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ESTUDIOS INTERNACIONALES 156 (2007) - ISSN 0716-01.40 55-65 Instituto de Estudios Internacionales - Universidad de Chile Chile y Asia hoy: una mirada crítica Mario Artaza Rouxel I Síntesis La región del Asia Pacífico reúne las economías más dinámicas del mundo y ha sido considerada por Chile como del mayor Interés nacional. Sin embargo, pareciera que nuestra diplomacia carece de una política de Estado, debidamente planificada con todos los actores nacionales, para lograr importantes objetivos en esa área del mundo, aunque hay que reconocer que se han logrado importantes logros en el pasado. Nuestra visión de Chile como país puente y país plataforma aún dista de poder concretarse. Hay que estar atentos a los desarrollos de nuevas perspec- tivas de integración regional en Asia y sobre todo, hay que mantener una mirada atenta sobre China. Abstract Asia Pacific ¡s the región wích rhe more dynamiceconomiesof theworld and Chile has defined ir as of the greatest narional interese. However, otir diplomacy sccms ro lack a state policy, duly planned and with the panicipation of all the relevant actors ¡n order to pursue important objectivcs in tliat área of the world. Ir is important to rccognizc thar Chile has obtamed important achievements in Asia, Hut the visión of Chile as n bridge between Asia and South America or as platform for business is yet far from becoming a rcality. \X'e havc to kccp track of nev/ devdopments in the regional integrarion of Asia and overall, a closer look on China. 55

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  • ESTUDIOS INTERNACIONALES 156 (2007) - ISSN 0716-01.40 55-65Inst i tu to de Estudios In t e rnac iona l e s - Un ive r s idad de Chile

    Chile y Asia hoy: una mirada crtica

    Mario Artaza Rouxel

    I Sntesis

    La regin del Asia Pacfico rene las economas ms dinmicas del mundoy ha sido considerada por Chile como del mayor Inters nacional. Sinembargo, pareciera que nuestra diplomacia carece de una poltica deEstado, debidamente planificada con todos los actores nacionales, paralograr importantes objetivos en esa rea del mundo, aunque hay quereconocer que se han logrado importantes logros en el pasado. Nuestravisin de Chile como pas puente y pas plataforma an dista de poderconcretarse. Hay que estar atentos a los desarrollos de nuevas perspec-tivas de integracin regional en Asia y sobre todo, hay que manteneruna mirada atenta sobre China.

    Abstract

    Asia Pacific s the regin wch rhe more dynamiceconomiesof theworldand Chile has defined ir as of the greatest narional interese. However,otir diplomacy sccms ro lack a state policy, duly planned and with thepanicipation of all the relevant actors n order to pursue importantobjectivcs in tliat rea of the world. Ir is important to rccognizc tharChile has obtamed important achievements in Asia, Hut the visin ofChile as n bridge between Asia and South America or as platform forbusiness is yet far from becoming a rcality. \X'e havc to kccp track ofnev/ devdopments in the regional integrarion of Asia and overall, acloser look on China.

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    INTRODUCCIN

    Hay una cita de Hans Morgenthau1que creo muy apropiada para iniciar elanlisis de nuestro tema. AI discutir lacalidad de la diplomacia como fac-tor del poder nacional, Morgenthaudice: La conduccin de los asuntosexteriores de una nacin por parte delos diplomticos es para el poder na-cional durante tiempos de paz lo mis-mo que las estrategias y tcticas de loslderes militares durante tiempos deguerra. La diplomacia es el arte de com-binar los distintos elementos de podernacional para que rindan el mximoefecto sobre aquellos puntos de la esce-na internacional que ms directamenteconciernen el nteres nacional. Y con-cluye aseverando que si la visin de ladiplomacia es defectuosa, su juicio err-neo y clbl su determinacin, las de-ms ventajas que pueda tener una na-cin no le servirn de nada. Para serrealistas, en Chile deberamos reempla-zar la cita a los diplomticos por losconductores de la poltica exterior, yaque con honrosas excepciones los di-plomticos propiamente tales no lle-gan a tener estas responsabilidades.

