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Valor del Mes:

Disponibilidad

Lema del Mes:

“Hágase en mí según tu palabra”

(Lc 1, 38)

Plan de PastoralMayo 2015

Créditos

Colaboradores: P. Santiago Rodriguez (Diócesis de Puerto Plata) ,Francisca de la Cruz, P. Valerio Baines Sanz, oar, y Pbro. Daniel Lorenzo Vargas Salazar (Santo Domingo)

Coordinación: Eugenia López

Diagramación y Arte Final: Jesús Pérez

Portadas: Werner Olmos

Impresión:Editora Amigo del HogarManuel María Valencia No. 4Santo Domingo, D. N. Tel.: 809.548.7594Para contacto Vicaría de Pastoral, Teléfono 809-682-0815, 809-221-3126, 809-685-3141 ext. 261 y 262Correo electrónico: [email protected]

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Plan de Pastoral - Mayo 2015

Acción Significativa del Sector:

Encuentro con las madres, reconociendo la entrega de las madres solteras.

Acción Significativa Familiar:

Una familia ayuda a una madre pobre.

Índice

Primera Parte:

Encuentros de Evangelización . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .4

Semana Mariana. Con Flores a María . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .10

Vigilia de Pentecostès . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .21

Acción Significativa del Sector: Celebraciòn de las Madres . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .32

Segunda Parte:

Celebraciones Dominicales, Lecturas de la Palabra de cada día y Meditación diaria del Evangelio . . . .34

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Hágase en mí según tu palabra

Primer Encuentro de EvangelizaciónSemana del 4-10 de Mayo

El Valor de la Disponibilidad “Aquí estoy. Envíame a mí” (Is 6,8)

Ambientación: El lugar donde se celebra este Encuentro debe estar adornado con motivos alegres, porque la Disponibilidad es un valor o una virtud de ánimo, de alegría de “echar para adelante”.

En las paredes se puede poner: Un reloj grande, un calendario, también grande. Además un cartel con la Palabra Disponibilidad y otros carteles que pongan 911, 24 horas (se puede bajar de internet e imprimirlo).

En una mesa o en otro lugar visible se pueden poner distintos folletos de publicidad de esos que entregan con los periódicos de cada día o que podemos tomar de los supermercados y hasta de algunos colmados.

1. Cantos o música ambiental: se ponen canciones que hablen de la vida en positivo, de la vida como entrega, como acogida. Pueden ser canciones de iglesia o de las que todos conocemos como positivas. Si ponemos canciones de Iglesia pueden ser todas las vocacionales que nos sabemos o tenemos grabadas.

2. Saludo de bienvenida del Animador o uno de la casa.

3. OraciónSe invoca el Espíritu Santo y se reza esta oración de Carlos de Foucauld: Padre, me pongo en tus manos, haz de mí lo que quieras. Sea lo que sea, te doy las gracias.Estoy dispuesto a todo, lo acepto todo, mientras se haga tu voluntad en mí y en todas las criaturas.Pongo mi alma en tus manos, te la doy, Dios mío, con todo el amor de mi corazón, porque te amo.Es una exigencia de mi amor el darme, ponerme sin medida en tus manos, con infinita confianza, porque Tú eres mi Padre.

Canto: ME HAS SEDUCIDO SEÑOR: Señor, no soy nada. ¿Por qué me has llamado?

4. Para centrar el tema del mes y del EncuentroComenzamos haciendo una pregunta a todas las personas participantes

en el Encuentro:

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• ¿Qué entendemos cuando hablamos de Disponibilidad? • ¿Cuándo se puede decir que una persona es disponible?

El diccionario define la Disponibilidad como: situación de la persona o cosa que está preparada para un fin. Cualidad de estar libre para ser usado en cualquier momento.

Es una palabra que se usa en ambientes tan distintos que el diccionario debe hacer una definición muy general para abarcar todas sus posibilidades. Se habla de disponibilidad de las cosas, la naturaleza, los horarios, los empleos, el dinero, las personas, situaciones, acontecimientos….

Nosotros, en este Encuentro, ponemos una definición más humana y de la que vamos a partir para entendernos y reflexionar; Disponibilidad sería: la cualidad de una persona que “está presente”, se ofrece, cuando se la necesita y para lo que puede aportar. Es una persona que ayuda espontáneamente, se pone al servicio de los otros con gusto y rápidamente. Es una cualidad que facilita la solidaridad hacia los más necesitados.

5. Escuchemos la Palabra de Dios: Isaías 6,1-9Silencio. Compartamos entre todos esta Palabra con estas preguntas: • ¿Cuál es la disponibilidad de Isaías ante la llamada de Dios?• ¿Qué otros personajes bíblicos son para nosotros modelo de

disponibilidad?• ¿Qué me pide el Señor con esta Palabra que hemos escuchado?• ¿Cómo, con quién y cuándo suelo ser más disponible? • ¿Me voy a quedar sólo en buenas intenciones?

Canto: Contigo hasta el final: hubo un día como hoy que me llamaste. O se puede entonar otro canto vocacional.

6. Para conocer más del temaLa disponibilidad personal es la actitud de quien está abierto o abierta a

dar su tiempo, conocimiento, esfuerzo, presencia… a quien necesita de todo ello. Es la persona que intenta dar respuestas, o contribuye a la resolución de problemas, aunque sea de manera limitada.

La persona disponible no es aquella que se puede usar con facilidad, y cuando no se la necesita se la deja de lado o no se cuenta con ella. Todo lo contrario, la persona disponible es aquella que conscientemente dedica su tiempo y sus cualidades a responder a las necesidades de otras personas. Esta virtud tiene mucho que ver con la amistad, con la verdadera amistad: el amigo o amiga sabe que puede contar con el otro o la otra porque para eso es la amistad, para estar disponibles cuando nos necesita el amigo o la amiga.

Decimos que la persona disponible no es aquella de la que se usa y abusa, ya que para ser disponibles humana y cristianamente, hace falta usar la libertad. La disponibilidad supone que se es libre para responder o no hacerlo ante la llamada o necesidad. Aquí pondríamos el ejemplo de Isaías en la lectura anterior y el de María en la Anunciación: están dispuestos porque son libres para responder.

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No basta sólo la libertad, hace falta la decisión. Diríamos con nuestras palabras, “poder y querer hacerlo”. Por eso en la definición que hemos puesto más arriba decíamos “está presente”. Ese estar presente no es quedarse en buenas intenciones, sino en ponerlas en práctica: “desearía ayudarte, tengo ganas de echarte una mano, podría ir a colaborar contigo, yo también quiero ser catequista, estoy dispuesto o dispuesta a entrar en el ministerio que sea de la Iglesia, pero… ahora tengo el tiempo muy ocupado, cuando pase los estudios, o este trabajo tan duro se termine, cuando los hijos crezcan, cuando la cosecha del campo me deje libre…”. Esta sería una persona de buenas palabras y de pocas o ninguna acción. La disponibilidad se demuestra en obras, no en buenas intenciones.

Si nos damos cuenta, la Disponibilidad tiene que ver con Dios y con los demás. Por eso está como valor en este año del Amor y la Solidaridad camino de Santidad.

En este sentido hablamos de Disponibilidad con Dios cuando respondemos a su llamada, a las necesidades de la Iglesia y a las necesidades de los demás.Abraham, Moisés y los profetas son unos ejemplos claros de Disponibilidad. Por ejemplo, Moisés defiende a su pueblo esclavizado, y por ello debe huir de su vida en el palacio; después se pone a disposición de Dios y del pueblo. En muchas ocasiones le toca defender a Dios ante el pueblo y al pueblo ante Dios.

A partir de estas vocaciones y de sus respuestas, debemos plantearnos la disponibilidad para responder a Dios, a la sociedad y a los más necesitados, Y disponibilidad práctica, no quedarnos en buenas intenciones.

Hablamos de disponibilidad en los jóvenes, muchachos y muchachas llamados y llamadas a la vida sacerdotal o a la Vida Consagrada. Y sí, no cabe duda que se necesita disponibilidad, pero el Señor cuenta con todos nosotros y nosotras. Todos debemos responder ante la llamada de la Iglesia y de la sociedad.

¡Tantas necesidades de evangelización, de ministerios, de entrar en comunidades; tantas necesidades sociales, materiales, personales, de asociaciones, de barrios, de campos, de vecinos, comunitarias que necesitan de nuestras respuestas!

Pero “estamos con tanta ocupación que no nos queda tiempo para lo demás ni para los demás. Bastante tenemos con responder a lo nuestro…” En definitiva, no estamos dispuestos o dispuestas, no tenemos disponibilidad. En ocasiones respondemos un poco mejor, pero sólo un poco a las llamadas de la Iglesia que a las de la sociedad.

No podemos encontrarnos con Dios si no es en esta situación social, política y eclesial en que nos toca vivir; y nos encontramos con Dios cuando tenemos disponibilidad para responder a las necesidades que nos plantean cada día los demás y nuestra República Dominicana.

Canto: QUIERO DECIR QUE SÍ: Yo siento tu voz muy dentro de mí

7. Oración final:Todos nos colocamos en círculo y abrimos nuestras dos manos como señal de disponibilidad. Le decimos a Dios en qué estoy

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disponible para que me envíe. Le pedimos fuerzas para ser fieles a esta promesa. Se termina con el Padrenuestro y el Ave María.

8. Avisos: se recuerda el lugar, día y hora del próximo Encuentro y del resto de actividades de la comunidad. En ese Encuentro trataremos de reflexionar sobre la Disponibilidad de María y de la Vida Consagrada.

9. Cantos: se termina con cantos de acción de gracias o cantos marianos o vocacionales. O un poco de todo.

Segundo Encuentro de EvangelizaciónSemana del 11- 16 de Mayo

Disponibilidad de la Virgen María y de la Vida Consagrada“Hágase en mí según tu palabra” Lc 1,38)

Ambientación: Propo-nemos poner los mismos signos de Disponibilidad sugeridos para el primer Encuentro. Y le añadimos algún cuadro de la Virgen y algún cuadro que nos recuerde a la Vida Consagrada.Si en la comunidad, en la parroquia, o cerca de donde realizamos el Encuentro hay alguna casa o alguna persona de la Vida Consagrada, le podemos invitar a que participe de manera activa en este Encuentro.

1. CantosMientras se reúne la comunidad ponemos o entonamos cantos marianos

y vocacionales. Para esto usamos algún aparato de música, o si tenemos coro, que vaya cantando esos cantos.

2. Saludo del animador o de uno de la casa.

3. OraciónSe puede hacer una oración de alabanza y también una oración mariana.

Canto: TÚ señor cada mañana. O también: Como lo hizo María…

4. Escuchemos la Palabra de Dios: Lucas 1,26-38Silencio. Compartamos esta Palabra del Señor con estas preguntas:

• ¿Qué nos dice este texto bíblico de la Disponibilidad de María? • ¿Cuándo y para quién estuvo dispuesta la Virgen? • ¿Qué nos enseña a nosotros? • ¿Cómo voy a estar dispuesto o dispuesta a responder a la llamada de

Dios a mi vida? • ¿Qué me impide ser una persona dispuesta? ¿Cómo venceré ese

impedimento?

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• Pongamos algún ejemplo de disponibilidad de Consagrados y Consagradas a quienes conocemos.

• ¿Cómo podemos ayudar a la Vida Consagrada a cumplir su disponibilidad?

5. Para conocer más del tema de hoyMiremos la disponibilidad de María en una única dirección, está dispuesta

en sí, en su persona; pero esta disposición tiene dos vertientes: hacia Dios y hacia los demás.

Disponibilidad hacia Dios. Vemos a María respondiendo con generosidad el día de la Anunciación. El Nuevo Testamento no nos dice nada de su vida anterior; pero en esa escena de la Anunciación vemos que es una muchacha de fe y de principios. No se deja llevar por el momento, ni por la visita tan importante; dialoga con libertad, como debe ser toda disponibilidad.

Y la respuesta a los planes de Dios no se queda en ese momento, sino que es para toda su vida. En este sentido ponemos unas palabras del papa Francisco hablando en el mes del Rosario: “¿Cómo vivió María esta fe? En la sencillez de las miles ocupaciones y preocupaciones cotidianas de todas las madres, como proveer la comida, el vestido, la atención de la casa… En esta existencia normal de la Virgen fue el terreno donde se desenvolvió una relación singular y un diálogo profundo entre ella y Dios, entre ella y su Hijo. El “sí” (disponibilidad) de María, ya perfecto desde el principio, creció hasta llegar a la hora de la Cruz. Allí su maternidad se amplió abrazándonos a cada uno de nosotros, nuestra vida, para guiarnos hacia su Hijo. María vivió siempre inmersa en el misterio de Dios hecho hombre, como su primera y perfecta discípula, meditando todas las cosas en su corazón a la luz del Espíritu Santo, para comprender y poner en práctica toda la voluntad de Dios.”

Disponibilidad hacia los demás. María podía haberse quedado en contemplación los nueve meses de su embarazo. Podía hacerlo porque tener a Dios dentro de sí, hacerlo crecer en sí misma, es como para estar en adoración y alabanza. Pero María sabe que Dios no es para ella sola, es para la humanidad, porque es Emmanuel, “Dios con nosotros”.

Por eso María se pone en camino para llevar a Dios y su salvación a quien la necesita. Ponemos otras palabras del Papa en el mismo discurso sobre María:“¿De qué modo María es para la Iglesia ejemplo viviente de amor? Pensemos en su disponibilidad frente a su pariente Isabel. Visitándola, la Virgen María no le llevó ninguna ayuda material, pero le ha llevado a Jesús, que ya vivía en su seno. Llevar a Jesús a esa casa quería decir llevar la alegría, la alegría plena. Isabel y Zacarías estaban felices por un embarazo que parecía imposible a su edad, pero es la joven María la que les lleva a la alegría plena, la que viene de Jesús y del Espíritu Santo y se expresa en la caridad gratuita, en el compartir, en el ayudarse y en el comprenderse.”

Disponibilidad de la Vida Consagrada. Los católicos y católicas conocemos a muchos Consagrados y consagradas que dejan su casa, su familia y se dedican a ayudar a los demás. Lo vemos, tal vez hasta nos admiramos de esa disponibilidad a las cosas de Dios y a ayudar a la gente más necesitada. Bueno, pues ese estar disponibles es parte esencial de la Vida Consagrada. Y lo es desde el Evangelio, desde el ejemplo de Jesús y

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desde la petición hecha por el Maestro: el “sígueme”, que pide Jesús supone dejar las redes y la barca, dejar la mesa de los impuestos, dejar a la familia… para ser “pescadores de hombres”.

El Papa Francisco fue quien declaró este año 2015 como el Año de la Vida Consagrada. Ya hace meses que escribió una carta a los Consagrados y Consagradas. En esa carta él les pide para este año y en toda la vida, que: • El Consagrado y Consagrada debe ser una persona que desborde de

alegría.• Su tarea es “despertar al mundo”, deben estar dispuestos y dispuestas a

ser profetas que conocen a Dios y al mundo• Deben ser “expertos en comunión”, dentro del propio instituto, con la

Iglesia y con el mundo• Su obligación es “ir a las periferias”, estar dispuestos para los más

necesitados• “Espero que toda forma de vida consagrada se pregunte sobre lo que Dios

y la humanidad de hoy piden”. Esta última, la de preguntarse sobre lo que Dios y el mundo le piden, habla más claramente de la disponibilidad, es decir, estar dispuestos a responder a las necesidades de la Iglesia y de la sociedad en el momento actual. Mirar al futuro con esperanza.

Ayudemos a los consagrados y consagradas a cumplir estas expectativas.

Canto: Yo canto al Señor porque es grande

6. Oración finalSe colocan todos en círculo. Cada uno en silencio piensa lo que Dios le

pide en este momento de su vida. Luegio cada uno y cada una expresan a lo que están disponibles para realizarlo y todos responden: “Hágase en mí, según tu Palabra”.

Terminamos rezando o cantando la oración que le hacemos a María en la Pascua llamada Regina Coeli o Reina del Cielo. El animador dice una frase y todos responden ALELUYA:

V. Alégrate, Reina del cielo. Aleluya.R. Porque el que mereciste llevar en tu seno. Aleluya.V. Ha resucitado, según predijo. Aleluya.R. Ruega por nosotros a Dios. Aleluya.V. Gózate y alégrate, Virgen María. Aleluya.R. Porque verdaderamente el Señor. Aleluya.V. Oremos: Oh Dios que por la Resurrección de tu Hijo, nuestro Señor

Jesucristo, te has dignado dar la alegría al mundo, concédenos por la intercesión de su Madre, la Virgen María, alcanzar el gozo de la vida eterna. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.

R. Amén.

7. Avisos y Cantos: terminamos con cantos de acción de gracias, marianos y vocacionales.

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Semana MarianaSemana del 17 - 22 de Mayo

Con Flores a MaríaPara nosotros y nosotras, el mes de mayo es el

mes de las flores, porque en la tierra donde vivió Cristo era y es el tiempo en que nacen y renacen las plantas y sobre todo las flores. Y es el mes de María, la madre de Dios y nuestra madre, la flor principal del jardín de Dios.

Todo este mes de mayo está dedicado a María como ejemplo para nosotros y nosotras, por ello en este mes recordamos a María como madre de todas las personas, y que nos hace a todos y todas ser hermanos y hermanas; reflexionamos sobre las virtudes y valores de María para seguir su ejemplo; pedimos su protección sobre nosotros, nuestras familias, comunidades y sobre República Dominicana; vivimos una real y verdadera devoción mariana.

Desde hace siglos, en la Iglesia, en este mes de mayo, tenemos la tradición de cantar las Flores y con flores a nuestra madre María. Esta devoción la celebramos en la Iglesia dominicana durante una semana. Recorremos distintas casas de nuestros sectores, o nos reunimos cada noche en un sector, personas de diversos sectores parroquiales, o de distintas comunidades campesinas.

Hagamos un recorrido por la vida de María y que nos sirva para recorrer el camino de nuestras vidas, tanto comunitaria como personalmente. en cada día miraremos a María como ejemplo de alguna virtud. Esa virtud será uno de los lemas del Plan Pastoral de nuestra Iglesia para este año 2015.

Adornamos la casa, enramada, parque o gacebo donde hacemos la ce-lebración. Ponemos un cuadro o imagen de la Virgen con flores y luces. Si la comunidad tiene Cirio, bendecido en la vigilia Pascual, se coloca al lado de la imagen.

Primer día: La Anunciación: Disponibilidad

1. MotivaciónNos reunimos en este día de Mayo para reconocer y alabar la disponibilidad

de la Virgen a la voluntad de Dios con ella. La disponibilidad es una virtud muy hermosa en una persona, ya que lo lleva a realizar lo que sea necesario para cumplir la tarea encomendada que se aceptó con responsabilidad.

Esta disponibilidad de María es ponerse al servicio de los demás para realizar entre los pobres la promesa de Dios que ella canta en ese himno de gratitud a Dios que llamamos magnificat. La humilde sierva está dispuesta a colaborar con Dios para que los hambrientos se colmen de bienes y los soberbios sean bajados de sus tronos y los ricos queden vacíos.

Por eso, Ella es modelo para nosotros estar disponibles para hacer nuestras las necesidades de los más pobres de nuestra sociedad y se realice

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entre nosotros el Reino de Dios. Dispongámonos a recordar y a celebrar a María, siempre disponible para Dios y los demás.

2. Rezo del Rosario (Misterios gozosos)

3. Lectura bíblica: Lucas 1,26-38Silencio. Comentario participado. Se concluye leyendo entre todos esta

reflexión.Según el Nuevo Testamento comenzamos a conocer la persona y la fe de

María en el momento del anuncio que le hace Gabriel de parte de Dios. Pero su fe y su amor a Dios comienzan mucho antes, por eso es elegida.

La Anunciación es el momento de la llamada, el momento en que descubre la misión que le encomienda Dios. Si María no hubiese estado dispuesta en toda su vida, si la disponibilidad no hubiera sido una de sus virtudes, en este momento no hubiera aceptado la misión. Lo que le espera es duro y sólo se acepta si se tiene el alma bien templada y dispuesta.

Gabriel la saluda con un “Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo”. Ese es un don que todos y todas tenemos, el Señor está con nosotros y nosotras, ello es motivo de alegría.

María no se queda callada, los mensajes y llamadas de Dios no son para quedarse en silencio, sino para dialogar con Él, para conocer mejor sus designios. La aceptación de la voluntad de Dios tiene más valor cuando la hacemos con conocimiento y con decisión personal.

María nos da ejemplo de disponibilidad al decir “hágase en mí según tu palabra”. Este es el valor para todo el mes de mayo, y este es el valor de nuestra primera reflexión.

¿Cómo va nuestra disposición a aceptar la voluntad de Dios? ¿En qué estamos trabajando dentro de la Iglesia? ¿Tenemos disposición a comprometernos en alguna tarea en favor de la comunidad eclesial y de la comunidad social donde vivimos?

María se turbó, se preocupó, se puso nerviosa, diríamos hoy. Porque es humana, la situación que le presentan le trae preocupación, pero no se tira atrás, sino que con valentía asume la responsabilidad. Después del diálogo, después de vencer el miedo, después de ver las cosas a favor y las en contra, se decide, está dispuesta a aceptar el reto de ser madre de Dios y nuestra madre.

Que su ejemplo de disponibilidad nos ayude, y que su intercesión nos consiga las fuerzas necesarias para estar dispuestos a trabajar por una sociedad y una iglesia mejor.

4. Canto de las flores.Mientras cantamos “Venid y vamos todos” o algún canto mariano, cada

persona va colocando las flores en el altar dedicado a María. Pedimos a María que nos ayude a estar dispuestos y dispuestas a acoger nuestra vida, a comprometernos en la superación personal, pero que nos ayude a asumir un compromiso eclesial y un compromiso por hacer una República Dominicana mejor. Comencemos por nuestra comunidad, sector, barrio o campo.

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5. Canto: Ave María, Ave María

6. Saludamos a María:Salve, Madre santa, que escuchaste la palabra del ángel, fuiste capaz de

dialogar con él, y después aceptaste el compromiso que te proponía. Salve, Madre que estuviste dispuesta a dejar tu comodidad para sumarte al plan de Salvación. Ayúdanos a aceptar nuestra vida y nuestra misión en favor de los demás; danos tu disponibilidad para prestar atención a las necesidades de los demás y para ser testigos de la presencia de la Salvación de Dios en nuestros ambientes. Ayúdanos por tu Hijo Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amen.

7. Compartamos alegremente. Cantos a María. Brindis.

Segundo día: La visitación de María a su prima Isabel: Solidaridad

1. Motivación:En este Segundo día contemplamos

a María que muestra su solidaridad hacia su prima Isabel mostrando así su disponibilidad de servir a los demás.

Cuando María se entera de que va a ser Madre de Dios no se queda contemplándose a sí misma, sino que, ante la noticia del sexto mes de embarazo de su prima Isabel, se pone en camino para ayudarla. En nuestros días, este tipo de amor se llama Solidaridad, y es la virtud que hemos reflexionado y vivido como lema en el mes de marzo; pero es la virtud de todo el año del Plan de Pastoral de nuestra Iglesia nacional.

Sintiendo a Dios crecer en sus entrañas, María podría haberse quedado en contemplación durante los nueve meses. Hasta hubiera sido comprensible: “Si Dios está conmigo, en mí, me quedo a adorarle y alabarle, a contemplarle cómo crece”. Pero, Ella se pone en camino para ponerse al servicio de su prima necesitada de ayuda.


3. Lectura bíblica. Lucas 1,39-56Silencio. Comentario participado. Se concluye leyendo entre todos esta

reflexión. Junto con la noticia de que Dios está en ella, María se entera que su prima Isabel, ya con bastantes años, está embarazada; y se pone en camino a ayudar a quien la necesita. Y es que Dios no está solo en María, Dios está en cada persona necesitada de ayuda.

La solidaridad no es algo que se puede dejar para más tarde, para después de la adoración al Señor, sino que debe ponerse en práctica en cuanto se ve la necesidad. Ese es el ejemplo de María, “rápidamente se puso en camino”. El amor solidario da respuestas a las necesidades concretas y en el momento concreto. Solidaridad es ponerse en camino, como María,

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hacia las necesidades de los demás. No es olvidarse de sí mismo, ni de Dios; es ver a Dios en quien nos necesita. Seguro que María, embarazada, se cuidaba mucho en ese camino y en ese tiempo de estar con Isabel, pero se preocupaba también de los demás. La solidaridad es el encuentro con Dios en los demás, en las personas más necesitadas, en las necesidades concretas y tratando de dar respuesta a esas necesidades.

Cuando somos solidarios y solidarias Dios se hace presente, por eso la Visita de María a su prima Isabel es el ejemplo de hacer presente a Dios en los demás, en la situación concreta del necesitado y en la situación concreta de la Comunidad. Nuestra patria necesita de Dios, y nos toca hacerlo presente con nuestra solidaridad. Que las personas se encuentren con Cristo porque lo ven en nuestra manera de vivir, en nuestro testimonio de vida y de compromiso.

No dejemos de reflexionar sobre todo este texto bíblico, y no nos olvidemos del cántico de María que aparece en estos versículos de Lucas.

4. Canto de las flores: Mientras se canta: “Venid y vamos todos…” o algún otro canto mariano se van presentando las flores recogidas para María: “Te ofrecemos, Madre, estas flores recogidas con amor para TI y te pedimos que, a cambio, nos regales una actitud de solidaridad, que dejemos a un lado la cultura del bienestar, que seamos capaces de arriesgar, porque cuando damos un paso hacia Jesús, presente en el hermano y hermana, descubrimos que Él ya nos esperaba con los brazos abiertos. Que seamos solidarios y solidarias para hacer presente a Cristo con nuestras vidas”. Podemos presentar a María a las mujeres de nuestro sector que están embarazadas.

5. Canto: Tu secreto María. O, Esperando con María.

6. Saludamos a María:Tú, llena de la presencia de Cristo, creciendo Dios en tus entrañas, no

te lo quedaste para ti, sino que lo llevaste a quien te necesitaba. María, con tu presencia y la de Cristo en tus entrañas, hiciste saltar de alegría a Juan el Bautista. Intercede por nosotros y nosotras para que hagamos presente a Cristo en las demás personas, sobre todo en las más necesitadas. Intercede para que demos respuesta solidaria a las necesidades concretas de las personas y de las comunidades. Interdice por nosotros ante tu Hijo Jesucristo, que es Dios y vive por los siglos de los siglos. Amén


Tercer día: El Nacimiento de Jesús: Generosidad

1. Motivación:En este tercer día contemplamos la generosidad de María que se hizo

disponible para que el Espíritu Santo actuara en Ella y concibiera el Salvador del mundo que luego entregaría a toda la humanidad.

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Una vez que Isabel ha dado a luz y ya no necesita a María, ésta regresa a su casa de Nazaret. Cristo, el hijo de Dios sigue creciendo dentro de María. Cuando el embarazo está muy adelantado, José, el esposo debe ir lejos, hasta Belén, para censarse. María no deja solo a José, le acompaña. Tenía razones y excusas para quedarse, pero María es generosa y le acompaña. Y es allí donde daría a luz a su Hijo a quien entregará a toda la humanidad.


3. Lectura Bíblica: Lc. 2,1-20Silencio. Comentario participado de la Palabra. Se concluye leyendo

entre todos esta reflexión.Generosidad es entregarse y entregar lo bueno que se tiene. María en

Belén nos entrega su ser y nos entrega a Cristo. No puede haber mayor generosidad que entregar a Dios a los demás. El mayor don o regalo que tenemos es la presencia y el amor de Dios. Pues bien, María nos lo entregó en Belén para que lo hagamos crecer en nosotros.

El ejemplo de generosidad de María lo veíamos en la Visita a Isabel, y lo vemos aquí en el nacimiento de Jesús. María entrega a Dios al mundo, nos lo entrega a cada uno de nosotros y nosotras. Para poner en práctica ese ejemplo, no podemos quedarnos a Dios para nosotros, sino que lo debemos llevar a los demás, seamos generosos con nuestros dones, tanto personales como materiales y de esta manera estaremos haciendo entrega de Dios a los demás, sobre todo a quienes nos necesiten.

Hagamos nacer a Dios en nosotros y llevémoslo generosamente a los demás, para que nazca y crezca en nosotros y en el mundo. Que nazca en nuestra persona, en la de los demás y que nazca y crezca en nuestras comunidades, porque nos comprometemos en desarrollarlas y mejorarlas. No se trata de hacer grandes cosas, Dios nació pequeño y débil en Belén; se trata de hacer bien las cosas de cada día y de hacer prácticos los pequeños compromisos de cada día con quienes nos necesitan, comenzando con los compromisos familiares. Démonos a nosotros y nosotras.

4. Canto de las flores: Mientras se canta: “Venid y vamos todos…”Vamos ofreciendo a María las flores que hemos traído y le decimos:

“Madre, gracias por tu generosidad al hacer crecer a Dios en tu seno y por entregarlo a todo el mundo. Enséñanos a descubrir a Dios en la realidad y a entregarlo al mundo y a las personas para que cambie esa realidad, tanto personal como comunitaria. María, intercede por nosotros para que podamos hacer crecer a Dios en nuestro mundo.” Podemos presentar a las mujeres que en estos días han dado a luz.

5. Canto: Madre: Junto a ti María, como un niño quiero estar,

6. Saludamos a María:María, eres la madre de Dios y eres nuestra Madre. Fuiste generosa al

acompañar a José hasta Belén, pero fuiste más generosa al entregar a Dios

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al mundo. Dios está con nosotros porque tú lo hiciste presente en el mundo y nos lo entregaste, gracias por ello. Ruega a tu Hijo para que seamos generosos y generosas y llevemos la salvación y la presencia de Dios allí donde vayamos, y que vayamos principalmente a donde más se necesita de Dios y de Salvación. Consíguenos la gracia de Dios para ser generosos y generosas hoy y siempre. Amén.


