Audiencia de vista de causaEl procedimiento del fuero laboral en la provincia de Buenos Aires llega a su punto culminante con la que se ha denominado "Vista de causa". Eso es, ni ms ni menos que la etapa oral del procedimiento que, como su nombre indica, rene a toda la prueba de ese tipo para dar lugar, luego a la sentencia.

Eso quiere decir que el proceso se ha iniciado, se ha contestado la demanda, se ha intentado conciliar y, si se fracas en ese objetivo, se produjo toda la prueba (informativa y pericial) y se lleg al momento decisivo de producir las declaraciones testimoniales y las absoluciones de posicin.

Esa aclaracin no intenta menospreciar los conocimientos del lector, sino ms bien destacar que, cuando se llega al momento del juicio oral, las posiciones estn mucho ms claras que al comienzo y se sabe, por ejemplo, que el trabajador no se encuentra inscripto o s, pero de manera deficiente. Esto significa, que es poco lo que puede especular el profesional que defiende ya que las cartas estn casi todas sobre la mesa. As tambin, se debe subrayar que, generalmente, la prueba oral es la ms importante, sobre todo cuando la relacin laboral no se encuentra registrada, de all la importancia que se le debe dar al momento procesal que nos ocupa.

Como nuestro trabajo se dirige al ejercicio de la profesin liberal, para escribir stas lneas, se consultaron a tres jueces del fuero para que indiquen cules eran la principales fallas de los profesionales y ellos, sin ningn tipo de coordinacin previa, coincidieron entre si - y con las propias experiencias - al sealar que la cuestin primordial en donde se demuestran las mayores falencias, es en la preparacin de la audiencia.

En efecto, pareciera que los letrados van al acto, sin otorgarle el debido estudio previo al expediente (que se evidencia en cuestiones que ms delante de explicarn) pero parece tambin que, desde este lado, se les puede criticar lo mismo a los magistrados.

1 La conciliacin

La vista de causa comienza con un ltimo intento de solucionar el conflicto sin dictar sentencia. Para eso, un funcionario del tribunal hace pasar a los letrados y pregunta si hay posibilidades conciliatorias. Muchas veces, el empleado que interviene es uno de los mismos jueces del tribunal que con ms autoridad que nadie, viene a advertir a las partes las consecuencias de seguir adelante con el procedimiento, bordeando siempre el prejuzgamiento. Sin embargo, a veces ocurre, que intentan conciliar con ms autoridad que conocimiento del expediente o haciendo, casi invariablemente, hincapi en el resultado de la prueba pericial contable. Eso queda muy bien disimulado, pero los letrados avezados, saben que es as y aprovechan la situacin para seguir ocultando falencias de los propios defendidos.

Digamos de paso que s es importante la pericial contable, pero tambin lo es la informativa al correo argentino que decide la procedencia del intercambio telegrfico o la prueba pericial caligrfica que deshecha las firmas insertas en los recibos de sueldo. As que, cuando se destaca solamente una de las pruebas, se est haciendo una evaluacin incompleta que puede llevar luego a conclusiones equivocadas a las partes.

Sin embargo este es el primer momento en que los abogados demostramos la falta de preparacin de la audiencia. Porque a los argumentos de los jueces o de los funcionarios que intentan conciliar, se les debe contestar en el mismo tono, polemizando las afirmaciones que pretenden convencer a la parte. Para eso se debe conocer el expediente hasta poder indicar con precisin la existencia de una prueba o la ausencia de otra. Y se tiene que desarrollar la capacidad de controvertir lo controvertible, porque a esa altura, uno no puede discutir por ejemplo, acerca de la registracin de un empleado o no, porque ya est firme la prueba pericial contable.

2 La absolucin de posiciones

Superado el intento, se pasa a la produccin de la prueba oral propiamente dicha. Se integra el tribunal, pasan las partes con sus letrados a la sala de audiencias, entran los jueces y se da comienzo al acto.

La primera prueba que debe tomarse es la absolucin de posiciones. Es costumbre desistir la misma atento a que pocas veces se logra alguna certeza con la misma. Respetando la garanta constitucional de que nadie est obligado a declarar en contra de si mismo, las partes cuando absuelven, se encuentran relevadas del juramento de decir verdad. O lo que es lo mismo, autorizadas legalmente a mentir. Esto, aunque suene mal, podra ser perfectamente utilizado por el tribunal para llegar a la verdad.

Porque el artculo 44 de la ley 11.653 dice, en la parte que nos ocupa: "() Durante la vista de la causa se observarn las siguientes reglas: a) Se dar lectura a las actuaciones de prueba producidas antes de la audiencia, si alguna de las partes lo pidiere. b) A continuacin el Tribunal recibir directamente las otras pruebas. Las partes, los testigos y los peritos, en su caso, sern interrogados libremente por el Tribunal, sin perjuicio de las preguntas que puedan proponer las partes. C) Luego se conceder la palabra al representante del Ministerio Pblico si tuviere intervencin y a las partes, por su orden, para que se expidan sobre el mrito de las pruebas. Cada parte dispondr de treinta (30) minutos para su alegato ()".

