Autoestima en la Carta Natal

© Copyright 2011 - Silvina Paula Gregórovich y FULTENA

Este libro y el CD que lo acompaña no pueden ser reproducidos total ni parcialmente por

ningún medio sin permiso expreso del autor. Todos los derechos reservados.

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Los elementos y conceptos aquí vertidos no pretenden diagnosticar, prescribir, tratar ni

curar patologías físicas ni mentales, sino establecer un estado interior de armonía y cui-

dado consciente de las emociones, pensamientos y la salud física. Ante cualquier duda

sobre problemáticas físicas y/o mentales, consulte con el facultativo adecuado.

Autoestima en la Carta Natall �

Prólogo

Cada texto lleva incorporado, entre los espacios que permiten entrever las letras encadenadas, el alma del autor. Cuando empezamos a desarro-llar la Editorial Fultena, creíamos que estábamos llenando un vacío, una necesidad que tenían los estudiosos o, como prefiero llamarlos, los “ami-gos” de las Terapias Naturales, de libros especializados en la materia, con un contenido que no es habitual en las librerías, y con agregados vivencia-les como son los CD´s que acompañan nuestras publicaciones.

Sin embargo, con el devenir de los libros, descubro que esos mismos textos llegan para llenarnos a nosotros de una renovada sabiduría y pro-fundidad, refrescando nuestra perspectiva y dando ingreso a valiosos te-soros que ven así la luz, en la mágica comunion de brindar y recibir cono-cimiento a la vez.

Coincido con muchos de los hermanos de camino con quienes empe-zamos hace muchos años que nuestra región, que alguna vez fue un foco receptivo de mensajes sanadores de otras áreas donde este conocimiento tenía un importante desarrollo, se ha convertido, como una estrella, en un centro emanador de esa luz que llega con cada descubrimiento, con cada paso que damos en el reconocimiento de la mirada más amplia que dan a la salud las terapias naturales.

Ultimamente, ya no buscamos qué libros editar, sino que llegan en una potente sincronicidad con la expectativa de conocimiento de nuestros lec-tores. Un cruce casual en la calle, por ejemplo, dio por resultado la deci-sión de publicar el maravilloso trabajo que tenemos a continuación.

Y como sucede en la naturaleza, el florecimiento es tal vez el momento visual en el que surge un trabajo profundo, silencioso e implacable en que las raíces extraen los nutrientes de la tierra en conjunción con la energía cósmica y la transmutan en vida.

Así nos llega Silvina Gregórovich. Abogada, astróloga, madre, docente y muchas cosas más en su multidimensional vida. Su mirada me recuerda a esos seres del renacimiento, llenos de conocimiento pero ansiosos de

� lAutoestima en la Carta Natal

nuevas búsquedas. Y si sumamos a eso la simplicidad que tiene para expli-car conceptos complejos, tenemos el reflejo de una tan bella alma en un libro pleno de perlas de sabiduría.

Años de trabajo son necesarios para el conocimiento que se destila en estas páginas, y espero que en ellas se encuentren nuevas rutas de bien-estar, en el sueño compartido de contagiar al mundo con salud natural.

No es fácil abordar un tema puntual como la autoestima, con tantas aristas difíciles, desde la perspectiva de la astrología, una de las herra-mientas de autoconocimiento más antiguas y enriquecedoras. La profe-sional aborda el tema con valentía, jugándose con conceptos concretos y aplicables, buscando abrir ventanas para que se filtren conocimientos que pocas veces llegan al público masivo.

He recorrido el libro con mis propios ojos, una y otra vez, emergiendo de él con más posibilidades internas. Por eso es un placer, en nombre de FULTENA, ser un canal para que estas páginas lleguen a los ojos prepara-dos para leerlas, pues como decía Paracelsus, la luz entra en cada casa de acuerdo a la apertura de las ventanas.

EduardoLondner

Presidente de FULTENA

“Los cielos te llaman, y giran en tu derredor mostrando

sus esplendores eternos.La divina comedia”.

Dante Alighieri


Introducción

Este libro, es producto de un intenso trabajo y estudio relacionado con la búsqueda propia de la autoestima, bajo la plena conciencia de que es un elemento basal en nuestra psiquis para el logro de cualquier objetivo en la vida.