Cuarto día: La vida oculta del hogar: Amor

1. Motivación:En este cuarto día nos encontramos con María que en la vida oculta de

su hogar de Nazaret es una maestra del amor sencillo que hace tantas cosas grandes y buenas.

Muchas veces pensamos que el amor se manifiesta en las grandes cosas, situaciones y acontecimientos. Nos olvidamos que si ni amamos en las cosas sencillas, en las de cada día, no seremos capaces de amar en las grandes y dificultosas. En María tenemos el ejemplo de la fuerza del amor en nuestras vidas que nos hace disponibles a Dios y a los demás en grandes cosas y en pequeñas cosas.

2. Rezo del Rosario (Misterios Luminosos)

3. Lectura Bíblica: Lc. 2,19.51Silencio. Comentario participado de la Palabra. Se concluye leyendo

entre todos esta reflexión.En el capítulo segundo de san Lucas se nos cuentan algunos grandes

acontecimientos: el nacimiento de Jesús, la adoración, la presentación en el templo, el niño con doce años que se pierde o escapa… pero en todo este tiempo nos presenta a María como una madre del hogar. Una madre que no habla mucho, pero actúa. Y ese actuar es consciente, por eso, en ese capítulo dos, se nos dice en dos ocasiones que María “conservaba todo eso en su corazón”. Vida oculta, sencilla, laboriosa, reflexiva, vida de hogar, de familia y de amor.

Cuando, más tarde, vemos a Jesús adulto con capacidad de amar, y amar hasta el extremo, nos preguntamos ¿dónde aprendió ese amor y esa entrega? Las actitudes más importantes se aprenden en la familia, de pequeños o no se aprenden nunca. Jesús aprendió el amor sintiéndose amado en toda su vida.

María es ejemplo de amar en la vida de cada día, y enseña a enseñar a amar a los demás. Ese amor que se hace en primer lugar dentro de la familia, se extiende a las personas cercanas y debe llegar a las más necesitadas y a todo el país. Amor práctico y concreto en el hogar, en la familia y que da respuestas a las necesidades de quienes

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están a nuestro lado. Amor práctico a la patria porque nos preocupamos de poner cuanto nos corresponde y mejorar la situación de República Dominicana.

María, cuando encuentra en el templo a su hijo que se había escapado, no se queda callada, le echa su “boche” como mamá. No podemos quedarnos callados ni calladas ante la situación de nuestro país; ¿qué está pasando con la justicia, con la impunidad, con la violencia, con los robos, sobre todo los de “guantes blanco”? ¿No tenemos nada que decir ante estas situaciones? Si nos quedamos callados y calladas nos falta amor, nos falta amar a la patria.

4. Canto de las flores: Mientras se canta: “Venid y vamos todos”… presentamos a María las

flores recogidas para Ella y las ponemos en el altar, mientras le pedimos, que nos ayude a hacer silencio interior para que, a pesar del ruido exterior, las prisas, el estrés, la agitación, podamos escuchar y entender la voluntad de Dios en nuestras vidas y sobre todo nos dé amor para enseñar a amar y para entregar amor a las demás personas y a la patria.

5. Canto: María, música de Dios

6. Oramos a María: “Virgen y Madre María, tú que viviste sencillamente el amor en la familia

y lo enseñaste a tu Hijo, enséñanos a amarte, a amar a Dios y a amar a los demás. Intercede ante tu Hijo para que nos duelan las situaciones negativas de nuestra patria y demostremos el amor trabajando por hacer una República Dominicana mejor. Ayúdanos a amar amando, a enseñar y demostrar el amor amando cada día más y mejor. Amén.


Quinto día: María la bienaventurada, la santa: Santidad

1. Motivación El lema del Plan de Pastoral de este año nos dice: “Amor y solidaridad

camino de santidad”. En este día quinto de las Flores a María, queremos reflexionar sobre la santidad de María y el llamado a nuestra propia santidad.

Ella es la mejor explicación de lo que consiste la santidad que consiste en ser disponible como Ella para dejarse llenar del poder amoroso de Dios y volverse amor para los demás. Oremos junto con Ella para que el Señor nos haga cada vez más suyos, disponiéndonos como María a responder a sus inspiraciones de amor a los más necesitado.

2. Rezo del Santo Rosario (Misterios gozosos)

3. Lectura Bíblica: Lucas 11,27-28 Silencio. Comentario participado de la Palabra. Se concluye leyendo

entre todos esta reflexión.

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El arcángel Gabriel la saluda como la “llena de gracia”, es decir como la santa; Isabel, la prima, cuando la ve la llama “Bendita tú entre las mujeres”, es decir, la bendecida, la santificada; más tarde una mujer del pueblo le hace una alabanza cuando le dice a Jesús “bendito el vientre que te llevó y los pechos que te alimentaron”, nuevamente la llama la bendecida.

Sí, sabemos y reconocemos la santidad de María, por eso fue elegida y para eso la eligieron. No tenemos duda sobre la santidad de María y sobre su ser bendecida de Dios.

Y ese es el ejemplo para nosotros y nosotras que también estamos bendecidos y bendecidas por Dios desde siempre: “antes que tú nacieras te conocía y te consagré” (Jr. 1,5)

María, la bendita, nos invita a ser santos. Dios nos llama a la santidad, como a Ella, y nos da las fuerzas para ser santos.

Dejémonos amar por el Señor, dejémonos llamar por Él y respondamos a su amor y a su llamada; respondamos con generosidad y con valentía. Todos y todas estamos bendecidos y bendecidas por Dios y por María. El Señor sigue haciendo maravillas en nosotros y por nuestro medio en los demás y en el mundo. Debemos llenarnos de la gracia de Dios y repartir esa gracia para que hermanos y hermanos sean herederos de las mismas bendiciones.

El Plan de Pastoral Nacional nos recuerda que el camino para la santidad es vivir el amor y la solidaridad. Por eso nuestro camino a la santidad es vivir el amor de Dios, el amor hacia Dios y vivir el amor hacia los demás, que es la solidaridad, como lo vivió María.

4. Canto de las flores: Mientras se canta: “Venid y vamos todos…” se ofrecen las flores traídas

ese día a la Madre y se colocan en el altar preparado para Ella, y le decimos: “Madre, María, Tú conoces nuestro corazón, nuestra limitación, y nuestro pecado. No somos santos ni santas, pero estamos caminando hacia la santidad, por eso necesitamos tu ayuda, intercede ante tu Hijo para que nos conceda la fuerza suficiente para combatir las tentaciones y vencerlas, para poder ser santos y santas siguiendo tu ejemplo.”

5. Canto: María, Madre buena. O Buena Madre eres tú.

6. Oramos a María:“Tú, Virgen María, la santa entre todas las mujeres; así como Isabel y

aquella mujer del Evangelio, queremos alabarte y proclamar tu santidad. Pero también queremos imitar tu ejemplo y para ello necesitamos tu protección: te pedimos hoy por nuestra santidad, intercede ante Cristo para que nunca nos falta su gracia y su fuerza para caminar hacia Dios y para ayudar a que otras muchas personas se encuentren con Cristo tu Hijo, Él que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén”


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Sexto día: Junto a la cruz de Jesús: Sensibilidad

1. Motivación:En este sexto día contemplamos el corazón de María siempre sensible

ante las necesidades de los demás, que la lleva a compartir el dolor de su Hijo que le atravesará su alma.

Sólo quien tiene un corazón sensible puede darse sin medida y entregarse totalmente al Señor decidiéndose por los que sufren cualquier dolencia y necesidad.

2. Rezo del Rosario (Misterios Dolorosos)

3. Lectura bíblica: Jn. 19,25-27Silencio. Comentario participado de la Palabra. Se concluye leyendo

entre todos esta reflexión.Desde la Anunciación, María sabe que su vida no va a ser fácil. El

anciano Simeón se lo confirma: “Y a ti, una espada te atravesará el alma”. Las dificultades a María le van a venir por aceptar su misión, por ser fiel a ella y por seguir siempre a Cristo.

Esta actitud de María la hace sensible en su vida y sensible a los demás. En la escena de la cruz vemos el sufrimiento de cualquier madre ante el hijo injustamente torturado. María no se retira de la escena, en esos momentos el Hijo necesita de la presencia, el amor y la sensibilidad de la mamá. Ella aguanta fuerte. Sufre por su hijo y por sus hijos. Por todos nosotros y nosotras que desde aquel momento comenzamos a ser sus hijos.

En aquella escena es donde vemos que María colabora también en la salvación. María no es insensible ante tantos hijos e hijas que hoy son crucificados, son martirizados, son torturados por la violencia, por la miseria, por la corrupción, por la falta de justicia.

María no se queda indiferente, está allí sufriendo por esos sus hijos tan necesitados y sensibilizándose con ellos.

Nosotros y nosotras debemos ser parte de esa respuesta de María ante la situación de sufrimiento de tantos hermanos y hermanas de nuestra comunidad, de nuestra patria que siguen siendo maltratados por las circunstancias y por las personas que provocan tales situaciones.

El único Redentor y Salvador es Cristo; María es colaboradora en la Redención y Salvación; Cristo nos ha dejado la misión de extender su salvación a todo el mundo. No podemos llevar la salvación si no somos amigos de los predilectos del Señor, los que más sufren; no podemos hacerlo si no somos sensibles a su situación de sufrimiento y dolor. Nos acordamos de los enfermos, de las personas que viven en soledad y tristeza, y de las personas y comunidades más marginadas, abandonadas y viviendo en la miseria.

María es el ejemplo de sensibilidad y de respuesta a las personas necesitadas. María es nuestra madre y la madre de los pobres.

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4. Canto de las flores:Mientras se canta: “Venid y vamos todos…” se ofrecen las flores

recogidas este día para la Madre y se colocan en el altar, pedimos a María por todos los que están sufriendo y le decimos: “Madre, te pedimos por los enfermos, abandonados, marginados, por los que se resisten a aceptar el dolor y el sufrimiento. Por los que sufren soledad, tristeza, abandono. Por los que están en los hospitales, por los que no reciben consuelos humanos, para que tu mano los conforte. Tu fortaleza al pie de la cruz, ante el dolor de tu Hijo, sirva de consuelo, en los sufrimientos, a todos los que peregrinamos hacia la casa del Padre. Y te pedimos que seamos sensibles a la situación de los demás”.

5. Canto: Santa María del Amén

6. Oramos con María:María salud de los enfermos, no sólo del cuerpo, sino de todos los que no

tenemos un corazón bueno. Madre de todos los que sufren, danos entrañas de misericordia y sensibilidad para que nos preocupemos de ayudar a quienes están peor que nosotros. María, Madre, intercede por todos los necesitados del mundo para que encuentren solución a sus sufrimientos. Amén


Séptimo día: La Pascua de María: Felicidad

1. Motivación: Hoy, en este séptimo día, miramos a María llena de felicidad y de alegría

por la victoria de su Hijo Resucitado. Ella que lo acompañó en su misión hasta la Cruz participa del gozo del Resucitado y ahora ya está glorificada con El. Alegrémonos con Ella y aprendamos que quien como Ella es fiel al plan de Dios, aunque pase por momentos difíciles y oscuros, siempre triunfará.

2. Rezo del Rosario (Misterios Gloriosos)

3. Lectura bíblica: Hch. 1,12-14Silencio. Comentario participado de la Palabra. Se concluye leyendo

entre todos esta reflexión.Sabemos que María estuvo junto a la cruz de su Hijo, nos lo dice

el Evangelio de Juan. Pero los Evangelios no nos dicen dónde estaba cuando la Resurrección. No lo dicen directamente, pero nos lo cuentan de otras maneras: “desde ese día el discípulo la recibió en su casa” Jn 19,27. Es decir, donde esté Juan estará María, la Madre. Y Juan estaba con los otros discípulos esperando. Por tanto, las apariciones de Jesús a los discípulos son también apariciones a su Madre.

María que participó directamente en la escena de la muerte, participa directamente en la escena de la Resurrección.

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¡Qué alegría, qué felicidad ver otra vez al hijo vivo! La Pascua es tiempo de Paz, por eso Jesús lo repite una y otra vez: “Paz a ustedes, no tengan miedo”. María que está con los discípulos, así lo vemos también el día de Pentecostés, sería el centro de paz, de ánimo, de consuelo y de alegría para aquella primera comunidad.

En una de las peticiones de las letanías del Rosario decimos: Reina de la paz, ruega por nosotros; y en otra “Causa de nuestra alegría”. En este último día de las Flores de María destacamos la alegría y la felicidad de la Virgen. María siempre tuvo su vida orientada, siempre dio sentido a su vida, lo que hacía, fueran motivos de alegría o de sufrimiento, estaban en ese sentido y orientación de la vida, por tanto todo daba paz y tranquilidad a su vida, y eso es la felicidad.

María se convierte en motivo de nuestra alegría y en ejemplo de nuestra felicidad. No se trata de no tener problemas, dificultades, contrariedades, es cuestión de saber asumirlas, orientarlas y enfrentarlas para buscarles una solución. Que María sea la causa de nuestra alegría.

4. Canto de las flores: Mientras se canta: “Venid y vamos todos…” presentamos a nuestra

Madre las flores recogidas para Ella en este día y las colocamos en el altar, pedimos que, como Madre, interceda ante su Hijo por todos nosotros, que no perdamos la orientación de nuestras vidas y que ayudemos a orientar la vida de los demás, que nos convirtamos en consoladores de los demás.

8. Canto: Madre de nuestra alegría: María tú que velas junto a mí…

9. Oramos a María,María, Causa de nuestra alegría, ayúdanos a llevar una vida digna.

Intercede ante tu hijo para que seamos capaces de ayudar a orientar la vida de tantos hermanos y hermanas que están sin saber a dónde van. Ayúdanos a construir nuestra felicidad para ser capaces de ayudar a la felicidad de quienes nos rodean. Que nuestra vida tenga sentido porque tu Hijo está en el centro de ella. Intercede por quienes están perdidos en su vida y ayúdales a encontrar el Camino, la Verdad y la Vida. Amén


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Vigilia de Pentecostés 23 de Mayo del 2015

Ven Espíritu de Amor, haznos disponibles para amar como Jesús

Orientaciones para esta Vigilia:La presente Vigilia de Pentecostés está pensada para

realizarse en los templos o en lugares amplios y con la participación de bastantes personas. Se recomienda hacerla en la noche.

Es importante tener en cuenta estas orientaciones: • Adornar el local con signos y figuras del Espíritu Santo,

de sus dones, de sus frutos: paloma, viento, agua, fuego….

• Se coloca en lugar visible el lema de esta Vigilia. • Debe darse una participación especial a los jóvenes que se preparan

para la Confirmación o que la acaban de recibir.• No puede faltar el Cirio Pascual. Se coloca el Cirio Pascual rodeado de

once cirios del mismo tamaño, y uno un poco mayor y azul, que representa a la Virgen.

• El color litúrgico del Espíritu es el rojo.

Para cada momento de la Vigilia se recomiendan algunos signos para la oración y la vivencia de la gracia del Espíritu Santo. A los que le toquen cada momento deben preparar los signos correspondientes tal como lo indica cada momento. Por ejemplo: vasijas con agua y vasijas con fuego e incienso

La música juega un papel muy importante en esta celebración. Sabemos muchos cantos del Espíritu Santo, pero se cantan los que correspondan a cada momento. Demos mucha importancia a la acogida: pongamos un grupo de personas que reciben a quienes llegan al lugar de la celebración y entregan un signo de acogida, puede ser el recorte de una paloma. Recomendamos celebrar la Eucaristía al final de la Vigilia.

Dado que estamos en el Año de la Vida Consagrada es importante destacar su presencia, pedirle dirijan uno de los momentos y orar por ellos y ellas.

1. Cantos de animación sobre el Espíritu Santo (mientras se da la acogida a los participantes.

2. Monición de entradaBuenas noches, hermanas y hermanos. Nos reúne el Señor en esta

noche santa para pedir con fuerza que se renueve en nosotros su Espíritu Santo y que realice un nuevo Pentecostés para estar disponibles para seguir a Cristo y vivir su misma vida dejándonos guiar por su mismo Espíritu.

En este año 2015 nuestra Vigilia de Pentecostés está marcada por los dos grandes valores que nuestro Plan de Pastoral se propone cultivar. En

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primer lugar, el valor de la solidaridad haciendo nuestras las necesidades de todos y todas, especialmente de los más pobres y necesitados.

En segundo lugar, el valor de la Vida Consagrada, que en este Año de la Vida Consagrada reconocemos, apreciamos y destacamos a la vez que oramos para que los consagrados y consagradas llenos del Espíritu vivan su vocación y a través de su testimonio Dios convoque a nuestros jóvenes a entregarse totalmente a Dios y a los hermanos y hermanas.

Entonces, durante esta noche santa seamos disponibles al Espíritu Santo dejando que El renueve en nosotros el amor al Padre y a su Hijo y el amor a los más pobres y a los consagrados y consagradas. Pidamos que baje con su poder amoroso sobre nosotros.

3. Entrada del signo del Espíritu SantoSe apagan todas las luces. En este momento se enciende el Cirio Pascual

y de él siete antorchas que irán recorriendo la Asamblea. El que preside va delante con el Cirio y de cada punto del lugar donde están reunidos sale una antorcha. Antes de caminar el que preside dice:

Hermanos y hermanas: En esta Vigilia de Pentecostés viviremos la experiencia de aquellos primeros discípulos que llenos de tristeza y de miedo estaban reunidos con las puertas cerradas. Esta oscuridad nos recuerda ese momento de dudas, de fracaso y debilidad. Es lo que sucede en nosotros tantas veces. Pero, Pentecostés acontecido 50 días de la Pascua, trae el primer gran regalo de la Pascua que es el Espíritu Santo que viene a encender en los corazones de los discípulos la valentía y la alegría del Resucitado.

Abrámonos a su presencia, mostrémonos disponibles a su acción para que también este fuego de Cristo y los 7 dones del Espíritu Santo se renueven con nueva fuerza para que podamos ser solidarios con los más pobres y lo mismo pase en la vida de los consagrados y consagradas.

4. Canto: Vamos cantando hasta que baje su poder.

5. Oremos: Te bendecimos Padre, por el don del Espíritu que, por tu Hijo, haces al

mundo. Te bendecimos por Jesucristo, quien lleno del Espíritu evangelizó a los pobres, se hizo solidario con ellos ayudándolos y fortaleciéndolos y una vez, resucitado, comunicó a su Iglesia ese mismo Espíritu para que continuase su misión. Hoy, en esta Vigilia de Pentecostés te pedimos que renueve en nosotros este Santo Espíritu para que estemos disponibles a realizar tu voluntad, manifestada por tu Hijo y así seamos solidarios con los más pobres, tengamos fuerzas para luchar por la verdad, la justicia y el amor; luz para comprender a todos, ayuda para servir, generosidad para amar y paciencia para esperar.

Envía tu Espíritu Santo a todos los consagrados y consagradas a Ti, vivan a fieles a su compromiso contigo de vivir la pobreza, la castidad y la obediencia al servicio de tu Reino. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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I.- PRIMER MOMENTO

Espíritu Santo, haznos disponibles para realizar en todo la voluntad del Padre

6. Monición del primer momentoHermanos y hermanas: En este primer momento

pedimos: Espíritu Santo haznos disponibles para realizar en todo la voluntad del Padre. Vamos a decir esta petición a una voz: Espíritu Santo….

Jesús nos enseñó a vivir disponibles para realizar en todo la voluntad del Padre. Para El su vida se entendía y se explicaba en su relación con el Padre. Su comida y su bebida era hacer la voluntad del Padre.

Obedecerle al Padre era su objetivo, su norma de vida y su decisión más profunda. Esta disponibilidad a la voluntad del Padre lo llevó hasta entregar su propia vida prefiriendo la gloria, el poder del Padre antes que la gloria de los hombres. Pero, obedecer esta voluntad del Padre nunca es fácil, ya que muchas veces nuestra propia voluntad quiere decidirse e irse detrás de otras cosas que contradicen esa voluntad del Padre. Jesús como hombre experimentó con dureza esa misma tentación y esa misma realidad.

Por eso, El como nosotros, con gritos y con lágrimas aprendió a obedecer esa voluntad del Padre (cfr Heb 5, 7-8) con la ayuda del Espíritu Santo que vivía en El a plenitud. Una de las principales funciones del Espíritu sería la de clarificar para la comunidad las palabras de Jesús y de sus acciones a fin de facilitar un seguimiento obediente de Cristo que consiste en hacer la voluntad del Padre (Jn. 14,26). También inspira la profecía en su medio, a fin de discernir el futuro y determinar los rumbos correspondientes (Jn. 16:13). Pero muy especialmente, capacita a la iglesia para dar testimonio fiel. Fortalecer a la iglesia para su testimonio de sufrimiento y martirio estaría entre las funciones del Espíritu en su continuación del testimonio de Cristo en el mundo (Jn. 15:26-27; 16:1-4; cf. Mt. 10:10; Mc. 13:11; Lc. 12:11-12; 21:12-15).

En esta Vigilia pidamos el Espíritu Santo para que nos hagamos obedientes al Padre, que nos haga renacer de nuevo para que podamos realizar cada día la voluntad del Padre y en toda circunstancia ya sea positiva o negativa, de éxito o de fracaso. Hacer esa voluntad del Padre es creer en Jesús y seguir su Camino y vivir su Vida. Oremos para que el Espíritu Santo resista en nosotros el mal que se rebela y no quiere permitir que sea Dios que se glorifique en nosotros.

7. Lectura bíblica: Juan 3, 1-18Silencio. Cada uno puede leer en silencio la lectura. También, la pueden

repetir haciendo una de Narrador, otro de Nicodemo y otro de Jesús. Se deja tiempo para destacar algunas de las frases del Evangelio sin comentarla dejando que esa Palabra se desarrolle en nosotros.

8. Salmo 104 (103). A cada verso se responde: Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra.¡Bendice al Señor, alma mía! ¡Bendice al Señor, alma mía!/ ¡Eres muy

grande, oh Señor, mi Dios,/ vestido de gloria y majestad,/ envuelto de luz como en un manto!

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Pusiste la tierra sobre sus bases, /por siempre jamás es inamovible. /La cubres con el manto de los océanos, / las aguas se han detenido en las montañas. Haces brotar vertientes en las quebradas,/ que corren por en medio de los montes, /Aves del cielo moran cerca de ellas, / entre medio del follaje alzan sus trinos.

De lo alto de tus moradas riegas los montes, / sacias la tierra del fruto de tus obras; / haces brotar el pasto para el ganado/ y las plantas que el hombre ha de cultivar ¡Señor, qué numerosas son tus obras! / Todas las has hecho con sabiduría, / de tus criaturas la tierra está repleta! / ¡Alma mía, bendice al Señor!

9. Oremos con el signo del agua ( Si se hacen varios grupos se ponen una fuentecita de agua para cada grupo)Animador: La pimera creación se realizó en el agua sobre la que aleteaba

sobre ella para que diera vida. En la nueva creación, la que hace Cristo, en el agua bautismal con el Espíritu Santo obtenemos esa vida nueva de Cristo Resucitado. Ahora cada uno y cada una mojará su dedo en el agua y se persignará con ella en la frente dando gracias a Dios porque por medio del Espíritu Santo es una nueva criatura.

10. Oremos todos juntos: Ven, Espíritu Santo, amigo entrañable, persona viva y siempre disponible.

Ayúdanos a decirle siempre al Padre con nuestros labios y con nuestras acciones: Padre mío, me abandono a Ti.

Haz de mí lo que quieras. Lo que hagas de mí te lo agradezco, estoy dispuesto a todo, lo acepto todo. Con tal que Tu voluntad se haga en mí y en todas tus criaturas, no deseo nada más, Dios mío.

Pongo mi vida en Tus manos. Te la doy, Dios mío, con todo el amor de mi corazón, porque te amo, y porque para mí amarte es darme, entregarme en Tus manos sin medida, con infinita confianza, porque Tu eres mi Padre.

11. CANTO: Espíritu de Dios, toma mi vida… O la Oración del Abandono cantada.

II.- SEGUNDO MOMENTO

Espíritu Santo, haznos disponibles para ser solidarios con todos y todas, especialmente con los más pobres

12. Monición para este Segundo Momento. Hermanos y hermanas: En este Segundo Momento

de nuestra Vigilia nuestra oración es la siguiente: Espíritu Santo, haznos disponibles para ser solidarios con todos y todas, especialmente con los más pobres. (Lo decimos todos juntos).

El Espíritu Santo es el Espíritu de amor. Porque sabemos que el Dios Trino, en su vida íntima y esencial (1 Jn 4, 8). Y el

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Espíritu Santo es la expresión personal de este ser-amor de Dios. Porque Él es el amor entre Padre a Hijo hecho persona. Porque el amor entre Padre a Hijo es tan profundo a intenso que se convirtió en persona. El Espíritu es, por eso, en la Trinidad el vínculo de amor entre Padre e Hijo.

Pero, también es ese mismo Espíritu Santo el que nos mueve y nos inspira a vivir el amor. No podemos realizar ningún gesto, ningún afecto de amor sin que el Espíritu nos guíe o estimule. Es la acción del Espíritu en nuestro interior que nos hace amar.

Por eso, tenemos que dejar que el amor que llevamos dentro, por la presencia del Espíritu, se abra paso en nuestra vida. El amor no puede forzarse. Nace, despierta, surge. Es el aleteo del Espíritu en lo más profundo de nuestro ser. Y el arte de amar está en reconocerlo, aceptarlo y seguirlo. Si no amamos bien, es porque no reconocemos la presencia del Espíritu Divino en nosotros, no cedemos a sus impulsos, no abrimos las puertas a su actuar.

San Pablo confirma, en su carta a los Gálatas (5,22) que el primer fruto del Espíritu Santo es el amor. Es Él quien despierta y enciende el amor sobrenatural en nosotros. Por eso nos recuerda la Carta a los Romanos:” el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que se nos ha dado (5,5).

El amor es la ley fundamental del Reino de Dios. Es la ley por la cual se nos va a juzgar a cada uno al final de los tiempos:”Tuve hambre y me alimentaron, tuve sed y me dieron de beber”. (Mt 25, 35).

Se nos va a juzgar a partir del amor, de un amor muy real y concreto. Es un amor al Dios que se identifica plenamente con el hermano necesitado. Es el Dios a nuestro alcance, el Dios presente en el corazón de los demás. Y el Espíritu, que está dentro de mí, hace de puente para llegar a los hermanos. En Él los encuentro, en Él los entiendo y en Él los amo.

El auténtico amor se manifiesta y realiza cuando es capaz de traducirse en solidaridad. Porque el amor es una fuerza de unión, una tendencia a considerar al otro como parte de mi propio ser, como mi verdadero hermano en Cristo.

Por eso, amar es compartir: sentir mías las alegrías, las esperanzas, las angustias y las necesidades del otro. Y hacerle sentir que también lo mío - mi corazón, mi tiempo, mi pan - está a su disposición. En esto consiste la solidaridad. Y en este tiempo difícil que está viviendo nuestro pueblo, es necesario que todos seamos solidarios con los hermanos necesitados. Además, es el único signo por el cual los hombres podrán reconocernos como discípulos de Cristo e instrumentos del Espíritu Divino.

Por eso rezamos: “Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de lo amor”. (Adaptación de las Homilías del Padre Nicolás Schwizer, Catholic.net).

13. Escuchemos la Palabra: 1 Juan 4, 7-21. Silencio. Cada uno puede leer en silencio la lectura. También, la pueden

repetir poniendo tres lectores: uno lee un versículo, el otro el siguiente y el tercero el siguiente y así sucesivamente. Se deja tiempo para destacar algunas de las frases de la lectura sin comentarla dejando que esa Palabra

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se desarrolle en nosotros. El que ha preparado este momento puede hacer una breve reflexión.

14. Salmo 15 (14). Rezado o cantado: ¿Quién puede entrar en tu tienda y habitar en tu monte santo?

15. Oración con el signo: En pequeños grupos formarmos círculos. En este momento pedimos al Espíritu Santo que nos haga más disponibles para ser solidarios con los demás, especialmente con los más pobres. Todos coloquemos nuestras manos sobre nuestro corazón y pidamos al Espíritu que despierte en nosotros los mismos sentimientos del Corazón de Cristo para que podamos amar con ese mismo amor. Luego, se les pide que cada uno haga una promesa de un compromiso concreto de ser solidario con alguna persona o familia de su Sector o en su trabajo. Al momento de decirlo, agarra abraza de la persona que está a su lado.

16. Canto del Espíritu Santo que hable del amor solidario.

17. Oremos:Espíritu Santo, llena nuestros corazones del fuego de tu amor para que

seamos cada vez más solidarios unos con otros y especialmente con los más pobres. Haz que nuestro amor nos lleve a organizarnos para que sean rotas tantas desigualdades, injusticias y corrupción que impiden que en nuestra sociedad haya una mesa común para todos y todas. Haznos solidarios con el que sufre y con aquellos a quienes carecen de los bienes que faciliten el desarrollo integral de las familias y de la sociedad. Amén.

18. Canto del Espíritu Santo.

TERCER MOMENTO

Espíritu Santo, haznos disponibles a tu acción en nosotros

19. Monición al Tercer Momento

Hermanos y hermanas: En este Tercer Momento de nuestra Vigilia oramos así: Espíritu Santo, haznos disponibles a tu acción en nosotros (Lo decimos todos juntos).