    La pregunta que queremos formu-larnos es la siguiente: frente a un esce-nario internacional en que el Asia-Pa-cfico aparece como el rea mas impor-tante del globo, con las economas msdinmicas y que consideramos del ma-yor inters nacional, est nuestra di-

    plomacia combinando al nivel suficientelos elementos del poder nacional y susrecursos para enfrentar todos los desa-fos que implica nuestra relacin con esaregin? Planteado de otro modo, te-nemos una poltica de Estado que des-pus de una planificacin detallada de-termine el papel que deben desempeartodos los actores nacionales para lle-var adelante, con determinacin, obje-tivos claros y posibles en el Asia Pacfi-co? Creo que la respuesta a estas inte-rrogantes es, desgraciadamente, nega-tiva.

    Ante probables acusaciones de igno-rar lo mucho que ha hecho Chile porlograr cierta insercin en esa regin delmundo, permtanme aseverar desde unprincipio que reconozco, y as destaca-r, que Chile ha tenido logros impor-tantes y pioneros en materia de apertu-ra de Embajadas, en el APIC y en ungran nmero de acuerdos de libre co-mercio con pases del Asia Pacfico.

    Pero ver de manera optimista elvaso medio lleno no debera darnosuna sensacin de autosatisfaccn ycomplacencia. Faltan elementos impor-tantes, de todo orden, que an nos lle-van a ver el vaso medio vaco y ellonos debera impulsar al diseo y puestaen ejecucin de esa poltica de Estadoque an falta para esa importantsimazona, que es la ms dinmica de la eco-noma mundial y que registra los ma-yores ndices de crecimiento, acumu-lacin de reservas Internacionales e in-

    1 Morgcnthau, Hans (1986), Poltica entre las Naciones, Buenos Aires, Grupo Editor Lati-noamericano, 6a edicin revisada por Kenncth \V. Thompson, p. 177.

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    novacin tecnolgica. Pareciera que elentusiasmo de muchos chilenos del sec-tor privado por abrirse a la globa-llzacn no alcanza Igual intensidadcuando se trata de Asa, con la excep-cin de pioneros importantes, talescomo la CSAV, la CAP y el Banco deChile. La distancia, las dificultades deIdioma y el comportamiento estadsti-co de algunos productos estrella, comoel cobre, el mineral de hierro, la harinade pescado, la celulosa y los vinos, sonfactores que inducen a complacencia.Ella nos puede costar caro.

    A este cuadro sobre Asia en gene-ral, en los ltimos aos se ha Ido su-mando China que, unto con Japn, esla nueva locomotora de crecimiento dela regin. Sus altas y sostenidas tasasde crecimiento, inversin, consumo yexportaciones la han convertido, segnel ltimo Informe del PECC, en una eco-noma vida de recursos naturales, loque se ha traducido en alzas importan-tes de precio de diferentes commoditiesen el mercado mundial, con diferenteimpacto en las economas latinoameri-canas del APEC2. Por lo mismo Chinarequiere un seguimiento permanente.

    MIRADAS TEMPRANAS Y LOGROS

    Nuestro inters como nacin en elAsia no es nuevo, ha sido un tanto es-pordico (espasmdico, diran algunos),transitorio y no continuo. Poco despus

    de la Independencia ya algunos auda-ces y visionarios armadores formaronla llamada Compaa de Calcuta paratransportar mercadera hasta la Indiaen la fragata Carmen, con numero-sos puertos de recalada en las islas delPacfico, Filipinas, y en lo que son hoySingapur y Malasia. Otros naveganteschilenos llegaron hasta Nueva Zelan-dia y la presencia de monedas chilenasen el Pacfico atestigua un comercioimportante. Sin embargo, los flujos decomercio cambiaron, Valparaso perdiimportancia con la apertura del Canalde Panam y nuestros hombres de ne-gocios miraron ms a Europa y luego aAmrica del Norte.