El absoluto convencimiento a través de la experiencia propia y de amigos y clientes, en las diferentes ramas laborales a las que me dedico, me ha llevado a comprender cuán importante es la autovaloración, a la hora de decidir los caminos a tomar en nuestra vida, ya sea en lo referente a la vida mundana como en lo atinente a la evolución individual.

La conciencia plena de que por el hecho de existir, por el hecho de ha-ber encarnado en el cuerpo que nos acompañará a lo largo de esta vida, somos seres dignos y merecedores de amor y felicidad, es la que me ha llevado a trabajar arduamente sobre mí y sobre quienes acuden a mi de una u otra forma para encontrar el por qué de nuestra falta de amor a nosotros mismos.

¿Por qué, si somos seres maravillosos dentro de esta fantástica creación, no podemos comportarnos como el resto de los seres del mundo que na-cen, viven y mueren en total armonía con la vida y con ellos mismos?

¿Qué es lo que hace que los seres humanos, que somos los “niños mima-dos de la creación”, vivamos tan alejados del amor puro y nos cueste tanto avanzar hacia nuestra evolución en forma lineal y sin sufrimientos que no debiéramos padecer?

Por supuesto, la gran respuesta a estas preguntas, radica en la conjuga-ción de nuestra inteligencia emotiva y cognitiva, en nuestra capacidad de razonar y en el maravilloso –pero cruel a la vez- libre albedrío.

Es cierto que esta capacidad de dudar y elegir, nos pone en la vida en si-tuaciones que resultan angustiantes y conflictivas, pero por qué no apren-der a vivir bajo la fe y confianza de que todo lo que sucede siempre es para nuestro mayor bien.


Por qué no podemos a veces, relajarnos en el Creador, en el mundo angéli-co, en nuestro Yo Superior y vivir con más tranquilidad y menos angustia.

Probablemente no logramos hacerlo porque nuestra falta de amor y con-fianza hacia nosotros mismos y hacia el proceso de la vida, nos lleva a creernos no merecedores de lo bueno que hay a nuestro alrededor y que está allí para nosotros, exclusivamente para nuestro disfrute.

Por eso la necesidad, en primer lugar, de reconocernos, de buscar dentro nuestro, cuál es el origen en nuestra vida de esa falta de fe y de amor que habita en nosotros.

Luego, cuando conocemos los motivos, las causas de ese desamor, bus-quemos las soluciones.

Este libro entonces, surgió como mi propia necesidad de aprender a reco-nocerme y a amarme lo suficiente como para creer que merezco ser feliz como cualquier ser de la creación.

Que mi vida y la de todos nosotros merece ser digna y puede serlo en la medida en que nos lo propongamos.

Este estudio y las distintas herramientas que en este libro se presentan, como ser la Astrología, las Flores de Bach y las demás terapias alternati-vas, me ha ayudado infinitamente a crecer como persona y entender con amor al mundo que me rodea.

Espero entonces, que pueda ayudar a todo aquel que lo necesite y que, por obra de los ángeles llegue a sus manos.

SilvinaPaulaGregórovich

Marzo de 2011


CAPITULOI:

La autoestima en la vida

“El hombre sabio maneja sus astros, el ignorante es manejado por ellos”.

CARTAS NATALES

La Carta Natal no es ni más ni menos que una “fotografía” del Universo en el momento del nacimiento de la persona y visto desde el lugar exacto en que la persona ha nacido.

En su contenido encontramos las energías natales otorgadas por las posi-ciones planetarias al momento de nacer y que acompañarán la vida de la persona hasta su muerte.

Esta especie de “huella digital”, abarca no sólo algunas tendencias ener-géticas a determinados hechos, sino también los dones, virtudes y asigna-turas a aprender a lo largo de toda la vida.

Conociéndola, se transforma en una maravillosa herramienta para vivir mejor, en cualquiera de los ámbitos que se observe y, sobre todo, facilita el aprendizaje que hemos traído a concretar en esta vida.

A través de las llamadas Casas y los posicionamientos planetarios dentro de ellas y, dependiendo del signo en que se encuentren, podemos cono-cer circunstancias posibles en nuestra vida con las que podemos enfren-tarnos y en especial, que tenemos a favor y en contra para llevar adelante nuestros objetivos y anhelos.

Nuestra historia natal

Cuando analizamos la Carta Natal, podemos observar no sólo los signos de padres, abuelos o familiares muy directos que generalmente se here-dan, sino también de qué clase de hogar provenimos.

