Arquidiócesis de Santo Domingo Arquidiócesis de …parroquia.salesianosmoca.com/wp-content/uploads/2014/07/09... · que tengan Biblia una de las citas bíblicas del tema. 1. Cantos

Arquidiócesis de Santo DomingoArquidiócesis de Santiago

Diócesis de BarahonaDiócesis de Baní

Diócesis de Puerto PlataDiócesis de San Pedro de Macorís

Diócesis de San Francisco de MacorísDiócesis de Mao-Monte Cristi

Valor del Mes:

Hospitalidad

Lema del Mes:

“Fui forastero y me acogieron… Estuve en la

cárcel y me visitaron”(Mt 25, 35b.36b)

Plan de PastoralSeptiembre 2015

Créditos

Colaboradores:Hna. Dra. Angela Cabrera, mdr. William Arias, Denny López, Carmen Fernández, Lea García, y Eduviges Tejada (Comisión Bíblica de la Arquidiócesis de Santiago), Silvia Rodríguez (Arquidiócesis de Santiago), Pbro. Lorenzo Vargas Salazar, Valerio Baines Sanz, OAR, (Arquidiócesis de Santo Domingo)Coordinación: Eugenia López

Diagramación y Arte Final: Jesús Pérez

Portadas: John Williams Castillo

Impresión:Editora Amigo del HogarManuel María Valencia No. 4Santo Domingo, D. N. Tel.: 809.548.7594Para contacto Vicaría de Pastoral, Teléfono 809-682-0815, 809-221-3126, 849-622-1221 ext. 261 y 262Correo electrónico: [email protected]

3

Plan de Pastoral - Septiembre 2015

Acción Significativa del Sector:

Visita a los Hogares con la Biblia. Recolección de ayuda y de Biblias para los internos

a través de la Pastoral Penitenciaria.

Acción Significativa Familiar:

Acogida de la Palabra en familia. (Visita, entronización, regalo de una Biblia…)

Índice

Primera Parte:

Encuentros de Evangelización . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .4

Visita con la Biblia a los Hogares . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .9

Semana Bíblica 2015 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .17

Caminata Bíblica Parroquial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .26

Feria Bíblica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .29

Maratón de Lectura de la Biblia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .32

Segunda Parte:

Celebraciones Dominicales, Lecturas de la Palabra de cada día y Meditación diaria del Evangelio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .34

Solemnidad de Nuestra Señora de las Mercedes, 24 de Septiembre . . . .79

4

Fui forastero y me acogieron… Estuve en la cárcel y me visitaron

PRIMER ENCUENTRO DE EVANGELIZACIONSemana 1-5 de Septiembre del 2015

La Palabra de Dios nos mueve a la hospitalidad

Orientaciones para este Encuentro: Colocar en el salón frases referentes a la Biblia. Se pueden tomar del Salmo 119, donde encontramos varios elementos de la Sagrada Escritura. En el centro del salón, colocar un altar o un ambón donde se entronizará la Biblia con una luz y dos huellas de pasos. Se reparten entre los participantes que tengan Biblia una de las citas bíblicas del tema.

1. Cantos sobre la Biblia

2. Entronización de la Biblia: Dos personas traen la Palabra desde el fondo del lugar donde están reunidas las personas. Se aclama la Palabra de Dios cantando con alegría. Luego se coloca sobre el altar o el ambón. Se invita a que todos abran su Biblia y busquen el Salmo 119 (118) versos 1- 16. Todos los recitan a una voz. Luego, cada uno los lee en silencio y se deja un espacio para que cada uno destaque en forma de oración el verso que más le ha llegado al corazón.

Canto: Tu Palabra me da vida.

3. Introducción al tema de hoyCon este Encuentro iniciamos el Mes de Septiembre, mes de la Biblia y mes

de la Pastoral Penitenciaria, resaltando el valor de la hospitalidad que tanto nos inculcó Jesús cuando nos dijo esta frase que es el lema de este mes: “Fui forastero y me acogieron… Estuve en la cárcel y me visitaron. (Mt 25, 35b.36b).

Este valor de la hospitalidad es una expresión propia de la solidaridad que todos estamos llamados a cultivar constantemente. Sólo quien es solidario abre las puertas de su corazón, de su casa y de su familia a quien lo necesita de una forma o de otra, ya sea de techo físico o de acogida fraterna.

Conversemos entre nosotros: • ¿Qué es hospitalidad para ti?• Puedes contar una experiencia de tu vida en la que has practicado la solidaridad.• ¿Qué relación hay entre Biblia y solidaridad?

4. Aclaremos el significado de hospitalidadLa hospitalidad es la cualidad de acoger y agasajar con amabilidad y

generosidad a los invitados o a los extraños. Es recibir con amor a quien es forastero o no tiene casa ni apoyo. La palabra “Hospitalidad” viene de una palabra griega, filoxenía que significa “amor (afecto o bondad) a los extraños”. Y en latín hospedar significa “recibir como invitado”. De ahí provienen palabras semejantes como hospital, hospicio y hostal.

5


En cada una de estas palabras, el significado principal se centra en un anfitrión que da la bienvenida y responde a las necesidades de las personas que se encuentran temporalmente ausentes de sus hogares. Esto implica, sobre todo, ofrecer al que llega a nuestra casa alimentación, bebidas y alojamiento o refugio, atención y cariño.

Al hablar de hospitalidad unida a la solidaridad el acento se pone en aquellos que están en necesidad, que son forasteros, que no tienen quien los reciba y acoja. Por eso, la hospitalidad es considerada como una obra de misericordia que trae muchas bendiciones a quienes la practican

5. La Palabra nos habla de la hospitalidad.En este momento dejémonos llevar por la Palabra que nos lleva a vivir

cada vez más este sentido de la solidaridad. Buscaremos estos textos bíblicos y, luego, entre todos y todas, apliquemos a nuestras vidas lo que nos enseñan para vivir la solidaridad.

Génesis 18, 1-10; Hebreros 13, 1. Levítico 19,34. Deuteronomio 10,18-19; Job 31, 19 y 32. Isaías 58,7. Mateo 25,35 y 43. Hechos 16,15. Romanos 12,13. 1 Pedro 4,9.

Compartamos esta Palabra reflejándola en nuestra propia vida. Cada uno pregúntese y conteste: • ¿A qué me invita esta Palabra? • ¿Quiénes son los que necesitan hospitalidad hoy? • ¿Cómo puedo ser más hospitalario?

6. Profundización:Estamos celebrando con alegría y fervor el Mes de la Biblia. Se realiza

en Septiembre en honor a San Jerónimo, quien amó profundamente la Palabra y se dedicó a estudiarla con gran dedicación. Para que la Palabra fuera conocida por su pueblo tradujo la Biblia de las lenguas hebrea y griega al latín que en el siglo cuarto después de Cristo era el idioma popular. El murió en Septiembre del año 420, en Belén. Fue declarado y reconocido como Padre de la ciencia bíblica y doctor de la Iglesia. Su fecha litúrgica, igualmente, es el 30 de septiembre.

Ya que la celebración de la Biblia es la celebración de la vida nos dedicamos en este mes a resaltar la hospitalidad en este año que estamos invitados a hacer nuestras las necesidades de los demás. Fácilmente podemos descubrir que la Biblia es un libro marcado por la vida creyente de los pobres y de las personas solidarias en una historia concreta.

Como podemos ver en los textos que hemos escuchado la Escritura está llena de testimonios de hospitalidad y de invitaciones a vivirla con verdadero amor solidario. El primer ejemplo de solidaridad nos lo dio Abraham al acoger a esos tres mensajeros que eran ángeles de Dios sin él saberlo (Heb 13,1).

Es importante tener en cuenta que la hospitalidad se debe practicar sin murmuraciones (1 Pedro 4,9) porque cuando uno es hospitalario lo hace sirviendo al Señor en esas personas y porque ama al Señor. Si se hace con disgusto, mala cara o refunfuñando en vez de mostrar el amor de Dios a esas personas les está mostrando desprecio y mala gana.

6


La hospitalidad se puede hacer cada día y en muy diferentes oportunidades y formas. La forma cariñosa y fraterna que tratamos a los que no conocemos y son extraños a nosotros es vivir la hospitalidad. Por ejemplo, dar una sonrisa, unos buenos días, la manera de dirigirnos a las personas que nos dan un servicio, mirar con respeto a los hermanos haitianos o a cualquier extranjero, recibir a una persona pobre con dignidad.

Ser hospitalario es ser capaces de acoger aún aquellos que la sociedad o el ambiente desprecia por su conducta o por ser considerados despreciables por prejuicios, ideas preconcebidas. Es hacer como Jesús que acogió a publicanos, prostitutas, pecadores públicos y los recibió en su corazón.

Podemos ser hospitalarios cuando recibimos en nuestras casas a los misioneros y misioneras que llevan la Palabra de Dios y compartimos con ellos ofreciéndoles atención, apoyo, comida y techo si es necesario.

Ser hospitalario, entonces, es abrir sus corazones y sus casas a los extraños, a los que están necesitados y no tienen que los reciba. Es sentar en nuestra mesa a los que no nos pueden invitar ni devolver lo que le hemos dado como nos manda Jesús (Lc 14,12-14).

7. Compartamos entre nosotros.Después de escuchar todo lo anterior digamos una frase bíblica que nos

mueve a vivir la hospitalidad y expresemos lo que más le ha ayudado para su vida esta reflexión.

8. Oración: Todos se colocan alrededor de la Biblia. Cada uno de los presentes hace una oración de acción de gracias por las luces y las orientaciones que la Biblia le ha dado para vivir la hospitalidad cada día. Luego, cada uno y cada una abre sus brazos en signo de acogida a los demás se compromete con el Señor a vivir la hospitalidad con algunas personas concretas. Se concluye con un Padrenuestro y un Ave María. Se dan un abrazo de paz, como signo de hospitalidad de unos con otros.

9. Canto final.

SEGUNDO ENCUENTROSemana 7-12 de Septiembre del 2015

“Acuérdense de los presos como si estuvieran con ellos en la cárcel” (Heb 13,3).

Orientaciones para este Encuentro: Preparar un altar para la Biblia, con flores, luces y adornos. Colocar el lema del mes. Se pueden poner unas cadenas con un candado para recordar la cárcel y a nuestros hermanos internos. Se distribuyen las citas bíblicas para proclamarlas.

7


1. Cantos sobre la Biblia

2. Entronización de la Biblia: Dos personas traen la Palabra desde el fondo del lugar donde está reunido el grupo. Se aclama la Palabra de Dios cantando con alegría. Luego se coloca sobre el altar o el ambón. Se invita a que todos abran su Biblia y busquen el Salmo 119 (118) versos 25-48. Todos los recitan a una voz. Luego, cada uno los lee en silencio y se deja un espacio para que cada uno destaque en forma de oración el verso que más le ha llegado al corazón.

Canto: Tu Palabra me da vida.

3. Introducción al tema de hoy

El Mes de Septiembre, mes de la Biblia y mes de la Pastoral Penitenciaria, resaltamos el valor de la hospitalidad que tanto nos inculcó Jesús cuando nos dijo esta frase que es el lema de este mes: “Fui forastero y me acogieron… Estuve en la cárcel y me visitaron. (Mt 25, 35b.36b).

En el Encuentro de hoy nuestra mirada se dirige a los que están internos en las cárceles de nuestro país, a los que Jesús nos invita visitar y socorrer. Partamos de lo que conocemos sobre nuestros hermanos que están en la prisión.• ¿Alguna vez has visitado alguna cárcel? ¿Cuál ha sido tu impresión?• ¿Qué conoces de la situación actual de las cárceles del país?• ¿Qué podríamos hacer para manifestar nuestra solidaridad con ellos?

4. Escuchemos la Palabra:Leamos estas citas bíblicas: Isaías 58, 5-6; Lucas 4,16-21; Mateo 25,

36-40 y 43-45; Hebreos 3, 13; Hebreos 10, 34-35; Hechos 24,23; Filipenses 4,14-19; Colosenses 4,18; 2 Timoteo 1,16-18; Gálatas 6,1-2.Compartamos esta Palabra reflejándola en nuestra propia vida. Cada uno pregúntese y conteste: • ¿A qué me invita esta Palabra? • ¿Qué podemos hacer por nuestros hermanos que están en la cárcel?• ¿Conocemos a alguien que está ayudando a los internos de las cárceles

como parte de la Pastoral Penitenciaria?• ¿Cómo apoyamos a la Pastoral Penitenciaria?

5. Profundicemos el tema de hoyPara hacer nuestras las necesidades de nuestros hermanos internos en

las cárceles dominicanas es importante que conozcamos lo que nos dice el Segundo Censo Nacional Penitenciario realizado en el 2012.

En nuestro país existen un total general de 20,007 internos privados de libertad repartidos entre el modelo tradicional en los que hay 16,298 ( 81.5% ) y unos 3,452 recluidos en los del nuevo modelo penitenciario (17.2%).

Pero, según la Dirección General de Prisiones la capacidad máxima del sistema penitenciario es para 11,505 internos. Eso quiere decir que

8


están superpobladas ya que hay 8,502 internos por encima de dicha capacidad. Lo que se traduce en la imposibilidad material de llevar a cabo la implementación del sistema progresivo dispuesto en el artículo 13 de la Ley 224-84, sobre Régimen Penitenciario, reflejada esta realidad en las condiciones deplorables en las que los privados de libertad logran subsistir dentro de este modelo penitenciario.

Esta sobrepoblación en estos recintos penitenciarios tradicionales genera los grandes males que afectan al sistema carcelario tradicional del país, cuya víctima directa son los privados de libertad ingresados en este régimen, los cuales sufren diariamente con: la falta de higiene, aprovisionamiento insuficiente de alimentos, enfermedades de la piel y respiratorias, sistema eléctrico inadecuado, ventilación insuficiente, entre otras.

Por igual, genera la vulneración del derecho a la igualdad material, en base a que incentiva altos niveles de discriminación entre la población que alberga, ya que aquellos que tienen recursos económicos son los que pueden ser beneficiados con condiciones de habitabilidad adecuadas, lo que se traduce como corrupción, ya sea de las autoridades penitenciarias civiles como castrenses.

Esto se evidencia más porque en los centros del nuevo modelo de gestión penitenciaria no ocurren estos males.

Del total general de 20,007 privados de libertad entrevistados, solamente 671 son mujeres y 19,336 que son hombres. Un 77.5% es predominantemente joven, debido a que 15,909 tienen edades comprendidas entre igual o mayor de 18 años y menor de 40. De 60 años en adelante se reportan 308 casos.

Ante esa situación no podemos quedarnos de brazos cruzados. Por eso, la Iglesia ha creado la Pastoral Penitenciaria para evangelizar tanto a los detenidos como a los que los custodian y a sus familiares. Esta obra evangelizadora la realizan a través de diferentes áreas de trabajo como son:

• El anuncio del Evangelio a los internos para que teniendo un encuentro con Jesucristo se conviertan a El y formen comunidades cristianas dentro de los recintos penitenciarios.

• Catequesis de iniciación cristiana• Celebraciones de la fe: la Eucaristía y otros sacramentos. • Servicios jurídicos• Servicios de salud• Servicios educativos• Trabajo de prevención del delito• Atención a las víctimas del delito• Trabajo con las familias• La reintegración a la sociedad: apoyo y acompañamiento a los que

cumplen la condena.

Como vemos el campo de acción es amplio. Aquí valen las palabras de Jesús: “La cosecha es grande y los obreros son pocos”. La Pastoral Penitenciaria necesita personas que se integren a trabajar en alguna de estas áreas. Necesita recursos económicos y materiales para esta gran y hermosa labor. Requiere apoyo de toda la comunidad eclesial que ella representa. Todos podemos hacer algo.

9


Les invitamos a comunicarse con la Comisión Nacional de Pastoral Penitenciaria a los teléfonos 809-482-2524; 849-214-4942. O al correo electrónico: [email protected]. También, pueden contactar a la Comisión Arquidiocesana o Diocesana de tu propia Iglesia Local.

6. Compartamos entre nosotros:Después de este Encuentro: ¿Qué ha quedado en mi mente y en mi

corazón? ¿Qué se nos ocurre hacer por Jesucristo que está vivo y presente en los detenidos en las cárceles?

7. Oremos:Nos reunimos en círculo alrededor de la Palabra y de la cadena. Todos

en silencio oran por algún conocido o familiar que está en la cárcel. Luego, todos interceden en voz alta por esa persona que está interna en la cárcel. Se repite el versículo Mateo 25,39-40. Se intercede por todos los que trabajan en la Pastoral Penitenciaria. Se concluye con el Padre Nuestro y Ave María.

8. Compromiso: Hacer un censo de las familias que tienen algún familiar en la cárcel. Organizar algún apoyo o visita a esos hermanos o hermanas.

ACCION SIGNIFICATIVA DEL SECTORSemana del 14 al 19 de Septiembre

Visita a los hogares con la BibliaLa Palabra nos hace hospitalarios

En este mes de septiembre la Acción Significativa del mes nos lleva a las visitas por los hogares con la Biblia. Siguiendo el Itinerario de Evangelización que propone el Plan Pastoral de nuestra Iglesia Dominicana, muy apropiadamente para esta dinámica, nos centraremos en el valor de la Hospitalidad, como un aspecto del Amor y la Solidaridad, camino de santidad, que es nuestro Lema durante todo el Año.

Como muchas veces hemos escuchado, el cristiano se salva en “racimo”. Aunque nuestra respuesta de fe es personal, somos responsables de llegar a Dios con la comunidad. Por ello es tan importante practicar la solidaridad entre compañeros de comunidad y mas allá. Un aspecto importante de la solidaridad es la hospitalidad, sobre todo con el extranjero. Los textos bíblicos insisten en ello. El pueblo de la Biblia, Israel, fue extranjero en otras tierras, por eso conoce las dificultades de quien lo es.

Invitamos a acoger la Palabra que visita a su pueblo, como un gesto de que nuestros hogares están abiertos a Jesús, a su mensaje y a los hermanos, sin importar raza o nacionalidad.

10


Primera Visita Amen al extranjero, como uno de ustedes.

Preparación: Llevar la Biblia en alto hasta llegar a la casa que se visitará. Se prepara un lugar con una mesa para colocar la Biblia, velón encendido y flores.

1. Saludo a la familia: “El Señor les visita y les dice “Hoy tengo que hospedarme en tu casa”: Respuesta de la familia: “No somos dignos de que entres en nuestra casa, pero quédate junto a nosotros porque la tarde está cayendo”.

2. Motivacion: En este año 2015, la Iglesia nos propone reflexionar sobre la Solidaridad, con el Lema: “Amor y solidaridad camino de santidad”, Como parte importante de la solidaridad, este mes de septiembre somos convocados a trabajar el valor de la Hospitalidad: escuchando la Palabra de Dios que nos dice: “Fui forastero y me acogieron…Estuve en la cárcel y me visitaron (Mt 25,35b.36b).

Para la mujer y el hombre que creen en Jesucristo la hospitalidad es un deber. Los textos bíblicos nos lo recuerdan desde el Antiguo hasta el Nuevo Testamento. “La hospitalidad al forastero fue una característica propia de los pueblos semitas y mediterráneo en el mundo antiguo. Los beduinos del desierto, los pueblos nómadas, los hebreos, los griegos y los romanos acreditan sus costumbres hospitalarias. María y José demandaron hospitalidad y no la obtuvieron, por eso Jesús tuvo que nacer en un pesebre” (Juan Pablo II, Jornada Mundial de la Migraciones). En este mes de septiembre dedicado a la Biblia queremos invitarte a fomentar el valor de la hospitalidad obedeciendo al mandato del Señor.

3. Canto y entronizar la Biblia abierta en lugar preparado y visible

4. Invocar el Espíritu: Puede ser usando formulas aprendidas o cánticos de invocación o también de forma espontanea, dejando que el espíritu fluya.

5. Lectura del Libro de Levítico, 19,33-34. Hacemos breve silencio para interiorizar el texto bíblico y compartirlo entre nosotros.

6. Meditemos con esta reflexión. Un inmigrante es una persona venida de otro país, de otra cultura, por tanto

es un necesitado de acogida, de hospitalidad. Por el desconocimiento de la cultura o del idioma del pueblo al que llega se convierte en sujeto sensible de desprecios y de abusos. Todo el que ha estado en otro país, sobre todo si no conoce el idioma, sabe lo difícil, que a veces resulta el moverse de un lado a otro. Muchos amigos y familiares nuestros, probablemente nosotros mismos, tal vez hayamos experimentado el hecho de ser extranjeros en otras tierras.

El texto que hoy hemos leído, es una máxima o un mandato para el pueblo de Israel, que habiendo sido extranjero en un país extraño, invita a su gente, a socorrer al extranjero que le solicita ayuda.

11


Es una lección para nosotros cristianos dominicanos de hoy. Muchas fibras se pueden tocar, al aludir a este tema; pero la palabra es clara. Ella nos llama a no hacer sufrir o abusar del extranjero que vive entre nosotros, a tratarlos como uno de nosotros; ellos son tan hijos de Dios, como nosotros mismos.

A veces espanta la manera como, aun siendo cristianos, nos referimos a un hermano por el hecho de ser extranjero, y específicamente cuando se trata de un hermano haitiano. Es cierto que hay muchas heridas en nuestro pasado, que bloquean una justa y armoniosa relación, pero como seguidores de Cristo y oidores de su Palabra, debemos esforzarnos en que así sea.

7- Oración: Todos se colocan alrededor de la Sagrada Escritura, unen sus manos en señal de unidad, por un momento reflexionan en las veces en que han rechazado a alguien por el hecho de ser extranjero, piden perdón. Luego, dan gracias según le inspire el Espíritu por hacernos hospitalarios. Se concluye con un Padre Nuestro y Ave María y Gloria.

8. Propósito: No despreciar a los demás por el hecho de que sean extranjeros.

9. Canto: No me llames extranjero, Alberto Cortez

Segunda Visita No abusar del extranjero

Preparación: Llevar la Biblia en alto hasta llegar a la casa que se visitará. Se prepara un lugar con una mesa para colocar la Biblia, velón encendido y flores.



Para la mujer y el hombre que creen en Jesucristo la hospitalidad es un deber. Los textos bíblicos nos lo recuerdan desde el Antiguo hasta el Nuevo Testamento. “La hospitalidad al forastero fue una característica propia de los pueblos semitas y mediterráneo en el mundo antiguo. Los beduinos del desierto, los pueblos nómadas, los hebreos, los griegos y los romanos acreditan sus costumbres hospitalarias. María y José demandaron hospitalidad y no la obtuvieron, por eso Jesús tuvo que nacer en un pesebre” (Juan Pablo II, Jornada Mundial de la Migraciones).

En este mes de septiembre dedicado a la Biblia queremos invitarte a fomentar el valor de la hospitalidad obedeciendo al mandato del Señor.

12



4. Invocar el Espíritu: Puede ser usando formulas aprendidas o cánticos de invocación o también de forma espontánea, dejando que el Espíritu fluya.

5. Lectura del Libro de Job 31,31-32 Hacemos breve silencio para interiorizar el texto bíblico y compartirlo entre nosotros.

6. Meditemos con esta reflexión. En el libro de Job modelo de hombre justo, aparece una mención al

inmigrante y cómo cumple con él la hospitalidad debida, “El forastero no pernoctaba a la interperie, tenía abierta mi puerta al caminante” (Job 31,31-32). También el evangelista Mateo habla de manera expresa de la hospitalidad a personas en dificultad y necesitadas.

Entre los signos que permiten discernir si se ha acogido a Jesús y su mensaje está el haber brindado hospitalidad al forastero (Mt. 25,35) Como nos dice .Juan Pablo II, en su mensaje en la Jornada Mundial de la Migraciónes 2001, ¨para nuestras sociedades, el criterio para determinar el límite de soportabilidad no puede ser la simple defensa de nuestro propio bienestar, descuidando las necesidades reales de quienes tristemente se ven obligados a solicitar hospitalidad”.

Además, esta hospitalidad debe suponer condiciones de respeto e igualdad, pues al decir de Ex 23,9 no podemos ¨oprimir al ¨emigrante¨, recordando al pueblo de Israel su situación de emigrante en Egipto. Actuando así con verdadero sentido de la hospitalidad evangélica, nos acercamos cada vez más a la santidad y unidad a que nos llama Jesús. 7. Oración espontánea orando por la hospitalidad en nuestra sociedad.

Todos se colocan alrededor de la Sagrada Escritura, unen sus manos y piden para que haya hospitalidad en nuestra sociedad. Se concluye con el Ave María y Gloria.

8. Propósito: acoger con caridad al extranjero, sin abusar de él, por su calidad de inmigrante.

9. Canto

Tercera Visita No olviden la Hospitalidad

Preparación: Llevar la Biblia en alto y cantando hasta llegar a la casa que se visitará. Se prepara un lugar con una mesa para colocar la Biblia, velón encendido y flores.

1. Saludo a la familia: “El Señor les visita y les dice “Hoy tengo que hospedarme en tu casa”: Respuesta de la familia: “No somos dignos de que entre en nuestra casa, pero quédate junto a nosotros porque la tarde está cayendo”.

13


2. Motivación: En este año 2015, la Iglesia nos propone reflexionar sobre la Solidaridad, con el Lema: “Amor y solidaridad camino de santidad”, Como parte importante de la solidaridad, este mes de septiembre somos convocados a trabajar el valor de la Hospitalidad: escuchando la Palabra de Dios que nos dice: “Fui forastero y me acogieron…Estuve en la cárcel y me visitaron (Mt 25,35b.36b).


En este mes de septiembre dedicado a la Biblia queremos invitarte a fomentar el valor de la hospitalidad obedeciendo al mandato del Señor.


4. Invocar el Espíritu: Puede ser usando formulas aprendidas o cánticos de invocación y de forma espontanea, dejando que el Espíritu fluya

5. Lectura del Libro de Hebreos 13, 1-3. Hacemos breve silencio para interiorizar el texto bíblico y compartirlo entre nosotros.

6. Meditemos con esta reflexión. Al finalizar la Carta a los Hebreos, hay una lista de exhortaciones para

quien quiere asumir un estilo cristiano en su vida. La primera, es amarse unos a otros y a cultivar la fraternidad. En una frase muy hermosa invita a la hospitalidad. A ser amables con los que llegan a nuestra casa.

Resulta un poco cuesta arriba en estos tiempos de tanta inseguridad, no dudar en abrir nuestras puertas a quienes se acercan a nuestros hogares. Ciertamente debemos ser cautos, sin caer en la descortesía o en la falta de caridad y hospitalidad. Sin olvidar que Dios está en el rostro de quien toca nuestra puerta por un plato de comida, a si como en la antigüedad, sin saberlo algunos hospedaron ángeles.

La siguiente exhortación es acordarse de quienes están privados de la libertad. No porque no sean culpables, sino, porque es al pecado al que debemos juzgar o al pecador. Y finalmente la invitación a pensar en el maltratado, porque alguna vez puede tocarnos a nosotros. Pensemos, por ejemplo en tantos niños indefensos y abuzados, en tantas mujeres maltratadas, tal vez, entre nosotros. Y vayamos un poco más allá, considerando la manera en cómo podemos ayudar a mejorar su situación de vida.

7. Oración. Todos se colocan alrededor de la Sagrada Escritura, unen sus manos y piden por la seguridad de nuestro país, para que podemos abrir las puertas de nuestras casas sin temor. Pedir también por tantos niños,

14


mujeres y hombres que son víctimas de maltrato en nuestra sociedad. Concluir con un Padre nuestro y Ave María y Gloria.

8. Propósito: Acoger con amabilidad a quienes tocan nuestra puerta; Orar por encarcelados y maltratados de nuestra comunidad

9. Canto:

Cuarta Visita: Que la nuestra, sea la casa de todos.





En este mes de septiembre dedicado a la biblia queremos invitarte a fomentar el valor de la hospitalidad obedeciendo al mandato del Señor.


4. Invocar el Espíritu: Puede ser usando formulas aprendidas o cánticos de invocación y también de forma espontanea, dejando que el Espíritu fluya.

5. Lectura del la Primera Carta de Pedro 4, 7-10. Hacemos breve silencio para interiorizar el texto bíblico y compartirlo entre nosotros.

6. Meditemos con esta reflexiónLa comunidad que se reunía alrededor del apóstol Pedro no da una

lección a los seguidores de Cristo de la actualidad. Nos recuerda que un cristiano que no produzca ningún impacto en la sociedad es señal de que su vida no está organizada de acuerdo a las exigencias del Evangelio.

15


¿Quién no calificaría los acontecimientos que estamos viviendo como “final del universo”?,La pobreza, el descalabro moral, El hambre de millones de personas o la catástrofe ecológica a las que nos lleva en consumo excesivo?

El papa Francisco en su encíclica Laudato Si (Alabado sea) no dice: “ Esta hermana tierra clama por el daño que le provocamos a causa del uso irresponsable y del abuso de los bienes que Dios ha puesto en ella. Hemos crecido pensando que éramos sus propietarios y dominadores, autorizados a expoliarla. La violencia que hay en el corazón humano, herido por el pecado, también se manifiesta en los síntomas de enfermedad que advertimos en el suelo, en el agua, en el aire y en los seres vivientes. Por eso, entre los pobres más abandonados y maltratados, está nuestra oprimida y devastada tierra, que «gime y sufre dolores de parto» (Rm 8,22).”

Que nos propone este texto bíblico como una alternativa contra los males que nos arropan: un amor intenso los unos por los otros, perdonar la ofensas del otro, hospitalidad sin murmuraciones, servicio a los demás compartir los dones que cada uno ha recibido. Vivir estas prácticas de verdadero amor en nuestros hermanos y a nuestra casa común la tierra que nos impulsara con la fuerza del Espíritu Santo que penetra los corazones con la fuerza de la verdad y nos permitirá descubrir cómo vivir los uno por los otros.

7. Oración. Todos se colocan alrededor de la Sagrada Escritura, unen sus manos y cada sector presenta sus necesidades particulares. Concluir con el Padre nuestro, l Ave María y Gloria.

