41
Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com " 1 CURSO SOBRE ANTISÉPSIA Y CURACIÓN DE HERIDAS 1. HERIDAS Y SU CLASIFICACIÓN A. Objetivos de la unidad Una vez finalizado el módulo el alumno será capaz de: - Describir la estructura y las funciones de la piel - Distinguir las distintas capas de la piel y sus funciones - Clasificar adecuadamente los distintos tipos de heridas. B. La piel INTRODUCCIÓN La piel o cutis, tiene su origen etimológico en la palabra latina pellis 1 y es el órgano más externo de nuestro cuerpo. Su superficie alcanza aproximadamente los dos metros cuadrados (un varón de 1,70 metros de altura y 70kg de peso, tiene una superficie corporal de 1,85m 2 ) y constituye el 16% del peso corporal 2 (en un adulto oscila aproximadamente entre los 3 y los 5 kilogramos) presenta como particularidad la capacidad de regenerarse a sí misma.

asepsia y heridas

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

1

CURSO SOBRE ANTISÉPSIA Y CURACIÓN DE HERIDAS

1. HERIDAS Y SU CLASIFICACIÓN

A. Objetivos de la unidad

Una vez finalizado el módulo el alumno será capaz de:

- Describir la estructura y las funciones de la piel

- Distinguir las distintas capas de la piel y sus funciones

- Clasificar adecuadamente los distintos tipos de heridas.

B. La piel

INTRODUCCIÓN

La piel o cutis, tiene su origen etimológico en la palabra latina pellis1 y es el órgano más

externo de nuestro cuerpo. Su superficie alcanza aproximadamente los dos metros

cuadrados (un varón de 1,70 metros de altura y 70kg de peso, tiene una superficie

corporal de 1,85m2) y constituye el 16% del peso corporal2 (en un adulto oscila

aproximadamente entre los 3 y los 5 kilogramos) presenta como particularidad la

capacidad de regenerarse a sí misma.

Page 2: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

2

El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española la define como Tegumento

extendido sobre todo el cuerpo del animal, que en los vertebrados está formado por

una capa externa o epidermis y otra interna o dermis. Y en términos sanitarios

podemos encontrarla descrita como membrana gruesa, resistente y flexible, que cubre

el cuerpo, tegumento externo que a nivel de los orificios naturales se continúa con las

mucosas o tegumento interno3.

En condiciones de normalidad la piel es uno de los órganos más importantes de

nuestro organismo y sobre él recae la tarea de realizar distintas funciones

indispensables para la vida. Sin embargo, es tan accesible y está presente en tantas de

nuestras percepciones que en lo que respecta a los cuidados es la gran olvidada4.

La piel tiene su origen en las primeras semanas de vida del feto. Durante la décima

semana de gestación se empieza a diferenciar lo que será la piel del bebé,

completando su desarrollo en la semana veinticinco donde el estrato córneo (capa más

externa de la epidermis) se hace histológicamente visible. Aunque algunos anejos

como las uñas no se formarán hasta la semana treinta de gestación. La epidermis tiene

su origen embriológico a partir del ectodermo superficial, mientras que la dermis y el

tejido celular subcutáneo se desarrollan en el mesodermo. Sin embargo, será después

del nacimiento cuando la piel alcance su estructura definitiva, el grosor y la maduración

de los componentes conjuntivos5.

Page 3: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

3

FUNCIONES DE LA PIEL

Las principales funciones de la piel pasan por protegernos ante agresiones: físicas,

tales como las radiaciones ultravioleta; químicas, evitando la absorción de sustancias

tóxicas; mecánicas, como las contusiones y los cuerpos extraños; y biológicas,

impidiendo la proliferación de gérmenes.

Otra de las funciones sería la de relación con el medio a través de las distintas

terminaciones nerviosas que nos proporcionan las sensaciones de frío o calor, de

presión (tacto) y también de dolor o malestar.

Nos ayuda a mantener el equilibrio interno a través del control de la temperatura,

generando la sudoración en caso de calor y la piloerección cuando existe frío, o el

control hidroelectrolítico que repercute en la pérdida de iones.

También desarrolla una importante función inmunológica a través de los queratinocitos

y las células de Langerhans reaccionando contra los agentes patógenos que se ponen

en contacto con la piel. Además, a través de la función endocrina, se realiza la síntesis

endógena de la vitamina D mediada por los rayos UV y cuyo déficit ocasiona mala

absorción de las sales de calcio y fósforo e hipotonía muscular y ligamentosa; la

síntesis de péptidos, hormonas y enzimas6.

ESTRUCTURA DE LA PIEL

La estructura macroscópica que podemos visualizar de nuestra piel es la de un

conjunto de surcos superficiales y de pliegues más o menos profundos que son

originados por la fijación a los tejidos profundos y a la disposición de las estructuras

fibrosas subyacentes.

Page 4: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

4

Los pliegues se presentan sobre todo en palmas de las manos y plantas de los pies

junto con los dedos. Mientras que los surcos se extienden a lo largo de toda la piel,

generalmente de carácter romboidal y en los ángulos que forman desembocan las

glándulas sudoríparas y sebáceas.

A nivel microscópico la piel consta de tres capas que están presentes en las distintas

localizaciones del cuerpo, aunque pueden variar su grosor dependiendo de la zona.