    Entre las instituciones chilenas, solola Marina mantuvo vivo el pensamien-to de que Chile tena un destino marti-mo, destacando la Importancia del Pa-cfico para nuestro desarrollo. En ladcada de 1960 el sector acadmico fueel primero en despertar conciencia en-tre otros sectores del pas de que el marque tranquilo te baa realmente po-da ofrecer un futuro esplendor. ElInstituto de Estudios Internacionales, enel ao 1970, tres aos despus de sufundacin, convoc a un seminario in-ternacional bajo el ttulo Amrica La-tina vuelve al Pacfico, en el que parti-ciparon quince pases. Tempranamentedescubrimos que nuestro destino en elAsia estaba atado al de otros pases dela regin. El desafo era demasiado vas-to para enfrentarlo solos.

    Se ha observado que Mxico se ha visto negativamente afectado por el traslado a Chinade la produccin de industrias de maquila, mientras que Per >' Chile se han beneficiadopor los alros precios dei cobre y otros minerales.

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    Hasta las dcadas de los aos seten-ta y ochenta los contactos oficales conAsia eran escasos. En esos aos, quizspor influencia de la Marina, pero tam-bin por la necesidad ce buscar apoyointernacional frente a las crticas y con-denas de las Naciones Unidas, el Go-bierno de la dictadura militar inici unapoltica de apertura de Embajadas y mi-siones comerciales en varios pases delrea, tales como Tailandia, Filipinas,Indonesia y Singapur. Las relaciones co-merciales con China, Corea del Sur yJapn tambin se vieron fortalecidas.

    Ya el primer gobierno de la Concer-tacin consider que el Asia Pacfico erauna regin en la cual Chile deba incre-mentar y consolidar su proceso dereinsercin internacional. Chile se in-corpor al PECG en 1991 y solicit, sinxito, incorporarse como observador delAPEC en Sel, tambin en 1991. En esosaos se cre la Fundacin Chilena delPacfico, en la que participan empresa-rios, acadmicos y representantes delsector pblico y que ha realizado unaimportante labor en el pas. Chile habaadvertido la importancia del APEC comomecanismo para proyectarse hacia Asiay el Pacfico. Se perciba que s bien elAtlntico haba sido el centro de activi-dades poltico-econmicas durante el si-glo XX, el Pacfico lo sera durante el si-glo XXI. Debamos por ello ingresar alAPEC. Nuestro ingreso no fue fcil y re-quiri un gran esfuerzo poltico y diplo-mtico: hubo que superar incluso la opo-sicin de Australia y Estados Unidos. Enello fueron particularmente activos losEmbajadores chilenos Carlos Portales,

    Jaime Lagos y Octavio Errzuriz. Chileingres a! APEC en 1994, es decir, a unforo econmico y comercial multilate-ral cooperativo, comprometido a redu-cir las barreras comerciales e incremen-tar la inversin en el rea del Asia Pac-fico.

    La accin de Chile dentro del APECha sido muy positiva. Hoy en da cercadel 60% de sus exportaciones se diri-gen a economas del Asia Pacfico (estoincluye a Estados Unidos y Mxico). Suparticipacin en este foro le ha facilita-do, gracias a los contactos y lafamliarizacin lograda en el mismo, laconclusin de Tratados de Libre Comer-cio con Corea del Sur, Singapur, Nue-va Zelandia, Brunei y China (libre co-mercio de bienes, con negociaciones enmarcha sobre servicios e inversiones).Entretanto se han concluido negocia-ciones con Japn, con el cual podra fir-marse un TLC a fines de marzo. Ade-ms, se han logrado acuerdos con In-dia (no miembro del APEC), se proyec-ta Iniciar negociaciones con Australiay en el horizonte existen posibles nego-ciaciones con Malasia y Vietnam, e in-cluso Tailandia.

    Chile fue anfitrin del APEC 2004cuyo resultado fue calificado como ungran xito para el pas. El esfuerzo reali-zado ese ao fue grande, y no solo porparte del Gobierno. ABAC, que rene arepresentantes del sector privado de laregin, dirigido por Hernn Somerville,hizo planteamientos novedosos queabren nuevas perspectivas al foro.

