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AVENTURAS CON EL TELEVISOR(Gianni Rodari, italiano)Adaptado por Marianela Antimán

Personajes: Doctor, periodista, bandido, general Bolo, Estudiantes en marcha, deportistas, narrador.

En una sala, un sillón y un televisor. De un costado del escenario aparece el narrador.

Narrador: - Una noche el Dr. Verucci, volvía a casa después del trabajo, nuestro doctor podría ser un dentista o un empleado de correos; en realidad podemos hacer lo que queramos con él, al fin y al cabo esta es nuestra historia y este nuestro personaje. Intentemos imaginar también cómo está vestido, cómo camina, cómo es su voz. –Vamos a escucharlo a escondidas (susurrando al público en señal de complicidad).

(el narrador permanece en una esquina del escenario y aparece el doctor)

Doctor Verucci: - en casa, por fin en casa... hogar, dulce hogar. No puedo más, estoy verdaderamente agotado, además (haciendo mímica) , entro, cierro la puerta:- Señoras y señores , los saludo, todos fuera por favor ( haciendo la mímica cierra la puerta)

(se sienta en un sillón, toma el control remoto y enciende el televisor).

Narrador: - una hermosa señorita se le apareció al Dr. Verucci.

Periodista: (se arregla el collar, el peinado, en su mano derecha sostiene un micrófono) - Dr. ¿No me reconoce?, soy la presentadora de televisión, usted encendió la tv y aquí estoy, vengo a darle las noticias de última hora.

Doctor Verucci: (asombrado, mira a todos lados y se encoge de hombros)- momento, Ud. no está dentro del televisor como debería, está en mi

casa y en mi sala.

Periodista: - Perdone, ¿Cuál es la diferencia? También cuando estoy en el televisor estoy en su casa y hablo con Ud.

Doctor Verucci: - Pero, ¿Cómo lo ha hecho para entrar?, no me he dado cuenta...Oiga, ¿no habrá entrado a escondidas, verdad?

Periodista: - ya pues, no le dé más vueltas ...¿Quiere o no las noticias del telediario?

Doctor Verucci: - La cosa no acaba de convencerme, pero bueno, puede comenzar.

Periodista: (arreglándose momentáneamente el collar, el peinado y el micrófono)- Entonces, en Inglaterra continúa la caza del temible bandido evadido de la

cárcel de Reading. El comisario, jefe de policía ha declarado que según él, el bandido se esconde en los bosques.

Bandidos: (apareciendo desde unos de los rincones de la sala)- ¡Cuentos!

Doctor Verucci: ¿Quién es? ¿Quién ha hablado?

Periodista: - Es el bandido ¿no?, mire ahí , está escondido detrás del sillón.

Doctor Verucci: - Pero, ¿Cómo se atreve? ¡y más encima armado!¡un bandido en mi casa! Cosa de locos ¿no?

Bandido: - pero, si es Ud. quien me ha invitado (dijo el bandido, saliendo de su escondrijo)

Doctor Verucci: - Yo, chis, esta sí que está buena – yo invitando a un bandido a visitarme y tomar una copa.

Bandido: A propósito ¿tiene?

Doctor Verucci: - ¿Qué, si tengo qué?

Bandido: - la copa

Doctor Verucci: - Además de bandido, sinvergüenzas, en primer lugar, declaro que no lo conozco y que está aquí en contra de mi voluntad. Ud. señorita es testigo.

Periodista: - no, Doctor Verucci, no puedo testificar como Ud. quiere. Fue Ud. el que encendió la televisión .

Doctor Verucci:- Ah, También el bandido...

Periodista: -Desde luego, ha entrado en su casa desde el televisor, como yo.

Doctor Verucci: - no faltaba más, adelante acomódese (al bandido). Haga cuenta que esta es su casa. Ya me he dado cuenta que aquí no cuento. Es mi casa, pero no tengo ninguna autoridad. La puerta está cerrada, las ventanas con trancas, pero la gente entra y sale, hace lo que le parece.

Bandido: -Tanto atado por una copa oh...

Periodista: - ¿sigo con las noticias?

Doctor Verucci: -¿Por qué no? Siento curiosidad por saber cómo sigue la historia.

Periodista: (Leyendo). –El general Bolo, comandante de las tropas semánticas, ha declarado que reiniciará lo más pronto posible la ofensiva contra la República de Planavia y que la guerra no terminará antes de Navidad.

(en ese momento se oye un ruido detrás de un mueble)

General Bolo: - Eso no es del todo exacto.

Doctor Verucci: - ¿Cómo? Es Ud. el general Bolo . ¿Qué estaba Ud, haciendo ahí?

General Bolo: - nada que a Ud. le incumba.

Doctor Verucci:- de todas formas, acérquese, quiero verlo. ¿Qué tengo que ver yo con tu guerra? , Me gustaría saberlo.

General Bolo: -ja, ja. ( Mostrando un mapa) . Estimado señor, mi trabajo consiste en dirigir las tropas semánticas y ocupar el territorio de Planavia, no en contestar sus preguntas . estaba diciendo aquí a la señorita, que mi declaración ha sido mal interpelada, mis palabras exactas fueron estas: “la guerra terminará, antes de Navidad, porque destruiré uno a uno, a todos los planavianos , sus ciudades las reduciré a cenizas y sus campos los convertiré en desiertos.

Bandido: -Escuchen, escuchen, ¡cuánta maldad! Y a mí pobre asaltadorcillo de caminos, me buscan por toda Inglaterra, al lado de este sí que soy un angelito, me gustaría saber cuál de los dos es el auténtico bandido.

Doctor Verucci: -En cambio a mí me gustaría saber cuándo se marchan todos. Ud. señorita, Usted señor bandido y ud. general. Esta es mi casa y ¡quiero estar solo!. No me interesa lo que hagan o lo que digan. Pero, ya encontraré una forma de echarlos de aquí. Ahora mismo llamo a la policía.

Periodista: - Siguiendo con las noticias : una marcha de estudiantes en sudamérica convoca a reformar la educación.

(Estudiantes entran con lienzos y gritos al escenario)

Doctor Verucci : ( mira asombrado, se tapa la cara, se rasca la cabeza, los estudiantes toman posesión de su living y sacan un cartel : “en toma”).

- Basta, basta, traición , vilolación de domicilio.

( música clásica, en cámara lenta, se mueven todos, el doctor correbusca y encuentra un control remoto, apreta el botón y lentamente desaparecan en reversa cada uno de los personajes)

Coro de voces: Cantan “ Pobrecito mortal si quieres ver menos televisión, descubrirás que aburrido estarás por la tarde (de Florcita Motuda)

Artistas al escenario, saludan y se van.

F I N