8. Propósito: Considerar la tierra como nuestra casa grande, donde todos somos acogidos y así mismo disponer de nuestras casas como la casa de todos los hermanos

9. Canto: Credo Nicaraguense.

Quinta Visita: Es muestra de lealtad acoger al hermano, aunque sea extranjero




16



En este mes de septiembre dedicado a la biblia queremos invitarte a fomentar el valor de la hospitalidad obedeciendo al mandato del Señor.


4. Invocar el Espíritu: Puede ser usando formulas aprendidas o cánticos de invocación y de forma espontanea, dejando que el espíritu fluya

5. Lectura del Libro de Tercera Carta de Juan 1, 2-6. Hacemos breve silencio para interiorizar el texto bíblico y compartirlo entre nosotros.

6. Meditemos con esta reflexión. El texto habla de fidelidad, de lealtad y de verdad. La verdad es Cristo

Jesús y su propuesta de construcción de un reino de amor donde todos seamos hermanos. La lealtad a esa verdad y enmarcar la vida a los propósitos del Reino; la fidelidad es mantener en el tiempo esa coherencia.

El texto es una explosión de alegría a saber que un seguidor del mensaje, lleva una vida de acuerdo a aquello que profesa creer, sobre todo en la acogida a los hermanos que van de paso, sin importar que fueran paganos o extranjeros.

Porque es tan importante este gesto, porque en el principio la Iglesia era básicamente misionera y los seguidores de Jesús iban de una comunidad a otra predicando, bautizando y construyendo comunidades, entre ellos había tanto judíos como extranjeros, por eso la aclaración que hace el texto. Era bueno para ello ir encontrando en el camino gente que le acogiera.

También a nosotros nos toca hoy acoger a gente que está al servicio de Dios y que viene a nuestras comunidades a traer la buena nueva, dejando sus países y sus culturas. Tantos sacerdotes, religiosas y religiosos, misioneros laicos, etc.

Acogerlos con alegría, es ser coherente con el estilo de vida cristiano que asumimos cuando dijimos si al Señor.

7. Oración: Todos se colocan alrededor de la Sagrada Escritura, unen sus manos y piden por todos los misioneros itinerantes que van por el mundo llevando la Palabra de Dios. Concluir con el Padre Nuestro y Ave María y Gloria.

8. Propósito: Acoger con alegría a quienes traen el mensaje del reino, sin discriminar por su nacionalidad.

9. Canto: Alma misionera.

17


SEMANA BÍBLICA 2015Del 21 al 25 de Septiembre

La Palabra, mueve a la solidaridad

IntroducciónNueva vez estamos en septiembre, “el mes de la Palabra”, durante el cual

la Iglesia nos invita a poner especial atención a la Palabra Revelada y escrita en la Biblia. Ella nos guía en el itinerario propuesto por el Plan Nacional de Pastoral. Como ya sabemos y hemos trabajado durante todo el año, el tema de la solidaridad es el centro de la reflexión propuesta.

En sociología, solidaridad se refiere al sentimiento de unidad basado en metas o intereses comunes, es un término que refiere a la aplicación de lo que se considera bueno. Así mismo, se refiere a los lazos sociales que unen a los miembros de una sociedad entre sí. La solidaridad en el aspecto social se entiende como la capacidad de entregarse a otros individuos pensando en estos como semejantes; es decir, poder compartir un hogar, alimentos, sentimientos, etc, con otro ser vivo sin pensar en su situación económica; tomando en cuenta también que los bienes no son solo los materiales.

Aunque la palabra moderna solidaridad no aparece en los evangelios, éstos pueden considerarse, sin lugar a dudas, una constante invitación a su práctica, como expresión de amor universal sin barreras de ningún tipo.

La palabra más próxima a ésta, porque la supone y la incluye, es agapê que aparece 116 veces en el Nuevo Testamento (de las que sólo nueve en los evangelios). Con ésta se indica en el amor que proviene o tiene por objeto a Dios, o al hombre en cumplimiento del precepto divino: “Amarás a Dios... y al prójimo como a tí mismo”(Lc 10, 27).

En estas reflexiones, durante esta semana, haremos un pequeño recorrido bíblico, para ver que tan recurrente es el llamado a la solidaridad, veremos 5 textos como muestra, en el mismo orden en que aparecen en el canon, de los siguientes libros: Deuteronomio, el Profeta Isaías, Evangelio de Mateo, Evangelio de Lucas y del Apóstol Pablo y un texto de la Carta a los Gálatas

Sugerimos que esta semana bíblica sea realizada la última semana de septiembre y que culmine con una marcha de la Biblia, que puede ser Parroquial, Zonal o Diocesana, que muestre al mundo que los cristianos católicos somos hombres y mujeres que escuchan la Palabra de Dios.

Primer día “La solidaridad con el pobre”

Canto: “Va Dios mismo en nuestro mismo caminar”

Oración “Señor en este encuentro con tu Palabra, ayúdanos a vivir la solidaridad propia de los hijos de Dios,

18


muy en especial con nuestros hermanos más pobres. Tal vez somos iguales a ellos, pues no tenemos muchas cosas, sin embargo, te tenemos a ti y tu amor grande que nos cobija. Por ese amor, ayúdanos a no cerrarnos ante sus necesidades y a vivir la fraternidad propia de tus hijos que somos cada uno de nosotros”. Amén.

MotivaciónEn los años 90, María era una muchacha joven que se había casado con

un señor obrero de zona franca. Vivían en el barrio la Unión de Santiago, en una modesta pensión, tenía una niña de 8 meses de nacida. Una mañana su vecina se acerca y le dice que su esposo, obrero también, ha tenido que salir muy temprano y se lo olvidó dejarle dinero para la leche de su niño, de la misma edad que la niña de María, y que ahora ella no sabe que hacer. María que tiene seis biberones de leche para su hija ese día, va a la pequeña neverita que tiene, saca tres y se lo da a la vecina para que ella pase su día y pueda alimentar a su hijo hasta que su esposo llegue.

Preguntas para el Diálogo1. ¿Qué reacciones provoca en nosotros este testimonio de María?2. ¿Conocemos otros casos parecido a lo sucedido en nuestra comunidad?3. ¿Hemos vivido alguna experiencia semejante?

Iluminación Bíblica: Deuteronomio 15, 7-11.Luego de la lectura hacer grupos de dos o tres. Se lee otra vez en el grupo.

Luego, cada uno la lee en silencio. Se destacan los personajes presentes en el texto; las palabras principales; las frases más llamativas. Luego, se hacen estas preguntas para compartir y aplicar este texto a nuestras vidas. Uno escribe las respuestas comunes para después hacer una puesta en común de cada grupo.

ReflexiónLa lectura que hemos leído del Deuteronomio se ubica dentro de los

señalamientos que corresponden a la vivencia del año sabático en el pueblo de Israel, que era una fiesta judía que debía celebrarse cada siete años, en ese tiempo se le daba libertad al esclavo, no se cultivaba la tierra, para que ella descansara, y se perdonaban las deudas, es decir, era todo un año de descanso.

En el texto se nos recuerda y se nos invita a una solidaridad y cercanía con el pobre, sobre todo, el pobre socio-económico, el que no tiene bienes materiales o tiene poco. Se trata de no encerrarse en uno mismo y tener en cuenta su situación.

En los últimos tiempos hemos asimilado una frase que dice: “Ese es su problema“. Es decir, lo del otro no nos debe importar; que cada uno resuelva como pueda. En un seguidor del Señor esta frase no debe salir de sus labios, la Palabra de Dios es reiterativa en cuando a ese tener presente al otro, en especial, al necesitado, al pobre; pues este nos interroga y nos invita a hacer algo por él, en nombre del Dios a quien seguimos.

Hay muchos que especulan diciendo que para ayudar al pobre hay que hacer grandes cosas, incluso una gran revolución al nivel que sea. Pero,

19


la clave estaría en ese ir haciendo esas pequeñas cosas de cada día, que ayudan en su momento a subsanar las necesidades de nuestros hermanos pobres. Ahí radica la gran expresión de bien que necesitamos, para que la solidaridad que brota de la bondad se vaya haciendo realidad entre nosotros.

En nuestros días, se habla mucho de bendición de Dios y se desea esa misma bendición a los demás. Dice el texto que por nuestra acción de solidaridad con el pobre, Dios nos va a bendecir. Pues la bendición no es un asunto de un mero deseo o palabritas sin más, sino una opción profunda que sale de nuestro corazón y se materializa, se hace visible en lo que hacemos por el otro, en este caso por el pobre, por el necesitado. La pobreza es en sí una maldición, con nuestros gestos y accionar solidario, es que dicha maldición se espanta y aparece la bendición de Dios para con nuestros hermanos.

Al final el texto refiere que no faltarán pobres en el mundo, pues si continúan las actitudes de indiferencia ante la pobreza y los pobres, y no hay una actitud solidaria firme y concreta de todos, en especial de los creyentes, este mal no podrá ser vencido, como el Señor en realidad quiere y desea.

CompromisoAmpliemos nuestra mirada y veamos quienes en nuestra comunidad

están en situaciones de pobreza e indigencia extrema; vayamos y hagamos algo por cada uno de ellos, y motivemos a la comunidad para que no sea indiferente ante esta situación, hacer posible, creando grupos de Pastoral Social que animen y sensibilicen, para realizar alguna acción ante las situaciones de pobreza de nuestros hermanos.

Oración finalSe invita a hacer un gran círculo, en el cual todos nos tomamos de las

manos, destacando que para luchar contra la pobreza y solidarizarnos con nuestros hermanos más pobres, hay que trabajar unidos, promover y motivar a la comunidad hacia ese fin, y cada uno o los que quieran si son muchos enumeran y piden por las situaciones de pobreza en que vivimos hoy día. Se culmina con la oración del Padrenuestro.

Canto Final: “De dos en dos“

Segundo Día “Repartes al hambriento tu pan, y al alma afligida dejas saciada.”(Is 58)

Canto: Al Espíritu Santo.

Oración: Como es la semana bíblica sugerimos orar con el salmo 103 (102). El facilitador pedirá a los participantes que busquen en sus Biblias y libremente vayan leyendo estrofas. Se concluye con la oración del Gloria.

Texto iluminador de hoy: Isaías 58, 6-11Se eligen varios para leer por párrafos el texto. Esto logra

la integración y participación de todos. Se recomienda una

20


lectura pausada y clara. Se lee una vez. Luego, cada uno la lee en silencio. Se destacan los personajes presentes en el texto; las palabras principales; las frases más llamativas. Luego, se hacen estas preguntas para compartir y aplicar este texto a nuestras vidas.

- ¿Cuáles son mis prácticas y vivencias cristianas? Son estas prácticas y vivencias las que más agradan al Señor?

- ¿Cuáles acciones solidarias y de hospitalidad me sugiere el texto?-En mi ambiente de trabajo, familiar, comunitario: ¿Maltrato a algunos?

¿A quiénes puedo tener sometidos a un yugo: esposa, esposo, hijos, empleados, padre, madre, abuelo, abuela?

- ¿Recibo en mi casa o les busco albergue a pobres, ancianos, desamparados sin hogar, extranjeros, misioneros y religiosos?

- ¿Estoy dispuesto o dispuesta a dar amor, atención a los pobres de amor y atención en especial a nuestros vecinos haitianos tan vulnerables?

- ¿Cuál es la respuesta del Señor a los que son solidarios?

Reflexión: Este texto que hemos escuchado es un texto conocido pues lo usamos

en tiempos de Cuaresma. Pero ahora vamos a profundizar en su sentido bíblico. En el pensamiento deuteronomista y de los profetas, la justicia es el tema por excelencia. ¿Por qué usar este tema cuando la solidaridad y la hospitalidad son los temas que estamos tratando en este año? Porque más que un sentido legal para el Señor es misericordia, ternura, entrega (Os 2,21). En el Deuteronomio El Señor no se contenta con hacer justicia al huérfano, sino que ama al extranjero y da alimento y vestidos (Dt 10,18).

La práctica de la solidaridad más allá de un simple acto de caridad. Hay que hacerla con todos especialmente con los más rechazados de la sociedad, con nuestros vecinos haitianos quienes también son nuestros hermanos: Es difícil, pero somos discípulos del maestro Jesús, quien llevó la solidaridad hasta las últimas consecuencias entregando todo por buenos y malos, por justos e injustos.

Habrá momentos en que quizás no puedas recibir a un necesitado en tu casa pero, hay muchas cosas que puedo hacer desde mi posición en la sociedad: si soy profesional desde ella puedo ofrecer mis conocimientos de manera desinteresada. Si soy obrero puedo ofrecer mi fuerza y mis habilidades para servir. Si soy ama de casa puedo compartir el pan de mi mesa. Hay tantas formas de ser solidarios y hospitalarios. Hagamos lo que agrada al Señor. Y, entonces, tu luz resplandecerá y lo oscuro será como mediodía.

Oración: A partir de este tema nos colocamos en grupos de 5 o 6 personas y pedimos al Señor la gracia de ser solidarios como El es con nosotros, especialmente, con el más pobre.

Se concluye con esta oración: Señor pon en mi corazón el deseo de verte a ti en los más necesitados, de encontrarte en mis hermanos que extienden su mano hacia mí para que yo los libere de sus yugos y sacie su hambre.

Canción:, Danos un corazón.

21


Tercer Día “Vengan benditos de mi Padre”.

Canto: Hoy me siento Feliz

Oremos con el Salmo 18(17). Todos lo rezan juntos. Luego, el que quiera destaca el verso que más le inspira.

Texto Iluminador de hoy: Mateo 25,34-40Se lee una vez. Luego, cada uno la lee en silencio. Se destacan los

personajes presentes en el texto; las palabras principales; las frases más llamativas. Luego, se hacen estas preguntas para compartir y aplicar este texto a nuestras vidas.1. ¿Cuál es la intención de este texto? Iniciar la preparación necesaria para

superar con éxito la prueba. 2. ¿Esta enseñanza de Jesús a quien se dirige? a todos indistintamente,

demostrando que fuera del ámbito visible de sus discípulos, de su iglesia, puede acontecer el reino de Dios.

3. ¿A quién pretende poner en relieve como guía central? a Jesús el Hijo del Hombre

4. ¿Cuáles son los recibidos en el reino? Los que tuvieron amor misericordioso con el prójimo.

Reflexion:La solidaridad fraterna es la unión entre los seres humanos como

hermanos, por el amor que tenemos a los demás, no sólo a los amigos, sino también a los enemigos. Asimismo, surge la preocupación por crear condiciones fraternas en el mundo.

El entendimiento del amor, no como idea abstracta, sino como obras concretas. Jesús nos habla claramente de obras concretas: dar de comer, vestir, visitar a los enfermos, entre otras. Y en tercer lugar, el Amor a Dios a través de nuestras acciones con los demás, Viendo a Jesús en el otro. Si amo a Dios, no puedo dejar de amar a mi hermano.

Jesús se identifica con las personas en desventaja, los más necesitados, los que no tienen las mismas oportunidades que nosotros. El acoger a los miembros más abandonados de la comunidad, a los despreciados, los que no tienen a dónde ir, los que no son bien recibidos, es reconocer a Jesús en el otro. El servicio, nos permite ser personas con consciencia de paz y cumplir con la voluntad de Dios.

Retomando en Evangelio de San Mateo 10:42: “Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.” De esta manera, en el servicio cumplimos con lo que Dios manda. De tal manera el servicio es el poder para transformar a través de la responsabilidad conjunta, de servir a la persona y a la sociedad para la animación cristiana del orden temporal. El cristianismo no consiste sólo en rezos y posturas piadosas. Esto, indudablemente, tiene su valor y es un medio válido para vivir la fe, pero no es lo único, ni lo más esencial.

22


El verdadero amor a Dios se vive realmente en el prójimo. Jesús nos lo dice claramente “lo que hiciste a mis hermanos más pequeños, a mí me lo hiciste” y además con ejemplos prácticos. Esta caridad brota naturalmente del amor a Dios. El espíritu cristiano de servicio a los demás es la promoción de la justicia social.

Es necesario promover el bien, reconociendo a la persona a partir del principio de filiación divina, como Ser creado por amor y a quien Dios ama por sí mismo, así como una cultura de encuentro y fraternidad universal basada en los valores fundamentales del cristianismo, apoyando a los débiles, los necesitados, los que se encuentran en desventaja. Cada uno identificará en su comunidad las personas más desventajadas y creará un plan de trabajo para dar mejor calidad de vida. Y les dirán vengan benditos de mi Padre.

Oracion: Todos forman un gran círculo y se toman de las manos. Cada uno en silencio hace un compromiso de vivir este Evangelio en algo concreto. Luego, pueden manifestarlo en la Asamblea. Se concluye con esta oración: Oh Jesús quiero seguir tu camino, vivir alegre y dispuesto para servir a mis hermanos, en el lugar que me pidas; quiero vivir atento a las necesidades de los demás, en especial de los más despreciados. Quiero ser como Tú, Señor, servidor de todos. Amén Canto Tener un Ideal.

Cuarto Día “La recompensa de la solidaridad”

Canto: “Con nosotros está, y no le conocemos”

Oración: Ven, Espíritu Santo, ilumina mi mente, abre mi corazón, toma mis manos, para que comprenda el mensaje de la Palabra, para que sienta la profundidad del amor divino, para que camine abriendo mis manos a los que necesitan curación y misericordia.

Ven, Espíritu Santo, aumenta mi fe en el Dios que ama a todos, santos y pecadores; dame el amor que abraza a todos los hombres y mujeres del mundo entero; afianza mi esperanza en medio de mis debilidades, limitaciones e incapacidades.

Ven, Espíritu Santo, yo solo sé que no puedo hacer nada; acompáñame, guíame, llévame, para que pueda llegar al abrazo del Padre, para que pueda seguir las Palabras y enseñanzas del Hijo, para que pueda caminar con los demás, con amor, fe y misericordia, con la fuerza, la luz y la ternura que vienen solo de Dios.

Motivación: Compartir en el grupo la siguiente historia: Buscando a Dios de la escritora argentina Liana Castello. “Juan nunca había sido un hombre de fe. Su vida no había sido muy sencilla pero tampoco mucho más complicada que la del común de las personas. Era una persona pragmática, de aquellas que creen solamente en lo que ven sus ojos y se ciñen a lo concreto. No era amigo de lo abstracto y creía que Dios era precisamente eso, algo abstracto, sin rostro, sin cuerpo, que no era tangible ni visible y ante sus ojos eso se parecía peligrosamente al descrédito total. Era difícil o casi imposible para

23


Juan pensar en un Dios que permitiese la guerra, el hambre, la enfermedad y el dolor. De todos modos y sin darse cuenta, Juan buscaba a Dios, necesitaba creer, pensar que había algo más que esta vida que tenemos.

Una fría mañana Juan caminaba por un parque que se encontraba frente a una iglesia. En las escalinatas de la misma estaba sentado un hombre con su mano extendida pidiendo limosna. Ese tipo de escenas eran las que hacían dudar a Juan de la existencia de Dios. Esa noche, volvió a pasar por allí y la escena que vio lo movilizó en forma inesperada. Una señora casi tan humilde como el mendigo, le alcanzaba un tazón de sopa caliente y una frazada, algo desgastada, pero que sin dudas combatiría el frío. Juan se quedó mirando. Alguien cuya humildad era evidente, alguien a quien sin dudas no le sobraba nada, compartía con otro que tenía menos su alimento y su abrigo.

Volvió a su casa caminando despacito, sin poder sacarse de la mente o, mejor dicho del corazón, el gesto de esa mujer. No pudo conciliar el sueño, por un lado la pobreza extrema, el cielo como techo, la calle como hogar. Por el otro, la generosidad más absoluta, el amor hacia el otro expresado no en palabras, sino en apaliar la necesidad vital del prójimo.

Él no hubiera hecho eso, no se consideraba un hombre malo o indiferente, pero sabía que jamás se le hubiese ocurrido calmar el hambre y el frío de un hombre que vivía en la calle. Sin embargo, esa humilde mujer, que tenía mucho menos que él, había elegido hacerlo. Era cierto realmente, Dios nos hace libres. Pensó en cuántas veces había visto gente con hambre y había elegido no hacer nada. Cuantas veces podría haber dicho una palabra que otro necesitaba escuchar y había elegido no hacerlo. Esa humilde mujer, había elegido compartir, acompañar, sanar en cierto modo, en definitiva, había elegido amar.

Juan comprendió que había buscado en lugares donde no suele encontrarse a Dios y que el Señor, para que no siguiera dudando de su existencia, había decidido presentársele en la figura de esa mujer que daba casi lo que no tenía para ella. Allí sin dudas, estaba Dios. La vida ya no fue igual para Juan pues había dejado entrar a Dios en ella.

Preguntas para el dialogo:1. ¿Por qué Juan no era un hombre de fe?2. ¿Qué impresión le causo la imagen del mendigo que miro frente a la Iglesia?3. ¿Qué provocó el cambio de actitud en Juan?4. ¿A nuestro entender, la señora que ayuda al mendigo, procuraba

reconocimiento en la tierra o lo hacía por solidaridad?5. ¿Que provoco en Juan el gesto de caridad y solidaridad que presencio?

Texto Iluminador de hoy: Lucas 12,32-34, Leer el texto de manera clara y en voz alta. Se lee una vez. Luego, cada uno lee en silencio. Se destacan los personajes presentes en el texto; las palabras principales; las frases más llamativas. Luego, se hacen estas preguntas para compartir y aplicar este texto a nuestras vidas.

Reflexión: El texto que hemos escuchado forma parte de un discurso más amplio sobre las riquezas y el afán del hombre por amontonar cosas materiales para asegurar el futuro con bienes que son perecederos.

24


Jesús invita a quienes han confiado en él, a no tener miedo de lo que vendrá, pues son herederos del Reino, por bondad del Padre; por tanto, la invitación es también al desapego de los bienes materiales.

Vender lo que tienen y dar al necesitado es compartir todo aquello a lo que tenemos acceso con quienes carecen de ello; con miras, no a recibir reconocimiento en la tierra, sino en acumular riquezas y favores en el cielo.

Poner el corazón en Dios, y encontrarlo en quienes nos rodean y padecen tantas limitaciones, y a quienes muchas veces dejamos pasar a nuestro lado sin que ello mueva el corazón, olvidándonos de que en cada necesitado podemos encontrar a Dios.

Donde está nuestra riqueza, está nuestro corazón, procuremos que nuestras riquezas estén puestas en todo lo que nos acerque a Dios.

Compromiso: Pensar en los necesitados de nuestro sector y en comunidad organizar una colecta de alimentos o medicina según sea la necesidad para ir en su ayuda.

Oración final: Tomados de las manos, hacer un momento de silencio y cada uno interiormente examinará, las veces que hemos tenido la oportunidad de ayudar a alguien y no lo hemos hecho. Luego, pedimos al Señor que nos ayude a caminar en la presencia del Señor. Se termina con un Padre Nuestro y un abrazo de la paz.

Canto: “Cuando el pobre nada tiene”

Quinto Día “Ser solidarios unos con otros”

Canto: “Amémonos de corazón”

Oración: Orar con el Salmo. 23 (22), Si es posible que cada quien tenga su Biblia a mano, dividir la asamblea en dos grupos, para orar con el salmo a dos coros. Cada grupo lee un versículo del salmo hasta terminar y cerrar la oración con el Gloria.

Motivación: Ser solidarios es condolerse de las necesidades ajenas y prestar ayuda. Cada quien de alguna madera necesita en algún momento la ayuda de otros, a si mismo debe ser capaz de ayudar a otros. En esta dinámica de ayuda mutua que se da en las comunidades, debemos cuidar de no convertirnos en una carga pesada e innecesaria para los demás. Cada uno habrá de llevar sus propias cargas y a partir de ahí dejarse ayudar por otros. Al final habremos cosechado, lo que hayamos sembrado.

Texto Iluminador de hoy: Gálatas 6,1-10, Leer el texto de manera clara y en voz alta. Se lee una vez. Luego, cada uno la lee en silencio. Se destacan los personajes presentes en el texto; las palabras principales; las frases más llamativas. Luego, se hacen estas preguntas para compartir y aplicar este texto a nuestras vidas.

Preguntas para la meditación:2. ¿Cuándo uno de los hermanos de la comunidad comete alguna falta,

cuál es nuestra actitud?

25


3. ¿Encuentro motivos de satisfacción en mi propia conducta o dependo de los demás para sentirme bien con lo que soy?

4. ¿Asumo mis propias cargas y responsabilidades o siempre espero que los demás las asuman por mí?

5. ¿Estoy consciente de que solo cosecharé, aquello que siembro?6. ¿Me canso de hacer el bien?

Reflexión: El texto que hemos leído, esta precedido por el llamado de atención que hace Pablo a la comunidad de los Gálatas. “…si viven mordiéndose y devorándose unos a otros, acabaran destruyéndose todos” (Gal 5,15), Esta afirmación sirve de punto de partida para la exhortación, que es centro de nuestra reflexión.

La vida comunitaria a menudo se torna cuesta arriba. El apóstol nos presenta en los versículos finales de la carta a los Gálatas, una especie de guía para la convivencia, exhortando a la ayuda mutua.

Los más fuertes, aquellos que están iluminados por el Espíritu deberán corregir a los más débiles, sin arrogancia, en la conciencia de que ellos también pueden ser tentados; sin presentarse como superiores, pues todo lo que tienen es don gratuito de Dios.

Cada uno, cuando examina su conciencia debe encontrar en ello elementos que les hagan sentirse satisfecho de sí mismo, sin que para ello necesite aprobación de otros, encontrando en ello la capacidad de asumir sus propias cargas y responsabilidades.

Cuando hablamos de ayuda mutua y solidaridad comunitaria, corremos el riesgo de que unos pocos se conviertan en carga pesada para los demás, en el entendido de que no asumen la suya propia y siempre esperan que otros la carguen por ellos. Quien más tiene para aportar a la comunidad, en conocimientos, en experiencias y a veces en términos materiales, más debe aportar; pero aún el que menos tiene siempre podrá aportar algo. De eso se habla cuando se hace referencia a la ayuda mutua.Aquellos que sembremos, eso habremos de cosechar. Por tanto, dice el apóstol, no debemos cansarnos de hacer el bien, a todos, pero especialmente a la familia de los creyentes, con quienes formamos comunidad.

Compromiso: Cada uno a partir de ahora, asume sus propias cargas y se dispone a ayudar con sus cargas a los demás.

Oración final: Tomados de las manos, hacer un momento de silencio en que cada uno interiormente examinará: primero, si en algún momento se ha convertido en una carga innecesaria para la comunidad, y segundo, cómo puede ayudar a los demás en la convivencia. Se expresan peticiones en este sentido. Terminar con un Padre Nuestro y un abrazo de la paz.

Canto: “Dame la mano, y mi hermano serás”

26


CAMINATA BIBLICA 2015

PreparaciónSe motiva esta Caminata, tradicionalmente

realizada en cada Diócesis, Zona Pastoral o parroquia, a través de los medios al alcance: televisión, radio, internet, redes sociales, cartelones, homilías. Recordar que cada quien debe llevar su Biblia, recopilación de la Palabra de Dios que nos anima y fortalece en nuestra acción pastoral. También se puede preparar una carroza con la Biblia y bien adornada. En el punto de encuentro señalado, se entona la canción “Tu Palabra me da vida”, mientras quien preside levanta la Biblia y en procesión la entroniza solemnemente, en medio de dos cirios, hasta el lugar reservado en la carroza hermosamente decorada.

1. Invocación del Espíritu Santo: cantada o rezada.

2. Motivación inicial:Con gratitud al Padre Celestial iniciamos esta Caminata con la Palabra

suya que nos alienta y motiva en nuestro diario vivir y quehacer humano y cristiano porque en ella encontramos respuestas a nuestras inquietudes, los fundamentos de nuestra fe y la razón de nuestra alegría ante el amor mejor demostrado en todas las épocas y sociedades.

Con la alegría de ese amor de Jesús que nos llamó “amigos”, avancemos en esta Caminata con la Biblia en alto, mostrando al mundo la Palabra que nos une y fortalece en el testimonio de vida que nos corresponde exhibir y del que las Laicas consagradas son ejemplo.

Con el Papa Francisco recordemos que la misión de la Iglesia, peregrina en la tierra y madre de todos, es por tanto amar a Jesucristo, adorarlo y amarlo, especialmente en los más pobres y desamparados; en los Emigrantes y enlos Internos que intentan dejar atrás difíciles condiciones de vida y todo tipo de peligros.

Con el lema de este mes, “fui forastero y me acogieron… Estuve en la cárcel y me visitaron”, reflexionemos también sobre el valor de la “hospitalidad”, característica esencial de Jesús, a quien anunciamos, testimoniamos y celebramos.

3. Canto e inicio de la Caminata.Se camina cantando a la Palara de Dios hasta la Primera Parada

Primera Parada “Hospitalidad”

En este septiembre 2015 nuestra Iglesia dominicana nos propuso el valor de la hospitalidad para destacarlo en nuestras acciones. Virtud o cualidad

27


que se refiere al trato adecuado, amable, atento y acogedor a los demás, al que necesita algo. Significativa actitud para nuestro diario vivir, más aun después de ser testigos del amor en mayúscula que nos demostró Jesús en la cruz, en su resurrección y al quedarse con nosotros en la Eucaristía.

La hospitalidad de Jesús es la demostración palpable de que “la misión es lo que el amor no puede callar” (Mensaje Cuaresma 2015 del Papa Francisco). Como sus testigos, no podemos hacer menos; no podemos ser indiferentes, actitud contraria al actuar de Dios, a quien nada nuestro le es ajeno. Tanto nos ama y conoce personalmente a cada uno y cada una, que no es indiferente a nada de lo que nos acontece.

Aunque el comportamiento indiferente ha alcanzado dimensiones extraordinarias a todos los niveles, pudiendo hablarse de la “globalización de la indiferencia”, los cristianos de hoy tenemos que marcar la diferencia, viviendo en “amor y solidaridad”, para hacer realidad el deseo de nuestro Papa Francisco de “que los lugares en los que se manifiesta la Iglesia, en particular nuestras parroquias y nuestras comunidades, lleguen a ser islas de misericordia en medio del mar de la indiferencia”.