    Paralelamente, en estos aos se hahablado en el pas de la necesidad de

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    convertir a Chile en pas puente y pasplataforma. Por su ubicacin geogrfi-ca, con ms de 4500 Km. de costas enel Pacfico, por su participacin comopas asociado en el Mercosur (y ahoraen la CAN) y sus contactos en Asia, Chi-le estara en una posicin privilegiadapara servir de puente para el ingreso ysalida desde y hacia la regin a travs desus puertos y corredores bocenicos.Adems, Chile podra consolidarse comopas plataforma de bienes y servicios,permitiendo que empresas extranjeras seasienten en el pas a fin de realizar nego-cios con el resto de la regln y conperfilacin hacia el Asia Pacfico.

    Esta sntesis parece revelar que Chi-le ha alcanzado una variada y no des-preciable cantidad de logros en su es-fuerzo por insertarse y tener una pre-sencia considerable en la regin del AsiaPacfico. Tenemos un elevado nmerode misiones diplomticas y comercia-les en el rea, un creciente intercambiocomercial con nfasis en la profundi-zacin del proceso de liberalizacin, yun buen nivel de inversiones provenien-tes de la regin... Debemos por elloconsiderarnos satisfechos? Y s no fue-ra as, qu nos falta?

    TAREAS PENDIENTES

    Lo primero que echamos de menoses la existencia de una poltica defini-da, con un plan estratgico, para avan-zar en lo que se ha ido bosquejando enel pasado. S que el Ministerio de Re-laciones Exteriores prepar hace algn

    tiempo un Plan Asia, pero su contenidono es el que se requiere para lograr elmximo efecto. No se trata de busi-ness as usual, con ms visitas de altonivel y participacin en foros. Lo quedebe perfilarse es una estrategia quemovilice a distintos Ministerios., dota-dos de recursos adecuados, para con-cretar objetivos que estn en la concien-cia de muchos que laboran en Asia.

    Hay algunas buenas seales en dis-cursos del Ministro de Relaciones Ex-teriores: el 21 de diciembre pasado ase-gur que el sello distintivo de la po-ltica exterior de la Presidenta MichelleBachelet sera volcarse hacia el AsiaPacfico con todas las energas de esteGobierno. An ms, en los aos 2007y 2008 la prioridad ser generar unaestrategia de mayor envergadura quepermita la asociacin econmica y co-mercial entre Asia-Pacfico y todaSudamrica. Luego, al hacer un balan-ce de la gestin del Ministerio de Rela-ciones Exteriores en 2006 asegur queel concepto de Chile, pas puente en-tre Asia Pacfico y Sudamrica tiene yauna realidad estructural, con avancessignificativos en el ambicioso plan paraconvertir a Chile en el nexo comercialentre Sudamrica y el Asia Pacfico.

    El concepto de pas puente es in-teresante y valioso. Chile, con su ex-tensa costa, pondra sus puertos a dis-posicin de sus vecinos del Atlntico.iVlltiples cadenas de servicios, especial-mente bancarios, cubriran las necesi-dades de los clientes del otro lado de laCordillera (lase Brasil, Uruguay, Soli-via, Paraguay y Argentina). Con ima-

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    gnacin, podramos visualizar puertoschilenos cumpliendo funciones simila-res al de Rotterdam. La concrecin deesta idea est an lejana de la realidad,aunque hay que reconocer que desde ladcada de los aos noventa nuestrospuertos han dado importantes pasos demodernizacin.

    Para lograr realmente este objetivoChile necesita puertos modernos, alta-mente eficientes y competitivos. Tene-mos pocos puertos de profundidad y losaltamente protegidos tambin son es-casos, aunque nuestro sector privado haefectuado importantes inversiones eneste campo. Por otra parte, las autori-dades diplomticas peruanas de dosgobiernos han anunciado que Percompetir con Chile en la bsquedade servir de puente con el Asia. Creoque si en nuestra regin hay avances enmateria de comercio, ambos pases po-dran perfectamente establecer sinergiasportuarias. Pero, s de competir se tra-ta, es importante saber si podemos ofre-cer una red de transporte segura, expe-dita y eficiente. Y paralelamente, ofre-cer una red de servicios integral,internacionalizada, con conexiones., fi-liales o sucursales bien instaladas, tan-to en Asia como en el Atlntico. Cabes mencionar el trabajo de la CSAV enmateria naviera, con su valiosa inser-cin en China. El establecimiento deambas redes quizs requiera la coordi-nacin del Ministerio de RelacionesExteriores con los Ministerios de Ha-cienda, Economa y Transportes parala adopcin de las medidas requeridas,en conjunto con el sector privado.

