Arjun Appadurai - El rechazo de las minorías - Ensayo sobre la geografía de la furia

7/28/2019 Arjun Appadurai - El rechazo de las minoras - Ensayo sobre la geografa de la furia

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In dice

Pr6logo 7

Del etnocidio al ideocidio La civilizaci6n de los choques 9

Globalizaci6n violencia .

. El temo a los nmeos peque:os . . 7

Nuestros teroistas, nosotos mismos

La globalizaci6n de las basesen la era del ideocidio

Apndices

Bibiogr 7

fndice onomstico de mteris 77


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Pr6loo

Ese exeso esayo es la sega eega e poyeco e lago alcace qe comez6 e 989. Lapmea fase el oyeco coss6 e abajo ealss e la mca clal el mo e la globalzac6 e aqel eoces cee y clm6e el lbo lao modidad dsbordada: dimnsions ulturals d la globalizai6n 99) Esa oba

plaeaba algas as eseclaas y cas sobeel o el Esaoac6 y se ooa examala foma e qe os ezas qe a e la mao losmeos e comcac6 y las mgacoes ceabaeos ecsos aa el abajo e la magac6coceba como a cca socal Aems e sge

algos aoes seg los cales la cla losmeos e comcac6 y las soas asoasea ezas qe se escaba mamee e mo e slocacoes modidad dsbordadaoslaba qe la ceac6 e comaes e coeca locales se aba elo ms complcaa e el

coexo e la globalzac6El exo e 99 ssc6 amlo ebae eoy ea e la aoologa A algos ccos les aec6 qe oeca cao emasao alageo e la

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globalzac6n e pncpos e los aos noena y qeno pestaba na aenc6n sfcene a ss faceas msoscas como a olenca la exclsn y el amenoe a esgala. En pae como consecenca e esos poblemas y en pae lleao po ms neeses alago plazo comenc a nesga la olenca coleca ejeca cona los mslmanes en m ca naal(Bombay enomnaa aoa Mmba) one abaneno ga nensos sbos ene nes y mslmanes en eneo e 992 y en 993. Esos epsoose olenca gpal fomaban ae e na oleaa naconal e aaqes a sees elgosas ogaes y poblacones mslmanes en oa Ina qe sg6 a laescc6n e la mezqa e Bab en Ayoya ecembe e 992. El abajo sobe la olenca enenes y mslmanes en la Mmba e los aos no

ena egaba n poyeco comaao ms amploecao a nesga la olenca enoca a gan escala en el mno poseo a 989 paclamnee ana y Eopa cenal peo ambn en Inay en oas egones. El eslao e esas esgacones ealzaas ane la caa qe a e 995 as

a 2005 se encea pacalmene eejao en ese lbo as como en ceos ensayos pblcaos a lo lagoe esos ez aos algnas e cyas seccoes ambnfoman pae e ese exo.

La pesene nesgac6n e algnas e las consecencas ms cas e la globalzac6n (y ese l

bo se ge a expone esas coexoes) ambn mecojo en bena pae e manea accenal a nfen6meno eneamene neo n fen6meno gacasal cal oos poemos slmba espeanzas sobe

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e to e la globalzac6 E Mmba metasobseaba la oleca cota los mslmaes e estaa qe a lo lago e a hstoa ha so peoatemete lbeal y osmopolta m be amgoSa Ba me peset6 a sopeete gpo e actstas al qe peteeca qees me peteo accee a s tabajo ete los ms pobese os pobes baos e Mmba Me tojeotamb e lo qe e 99 a ea fe6meo pocoestao el fe6meo e globalzac6 e las basesa globazac6 ese abajo los esezos qe algos mometos y ogazacoes o gbeametales e actstas acometa e too el mo paacoqsta y a foma a la agea global e cestoes como eechos hmaos geo pobeza meo ambete y sal Este mpotate eceto e

Mmba me lle6 a embacame e poyecto eestgac6 paalelo sobe a globalzac6 e lasbases a cyos esltaos pelmaes me efeo eas pgas ales e este lbo La hstoa completae estos actstas e la ea e Mmba y las cosececas e ss esfezos paa a poltca e la

espeaza so el tema e tabajo qe co el ttlo posoal e Th Capaity to Aspir, se ecetaahoa e los estaos ales e s pepaac6

De moo qe el lbo qe e lecto ha comezaoa lee costtye a tasc6 y a asa e poyecto e lago aleto (tato telectal como pe

soa) qe bsca maeas e poe la globalzac6 aseco e aqelos qe ms a ecesta y meos asta os pobes los esposeos los bles y osmagaos e esto mo Es a tasc6 po

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qe toa palaba espeazaoa es aa a meos qesea aacaa e las faces e la btala qe laglobalzac6 tamb ha poco Y o sabemos6e bsca meos paa la espeaza e la globalzac6 y paa la globalzac6 e la espeaza hastaqe compeamos c6mo la globalzac6 ee poc eas fomas e oo etoco e eocoDe moo qe solcto la paceca el lecto e estafase e a estgac6 qe a o est acabaa

Como sempe tego meosas eas co amgs y colegas Ua caa es tempo lago y me hebeecao e la geeosa ajea e aos pasesy cotetes ate ese peoo La lsta completae pesoas y atoos qe me ayao a a foma a los captlos e este lbo es ta extsa qe caecea e seto oecela As qe asmeo el

esgo e se jsto mecoa s6lo a as pocaspesoas qe me ha ayao e aas maeas ate el esaollo (emasao eto) e estas estgacoes o e oe alfabtco Jock ApthamBa Axel a Ba Dpesh Chakabaty JeaCoao Joh Coao eea Caoke Veea

Das Cele DCz Fasal Dej Dlp Gaoka eteGeschee ash Kal Da Lat BejamLee Clao Lomtz Achlle Mbembe Uay Mehtaeela atel Vyjayat ao Kmkm agaeeChales Taylo ete a e Vee y Ke Wssoke Doslecoes a6mos e Dke Uesty ess fomla

o lcas pegtas qe alteao sstacalmetela es alCoespoe tamb mafesta algos agae

cmetos stcoales El pe ocety Isttte

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de Nueva Yor me otorg una beca de investigacinndividua en 19971998 para trabajar en este tema.La Universidad de Chicago me concedi una licen-cia sabtica y otras ayudas para terminar este ibro.La Universidad de Yale y a Universidad de Chicagome brindaron a oportunidad de ensear y de diaogarcon estudiantes que afinaron mis argumentos. E Departamento de Ciencias Poticas de a Universidadde Nueva Dehi me nombr profesor visitante y meinvit a impartir e cico de conferencias een Murtien febrero de 2002 que constituyen a base de loscaptuos 2 5 y . La New Schoo me record, muyrecientemente, e vaor de disenso y de debate parauna prctica democrtica goba. Estoy agradecido acada una de estas instituciones.

Me quedan agunas deudas ms cercanas. Ajay

Gandhi y Nikhi Aand, en a Universidad de Yae, feron ectores escrupuosos y amabes crticos de a tota-idad de texto. Zac Fine y Leiah Vevaina, en a NewSchoo, ucharon con una versin origina en cons-tante cambio hasta dejaa en e estado actua. La ti-ma, pero no a menos importante mi mujer, Caro A.

Breckenridge, supeis toda a obra. Sin su aiento ysu estmulo, ni el espritu ni a materia de este librohabran visto la uz.

Bthany, Conntiut, agosto d 25


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1Del etnocidio al ideocidio

E presente estudio est dedicado a a vioencia agran escaa, cuturamente motivada, que se produceen nuestra poca. Sus captuos, cuyas argumentacio-nes reseamos aqu, se prepararon entre 1998 y 2004de modo que os razonamientos ms importantes deos mismos se desarroaron a a sombra de dos ti-pos principaes de vioencia. E primero de eos, que

observamos en Europa de Este, Ruanda e India aprincipios de os aos noventa, mostr6 que e mun-do posterior a 1989 no marchaba hacia e progresoen todos sus entes y que a gobaizaci6n poda po-ner a descubierto patoogas severas en as ideoogasconsagradas a o aciona. E segundo tipo de vio-

encia, oficiamente gobaizado bajo a rbrica degerra contra e terror, podra caacterizarse me-diante os catastr6ficos ataques de 1 1 de septiem-bre de 2001 a Word rade Center, en Nueva York, ya Pentgono, en Virginia. Estos timos sucesos hi-cieron de os aos noventa una dcada de supeio-

encia, una dcada caracterizada por e hecho de queen muchas sociedades e continuo incremento de aguerra civi era u rasgo de a vida corriente. Vivi-mos ahora en un mundo diversamente articuado por

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os estados y por os medios de comunicaci6n en di-ferentes contextos nacionaes y regionaes, en e cuae temor a menudo parece ser origen y fndamento defuertes campaas de vioencia de grupo que van des-de disturbios a pogromos de grandes dimensiones.

A o argo de os aos cuarenta y durante agntiempo despus, muchos especiaistas comenzaron aaceptar que as formas extremas de vioencia coecti-va, sobre todo as que combinan asesinatos a granescaa con diversos modos de degradaci6n premedi-tada de a dignidad y de cueo humanos, eran con-secuencia directa de totaitarismo, en particuar defascismo, y podan apreciarse en a China de Mao, ena Unin Sovitica de Stain y en otras sociedades tota-itarias ms pequeas. Por desgracia, os aos noventano han dejado ninguna duda de que as erzas mayo-

ritaristas y a vioencia etnocida a gran escaa tambinpueden apoderarse de sociedades democrticas ibe-raes, as como de otras diversas formas de Estado.

De manera que nos vemos en a obigaci6n de for-muar y responder e interrogante de por qu a dca-da de os noventa, periodo de o que ahora podramos

denominar ata gobaizaci6n , tuvo que ser tambine periodo de a vioencia a gran escaa en diferentessociedades y regmenes poticos. A referirme a a atagobaizaci6n (con ago ms que un guio a a ata mo-deidad) tengo presente sobre todo un conjunto deposibiidades y proyectos ut6picos que se extendieron

como un reguero de p6vora por numrosos puebos,estados y esferas pbicas tras e fina de a guerraa. aes posibiidades se entretejieron en una suertede tramado doctrinario acerca de os mercados abier

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os y e ibre comercio, de a expansin de as institu-ciones democrticas y as constituciones iberaes yde a erza de as posbidades de Inteet (y ciber-ecnoogas reacionadas) para mitigar a desigua-dad, tanto dentro como entre as sociedades, y paraincrementar a ibertad, a transparencia y e buen go-bierno incuso en os pases ms pobres y aisados.oy en da, so os partidarios ms fundamentais-as de a gobaizacin econmica iimitada admitenque e efecto domin de ibre comercio, e ato gradode integracin de mercado inaciona y e ujo decapitaes es siempre positivo.