Las características y funciones de cada una de ellas están perfectamente

diferenciadas. Son de fuera hacia dentro las siguientes: epidermis, dermis e hipodermis

o tejido celular subcutáneo. (Figura 1)

Figura 1. Estructura de la piel

Page 5: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

5

La epidermis es la capa más superficial y de cuyas invaginaciones surgen las glándulas

sudoríparas, los folículos pilosos y otros anejos cutáneos.

La capa medial es la dermis en la que encontramos los anejos epidérmicos, vasos

sanguíneos, nervios y terminaciones nerviosas, así como abundantes fibras de

colágenos y en menor proporción de elastina.

La capa más profunda es el tejido celular subcutáneo, formada especialmente por

tejido adiposo y la red subcutánea de arterias y venas.

La epidermis

La epidermis mantiene un grosor similar en la mayor parte del cuerpo, oscilando éste

entre los 0,07 mm y los 0,12 mm; sin embargo, en zonas donde la presión y fricción son

importantes, manos y pies, puede alcanzar los 0,8 mm y 1,4 mm respectivamente2.

A mayor grosor mayor resistencia a la fricción. Cuando una persona pasa periodos de

tiempo prolongados en sedestación o encamada, las zonas de presión no van a estar

preparadas para soportar adecuadamente fricciones de repetición en comparación con

otras partes del cuerpo, situación que nos obliga a instaurar un adecuado seguimiento

y cuidado. Además, si una persona pasa largos periodos de tiempo en inactividad, ese

engrosamiento típico presente en pies y manos disminuye propiciando un mayor riesgo

de lesiones cuando se inician de nuevo las presiones y fricciones (Ej.: si la mayor parte

del verano la hemos pasado con calzado abierto en el talón, cuando volvemos a utilizar

los zapatos cerrados esa localización es más proclive a padecer lesiones).

La unión entre la epidermis y la dermis se realiza a través de la membrana basal

(figura 2) , que es una estructura compleja en constante estudio y revisión. Gracias a

Page 6: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

6

ella, las fuerzas de cizalla no podrán separar ambas capas. Los elementos que hacen

posible esta unión son: las proteínas de anclaje de las células; fibrillas de colágeno VII

que la unen a fibras de colágeno en dermis; y microfibrillas de fibrilina que la unen a

fibras de elastina. Además, juega un papel importante las crestas reticulares o

invaginaciones de la epidermis que están muy desarrolladas en las zonas de roces,

mientras que en el resto del cuerpo aparecen prácticamente aplanadas. Es por ello,

que la zona del tronco (especialmente zona sacra) no está preparada para soportar la

cizalla a este nivel y se pueda producir lesiones con mayor facilidad.

Figura 2. Membrana basal.

Cuando esta unión no es efectiva, ante fricciones mínimas o fuerzas de cizalla, se

producen con facilidad hematomas subepidérmicos, especialmente en las personas

mayores ya que el proceso de envejecimiento hace que se vea mermada la eficacia de

estos mecanismos de protección (figura 3) .

Page 7: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

7

Figura 3. Hematomas subepidérmicos

La unión dermoepidérmica puede verse afectada, además de por las fuerzas de cizalla,

por alteraciones estructurales, bien primarias, como en el caso de la epidermólisis

ampollosa, o secundarias a enfermedades como por ejemplo la enfermedad ampollosa

llamada penfigoide y la dermatitis herpetiforme7.

La epidermis no contiene capilares sanguíneos y las células que la conforman se

nutren por difusión desde la membrana basal. Cuando en la clínica aparecen

manifestaciones de hiperemia o lesiones por presión estadio I, según la clasificación

del Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y Heridas

Page 8: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

8

Crónicas8, nos está haciendo referencia a lesiones en capas más profundas que

afectan al menos a la dermis cutánea.

Las células que conforman la epidermis pertenecen a cuatro poblaciones celulares

diferentes:

- Queratinocitos:

Entre el 90%-95% de todas las células de la epidermis son queratinocitos.

Nacen por mitosis desde las capas basales de la epidermis y se van

desplazando hacia la superficie cutánea según transcurren los días. En esta

migración las células se van diferenciando y acumulan cantidades cada vez

mayores de precursores de la queratina9. Próximas a la superficie se mueren, se

forma la queratina y eliminan una sustancia grasa, hidrófoba, cuya función es

actuar de cemento para mantener unidas las escamas de queratina, y es en su

conjunto lo que se denomina estrato córneo.

Derivado de ese proceso evolutivo podemos hablar de cinco estratos celulares

en la epidermis: el estrato germinativo o capa basal, el estrato espinoso, el

estrato granuloso, el estrato lúcido y el estrato córneo10.

Cuando mantenemos el estrato córneo en contacto continuo con humedad,

detergentes, etc., estamos favoreciendo que la piel pierda su impermeabilidad,

que la sustancia hidrófoba de unión entre la queratina se degrade, deje que la

queratina absorba agua, aumente su volumen y se reblandezca, siendo de esta

manera más susceptible a nuevos traumatismos y/o a las agresiones bacteriana

o micóticas. De ahí, que no sea recomendable realizar abluciones,

Page 9: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

9

especialmente de los pies de los pacientes diabéticos, superiores a los 10

minutos.

