el águila del Anáhuac.
¿De dónde le vino a Ignacio Allende, el
ideal, la inspiración? Se estaban dando ya
las conspiraciones y la junta que hubo en
Jalapa, la reunión que habían tenido en
Valladolid, y la correspondencia que entre
los militares criollos estaba sucediendo se
significaba con ideales como éstos, el
emblema de la recuperación del Anáhuac.
El escudo nacional tiene tal
trascendencia, tiene tal trayectoria. Por
ahí he leído desafortunadamente en
historias que se enseñan que también ha
sido inspiración de Agustín de Iturbide,
por favor corrijan ese equivoco. Parece
que éste señor tuvo inspiración para
muchas otras cosas menos para sostener
un ideal tan emblemático de una nación.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
77
Pero si tuvo la imaginación de utilizar
el mismo sello de José María Morelos, de
Ignacio Allende, como emblema de
realeza y entonces la veremos como una
de las órdenes militares con que premió a
sus generales del Ejército Trigarante, el
águila con la corona del imperio.
Afortunadamente la vamos a ver un
par de décadas después, vuelta a la
batalla en los ejércitos juaristas liberales,
con “el gorro frigio” del liberalismo sobre
las armas porque también hay que
reconocer que éste emblema que nos da
origen como nación independiente va a
ser el emblema de la guerra contra las
invasiones que sufrió nuestro país.
Como está en la casa de Miguel
Hidalgo en Dolores Hidalgo, ésta bandera
que fue a entregarle como parte de guerra
al anunciar que habían sido derrotados en
el Cerro de las Campanas los traidores y
habían sido fusilados, entregó, depositó
en el altar de la patria el General Ramón
Corral, ésta bandera que está todavía
para que la podamos apreciar.
Nos distingue entonces, éste
emblema no es únicamente una imagen,
sino es todo un símbolo histórico que nos
consolida y que nos sigue dando gusto
verla así se le ponga la cabeza viendo
hacia un lado o hacia otro, o se le cambie
de formas de representarla.
La vemos en la misma casa de
Miguel Hidalgo en Dolores Hidalgo, en un
óleo, lo vemos ya como la alegoría que
lograron Ignacio Allende y Miguel
Hidalgo liberando a América. América
indígena que tiene el carcaje y las
flechas, en la parte posterior, el penacho
con las plumas encadenada al orbe y
justamente es un águila quien está
acusando al español, para simbolizar que
ese fue el gran logro de la gesta de la
independencia.
Pero la seguimos viendo en San
Miguel de Allende, recientemente hará un
par de semanas, como es pendón de uno
de los grupos más antiguos de comunidad
de indios que ahí hay de Guerrero, en una
de estas procesiones de septiembre que
hubo, la entrega de los “súchiles”, como
ahí se ven unos. La comunidad de
Guerrero tiene como pendón el mismo
que Ignacio Allende sacó en los días de
septiembre con la insurgencia.
Qué bueno que lo podemos
mencionar y compartir, ahora tendremos
que indagar, ¿Ellos lo tuvieron desde un
principio como emblema?, ¿En ellos se
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
78
habrá inspirado Ignacio Allende, o ellos lo
heredan del levantamiento en San Miguel
el Grande y se lo quedan como pendón?
O simplemente es una apropiación del
símbolo de la mexicanidad que ellos
portan ahora un tanto cuanto orgullosa.
La comunidad de Guerrero de las
más antiguas en San Miguel de los
Chichimecas, el Grande, hoy de Allende.
Y por cierto debo mencionar que la
palabra de nación originaria debido a que
estamos en tiempos de reconocimiento y
respeto a la lengua y cultura de las
naciones originarias antes llamadas
indígenas, pueblos de indios, la palabra
correcta no es chichimeca es “usa” y lo
que significa es águila, así que hay algo
más en el fondo de todas estas
búsquedas de emblemas que tendremos
que averiguar.