Nosotros estamos claros que ser cristiano es vivir en el Espíritu de Jesucristo. Luego de su muerte y resurrección, Jesús otorgó su Espíritu a sus discípulos. De modo que desde entonces, Jesucristo sigue presente en su Cuerpo, mediante su Espíritu.

En el Espíritu Santo la presencia y la obra salvífica de Jesucristo son continuadas a través de la iglesia en medio de la humanidad. La obra del Espíritu abarca toda la gama de la obra salvífica de Jesús. Incluye la creación de una comunidad que lleva la imagen de su Señor. Inspira a la

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comunidad en su obediencia fiel a las palabras de su Señor. Fortalece a los discípulos de Cristo a fin de poder ofrecer fielmente su testimonio en el mundo. Y finalmente, guía a la iglesia a glorificar a Cristo concretamente en su vida y hasta en el sufrimiento por su causa. Por eso, San Pablo, dice que la vida cristiana consiste en “andar en el Espíritu”, “ser guiados por el Espíritu”, “vivir en el Espíritu”, “ocuparse del Espíritu”, “ser morada del Espíritu”, “manifestar el fruto del Espíritu”, “ser llenos del Espíritu” (Gálatas 5,16-6,10 y Romanos 8, 1-30).

Vivir según el Espíritu de Cristo es tomar a Jesús como modelo, pues el Espíritu que inspira e impulsa nuestra espiritualidad es el Espíritu de Jesús. Es lo contrario de “vivir según la carne”, que es la oposición contra Dios y sus propósitos salvíficos.

“Andar en el Espíritu” significa continuar en la nueva comunidad del Espíritu la vida propia del reino de Dios restaurado por el Mesías. Jesús mismo ha sido el ejemplo más claro de una vida caracterizada por el fruto del Espíritu. Y como la comunidad primitiva lo comprendía muy bien, un papel fundamental del Espíritu en la comunidad era asegurar la continuación concreta de la vida de Jesús mediante su fructificación en la espiritualidad del cuerpo de Cristo. Como seguidores de Jesús estamos llamados a vivir como hombres y mujeres llenos de Espíritu Santo, que es caminar según la voluntad del Padre.

20. Lectura Bíblica: Gálatas 5,16 al 6,1-10.Silencio. Cada uno puede leer en silencio la lectura. También, la pueden

repetir poniendo tres lectores: uno lee un versículo, el otro el siguiente y el tercero el siguiente y así sucesivamente. Se deja tiempo para destacar algunas de las frases de la lectura sin comentarla dejando que esa Palabra se desarrolle en nosotros. El que ha preparado este momento puede hacer una breve reflexión.

21. Salmo 119 (118): Se canta y se responde: Tu Palabra me da vida…33 Señor, enséñame el camino de tus preceptos, que los quiero seguir

hasta el final. / 34 Dame inteligencia para guardar tu Ley, y que la observe de todo corazón.

35 Guíame por la senda de tus mandamientos, pues en ésa me complazco. / 36 Inclina mi corazón hacia tus testimonios y no hacia la ganancia.

Guarda mis ojos de mirar cosas vanas, me darás vida en tus caminos./ 40 Mira cómo deseo tus ordenanzas, tú que eres justo, vivifícame.

43 Que no se me olvide la palabra de verdad, pues espero en tus juicios. / 44 Quiero observar tu Ley constantemente, por siempre jamás.

49 Recuerda tu palabra a tu servidor, ella ha mantenido mi esperanza/ 50 Este es mi consuelo en mi miseria que tu palabra me vivificará.

22. Oremos unos por otrosEn este momento oremos unos por otros para que estemos siempre

disponibles para que el Espíritu Santo dirija nuestras vidas a nivel personal, comunitario y social. Siempre hay muchos obstáculos en nuestra vida. La

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carne nos pide lo contrario al Espíritu. El ambiente general muchas veces promueve los valores de la carne más que los del Espíritu. Necesitamos, entonces, la fuerza de la presencia del Espíritu Santo que nos dé fuerzas para mantenernos firmes.

En este momento, formamos pequeños grupos de 5 a 7 personas y oraremos unos por otros. Por turnos, el que quiera se pone de pie o de rodillas y todos imponemos nuestras manos sobre él o ella invocando sobre él o ella el Santo Espíritu de Dios.

Después que se ha rezado sobre cada uno y cada una se entona una canción suave de invocación del Espíritu Santo. Puede ser: Muévete en mí…

23. Oración común

Animador/a:Hermanos y hermanos: Pidamos que se derrame con abundancia sobre

nosotros el poder amoroso del Espíritu Santo para que cada vez más caminemos según sus inspiraciones y así glorifiquemos al Padre y al Hijo. Todos responderán cantando: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

Lector 1: • Envía, Señor, tu Espíritu para romper lo que nos ata y aleja de Ti• Envía, Señor, tu Espíritu para derribar barreras que nos separan de Ti.• Envía, Señor, tu Espíritu para derribar nuestros orgullos.

Cantamos: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

Lector 2:• Envía, Señor, tu Espíritu para curar nuestros resentimientos.• Envía, Señor, tu Espíritu para que nos acerquemos al necesitado.• Envía, Señor, tu Espíritu para que veamos en los demás tu rostro.

Cantamos: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

Lector 3: • Envía, Señor, tu Espíritu para que trabajemos por la paz comenzando

por el hogar.• Envía, Señor, tu Espíritu para que sepamos ver lo que nos une.• Envía, Señor, tu Espíritu para que seamos solidarios.

Lector 4: Cantamos: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

• Envía, Señor, tu Espíritu para que sirvamos a los demás.• Envía, Señor, tu Espíritu para que perdonar y responder con el bien.• Envía, Señor, tu Espíritu para que se superen las guerras, los racismos

y las desigualdades entre las personas.Cantamos: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

Lector 5:• Envía, Señor, tu Espíritu sobre todos los consagrados y consagradas

para que caminen siempre con fidelidad a su compromiso contigo.

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• Envía, Señor, tu Espíritu para que ellos y ellas vivan con alegría sus votos de castidad, pobreza y obediencia.

• Envía, Señor, tu Espíritu sobre nuestros jóvenes y nuestras jóvenes, para que escuchen el llamado a la vida consagrada y a la vida sacerdotal. Cantamos: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

24. Canto: Se siente aquí, se siente aquí (u otro parecido).

CUARTO MOMENTO

Espíritu Santo, haznos disponibles a la misión del Reino de Dios

25. Monición al Cuarto MomentoHermanos y hermanas: En este Cuarto

Momento de nuestra Vigilia oramos así: Espíritu Santo, haznos disponibles a la misión del Reino de Dios. (Lo decimos todos juntos).

Si leemos bien el Libro de los Hechos de los Apóstoles en el que se cuenta la misión de los primeros misioneros cristianos nos damos cuenta que es el libro de la acción del Espírtu Santo en ellos y en la Iglesia naciente. Es el Espíritu el que habla; El es quien realiza los signos milagrosos; El es el que despierta la fe; es El quien los une en una comunión profunda entre ellos; El es quien los envía a la misión dirigida a griegos y judíos, a hombres y mujeres, sin ninguna distinción.

Y eso que aconteció ayer es lo mismo que sucede hoy. La Iglesia se siente enviada, impulsada, movida, fortalecida, enseñada y desafiada por el Espíritu Santo para encarnar aquí y ahora a Jesús y su Reino.

Hoy como ayer el Espíritu Santo nos da la alegría y la valentía necesarias para la misión en los diferentes lugares del mundo ya sea en los lugares donde nos acogen y aceptan el Evangelio o ya sea donde rechazan esta llamada y donde hay persecusiones abiertas como está pasando en Irak, Libia. Siria, China y tantos otros lugares donde se quiere obstaculizar la proclamación del Evangelio.

Oremos intensamente para que en este día el Espíritu Santo venga con poder para enviarnos a ser testigos de su Reino donde El nos ha plantado y nos toca vivir. Oremos, de modo especial, en este Año de la Vida Consagrada para que este Año sea un verdadero y nuevo Pentecostés que los lance a vivir su carisma propio desarrollando la misión de Jesús en los campos de acción que El les ha encomendado.

26. Lectura bíblica: Hechos 13, 1-5Silencio. Cada uno puede leer en silencio la lectura. También, la pueden

repetir otros lectores. Se deja tiempo para destacar algunas de las frases de la lectura sin comentarla dejando que esa Palabra se desarrolle en

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nosotros. Si se está en grupos cada uno puede decir qué misión concreta le ha encomedado el Espíritu Santo. El que ha preparado este momento puede hacer una breve reflexión.

27. Cántico de Isaías. Se puede cantar: ¡Qué bellos son sobre los montes los pies del mensajero!6Por tanto, mi pueblo conocerá mi nombre; así que en aquel día

comprenderán que yo soy el que dice: Heme aquí. 7¡Qué hermosos son sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz, del que trae las buenas nuevas de gozo, del que anuncia la salvación, y dice a Sion: Tu Dios reina! 8¡Una voz! Tus centinelas alzan la voz, a una gritan de júbilo porque verán con sus propios ojos cuando el SEÑOR restaure a Sion.…

28. Oremos con el signoSe forman grupos y se lleva vasijas con fuego e incienso como signo

de la presencia del Espíritu Santo en medio de su pueblo para infundirles alegría y valentía para la misión. Mientras va pasando el incienso de persona a persona se hacen peticiones al Espíritu Santo para que reavive en nosotros el celo misionero por el Reino de Dios. Oramos por los consagrados y consagradas para que vibren con Cristo y su misión del Reino.

29. Oración común: Espíritu Santo, Tú que llenas de fuego el corazón de los que buscan

a Jesús. Que rebosen nuestros corazones de la Buena Nueva para que nuestros labios la hagan resonar hasta los confines de la tierra. Tú eres la fuerza que vigoriza nuestro trabajo. Tú el aliento que vivifica nuestra alma. Tú la luz que ilumina nuestra mente. Tú el motor de nuestras buenas obras. Danos docilidad para seguir tus mandatos y que gocemos de tu protección en los trabajos que estamos realizando.

30. Canto misionero: Con con con poder anuncia el Reino de Dios.

QUINTO MOMENTO

Proclamación de la venida del Espíritu Santo

31. Animador/a: En este momento hacemos memoria

del hecho del primer Pentecostés. Pidamos que se realice en nosotros aquella misma efusión del Espíritu Santo para ser verdaderos testigos de Cristo.

El animador/a invita a todos a formar un gran círculo en todo el templo o capilla, aunque se queden los bancos vacíos, de modo que nadie quede detrás. Se colocan en el altar el Cirio Pascual, Once hombres simbolizando a los 12 apóstoles y a la Virgen se colocan alrededor del altar. Se tienen fósforos para encender las luces en

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el momento adecuado. Se puede preparar también la tambora para que al hablar de ruido la toquen.

32. Proclamación de la lectura: Hechos 2,1-11.(Se hace despacio la proclamación de la lectura y haciendo lo que se

indica entre paréntesis).“Todos los discípulos estaban juntos el día de Pentecostés. De

repente un ruido del cielo (se toca la tambora) como de un viento recio (se sigue tocando la tambora) resonó en toda la casa donde se encontraban (se sigue tocando la tambora).

Vieron aparecer como unas lenguas, como llamaradas, que se repartían posándose encima de cada uno (aquí se van prendiendo todas las velas y se les va dando a la Virgen y los Apóstoles que la colocan sobre sus cabezas). Se sigue leyendo el texto…

33. AnimadorHermanos y hermanas: invoquemos sobre nosotros el Espíritu Santo.

Levantemos nuestras manos hacia El y repitan conmigo. (Mientras se hace la oración los Apóstoles y la Virgen van colocando sobre las cabezas de cada uno el velón, signo del fuego del Espíritu Santo) Ven Espíritu Santo/manda tu luz divina desde el cielo. / Padre amoroso del pobre/don en tus dones esplendido.

Luz que penetras las almas/fuente del mayor consuelo/ tregua en el duro trabajo/ brisa en las horas de fuego/ gozo que enjuga las lagrimas/ y reconforta en los duelos. Entra hasta el fondo del alma/ divina luz/ y enriquécenos / mira el vacío del hombre/ si tu le faltas por dentro/ mira el poder del pecado/ cuando no envías tu aliento.

Riega la tierra en sequía/ sana el corazón enfermo/ lava las manchas/ infunde calor de vida en el hielo/ doma el espíritu indómito/ guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones/ según la fe de tus siervos/ por tu bondad y tu gracia/ dale al esfuerzo su merito/ salva al que busca salvarse / y danos tu gozo eterno. Amén.

34. Canto: A que tú no sabes lo que en la Iglesia pasó….

35. Signo de unidad: El que preside invita a todos agarrarse las manos en señal de unidad.Celebremos con alegría este gran acontecimiento. Tenemos en nuestro

interior y en medio de la comunidad el amor de Dios que se ha derramado sobre nosotros. El nos une como la gran familia de discípulos misioneros de Jesucristo. Por eso, animados por el Espíritu Santo, atrevámonos a decirle al Padre: Padre nuestro...

Nuestra Madre María acompañó a los apóstoles en el primer Pentecostés. También nos acompañó esta noche a nosotros. Saludemos su presencia cantándole el AVE MARÍA...

36. Compartamos nuestra experienciaEn cada grupo comparten unos con otros lo que han experimentado

esta noche. Comuniquémonos mutuamente la alegría del Espíritu Santo. Luego, algunos dan su propia experiencia a toda la Asamblea.

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37. ConclusiónSe proclama el lema del año: “Amor y solidaridad, camino de santidad”.

Digamos también el lema del mes: “Hágase en mí según tu palabra”.

38. Bendición finalSi quien preside es sacerdote o diácono, recibimos su bendición. Si no

todos dicen juntos. “El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos guarde en vida eterna”.

39. Brindis y fiesta: Se concluye con un compartir fraterno. Se come juntos y se comparten

cantos y danzas. Cantos de animación mientras se comparte el brindis

40. Canto: Nos envías por el mundo….

Acción significativa del sectorSemana del 24 Mayo-30 de Mayo 2015

Hágase en mí según tu palabra” (Lc 1, 38)

Orientaciones para este encuentro: Ambientar el espacio con flores, frases alusivas al día de las madres, láminas o cuadros con madres con sus hijos, sobre todo que denoten la disponibilidad de las madres colocar el lema y el valor del mes, se pone música alusiva a la celebración. Los jóvenes y los niños pueden dramatizar las lecturas (Lc1, 26-56). Preparar brindis, regalos y reconocimientos para las madres.

1. Acogida y bienvenida a las madres: Se colocan distintivos a las madres asistentes con mensajes alusivos a

la dedicación y a la disponibilidad de las madres con los hijos como la madre María estuvo disponible para Dios. Cada distintivo tendrá un numerito detrás para las rifas . También se le puede entregar una flor o un detalle a cada madre cuando llegue.

2. Cantos de bienvenida alusivos a las madres.

3. Lectura bíblica: Lucas 1,26-56.Se puede dramatizar, o se puede repartir por versículos a diferentes hijos

para que estos lo lean en el momento indicado. Destacar que nos dice la

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lectura con relación a nuestra madre y tomando en consideración que a María no le importaba ser madre soltera ante los ojos del mundo, ella estaba disponible para acatar la voluntad de Dios

4. Reflexión: Hoy dedicamos este homenaje a todas las madres de nuestra

comunidad especialmente a aquellas que por una razón u otra han tenido que asumir toda la responsabilidad del hogar. Con su esfuerzo y ayuda de Dios han podido sacar hacia delante su familia siempre dispuestas a darlo todo para que sus hijos crezcan con dignidad. A ellas nuestro respeto y nuestro reconocimiento especial en este día A esa madre que ha puesto en Dios todas sus esperanzas enseñando a cada hijo el valor de la fe y su disponibilidad ante Dios.

Oremos para que la familia se fortalezca y que en cada hogar de nuestra comunidad brille la luz de la esperanza de un mejor futuro, con Cristo como estandarte y María como ejemplo de disponibilidad

5. Piropos para mamáSe escriben en tarjetitas los versos de Prov. 31,10-31 y cada hijo se pone

en frente de su madre y le recita el verso que le tocó y le explica porque se lo dedica a ella y luego le da un fuerte abrazo dándole la gracia por ser su madre.

6. Momento de oración: Demos gracias a Dios por nuestras madres y pidamos por ellas. Se eligen

diferentes hijos para que hagan las peticiones y den gracias al Señor por sus madres y a la madre María se saluda con una Salve.

7. Momento cultural en honor a las Madres: Sociodramas canciones poesías decimas dedicadas a las madres

preparadas por los hijos

8. TestimoniosSe le pide a algunas madres que nos den su testimonio de cómo han

podido llevar su misión de madres, a veces sin el apoyo de un padre. Pedirle a algunos hijos que nos hablen de ese don de disponibilidad de sus madres

9. Rifas y entrega de reconocimientos y regalos a esas madres que han podido sacar a su familia hacia delante solas o junto a su esposo.

10.Oración finalSe pide la bendición de las madres. Todas se ponen en el centro y los

presentes extienden sobre ellas sus manos y juntos piden la bendición por las madres.

11. Brindis

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Lecturas y meditaciones diariasCelebraciones Dominicales

Las citas de las Lecturas Diarias utilizadas son tomadas de: Calendario Litúrgico 2015 de la Conferencia del Episcopado

Dominicano

1 Feria o Memoria Libre: San José Obrero

Viernes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 13,26-33 En aquellos días, habiendo llegado Pablo a Antioquía decía en la

sinagoga: “Hermanos, descendientes de Abrahán y todos los que temen a Dios: A ustedes se les ha enviado este mensaje de salvación. Los habitantes de Jerusalén y sus autoridades no reconocieron a Jesús ni entendieron las profecías que se leen los sábados, pero las cumplieron al condenarlo. Aunque no encontraron nada que mereciera la muerte, le pidieron a Pilato que lo mandara ejecutar. Y, cuando cumplieron todo lo que estaba escrito de Él, lo bajaron del madero y lo enterraron. Pero Dios lo resucitó de entre los muertos. Durante muchos días, se apareció a los que lo habían acompañado de Galilea a Jerusalén, y ellos son ahora sus testigos ante el pueblo. Nosotros les anunciamos la Buena Noticia de que la promesa que Dios hizo a nuestros padres, nos la ha cumplido a los hijos resucitando a Jesús. Así está escrito en el Salmo segundo: “Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy.” Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 2 “Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy.”

“Yo mismo he establecido a mi rey en Sión, mi monte santo.” Voy a proclamar el decreto del Señor; “Él me ha dicho: Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy.” R.

“Pídemelo: te daré en herencia las naciones, en posesión, los confines de la tierra: los gobernarás con cetro de hierro, los quebrarás como jarro de loza.” R.

Y ahora, reyes, sean sensatos; / escarmienten, los que rigen la tierra: / sirvan al Señor con temor, / ríndanle homenaje temblando. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 14, 1-6 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “Que no tiemble su corazón:

Crean en Dios y crean también en mí. En la Casa de mi Padre hay muchas estancias; si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes. Yo voy a prepararles un lugar. Y cuando haya ido y les haya preparado un lugar, volveré otra vez para llevarlos conmigo, a fin de que donde yo esté, estén también ustedes. Ya conocen el camino del lugar adonde voy”. Tomás le dijo: “Señor, no sabemos adónde vas. ¿Cómo vamos a conocer el camino?”. Jesús le respondió: “Yo

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soy el Camino, y la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Palabra del Señor.

Meditación

En este día tan especial de San José obrero, Patrono de los trabajadores, encontramos a un hombre modelo de trabajo, de entrega, sacrificio y santidad. Por su fe y humildad es reconocido en la Iglesia como un hombre de gran santidad. San José es cabeza de la Sagrada Familia. El hombre en quien Dios confió sus más valiosos tesoros. Esposo de María Santísima, madre virginal de Jesús. No hay en el cielo santo más grande después de su esposa, María.

Todos sabemos que San José fue un trabajador por cuenta propia, mejor dicho, era artesano, de esas personas que trabajan con sus manos, la tradición lo pone como carpintero; pero nos lo podemos figurar como uno de esos carpinteros que lleva en un saco un martillo, un serrucho, unos clavos, y muchas ganas de hacer las cosas bien para arreglar lo que haga falta.

El trabajo puede ser ejercido por cuenta propia o bajo condición de dependencia. En todo caso, lo importante es que se haga animado por el valor de la equidad, que se enraíza en la justicia.

Estamos invitados a educarnos y educar, sobre todo con el testimonio de vida, en un acto de conversión en el proceso de pasar del culto al dinero, del tener y del poder, a la práctica de una cultura animada por los valores de la laboriosidad, la austeridad, la solidaridad, la fraternidad, la caridad, que nos convierta en productores de alimentos para el cuerpo y para el alma.

No podemos olvidar que el trabajo es un mandato de Dios desde el momento de la creación, ya que puso al hombre en el jardín para que “lo cuidara y cultivara”. Nuestro trabajo tiene por deber cuidar y cultivar la naturaleza, es decir tenemos que hacer que la tierra produzca bienes para todas las personas. Un cristiano que no quiera trabajar, que se borre, bien sea que deje de ser vago y haragán, o que deje de ser cristiano. El trabajo es para el desarrollo personal, familiar y social. En el día de hoy debemos plantearnos el tema del trabajo, de su justa remuneración y es oportuno orar, reflexionar y presionar para que se haga pronto una ley sobre los sueldos mínimos que sea una ley justa y sirva para el desarrollo de todas las familias dominicanas. Desde la fe, el pago del trabajo debería ser para cubrir las necesidades familiares.

El lema de este mes es la disponibilidad. San José es un ejemplo de estar dispuesto a asumir la misión encomendada por Dios, aunque ello suponga renunciar a sus propios planes. También el tema de la disponibilidad tiene mucho que ver con el trabajo. Hay muchas personas dispuestas a trabajar y no encuentran trabajo, o no le encuentran en su área profesional, o está mal pagado. Oremos y presionemos para que haya más trabajo y mejor remunerado.

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2 Memoria Obligatoria San Atanasio, Obispo y Doctor de la Iglesia

Sábado Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 13, 44-52 El sábado siguiente, casi toda la ciudad acudió a oír la palabra de Dios. Al

ver el gentío, a los judíos les dio mucha envidia y respondían con insultos a las palabras de Pablo. Entonces Pablo y Bernabé dijeron sin contemplaciones: “Teníamos que anunciarles primero a ustedes la palabra de Dios; pero como la rechazan y no se consideran dignos de la vida eterna, sepan que nos dedicamos a los gentiles.

Así nos lo ha mandado el Señor: “Yo te haré luz de los gentiles, para que lleves la salvación hasta el extremo de la tierra.” “Cuando los gentiles oyeron esto, se alegraron y alababan la palabra del Señor; y los que estaban destinados a la vida eterna creyeron. La palabra del Señor se iba difundiendo por toda la región. Pero los judíos incitaron a las señoras distinguidas y devotas y a los principales de la ciudad, provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé y los expulsaron del territorio. Ellos sacudieron el polvo de los pies, como protesta contra la ciudad, y se fueron a Iconio. Los discípulos quedaron llenos de alegría y de Espíritu Santo. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 97“Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro

Dios.”Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra

le ha dado la victoria, su santo brazo. R.El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se

acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.

Aclama al Señor, tierra entera; griten, vitoreen, toquen. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 14, 7-14 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “Si me conocen a mí,

conocerán también a mi Padre. Ahora ya lo conocen y lo han visto.” Felipe le dice: “Señor, muéstranos al Padre y nos basta.” Jesús le replica: “Hace tanto que estoy con ustedes, ¿y no me conoces, Felipe? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: “Muéstranos al Padre”? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo les digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre, que permanece en mí, hace sus obras. Créanme: yo estoy en el Padre, y el Padre en mí. Si no, crean a las obras. Se lo aseguro: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aún mayores. Porque yo me voy al Padre; y lo que pidan en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si me piden algo en mi nombre, yo lo haré.” Palabra del Señor

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Meditación

La Palabra de Dios, que nos trae el Libro de los Hechos de los Apóstoles en el día de hoy, nos sirve de estímulo para seguir adelante en cualquier actividad con la que nos hayamos comprometido, sobre todo cuando estamos convencidos de que nuestro esfuerzo está orientado a hacer el bien.

El ejemplo que nos dan hoy Pablo y Bernabé nos estimula a seguir siempre hacia adelante, aunque se requiera cambiar de ruta, lugar o comunidad.“Teníamos que anunciarles primero a ustedes la Palabra de Dios”. De esta afirmación, se deduce una primacía, pero no una exclusividad. En otro lugar, la Buena Noticia nos enseña: “Hay últimos que serán primeros”. Esta afirmación sigue dejando las puertas abiertas a todos y todas.

Este texto de Hechos nos presenta dos claras actitudes; la de los jefes de los judíos que no están dispuestos a escuchar ni acoger la Palabra, y la de los gentiles, que están muy dispuestos a acoger esa Palabra y se llenan de alegría ante el mensaje de salvación.

En el evangelio de hoy tenemos dos partes: 1),el tema es el conocimiento de Dios, 2), la eficacia de la fe. El conocimiento del Padre está condicionado al conocimiento de Jesús porque, como acaba de afirmar Cristo, Él es el camino, la verdad y la vida. “Si me conocieran a mí, conocieran también a mi Padre”.

Jesús es la imagen visible y el rostro humano de Dios. Así el que ve a Cristo, conoce y ve al Padre. Pero ni ese “ver” es físico ni este “conocer” es meramente intelectual.

En el evangelio de Juan, la unidad de sentido que forman los verbos ver, conocer y creer es intercambiable, equivalente, por demás casi sinónimo. El “conocer” de la fe, según el pensamiento bíblico que Juan refleja aquí es ante todo contacto y experiencia personal de Dios a través de su Hijo, totalmente identificado con el Padre en su ser, querer y actuar.

En cuanto a la eficacia de la fe dice Jesús: “Les aseguro, el que cree en mí también el hará las obras que yo hago y aún mayores”. La contemplación del Padre en la persona y obra del Hijo se hace extensiva a la conducta del cristiano, que se convierte también en signo de la presencia de Dios en el mundo. Finalmente, la fe, unida a la oración, alcanzará de Jesús cuanto se le pide en su nombre, es decir, con tal de permanecer unidos a Cristo, como él lo está con el Padre.

3 V Domingo de Pascua

Primera Semana Liturgia de las Horas Blanco

“Disponibles para dar frutos unidos a Cristo”

Orientaciones para esta Celebración: Hoy es el primer domingo del mes de mayo. Por tanto, presentemos el valor del mes, que es la

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Disponibilidad y su lema: “Hágase en mí según tu palabra”. Podemos llevarlo en la procesión de entrada junto con el cuadro o imagen de la Virgen adornado con flores, por ser el mes de María. Se tiene la aspersión con el agua bendita como acto penitencial. Se pueden cantar las flores a María antes de la Bendición trayendo las familias presentes una flor a María.

Monición ambiental: Queridos hermanos y hermanos: Celebramos

hoy el Quinto Domingo del Tiempo Pascual al iniciar el primer domingo del mes de Mayo de 2015.

Mayo es un mes dedicado a la Virgen María, la flor más hermosa del jardín, siguiendo una tradición de nuestra Iglesia. Al mismo tiempo, el valor que cultivaremos en este mes es la disponibilidad, que es condición para que podamos entregarnos a Dios y para hacer nuestras las necesidades de los demás, especialmente de los más pobres.

Disponibilidad es lo que muestra María al decirle a Dios “Hágase en mí según tu palabra”. Palabras que vivió hasta el final, de verdad y con obras, fruto de su amor a Dios y a los demás.

Disponibilidad es lo que pide el Señor a todos y a todas. De modo especial, los consagrados y consagradas están llamados a dar testimonio de absoluta disponibilidad como María a la voluntad del Señor que se manifiesta a lo largo de nuestras vidas. Para vivir en esta disponibilidad que dé frutos buenos es necesario estar íntimamente unidos a Cristo como las ramas al tronco del árbol como nos recuerda el Evangelio de hoy y el apóstol Pablo. Unámonos al Señor en esta Eucaristía y pidamos su gracia para siempre estar disponibles en todo momento y lugar a realizar su Reino entre nosotros. Lo recibimos cantando a El, que viene a presidir la Celebración a través de su ministro.

Primera lectura: Hechos 9,26-31Aunque con razón la primera comunidad, dudaba de Pablo y empezó a

ser perseguido, él se muestra disponible para anunciar el Evangelio en todas partes. Así nos enseña que los problemas que tengamos no pueden quitarnos la disponibilidad para servir al Señor y a los hermanos. Escuchemos.

Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 9,26-31En aquellos días, llegado Pablo a Jerusalén, trataba de juntarse con los

discípulos, porque no se fiaban de que fuera realmente discípulo. Entonces Bernabé se lo presentó a los apóstoles. Saulo les contó cómo había visto al Señor en el camino, lo que le había dicho y cómo en Damasco había predicado públicamente el nombre de Jesús. Saulo se quedó con ellos y se movía libremente en Jerusalén, predicando públicamente el nombre del Señor. Hablaba y discutía también con los judíos de lengua griega, que se

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propusieron suprimirlo. Al enterarse los hermanos, lo bajaron a Cesarea y lo enviaron a Tarso. Entre tanto, la Iglesia gozaba de paz en toda Judea, Galilea y Samaria. Se iba construyendo y progresaba en la fidelidad al Señor, y se multiplicaba, animada por el Espíritu Santo.Palabra de Dios

Salmo Responsorial 21R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Cumpliré mis votos delante de sus fieles.Los desvalidos comerán hasta saciarse,alabarán al Señor los que lo buscan:viva su corazón por siempre. R/.

