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Bernal Díaz del Castillo fue uno de los descubridores y ... · Orgulloso de haber figurado entre los descubridores, después entre los conquistadores y, por último, entre los pobladores

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  • BernalDíazdelCastillofueunodelosdescubridoresyconquistadoresdelaNuevaEspaña,susprovinciasydelcabodeHonduras.Yaviejoy retirado,escribióestacrónicade lasproezasenque,almandodeHernán Cortés, fue parte y testigo. El historiador mexicano CarlosPereyra estudia en el prólogo de esta edición la figura del cronista,queenvidanoviopublicadosumanuscrito.LaHistoriaverdaderadela conquista de la Nueva España apareció, por fin, en el siglo XVIII,siendo su autor mal juzgado, pues se consideró que trataba depalidecerlagloriadeHernánCortés.MenéndezPelayoreivindicósusméritos,reconociéndolenosóloimportanciadetestigofiel,sinodotesde interpretación psicológica que dan calidez humana a su extensacrónica. Además de relatar los sucesos ocurridos en 1517 y 1521,Bernal Díaz del Castillo describe también las ciudades, ritos ycostumbresde lospobladores,pudiendodecirsequesetratadeunaprimerísimafuenteparaelestudiodelacivilizaciónprecortesiana.

    LapresenteediciónestábasadaenelManuscritoGuatemala.

  • BernalDíazdelCastillo

    HistoriaverdaderadelaconquistadelaNuevaEspaña

    ManuscritoGuatemalaePubr1.0

    Himali13.04.15

  • Títulooriginal:HistoriaverdaderadelaconquistadelaNuevaEspaña

    BernalDíazdelCastillo,1632

    Diseñodecubierta:Orkeyon

    Editordigital:Himali

    Primereditor:Bercebus(EPG)

    ePubbaser1.2

  • Prólogo

    Para apreciar las excelencias de esta crónica, no es menester acudir alrecursodelosadjetivos.BastanlosdossustantivosqueexpresabanelanhelodeGoetheensusrealizaciones:VerdadyBelleza.

    DíazdelCastilloeselcronistaesclavizadoalafidelidad,porquenosólose propone decir con toda honradez lo que sabe, sino porque su genioliterario, adueñándose de la pluma del escritor, le constriñe a seguir sindesviaciones la corriente del recuerda, nítidamente conservado. «Muchasveces, agora que soy viejo —escribe—, me paro a considerar las cosasheroicasqueenaquel tiempopasaron,quemeparecelasveopresentes».Elevocadorseabandonaasumundodeimágenesyentodolo,quevarefiriendono hay una sola vacilación, una calculada reticencia, un dato engañoso. Elhombreprobasesientereforzadoporelartistaquenoadmitetraicionesalaverdad, porque esa verdad se identifica con el propósito literario, o, parahablarmásexactamente,vaunidaalimpulsoliterariodetroquelarloshechos.

    Hay artistas del fingimiento que no saben llegar a las cumbres de laperfección estética sin falsear las realidades para adaptarlas a un modeloideal, Independientementede los intereses que comohombres les obligan amentir, el demonio interno de laBelleza reclama su parte de disfraz de loshechosparaennoblecerelrelata.Perohaytambiénartistasdelaingenuidad,que,teniendounapotenciaimaginativasuficienteparanovelarsusrecuerdos,sienten con tanta intensidad y en tal plenitud los hechos realizados opresenciadosporellos,quenoconcibenunamínimaalteración,sincreerqueesa alteración deforma en vez de embellecer lo pasado. Bernal Díaz delCastillovivepersuadidodequesusinfortuniosysustrabajos,susdesencantosysusgloriasnopudieronhabersidootracasadeloquefueron.Orgullosodehaber figurado entre los descubridores, después entre los conquistadores y,por último, entre los pobladores de la Nueva España, no cambiaría surelación,sincreerquerebajabalaepopeyahastahacerlaobjetodeunavulgarmaniobra.

  • Laocasiónde su libro revelano sólouna resoluciónyunmétodo, sinoalgo temperamental. Un escritor elegante, cortesano y de tendencia —Francisco López de Gómara—, había escrito la historia de la conquista deMéjicoparaengrandeceralventurosocapitánHernánCortés.Losqueconélmilitaron,sólofigurabanparaquesedestacaraeljefe.LópezdeGómaraeseltipodelbiógrafoquereduceloshechosexcepcionalesalaacciónindividualdeunhéroe.BernalDíazdelCastillovindica lapotenciade la intervenciónanónima.Ytomalapluma,comosoldadoquees,paradecirloquesedebealamasa.Sihubieramásdenuevemusas,asignaríamosaBernalDíazladelaindignación.Ellatedictasulibro.Nodeprime,porello,aCortés.Sinocultarsus defectos y sin callar sus errores, agiganta la figura del capitán. Cortésaparece más genial y atractivo en la exposición verdadera que en elpanegíricodeladulador.LópezdeGómarainfluyesobreBernalDíazcomounestimulante que enardece su ansia de sinceridad. Pero el cronistaindependiente no comete la falta de enzarzarse, intentando una refutación.OcasionalmentenombraaGómara,sinseguirle.Sisepropusieracontradecir,seríaviolentoyantinatural;veríaunaspectoparcialdeloshechosquerelata.Vindicandolaverdad,éstaserevistedesuheroicagrandeza.