4. Canto y continúa la caminata.Se camina cantando hacia la Segunda Parada.

Segunda Parada “Fui forastero y me acogieron”.

Lectura de Mt 25,34-35c“Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Vengan, benditos de mi Padre,

reciban la herencia del Reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Porque…fui forastero, y me acogieron”.

Meditación

En su mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado 2015, el Papa Francisco nos afirma que “el carácter multicultural de las sociedades actuales invita a la Iglesia a asumir nuevos compromisos de solidaridad, de comunión y de evangelización”. Tres elementos esenciales en nuestro accionar cristiano y que se hacen realidad en nuestra cercanía y acogida al otro, formando una especie de compromiso circular. Nos hacemos solidarios en la comunión con aquellos a quienes evangelizamos, dándole a conocer la Buena Nueva del amor de Dios. Se reinicia el círculo de compromiso pastoral, a quien evangelizamos, nos unimos en comunión solidaria.

Acoger al nuevo residente en nuestro sector; al que se integra a nuestro apostolado; al nuevo compañero de trabajo; a quien pide ayuda; a quien no se comporta como esperamos; a quien es diferente a nosotros; a quien entra al espacio donde estamos; a quien en su limitación corporal o intelectual requiere de nuestra asistencia.

En fin, acoger a quien llegó para quedarse y al que está de paso, pues en él o ella, debemos ver a Jesús que pidió al Padre que seamos uno, como ellos dos.

28


5. Canto y continúa la caminata.Se camina con cantos y aclamaciones a la Palabra hasta llegar a la

Tercera Parada.

Tercera Parada “Estuve en la cárcel y me visitaron”.

Lectura de Mt 25,34-36f“Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Vengan, benditos de mi Padre,

reciban la herencia del Reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Porque…estuve en la cárcel y me visitaron”.

Meditación

En su mensaje para esta Cuaresma 2015 el Papa Francisco nos aclara que “el sufrimiento del otro constituye un llamado a la conversión,…”, ya que “tener un corazón misericordioso no significa tener un corazón débil” que solo llora o se compadece sin comprometerse. La conversión nos lleva al cambio de mentalidad o metanoia y es lo que explica la cantidad de ministerios de hospitalidad y solidaridad que se mantienen vigentes en nuestra Iglesia. Es la base que sustenta el compromiso solidario con los más pobres, vulnerables y ausentes de libertad; así como, el servicio generoso de las Laicas consagradas.

Acoger, atender, solidarizarse y demostrar amor cristiano a los encarcelados es una decisión que requiere de un corazón fortalecido y parecido al de Jesús. Es propio de un corazón que ha vencido la tentación de la indiferencia. Y no puede ser de otro modo, porque como miembros del cuerpo místico de Cristo, «si un miembro sufre, todos sufren con él; y si un miembro es honrado, todos se alegran con él» (1 Co 12,26).

Que llegue nuestra hospitalidad con quienes están presos de los apegos que le impiden superar el egoísmo; de la malquerencia que le lleva a buscar conflictos con otros; de las críticas negativas que le impiden entablar adecuadas relaciones humanas; de las inconductas que le llevan a dañar a los demás y quedar privados de la libertad. En fin, quien está preso de los bajos instintos que le mantienen apegados a la maldad, al desamor, a la utilización y disminución del otro, necesita mucho más de nuestra misericordia para atraerlo a ese Jesús misericordiosamente amoroso que perdona, acoge y redime.

6. Canto y continúa la caminata.Se continúa el camino hasta la meta final mientras se canta y se aclama

la Palabra.

Punto Final «Una Iglesia sin fronteras, madre de todos»

Al concluir esta Caminata Bíblica, meditemos el lema del mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado 2015:«una

29


Iglesia sin fronteras, madre de todos». Hemos caminado acompañados de la Palabra de Dios, diciendo a todos y todas que creemos en esta Palabra y que queremos vivirla en cada uno de nuestros ambientes, sin límite ninguno. Que acogemos a todos, en especial a los más vulnerables,a los Internos de nuestros centros carcelarios y los que emigran de un lugar a otro en “el arriesgado viaje de la esperanza, con el equipaje lleno de deseos y de temores, a la búsqueda de condiciones de vida más humanas”.

Acogemos también de manera especial, a las Laicas que ofrecen sus vidas en la consagración de una “Iglesia sin fronteras”, atendiendo enfermos, educando y catequizando niños y adultos; orientando a madres solteras y muchachas de la calle que anhelan conocer a un Jesús redentor; acogiendo a adictos de diferentes tipos de esclavitudes. En fin, laicas consagradas al servicio en esta Iglesia en camino, “madre de todos”.

En cada una de nuestras funciones como consagrados en el matrimonio o el celibato; en las calles o en las cárceles; en nuestro propio país o con los venidos de otras latitudes, somos la Iglesia que “extiende por el mundo la cultura de la acogida y de la solidaridad”. Hoy más que nunca, se “requiere reciprocidad y sinergia, disponibilidad y confianza” para“responder con la globalización de la caridad y de la cooperación”. La solicitud de “los más vulnerables y excluidos nos invita a todos a cuidar a las personas más frágiles y a reconocer su rostro sufriente, sobre todo en las víctimas de las nuevas formas de pobreza y esclavitud”.

Hagamos nuestro el deseo del Papa Francisco en su mensaje de Pascua de Resurrección de este año, “los cristianos, por la gracia de Cristo muerto y resucitado, son los brotes de otra humanidad, en la cual tratamos de vivir al servicio de los demás, de no ser altivos, sino disponibles y respetuosos”. Que así sea.

7. Bendición, canto final y aclamaciones al Señor Jesús, Palabra viva del Padre.

FERIA BIBLICA 2015 En Parroquias, Sectores y Centros Educativos

AMOR Y SOLIDARIDAD, CAMINO DE SANTIDAD

En el mes de la Biblia ya se ha hecho tradicional entre nosotros celebrar la FERIA BIBLICA que con el tema del año se quiere presentar los diferentes libros de la Biblia o parte de ellos. Como lo dice su nombre es una exposición variada, creativa y festiva que lleva a un acercamiento, a una valoración y a un conocimiento de los libros de la Biblia o temas bíblicos al estilo de las ferias de libros.

Este 2015 el valor a exponer es la presentación bíblica de nuestro lema del Año: “Amor y Solidaridad, camino de santidad” presente en los libros bíblicos.

La Feria Bíblica puede organizarse en la Parroquia repartiendo los

30


libros entre los Sectores o entre las Comunidades y Movimientos, o entre los grupos de niños de la catequesis o grupos de adolescentes y jóvenes. También, es interesante que se haga en las Escuela o Colegios dejando que la creatividad se exprese de múltiples formas y estilos.

Puede realizarse en una semana, un fin de semana, un día. Es importante propiciar una dinámica festiva, donde de una manera divertida, amena, entretenida y estimulante se representarán las exhortaciones y testimonios de la vivencia de la solidaridad de Dios con su pueblo y del pueblo entre sí.

Cada comunidad tendrá un pabellón (stand) donde presentará el libro donde aparece el tema elegido, el personaje o personajes que intervienen. En ese pabellón o stand pueden tenerse música, o hacer una dramatización o una danza o una canción o un poema o una presentación digital que trate sobre ese tema.

En la Feria Bíblica se podrán presentar agrupaciones corales de la Parroquia y juegos infantiles relacionados con la Biblia. Se pueden poner a la venta diferentes versiones de la Biblia, o CDs de música cristiana, tarjetas y libros bíblicos. Se pueden hacer brindis o vender alimentos y bebidas refrescantes.

1. Para organizar esta actividadPrimer paso: A cada grupo o comunidad o movimiento de la Parroquia

o curso de la Escuela se le asigna un libro de la Biblia en el que buscará un relato o enseñanza de solidaridad que presentará de forma artística y gráfica. Es importante que se exponga:

• Nombre del libro de la Biblia• Ubicación geográfica del lugar donde se vivió o realizó este relato o se

hizo esa enseñanza.• Momento histórico o circunstancia en que se realizó ese acto de

solidaridad• Contenido de ese relato o enseñanza sobre la solidaridad• Enseñanza que nos comunica para vivir la solidaridad entre nosotros,

haciendo nuestras las necesidades de los demás.

Para encontrar datos pueden investigar en el Vocabulario Bíblico de León Doufour en el Internet o en otros diccionarios y páginas webs. También, al inicio de cada libro bíblico las Biblias Católicas tienen una buena introducción sobre los personajes más destacados en ellos.

Segundo paso: Cada comunidad o grupo o curso una vez que conoce cuál es el relato o enseñanza elegido en la Biblia que le corresponde se reúne para pensar y decidir cómo preparar la presentación del mismo en la Feria Bíblica 2015.

Es importante dar paso a la creatividad. Se pueden colocar canciones, fotos, dibujos, textos principales del personaje bíblico, frases principales, símbolos, etc. Se puede decorar de acuerdo a la época que vivía dicho personaje o se realizó esa obra de solidaridad.

Tercer paso: Se distribuyen los diferentes espacios donde estarán colocados los diferentes textos y relatos bíblicos.

31


Cuarto paso: Cada grupo o comunidad coloca su presentación en el espacio asignado lo más hermoso y vistoso posible. Se puede colocar música alusiva a su diálogo, brindar algo a los participantes y crear un ambiente de fiesta y de confianza.

Quinto paso: Se inaugura la Feria con un acto especial con la participación del mayor número de personas, una oración y un concierto o actividad cultural

Sexto paso: Clausura de la Feria con otro acto especial en un ambiente de oración y de fiesta.

Séptimo paso: Se evalúa la Feria en el Consejo Parroquial. Se proponen reconocimientos a los organizadores.

Octavo paso: Se entregan reconocimientos a los organizadores al final

2. Fecha:Cada Parroquia o Escuela elige durante este mes de Septiembre el

momento más adecuado. La exposición debe durar varios días para que la gente pueda visitarla. Se puede invitar a los alumnos de las escuelas cercanas a que visiten la exposición. También, sería muy buena idea que las Escuelas organicen esta exposición con los alumnos.

3. Textos bíblicos posibles a elegir para la Feria Bíblica 2015Dios se muestra solidario con su pueblo: Libro del Exodo con sus

paralelos de Números y Deuteronomio. Los paralelos son las citas bíblicas que hablan del mismo tema a lo largo de la Biblia, desarrollándolo o explicándolo o reafirmándolo de otra manera y en otra situación. En la Biblia de Jerusalén se refieren a muchos paralelos.

Los Diez Mandamientos expresión de amor y solidaridad: buscar Exodo 20 y capítulos siguientes, buscar sus paralelos a lo largo de la Biblia. • La solidaridad de Dios con su pueblo y del pueblo entre sí en los Salmos.• La solidaridad en Isaías: Isaías 58; Cánticos del Siervo: Isaías 42,49, 50 y 52.• La enseñanza sobre la solidaridad en los Proverbios.• El libro de Tobías.• El libro de Judit y de Rut.• Las Bienaventuranzas, la expresión mayor de amor y solidaridad: Mateo

5-7 y paralelos.• Los milagros de Jesús, signo de solidaridad, en los Evangelios de Mateo,

Lucas, Marcos y Juan.• La solidaridad de Dios vivida hasta el extremo por Jesús: textos de la

Pasión en los Evangelios y Carta a los Romanos.• Una enseñanza práctica de solidaridad: Cartas de San Juan.• La solidaridad que se vuelve libertad: Carta de San Pablo a Filemón y

paralelos. • La solidaridad en la Carta de Santiago.• La Colecta Solidaria con los pobres en las Cartas de San Pablo:

Romanos y paralelos.• Enseñanzas prácticas de solidaridad en las diferentes Cartas de Pablo.

32


Maratón de lectura escrutando la Palabra para vivir más la solidaridad

Esta hermosa actividad de lectura continua de toda la Biblia es una hermosa experiencia realizada en muchos lugares y que da mucho fruto. Este año lo queremos hacer viviendo una hermosa y antigua tradición de leer, estudiar, escarbar, profundizar la Biblia desde ella misma. Es interesante descubrir que la Palabra se explica ella misma a lo largo de la Biblia a través de otras citas bíblicas. Les llamamos a esas citas bíblicas con el nombre de paralelos, porque en las Biblias que las colocan siempre las ponen al lado del texto bíblico que se leen o a pie de página, indicando el versículo a que corresponde.

Cada Parroquia puede organizarlo en este mes de Septiembre como mejor pueda hacerlo: ya sea dos o tres días. O un día entero. Pueden elegirse los textos bíblicos aquí propuestos buscando sus paralelos. Para esto es necesario, tener una Biblia de Jerusalén o alguna Biblia que los traiga reportados.

1. Objetivos del Maratón Bíblico escrutando la Palabra.• Orar, reflexionar y meditar mediante la escucha de la palabra de Dios. • Escuchar lo que Dios le dice a cada uno a través de la lectura y escucha

de su palabra. • Movilizar a nuestro pueblo y congregarlo en torno a la Palabra de Dios,

que es vida y da vida. • Reverenciar la palabra de Dios por medio de la lectura y meditación de su

palabra. • Familiarizarse con la Palabra de Dios. • Crear un espacio para la evangelización. • Promover la lectura de la Biblia entre todas las personas de todas las

edades. • Fortalecer la vida espiritual y fomentar el hábito de lectura de la Biblia. • Escuchar “con el corazón abierto y sincero la Palabra de Dios, para que

oriente sus pensamientos, sus elecciones y acciones” (Papa Benedicto XVI (02/09/12).

2. Descripción del Maratón escrutando la PalabraLa actividad se puede realizar cualquier día de Septiembre según su

posibilidad. Puede hacerse de un día para otro. Se puede llevar a cabo en el Templo Parroquial o en otro lugar apropiado, bien adornado con motivos bíblicos.

33


Durante esta actividad se leerá y escrutará de manera ininterrumpida día y noche los textos bíblicos que aquí se proponen.

3. Se escruta la Palabra de esta manera:• Se lee el texto seleccionado de corrido.• Se vuelve a leer, pero cada vez que aparezca una cita bíblica al lado,

paralela, la buscamos y si aparece otra cita bíblica al lado del texto que leímos, se lee y si en esa otra cita bíblica aparece otra cita se lee y así sucesivamente se va caminando toda la Biblia.

• Después de leer todos los paralelos se guarda media hora de silencio, asimilando esa Palabra escuchada. Si se tiene cuaderno se va escribiendo lo que el Señor le ha dado a conocer con esa Palabra.

• Luego, se hace oración comunitaria a partir de esa Palabra escuchada y saboreada.

4. Les proponemos estos textos, pero pueden seleccionarse otros.• Isaías 58 y búsqueda de sus paralelos.• Los dos mandamientos: vivencia de la solidaridad: Éxodo 20-24 y

paralelos.• Las Bienaventuranzas: vivencia completa de la solidaridad fundamentada

en Dios: Mateo 5-7 y paralelos.• Los cantos del Siervo de Yahvé: Isaías 42,49, 50 y 52 y sus paralelos.• Los milagros de Jesús en los 4 evangelios.• La solidaridad en los Discursos de Despedida: Juan 13-17 y paralelos.• La solidaridad de Dios mostrada hasta el extremo en la Pasión y

Resurrección de Jesús: Mateo 26-28; Marcos 14-16; Lucas 22-24; Juan 18-21 y paralelos.

• Carta de Pablo a Filemón y paralelos.• Las Cartas de San Juan y paralelos.• La Carta de Santiago y paralelos.• Libro de Tobías.• Libro de Rut.• Libro de Judit.

Se necesitan muchos lectores de todas las edades. Durante los días del Maratón los feligreses permanecerán en silencio reverente, pues es un espacio donde el mismo Dios habla y sólo hablarán para leer los paralelos y orar desde la Palabra.

Se invitará para que participen como escuchas y lectores de la Palabra y como lectores a todas las Comunidades, Movimientos, Congregaciones religiosas e institutos seculares, las instituciones públicas y privadas, escuelas y colegios, juntas de vecinos en fin todas las instituciones que hagan vida en nuestra Parroquia y Zona. Se puede invitar a otras denominaciones cristianas que lo deseen hacerlo en un clima fraterno y respetuoso.

Se distribuirán fichas para que los y las interesadas se inscriban, previa selección de la fecha y horario en que deseen ser lectores de la Palabra.

34


Lectura Dominicales y Diarias, Septiembre 2015Tomadas del Calendario Litúrgico de la Conferencia del Episcopado Dominicano 2015

1 Feria

Martes Verde

Lectura de la primera carta a los Tesalonicenses 5, 1-6. 9-11 Hermanos: En lo referente al tiempo y a las circunstancias no necesitan

que les escriba. Saben perfectamente que el Día del Señor llegará como un ladrón en la noche. Cuando estén diciendo: “paz y seguridad”, entonces, de improviso, les sobrevendrá la ruina, como los dolores de parto a la que está encinta, y no podrán escapar.

Pero ustedes, hermanos, no viven en tinieblas para que ese día no les sorprenda como un ladrón, porque todos son hijos de la luz e hijos del día; no lo son de la noche ni de las tinieblas.

Así, pues, no durmamos como los demás, sino estemos vigilantes y vivamos sobriamente. Porque Dios no nos ha destinado al castigo, sino a obtener la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo; él murió por nosotros para que, despiertos o dormidos, vivamos con él. Por eso, anímense mutuamente y ayúdense unos a otros a crecer, como ya lo hacen. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 26,R/ Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida.

El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? R/.

Una cosa pido al Señor, eso buscaré: habitar en la casa del Señor por los días de mi vida; gozar de la dulzura del Señor contemplando su templo. R/.

Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida. Espera en el Señor, sé valiente, ten ánimo, espera en el Señor. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 4, 31-37 En aquel tiempo, Jesús bajó a Cafarnaún, ciudad de Galilea; y los sábados

enseñaba a la gente. Se quedaban asombrados de su enseñanza, porque hablaba con autoridad.

Había en la sinagoga un hombre que tenía un demonio inmundo, se puso a gritar a voces: ¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres: El Santo de Dios. Jesús le intimó: ¡Cierra la boca y sal! El demonio tiró al hombre por tierra en medio de la gente, pero salió sin hacerle daño. Todos comentaban estupefactos: ¿Qué tiene su palabra? Da órdenes con autoridad y poder a los espíritus inmundos, y salen. Noticias de él iban llegando a todos los lugares de la comarca. Palabra del Señor.

Meditación

“Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida” hemos repetido en el Salmo. Esa puede ser la conclusión del tema planteado en la primera

35


lectura. Parece que la comunidad de Tesalónica estaba muy preocupada por la última vista de Cristo; como sucede también en algunos sectores cristianos de nuestro tiempo, que van poniendo por todas partes eso de “ya Cristo viene”. Y Pablo da la respuesta: no podemos vivir distraídos, pensando en cualquier cosa y en la oscuridad: “no durmamos como los demás, sino estemos vigilantes y vivamos sobriamente”. Es una llamada a no tener miedo, sino a estar atentos a lo que sucede a nuestro lado y a intervenir en eso que sucede.

Nos puede hacer mucho bien pensar en el futuro; debemos ser personas de ideales para nosotros, nuestra familia y el país. No podemos contentarnos con lo que somos y tenemos, debemos progresar, pero no de cualquier forma, sino teniendo presente al Señor que nos hace “hijos de la luz”.

Además, Pablo nos da un consejo personal y otro comunitario. El personal nos dice que estamos destinados a obtener la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo; él murió por nosotros para que, despiertos o dormidos, vivamos con él. Vivamos en el Señor y con el Señor en nuestras vidas.

El consejo a la comunidad es anímense mutuamente y ayúdense unos a otros a crecer, como ya lo hacen. En este tiempo y en este mes de septiembre, mes de la Biblia, se nos pide que nos preocupemos sobre todo de la hospitalidad como manera de animar y de ayudarnos los uno a los otros.

El evangelio de hoy nos presenta una victoria de Cristo sobre el maligno y sobre el mal. Hay un enfrentamiento directo, hasta nos presenta un diálogo de Jesús con el maligno. Ese enfrentamiento fue entonces, y sigue siendo ahora, en nosotros y en nuestro pueblo. El maligno le pregunta a Jesús ¿has venido a destruirnos? La respuesta de Jesús es por medio de la acción, echar al demonio y dejar a la persona en buen estado.

Nuestro Dios se preocupa de la persona completa, está atento al estado personal para hacerse presente allí, y liberar de lo que hace falta, por eso podemos preguntarnos: ¿cuáles son mis demonios? ¿A qué estoy atado o atada y necesito liberarme para ser feliz? ¿Cuáles son mis miedos y esclavitudes? ¿Podrá Jesús liberarme del miedo, el egoísmo, envidias, depresiones, dependencias?

Pero también está la parte que nos corresponde a cada uno, el hacer presente a Cristo liberador en las demás personas. Nos toca repartir la fuerza curativa de Cristo en las personas que nos rodean, comenzando por los de más cerca. Debemos solidarizarnos con las necesidades de los demás para tratar de ayudarles en su liberación.

2 Feria

Miércoles Verde37º Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Mons. Francisco

Ozoria Acosta, Obispo de San Pedro de Macorís

Comienzo de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1, 1-8

Pablo, apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, y el hermano Timoteo al pueblo santo que vive en Colosas, de hermanos fieles a Cristo.

36


Les deseamos la gracia y la paz de Dios nuestro Padre. En nuestras oraciones damos siempre gracias por ustedes a Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo, desde que nos enteramos de su fe en Cristo Jesús y del amor que tienen a todo el pueblo santo.

Les anima a esto la esperanza de lo que Dios les tiene reservado en los cielos, que ya conocieron cuando llegó hasta ustedes por primera vez la Buena Noticia, el mensaje de la verdad.

Esta se sigue propagando y dando fruto en el mundo entero, como ha ocurrido entre ustedes desde el día en que lo escucharon y comprendieron de verdad lo generoso que es Dios.

Fue Epafra quien se lo enseñó, nuestro querido compañero de servicio, auxiliar fiel que Cristo nos ha dado. Él ahora nos ha hecho ver el profundo amor que sienten por nosotros. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 51,R/. Confío en tu misericordia, Señor, por siempre jamás.

Pero yo, como verde olivo en la casa de Dios, confío en la misericordia de Dios, por siempre jamás. R/.

Te daré siempre gracias porque has actuado; proclamaré delante de tus fieles: “Tu nombre es bueno”. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 4, 38-44 En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, entró en casa de Simón.

La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta y le pidieron que hiciera algo por ella. Él, de pie a su lado, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella, levantándose enseguida, se puso a servirles. Al ponerse el sol, los que tenían enfermos con el mal que fuera, se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre cada uno, los iba curando.

De muchos de ellos salían también demonios, que gritaban: Tú eres el Hijo de Dios. Los increpaba y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías. Al hacerse de día, salió a un lugar solitario.

La gente lo andaba buscando; dieron con él e intentaban retenerlo para que no se les fuese. Pero él les dijo: También a los otros pueblos tengo que anunciarles el reino de Dios, para eso me han enviado. Y predicaba en las sinagogas de Judea. Palabra del Señor.

Meditación

Desde hoy, el resto de esta semana, y hasta el viernes de la próxima, la primera lectura está tomada de la Carta a los cristianos de la ciudad de Colosas. Parece que Pablo no ha fundado esa comunidad, sino un tal Epafra, como dice en lo que hemos leído; parece que conoce la comunidad por lo que le cuentan de ella, pero lo contado es tan bueno que nos debe servir para reflexionar sobre nuestras comunidades diocesanas, parroquiales, de los sectores y los grupos eclesiales.

A Pablo le han contado cómo la comunidad de Colosas está animada por “su fe en Cristo Jesús y del amor que tienen a todo el pueblo santo”.

37


Esa fe y amor están fundados en la Esperanza de conseguir el cielo. Por tanto la comunidad está fundada en las tres virtudes cardinales.

¿En qué fundamos nuestras comunidades? Y ¿las relaciones de los miembros de las mismas?

El evangelio de hoy nos cuenta cómo se desarrollaba un sábado en la vida de Jesús: primero va a la Sinagoga, va a cumplir con lo mandado por la ley y a cumplir con la oración comunitaria. Después regresa a casa (en este caso la de Pedro, porque están en la ciudad de la cual es el apóstol), sigue en casa todo el día, porque la ley no permite trabajar ni caminar. Al final de la tarde, cuando cae el sol, cuando se termina de manera oficial el sábado judío, comienza otra vez su contacto con la gente. Contacto que le lleva a preocuparse de la persona completa, “los que tenían enfermos con el mal que fuera, se los llevaban”, curaba el mal que fuera, atendía a cada persona según sus necesidades.

De este Evangelio se pueden destacar muchas actitudes de Jesús para con nosotros. Destacamos: Jesús cumple la ley siempre que puede y siempre que no lo necesiten las personas. Por ejemplo, se queda en casa, no tiene por qué enfrentarse a las autoridades religiosas sin necesidad.

Otro aspecto: Pedro es hospitalario, lo recibe en su casa y le da posada. Este evangelio da a entender que la casa de Pedro es la casa habitual de Jesús cuando está en Cafarnaúm. Y el premio a esa hospitalidad es la curación de su suegra enferma. Hoy día y siempre, la hospitalidad es la presencia de Cristo en nuestra vida y en nuestros hogares, por eso debemos ser hospitalarios para tener a Cristo en nuestras casas. Cada vez que atendemos, acogemos o servimos a los demás, sobre todo a los necesitados, estamos atendiendo, acogiendo, siendo hospitalarios con el mismo Jesús.

También podríamos destacar la oración de Jesús a la mañana siguiente. La importancia de la oración de la mañana en nuestras vidas para poner toda la jornada en la presencia de Dios….

3 Memoria obligatoria: San Gregorio Magno, Papa y doctor de la Iglesia

Jueves Blanco

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1, 9-14 Hermanos: Desde que nos enteramos de su conducta, no dejamos de

rezar por ustedes y de pedir que consigan un conocimiento perfecto de su voluntad con toda sabiduría e inteligencia espiritual.

De esta manera su conducta será digna del Señor, agradándole en todo; fructificarán en toda clase de obras buenas y aumentará su conocimiento de Dios. El poder de su gloria les dará fuerza para soportar todo con paciencia y magnanimidad, con alegría dando gracias a Dios Padre, que les ha hecho capaces de compartir la herencia del pueblo santo en la luz.

Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas, y nos ha trasladado al reino de su Hijo querido, por cuya sangre hemos recibido la redención, el perdón de los pecados. Palabra de Dios.

38


Salmo responsorial, Sal 97R/. El Señor da a conocer su victoria.

El Señor da a conocer su victoria revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y de su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.

Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera, griten, vitoreen, toquen instrumentos. R/.

Toquen la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas aclamen al Rey y Señor. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 5, 1-11 En aquel tiempo, la gente se agolpaba alrededor de Jesús para oír la

Palabra de Dios, estando él a orillas del lago de Genesaret; y vio dos barcas que estaban junto a la orilla: los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las redes. Subió a una de las barcas, la de Simón, y le pidió que la apartara un poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente.

Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: Rema mar adentro y echen las redes para pescar. Simón contestó: Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes.

Y, puestos a la obra, hicieron una redada de peces tan grande, que reventaba la red. Hicieron señas a los socios de la otra barca, para que vinieran a echarles una mano. Se acercaron ellos y llenaron las dos barcas, que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se arrojó a los pies de Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, que soy un pecador.

Y es que el asombro se había apoderado de él y de los que estaban con él, al ver la redada de peces que habían cogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Jesús dijo a Simón: No temas: desde ahora serás pescador de hombres. Ellos sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo siguieron. Palabra del Señor.

Meditación

Recordemos que Pablo no conoce a los Colosenses, por eso habla de que se enteró de su conducta.

El tema de hoy, en esta carta, está en el conocimiento y la conducta. La conducta de los colosenses es muy buena, esa noticia le ha llegado a Pablo, y el apóstol los invita también a profundizar en el conocimiento.

Revisemos nuestras vidas, las de nuestras comunidades. Nos encontramos con católicos y católicas preocupados por su formación religiosa y por llevar una vida santa según esos conocimientos, además de estar preocupados por presentar sus conocimientos a los demás.

Pero también encontramos a católicos y católicas muy buenos pero no preocupados por su formación, a ellos y ellas van dirigidas las palabras de Pablo en el día de hoy, deben formarse. Y, gracias a Dios, la Iglesia dominicana ofrece posibilidades de formación. Las ofrece con mayor facilidad en las ciudades, pero también en las comunidades campesinas pueden mejorar la formación, será necesario emplear tiempo, esfuerzo y recursos económicos por los desplazamientos, recursos que no siempre

39


están al alcance; también tenemos emisoras de radio y televisión que pueden ayudar en esta formación, será necesario sacar tiempo para esos temas de formación ofrecidos por estos medios de comunicación.

Y además encontramos a católicos, que así se llaman, que ni se preocupan por la formación ni por hacer buenas obras, ¿cómo podemos llegar a evangelizar este grupo? Debemos ser creyentes de conocimiento, de acción y de misión llevando nuestros conocimientos y ejemplo a las demás personas.

El capítulo 4 de san Lucas, que leíamos los días anteriores, es el comienzo de la vida pública de Jesús. Por tanto estamos aún en las primeras presentaciones de Cristo ante los judíos.

Ayer decíamos que la hospitalidad de Pedro con Jesús le había conseguido la curación de la suegra. Hoy, esa misma hospitalidad le lleva a la confianza de pedirle “prestada” su barca para poder predicar desde ella. Y después a ser llamado por el mismo Jesús a “ser pescador de hombres”. Como siempre, este evangelio nos trae muchas enseñanzas…

Pedro ha estado trabajando toda la noche, y no ha conseguido fruto, no ha pescado nada; viene un desconocido, uno que no es de mar ni es pescador y le aconseja dónde tiene que echar las redes. Lo normal sería no hacerle caso, pero como quien se lo pide es Jesús, lo atiende. Y los peces pescados son muchos, demasiados.