Lo recordarán y volverán al Señor hasta de los confines del orbe;en su presencia se postrarán las familias de los pueblos.Ante él se postrarán las cenizas de la tumba,ante él se inclinarán los que bajan al polvo. R/.

Me hará vivir para él, mi descendencia le servirá,hablarán del Señor a la generación futura,contarán su justicia al pueblo que ha de nacer: todo lo que hizo el Señor. R/.

Segunda lectura: Primera carta de san Juan 3,18-24:El amor hace surgir en nosotros la disponibilidad a realizar las obras que

necesitan los demás especialmente los más pobres. Para esto es necesario creer y permanecer en Jesucristo, quien siempre estuvo disponible para amar de verdad y con obras. Escuchemos.

Lectura de la primera carta del apóstol san Juan Hijos míos, no amemos de palabra y de boca, sino de verdad y con

obras. En esto conoceremos que somos de la verdad y tranquilizaremos nuestra conciencia ante él, en caso de que nos condene nuestra conciencia, pues Dios es mayor que nuestra conciencia y conoce todo. Queridos, si la conciencia no nos condena, tenemos plena confianza ante Dios. Y cuanto pidamos lo recibimos de él, porque guardamos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada. Y éste es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo, Jesucristo, y que nos amemos unos a otros, tal como nos lo mandó. Quien guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él; en esto conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio. Palabra de Dios.

Aleluya Jn15,4-5bPermanezcan en mi y yo en ustedes, dice el Señor,

el que permanece en mi da fruto abundante.

Evangelio: Juan 15,1-8:El Evangelio de Juan nos dice que cada cristiano y cristiana somos ramas

de un árbol cuyo tronco es Cristo. Para permanecer siempre dispuestos a realizar la obra de Cristo que es el Reino de su Padre es necesario estar unidos a El. Preparémonos a escuchar su voz aclamándolo con alegría.

Lectura del santo evangelio según san JuanEn aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Yo soy la verdadera vid,

y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento mío que no da fruto lo arranca,

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y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto. Ustedes ya están limpios por las palabras que les he hablado; permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante; porque sin mí no pueden hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecen en mí, y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que desean, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que den fruto abundante; así serán discípulos míos.» Palabra del Señor.

Oración de los fielesEl que preside: Jesús nos ha dicho en el Evangelio de hoy que si

permanecemos unidos a Él, lo que pidamos al Padre nos lo va a conceder; por ello, con confianza, a cada oración respondemos: Que permanezcamos unidos a Cristo.1. Oremos por la unidad de la Iglesia, que sea una verdadera comunidad y

produzca los frutos del amor y la unidad. Oremos.2. Por los que gobiernan las naciones para que estén siempre dispuestos a

trabajar por el bien común de su pueblo. Oremos.3. Por los más pobres que nosotros para que unidos a Cristo estén

dispuestos a organizarse y a buscar salida a sus problemas. Oremos. 4. Por esta Asamblea, para que vivamos unidos a Cristo y estemos

dispuestos y dispuestas a colaborar en la solución de los problemas de República Dominicana. Oremos.

5. Por nuestras familias y por todas las familias de nuestra patria, para que vivan unidas a Cristo y den los frutos buenos y verdaderos.Oremos

6. Por los Consagrados y Consagradas, de manera especial por los Institutos Seculares Masculinos, para que vivan dispuestos a seguir a Cristo en las personas más pobres y necesitadas. Oremos.

Quien preside: Escucha Padre nuestras súplicas. Unenos más y más a tu Hijo para que como El estemos dispuestos a realizar en todo tu voluntad. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén

4 Feria de Pascua

Lunes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 14, 5 -18 En aquellos días, se produjeron en Iconio conatos de parte de los gentiles

y de los judíos, a sabiendas de las autoridades, para maltratar y apedrear a Pablo y a Bernabé; ellos se dieron cuenta de la situación y se escaparon a Licaonia, a las ciudades de Listra y Derbe y alrededores, donde predicaron el Evangelio. Había en Listra un hombre lisiado y cojo de nacimiento, que nunca había podido andar. Escuchaba las palabras de Pablo, y Pablo,

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viendo que tenía una fe capaz de curarlo, le gritó, mirándolo: “Levántate, ponte derecho.” El hombre dio un salto y echó a andar. Al ver lo que Pablo había hecho, el gentío exclamó en la lengua de Licaonia: “Dioses en figura de hombres han bajado a visitarnos.” A Bernabé lo llamaban Zeus, y a Pablo, Hermes, porque se encargaba de hablar. El sacerdote del templo de Zeus que estaba a la entrena de la ciudad, trajo a las puertas toros y guirnaldas y, con la gente, quería ofrecerles un sacrificio.

Al darse cuenta los apóstoles Bernabé y Pablo, se rasgaron el manto e irrumpieron por medio del gentío, gritando: “Hombres, ¿qué hacen? Nosotros somos mortales igual que ustedes; les predicamos el Evangelio para que dejen los dioses falsos y se conviertan al Dios vivo que hizo el cielo, la tierra y el mar y todo lo que contienen. En el pasado, dejó que cada pueblo siguiera su camino; aunque siempre se dio a conocer por sus beneficios, mandándoles desde el cielo la lluvia y las cosechas a sus tiempos, dándoles comida y alegría en abundancia.” Con estas palabras disuadieron al gentío, aunque a duras penas, de que les ofrecieran sacrificios. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 113“No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria.”

No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria, por tu bondad, por tu lealtad. ¿Por qué han de decir las naciones: “Dónde está su Dios”? R.

Nuestro Dios está en el cielo, lo que quiere lo hace. Sus ídolos, en cambio, son plata y oro, hechura de manos humanas. R.

Benditos sean del Señor, que hizo el cielo y la tierra. El cielo pertenece al Señor, la tierra se la ha dado a los hombres. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 14, 21-26 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “El que acepta mis

mandamientos y los guarda, ése me ama; al que me ama lo amará mi Padre, y yo también lo amaré y me revelaré a él.” Le dijo Judas, no el Iscariote: “Señor, ¿qué ha sucedido para que te reveles a nosotros y no al mundo?” Respondió Jesús y le dijo: “El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él. El que no me ama no guardará mis palabras. Y la palabra que están oyendo no es mía, sino del Padre que me envió. Les he hablado de esto ahora que estoy a su lado, pero el Defensor, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien les lo enseñe todo y les vaya recordando todo lo que les he dicho.” Palabra del Señor.

Meditación

Jesucristo nos presenta, hoy, la Trinidad de Dios, que es Familia Divina con una unión indisoluble entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Y como nos vamos acercando a Pentecostés, cada vez nos habla más del Espíritu Santo y su presencia. Jesucristo, ya como Evangelio del Padre, y miembro

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del modelo de Jesús prosigue su conversacion de despedida. Aunque Él se ausenta se mostrará al que lo ama, es decir, al que guarda su palabra o mandamientos.

Los apostoles son conscientes de que hasta aquel momento Jesús no se había manifestado ante el pueblo con poder, sino en actitud humilde, y que su figura había suscitado el rechazo de los jefes y la indiferencia de las masas. Pero ahora, cuando Cristo empieza a hablar de su obra y de su glorificacion, no entienden por qué no avasallar con fuerza.

Entonces Jesús declara que Él, lo mismo que el reino de Dios que encarna en su persona, no se manifestará con sensacionalismo, sino en la intimidad y solo a los creyentes, a los que unen en su vida la escucha de su palabra y su complimiento, mediante el amor. Así,el Padre, Jesús y el discípulo formarán un círculo de amor que irá descubriendo a las personas en un acontecimiento mutuo cada vez mas profundo. Algo que no tiene el mundo, el enemigo de Dios, el cual, su falta de obediencia y de amor, le impide tener parte alguna en la manifestacion del Padre y del Hijo.

En la lectura de Hechos de los Apóstoles se nos presenta un caso en el que Pablo también combate el sensacionalismo. El milagro solo lo hace Dios. Pablo no quiere aprovechar el éxito para sí, sino para la evangelización. En nuestra vida hay épocas de éxitos y de fracasos, debemos estar dispuestos a todo, a acoger todo,sin perder en ningún momento la paz y el equilibrio interior, y sobre todo sin permitir que nada ni nadie nos desvíe de nuestra fe y de nuestro propósito de dar testimonio de Jesús en el mundo de hoy. No podemos “endiosarnos”, quitarle los méritos a Dios para ponérnoslos nosotros y nosotras. Para nosotros es una opción práctica lo repetido en el salmo de hoy: “No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria”

A nosotros, los fieles discípulos misioneros de Jesucristo nos corresponde encarnar su palabra en la iglesia y en la sociedad, para crear modelos de familias humanas que, como células vitales, contribuyamos al desarrollo integral en función del bien común, y la solidaridad, que trasciende el tiempo y el espacio, desde aquí hasta la eternidad.

5 Feria de Pascua

Martes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 14,19-28 En aquellos días, llegaron unos judíos de Antioquía y de Iconio y se

ganaron a la gente; apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera de la ciudad, dejándolo por muerto. Entonces lo rodearon los discípulos; él se levantó y volvió a la ciudad. Al día siguiente, salió con Bernabé para Derbe; después de predicar el Evangelio en aquella ciudad y de ganar bastantes discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía, animando a los discípulos y exhortándolos a perseverar en la fe, diciéndoles que hay que pasar mucho para entrar en el reino de Dios. En cada Iglesia designaban presbíteros, oraban, ayunaban y los encomendaban al Señor, en quien habían creído. Atravesaron Pisidia y llegaron a Panfilia. Predicaron en Perge, bajaron a

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Atalía y allí se embarcaron para Antioquía, de donde los habían enviado, con la gracia de Dios, a la misión que acababan de cumplir. Al llegar, reunieron a la Iglesia, les contaron lo que Dios había hecho por medio de ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe. Se quedaron allí bastante tiempo con los discípulos. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 144 “Que tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado.”

Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R.

Explicando tus hazañas a los hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R.

Pronuncie mi boca la alabanza del Señor, todo viviente bendiga su santo nombre por siempre jamás. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 14, 27-31a En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “La paz les dejo, mi paz les

doy; no se la doy yo como la da el mundo. Que no tiemble su corazón ni se acobarde. Me han oído decir: ‘Me voy y vuelvo a su lado.’ Si me amaran, se alegrarían de que vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Se lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, sigan creyendo. Ya no hablaré mucho con ustedes, pues se acerca el Príncipe del mundo; no es que él tenga poder sobre mí, pero es necesario que el mundo comprenda que yo amo al Padre, y que lo que el Padre me manda yo lo hago.”Palabra del Señor

Meditación

El párrafo de Hechos de los Apóstoles de hoy presenta una escena completamente distinta a la de ayer. Hoy nos encontramos con Pablo apedreado y casi muerto a golpes; ayer era considerado como un Dios. En las estas circunstancias Pablo se pone en las manos de Dios. Como decíamos ayer, la fe es la disponibilidad de tener a Dios en el centro de la vida. También nosotros y nosotras, como Pablo, encontramos dificultades en la vida, tal vez no sea como para matarnos ni apedrearnos, pero sí, la indiferencia, el señalarnos con el dedo, el reirse de nosotros y nosotras. En esos momentos debemos estar dispuestos a no volver atrás, sino todo lo contrario, a perseverar en la fidelidad a Cristo y en seguir dando testimonio de nuestra fe.Hoy podemos recordar a los hermanos y hermanas perseguidos y que están siendo matados por ser cristianos.

También esta primea lectura destaca el actuar de la comunidad, que se va organizando: “En cada Iglesia designaban presbíteros”, y que escucha, acepta y aprueba el informe de los apóstoles. Los misioneros han actuado enviados por la comunidad. Desde otro punto de vista, podemos mirar que la Palabra de Dios, en el día de hoy, contenida tanto en el Libro de los Hechos de los Apóstoles como también en el Evangelio, nos invita a practicar los valores del pacifismo, la amabilidad, la valentía, la fidelidad, la perseverancia, el esfuerzo; como también a rechazar los antivalores de la

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violencia, la cobardía, la infidelidad, el relativismo, la pasividad. También nos enseña que el fruto de practicar los valores de la sana convivencia social, es la paz.

Queremos destacar el infinitivo del verbo practicar, porque todo valor, no pasa de ser una palabra que expresa la esencia de un criterio, que sólo adquiere seriedad, sino que se enraíza, en la fortaleza de unos principios normativos; aún así, para que dé abundantes y excelentes frutos, ambos tienen que encarnarse en una persona que lo asuma como virtud, que es la práctica de los valores y principios.

La paz de Cristo difiere absolutamente de la paz que da el mundo. La paz de Dios es don gratuito que brota del favor divino, es decir del amor del Padre y de Jesús a los suyos, que así se saben amados y reconciliados con Dios. Por eso es distinta la paz interesada y temporal que da el mundo, cifrada básicamente en la ausencia de guerra y de violencia o bien en el equilibrio de fuerzas. La paz de arriba alienta en el creyente la alegre seguridad de la permanente presencia de Cristo por su Espíritu.

6 Feria de Pascua

Miércoles Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 15,1-6 En aquellos días, unos que bajaron de Judea se pusieron a enseñar a

los hermanos que, si no se circuncidaban conforme a la tradición de Moisés, no podían salvarse. Esto provocó un altercado y una violenta discusión con Pablo y Bernabé; y se decidió que Pablo, Bernabé y algunos más subieran a Jerusalén a consultar a los apóstoles y presbíteros sobre la controversia. La Iglesia los proveyó para el viaje; atravesaron Fenicia y Samaria, contando a los hermanos cómo se convertían los gentiles y alegrándolos mucho con la noticia. Al llegar a Jerusalén, la Iglesia, los apóstoles y los presbíteros los recibieron muy bien; ellos contaron lo que Dios había hecho con ellos. Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían abrazado la fe, intervinieron, diciendo: “Hay que circuncidarlos y exigirles que guarden la ley de Moisés.” Los apóstoles y los presbíteros se reunieron a examinar el asunto. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 121“Vamos alegres a la casa del Señor.”

¡Qué alegría cuando me dijeron: “Vamos a la casa del Señor”! Ya están pisando nuestros pies tus umbrales, Jerusalén. R.

Allá suben las tribus, las tribus del Señor, según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella están los tribunales de justicia, en el palacio de David. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15,1-8 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “Yo soy la verdadera vid,

y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento mío que no da fruto lo arranca,

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y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto. Ustedes ya están limpios por las palabras que les he hablado; permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante; porque sin mí no pueden hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecen en mí, y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que deseen, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que den fruto abundante; así serán discípulos míos.” Palabra del Señor.

Meditación

En la primera lectura se nos presenta un problema, una discusión en la comunidad de Antioquía. El tema en principio parece sin importancia, pero no es así: ¿los cristianos deben cumplir o no cumplir todas las leyes judías? Ese tema es muy importante. ¿Los cristianos están dispuestos a cumplir esas leyes? Deciden que el asunto se resuelva en diálogo con los apóstoles en Jerusalén.

La lección de aquella comunidad es si estamos en disposición de dialogar o no. Hoy también tenemos discusiones en nuestra parroquia, sector, comunidad o grupo apostólico, y en ocasiones fuertes, porque unas personas están más apegadas a sus tradiciones, otras no saben abrirse a las novedad de la vida y de la historia, otras piensan que la razón está con ellas… ¿estamos dispuestos y dispuestas al diálogo? Ese es el ejemplo de la comunidad y de los apóstoles que escuchan a Pablo y Bernabé y escuchan a la otra parte. Se ponen en oración a estudiar el asunto. Las cosas nos irían mejor en la familia o en la comunidad si fuéramos más capaces de dialogar y de escuchar, y de hacerlo desde la fe. Buscando el bien común, la fidelidad a Cristo, y no la victoria personal.

Nuestro Señor Jesucristo, por medio del Evangelista San Juan, nos propone el plan de vida perfecto para alcanzar la vida eterna. En un corto discurso, pero con la mayor profundidad, San Juan, con la cercanía a Jesús que le confería su fiel amistad, la autoridad de ser uno de los doce apóstoles y su magisterio como evangelista, nos presenta lo que podríamos definir como una espiritualidad del seguimiento radical a Jesús.

Todas las palabras contenidas en este pasaje del Evangelio, enseñan un estilo de vida. Algunas las proponemos como de mayor significación: “Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador… Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos”.

Creemos que todo se resume en estas pocas líneas de la Palabra del Señor en este día: “Si permanecen en mí, y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que deseen, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que den fruto abundante; así serán discípulos míos.”

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7 Feria de Pascua

Jueves Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 15, 7-21 En aquellos días, después de una fuerte discusión, se levantó Pedro y

dijo a los apóstoles y a los presbíteros: «Hermanos, desde los primeros días, como saben, Dios me escogió entre ustedes para que los gentiles oyeran de mi boca el mensaje del Evangelio, y creyeran. Y Dios, que penetra los corazones, mostró su aprobación dándoles el Espíritu Santo igual que a nosotros. No hizo distinción entre ellos y nosotros, pues ha purificado sus corazones con la fe. ¿Por qué provocan a Dios ahora, imponiendo a esos discípulos una carga que ni nosotros ni nuestros padres hemos podido soportar? No, creemos que lo mismo ellos que nosotros nos salvamos por la gracia del Señor Jesús.»

Toda la asamblea hizo silencio para escuchar a Bernabé y Pablo, que les contaron los signos y prodigios que Dios había hecho por medio de ellos entre los gentiles. Cuando terminaron, Santiago resumió la discusión, diciendo: «Escúchenme, hermanos: Simón ha contado la primera intervención de Dios para escogerse un pueblo entre los gentiles. Esto responde a lo que dijeron los profetas: “Después volveré para levantar de nuevo la choza caída de David; levantaré sus ruinas y la pondré en pie, para que los demás hombres busquen al Señor, y todos los gentiles llevarán mi nombre: lo dice el Señor, que lo anunció desde antiguo.” Por eso, a mi parecer, no hay que molestar a los gentiles que se convierten a Dios; basta escribirles que no se contaminen con la idolatría ni con la fornicación y que no coman sangre ni animales estrangulados. Porque durante muchas generaciones, en la sinagoga de cada ciudad, han leído a Moisés todos los sábados y lo han explicado.» Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 95“Cuenten las maravillas del Señor a todas las naciones”

Canten al Señor un cántico nuevo, canten al Señor, toda la tierra; canten al Señor, bendigan su nombre. R.

Proclamen día tras día su victoria. Cuenten a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R.

Digan a los pueblos: «El Señor es rey, Él afianzó el orbe, y no se moverá; Él gobierna a los pueblos rectamente.» R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15, 9-11 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Como el Padre me ha

amado, así les he amado yo; permanezcan en mi amor. Si guardan mis mandamientos, permanecerán en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he hablado de esto para que mi alegría esté en ustedes, y su alegría llegue a plenitud.» Palabra del Señor.

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Meditación

En el Libro de los Hechos de los Apóstoles, leemos hoy la parte que se llama “el Concilio de Jerusalén”, porque allí estaban reunidos los apóstoles y la comunidad para tomar una decisión muy importante. San Pedro y San Pablo, compartiendo la armonía, en lo esencial, que es el amor a Dios y al prójimo, nos invitan a rechazar todo tipo de sectarismo, y a vivir la fraternidad incondicionalmente. Se puede pensar distinto y vivir en la amabilidad.

Las discusiones fueron fuertes pero tomaron una decisión abierta a la realidad y no quedándose con “siempre ha sido así”. La decisión tomada dice que los cristianos no son un grupo o una secta de los judíos, sino que es una comunidad completamente distinta y que no tiene que cumplir las leyes judías.

Esta decisión se toma después de oración, con la presencia del Espíritu Santo y con el diálogo entre todas las partes. Este es el ejemplo para nuestras familias, parroquias, grupos, sectores y comunidades. Además nos enseña la disponibilidad de apertura a los nuevos carismas en la Iglesia. Pero siempre con el Espíritu y el diálogo de por medio.

La idea central del evangelio de hoy es la unión permanente del discípulo con Jesús mediante el amor, es decir, mediante el cumplimiento de sus mandamientos; porque el amor se prueba en la obediencia de la fe. Este pequeño texto es una transición entre la comparación de la vid y la declaración de amistad que después hará Jesús a los que hasta entonces no eran más que sus discípulos.

¿Y cómo permanecer en el amor de Cristo? “Si guardan mis mandamientos, permanecerán en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor”. Afirma Jesús “El que me ama guardará mi palabra”. Las expresiones de Jesús: El que me ama y permanecerá en mi amor, serán entendidas en la luz de todo el mensaje de Cristo como la equivalencia a “el que ama al hermano me ama a mí”.

Jesús y sus discípulos de las primeras comunidades amaban a las personas, no por lo que poseían o aparentaban, llámese títulos, posesiones, cargos, dinero, influencia, o cualquier otra forma del tener. Amaban por lo que eran: un ser humano semejante a nosotros. Imitarlos es estar disponible, como María para que se realice el plan de Dios en nuestras vidas.

8 Feria de Pascua

Viernes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 15, 22-31 En aquellos días, los apóstoles y los presbíteros con toda la Iglesia

acordaron elegir algunos de ellos y mandarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé. Eligieron a Judas Barsabá y a Silas, miembros eminentes entre

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los hermanos, y les entregaron esta carta: «Los apóstoles y los presbíteros hermanos saludan a los hermanos de Antioquía, Siria y Cilicia convertidos del paganismo. Nos hemos enterado de que algunos de aquí, sin encargo nuestro, les han alarmado e inquietado con sus palabras. Hemos decidido por unanimidad, elegir algunos y enviárselos con nuestros queridos Bernabé y Pablo, que han dedicado su vida a la causa de nuestro Señor Jesucristo. En vista de esto, mandamos a Silas y a Judas, que les referirán de palabra lo que sigue: Hemos decidido el Espíritu Santo y nosotros, no imponerles más cargas que las indispensables: que se abstengan de carne sacrificada a los ídolos, de sangre, de animales estrangulados y de la fornicación. Harán bien en apartarse de todo esto. Salud.»

Los despidieron, y ellos bajaron a Antioquía, donde reunieron a la Iglesia y entregaron la carta. Al leer aquellas palabras alentadoras, se alegraron mucho. Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 56“Te daré gracias ante los pueblos, Señor”

Mi corazón está firme, Dios mío, mi corazón está firme. Voy a cantar y a tocar despierta, gloria mía; despierten, cítara y arpa; despertaré a la aurora. R.

Te daré gracias ante los pueblos, Señor; tocaré para ti ante las naciones por tu bondad, que es más grande que los cielos; por tu fidelidad, que alcanza a las nubes. Elévate sobre el cielo, Dios mío, y llene la tierra tu gloria. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15,12-17 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Este es mi mandamiento:

que se amen unos a otros como yo les he amado. Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no les llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a ustedes les llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre se lo he dado a conocer. No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien les he elegido y les he destinado para que vayan y den fruto, y su fruto dure. De modo que lo que pidan al Padre en mi nombre se lo dé. Esto les mando: que se amen unos a otros.»Palabra del Señor

Meditación

Según nos enseña el libro de Los Hechos de Los Apóstoles, Antioquía es una comunidad en la que, por el comportamiento de los primeros cristianos, se hace acreedora de admiración porque, a pesar de la gran proporción de conversos del paganismo, su fidelidad al cristianismo era notoria.

La admiración de los seguidores de Jesucristo, de hoy día, a la comunidad de Antioquía, merece una doble razón; en primer lugar su comportamiento, y, en segundo término, el origen histórico del nombre de cristiano que hemos asumido.

El comportamiento de los Apóstoles, con Pedro a la cabeza, es digno de imitación por los cristianos de hoy, por su sentido de fraternidad, de corresponsabilidad y, sobre todo, por su espiritualidad, como lo indica

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la carta dirigida a las comunidades de Antioquía, Siria y Cilicia: “Hemos decidido el Espíritu Santo y nosotros, no imponerles más cargas que las indispensables”.

El discurso de los Apóstoles al invitar al Espíritu Santo a participar de una decisión tan delicada, como es asumir la responsabilidad de la solución de un conflicto, nos deja una profunda enseñanza válida para nosotros cristianos de hoy.

Si la familia, la parroquia, el sector o la comunidad se reúnen a tomar una decisión importante, y en ella está presente el Espíritu Santo, las decisiones serán las mismas que en Hechos de los apóstoles: “no imponer más cargas que las imprescindibles”. En ocasiones nos empeñamos en imponer cosas que no son necesarias, por ejemplo la uniformidad en aspectos no centrales o importantes. Esta lectura nos pide la disponibilidad a ser tolerantes, respetuosos, dialogantes con las diferencias de carácter, cultura y opinión.

En el texto evangélico de hoy nos encontramos con dos ideas básicas: la amistad de Jesús con sus discípulos y, como consecuencia, el amor fraterno. El texto comienza y termina con la misma consigna: el mandamiento del Señor sobre el amor fraterno. Según el deseo explícito de Jesús, los creyentes deben amarse mutuamente. ¿Por qué? Porque ellos han sido previamente amados por él.

Amor, obediencia y amistad son términos que expresan la comunión entre Jesús y los suyos. Así mismo el fruto necesario de esta amistad con Jesús es el amor mutuo de sus seguidores. El amor fraterno tiene, pues, su medida en el amor de Jesús que llegó hasta la entrega de la propia vida.

De todo esto debemos tener claro que el amor inicia y finaliza en Dios, pasando por el hermano. Amar en cristiano no es más que corresponder a Dios, devolverle su ternura, compartir con los demás el amor y la amistad que de Él recibimos gratuitamente por su hijo Jesús.

La amistad es disponibilidad a aceptar al otro o la otra como es, a amarle y a apoyarle como persona. Por tanto, a amistad de Cristo con nosotros es su disponibilidad a aceptarnos como somos y a querernos así como somos. La fe es una disposición de ánimo a amar a los demás. La fe que no pasa por el amor, será una fe vacía.

9 Feria de Pascua

Sábado Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 16,1-10 En aquellos días, Pablo fue a Derbe y luego a Listra. Había allí un

discípulo que se llamaba Timoteo, hijo de un griego y de una judía creyente. Los hermanos de Listra y de Iconio daban buenos informes de él. Pablo quiso llevárselo y lo circuncidó, por consideración a los judíos de la región, pues todos sabían que su padre era griego. Al pasar por las ciudades, comunicaban las decisiones de los apóstoles y presbíteros de Jerusalén, para que las observasen. Las Iglesias se robustecían en la fe y crecían en

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número de día en día. Como el Espíritu Santo les impidió anunciar la palabra en la provincia de Asia, atravesaron Frigia y Galacia. Al llegar a la frontera de Misia, intentaron entrar en Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo consintió. Entonces dejaron Misia a un lado y bajaron a Troas. Aquella noche Pablo tuvo una visión: se le apareció un macedonio, de pie, que le rogaba: «Ven a Macedonia y ayúdanos.» Apenas tuvo la visión, inmediatamente trataron de salir para Macedonia, seguros de que Dios los llamaba a predicarles el Evangelio. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 99“Aclama al Señor, tierra entera”

Aclama al Señor, tierra entera, sirvan al Señor con alegría, entren en su presencia con vítores. R.

Sepan que el Señor es Dios: que él nos hizo y somos suyos, su pueblo y ovejas de su rebaño. R.

El Señor es bueno, su misericordia es eterna, su fidelidad por todas las edades. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15,18-21 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Si el mundo les odia, sepan

que me ha odiado a mí antes que a ustedes. Si fueran del mundo, el mundo les amaría como cosa suya, pero como no son del mundo, sino que yo les he escogido sacándolos del mundo, por eso el mundo les odia. Recuerden lo que les dije: ‘No es el siervo más que su amo. Si a mí me han perseguido, también a ustedes les perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la de ustedes.’ Y todo eso lo harán con ustedes a causa de mi nombre, porque no conocen al que me envió.» Palabra del Señor

Meditación

La lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles, que nos presenta la liturgia del día de hoy, es reveladora del comportamiento de San Pablo, como promotor, dirigente y asesor de comunidades.

Su sabiduría integral, que incluye los valores de prudencia, respeto por la cultura de los pueblos para facilitar la inculturación del Evangelio, como también su disponibilidad para dejar que el Espíritu Santo lo dirija, expresan la excelencia del modelo propio del fundador y conductor. Aunque para San Pablo la fe en Jesucristo es el fundamento del discipulado, sin embargo, permite la circuncisión de su discípulo muy querido.

En esta lectura de hoy lo que más destaca es la presencia del Espíritu que les lleva de un lugar a otro, les dice dónde ir y dónde no. Pero esa presencia del Espíritu no es para gusto personal ni de manera individual, sino que es para bien de la comunidad y en comunicación con la comunidad. Para que no nos “sintamos inspirados” a hacer los que nos parece bueno o conveniente “porque me lo ha inspirado el Espíritu”, y eso queramos imponerlo a los demás. Será necesario consultarlo con la comunidad.En profundo contraste con el evangelio de ayer, cuyo tema era el amor

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fraterno, entre Jesús y sus amigos, y de éstos entre sí, en el de hoy constatan el odio del mundo a los discípulos de Cristo. Pero esto forma parte también de la comunión de vida con Jesús.

El tema hace resonancia a la experiencia de la persecución que las primeras comunidades tenían ya cuando se escribió el evangelio de Juan; persecuciones provenientes de la sinagoga judía y también, sutilmente, del imperio romano.

La palabra de Cristo, que el discípulo trata de encarnar en su vida, provoca frecuentemente el rechazo y la hostilidad del mundo. El verdadero creyente sufrirá por mantener su decisión por el Evangelio, pues sus criterios y prioridades chocarán con los del mundo, que se cierra a Dios porque lo desconoce.