En mayor o menor medida, la mayoría de la gente se cría en un hogar


al menos algo disfuncional, no necesariamente hablamos de serios pro-blemas como adicciones o abusos, sino también de problemas menores como la contradicción en los mensajes que emiten los adultos y funda-mentalmente, que se crece bajo condicionamientos que no dan lugar al desarrollo de la propia esencia.

La mayoría de la gente necesita llegar al primer retorno de Saturno, cuyo efec-to se produce entre los 27 y 32 años, dependiendo de la persona, para permi-tirse experimentar su propia esencia y descubrir quienes son en realidad.

Desde lo psicológico, estas son algunas de las formas en que el mundo adulto, sin quererlo o sin saberlo, lleva al niño a no desarrollar una au-toestima positiva:

• la sobreprotección

• la falta de demostración de afecto

• el ridiculizarlo

• emisión de normas contradictorias de conducta

• desaprobación de sus sentimientos genuinos

• críticas y generación de sentimientos de culpa y/o vergüenza

Mediante estas pautas desvitalizantes, los adultos forman niños que lue-go, siendo adultos, no tendrán una estima alta que los acompañe para enfrentar al mundo y sus exigencias.

La Autoestima y sus componentes

Podemos entender que la mayor o menor autoestima dependerá de la confianza hacia nosotros mismos y hacia el proceso de la vida. Esto es, confiar en que nosotros somos capaces y en que el Universo es un lugar benigno que apoyará todos nuestros deseos de crecimiento.

El sentirnos con derecho a ser felices y a merecer todo lo mejor, es tan im-portante como el creernos capaces de conseguirlo por nosotros mismos.

El poder que radica en nuestra mente, suele ser muy superior al que cree-mos. La mente y la palabra, como expresión directa y exterior del pensa-miento, es capaz de concretar nuestros mejores sueños y también nues-tras peores pesadillas.


La Ley de Atracción

Este fenómeno que en la actualidad ha sido furor en el mundo, relativo a la Ley de Atracción, que se gestó a través del Libro “El Secreto”, también se relaciona con la autoestima.

Siempre solemos atraer lo similar, por lo tanto, si nuestro nivel de au-toestima es bajo, difícilmente atraigamos a nuestras vidas personas que tengan una estima alta o, si las atraemos, seguramente serán relaciones que no durarán.

Por ello, hasta en el ámbito de las relaciones humanas, tener una alta autoestima es importante, ya que así nuestras relaciones podrán ser ar-moniosas, sanas y que aporten a nuestra evolución espiritual y no que nos estanquen en el proceso evolutivo.

El Ciclo creativo de la Energía

La ciencia metafísica ha concluido en los últimos años en que todo es energía y, de ese modo, nosotros somos creadores de nuestro propio des-tino con el poder que la mente nos otorga.

En mayor o menor medida, dependiendo de que los mensajes del incons-ciente no sean demasiado contradictorios, cuando tenemos una idea o pensamiento podemos llevarlo a la concreción a través de una emisión cierta de energía mental conjugada con el sentimiento.

En otras palabras, si lo ideamos y luego lo deseamos a nivel sentimental, podemos concretarlo como una realidad para nosotros.

Si esto es así, entonces debemos preguntarnos una y otra vez, por qué motivo deseamos profundamente algo con la mente y el corazón y tal vez no lo obtengamos.

El no obtener lo anhelado puede tener que ver con varios puntos: uno de ellos es la incoherencia entre lo que se tiene en mente y lo que se desea a nivel sentimental; en este caso, esa incoherencia impide la materializa-ción de lo supuestamente anhelado.

En otros casos, existen factores inconscientes (que no podemos reconocer conscientemente), que generan esa incoherencia entre mente-corazón y que impide la materialización del deseo.

Dentro de esos factores llamados “inconscientes”, debemos incluir la sa-

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biduría de nuestro propio Ser Superior, que, conociendo plenamente el objetivo de nuestra encarnación, aunque nosotros no lo reconozcamos tan claramente, no permite que sucedan circunstancias que no hacen a nuestra evolución superior.

En este caso, nos es muy difícil entender, desde nuestra visión humana limitante, el por qué de tal situación, pero por lo general, con el paso del tiempo y, haciendo un análisis de las circunstancias acontecidas a la distancia, solemos entender por qué motivo fue mejor para nosotros que ese anhelo o deseo no se cumpliera en aquel momento. Generalmente, este “darse cuenta”, solo es cuestión de tiempo.