¿Cuántas veces queremos hacer las cosas por nosotros mismos sin contar con Dios? Pero si esa es mi carrera, mi especialidad, si todos confían en mí para hacer esa tarea, por tanto lo puedo hacer solo o sola…. ¿No me sucede? El Señor nos llama a ser pescadores, a echar las redes, los frutos los va a poner Él. En la misión, en la catequesis, en el ejemplo, en el trabajo no nos midamos por los frutos de conversión de otras personas, sino por hacerle caso al Señor y seguir echando las redes.

4 Feria

Viernes Verde

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1, 15-20 Cristo Jesús es imagen de Dios invisible, primogénito de toda criatura;

porque por medio de él fueron creadas todas las cosas: celestes y terrestres, visibles e invisibles. Tronos, Dominaciones, Principados, Potestades; todo fue creado por él y para él.

Él es anterior a todo, y todo se mantiene en él. Él es también la cabeza del cuerpo: de la Iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, y así es el primero en todo. Porque en él quiso Dios que residiera toda la plenitud.

Y por él quiso reconciliar consigo todos los seres: los del cielo y los de la tierra, haciendo la paz por la sangre de su cruz. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 99,R/. Entren en la presencia del Señor con vítores.

Aclama al Señor, tierra entera, sirvan al Señor con alegría, entren en su presencia con vítores. R/.

40


Sepan que el Señor es Dios: que él nos hizo y somos suyos, su pueblo y ovejas de su rebaño. R/.

Entren por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con himnos, dándole gracias y bendiciendo su nombre R/

“El Señor es bueno, su misericordia es eterna, su fidelidad por todas las edades”. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 5, 33-39 En aquel tiempo, dijeron a Jesús los fariseos y los letrados: Los discípulos

de Juan ayunan a menudo y oran, y los de los fariseos también; en cambio los tuyos, a comer y a beber.

Jesús les contestó: ¿Quieren que ayunen los amigos del novio mientras el novio está con ellos? Llegará el día en que se lo lleven, y entonces ayunarán.

Y añadió esta comparación: Nadie recorta una pieza de un manto nuevo para ponérsela a un manto viejo; porque se estropea el nuevo, y la pieza no le pega al viejo.

Nadie echa vino nuevo en odres viejos: porque revientan los odres, se derrama, y los odres se estropean. A vino nuevo, odres nuevos.

Nadie que cate vino añejo quiere del nuevo, pues dirá: “Esta bueno el añejo”. Palabra del Señor.

Meditación

El texto de la primera lectura se llama El Himno Cristológico de la carta a los Colosenses. Es un canto por medio del cual Pablo quiere instruir, formar más a los miembros de esa comunidad en quién es Cristo.

Gracias a este himno tenemos un conocimiento mayor de Cristo, quien está por encima de todo lo creado, ya que todo fue creado por medio de Él. Cristo es el centro del mundo, de la Iglesia, de las personas. Y es quien da sentido a todo y a todos.

Según este himno nuestra persona, el mundo y la realidad eclesial las debemos centrar, organizar y entender desde Cristo, porque Él es el centro de todo. Debemos orar muchas veces con este himno.

El Evangelio nos presenta el primer enfrentamiento de Jesús con los fariseos y la gente entendida en leyes. El tema de hoy es sobre el ayuno. No se trata solo de la ley, sino de la costumbre que tenían todos los maestros de poner unas normas de orden, disciplina y comportamiento de sus discípulos. Jesús no las puso, por lo menos no en cuanto al ayuno.

En nuestra realidad cuesta entender la respuesta de Jesús, eso del novio, de la ropa y del vino. Pero en la mentalidad judía de entonces le entienden perfectamente. Los judíos tenían el ayuno como algo triste y de preparación de la llegada del Mesías, a quien también lo comparan con el Novio que están esperando.

Por eso la respuesta de Jesús está diciendo que el Novio, es decir el Mesías, ya ha llegado, ya se terminó el tiempo de ayuno, deberá volverse a ayunar cuando se vaya o le quiten al Novio-Mesías. Ahora es tiempo de fiesta y de alegría.

41


Y este planteamiento es para nosotros: ¿Está Cristo en nuestras vidas y en nuestras comunidades? ¿Estamos de fiesta? ¿Vivimos alegres?

La presencia de Cristo en nuestras vidas debe significar cambio. Este es el ejemplo del paño y del vino. Muchos de nosotros y nosotras seguimos con la idea de “siempre ha sido así”, y nos aferramos a ello para no cambiar muchas cosas, actitudes, situaciones… Mientras el mundo está cambiando a una velocidad muy grande, en los asuntos personales, morales, de iglesia queremos seguir con lo de siempre. A vino nuevo, vasijas nuevas.

Cuando la Iglesia habla de Nueva inculturación, inserción, actualización no se refiere a retoques externos, a pintarnos la cara, sino a ser capaces de vivir a Cristo en esta realidad y hacerlo presente con palabras, signos, ejemplos comprensibles por la realidad de hoy.

No cabe ninguna duda que en la realidad actual, uno de los signos más claros que podemos dar los católicos es el tema de la solidaridad y de la hospitalidad a tantas personas en situaciones extremas de abandono, soledad, miseria, explotación, tristeza y miedo.

5 Feria

Sábado Verde

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1, 21-23 Hermanos: Antes estaban también ustedes alienados de Dios y eran

enemigos suyos por la mentalidad que engendraban sus malas acciones; ahora en cambio, gracias a la muerte que Cristo sufrió en su cuerpo de carne, han sido reconciliados y Dios puede admitirlos a su presencia como a un pueblo santo sin mancha y sin reproche. La condición es que permanezcan cimentados y estables en la fe, e inamovibles en la esperanza que escucharon en el Evangelio. Es el mismo que se proclama en la creación entera bajo el cielo, y yo, Pablo, fui asignado a su servicio. Palabra de Dios.

Salmo responsorial, Sal 53R/. Dios es mi auxilio.

Oh Dios, sálvame por tu nombre, sal por mí con tu poder. Oh Dios, escucha mi súplica, atiende a mis palabras. R/.

Pero Dios es mi auxilio, el Señor sostiene mi vida. Te ofreceré un sacrificio voluntario dando gracias a tu nombre que es bueno. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 1-5 Un sábado, Jesús atravesaba un sembrado; sus discípulos arrancaban

espigas y, frotándolas con las manos, se comían el grano. Unos fariseos les preguntaron: ¿Por qué hacen en sábado lo que no está

permitido? Jesús les replicó: ¿No han leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios, tomó los panes presentados que sólo pueden comer los sacerdotes, comió él y les dio a sus compañeros. Y añadió: El Hijo del Hombre es señor del sábado. Palabra del Señor.

42


Meditación

Como les dice Pablo a los colosenses, el encuentro con Cristo les ha llevado a cambiar la vida por completo, de sus malas acciones “han sido reconciliados y Dios puede admitirlos a su presencia”. Se nos vuelve a insistir en la necesidad de ese encuentro con Cristo porque en su sangre hemos sido reconciliados.

Pero habla también del comportamiento de la comunidad, que si tiene a Cristo en el centro se convierte en “un pueblo santo sin mancha y sin reproche”. Es un planteamiento para nuestras comunidades: tienen la obligación de ser santas y sin reproche. Ante las demás personas que no creen o no están en la comunidad debemos dar testimonio de santidad y no dar malos ejemplos. Nuestras comunidades deben ser acogedoras, hospitalarias, abiertas a las demás personas, no rechazar a nadie y ser ejemplo de vida.

Y esto es también una enseñanza para permanecer en la fe, no es suficiente el comenzar, sino el seguir. En ocasiones nos cuesta seguir reuniéndonos en la comunidad, llegamos cansados o cansadas del trabajo, los temas ya no son tan atrayentes como los primeros días… son nuestras excusas, pero la comunidad nos necesitas y necesitamos de la comunidad, El Evangelio, por su parte, continúa el enfrentamiento de Jesús con los fariseos; en esta ocasión el tema se refiere a trabajar en sábado.

Jesús con sus discípulos pasan por unos campos de trigo ya maduros, están para ser cosechados. Tienen hambre y arrancan unas espigas para comerse los granos de trigo. Esos campos no son de los discípulos, por tanto, para nosotros la falta estaría en robar el trigo para comer. Para los fariseos el fallo mayor es trabajar y caminar en sábado, dos cosas prohibidas en ese día de reposo. Jesús no critica el cumplimiento de la ley del sábado, lo que critica es el rigorismo con que la aplican; no es un trabajo el restregar una espigas en la mano para comerse unos granos de trigo.

Y eso lo debemos aplicar a nuestra vida personal, familiar y comunitaria. Podemos estar siendo demasiado exigentes en cosas accidentales y por ellas podemos estar amargándonos la vida o la de los demás.

Por otra parte, Jesús se pone por encima del sábado: “El Hijo del Hombre es señor del sábado”. Es presentarse por encima de la ley, es decir es presentarse como Dios. El sábado, el domingo, son importantes, debemos dedicarlos a Dios, a su servicio, sirviendo y viviendo en familia el triunfo total de Cristo sobre el mal. Y pongamos a la persona humana por encima del sábado, por encima de las leyes y de las normas, como nos lo ha enseñado Jesús.

6 Domingo XXIII del Tiempo Ordinario

III Semana Liturgia de las Horas Verde

Como Jesús seamos hospitalarios que liberan

Orientaciones para este domingo: Como primer domingo de septiembre colocamos el cartel del lema del mes en un lugar visible para toda la

43


comunidad; este cartel lo llevamos en la procesión de entrada. Durante todo este mes debe darse mucha importancia a la acogida de las personas en el lugar de la celebración, esto es uno de los principales signos de hospitalidad. Al inicio de la celebración, quien la preside, puede invitar a todas las personas a hacer un saludo de acogida a quienes tienen a su lado. También se pude colocar a los enfermos y personas mayores, en las primeras filas del lugar de la celebración. También es el mes de la Biblia, por tanto en la procesión de entrada se lleva una Biblia grande y se coloca en un “altar-atril”, donde estará todo el mes a la vista de las personas; se adorna con flores y velas. Se ha avisado con tiempo para que las familias traigan su Biblia, y después de la homilía, se procede a su bendición y entrega.

Monición ambientalHermanas y hermanos: El Señor nos reúne en este primer Domingo de Septiembre,

mes de la Biblia, de la Pastoral Penitenciaria y de la Pastoral de los Migrantes. Durante todo este mes estudiaremos, rezaremos, celebraremos y viviremos el valor de la hospitalidad, practicándola como nos dice Jesús: “Fui forastero y me acogieron… Estuve en la cárcel y me visitaron” (Mt 25, 35b.36b) “.

Pidamos que el Señor abra nuestros oídos para escuchar su Palabra y suelte nuestra lengua para proclamarla, dándole acogida en nuestras vidas y animados por él, seamos hospitalarios, de modo que acojamos a todos los sor-dos, mudos, cojos y oprimidos, comunicándoles su amor sanador y liberador.

Que el Señor nos haga capaces de ser hospitalarios con todos y todas, especialmente, con los más pobres y necesitados. Ahora nos ponemos de pie para darle hospitalidad a Jesús que llega a decirnos: “Éffeta, Abrete”..

Primera Lectura: Isaías 35, 4-7ªEl profeta destaca la hospitalidad de Dios que acoge a todas las

personas, principalmente trayendo ánimo a los miedosos y ayudando a las personas necesitadas como los enfermos, los necesitados de alimento y agua. Escuchemos.

Lectura del libro del profeta Isaías Digan a los cobardes de corazón: “Sean fuertes, no teman. Miren a su

Dios que trae el desquite, viene en persona, resarcirá y les salvará” Se despegarán los ojos del ciego, los oídos del sordo se abrirán, saltará

como un ciervo el cojo, la lengua del mudo cantará. Porque han brotado aguas en el desierto, torrentes en la estepa; el

páramo será un estanque, lo reseco un manantial. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 145R/. Alaba, alma mía, al Señor.

Que mantiene su fidelidad perpetuamente, que hace justicia a los oprimidos, que da pan a los hambrientos. El Señor liberta a los cautivos. R/.

El Señor abre los ojos al ciego, el Señor endereza a los que ya se doblan, el Señor ama a los justos, el Señor guarda a los peregrinos. R/.

44


Sustenta al huérfano y a la viuda y trastorna el camino de los malvados. El Señor reina eternamente, tu Dios, Sión, de edad en edad. R/.

Segunda Lectura: Santiago 2, 1-5Santiago nos habla de cómo debemos ser hospitalarios y acogedores en

nuestras reuniones de Iglesia, sin hacer distinción, y si la hacemos que sea para darles los mejores puestos a los enfermos, los pobres y los pequeños.

Lectura de la carta del apóstol Santiago Hermanos míos: No junten la fe en nuestro Señor Jesucristo glorioso con

el favoritismo. Por ejemplo: llegan dos hombres a la reunión litúrgica. Uno va bien vestido y hasta con anillos en los dedos; el otro es un pobre andrajoso.

Ven al bien vestido y le dicen: “Por favor, siéntate aquí, en el puesto reservado.” Al pobre, en cambio: “Quédate ahí de pie o siéntate en el suelo.” Si hacen eso, ¿no son inconsecuentes y juzgan con criterios malos?

Queridos hermanos, escuchen: ¿Acaso no ha elegido Dios a los pobres del mundo para hacerlos ricos en la fe y herederos del reino, que prometió a los que lo aman? Palabra de Dios.

Aleluya Mt 4, 23 Jesús proclamaba el Evangelio del reino, curando las dolencias del

pueblo.

Evangelio: Mateo 7, 31-37Jesús acoge a un sordomudo a quien le abre los oídos y le suelta la

lengua. Del mismo modo si nosotros sabemos ser hospitalarios tantos sordos y mudos que hay a nuestro alrededor podremos decirles: “Effetá” Abrete y abrir sus ojos, oídos y bocas.

Lectura del santo evangelio según san Marcos En aquel tiempo, dejó Jesús el territorio de Tiro, pasó por Sidón, camino

del lago de Galilea, atravesando la Decápolis. Y le presentaron un sordo que, además, apenas podía hablar; y le piden que le imponga las manos.

Él, apartándolo de la gente a un lado, le metió los dedos en los oídos y con la saliva le tocó la lengua. Y, mirando al cielo, suspiró y le dijo: —”Effetá”, esto es: “Ábrete.”

Y al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la traba de la lengua y hablaba sin dificultad.

Él les mandó que no lo dijeran a nadie; pero, cuanto más se lo mandaba, con más insistencia lo proclamaban ellos. Y en el colmo del asombro decían: —”Todo lo ha hecho bien; hace oír a los sordos y hablar a los mudos.” Palabra del Señor.

Oración de los fielesQuien preside: Con la confianza de que Dios es un Padre que nos acoge,

le presentamos nuestras necesidades. A cada petición respondemos: Padre, ayúdanos a ser hospitalarios con los necesitados.

45


1. Para que la Iglesia sea la casa que da hospitalidad, acogida a todas las personas, sin hacer distinciones de ningún tipo. Oremos.

2. Por quienes gobiernan nuestro país, por quienes tienen el poder real en nuestra República Dominicana, para que siendo hospitalarios con los más pobres trabajen por conseguir el desarrollo, la paz y la justicia. Oremos.

3. Para que la República Dominicana, libre y soberana siga siendo acogedora y hospitalaria con quienes viven o vienen a nuestra patria cumpliendo nuestras leyes. Oremos.

5. Por los enfermos, las personas que viven en soledad, los abandonados, quienes no tienen lo necesario material para vivir en dignidad, para que el Padre de la vida les ayude a solucionar sus problemas, y seamos hospitalarios con ellos. Oremos.

6. Para que saquemos tiempo para formarnos en la lectura, comprensión y cumplimiento de la Biblia, y leamos más y mejor la Palabra de Dios. Oremos.

7. Para que el Señor abra nuestros ojos y oídos para verle, escucharle, escuchar la voz del pueblo; y abra nuestra lengua para hacerle presente en quienes más lo necesitan. Oremos.

Quien preside: Padre, acoge nuestras súplicas y haz que tengamos un corazón semejante al tuyo, capaz de acoger a todos y a todas sin discriminación, ofreciéndoles tu liberación. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.

7 Feria

Lunes Verde

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1, 24-2, 3 Hermanos: Me alegro de sufrir por ustedes: así completo en mi carne los

dolores de Cristo, sufriendo por su cuerpo que es la Iglesia, de la cual Dios me ha nombrado ministro, asignándome la tarea de anunciarles a ustedes su mensaje completo: el misterio que Dios ha tenido escondido desde siglos y generaciones y que ahora ha revelado a su pueblo santo.

Dios ha querido dar a conocer a los suyos la gloria y riqueza que este misterio encierra para los gentiles: es decir, que Cristo es para ustedes la esperanza de la gloria. Nosotros anunciamos a ese Cristo; amonestamos a todos, enseñamos a todos, con todos los recursos de la sabiduría, para que todos lleguen a la madurez en su vida cristiana: esta es mi tarea, en la que lucho denodadamente con la fuerza poderosa que él me da.

Quiero que tengan noticia del empeñado combate que sostengo por ustedes y los de Laodicea, y por todos los que no me conocen personalmente.

Busco que tengan ánimos y estén compactos en el amor mutuo, para conseguir la plena convicción que da el comprender y que capten el misterio de Dios. Este misterio es Cristo, en quien están encerrados todos los tesoros del saber y el conocer. Palabra de Dios.

46


Salmo responsorial Sal 61R/. De Dios viene mi salvación y mi gloria.

Descansa en Dios, alma mía, porque él es mi esperanza; sólo él es mi roca y mi salvación, mi alcázar; no vacilaré. R/.

Pueblo suyo, confía en él, desahoga ante él su corazón, que Dios es nuestro refugio. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 6-11 Un sábado, entró Jesús en la sinagoga a enseñar. Había allí un hombre

que tenía parálisis en el brazo derecho. Los letrados y los fariseos estaban al acecho para ver si curaba en sábado, y encontrar de qué acusarlo.

Pero él, sabiendo lo que pensaban, dijo al hombre del brazo paralítico: Levántate y ponte ahí en medio. Él se levantó y se quedó en pie.

Jesús les dijo: Les voy a hacer una pregunta: ¿Qué está permitido en sábado?, ¿hacer el bien o el mal, salvar a uno o dejarlo morir? Y, echando en torno una mirada a todos, le dijo al hombre: “Extiende el brazo”.

Él lo hizo y su brazo quedó restablecido. Ellos se pusieron furiosos y discutían qué había que hacer con Jesús. Palabra del Señor

Meditación

En todas las celebraciones de la Eucaristía, cuando el sacerdote o los acólitos preparan el cáliz, añaden unas gotitas de agua al vino del cáliz, solo unos gotitas. El gesto significa lo que aportamos nosotros, la humanidad entera, a la sangre, a la salvación de Cristo. La sangre de Cristo tiene poder y valor para salvar a este mundo y a todos los posibles mundos, pero Cristo cuenta con nosotros para la salvación. Así podremos entender también las palabras de Pablo en la primera lectura: “Me alegro de sufrir por ustedes: así completo en mi carne los dolores de Cristo”.

La misión primera de Pablo es la evangelización, hacer presente la persona de Cristo en todo el mundo, para ser aceptada por quienes le escuchan. Esta tarea le lleva al sufrimiento; él lo acepta como parte de la propia misión.

También nosotros y nosotras tenemos la misión de evangelizar. Pablo se nos presenta como testigo; también en nuestras comunidades y sectores tenemos ejemplos de hermanas y hermanos que dedican tiempo, esfuerzo, recursos y hasta sufrimientos por hacer presente a Cristo en quienes lo necesitan. Sigamos esos ejemplos.

El evangelio continúa con el enfrentamiento de Jesús con los fariseos y la gente entendida en la ley. Nuevamente Jesús les hace callar poniendo la caridad, el amor, la acogida, la hospitalidad, el cariño a los demás, a los enfermos, por encima de todas las leyes y de todas las normas religiosas. Jesús no critica la ley del sábado, es más, ya hemos visto estos días anteriores cómo trata de cumplirla. Su crítica va a quien desea imponer una serie de normas inventadas, dejando de lado la preocupación por las personas

Hoy podíamos preguntarnos: Quien trabaja el domingo en un hospital ¿quebranta la ley de guardar el domingo? Quién se queda en casa a cuidar

47


a una persona enferma ¿quebranta la ley de participar en la Misa todos los domingos?

El paralítico del evangelio no le pide nada; es Jesús quien está atento a cuanto suceda a su lado para ayudar. Jesús ofrece la curación, no importa el día de la semana. Jesús junta el sábado, el día de fiesta con la caridad, con la sanidad, para que nosotros también tengamos en cuenta que el domingo es el día especial para el Señor y para los demás. No podemos separar la comunión con Dios de la comunión con los hermanos y hermanas.

Con su actitud de ir a la sinagoga a orar y a sanar, Jesús nos da a entender que nuestros días de fiesta, nuestros domingos son días de orar, ir a la Eucaristía y de sanar heridas, de preocuparnos por los más necesitados. Hagamos que los domingos se tengan muy presentes a los enfermos en las Eucaristías. Y no perdamos la costumbre de ser hospitalarios con toda la familia, reuniéndola en esos días de fiesta.

8 Fiesta: Natividad de la Santísima Virgen María

Martes Azul o Blanco

Lectura del profeta Miqueas 5,1-4ª Así dice el Señor: “Pero tú, Belén de Éfrata, pequeña entre las aldeas

de Judá, de ti saldrá el jefe de Israel. Su origen es desde lo antiguo, de tiempo inmemorial. Los entrega hasta el tiempo en que la madre dé a luz, y el resto de sus hermanos retornará a los hijos de Israel. En pie, pastoreará con la fuerza del Señor, por el nombre glorioso del Señor, su Dios. Habitarán tranquilos, porque se mostrará grande hasta los confines de la tierra, y éste será nuestra paz.” Palabra de Dios

(O Esta lectura de romanos, a elegir entre una de las dos)

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 8, 28-30 Hermanos: Sabemos que a los que aman a Dios todo les sirve para el

bien: a los que ha llamado conforme a su designio. A los que había escogido, Dios los predestinó a ser imagen de su Hijo,

para que él fuera el primogénito de muchos hermanos. A los que predestinó, los llamó; a los que llamó, los justificó; a los que

justificó, los glorificó. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 12R/ “Desbordo de gozo con el Señor.”

Porque yo confío en tu misericordia: / alegra mi corazón con tu auxilio. R. Y cantaré al Señor por el bien que me ha hecho. R.

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 1,1-16.18-23 Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán. Abrahán

engendró a Isaac, Isaac a Jacob, Jacob a Judá y a sus hermanos. Judá

48


engendró, de Tamar, a Farés y a Zará, Farés a Esrón, Esrón a Aram, Aram a Aminadab, Aminadab a Naasón, Naasón a Salmón, Salmón engendró, de Rahab, a Booz; Booz engendró, de Rut, a Obed; Obed a Jesé, Jesé engendró a David, el rey.

David, de la mujer de Urías, engendró a Salomón, Salomón a Roboam, Roboam a Abías, Abías a Asaf, Asaf a Josafat, Josafat a Joram, Joram a Ozías, Ozías a Joatán, Joatán a Acaz, Acaz a Ezequías, Ezequías engendró a Manasés, Manasés a Amós, Amos a Josías; Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando el destierro de Babilonia.

Después del destierro de Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel a Zorobabel, Zorobabel a Abiud, Abiud a Eliaquín, Eliaquín a Azor, Azor a Sadoc, Sadoc a Aquim, Aquim a Eliud, Eliud a Eleazar, Eleazar a Matán, Matán a Jacob; y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo.

El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo: “José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados.”

Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por el Profeta: “Mira: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa “Dios con nosotros”. Palabra del Señor.

Meditación

Los evangelios o la Biblia no hablan del nacimiento de la Virgen María. Podríamos recurrir a otros textos, por ejemplo a los apócrifos, donde sí aparece ese nacimiento y de maneras distintas.

Pero nosotros y nosotras, el pueblo católico no necesitamos muchos documentos para tratar de celebrar el cumpleaños de nuestra madre María.

¿Si no aparece en la Biblia, por qué celebramos este nacimiento? Porque queremos celebrar todos los años el cumpleaños de la Madre. Sería como si una mamá campesina, que ha dado la vida por sus hijos, ha conseguido hacerlos buenos profesionales, y no tiene acta de nacimiento, ni siquiera está inscrita, nadie sabe cuándo nació… Los hijos deciden poner una fecha fija para celebrar todos los años una gran fiesta por esa mamá tan extraordinaria que les dio el Señor.

Este es nuestro caso. Esta fiesta es de mucha alegría, así nos lo demuestran las lectura elegidas para hoy, y así la presentan todas las oraciones de la Eucaristía.

María no es Dios; María es su madre. María no es la salvadora, es la “Aurora de la Salvación”; es decir, es el amanecer, el comienzo de la salvación. De todos los santos celebramos el día de su muerte; solo de María y de san Juan Bautista celebramos su nacimiento; y lo hacemos

49


porque ellos dos tienen una misión importante en la salvación de la humanidad. Juan es quien presentó a Cristo en público; María es quien lo trajo al mundo.

Como primera lectura podemos elegir entre el profeta Miqueas o la carta a los Romanos; por no saber cuál se lee no las comentamos. Nos detenemos un poco en el evangelio de hoy.

Presenta dos partes, una primera, aburrida, difícil, demasiados nombres ¿no sería bueno suprimir esa parte? No. Debemos leerla porque esa cantidad de nombres nos dicen que Cristo nace de la raza humana; sus antepasados tienen nombre, familia e historia. Cristo es humano por completo, es Dios encarnado, inculturado, y lo es hace en un pueblo, en una familia y de unos antepasados concretos.

La segunda parte nos habla del nacimiento de Cristo. Esto está puesto para decirnos que la importancia de María no es por ella, sino por su Hijo. La Madre será importante en tanto en cuanto nos lleve a encontrarnos con Cristo. Y esta fiesta del nacimiento o del cumpleaños de María debe llevarnos a tener a Cristo en el centro de la vida.

Celebremos con fe, con devoción y agradecimiento este nacimiento de la Madre de Dios y nuestra Madre.

9 Feria o memoria libre, San Pedro Claver, Presbítero

Miércoles Verde o Blanco

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 3, 1-11: Hermanos: Ya que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de allá

arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios; aspiren a los bienes de arriba, no a los de la tierra. Porque han muerto; y su vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también ustedes aparecerán, juntamente con él, en gloria.

En consecuencia, den muerte a todo lo terreno que hay en ustedes: la fornicación, la impureza, la pasión, la codicia, y la avaricia, que es una idolatría. Eso es lo que atrae el castigo de Dios sobre los desobedientes.

Entre ellos andaban también ustedes, cuando vivían de esa manera; ahora en cambio, desháganse de todo eso: ira, coraje, maldad, calumnias y groserías, ¡fuera de su boca! No sigan engañándose unos a otros.

Despójense de la vieja condición humana, con sus obras, y revístanse de la nueva condición, que se va renovando como imagen de su creador, hasta llegar a conocerlo.

En este orden nuevo no hay distinción entre judíos y gentiles, circuncisos e incircuncisos, bárbaros y escitas, esclavos y libres; porque Cristo es la síntesis de todo y está en todos. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 144R/. El Señor es bueno con todos.

Día tras día te bendeciré y alabaré tu nombre por siempre jamás. Grande es el Señor y merece toda alabanza, es incalculable su grandeza. R/.

50


Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/.

Explicando tus hazañas a los hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 20-26 En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos hacia sus discípulos, les dijo:

Dichosos los pobres, porque suyo es el Reino de Dios. Dichosos los que ahora tienen hambre, porque quedarán saciados.

Dichosos los que ahora lloran, porque reirán. Dichosos ustedes cuando les odien los hombres, y les excluyan, y les

insulten y proscriban su nombre como infame, por causa del Hijo del Hombre. Alégrense ese día y salten de gozo: porque su recompensa será grande en el cielo. Eso es lo que hacían sus padres con los profetas. Pero, ¡Ay de ustedes, los ricos, porque ya tienen su consuelo! ¡Ay de ustedes, los que están saciados, porque tendrán hambre!

¡Ay de los que ahora ríen, porque harán duelo y llorarán! ¡Ay si todo el mundo habla bien de ustedes! Eso es lo que hacían sus

padres con los falsos profetas. Palabra del Señor.

Meditación

En los días anteriores, la carta a los Colosenses nos ha hablado de la incorporación a Cristo, del “encuentro personal con Cristo”. Hoy nos habla de las consecuencias de ese encuentro con Cristo: Debemos ser “una criatura nueva”.

Acostumbramos a decir: estamos bautizados, somos creyentes, somos católicos, por tanto se da por supuesto ese encuentro con Cristo. Si es así, si Cristo es el centro de nuestras vidas, se debe notar porque vivimos lejos de las dos listas de pecados puestos por Pablo en la lectura de hoy; una lista se refiere a pecados personales, la otra a pecados contra la caridad. Repasemos si estamos unidos a Cristo porque vivimos lejos y enfrentados a: “la fornicación, la impureza, la pasión, la codicia, y la avaricia, que es una idolatría” (estos serían los pecados íntimos, que realizamos en la propia persona); “ira, coraje, maldad, calumnias y groserías, ¡fuera de su boca! No sigan engañándose unos a otros”, (estos se refieren a los pecados contra los demás, al trato con las otras personas). A esta última lista de Pablo, en este año 2015 añadiríamos el de la falta de solidaridad y, en el mes de septiembre pondríamos también el de la falta de hospitalidad.

¿Somos hombres y mujeres nuevos y nuevas? Aspiremos a los bienes de arriba. Y si no lo hemos hecho, todavía estamos a tiempo de convertirnos y cambiar, porque Pablo nos invita y anima a: “Despójense de la vieja condición humana, con sus obras, y revístanse de la nueva condición”. En el Evangelio hemos leído las Bienaventuranzas contadas por San Lucas, son un poco más cortas que las de Mateo, pero nos dan para una seria y larga reflexión.

Nos pone cuatro bienaventuranzas y cuatro malaventuranzas. Podíamos pensar ¡qué bien, Jesús nos señala el camino de la felicidad! En

51


este mundo en el cual se habla tanto de felicidad y se trata de conseguirla de todas formas y a cualquier precio, necesitábamos alguien con autoridad para señalar el camino.