Jesús nos dice que la fe es una decisión: o con Él o con el mundo. Cristo nos ha elegido del mundo para que le sigamos, no para que estemos de acuerdo con el mundo. ¿Somos bien visto por todos? ¿Nuestra Iglesia y comunidad es incómoda para el mundo, para el ambiente? Nuestra opción por Cristo es estar dispuestos y dispuestas a ser mal mirados, criticados y perseguidos por ser “molestos” o “incómodo” ante el mundo que nos rodea.¿Estamos dispuestos y dispuestas a aceptar los valores del mundo o los de Cristo?

10 VI Domingo de Pascua

II Semana de la Liturgia de las Hras Blanco

Jesús, el amigo siempre disponible para sus amigos y amigas

Orientaciones para la celebra-ción: En todos los domingos de mayo se puede llevar en procesión algún cuadro o imagen de María, y junto a ese cuadro el lema del mes: “Hágase en mí según tu palabra”. Llevemos visible el valor del mes: la Disponibili-dad. Se puede llevar también a un gru-po de amigos o de amigas recordando la amistad de Jesús. Se puede poner un gran corazón a la entrada de la Iglesia y pedirle que firmen todos los que amen a Jesús. Ese corazón se lleva en las ofrendas y se coloca en lugar visi-ble delante del altar como signo de que somos amigos del Señor, dispuestos a realizar lo que El quiera y pida. No dejemos de hacer la aspersión con el agua bendita, propia del tiempo Pascual.

Monición ambiental:Hermanos y hermanas: En este sexto Domingo de Pascua todo nos habla

del amor de Dios hacia nosotros que se manifiesta sin distinción de personas a través de su Hijo Jesucristo que con absoluta disponibilidad a la voluntad del Padre se entregó por nosotros.

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Jesús en este día nos hace una confesión de amor: Ustedes son mis amigos. Yo les he mostrado el amor más grande que puede tener un amigo que es dar la vida. Aunque se vaya físicamente, la amistad continúa, perdura.

Una de las características fundamentales de la amistad es la disponibilidad. El amigo o la amiga siempre están dispuestos a echar una mano al amigo o amiga que lo necesita; estar con el otro en cualquier momento o situación, eso es la amistad. Y así es Jesús: está con nosotros y nosotras.

Pero hay más, en lo humano decimos: “los amigos de mis amigos son mis amigos”. Apliquémoslo a nuestras vidas, los amigos de Jesús deben ser mis amigos. Tengo que preocuparme por los demás, debo estar dispuesto a echar una mano a los amigos y amigas de Jesús, a los demás, sobre todo a los más necesitados.

Que esta Eucaristía, presencia de la amistad de Jesús, nos dé la fuerza necesaria para sentir y llevar su amor en la vida de cada día siendo personas disponibles para servir a todos y a todas sin distinción como El.

Iniciemos nuestra Celebración recibiendo con cantos al gran Amigo que es Jesús que llega a presidirla a través de su ministro.

Primera Lectura: Hechos de los Apóstoles 10,25-26.34-35.44-48:Lo que aconteció en casa de Cornelio es lo que acontece hoy: Dios

no hace distinción de personas, razas ni naciones. Y, es lo que estamos llamados a vivir como Iglesia de puertas abiertas, siempre disponibles para comunicar el amor de Dios a todos y a todas sin discriminación. Escuchemos.

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles Cuando iba a entrar Pedro, salió Cornelio a su encuentro y se echó a sus pies

a modo de homenaje, pero Pedro lo alzó, diciendo: Levántate, que soy un hombre como tú.»Pedro tomó la palabra y dijo: «Está claro que Dios no hace distinciones; acepta al que lo teme y practica la justicia, sea de la nación que sea.»

Todavía estaba hablando Pedro, cuando cayó el Espíritu Santo sobre todos los que escuchaban sus palabras. Al oírlos hablar en lenguas extrañas y proclamar la grandeza de Dios, los creyentes circuncisos, que habían venido con Pedro, se sorprendieron de que el don del Espíritu Santo se derramara también sobre los gentiles.

Pedro añadió: «¿Se puede negar el agua del bautismo a los que han recibido el Espíritu Santo igual que nosotros?»Y mandó bautizarlos en el nombre de Jesucristo. Le rogaron que se quedara unos días con ellos.Palabra de Dios.

Salmo responsorial 97R/. El Señor revela a las naciones su justicia

Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas; su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/.

El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.

Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera, griten, vitoreen, toquen. R/.

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Segunda lectura. Primera carta de san Juan 4,7-10San Juan nos da la buena noticia del gran amor que Dios nos tiene hasta

entregarnos a su Hijo. Y este amor recibido nos lleva a amar a todos sin distinción, disponibles siempre para servirles, especialmente a los más pobres. Escuchemos.

Lectura de la primera carta del apóstol san Juan Amémonos unos a otros, ya que el amor es de Dios, y todo el que ama

ha nacido de Dios y conoce a Dios. Quien no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. En esto se manifestó el amor que Dios nos tiene: en que Dios envió al mundo a su Hijo único, para que vivamos por medio de él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su Hijo como víctima de propiciación por nuestros pecados. Palabra de Dios.

Aleluya Jn14,23El que me ama guardará mi palabra, dice el Señor y mi Padre lo amará,

y vendremos a él.

Evangelio: San Juan 15,9-17En este evangelio de San Juan, Jesús nos dice que somos afortunados

porque es Él quien nos ha elegido. Somos sus amigos, sus amigas, de esto no podemos dudar. Y nos llama a amar a los demás dispuestos a dar la vida como El, especialmente a quienes Él más ama que son los más necesitados.

Lectura del santo evangelio según san Juan En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Como el Padre me ha

amado, así los he amado yo; permanezcan en mi amor. Si guardan mis mandamientos, permanecerán en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.

Les he hablado de esto para que mi alegría esté en ustedes, y su alegría llegue a plenitud. Éste es mi mandamiento: que se amen unos a otros como yo les he amado. Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no les llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a ustedes les llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre se lo he dado a conocer. No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los he elegido y los he destinado para que vayan y den fruto, y su fruto dure. De modo que lo que pidan al Padre en mi nombre se lo dé. Esto les mando: que se amen unos a otros.» Palabra del Señor.

Oración de los FielesQuien preside: Por los méritos de Jesús, nuestro amigo, levantamos

nuestras oraciones al Padre Dios pidiendo por todo el mundo. A cada petición respondemos: Padre, ayúdanos a estar disponibles para amar como tu Hijo Jesús.1.- Por la Iglesia, para que lleve el amor y la amistad de Dios a todos los

pueblos, razas y culturas. Oremos

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2.- Por quienes nos gobiernan, para que se muestren disponibles con verdad y amor para terminar la violencia, la corrupción y la miseria de nuestra República Dominicana. Oremos

3.- Por los enfermos, quienes viven tristes, por quienes sienten que nadie les quiere, para que experimenten el amor de Dios a través de nuestra disponibilidad en el servicio a ellos. Oremos

4.- Para que defendamos la naturaleza, comenzando por la limpieza de nuestra casa, barrio, campo o calle, respetando el agua, las plantas y los animales, además de las personas. Oremos

5.- Para que las muchachas y muchachos llamados a la Vida Consagrada, estén dispuestos a dejarlo todo por seguir a Dios y responder a las necesidades de los más necesitados. Oremos

Quien preside: Acoge Padre nuestras súplicas confiados en tu gran amor hacia nosotros. Haz que de verdad experimentemos que Tú nos amas y así estemos dispuestos a amar a los demás sin ninguna distinción. Por Jesucristo nuestro amigo y Señor. Amén

11 Feria de Pascua

Lunes Blanco49º Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Mons. Priamo

Pericles Tejeda Rosario, Obispo Emérito de Baní

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 16, 11-15 Por aquellos días, nos embarcamos en Tróade y fuimos directos a

Samotracia. Al día siguiente fuimos a Neápolis, y de allí a Filipos, ciudad importante del distrito de Macedonia y colonia romana. Allí permanecimos algunos días.

El sábado salimos fuera de la ciudad y fuimos junto al río, donde pensábamos que se reunían para orar. Nos sentamos y estuvimos hablando con las mujeres que se habían reunido. Entre ellas había una llamada Lidia, que procedía de Tiátira y se dedicaba al comercio de telas. Lidia adoraba al verdadero Dios, y el Señor le abrió el corazón para que aceptara las palabras de Pablo. Después de haberse bautizado con toda su familia, nos suplicó: «Si consideran que mi fe en el Señor es sincera, entren y quédense en mi casa». Y nos obligó a ir. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 149“El Señor ama a su pueblo”

Canten al Señor un canto nuevo: alábenlo en la asamblea de los fieles, celebre Israel a su Creador, festejen los hijos de Sión a su Rey. R.

Que alaben su nombre con danzas, que toquen para él la pandereta y el arpa; porque el Señor aprecia a su pueblo y concede a los débiles la victoria. R.

Que los fieles festejen su gloria y canten jubilosos en filas: con vivas a Dios en la boca. R.

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Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15, 26- 16,4 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga el

Consolador, el Espíritu de la verdad que yo les enviaré y que procede del Padre, él dará testimonio de mí. Ustedes mismos serán mis testigos, porque han estado conmigo desde el principio.

Les he dicho todo esto, para que no pierdan la fe en la prueba. Porque los expulsarán de la sinagoga; más aún, llegará un momento en el que les quiten la vida pensando que así dan culto a Dios. Y actuarán así, porque no conocen al Padre ni me conocen a mí. Les digo esto de antemano, para que, cuando llegue la hora, recuerden que ya estaba anunciado». Palabra del Señor.

Meditación

En el evangelio de Juan leido hoy, Jesús promete a sus discípulos, y a cada uno de nosotros y nosotras, el Espíritu Santo, el Consolador. La presencia del Espíritu no solo trae consuelo, sino que les capacita para ser sus testigos. El Espíritu les dará la fuerza para que con su vida den testimonio, porque van a ser perseguidos como lo fue el mismo Maestro.

El odio con los seguidores se convertirá en persecución y hasta muerte. Esto será como continuidad del mismo sufrimiento de Cristo porque “El discípulo no es más que el maestro”.

A lo largo de toda la historia se ha dado esta persecución, a lo largo de toda la historia de la Iglesia ha habido testigos, y mártires; como lo sigue habiendo en nuestros días. En algunos países, grupos fanáticos de su religión están persiguiendo y matando, a veces de manera masiva, a muchos hermanos y hermanas cristianos. Mueren por su fe, mueren por ser testigos de Cristo.

El Espíritu llevará a los discípulos a la misión de predicar la buena Nueva. Aquí conectamos con la primera lectura, ya sabemos, por las lecturas de los días anteriores, que Pablo llega a Filipos movido por el Espíritu Santo. Una vez en esta ciudad se pone a predicar en un lugar que se nos hace un poco raro, la orilla del río.

El apóstol va allí porque es el lugar donde se reúne la gente. Es que siempre se adapta a las circunstancias que considera más convenientes para hacer presente el Evagelio, unas veces en las sinagogas, o en la cárcel, o en la plaza de Atenas, o a la orilla del río… con razón nos dirá el mismo Pablo “predica a tiempo y a destiempo”.

Y ese es el ejemplo para cada cristiano y cristiana y para las comunidades de hoy: debemos ser testigos en todas partes y en todo momento, en la familia, en el trabajo, en la escuela, en la calle, en la fiesta, en donde nos toque vivir.

Para esto nos hace falta el Espíritu Santo, pero también nuestra disponibilidad. Estar abiertos a ser testigos siempre, estar dispuestos a llevar el mensaje cristiano en el ambiente de nuestra vida. Muchas veces nos da miedo, o vergüenza defender la fe, defender la Iglesia, decir qué

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pensamos de tal tema religioso o moral, ¿será que no tenemos el Espíritu Santo o será que nos falta disponibilidad para vivir, testimoniar y defender nuestra fe?

12 Feria de Pascua

Martes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 16, 22-34 En aquellos días, la plebe de Filipos se amotinó contra Pablo y Silas, y los

magistrados dieron orden de que los desnudaran y los apalearan; después de molerlos a palos, los metieron en la cárcel, encargando al carcelero que los vigilara bien; según la orden recibida, los metió en la mazmorra y les sujetó los pies en el cepo. A eso de media noche, Pablo y Silas oraban cantando himnos a Dios. Los otros presos escuchaban. De repente, vino una sacudida tan violenta que temblaron los cimientos de la cárcel. Las puertas se abrieron de golpe, y a todos se les soltaron las cadenas. El carcelero se despertó y, al ver las puertas de la cárcel de par en par, sacó la espada para suicidarse, imaginando que los presos se habían fugado. Pablo lo llamó a gritos: «No te hagas nada, que estamos todos aquí.» El carcelero pidió una lámpara, saltó dentro, y se echó temblando a los pies de Pablo y Silas; los sacó y les preguntó: «Señores, ¿qué tengo que hacer para salvarme?» Le contestaron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia.» Y le explicaron la palabra del Señor, a él y a todos los de su casa. El carcelero se los llevó a aquellas horas de la noche, les lavó las heridas, y se bautizó en seguida con todos los suyos, los subió a su casa, les preparó la mesa, y celebraron una fiesta de familia por haber creído en Dios. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 137“Señor, tu derecha me salva”

Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti, me postraré hacia tu santuario. R.

Daré gracias a tu nombre por tu misericordia y tu lealtad. Cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma. R.

Tu derecha me salva. El Señor completará sus favores conmigo: Señor, tu misericordia es eterna, no abandones la obra de tus manos. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 16, 5-11 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Ahora me voy al que me

envió, y ninguno de ustedes me pregunta: ‘¿Adónde vas?’ Sino que, por haberles dicho esto, la tristeza les ha llenado el corazón. Sin embargo, lo que les digo es la verdad: les conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a ustedes el Defensor. En cambio, si me voy, se lo enviaré. Y cuando venga, dejará convicto al mundo con la prueba de un pecado, de una justicia, de una condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia, porque me voy al Padre, y no me verán; de una condena, porque el Príncipe de este mundo está condenado.»Palabra del Señor

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Meditación

La lectura de Hechos de los Apóstoles de ayer nos hablaba de éxito en la predicación y de tranquilidad a la orilla del río. Hoy no habla de aparente fracaso, de persecución, de una enorme paliza y de meterlos en la cárcel.

A partir de aquí lo que nos cuenta parece una de esas telenovelas que tanto gustan ver por nuestras tierras:

.- Apaleados como están, se ponen a cantar salmos en la noche;

.- un temblor de tierra, ¿coincidencia?, mueve el edificio y se abren las puertas de la cárcel, además de romper las cadenas de los presos;

.- Pablo no se escapa, al contrario, se preocupa por el carcelero y le salva la vida del suicidio;

.- después viene la convesión, la preparación del carcelero y su familia y el bautismo de todos;

.- y, claro, como las telenovelas, termina en fiesta.Pero no es una novela, es una realidad y una enseñanza: el fracaso se

convierte en un bien, y los apóstoles van a poder seguir predicando con libertad. Otra enseñanza es que aún heridos y golpeados, siguen alabando a Dios y predicando. Aprovechan todos los lugares y situaciones para hacer presente el mensaje cristiano. Este mismo tema lo comentábamos ayer. Y es el ejemplo de la total disponibilidad de Pablo y sus compañeros a hacer presente el Evangelio en todo momento y en todo lugar.

El Evangelio nos presenta a Jesús despidiéndose de sus discípulos. La tristeza de ellos es comprensible. “Cuando un amigo se va…” no queda más remedio que estar tristes; Jesús se les presentó como amigo y ahora dice que se va, y parece que de forma definitiva.

El mismo Jesús les da una pistas para que superen su tristeza: les conviene que se vaya, porque así podrá estar con ellos de otras muchas maneras; además cuando se vaya, no les va a dejar solos, sino que les enviará al Espíritu Consolador.

Nos hubiera gustado tener a Jesús “en persona”, en medio de nosotros, es que siempre nos gustan las seguridades y el poder tocarlo, como a Tomás el apóstol. Pero no nos ha abandonado ya que se ha quedado Él mismo de muchas maneras, y nos ha enviado al Espíritu para que nos acompañe.

Además tenemos la Eucaristía, esa presencia real y entrañable, del mismo Cristo que se ha quedado como alimento para nuestro camino diario. Cristo está de verdad en la Eucaristía para poder alabarlo y para sacar las fuerzas necesarias para poder llevarlo en la vida y encontrarlo en los demás, sobre todo en los más necesitados.

13 Feria o Memoria Libre: Nuestra Señora de Fátima

Miércoles Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 17,15.22–18,1En aquellos días, los que conducían a Pablo lo llevaron hasta Atenas,

y se volvieron con encargo de que Silas y Timoteo se reuniesen con Pablo cuanto antes.

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Pablo, de pie en medio del Areópago, dijo: «Atenienses, veo que son casi nimios en lo que toca a religión. Porque, paseándome por ahí y fijándome en sus monumentos sagrados, me encontré un altar con esta inscripción: “Al Dios desconocido.” Pues eso que veneran sin conocerlo, se lo anuncio yo. El Dios que hizo el mundo y lo que contiene, él es Señor de cielo y tierra y no habita en templos construidos por hombres, ni lo sirven manos humanas; como si necesitara de alguien, él que a todos da la vida y el aliento, y todo.

De un solo hombre sacó todo el género humano para que habitara la tierra entera, determinando las épocas de su historia y las fronteras de sus territorios. Quería que lo buscasen a él, a ver si, al menos a tientas, lo encontraban; aunque no está lejos de ninguno de nosotros, pues en él vivimos, nos movemos y existimos; así lo dicen incluso algunos de sus poetas: “Somos estirpe suya.” Por tanto, si somos estirpe de Dios, no podemos pensar que la divinidad se parezca a imágenes de oro o de plata o de piedra, esculpidas por la destreza y la fantasía de un hombre. Dios pasa por alto aquellos tiempos de ignorancia, pero ahora manda a todos los hombres en todas partes que se conviertan.

Porque tiene señalado un día en que juzgará el universo con justicia, por medio del hombre designado por él; y ha dado a todos la prueba de esto, resucitándolo de entre los muertos.» Al oír “resurrección de muertos” unos lo tomaban a broma, otros dijeron: «De esto te oiremos hablar en otra ocasión.» Pablo se marchó del grupo. Algunos se le juntaron y creyeron, entre ellos Dionisio el areopagita, una mujer llamada Dámaris y algunos más. Después de esto, dejó Atenas y se fue a Corinto.Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 148“Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria”

Alaben al Señor en el cielo, alaben al Señor en lo alto. Alábenlo, todos sus ángeles; alábenlo, todos sus ejércitos. R.

Reyes y pueblos del orbe, príncipes y jefes del mundo, los jóvenes y también las doncellas, los viejos junto con los niños. R.

Alaben el nombre del Señor, el único nombre sublime. Su majestad sobre el cielo y la tierra. R.

Él acrece el vigor de su pueblo. Alabanza de todos sus fieles, de Israel, su pueblo escogido. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 16,12-15En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Muchas cosas me quedan

por decirles, pero no pueden cargar con ellas por ahora; cuando venga él, el Espíritu de la verdad, los guiará hasta la verdad plena. Pues lo que hable no será suyo: hablará de lo que oye y les comunicará lo que está por venir. Él me glorificará, porque recibirá de mí lo que les irá comunicando. Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso les he dicho que toma de lo mío y se lo anunciará.»Palabra del Señor

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Meditación

El areópago es el centro del pensamiento, de la política y de la religión de los griegos. Allí va a predicar Pablo, y lleva un discurso, una catequesis o una homilía muy bien preparada. Tiene citas de escritores griegos y hace referencia a su religión. Pablo se adapta a la manera de pensar y de hablar de los griegos (no olvidemos que él es de nacimiento y de formación griega). Con este método se gana la atención de quienes le escuchan. Pero a esos pensadores filosóficos, no les entra en la cabeza la resurrección, por eso al tocar el tema de la resurrección de Cristo se termina la función. Aunque algunos, hombres y mujeres le escuchan y se convierten.

Otra vez Pablo es ejemplo de cómo debemos aprovechar todos los lugares y momentos para presentar a Cristo; pero en cada lugar debe hacerse de manera acomodada a la comprensión y a la cultura de los oyentes. Hoy hablaríamos de Inculturación del Evangelio.

Y hoy, en este mes de mayo debemos hablar de la disponibilidad de Pablo para hacer presente la Buena Nueva en todos los lugares.

¿Cómo podemos anunciar a Cristo a la juventud de hoy, o a los alejados, o a los que no creen? ¿Cómo podemos ayudarles a pasar del materialismo de nuestro mundo a una visión más espiritual de la vida? ¿Cómo podemos tomar como puntos de partida tantos valores que hoy son apreciados -la justicia, la igualdad, la dignidad de la persona, la ecología, la paz- para pasar claramente al mensaje de Jesús y proponerles su persona y su Evangelio como la plenitud de esos y de otros valores?

En el Evangelio de hoy, Jesús nos presenta al Espíritu Santo como maestro, ya que es Él quien les hará entender muchas cosas que los discípulos no entienden en estos momentos.

El Espíritu no viene a enseñar verdades nuevas, sino a hacernos entender las enseñadas por Cristo. Por eso es bueno recordar la necesidad de implorar al Espíritu Santo antes de leer la Biblia, antes de interpretarla, antes de participar en una reunión de formación… No esperemos que nos enseñe cosas nuevas, distintas, sino que nos ayude a entender la riqueza de las enseñanzas de Cristo.

Este día, 13 de mayo tenemos un recuerdo muy especial de la Virgen María, ya que celebramos su aparición en Fátima. ¿Cuántas veces hemos cantado el Ave de Fátima? Hace referencia a este día. La celebración de esta aparición de María, como muchas de ellas, recordemos también la de Guadalupe, es celebrar a María cercana a los pobres, a los sencillos y humildes. En Fátima se apareció a tres niños pastores de ovejas. Esta fiesta también nos recuerda que debemos estar siempre dispuestos a “aparecernos” en la gente necesitada, en los más pobres, como lo hizo María.

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14 Fiesta San Matías, Apóstol

Jueves Rojo

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 1,15-17.20-26Uno de esos días, Pedro se puso de pie en medio de los hermanos

-los que estaban reunidos eran alrededor de ciento veinte personas- y dijo: “Hermanos, era necesario que se cumpliera la Escritura en la que el Espíritu Santo, por boca de David, habla de Judas, que fue el jefe de los que apresaron a Jesús. El era uno de los nuestros y había recibido su parte en nuestro ministerio. En el libro de los Salmos está escrito: Que su casa quede desierta y nadie la habite. Y más adelante: Que otro ocupe su cargo. Es necesario que uno de los que han estado en nuestra compañía durante todo el tiempo que el Señor Jesús permaneció con nosotros, desde el bautismo de Juan hasta el día de la ascensión, sea constituido junto con nosotros testigo de su resurrección”. Se propusieron dos: José, llamado Barsabás, de sobrenombre el Justo, y Matías. Y oraron así: “Señor, tú que conoces los corazones de todos, muéstranos a cuál de los dos elegiste para desempeñar el ministerio del apostolado, dejado por Judas al irse al lugar que le correspondía”. Echaron suertes, y la elección cayó sobre Matías, que fue agregado a los once Apóstoles.Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 112“El Señor lo sentó con los príncipes de su pueblo”·

Alaben, siervos del Señor, alaben el nombre del Señor. Bendito sea el nombre del Señor, ahora y por siempre. R.

De la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor. El Señor se eleva sobre todos los pueblos, su gloria sobre los cielos. R.

¿Quién como el Señor, Dios nuestro, que se eleva en su trono y se abaja para mirar al cielo y a la tierra? R.

Levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre, para sentarlo con los príncipes, los príncipes de su pueblo. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 15,9-17.Como el Padre me amó, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan

en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, como yo cumplí los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi gozo sea el de ustedes, y ese gozo sea perfecto. Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre. No son ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes, y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero. Así todo lo que pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá. Lo que yo les mando es que se amen los unos a los otros. Palabra del Señor.

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Meditación

“Quien entra papa, sale cardenal”; esta es una frase que se dice en tiempo de los consistorios, cuando los cardenales se reúnen para elegir al nuevo Papa; quiere decir que el que el cardenal que más suena, ese nombre que la prensa y la gente más cita como nuevo Papa, se queda sin ser elegido y sigue siendo cardenal de la Iglesia.

Esta frase parece vieja, ya que la lectura de los Hechos de los Apóstoles confirma esa frase: Según nos presenta a los dos candidatos para entrar al número de los doce apóstoles, el que tenía la mejor opinión, quien pensaban que era el mejor, era el otro, es decir José Barsabás; este era tan conocido que hasta le llamaban el Justo.

Y es que el Espíritu sopla donde quiere y donde se le necesita. Entonces, en la época de los apóstoles, y hoy, el Espíritu nos da muchas sorpresas, y para nuestro bien. Sigue eligiendo a la gente sencilla, la de menos fama, la más callada. Revisemos nuestras comunidades y nos daremos cuenta, y si no es así, será porque nosotros y nosotras estamos buscando a la gente de renombre, a los importantes, a quienes por delante del nombre llevan el título. El título debemos ponerlo después, cuando vemos el trabajo y los esfuerzos de las personas.

De hecho, después de esta elección, Matías sigue en el anonimato, no se habla de él. Y esto puede parecer de poca importancia, y que ese personaje no tuvo mucho que hacer en aquella comunidad. Para nosotros es de mucha importancia, porque nos indica que la santidad y la misión de evangelizar no es para aparecer por todos los lados, para ser famosos, sino para seguir a Cristo en la sencillez de cada día y para hacerlo presente a los demás en nuestra vida y en el lugar donde nos toca desarrollar nuestra actividad.

Esto nos anima porque debemos ser santos como una hormiga dentro de su hormiguero, es decir, en este nuestro mundo y con los millones de personas que nos rodean. Aquí, ahora, en esta nuestra República Dominicana estamos dispuestos y dispuestas a ser santos y santas, a ser misioneros y misioneras, a vivir en alegría la fe y el compromiso por nuestra República Dominicana.

15 Memoria obligatoria: San Isidro Labrador

Viernes Blanco

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 18, 9-18 Estando Pablo en Corinto, una noche le dijo el Señor en una visión:

«No temas, sigue hablando y no te calles, que yo estoy contigo, y nadie se atreverá a hacerte daño; muchos de esta ciudad son pueblo mío.» Pablo se quedó allí un año y medio, explicándoles la palabra de Dios. Pero, siendo Galión procónsul de Acaya, los judíos se abalanzaron en masa contra Pablo, lo condujeron al tribunal y lo acusaron: «Éste induce a la gente a dar a Dios un culto contrario a la Ley.» Iba Pablo a tomar la palabra, cuando Galión dijo a los judíos: «Judíos, si se tratara de un crimen o de un delito grave, sería

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razón escucharles con paciencia; pero, si discuten de palabras, de nombres y de su Ley, arréglense ustedes. Yo no quiero meterme a juez de esos asuntos.» Y ordenó despejar el tribunal. Entonces agarraron a Sóstenes, jefe de la sinagoga, y le dieron una paliza delante del tribunal. Galión no hizo caso. Pablo se quedó allí algún tiempo; luego se despidió de los hermanos y se embarcó para Siria con Priscila y Aquila. En Cencreas se afeitó la cabeza, porque había hecho un voto. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 46“Dios es el rey del mundo”

Pueblos todos, batan palmas, aclamen a Dios con gritos de júbilo; porque el Señor es sublime y terrible, emperador de toda la tierra. R.

Él nos somete los pueblos y nos sojuzga las naciones; él nos escogió por heredad suya: gloria de Jacob, su amado. R.

Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas: toquen para Dios, toquen, toquen para nuestro Rey, toquen. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 16, 20-23ª En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Les aseguro que llorarán

y se lamentarán ustedes, mientras el mundo estará alegre; ustedes estarán tristes, pero su tristeza se convertirá en alegría. La mujer, cuando va a dar a luz, siente tristeza, porque ha llegado su hora; pero, en cuanto da a luz al niño, ni se acuerda del apuro, por la alegría de que al mundo le ha nacido un hombre. También ustedes ahora sienten tristeza; pero volveré a verlos y se alegrará su corazón, y nadie les quitará su alegría. Ese día no me preguntarán nada.»Palabra del Señor

Meditación

En la primera lectura el Señor le dice a Pablo que no tema, que no tenga miedo y siga hablando, y que mucha gente en la ciudad es “mi pueblo”. Palabras necesarias hoy en la Iglesia, en nuestras comunidades y a nuestras propias personas. Necesitamos valentía, animación para continuar con la misión. Y necesitamos decisión porque hay mucha gente esperando la Palabra del Señor. Decidámonos a llevar esa Palabra sin miedo y con valentía.

La alegría es signo y característica de los cristianos y esto desde los inicios, porque cuando el cristiano está convencido de que Dios está cerca de él, en lo hondo del corazón reina una alegría que es mayor que todos los sufrimientos. Por eso, con autoridad divina, Jesús proyecta su luz sobre nuestro futuro como personas que participamos de su mismo destino de lucha y de victoria. Como nos dice Jesús, estarán tristes, pero su tristeza se convertirá en gozo. Estos dos tiempos de lamento y tristeza, tanto porque El será levantado en la cruz como por su bajada al sepulcro. Los dos tiempos, el juicio y la de la salvación de Dios, que los mismos discípulos tendrán dificultad en comprender. Porque el mundo creerá que ha vencido, y la tiniebla creerá que ha capturado la luz.