Esta transformación de los queratinocitos en queratina se produce en unos 25-

30 días en aquellas localizaciones expuestas a roces continuos, siendo más

lenta, 40-50 días, en otras zonas menos traumatizadas.

Si durante el proceso de cuidados tanto por fricciones externas como por la

realización de técnicas incorrectas (posicionamientos, secado por arrastre…)

eliminamos este estrato córneo con mayor intensidad que su capacidad de

regeneración estaremos propiciando que aparezcan nuevas lesiones al dejar al

descubierto capas celulares desprotegidas.

- Melanocitos:

Los melanocitos se encuentran en contacto con la membrana basal y aunque su

número se mantiene más o menos constante, será el grado de actividad que es

genéticamente variable, como productores del pigmento de melanina, el que

determine las diferencias en el color de la piel entre razas e individuos.

Desde su posición son capaces de relacionarse con unos 40 queratinocitos de

capas más externas gracias a sus prolongaciones que son las encargadas de

distribuir la melanina.

Su principal función es servirnos de defensa contra la exposición prolongada de

radiación ultravioleta.

- Células de Langerhans:

Page 10: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

10

Se encuentran principalmente en epidermis, aunque pueden hallarse en otros

epitelios como en la cavidad bucal, esófago y vagina. Son células dendríticas y

sus largas prolongaciones se extienden por las capas suprabasales de la

epidermis.

Tienen la función de reconocer los antígenos que aparezcan a nivel cutáneo y

presentarlos a los linfocitos T inmunocompetentes. Son en definitiva una parte

importante del sistema inmunitario.

Ante exposiciones continuadas a los rayos ultravioletas se produce una

disminución en el número de estas células, situación que puede favorecer el

desarrollo de carcinogénesis cutánea.

- Células de Merkel:

Son células neuroendocrinas de la piel y su mayor presencia la encontramos en

labios, paladar, palmas de las manos y pulpejos de los dedos, siendo

considerados por algunos autores como mecanorreceptores táctiles de

adaptación lenta.

Si queremos conseguir un buen mantenimiento de la epidermis y por tanto mantener su

función de protección, debemos de conseguir una adecuada cohesión celular, una

renovación epitelial eficaz y una normalización de la descamación celular.

Page 11: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

11

La dermis

La dermis es la capa intermedia de la piel y está considerada como un elemento muy

importante. En su estructura podemos encontrar a los distintos anejos cutáneos, la red

vascular cutánea, terminaciones nerviosas y el sistema linfático.

Las células que están presentes en la dermis son los fibroblastos (encargados de la

síntesis de colágeno y elastina), histiocitos, mastocitos, linfocitos y dendrocitos

dérmicos. Estas células se encuentran en lo que se denomina matriz o sustancia de

crecimiento compuesta fundamentalmente por proteoglicanos, glicosaminoglicanos y

finos filamentos de glicoproteínas11.

La dermis no es homogénea en toda su estructura, de ahí que se divida en la dermis

papilar y la dermis reticular, pero no existe una línea clara de separación entre una y

otra.

La dermis papilar es la más superficial y estrecha; contiene fibras finas de colágeno y

elastina mayoritariamente perpendiculares a la superficie. En ella están presentes los

capilares sanguíneos y terminaciones nerviosas.

La dermis reticular es más profunda y gruesa; las fibras de colágeno y de elastina son

más gruesas y generalmente paralelas a la superficie cutánea. Además, se localizan

los vasos sanguíneos, los linfáticos y los nervios cutáneos.

Las fibras de colágeno y elastina confieren a la piel unas características especiales de

flexibilidad, elasticidad y resistencia a la tensión lo que se traduce en protección frente

a estímulos mecánicos.

La sensibilidad cutánea se manifiesta gracias a la actuación conjunta de diversas

terminaciones nerviosas, más o menos especializadas:

Page 12: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

12

- Terminaciones nerviosas libres encargadas de detectar el dolor y la temperatura.

- Corpúsculos de Pacini que detectan la presión y posiblemente la vibración

(palmas de las manos y plantas de los pies)

- Corpúsculos de Meissner encargadas del tacto.

- Células de Merkel como receptores táctiles de adaptación lenta.

La exploración neurológica que se realiza con el fin de detectar problemas de

sensibilidad superficial y profunda (presión, temperatura, dolor…) en pacientes a riesgo

de desarrollar lesiones neuropáticas está basada principalmente en las características

que mantienen las distintas células que integran estas dos capas (epidermis y dermis).

En conjunto, la dermis sirve de soporte a la epidermis y mantiene en su espesor las

glándulas sudoríparas y sebáceas, el folículo piloso y las uñas. De todos es sabido que

la epitelización de una herida sucede desde los bordes de la lesión, donde se

encuentra la piel sana, y por migración de los queratinocitos de la epidermis hacia

posiciones más centrales en la herida van tapizando todo el lecho hasta conseguir su

epitelización completa. Sin embargo, en aquellas lesiones donde la afectación de

alguno de los anejos no haya sido completa podemos observar una proliferación de

queratinocitos desde estas posiciones, ya que al surgir de la invaginación de la

epidermis mantendrán queratinocitos activos que tenderán a reproducirse para ir

migrando a posiciones más externas y tapizar la lesión. De esta forma podemos ver

islas de epitelización que ayudarán a que el proceso de cierre sea más eficaz (figura

4).