Pero también, en el mundo de hoy, leer estas bienaventuranzas de Lucas es llevarse un susto, porque nos presentan un camino en contradicción con la felicidad propuesta por el mundo en que vivimos. La sociedad nos dice: debes tener mucho de todo, sé el primero, compite a toda costa, no permitas que hablen mal de ti, ríe, goza todo lo posible… Y Cristo nos habla de la felicidad en la pobreza, en la humildad, en la necesidad, en la persecución. Y esto nos conecta con la primera lectura: ¿buscamos los bienes de arriba, los de Cristo, o los de abajo, los del mundo?

Queremos conseguir la felicidad a nuestro estilo, por nuestro camino y a nuestro modo. Así nos va. Es hora de ser pobres y estar del lado de los pobres, de quienes lloran, sufren y están pasando necesidad. Estar de su parte es luchar con ellos y ellas para salir de esa situación. Busquemos la felicidad construyéndola en la gente que la necesita más que nosotros.

10 Feria

Jueves Verde38º Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Mons. Freddy Antonio

de Jesús Bretón Martínez, Arzobispo de Santiago de los Caballeros

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 3, 12-17 Hermanos: Como pueblo elegido de Dios, pueblo sacro y amado, sea

su uniforme: la misericordia entrañable, la bondad, la humildad, la dulzura, la comprensión. Sobrellévense mutuamente y perdónense, cuando alguno tenga quejas contra otro.

El Señor les ha perdonado: hagan ustedes lo mismo. Y por encima de todo esto, el amor, que es el ceñidor de la unidad

consumada. Que la paz de Cristo actúe de árbitro en su corazón: a ella han sido convocados, en un solo cuerpo.

Y celebren la Acción de Gracias: la Palabra de Cristo habite entre ustedes en toda su riqueza; enséñense unos a otros con toda sabiduría; exhórtense mutuamente. Canten a Dios, denle gracias de corazón, con salmos, himnos y cánticos inspirados.

Y todo lo que de palabra o de obra realicen, sea todo en nombre de Jesús, ofreciendo la Acción de Gracias a Dios Padre por medio de él. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 150R/. Todo ser que alienta alabe al Señor.

Alaben al Señor en su templo, alábenlo en su fuerte firmamento. Alábenlo por sus obras magníficas, alábenlo por su inmensa grandeza. R/.

Alábenlo tocando trompetas, alábenlo con arpas y cítaras, alábenlo con tambores y danzas, alábenlo con trompas y flautas. R/.

Alábenlo con platillos sonoros, alábenlo con platillos vibrantes. Todo ser que alienta alabe al Señor. R/.

52


Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 27-38 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: A los que me escuchan les

digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que les odian, bendigan a los que les maldicen, oren por los que les injurian.

Al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra; al que te quite la capa, déjale también la túnica. A quien te pide, dale; al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames. Traten a los demás como quieren que ellos les traten.

Pues, si aman sólo a los que les aman, ¿qué mérito tienen? También los pecadores aman a los que los aman. Y si hacen bien sólo a los que les hacen bien, ¿qué mérito tienen? También los pecadores lo hacen.

Y si prestan sólo cuando esperan cobrar, ¿qué mérito tienen? También los pecadores prestan a otros pecadores con intención de cobrárselo. ¡No! Amen a sus enemigos, hagan el bien y presten sin esperar nada: tendrán un gran premio y serán hijos del Altísimo, que es bueno con los malvados y desagradecidos.

Sean compasivos como su Padre es compasivo; no juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados; den y se les dará: les verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que usen la usarán con ustedes. Palabra de Dios.

Meditación

Hoy, las dos lecturas se han puesto de acuerdo en ser muy exigentes, sobre todo en el tema del amor y la caridad.

Pablo nos presenta un programa de vida para todo cristiano y cristiana. Su programa habla de nuestra relación con Dios y con los demás, aquello del mandamiento principal.

Con Dios: primero escuchar su Palabra que debe habitar en nosotros; debemos ser agradecidos, darle gracias, parece que eso de “Celebrar la Acción de Gracias” es una referencia directa a la Eucaristía; también se nos invita a orar con los salmos, con cantos y con alabanzas; y debemos honrar a Dios con las acciones, con la vida, porque todo lo que hagamos, de palabra o de obra, debe ser en el nombre de Jesús.

Con los demás: comenzando por los de más cerca; se nos invita a ser misericordiosos, comprensivos, amables y con capacidad de perdón. Lo haremos porque Dios ya lo ha hecho por nosotros.Todo esto sería un buen programa para el día de hoy y para todos los días.En esta misma línea del amor está todo el evangelio de hoy. Nos presenta cuatro escalas del amor:1ª. La humana, la más baja, debemos amar, tratar a los demás como

queremos que nos traten a nosotros, y usar con los demás la medida que deseamos usen con nosotros. Esta es la más baja, ¿la estamos cumpliendo? ¿Desearíamos que hablaran de nosotros como hablamos de los demás, como pensamos de los demás…?

2ª. Actuar mejor que quienes no creen en Dios. El cristiano debe diferenciarse del no creyente por el amor, porque es capaz de amar sin esperar recompensa, esto sería la solidaridad.

53


3ª. Hacerlo porque “somos hijos del Altísimo”. El ser hijos de Dios nos lleva a responder con amor a los demás hijos de Dios. Además, esto nos proporciona un tesoro en el cielo. Las obras de amor y caridad son parte del tesoro a prueba de la polilla ni el comején.

4ª. Sean compasivos como el Padre es compasivo. Bueno, esto es un ideal, una utopía; nunca podremos llegar al amor de Dios. Jesús nos pide tener este ideal tan alto para seguir superándonos siempre. Nunca amaremos suficiente. Ayer las bienaventuranzas, hoy el ideal del amor. Para Jesús lo central es la relación con los demás.

Este párrafo del evangelio lo entendemos bien; no se trata de conocimiento. Nos cuesta cumplirlo, arreglar nuestra vida según estas palabras y enseñanzas. Después de escuchar estas palabras deberíamos revisar y cambiar nuestra relación con los demás, comenzando por los de cerca, la familia, el trabajo, la universidad, la escuela, el campo, el sector, la comunidad. No podemos seguir considerándonos buenos cristianos y cristianas si no hacemos algo por cumplir estas palabras de Jesús.

11 Feria

Viernes Verde

Comienzo de la primera carta de San Pablo a Timoteo 1, 12. 12-14 Pablo, apóstol de Cristo Jesús por disposición de Dios nuestro salvador

y de Jesucristo nuestra esperanza, a Timoteo, verdadero hijo en la fe. Te deseo la gracia, la misericordia y la paz de Dios Padre y de Cristo Jesús Señor nuestro. Doy gracias a Cristo Jesús nuestro Señor que me hizo capaz, se fió de mí y me confió este ministerio.

Eso que yo antes era un blasfemo, un perseguidor y un violento. Pero Dios tuvo compasión de mí, porque yo no era creyente y no sabía lo que hacía. Dios derrochó su gracia en mí, dándome la fe y el amor cristiano. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 15R/. Tú, Señor, eres el lote de mi heredad

Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti; yo digo al Señor: “Tú eres mi bien. El Señor es el lote de mi heredad y mi cáliz, mi suerte está en tu mano. R/.

Bendeciré al Señor que me aconseja, hasta de noche me instruye internamen-te. Tengo siempre presente al Señor, con él a mi derecha no vacilaré. R/.

Me enseñarás el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia, de alegría perpetua a tu derecha. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 39-42 En aquel tiempo, ponía Jesús a sus discípulos esta comparación: ¿Acaso

puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? Un discípulo no es más que su maestro, si bien cuando termine su aprendizaje, será como su maestro. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: “hermano, déjame que te saque la mota del ojo”, sin fijarte en la viga que llevas

54


en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la mota del ojo de tu hermano. Palabra de Dios.

Meditación

Hoy, mañana y toda la próxima semana leeremos como primera lectura la primera carta de Pablo a su discípulo y amigo Timoteo. Pablo le dedica unas palabras muy afectuosas, lo llama hijo suyo en la fe y lo saluda con unos deseos de gracia, misericordia y paz de Dios para la vida del discípulo.

Después Pablo pasa a dar testimonio de su vida. Algo muy de moda en nuestros retiros, charlas y reuniones, llamamos a alguien para dar testimonio de su vida, de su conversión, de su estado anterior y de cómo se encuentra ahora. Pues bien, Pablo hace eso mismo para reconocer la bondad y la grandeza de Dios que lo eligió a pesar de sus pecados.

“Dios tuvo compasión de mí”, lo dice Pablo, y lo debemos decir cada uno de nosotros y nosotras; de verdad, Dios ha manifestado, y lo sigue haciendo, su compasión con cada uno de nosotros, porque le fallamos, le volvemos a fallar y él no nos deja, no nos abandona, se sigue fiando de nosotros y nos sigue llamando para ser apóstoles, como lo hizo con Pablo y Timoteo. El evangelio es continuación del de ayer, y lo podemos presentar como una puesta en práctica de alguna de las enseñanzas de los versículos de ayer.

Muchos de nosotros y nosotras, gracias a Dios, tenemos un ministerio, un servicio dentro de la comunidad; estamos llamados por Dios para cumplir una mi-sión; y si no la tenemos en la comunidad eclesial la podemos tener en la civil, en la junta de campesinos, o de vecinos o del condominio o de padres de la escuela; y la tenemos dentro de la familia. Estamos llamados a aconsejar a otras personas.

Por un lado, como decíamos arriba, somos capaces de dar testimonio del cambio hecho por Dios en nuestras vidas; por otro lado somos capaces de seguir escondiendo nuestros pecados, nuestros defectos y fallos… mientras damos consejos a los demás: el ciego que guía a otro ciego.

También nos fijamos en el defecto, el fallo de los demás, y los nuestros los disimulamos, los escondemos. Esto puede ser una puesta en práctica de aquello del evangelio de ayer, de tratar y medir a los demás como deseamos ser tratados y medidos. ¡Cuántos pensamientos, y cuántas críticas a los defectos de los demás! ¿Deseamos que piensen y hablen de nosotros y nosotras como lo hacemos de los demás?

Pero tenemos remedio, la Palabra de Dios viene a animarnos, a invitarnos al cambio a la mejoría. Si tratamos a los demás como deseamos ser tratados, seremos más caritativos, solidarios, acogedores, hospitalarios y además seremos más felices y estaremos ayudando a la felicidad de los demás.

12 Feria o memoria libre, El Santísimo nombre de María

Sábado Verde o Blanco

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 1, 15-17 Querido hermano: Pueden fiarse y aceptar sin reserva lo que les digo:

Que Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, y yo soy el primero.

55


Y por eso se compadeció de mí: para que en mí, el primero, mostrara Cristo toda su paciencia, y pudiera ser modelo de todos los que creerán en él y tendrán vida eterna. Al rey de los siglos, inmortal, invisible, único Dios, honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 112R/. Bendito sea el nombre del Señor ahora y por siempre.

Alaben, siervos del Señor, alaben el nombre del Señor. Bendito sea el nombre del Señor por siempre. R/.

De la salida del sol hasta el ocaso, alabado sea el nombre del Señor. El Señor se eleva sobre todos los pueblos, su gloria sobre el cielo. R/.

¿Quién como el Señor, Dios nuestro, que se abaja para mirar, al cielo y a la tierra? Levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 6, 43-49 En aquel tiempo, decía Jesús a sus discípulos: No hay árbol sano que dé

fruto dañado, ni árbol dañado que dé fruto sano. Cada árbol se conoce por su fruto: porque no se cosechan higos de las

zarzas, ni se vendimian racimos de los espinos. El que es bueno, de la bondad que atesora en su corazón saca el bien, y el que es malo, de la maldad saca el mal; porque lo que rebosa del corazón, lo habla la boca.

¿Por qué me llaman “Señor, Señor”, y no hacen lo que digo? El que se acerca a mí, escucha mis palabras y las pone por obra, les voy a decir a quién se parece: se parece a uno que edificaba una casa: cavó, ahondó y puso los cimientos sobre roca; vino una crecida, arremetió el río contra aquella casa, y no pudo tambalearla, porque estaba sólidamente construida.

El que escucha y no pone por obra se parece a uno que edificó una casa sobre tierra, sin cimiento; arremetió contra ella el río, y enseguida se derrumbó desplomándose. Palabra del Señor.

Meditación

En la primera lectura, Pablo continúa con el testimonio de su vida: se considera el primero y principal pecador. ¿Nos consideramos pecadores, o más bien consideramos pecadores a los demás y nosotros somos los buenos? Tal vez en nuestro interior nos consideramos malos o malas, y reconocemos nuestros errores y pecados, pero no los confesamos ante los demás, sino que los disimulamos y escondemos. No queremos que nos conozcan como somos.

Sin embargo Pablo no se reconoce pecador para quedar mal él, sino para resaltar la compasión y misericordia de Dios que se fijó en él. Si no aceptamos nuestros pecados, no estamos dejando actuar el amor y la misericordia de Dios en nuestras vidas, en nuestro mundo.

Dejemos que Dios actúe en nosotros, para ello reconozcamos nuestras faltas y pecados, dejémonos perdonar por Dios, así nos podremos presentar como modelos ante los demás, en la familia, en el trabajo, en la comunidad o en la escuela…

56


Jesús nos pone dos ejemplos para hacernos revisar la vida: el del árbol con sus frutos y el de los cimientos del edificio.

El árbol se conoce por sus frutos: una mata de mangos no puede dar sino mangos y una de cerezas no va a dar aguacates: pero puede dar buenos o malos mango y buenas o malas cerezas.

La bondad o maldad de los frutos no está en la apariencia sino en la realidad. Podemos ver un bonito mango, está madurado, nos lo vamos a comer y no tiene sabor, es todo fibras y está llene de gusanos… la apariencia nos ha engañado. Esta es la comparación puesta por Jesús para revisar nuestras vidas. Dejemos de lado las apariencias y demos buenos frutos; frutos sanos por dentro y por fuera.

Parecida es la comparación de la casa: puede estar muy bonita, bien pintada, muchos tejados… pero ¿aguantará un ciclón?; dependerá de los cimientos y de la cantidad de hierro y cemento que le hayan puesto en la construcción, no sea que pase como algunas obras del gobierno… Y así es nuestra vida, debemos mirar los cimientos, si estamos fundados en Jesús o ponemos las bases en las modas, los intereses, los propios gustos.

Necesitamos hacer una casa fuerte, acogedora, hospitalaria y además bonita. Porque también lo que se ve debe atraer a los demás.

¿Dónde tenemos el corazón? Si nuestra vida tiene sentido, si Cristo es importante en ella, si estamos alegres, con esperanza, con ánimo, las palabras servirán para animar a los demás. De un corazón amargado, sin esperanza no pueden salir muchas palabras positivas. ¿Qué sale de nuestra boca? Es una fotografía de nuestro corazón.

13 Domingo XXIV del Tiempo Ordinario

IV Semana Liturgia de las Horas Verde

Carguemos con nuestra cruz y ayudemos con las cruces de los demás

Orientaciones para esta celebración: Como en todos los domingos de este mes, hacemos una acogida especial de todas las personas que acuden a la celebración. También todos los domingos de este mes llevamos en procesión la Biblia y la colocamos en el lugar preparado para ella. En la procesión de entrada ponemos a dos personas que cargan cada una con una cruz; la primera va con la cruz arrastrándola por el suelo, con la cara triste y protestando; la otra persona lleva la cruz con naturalidad, con pesar pero con la cara normal, pero sin tristeza. Se llevan los carteles del lema del domingo y del mes.

Monición ambientalHermanos y hermanas: Nos reúne el Señor en este Domingo de

Septiembre para escuchar su Palabra que nos invita a ser hospitalarios con los emigrantes y los detenidos en las cárceles.

57


Hoy nos invita a recibirlo como Mesías y Siervo de Dios que entrega todo su ser por amor al Padre y a nosotros. Pero, quiere que nosotros acojamos su Evangelio todo entero sin acotejo alguno, sin comodidades y sin adaptarlo a nuestros esquemas y a nuestra huida al sufrimiento.

Estamos llamados a cargar con nuestra cruz y a darnos por entero como Jesús. Esto nos posibilita a ser hospitalarios con los demás acogiéndolos con sus propias cruces que muchas veces los lleva a la desesperación.

Iniciamos la celebración siendo hospitalarios con Cristo, a quien recibimos a través de su ministro.

Primera lectura: Isaías 50, 5-9aEl Siervo de Yahvé en medio el sufrimiento confiesa que Dios es su

defensor y que nunca lo abandonará. Por eso, acoge todo seguro de su victoria. Escuchemos al profeta.

Lectura del libro del profeta Isaías El Señor me abrió el oído; yo no resistí ni me eché atrás: ofrecí la espalda

a los que me apaleaban, las mejillas a los que mesaban mi barba; no me tapé el rostro ante ultrajes ni salivazos.

El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado.

Tengo cerca a mi defensor, ¿quién pleiteará contra mí? Comparezcamos juntos. ¿Quién tiene algo contra mí? Que se me acerque. Miren, el Señor me ayuda, ¿quién me condenará? Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 114,R/. Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida.

Amo al Señor, porque escucha mi voz suplicante, porque inclina su oído hacia mí el día que lo invoco. R/.

Me envolvían redes de muerte, me alcanzaron los lazos del abismo, caí en tristeza y angustia. Invoqué el nombre del Señor: “Señor, salva mi vida.” R/. EL Señor es benigno y justo, nuestro Dios es compasivo; el Señor guarda a los sencillos: estando yo sin fuerzas, me salvó. R/.

Arrancó mi alma de la muerte, mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída. Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida. R/.

Segunda lectura: 2, 14-18La fe es conocimiento y puesta en práctica, eso nos dice el apóstol

Santiago. Sobre todo puesta en práctica en el amor, la acogida, en ser hospitalarios con los más necesitados y necesitadas. La fe nos exige responder a las necesidades concretas de los demás y de la Patria.

Lectura de la carta del apóstol Santiago ¿De qué le sirve a uno, hermanos míos, decir que tiene fe, si no tiene obras?

¿Es que esa fe lo podrá salvar? Supongamos que un hermano o una hermana andan sin ropa y faltos del alimento diario, y que uno de ustedes les dice: “Dios les ampare; abríguense y llénense el estómago”, y no les dan lo necesario para

58


el cuerpo; ¿de qué sirve? Esto pasa con la fe: si no tiene obras, por sí sola está muerta. Alguno dirá: “Tú tienes fe, y yo tengo obras. Enséñame tu fe sin obras, y yo, por las obras, te probaré mi fe.” Palabra de Dios.

Aleluya Ga 6,14 Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz del Señor, en la cual el

mundo está crucificado para mí, y yo para el mundo.

Evangelio: Marcos 8, 27-35Pedro fue capaz por obra del Espíritu de reconocer a Jesús como Mesías.

Pero no supo acoger a Jesús cuando su idea de Mesías chocó con el anuncio del sufrimiento y de la cruz. También, nos puede pasar a nosotros que acogemos a Jesús en lo que nos conviene, pero nos resistimos cuando se trata de tomar nuestra cruz y perder su vida por El.

Lectura del santo evangelio según san Marcos En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se dirigieron a las aldeas de

Cesarea de Felipe; por el camino, preguntó a sus discípulos: “¿Quién dice la gente que soy yo?” Ellos le contestaron: “Unos, Juan Bautista; otros, Elías; y otros, uno de los profetas.”

EL les preguntó: “Y ustedes, ¿quién dicen que soy?” Pedro le contestó: “Tú eres el Mesías.” Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y empezó a instruirlos: “EL Hijo del hombre tiene que padecer mucho,

tiene que ser condenado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar a los tres días.”

Se lo explicaba con toda claridad. Entonces Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo. Jesús se volvió y, de cara a los discípulos, increpó a Pedro: “¡Quítate de mi vista, Satanás! ¡Tú piensas como los hombres, no como Dios!”

Después llamó a la gente y a sus discípulos, y les dijo: “El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Miren, el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mí y por el Evangelio la salvará.” Palabra del Señor.

Oración de los fielesQuien preside la celebración: Somos necesitados, sólo la presencia de

Dios nos dará la fuerza para superar las dificultades, por eso le presentamos nuestras oraciones. A cada petición respondemos: Padre, que nuestra fe se convierta en obras1. Por el Papa Francisco, para que el Señor le conceda salud y la fuerza del

Espíritu le lleve a conseguir una Iglesia más cercana y comprometida con el pueblo. Oremos.

2. Por nuestra Iglesia de República Dominicana, para que echemos adelante con el Plan Pastoral y consigamos una fe viva manifestada en obras. Oremos.

3. Por nuestra patria, para que todos nosotros y nosotras, y quienes trabajemos por quitar la violencia, la corrupción, la impunidad y la desigualdad. Oremos.

59


4. Por las Laicas Consagradas, para que vivan la virtud de la hospitalidad dentro de sus carismas, y se abran a acoger a los más pobres y necesitados de la sociedad. Oremos.

5. Que Cristo sea el centro de nuestra vida y nos impulse a obrar según sus ejemplos y mandatos. Oremos.

6. Para que nuestros sectores y comunidades sean hospitalarios, acogiendo y saliendo al encuentro de las personas faltas de fe, de confianza, de compañía y de recursos materiales. Oremos.

7. Para que como parte de las obras de la fe seamos defensores, conservadores y cuidadores de la naturaleza que Dios nos ha regalado. Oremos.

Quien preside: Padre de la vida, danos tu gracia para que la fe nos lleve a defender la vida digna para todos y todas. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.

14 Fiesta: Exaltación de la Santa Cruz

Lunes Rojo35º Aniversario de la Dedicación de la Catedral Santa Cruz,

de la Diócesis de Mao- Montecristi.

Lectura del libro de los Números 21,4b-9En aquellos días, el pueblo estaba extenuado del camino, y habló contra

Dios y contra Moisés: “¿Por qué nos has sacado de Egipto para morir en el desierto? No tenemos ni pan ni agua, y nos da náusea ese pan sin cuerpo.” El Señor envió contra el pueblo serpientes venenosas, que los mordían, y murieron muchos israelitas.

Entonces el pueblo acudió a Moisés, diciendo: “Hemos pecado hablando contra el Señor y contra ti; reza al Señor para que aparte de nosotros las serpientes.” Moisés rezó al Señor por el pueblo, y el Señor le respondió: “Haz una serpiente venenosa y colócala en un estandarte: los mordidos de serpiente quedarán sanos al mirarla.” Moisés hizo una serpiente de bronce y la colocó en un estandarte. Cuando una serpiente mordía a uno, él miraba a la serpiente de bronce y quedaba curado. Palabra de Dios

Salmo Responsorial: 77R/ “No olviden las acciones del Señor.”

Escucha, pueblo mío, mi enseñanza, inclinen el oído a las palabras de mi boca: que voy a abrir mi boca a las sentencias, para que broten los enigmas del pasado. R.

Cuando los hacía morir, lo buscaban, y madrugaban para volverse hacia Dios; se acordaban de que Dios era su roca, el Dios Altísimo su redentor. R.

Lo adulaban con sus bocas, pero sus lenguas mentían: su corazón no era sincero con él, ni eran fieles a su alianza. R.

Él, en cambio, sentía lástima, perdonaba la culpa y no los destruía: una y otra vez reprimió su cólera, y no despertaba todo su furor. R.

60


Lectura de la Carta de San Pablo de los Filipenses 2,6-11Cristo a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de

Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz.

Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el “Nombre-sobre-todo-nombre”; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre. Palabra de Dios.

Lectura del santo Evangelio según san Juan 3,13-17En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo: “Nadie ha subido al cielo, sino el

que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen el él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.” Palabra del Señor.

Meditación

En este día de la Santa Cruz, la liturgia universal aconseja leer dos lecturas; sin embargo, el Calendario Litúrgico de la Conferencia del Episcopado Dominicano aconseja leer las tres. Por tanto las debemos leer, y nos hará bien, porque son complementarias para entender mejor esta fiesta.

Muchos de nosotros y nosotras llevamos una cruz en el pecho, en el bolsillo, en el carro… Es que la cruz nos idéntica con Cristo. Si recordamos bien, en el Evangelio de ayer Cristo nos invitaba a cargar con la cruz de cada día; no se refería a llevar esa cruz en el pecho, sino a ser capaces de vivir la fe en su plenitud y llevar adelante los sufrimientos de la vida dé cada día. Ese signo de la cruz nos identifica como seguidores de quien murió en la Cruz, como seguidores de Cristo. Por desgracia, muchas otras personas llevan la cruz en el pecho en espectáculos indignos, en escenas de muerte y destrucción; piensan que la cruz les va a proteger de cualquier mal, como si fuera algo mágico. No, el signo de la cruz no es magia, no salva de nada, quien salva, solamente es quien murió en ella.

La primera lectura nos presenta la fe del pueblo que creía en la Palabra de Dios presentada por Moisés, quien mire ese signo de la serpiente de bronce, y lo haga con fe, se curará, no morirá. Ese signo lo asume el mismo Jesús en el evangelio de hoy, y lo transforma; ya no hay se trata de mirar a una serpiente de bronce en un palo, miramos a Cristo, elevado en la cruz, quien murió en la cruz para traernos la salvación.

Hoy es un buen día para aprender a “mirar” la cruz, a creer en él, clavado en ella. Debemos entender el misterio de la cruz, el de Cristo y el de cada uno. La fiesta de hoy nos recuerda el triunfo del amor sobre el pecado; hoy expresamos nuestro agradecimiento a Cristo que nos salvó en la cruz haciéndose solidario con nuestros sufrimientos, debilidades y

61


pecados; hoy celebramos la esperanza del triunfo de la cruz sobre el mal, y sobre nuestros propios momento de cruz.

No adoramos la cruz, no nos postramos ante un pedazo de madera, de metal, sino que postramos la rodilla, como nos dice la segunda lectura, ante quien murió en ella, ante quien en la cruz nos trajo la salvación. Por eso proclamamos “Jesucristo es Señor para gloria de Dios Padre”.

15 Memoria obligatoria: Nuestra Señora, la Virgen de los Dolores

Martes Blanco

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 3, 1-13 Querido hermano: Está muy bien dicho que quien aspira a ser obispo no

es poco lo que desea, porque el obispo tiene que ser irreprochable, fiel a su mujer, sensato, equilibrado, bien educado, hospitalario, hábil para enseñar, no dado al vino ni amigo de reyertas, comprensivo, no agresivo ni interesado. Tiene que gobernar bien su propia casa y hacerse obedecer de sus hijos con dignidad. Uno que no sabe gobernar su casa ¿cómo va a cuidar de una asamblea de Dios? Que no sea recién convertido, por si se le sube a la cabeza y lo condenan como al diablo. Se requiere, además, que tenga buena fama entre los de fuera para evitar el descrédito y que lo atrape el diablo.

También los diáconos tienen que ser respetables, hombres de palabra, no aficionados a beber mucho ni a negocios sucios, conservando la fe revelada con una conciencia limpia. También éstos tienen que ser probados primero, y cuando se vea que son irreprensibles, que empiecen su servicio. Las mujeres lo mismo, sean respetables, no chismosas, sensatas y de fiar en todo. Los diáconos sean fieles a su mujer y gobiernen bien sus casas y sus hijos, porque los que se hayan distinguido en el servicio progresarán y tendrán mucha libertad para exponer la fe cristiana. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 100R/. Danos, Señor, tu bondad y tu justicia

Voy a cantar la bondad y la justicia, para ti es mi música, Señor; voy a explicar el camino perfecto: ¿cuándo vendrás a mí? R/.

Andaré con rectitud de corazón dentro de mi casa; no pondré mis ojos en intenciones viles; aborrezco al que obra mal. R/.

Al que en secreto difama a su prójimo lo haré callar; ojos engreídos, corazones arrogantes, no los soportaré. R/.

Pongo mis ojos en los que son leales, ellos vivirán conmigo; el que sigue un camino perfecto, ése me servirá. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 7, 11-17 En aquel tiempo, iba Jesús camino de una ciudad llamada Naín, e iban

con él sus discípulos y mucho gentío. Cuando estaba cerca de la ciudad, resultó que sacaban a enterrar a un

muerto, hijo único de su madre, que era viuda; y un gentío considerable de la ciudad la acompañaba. Al verla el Señor, le dio lástima y le dijo: No llores.

62


Se acercó al ataúd, lo tocó (los que lo llevaban se pararon) y dijo: ¡Muchacho, a ti te lo digo, levántate! El muerto se incorporó y empezó a hablar, y Jesús se lo entregó a su madre.

Todos, sobrecogidos, daban gloria a Dios, diciendo: Un gran Profeta ha surgido entre nosotros. Dios ha visitado a su pueblo. La noticia del hecho se divulgó por toda la comarca y por Judea entera. Palabra de Dios.

Meditación

Timoteo era uno de los obispos puesto por Pablo al frente de una comunidad, en este caso de la de Éfeso. Y como le va a tocar elegir otros obispos y diáconos, le da los consejos de cómo deben ser. Hoy diríamos que Pablo “marca el perfil” de los obispos y diáconos.

Las funciones de los obispos o “inspectores” de aquellas comunidades no son las mismas que las de los obispos ahora; las de los diáconos son muy parecidas a las actuales. Llama la atención que las cualidades señaladas son las que debe tener cualquier responsable de las comunidades, sean civiles, sociales o religiosas: sensatez, equilibrio, fidelidad, buena educación, dominio de sí, comprensión, buen gobierno de su propia casa, que sean hombres de palabra, no envueltos en negocios sucios, ni “dados al vino”, sino irreprochables. Hoy en este año y en este mes añadiríamos la solidaridad y la hospitalidad como cualidades o virtudes necesarias para los dirigentes eclesiales.

Como vemos, son cualidades humanas. Nos debe quedar claro, el punto de partida de todo dirigente de Iglesia son sus facultades humanas. Si estas fallan, nunca podrá ser un buen dirigente. Un iracundo, un desequilibrado, una persona de mala educación ¿qué dirigente eclesial puede ser?

Y hoy día estas cualidades debemos aplicarlas a los catequistas, coordinadores de sectores, de comunidades, de ministerios, además de a los presbíteros, diáconos y obispos. Es un día para hacer un buen examen de conciencia partiendo de la primera lectura.