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Es impresionante lo que nos dice Jesús y la comparación de la mujer cuando va a dar a luz, está triste porque le ha llegado su hora. Jesús compara el tiempo de la aflicción con el tiempo en que la mujer está a punto de dar a luz. Porque de este modo, hace comprender la fecundidad del momento que el discípulo atraviesa. El discípulo, ante la cruz, está triste como la mujer a la cual le ha llegado la hora del parto. El ser humano tiene que pasar por el sufrimiento, por el dolor, por la tristeza, para que pueda vivir a plenitud la alegría que trae Cristo Jesús el Resucitado.

Es por eso que la alegría que viene de la cruz es invencible. Es amor y vida que vence el odio y la misma muerte. Nótese cuántas veces en los versículos 20-22 se habla de tristeza y de alegría. Estos son los dos condimentos de la existencia humana.

Hoy celebra la Iglesia la fiesta de san Isidro. Fue un labrador en tierras pobres, que no eran suyas, era un empleado del campo. Hoy es por tanto un día para orar por los campesinos, sobre todo por quienes viven trabajando en los campos de otras personas, y por quienes tienen un poco de tierra, un conuco, que no les da ni para sobrevivir. Es necesaria la agricultura para vivir, y también es necesaria una agricultura autosostenible y con menos químicos y transgénicos. Que san Isidro interceda por todas las personas de nuestros campos, que tengan buen tiempo y buenas cosechas.

16 Feria de Pascua

Sábado Blanco

Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 18,23-28Pasado algún tiempo en Antioquía, emprendió Pablo otro viaje y recorrió

Galacia y Frigia, animando a los discípulos. Llegó a Éfeso un judío llamado Apolo, natural de Alejandría, hombre elocuente y muy versado en la Escritura. Lo habían instruido en el camino del Señor, y era muy entusiasta; aunque no conocía más que el bautismo de Juan, exponía la vida de Jesús con mucha exactitud. Apolo se puso a hablar públicamente en la sinagoga. Cuando lo oyeron Priscila y Aquila, lo tomaron por su cuenta y le explicaron con más detalle el camino de Dios. Decidió pasar a Acaya, y los hermanos lo animaron y escribieron a los discípulos de allí que lo recibieran bien. Su presencia, con la ayuda de la gracia, contribuyó mucho al provecho de los creyentes, pues rebatía vigorosamente en público a los judíos, demostrando con la Escritura que Jesús es el Mesías.Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 46R/. Dios es el rey del mundo

Pueblos todos, batan palmas, aclamen a Dios con gritos de júbilo; porque el Señor es sublime y terrible, emperador de toda la tierra. R/.

Porque Dios es el rey del mundo: toquen con maestría. Dios reina sobre las naciones, Dios se sienta en su trono sagrado. R/.

Los príncipes de los gentiles se reúnen con el pueblo del Dios de Abrahán; porque de Dios son los grandes de la tierra, y él es excelso. R/.

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Lectura del santo evangelio según san Juan 16,23b-28En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Yo les aseguro, si piden algo

al Padre en mi nombre, os lo dará. Hasta ahora no han pedido nada en mi nom-bre; pidan, y recibirán, para que su alegría sea completa. Les he hablado de esto en comparaciones; viene la hora en que ya no hablaré en comparaciones, sino que les hablaré del Padre claramente. Aquel día pedirán en mi nombre, y no les digo que yo rogaré al Padre por ustedes, pues el Padre mismo los quiere, porque ustedes me quieren y creen que yo salí de Dios. Salí del Padre y he ve-nido al mundo, otra vez dejo el mundo y me voy al Padre.»Palabra del Señor.

Meditación

En los Hechos de los Apóstoles vemos a Pablo iniciando otro viaje. Nos cuenta cómo llega a la comunidad un desconocido que habla bien de Jesús, pero algunas cosas no son muy exactas. Por ello, dos laicos, Priscila y Aquila, lo toman y lo instruyen hasta convertirlo en un gran predicador.

¡Qué ejemplo para hoy y nuestras comunidades! No se trata de rechazar al que habla distinto a nosotros, sino de formarlo, instruirlo, completarlo. Pero también el ejemplo de Apolo es impresionante; quien ya se considera que habla bien, bonito, debe estar abierto a seguir formándose y a poner la doctrina en consonancia con la comunidad, a no ir por libre y hacer y decir lo que me parezca y cuando me parezca; sino atenerse a la enseñanza de Cristo y de la Iglesia. Nos presenta a una comunidad dispuesta a acoger y a formar y a una persona dispuesta a dejarse formar y a integrarse en la comunidad.

Es evidente que la función de Jesús no es sustituir a “los suyos”: no los suplanta mediante una función de intercesión, sino que los une a sí; y en comunión con Él, ellos presentan sus carencias y necesidades. Los discípulos están seguros de que Jesús dispone de la riqueza del Padre: “En verdad, en verdad les digo: si piden alguna cosa al Padre en mi nombre, él se la dará” (v.23b). De esta manera, es decir, en unión con Él, la riqueza pasa a ser eficaz.

En Jesús tenemos contacto directo con el Padre. Los creyentes están incluidos en la relación entre el Hijo y el Padre. En Jn 16,26 Jesús insiste en el nexo operado por el Espíritu, que permitirá a los suyos presentar al Padre cualquier petición en unión con Él. Esto sucederá “en aquel día”. ¿Qué quiere decir “aquel día pedirán”? Es el día que vendrá a los suyos y les comunicará el Espíritu (Jn 20,19-22). Entonces, los discípulos, conociendo la relación entre Jesús y el Padre, sabrán que son escuchados. Conectados en la relación con el Padre mediante la unión con Él, nuestro gozo es total y nuestra oración perfecta. Dios ofrece siempre su amor a todo el mundo, pero este amor se torna recíproco sólo si el hombre responde. El amor es incompleto si no es recíproco: hasta que el hombre no lo acepta, permanece en suspenso. Los discípulos lo aceptan en el momento en que aman a Jesús, y de esta manera se torna operativo el amor del Padre. La oración es esta relación de amor. En el fondo, la historia de cada uno de nosotros se identifica con la historia de su oración, incluyendo aquellos momentos que no parecen tales: el deseo es ya una oración.

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17 Solemnidad: La Ascensión del Señor

Domingo I del Salterio Blanco

Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales

Estemos siempre disponibles para proclamar el Evangelio

Orientaciones para esta Celebración: Como en todos los domingos debe estar visible el valor del mes: Disponibilidad. Una familia lleva en procesión el lema de la Jornada Mundial de las comunicaciones: “Comunicar la Familia”.

Estamos en el mes de María, llevar un cuadro con flores. Hacer presentes a las mamás en su mes. Poner un cuadro que represente a la Ascensión del Señor…. Se puede llevar una escalera como señal de subida. Si la comunidad tiene encargados de la comunicación, de la publicidad… es el momento de presentarlos.

Monición ambiental:En este Domingo Séptimo del Tiempo Pascual celebramos la Solemnidad

de la Ascensión del Señor. Jesucristo una vez terminada su misión en la tierra vuelve al Padre donde está sentado a la derecha del Padre, glorificado y triunfante. Por estar disponible a realizar la voluntad de su Padre El está coronado y ceñido de poder.

A la vez, la Ascensión del Señor marca el inicio del tiempo del Espíritu Santo quien a través de la Iglesia continúa en el mundo la misión de Jesucristo. Por eso, la Ascensión del Señor implica una responsabilidad grande para su Iglesia, que somos nosotros que conlleva una gran y permanente disponibilidad para ser testigos de Cristo en todas partes y por todos los medios.

Por eso, la Iglesia celebra hoy la 49 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que son medios modernos y poderosos para llevar el Evangelio a todos los lugares del planeta y a todos los ambientes.

El Papa Francisco ha querido dedicar esta Jornada a la familia con el lema: Comunicar la familia: ambiente privilegiado del encuentro en la gratuidad del amor. “En efecto, la familia es el primer lugar donde aprendemos a comunicar”. “Hoy, los medios de comunicación más modernos... Pueden tanto obstaculizar como ayudar a la comunicación en la familia y entre familias. La pueden obstaculizar si se convierten en un modo de sustraerse a la escucha, de aislarse de la presencia de los otros, de saturar cualquier momento de silencio y de espera, .. La pueden favorecer si ayudan a contar y compartir, a permanecer en contacto con quienes están lejos, a agradecer y a pedir perdón, a hacer posible una y otra vez el encuentro”.

Recemos para que la familia crezca en la comunicación y sepan guiar los medios de comunicación como ayuda para crecer y amarse más. Recemos

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para que los medios de comunicación sean instrumentos que favorezcan más y más el amor familiar y nunca contribuyan a destruir la familia.

Iniciemos la Celebración cantando con alegría a Jesucristo glorioso que viene a presidirla a través de su ministro.

Primera Lectura: Hechos 1, 1-11La Ascensión del Señor es la coronación de su disponibilidad a la voluntad

del Padre y marca el comienzo de la misión del Espíritu Santo y de la Iglesia para hacer presente el Reino de Dios en este mundo. Para nosotros realizar esta obra de Cristo necesitamos disponibilidad al Espíritu Santo para ser sus testigos aquí y ahora. Escuchemos.

Lectura del libro de los Hechos de los ApóstolesEn mi primer libro, querido Teófilo, escribí de todo lo que Jesús fue

haciendo y enseñando hasta el día en que dio instrucciones a los apóstoles, que había escogido, movido por el Espíritu Santo, y ascendió al cielo. Se les presentó después de su pasión, dándoles numerosas pruebas de que estaba vivo, y, apareciéndoseles durante cuarenta días, les habló del reino de Dios.

Una vez que comían juntos, les recomendó:-«No se alejen de Jerusalén; aguarden que se cumpla la promesa de mi

Padre, de la que yo les he hablado. Juan bautizó con agua, dentro de pocos días ustedes serán bautizados con Espíritu Santo.»

Ellos lo rodearon preguntándole: -«Señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel?» Jesús contestó: -«No les toca a ustedes conocer los tiempos y las fechas que el Padre ha establecido con su autoridad. Cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes, recibirán fuerza para ser mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines del mundo.»

Dicho esto, lo vieron levantarse, hasta que una nube se lo quitó de la vista. Mientras miraban fijos al cielo, viéndole irse, se les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron:

-«Galileos, ¿qué hacen ustedes ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que les ha dejado para subir al cielo volverá como le han visto marcharse. » Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 46R/ Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas.

Pueblos todos batan palmas, aclamen a Dios con gritos de júbilo; porque el Señor es sublime y terrible, emperador de toda la tierra. R.

Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas; toquen para Dios, toquen, toquen para nuestro Rey, toquen. R.

Porque Dios es el rey del mundo; toquen con maestría. Dios reina sobre las naciones, Dios se sienta en su trono sagrado. R.

Segunda Lectura: Efesios 1, 17-23Pablo ora para que el Señor nos conceda la sabiduría divina para entender

todo el misterio de Cristo y así estemos dispuestos a ser su Iglesia, su Cuerpo, que lo hace presente en el mundo. Escuchemos.

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Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los EfesiosHermanos: Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria,

les dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo. Ilumine los ojos de su corazón, para que comprendan cuál es la esperanza a la que les llama, cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos, y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para nosotros, los que creemos, según la eficacia de su fuerza poderosa, que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos y sentándolo a su derecha en el cielo, por encima de todo principado, potestad, fuerza y dominación, y por encima de todo nombre conocido, no sólo en este mundo, sino en el futuro. Y todo lo puso bajo sus pies, y lo dio a la Iglesia como cabeza, sobre todo. Ella es su cuerpo, plenitud del que lo acaba todo en todos. Palabra de Dios.

Aleluya Mt 28, 19. 20Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos -dice el Señor-;

yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.

Evangelio: Marcos 16, 15-20En su despedida de esta tierra Jesús envía a sus discípulos a predicar

y a sanar,dándoles poderes sobre el mal. Ellos mostraron su disponibilidad sembrando el Evangelio a todos los pueblos de su tiempo. Ahora nos toca a nosotros continuar esta misión dispuestos y dispuestas a darlo todo por el todo para cumplirla.

Conclusión del santo evangelio según san MarcosEn aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: «Vayan al mun-

do entero y proclamen el Evangelio a toda la creación. El que crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, ha-blarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos.»Después de hablarles, el Señor Jesús subió al cielo y se sentó a la derecha de Dios. Ellos se fueron a pregonar el Evangelio por todas partes, y el Señor cooperaba confirmando la palabra con las señales que los acompañaban. Palabra del Señor.

Oración de los fielesQuien preside: Padre, te presentamos nuestras necesidades y las del

mundo entero, por medio de tu Hijo Jesucristo. A cada petición respodemos: Danos la fuerza de tu Espíritu para anunciar el Evangelio1.- Por la Iglesia, para que con valentía proclame la Buena Nueva de la

Salvación por todos los rincones el mundo. Oremos.2.- Por los gobiernan las naciones para que sepan colaborar para que

la Iglesia realice su misión con libertad y para que los medios de comunicación sirvan para fortalecer las familias. Oremos.

3.- Por los más pobres para que sean evangelizados y para que los medios de comunicación sean instrumentos de solidaridad con ellos. Oremos.

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4.- Por esta Asamblea aquí reunida para que estemos dispuestos a ser testigos de Jesús con nuestras palabras y obras. Oremos.

5.- Por todas las personas que trabajan en los medios de comunicación para que lo hagan con la verdad, con la ética y no sean maltratados ni perseguidos por decir la verdad. Oremos.

6.- Por nuestras familias, para que sean el primer lugar de comunicación de la verdad, la disponibilidad, el amor y el respeto a todas las personas y sepan discernir los medios de comunicación social. Oremos.

7.- Por todas las personas que en nuestra comunidad están cumpliendo con los ministerios y trabajos pastorales, que la gracia del Señor les acompañe y les ayude a ser felices en su misión. Oremos.

8.- Te pedimos Señor que no nos quedemos mirando al cielo, sino que con tu gracia nos comprometamos en hacer un mundo mejor, comenzando por lo más cercano. Oremos.

Quien preside: Padre Bueno que has glorificado a tu Hijo por su obediencia y disponibilidad a realizar su misión, danos tu Espíritu Santo para que hoy y en todas partes seamos tus testigos alegres y valientes de tu Reino.Te lo pedimos por Jesucrito nuestro Señor. Amén.

18 Feria o Memoria Libre: San Juan I, Papa y Mártir

Lunes Blanco o Rojo

III Semana del Salterio

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 19,1-8 Mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó la meseta y llegó a

Éfeso. Allí encontró unos discípulos y les preguntó: « ¿Recibieron el Espíritu Santo al aceptar la fe?»

Contestaron: «Ni siquiera hemos oído hablar de un Espíritu Santo.» Pablo les volvió a preguntar: «Entonces, ¿qué bautismo han recibido?» Respondieron: «El bautismo de Juan.» Pablo les dijo: «El bautismo de Juan era signo de conversión, y él decía al pueblo que creyesen en el que iba a venir después, es decir, en Jesús.» Al oír esto, se bautizaron en el nombre del Señor Jesús; cuando Pablo les impuso las manos, bajó sobre ellos el Espíritu Santo, y se pusieron a hablar en lenguas y a profetizar. Eran en total unos doce hombres. Pablo fue a la sinagoga y durante tres meses habló en público del reino de Dios, tratando de persuadirlos. Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 67R/ “Reyes de la tierra, canten a Dios”

Se levanta Dios y se dispersan sus enemigos, huyen de su presencia los que lo odian; como el humo se disipa, se disipan ellos; como se derrite la cera ante el fuego, así perecen los impíos ante Dios. R.

En cambio, los justos se alegran, gozan en la presencia de Dios, rebosan-do de alegría. Canten a Dios, toquen en su honor, su nombre es el Señor. R.

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Padre de huérfanos, protector de viudas, Dios vive en su santa morada. Dios prepara casa a los desvalidos, libera a los cautivos y los enriquece. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 16, 29-33 En aquel tiempo, dijeron los discípulos a Jesús: «Ahora sí que hablas claro

y no usas comparaciones. Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que saliste de Dios.» Les contestó Jesús: “¿Ahora creen? Pues miren está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que se dispersen cada cual por su lado y a mí me dejen solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Les he hablado de esto, para que encuentren la paz en mí. En el mundo tendrán luchas; pero tengan valor: yo he vencido al mundo”. Palabra del Señor

Meditación

La primera lectura de hoy nos presenta un caso un poco raro, ya que un grupo de judíos, que no estaban bautizados como cristianos, son considerados como “discípulos”. Se trata de un grupo de personas que han oído hablar de Jesús, están de acuerdo con su mensaje y su persona, pero no están bautizadas. Pablo las acepta, las forma y ellas deciden recibir el bautismo “completo”.

Nuevamente Pablo y la comunidad nos enseñan a ser tolerantes, a acoger a todas las personas y preocuparnos de partir de su realidad para la evangelización. No se trata de todo igual y para todos igual, sino de partir de cómo es y cómo está la persona para hacer su formación. Tampoco se trata de caprichos personales, sino de realidades y de muy buenas intenciones.

El Señor Jesús nos invita a seguirlo con optimismo. No debemos dejarnos asustar, y sobre todo, no debemos dejarnos vencer por el temor, el desconcierto o el desánimo…Recordemos siempre que Jesús ya ha vencido al mundo. Así, no hay cadena tan fuerte que pueda atarnos, ni nada que pueda doblegarnos. Es cuestión de fe. Les he dicho estas cosas para que tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulación. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo.

Muchas veces nos ocurre como a los discípulos, que un poco de memoria y por salir del paso decimos que creemos, pero en realidad nuestra confesión es frágil, diríamos que de la boca para afuera, y Jesús lo sabe. Por eso repite con ellos en un tono un poco sarcástico ¿Ahora creen? Pues tendrán ocasión de comprobar su fe dentro de poco y ya sabe que saldrán corriendo…Pero aun así el Señor nos invita a tener paz en Él. A confiar en que Él ha vencido al mundo. Esto es lo que debemos tener en cuenta en los momentos de mayor dificultad. No importa cuán grandes sean…Jesús ha vencido al mundo, es decir, lo ha enfrentado todo y ha salido victorioso.

Este debe ser nuestro mejor discurso. En los momentos de duda, de dolor, de adversidad, cuando tengamos que atravesar las mayores tribulaciones, que indudablemente sobrevendrán, tengamos en cuenta estas palabras de

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Jesús para levantarnos la moral y seguir adelante. Todo es posible con Él. Solo debemos ponernos en su sintonía, alineados con su Voluntad, que no es otra que la del Padre, entonces todo fluirá como el cauce de un río, sin retorno. Sin importar cuán profundo, rápido o apacible sea su paso. Como Jesús antes que nosotros, habremos de llegar y pasar. Él es nuestra garantía. Les he dicho estas cosas para que tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulación. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo.

19 Feria de Pascua

Martes Blanco

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 20,17-27 En aquellos días, desde Mileto, mandó Pablo llamar a los presbíteros de

la Iglesia de Éfeso. Cuando se presentaron, les dijo: «Ustedes saben que todo el tiempo

que he estado aquí, desde el día que por primera vez puse pie en Asia, he servido al Señor con toda humildad, en las penas y pruebas que me han procurado las maquinaciones de los judíos. Saben que no he ahorrado medio alguno, que les he predicado y enseñado en público y en privado, insistiendo a judíos y griegos a que se conviertan a Dios y crean en nuestro Señor Jesús. Y ahora me dirijo a Jerusalén, forzado por el Espíritu. No sé lo que me espera allí, sólo sé que el Espíritu Santo, de ciudad en ciudad, me asegura que me aguardan cárceles y luchas. Pero a mí no me importa la vida; lo que me importa es completar mi carrera, y cumplir el encargo que me dio el Señor Jesús: ser testigo del Evangelio, que es la gracia de Dios. He pasado por aquí predicando el reino, y ahora sé que ninguno de ustedes me volverá a ver. Por eso declaro hoy que no soy responsable de la suerte de nadie: nunca me he reservado nada; les he anunciado enteramente el plan de Dios.» Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 67R/ “Reyes de la tierra, canten a Dios”

Derramaste en tu heredad, oh Dios, una lluvia copiosa, aliviaste la tierra extenuada y tu rebaño habitó en la tierra que tu bondad, oh Dios, preparó para los pobres. R.

Bendito el Señor cada día, Dios lleva nuestras cargas, es nuestra salvación. Nuestro Dios es un Dios que salva, el Señor Dios nos hace escapar de la muerte. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 17,1-11ª En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, dijo: «Padre, ha

llegado la hora, glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo te glorifique y, por el poder que tú le has dado sobre toda carne, dé la vida eterna a los que le confiaste. Ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a tu enviado, Jesucristo. Yo te he glorificado sobre la tierra, he coronado la obra que me encomendaste. Y ahora, Padre, glorifícame cerca de ti,

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con la gloria que yo tenía cerca de ti, antes de que el mundo existiese. He manifestado tu nombre a los hombres que me diste de en medio del mundo. Tuyos eran, y Tú me los diste, y ellos han guardado tu palabra. Ahora han conocido que todo lo que me diste procede de ti, porque yo les he comunicado las palabras que Tú me diste, y ellos las han recibido, y han conocido verdaderamente que yo salí de ti, y han creído que Tú me has enviado. Te ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por éstos que Tú me diste, y son tuyos. Sí, todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y en ellos he sido glorificado. Ya no voy a estar en el mundo, pero ellos están en el mundo, mientras yo voy a ti.» Palabra del Señor

Meditación

En la primera lectura encontramos a Pablo despidiéndose de la comunidad. En su despedia mira al pasado, al presente y al futuro. Y revisando su vida, resume su ministerio presentándose como ejemplo de apóstol y de dirigente comunitario:«he servido al Señor», «no he ahorrado medio alguno», «he predicado y enseñado en público y en privado», «nunca me he reservado nada». Y todo esto no ha sido fácil ya que ha tenido «maquinaciones de los judíos» contra él.

Se pone como ejemplo y no nos podemos comparar con él, que fue un predicador y un lider nato. Pero algo debemos imitarle, y también que interceda por nosotros, porque muchas veces no somos testigos, apóstoles o misioneros por falta de decisión personal.

Cuando Jesús llama a Dios con este nombre: es el Hijo amado que ama al Padre. Jesús al dirigirse a Él delante de sus discipulos, les abre su misma relación con Él. “Padre”, en hebreo abbá (papá), es el primer balbuceo del niño, que ilumina el rostro del padre y del hijo. Esta palabra, cargada de afecto, expresa una relación de amor correspondido, seguridad y fuerza. En la palabra se da como un don, a todo el que escucha, la realidad de Dios: revela que Dios es nuestro Padre y que nosotros somos sus hijos. El esfuerzo de todos los cristianos debe ser conocer a Dios, es el primer interés de los creyentes, conocer a Jesús debe ser el primer interés de los cristianos.

Jesucristo bien sabía que una vez que le conociéramos de verdad, no podríamos dejar de amarlo y de seguirlo. Porque no se puede conocer a Jesús sin caer presa de su amor. No se puede conocer a Jesús sin contagiarse de la esperanza que infunde su mensaje. No se puede conocer a Jesús sin creer en su Pasión, Muerte y Resurrección.

Alguien ha dicho que un creyente es un enamorado, uno que se ha enamorado de Dios. Si le pides que te dé razones de su amor, quizá no logre hacerlo, no porque no tenga razones o no las haya pensado, sino porque tendrá tantas que se le amontonarán en la boca y no podrán salir. Conocer a Jesús, no nos puede dejar indiferentes, como no es indiferente el hombre ante el amor de su esposa, o de su novia. El verdadero cristiano es quien con su vida intentará corresponderle regalándole sus buenas obras.

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Por esto, Jesús encomienda a sus seguidores al cuidado del Padre. Él sabe que llega su hora. Pero no quiere dejarnos desamparados. Pide al Padre por aquellos que creerán en el Evangelio a lo largo de toda la historia. Por todos los que conociendo lo que Dios ha hecho por el hombre le corresponderán con una vida de auténticos discípulos: amando al prójimo, como Dios nos ha amado.

20 Feria o Memoria Libre: San Bernardino de Siena, présbitero

Miércoles Blanco

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 20, 28-38 En aquellos días, decía Pablo a los presbíteros de la Iglesia de

Éfeso: «Tengan cuidado de ustedes y del rebaño que el Espíritu Santo les ha encargado guardar, como pastores de la Iglesia de Dios, que él adquirió con su propia sangre. Ya sé que, cuando les deje, se meterán entre ustedes lobos feroces, que no tendrán piedad del rebaño. Incluso algunos de ustedes deformarán la doctrina y arrastrarán a los discípulos. Por eso, estén alerta: acuérdense que durante tres años, de día y de noche, no he cesado de aconsejar con lágrimas en los ojos a cada uno en particular. Ahora les dejo en manos de Dios y de su palabra de gracia, que tiene poder para construirles y darles parte en la herencia de los santos. A nadie le he pedido dinero, oro ni ropa. Bien saben que estas manos han ganado lo necesario para mí y mis compañeros. Siempre les he enseñado que es nuestro deber trabajar para socorrer a los necesitados, acordándonos de las palabras del Señor Jesús: “Hay más dicha en dar que en recibir.”»

Cuando terminó de hablar, se pusieron todos de rodillas, y rezó. Se echaron a llorar y, abrazando a Pablo, lo besaban; lo que más pena les daba era lo que había dicho, que no volverían a verlo. Y lo acompañaron hasta el barco. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 67R/. “Reyes de la tierra, canten a Dios”

Oh Dios, despliega tu poder, tu poder, oh Dios, que actúa en favor nuestro. A tu templo de Jerusalén traigan los reyes su tributo. R.

Reyes de la tierra, canten a Dios, toquen para el Señor, que avanza por los cielos, los cielos antiquísimos, que lanza su voz, su voz poderosa: «Reconozcan el poder de Dios.» R.

Sobre Israel resplandece su majestad, y su poder sobre las nubes. ¡Dios sea bendito! R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 17, 11b -19 En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró, diciendo:

«Padre Santo, guárdalos en tu nombre, a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos, yo guardaba en tu nombre a los que me diste, y los custodiaba, y ninguno se perdió, sino el

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hijo de la perdición, para que se cumpliera la Escritura. Ahora voy a ti, y digo esto en el mundo para que ellos mismos tengan mi alegría cumplida. Yo les he dado tu palabra, y el mundo los ha odiado porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. No ruego que los retires del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Conságralos en la verdad; tu palabra es verdad. Como Tú me enviaste al mundo, así el envío yo también al mundo. Y por ellos me consagro yo, para que también se consagren ellos en la verdad.» Palabra del Señor

Meditación

La primera lectura de hoy nos presenta un apóstol lleno de sentimiento pero también lleno de claridad. Siente, desde luego, y le duele partir; pero también sabe que los ojos que lloran porque él se va podrán también mentir cuando se haya ido. Pablo habla con confianza, pero no con ingenuidad. Es cercano pero no manipulable. Se le puede conmover pero no engañar. Pablo apela a su propio ejemplo: “acuérdense de que durante tres años, día y noche, no me cansé de exhortarlos hasta con lágrimas a cada uno de ustedes...” ¡Feliz testigo que puede invitar a leer la verdad en la vida! Y termina diciéndoles: “ahora les encomiendo a Dios”. Ha sabido llegar, ha sabido servir; ha sabido orar, y ahora demuestra que sabe también partir. Si su corazón se apega es como el seno que quiere dar leche a la criatura, no como el que busca ganancias de esta tierra o como el que depende del afecto que se le brinda. Es generoso y es libre. Como es generoso, se da; como es libre, sabe irse.

También las palabras de Jesús en el Evangelio suenan a despedida, como las de Pablo. Como decíamos ayer de Pablo, hoy Jesús resume la misión que ha cumplido: «yo te he glorificado sobre la tierra», «he coronado la obra que me encomendaste», «he manifestado tu nombre a los hombres», «les he comunicado las palabras que tú me diste y ellos han creído que tú me has enviado».

En su despedida, Jesús nos deja su misma misión, nos envía al mundo a continuar lo que Él ha comenzado.

Y esta oración de Jesús en su despedida nos hace recordar al verbo “cuidar”. Cuidar es reconocer que la vida es precaria y que hay que obrar en consecuencia. Es un acto de sensatez y de amor por el que admitimos con serenidad que somos frágiles, y que todo lo bueno que hay en nosotros también es frágil: ¿no lo es acaso la paz? ¿No lo son la sabiduría, la pureza, la justicia, la humildad? ¡Casi nos parece que ese es el sello del bien: ser débil Y en efecto, si somos pobres en el bien no es porque nos hayan faltado bienes, sino porque los hemos perdido. Aprender a cuidar es entonces un acto de gratitud a Dios y a quienes nos hacen el bien. Es también una actitud de misericordia; es como la raíz del amor. Y de hecho, ¡cuánto amamos a quienes nos han cuidado! Estamos cuidados y cuidadas, por tanto no podemos tener miedo a nada ni a nadie.

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21 Feria de Pascua

Jueves Blanco38º Aniversario de la Ordenación episcopal De Mons. Jesús Maria de

Jesus Moya, Obispo Emérito de la Diócesis de San Francisco de Macorís

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 22, 30; 23, 6-11 En aquellos días, queriendo el tribuno poner en claro de qué acusaban

a Pablo los judíos, mandó desatarlo, ordenó que se reunieran los sumos sacerdotes y el Sanedrín en pleno, bajó a Pablo y lo presentó ante ellos. Pablo sabía que una parte del Sanedrín eran fariseos y otra saduceos y gritó: «Hermanos, yo soy fariseo, hijo de fariseo, y me juzgan porque espero la resurrección de los muertos. Apenas dijo esto, se produjo un altercado entre fariseos y saduceos, y la asamblea quedó dividida. (Los saduceos sostienen que no hay resurrección, ni ángeles, ni espíritus, mientras que los fariseos admiten todo esto.) Se armó un griterío, y algunos escribas del partido fariseo se pusieron en pie, porfiando: «No encontramos ningún delito en este hombre; ¿y si le ha hablado un espíritu o un ángel?» El altercado arreciaba, y el tribuno, temiendo que hicieran pedazos a Pablo, mandó bajar a la guarnición para sacarlo de allí y llevárselo al cuartel. La noche siguiente, el Señor se le presentó y le dijo: « ¡Ánimo! Lo mismo que has dado testimonio a favor mío en Jerusalén tienes que darlo en Roma.» Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 15R/. “Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti”

Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti; yo digo al Señor: «Tú eres mi bien.» El Señor es el lote de mi heredad y mi copa; mi suerte está en tu mano. R.

Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye interna-mente. Tengo siempre presente al Señor, con Él a mi derecha no vacilaré. R.

Por eso se me alegra el corazón, se gozan mis entrañas, y mi carne descansa serena. Porque no me entregarás a la muerte, ni dejarás a tu fiel conocer la corrupción. R.

Me enseñarás el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia, de alegría perpetua a tu derecha. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 17, 20-26 En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró, diciendo: «Padre

Santo, no sólo por ellos ruego, sino también por los que crean en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí, y yo en ti, que ellos también lo sean en nosotros, para que el mundo crea que Tú me has enviado. También les di a ellos la gloria que me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno; yo en ellos, y tú en mí, para que sean completamente uno, de modo que el mundo sepa que Tú me has enviado y los has amado como me has amado a mí. Padre, éste es mi deseo: que los que me confiaste estén conmigo donde yo estoy y contemplen mi gloria, la que me diste, porque me amabas, antes de la fundación del mundo. Padre

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justo, si el mundo no te ha conocido, yo te he conocido, y éstos han conocido que Tú me enviaste. Les he dado a conocer y les daré a conocer tu nombre, para que el amor que me tenías esté con ellos, como también yo estoy con ellos.» Palabra del Señor

Meditación

Como ya nos quedan pocos días de Pascua, no podemos leer todo el libro de Hechos, por eso hoy nos saltamos dos capítulos y cambiamos de escenario. Pablo está preso y quien lo tiene prisionero quiere saber los motivos de la acusación. Para ello lleva a los judíos y a Pablo a su tribunal.

El apóstol no solo es inteligente, sino que conoce muy bien a los judíos y hace que, en vez de juzgarlo a él, se enfrenten entre ellos por cuestiones de teología judía.

Le sale muy bien su jugada y los judíos acaban peleándose entre sí. Pablo recurre al César. Como es ciudadano romano por nacimiento, tiene derecho a ser juzgado por las leyes romanas. A partir de ahora va a comenzar otro viaje, pero en esta ocasión va preso, no va por su cuenta, sino que lo llevan a Roma.

Como ejemplo para nosotros y para todas las comunidades, debemos saber defendernos, no se trata de quedarse callados ante las injusticias y ante la realidad de maldad de nuestra propia justicia, con tantos casos en que vemos que se parcializa. Pablo lo que hace en esta escena es aplicar aquello enseñado por Jesús, “ser sencillos como palomas y astutos como serpientes”. Por eso Pablo nos enseña hoy a relacionar la inocencia y la astucia para conseguir que el bien triunfe sobre el mal.

En el Evangelio, Jesús pide que sus seguidores sean uno, que haya unidad entre ellos. El ejemplo que pone es muy alto: “Como tú, padre, en mí y yo en ti”. Esta unión de los cristianos es también condición para que los cristianos podamos realizar nuestra misión con algo de credibilidad: «para que el mundo crea que tú me has enviado».

La unidad es algo que tenemos pendiente, tanto entre las distintas Iglesias que nos llamamos cristianas, como dentro de nuestra propia Iglesia y comunidad. Muchas veces hablamos de la unidad, y para ello acudimos a que todos los días, hoy también, en todas partes del mundo, los católicos celebramos las mismas fiestas, leemos las mismas lecturas y hacemos la misma Eucaristía. Y es verdad, en eso estamos unidos. Pero nos falta mucho para conseguir la unidad de corazones, de aceptación y de comprensión.

Si en nuestras comunidades, sectores y parroquia, unos grupos y otros, unos movimientos y otros, unas pastorales y otras, no se llevan demasiado bien, hay celos, quieren ser las primeras y mejores… si esto exite, no estamos unidos y no podemos hablar de la unidad con los otras denominaciones cristianas.

La unidad es un mandato de Cristo y una decisión nuestra. Debemos decidirnos por la unidad en la misma comunidad, entre las distintas comunidades y parroquias, colaborar por la unidad de las parroquias en

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las zonas pastorales y entre toda la diócesis. Comencemos la unidad por la casa y la Iglesia.

22 Feria ó Memoria Libre: Santa Joaquina Vedruna, Religiosa

Viernes Blanco

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 25,13-21 En aquellos días, el rey Agripa llegó a Cesárea con Berenice para saludar

a Festo, y se entretuvieron allí bastantes días. Festo expuso al rey el caso de Pablo, diciéndole: «Tengo aquí un preso, que ha dejado Félix. Cuando fui a Jerusalén, los sumos sacerdotes y los ancianos judíos presentaron acusación contra él, pidiendo su condena. Les respondí que no es costumbre romana ceder a un hombre por las buenas; primero el acusado tiene que carearse con sus acusadores, para que tenga ocasión de defenderse. Vinieron conmigo a Cesárea, y yo, sin dar largas al asunto, al día siguiente me senté en el tribunal y mandé traer a este hombre. Pero, cuando los acusadores tomaron la palabra, no adujeron ningún cargo grave de los que yo suponía; se trataba sólo de ciertas discusiones acerca de su religión y de un difunto llamado Jesús, que Pablo sostiene que está vivo. Yo, perdido en semejante discusión, le pregunté si quería ir a Jerusalén a que lo juzgasen allí. Pero, como Pablo ha apelado, pidiendo que lo deje en la cárcel, para que decida su majestad, he dado orden de tenerlo en prisión hasta que pueda remitirlo al César.» Palabra de Dios

Salmo Responsorial. R/ 102 “El Señor puso en el cielo su trono”Bendice, alma mía, al Señor, y todo mi ser a su santo nombre. Bendice,

alma mía, al Señor, y no olvides sus beneficios. R.Como se levanta el cielo sobre la tierra, se levanta su bondad sobre sus

fieles; como dista el oriente del ocaso, así aleja de nosotros nuestros delitos. R.El Señor puso en el cielo su trono, su soberanía gobierna el universo.

Bendigan al Señor, ángeles suyos, poderosos ejecutores de sus órdenes. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 21,15-19 Habiéndose aparecido Jesús a sus discípulos, después de comer con

ellos, dice a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?» Él le contestó: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Jesús le dice: «Apacienta mis corderos.» Por segunda vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?» Él le contesta: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Él le dice: «Pastorea mis ovejas.» Por tercera vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?» Se entristeció Pedro de que le preguntara por tercera vez si lo quería y le dijo «Señor, Tú conoces todo, tú sabes que te quiero.» Jesús le dice: «Apacienta mis ovejas. Te lo aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías e ibas adonde querías; pero, cuando seas viejo, extenderás las manos, otro te ceñirá y te llevará adonde no quieras.» Esto dijo aludiendo a la muerte con que iba a dar gloria a Dios. Dicho esto, añadió: «Sígueme.» Palabra del Señor.

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Meditación

Estamos terminando el tiempo pascual. Y hoy lo terminamos casi como lo iniciamos, con el anuncio krígmático: “Jesús está vivo”.

Esta afirmación la leemos hoy de boca de un romano, del nuevo gobernador romano que tiene a Pablo en la cárcel. Cuando el gobernador quiere resumir el motivo de la prisión de Pablo dice: “se trataba sólo de ciertas discusiones acerca de su religión y de un difunto llamado Jesús, que Pablo sostiene que está vivo.”

Y este es el resumen de nuestra fe. No creemos en un difunto, sino en Cristo Vivo. Esto da sentido y valor a toda nuestra vida.

Ese tal Festo, el gobernador, dice estas palabras, pero no cree en ellas; aunque quiere hacer cumplir la ley, no es creyente. Le da igual que ese Jesús esté vivo o difunto.

Es posible que en nuestros ambientes encontremos personas que aprecian a Jesús por su mensaje, pero no llegan a creer que es Dios, por tanto no creen que está vivo.

El mensaje central de la predicación cristiana no puede ser otro. Es cuestión de decidirnos a llevar el mensaje de vida, de salvación, de amor, de liberación y justicia; y no el de condenación, de muerte, de sufrimiento.

Decisión por el amor, como la de Pedro en el Evangelio. Debe amar más, esa es su decisión, y la nuestra: amar a Dios amando a nuestros hermanos; no tenemos de otra. Apacentar a las ovejas de Cristo es preocuparse de ellas en todos los sentidos, en lo material, personal y espiritual. No podemos demostrar el amor a Dios si no es a través de la solidaridad con los demás.

Al final de la Pascua, cada uno de nosotros y nosotras podemos reconocer que muchas veces hemos sido débiles, y hemos callado por miedo o vergüenza, y no hemos sabido dar testimonio de Jesús, aunque tal vez no le hayamos negado tan solemnemente como Pedro.

Tenemos la ocasión hoy, y en los dos días que quedan de Pascua, para reafirmar ante Jesús nuestra fe y nuestro amor, y para sacar las consecuencias en nuestra vida, de modo que este testimonio no solo sea de palabras, sino también de obras: un seguimiento más fiel del Evangelio de Jesús en nuestra existencia.

También a nosotros nos dice el Señor: «sígueme». Desde nuestra debilidad podemos contestar al Resucitado, con las palabras de Pedro: «Señor, tú sabes que te amo». Y también, imitando esta vez a Pablo, podemos reafirmar que «creemos que Jesús, ese a quien el mundo da por difunto, está vivo».

23 Feria de Pascua

Sábado Blanco

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 28,16-20. 30-31 Cuando llegamos a Roma, le permitieron a Pablo vivir por su cuenta en

una casa, con un soldado que lo vigilase. Tres días después, convocó a

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los judíos principales; cuando se reunieron, les dijo: «Hermanos, estoy aquí preso sin haber hecho nada contra el pueblo ni las tradiciones de nuestros padres; en Jerusalén me entregaron a los romanos. Me interrogaron y querían ponerme en libertad, porque no encontraban nada que mereciera la muerte; pero, como los judíos se oponían, tuve que apelar al César; aunque no es que tenga intención de acusar a mi pueblo. Por este motivo he querido verles y hablar con ustedes; pues por la esperanza de Israel llevo encima estas cadenas.» Vivió allí dos años enteros a su propia costa, recibiendo a todos los que acudían, predicándoles el reino de Dios y enseñando lo que se refiere al Señor Jesucristo con toda libertad, sin estorbos. Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 10R/ “Los buenos verán tu rostro, Señor”

El Señor está en su templo santo, el Señor tiene su trono en el cielo; sus ojos están observando, sus pupilas examinan a los hombres. R.

El Señor examina a inocentes y culpables, y al que ama la violencia Él lo odia. Porque el Señor es justo y ama la justicia: los buenos verán su rostro. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 21, 20-25 En aquel tiempo, Pedro, volviéndose, vio que los seguía el discípulo a

quien Jesús tanto amaba, el mismo que en la cena se había apoyado en su pecho y le había preguntado: «Señor, ¿quién es el que te va a entregar?» Al verlo, Pedro dice a Jesús: «Señor, y éste ¿qué?» Jesús le contesta: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿a ti qué? Tú sígueme.» Entonces se empezó a correr entre los hermanos el rumor de que ese discípulo no moriría. Pero no le dijo Jesús que no moriría, sino: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿a ti qué?» Éste es el discípulo que da testimonio de todo esto y lo ha escrito; y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero. Muchas otras cosas hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que los libros no cabrían ni en todo el mundo. Palabra del Señor

Meditación

Hoy leemos el final de dos libros, el de los Hechos de los Apóstoles y el Evangelio de San Juan.

Al principio del libro de los Hechos de los Apóstoles, que ha acompañado todo nuestro tiempo de Pascua, Jesús hizo una promesa: “recibirán poder cuando el Espíritu Santo venga sobre ustedes; y me serán testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra” (Hch 1,8). Realmente esa palabra del Señor es la gran clave de lectura de este libro singular por sus variaciones de estilo y por sus oscilaciones en cuanto al “protagonista”. Porque, si bien Pablo y sus misiones ocupan un lugar muy amplio en el conjunto de los Hechos, uno ve que más que un libro sobre Pablo es una obra que retrata el despliegue del Evangelio por el poder del Espíritu Santo. Así vemos victoriosa y cumplida la palabra de Jesús antes de su Ascensión. No olvidemos que al libro de los Hechos de los Apóstoles se le acostumbra a llamar “el Evangelio del Espíritu Santo”.

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Roma, en la mente de aquellos galileos, correspondía precisamente a los “confines de la tierra”, de modo que la estadía fecunda de Pablo, aquellos dos años de predicación en que “podía anunciar el reino de Dios y enseñar cuanto se refiere a Jesucristo, el Señor, con toda libertad y sin obstáculo alguno” indican que, más allá de las maquinaciones de los enemigos de la fe (cf. Hch 26,2 ss.), más allá de las traiciones de los “falsos hermanos” (cf. 2 Cor 11,26; Gál 2,4); más allá de las debilidades y tentaciones que todos padecemos, ¡la palabra de Jesucristo se cumple!

Finalmente su Evangelio vence y la noticia habrá de llegar a todos, como llegó hasta la capital misma de aquel imperio. También durante la Pascua nos ha acompañado abundantemente el Evangelio según san Juan. La conversación con Nicodemo, los discursos sobre “Jesús, Pan de Vida” y “Jesús, Buen Pastor”, y finalmente los textos de aquel testamento espiritual que nos regaló Jesús en la Ultima Cena, donde precisamente nos enseñó a esperar y rogar por el don del Espíritu Santo. ¡Cuánto bien nos ha traído este Santo Evangelio, enseñándonos a hundir un poco más la mirada en el misterio inagotable de la Palabra hecha carne, cuya gloria ha extasiado nuestro corazón! ¡Cuánta bendición para el alma cristiana levantarse en alas del águila de la contemplación, que es este Juan, para aspirar los aires tonificantes de la altura para la que hemos sido creados!

Sin embargo el Evangelio de Juan parece como si no se acabara, ya que nos dice que Jesús hizo otras muchas cosas. No nos podemos quedar esperando que nos escriban esas otras cosas de Jesús, muchas de ellas ya las conocemos por la Tradición de la Iglesia. Es cuestión de decidirnos a practicar todas las enseñanzas y a predicarlas a los demás.

24 Domingo de Pentecostés

I Semana de la Liturgia de las Horas Rojo

Espíritu Santo, haznos disponibles para servir al Reino de Dios

Orientaciones para esta Celebración: Se pueden poner todos los signos y símbolos del Espíritu Santo. Se ponen en lugares visibles los dones y los frutos del Espíritu. A cada persona que llega a la celebración se le pone en el pecho una tarjetita con uno de los dones o frutos del Espíritu. Se recibe a la comunidad con los cantos alegres que conocemos sobre el Espíritu. Se pueden colocar los diferentes servicios que se realizan en la comunidad movidos por el Espíritu Santo.

Monición ambientalHoy es el día de Pentecostés, hoy es el día de una gran fiesta cristiana,

porque es el día en que nace la Iglesia. El Espíritu llena de alegría y fortaleza a

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los apóstoles y a cada uno de nosotros y nosotras. Hoy es el día del envío, de la profecía… hoy es nuestro día, el día de todos los bautizados y bautizadas.

Hoy es el día de llenarnos de fuerza para la disponibilidad ante Dios y ante los hermanos y hermanas, ante la patria y ante el mundo.

Nos acompaña María como estuvo al lado de los Apóstoles para reforzarnos y animarnos a estar disponibles para que el Espíritu Santo nos invada y nos envíe donde El quiera y cuando El quiera. Llenos del Espíritu Santo celebremos con gozo esta fiesta e iniciemos cantando a Jesucristo, que llega a presidir esta Celebración a través de su ministro.

Primera lectura: Hechos 2, 1-11El Espíritu Santo es fuego que quita el frío del miedo y hace que los

Apóstoles se dispongan con alegría y valentía a proclamar a Jesucristo muerto y resucitado. Y lo mismo hace hoy con nosotros, haciendo surgir en nosotros la disponibilidad para ser verdaderos testigos del Señor. Escuchemos..Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles

Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De repente, un ruido del cielo, como de un viento recio, resonó en toda la casa donde se encontraban. Vieron aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se repartían, posándose encima de cada uno. Se llenaron todos de Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas extranjeras, cada uno en la lengua que el Espíritu le sugería.

Se encontraban entonces en Jerusalén judíos devotos de todas las naciones de la tierra. Al oír el ruido, acudieron en masa y quedaron desconcertados, porque cada uno los oía hablar en su propio idioma. Enormemente sorprendidos, preguntaban:

- «¿No son galileos todos esos que están hablando? Entonces, ¿cómo es que cada uno los oímos hablar en nuestra lengua nativa?

Entre nosotros hay partos, medos y elamitas, otros vivimos en Mesopotamia, Judea, Capadocia, en el Ponto y en Asia, en Frigia o en Panfilia, en Egipto o en la zona de Libia que limita con Cirene; algunos somos forasteros de Roma, otros judíos o prosélitos; también hay cretenses y árabes; y cada uno los oímos hablar de las maravillas de Dios en nuestra propia lengua.» Palabra de Dios.

Salmo Responsorial 103R/ Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra.

Bendice, alma mía, al Señor: ¡Dios mío, qué grande eres! Cuántas son tus obras, Señor; la tierra está llena de tus criaturas. R.

Les retiras el aliento, y expiran y vuelven a ser polvo; envías tu aliento, y los creas, y repueblas la faz de la tierra. R.

Gloria a Dios para siempre, goce el Señor con sus obras. Que le sea agradable mi poema, y yo me alegraré con el Señor. R.

Segunda Lectura: 1 Corintios 12, 3b-7. 12-13 El Espíritu Santo nos lleva a vivir la unidad a la vez que nos

enriquece con diversidad de dones para bien de toda la comunidad. El

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nos mueve a la disponibilidad para recibir y para compartir sus dones. Escuchemos.

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios Hermanos: Nadie puede decir: «Jesús es Señor», si no es bajo la acción

del Espíritu Santo. Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común.

Porque, lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo. Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu. Palabra de Dios.

Secuencia: para ser cantada o rezada Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el cielo. Padre amoroso del

pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo.

Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos.

Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre, si tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado, cuando no envías tu aliento.

Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma el espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero.

Reparte tus siete dones, según la fe de tus siervos; por tu bondad y tu gracia, dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno.

AleluyaVen, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles

y enciende en ellos la llama de tu amor.

Evangelio: Juan 20, 19-23 Jesús nos regala el Espíritu para el perdón de los pecados y para la

misión que el Padre le encomendó y que El transmite a sus discípulos. Es el Espíritu Santo quien nos mueve a la disponibilidad para ser testigos del Señor en todas partes y en todos los ambientes. Es El que nos mueve a estar disponibles a la solidaridad con los necesitados e inspira a los consagrados y consagradas a seguir a Jesús y servir a su Reino. Escuchemos.

Lectura del santo evangelio según san Juan Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los

discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y

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en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «Paz a ustedes» Y diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: «Paz a ustedes. Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo.» Y, dicho esto, exhaló su aliento sobre ellos y les dijo: - «Reciban el Espíritu Santo; a quienes les perdonen los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengan, les quedan retenidos.» Palabra del Señor.

Oración de los fieles.Quien preside: Padre, te presentamos nuestras necesidades, las de

nuestras familias y del país. A cada petición respondemos: Envíanos tu Espíritu para que nos haga disponibles a servirte.

1.- Por el Papa, los obispos, los presbíteros, diáconos y a todos los que prestan algún servicio de animación y coordinación en la Iglesia para que estén dispuestos a dejarse guiar por el Espíritu Santo. Oremos.

2.- Por quienes gobiernan la República Dominicana, para que abiertos a la acción del Espíritu Santo estén disponibles a servir a los más pobres.Oremos.

3.- Por los más pobres para que sientan el consuelo y la fuerza del Espíritu Santo y la solidaridad de todos nosotros. Oremos.

4.- Por la Asamblea aquí reunida para que el Espíritu Santo nos llene de alegría y valentía para disponernos a servir a los más necesitados. Oremos.

5.- Por los Consagrados y Consagradas, para que fieles al Espíritu Santo estén dispuestos a servir a Dios y a los más necesitados. Oremos.

6.- Por los niños y los jóvenes, que encuentren un ambiente apropiado para su desarrollo integral, y trabajen por una juventud alegre y comprometida con la realidad. Oremos.

7.- Por quienes en nuestra comunidad están cumpliendo con algún ministerio o servicio eclesial, para que lo hagan con alegría en bien de toda la comunidad. Oremos.

Quien preside: Padre Santo envía tu Espíritu sobre nosotros. Llénanos de su amor, de su sabiduría, de su fortaleza y de su paz que nos lleve a estar disponibles para servir a tu Reino en nuestro pueblo. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.

25Feria o Memoria Libre: San Beda el Venerable,

Presbítero y Doctor de la Iglesia o San Gregorio VII, Papa, o Santa María Magdalena de Pazzi, Virgen

Lunes Verde o BlancoIV Semana Liturgia de las Horas. Se reanuda el Tiempo Ordinario.

VIII Semana del Tiempo Ordinario

Lectura del Libro del Eclesiástico 17,20-28A los que se arrepienten Dios los deja volver y reanima a los que pierden

la paciencia. Vuelve al Señor, abandona el pecado, suplica en su presencia

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y disminuye tus faltas; retorna al Altísimo, aléjate de la injusticia y detesta de corazón la idolatría. En el Abismo, ¿quién alaba al Señor, como los vivos, que le dan gracias? El muerto, como si no existiera, deja de alabarlo, el que está vivo y sano alaba al Señor. ¡Qué grande es la misericordia del Señor, y su perdón para los que vuelven a él! Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 31R/ “Alégrense, justos, y gocen en el Señor

Dichoso el que está absuelto de su culpa, a quien le han sepultado su pecado; dichoso el hombre a quien el Señor no le apunta el delito. R.

Había pecado, lo reconocí, no te encubrí mi delito; propuse: «Confesaré al Señor mi culpa», y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R.

Por eso, que todo fiel te suplique en el momento de la desgracia: la crecida de las aguas caudalosas no lo alcanzará. R.

Tú eres mi refugio, me libras del peligro, me rodeas de cantos de libera-ción. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 10,17-27En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó uno corriendo,

se arrodilló y le preguntó: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?»

Jesús le contestó: « ¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios. Ya sabes los mandamientos: no matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, no estafarás, honra a tu padre y a tu madre.» Él replicó: «Maestro, todo eso lo he cumplido desde pequeño.» Jesús se le quedó mirando con cariño y le dijo: «Una cosa te falta: anda, vende lo que tienes, dale el dinero a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego sígueme.» A estas palabras, él frunció el ceño y se marchó pesaroso, porque era muy rico. Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: « ¡Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el reino de Dios!» Los discípulos se extrañaron de estas palabras. Jesús añadió: «Hijos, ¡qué difícil les es entrar en el reino de Dios a los que ponen su confianza en el dinero! Más fácil le es a un camello pasar por todo el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de Dios.»

Ellos se espantaron y comentaban: «Entonces, ¿quién puede salvarse?» Jesús se les quedó mirando y les dijo: «Es imposible para los hombres, no para Dios. Dios lo puede todo.»Palabra del Señor

Meditación

Tanto la primera lectura como el salmo responsorial nos hablan de la conversión y de la vuelta a Dios. No porque seamos muy malos, sino porque Dios es muy bueno y está esperando el regreso: él nos deja volver.

¿De qué tenemos que arrepentirnos? ¿Cuáles son nuestros pecados?Muchos y muchas podremos decir, “si yo no tengo grandes pecados”

El libro del Eclesiástico (Sirácida) nos invita a convertirnos de dos cosas fundamentales: de la injusticia y de la idolatría. Sí, tenemos o podemos

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tener algún o algunos ídolos; no ponemos a Dios lo primero, preferimos nuestra comodidad a la oración, a la celebración, a las reuniones de formación. Nos quedamos en casa, en vez de ir a Misa porque “nos ha venido una visita”, y así perdemos la oportunidad de dar testimonio, de evangelizar de la importancia de la Eucaristía, cuando le decimos a la visita que tenemos a Dios por más importante… y así revisemos nuestra vida y veamos casos y cosas en que tenemos nuestros ídolos.

Y con relación a la injusticia revisemos nuestra decisión de comprometernos por mejorar la situación de nuestro barrio, campo, sector, o condominio. Revisemos cuánto nos preocupa el país, pero no en teoría, para quejarnos con la vecina, sino en la práctica de trabajar por combatir la violencia, la corrupción, etc, y participando en asociaciones y juntas para trabajar por el bien de la comunidad.

En el Evangelio vemos una escena bonita, simpática, que lo primero que nos enseña es que a Jesús también se le negaron a seguir unas cuantas personas, y que no consigue todo lo que quiere con su predicación.

Es que Jesús no pide «cosas», sino que pide la entrega total. No se trata de «tener» o no tener, sino de «ser» y «seguirlo” en la vida: «que cargue con su cruz cada día y me siga», «el que quiera guardar su vida, la perderá». A todos nos cuesta renunciar a lo que estamos apegados: las riquezas o las ideas o la familia o los proyectos o la mentalidad.

Esta escena del evangelio de hoy se aplica muchas veces a la Vida Consagrada, ya que quienes la han abrazado han decidido imitar a Jesús más de cerca: han vendido todo y le han seguido. Si han querido hacer los votos de pobreza, celibato y obediencia, ha sido para poder caminar más ágilmente por el camino de las bienaventuranzas, para poder amar más, para estar disponibles para los demás, para ser libres interiormente, como Jesús. Todo ello, fiados no en sus fuerzas, sino en las de Dios: «es imposible para los hombres, no para Dios». En este Año de la Vida Consagrada oremos por su fidelidad.

Pero también lo aplicamos a todo cristiano y cristiana que debe decidirse a seguir el camino de las bienaventuranzas. No se trata de que el discípulo de Jesús no pueda tener nada propio, sino que no se apegue a lo que posee, y esto que tiene lo comparta con los demás, sobre todo con los más necesitados. Que no intente servir a dos señores.

26 Memoria Obligatoria: San Felipe Neri, Presbítero

Martes Blanco

Lectura del Libro del Eclesiástico 35,1-15El que observa la ley hace una buena ofrenda, el que guarda los

mandamientos ofrece sacrificio de acción de gracias; el que hace favores ofrenda flor de harina, el que da limosna ofrece sacrificio de alabanza. Apartarse del mal es agradable a Dios, apartarse de la injusticia es expiación. No te presentes a Dios con las manos vacías; esto es lo que pide la ley. La ofrenda del justo enriquece el altar, y su aroma llega hasta el Altísimo. El

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sacrificio del justo es aceptado, su ofrenda memorial no se olvidará. Honra al Señor con generosidad y no seas mezquino en tus ofrendas; cuando ofreces, pon buena cara, y paga de buena gana los diezmos. Da al Altísimo como él te dio: generosamente, según tus posibilidades, porque el Señor sabe pagar y te dará siete veces más. No lo sobornes, porque no lo acepta, no confíes en sacrificios injustos; porque es un Dios justo, que no puede ser parcial.Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 49R/ “Al que sigue buen camino, le haré ver la salvación de Dios”

Congréguenme a mis fieles, que sellaron mi pacto con un sacrificio. Proclame el cielo su justicia; Dios en persona va a juzgar. R.

«Escucha, pueblo mío, que voy a hablarte; Israel, voy a dar testimonio contra ti; yo, Dios, tu Dios. No te reprocho tus sacrificios, pues siempre están tus holocaustos ante mí.» R.

«Ofrece a Dios un sacrificio de alabanza, cumple tus votos al Altísimo. El que me ofrece acción de gracias, ése me honra; al que sigue buen camino le haré ver la salvación de Dios.» R.

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 10,28-31En aquel tiempo, Pedro se puso a decir a Jesús: «Ya ves que nosotros lo

hemos dejado todo y te hemos seguido.» Jesús dijo: «Les aseguro que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más –casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones–, y en la edad futura, vida eterna. Muchos primeros serán últimos, y muchos últimos primeros.»Palabra del Señor.

Meditación

Las dos lecturas de hoy nos hablan de dar, de entrega y de lo que se logra con la entrega. El Evangelio habla más de entregarse a sí mismo que de entregar cosas materiales.

La primera lectura nos enseña cómo hacer ofrendas. No se trata de “comprar” a Dios, ni de comprar su amor, su benevolencia o sus favores. Veamos. La vida misma es una ofrenda agradable a Dios, cuando es una vida recta y justa: “cumplir la ley vale tanto como hacer muchas ofrendas; obedecer los mandamientos es como ofrecer sacrificios de reconciliación. Ser agradecido es como ofrecer la mejor harina a Dios, y dar limosna es como hacer sacrificios de alabanza. Lo que agrada al Señor es que te apartes del mal; si te apartas de la injusticia, obtendrás el perdón de tus pecados” (Sir 35,1-5). Por ello también la ofrenda no es un reemplazo de lo que la vida no ha sido, pues hay una indicación elocuente: “el sacrificio del justo es aceptado, su ofrenda no se olvidará” (Sir 35,9), y también: “no confíes en ofrendas de cosas mal habidas, porque él es un Dios justo, y trata a todos por igual” (Sir 35,15).