As entonces, el Tribunal interroga libremente a las partes, es decir que puede, luego de absueltas las posiciones, preguntar al actor y al demandado. Esa tcnica, poco utilizada por los tribunales, da excelentes resultados cuando se pone en prctica. Porque la mentira en la que pueden incurrir en la absolucin, es casi siempre despejada en el interrogatorio ya que el que contesta lo hace desprovisto de cualquier prejuicio tcnico que le impida decir otra cosa que la verdad. As los demandados que, en ocasiones, niegan la relacin laboral, puestos en esta situacin, terminan por reconocer que lo han tenido trabajando al dependiente algunos meses, pero no lo registraron por falta de documentacin; o los actores que comenzaron diciendo que trabajaban de lunes a domingos, llegan a afirmar que los sbados y domingos el establecimiento permaneca cerrado, etc. etc. Es muy difcil para el absolvente mantener una mentira cuando es eso lo que tiene que decir y, al contrario, es muy sencillo para el tribunal arribar a la verdad del caso sin violentar ninguna garanta ni alterar indebidamente ningn procedimiento.

No estamos de acuerdo con la creencia generalizada de que la prueba a la que nos referimos no tiene incidencia en el resultado del pleito. Al contrario, los abogados debemos saber que, cuando damos la oportunidad al tribunal o a la otra parte de producir esa prueba, se nos puede complicar el resultado ya que exponemos a la parte a decir la verdad que lo compromete. Y el tribunal debera insistir en su produccin porque eso le va a permitir llegar a la verdad con ms facilidad.

3 Las declaraciones testimoniales

Luego declaran los testigos. Aqu las opiniones divergen. Hay jueces que opinan que deben ser consecuentes con la libertad sealada en el prrafo anterior y hay otros que prefieren que sea el proponente el que aclare sobre qu va a declarar el testigo.

En una relativamente reciente reforma del Cdigo de Procedimientos Civil y Comercial de la Nacin, se puso como requisito del ofrecimiento de la prueba testimonial que la parte aclare sobre qu extremo va a declarar el testigo. No nos parece eso una solucin ya que cumplido con eso al principio del proceso son muy inexactas las afirmaciones al respecto. As los testigos, conforme vaya avanzando el procedimiento pueden cambiar el centro de gravedad en su declaracin. En cambio, si en el momento inmediatamente anterior de la misma ponencia, se pudiera decir sobre qu va a declarar, el abogado podra guiar el interrogatorio del Tribunal, sin atentar contra su libertad y circunscribiendo su testimonio a lo que no se encuentra probado ya en el expediente.

Entendemos que un pedido de aclaraciones previo, del tribunal a los abogados, acerca del objeto de cada declaracin, ahorrara tiempo y confusiones en la audiencia.

En todo caso, lo que observamos es que los jueces, puestos frente al testigo, comienzan a interrogar confiando en que, al poco tiempo de declaracin, encontrarn la razn de la presencia de la persona propuesta. Y cuando los abogados en la repregunta, intentamos desviar el interrogatorio hacia otro lado, se provocan brevsimos incidentes que nos dejan mal colocados frente a todos.

A propsito de ello, en esta ocasin, tambin queda evidenciada la preparacin del abogado en cuanto al conocimiento de la relacin entre los dichos y lo que se ventila en el juicio. A esta altura ya debemos tener bien determinado lo que tenemos por probar, teniendo en cuenta el meollo de la cuestin que se ventila. Para eso, no podemos dejar de conocer lo que va a decir el testigo, sin afirmar por eso que hay que influenciarlo o guiarlo para que mienta. De tal manera que se pueda resumir en una oracin ante el tribunal el centro de lo que va a decir el declarante. Por ejemplo: "El testigo Garca va a declarar acerca de la existencia de la relacin laboral negada por la demandada". Semejante afirmacin es suficiente para guiar al interrogatorio del Tribunal y permitir que el mismo entienda a qu apunta la estrategia ofensiva o defensiva del actor o del demandado. Podr algn magistrado decir que algo as es innecesario, aunque desde este lado, no lo parece tanto cuando uno ve por donde comienzan a preguntar los jueces.

Otro problema al que nos enfrentamos los letrados es la ausencia de constancia de los dichos. Los sentenciantes toman nota de lo que escuchan, pero nadie sabe qu es lo que guardan. Y no son pocos los casos en los que la sentencia parece no tener nada que ver con los dichos de los testigos, quedando uno desprovisto de posibilidades de controvertir el decisorio. Sabemos que los letrados podemos pedir que el secretario tome nota de los dichos que sean importantes para la dilucidacin de la cuestin. Pero tambin sabemos que son muy pocas las ocasiones en las que se hace eso.