Page 13: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

13

Figura 4. Isletas de epitelización

Una vez cicatrizada la lesión, la zona de cicatriz será más sensible a la presencia de

nuevas lesiones puesto que su fuerza tensil ante nuevas presiones, externas como en

las úlceras por presión o internas derivadas del éxtasis venoso, es menor que la piel

circundante sana.

La hipodermis o tejido celular subcutáneo.

La hipodermis se configura como el gran depósito de grasa del organismo. Además de

esta función de reserva, nos sirve de cojín mecánico frente a agresiones externas al

absorber traumatismos (entre los que se encuentran las fuerzas de cizalla) y nos

proporciona aislamiento térmico, evitando la pérdida de calor.

Page 14: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

14

La hipodermis está formada por células adiposas o adipositos, tejido conjuntivo y fibras

de colágeno. Se disponen en lóbulos separados por material fibrosos y que contienen

vasos sanguíneos y nervios.

En su estructura podemos encontrar los grandes vasos sanguíneos y los nervios que

posteriormente se distribuirán por la dermis; y la porción inferior de folículos pilosos,

glándulas sebáceas y sudoríparas.

Cuando aparecen las fuerzas de cizalla, el organismo tiende a compensarlas con el

deslizamiento del tejido celular subcutáneo. Si éstas son prolongadas en el tiempo

puede llegar a obliterar los grandes vasos sanguíneos (figura 1) que se encuentran en

el tejido celular subcutáneo y producir isquemia en los territorios suprayacentes. De

ahí, que las personas obesas puedan tener mayor riesgo a desarrollar lesiones por

presión.

Características de la piel en diferentes localizaci ones.

Aunque hemos tratado la piel como una estructura que se mantiene en toda la

extensión del cuerpo, hoy sabemos que dependiendo de la localización de la que

hablemos podemos encontrarnos diferencias estructurales al respecto7. Así, la piel de

la mayor parte del organismo la cual está cubierta por ropa y no recibe traumatismos de

repetición no presenta ninguna especialización y la epidermis es fina, las crestas

reticulares están poco desarrolladas y presentan un escaso número de folículos

pilosos. Sin embargo, otras localizaciones como la planta de los pies, el cuero

cabelludo, los pulpejos o las axilas presentan características diferenciadas.

Page 15: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

15

La planta de los pies muestra una epidermis compacta y engrosada, con un sistema de

crestas reticulares muy desarrollado que previene la separación de la epidermis de la

dermis, no presenta folículos pilosos y existen abundantes glándulas y conductos

ecrinos.

El cuero cabelludo presenta una gran cantidad de folículos pilosos y glándulas

sebáceas.

En los pulpejos de los dedos, presenta una epidermis compacta y engrosada, las

crestas reticulares están muy desarrolladas, abundantes glándulas y la presencia de

numerosos corpúsculos de Meissner y de Pacini, así como comunicaciones

arteriovenosas especializadas.

La axila presenta numerosas glándulas apocrinas y ecrinas, abundantes folículos

pilosos y una epidermis fina.

Además de las diferencias según la localización, la edad es un elemento diferenciador

de la piel, puesto que el proceso de envejecimiento que es universal para todos, junto

con los factores medioambientales que han incidido durante el desarrollo de la persona,

influirán inexorablemente sobre el estado general de la piel. Las principales diferencias

entre la piel del anciano frente al adulto joven son:

- Mayor fragilidad al disminuir el grosor de la epidermis por la menor división

celular de los queratinocitos, de su vida media y de la desorganización celular

existente.

- Menor cohesión celular y por lo tanto mayor permeabilidad

- Mayor sequedad cutánea al estar disminuida la presencia y calidad de la capa

hidrolipídica o manto ácido graso.

Page 16: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

16

- Presencia de alteraciones en la melamina y el flujo sanguíneo al estar

disminuidos.

- Presencia de un deterioro de la red nerviosa y de la termorregulación.

- Pérdida de elasticidad y modificaciones de la unión dermoepidérmica.

- Cambios y modificaciones en los anejos cutáneos.

La complejidad de la piel queda de manifiesto en la relación entre las distintas

estructuras que en ella conviven y en las peculiaridades de las funciones que

desarrolla. Así, podemos hablar de una piel que nos aísla y defiende de agresiones

externas, que nos protege ante la posibilidad de una pérdida descontrolada de agua u

otras sustancias corporales y que al mismo tiempo nos sirve de relación con los demás.

Todos los esfuerzos serán pocos para mantener en perfecto estado la piel de las

personas que cuidamos, puesto que hoy en día sabemos que existe un volumen

importante de personas que se mueren con úlceras por presión y que además, muchos

de ellos se mueren a consecuencia de las úlceras por presión. Es por ello que quiera

concluir esta revisión con la idea de que salvando su piel, salvamos su vida,

extendiendo un poco más la máxima de Velpeau cuando afirma que “el pinchazo de

una aguja es la puerta de entrada de la muerte”.