As pues, este trabajo viene a sumarse a os intentos de responder a a siguiente pregunta por quuna dcada dominada por a aprobacin goba de osmercados abiertos y de a ibre circuacin de capita

financiero, por ideas iberaes respecto a as regasconstitucionaes y a buen gobieo y por una activaexpansin de os derechos humanos ha producido,por una parte, una ptora de casos de impieza tnica y, por a otra, formas extremas de vioenca poticacontra pobaciones civies (una buena denicin de

terrorismo como tctica)? En o que sigue discreparen ocasiones de agunos eminentes intentos de resoveresta cuestin. Aqu me imito a seaar en trminossencios os eementos de un tipo de respuesta diferente, una respuesa arraigada en a preocupacin poras dimensiones cuturaes de a gobaizacin. Agu-

nos crticos cnsideraron que mi anterior intetode caracterizar e (a a sazn) emergente mundo dea gobaizacin ( 1 99) haba sido un tanto severoen sus crticas a Estadonacin modeo e ingenua

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mente optimista en cuanto a os benecios de os u-jos gobaes. Este ensayo se enenta de modo directoa a cara ms oscura de a gobaizaci6n.

A fin de comprender mejor qu nexos podranexistir entre a gobaizaci6n y as impiezas tnicas ye terror, propongo una serie de ideas interreaciona-das. E primer paso es reconocer que bajo a idea mis-ma de Estadonaci6n moderno subyace otra ideafndamenta y peigrosa, a idea de una etnia nacio-na . Ninguna naci6n modea, por ms benigno quesea su sistema potico, por ms eocuentes que seansus voces pbicas respecto a as virtudes de a toe-rancia, e muticuturaismo y a incusin, est ibrede a idea de que su soberana naciona se haa cons-truida sobre una suerte de genio tnico. Hemos apre-ciado recientemente este punto de vista expresado

con una espeuznante civiidad por Samue Hunting-ton (2004) cuando suscit6 abiertamente a aarmapor a manera en que a pobaci6n hispana de EstadosUnidos amenaza con abandonar e modo de da ame-rican, concebido como una intransigente dctrinacutura europrotestante. Y uego se dice que as pos-

turas de nacionaismo tnico estn confinadas enoscuros estados bticos, deirantes demagogos afri-canos o extremistas nazis de Ingaterra y de norte deEuropa.

Se ha insistido o suciente en que a idea de unaetnia naciona singuar, ejos de haber brotado de

modo natura en una tierra u otra, ha sido produciday naturaizada con gran eserzo por medio de una re-t6rica sobre a guea y e sacricio, de discipinas muyduras para ograr una uniformidad educativa y in


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gstica y de a subordinacin de una mirada de tra-diciones ocaes y regionaes a n de producir indiosanceses britnicos o indonesios (Anderson 99;Baibar 990; Scott 998; Weber 97). gunos gran-des tericos de a potica particuarmente HannahArendt (98) han obseado tambin que a idea deun puebo naciona es e tan de Aquies de as sociedades iberaes modeas. En mi argumentacin sigoagunas ideas de Mary Dougas y otros antropogospara sostenr que e camino que va desde e genio naciona hasta una cosmooga acabada y tota de anacin sagrada y uteriormente hacia a pureza a impieza tnicas es reativamente directo. Hay quienes manifiestan que ste es un riesgo so en aque-os sistemas poticos modernos que han coocadoerrneamente a sangre en e centro de su ideooga

naciona . Sin embargo sangre y nacionaismo pare-cen abrazarse de una manera mucho ms estrechay competa en todo e mundo. oda nacin bajo cier-tas condiciones demanda transfusiones totaes desangre y suee exigir que una parte de su sangre seaexpusada.

Esta tendencia etnicista inherente a todas as ideo-ogas nacionaistas no expica por qu so agunossistemas poticos nacionaes se convierten en escenario de vioencia a gran escaa guerra civi o impie-za tnica. Necesitamos recurrir aqu a una segundaidea reativa a ugar que ocupa a incertidumbre so-

cia en a vida de a sociedad. En un ensayo anteriorque eva e ttuo de Dead Certainty (998b) he desaoado en detae una argumentacin sobre as ma-neras en as que a incertidumbre socia puede guiar

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proyectos de impieza tnica cuyos procedimientosson a a vez vivisectores y verificacionistas es decir que buscan a incertidumbre desmembrando ecuerpo sospechoso e cueo bajo sospecha Esta case de incertidumbre se haa ntimamente reacionadacon e hecho de que os grupos tnicos de hoy se cuen-tan por mies y sus movimientos mezcas estioscuturaes y representaci6n en os medios de comuni-caci6n crean dudas profndas acerca de quines exac-tamente se haan dentro de nosotros y quinesdentro de eos

a rapidez y a intensidad con as que tanto oseementos materiaes como os ideo6gicos circuanahora czando as onteras nacionaes han creadoun nuevo orden de incertidumbre en a vida sociaSea o que fere o que caracterice a este nuevo tipo

de incertidumbre no encaja con faciidad en a do-minante profeca weberiana sobre a modeidad se-gn a cua pronto se disoven as formas socaesntimas para se reempazadas por 6rdenes buroctcoegaes atamente regamentados y regidos por eaumento e as tramitaciones y a previsibiidad as

formas de ta incertidumbre ciertamente son variasUn tipo de incertidumbre es reejo directo de preocupaciones reativas a censo cntas personas de tao cua condici6n existen reamente en un territoriodado? 0 en e contexto de una emigraci6n pida omovimientos de refgiados cntos de eos estn

ahora entre nosotros? Otro tipo de incetidumbre sereaciona con e significado verdadero de agunas deestas megaidentidades por ejempo cues son ascaractersticas normativas de o que a Constituci6n

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india dene como miembro de una OBC (Other Back-ward Caste) ?* Otra incertidumbre es a de si un in-dividuo particuar es reamente o que o ea diceser o o que parece ser o o que ha sido hist6ricamen-te. A fina estas variadas formas de incertidumbrecrean una ansiedad intoerabe respecto a a reaci6nde muchos individuos con os bienes provistos pore Estado desde vivienda y saud hasta seguridad ycondiciones de saubridad pues estos derechos conecuencia estn directamente igados a quin erest y por o tanto a quines son eos. Cada tipode incertidumbre cobra ferza siempre que hay mo-vimientos de personas a gran escaa (por a raz6nque sea) cuando as identidades tnicas a gran esca-a evan consigo nuevas recompensas y riesgos ocuando as redes existentes de conocimiento socia

son socavadas por e rumor e terror o e despaza-miento socia. A donde una o varias de estas for-mas de incertidumbre socia entran en juego a vio-encia puede crear una macabra forma de certeza ypuede convertirse en una tcnica bruta ( o un proce-dimiento de descubrimiento propio de puebo) acerca

de eos y por o tanto acerca de nosotros. Puedeque esta voti reaci6n entre certeza e incertidumbreadquiera un sentido especia en a era de a gobai-zaci6n.

En este contexto mutiforme agunos principiosy procedimientos esenciaes de Estadonaci6n mo

* Other Bacard Castes Otras castas retrasadas) es la denomi-naci6n ocial de un gpo de castas agrcolas y artesanas empobrecidas que se benecian de la acci6n positiva del Estado indio dirigidaa mejorar su situaci6n (N de l T)

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deo (a idea de un territorio soberano estabe deuna pobaci6n controabe cuantificabe de un cen-so digno de confianza de categoras transparentes estabes) se han resquebrajado en a era de a gobai-zaci6n debido a razones que expicar en os captu-os siguientes. Sobre todo a certeza de que puebosdiferentes singuares han tenido origen en determi-nados territorios nacionaes - que os controan hasido decisivamente desestabiizada por a uida cir-cuaci6n a escaa goba de riquezas armas personase imgenes que he descrito en modidad dsbordada (99)

Dicho en pocas paabras es probabe que a o ar-go de toda a historia de hombre a donde as neasentre nosotros eos han estado desdibujadas enos mites han sido poco caras en ampios espa-

cios grandes grupos a gobaizaci6n exacerbe taesincertidumbres produzca incentivos nuevos paraa purifcaci6n cutura a medida que ms nacionespierden a iusi6n de a soberana econ6mica nacio-na de bienestar Esta obseaci6n tambin nosrecuerda que a vioencia a gran escaa no es simpe-

mente e producto de identidades antag6nicas sinoque a vioencia misma es una de as maneras a tra-vs de as que se produce a iusi6n de unas identi-dades fijas penas en parte para contrarrestar asincertidumbres acerca de a identidad que a circua-c6n goba invariabemente produce En este senti-

do e fndamentaismo ismico e ndamentaismocrstiano muchas otras formas ocaes o regionaesde fundamentaismo cutura pueden considerarseparte de un repertorio emergente de intentos de pro

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cir niveles anes innecesarios de ceeza aceca dela idenidad social los valoes la adicin y la dignia. La violencia sobe odo la violencia exema yspecacular es una manera de poduci ese ipo dereza mediane la movilizacin de lo que en oo siio he deominado el compomiso pleno (1998a)sobe odo cuando las fezas de la inceidumbe social se alan con oros emores: el cecimieno de la desigualdad la pdida de la soberana nacional o lasamenazas a la seguridad y a los medios de vida ena zona en que uno habia. En esa lnea uno de losemas ecuenes de mi pesene agumenaci esque paa emplea el bal afoismo de Philip Gouevich sobe Ruda el genocidio desus de odoes un ejecicio que consuye senimieno de comunidad (1998: 95) .