    ¿Existeenlaliteraturauniversalotrolibro,deigualmérito,que,comoeldeBernalDíaz,seacrónicaescritaporunsimplesoldado?

    MenéndezPelayosehizoestapregunta,ylacontestódandoelnombredelsoldadoquefueautordelúnicalibrocomparablealaVerdaderaHistoriadelaConquistadeMéjico.EsecronistaesRamónMuntaner.Efectivamente,laExpedició dels Catalans a Orient revela en el soldado un artista de laevocación directa, y en la obra íntegra, un historiador de raza. Entre lascrónicas destinadas a la epopeya de los conquistadores de América, la deBernalDíazsobresale,sinqueotrapuedarivalizarconella,comonoseaunaconlaquenorivalizatalvezniladelmismoBernalDíaz:laFloridadelInca.

    Garcilaso, de la Vega, el criollo letrado, y Bernal Díaz del Castillo, elpeninsularinculto,sonlospríncipesdelacrónicaamericana,ysuslibroslosdescollantes enungénero tan rica por lamateria comopor lamaestría conque lo cultivaron los hombres del siglo XVI. La expedición de Soto a laFlorida,historiadeunfracasosiniestro,tienealgodefantasmagórico.Hayenellasombraymisterio.ImpresionacomounateladeRembrandt.BernalDíazdelCastillopintaalamaneradeRubens:todoenélesclaridadymovimiento.Lasmasasdominan,yelautornosobligaaseguirlasporelespaciaabierto.Surapideznosarrastra.LaprosadeBernalDíaznosedetieneniseestanca.

  • Hábilmente puntuada, como lo hizo el encargado de esta edición, la frase,generalmente corta, sólopor excepción se alarga, cuandoentra enunordendiscursivo.Perolanarracióncorre,fácilyllana,sinrodeosysinadornos.Elautorsabeyquiereemplear lacomúnhabladeCastillo laVieja,queensustiempossetieneporlamásagradable,privándola«derazoneshermoseadasyde afeiterías». Piensa en el hecho, no en la palabra. Y la palabra acudesiempreparadejaruna imagenprecisa,vivayemocionante,dealgovistouoído.

    El instinto seguro que aconseja a Bernal Díaz te indica que cortefrecuentemente la narración. Así, pues, los capítulos nunca son demasiadolargos,ysesucedencomocuadrosdeunaextensagalería.Porloregular,cadacapítulotienemenosdecincopáginas,pocasvecesloshaydeseis;denueveodiez,casinunca.

    Unlectorincréduloque,apesardelodicho,lemanoresistirlalecturadeesta vieja crónica, puede ensayar sus fuerzas empezando por elcapítuloLXXXVI,enquelosexpedicionariosabrenlamarchadesdeCholulaparairalafabulosaTemistitán.SillegahastaelCXXVIII,enesasdoscientaspáginas hallará revelaciones de un país fantástico, intrigas, ardides,encuentrosybatallas.Leentretendrátambiéntodaunanoveladecaballeríaspor los hechos sorprendentes, todo un diario de explorador por laminuciosidadgeográfica,todounpartemilitarporlasoperacionesytodouninformepolíticopor lasdificultadesquevaallanandoel jefede laempresa.EndoscientaspáginasestárelatadoelsitiodeMéjico,queeslaculminacióndeestaobra.

    ConloexpuestoseapreciahastaquepuntoesaccesiblelaobradeBernalDíaz y hasta qué punto puede popularizarse su deliciosa narración. Quienconozcaunapartedeella,querráenterarsedetodolodemás,yquienunavezlaleaíntegra,nodejarádevolverconfrecuenciaalospasajesmássalientes,nosólodelaprimeramarchahaciaMéjicoydelsitioqueterminaalquedararrasada la Troya de Cuauhtémoc, sino también de los que tratan deldescubrimientodelatierraydelosquenarrantodosloshechosposterioresalatomadelaciudadazteca.Nohayunsolocapítuloenqueelautordormite.Y todos, absolutamente todos, dignos de la crónica por su dramatismo,contienen datos de importancia para el conocimiento de los orígenes delpueblomejicano.