Todos estos factores, están íntimamente ligados a nuestra autoestima, que juega un rol preponderante, no será suficiente crearlo en nuestra mente y tamizarlo por el corazón, también debemos creernos merecedores y ca-paces desde nuestra mente inconsciente y eso es la autoestima.

La predicción en la Carta Natal:

“El saber te hará libre”.

Si bien es cierto que puede observarse en la Carta Natal una tendencia energética hacia determinadas situaciones, lo cierto es que el libre albe-drío es superior a todo.

La estadística demuestra que, es suficiente con que una persona esté aler-tada de un eventual hecho para que este no suceda y, ello tiene que ver con el manejo mental de la energía predisponente.

Desde el momento en que la persona se encuentra ante un hecho de eventual realización futura, los mecanismos inconscientes comienzan a trabajar para que esto suceda o no a partir de la conducta que la persona llevará a cabo.

En la Astrología antigua y clásica, el determinismo y el fatalismo eran las corrientes más fuertes, ya que se creía que el ser humano no podía esca-par al destino astral que se fijaba al momento de nacer.

En la actualidad, las ciencias metafísicas, se encuentran a favor de las co-rrientes no deterministas y, como consecuencia, confían plenamente en la capacidad del hombre de manejar sus energías astrales bajo el predo-minio del libre albedrío.

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La Pseudo-autoestima

A veces somos personas exitosas, independientes, orgullosas de nuestros logros, hasta ególatras y egocéntricos. Vivimos recibiendo elogios de quie-nes nos rodean, pero en nuestro interior más profundo, somos pequeños niños que aún seguimos buscando la aprobación del mundo exterior y vivimos aterrados por la posibilidad de que, en algún momento, todos aquellos que nos elogian, descubran cuán inseguros somos en nuestra esencia más íntima.

Esto es la pseudoautoestima, la que se genera por fuera de nosotros en base a nuestros logros sociales, pero que nada tiene que ver con un ver-dadero y profundo amor hacia nosotros mismos y seguridad respecto de nuestro valor y merecimiento en la vida.

Es fundamental que la estima se desarrolle de adentro hacia afuera, pre-ponderando nuestra dignidad en sí misma, por el simple hecho de ser un ser humano libre y especial dentro de la Creación y no desde el afuera y en base a los logros mundanos.

Tal vez sea este uno de los obstáculos más difíciles de sortear en nuestro camino hacia una autoestima buena y sana, ya que, en el mundo actual, generalmente solemos confundirnos en gran medida porque todo se mide en base a los logros externos, a las adquisiciones y a la valoración social, mucho más que por la misma naturaleza de ser quienes somos, desnudos tal como venimos y nos vamos de este mundo.

“Las estrellas en el Cielo tocan la música.

Si tan solo tuviéramos oídos para oírlo”.

Pitágoras


CAPITULOII:

Fundamentos de la Astrología

Este capítulo, pretende lograr una comprensión sencilla de los conceptos básicos de la Astrología, para la interpretación del “mandala” natal.

Para la interpretación de una Carta Natal, debe tenerse en cuenta que existen cuatro niveles diferentes: los planetas en los signos, los planetas en las casas, los puntos importantes en la Carta y, finalmente, la relación entre ellos (aspectos).

Los planetas en los signos, involucra la distribución de los diez planetas (ocho planetas y dos luminarias) emplazados en el espectro zodiacal. Esto, debe llevarnos a ser conscientes de que todos llevamos dentro la energía de los doce signos y que jugaran su rol en nuestra vida, en mayor o menor medida dependiendo del emplazamiento planetario concreto.

En Astrología, a modo de simplificación, se llama planetas también a las luminarias Sol y Luna.

El “Camino de la Vida”

Si bien, debemos tener en cuenta que todos llevamos en potencialidad energética los doce signos, también es importante destacar que existen tres ejes fundamentales que hacen a lo que los astrólogos llaman el “Ca-mino de la Vida”, ya que las cuestiones fundamentales dependerán de los tres signos y los emplazamientos del Sol, la Luna y el punto del amanecer: el Ascendente.

La personalidad basal, estará definida por el signo astrológico en el cual se encuentra el Sol y sus circunstancias dependerán de la Casa astrológica en la que se encuentre.

La Luna, por su parte, indicará la emotividad primaria, aquella que no puede tamizarse por la razón antes de salir a la luz y que lleva nuestro instinto más primitivo con nosotros, encerrando también nuestra historia familiar y origen.