El hecho de que la violencia esule produciva enel plano social o es por s mismo una exlicacin suciene e las maneas eculiaes en las que en los aosnovena paece habe cobado nueva vda la vioecia conra guos definidos como minoas desdeEsados Uidos hasa Indonesia y desde Nouega has

a Nigeia. Poda deise que la odava cuesiodUnin Euope es e varios senidos la fomacinpolica ms pogesisa del mundo posnacional . Peoes manifieso que a da de hoy exisen dos Euopas:el mundo de inclusin y muliculuaismo en un gupo de sociedades euopeas y la angusiada xenofo

bia de lo que podamos denomina la Euopa dePim Fouyn (Ausia Rumania olanda Francia).A fin de expica po q esados nacionales po lodems inclusivos democricos e incluso laicos gene

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an ideologas como el mayoiaismo* y el nacionalismo acisa debemos inoducios ms pondamene en el coaz6n del libealismo y as lo hago enel capulo 4

Ese anlisis me ha pemiido obsea que e l vuelco haia el nacionalismo nico e incluso hacia el enocidio en algunos sisemas policos demoiosse explica en buena pae po la exaa ecpocidainnseca de las caegoas de mayoa y minoa e el pensamieno social libeal la cual genelo que he denominado angustia d lo inomplto. Lasmayoas numicas pueden conveise en pedaoias y enocidas de los nmros pquos peisamene uado algunas minoas (y sus meos pqueos)ueda a las mayoas la pequa beha que media ene su condici6n de mayoas y el hozone de

u odo nacional impoluo de una enia acionalpua y sin acha. Esa sensai6n de lo inomplo puede lleva a las mayoas a un paoxismo de olenciacona las minoas seg deeminadas oniionesque analiz co especial dealle con espco a los musulmanes de India a lo lago de odo el libo paicu

lamene en el capulo 5.La globalizaci6n omo manea especa e n quelos esados los meados y las ideas sbe el comecio

* El original ingls presenta recurrentemente el sustantivo majr aranm y el adjetivo coespondiente majr aran, que traducimos por mayoritarismo>> y mayoritarista>> Hay que tenerpresente que el autor emplea el trmino majr aranm en dos sen

tidos dierentes: a veces designa el pensamiento segn el cual en losgrupos sociales las decisiones deben tomarse siguiendo el criteriode a mayora numrica de sus miembros y otras veces designa aideologa que se vale de dicho punto de vista para oprimir a las minoras (N de l T)

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e gobieo se han llegado a organizar exacerba lasondiciones de la vioencia a gran escala debido a queenera una poencial colisi6n enre la 6gica de la ineridumbre y la 6gica de o incompleo cada unae las cuales iene su propia forma y su propia ferza.omo realidad ampliamene exendida en el mundode los aos novena las fuerzas de la gobalizaci6npromoveron las condiciones para el crecimieno dea inceidumbre social a gran escala y para el incremeno de la icci6n de lo incompleo lo uno y ooro emergenes de la dimica enre las caegorasde mayora y minora. La angusia de lo incompleo(siempre laene en el proyeco de pureza nacionalcomplea) y la sensaci6n de inceridumbre social reaiva a las caegoras enoaciales a gran escala pueden dar luga a una forma desenenada de muua

esimulaci6n que se conviera en el camino hacia elgenocidio.Esa apoximaci6n al aumeno de la volencia cul

ural a gan escala en la dcada de los novena quecombina la inceidumbre y lo incompleo puedeoecer ambin un ngulo (no un modelo ni una ex

plicaci6n) desde el que considerar el problema de poqu dicha violencia se produce en un nmero de casos relaivamene pequeo sobe odo si el universocompleo se mide en az6n del nmero acual de esadosnaci6n independienes. La agumenaci6 quepeseno en esas pginas y que gira en oo a la re

laci6n enre la globaliaci6n la inceridumbre y lo incompleo nos propociona una forma de reconocercundo la angusia de lo incompleo se combina conniveles de inceidumbre inacepables de un modo al

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que pone en marcha una movilizacin enocida a granescala. Podra argumenarse que la concurrencia deniveles elevados de ambos senimienos es una condi-cin necesaria de la violencia a gran escala. Pero queresule condicin suciene como a menudo es el casoen las ciencias sociales es ora cosa. La suciencia po-dra ser aporada por un esado canalla (Irak con loskurdos) por una esrucura colonial racisa (Ruan-da) por un proceso de creacin de una consiucingicamene enizado (Yugoslavia despus de Tio) opor lderes criminales movidos por la codicia perso-nal y respaldados por redes de mercancas ilegales(Liberia Sudn). En India que va a represenar uncaso ejemplar a lo largo de ese libro la condicin desuciencia parece radicar en una coningencia especial que vincula una profunda divisin polica con

una serie de deficiencias ineas en los planos legaly culural.Es preciso hacer una punualizacin ms . La vio-

lencia a gran escala de los aos novena se presen-a caracersicamene acompaada de un exceso deira de un plus de odio que produce formas nunca

visas de degradacin y vejacin en el cuerpo y en elpropio ser de las vcimas: cuerpos orurados y mu-ilados personas quemadas y violadas mujeres desripadas nios con miembros corados y ampuadosy humillaciones sexuales de odo ipo. Cmo enenarse a ese excedene de violencia que con ecuen-

cia iene lugar en acciones pblicas a menudo enreamigos y vecinos y ya no se realiza de la manera en-cubiera en que en el pasado solan llevarse a cabo lasvejaciones en las guerras enre grupos? Teniendo en

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ena qe en cualqier posible respesa inerienenchos elemenos sugiero que ese plus de violenciaes relacionado con las deformaciones que la globaizacin ha inroducido en el narcisismo de las difeencias menores ema que raar en el capulo 4.

El ncleo de ese argumeno sobre e l exceso de irasobre el impulso a la degradacin consise en que elnarcisismo de las diferencias menores es ahora muho ms peligroso que en el pasado a causa de la nuea economa de deslizamienos y ransformacionese caraceriza la relacin enre la idenidad y el poder de mayoras y minoras. Dado que debido a lamaleabilidad de los censos de las consiuciones yde las cambianes ideologas sobre la inclusin y laequidad las caegoras de mayora y minora plausiblemene pueden inercambiar su ugar las diferen

cias menores ya no son slo preciados indicios deun yo inciero y por ello dignas de ser especialmene proegidas como podra sugerir el puno de visaoriginal de Freud. De hecho las diferencias menorespodran converirse en las menos acepables puesoque hacen an ms resbaladizo el camino de ida y

vuela ene las dos caegoras. La brualidad degradacin y deshumanizacin que ecuenemene han

acompaado a la violencia nica en los limos quince aos son indicio de nas condiciones en las que ellmie mismo enre diferencias mayores y menores sehaba ornado inciero. En esas circunsancias la ira

y el emor que producen conjnamene lo incompleo y la inceidumbre ya no pueden ser aonadosmediane la exincin mecnica o la explsin de lasminoras no deseadas. La minora es el snoma pero

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el poblema subyacene es la difeencia misma. Demodo que la eliminaci6n de la difeencia misma (noslo s hipeinculaci6n con las difeencias mnors)es la nueva maca disiniva de los acuales narisismos prdatorios a gan escala. Pueso que el poyecode eliminaci6n de la difeencia es bsicamene impo-sible en un mundo de lmies difsos maimoniosmixos lenguajes compaidos y oas pondas in-eelaciones es desinado a poduci un oden deusaci6n capaz de comenza a da cuena de los ex-cesos sisemicos que podemos ve en las noiciasacuales. La psicodinmica y la psicologa social deesa lnea de invesigaci6n cuesiones difciles queebasan mi especialidad demandan un anlisis mspofund que el que peseno en el capulo 4.

Esas ideas aceca de la inceidumbe lo incom-

pleo las minoas y la poducividad de la violenciaen la ea de la globalizaci6n pueden pemiios e-considea el mundo de la guea uilaeal y pepe-ua y de la democaizaci6n a disania eveladas poEsados Unidos en Afganisn e Iak despus del 1 1 desepiembe y el mundo del eo a disancia desaa-

do po A Qaeda y oos cona Occidene en el mis-mo peiodo. Los capulos 2 5 y eon escios enEuopa y en India as el 1 1 de sepiembe duanelos seis meses que siguieon a los aaques al WoldTade Cene y al Pengono. Han cambiado algunascosas desde enonces peo oas no.

Los nuevs ipos de oganizaci6n polica celula(epesenados po A Qaeda) la opci6n cada vez msfime po una guea asimica de violencia conapoblaciones civiles el aumeno de la cica de los

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roisas suicidas ms cienmen la cica dea dcapiacin mediica (de paicipans ms o meos incidenales n scnaios d luchas violenas) noscian a fomulaos una nueva sei d ineogans. Esn elacionados con el oigen de la ia global cona las ezas dl mecado con la naualezaculia del ecine aniameicanismo en muchossiios del mundo con el exao eoo del cuepol paioa del mi de la vcima xpiaoia aos espacios de la violncia de masas.

Pemaseme conclui ese panoama cenndome en la foma de impaco pblico mediico quems ecienemene se ha incopoado a los damase violncia epesenados en nombe de la eliginla nacionalidad la libead la idenidad. Me efieo a los secuesos de vcimas en Iak egisados en

vdeo en algunos casos su decapiacin empleados como heamiena mediica paa ejece una pesin asimica sobe vaios esados ene los cualesse acaba de inclui India po pae de gupos asociads con la milincia en el islam. En cieo modo obseamos aqu un eoo a la foma ms simple de

violencia eligiosa el sacicio aceca del cual ha escio convincenemene Ren Giad (1977). A paide la gabacin en vdeo de la decapiacin de Daniel

Peal en Pakisn poco despus del 1 1 de sepiembe el sacicio pblico se ha conveido n una heamina de xpesin polica ms sismica. Quienes

son secuesados amenazados luego con la decapiacin o dcapiados de hecho no son necesaiamenepesonas icas podeosas o famosas. Ene ellos pojemplo s ncuena un gupo de abajadoes po

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bres desesperados qe emigraron a Irak desde India wai oros pases. Esos inmigranes pobresellos mismos carne de ca6n del rfico globalizado sealan n conrapno de la mere impersonalprovocada por la Ferza Area de Esados Unidos enIrak o por Qaeda en Neva York Nairobi AabiaSad drane esos limos aos. Las decapiaciones elevisadas de Irak represenan n geso ineqvoco hacia n sacrificio ms nimo personal alcombinar vcimas conocidas e idenicables con naceremonia de la mere violena ms pasada deliberada n drama ms seorial de las erzas en armas qe se hallan ders de la mscara. Esas rgicas vcimas son la conrapare involnaria de loserrorisas sicidas de Palesina Irak Sri Lanka. Enesos casos las ideologas generadas por diversas for

mas de desesperaci6n ane la asimera prodcen vcimas mrires como insrmenos de liberaci6n.Esos cerpos singlares son n ineno desesperadopor reinrodcir n elemeno religioso en nos espacios de mere desrcci6n qe han llegado a serinimaginablemene absracos. Podran considerarse

ambin respesas morales por horrorosas qe seana los cerpos orrados maniaados hmillados foografiados de los mslmanes bajo csodia americana en Irak Afganisn.