El evangelio nos presenta la resurrección de un muerto. Ese milagro lo hace Jesús al ver el dolor de la madre del difunto. Nadie se lo pide, sino que sale de Él aliviar el dolor de la mujer. Esto es lo que destaca el Evangelio.

Hoy sigue Jesús atento a las necesidades de la gente, de las comunidades, de los más necesitados y necesitadas. Y les trae el alivio, el consuelo y la respuesta a su situación. Lo hace de diferentes maneras, por ejemplo, por medio de los sacramentos. Pero lo hace por medio de las personas e instituciones. Hoy somos las manos y los pies de Jesús en nuestro mundo. Estamos llamados para ser la presencia sanadora y liberadora de Jesús en esta realidad en que nos toca vivir. Ya es hora de decir, “qué puedo hacer por mejorar la comunidad, el campo, el barrio o el país”, en vez de decir “qué mal está nuestra República”.

Cuando lo digamos, y más cuando lo hagamos, estamos haciendo presente al Señor con su respuesta sanadora.

63


16 Memoria obligatoria: San Cornelio, Papa y San Cipriano, Obispo, Mártires

Miércoles Rojo

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 3, 14-16 Querido hermano: Aunque espero ir a verte pronto, te escribo esto por

si me retraso; quiero que sepas cómo hay que conducirse en un templo de Dios, es decir, en la asamblea de Dios vivo, columna y base de la verdad.

Sin discusión, grande es el misterio que veneramos: Se manifestó como hombre, lo rehabilitó el Espíritu, se apareció a los mensajeros, se proclamó a las naciones, creyó en él el mundo, fue exaltado a la gloria. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 110, R/. Grandes son las obras del Señor. Doy gracias al Señor de todo corazón, en compañía de los rectos, en la

asamblea. Grandes son las obras del Señor, dignas de estudio para los que las aman. R/.

Esplendor y belleza son su obra, su generosidad dura por siempre; ha hecho maravillas memorables, el Señor es piadoso y clemente. R/.

El da alimento a sus fieles, recordando siempre su alianza. Mostró a su pueblo la fuerza de su obrar, dándoles la heredad de los gentiles. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 7, 31-35 En aquel tiempo, dijo el Señor: ¿A quién se parecen los hombres de

esta generación? ¿A quién los compararemos? Se parecen a unos niños, sentados en la plaza, que gritan a otros: “Tocamos la flauta y no bailan, cantamos lamentaciones y no lloran” Vino Juan el Bautista, que ni comía ni bebía, y dijeron que tenía un demonio; viene el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: “Miren qué comilón y qué borracho, amigo de recaudadores y pecadores”. Sin embargo, los discípulos de la Sabiduría le han dado la razón. Palabra del Señor.

Meditación

Pablo habla, de cómo conducirse en el templo de Dios. No habla del templo material o las capillas; en aquel tiempo no tenían ese tipo de edificios, se reunían en las casas y en los lugares donde podían hacerlo con tranquilidad. Para Pablo el templo es la comunidad. En esta lectura hace referencia a dos temas fundamentales, la comunidad y a Cristo.

El centro de la comunidad no es su dirigente, ni quienes la componen, sino Cristo que es quien la reúne, le da vida y la mantiene. La comunidad es la asamblea del Dios vivo. Por eso el enorme respeto que nos merece la comunidad. En nuestros sectores debemos tener una o más comunidades, la parroquia debe ser la “comunidad de comunidades”, es decir “la Asamblea de las Asambleas de Dios”.

Y el otro tema, repetitivo en Pablo, es Cristo, a quien lo presenta hoy como humano y divino, proclamado, venerado, creído y exaltado. Cristo, siendo Dios, es nuestro motivo de fe y de veneración.

64


El Evangelio nos pone la comparación de los niños y la música. En esta ocasión le damos dos aplicaciones:1ª La atención a los signos de los tiempos. La gente de Iglesia corre el

peligro de estar tan centrada en lo espiritual, en la “otra vida” que se olvida del mundo y de la realidad donde se desarrolla la vida. A mucha gente de la Iglesia le da igual el estado de la realidad del mundo, el país o del barrio, siguen haciendo lo mismo y orando lo mismo. Puede haber una gran fiesta o puede haber un velorio, sigue con sus prácticas y sin comprometerse mucho. La catequesis, la predicación, la misión, la liturgia… están por “encima del bien y del mal”, siempre son iguales; esto no puede ser así; por eso Cristo nos enseña a estar metidos en la realidad y a responder a la realidad. El cristiano, está en el mundo y debe contribuir en el cambio y la salvación del mundo.

2ª La participación en los trabajos y ministerios de la Iglesia o entrar en la comunidad. Nos cansamos de invitar a participar en la comunidad, en el sector, en la capilla del campo; algunas personas siempre nos dan buenas palabras y nunca participan. Lo mismo si invitamos a los ministerios o servicios comunitarios, siempre hay excusas, y “no tienen tiempo”. Ya Jesús nos avisa de la existencia de esas personas: ni bailan ni lloran. Igual sucede con los grupos sociales, las juntas de vecinos, de campesinos, de padres de la escuela… ¿no es verdad?Quienes sí están atentos a los signos de los tiempos y sí colaboran con

las comunidades, o en los grupos sociales, tenemos la misión de seguir haciéndolo, animar a las demás personas a comprometerse y a trabajar por una Iglesia inserta en la realidad y comprometida con ella.

17 Feria o memoria libre: San Roberto Belarmino, Obispo y Doctor de la Iglesia

Jueves Verde o Blanco

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 4, 12-16 Querido hermano: Nadie te desprecie por ser joven; sé tú un modelo para

los fieles, en el hablar y en la conducta, en el amor, la fe y la honradez. Mientras llego preocúpate de la lectura pública, de animar y enseñar. No descuides el don que posees, que se te concedió por indicación de

una profecía con la imposición de manos de los presbíteros. Preocúpate de esas cosas y dedícate a ellas, para que todos vean cómo adelantas.

Cuídate tú y cuida la enseñanza; sé constante; si lo haces, te salvarás a ti y a los que te escuchan. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 110R/. Grandes son las obras del Señor.

Justicia y verdad son las obras de sus manos, todos sus preceptos merecen confianza: son estables para siempre jamás, se han de cumplir con verdad y rectitud. R/.

Envió la redención a su pueblo, ratificó para siempre su alianza: su nombre es sagrado y temible. R/.

65


Primicia de la sabiduría es el temor del Señor, tienen buen juicio los que lo practican; la alabanza del Señor dura por siempre. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 7, 36-50 En aquel tiempo, un fariseo rogaba a Jesús que fuera a comer con él.

Jesús, entrando en casa del fariseo, se recostó a la mesa. Y una mujer de la ciudad, una pecadora, al enterarse de que estaba

comiendo en casa del fariseo, vino con un frasco de perfume, y, colocándose detrás junto a sus pies, llorando, se puso a regarle los pies con sus lágrimas, se los enjugaba con sus cabellos, los cubría de besos y se los ungía con el perfume.

Al ver esto, el fariseo que lo había invitado, se dijo: Si éste fuera profeta, sabría quién es esta mujer que lo está tocando y lo que es: una pecadora.

Jesús tomó la palabra y le dijo: Simón, tengo algo que decirte. El respondió: Dímelo, maestro. Jesús le dijo: Un prestamista tenía dos

deudores: uno le debía quinientos denarios y el otro cincuenta. Como no tenían con qué pagar, los perdonó a los dos. ¿Cuál de los dos lo amará más? Simón contestó: Supongo que aquel a quien le perdonó más. Jesús le dijo: Has juzgado rectamente.

Y, volviéndose a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves a esta mujer? Cuando yo entré en tu casa, no me pusiste agua para los pies; ella en cambio me ha lavado los pies con sus lágrimas y me los ha enjugado con su pelo. Tú no me besaste; ella en cambio, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies. Tú no me ungiste la cabeza con ungüento; ella en cambio me ha ungido los pies con perfume. Por eso te digo, sus muchos pecados están perdonados, porque tiene mucho amor: pero al que poco se le perdona, poco ama. Y a ella le dijo: Tus pecados están perdonados. Los demás convidados empezaron a decir entre sí: ¿Quién es éste, que hasta perdona pecados? Pero Jesús dijo a la mujer: Tu fe te ha salvado, vete en paz. Palabra del Señor.

Meditación

Ya hemos dicho, en días anteriores, que Timoteo era el obispo o encargado de la comunidad de Éfeso. Pablo lo había puesto allí. Ahora le da una serie de consejos de cómo debe actuar. Son muchos los consejos que le da en tan pocas líneas; unos son humanos, como la honradez, el ser ejemplo para los demás; otros son de caridad, amor, fe, buena conducta; otros tienen que ver con la propia misión como enseñar, animar, la lectura pública…

Y esto no es sólo para el obispo, lo podemos aplicar a quienes tengan cualquier ministerio en la comunidad, para los padres en su relación con los hijos y para los educadores. Esto va para nosotros y nosotras. Nos corresponde ser evangelizadores, hacer la enseñanza, primero con el ejemplo, el testimonio y después con la palabra y la lectura pública. Eso de la lectura pública, es para animarnos a leer la Biblia, a estudiarla y a presentarla a los demás.

Desde el bautismo tenemos esa misión de hacer presente el mensaje de salvación comenzando por quienes nos rodean.

66


El Evangelio de hoy nos presenta una escena bastante detallada y con muchas enseñanzas para la vida personal y comunitaria. El tema central es la relación entre el amor y el perdón. Y de esta escena sacamos dos conclusiones: a quien mucho ama, mucho se le perdona; y a quien mucho se le perdona mucho ama. Amor y perdón van siempre unidos.

Jesús perdona a una pecadora pública en casa de un fariseo y eso le sirve para hablar del amor y perdón; le sirve al fariseo y nos sirve a nosotros para darnos cuenta que el perdón está en manos de Dios para quien ama. También lo debemos aplicar a la acogida, a la hospitalidad, que damos en las comunidades a los pecadores, a quienes son reconocidos por haber estado en pecados públicos. Se nos pone la comparación de si los tratamos como los fariseos o los tratamos como Jesús; si los acogemos y acercamos o si, con nuestro rechazo, los hundimos más en su situación de abandono.

Estamos claros: no todo está bien; eso sería relativismo. Todo no está bien. Jesús no aprobaba el pecado y el mal, pero nos enseña a ser respetuosos y tolerantes con las personas. Parafraseando a san Agustín diríamos: amando a las personas y odiando cuanto ellas hacen mal. Con nuestra acogida humana, podemos ayudar a tantas personas -drogadictos, delincuentes, marginados de toda especie- a rehabilitarse, animándoles en el camino de la recuperación. Con el rechazo les podemos quitar los pocos ánimos que tengan. Debemos ser acogedores, hospitalarios, porque la hospitalidad no es sólo llevar a alguien a casa, sino también llevarlos y acogerlos en la comunidad, en la vida, en el sentido de la vida.

18 Feria

Viernes Verde

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 6, 2-12 Querido hermano: Esto es lo que tienes que enseñar y recomendar.

Si alguno enseña otra cosa distinta, sin atenerse a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo y a la doctrina que armoniza con la piedad, es un orgulloso y un ignorante, que padece la enfermedad de plantear cuestiones inútiles y discutir atendiendo sólo a las palabras.

Esto provoca envidias, polémicas, difamaciones, sospechas maliciosas, controversias propias de personas tocadas de la cabeza, sin el sentido de la verdad, que se han creído que la piedad es un medio de lucro. Es verdad que la religión es una ganancia, cuando uno se contenta con poco.

Sin nada vinimos al mundo y sin nada nos iremos de él. Teniendo qué comer y qué vestir nos basta. En cambio, los que buscan riquezas se enredan en mil tentaciones, se crean necesidades absurdas y nocivas, que hunden a los hombres en la perdición y la ruina.

Porque la codicia es la raíz de todos los males, y muchos, arrastrados por ella, se han apartado de la fe y se han acarreado muchos sufrimientos.

Tú en cambio, hombre de Dios, huye de todo esto, practica la justicia, la religión, la fe, el amor, la paciencia, la delicadeza.

67


Combate el buen combate de la fe. Conquista la vida eterna a la que fuiste llamado, y de la que hiciste noble profesión ante muchos testigos. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 48, R/. Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.

¿Por qué habré de temer los días aciagos, cuando me cerquen y acechen los malvados que confían en su opulencia y se jactan de sus inmensas riquezas? R/.

Nadie puede salvarse ni dar a Dios un rescate. Es tan caro el rescate de la vida, que nunca les bastará para vivir perpetuamente, sin bajar a la fosa. R/.

No te preocupes si se enriquece un hombre y aumenta el fasto de su casa: cuando muera, no se llevará nada, su fasto no bajará con él. R/. Aunque en vida se felicitaba: “Ponderan lo bien que lo pasa”, irá a reunirse con sus antepasados, que no verán nunca la luz. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 8, 1-3 En aquel tiempo, Jesús iba caminando de ciudad en ciudad y de pueblo

en pueblo, predicando la Buena Noticia del Reino de Dios; lo acompañaban los Doce y algunas mujeres que él había curado de malos espíritus y enfermedades: María la Magdalena, de la que habían salido siete demonios; Juana, mujer de Cusa, intendente de Herodes; Susana y otras muchas que le ayudaban con sus bienes. Palabra del Señor.

Meditación

Pablo le aconseja a Timoteo enseñar y defender la sana doctrina y alejarse de toda codicia.

Dentro de la Iglesia y de las iglesias encontramos personas preocupadas por discutir y discutir, y no les preocupa mucho la verdad, sino seguir con su discusión. Pueden ser de cosas importantes o de cosas menores. Nos encontramos con hermanos y hermanas dentro de la Iglesia y fuera de ella que “padecen la enfermedad de plantear cuestiones inútiles y discutir atendiendo sólo a las palabras”. No seamos de ellas.

Debemos ser críticos, y también debemos serlo con los temas de fe. Ser críticos es ayudarse a crecer y ayudar a crecer a los demás, es tratar de responder a las dudas y ayudar a clarificar el conocimiento de los demás. Para eso debemos estudiar, estar bien preparados y preparadas, participar en formaciones, escuchar programas formativos… siempre para avanzar y ayudar a caminar a los demás.

El otro tema es huir de la codicia, no aprovecharse de la religión, sus cargos dentro de ella para enriquecernos. Ser creyente es ser servidor.

Estas enseñanzas son para los obispos, presbíteros, la Vida Consagrada, para todos nosotros y nosotras, quienes debemos ser ejemplos por defender y vivir la “sana doctrina”, por no codiciar los bienes, por no usar la Iglesia para mejorar económicamente, sino para servir a los otros.

68


Esa sana doctrina citada por Pablo es la Buena Noticia del Reino que Jesús iba proclamando de ciudad en ciudad.

Y hoy, esa Buena Noticia la explica y aplica Jesús con la práctica de dejarse acompañar, de dejarse atender por la hospitalidad de un grupo de mujeres. Hoy la Buena Noticia la aplicamos a las mujeres. Nos puede parecer normal que un grupo de mujeres acompañara a Jesús. No era normal en su tiempo: ningún maestro admitía a mujeres en el grupo de sus discípulos. Jesús sí las admite, se deja cuidar y son hospitalarias con Él.

A la Iglesia le ha costado mucho tiempo valorar a la mujer; no es muy comprensible viendo cómo Jesús las admite y valora. No puede ser de otra manera porque ellas estuvieron muy cerca de Él en toda su vida, y sobre todo en la pasión, cuando le fallaron los discípulos. Por eso fueron las primeras en encontrarse con el Resucitado.

Estas mujeres del evangelio son un signo de las numerosas mujeres que han dado testimonio a lo largo de la historia de la Iglesia: religiosas, laicas, misioneras, catequistas, madres de familia, enfermeras, maestras...

La Iglesia debe abrirse a la participación de la mujer en puestos de responsabilidad. Desde el comienzo, desde el “sí de María”, la mujer es quien ha dado más ejemplo dentro de la comunidad. No serán obispos ni párrocos (por lo menos por ahora), como tampoco las que acompañaban a Jesús fueron elegidas y enviadas como apóstoles, pero las mujeres cristianas, religiosas o laicas, siguen realizando una misión hermosísima y comprometida en la vida de la comunidad.

19 Feria o memoria libre: San Jenaro, obispo y mártir

Sábado Verde o Rojo17º Aniversario de Ordenación Episcopal de Mons. Freddy Antonio de Jesús

Bretón Martínez, Arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago de los Caballeros

Lectura de la primera carta de San Pablo a Timoteo 6, 13-16 Querido hermano: En presencia de Dios que da la vida al universo y de

Cristo Jesús que dio testimonio ante Poncio Pilato: te insisto en que guardes el Mandamiento sin mancha ni reproche, hasta la venida de Nuestro Señor Jesucristo, que en tiempo oportuno mostrará el bienaventurado y único Soberano, Rey de los reyes y Señor de los señores, el único poseedor de la inmortalidad, que habita en una luz inaccesible a quien ningún hombre ha visto ni puede ver. A él honor e imperio eterno. Amén. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 99, R/. Entren en la presencia del Señor con vítores.

Aclama al Señor, tierra entera, sirvan al Señor con alegría, entren en su presencia con vítores. R/.

Sepan que el Señor es Dios: que él nos hizo y somos suyos, su pueblo y ovejas de su rebaño. R/.

Entren por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con himnos, dándole gracias y bendiciendo su nombre. R/.

69


“El Señor es bueno, su misericordia es eterna, su fidelidad por todas las edades”. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 8, 4-15 En aquel tiempo, se le juntaba a Jesús mucha gente y, al pasar por los pueblos, otros se iban añadiendo.

Entonces les dijo esta parábola: Salió el sembrador a sembrar su semilla. Al sembrarla, algo cayó al borde del camino, lo pisaron, y los pájaros se

lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso, y, al crecer, se secó por falta de humedad. Otro poco cayó entre zarzas, y las zarzas, creciendo al mismo tiempo, lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena, y, al crecer, dio fruto al ciento por uno. Dicho esto, exclamó: El que tenga oídos para oír, que oiga.

Entonces le preguntaron los discípulos: ¿Qué significa esa parábola? Él les respondió: A ustedes se les ha concedido conocer los secretos del Reino de Dios; a los demás, sólo en parábolas, para que viendo no vean y oyendo no entiendan.

El sentido de la parábola es éste: La semilla es la Palabra de Dios. Los del borde del camino son los que escuchan, pero luego viene el diablo y se lleva la Palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. Los del terreno pedregoso son los que, al escucharla, reciben la Palabra con alegría, pero no tienen raíz; son los que por algún tiempo creen, pero en el momento de la prueba fallan. Lo que cayó entre zarzas son los que escuchan, pero con los afanes y riquezas y placeres de la vida, se van ahogando y no maduran.

Lo de la tierra buena son los que con un corazón noble y generoso escuchan la Palabra, la guardan y dan fruto perseverando. Palabra del Señor.

Meditación

Terminamos la primera carta a Timoteo, y termina como comienza: invocando a Cristo como centro de toda la vida cristiana. Seguimos a Cristo, si escuchamos a Pablo es porque nos ayuda a encontrarnos con Cristo y a seguir mejor sus mandamientos.

Se nos invita a la perseverancia en la fe. Es fácil comenzar, podemos tener un retiro que nos llega al corazón y nos hace dar testimonio del cambio producido en nuestras vidas. ¿Hasta cuándo va a durar ese cambio? La fe debe mantenerse hasta el final. Vendrán dificultades y problemas que la quieran apagar, pero confiemos en la gracia de Dios y pongámosla en práctica hasta el final. Nuestra fe cristiana es un tesoro para conservar y hacer producir frutos. Ese tesoro lo llevamos en frágiles vasijas de barro. Haremos muy bien en no fiarnos demasiado, para esa perseverancia, de nuestras propias fuerzas; por eso el encuentro con Cristo nos hará mantenernos firmes en la fe.

El mismo Jesús nos explica la parábola contada en el evangelio, por tanto, más que detenernos en aclaraciones, debemos situarnos dentro de esa parábola dicha para cada uno de nosotros y nosotras.

La Palabra es buena y poderosa, toda esa tierra en la que cae es buena, porque todas las semillas germinan. Es lo exterior lo que les ayuda

70


o dificulta a poder crecer y dar más o menos frutos. Esa es la realidad de hoy: somos buena tierra, muy buena, debemos valorarnos así. Miremos el ambiente que nos rodea: la moda, lo que hacen todos, lo que dicen los medios de comunicación, las presiones de los grupos de poder, el miedo, el quedar bien… y veamos si puede más ese ambiente o la tierra buena, la Palabra más buena.

Su fruto depende también de nosotros y nosotras, porque Dios respeta nuestra libertad, no actúa en contra de nuestras decisiones ni saltando por encima de nuestros sentimientos.

En esta parábola, ¿dónde estoy retratado yo? ¿En qué clase de tierra me sitúo? Cuando, por ejemplo en la Eucaristía, en la reunión de comunidad o de sector, escucho la Palabra, o sea, cuando el Sembrador, Cristo, siembra su palabra en mi tierra, ¿puedo decir que cae en buen terreno, me dejo interpelar por ella? ¿O “viene el diablo” o “los afanes y riquezas y placeres de la vida” y la ahogan, y así no llega nunca a madurar, porque no tiene raíces? ¿Qué tanto por ciento de fruto produce en nosotros la Palabra que escucho?

Acoger la Palabra “con un corazón noble y generoso”, perseverar luego en su meditación y en su obediencia (como decíamos en la primera lectura): ésa actitud espera Jesús de nosotros, nos conducirá a madurar en nuestra vida cristiana y a dar los frutos que Dios y la comunidad esperan de nosotros y nosotras.

20 Domingo XXV del Tiempo Ordinario

I Semana de la Liturgia de las Horas Verde

La grandeza está en la hospitalidad a los más pequeños

Orientaciones para esta celebración: La procesión con la Biblia puede ser a la entrada, o después que quien preside ha hecho el saludo a la comunidad. En la procesión de entrada se lleva a una persona que representa a Jesús y va rodeada de algunos niños y niñas, también pueden ser enfermos, o cualquiera que represente “los pequeños”, como puede ser algún migrante. Si en la comunidad hay Laicas Consagradas, se llevan en procesión y se colocan en lugar preferente, además de presentarlas a la comunidad. Se lleva el lema de este domingo y se coloca junto al del mes.

Monición ambientalHermanos y hermanos: En este mes de la Biblia, de los emigrantes y de

los internos en la cárcel, continuamos celebrando y reflexionando sobre el valor de la hospitalidad.

En este Domingo el Señor nos recuerda que la grandeza la obtenemos cuando somos capaces de acoger a los más pequeños y humildes. Sólo

71


cuando hacemos del servicio una vivencia de la hospitalidad crecemos y somos felices.

Veamos en los niños presentes en esta Celebración el modelo a seguir en nuestro seguimiento a Jesús, quien no vino a buscar puestos al estilo de este mundo sino a darse y servir hasta dar la vida. Nos ponemos de pie, y cantando recibimos a Cristo en la persona de su ministro.

Primera Lectura: Sabiduría 2, 12. 17-20El libro de la Sabiduría nos presenta la falta de hospitalidad, de acogida,

por parte de la gente mala; y la gran acogida que hace Dios de quienes están sufriendo y siendo perseguidos. Sigamos el ejemplo de Dios siendo hospitalarios y acogedores de los más débiles.

Lectura del libro de la Sabiduría Se dijeron los impíos: “Acechemos al justo, que nos resulta incómodo:

se opone a nuestras acciones, nos echa en cara nuestros pecados, nos reprende nuestra educación errada; veamos si sus palabras son verdaderas, comprobando el desenlace de su vida.

Si es el justo hijo de Dios, lo auxiliará y lo librará del poder de sus enemigos; lo someteremos a la prueba de la afrenta y la tortura, para comprobar su moderación y apreciar su paciencia; lo condenaremos a muerte ignominiosa, pues dice que hay quien se ocupa de él.” Palabra de Dios.

Salmo responsorial, Sal 53R/. El Señor sostiene mi vida.

Oh Dios, sálvame por tu nombre, sal por mí con tu poder. Oh Dios, escucha mi súplica, atiende a mis palabras. R/.

Porque unos insolentes se alzan contra mí, y hombres violentos me persiguen a muerte, sin tener presente a Dios. R/.

Pero Dios es mi auxilio, el Señor sostiene mi vida. Te ofreceré un sacrificio voluntario, dando gracias a tu nombre, que es bueno. R/.

Segunda lectura: Santiago 3, 16-4, 3El apóstol Santiago nos da muchas recomendaciones, principalmente

sobre el comportamiento con las demás personas. Insiste en la paz, debemos procurar la paz, sembrarla, así damos frutos de justicia. También la hospitalidad es una manera de construir la paz y la justicia. Escuchemos

Lectura de la carta del apóstol Santiago Queridos hermanos: Donde hay envidias y rivalidades, hay desorden y

toda clase de males. La sabiduría que viene de arriba ante todo es pura y, además, es amante de la paz, comprensiva, dócil, llena de misericordia y buenas obras, constante, sincera. Los que procuran la paz están sembrando la paz, y su fruto es la justicia.

¿De dónde proceden las guerras y las contiendas entre ustedes? ¿No es de sus pasiones, que luchan en sus miembros? Codician y no tienen; matan, arden en envidia y no alcanzan nada; se combaten y se hacen la guerra.

72


No tienen, porque no piden. Piden y no reciben, porque piden mal, para dar satisfacción a sus pasiones. Palabra de Dios.

Aleluya cf. 2Ts 2, 14 Dios nos llamó por medio del Evangelio,

para que sea nuestra la gloria de nuestro Señor Jesucristo.

Evangelio: Marcos 9, 30-37Según Jesús en el evangelio de hoy, debemos ser hospitalarios y acoger

con ternura a los más pequeños de la sociedad. El cristiano convierte la hospitalidad en servicio de los necesitados y necesitadas. Escuchemos.

Lectura del santo evangelio según san Marcos En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se marcharon de la montaña y

atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos.

Les decía: “EL Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará.”

Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle. Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó: “¿De qué discutían por el camino?”

Ellos no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo: “Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos.”

Y, acercando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: “El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí no me acoge a mí, sino al que me ha enviado.” Palabra del Señor.

Oración de los fielesQuien preside: Confiados en el amor de Dios que nos escucha, le

presentamos nuestras necesidades. A cada oración respondemos: padre, ayúdanos a servir a los demás. 1. Por el papa, los obispos, sacerdotes y quienes en la Iglesia tienen la

misión de gobernar, para que su trabajo sea un verdadero servicio al pueblo de Dios. Oremos.

2. Por los consagrados y consagradas, principalmente las Laicas Consagradas, para que se pongan al servicio de los más pobres y necesitados y consigan su desarrollo material y espiritual. Oremos.

3. Por quienes tienen el poder en la República Dominicana, para que sirvan al pueblo y no se sirvan a sí mismos. Oremos.

4. Por cada uno de los católicos y católicas, para que seamos profetas, no tengamos miedo a las críticas y persecuciones y defendamos nuestra fe y vida moral. Oremos.

5. Para que reine la paz en nuestra República Dominicana, que nuestras autoridades trabajen por ello y cada uno de nosotros y nosotras la construyamos. Oremos.

73


6. Para que profundizando más en la lectura de la Biblia, nos comprometamos en la evangelización y en el cumplimiento de lo mandado por Dios en sus Escritos. Oremos.

7. Por nuestros difuntos, para que el Señor les conceda vivir definitivamente en el reino de los cielos. Oremos.

Quien preside: Ante ti, Padre de bondad, presentamos nuestra vida, acógela como te la presentamos y ayúdanos a hacerla mejor. Por Jesucristo nuestro Señor.

21 Fiesta: San Mateo, Apóstol y Evangelista

Lunes Rojo

Lectura de la carta de san Pablo a los Efesios 4, 1-7. 11-13 Hermanos: Yo, el prisionero por el Señor, les ruego que anden como pide

la vocación a la que han sido convocados. Sean siempre humildes y amables, sean comprensivos, sobrellévense mutuamente con amor; esfuércense en mantener la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz.

Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la esperanza de la vocación a la que han sido convocados. Un Señor, una fe, un bautismo. Un Dios, Padre de todo, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo invade todo. A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo. Y él ha constituido a unos, apóstoles, a otros, profetas, a otros, evangelizadores, a otros, pastores y maestros, para el perfeccionamiento de los santos, en función de su ministerio, y para la edificación del cuerpo de Cristo; hasta que lleguemos todos a la unidad en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, al hombre perfecto, a la medida de Cristo en su plenitud. Palabra de Dios.

Salmo responsorial, Sal 18R. A toda la tierra alcanza su pregón.

El cielo proclama la gloria de Dios, el firmamento pregona la obra de sus manos: el día al día le pasa el mensaje, la noche a la noche se lo susurra. R.

Sin que hablen, sin que pronuncien, sin que resuene su voz, a toda la tierra alcanza su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje. R.

Lectura del santo evangelio según san Mateo 9, 9-13 En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado

al mostrador de los impuestos, y le dijo: -”Sígueme.” Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores,

que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: “¿Cómo es que su

maestro come con publicanos y pecadores?”Jesús lo oyó y dijo: “No tienen necesidad de médico los sanos, sino

los enfermos. Vayan, aprendan lo que significa “misericordia quiero y no sacrificios”: que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.” Palabra del Señor.

74


Meditación

Hoy celebramos la fiesta del apóstol y evangelista Mateo. Él mismo, en su evangelio se llama a sí mismo, Mateo, mientras que Lucas y Marcos le llaman Leví y también Mateo. Tenía los dos nombres, pero es la misma persona.

El mismo evangelista nos cuenta cómo le llamó el Señor. Con toda sencillez, pasando por el lado, lo vio y lo llamó. Mateo le sigue al instante. Una sencilla llamada y una respuesta sencilla y práctica. Pero no es tan fácil.