Para salir de mi participación, pongo
allí una síntesis de los artículos
relacionados en la Constitución de
Apatzingán y menciono, reitero, que no
eran ningunos improvisados los diputados
electos para integrar ese primer congreso
itinerante de Apatzingán a Chilpancingo, a
Zamora, a donde pudieron haber estado
seguros en lo que escribían la
Constitución de Apatzingán. Tuvieron en
su mano la Constitución de Cádiz.
Estamos en el año de 1813.
Éstos son los artículos relacionados
que Ernesto de la Torre Villar, en su libro
de “Estudios Jurídicos”, ha comparado.
Veremos enseguida ya muy rápido la
tabla comparativa.
En Apatzingán el 1º, 2, 4, 5, 7, 11,
12, 14,15, 18 y 21, todos están
relacionados con el 4º de Cádiz. Y para
Apatzingán el elemento nuevo decía: “La
vida parlamentaria”, “El origen del poder
legislativo”, está en los artículos, 101,
103,112, etc., como ustedes ven ahí, pero
también para establecer la vida del poder
judicial del supremo tribunal, están estos
artículos: 196, 198 al 199, también
tomados del 261 de la Constitución de
Cádiz.
En septiembre se había instalado el
Congreso del Anáhuac en Chilpancingo y
declaraba, vamos a restablecer el imperio
mexicano mejorando el gobierno. Vamos
a ser libres e independientes y temamos
el juicio de una posteridad justa e
inexorable que nos espera. Temamos a la
historia que ha de presentar al mundo el
cuadro de nuestras acciones y ajustemos
nuestra conducta a los principios más
sanos de honor, de religión y de política.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
79
Ésta es la Constitución de Cádiz que
nos llega a México, después de haber
sido jurada en marzo de 1812. Para abril
de 1813, se está extendiendo el recibo de
que ha llegado a Guanajuato, la capital de
la provincia del mismo nombre para ser
distribuida en las principales poblaciones.
También tenemos en archivo ese
expediente de la proclama y jura de la
Constitución de Cádiz en Guanajuato. Se
recibió en Irapuato, ahí está firmado de
recibo. Se recibió en Salamanca, Celaya,
Guanajuato, así que no es extraño que
hubiera ido a parar a manos del
constituyente de Apatzingán, la
conocieron.
Así como se recibió en la provincia de
Guanajuato, se recibió en la de Valladolid
hoy Michoacán, en la de México de la que
formó parte Querétaro, en la de
Guadalajara, hoy Jalisco, en la de San
Luis Potosí, por lo mismo no es extraño
encontrarnos éstas correlaciones entre la
Constitución de Cádiz con la de
Apatzingán.
Un asunto para cerrar un poco la
expresión de la república de indios, esta
ya había entrado en una omisión por las
ordenanzas de las intendencias que para
nada mencionaron el orden legal
republicano. Dieron por sobreseído que
existiera esta circunstancias y comenzó
haber conflictos porque entonces las
intendencias tenían que gobernar a la
totalidad del territorio, ¿Qué pasaba con
los pueblos de Indios? Ya no tenían
derecho a nombrar a sus gobernantes, a
sus autoridades, ahí se va a dar un
conflicto que al menos el intendente
Riaño en Guanajuato, que antes lo había
sido en Valladolid, donde tuvo
conocimiento de una mayor cantidad de
pueblos de indios reclamando sus
derechos, a Guanajuato vino aplicar una
política de negociación, permitiéndoles
que siguieran con sus usos y costumbres,
pero los de Irapuato en cuanto llega la
Constitución de Cádiz en 1813, la juran y
la proclaman y para darle lugar convocan
a elecciones.
Las primeras elecciones
constitucionales de Irapuato, Salamanca,
Celaya, Guanajuato, sucedieron entonces
entre 1813 a 1824. En Irapuato para nada
tomaron en cuenta a los pueblos de
indios. Aquí están las firmas de quienes
componen el primer ayuntamiento
constitucional de Irapuato, todos son
militares, todos son del regimiento del
Bajío comandados por Agustín de
Iturbide, así que técnicamente es un
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
80
golpe de estado. Asumen ellos el poder y
desconocen usos y costumbres de los
pueblos de indios en Irapuato.