Autoestima en la Carta Natall 1�

El Ascendente, que a diferencia de los anteriores, solo es un punto dentro de la Carta Natal, que indica el amanecer del día del nacimiento de la persona, contrario a lo que sucede con el Sol, cuya energía se encuentra aprendida, es la energía que viene a aprenderse y experimentarse.

Estas tres energías configuran los ejes más importantes dentro del esque-ma de la Carta Natal y son los que harán predominantes esos signos del zodíaco que contengan.

BREVE RESEñA dE LAS ENERgíAS PLANETARiAS

Ascendente

El Ascendente es el primer signo del Zodíaco que asciende en el horizonte por el Este en el momento del nacimiento. Esto cambia cada dos horas, por ello es muy importante tener la hora precisa de nacimiento ya que ello nos determinará el Ascendente de la persona que nace.

Este signo indica el modo en que encararemos la vida en el mundo que nos rodea, nuestro habitual estado de ánimo y la forma básica con que emprenderemos lo nuevo.

Desde un punto de vista psicológico, el Ascendente es la energía que uno viene a aprender, tal vez una de las asignaturas más importantes a cubrir en el transcurso de la vida.

Esta energía surge realmente y con toda su fuerza, generalmente después de los 29 años, momento en que Saturno, realiza su primer retorno a la posición natal de la Carta.

Este aprendizaje se realiza “a la fuerza”, es decir, que superada esa edad clave, la vida nos pondrá en situaciones que nos obligará a tomar contacto con esa energía que debemos experimentar y aprender, más allá de que lo busquemos o no.

Desde un punto de vista físico, este punto natal nos habla del momento en que nacemos, el parto, la salida del útero materno y también nues-tra zona corporal más sensible. Por ello es muy importante, analizar la eventual presencia de cualquier planeta que estuviera presente sobre el Ascendente, ya que ello nos mostrará importantes detalles referidos a la personalidad en estudio.

1� lAutoestima en la Carta Natal

El Sol

El Sol es quien dará lugar a nuestro signo zodiacal básico.

Encarna nuestro carácter intrínseco, las preocupaciones básicas, el área y el modo en que tiene lugar la mayor parte de nuestra personalidad.

Simboliza el camino y la meta en la vida, como así también lo que nos es esencial. El lugar donde se emplaza en nuestra Carta, nos mostrará el área de la vida que será eje de nuestra existencia y desarrollo personal.

Cada 365 días aproximadamente, el Sol vuelve a tocar su lugar natal, ha-biendo recorrido todo el Zodíaco, y dando lugar a lo que se conoce como Revolución Solar.

La Revolución Solar, es la “aplicación de un zoom” sobre nuestro mandala natal, que nos permite el análisis de las energías que nos acompañarán durante ese año particular de nuestra vida, que va desde un cumpleaños hasta el otro.

Siempre debemos tener presente que, al igual que en la Carta Natal, las energías que nos muestra la Revolución Solar, son predisponentes y no determinantes, debiendo tomar el libre albedrío como eje real de lo que sucederá en nuestras vidas.

La Luna

La Luna representa la naturaleza interior, las emociones, el inconsciente y las reacciones instintivas y nuestra historia familiar o de origen.

La posición de la Luna muestra en qué dirección nos vemos impulsados, ante qué reaccionamos de forma espontánea y aquello que instintiva-mente detestamos y evitamos.

También nos habla de cómo hemos vivido de niños a nuestra madre, las vivencias de la infancia y las raíces familiares.

El lugar donde se emplaza, nos habla de en que lugar o bajo qué circuns-tancias nos sentiremos seguros.

Generalmente, el sitio de la Carta donde se encuentra la Luna, no solo in-volucra la búsqueda de seguridad, sino también una zona de nuestra vida donde podría haber mayores fluctuaciones.

Debemos tener en cuenta que, la Luna, es el planeta o luminaria, que más


fluctúa, ya que tarda solo veintiocho días en recorrer el Zodíaco, quedán-dose, aproximadamente, dos días y medio en cada signo. Cada veintiocho días, se produce entonces la Revolución Lunar, que puede estudiarse igual que la Revolución Solar pero aplicada mes a mes.

El estudio de la Luna es de alta importancia para acompañar el proceso de la vida cotidiana, ya que, la presencia en cada signo, sumada a las fases lunares que va atravesando, puede ser de gran ayuda para ser utilizada como herramienta en el día a día.