Por eso nos parece que tendramos que comenzar a proponer, por lo menos en casos que los ameriten, el soporte informtico de las declaraciones. Esto es, ofrecer una pequea Notebook o netbook, provista de cmara y micrfono (generalmente incorporado) que, en un pendrive constatado por el secretario del tribunal, se grabe al testigo esencial del caso. O a todos. Sin necesidad de obtener una grabacin al estilo de la televisin, si no algo que aunque sea ms rudimentario, deje constancia vlida de la declaracin de una persona.

No vemos razones vlidas para que el tribunal se oponga. Antes bien, as como se ha avanzado mucho en el ofrecimiento y aceptacin de la prueba de video en los procesos laborales hemos puesto en prctica lo dicho en tribunales de la provincia de Buenos Aires y de la Capital Federal as tambin es posible avanzar en este tipo de soporte, que sin limitar la libertad de decisin de los jueces, proteja a las partes de algn error de apreciacin de la prueba por parte de los magistrados.

Proponemos como requisitos bsicos, los siguientes:

1) Debe existir una propuesta formal previa de la parte interesada, para la aceptacin o no de la otra.

2) La proponente debe poner los medios necesarios a disposicin.

3) El secretario debe levantar una pequea acta en donde conste la limpieza absoluta del soporte ofrecido.

4) Una vez grabada la declaracin, se debe reservar en secretara la unidad en la que se obtuvo el archivo hasta vencido el plazo para la interposicin del recurso pertinente contra la sentencia del tribunal.

5) Sin embargo, la reserva en secretara debe ser lo suficientemente gil como para permitir la consulta del letrado que va a interponer un cuestionamiento ante la Suprema Corte.

4 Los alegatos

Las malas prcticas procesales nos han hecho olvidar el valor de este paso procesal.

El principio fundamental es que se alega sobre la prueba.

No se hace un discurso para quedar bien con el cliente. Tampoco se hace un resumen de la demanda o de la contestacin porque eso lo har cada juez en su inteligencia cuando se disponga a decidir.

Se evala la prueba producida. Con precisin. Por ejemplo: "Se prob la relacin laboral negada por la demandada por la ausencia de libros laborales constatada por el perito contador a fs "; "El testigo X afirm que el que le pagaba es el demandado; a l y al actor". Es decir, la valoracin pblica debe ser directa, concreta, teniendo ya completamente desbrozado lo principal de lo accesorio y no detenindose en cuestiones secundarias para el pleito. De la misma manera que los jueces lo hacen cuando dictan sentencia ya que omiten toda la prueba que no tiene que ver en forma inmediata con la cuestin debatida.

En este momento, tambin hay que demostrar conocimiento del derecho y del expediente. Del primero para fundar brevemente la razn que existe para destacar una u otra prueba. Del segundo para citar con exactitud. El alegato es una exposicin tcnica porque se hace frente a profesionales del derecho y no frente a los clientes, aunque ellos tambin se encuentren en la sala. No debe ser emotivo, ni retrico, ni magistral como si los jueces debieran aprender derecho de nuestra exposicin. Tenemos que ganar el juicio, no el nimo del cliente que ya debe ser leal a nosotros a esa altura.

Finalmente, decimos que se debe alegar cuando es necesario. No siempre. Sino cuando el caso lo amerita. Por ejemplo, es innecesario este paso cuando la demandada est rebelde y el letrado, por alguna razn no desisti de la prueba oral. O cuando la relacin laboral fue negada y los cuatro o cinco testigos que declararon, dijeron que el demandado presente en la sala, les pagaba el salario, les daba rdenes y les controlaba el horario de entrada y salida.

Entendemos entonces, que debemos recuperar el valor del alegato haciendo buen uso del mismo. Porque all es el momento en donde los abogados podemos lucirnos en los trminos dichos ms arriba frente a otros hombres de leyes y porque, bien empleado, es el momento oportuno para llamar la atencin al tribunal sobre uno o dos detalles decisivos del pleito.

5. Los incidentes orales

Son poco frecuentes. Pero existen. La presencia del tribunal limita mucho la existencia de los mismos, porque las cuestiones tcnicas que suelen oponerse ante una audiencia la resuelven antes los magistrados.

Pero pueden ocurrir. Por ejemplo, por la ausencia de firma de la parte en el pliego de posiciones. Supuesto el caso en que la parte insiste en la produccin de la prueba confesional, se abre el pliego en el momento de la misma audiencia. All se comprueba la situacin sealada. La parte contraria se opone, el tribunal da traslado oral de las razones invocadas y el otro letrado las contesta inmediatamente. O las oposiciones a las preguntas del tribunal o de los letrados contrarios. Por impertinentes o por superfluas. Tambin generan incidentes breves y, obviamente, orales.

Entendemos que en estas situaciones tambin se muestra la preparacin del abogado con respecto al expediente. Porque es necesario conocer perfectamente el articulado pertinente de la ley procesal y su vinculacin con el juicio. Para eso, hay que tener todo bien estudiado y repasado antes de la audiencia. Aunque esto parezca una actitud de estudiante universitario. Porque hay artculos olvidados de tan poco usados. Pero que pueden ser necesarios.