Arte Republicano

Vida y Obra de los Artistas Republicanos del Perú 2013

PINTORES REPUBLICANOS DEL PERÚ

Se le llama Pintura Republicana, a la producción plástica pictórica efectuada en la época Republicana. Aproximadamente en el año 1820 de inicio hasta la actualidad.

Estas pinturas han ido evolucionando, se muestran como diseños, claros, sencillos, naturales y concretos expuestos en cuatro periodos o estilos por la particularidad de sus características.

Pintura Costumbrista (1820-1860)

Con nuevas aspiraciones e ideales se sintió el hombre en esta época. Los artistas se expresaron su libertad por medio de sus sentimientos, se mostraron alegres y eso lo manifestaron en sus cuadros. Por eso entonces nacen las pinturas alegres y espontáneas de tema costumbrista, donde presenta las características más importantes y resaltantes de un pueblo o región del País.

Pintura Académica (1860 – 1920)

Esta es una nueva estética, académica, ajustada al clasicismo, con esto el Perú pudo integrarte a la cultura artística universal y asentar bases más resistentes en el desarrollo del país. En el arte de los pintores académicos, se encuentran secuencias románticas, neoclásicas, impresionistas y realistas que ayudaron en cantidad al arte peruano.

Pintura Indigenista (1920 – 1940)

Con el sentir de nuevos ambientes y realidades, entendemos mejor nuestro ámbito vital. Esto sucedió en la pintura indigenista, en donde la preciosidad de esos mundos enaltecidos del arte académico y clásico, dio la posibilidad a nuestros artistas de conocer mejor el significado real de los pueblos y regiones de nuestro territorio.

El indigenismo tuvo su tiempo, de productividad donde aportó de forma concreta y preciso el nacionalismo, pero también tuvo que ceder el camino a la reacción nacida en la razón tradicionaria de cambio dentro de la gran rueda del tiempo.

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Pintura Contemporánea (1940 – hasta nuestros días)

Esta pintura tiene como carácter sustentatorio el valor que se muestra en sus retratos, los recursos estéticos concentrados a lo largo del tiempo de los más diversos nacimientos artísticas de nuestra realidad y de las aportaciones permanentes que significan nuestras relaciones con el arte universal. La Pintura contemporánea es ya una realización fundamentada en sólidos conceptos, filosóficos, étnicos y técnicos. Su calidad artística están representados en los mejores certámenes.

Pintura Costumbrista

Pancho Fierro

nació aproximadamente hacia 1807. Pintor autodidacta, su arte es fruto del talento personal y de un agudo conocimiento de la naturaleza humana. El público que adquiría sus obras no pertenecía tanto al mundo de los salones y de la alta sociedad de entonces, como a la gente de la calle que se sentía íntimamente identificada con sus producciones.

Pancho Fierro fue básicamente acuarelista y se le reconoce como el más importante de nuestros artistas costumbristas del siglo XIX. Casi la totalidad de sus acuarelas fueron hechas sobre cartulina corriente y en formato pequeño.

Su obra pone de manifiesto una clara preferencia por trabajar pocos personajes en cada cartulina. Ello se explicaría por sus propias limitaciones en el manejo del dibujo, evitando gracias a la sencillez, problemas como el de la perspectiva lo que adicionalmente le permitía concentrar su ingenio en lo esencial y característico de cada personaje.

En cuanto a los temas que Pancho Fierro trabajó, destacan aquellos que caracterizaban a la Lima de aquella época, que era una ciudad en donde se respiraba una mezcla de religiosidad y criollismo y en la que la vida transcurría plácidamente.

Pancho Fierro tuvo personajes y temas favoritos como aquellos cuyo paso puntual por las calles, daba cierto ritmo a una ciudad que parecía resistirse a abandonar la molicie heredada del régimen colonial.

En sus acuarelas encontramos personajes como la lechera, el aguatero, la tamalera, la vendedora de pescado, la misturera y el vendedor de velas que, entre otros, llenaban con sus pregones las horas de la mañana a la noche. Junto a ellos, los clérigos, beatos y monjas fueron también motivo de inspiración, como lo fueron los funcionarios públicos y los que ejercían oficios libres.

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No podía faltar la tapada limeña que con su saya y manto, llena de hermosura y picardía, quedó magistralmente perennizada en las acuarelas.