    Aunquecasitodalaobrasecontraealoshechosdearmasocurridosentre1517y1521—conmásparticularidadasólodosdeestosaños,quesonlosde

  • lagranepopeyadeCortés enelAnáhuac—,BernalDíazdelCastillodilatasusmemoriasporunespaciodemediosiglo,condatospreciosísimosparalahistoriainterna.Sinpropósitosdedisertación,alazardesusrecuerdos,habladeagricultura,deminería,deconstruccionescivilesyreligiosas,deviajes,decomercio,deadministraciónydecostumbres.Aéldebemosladescripcióndelasciudadesyvillaspobladasporlosaztecasenelagua,ladelacalzada,tanderecha y por nivel, que iba a Méjico, la de las grandes torres, cúes yedificios,casasqueleparecíandeencantamiento,ya todossuscompañeroscama vistas entre sueños. A él hay que referirse para muchas de las másperegrinasobservacionesquetenemossobrelacivilizaciónprecortesiana,asícomo para los pasos iniciales de las nuevas fundaciones. Él sembró losprimeros naranjos que dieron fruto en las costas de la Nueva España. Élquebró el hierro que se empleaba para marcar esclavos, y su acto fueaplaudidoporelbeneméritogobernantedonSebastiánRamírezdeFuenleal.CitasfrecuentesdeBernalDíaz,queencontramosen todos loshistoriadoresdelacivilización,dicencuantovalensusnotas,rápidasypenetrantes.

    LaexcepcionalacogidaquehoyobtienelacrónicadeBernalDíaz—esaverdaderaynotablerelación,comoélmismolallama—esunhechoreciente.En vida del autor, nadie se dio cuenta de sumérito.Murió sin ver la obraimpresa.Dejóelmanuscritocomoundocumento,defamilia,afaltadeotrariqueza,para sushijosydescendientes.Así lo consignaenunprólogo,queredactóalosochentaycuatroaños.Noera,pues,uncronista,unescritor,unautor,sinounhombrequeaspirabamodestamenteaquesusnietospudierandecirconverdadqueélhabíafiguradoentrelosdescubridores,conquistadoresy pobladores de aquellas tierras. Acaso tenía una vaga esperanza denotoriedadpóstuma.«Mihistoria, si se imprime,cuando lavean,eoyan—dijo una vez—, la darán fe verdadera y escurecerá las lisonjas de lospasados».Asíhasido.

    Altrazarenelpapelesaremotailusión,acasorecordabaque,veintiochoaños antes de escribir su libro, hubo en la corte un fiscal, llamado Juan deVillalobos,paraquien,legalmente,BernalDíazdelCastillo«nohabíasidotalconquistador».Estanegación injuriosa era el resultadodeuna confusióndenombres, que al fin quedó aclarada. ¿Por qué no pasaría en el metafóricotribunal de la historia lo que en el tribunal donde hacía pedimentos ellicenciadoVillalobos?

    Uno de losmanuscritos de Bernal Díaz diomateriales para la obra delpulidoHerrera.PublicadafinalmentelacrónicaenelsigloXVII,elautor fue

  • juzgado y condenado como un deturpador envidioso de Cortés. Así seexpresaba el fino retórico don Antonio de Salís. En el siglo XVIII sereconocieronaBernalDíazalgunosméritosdeespontaneidadvanidosa.EnelsigloXIX ya se acepta que el ineducado hija de la naturaleza, fiel y exactocopista,obtienelosresultados,deunbuendaguerrotipo.Haypasiónjuvenilyfrescuraderecuerdosenesaobrade lasenectud.Perose teniegaelarte.Yallíquedaeljuicio,quedejaaBernalDíazenunplanoinferiordeingenuidadsindestreza.Finalmente,MenéndezPelayoasignaalconquistadordeMéjicoelrangodeunMuntaneramericano.Estaasimilación,porsísola,esyatodauna revisión de sentencia, confirmada por Fitzmaurice-Kelly, quien hacememoriadelterribleBlaisedeMontluc.

    Paramí,lasgrandesplumassoldadescastienenunodeloscaracteresmásdestacadosdelverdaderaartista.Detestanlapomposidadyelénfasis.Lleganalaemociónépicaporloscaminosdelanaturalidad.Deallíelerrordecríticaenqueincurrenmuchosdelosquejuzganaestoshistoriadores.Secreequeloshechoshablanporsímismosyquelosindoctosnarradoresnohacensinotraducirloquecuentalavida.Nohaytal.Elacontecimientorelatadonoexisteparanosotrossinoatravésdelojoquelove,deltemperamentoquelasiente,delespírituque lo interpretayde la imaginaciónque lo reconstruye.En loshombressinletrasquesabenreferirunnaufragiodeSepúlvedaolavisitaaunmercadodeTlatelolco,vivengrandespoetasdesconocidosqueloshechosseencargan de revelar. Para convencernos de ello, en el caso deBernalDíaz,tomemoslaNocheTriste,y,comparándolaconcualquierarelaciónartificiosade aquella retirada, veremos que la impresión dominante no es la de unaconvencionalsucesióndepasosencadenadosporlaprevisióncalculadoradeundirector de escena, sino la de un desconcierta general. ¿Cuáles son esoshechosquehablan,supliendoalartista?Todolocontrario:elartistahablaporloshechos,presentándolos.Cortésdainstruccionesminuciosas,olvidadasenlos aprietos de la salida. «Sí había algún concierto, maldito aquél». Cadacapitán,yauncadasoldado,haceloquepuede.Cortésvadelante,yescapa.Pero vuelve, llamado por las voces de los que piden socorro. Encuentra aPedrodeAlvarado,queheridoymaltrechohadejadoatrássuyeguaalazana,muertaporlosindios,ysepresentaconsulanzaenlamano,seguidodesieteespañolesyochotlaxcaltecas,todoschorreandosangre.Nohaysalto.Nohaynadadeloquelaleyendainventara,elaborando,ensentidodeglorificación,lamateria de una sátira compuesta por el libelistaOcampo.Toda laNocheTriste, como el supuesto Salto deAlvarado, sale de la narración deBernalDíaz con la diafanidad que tiene la vida. El artista alcanza esta perfección