    Mucho se ha discutido sobre los co-rredores bocenlcos. Al parecer la l-tima Cumbre Sudamericana no tomdecisiones definitivas sobre la materia.Y poco podremos avanzar si no tene-mos acuerdos claros de cmo poderavanzar en los esfuerzos en los camposde la infraestructura (planificacin, fi-nanciacin, ejecucin, habilitacin, fi-nalizacin) y de los transportes inter-nacionales. Algunos aun dudan acercade cmo analizar los beneficios com-partidos.

    Para que veamos la prioridad quese otorga en Chile a este tema (en es-pera de alguna decisin sobre los co-rredores?) es interesante anotar lo si-guiente: a) el paso Cristo Redentor, queconcentra un alto porcentaje de nues-tro flujo carretero con Argentina, se cie-rra durante semanas en cada invierno.El diario El Mercurio de fecha 8 deenero del presente ao seala que laCuesta Caracoles que lleva al paso se-alado es considerada como uno delos ms peligrosos y en peor estado.Tiene 36 curvas, doce kilmetros deextensin y por ella pasan 1000 camio-nes, 200 automviles y cen buses dia-riamente. El MOP habra destinadocerca de 5 millones de dlares a mejo-rar la ruta, pero fuentes del gobiernoregional Indican que, lo que se necesitaes un rediseo de la va con un mayorcosto. Segn el mismo diario, en Ata-cama, reparar la carretera que conectacon Cajamarca y la Rioja, a travs delpaso San Francisco, costara ms de 20millones de dlares, pero por razonespresupuestarias solo se mejorar untra-

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    mo de la ruta debido al inters de lostrasandinos por exportar sus produc-tos a travs de los puertos de la TerceraRegin. En Arica, el intenso trfico decarga pesada en la ruta a Tambo Que-mado ha convertido el camino en uncampo lunar lleno de crteres. Deacuerdo con la misma fuente de infor-macin, aunque se han reparado algu-nos tramos, faltan 50 km del total de193 km. Conocemos nuestra realidadpresupuestaria y las distintas demandasque debe enfrentar el MOP, pero es atodas luces necesario que el Ministeriode Relaciones Exteriores coordine conel MOP una poltica concreta, realista,con plazos definidos, para solucionarla incertidumbre del cruce de la cordi-llera y las limitaciones que plantea elestado de las carreteras internaciona-les.

    Con su agudeza habitual, en uno desus Informes, el analista ArmenKouyoumdjian coincida en estos aspec-tos crticos al indicar que nuestros ban-cos carecen de una cadena de sucursa-les en Asia y Amrica Latina para po-der cubrir las necesidades de serviciosfinancieros de un pas puente efectivo,agregando que su personal, adems,carece del dominio de lenguas necesa-rio para esa tarea. Solo el Banco deChile tom recientemente la medidapionera de ingresar a China. Sera inte-resante conocer la opinin de la bancanacional en esta materia a fin de deter-minar qu apoyo requiere para solucio-nar este vaco.

    El pas plataforma: desde 2002Chile cuenta con una legislacin imposi-

    tiva destinada a facilitar el uso del pascomo plataforma para manejar inver-siones en otros pases. De esta manera,los inversionistas extranjeros no paganimpuestos en Chile sobre las gananciasderivadas de bienes en otros pases. Estaestrategia ha permitido que varias em-presas hayan instalado sedes regiona-les en el pas (Hewlett-Packard, Delta,Air France y otras). Esta es una exce-lente iniciativa que debera profundi-zarse al mximo posible, ms all de loeconmico-comercial si intentamosconvertir a Chile en puente interre-gional. Esto implica impulsar con lossocios del Asia Pacfico iniciativas en elcampo cientfico y tecnolgico, unapoltica realista en materia de Inmigra-cin y de facilitacin de visas para eje-cutivos y profesionales extranjeros. Porsupuesto, entraa una mayor integra-cin regional, acuerdos en materia dedoble tributacin y, como ha sealadoKoyoumdjian, mayores y ms expedi-tas facilidades de transporte areo en-tre los pases de la regin.