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2La civilizaci6n de los choques

En nuesa manea de concebi la paz polica y elorden social cieos elemenos concepuales han consado su uga duane lago iempo. Ene ellos seicluyen los siguienes 6picos: que el Esadonaci6nodeno es el dueo exclusivo de las gandes decisiones paa conduci la guea y fima acuedos depaz duadeos; que el oden social en la vida coidianaes un esado de cosas que se da po defeco y es garanizado po la mea ausencia de guea; que exiseuna pofnda difeencia naual ene el desoden enel ineio de una sociedad y la guea ene una sociedad y oa. Cada una de esas vedades ha quedadohecha aicos en el mundo poseio al de sepiem

be. En los pocos aos anscuidos hemos podidove que la guea se ha escapado del conexo del Esadonaci6n y ha sobepasado la l6gica de cualquieipo de ealismo. Asimismo nos enconamos confomas de conico nico que apenas se difeenciande una guea de baja inensidad y que en muchas so

ciedades se han conveido en el esado de cosas uinaio o po defeco; el viejo chise sobe los esallidosde paz es ahoa un hecho social aleccionado. Finalene la mesasis de lo que denominamos ero

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ismo y la veiginosa ifsi6n el mino eoismo en el iscso como nombe e calqie vaiea e acivia aniesao han esibjao decisivamene la lnea ene las geas d la naci6n y lasgeras n la naci6n.

Po speso qe la aleaci6n e esas veaesno lleg6 sin annciase anqe s aibo fe msenigmico e lo qe coespona. De algnas dcaas a esa pate las gueas ineas po ivesos moivos han speao en nmeo a las gueas exernas. La gea en zonas en las qe eside poblaci6ncivil empenida con el pop6sio de elimina la nocin de la gea como aciviad eglada ene combaienes amaos lleva ya cieo iempo ene nosoos. El asesinao en masa e la poblaci6n civilelevado a insmeno oficial qiz po pimea vez

po los nazis se ha conveido en uga comn enlas gueas nicas qe han enido uga en los limos decenios. Y la popagaci6n e las milicias en oos los niveles e la sociead sobe odo en socieaescaaceizaas po n esado bil o dependiene haaancado la bandea el nifome y el fsil aom

ico al Esadonaci6n ocial e mchas egiones delmndo.Sin embago el 1 1 de sepiembe sucei6 algo

qe llev6 esos pocesos gauales a n pno cico ynos oblig6 a econsidea nesos pesupesos mspeciaos sobe la gea la paz y la segia po

movida po el Esao. El aaqe a las oes gemelasha sido analizao ms pomenoizadamene qe eliss de James Joyce y con la misma vaiea e pnos e visa. Peo my pocos negan qe al aaca las


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raas de la besia al inroducise a plena luz del

a deriba los Budas de Wall See se decla unvo ipo de guea. La novedad no esida en la asira ecnolgica aunque fue sopendene en ese

speco; ni en la audacia de la empesa de aeoizaa megalpolis enea desaa el caos en los sosiados mecanismos de la capial global; ni debe ves ampoco en el ineno de poduci eo medianen fulminane colapso ecnolgico.

La novedad consisi en el afn de inaugua unauea definida slo po un enemigo el enemigoera Esados Unidos. Adems de consiui un acod guea sin fima una suee de pesadilla dadasa una monsuosa foma de venganza po odos losguiones de Hollood sobe eo ubano eoisas abes aaques de ezas exanjeas oos po

el esilo el 1 de sepieme povoc que hubiea queomase en seio la idea de una guea sin auo.Tampoco se aaba de una guea empendida po

una feza innominada. Ea una guea empendidapo un nuevo ipo de agencia. Una agencia que no esaba ineesada en funda un Esado en oponese a

ningn Esado en paicula ni en ningn ipo de elacin ene esados. Se aaba de una guea conaEsados Unidos peo ea ambin una guea cona la idea de que los esados son la nica aleaivaposible. Los aaques del 1 1 de sepiembe feo unaco masivo de casigo social una suee de ejecucin

pblica masiva una muee bajo piedas fuego escombos diigida a casiga a Esados Unidos po susfasas moales en odo el mundo en paicula en elundo islmico.

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Es esa cualidad moral puniiva y pedag6gica delos aaques del 1 1 de sepiembre lo que ha llevado a algunos analisas a volverse hacia el famoso modelo delchoque de civilizaciones de Samuel Huningon ( 1 99)aunque muchos ms han cuesionado la perinenciadel mismo. Pero anes de manifesar nuesra discrepancia con l permasenos apunar qu aracivosoece despus del 1 1 de sepiembre. El modelo seala que en la acualidad hay una nueva clase de indignaci6n moral vigene en el mundo una nueva dispo-sici6n a ealizar acos de guerra exemos en nombrede ideas precisas de pureza moral y reciud socialy sin duda sea una ingenuidad negar que exisenvnculos impoanes enre fuezas sociales del mundo islmico y los sucesos del 1 1 de sepiembe.

Hay muchas razones nada riviales para ir ms

all del modelo de Huningon y me refer a ellas enel capulo De momeno quisiera realiza s6lo unaspocas obseaciones. En el mundo islmico abundanlos debaes inernos . No es el menos impoane deellos la cuesi6n de qu esados islmicos son consideados esados jusos por su propio pueblo y cules

no. Y muchos esados islmicos son raados como ilegimos por varias coaliciones que desean aacar a esados no islmicos sobe odo Esados Unidos y GranBeaa. Mienras que Al Qaeda fue el principal responsable de los aaques del 1 1 de sepiembre y Osamaben Laden era el cerebo ders de esa red ambin

paece claro que l represena una variedad muy precisa de disenso moral y escaol6gico denro del mundo islmico y de los mundos rabe saud y sun. Puede que sa sea una guerra en nombre del islam pero

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auoridad deriva de fenes mucho ms idiosincras denro del mundo islmico.

Reornar luego a las razones que me inducen ansar en nosoros mismos como seres que viven ena cilizaci6n mundial de choques anes que en unhoque de civilizaciones; ahora deseo razar el maro de la discusi6n a parir del examen de la reacci6n Esados Unidos ane los episodios del 1 1 de sepiembre.

rai6n d stados Unidos

Curiosamene hasa que el Gobieo de EsadosUnidos reaccion6 ms o menos una semana despusde recuperarse del impaco de los aaques no comen

zamos a slumbrar algo de la morfologa de la nuevaguerra y del ipo de conico que represenaba. Seha escrio mucho sobre los aneos de los medios esadounidenses y de los 6rganos del Esado en buscade las palabras apropiadas para describir a ese enemigo invisible y desconocido. Ahora podemos mirar

ars y elogiar el esfuerzo inicial para eviar un lenguaje explciamene racisa para no exacerbar senimienos anirabes para resisir la enaci6n de idenificar el mundo islmico enero como el enemigo.De hecho Condoleezza Rice a la saz6n consejera deSeguridad Nacional declar6 desde el comienzo que

o se raaba de un choque de civilizaciones (rechazando as claramene a Huningon) . George Bush yoros miembros desacados de su Gobierno se sumaron a la lucha desesperada por poner nombre al


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enemigo y lenamene el proceso de denominaci6n feomando forma. A Qaeda, Afganisn y Osama benLaden emergieron durane las dos semanas poseriores al 1 1 de sepiembre como los nombres propioscon los cuales relaar la hisoria del aenado perperado conra el pueblo de Esados Unidos y modelaruna jusificaci6n de la poderosa reacci6n miliar quese desencadenara poco despus.

No es se el lugar para analizar la impresionaneguerra area desencadenada por Esados Unidos yGran Breaa conra Afganisn, los alibanes y elmando principal de la red mundial de A Qaeda. Mucho se ha hablado sobre la exraa ayuda humaniaria consisene en arrojar en paracadas sacos de comida con bombas. Mucho se ha dicho ambin sobrela irona de omar un pas que los alibanes haban

reducido a escombros y converir sos en polvo. Y sobre el enorme error que se inrodujo en la deasadapoblaci6n civil de Afganisn, que ya haba sido reducida a la rina psicol6gica por los alibanes. Y enel escenario mundial se ha sealado con raz6n que elconraaaque sobre Afganisn posibili6 que se des

perara la mquina de guerra dormida de EsadosUnidos, permii6 que un lder recin elegido y en suprimer mandao asumiera el papel de salvador delmundo civilizado y provoc6 que diversos personajesvolvieran a inerprear los drams morales de Suezla guerra a y la guerra del Golfo conveienemene

coplados en el drama giganesco de Gulliver enfrecido. Una vez ms el mundo se conviri6 en una lis de pridarios y deracores de ses y noes de seguidores y oposiores de lo que se ransform6 en los

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ombres de un enemigo ominoso y global: errorrrorismo errorisas.

La guerra conra Afganisn a no finalizadaompleamene e lo que podramos denominar unaerra de diagn6stio o incluso una guerra forense.ue una guea calculada para hacer descubrimienos. diagn6sico ms imporane que la guerra raabae realizar consisa en saber quin era exacamene enemigo: qu era A Qaeda? quin era Osamaben Laden? quines eran en realidad los alibanes?ue sa ambin una guerra de diagn6sico en orosenido. Se propona idenificar a los paridarios deEsados Unidos y del Reino Unido. Europa y Jap6ns vieron forzados a declarar su lealad y muchos cuyaposicin no esaba claramene denida uvieron queainearse del lado de Esados Unidos sin imporar

cles fueran sus reseas. Se ra6 de un plebiscioconvocado por la poderosa mquina de guerra de Esados Unidos en el que las absenciones no esabanpermiidas. Muchos de esos rasgos ambin caracerizaron la poseror guea de Irak aunque en ese limo caso la preguna forense que precipi6 los acone

cimienos uvo que ver con las armas de desucci6nmasiva.Y pueso que el enemigo fue denominado red

errorisa global l mismo vinculado mediane oscuros mecanismos con oras redes an6nimas similares cuyos enculos se exendan por odo el mundo

arios esados pudieron idenificar con esa denominaci6n a sus propios disidenes acivisas aiesadoy minoas violenas. Resul6 ser un nombre con unee apoyo a escala global. Y la mayora de los esa

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dos reconocieron qe se raaba de na denominaci6n con infinias posibilidades para la maniplaci6ndenro de las propias froneras. India no fe na excepci6n.