Trabajando con colores alegres y limpios, Pancho Fierro logró trasmitirnos una imagen fidedigna de la Lima de principios del XIX, en la que a él le tocó vivir.

Pintura Academista

Daniel Hernandez Morillo

Nació en el departamento de Huancavelica, en el distrito de Salcabamba dentro de la provincia de Tayacaja, el 1 de agosto de 1856, hijo del español Don Leocadio Hernández, y de la peruana Doña Basilia Morillo. Llega a Lima a los 4 años y empieza su educación artística a los 14, en el taller de Leonardo Barbieri ubicada en la calle San Pedro de Lima. Cuyas clases toma a su cargo cuando el maestro vuelve a su patria natal: Italia. De esta época es su obra La Muerte de Sócrates (1872), que le valió el reconocimiento por parte del gobierno de Manuel Pardo, obteniendo una beca a Europa y un compromiso de subvención que no fue cumplido en su totalidad al llegar de su viaje en los primeros meses de 1874.

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Durante su estadía visita en París a su compatriota Ignacio Merino, el cual le aconseja trasladarse a Roma; así permanece diez años en Italia aprendiendo del pintor español Mariano Fortuny. En 1883 vuelve a París donde logra por méritos propios ser el Presidente de la Sociedad de Pintores Españoles residentes en la ciudad, vinculándose con otros artistas como Francisco Padilla y José Villegas Cordero, y fue miembro de la Sociedad de Artistas Franceses, exhibiendo en el Salón Anual de la Sociedad de Artistas Franceses, de difícil y riguroso acceso por su severo dogma academista; él tuvo amplia y triunfal acogida en los siete años que se presentó, considerado “fors concours” ("competencia sustancial") de los salones parisinos.

Por su célebre cuadro La Perezosa, fue premiado con la Segunda Medalla en el Salón de París, 1899. En la Exposición Universal de París, con motivo del cambio al siglo XX en 1900 le fue otorgada Medalla de Oro en por su cuadro Amor Cruel, y La Perezosa le valió la Condecoración de la Legión de Honor en 1901. Desde entonces Hernández fue declarado H.C. Honoris Causa, en todos los salones. Obtuvo además, el Premio de Pintura en la Exposición Iberoamericana de Sevilla con la obra Francisco Pizarro.

Con una cierta preferencia por los temas históricos, destacan La muerte de Sócrates, Capitulación de Ayacucho, Apoteosis de Ayacucho, Saludo al presidente Leguía, Retrato de dama, Dama en el Campo, Retrato de un Inca, Mujer cargando un ganso y Mujer cargando leña.

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Teofilo Castillo

(Carhuaz 1857-1922), fue el primer crítico de arte en nuestro medio; sus comentarios acertados y a veces ácidos, le granjearon admiradores y no pocos detractores. Como artista, gran parte de su obra está vinculada a la reminiscencia de la Lima virreinal, destacando su preferencia por las tonalidades graves, al manejo casi lírico del color, como se aprecia en Interior de iglesia, La Procesión del Corpus Christi, El asesinato del marqués de Aguas Claras, conocido también como La muerte del conde de Nieva y Autorretrato. Enmarcó en sus obras los paisajes naturales del interior del país, en los que imprime un exuberante colorido y la fuerza de su paleta que le permite captar con extraordinaria luminosidad

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algunos detalles del ambiente andino, como se ve en Paisaje del Huascarán, Paisaje nevado y Paisaje de la Laguna de Llanganuco.

Carlos Vaca Flor

(Arequipa 1867-Francia 1941), fue otro de los pintores de este período académico. Formado dentro de los patrones del movimiento académico, introdujo en su arte los aportes del nuevo movimiento impresionista, y logró imponerse en un medio tan difícil como el parisino. Siendo muy niño su familia se dirigió Chile, Pronto murió su padre. Ingresó a la Academia de Bellas Artes de Santiago, recibiendo premios y honores. A mediados de 1887 llegó con su madre a Lima e ingresó al círculo de la familia del presidente Cáceres y de sus amigos, en el que se cultivaba la poesía, la música y las artes plásticas. En agosto del año 1889 el Congreso de la República votó por una pensión para que se perfeccionara en Europa. Viajó el 6 de febrero de 1890 y no volvió nunca más al Perú. Se mantuvo fiel a su vocación y a su oficio a pesar de las penurias económicas, y de la pensión que nunca le llegó.