Page 17: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

17

C. Definición de herida y clasificación de las herida s

DEFINICIÓN DE HERIDA

Las heridas se caracterizan por ser lesiones producidas por un traumatismo de origen

accidental (accidentes domésticos, laborales, agresiones, etc.) o quirúrgico, con fines

diagnósticos o terapéuticos, que cursa con pérdida de la integridad de las partes

blandas, bien sea piel o mucosas12, y con afectación variable de las estructuras

subyacentes13.

Las heridas quirúrgicas se caracterizan por haber sido realizadas en un ambiente

aséptico / estéril y generalmente se muestran limpias.

Toda herida suele ir acompañada de una sintomatología variable según la persona que

la padece y sobre todo relacionada con su localización, complejidad, afectación de

estructuras profundas, etc. Sin embargo, generalmente vienen acompañadas de

separación de bordes, hemorragia y dolor12.

La separación de bordes estará mediada por la profundidad de la herida, de tal forma

que a mayor profundidad mayor separación de bordes. También incide directamente la

cantidad de tejido adiposo que presente el lesionado, pues a mayor cantidad de tejido

Page 18: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

18

adiposo se producirá una mayor separación de bordes. Y por último, la dirección de la

herida respecto a las líneas de Langer, siendo las heridas perpendiculares a las líneas

de Langer las que presenten mayor separación de bordes.

La hemorragia en las heridas va a variar en relación a la mayor o menor destrucción

de vasos sanguíneos afectados. Ante una herida siempre deberemos de tener en

cuenta que se puede producir una hemorragia interna y/o externa, siendo esta última

las más difícil de diagnosticar y que en ocasiones puede comprometer la vida de la

persona.

La actuación de urgencia en grandes accidentados o en situaciones de catástrofes, las

personas con grandes heridas pueden presentar sintomatología general, como puede

ser cuadros de shock, hipovolemias, etc. que habrá que tener en cuenta y valorar,

dando prioridad a los que ponen en riesgo la vida del paciente.

El dolor , aún siendo un síntoma subjetivo y que puede variar dependiendo del umbral

doloroso de la persona afecta, siempre suele estar presente cuando existe una herida y

va a variar su intensidad según la extensión, la profundidad y la localización de la

lesión.

La valoración del dolor, especialmente en los pacientes con heridas crónicas, será una

variable muy importante a tener en cuenta en las valoraciones continuadas del paciente

y de la herida14.

Page 19: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

19

CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDAS

No existe una clasificación única de las heridas, pudiendo hablar de distintas

clasificaciones de las heridas según atendamos a las diversas características de las

mismas. Así, pueden ser clasificadas según:

1. El agente productor

- Heridas Incisas o Cortantes: (Figura 5) son producidas por objetos afilados

(p.ej.: cuchillos, cristales, latas…). Se caracterizan por presentar bordes limpios,

nítidos, lineales y regulares. Ejemplo: corte con cuchillo doméstico, con una hoja

de papel, con un objeto o lámina afilado.

El nivel de hemorragia que producen es variable al igual que la afectación de

músculo, tendones y nervios.

Figura 5. Herida incisa o cortante

Page 20: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

20

- Heridas Punzantes: (Figura 6) son producidas por instrumentos acabados en

punta. Muestran un pequeño orificio de entrada, son dolorosas, y la hemorragia

que presentan suele ser escasa. Al ser profundas existe el riesgo de lesionar

vísceras, generar hemorragias internas y favorecer los procesos infecciosos,

especialmente el tétanos. Ejemplo: herida por arma blanca, tijera, hueso

fracturado, clavo, aguja, anzuelo o mordedura de serpiente.

Figura 6. Herida punzante

-

- Heridas Contusas: (Figura 7) son producidas por objetos romos y se caracteriza

por la destrucción del tejido existente entre el lugar de impacto del objeto y el

hueso que ofrece resistencia. Presentan bordes irregulares, afectación tisular

importante, dolor y hematoma. Cuando el arrancamiento de piel se produce en el

Page 21: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

21

cuero cabelludo recibe el nombre de “SCALP”. Ejemplo: piedra, palos, golpe

de puño u objeto duro.

Figura 7. Herida contusa en región frontal

-

Se denomina magulladuras aquellas heridas que se caracterizan por destrucción

de tejidos profundos, sin pérdida de continuidad de la piel y suelen presentar un

color morado (Figura 8).

Page 22: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

22

Figura 8. Magulladura

- Heridas Laceradas: son producidas por objetos de bordes dentados. Se

provoca desgarro de tejidos y la herida presenta bordes irregulares. Ejemplo:

Latas, serrucho.

- Abrasión, excoriación o raspadura: (Figura 9) son producidas por la acción del

rozamiento, la fricción o el arrastre contra superficies duras. También son

denominadas quemaduras por fricción. En ellas, se pierde la capa superficial de

la piel (epidermis), y cursan con dolor, ardor, dado su grado de superficialidad y

prácticamente sin hemorragia. Hay que estar vigilante ya que se infectan con

facilidad. Ejemplo: abrasión por caída de moto, bicicleta, fri cción con una

cuerda.

Page 23: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

23

Figura 9. Abrasión, escoriación o raspadura

-

- Aplastamientos: son producidos por objetos pesados que atrapan alguna parte

del cuerpo. Secundario a los aplastamientos están las fracturas óseas, lesiones

tanto en órganos externos como internos y en ocasiones hemorragias

importantes que pueden ser internas y/o externas.