Mercurio

Representa la mente y el intelecto, la teoría de las combinaciones, el ha-bla, la comunicación, la meditación, la táctica, el conocimiento, la flexibi-lidad o rigidez mental, la capacidad de orientación, el pensamiento analí-tico y lógico y la forma de juzgar y decidir.

También representa la expresión en el habla, la curiosidad, la sed de cono-cimiento y una cierta predisposición, ambición y capacidad de aprender.

Rige nuestro modo de recoger, mediar y distribuir conocimiento e infor-mación. En lo cotidiano, su regencia abarca el comercio, las comunicacio-nes, el transporte, todo lo relacionado con papeles y escritura.

Es el símbolo del amor, de los sentimientos, de la armonía, de la capacidad de dar y recibir, de las relaciones y las asociaciones.

Representa el modo en que nos fundimos o no con el otro, los placeres de la vida, lo estético, el modo de disfrute.

El modo en que damos y recibimos afecto, se encontrará afectado por la energía del signo en el que se emplace Venus.

Es importante diferenciar a Venus de la Luna: mientras que Venus nos ha-bla del amor y del afecto y su energía puede ser “tamizada” a través de la razón, la Luna nos habla de la emoción primaria, aquella que es instintiva y que sale a la luz sin posibilidad de tamiz alguno.


Marte

Representa la fuerza de voluntad y el deseo de conquista de un individuo. Simboliza vigor, perseverancia y la energía necesaria para combatir los obstáculos en la vida y penetrar en el mundo.

La determinación y la disposición a aceptar el conflicto y el disfrute de los riesgos, estará regido por el signo en el que este planeta se encuentre.

También representa la agresividad, el impulso, el empuje y la pasión.

A través de Marte, canalizamos nuestra naturaleza esencial, potenciamos nuestro desarrollo y logros y también nos protegemos de los ataques ex-ternos. El modo en que se emplace Marte nos hablará también de nues-tra esencia sexual, de cómo encararemos nuestra vida sexual y cómo in-tentamos satisfacernos.

Júpiter

Representa la confianza en la vida, la creencia en el sentido de la vida, los ideales y valores de la persona y la búsqueda y el descubrimiento del sentido personal en la vida.

Fomenta la buena suerte, la prosperidad y en especial beneficia el desa-rrollo de la personalidad y el ensanchamiento de los horizontes indivi-duales. También significa dignidad, sabiduría, creencia, esperanza, moral, gracia, convicciones, confianza, riqueza, abundancia.

Su emplazamiento en la Carta Natal, nos habla de las circunstancias de la vida en que las experiencias nos resultarán más llevaderas y fáciles.

Saturno

Contrario a Júpiter, su ubicación en la Carta Natal nos habla de un sitio que no nos será tan propicio sino que, por el contrario, nos presentará dificultades para que sean sorteadas y finalmente nos realicemos en esas áreas específicamente.

Nos enfrenta con nuestras propias estructuras, nuestros miedos, nuestros límites, el aislamiento, la soledad, la sensación de abandono, las obliga-ciones más tediosas, la justicia, la ley y el orden.


Nos obliga a trabajar en el desarrollo de la personalidad autónoma y un carácter constante mediante la realización de las capacidades existentes y la verdadera vocación. Aumenta nuestras experiencias y sabiduría en la vida. Nos da claridad, autocontrol y moderación.

Urano

Representa la libertad, la fraternidad y la igualdad. Encarna todo lo que es ingenioso en nosotros, nuestro afán de independencia y libertad indi-vidual. Es el gran liberador.

Representa cambios sorprendentes, destellos de inspiración y súbitas re-vueltas. Nos ayuda u obliga a superar las antiguas estructuras, actitudes, ideas y opiniones a nivel individual y colectivo. Nos libera de las viejas ataduras y desintegra abruptamente los lazos.

Neptuno

Representa la disolución de los límites en forma mucho más sutil que Ura-no. También representa el anhelo individual de superar la conciencia coti-diana y ver las cosas más elevadas. El afán de Neptuno está íntegramente dirigido a apreciar el mundo espiritual.

Nos ofrece sensibilidad emocional y debilidad corporal. Es fuente de inspi-ración no sólo en lo espiritual sino también en lo artístico.