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Francisco Lazo

Pintor peruano nacido en Tacna en 1823, hijo del prócer de la independencia Benito Laso. Cuando contaba 7 años su familia se trasladó a Arequipa y algunos años más tarde, a Lima. Ya en la capital, ingresó en la Academia de Dibujo y Pintura, entonces dirigida por el pintor quiteño Javier Cortés. Tuvo también como maestro a Ignacio Merino, pocos años mayor que él.

En 1842 el joven Laso fue enviado a estudiar a Europa, radicando en París. Allí ingresó en el taller del pintor Delarouche y, posteriormente, en el de Gleyre. Dentro de este último permaneció cuatro años. En 1847 viajó por Italia, quedando particularmente impresionado por la pintura del Verones y Tiziano, de los cuales realizó varias copias.

De vuelta al Perú en 1849, pronto saldría nuevamente de Lima para viajar por Cusco y Puno, en la sierra sur. Su contacto con los paisajes y pobladores andinos

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le serviría para imprimir en sus obras una suerte de embrión del futuro indigenismo peruano.

Gracias a un sueldo que le fue concedido como pensionado del gobierno, en 1851 se embarcó una vez más hacia París, reintegrándose allí al taller de Gleyre. En Europa expondría El habitante de la Cordillera en la Exposición Universal de París, llamado también El indio alfarero (1855).

De regreso al Perú se casó con Manuela Henríquez, de quien haría su retrato. Junto a ella emprendió un tercer viaje a Europa, entre 1863 y 1866. En esta etapa de su vida, que corresponde a su madurez artística, el pintor mostró inclinación por los temas religiosos. Anteriormente, Laso había pintado El entierro de Cristo y 4 grandes pinturas de los Evangelistas para la Catedral de Arequipa (1857). Sin embargo, entre los años referidos al tercer viaje, esta tendencia temática produjo algunas de sus más importantes obras: el Manchaypuito, llamado El entierro del mal cura y sus dos Santa Rosa de Lima. Probablemente, este misticismo expresado en la pintura tuvo como una de sus fuentes en la influencia de la Hermandad de los pre-rafaelistas, pintores ingleses que firmaban con las mismas iniciales, a los que parece haber conocido en Europa.

De esta etapa, su obra más conocida es la Santa Rosa de Lima en gesto de oración. La santa aparece con una figura alargada, mirando hacia el cielo, mística y sensual. Debido a una supuesta deuda con el Estado, Laso se vio obligado a pagar con algunos de sus cuadros, entre ellos la imagen de la santa limeña. A su regreso, Laso se encontró con el conflicto con España, colaborando en la defensa como jefe de la compañía municipal de bomberos.

Dentro de la vida pública, el pintor llegó a ser elegido diputado por Lima al Congreso Constituyente de 1867. Sin embargo, su timidez y retraimiento no le permitieron sobresalir precisamente como político. Por el contrario, ni siquiera figura su nombre entre los oradores de la Cámara. Pese a ello, sí dejó iniciativas escritas. Es más, publicó 12 artículos de crítica costumbrista y política en la Revista de Lima y en el folletín El Aguinaldo.

En 1868, cuando sobrevino la epidemia de fiebre amarilla, Laso se inscribió en la Cruz Roja. Realizando esta labor social, enfermó de gravedad y falleció finalmente mientras era trasladado a la sierra central (en San Mateo), a comienzos del año siguiente.Para sus contemporáneos, su obra más relevante fueron los retratos, de los cuales sobresalieron el de su esposa y el del escritor Felipe Pardo y Aliaga. Otras obras importantes fueron: La Pascana (hoy en el Club Nacional de Lima), el Hararicu, etc.

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Como en otros países de América Latina, en el Perú la generación de Francisco Laso tuvo que afrontar el reto de ubicarse en el mundo cultural de occidente, de crear una tradición pictórica propia para sus nuevas naciones. En el Perú, entre los pintores académicos fue Laso quien probablemente aportó más al reto de forjar una pintura peruana en el siglo pasado. En efecto, gracias a una formación técnica sólida, pero complementada con la búsqueda de lo propio, a una posición que lo ubicaba entre el academicismo europeo de Ignacio Merino y las acuarelas costumbristas del genial autodidacta Pancho Fierro, Laso puede ser considerado como el primer pintor "moderno" del país.

Obras:

Sus obras presentan una gran variedad temática dada la diversidad de ambientes en que vivió y estudió.

-La Pascana o el Haravicu.