    Cuando sealamos estas deas sobreChile, pas puente y pas plataforma,resulta evidente que hemos analizado yevaluado el nteres de nuestros vecinosregionales en estas iniciativas y la utili-dad que ello pueda representarles. Laidea parece atractiva, pero son los in-tereses y no las ideas las que mueven elmundo como escribi Max Weber ycabe preguntarse si la demora en tomarmedidas efectivas y concretas en mate-ria de corredores bocenicos nos estenviando un mensaje que debamos es-cuchar. En esta materia, el entendimien-

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    to y la cooperacin con Brasil resulta dela mayor importancia estratgica y Bo-livia aumenta su importancia como nudopara las comunicaciones del norte chile-no con los vecinos del Atlntico.

    MS ALL DEL APEC: ASEAN

    Nuestra participacin en el APEC nospermite apreciar el alto y creciente n-mero de acuerdos de libre comerciosuscritos entre las economas asiticas,incluyendo India, con lo que ha aumen-tado significativamente el comerciointra-sitico. De acuerdo con muchosobservadores, se estn dando pasosimportantes para establecer un regio-nalismo de solo Asia. Si esto se sumaal desequilibrio existente en materia decomercio y flujos financieros, en que losEstados Unidos registran un importan-te dficit en su cuenta comercial (calcu-lado en casi 800 mil millones de dlaresen 2005) mientras que varias economasasiticas muestran un fuerte supervit,la situacin podra llevar a nuevas deman-das proteccionistas y a otros efectos ad-versos en el comercio transpacfico. Ade-ms, ante las incertidumbres que rodeanla Ronda de Dola, resulta imprescindi-ble que profundicemos nuestros acuerdoscon las economas de Asia.

    Ello nos obliga a pensar ms all delpropio APEC y considerar las perspecti-vas de la ASEAN. La evolucin de losentendimientos comerciales en Asia de-ben tener un seguimiento permanentedebido a su impacto en nuestra regin.

    La Asociacin de Naciones de Asia

    Sudorienta! (ASEAN) fue creada en 1967y cuenta actualmente con 10 pasesmiembros: Indonesia, Malasia, Filipi-nas, Singapur,Tailanda, Brunei Darus-salam, Vietnam, Laos , Myanmar yCamboya. La regin tiene una pobla-cin superior a los 500 millones, abar-ca 4.5 millones de km.2, con un PIB dems de 700 mil millones de dlares yun comercio total de 850 mil millonesde dlares. A partir de 1992 cuenta conun rea de Libre Comercio (AFTA),dentro del esquema de la ComunidadEconmica de la ASEAN, en la que seha avanzado en la reduccin de aran-celes y en la integracin de varios sec-tores prioritarios. Desde 1999 la ASEANmantiene un activo dilogo con China,Japn y Corea del Sur en el llamadoproceso ASEAN + Tres cuya meta esllegar a acuerdos comerciales bilatera-les que sirvan de base de un rea deLibre Comercio del Asia del Este. Ade-ms, promovido por Malasia, en 2005se estableci el mecanismo de Cumbresde Asia del Este (EAS), que incluyeASEAN + Tres, India, Nueva Zelandia yAust ra l ia . Rusia, Timor oriental ,Pakistn y Mongola esperan ser admi-tidos como miembros, y Estados Uni-dos y la Unin Europea han mostradointers por ser admitidos como obser-vadores. En noviembre de 2004, Chinafirm con la ASEAN un acuerdo desti-nado a eliminar aranceles antes del ao2010, lo que llev a la Presidenta de Fi-lipinas a saludar la emergencia de ungrupo regional que rivalizara con elNAFTA y la UE. Naturalmente, Japny Corea del Sur estn observando de

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    cerca estos desarrollos. Japn inclusolleg a sugerir un Acuerdo de Libre Co-mercio de los pases del EAS (EAFTA),mientras que India apoya un Acuerdode Libre Comercio Panasi-tico.