Mateo es “una mala gente”, según los judíos y según los fariseos. Su oficio le hacía despreciable, se dedicaba a cobrar impuestos y a nadie nos gusta que “nos toquen el bolsillo”; además era un “colaboracionista”, es decir, una persona que trabajaba para el enemigo, para el conquistador, para el romano. Por parte de Jesús es una osadía hacer discípulo a este tipo de personas. Por parte de Mateo también es complicado porque tiene que dejar un buen trabajo y unas buenas ganancias para marcharse a vivir sin casa, sin dinero y sin lugar fijo.

Partiendo de esta situación debemos hacer nuestra reflexión personal: ¿con quién nos juntamos? ¿A quién invitamos a nuestras comunidades? Nos gusta “aparecer en la foto” de la gente bien, de los importantes. Jesús no hace distinción de personas y es acogedor-hospitalario con todos y todas. Cuando vamos a hacer una misión, no podemos dejar de invitar a alguien porque lleve mala fama, porque conozcan su situación, porque “no esté casado por la Iglesia”, porque está metido en no sé qué. La Iglesia no es de santos, es para ayudarnos a ser santos; por eso Jesús vino a llamar a los pecadores.

Según la primera lectura, el Señor ha llamado y sigue llamando a unos para ser apóstoles, a otros evangelistas… a cada uno para una misión, y todas esas misiones para el servicio de la Iglesia. Mateo cumplió la misión de apóstol y evangelista. No sabemos dónde predicó después de Pentecostés, pero sí sabemos que sigue trayendo la Buena Noticia, porque al escribir su evangelio nos permite hacer presente el mensaje todos los días y en todo el mundo. Recordemos el ejemplo de Mateo para responder con rapidez a la llamada del Señor. Y, en este mes de la Biblia, Mateo es un ejemplo de escucha de la Palabra, la entiende tan bien, que es capaz de escribirla. Leamos el Evangelio de San Mateo.

Por otro parte, el texto leído hoy nos habla de la hospitalidad de Mateo que invitó a Jesús a su casa, y gracias a esa hospitalidad tenemos la enseñanza del Maestro sobre su enorme misericordia al buscar al pecador más que al justo.

No olvidemos que hoy se celebra el “Día internacional de la paz”. Oremos por la paz en el mundo y comprometámonos a construirla en nuestro país, comenzando siempre por construirla con los de casa.

75


22 Feria

Martes Verde

Lectura del libro de Esdras 6, 7-8. 12b. 14-20 En aquellos días, el rey Darío escribió a los sátrapas de Transeufratina:

“Permitan al sátrapa y a los ancianos de Judá que trabajen para reconstruir el templo de Dios en su antiguo sitio.

En cuanto a los ancianos de Judá y a la construcción del templo de Dios, les ordeno que se paguen a esos hombres todos los gastos puntualmente y sin interrupción, utilizando los fondos reales de los impuestos de Transeufratina.

La orden es mía y quiero que se cumpla exactamente. Darío”. De este modo, los ancianos de Judá adelantaron mucho la construcción, como habían profetizado el profeta Ageo y Zacarías, hijo de Iddó, hasta que por fin la terminaron, conforme a lo mandado por el Dios de Israel y por Ciro, Darío y Artajerjes, reyes de Persia. El templo se terminó el día tres del mes de Adar, el año sexto del reinado de Darío.

Los israelitas “los sacerdotes, los levitas y el resto de los deportados” celebraron con júbilo la dedicación del templo, ofreciendo con este motivo cien toros, doscientos carneros, cuatrocientos corderos y doce machos cabríos, uno por cada tribu, como sacrificio expiatorio por todo Israel.

Asignaron a los sacerdotes y a los levitas las categorías y los órdenes que les correspondían en el culto del templo de Dios en Jerusalén, como está escrito en la ley de Moisés.

Los deportados celebraron la Pascua el día catorce del mes primero; como los sacerdotes y los levitas se habían purificado a la vez, todos estaban puros e inmolaron la víctima pascual para todos los deportados, para los sacerdotes, sus hermanos, y para ellos mismos. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 121,R/. Vamos alegres a la casa del Señor.

Qué alegría cuando me dijeron: “Vamos a la casa del Señor” Ya están pisando nuestros pies tus umbrales, Jerusalén. R/.

Jerusalén está fundada como ciudad bien compacta. Allá suben las tribus, las tribus del Señor. R/.

Según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor. En ella están los tribunales de justicia en el palacio de David. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 8, 19-21 En aquel tiempo, vinieron a ver a Jesús su madre y sus hermanos, pero

con el gentío no lograban llegar hasta él. Entonces le avisaron: Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren

verte. Él les contestó: Mi madre y mis hermanos son éstos: los que escuchan la

Palabra de Dios y la ponen por obra. Palabra del Señor.

76


Meditación

Los judíos, después de estar deportados durante “setenta años” en Babilonia, han conseguido permiso para regresar a su tierra. Ha habido grandes cambios políticos y ellos han facilitado el retorno. Uno de los cambios políticos es que los persas, los nuevos conquistadores del mundo, deciden dejar en libertad de culto y de movimiento a los pueblos conquistados, aunque deban pagar los impuestos y ayudar cuando haya guerras.

En este panorama social y político, los judíos tienen posibilidad y recursos para reconstruir el templo. Con esta reconstrucción se está simbolizando la vuelta a construir el pueblo, la religión, la fe y las distintas instituciones. Una vez terminada la construcción celebran una gran fiesta. ¿Qué pasa entre nosotros cuando construimos una capilla, una Iglesia o una catedral?

No olvidemos que el primero y principal templo de los católicos es la comunidad. El primero y principal edificio a construir es la comunidad. Y hablamos de la comunidad cristiana, la social y la humana.

Debemos mirar qué falta en la construcción de nuestras comunidades en los sectores, en las barriadas, en los campos. Y debemos poner mano a la obra a construir una comunidad social y política en la que reinen la paz, la justicia, la hospitalidad y todos los valores humanos y religiosos.

De poco nos sirve tener bonitos y grandes edificios si las comunidades no funcionan como tales; no es suficiente llenar los templos los domingos, debemos llenarlos de reuniones, formación, trabajo, compromiso. Las reuniones en el templo o en sus salones se deben notar en la calle, con la misión, la preocupación por los pobres y necesitados, la atención a los enfermos; el cuidado por la naturaleza, la hospitalidad con los demás, con los inmigrantes y el trabajo por una República Dominicana mejor.

El evangelio también debemos interpretarlo en el sentido comunitario: Jesús aprovecha la ocasión para decir cuál es su nuevo concepto de familia o de comunidad: “mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la ponen por obra”. No niega el concepto de familia, pero sí lo amplía, poniendo los lazos de fe por encima de los de sangre. La comunidad propuesta por Jesús no está basada en la misma raza, o pueblo, sino en la misma fe.

Este texto de Lucas no puede considerarse como rebajar a la Madre. Si algún evangelista se preocupa de resaltar a María es Lucas. Este texto es una alabanza a su madre, en la que Jesús destaca, no tanto su maternidad biológica, sino su cercanía de fe. María es doblemente madre. Y nosotros somos, debemos ser de esa familia de Jesús, para ello escuchemos su palabra, estemos atentos a cuanto nos enseña y tratemos de ponerlo en práctica.

77


23 Feria o memoria libre: San Pío de Pietrelcina, presbítero

Miércoles Verde o Blanco

Lectura del libro de Esdras 9, 5-9 Yo, Esdras, al llegar la hora de la oblación de la tarde, salí de mi

abatimiento y con los vestidos y el manto rasgados caí de rodillas, alcé mis manos al Señor mi Dios y dije: -Dios mío, me avergüenzo y sonrojo de levantar mi rostro hacia ti, porque estamos hundidos en nuestros pecados y nuestro delito es tan grande que llega al cielo.

Desde los tiempos de nuestros padres hasta el día de hoy hemos sido gravemente culpables, y por nuestros pecados nos entregaste a nosotros, a nuestros reyes y a nuestros sacerdotes en manos de reyes extranjeros, y a la espada, al cautiverio, al saqueo y al oprobio, como ocurre hoy.

Pero ahora, en un instante, el Señor nuestro Dios se ha compadecido de nosotros, dejándonos algunos supervivientes y otorgándonos un resto en su lugar santo; nuestro Dios ha iluminado nuestros ojos y nos ha reanimado un poco en medio de nuestra esclavitud.

Porque éramos esclavos, pero nuestro Dios no nos abandonó en nuestra esclavitud; nos granjeó el favor de los reyes de Persia y nos dio ánimos para levantar el templo de nuestro Dios y restaurar sus ruinas, concediéndonos un valladar en Judá y Jerusalén. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Tb 13R/. Bendito sea Dios, que vive eternamente.

El azota y se compadece, hunde hasta el abismo y saca de él, y no hay quien escape de su mano. R/.

Denle gracias, israelitas, ante los gentiles, porque él nos dispersó entre ellos. Proclamen allí su grandeza, ensálcenlo ante todos los vivientes: que él es nuestro Dios y Señor, nuestro padre por todos los siglos. R/.

Verán lo que hará con ustedes, le darán gracias a boca llena, bendecirán al Señor de la justicia y ensalzarán al rey de los siglos. R/.

Yo le doy gracias en mi cautiverio, anuncio su grandeza y su poder a un pueblo pecador. R/.

Conviértanse, pecadores, obren rectamente en su presencia: quizás les mostrará benevolencia y tendrá compasión. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 9, 1-6 En aquel tiempo, Jesús reunió a los Doce y les dio poder y autoridad

sobre toda clase de demonios y para curar enfermedades. Luego los envió a proclamar el Reino de Dios y a curar a los enfermos,

diciéndoles: No lleven nada para el camino: ni bastón ni alforja, ni pan ni dinero; tampoco lleven túnica de repuesto.

Quédense en la casa donde entren, hasta que les vayan de aquel sitio. Y si alguien no les recibe, al salir de aquel pueblo sacúdanse el polvo de los pies, para probar su culpa.

78


Ellos se pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando la Buena Noticia y curando en todas partes. Palabra del Señor

Meditación

La primera lectura es una oración profunda salida de la boca y el corazón de Esdras. Es una oración de mucho sentimiento. Reconoce la culpa del pueblo, la culpa de ahora y de las generaciones anteriores, pide perdón; bendice la misericordia de Dios al fijarse en el pueblo esclavizado y concederle la libertad.

Esta oración se entiende mejor si conocemos el contexto: el pueblo ha estado muchos años, dos generaciones, esclavizado en Babilonia. En dos generaciones han cambiado el idioma, ya no hablan hebreo sino arameo. Pero también han perdido su cultura, mucha gente del pueblo se ha alejado de Yahvé, ya no sigue sus antiguas costumbres y la moral se ha relajado bastante.

Este pueblo, o parte de ese pueblo regresa a Jerusalén y al resto del territorio. Un lugar que no conocen porque la mayoría de quienes fueron deportados ya habían fallecido. Se ve que no tienen muchas ganas de volver a la “antigua observancia” de la ley y de las costumbres. Todo ello tiene muy preocupado a Esdras y así se lo presenta a Dios en su oración.Esto es una invitación a revisar nuestras oraciones: deben partir de nuestra situación personal, pero deben atender a las necesidades de quienes nos rodean y de todo el pueblo.

El evangelio nos habla del envío de los doce, y de las condiciones en que debe hacerse la evangelización y la misión. En nuestra realidad, en esta realidad de las seguridades, este evangelio y su mensaje no tiene mucho sentido. Hoy debe estar todo planificado y bien planificado; además deben tenerse todos los medios posible para no fracasar en el trabajo, para no fracasar en la misión, en la catequesis, en la pastoral social, en la celebración litúrgica… Con esa actitud estamos dando a entender que nos fiamos más de nosotros mismos, de nuestros medios, preparación… que del Señor. Pero no trabajamos a nuestro estilo, sino según el mandato de Jesús. Porque no somos nosotros quienes salvamos al mundo: sólo somos instrumentos de la fuerza salvadora del Resucitado y de su Espíritu.

Jesús envía a los doce a una sola misión con dos partes: predicar y curar. La evangelización abarca a la persona entera. Así lo entendieron los doce y así lo cumplieron según nos dice: “Ellos se pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando la Buena Noticia y curando en todas partes.”

La Iglesia así lo ha hecho durante siglos y siglos: ha predicado y sanado a la humanidad de tantos males. Así es también hoy la misión de la Iglesia y la nuestra. Estamos llamados y llamadas a la misión de llevar el bien espiritual, sacramental, y también el corporal y social. El evangelio nos habla de la hospitalidad que se debe dar a la Palabra y a los mensajeros.

79


24 Solemnidad de Nuestra Señora de las MercedesPatrona de la República Dominicana

Jueves Azul o Blanco

María de la Merced, modelo de hospitalidad

Orientaciones para esta celebración: Si tenemos el “altar-atril” de la Biblia de todo el mes, hoy se pone a un lado la bandera Dominicana, al otro lado un cuadro, a poder ser grande, de la Virgen de las Mercedes; se pone un ejemplar de la Constitución de la Republica; alrededor se van poniendo signos patrios y otros signos distintivos, pilones, tamboras, güiras… En la procesión de ofrendas se llevan unas cadenas. Al final de la celebración de puede dar a besar el cuadro de las Mercedes. Seguimos dando importancia a la acogida en la celebración.

Monición de entradaEn este día celebramos con alegría la Solemnidad de Nuestra Señora

de las Mercedes, declarada Patrona de la República Dominicana desde la Independencia Nacional en 1844, aunque la devoción se remonta casi al descubrimiento de la Isla, ya que en el 1615 es declarada Patrona de la Española, a raíz de un fuerte terremoto acaecido.

La devoción a ella está ligada a la Orden de La Merced que tiene por finalidad liberar a los cautivos. Oramos por todos los servidores de la Pastoral Penitenciaria, para que el Señor los haga profetas del Reino dentro de la dolorosa realidad de nuestras cárceles. Oramos y nos comprometemos en ser hospitalarios con quienes nos visitan, en hacer leyes buenas y justas para con los migrantes. Que el pueblo dominicano no pierda la hospitalidad por la que siempre se ha caracterizado.

Es un día patrio, ya que Ella es patrona de la República. Por eso, hoy es día de celebrar, de pedir por nuestra patria y de comprometernos en trabajar por un país mejor. Para llegar a esta meta Ella nos indicó el camino que es hacer lo que su Hijo nos dice en el Evangelio.

Llenos de alegría, junto a nuestra Madre liberadora de los cautivos, y liberadora de nuestras esclavitudes, pues las tenemos, celebremos con su Hijo esta acción de gracias al Padre que nos liberó de las cadenas de la muerte y del pecado. Aclamemos a Jesucristo junto con María y recibámoslo a través de su ministro.

Oración Colecta Dios, Padre de misericordia, que en tu admirable providencia, hiciste que

la Madre de tu Hijo participase de las angustias y sufrimientos humanos, concede, por la intercesión de la Bienaventurada Virgen María de las Mercedes, consuelo de los afligidos y liberadora de cautivos, que los que sufren cualquier forma de esclavitud, consigan la verdadera libertad de los hijos de Dios. Por nuestro Señor Jesucristo…

80


Primera Lectura: Jeremías 30, 8-11ª A través de Jeremías, el Señor se presenta como el gran liberador de

su pueblo y lo invita a escuchar su voz y a servirle solo a Él. A pesar de su pecado el Profeta acoge con amor a su pueblo y lo libera. Escuchemos.

Lectura del libro de Jeremías Acontecerá aquel día - oráculo de Yahvé Sebaot - que romperé el yugo

de sobre tu cerviz y tus coyundas arrancaré, y no te servirán más los a Yahvé su Dios y a David su rey, que yo les suscitaré. Pero tú no temas, siervo mío Jacob - oráculo de Yahvé - ni desmayes, Israel, pues mira que yo acudo a salvarte desde lejos y tu linaje del país de su cautiverio; volverá Jacob, se sosegará y estará tranquilo, y no habrá quien le inquiete, pues contigo estoy yo - oráculo de Yahvé - para salvarte: pues acabaré con todas las naciones entre las cuales te dispersé. Pero contigo no acabaré; aunque sí te corregiré como conviene, ya que impune no te dejaré. Palabra de Dios.

Salmo responsorial, Sal 125, R. Los que sembraban con lágrimas cosechan entre cantares.

Cuando el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía soñar: la boca se nos llenaba de risas, la lengua de cantares. R.

Hasta los gentiles decían: El Señor ha estado grande con ellos. El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres. R.

Que el Señor cambie nuestra suerte, como los torrentes del Negueb. Los que sembraban con lágrimas cosechan entre cantares. R.

Al ir, iba llorando, llevando la semilla; al volver, vuelve cantando, trayendo sus gavillas. R.

Segunda Lectura: Gálatas 5, 1.13-25 La libertad verdadera nos viene de Cristo. Es necesario que lo conozcamos

y lo aceptemos en la vida, para que vivamos en la verdadera libertad, que nos lleva a vivir la hospitalidad, expresión del amor fraterno. Escuchemos.

Lectura de la Carta de San Pablo a los Gálatas Para ser libres nos libertó Cristo. Manténganse, pues, firmes y no se dejen

oprimir nuevamente bajo el yugo de la esclavitud. Porque, hermanos, ustedes han sido llamados a la libertad; sólo que no tomen de esa libertad pretexto para la carne; antes al contrario, sírvanse por amor los unos a los otros.

Pues toda la ley alcanza su plenitud en este solo precepto: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Pero si se muerden y se devoran mutuamente, ¡miren no vayan mutuamente a destruirse!

Por mi parte les digo: Si viven según el Espíritu, no darán satisfacción a las apetencias de la carne. Pues la carne tiene apetencias contrarias al espíritu, y el espíritu contrarias a la carne, como que son entre sí antagónicos, de forma que no hacen lo que quisieran.

Pero, si son conducidos por el Espíritu, no están bajo la ley. Ahora bien, las obras de la carne son conocidas: fornicación, impureza, libertinaje, idolatría, hechicería, odios, discordia, celos, iras, rencillas, divisiones,

81


disensiones, envidias, embriagueces, orgías y cosas semejantes, sobre las cuales les prevengo, como ya les previne, que quienes hacen tales cosas no heredarán el Reino de Dios. En cambio el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio de sí; contra tales cosas no hay ley. Pues los que son de Cristo Jesús, han crucificado la carne con sus pasiones y sus apetencias. Si vivimos según el Espíritu, obremos también según el Espíritu. Palabra de Dios.

R. / Aleluya, AleluyaTú eres la puerta del Rey Altísimo. / Trono resplandeciente del que es luz, / Pueblos redimidos, aplaudan, / Por María se nos ha devuelto la libertad.

Aleluya, Aleluya

Evangelio: Juan 2, 1-11 María, con plena libertad acude a Jesús haciéndose solidaria con

aquellos novios a quienes se les acababa el vino de la fiesta. Ella hizo suya las necesidades de ellos y buscó en su Hijo una solución. Escuchemos.

Lectura del Santo Evangelio según San Juan 2, 1-11Tres días después se celebraba una boda en Caná de Galilea y estaba allí

la madre de Jesús. Fue invitado también a la boda Jesús con sus discípulos. Y, como faltara vino, porque se había acabado el vino de la boda, le

dice a Jesús su madre: “No tienen vino.” Jesús le responde: “¿Qué tengo yo contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi hora.” Dice su madre a los sirvientes: “Hagan lo que él les diga.”

Había allí seis tinajas de piedra, puestas para las purificaciones de los judíos, de dos o tres medidas cada una. Les dice Jesús: “Llenen las tinajas de agua.” Y las llenaron hasta arriba. “Sáquenlo ahora, les dice, y llévenlo al maestresala.” Ellos lo llevaron.

Cuando el maestresala probó el agua convertida en vino, como ignoraba de dónde era (los sirvientes, los que habían sacado el agua, sí que lo sabían), llama el maestresala al novio y le dice: “Todos sirven primero el vino bueno y cuando ya están bebidos, el inferior. Pero tú has guardado el vino bueno hasta ahora.” Así, en Caná de Galilea, dio Jesús comienzo a sus señales. Y manifestó su gloria, y creyeron en él sus discípulos. Palabra del Señor.

Meditación

Hoy es un día mariano y patrio, hoy es una gran Fiesta para la República Dominicana porque celebramos a nuestra patrona, la Virgen de las Mercedes.

“Mercedes” significa favores gratuitos y también misericordia. Y así lo aplicamos al María, nuestra patrona. Ella es quien nos ha traído al Señor misericordioso, y la liberación del mal, este es el tema de la primera lectura. Ella nos consigue del Hijo los favores sin esperar nada a cambio, es el tema del Evangelio. María es misericordia y la puerta de la misericordia de Dios para con nosotros y para el pueblo Dominicano, recordemos que el próximo año ha

82


sido declarado por el Papa el “Año de la Misericordia”. Jesús es la expresión del amor que no espera nada a cambio, Jesús es la misericordia de Dios.

La fiesta de la Merced nos ayuda a levantar el corazón a Dios y experimentar su misericordia, pero también a sentir la intercesión poderosa de María. Ella, en esta fiesta, nos recuerda los tres aspectos más importantes de nuestra vida: Dios, la Familia y la Patria. Hacemos insistencia en Dios y la Patria porque es la fiesta patronal del país.

Amar a Dios y amar la patria son inseparables, como amar al prójimo no se puede separar del amor a Dios. La dominicanidad no se entendería sin recurrir a Dios y a María. El escudo patrio nos recuerda esa dependencia de Dios. Podríamos decir que somos dominicanos por las sólidas raíces cristianas que dejaron los antepasados. ¿No dependerá de nuestra fe actual, la continuidad de la existencia de la República Dominicana, su libertad y la vivencia de los valores patrios y cristianos?

Están completamente unidos el amor a Dios y a la Patria; el amor a Dios y el compromiso ciudadano. Ningún católico o católica dominicano podrá serlo de verdad sin su esfuerzo en ser buen ciudadano o ciudadana.

No podremos ser buenos dominicanos sin sentimos hijos de María y a la vez si no tenemos misericordia, solidaridad, amor, y trabajo por la inclusión, la justicia y el desarrollo del país. Nuestra patria necesita católicos y católicas coherentes con su fe y siendo ejemplo por su conducta. Si decimos que la Virgen de la Merced es nuestra patrona, la fe y devoción tendrá que ver algo con el progreso espiritual y material de nuestro pueblo.

Hoy, en esta fiesta patronal del 2015, en el año del amor y la solidaridad, en el mes de la hospitalidad, nos debemos preguntar de qué estamos prisioneros para que la Virgen de las Mercedes, por medio de la misericordia de su Hijo, nos ayude a liberarnos. No vamos a hacer la lista aquí, sino que hacemos la propuesta de que cada quien se la haga: liberación personal, familiar, social y nacional. Después de hacer la lista, la ponemos en oración ante la Virgen de las Mercedes, y nos comprometemos a poner nuestra parte.

Oración de los fieles: El que preside: Elevemos nuestras súplicas al Padre, por medio de

Jesucristo, y con la intercesión de la Virgen María de las Mercedes; a cada oración respondemos: Padre, por intercesión de María, escúchanos.

1. Por la Conferencia Episcopal Dominicana, para que el Señor, por la intercesión de la Santísima Virgen María, ilumine a nuestros obispos para que guíen a la Iglesia dominicana por los caminos de la nueva Evangelización. Oremos.

2. Por el Gobierno de nuestro país, para que el Señor, por intercesión de nuestra Patrona, la Virgen de Las Mercedes, le conceda la inteligencia, la fuerza y la voluntad para buscar soluciones a los mayores problemas nacionales. Oremos.

3. Por los pobres, los huérfanos y las viudas, por los enfermos, los encarcelados y los que están esclavizados por el pecado, para que por

83


intercesión de Nuestra Señora de las Mercedes, y nuestra solidaridad, consigan solucionar sus problemas. Oremos.

4. Por nosotros, los que nos confesamos católicos, para que por la intercesión de nuestra Madre de las Mercedes, tengamos un encuentro personal con Cristo y nos comprometamos en sacar adelante el Plan Nacional Pastoral, levándolo a la práctica en las comunidades y sectores de nuestras parroquias. Oremos.

5. Por todos los que trabajan en la Pastoral Penitenciaria para que sean verdaderos instrumentos de la liberación que solo Dios puede dar. Oremos.

6. Por el pueblo dominicano, que celebra hoy con gozo la solemnidad de Nuestra Señora de las Mercedes, para que se esfuerce en vivir la unidad, el bien común, la justicia, la paz, y la alegría. Oremos

7. Para que a ejemplo de María nos pongamos a la escucha de Dios que nos habla en su Palabra y en la realidad que nos rodea. Oremos

El que preside: Padre, ponemos ante ti todas estas peticiones, las necesidades de nuestras familias y del país, lo hacemos por intercesión de Nuestra Señora de las Mercedes, pero sobre todo por Jesucristo nuestro Señor.

Oración de las Ofrendas: Recibe, Señor, las ofrendas de tu pueblo y concede, que los que

celebramos la obra inmensa de la caridad de tu Hijo, nos afiancemos, por la intercesión de la Bienaventurada Virgen María, en el amor a Dios y al prójimo. Por Jesucristo nuestro Señor.

Prefacio: IV de Santa María Virgen: “María, Signo de Consuelo y de Esperanza”

Antífona de la Comunión: Cantares 8, 7 Las aguas torrenciales no podrán apagar el amor, ni los ríos extinguirlo

Oración después de la Comunión: Habiendo recibido, Señor, el sacramento de redención y vida, te pedimos

por intercesión de la Bienaventurada Virgen María de las Mercedes, Madre solícita y celestial Patrona nuestra, que podamos servir con todas nuestras fuerzas al misterio de la salvación, y merezcamos ser admitidos en el Reino Eterno. Por Jesucristo nuestro Señor.

25 Feria

Viernes Verde

Lectura del Profeta Ageo 2, 1b-10 El año segundo del reinado de Darío, el día veintiuno del séptimo mes

vino la palabra del Señor por medio del profeta Ageo: Di a Zorobabel Ben-Salatiel, gobernador de Judea, y a Josué Ben–Josadak, Sumo Sacerdote, y al resto del pueblo: ¿Quién entre ustedes vive todavía, de los que vieron

84


este templo en su esplendor primitivo? ¿Y qué ven ustedes ahora? ¿No es como si no existiese ante sus ojos? ¡Animo! Zorobabel, oráculo del Señor; ¡Animo! Josué Ben–Josadak, Sumo Sacerdote; ¡Animo! pueblo entero, oráculo del Señor, a la obra: que yo estoy con ustedes, oráculo del Señor de los Ejércitos. La palabra pactada con ustedes, cuando salían de Egipto, y mi espíritu habitan con ustedes: no teman. Así dice el Señor de los Ejércitos: Todavía un poco más y agitaré cielo y tierra, mar y continentes.

Pondré en movimiento los pueblos; vendrán las riquezas de todo el mundo, y llenaré de gloria este Templo dice el Señor de los Ejércitos: Mía es la plata y mío es el oro, dice el Señor de los Ejércitos.

La gloria de este segundo Templo será mayor que la del primero dice el Señor de los Ejércitos ¡y en este sitio daré la paz!, oráculo del Señor de los Ejércitos. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 42R/. Espera en Dios, que volverás a alabarlo: “Salud de mi rostro, Dios mío”.

Hazme justicia, oh Dios, defiende mi causa, contra gente sin piedad, sálvame del hombre traidor y malvado. R/.

Tú eres mi Dios y protector: ¿por qué me rechazas? ¿Por qué voy andando sombrío, hostigado por mi enemigo? R/.

Envía tu luz y tu verdad: que ellas me guíen y me conduzcan hasta tu monte santo, hasta tu morada. R/.

Que yo me acerque al altar de Dios, al Dios de mi alegría; que te dé gracias al son de la cítara Dios, Dios mío. R/.

Lectura del santo Evangelio Según San Lucas 9, 18-22 Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos,

les preguntó: ¿Quién dice la gente que soy yo? Ellos contestaron: Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas. Él les preguntó: Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo? Pedro tomó la palabra y dijo: El Mesías de Dios. Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie.

Y añadió: El Hijo del Hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y letrados, ser ejecutado y resucitar al tercer día. Palabra del Señor.

Meditación

“Ánimo, pueblo entero... no teman... que Dios está con ustedes”. Estas palabras del profeta Ageo las dirigió al pueblo judío cuando acababa de regresar a su tierra, después del destierro en Babilonia. Por tanto, esta lectura está puesta para completar las ideas los días anteriores en el libro de Esdras.

Estas palabra fueron dichas hace muchos siglos, pero se nos dicen a nosotros, a todos nosotros y nosotras, a todas las personas de la Iglesia. Necesitamos ánimo, mucho ánimo.

Las palabras del profeta dan a entender que algunos de los más ancianos conocieron el antiguo templo. Si esas personas comparan con

85


el templo antiguo, verán la enorme tarea de la reconstrucción. Ante ese trabajo tan grande, se desaniman.

Nuestra vida, comunidad, Iglesia y país tiene mucho para reparar. Soy tan pequeño, somos muy pocas personas para ese trabajo, porque la mayoría no está por la labor… ¿Qué podemos hacer tan poca gente ante esta situación eclesial y nacional?

Aquí llegan las palabras del Señor: “ánimo pueblo entero, no tengas miedo, Dios está con ustedes”. No podemos con nuestras solas fuerzas, no podemos con nuestros instrumentos, pero Dios está de nuestra parte. Cambiar y mejorar en lo personal, en la marcha de la comunidad y eclesial, cambiar esta República Dominicana es posible. Dios lo ha puesto en nuestras manos y Él está de nuestra parte. ¡Manos a la obra!, precisamente porque la tarea es grande, más importante es nuestra colaboración.

Este evangelio es demasiado repetido; nos aparece muchas veces en la liturgia, lo hemos reflexionado una y otra vez… Es verdad. Nos lo cuentan los tres evangelios sinópticos, por eso lo leemos en repetidas ocasiones. Además lo leemos porque es necesario plantearnos una y otra vez la importancia y la acción de Cristo en nuestras vidas.