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Ofrecer nuestras cosas y ofrecernos a Dios es un acto de justicia y una expresión de gratitud, por eso “no te presentes al Señor con las manos vacías” (Sir 35,6). Lo que damos a Dios es un reconocimiento ante nuestra conciencia y ante los hermanos de la generosidad divina, y por esto ofrendamos de buena gana y con abundancia: “honra al Señor con generosidad y no seas mezquino en tus ofrendas; cuando ofreces, pon buena cara, y da los diezmos con alegría. Da al Altísimo como él te dio: generosamente, según tus posibilidades” (Sir 35,10-12). Una ofrenda generosa nos hace entender la lógica de Dios que no es la del comercio, en que se recibe tanto como se da, sino la lógica del amor y la alegría, en que todo se multiplica perfecta y maravillosamente: “siete” veces (Sir 35,13). Es también un género de ofrenda lo que nos presenta el evangelio de hoy. Pedro dice al Señor: “nosotros lo hemos dejado todo para seguirte” (Mc 10,28). El apóstol, en efecto, hace una ofrenda semejante al holocausto de la ley antigua, en que todo debía ser consumido por el fuego. “Lo hemos dejado todo” significa: “lo hemos ofrecido todo”. Y Jesús habla de una recompensa en esta vida, de cien veces más.

No se trata de una recompensa material, sino de un verdadero sentido en la vida y de una paz y felicidad personal. De un modo especial esta experiencia la viven los Consagrados y Consagradas y los sacerdotes. Han entrado en la dinámica de este otro género de familia y parentesco: los hermanos y los hijos los cuentan por centenares y miles. No han formado familia propia, pero no por eso han dejado de amar: al contrario, están más plenamente disponibles para todos, movidos de un amor universal, no por una paga a corto plazo.

27 Feria o Memoria Libre: San Agustín De Cantorbery, Obispo

Miércoles Verde o Blanco

Lectura del Libro del Eclesiástico 36,1-2a.5-6.13-19Sálvanos, Dios del universo, infunde tu terror a todas las naciones, para que

sepan, como nosotros lo sabemos, que no hay Dios fuera de ti. Renueva los prodigios, repite los portentos. Reúne a todas las tribus de Jacob y dales su heredad como antiguamente. Ten compasión del pueblo que lleva tu nombre, de Israel, a quien nombraste tu primogénito; ten compasión de tu ciudad santa, de Jerusalén, lugar de tu reposo. Llena a Sión de tu majestad, y al templo, de tu gloria. Da una prueba de tus obras antiguas, cumple las profecías por el honor de tu nombre, recompensa a los que esperan en ti y saca veraces a tus profetas, escucha la súplica de tus siervos, por amor a tu pueblo, y reconozcan los confines del orbe que tú eres Dios eterno.Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: R/ 78“Muéstranos, Señor, la luz de tu misericordia

No recuerdes contra nosotros las culpas de nuestros padres; que tu compasión nos alcance pronto, pues estamos agotados. R.

Socórrenos, Dios, salvador nuestro, por el honor de tu nombre; líbranos y perdona nuestros pecados a causa de tu nombre. R.

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Llegue a tu presencia el gemido del cautivo: con tu brazo poderoso, salva a los condenados a muerte. R.

Mientras, nosotros, pueblo tuyo, ovejas de tu rebaño, te daremos gracias siempre, contaremos tus alabanzas de generación en generación. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 10,32-45En aquel tiempo, los discípulos iban subiendo camino de Jerusalén, y

Jesús se les adelantaba; los discípulos se extrañaban, y los que seguían iban asustados. Él tomó aparte otra vez a los Doce y se puso a decirles lo que le iba a suceder: «Miren, estamos subiendo a Jerusalén, y el Hijo del hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas, lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, se burlarán de él, le escupirán, lo azotarán y lo matarán; y a los tres días resucitará.»

Se le acercaron los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron: «Maestro, queremos que hagas lo que te vamos a pedir.» Les preguntó: «¿Qué quieren que haga por ustedes?» Contestaron: «Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda.» Jesús replicó: «No saben lo que piden, ¿son capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizarse con el bautismo con que yo me voy a bautizar?»

Contestaron: «Lo somos.»Jesús les dijo: «El cáliz que yo voy a beber lo beberán y se bautizarán con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mi concederlo; está ya reservado.»

Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan. Jesús, reuniéndolos, les dijo: «Saben que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Ustedes nada de eso: el que quiera ser grande, sea el servidor de los demás; y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.»Palabra del Señor

Meditación

El Eclesiástico hace una oración por el pueblo, pide que vuelva a su antigua grandeza, a la unidad entre toda su gente. Pero es también una oración universal, ya que presenta a Dios como el Dios del universo, y pide que todos los pueblos sepan que no hay un dios fuera de Él. “… para que sepan, como nosotros lo sabemos, que no hay Dios fuera de ti”. Esta frase puede ser entendida también como una misión, o un envío, ya que el pueblo debe moverse a llevar ese mensaje a los demás pueblos.

Es un ejemplo de cómo orar de manera universal y abierta, no podemos quedarnos a pedir sólo por nosotros, los nuestros o nuestra Iglesia. El mundo está muy necesitado y debemos pedirle a Dios por esas necesidades mundiales. Y comprometernos en lo que pedimos, porque nos corresponde poner nuestra parte. También nos recuerda que tenemos la misión de evangelizar, de meternos en la Nueva Evangelización.

En el Evangelio se nos muestra de una manera excepcional la realidad del servicio. Podemos decir, que se institucionaliza el servicio como

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regla de oro en la Iglesia. De ahí que a todos, en la Iglesia, se nos invita al servicio de los demas como la ecencia de nuestro ser cristiano. El servicio es lo que nos hace grandes e importantes ante Dios y nuestros hermanos y hermanas. Con razon el Papa Francisco invita y exhorta a todos, sacerdotes y consagrados de modo especial, a no buscar y tener como objetivo principal los ascensos y carrerismos dentro de la Iglesia.

Por eso, debemos tener claro que en la Iglesia no hay cargos y puestos de privilegios, sino servicios. “El que quiera ser grande entre ustedes que se haga servidor de todos”. El mismo Jesus, como gran maestro nos enseñó: “ No he venido a que me sirvan, sino a servir y a dar la vida por todos”.

El Evangelio habla del servicio total, hasta la muerte. Este tema no es sólo para la iglesia, el servicio debe ser de toda persona que trabaja en el Estado y para el Estado, de hecho se llama “servidores del Estado”. ¡Cuánta falta hace este servicio en la Iglesia y en los empleados del estado! Y más en quienes tienen altos cargos.

28 Fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote

Jueves Blanco

Lectura del Profeta Isaías 52, 13-15; 53, 1-12 He aquí que mi siervo tendrá éxito, crecerá y llegará muy alto. Lo mismo

que muchos se horrorizaban al verlo, porque estaba tan desfigurado que no parecía hombre ni tenía aspecto humano, así asombrará a muchas naciones. Los reyes se quedarán sin palabras al ver algo que nunca les habían contado y comprender algo que nunca habían oído.

¿Quién creyó nuestro anuncio? ¿A quién se manifestó el poder del Señor? Creció ante el Señor como un retoño, como raíz en tierra árida. No tenía gracia ni belleza para que nos fijáramos en él, tampoco aspecto atractivo para que lo admiráramos. Fue despreciado y rechazado por los hombres, abrumado de dolores y habituado al sufrimiento; como alguien a quien no se quiere mirar, lo despreciamos y lo estimamos en nada.

Sin embargo, él llevaba nuestros sufrimientos, soportaba nuestros dolores. Nosotros lo creíamos castigado, herido por Dios y humillado, pero eran nuestras rebeldías las que lo traspasaban, y nuestras culpas las que lo trituraban. Sufrió el castigo para nuestro bien y con sus heridas nos sanó.

Andábamos todos errantes como ovejas, cada uno por su camino, y el Señor cargó sobre él todas nuestras culpas. Cuando era maltratado, él se sometía, y no abría su boca; como cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría su boca.

Sin defensa ni juicio se lo llevaron, y ¿quién se preocupó de su suerte? Lo arrancaron de la tierra de los vivos, lo hirieron por los pecados de mi pueblo; lo enterraron con los malhechores, lo sepultaron con los malvados, aunque él no cometió ningún crimen ni hubo engaño en su boca.

Pero el Señor quiso quebrantarlo con sufrimientos. Y si él entrega su vida como expiación, verá su descendencia, tendrá larga vida y por medio de él, prosperarán los planes del Señor. Después de una vida de amarguras verá la

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luz, comprenderá su destino. Mi siervo, el justo, traerá a muchos la salvación cargando con las culpas de ellos.

Por eso, le daré un puesto de honor entre los grandes, y con los poderosos participará del triunfo, por haberse entregado a la muerte y haber compartido la suerte de los pecadores. Pues él cargó con los pecados de muchos e intercedió por los pecadores.Palabra de Dios. (O esta otra lectura Hebreos 10, 12-23).

Salmo Responsorial: 39 R/ “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”

¡Cuántas maravillas has hecho, Señor Dios mío! ¡Cuántos proyectos para nosotros! ¡No hay nadie como tú! Yo quisiera contarlos, publicarlos, pero son innumerables. R.

He proclamado tu fidelidad en la gran asamblea; tú sabes, Señor, que no me he callado. No he ocultado tu fidelidad en el fondo de mi corazón, proclamé tu lealtad y tu salvación, no oculté tu amor en la gran asamblea. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 22, 14-20Llegada la hora, Jesús se sentó a la mesa con sus discípulos. Y les dijo: «

¡Cómo he deseado celebrar esta pascua con ustedes antes de morir! Porque les digo que no la volveré a celebrar hasta que tenga su cumplimiento en el reino de Dios». Tomó entonces un cáliz, dio gracias y dijo: «Tomen esto y repártanlo entre ustedes; pues les digo que ya no beberé del fruto de la vid hasta que llegue el reino de Dios».

Después tomó pan, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo: «Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes; hagan esto en memoria mía». Y después de la cena, hizo lo mismo con el cáliz diciendo: «Este es el cáliz de la nueva alianza sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes».Palabra del Señor.

Meditación

El jueves después de Pentecostés, la Iglesia celebra a Jesucristo como sumo y eterno sacerdote. Esta fiesta nos recuerda que estamos salvados por el único Sacrificio de Cristo en la Cruz. No tenemos otro sacerdote que se ofrezca y nos salve, no lo tenemos, por eso creemos solamente en Cristo Salvador. Las lecturas de hoy insisten en esa salvación y en el precio que ha costado: la entrega total de Cristo, el sufrimiento y la vida. Somos importantes, tan importantes como para que Jesucristo se haya entregado en totalidad para nuestra salvación.

Y esta entrega supone que ahora tenemos otros sacerdotes, no son salvadores, no nos salvan, sino que nos hacen presente, nos actualizan la única salvación traida por Cristo. De ahí su importancia, su necesidad para actualizar la salvación. Y estos sacerdotes actuales, al ejemplo de Cristo, deben estar para servir al pueblo, para ayudar al pueblo a encontrar esa salvación. El sacerdote debe rechazar las tentaciones de considerarse superior a los fieles,antes bien, debe

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ponerse a su servicio y, a ejemplo de Cristo, tomar sobre sí los gozos y las angustias, las fatigas y las esperanzas de los demás. Por otra parte, esta fiesta nos recuerda que todos los bautizados y bautizadas participamos también del sacerdocio de Cristo, todos y todas debemos celebrar, ser parte activa de la celebración, de todas las celebraciones, principalmente de la Eucaristía.

En esta fiesta, el evangelio que ha puesto la Iglesia, nos recuerda la Institución de de la Eucaristía, Sacramento de vida y amor. Por eso, la celebración de la Eucaristía es el centro y cumbre de toda la litugia de la Iglesia. Es el gran memorial que Jesús dejó como legado a la Iglesia para que se fortalezca, alimente y a la vez celebre en comunión y participación.

Nuestra Iglesia Católica hace suya la celebración instituida por Jesús. Debemos dar gracias a Dios por tener y pertenecer a una Iglesia que posee el depositum fidei, o depósito de la fe donde nos podemos nutrir y fortalecer como pueblo de Dios que camina y se prepara para celebrar un día la Pascua definitiva con Jesús Sumo y Eterno Sacerdote.

Pedimos a Jesús como único y Sumo Sacerdote que fortalezca, anime y renueve a todos nuestros hermanos sacerdotes en tan delicada e importante misión que se les ha encomendado de dirigir,educar, alimentar y pastorear a todo el pueblo de Dios. Hoy es tiempo de sentirnos salvados por Cristo, de orar por nuestros sacerdotes, de respetarlos, colaborar con ellos, amarlos mucho y ayudarles a llevar una vida santa. Hoy es un día para aprender a celebrar mejor la Eucaristía.

29 Feria

Viernes Verde

Lectura del libro del Eclesiástico 44,1.9-12Hagamos el elogio de los hombres de bien, de la serie de nuestros

antepasados. Hay quienes no dejaron recuerdo, y acabaron al acabar su vida: fueron como si no hubieran sido, y lo mismo sus hijos tras ellos. No así los hombres de bien, su esperanza no se acabó; sus bienes perduran en su descendencia, su heredad pasa de hijos a nietos. Sus hijos siguen fieles a la alianza, y también sus nietos, gracias a ellos. Su recuerdo dura por siempre, su caridad no se olvidará. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 149R/. El Señor ama a su pueblo

Canten al Señor un cántico nuevo, resuene su alabanza en la asamblea de los fieles; que se alegre Israel por su Creador, los hijos de Sión por su Rey. R/.

Alaben su nombre con danzas, cántenle con tambores y cítaras; porque el Señor ama a su pueblo y adorna con la victoria a los humildes. R/.

Que los fieles festejen su gloria y canten jubilosos en filas: con vítores a Dios en la boca; es un honor para todos sus fieles. R/

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Lectura del santo evangelio según san Marcos 11,11-26Al día siguiente, cuando salió de Betania, sintió hambre. Vio de lejos

una higuera con hojas y se acercó para ver si encontraba algo; al llegar no encontró más que hojas, porque no era tiempo de higos.

Entonces le dijo: «Nunca jamás coma nadie de ti.» Los discípulos lo oyeron.

Llegaron a Jerusalén, entró en el templo y se puso a echar a los que traficaban allí, volcando las mesas de los cambistas y los puestos de los que vendían palomas. Y no consentía a nadie transportar objetos por el templo. Y los instruía, diciendo: «¿No está escrito: “Mi casa se llamará casa de oración para todos los pueblos” Ustedes, en cambio, la han convertido en cueva de bandidos.»

Se enteraron los sumos sacerdotes y los escribas y, como le tenían miedo, porque todo el mundo estaba asombrado de su doctrina, buscaban una manera de acabar con él. Cuando atardeció, salieron de la ciudad. A la mañana siguiente, al pasar, vieron la higuera seca de raíz.

Pedro cayó en la cuenta y dijo a Jesús: «Maestro, mira, la higuera que maldijiste se ha secado.»Jesús contestó: «Tengan fe en Dios. Les aseguro que si uno dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, no con dudas, sino con fe en que sucederá lo que dice, lo obtendrá. Por eso les digo: Cualquier cosa que pidan en la oración, crean que se la han concedido, y la obtendrán. Y cuando se pongan a orar, perdonen lo que tengan contra otros, para que también su Padre del cielo les perdone sus culpas.»Palabra del Señor.

Meditación

El Eclesiástico nos invita a hacer un elogio de los antepasados. Unos fueron buenos, otros no tanto, así nos lo dice el libro.

Debemos hacer ese recuerdo de las personas de la Biblia, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, un recuerdo para tratar de imitarlos en qué hacer y no hacer.

Además, tenemos una larga historia de Santos y Santas que a lo largo de la historia han vivido su vida de acuerdo con los mandatos de Cristo y ahora son ejemplo para nuestro tiempo.

En “comunión con los santos”, debemos sentirnos dispuestos a caminar por los caminos del Señor, quien va por delante para enseñarnos el camino y darnos la fuerza para recorrerlo.

También tenemos a los antepasados vivos, esos abuelitos y abuelitas que están en nuestras familias y en la sociedad. Son la cultura, la fe, la sociedad viviente. Por desgracia, en este mundo de la eficacia, muchas de esas personas mayores son abandonadas, retiradas, dejadas de lado, en un rincón de la casa, porque ya no producen, ya no ganan, ya no aportan. Tienen mucho para aportar si les escuchamos, atendemos y aprendemos de ellas.

El evangelio de hoy narra unas cuantas cosas distintas, que las une entre sí porque Jesús va por el camino de Jerusalén. La más destacada, la que más llama la atención es la de la higuera.

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Tiene muchas ramas, muchas hojas y está muy verde, por tanto es de esperar que aún tenga higos. Se podía pensar que es una de las matas de mango que echa los frutos en época tardía.

Llegan a la higuera y se encuentran con una apariencia. Muy bonita, muy verde, pero sin higos. Como muchos cristianos y cristianas, nos llamamos con ese nombre, vamos a la Iglesia y… “por los frutos los conocerán”. No seamos apariencia de cristianos, mejor tener menos hojas, estar menos verdes y dar frutos, dar alimento, dar de nuestro tiempo y trabajo.

El otro tema a destacar de este evangelio sería la expulsión de los vendedores del templo. Es más un gesto contra los responsables del templo que contra los mismos vendedores. Puede verse un signo que trata de dar valor interior al culto, más que a las cosas y sacrificios materiales. En este sentido va en la misma dirección que los profetas.

¿Tendrá que venir Jesús a purificar nuestros templos, nuestras comunidades, parroquias y catedrales?

30 Feria o Memoria Libre: San Fernando

Sábado Verde o Blanco

Lectura del Libro del Eclesiástico 51,17-27 Doy gracias y alabo y bendigo el nombre del Señor. Siendo aún joven,

antes de torcerme, deseé la sabiduría con toda el alma, la busqué desde mi juventud y hasta la muerte la perseguiré; crecía como racimo que madura, y mi corazón gozaba con ella, mis pasos caminaban fielmente siguiendo sus huellas desde joven, presté oído un poco para recibirla, y alcancé doctrina copiosa; su yugo me resultó glorioso, daré gracias al que me enseñó; decidí seguirla fielmente, cuando la alcance no me avergonzaré; mi alma se apegó a ella, y no apartaré de ella el rostro; mi alma saboreó sus frutos, y jamás me apartaré de ella; mi mano abrió sus puertas, la mimaré y la contemplaré; mi alma la siguió desde el principio y la poseyó con pureza. Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 18 R/ “Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón”

La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el precepto del Señor es fiel e instruye al ignorante. R/.

Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la norma del Señor es límpida y da luz a los ojos. R/.

La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente justos. R/.

Más preciosos que el oro, más que el oro fino; más dulces que la miel de un panal que destila. R/.

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 11,27-33 En aquel tiempo, Jesús y los discípulos volvieron a Jerusalén y, mientras

paseaba por el templo, se le acercaron los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos y le preguntaron: «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te

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ha dado semejante autoridad?» Jesús les respondió: «Les voy a hacer una pregunta y, si me contestan, les diré con qué autoridad hago esto: El bautismo de Juan ¿era cosa de Dios o de los hombres? Contéstenme.»

Se pusieron a deliberar: «Si decimos que es de Dios, dirá: “¿Y por qué no le han creído?” Pero como digamos que es de los hombres...» (Temían a la gente, porque todo el mundo estaba convencido de que Juan era un profeta.)

Y respondieron a Jesús: «No sabemos.» Jesús les replicó: «Pues tampoco yo les digo con qué autoridad hago esto.» Palabra del Señor

Meditación

El libro del Eclesiástico está entre los que llamamos libros Sapienciales, por la importancia que dan a la sabiduría humana y a la divina. Hoy nos dice: “deseé la sabiduría con toda el alma, la busqué desde mi juventud y hasta la muerte la perseguiré”. Todo el resto del texto es una alabanza de la sabiduría y de su búsqueda. ¿Podríamos decir también nosotros que desde la juventud estamos buscando a Dios? ¿Qué lo estamos buscando ahora? ¿Lo ponemos por encima de otros intereses y otras búsquedas?

Tenemos la Palabra de Dios como la verdadera sabiduría que nos marca el camino de la vida, el sentido de la vida, el valor de la vida, deberíamos decidirnos a seguir esa Palabra por encima de todo. Pero para seguirla debemos conocerla, por tanto la primera decisión debe ser emplear tiempo en conocer y profundizar la Palabra de Dios.

Esa Palabra de Dios no es una doctrina que hay que saber como recuerdo histórico: es palabra viva dicha para nosotros hoy y aquí. Una palabra y una sabiduría que tiene fuerza para iluminar y transformar todos los posibles rincones escondidos de nuestra vida.

Seguimos a Cristo, Camino, Verdad y Vida. Tenemos, por tanto, más motivos que el autor del libro del Eclesiático (Sirácida) para alegrarnos de tener la sabiduría de Dios muy cerca. En nuestro estilo de conducta y en las decisiones que vamos tomando, se tendría que notar que Jesús, el Maestro, nos va enseñando sus caminos.

El párrafo del Evangelio de hoy es continuación de la escena de ayer de la expulsión de los mercaderes del templo. Los sacerdotes se ponen nerviosos ante esa situación y le envían un comité a hablar con Él. En primer lugar no van los interesados, en segundo lugar los enviados van con malas intenciones, desean encontrar motivos para condenarlo. Ante esta mala intención Jesús no responde a la pregunta. Esto de guardar silencio lo hace en otras ocasiones: se calla dignamente ante Caifás, Pilatos o Herodes. A veces contesta con una pregunta, como en el caso de la moneda del César. Jesús también sabe ser astuto y poner trampas a quienes van a buscarlo con malas intenciones.

Hoy día, en nuestro mundo, comunidades y parroquias, también pueden aparecer gestos proféticos. No se trata de aceptarlos o rechazarlos sin más. Debemos discernir personal y comunitariamente, y siempre bajo la guía de la Iglesia, si esas voces o movimientos vienen del Espíritu Santo o son unas intenciones e intereses particulares, aunque sean intereses

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religiosos y espirituales. No se trata de considerarlo bueno o malo “porque siempre ha sido así”, ni porque todo lo nuevo puede ser bueno para renovar la comunidad.

31 Solemnidad: La Santísima Trinidad

Primera Semana Liturgia de las Horas Blanco

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

Orientaciones para esta Celebración: La celebración de hoy debe ser llevada por las mamás. Ellas harán las lecturas, las oraciones de los fieles, las ofrendas…al llegar a la celebración serán recibidas con algún detalle, una flor, un papelito con una frase, etc. Se colocarán en un lugar preferente. Al final habrá una bendición especial para ellas. En la procesión de entrada se puede llevar un cartel que diga: “Gracias, mamá, por tu disponibilidad”. Llevemos también un cuadro de la Virgen y coloquemos tres letreros unidos con las palabras: PADRE, HIJO y ESPÍRITU SANTO.

Monición ambientalEn este último Domingo de Mayo celebramos dos grandes acontecimientos

que son la fiesta de la Santísima Trinidad y la fiesta de las Madres dominicanas. La Santísima Trinidad nos habla de Dios que es una comunión perfecta del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y quien ha puesto en cada ser humano ese espíritu de comunión. La familia es la primera imagen o reflejo de la Trinidad llamada a vivir en un amor trinitario del padre, de la madre y de los hijos.

Las madres en la familia son punto de encuentro y de unidad familiar de los hijos con el padre y de los hijos entre sí. Ellas siempre procuran la armonía y la alegría de la familia como quiere Dios. Ellas siempre son modelos de disponibilidad para su familia en todo momento y en toda circunstancia como lo está Dios Uno y Trino con nosotros. Hoy, en este Domingo adoremos la Santísima Trinidad y démosle gracias por regalarnos una familia y en ella nuestra madre. Reconozcamos su disponibilidad a tiempo completo. Comprometámonos a respetarlas, amarlas, ayudarlas y corresponderles su amor y su entrega con nuestras atenciones y obediencia.

Recordemos con gran amor a las madres que Dios llamó a su presencia y oremos por ellas para que estén gozando de la presencia de Dios en el cielo.

Junto con nuestras madres iniciamos con alegría cantando a Jesucristo quien viene a presidir esta Celebración en la que damos gracias al Padre movidos por el Espíritu Santo.

Primera Lectura, del Deuteronomio 4, 32-34. 39-40En este día que celebramos la Santísima Trinidad reafirmamos nuestro

amor y adoración al Dios Único y verdadero. El, que actuó en tiempos antiguos por medio de su Palabra y de su Espíritu, sigue actuando entre nosotros como Dios Uno y Trino. Escuchemos.

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Lectura del libro del Deuteronomio Moisés habló al pueblo, diciendo: —«Pregunta, pregunta a los tiempos

antiguos, que te han precedido, desde el día en que Dios creó al hombre sobre la tierra: ¿hubo jamás, desde un extremo al otro del cielo, palabra tan grande como ésta?; ¿se oyó cosa semejante?; ¿hay algún pueblo que haya oído, como tú has oído, la voz del Dios vivo, hablando desde el fuego, y haya sobrevivido?; ¿algún dios intentó jamás venir a buscarse una nación entre las otras por medio de pruebas, signos, prodigios y guerra, con mano fuerte y brazo poderoso, por grandes terrores, como todo lo que el Señor, su Dios, hizo con ustedes en Egipto, ante sus ojos?

Reconoce, pues, hoy y medita en tu corazón, que el Señor es el único Dios, allá arriba en el cielo, y aquí abajo en la tierra; no hay otro. Guarda los preceptos y mandamientos que yo te prescribo hoy, para que seas feliz, tú y tus hijos después de ti, y prolongues tus días en el suelo que el Señor, tu Dios, te da para siempre.» Palabra de Dios.

Salmo responsorial 32R/. Dichoso el pueblo que el Señor se escogió como heredad.

La palabra del Señor es sincera, y todas sus acciones son leales; él ama la justicia y el derecho, y su misericordia llena la tierra. R/.

La palabra del Señor hizo el cielo; el aliento de su boca, sus ejércitos, porque él lo dijo, y existió, él lo mandó, y surgió. R/.

Los ojos del Señor están puestos en sus fieles, en los que esperan en su misericordia, para librar sus vidas de la muerte y reanimarlos en tiempo de hambre. R/.

Nosotros aguardamos al Señor: él es nuestro auxilio y escudo; que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti. R/.

Segunda lectura, Romanos 8, 14-17Pablo nos presenta nuestra vocación a la vida trinitaria: somos hijos del

Padre por medio de su Hijo que se hizo nuestro hermano y por la acción del Espíritu que actúa en nosotros y nos hace disponibles y valientes testigos de su amor. Escuchemos.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos Hermanos: Los que se dejan llevar por el Espíritu de Dios, ésos son hijos

de Dios. Han recibido, no un espíritu de esclavitud, para recaer en el temor, sino un espíritu de hijos adoptivos, que nos hace gritar: «¡Abba!» (Padre).

Ese Espíritu y nuestro espíritu dan un testimonio concorde: que somos hijos de Dios; y, si somos hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, ya que sufrimos con él para ser también con él glorificados. Palabra de Dios.

Aleluya Ap 1, 8Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo,

al Dios que es, que era y que viene.

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Evangelio, san Mateo 28,16-20Jesús envía a sus discípulos de ayer y de hoy a evangelizar y a consagrar

al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo a todas las gentes por medio del Evangelio y del Bautismo. Contamos con su presencia que nos mueve a vencer el miedo y a estar disponibles para la misión. Escuchemos.

Lectura del santo evangelio según san MateoEn aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que

Jesús les había indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos vacilaban. Acercándose a ellos, Jesús les dijo:

—«Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre

del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado. Y sepan que yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.» Palabra del Señor.

Oración de los fielesQuien preside: A nuestro Dios, Padre que nos ama como una madre, por

medio de su Hijo bajo la inspiración del Espíritu Santo elevamos nuestras oraciones pidiendo por las mamás del mundo entero. A cada oración respondemos: Padre atiende nuestra oración1.- Por la Iglesia, para que como una madre dispuesta, atienda a sus hijos y

trate de atraer al Evangelio a quienes no lo conocen y los consagre en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Oremos.

2.- Por nuestras autoridades para que reconociendo que nuestra patria nació bajo el nombre de la Santísima Trinidad se respete siempre la voluntad de Dios sobre la vida humana, la justicia y el derecho de los pobres. Oremos.

3.- Por las madres dominicanas que carecen de lo necesario material, para el buen desarrollo de sus hijos, para que vean solucionados sus problemas por el trabajo de desarrollo de las autoridades y por nuestra solidaridad. Oremos.

4.- Por esta Asamblea reunida para que sepamos vivir al estilo de la Trinidad desarrollando la comunión entre nosotros y promoviéndola en toda la sociedad. Oremos.

5.- Por las madres solteras, por las que llevan todo el peso de su hogar, para que tengan la fuerza de educar bien a sus hijos y se sientan felices con el amor y respeto de ellos. Oremos.

6.- Por las mamás embarazadas, para que se cuiden y cuiden a su hijo, para que lo traigan al mundo y lo amen siempre. Oremos.

6.- Por las mamás que ya han fallecido, que desde el cielo sigan intercediendo por sus hijos y nietos. Oremos.

Quien preside: Padre Bueno, que nos amas con corazón de madre, recibe todas las súplicas que te presentamos. Haz que cada día las familias, la Iglesia y la sociedad nos parezcamos más y más a tu Augusta Trinidad viviendo la comunión contigo y entre nosotros. Bendice a todas las madres para que sigan siendo modelos de disponibilidad e instrumentos de la comunión en sus familias. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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