- Quemaduras: son lesiones producidas por un agente térmico, eléctrico,

químico o radioactivo. Siendo las llamas y los liquidos calientes los responsables

de un mayor porcentaje de quemaduras, especialmente en el ámbito doméstico

y en niños y mayores de 65 años. Causan la muerte de tejidos, que puede variar

Page 24: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

24

desde una afectación superficial, como el eritema, a la destrucción de tejidos

profundos15.

Ante una quemadura debemos de tener presente la localización, la extensión y

la profundidad.

Se consideran localizaciones de riesgo o especiales: la cara y el cuello, las

manos, los pies, los genitales, el periné y las articulaciones. Tanto el riesgo de

infección, como las consecuencias estéticas y/o funcionales de las quemaduras

que se presentan en estas localizaciones deben de hacernos valorarlas como de

especial riesgo15.

Las quemaduras las podemos clasificar según:

a) su extensión:

i. Regla de Wallace o regla del 9.

Consiste en delimitar la superficie corporal total (SCT) en áreas de

representen el 9% o el 18% (9% x 2) de la SCT. Ver tabla 1

Page 25: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

25

TABLA 1. Regla de Wallace

Solo debe de ser utilizada en adultos y nos proporciona una

cuantificación aproximada del área quemada.

ii. Regla de la palma de la mano o del 1%

La palma de la mano con los dedos extendidos y juntos representa el

1% de la SCT del propio paciente.

b) su profundidad:

DISTRIBUCIÓN CORPORAL Y % DE LA SUPERFICIE

CORPORAL TOTAL EN EL ADULTO

Localización % de la superficie total

Cabeza y cuello 9%

Miembro superior derecho 9%

Miembro superior izquierdo 9%

Cara anterior del tronco 18%

Cara posterior del tronco 18%

Miembro inferior derecho 18%

Miembro inferior izquierdo 18%

Genitales 1%

TOTAL: 100%

Page 26: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

26

i. Grado I

(Figura 10) Existe una afectación de la epidermis sin afectar a la

menbrana basal. La zona corporal afectada muestra un eritema, con

calor y sequedad de la piel, pero sin ampollas. Cursa con un dolor de

leve a moderado.

El periodo de cicatrización oscila entre 4 días y 7 días sin dejar

secuelas.

Figura 10. Quemadura grado I

ii. Grado II

(Figura 11) Las quemaduras de segundo grado se dividen en

quemaduras de segundo grado superficial y en quemaduras de

segundo grado profundo.

Page 27: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

27

Las quemaduras de segundo grado superficial se caracterizan por la

afectación de la epidermis y de la dermis superficial o papilar. El signo

más característico de este estadio son las flictenas o ampollas. Cursa

con elevadas cotas de dolor.

Son lesiones que si no se infectan cicatrizan rápidamente, entre 7 días

y 14 días. La secuela más característica es el cambio de pigmentación

de la zona afectada que tenderá a disminuir o desaparecer con el

paso del tiempo.

Figura 11. Quemadura grado II

Las quemaduras de segundo grado profundo afectan a la epidermis y

la dermis por completo, viendose también afectados los folículos

pilosos y sebáceos, así como las glándulas sudoríparas. Muestras una

Page 28: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

28

zona de la piel denudada aunque en ocasiones pueden presentar

flictenas. Son lesiones menos dolorosas que las dérmicas

superficiales.

Su cicatrización puede oscilar de los 15 días a más de 3 meses en las

muy extensas. Precisan de una cicatrización por segunda intención y

la cicatriz suele presentar problemas estéticos y en ocasiones

funcionales (retracciones, cicatrices hipertróficas, etc.).

iii. Grado III

(Figura 12) Se ve afectada la epidermis, la dermis y el tejido celular

subcutáneo. Incluso podemos encontrar lesiones a nivel de fascia,

músculo, tendones, periostio, etc.) Siendo el signo más característico

de este estadio la escara (tejido mortificado de aspecto acartonado y

seco que puede variar de color desde el blanco nacarado al negro).

Presentan destrucción de las terminaciones nerviosas, aunque pueden

presentar cuotas de dolor elevadas debido a la irritación de los tejidos

colindantes que siguen manteniendo sensibilidad.

Si queremos conseguir su cicatrización deberemos de estimular una

pronta limpieza del lecho de la quemadura y la cicatrización por

segunda intención. En lesiones de grandes extensiones (mayores del

5% de la SCT) puede precisar un tratamietno quirúrgico de la zona

afectada.

Page 29: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

29

Figura 12. Quemadura grado III

- Congelaciones: son lesiones producidas por las exposiciones prolongadas al

frio. Mientras se mantenga la congelación las manifestaciones cutáneas pueden

pasar desapercibidas, siendo horas o días después de la descongelación

cuando aparezcan flictenas y posteriormente con el paso de los días tejidos

necróticos.

2. La profundidad

- Arañazo: Se trata de una lesión que solo afecta a la epidermis.

- Desolladura: Lesión de la epidermis que cursa con pérdida de sustancia en

esta capa de la piel.

- Herida Penetrante: afecta a cavidades naturales no comunicadas con el

exterior.