  • únicamenteporsufuerzasimplificadora.Producelaemocióndeloconfusoycaótico, no porque su narración lo sea, sino a la inversa, porque saca de larealidadalgunos rasgosque sólounalto instintodecreación literariapuedeseleccionar.

    LosnoventaytresdíasdelsitiodeMéjicodanotrapruebamanifiestadelasdotesdeBernalDíaz.¿Quiénleigualacuandonosdicecómooyetañereltambor delHuichilobos y delTezcatepuca, retumbando de talmodo que seoyeraadosotresleguas,yjuntoconeltambormuchosatabalejos,señaldequelosaztecasestabanofreciendoasusdioseslasangreyloscorazonesdelos soldados prisioneros? Basta este, y el espanto de los sesenta y dossacrificiosdesuscompañerosdearmas,paraseñalarleentrelosescritoresdeprimeralínea.

    Otrosehubieradejadollevardelajactanciasoldadesca.Peroélsienteelpavor y sabe expresarlo.Ya le habían asido en dos ocasiones, y en las doslogrósalvarse.¿Peronopodríanengarrafarledenuevoyllevarlehastaelaltocu? Presumiendo de buen soldado, siempre a la vanguardia, ¿no estabaconstantemente expuesta al peligro de que le aserrasen por el pecho y lesacasenelcorazónbullenteparaofrecerloalHuichilobos?Poresto,antesdeentrarenlasbatallas,seleponía«unacomogrimaytristezagrandísimaenelcorazón».Ayunaba, se encomendaba aDios y a su benditaMadre,NuestraSeñora.Yluegoselequitabaaquelpavor.Peronunca,nuncapudoapartardesu pensamiento las feísimas muertes de los que perecían en la piedrasacrificatoria.Siempre,desdeentonces, ledominóelpensamientodeun findesastroso.

    Esto no es ya contar batallas. El cronista conoce también un mundointerior.

    CARLOSPEREYRA

  • Notapreliminar

    Notandoestadocomolosmuyafamadoscoronistasantesquecomiencenaescrebir sus historias hacen primero su prólogo y preámbulo con razones yretóricamuysubidaparadarluzycréditoasusrazones,porqueloscuriososletores que las leyeren tomen melodía y sabor dellas, y yo, como no soylatino,nomeatrevoahacerpreámbuloniprólogodello,porquehamenesterparasublimarlosheroicoshechosyhazañasquehecimoscuandoganamoslaNuevaEspañaysusprovinciasencompañíadelvalerosoyesforzadocapitándon Hernando Cortés, que después, el tiempo andando, por sus heroicoshechos fueMarqués del Valle, y para podello escrebir tan sublimadamentecomoesdigno,fueramenesterotraelocuenciayretóricamejorquenolamía;masloqueyooíymehalléenellopeleando,comobuentestigodevista,yoloescrebiré,conelayudadeDios,muyllanamente,sintorceraunaparteniaotra,yporquesoyviejodemásdeochentaycuatroañosyheperdidolavistay el oír, y por mi ventura no tengo otra riqueza que dejar a mis hijos ydescendientes,salvoestamiverdaderaynotablerelación,comoadelanteenella verán, no tocaré por agora enmás de decir y dar razón demi patria ydónde soy natural y en qué año salí de Castilla y en compañía de quécapitanesanduvemilitandoydóndeagoratengomiasientoyvivienda.

  • CapítuloI.Comienzalarelacióndelahistoria

    Bernal Díaz del Castillo, vecino e regidor de la muy leal ciudad deSantiagodeGuatemala,unode losprimerosdescubridoresyconquistadoresdelaNuevaEspañaysusprovinciasyCabodeHondurasydecuantohayenesta tierra…naturalde lamuynoblee insigneVilladeMedinadelCampo,hijodeFranciscoDíazdelCastillo,regidorquefuedella,queporotronombrelellamaban«ElGalán»,quehayasantagloria,porloqueamítocayatodoslos verdaderos conquistadores mis compañeros que hemos servido a SuMajestad en descubrir y conquistar y pacificar y poblar todas las másprovinciasdelaNuevaEspaña,queesunadelasbuenaspartesdescubiertasdelNuevoMundo,locualdescubrimosanuestracosta,sinsersabedordeelloSuMajestad.