-El Alfarero.

- Santa Rosa de Lima.

-El retrato de su esposa.

-El entierro del mal cura.

-La lavandera .

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Julia Codesido

hija de Bernardino Codesido Oyaque y Matilde Estenós Carreño, nació en Lima – Perú en 1892, inició su recorrido por Europa desde muy joven (17 años), puesto que su padre fue nombrado embajador del Perú en Francia e Inglaterra, viviendo conjuntamente con su familia; esto hizo en ella sentir interés por el arte. El 1918 retornó al Perú y posteriormente ingresó a la Escuela Nacional de Bellas Artes de Lima (recientemente fundado), que estuvo a cargo en la Dirección del gran artista Daniel Hernández y José Sabogal Diéguez, que ejercía de profesor.

Codesido, fue egresada de la primera promoción de ésta Escuela de arte, Su primera exposición la hizo en Lima, posteriormente en New York e innumerables individuales nacionales. Durante su estudio, admiró mucho al gran José Sabogal y fue su apasionada seguidora y discípula de la temática nacional denominado movimiento indigenista, se adoctrinó y formó parte de ella juntamente con otros jóvenes artistas, causando en algunos entendidos, críticas y rechazo por tal filiación.

Las obras pictóricas de esta artista se caracterizan por su extraordinaria fuerza de personalidad, que convive la energía de la expresión hacia el Perú andino, donde el indio, nativo y autóctono se reivindicaba al ser representado en sus pinturas, asimismo uno de sus virtudes que se le atribuye va mas allá de la misma temática que los demás artistas de la época no estaban acostumbrados, no se encasilló en un solo estilo, sino que sus pinturas propasan los límites, rompiendo las rígidas estructuras establecidas en el Perú. “Transforma los temas elegidos por el indigenismo, llevándolos hasta un estado en el que se genera una tensión entre las figuras y la abstracción” (Jorge Villacorta), esto expresa la travesía de un indigenismo figurativo, es decir de rostros y cuerpos apegados a la realidad, a un indigenismo indefinido abstracto, matizado con formas, líneas y colores. Supo marcar la diferencia.

Julia Codesido, extrajo los misterios del antiguo y oriundo Perú, por ello, en su afán investigar se relacionó con personalidades como Honorio Delgado, Jorge Muelle, Luis E. Valcárcel y otros intelectuales de la época que coadyuvaron su vocación por el país, por su paso por México hacia 1935, conoció a los grandes muralistas: Rivera, Siqueiros, entre otros; éstos también influyeron en su estilo artístico, con nuevas formas como. Cabezas agrandadas, que nos recuerda a tipo de pintura que pinto Siqueiros en sus composiciones, con evocaciones entremezcladas de éste autor, desligándose del trazo duro, marginado de anchos, rasgos negros, facciones angulosas, ojos agrandados de pupila fija y honda, la

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morena limeña, Las tapadas y los grabados donde se constata la marcada influencia de Sabogal en los años 20 al 35, sus obras evolucionaron a través del tiempo, observándose el estilo continuo.

Esta gran representante del indigenismo realizó muchas obras, entre ellas: “frutera ayacuchana”, “india huanca”, “caballito de totora amarillo”, “desnuda echada”, “elevación”, “desnuda en la villa”, “vuelo”, “Santa Rosa”, “navidad”, “la red”,entre otros, de igual forma realizo el diseño de la carátula de la obra de José Carlos Mariátegui, “Los 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana”. La tendencia innovadora de Codesido fue producto de los viajes que hizo a Europa en 1900, que se prolongó 18 años. En este tiempo las galerías de París estaba impactado por el cubismo y otras tendencias, influyeron determinadamente en ella. Presentó exposiciones en Lima (1929-1932), Palacio de Bellas Artes de México (1935 y 1960), Nueva York (1936), San Francisco (1937), París (1939 y 1955), Buenos Aires (1958) y Barcelona (1963). Se le otorgó el Premio Nacional de Fomento a la Cultura: Ignacio Merino (1976).

Fue elogiada por grandes intelectuales, comentarios por doquier en la revista “Amauta”, publicaciones en diferentes momentos por su fecunda labor y admirada en el país, en el extranjero y por ser la única mujer que cambió el destino del arte, rompiendo barreras.