Sin embargo la principal raz6n para esa mesra abrmadora de apoyo a Esados Unidos por pare de los gobiernos de odo el mndo reside en qeese pas adviri6 qe la gerra desaada el 1 1 de sepiembre era sobre odo na gerra enre dos ipos desisema ambos de alcance global. El prmeo podracaracerizarse como vrbdo, el segndo como lula Los esadosnaci6n modernos reconocen s perenencia com al mndo veebrado y como los limos dinosarios advieen qe se encenan en nalcha desesperada por la spevencia en cano formaciones globales.

istma lular verss sistma vrtbdo

Para comprender la disinci6n ene los sisemasde mndo veebrados y cellares necesiamos dar n

paso ars y reexionar sobre los procesos qe hemosdesignado con el rmino globalizac6n . Anqe haynmerosos debaes en oo a la medida en qe laglobalizaci6n ha desdibjado los conoos del sisema de esadosnaci6n ningn analisa seio de la economa global de las limas res dcadas podra nega

qe calesqiera qe fesen las ficciones y conradicciones iniciales del Esadonaci6n sas se hanagdizado debido a la inegraci6n ms profnda delos mercados mndiales y a la amplia propagac6n

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e ideologas de mercadoecnia a escala mndialen especial desps de 1989. Tampoco ha sido simlemene na cesin de balanza comercial en relain con el PIB. Se raa de n asno insicionale como mchos esdiosos han mosrado sponeambios prondos en la naraleza de insicionesacionales como los bancos cenrales los cales enchas sociedades ejecan de hecho policas globales denro de marcos nacionales. Han aparecidocerpos compleos de derecho inernacional siseas conables y proocolos de ecnologas de la informacin ransonerizos mchos no conocidos nisados fera de las elies ecnocicas especializadasconcebidos para dominar las formas complejas delrfico econmico global.

La idea de na economa nacional siempre porosa

en el mejor de los casos (y no ms vieja qe el economisa alemn Friedrich Lis 1 789 1 84) ahora parece ms a mendo colaboradora y sericial qe anoma o aodeerminada. Solamene las economasms poderosas del mndo parecen nacionales en algn senido impoane y la ms grande de odas la

economa de Esados Unidos si no es global no esnada. En Eropa exise n amplio consenso en canoa qe la mayor jsicacin de la Unin Eropea esel hecho inexorable de qe Eropa debe omar pareen el jego global o corre el riesgo de perderlo odo.Los japoneses no del odo preparados para globali

zarse en el nevo orden de cosas de la noche a lamaana se encenran en na economa adormecidainmne inclso a los diversos shoks macroeconmicos.

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Hay menos acuerdo sobre la polica y la culuraemergenes en ese mundo hiperglobalizado. Sin embargo diversos pensadores esn debaiendo sobre lacrisis del Esadonacin sobre el fuuro de la soberana sobre la vabilidad de los esados que no inegranferes coaliciones regionales. Esos debaes que ienen su conraparida en discursos policos y movimienos de masas en odo el mundo a meudo asumen la forma de nuevos miedos a bienes o lenguajesforneos a emigranes o inversiones exrajeras. Muchos esados se encuenran arapados enre l ecesidad de escenicar el drama de la soberana nacionaly simulneamene la proeza de una aperura calculada para inciar la llegada de los benecios del capial occidenal y de las mulinacioales.

La prdida viualmene complea hasa de la

cin de una economa nacional de la que hubo alguna evidencia en la poca de los esados eres socialisas y la planicacin cenral deja ahora el campoculural como el principal escenario donde represenar fanasas de pureza auenicidad oneras y seguridad. No es ninguna soresa que en el mundo en

desarrollo la muee o la implosi de ecoomas nacionales poderosas (debido al crecimieno de las inversiones exranjeras fugaces al desaollo de los mecanismos y procesos econmicos ransacionales yal aumeno de imperios econmicos esablecidos enparasos fiscales que escapan a cualquier forma de

conabilidad a escala nacional) haya ido acompaadadel ascenso de nuevos fundamenalismos mayoriarismos e indigenismos ecuenemene con un marcao sesgo enocida. El Esadonacin ha sido progre

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sivamene reducido a la ficci6n de su enia como l-imo recurso culural sobre el cual puede ejercer undominio pleno.

Y por desconado hay ora facea de la acualdimica de la globalizaci6n que ha sido adveridaor un amplio nmero de analisas : la creciene producci6n de una desigualdad cada vez mayor enrenaciones clases y regiones. Ese aumeno de la desigualdad independienemene de los debaes de losexperos sobre sus relaciones exacas con los mercados abieros y los fujos de capial globales de alavelocidad en muchos pases es considerado popu-larmene una consecuencia direca de la fuerza irresisible del capialismo global y de su incuesionado lder nacional Esados Unidos. Se halla fuera deduda que ese vnculo manieso enre las economas

nacionales implosionadas el capial financiero de-senenado y el papel de Esados Unidos como pre-bse de las ideologas de los negocios el mercadoy el lucro ha creado una suere de nueva guerra aafeciva enre quienes se idenifican con los perde-dores de ese nuevo juego y quienes se idenican con

el pequeo grupo de ganadores en paricular Esados Unidos. La sensaci6n ampliamene observadaincluso enre quienes deploraron la brualidad del1 1 de sepiembre de que hab cado sobre EsadosUnidos una suere de jusicia sin duda se encuenraanclada en la indignaci6n moral provocada por la

6gica de la exclusin econ6mica. Hay ms cosasque decir respeco al crecimieno del odio global aEsados Unidos y reornar sobre la cuesi6n en elcapulo .

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Es digno de notarse que los nuevos fujos de dine-

ro, armas, informacin, personas e ideologas a tra-

vs de las froneras nacionales han generado formas

de solidaridad qe exisen en el mismo plano poltioque aqellas qe radicionalmene monopolizaba elEsadonacin. Por ejemplo mchos ipos de comni-dades diaspricas cenan con lealades fundamena-les enre poblaciones qe peden exisir ambin enel inerior de varias oneras nacionales. Debaes in-ensos sobre cesiones clave como la gerra la pazla idenidad y el progreso ienen lgar enre ciber-comnidades qe fncionan ms all de los lmiesde la nacin y represenan diversos ipos de solida-ridad: clral profesional circnsancial opor-nisa. Los nacionalismos violenos ambin prosperanen el mbio del ciberespacio pero de odas mane-

ras complican la solidez de los vnclos enre espa-cio lgar e idenidad. Exise de hecho na comni-dad denominada eelam.com (Jeganaham 1998) qeagrupaa los tamilesqe han escapado de la violencia

en Sri Lanka desde la dcada de los aos seena. Lasimaginaciones colecivas y las colecividades imagi-

nadas en la era de la ciberecnologa ya no son slodos caras de la misma moneda; ms bien con fre-cencia se ponen a preba y se rebaen las nas a lasoras.

Se ha invocado convincenemene la imagen dela red para aprehender las formas policas y sociales

emergenes en ese mndo inerconecado y ecnolgi-co; lo ha hecho en paiclar Manel Casells (199)pero ambin mchos grs de empresa fuurlogosy oros. El mndo es ahora claramene conecado

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por mltiples circuitos a travs de los cuales el dine-ro, las noticias, las personas y las ideas fluyen, se en-

cuentran, convergen y se dispersan de nuevo. Y sinembargo, la imagen de la red parece demasiado ge

neral para la realidad que intenta captar.

La idea de un mundo celular tal vez sea ligeramen-e ms precisa. La oposici6n, derivada de la biologa,

enfrenta formas celulares y formas vertebradas y,como todas las analogas, no trata de ser completa o

perfecta. El sistema moderno de los estadosnaci6n

es el caso ms ostensible de una estructuravertebda,

pues, aunque las naciones se desarrollan apondoseen sus historias de diferencia y singularidad, el siste-

ma de los estadosnaci6n funciona slo gracias alsupuesto subyacente de un orden inteaional garan-

tizado por una variedad de normas, ente las que se

encuentran las normas de la guerra misma. En la ac-tualidad este orden vetebrado es simbolizado no slopor las Naciones Unidas, sino tambin por un vasto ycreciente cuerpo de protocolos, instituiones, trata-

dos y acuerdos que pretenden garantizar que todas

las naciones acten segn principios simtricos en

sus relaciones mutuas, sea cual fere su jerarquaen cuanto a poder o riqueza. El sistema de los esta-

dosnaci6n se ha bas ado desde el comienzo en un sis-tema semi6tico de comunicaci6n y reonocimiento

compuesto por elemetos simples como banderas, se-

lls postles y lneas areas, y po sisteas mucho

ms complejos, como los consulados, bajadoesy otras formas de reconocimiento uto. Tles sistemas vertebrados, entre los cuales el de los estadosna-

cin quiz sea en proporci6n e ms aio y extenso,

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no son necesariamene cenralizados o jerquicos .Sin embargo, esn fndamenalmene concebidos sobre un conjuno limiado de normas y seales regulaivas bien coordinadas . No resula difcil advei porqu el Traado de Wesfalia y los escios de an sobre la simera y la reciprocidad morales vieron la luzcon ana proximidad en el iempo y el espacio.

El sisema del capialismo global no encaj exacamene en el conrase ene los sisemas veebado celular. De un lado, se tata de un sistema clmen-

e veebado en la medida en que descansa sobe unavasta red, aticulada como una suete desistema ner-

voso, de comunicaciones, anspoe, cdio a disancia y ansacciones scales coodinds. Ese asgo dela coodinaci6n siempe ha fomado pae de l hisoria del capialismo indusial, que como mnimo

equera unos sisemas fibles de cdio e inercambi moneaio. El capialismo modeo mbies veebado en la medid en que demnd l plicabilidad genealizada de deeminados ooolos legales, conables, fiscales, de supeisin y e seguidad;paraconseguilo, se ha seido nomlmente d

convenios ene esados sobeanos fomlizdos en divesos acuedos y raados. De ese modo, ls esrucuas veebdas del sisema de los esosnci6n ydel cpial indusrial modeno se han soldo y lhisoia de ambs mues obvs onexiones. Esa esucura com nunca esuvo, o spueso, libe e

ensiones y conradicciones; no obsane, y e pecepible en la economa olia globl en los siglos y I en los impeios maimos sgidos en el oese el sur de Europa.