    Yhablandoaquíenrespuestadeloquehandichoyescritopersonasqueno lo alcanzaron a saber ni lo oyeron ni tener noticia verdadera de lo quesobreestamateriahay,propusieron,salvohablaralsabordesupaladarpor…muchosynotables serviciosporquenohaya famadellos…talestimacomoson dignos de tener y aun como la… tal calidad, no querrían los malosretratadoresque…tosyrecompensadoscomoSuMajestadlohamandadoasusvi…tesygobernadores.

    Ydejandoestas razones aparte… tanheroicas comoadelantediréno seolviden, ni más la… mente se conozcan ser verdaderas y porque sereprueben…loslibrosquesobreestamateriahanescrito,porquevan…delaverdadyporquehayafamamemorabledenosotroscon…historiasdehechoshazañososquehahabidoenelmundojusta…tanilustresseponganentrelosmuy nombrados que han acaescido… riesgos de muerte y heridas y milcuentos demiserias, posimos y aventuramos nuestras vidas…descubriendotierras que jamas se había tenido noticia dellas, y de día y de noche,batallando conmultitud de belicosos guerreros, y tan apartados deCastilla,sin tener socorro ni ayuda ninguna, salvo la gran misericordia de DiosNuestroSeñor,queeselsocorroverdadero,quefueservidoqueganásemosla

  • NuevaEspañaylamuynombradaygranciudaddeTenuztitlan,Méjico,queansí se nombra, y otrasmuchas ciudades y provincias, que, por ser tantas,aquí no declaro sus nombres. Y después que las tuvimos pacificadas ypobladasdeespañoles,comomuybuenosylealesvasallosservidoresdeSuMajestadsomosobligadosanuestroreyeseñornatural,conmuchoacatoselasenviamosadaryentregarconnuestrosembajadoresaCastilla,ydesdeallíaFlandes,dondeSuMajestadenaquella sazónestabaconsucorte.Ypuestantosbienescomoadelantediréhanredundadodelloyconversióndetantoscuentosdeánimasquesehansalvadoydecadadíasesalvan,quedeantesiban perdidas al infierno, y además desta santa obra tengan atención a lasgrandesriquezasquedestaspartesenviamosenpresentesaSuMajestadyhanido y van cotidianamente ansí de los quintos reales y lo que llevan otrasmuchaspersonasdetodassuertes.

    Digo que haré en esta relación quién fue el primero descubridor de laprovinciadeYucatán,ycómofuimosdescubriendolaNuevaEspaña,yquiénfueron los capitanes y soldados que la conquistamos y poblamos y otrasmuchascosasquesobrelastalesconquistaspasamosquesondinasdesaberynoponerenolvido, locualdiré lomásbrevequepueda,y, sobre todo,conmuy cierta verdad, como testigo de vista, y si hobiese de decir e traer a lamemoriaparteporpartelosheroicos…alasconquistas,hecimoscadaunodelos valerosos capitanes y fuertes… que desde el principio en ellas noshallamos,fueramenesterhacerungran…declarallocomoconvieneyunmuyafamadocoronistaque tuviera…elocuenciay retóricaeneldecir,queestasmis palabras tan mal… yo y estimar tan altamente como merece, segúnadelante… lo que yo me hallé y oí y entendí y se me acordare… quetornaba… encumbrado y estilo delicado y se me… yo lo escribiré con laayuda de Dios con recta verdad… de los sabios varones que dicen que labuenaretórica…esdecirverdady…sublimarydecirlisonjas…ajaraotrosenespecialenunarelacióncomoésta…moríadella.

    Yporqueyonosoylatinonisédelarte…notratarédello,porque,comodigo,nolosé…batallasypacificacionescomoenellasmehallé,porqueyosoyel…deCuba,de losprimeros,encompañíadeuncapitánquesedecíaFrancisco…trujimosdeaquelviajecientoydiezsoldados,descubrimoslo…ataronen laprimera tierraque saltamos,quesedice lapuntade…blomásadelante, que se llama Champotón, más de lamitad de nosotros… capitánsaliócondiezflechazosytodoslosmássoldadosadosya…ndonosdeaquelartehobimosdevolverconmuchotrabajoalaisla…habíamossalidoconelarmadayelcapitánmurióluegoenllegandoatierra,quedeloscientoydiez

  • soldados que veníamos quedaronmuertos los cincuenta y siete[1]. Despuésdestas guerras volví segunda vez, desde la misma isla de Cuba, con otrocapitánquesedecíaJuandeGrijalva,ytuvimosotros,grandesreencuentrosde guerra con los mesmos indios del pueblo de Champotón, y en estassegundasbatallasnosmataronmuchossoldados,ydesdeaquelpueblofuimosdescubriendo la costa adelante, hasta llegar a laNueva España, y pasamoshastalaprovinciadePánuco,yotravezhobimosdevolveralaisladeCubamuydestrozadosytrabajosos,ansídehambrecomodesed,yporotrascausasqueadelantediréenelcapítuloquedellosetratare.