Plutón

Nos habla del poder de transformación más profundo. Nos ofrece una transformación radical a favor de la verdad profunda. Las experiencias a través de este planeta, nos llevan a conocer la muerte y el renacimiento en todos los órdenes de la vida.


LoS PUNToS CoNSidERAdoS káRMiCoS dENTRo dE LA CARTA NATAL:

El asteroide kirón

Kirón es un asteroide que involucra vital importancia cuando tratamos de encontrar los mecanismos inconscientes que desatan conductas en la vida, ello, si lo observamos desde un punto de vista científico.

Desde un punto de vista de las reencarnaciones, el karma y el dharma, nos hablará de nuestra relación en la vida con situaciones generadas en el pasado (ya sea en vidas pasadas o en el pasado de la propia vida), que generan sus efectos y buscan sus soluciones en el hoy.

La interpretación de las energías que moviliza Kirón dentro de la Carta Na-tal, en especial en sus aspectos con los planetas, nos permite interpretar la psicología de la persona desde un lugar enraizado y a veces difícil de detectar desde lo consciente.

Los Nodos Lunares

Los ejes de intersección entre la Luna y la órbita solar, son los llamados Nodos de la Luna. Uno se encuentra exactamente opuesto al otro.

Su significado nos habla de un punto crucial en la vida de una persona. Muestra las tareas que habrá de dominar y el propósito de la existencia. El Nodo Sur simboliza el pasado: los patrones y estilos viejos de compor-tamiento que el alma de un individuo ya ha traído consigo. En astrología kármica, se habla de vidas pasadas. Por analogía, el Nodo Norte señala hacia el futuro. Muestra la dirección a seguir y simboliza las tareas que aguardan ser resueltas.

El Nodo Sur tiende a obstruir el desarrollo y funciona como freno; por el contrario, el Nodo Norte, indica el reto de una nueva dirección.


LoS ASPECToS

Los aspectos en la Carta Natal nos muestran las relaciones entre las ener-gías planetarias que encontramos en ella.

Se pueden dividir los aspectos en favorables (o armónicos), y en desfavo-rables (o desarmónicos), según combinen más o menos a nuestro favor esas energías.

Los aspectos favorables o benéficos a tener en cuenta, son los trígonos y los sextiles.

Los desfavorables más importantes son las cuadraturas y oposiciones.

Las conjunciones serán favorables o desfavorables según las energías que involucren y cómo la persona (conociendo su existencia) aprende a domi-narlas y manejarlas.

Energías Triplicidades

Se llaman Energías Triplicidades a los siguientes tipos energéticos que for-man la Carta Natal:

• EnergíaCardinal: Capacidad de iniciar o proyectar. Energía creativa que genera fuerza para dar origen a proyectos e ideas.

• EnergíaFija: Capacidad de perseverar y llevar a cabo los proyectos. Ca-pacidad y energía ejecutora.

• Energía Mutable: Capacidad de relacionarse y de mediar. Capacidad conciliadora y de comunicación. Amalgama las dos energías anteriores.

Energías Elementales

Los elementos que conforman la Carta Natal en la Astrología Occidental, son cuatro: Fuego, Tierra, Aire y Agua.

• El Fuegonos habla de pasión e iniciativa.

• La Tierra nos da estabilidad y mansedumbre.

• El Airenos transforma en volátiles, errantes y pensantes.

• El Agua nos sumerge en nuestro pasado, nuestro inconsciente y las pro-fundidades del Alma.


Tanto las energías Triplicidades como las Elementales, pueden verse en la Carta Natal a partir de los emplazamientos de los planetas en los signos, llevando a cabo una sumatoria de los mismos y permitiendo a través de un cálculo matemático, observar la cantidad que existe en la Carta de cada una de estas energías.

Es importante destacar que, no es común encontrar cartas natales con un equilibrio perfecto de energías, por el contrario lo habitual es que preva-lezca una energía sobre otra y, será parte del trabajo de orientación del astrólogo, ayudar al consultante a buscar ese equilibrio en lo cotidiano.

Naturalmente y, en forma instintiva, nos vamos relacionando con perso-nas que poseen las energías de las que somos carentes, así, sin buscarlo en forma consciente, una persona con carencia, por ejemplo de Aire, se relacionará y se verá complementada por una persona con mucho Aire en su carta o tal vez con un exceso de Aire en la misma.

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AUTOESTIMA EN LA CARTA NATALQUE INCLUYE ADEMAS DE 108 PAGINAS

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