Después de desempeñarse como docente, (de 1931 a 1943) se retiró junto con José sabogal para seguir su estudio pictórico que cada vez evolucionaba, compartió su arte con la ciencia de la medicina (estudió en la Universidad nacional Mayor San Marcos), posteriormente prestó sus servicios en Hospital Almenara. Fue miembro del Instituto Americano de Arte que fundó Sabogal.

Sus obras se encuentra en diferentes museos: de Nueva York, San Francisco, Argentina, en Lima, etc. La insigne artista plástico Julia Codesido, En sus últimos años realizó pinturas con pinceladas expresionistas, asimismo la búsqueda ideológica de la iluminación de color como en “La red”, sin perder lo propio. Falleció el 8 de mayo de 1979, dejando huella y el grito valiente de rebeldía en la escuela indigenista. Cabe subrayar que fue el brazo derecho de José Sabogal en todos los proyectos del movimiento artístico.

Obras:

Elevación

Desnuda en la villa

Vuelo

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Santa Rosa

Paisaje de Chosica

Nevadas

Tres indígenas

Morena Limeña

Tapadas. 1945.

Mujeres Tapadas

Huayno

Paisaje

Che Guevara

Velas 1931

Hilandera. Dibujo

Marinera. Dibujo

Paisaje de Cerro de Pasco

Chozas Indias

Indio. Litografía

Mercado. Litografía

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Francisco Masias

Nacido en Lima, hijo de José María Masías Hurtado, natural de Cadiz, nieto paterno de Fernando Masías y Benita Hurtado, su padre fue el dueño de una famosa imprenta en Lima, la mayor de la ciudad hasta la fundación de El Comercio en 1839, su madre fue la limeña Petronila Margarita Rodríguez del Castillo, hija de Manuel Rodriguez y Micaela del Castillo; a corta edad se trasladó a Piura, en el norte del Perú. De retorno a su ciudad natal, estudió en la Academia de Pintura y Dibujo, que por entonces dirigía Ignacio Merino y a la que también asistía Francisco Laso.

En 1854 viajó a Europa. Se estableció en París, donde fue alumno del célebre pintor Leon Cogniet, quien le inició en el retrato y la pintura histórica. Estuvo también en Italia donde perfeccionó su técnica.

En 1864 regresó al Perú y se dedicó a pintar retratos de la aristocracia limeña, así como a la enseñanza. Pero paulatinamente cayó en la bohemia; y aunque continuó retratando hábilmente, desatendió la calidad de sus colores.

Obras:

Autorretrato

La muerte de Atala

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El Señor de la Caña

Alberto Lynch

Nació en Trujillo en 1851 y abandonó el Perú en 1878 para establecerse en París, estudiando en la École des Beaux-Arts y con el pintor William Bouguereau, de quien aprendió las técnicas del retrato.1 Trabajó en los talleres de los pintores Jules Noël, Gabriel Ferrier y el paisajista Henri Lehmann. Ya en 1890 competía en los salones entre los artistas franceses y expuso sus obras en el Salón de artistas franceses en la que ganó en 1890 y 1892; y en la Exposición Universal de 1900, donde recibió la medalla de oro, junto al reconocido pintor húngaro Philip de László, quien recibió la Grand Gold Medal por un retrato del papa León XIII.

En 1901, fue nombrado oficial de la Legión de Honor.

Ilustró las obras de varios escritores franceses como La dama de las camelias de Alexandre Dumas, Papá Goriot de Honoré de Balzac y La Parisienne de Henry Becque.

Prefirió las técnicas al pastel, la acuarela y el gouache, ocasionalmente trabajó la pintura al óleo. No es un pintor que esté dentro de un estilo determinado, su obra sencillamente mantuvo vivo el espíritu de la Belle Époque y del modernismo; aunque otros más bien lo consideran como un exponente de Neoacademismo con una clara tendencia romántica. Sus pinturas son tiernas, llenas de luz y de

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sensibilidad. Las mujeres de su época eran su inspiración para pintar, y en su recurrente tema había flores asociadas en todos sus significados a la mujer.2

Albert Lynch perteneció a una generación de artistas peruanos en la que en muchos casos, los viajes de estudio se convirtieron en largas residencias en el exterior, o incluso en la inmigración definitiva. A pesar de ello, los artistas emigrados como Lynch, dejaron una definida influencia en el medio local gracias a la difusión de las revistas ilustradas, los diarios y coleccionistas.