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Sn embargo, por ora pare, a medda que desde elsiglo XIX el capalsmo ha evoluconado se ha vuelo, debdo al desarrollo ecnol6gico, ms sofscado manejable, a medda que sus ecnologas se han hecho ms modulares m6vles su componene nancero se ha lberado progresvamene de una relac6ndreca con la ndusra la manufacura, el capalsmo ha comenzado a desarrollar gradualmene cerosrasgos celulares que son crcales. Esos rasgos se hanhecho cada vez ms vsbles en la era de un capalsmo que ha recbdo dversas denomnacones: posfordsa, desorganzado, flexble o posndusral . En esa era, caracerzada por la ransformac6nde las corporacones mulnaconales en ransnaconales ahora en corporacones globales, la recombnac6n a ala velocdad de los facores de produc

c6n ha modfcado la geografa del capal hahecho que sus movmenos su perl naconal seandfcles de precsar. Esas caracerscas, evdenessobre odo a par de los aos seena, han sdo reejadas en numerosas clases de lemas modelos organzavos que buscaban capurar las acivdades

m6vles, recombnaes, oporunsas desnaconalzadas de muchas corporacones globales . En las dcadas oserores a los aos ochena, esos rasgos celulares se han acelerado debdo al desarrollo de lasnuevas ecnologas de la nformacn al ncremenoapabullane de la rapdez las proporcones de las

ransaccones fnanceras, lo cual ha expueso a losmercados nanceros naconales al resgo de crss sbas e nensas. Ese proceso se ha desplazado desdeMxco haca el ese de Asa Argenna, un pas n

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mensamene ico qe se vio edcido a la anaqaecon6mica en nas pocas semanas. Pases como India han admiido abieamene qe s elaiva inmnidad especo a cisis como sas se debe al menosen pae a s gil inegaci6n en la economa global. Sin embago se aa de n juego difcil: vaiospases del ica sbsahaiana nos muesan las consecencias desasosas de se demasiado maginal enlos pocesos del mecado global.

El esado acal de las compaas globales delos mecados en los qe opean mesa en vaiossenidos na pesonalidad dividida qe de n ladose asemeja descansa sobe los asgos veebadosdel sisema del Esadonaci6n , de oo sie ambincomo laboaoio paa nevas fomas de cellaidaddesvinclaci6n aonoma local.

Ese doble cae del capialismo global en laea de Inee es lo qe nos pemie enende mejola naaleza cella de las nevas edes eosas .Conecadas peo no diigidas veicalmene; coodinadas peo noablemene independienes; capacesde da espesas sin cona con una esuca cen

alizada de comnicaci6n; boosas en sus pincipales lneas de oganizaci6n peo con la claidad delda en s esaegia efecos celulaes esas oganizaciones dependen osensiblemene de cieos ecsos cciales como las ansfeencias de dineo naoganizaci6n ocla paasos scales medios no o

ciales de enenamieno movilizaci6n lo cal ambin caaceiza en vaios niveles el fncionamienodel mundo capialisa. En efeco las zonas ms gises del mndo de la banca las finanzas se encen


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ran en evidene complicidad con las acividades deas redes de eoismo inernacional. La campaaasiva paa persegui y congela los acivos de esasorganizacines mediane ecusos del sisema bancario esaegias scales y la aplicaci6n de la ley especialmene en Esados Unidos es un esimonio claode la gavedad de ese vnculo. Despus de odo exiseciea anidad ene las operaciones ealizadas feade balance de una copoaci6n gigane como Enonque defaud6 a miles de abajadores e invesoes ylos negocios bajo cueda de las edes eoisas aceca de los cuales hemos odo habla ano. En un senido geneal los flujos globales de amas mano deobra dogas y piedas peciosas se basan con ecuencia en sisemas de comunicaci6n de ala ecnologa yen la disposici6n de medios de violencia independien

emene del Esado.

sa es la zona en la que la violencia del eoismo y la independencia de divesosujos globales ilcios machan junas.

Sin embago la celulaidad que caaceiza ano al capial como al eoismo ineacionales ieneoros aspecos y en el capulo sobre la globaliza

ci6n de las bases me efieo a los modos en que algunas oganizaciones no esaales han esado empleandolos medios de la celulaidad paa cea nuevas solidaridades y nuevas esaegias a n de esisi el podedel Esadonaci6n y de las copoaciones globales.Se aa de fomas celulaes u6picas que pesiguen

fines como la equidad la anspaencia y la inclusin. No es posible hallase ms lejos de los valoes yaciudes del erorismo. Sin embago ambin ellosjemplican la nueva l6gica de la celulaidad.

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Ni que decir iene que en los hechos resula absurdo hablar del final del Esadonaci6n. Pero si examinamos con deenimieno la proliferaci6n de formas celulares que cercan y cuesionan la moralidadverebrada del sisema moderno de esadosnaci6nparece que exise a la vez dependencia muua y anagonismo enre esos dos principios de vinculacin yorganizaci6n policas a gran escala. La complemenariedad y la diferencia enre los sisemas veebradoy celular nos oecen una manera esucural de exa

minar la crisis del Esadonaci6n en la era de la globalizaci6n y nos compelen a adveir que las formas deerrorismo global de las que an conscienes somosdespus del 1 1 de sepiembre son s6lo ejemplos deuna ransformaci6n amplia y profunda en la morfloga de la economa y de la polica globales.

Esa amplia ransformaci6n cuya cara violenay asimica es el errorismo global podra considerarse una crisis de circulaci6n. Es decir podra verse como una crisis producida por lo que en mi rabajo anerior denomin dislocaciones enre disinosipos de flujos (ujos de imgenes de ideologas de

bienes de personas y de riqueza) que parecen caracerizar la era de la globalizaci6n (199). Tales dislocaciones son provocadas en buena medida por modalidades y medios de circulaci6n que operan condiferenes rimos en el espacio y en el iempo. En ocasiones consideradas como ujos globales dislocados

producen varios ipos de conradicciones y ensioneslocales. Pueso que odas esas ensiones concieena procesos de flujo global que no esn coherenemene sincronizados pueden calificarse como crisis

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e circulaci6n. Esa denominaci6n nos recuerda quea globalizaci6n es esrechamene vinculada a losovimienos del capial financiero que arl Marxfue uno de los primeros en adverir que la circulaci6n en especial la del dinero en relaci6n con la mercanca era vial para el funcionamieno las conraicciones del capial. En la acualidad basndonos enesa aporaci6n del maismo podramos admiir quea 6gica e la circulaci6n se ha diversicado dislocado cada vez ms en su mbio espacia en su legibiiad semi6ica en su velocidad rimo de movmieno en los caminos por los que se mueve o en los queva creando para moverse.

Reoando a la idea siempre gil de un mundoe economas nacionales podramos caracerizar lapoca acual de la globalizaci6n (impulsada por el ri

pe moor del capial especulaivo los nuevos insrumenos financieros las veriginosas ecnologas dea informacin) como generadora de nuevas ensionesenre el mpeu desenfrenado del capial global pormoverse sin resricciones ni lmies la fanasa odava reinane de que el Esadonaci6n cusodia un espa

cio de soberana econ6mica. Esa nueva crisis de circuaci6n (ms concreamene una crisis de las relacionesdislocadas enre diferenes caminos formas de circulaci6n) es el vaso paisaje conra el cual se recoranahora las ensiones enre formas veebradas celulares. Esa pugna ambin puede observarse en la ic

ci6n enre las formas de circulaci6n la circulaci6n deformas en la era de la globalizaci6n.Aunque esas formas se hallan inseparablemene

nrelazadas a la vez conienen una propensi6n a en

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enarse. Pero no se raa de n choqe enre docrinas clras o civilizaciones sino enre diferenesmodos de organizaci6n a gran escala qe aq he denominado cellar y verebrado en el seno de la acalcrisis de circaci6. Osama ben Laden y Al Qaedason nombres aerradores de ese choqe qe enraamchas cosas ms qe la cesi6n del errorismo.

gua como rdn

Achille Mbembe (200) nos ha oecido n pnode visa ilminador al sosener qe en las sociedadesen as qe la vida diaria se caraceriza por la coidianidad de la violencia fsica el conico miliarizadoo la balidad somica ejercidos en nombre de iden

idades colecivas ya no podemos pensar en na simpe oposici6n enre naraleza y gerra por na pare y vida social y paz por la ora. Mbembe nos inviaa imaginar n paisaje ms errible en el cal el orden(la reglaridad la predecibilidad la rina y la coidianidad misma) se encenra organizado en oo

al hecho o la probabilidad de la violencia.La polica global relaiva a la imagen del errory del errorismo ras el 1 1 de sepiembre nos obliga aacepar la inviaci6n de Mbembe de na manera algodisina. Se ha derribado la divisin enre las esferascivil y miliar. Las acciones de varias redes y agenes

errorisas raan de infndir emor en la oalidad dela vida coidiana de la poblaci6n civil. Dichas accionessponen n mndo en el qe los civiles no exisen.No se raa simpemene de na gerra oal como


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s que han librado esados poderosos en diferenesomenos de la hisoria se raa de una guerra coi-iana la guerra como una posibilidad de cada daibrada precisamene para desesabilizar la idea dee para alguien pueda exisir lo oidiano fera delspacio el iempo de la guerra. A eso el errorismosuma el elemeno de la impredecibilidad la clave paraproducir un emor consane. Los esados que se in-volucran en esa suere de esraegia con respeco a supropia poblaci6n o a oras son correcamene consi-erados como implicados en el errorismo.

El error produce sus efecos borrando sisemi-mene los lmies enre los espacios iempos de laguerra la paz. Se esfuerza ambin para disazarsus principios de organizaci6n movilizaci6n. Y seconsagra sobre odo a diezmar el orden basado en la

paz o la ausencia de violencia. El error en nombrede cualquier ideologa de equidad liberad o jusi-cia raa de insalar la violencia como principi regu-aivo fundamenal de la vida coidiana. Eso es loerrorfico del error incluso ms al de sus rau-mas corporales de su promiscuidad espacial de sus

dramas de auosacrificio de su rechazo de n hu-manismo reproco. Terror es el nombre legimo deodo ineno de reemplazar la paz por la violenciacomo pilar de la vida coidiana. La emergenci es suruina; su norma las normas excepcionales e vio-lencia ransgresi6n.