- Herida Perforante: son lesiones que afectan a la pared de las vísceras huecas.

Page 30: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

30

3. La situación de la infección

- Herida Contaminada: Cualquier herida a partir de las 8 -10 horas de evolución

se considera contaminada y por ello no va a ser candidata a recibir puntos de

sutura para realizar su cierre por primera intención12. En ella existe una

presencia de microorganismos que potencialmente pueden infectar la herida.

En el caso de las heridas crónicas, todas las lesiones están contaminadas,

aunque los microorganismos existentes en la herida no son responsables de un

retraso en la cicatrización16. (Figura 13)

Figura 13. Herida contaminada

Page 31: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

31

- Herida Colonizada: este término se utiliza generalmente en heridas crónicas o

en heridas agudas cronificadas y se caracterizan porque las especies

microbianas presentes en el la herida logran crecer y multiplicarse. Tampoco

afectan al proceso normal de cicatrización, si bien el aumento de cepas

microbianas puede originar biofilms bacterianos y convertirse en los precursores

de la infección y del retraso del proceso de cicatrización16. (Figura 14)

Figura 14. Herida colonizada

- Herida Infectada: las especies microbianas crecen, se multiplican y afectan al

proceso de cicatrización, retrasándolo e incluso interrumpiéndolo. La infección

en las heridas agudas suele cursar con la presencia de los signos clásicos de

inflamación (rubor, tumor, calor y dolor), mientras que en las heridas crónicas,

además de estos, deberemos de tener en cuenta otros signos más sutiles, tales

Page 32: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

32

como el retraso en la cicatrización, el aumento del exudado o la aparición de

dolor en lesiones que previamente no eran dolorosas, la fragilidad del lecho de la

herida y el sangrado espontáneo son algunas de las manifestaciones más

comunes en este tipo de heridas17. (Figura 15)

Figura 15. Herida infectada

4. La complejidad

- Herida Simple o Superficial: Son lesiones que afecta a la epidermis y dermis

superficial. La evolución es satisfactoria y rara vez cursan con complicaciones

durante el proceso de cicatrización. (Figura 16)

Page 33: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

33

Figura 16. Herida superficial

- Herida Profunda o Compleja: En estas lesiones está afectado todo el espesor

de la piel y daña a otras estructuras blandas, tejido muscular, aponeurosis,

vasos o nervios. Suelen ser extensas, cursar con complicaciones en el proceso

de cicatrización y presentar material contaminante (tejidos desvitalizados,

cuerpos extraños, etc.) (Figura 17)

Page 34: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

34

Figura 17. Herida complicada

5. La tendencia a la cicatrización

- Heridas agudas: Cuando hablamos de una herida aguda estamos haciendo

referencia a una lesión con afectación variable que en condiciones normales

tenderá a cicatrizar en un periodo de tiempo que en las situaciones más

desfavorables oscila entre 3 y 6 semanas.

- Heridas crónicas: Las heridas crónicas son aquellas que se recuperan

lentamente, consumiendo para ello meses o incluso años y en cuyo tiempo

pueden pasar por distintas situaciones clínicas derivadas de las condiciones

locales de la propia herida (tipo de tejido presente, infección, etc.) o secundarias

Page 35: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

35

a las condiciones generales del paciente (enfermedades de base, desnutrición,

etc.). Son lesiones que muestran una escasa o nula tendencia hacia la

cicatrización.

6. Atendiendo a su origen

Si clasificamos las heridas según su origen, tenemos que hacer referencia a los

siguientes grupos18:

- Heridas por trastornos genéticos

Ejemplo: El síndrome de Turner, el déficit de prolidasa, etc.

- Heridas por hemopatías

Ejemplo: Trastornos de la fibrinolisis, de la hipercoagulabilidad, anemia

hemolítica.

- Heridas mecánicas

Ejemplo: lesiones traumáticas, por presión, quemaduras, etc.

- Heridas por agentes químicos o cáusticos exógenos o endógenos

Ejemplo: álcalis y ácidos exógenos y a nivel endógeno drenajes, ostomías…

Page 36: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

36

- Heridas vasculares

Ejemplo: arteriales, venosas, linfáticas…

- Heridas por transtornos metabólicos

Ejemplo: secundarias a la diabetes

- Heridas de origen infeccioso

Ejemplo: parasitarias, micóticas, bacterianas, etc.

- Heridas de origen neurológico

Ejemplo: polineuropatías, mielopatías, mal perforante plantar, etc.

- Heridas de origen neoplásico

Ejemplo: síndromes mieloproliferativos y linfoproliferativos.

- Heridas yatrogénicas

Trás intervenciones com medicamentos (quimioterápicos, radioterapia...) o por la

utilización de dispositivos (cinturones de seguridad, sujecciones, férulas...)

Page 37: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

37

Las clasificaciones descritas pueden complementarse entre si, puesto que no son

excluyentes y una herida puede compartir más de una situación de las revisadas. Por

ejemplo: podemos hablar de una herida incisa que es superficial y está contaminada.

BIBLIOGRAFÍA

1. Real Academia de la Lengua. Diccionario de la Lengua Española. Vigésima

segunda edición. 2001

2. Gartner L. Hiatt JL. Texto Atlas de Histología. McGraw-Hill. 2ª Ed. México 2003.

3. Diccionario Terminológico de ciencias médicas. 12ª edición. Salvat Editores.

Barcelona, 1984.