De hecho en 1920, el escultor peruano José M. Huerta en un artículo en la Revista de la Sociedad de Bellas Artes, escribe: "(...) El maestro tiene su fama cimentada y su gloriosa ancianidad empezada, proclama la energía de carácter, a través de las rudas jornadas de iniciación; trabajó hasta imponerse como artista que honra la pictórica y la patria en que nació."

Pero poco se sabe hasta ahora de su vida personal y se han tergiversado los datos del lugar y fecha de nacimiento (ej: Lima de 1851) y fallecimiento (1912, 1932, 1936...). El Diccionario Bénézit, por ejemplo, en su última versión del 2006 lo da por muerto en 1912.

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Francisco Canaval

Nació en Lima en 1877desarrolló con gran habilidad el manejo de los fondos oscuros, en los que a veces se distingue apenas, las figuras que desea resaltar. Hombre con botella, Mestiza durmiendo y Anciano sentado frente a cuadro, vinculan su obra a la escuela del gran Rembrandt. Murió en 1911.

Enrique Domingo Barreda

Nació en Lima en 1879, su obra logró superar los estrechos límites del Neoacademismo, composiciones como El rabí manifiesta el enfrentamiento que vivían los artistas entre la excelencia del dibujo y la ausencia del color. Ya en Europa optó por una pintura al aire libre, logrando obras de gran soltura, equilibrio y vivacidad, por ejemplo Marina o Barcas y Monte Cucco, se nota su preferencia por el tema paisajista. Murió en 1944.

Mario Urteaga

Nació en Cajamarca en 1875, centró su atención en plasmar escenas de la vida diaria de su pueblo; no obstante ser autodidacta, se le considera un precursor del indigenismo. Retrata con sobriedad y equilibrio el mundo rural en el que vive, sin olvidar escenas de la dramática realidad del medio campesino. Obras suyas son Captura de un abigeo y Paisaje o Escena campestre. Murió en 1957.

Urteaga ha logrado mostrar al mundo "los indios más indios que jamás se han pintado", según la frase conclusiva de Teodoro Núñez Ureta.

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Pintura Indigenista

José Sabogal

Nació en Cajabamba, ciudad de provincia en el departamento de Cajamarca el 19 de marzo de 1888. A los nueve años intentó una escapada hacia la costa. En el camino frustraron la aventura, amistades de sus padres.

A los doce años conoció el mar; una beca lo llevó a un colegio trujillano. pero a los pocos meses fuguó del internado y en cinco días de marcha a pie volvió a su pueblo. A los dieciseis años salió para correr mundo.

En el valle de Chicama quemó su adolescencia en aras de su ilusión de viajar a Europa. A los veinte años se embarco para Lima y algunos días después por la ruta de Panamá se dirigió a Italia. En Roma inició sus estudios para pintor con apasionada voluntad, como vengando sus años de la adolescencia.

Viajó por Francia y por las costas africanas, Argelia y Marruecos. Entró a España y recorrió muchas penínsulas con la rara sensación de ser o no ser así como hijo pródigo de la bravía tierra española.

Dejó Europa en aventura de buque velero, radicó en Buenos Aires; reanudó estudios y corrió grata y fecunda bohemia con inolvidables camaradas de arte. En los Andes argentinos del Norte hizo

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provechosa tarea de paisaje y de figura, con los autóctonos, como interesante motivo.

Volvió a Buenos Aires con fines de retorno a Europa, pero la belleza inédita de los Andes americanos tuvo en él fuerte atracción y planeó viajar a Cusco. Realizó un viaje inolvidable por la magia arcaica que la ruta del Altiplano, el Titicaca y el sagrado río Vilcamayo operaron en su sensibilidad.

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Web-grafía

http://www.pintoreslatinoamericanos.com/2012/08/pintores-peruanos-daniel-hernandez.html

http://cronologia1879.blogspot.com/2010/08/la-guerra-y-la-pintura.html

http://saposaqta.blogspot.com/2008/08/daniel-hernandez.html

http://juancarlosboverimuseos.wordpress.com/category/pinturas-del-museo-de-arte-de-lima/

http://www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=laso-francisco

http://hagaarte.blogspot.com/2013/03/julia-codesido_12.html

http://www.dearteycultura.com/julia-codesido-y-estenos/#.UnGC__lmjVo

http://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_Mas%C3%ADas

http://calotipoperuano.blogspot.com/2010/04/mas-pintores-del-neoacademismo.html

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