    Evolviendoamicuento,vinelaterceravezconelventurosoyesforzadocapitándonHernandoCortés,quedespués,el tiempoandando, fuemarquésdelValleytuvootrosditados.DigoqueningúncapitánnisoldadopasóaestaNuevaEspañatresvecesarreo,unastrasotras,comoyo;pormaneraquesoyelmásantiguodescubridoryconquistadorquehahabidonihayenlaNuevaEspaña, puesto quemuchos soldados pasaron dos veces a descubrir, la unoconJuandeGrijalva,yapormimemorado,yotraconelvalerosoHernandoCortés; mas no todos tres veces arreo, porque si vino al principio conFrancisco Hernández de Córdoba, no vino la segunda con Grijalva, ni latercera con el esforzado Cortés. Y Dios ha sido servido deme guardar demuchospeligrosdemuerte,ansíenestetrabajosodescubrimientocomoenlasmuysangrientasguerrasmejicanas.YdoyaDiosmuchasgraciasylooresporello,paraquedigaydeclareloacaescidoenlasmesmasguerras.

    Y demás de esto, ponderen y piénsenlo bien los curiosos letores, quesiendo yo en aquel tiempo de obra de veinte e cuatro años y en la isla deCuba, el gobernador della, que se decía Diego Velázquez, deudo mío, meprometió que me daría indios de los primeros que vacasen, y no quiseaguardar a queme los diesen, siempre tuve celo de buen soldado, que eraobligadoatener,ansíparaserviraDiosyanuestroreyeseñoryprocurardeganarhonra,comolosnoblesvaronesdebenbuscarlavida.Yyadebienenmejor, no se me puso por delante la muerte de los compañeros que enaquellos tiempos nos mataron, ni las heridas que me dieron, ni fatigas nitrabajos que pasé y pasan los que van a descubrir tierras nuevas, comonosotros nos aventuramos, siendo tan pocos compañeros, entrar en tangrandes poblaciones llenas demultitud de belicosos guerreros. Siempre fuiadelanteynomequedérezagadoenlosmuchosviciosquehabíaenlaisladeCuba, segúnmásclaroveránenesta relación,desde el añodequinientosycatorcequevinedeCastillay comencé amelitar en lodeTierraFirmey adescubrirlodeYucatányNuevaEspaña.

  • Y comomis antepasados y mi padre y un mi hermano siempre fueronservidoresdelaCoronaRealydelosReyesCatólicos,donFernandoydoñaIsabel, demuy gloriosamemoria, quise parecer en algo a ellos; y en aqueltiempo, que fue año demil y quinientos y catorce, como declarado tengo,vino por gobernador de Tierra Firme un caballero que se decía PedrariasDávila,acordédemevenirconélasugobernaciónyconquista:yporacortarpalabrasnodiréloacaecidoenelviaje,sinoqueunasvecesconbuentiempoyotras concontrario, llegamosa elNombredeDios,porqueansí se llama.Desde a tres o cuatromeses que estábamospoblados, dio pestilencia, de lacualsemurieronmuchossoldados,ydemásdestotodoslosmásadolecíamosysenoshacíanunasmalasllagasenlaspiernas.Ytambiénhabíadiferenciasentreelmesmogobernadorconunhidalgoqueenaquella sazónestabaporcapitányhabíaconquistadoaquellaprovincia,elcualsedecíaVascoNúñezdeBalboa,hombrerico,conquienelPedrariasDávilacaséunasuhija,quesedecíadoñaFulanaAriasdePeñalosa,ydespuésquelahubodesposado,segúnparescióysobresospechasquetuvodelyernoselequeríaalzarconcopiadesoldados, para irsepor lamardelSur, ypor sentencia lemandódegollar yhacerjusticiadeciertossoldados.Ydesquevimosloquedichotengoyotrasrevueltas entre sus capitanes, y alcanzamos a saber que era nuevamentepoblada y ganada la isla de Cuba, y que estaba en ella por gobernador unhidalgoquesedecíaDiegoVelázquez,naturaldeCuéllar,yotravezpormímemorado, acordamos ciertos caballeros y personas de calidad, de los quehabíamosvenidoconelPedrariasDávila,dedemandallelicenciaparanosiralaisladeCuba,yélnosladiodebuenavoluntad,porquenoteníanecesidaddetantossoldadoscomolosquetrujodeCastillaparahacerguerra,porquenohabíaquéconquistar,quetodoestabadepaz,queelVascoNúñezdeBalboa,suyernodelPedrarias,lohabíaconquistado,ylatierradesuyoesmuycorta.