En Salamanca en cambio el primer
ayuntamiento constitucional, si reconoce
a los pueblos de indios e invita a que
participen a los de Nativitas y a los de la
presa y menciona expresamente el
expediente que no así a los de San
Pedro, porque ayudaron al cura Hidalgo y
a sus corifeos en su levantamiento.
¿Qué pasó en las otras poblaciones
de la nación mexicana? Eso todavía no lo
conocemos. Esta es la serie de tablas que
Ernesto de la Torre Villar, ha tenido a bien
hacer para comparar. Al menos vean
ustedes las cuatro columnas, las tres
centrales son de las distintas versiones de
la Constitución Francesa, las de la
izquierda son de la Constitución de
Apatzingán, y las de la derecha es la
Constitución de Cádiz.
De ahí están tomados, traídos,
trasladados porque el espíritu de la ley
era necesario que así se reconociera.
Cuando en Cádiz se aprobó y llegó a la
Nueva España, también se tomó para
Apatzingán donde se vio que era
conveniente.
Sin embargo, hay más trabajo que
nos dejan ver los artículos tomados por
Ernesto de la Torre Villar, que no tienen
inspiración.
Hay otra falacia por ahí circulando
que la inspiración son las actas
constitutivas de Virginia, la Constitución
Norteamericana, no hay comparación.
En otra parte del mismo libro nos
prueba Ernesto de la Torre Villar, que es
falso que el constituyente mexicano se
inspiró en la Constitución de los Estados
Unidos Americanos, pero hay que leerlo,
hay que ir a los documentos que lo
prueban, para ya no seguir en el supuesto
de que en todo hemos imitado a los
vecinos del norte.
Yo con esto concluyo. Solo espero
que se les den las instrucciones para que
ustedes puedan tener éste documento.
Se lo lleven y lo podamos dialogar
posteriormente a través del Colegio de
Historiadores, que como ya lo hemos
dicho estamos para compartir con la
ciudadanía el conocimiento histórico.
Muchas gracias.
.
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
82
3 Constitución de Apatzingán en
Textos
Grecia M. Vallejo García*
En este número 90 de Apuntes Legislativos
presentamos a nuestros lectores algunos textos que abordan el tema de la Constitución de Apatzingán en conmemoración de su Bicentenario.
Báez Corona, José Francisco coord. México a través de sus Constituciones 1812- 1917. Universidad de Jalapa. México 2012.
El primer libro es un texto que
analiza la transformación de las constituciones y su desarrollo con los años, a partir de sus causas y efectos de diversos acontecimientos históricos
Dentro de su contenido, abarca
los temas de la Constitución Política de la Monarquía Española de 1812, el Decreto Constitucional para la Libertad de la
* Asistente del IIL del Congreso del Estado de Guanajuato.
América Mexicana (Apatzingán 1814), La Constitución Federalista de 1824, La Constitución de las Siete Leyes, las Bases Orgánicas de la República Mexicana, El Acta Constitutiva y de Reformas de 1847, La Constitución de 1857 y La Constitución de 1917.
El libro se encuentra disponible en
la biblioteca del Congreso del Estado.
Rabasa, Emilio O. Historia de las constituciones mexicanas. Instituto de Investigaciones Jurídicas UNAM, México 2004.
La segunda obra, editada por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, contiene los temas del Acta Constitutiva y la Constitución de 1824, La Ruina del Sistema Federal: La etapa Centralista, el Acta Constitutiva y de Reformas de 1847, La Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 5 de Febrero de 1857 y la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917, así como los planes que dieron marco a las constituciones. El libro puede ser consultado directamente en la página web: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/libro.htm?l=431
Bicentenario de la Constitución de Apatzingán
83
Constitución de Apatzingán 1814.
El último texto que presentamos es el
Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, sancionado en Apatzingán el 22 de Octubre de 1814, recordando la importancia de consultar los textos originales, para entender el contexto y situaciones que se vivían.
Cabe destacar, que este libro contiene los Principios y Elementos Constitucionales, la Forma de Gobierno, y los capítulos y artículos que la integran.
El documento puede ser
consultado en la Biblioteca del Congreso del Estado de Guanajuato.