El ipo de red de error globalizada que ahora ob-seamos en organizaciones como A Qaeda aade aesa l6gica la capacidad de globalizarse a ravs dena organizaci6n celular. De modo que esas redes

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poducen una doble sensaci6n de nusea e inceidumbe. Taan de evoca la elaci6n ene paz yvida


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3Globalizaci6n y violencia

La globalizain es fene de debae asi en odaspaes. Es el nombe de una nueva evoluin indusial (impulsada po podeosas enologas de la infomain y la omuniain) que apenas ha omenzado. Debido a su novedad pone a pueba nuesosreusos lingsios paa ompendela y nuesos ecusos polios paa gesionala. En Esados Unidos y digamos que en los diez pases ms ios delmundo la globalizain es una palaba de moda posiiva para las elies empesaiales y sus aliados policos. Peo paa los inmiganes las pesonas de olo yoos maginados (los denominados el Su del Noe) epesena una fene de inquieud elaiva a la

inlusin el abajo y una maginan a ms pofnda. Y la inquieud de los maginados omo siempe en la hisoia del hombe onsiuye un poblemapaa las elies. En los esanes pases del mundo lossubdesaollados y vedadeamene indigenes hayuna doble peoupain: el emo a una inlusin eje

cuada de foma daoniana y el emo a la exlusinpues sa paee la exlusin de la hisoia misma.Esemos en el Noe o en el Su la globalizain

consiuye un eo paa nuesa heamiena ms po

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derosa para adminisrar a novedad recurrir a a hisoria. Podemos hacer odo lo posible por considerara globalizacin simpemene como una nueva fase (yuna nueva faz) de capialismo del imperiaismo delneocoloniaismo de la modernizacin o de desarro-ismo. Y hay algo de vioencia en esa cacera de a ana-oga que nos permia domesicar la besia de a gobaizacin inroducindoa en la casa prisin (o el zoo)de lenguaje. Sin embargo ese movimieno hisorizan-e (a pesar de su legiimidad cnica) es condenadoa acasar jusamene cuando se propone dar cuenadel aspeco de la globalizacin que resula inquiean-e debido a su novedad. Recurir a los archivos paraconsular los sisemas pasados de organizacin deundo los viejos imperios las formas conocidas queasumi el poder o el capial puede en efeco ayudar-

nos pero slo hasa ciero puno. Ms all acecha lainuicin de muchos pobres (y de quienes en el mun-do esn de su lado) de que la globalizacin presenaagunos desafos nuevos que no pueden raarse conla auda de la hisoia ni siquiera la hisoa de genemalvada y de infames conquisadoes del mundo. Esa

vaga inuicin se halla en el cenro de cieras alianzasvacilanes y dilogos inseguros en oo a la globali-zacin incluso en las calles de Seale Paga Washing-on D.. y oras muchas regiones menos cinemao-grcas.

Pero en qu se fundamena esa novedad y por

qu anos inelecuales cricos no consiguen apre-henderla mejor? En mi opinin exisen res facoresinerconecados que hacen de la globalizacin un fe-nmeno dicil de comprende desde la perspeciva

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as hisorias precedenes de Esado y de mercado. primero es el pape que desempea e capia fianciero (sobre odo en sus formas especulaivas) enla acua economa del mundo es ms veloz ieneayor capacidad de muliplicacin es ms absraco ms invasor de las economas nacionales de lo queams ha sido en la hisoria. Y a causa de sus vncuos laxos con a manufacura de bienes dems formas de riqueza produciva se convere en una sueed caballo conducido por un jine que en aparienciacarece de esrucuras. La segunda razn se relaciona con la peculiar ferza de la revolucin de la informacin en sus modalidades eecrnicas. La ecnologa elecrnica de la informacin forma pare de losnuevos insrumenos financieros muchos de los cuas ienen capacidades cnicas que se encuenran

caramene por deane de los proocolos que debenrgularlos. De modo que sea verdad o no que el Esadonacin es desaareciendo nadie puede argumenar de forma convncene que la idea de una economanacional (en el senido expresado por primera vezpor el alemn Friedch Lis) conine siendo un pro

yeco fcilmene sosenible. As que por aadiduraa soberana nacional resula en la acualidad un proyeco inciero debido a razones cnicas especficasde un nuevo ipo a una nueva escala. En ercer ugar las nuevas miseriosas y casi mgicas formas deiqueza generadas por los mercados nancieros elec

rnicos parecen direcamene responsables de la brecha creciene enre ricos y pobres incluso en los pases ms ricos del mundo.

Ms impoane an es que los deoeros indesci

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ables del capial nanciero son reproducidos por losnuevos ipos de emigraci6n ano de las elies comode los prolarios que crean ensiones sin precedenesenre idenidades de origen idenidades de residenciae idenidades de aspiraci6n para muchos inmigranesdel mercado de rabajo mundial. as oneras nancieras fciles de franquear las idenidades m6vilesy la celeridad de las ecnologas de comunicaciones yransacciones generan conrovesias denro y msall de los lmies de las naciones que conienen nuevas posibilidades paa la violencia.

os problemas de la globalizaci6n y de la violencia admien varios modos de aproximaci6n. Se podraomar Esados Unidos y pregunar si el crecimieno dela indusria penienciaria (y de lo que en ocasiones sedenomina el esado carcelario) es vinculado con la

dinmica de las economas regionales que esn siendoalejadas de oras formas ms humanas de empleo yde creaci6n de riqueza. Se podra considerar Indonesia y pregunar por qu se regisr u cecimienoenorme de l volencia inaesaal enre poblacionesindgenas e inmiganes cuyo desplazamieno ha sido

promovdo por el Esado. Se podra examinar Sri anka y pregunar si exisen vnculos reales enre la incesane guerra civil y la dispora gobl de los amilescon consecuencias como eelam.com un ejemplo decibersecesi6n (Jeganaham 1 998). Uno podra preocuparse por los radicionales movimienos secesionis

as desde Chechenia y Cachemira hasa el Pas Vascoy muchas zonas de ica y egunar si su volenciaes esricamene end6gena. abra obsear Palesinay pegunar si la pronda violencia del colonialismo

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eo se halla ahoa an nimamene vinculada aos medios de comunicaci6n masivos y a la ineen6n global que es condenada a su insiucionalizci6n pemanene. Uno poda siuase en osovoo en Iak y pegunase si el humaniaismo violeno de los aaques aeos de la OTAN es la lima foa de epesalia bblica a cago de los dioses amadose nueso iempo. 0 bien uno poda idenificasecon el puno de visa de las minoas aeadas deuchos mbios nacionales como Palesina Timoo Siea Leona que a menudo viven en campos deeenci6n que dicen se vecindaios o campamenos de efgiados y peguna po la volencia del desplazamieno y del ealojaieno.

Tascendiendo odos esos lugaes y fomas de volencia se encuenan algunos facoes globales ele

anes. La ceciene y oganizada violencia cona lamuje conocida en el gimen de los alibanes ambin se edencia con claidad en muchas oas sociedades que inenan aoja la pimea pieda comoEsados Unidos donde los episodios de violencia domsica suceden con ecuencia. La movilizaci6n de

ejcios de adolescenes sobe odo en ica peoambin en muchos oos pases en los que ienen uga gueas inaesaales poduce veeanos de gueaque dicilmene han alcanzado la edad adula ni mucho menos conocen la paz. El abajo infanil comofoma de violencia globalizada cona los nios ya es

suficienemene penoso peo el hecho de abaja inegando milicias civiles y bandas miliaes es una manea paiculamene eible de inducci6n a la vioencia a una edad empana. Y luego esn las fomas

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ms insidiosas de violencia suidas por una muliudde pobres del mundo obligados a padecer desplazamienos a causa de desmesurados proyecos de embalses o de erradicaci6n de viviendas insalubres. Enesos casos su experiencia de los efecos de la policaglobal de seguridad de los esados significa converirse en vcimas de embargo econ6mico violencia policial movilizaci6n nica y prdida de sus empleos. Elcierre de la pequea indusria en Nueva Delhi duranela dcada pasada es un vvido ejemplo de colusi6n enre discursos ecologisas alisas la polica corrupade la ciudad y la lucha desesperada por un empleo yun medio de vida. sos son algunos de los moivospor los que en ocasiones los pobres se someen por smismos a la nima violencia de vender pare de sucuerpo en los mercados globales de 6rganos de ven

der la oalidad de su cueo realizando un rabajo domsico en pases inseguros y de oecer a sus hijas ehijos como rabajadores sexuales y para efecuar oraacividades que dejan una marca para siempre.

Permaseme por un momeno dar un paso arsy considerar algunas objeciones a esa lnea de pensa

mieno. Qu relaci6n iene el calogo que acabo deenumerar con la globalizaci6n como al? No se raasimplemene de un capulo ms en la hisoria delpoder la codicia la coupci6n y la exclusin que ambin podemos hallar remonndonos hacia ars enla hisoria del ser humano ano como deseemos? Yo

no lo creo as. Muchos de los ejemplos que ms arriba he ciado esn relacionados de un modo paricular con ransformaciones de la economa mundial aparir de 1970, con deerminadas baallas por el indi

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nismo y la soberana nacional libradas en la gerranre niversalismos en compeencia como la liberad mercado la dmocracia y los derechos los calessncillamene no operaban de la misma manera enriodos aneriores. Sobre odo los nmerosos ejem-os qe he oecido concerdan con el dao empricos imporane de la macroviolencia de las limasos dcadas: el marcado crecimieno de la violencianraesaal ene a la violencia ineresaal. As losapas de los Esados y los mapas de la gerra ya nos corresponden con la anerior geografa realisa.Y cando agregamos a eso la circlacin global dermas drogas mercenarios mafias y la resane pa-rafrnalia de la violencia resla difcil manener elsnido local de los ejemplos locales.

De odos esos conexos de violencia consideran-

o desd los ms nimos (como la violacin la mi-cin del cerpo y el desmembramieno) hasa loss absracos (como la emigracin forzada y la con-rsin en minora legal) el qe presena ms difi-lades es la agresin exendida por odo el mndo aodo ipo de minoras. En sa cesin odo Esado

como oda familia) es desdichado a s manera. Peropor q esamos conemplando n implso genocidaonra las minoras viralmene exendido por odol mndo se rae de minoras nmricas clraleso policas o qe se hayan conveido en minoras porarecer del origen nico o de la docmenacin apro-

iados o por ser la encaacin visible de algna his-oria de violencia o abso mos? Ese parn deomporamieno global reqiere na sere de res-esa global y se es el propsio del presene libro.

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Las respuestas exstentes no nos llevan demasa-do lejos. Estamos ante un choque de clzacones?Probablemente no puesto que muchas de estas for-mas de volenca se llevan a cabo en el nteror de unamsma cvlzac6n. Se trata de la mposbldad delos estados de cumplr la norma weberana de deten-tar el monopolo de la volenca? En parte es as peroesta msma mposbldad requere una explcac6nulteror junto con el concomtante desarrollo mundal de ejrctos zonas de segurdad expertos en protecc6n guardaespaldas prvados. Se da un entumecmento general a escala mundal de nuestrosmpulsos humantaros como sugr6 alguen comoMchael Ignate (1998) debdo al exceso de mgenes de guerras etnocdos lejanos propalados por losmedos de comuncac6n de masas? Quz pero el

crecmento de coalcones de base que luchan porel cabo la equdad la salud a escala mundal s-gere que la facultad humana de la empata a dstancaan no se ha agotado. Se trata del crecmento concomtante del enorme trfco global de armas queengloba desde armas pequeas fsles kalashnkov

hasta el comerco ofcal entre estados de mslestanques sstemas de radar dentro de un cuantoso turbo arco de negocos? S pero todo esto se refe-re s6lo a condcones necesaras para la volenca global no a condcones sucentes.