Sí, sabemos quién es Jesús, lo sabemos desde el catecismo estudiado siendo niños; lo sabemos porque leemos su Palabra y porque hasta nos toca explicarlo a los demás. Lo sabemos, sí lo sabemos, pero ¿esa imagen de Jesús va cambiando en nuestra vida o se mantiene siempre igual?

Porque la comprensión y la vivencia de Cristo debe evolucionar. Cada día debemos formarnos más, estudiar más la Palabra; cada día debemos estar más cerca de Cristo; cada día debemos vivir más y mejor la comprensión del mensaje y de la Buena Noticia y debemos enseñarla…

También miraremos la comprensión de Cristo en la catequesis, en la misión, en la pastoral social, en la vivencia litúrgica y moral: ¿Qué Jesús anunció? ¿El portador de la Buena Noticia o el que me gusta para hacerlo más atractivo para quienes me están escuchando? La Buena Noticia no nos la podemos inventar; nos viene de Cristo y es siempre consoladora, pero exigente a la vez.

26 Feria o memoria libre: San Cosme y san Damián, mártires

Sábado Verde o Rojo

Lectura del Profeta Zacarías 2, 15.10-11a Alcé los ojos y vi un hombre con un cordel de medir. Pregunté: ¿A dónde

vas? Él me contestó: A medir a Jerusalén, para comprobar su anchura y longitud. Entonces salió el ángel que hablaba conmigo, y otro ángel le vino al encuentro, diciendo: Corre y di a aquel joven: Jerusalén será ciudad abierta, por la multitud de hombres y ganados que hay dentro de ella; yo seré para ella, oráculo del Señor, una muralla de fuego en torno, y gloria dentro de ella. ¡Alégrate y goza, hija de Sión! , que yo vengo a habitar dentro de ti oráculo del Señor. Aquel día se unirán al Señor muchos pueblos, y serán pueblo mío, y habitaré en medio de ti. Palabra de Dios.

86


Salmo responsorial, Jeremías 31,R/. El Señor nos guardará, como pastor a su rebaño.

Escuchen, pueblos, la palabra del Señor, anúncienla en las islas remotas: “El que dispersó a Israel lo reunirá, lo guardará como pastor a su rebaño”. R/.

Porque el Señor redimió a Jacob, lo rescató de una mano más fuerte. Vendrán con aclamaciones a la altura de Sión, afluirán hacia los bienes del Señor. R/.

Entonces se alegrará la doncella en la danza, gozarán los jóvenes y los viejos; convertiré su tristeza en gozo, los alegraré y aliviaré sus penas. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 9, 44b-45 En aquel tiempo, entre la admiración general por lo que hacía, Jesús

dijo a sus discípulos: Métanse bien esto en la cabeza: al Hijo del Hombre lo van a entregar en manos de los hombres. Pero ellos no entendían este lenguaje; les resultaba tan oscuro, que no cogían el sentido. Y les daba miedo preguntarle sobre el asunto. Palabra del Señor.

Meditación

Con una breve lectura del profeta Zacarías terminamos el tema de la reconstrucción de Jerusalén y de la comunidad del pueblo judío.

Nos presenta una parábola: una persona quiere medir Jerusalén, es decir, quiere saber las dimensiones de la ciudad, no sabemos si es porque la consideraba muy grande o muy pequeña. El Ángel le dice que no es necesario medirla, porque va a ser una ciudad abierta, sin límites, en la que entrarán y saldrán todo tipo de personas.

Es una parábola para contar que la salvación es universal, y también lo es la Iglesia. Ésta no se puede medir porque no está limitada a un lugar y a un tiempo, sino que es universal. Como dice la lectura, la Iglesia está formada por infinidad de pueblos y de razas.

La lectura anima al optimismo porque es una Iglesia hospitalaria, acoge en sí a toda persona sin distinción; no solo recibe a quien viene a ella, sino que está abierta, sale a buscar a las personas y los pueblos; es motivo de ánimo el saber que el Señor estará siempre en la Iglesia: “¡Alégrate y goza, hija de Sión!, que yo vengo a habitar dentro de ti oráculo del Señor”. Tenemos motivos de ánimo y optimismo porque el Señor está y ha prometido habitar en la Iglesia y en nuestras comunidades por siempre.

Jesús vuelve a avisar a sus discípulos sobre la muerte. Y como de costumbre, los discípulos miran a otra parte, no se enteran o prefieren no darse cuenta del tema. Jesús les da este aviso, cuando la gente más lo alababa por sus palabras y acciones. Jesús despierta admiración, por sus gestos milagrosos y por la profundidad de sus palabras. También a nosotros nos gusta fijarnos en ese Jesús bonito y fácil.

Pero Jesús “no es fácil”. A él le gusta ser servidor, por ejemplo, ponerse la toalla y lavar los pies a los discípulos; se entrega en la pasión, en la cruz para cumplir su misión de salvar a la humanidad entera. Y este Jesús servidor y sufriente no lo entendemos tan fácilmente. A muchos creyentes nos gusta quedarnos con el Jesús del consuelo, de las buenas palabras,

87


de los momentos de ánimo, de perdón; nos cuesta aceptar el Cristo de la renuncia, el sufrimiento y el servicio.

Es que si aceptamos al Jesús servidor y sufriente, debemos seguirlo, imitarlo, y eso nos cuesta.

Sin embargo “debemos cargar con la cruz de cada día”, y ayudar, servir a los demás a cargar con esa cruz. Somos colaboradores suyos en la salvación del mundo; eso nos lleva a estar atentos a las necesidades, sufrimiento y pesares de los demás, para echarles una mano. Abramos nuestros oídos y entendamos qué nos pide Jesús.

27 XXVI Domingo del Tiempo Ordinario

II Semana de la Liturgia de las Horas Verde7º Aniversario de la Ordenación episcopal de Monseñor Jude

Thaddeus Okolo, Nuncio Apostólico

Seamos hospitalarios con quienes no son de los nuestros

Orientaciones para esta celebración: Como en todos los Domingos del mes, damos importancia a la acogida de las personas en el lugar de la celebración. Como en el primer domingo, después del saludo de entrada y como signo de hospitalidad, se saluda efusivamente las personas participantes. Se coloca el cartel del lema del domingo junto al del lema del mes. Llevar en la procesión de entrada a algún migrante.

Monición ambientalBienvenidas y bienvenidos a la celebración de este último Domingo del

mes de septiembre. Nos reunimos en comunidad para encontrarnos con Cristo en su Palabra y en la Eucaristía.

La Palabra nos recuerda la obligación de acoger a quienes no son de los nuestros, y a unirnos a quienes hacen el bien aunque no sean de nuestro grupo, iglesia, o ministerio. Es un día para orar por la unidad dentro de todos los grupos, ministerios y movimientos de nuestra comunidad.

El que no está contra nosotros está a nuestro favor, es una invitación a ser hospitalarios y acogedores con las demás personas que trabajan por hacer el bien y a unirnos a sus esfuerzos.

Acojamos a Cristo, que una vez más viene a nosotros en la persona de quien preside la celebración. Nos ponemos de pie y cantamos con alegría.

Primera lectura. Números 11, 25-29Dios baja y vive en medio del pueblo, en la Tienda del Encuentro. Dios

hace llegar su Espíritu aún a los que no están reunidos. El quiere hacer realidad el deseo de Moisés de hacer un pueblo de profetas en el que estamos incluidos todos sin distinción. Escuchemos.

Lectura del libro de los Números En aquellos días, el Señor bajó en la nube, habló con Moisés y, apartando

algo del espíritu que poseía, se lo pasó a los setenta ancianos. Al posarse

88


sobre ellos el espíritu, se pusieron a profetizar en seguida. Habían quedado en el campamento dos del grupo, llamados Eldad y Medad. Aunque estaban en la lista, no habían acudido a la tienda. Pero el espíritu se posó sobre ellos, y se pusieron a profetizar en el campamento.

Un muchacho corrió a contárselo a Moisés: “Eldad y Medad están profetizando en el campamento.” Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde joven, intervino: “Señor mío, Moisés, prohíbeselo.” Moisés le respondió: “¿Estás celoso de mí? ¡Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta y recibiera el espíritu del Señor!” Palabra de Dios.

Salmo responsorial, Sal 18,R/. Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón.

La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el precepto del Señor es fiel e instruye al ignorante. R/.

La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente justos. R/.

Aunque tu siervo vigila para guardarlos con cuidado, ¿quién conoce sus faltas? Absuélveme de lo que se me oculta. R/.

Preserva a tu siervo de la arrogancia, para que no me domine: así quedaré libre e inocente del gran pecado. R/.

Segunda lectura: Santiago 5, 1-6Durante todos los domingos de este mes hemos leído la carta del apóstol

Santiago. Una carta muy social y comprometida. Hoy habla de lo mal que lo van a pasar los ricos por no ser hospitalarios, por no acoger con sus bienes a los demás, por haberse enriquecido a costa de los demás. Sigue siendo una lectura muy actual. Escuchemos.

Lectura de la carta del apóstol Santiago Ahora, ustedes, los ricos, lloren y laméntense por las desgracias que les

han tocado. Su riqueza está corrompida y sus vestidos están apolillados. Su oro y su plata están herrumbrados, y esa herrumbre será un testimonio contra ustedes y devorará su carne como el fuego. ¡Han amontonado riqueza, precisamente ahora, en el tiempo final!

El jornal defraudado a los obreros que han cosechado sus campos está clamando contra ustedes; y los gritos de los segadores han llegado hasta el oído del Señor de los ejércitos. Han vivido en este mundo con lujo y entregados al placer. Les han cebado para el día de la matanza. Condenaron y mataron al justo; él no les resiste. Palabra de Dios.

Aleluya cf. Jn 17, 17b. a Tu palabra, Señor, es verdad; conságranos en la verdad.

Evangelio: Marcos 9, 38-43. 45. 47-48Como en la primera lectura, el evangelio nos habla de la hospitalidad. Los

discípulos sólo acogen a los suyos, a los de su grupo; Jesús es más amplio y acoge principalmente a toda la gente, aún aquellos que no son de su grupo. Seamos hospitalarios y seremos bendecidos. Escuchemos.

89


Lectura del santo evangelio según san Marcos En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús: “Maestro, hemos visto a uno que

echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros.”

Jesús respondió: “No se lo impidan, porque uno que hace milagros en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro.

Y, además, el que les dé a beber un vaso de agua, porque siguen al Mesías, les aseguro que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al infierno, al fuego que no se apaga.

Y, si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser echado con los dos pies al infierno.

Y, si tu ojo te hace caer, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios, que ser echado con los dos ojos al infierno, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.” Palabra del Señor.

Meditación

Interpretamos la Palabra en dos sentidos: Hospitalidad de Dios para con todos; hospitalidad hacia los demás. ¿Dónde y con quién está Dios, el Espíritu Santo? Planteada la cuestión así, es claro que respondemos: en todas partes y con todas las personas. Pero… “seguro que nosotros tenemos más a Dios, con nosotros está más el Espíritu Santo”.

¡Gracias a Dios que Dios es más grande que nosotros en todos los sentidos! ¡Gracias a Dios que Dios es más hospitalario y acogedor que nosotros!

El libro de los Números y la primera parte del evangelio nos presentan a un Dios abierto, acogedor, hospitalario de todas las personas. Derrama su espíritu sobre los llamados, aunque no estén presentes; Jesús enseña que Dios, la misión, la evangelización, la presencia del Espíritu no estaban únicamente en los doce, ni en el grupo de sus seguidores directos… el Espíritu está en todas partes, y en quien Él llama.Dejemos actuar al Espíritu, no lo encerremos en el círculo de los nuestros. Dios mora en la persona que lo quiere recibir, pero es Él quien hace la invitación.

El tema de los celos espirituales es muy viejo, así habla el libro de los Números, y sigue siendo actual. Nuestra Iglesia se cree en posesión de toda la verdad; nuestra parroquia es la mejor; nuestro grupo, comunidad o ministerio hace mejor las celebraciones, las oraciones, las catequesis… Y cuando vemos los frutos espirituales de otros grupos o ministerios no los reconocemos, o hasta: “se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros.”

Convertirnos es ser hospitalarios está en la carta de Santiago y de la segunda parte del evangelio. Dar de beber un vaso de agua a quien la necesite, es la manera de significar la hospitalidad, la acogida a todas las

90


personas; Santiago condena la riqueza acumulada en vez de ser repartida con quienes están necesitados.

La experiencia de nuestro país es clara: las casas de los pobres están abiertas a todas las personas, las de los ricos están cerradas, cercadas, alambradas y con verjas electrificadas. Las familias de los pobres separan un plato de comida para “el peregrino”, el que pase; las de los ricos ponen a comer aparte y comida distinta a las propias personas que les están ayudando en la casa…

Este puede ser el escándalo por el que nos tengamos que cortar la mano o el pie, sacar un ojo… miremos qué debemos cortar en nuestra vida para poder ser ejemplo. El ejemplo que se nos pide es estar abiertos a la presencia del Espíritu fuera de nuestro grupo, y ser hospitalarios compartiendo nuestros bienes, hasta el vaso de agua, con quienes más lo necesitan.

Oración de los fielesQuien preside: Confiando en la misericordia de Dios, le presentamos

las intenciones personales, familiares y de la Patria. A cada oración respondemos: Padre, que seamos acogedores1. Por la Iglesia, para que se abra al ecumenismo trabajando por la

unidad de las Iglesias, y reconociendo la presencia del Espíritu en otras manifestaciones de fe. Oremos.

2. Por los grupos, comunidades, ministerios de nuestros sectores y parroquia, para que trabajen en unidad, se esfuercen en reconocer lo bueno de los demás. Oremos.

3. Por los ricos de nuestro país, para que pongan sus bienes al servicio del desarrollo de todo el pueblo, principalmente de los más necesitados. Oremos.

4. Para que la hospitalidad sea una de las virtudes practicadas en las comunidades, familias y personas. Oremos.

5. Para que nos preocupemos de ser solidarios y solidarias con las necesidades de los pobres y de la patria. Oremos.

6. Para que seamos buenos ejemplos con todas las personas, principalmente con los pequeños, los pobres y los necesitados. Oremos.

7. Para que los niños y los jóvenes crezcan en un ambiente de amor, respeto, solidaridad y compromiso por la superación personal, familiar y del país. Oremos.

Quien preside: Padre, acoge esto que te acabamos de pedir y danos lo que tú sabes que necesitamos, ya que te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.

28 Feria o memoria libre: San Wenceslao, mártir o San Lorenzo Ruiz y compañeros mártires

Lunes Verde o Rojo

Lectura del Profeta Zacarías 8, 1-8 En aquellos días, vino la palabra del Señor de los Ejércitos: Así dice el

Señor de los Ejércitos: Siento gran celo por Sión, gran cólera en favor de ella.

91


Así dice el Señor de los Ejércitos: Volveré a Sión y habitaré en medio de Jerusalén. Jerusalén se llamará “Ciudad Fiel”, y el monte del Señor de los Ejércitos, “Monte Santo”.

Así dice el Señor de los Ejércitos: De nuevo se sentarán en las calles de Jerusalén ancianos y ancianas, hombres que, de viejos, se apoyan en bastones. Las calles de Jerusalén se llenarán de muchachos y muchachas que jugarán en la calle.

Así dice el Señor de los Ejércitos: Si el resto del pueblo encuentra esto imposible aquel día: ¿será también imposible a mis ojos? oráculo del Señor de los Ejércitos.

Así dice el Señor de los Ejércitos: Yo libertaré a mi pueblo del país de Oriente y del país de Occidente, y los traeré para que habiten en medio de Jerusalén. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios con verdad y con justicia. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 101. R/. El Señor reconstruyó Sión, y apareció en su gloria.

Los gentiles temerán tu nombre, los reyes del mundo, tu gloria: cuando el Señor reconstruya Sión y aparezca en su gloria, Y se vuelva a la súplica de los indefensos, y no desprecie sus peticiones. R/.

Quede esto escrito para la generación futura, y el pueblo que será creado alabará al Señor: Que el Señor ha mirado desde su excelso santuario, desde el cielo se ha fijado en la tierra, para escuchar los gemidos de los cautivos, y librar a los condenados a la muerte. R/.

Los hijos de tus siervos vivirán seguros, su linaje durará en tu presencia: para anunciar en Sión el nombre del Señor, y su alabanza en Jerusalén; cuando se reúnan unánimes los pueblos y los reyes, para dar culto al Señor. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 9, 46-50 En aquel tiempo los discípulos se pusieron a discutir quién era el más

importante. Jesús adivinando lo que pensaban, cogió de la mano a un niño, lo puso a su lado y les dijo: El que acoge a este niño en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí, acoge al que me ha enviado. El más pequeño de ustedes es el más importante.

Juan tomó la palabra y dijo: Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y, como no es de los nuestros, se lo hemos querido impedir. Jesús le respondió: No se lo impidan: el que no está contra ustedes, está a favor su. Palabra del Señor

Meditación

El profeta Zacarías nos habla de una ciudad ideal; ese es su deseo para Jerusalén. Y esa lectura, como ayer, Dios vuelve a hablar de hospitalidad. Dios se invita a vivir en la ciudad, en cada persona, en la comunidad: y habitaré en medio de Jerusalén. Dios se auto invita; Él es quien vendrá a habitar a la ciudad. Ella se hace hospitalaria, lo acoge, y esa presencia hace una ciudad nueva. Aparecen los signos de hospitalidad: los ancianos

92


y ancianas podrán estar en las calles tomando el sol, charlando; los niños y jóvenes estará alegres, jugarán en las calles y parques.

Nuestra ciudad, campo, aldea, pueblo, comunidad, sector ¿se parece a esto? ¿Se puede circular libremente por las calles? ¿Pueden salir los ancianos y ancianos, los niños y jóvenes con tranquilidad? La respuesta es NO, en la mayoría de los lugares de República Dominicana. Y si nos preguntamos por las causas diremos que es la INSEGURIDAD, la VIOLENCIA, el MIEDO.

Deberíamos ir más a lo profundo, ¿no será la pérdida de valores, la educación dada en las familias, el no tener a Dios en la vida, en la familia ni en la sociedad?

Debemos ser hospitalarios con Dios, recibirlo en nuestras vidas y hacerlo quedarse; también en las familias, comunidades, en la Patria en general. Seguro, si Dios estuviese en medio de nosotros, mejor, si pusiésemos a Dios en las vidas y acciones, seguro que la situación de las comunidades y del país en general sería diferente. Dios se auto invita a vivir en la comunidad, en la persona y en la ciudad, acojámoslo.

El evangelio toca el tema tratado ayer sobre lo de acoger o no a las personas buenas que hacen el bien, pero no son de nuestro grupo. Hoy leemos la versión de Lucas, ayer la de Mateo. Este tema lo damos por tratado. Nos detenemos en la acogida y hospitalidad que debe darse a los niños y a los pequeños.

Jesús nos invita a acoger, a ser hospitalarios con los niños, con los pequeños y sencillos. Cuando somos hospitalarios con ellos, estamos acogiendo en nuestra vida, casa, comunidad o grupo al mismo Jesús.

No podemos ser hospitalarios ni acogedores de los pequeños si nos consideramos importantes, superiores, los primeros. Eso les pasó a los discípulos, estaban planeando quiénes ocuparían los primeros puestos. En este tiempo de tanta campaña política, esto lo vemos, lo sentimos, aunque los partidos políticos estén repartiéndose esos puestos.

Entre nosotros el más importante siempre será el servidor. Eso debe aplicarse también a los puestos políticos, y no podremos votar a quien sabemos “que se va a servir”, en vez de servir al pueblo y a los más necesitados.

En la Iglesia, en nuestros grupos, hagamos lo mismo, pongamos de coordinadores, dirigentes… a quienes van a servir a la comunidad, no a quien desea ascender.

29 Fiesta de los Santos Arcángeles: Miguel, Gabriel y Rafael

Martes Blanco

Lectura del libro del profeta Daniel 7,9-10.13-14 Durante la visión, vi que colocaban unos tronos, y un anciano se sentó; su

vestido era blanco como nieve, su cabellera como lana limpísima; su trono, llamas de fuego; sus ruedas, llamaradas. Un río impetuoso de fuego brotaba delante de él. Miles y miles le servían, millones estaban a sus órdenes. Comenzó la sesión y se abrieron los libros.

93


Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él. Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin. Palabra de Dios

(O la siguiente lectura del Apocalipsis, a elegir una de las dos)

Lectura del libro del Apocalipsis 12, 7-12a Se trabó una batalla en el cielo; Miguel y sus ángeles declararon la guerra

al dragón. Lucharon el dragón y sus ángeles, pero no vencieron, y no quedó lugar para ellos en el cielo. Y al gran dragón, a la serpiente primordial que se llama diablo y Satanás, y extravía la tierra entera, lo precipitaron a la tierra, y a sus ángeles con él. Se oyó una gran voz en el cielo:

Ahora se estableció la salud y el poderío, y el reinado de nuestro Dios, y la potestad de su Cristo; porque fue precipitado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba ante nuestro Dios día y noche.

Ellos le vencieron en virtud de la sangre del Cordero y por la palabra del testimonio que dieron, y no amaron tanto su vida que temieran la muerte. Por esto, estad alegres, cielos, y los que moráis en sus tiendas. Palabra de Dios.

Salmo Responsorial: 137. R/ “Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor”

Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti, me postraré hacia tu santuario. R.

Daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma. R.

Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca; canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande. R.

Lectura del santo evangelio según san Juan 1,47-51 En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: “Ahí

tienen a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.” Natanael le contesta: “¿De qué me conoces?” Jesús le responde: “Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.” Natanael respondió: “Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.” Jesús le contestó: “¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.” Y añadió: “Yo les aseguro: verán el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.” Palabra del Señor.

Meditación

Los ángeles aparecen muchas veces en la Palabra de Dios; cuando aparecen, lo hacen significando a un “enviado” o “mensajero”. Son muchos, muchísimos, pero no conocemos el nombre sino de unos pocos, de los principales, de los “arcángeles”, que significa “príncipes de los ángeles”.

94


Los arcángeles más conocidos son Miguel, es decir “¿quién como Dios?”; Gabriel, “fuerza de Dios”; Rafael, “medicina de Dios”. Hoy celebramos la fiesta de estos tres.

Debemos elegir entre una de las dos primeras lecturas. Daniel nos presenta a una enorme multitud, millones, de ángeles sirviendo, dando culto y alabanza a Dios. El principal, el importante no es ningún ángel, sino el hijo que viene entre las nubes, haciendo una referencia directa a Cristo.

La lectura del Apocalipsis narra la batalla del bien contra el mal y la representa con la lucha entre los ángeles, dirigidos por Miguel, contra los demonios, dirigidos por Satanás. Y la victoria del bien, de Miguel.

En evangelio nos presenta una de las muchas veces que aparecen los ángeles. Jesús habla de ángeles, los da por conocidos, y los acepta.

La Biblia no nos dice cómo son los ángeles ni los arcángeles, sino que habla de sus actuaciones. Presentamos brevemente algo de los tres arcángeles cuya fiesta hoy celebramos:

Miguel, es el más conocido. Representa la lucha del bien y del mal y la victoria de Dios sobre el maligno. Así lo vemos en la lectura del Apocalipsis presentada para la Misa de hoy. También aparece así, luchando contra el maligno en el profeta Daniel. Y en la carta de Judas, en el versículo 9, se le llama “el arcángel Miguel”.

Gabriel, es más conocido por el anuncio a María de la Encarnación del Hijo de Dios; pero antes ha anunciado a Zacarías el nacimiento de Juan el Bautista, esto lo vemos en el capítulo primero de san Lucas. Gabriel también aparece en el libro del profeta Daniel.

Rafael es protagonista en el libro de Tobías. Acompañó y ayudó al hijo en su viaje; al regreso curó al padre con la medicina que había anunciado. Por eso le llamamos medicina de Dios.

Por tanto, la función que vemos en los arcángeles es doble, con relación a Dios están cantándole, alabándole y sirviéndole; con relación a nosotros y la humanidad nos ayudan en la lucha contra el mal y el pecado, nos anuncian buenas noticias de parte de Dios y nos traen la medicina, la salud procedente de Dios.

En este día sintamos la protección de los arcángeles, sintamos que no estamos solos en la lucha contra el mal, sintamos la cercanía de Dios por medio de sus arcángeles; y tratemos de imitarles en la alabanza a Dios, en servirle sirviendo a los hermanos y hermanas, siendo medicina de Dios, buena noticia y personas comprometidas contra el mal.

30 Memoria obligatoria: San Jerónimo, Presbítero y Doctor

Miércoles Blanco

Lectura del libro de Nehemías 2, 1-8 El mes de Nisán del año veinte del rey Artajerjes, siendo yo, Nehemías,

copero mayor, tomé vino y se lo ofrecí al rey. Nunca me había presentado ante él con cara triste. Y me dijo el rey: ¿Qué

te pasa que estás tan triste? Tú no estás enfermo, sino preocupado.

95


Me llevé un susto enorme y respondí al rey: Viva el rey eternamente. ¿Cómo no he de estar triste cuando la ciudad donde se hallan enterrados mis padres está en ruinas y sus puertas consumidas por el fuego? El rey me dijo: ¿Qué pretendes? Me encomendé al Dios del cielo y contesté al rey: Si a Su Majestad le parece bien, y si está satisfecho de su siervo, déjame ir a Judá y reconstruiré la ciudad donde están enterrados mis padres.

El rey y la reina, que estaba sentada a su lado, me preguntaron: ¿Cuánto durará tu viaje y cuándo volverás? Al rey le pareció bien la fecha que le indiqué y me dejó ir.

Pero añadí: Ruego a Su Majestad que me den cartas para los gobernadores de Transeufratina, para que me faciliten el viaje hasta Judá.

Y una carta dirigida a Asaf, encargado de los bosques reales, para que me suministre vigas de madera para los portones de la ciudadela del templo, para el muro de la ciudad y para la casa donde me voy a instalar. Por un favor de Dios el rey me lo concedió todo. Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 136,R/. Que se me pegue la lengua al paladar, si no me acuerdo de ti. Junto a los canales de Babilonia nos sentamos a llorar con nostalgia de

Sión; en los sauces de sus orillas colgábamos nuestras cítaras. R/. Allí los que nos deportaron nos invitaban a cantar, nuestros opresores, a

divertirlos. “Cántenos un cantar de Sión”. R/. ¡Cómo cantar un cántico del Señor en tierra extranjera! Si me olvido de ti,

Jerusalén, que se me paralice la mano derecha. R/. Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti, si no pongo

a Jerusalén en la cumbre de mis alegrías. R/.

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 9, 57-62 En aquel tiempo, mientras iban de camino Jesús y sus discípulos, le

dijo uno: Te seguiré a donde vayas. Jesús le respondió: Las zorras tienen madriguera y los pájaros, nido pero el Hijo del Hombre no tiene donde reclinar la cabeza.

A otro le dijo: Sígueme. El respondió: Déjame primero ir a enterrar a mi padre. Le contestó: Deja que los muertos entierren a sus muertos, tú vete a anunciar el Reino de Dios.

Otro le dijo: Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia. Jesús le contestó: El que echa mano al arado y sigue mirando atrás, no vale para el Reino de Dios. Palabra del Señor.

Meditación

Como primera lectura leemos un párrafo de Nehemías. Esta persona era un judío que había conseguido un buen puesto dentro de la corte en Babilonia, y no regresó a Jerusalén con el grupo del pueblo que ha retornado a su tierra. Le llegan malas noticias: está costando mucho la construcción de la ciudad y del templo. Él, persona importante, no se queda indiferente, decide ayudar al pueblo y para ello utiliza todas sus

96


influencias. Consigue permiso para ir a su tierra y para usar materiales y dinero en la reconstrucción de la ciudad.

Nehemías no es de la clase sacerdotal, es un seglar, un laico. Se podía haber quedado en su tranquilidad, pero prefieren el bien de la gente, la reconstrucción de su país, a su comodidad y bienestar.

Muchas enseñanzas salen de esta lectura. También hoy la Patria y la Iglesia deben reconstruir muchas situaciones difíciles. Nos toca colaborar a todos y todas, laicos y sacerdotes, diáconos, consagrados y consagradas. La Iglesia y la Patria están en nuestras manos, Dios cuenta con nosotros para arreglarlas y mejorarlas. Independientemente de la situación de cada quién, Dios cuenta con nosotros. Hoy la primera lectura da a entender que cuenta con los políticos. Tenemos políticos y políticas que se declaran cristianos y católicos, debe notarse en su compromiso, su honradez, su trabajo por el pueblo y por los pobres.

El evangelio tiene que ver con distintas llamadas y respuestas del Señor y al Señor. Podíamos pensar principalmente en los sacerdotes, consagrados y consagradas, pero la lectura va para todo cristiano. Todos y todas estamos llamados aunque sea en distintos grados.

En primer lugar queremos destacar: ente las llamadas de Jesús hubo distintas respuestas, unos le siguieron y otro prefirieron seguir con su vida. Hoy nos presenta tres situaciones ante la llamada:1.- Cuando uno se le ofrece voluntario a seguirle, Jesús le advierte de

las dificultades; su vida es estar en camino, no tener lugar donde descansar, vivir sin casa. Quien desee seguir a Jesús en radicalidad no puede “instalarse”

2.- “Déjame enterrar a mi padre”. No habla de enterrar o no enterrar, sino que no podemos dejar el seguimiento de Jesús hasta que se mueran los padres, hasta que tengamos mucho tiempo libre. A Cristo debemos seguirlo en la vida y con las circunstancias de la vida en las cuales vivimos.

3.- El tema de la familia y mirar hacia atrás. Si la misión lo pide, debemos renunciar a tener familia, o a la familia que tenemos. Así lo vemos en tantos cristianos y cristianas que, al sentirse llamados a la vocación sacerdotal o de la Vida Consagrada, a tantos misioneros laicos que deciden trabajar por Cristo dejando lo demás.¿En qué grupo me encuentro? ¿A qué me llama el Señor? ¿Estoy

dispuesto a renunciar a algo, a qué?

Documents

Arquidiócesis de Santo Domingo Arquidiócesis de …parroquia.salesianosmoca.com/wp-content/uploads/2014/07/09... · que tengan Biblia una de las citas bíblicas del tema. 1. Cantos