4. Martínez F. La piel nuestra gran desconocida. Ulcus Clínica. 2004; 1 (1): 4-8.

5. Alós-Moner M. Santamaría E. La piel. Anatomía y Fisiología. En: Soldevilla JJ.

Torra JE. Atención integral de las Heridas Crónicas. 1ª Ed. Madrid: SPA. 2004;

15-22

6. Idoate MA. Estructura y fisiopatología epidérmica. En: Vázquez FJ. Quintanilla E.

Fisiopatología de las enfermedades cutáneas. Editorial MCR. Barcelona. 1996:

51-82.

7. Stevens A. Lowe J. Histología humana. Segunda Edición. Ed. Harcourt S.A.

Barcelona 2000.

8. Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y

Heridas Crónicas. Clasificación-Estadiaje de las Úlceras por Presión. Logroño.

2003

Page 38: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

38

9. Lépori LR. Miniatlas. La piel. Informédica Contenidos Médicos S.L. Madrid 2003.

10. Geneser F. Histología. Tercera Edición. Ed. Panamericana. Madrid 2000.

11. Silbert JE. Proteoglycans and glycosaminoglycans of skin. En: Fitzpatrick Th.

Dermatology in General Medicine. Vol 1 4th ed. New York: McGraw-Hill, Inc

1993: 350-357

12. López JC. Fernández M. Heridas. En: López JC. Actuación de enfermería ante

las úlceras y heridas. 3ª Edición. Luzán 5 S.A. Madrid. 1993: 23 – 37.

13. Ibars P. Martínez F. Perdomo E. El abc de las heridas. Manual para de

formación sobre cuidado de las heridas crónicas. Laboratorios Indas. Madrid.

2007.

14. Fogh K. Glynn C. Jünger M. Krasner DL. Osterbrink J. Price P. Sibbald G.

Valoración y cuiddo de pacientes con heridas crónicas dolorosas. Coloplast.

Madrid. 2007.

15. Petit JM. Teixidó X. Santamaría E. Quemaduras. En: Soldevilla JJ. Torra JE.

Atención Integral de las Heridas Crónicas, 1ª Ed. Madrid: SPA; 2004: 361 – 384.

16. Torra JE. Soldevilla JJ. Rueda J. Bella i Cueto F. Morera i Pomarede MA. Espejo

E. Arboix i Perejamo M. Cabrera MJ. Tarín JJ. Martínez F. Abordaje de la carga

bacteriana y de la infección en las heridas crónicas. En: Soldevilla JJ. Torra JE.

Atención Integral de las Heridas Crónicas, 1ª Ed. Madrid: SPA; 2004:121 – 158.

17. Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y

Heridas Crónicas. Documento de posicionamiento GNEAUPP nº 4. Identificación

de los criterios de infección en heridas. Septiembre 2005.

Page 39: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

39

18. Bramasinne M. ¿Cómo se clasifican las heridas externas? En: Lachapelle JM.

Guía para el cuidado de las heridas. Ed. CREA. Barcelona. 2002: 19.

AUTOEVALUACIÓN

1.- La piel debemos de considerarla como:

a. Un tejido

b. Un aparato

c. Un órgano

d. Una membrana basal

2.- De las siguientes opciones señala aquella que N O se corresponda con una

capa de la piel:

a. La dermis

b. La membrana basal

c. La epidermis

d. El tejido celular subcutáneo

3.- De las siguientes afirmaciones señala la correc ta:

Page 40: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

40

a. El desarrollo de la piel se produce durante la semana veinticinco del feto

b. A mayor número de melanocitos mayor cantidad de melamina tendrá la piel

c. Los queratinocitos son células que están presentes en la dermis.

d. El tejido celular subcutáneo actúa como reserva energética de nuestro organismo.

4.- Uno de los siguientes elementos NO favorece el mantenimiento de un buen

estado de la epidermis. ¿Cuál es?

a. La cohesión celular del estrato córneo

b. La actividad regeneradora de la membrana basal

c. La disminución de las fuerzas mecánicas externas

d. La acción de los fibroblastos

5.- Uno de los siguientes elementos NO es frecuente cuando se presenta una

herida:

a. La separación de bordes

b. La hemorragia

c. La gangrena

d. El dolor

Page 41: asepsia y heridas

Fernando Martínez Cuervo, Teodomiro Hidalgo Sotelo. Heridas y su clasificación. En:Curso de Antisepsia y curación de heridas. Correo Farmacéutico, 2008. Disponible: www.correofarmaceutico.com"

41

6.- Cuando los gérmenes presentes en el lecho de un a herida generan un retraso

en el proceso de cicatrización, estamos hablando de :

a. Contaminación

b. Colonización

c. Infección

d. Todas las respuestas son correctas

7.- La regla de Wallace para valorar la extensión d e una quemadura se aplicar a:

a. los niños

b. los adultos

c. las respuestas a y b son correctas

d. Se utiliza para valorar la profundidad.

8.- La herida que muestra escasa o nula tendencia a la cicatrización se denomina:

a. Herida crónica

b. Herida infectada

c. Herida lacerada

d. Herida aguda