    Como nudo central de estos desa-rrollos, la ASEAN por supuesto tiene susproblemas y crticos, que creen que seha avanzado poco en sus casi cuarentaaos de vida y que antes de llegar aacuerdos con las tres potencias econ-micas de Asia debera concentrarse ensu propia integracin. Con tocio, la po-sibilidad de un acuerdo puramente asi-tico representara un factor a la vez inte-resante y preocupante, si se considera supotencial como bloque que tendera msal comercio intrarregional que al comer-cio mundial . A Australia y Nueva Ze-landia tambin les interesa este grupo ydesde 2004 han estado negociando unacuerdo de libre comercio entre el CER(Closer Economlc Ralations, que abar-ca Nueva Zelandia y Australia) y laASEAN, adems de que participan en laCumbre de Asia del Este.

    Los anuncios de Chile de su intersen negociar acuerdos de libre comerciocon Malasia y Viet Nam deben obser-varse necesariamente desde esta pers-pectiva y, por supuesto, deben conside-rarse muy favorables. Es de esperar quenuestra participacin en esa zona con-tine expandindose y que aumentenuestra presencia y nuestra preocupa-cin diplomtica y comercial. Los la-zos ya establecidos en lo comercial yeconmico deben reforzarsecon un ma-

    nejo diplomtico que siga de cerca es-tos desarrollos, buscando la manera deinc lu i r a Chile de la manera ms din-mica posible en estos procesos. Aunquees importante, no basta contar con unared de acuerdos comerciales. Nuestrapresencia y accin en Asa debe ir msall de las reuniones del APIiC.

    EL GIGANTE CHINO

    Todos miran hacia China. Es el gi-gante., no ya emergente sino muyreal, que nos hace admirarle por su cre-cimiento acelerado, temerle por su ca-pacidad de Influir en los precios de nues-tras exportaciones y, en ciertas condi-ciones, por su capacidad de desequili-brar las finanzas internacionales, a lavez que se le aprecia por haberse con-vertido en una enorme mquina que nosprovee de todo tipo de productos a bajocosto. Toda Asia est bajo su influen-cia y los dems actores globales, comoEstados Unidos, Japn y la Unin Eu-ropea miran las exportaciones chinascon el mayor inters. Adems, e mer-cado chino es importantsimo para es-tas potencias comerciales. En los lti-mos quince aos China se ha converti-do en el segundo importador ce petr-leo en el mundo (casi el 10% de la pro-duccin mundial), el primer importa-dor de estao, zinc y cobre (para felici-dad )r preocupacin de nuestros produc-tores), el segundo de a luminio , azcary soja. Como indic Osvaldo Rosales3

    3 Rosales, Osvaldo, notas de su presentacin ante la Cmara de Comercio de Bogot, no-viembre de 2006.

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    en una interesante exposicin realiza-da en noviembre de 2006, China solainfluye decisivamente en el manteni-miento de e q u i l i b r i o s econmicosglobales, contribuyendo con su ofertaa mantener en un bajo nivel la tasa deinflacin y de nteres en Estados Unidosy acumula reservas comprando bonosdel Tesoro, con lo cual ayuda a finan-ciar el dficit comercial de la principalpotencia econmica del mundo. Lasinversiones de todas las potencias econ-micas y las de chinos de ultramar (Taiwn,Singa pur, Malasia, Hong Kong} fluyenininterrumpidamente. China es hoy lacuarta economa del mundo y el tercerexportador e importador mundia l . Todoeso en quince aos.

    Nuestro TLC con China signific unavance Importantsimo. Fue el primerosuscrito entre China y un pas de Am-rica Latina. Demostr el inters de esegigante por una pequea economa sud-americana que le ofreca una vieja amis-tad, seriedad, estabilidad y, como dicenlos americanos, ubicacin. Gracias alos precios (no permanentes) del cobreChina se ha convertido en nuestro se-gundo socio comercial. Es esta una si-tuacin estable, permanente, ya enrie-lada y en la cual podamos descansarnuestros laureles? Creo que no. El n-mero de productos que vendemos aChina es reducido y ello se debe en par-te a nuestra pobre capacidad de oferta,por una parte, y a la estructura Impor-tadora china, por la otra. Los preciosdel cobre no estn asegurados para elfuturo. En consecuencia es preciso vol-ver a considerar qu atrajo a China de

    nosotros y poner mucho inters en de-sarrollar el potencial de esos elemen-tos.