O acaso estamos nmersos en una vasta correc-

c6n malthusana a escala mundal que fncona atravs de los domas de la conversn en mnora la etnzac6n pero est orentada nconalmente apreparar para los ganadores de la globalzac6n un

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undo sn el molesto rudo de los perdedores? Seata de una forma extensa de lo que podramos deno-nar econocdo una tendenca mundal (no mserfecta en su fnconamento que el mercado) a or-anzar la desaparc6n de los perdedores del grandama de la globalzac6n? Este escenaro nnde teor pero por fortuna faltan pruebas plausbles delmsmo en parte porque los mayores crmnales y tanos del mundo han aprenddo los lenguajes de lademocraca la dgdad y los derechos.

Entonces qu es lo que en las mnoras pareceatraer nuevas formas y nuevas escalas de volenca edferetes regones del mundo? El prmer paso hacauna respuesta es que mnoras y mayoras son ambasproducto de un mundo claramente modeo de estadstcas censos mapas de poblac6n y otras herra

mentas estatales creadas en su mayor parte a artrdel sglo XI. Las noras y las mayoras emergen ex-plctamente en el proceso de desarrollo de las deasde nmero representac6n y derecho al voto en las zo-nas donde se llevaron a cabo las revolucones democrtcas del sglo XI, ncluyendo las regones satl

tes del mundo colonal.As pues las mnoras son ua categora socal ydemogrca recente y en la actualdad genera nuevas preocupacones relatvas a derechos (humanos y deotros tpos) cudadana pertenenca y autoctona y alos subsdos estatales (o sus restos fantasmales). Las

mnoras debdo a su ubcac6n en la nsegura zonagrs que se extede entre los cudadanos propamentedchos y la humandad en general promueven nuevosmodos de anss de las oblgacones del Estado as

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como de os lmites de a humanidad poltica. No sor-prende que sean a menudo os seres humanos consi-derados imperfectos por los dems (como por ejempoos discapacitado, os ancianos, os enfermos) os pri-meros objetivos de a marginaci6n o de la aniquia-ci6n. Conviene recordar que a Aemania nazi intent6eiminar todas esas categoras (simboizadas por a -gura de judo) .

Pero as minoras no vienen predeterminadas. Songeneradas en las circunstancias especficas de cadanaci6n y de cada nacionaismo. A menudo son portadoras de recuerdos no deseados reativos a os actosde violencia que dieron lugar a los estados actuaes, aseicio mitar obligatorio o a expusiones vioentasefectuadas cuando emergieron estados nuevos. Y ade-ms, en a medida en que son soctantes desvaidos

de los subsidios estataes o son una de as causas dea disminuci6n de recursos nacionaes muy disputa-dos, son tambin recordatorio del acaso de diversosproyectos de Estado (sociaista, desarroista y capita-ista) . Las minoras son seaes que apuntan a acasoy a coercin. Son una vergenza para toda imagen de

pureza nacional y de justicia pbica patrocnada pore Estado. Son, por tanto, chivos expatorios en e sen-tido csico.

Pero cu es e particuar estatus de estos chivosexpiatorios en a era de a globaizaci6n? Despus detodo, los extranjeros, os enfermos, os n6madas, os

disidentes religiosos y similares grupos sociaes mi-noritarios han sido siempre blanco del prejuicio y axenofobia. Sugiero aqu una hip6tesis unitaria y sen-cia. Dado que dentro de a 6gica de la gobalizaci6n

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odemos retoar a argumento antropogco clscode Mary Dougas de que la sucedad es matera fuera de lugar y de que todas as taxonomas moraes ysocales aborrecen los elementos que desdbujan susdvsones (199). E tpo de mnoras que he descrto(os enfermos, os que abrazan desvacones regosas,os mnusvldos, los nmadas, los legales y os queno son gratos dentro del mbto de Estadonacn)borra las fronteras entre nosotros y ellos, aqu yal, dentro y fera, sano y enfermo, leal y deslea, necesaro pero no grato Este ltmo bnomo es la cave del engma De una manera u otra necestamos deos grupos mnortaros en nuestro espaco naconal, aunque slo sea para lmpar nuestras letrnas ycombatr en nuestras guerras Pero, a su vez, no songratos, por ceto, a causa de sus dentdades y eata

des anmalas Y en vrtud de esta doe cualdad asmnoras encaan e probema central de la globazacn msma para muchos estadosnacn: se tratade algo necesaro (o al menos nevtable) y, al msmotempo, molesto Es, a a vez, nosotros (podemos sersu dueo, controarlo y utlzarlo, en la vsn opt

msta) y no es nosotros (podemos evtaro, rechazarlo, vvr sn ello, negarlo y elmnarlo, en la vsnesmsta) De modo que, desde este punto de vsta, lagobazacn de la volenca contra las mnoras representa una profunda angusta en relacn con eproyecto naconal y su propa relacn ambgua con la

globalzacn Y la globalzacn, puesto que es unafuerza sn rostr, no puede ser objeto de etnocdoPero las mnoras s

Expresado de manera ms general, y volver sobre

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ese argumeno con ms dealle en el capulo lasnoras son el puno en que hacen crss una serede ncertdumbres que medan entre la vda dara suel6n de fondo global sempre en apresurado cambo .A causa de su estaus mxto las mnoras crean ncer-dumbres respecto del ser naconal de la cudada-na naconal. Su estatus jurdcamente ambguo ejercepresn sobre las consttucones los ordenamentosegales. Sus movmenos desafan la vglanca de lasoneras. Sus ransaccones nanceras borran las l-neas dvsoras entre las economas naconales entreas transaccones lctas las delctvas. Sus domasexacerban las preocupacones sobre la coherenca cul-ural de la nac6n. Sus estlos de vda son un modosenclo de desplazar las tensones comunes de la socedad especalmene en las socedades urbanas. Su po-

ca suele ser multfocal por lo que resulan sempreente de nquetud para el manenmento de la segu-rdad. Cuando son rcas nvocan al fantasma de laglobalzac6n de la ele actuando como sus heraldosparas. Y cuando son pobres son smbolos c6mo-dos del acaso de numerosas formas de desarrolo

de asstenca socal. En especal dado que cas odasas concepcones de la nac6n del pueblo reposan so-bre alguna dea de pureza 0 sngulardad ncas sobre la supres6n de la memora de la pluraldad lasmnoras tncas borran los lmtes del pueblo naconal. Esa ncertdumbre exacerbada por la ncapac-

dad de muchos estados de asegurar la soberana na-conal econ6mca en la era de la globalzac6n puederansformarse en fala de oleranca ane cualquerclase de exrao que posea un carcter colectvo.

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esuta difci saber ser a minora que seconvertir en banco, en e infortunado extrao. Enagunos casos parece obvio; en otros, menos. Y ocueas porque, ist6ricamente abando, as minoras nonacen, sino que se acen. En pocas paabras, a travsde decisiones y estrategias especficas, a menudo acargo de as eites de Estado o de os lderes polticos,agunos grupos particulares que aban permanecidoinvisibes son convertidos en minoras visibles contraas que cabe a posibiidad de poner en marca cam-paas caumniosas que conducen a la explosin deetnocidio. De modo que, en lugar de decir que as mi-noras generan vioencia, debeamos decir que a vio-encia, sobre todo en el mbito nacional, necesita deas minoas. Y este mecanismo de producci6n de mi-noras necesita sacar a la luz determinadas istorias y

ocutar otras. Este proceso es o que expica e comple-jo modo en que graduamente ciertos asuntos y con-ictos gobaes legan a imposionar dentro de a-gunas naciones y ocaidades, a menudo en forma deviolencia paroxstica ejercida en nombre de aguna ma-yora. Un caso csico es e proceso mediante e cua

os sij de India fueron pauatinamente convertidos enuna minora problemtica (Axel, 200 1 ) . No fue a con-secuencia de ninguna forma simple de potica rea-tiva al censo. Fue un proceso basado en una poticanaciona y regiona despegada durante un argo si-glo que se consum6 finamente en os episodios

vioentos de 1984: el asesinato de Indira Gandi, acampaa de contrainsurgencia del Estado contra osseparatistas sij y la matanza de 1984 durante os dis-turbios de Nueva Dei y otras regiones . Podra soste

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erse que fue de eco e desencadeamiento masi-o de oencia estata y popuar contra os sij en 1 98o que os conrti6 e una minora cutura y potica,cuyo pequeo componente terrorista se sacraiz6 des-pus de esos episodios De esta forma, en u sigo (yagunos diran en una dcada) una coectiidad con-siderada como un feoroso auxiiar de mundo in-d se conirti6 en su enemigo interno ms peigrosodurante a menos e decenio posterior a 1 98 .

Considrese una tima reexi6n sobre os ncu-os entre gobaizaci6n y iolencia contra as minoras.Esta conexi6n obiga a reaizar e ms arduo de osejercicios anaticos, que consiste en mostrar cmofuerzas de gran veocidad, a gran escaa y cuya esferade acci6n es muy vasta (esto es, os procesos de go-baizaci6n) , que son tambin en varios sentidos muy

abstractas, pueden conectarse con e tipo ms ntimode vioencia coora, enmarcada en a famiiaridad deas reaciones cotidianas, a tranquiidad de barrioy os azos de proximidad. Cmo puede e amigo a-tar a amigo, e vecino matar a vecino e incuso e famiiar matar a famiiar? Estas nuevas formas de vio-

encia ntima resutan especialmente desconcertantesen una poca de tecnoogas eloces, instrumentos -ancieros abstractos , poder ejercido a distancia y cir-cuaci6n a gran escaa de tcnicas e ideoogas.

Una manera de desentraar el orror de creci-miento mundia de esta ntima vioencia corpora,

en e contexto de una abstracci6 y una circua-ci6n cada ez mayores de imgenes y tecnoogas,es considerar que a reaci6n no es de ninguna ma-era parad6jica. E cuerpo, en especia e cuerpo de


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los integrantes de las minoras, puede ser simultnea-mente el espejo y el instmento de las abstraccionesque ms tememos Despus de todo, las minoras y suscueos son producto de un alto grado de abstracci6npuesto en juego al contar, clasicar y vigilar poblacio-nes De modo que el cuerpo de la minora hist6ricamente producida combina la seducci6n de lo familiary la insignificancia de lo abstracto en la vida social,permitiendo que el temor a lo glo

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Arjun Appadurai - El rechazo de las minorías - Ensayo sobre la geografía de la furia