    PuesdesquetuvimoslalicencianosembarcamosenunbuennavíoyconbuentiempollegamosalaisladeCubayfuimosahaceracatoalgobernador,yélseholgóconnosotrosynosprometióquenosdaríaindios,envacando.Ycomosehabíanyapasadotresaños,ansíenloqueestuvimosenTierraFirmee isla de Cuba, y no habíamos hecho cosa ninguna que de contar sea,acordamos de nos juntar ciento y diez compañeros de los que habíamosvenidodeTierraFirmey de los que en la isla deCubano tenían indios, yconcertamosconunhidalgoquesedecíaFranciscoHernándezdeCórdoba,queyalehenombradootravezyerahombrericoyteníapueblodeindiosenaquella isla, paraque fuesenuestro capitán, porque era suficientepara ello,para ir a nuestra ventura a buscar y descubrir tierras nuevas para en ellas

  • emplear nuestras personas.Y para aquel efecto compramos tres navíos, losdosdebuenporte,yelotroeraunbarcoquehobimosdelmesmogobernadorDiegoVelázquez, fiado, con la condiciónqueprimeroquenos lodiesenoshabíamosdeobligarquehabíamosdeirconaquellostresnavíosaunasisletasqueestabanentrelaisladeCubayHonduras,queagorasellamanlasislasdelosGuanaxes,yquehabíamosdeirdeguerraycargarlosnavíosdeindiosdeaquellas islas, para pagar con indios el barco, para servirse de ellos poresclavos.Ydesque vimos los soldados que aquello que nos pedía elDiegoVelázqueznoerajusto,lerespondimosqueloquedecíanolomandaDiosniel rey, quehiciésemosa los libres esclavos.Ydesque suponuestro intento,dijoqueeramejorquenoelsuyo,eniradescubrirtierrasnuevas,quenoloqueéldecía,yentoncesnosayudóconcosasparaelarmada.

    Hanmepreguntadociertoscaballeroscuriososqueparaquéescriboestaspalabras que dijo el Diego Velázquez sobre vendernos su navío, porqueparecen feas y no habían de ir en esta historia.Digoque las pongoporqueansíconvieneporlospleitosquenospusoelDiegoVelázquezyelobispodeBurgos,arzobispodeRosano,quesedecíadonJuanRodríguezdeFonseca.Yvolviendoamimateria,ydesquenosvimoscontresnavíosymatalotajedepancazabe,quesehacedeunasraíces,ycompramospuercos,quecostabanatres pesos, porque en aquella sazón no había en la isla de Cuba vacas nicarneros,porqueentoncessecomenzabaapoblar,yconotrosmantenimientosdeaceite,ycompramoscuentasycosasderescatedepocavalía,ybuscamostres pilotos, que el más principal y el que regía nuestra Armada se decíaAntóndeAlaminos,naturaldePalos,yelotrosedecíaCamachodeTriana,yel otro piloto se llamaba Juan Álvarez el Manquillo, natural de Huelva; yansimesmo recogimos los marineros que habíamos menester y el mejoraparejoquepodimoshaber,ansídecablesymaromasyguindalezasyanclas,y pipas para llevar agua, y todas otrasmaneras de cosas convinientes paraseguirnuestroviaje,yestotodoanuestracostayminción.Ydespuésquenoshobimosrecogidotodosnuestrossoldados,fuimosaunpuertoquesediceenombra en lengua de indiosAxaruco, en la banda del norte, y estaba ocholeguasdeunavillaqueentoncesteníanpoblada,quesedecíaSanCristóbal,quedesdehadosañoslapasaronadondeagoraestápobladalaHabana.Yaraque con buen fundamento fuese encaminada nuestra armada, hubimos dehaberunclérigoqueestabaenlamismavilladeSanCristóbal,quesedecíaAlonsoGonzález, el cual se fue connosotros; ydemásdesto, elegimosporveedor a un soldado que se decía Bernaldino Iñiguez, natural de SantoDomingo de la Calzada, para que si Dios nos encaminase a tierras ricas y

  • gentequetuviesenorooplata,operlas,uotrascualesquierriquezas,hubieseentre nosotros persona que guardase el real quinto.Y después de todo estoconcertado y oído misa, encomendándonos a Dios Nuestro Señor y a laVirgenSantaMaríaNuestraSeñora,subenditaMadre,comenzamosnuestroviajedelamaneraquediré.