    Est claro cules son los pases queinteresan realmente a China en nuestraAmrica: Brasil, por su enorme poten-cial, por su acero y su produccin desoja y otros productos agrcolas queChina necesita para su numerosa po-blacin; Venezuela, por su petrleo;Cuba, por su nquel; Chile y Per porel cobre.

    En consecuencia, hay que volver aloque llev a China a suscribir ese TLCcon Chile y a cmo aumentar o poten-ciar esos factores. Profundizar en ellosdebera ser un tema de anlisis muyprofundo, para saber claramente hastadnde podemos llegar y lo qne ello im-plica en costos y en riesgos. Porsupues-to, hay barreras en las que Chile debetrabajar ms que China. Lenguaje, porejemplo. En China muchos hablan cas-tellano, mientras que en Chile pocoshablan mandarn. Para qu referirnosa nuestra capacidad de manejarnos eningls. Los procesos de negociacin chi-nos son distintos de los occidentales yen nuestro pas, pocos los conocen.Pero, hasta dnde y cmo queremospro fund iza r el tema migracin, porejemplo? Cmo atraer profesionales ycientficos chinos de alto nivel acad-mico que representen aportes a la cien-cia y la tecnologa? Cmo atraer in-versiones chinas para obras de infraes-tructura? O tecnologa china para eldesar ro l lo de la in f raes t ruc tu ra ,conectvidad, educacin o salud? Qupodemos hacer para aumentar el nme-

  • A' lARlO ARTAZA Chile y Asia hoy: una mirada cn'rica

    ro de chilenos becados en China? Ypor supuesto, estudiantes chinos enChile? Qu otras reas de cooperacinexisten? Es posible relacionar regioneso ciudades del pas con regiones o ciu-dades chinas? (hermanamiento de ciu-dades?). Hay algo que podamos hacerjuncos en materia de conectividad? Es-tara China interesada en el tnel debaja altura entre Argentina y Chile?Cmo podemos Incrementar nuestraoferta exportadora a China? Existe elpotencia! para un accionar ms dinmi-co de nuestro sector privado en China?.Estamos creando recursos humanos enel sector pblico que le den un plus aChile frente a China? Todas estas pre-guntas nacen de la inquietud de que Chileno haya despertado ante la realidad delo que China representa. Nuestra demo-ra en hacerlo puede representar un cos-to elevado en el futuro.

    Muchas de estas materias son pro-pias de una potencial y rica relacinentre dos pases, sin tocar aspectos dendole poltica. Hay temas que podranllevarnos si no al conflicto al menos alroce diplomtico: derechos humanos,libertades polticas y otros. Hasta aho-ra esos aspectos no han sido un foco depreocupacin. Pero deben ser analiza-

    dos con realismo, a la luz de los intere-ses de nuestra relacin. Otra cuestinque ser preciso considerar es la acti-tud de los Estados Unidos respecto dela mayor presencia china en AmricaLatina. Estoy seguro de que a China nole interesa entrar en conflicto con losEstados Unidos por su relacin connuestros pases; sin embargo, se ha per-mitido celebrar negociaciones con Ve-nezuela para la venta de un satlite quele permitir pas cubrir los movimien-tos areos y martimos en el Caribe. Porsu parte, Estados Unidos no ha puestoobstculos a posibles ventas de arma-mento a Venezuela y Solivia, venta loque demuestra bastante latitud de per-cepcin en la materia.

    Por las razones anteriores, conside-ro que Chile requiere un plan, una po-ltica de Estado, una alianza del sectorpblico y del sector privado para el AsiaPacfico. Ms all del Al'EC, abandona-do a medias desde 2004, necesitamos unplan que plantee con determinacin ac-ciones concretas, que cuente con los re-cursos necesarios, que coordine de ma-nera efectiva a distintos Ministerios, parapoder realmente obtener resultados einsertarnos en la realidad magnfica,compleja e inquietante que es el Asia.