  • CapítuloII.CómodescubrimoslaprovinciadeYucatán

    EnochodíasdelmesdefebrerodelañodemilyquinientosydiezysietesalimosdelaHabana,delpuertodeAxaruco,queestáenlabandadelnorte,yendocedíasdoblamos lapuntadeSantoAntón,queporotronombreen laisla de Cuba se llama Tierra de los Guanahataveyes, que son unos indioscomosalvajes.Ydobladaaquellapuntaypuestosenaltamar,navegamosanuestraventurahaciadondeseponeelsol,sinsaberbajosnicorrientesniquévientos suelen señorear en aquella altura, con gran riesgo de nuestraspersonas,porqueenaquellasazónnosvinouna tormentaqueduródosdíasconsusnoches,yfuetal,queestuvimosparanosperder,ydesqueabonanzó,siguiendonuestranavegación,pasadosveinteeundíasquehabíamossalidodelpuerto,vimostierra,dequenosalegramosydimosmuchasgraciasaDiosporello.Lacual tierra jamássehabíadescubiertonisehabía tenidonoticiadellahastaentonces,ydesdelosnavíosvimosungranpuebloque,alparecer,estaríadelacostadosleguas,yviendoqueeragranpoblazónynohabíamosvistoenlaisladeCubanienlaEspañolapueblotangrande,lepusimospornombreelGranCairo.Yacordamosqueconlosdosnavíosdemenosporteseacercasen lomásquepudiesen a la costaparaver si habría fondoparaquepudiésemosanclarjuntoatierra;yunamañana,quefueroncuatrodemarzo,vimosvenirdiezcanoasmuygrandes,quesedicenpiraguas,llenasdeindiosnaturalesdeaquellapoblazón,yveníanaremoyvela.Soncanoashechasamaneradeartesas,ysongrandesydemaderosgruesosycavadosdeartequeestánhuecos; y todas sondeunmaderoyhaymuchasdellas enque cabencuarentaindios.

    Quierovolveramimateria.Llegadoslosindiosconlasdiezcanoascercadenuestrosnavíos,conseñasdepazqueleshicimos,yllamándolesconlasmanos y capeando para que nos viniesen a hablar, porqué entonces noteníamos lenguas que entendiesen la de Yucatán y mejicana, sin temorninguno vinieron, y entraron en la nao capitana sobre treinta dellos, y les

  • dimosacadaunounsartalejodecuentasverdes,yestuvieronmirandoporunbuenratolosnavíos.Yelmásprincipaldellos,queeracacique,dijoporseñasque se querían tornar en sus canoas y irse a su pueblo; que para otro díavolveríany traeríanmáscanoasenquesaltásemosen tierra.Yveníanestosindios vestidos con camisetas de algodón como jaquetas, y cubiertas susvergüenzas con unas mantas angostas, que entre ellos llaman masteles, ytuvímoslos por hombres de más razón que a los indios de Cuba, porqueandaban los de Cuba con las vergüenzas de fuera, eceto las mujeres, quetraíanhastalosmuslosunasropasdealgodón,quellamannaguas.

    Volvamos a nuestro cuento. Otro día por la mañana volvió el mesmocacique a nuestros navíos y trujo doce canoas grandes, ya he dicho que sedicenpiraguas,con indios remeros,ydijoporseñas,conmuyalegrecaraymuestrasdepaz,quefuésemosasupuebloyquenosdaríancomidayloquehobiésemosmenester,yqueenaquellassuscanoaspodíamossaltarentierra;entoncesestabadiciendoensulengua:«Conescotoche,conescotoche»,quequiere decir: Andad acá, a mis casas. Por esta causa pusimos por nombreaquella tierra Punta de Cotoche, y ansí está en las cartas de marear. Puesviendonuestro capitány todos losdemás soldados losmuchoshalagosquenoshacíaaquelcacique,fueacordadoquesacásemosnuestrosbatelesdelosnavíosyenelunodelosmáspequeñosyenlasdocecanoassaltásemosentierra todos de una vez, porque vimos la costa toda llena de indios que sehabían juntado de aquella población: y ansí salimos todos de la primerabarcada.Ycuandoelcaciquenosvioentierrayquenoíbamosasupueblo,dijootravezpor señasal capitánque fuésemosconél a suscasas,y tantasmuestras de paz hacía, que, tomando el capitán consejo para ello, acordósepor todos los más soldado, que con el mejor recaudo de armas quepudiésemosllevarfuésemos.Yllevamosquinceballestasydiezescopetas,ycomenzamosacaminarpordondeelcaciqueibaconotrosmuchosindiosqueleacompañaban.

    E yendo desta manera, cerca de unos montes breñosos comenzó a darvoceselcaciqueparaquesaliesenanosotrosunosescuadronesdeindiosdeguerra que tenía en celada para nos matar; y a las voces que dio, losescuadronesvinieroncongranfuriayprestezaynoscomenzaronaflechardearte que de la primera rociada de flechas nos hirieron quince soldados, ytraían armas de algodón que les daba a las rodillas, y lanzas, y rodelas, yarcos,yflechas,yhondas,ymuchapiedra,yconsuspenachos,yluego,traslas flechas,sevinierona juntarconnosotrospieconpie,ycon las lanzasamanteniente nos hacíanmuchomal.Mas quisoDios que luego les hicimos

  • huir,comoconoscieronelbuencortardenuestrasespadasydelasballestasyescopetas;pormaneraquequedaronmuertosquincedellos.

    Y un poco más adelante donde nos dieron aquella refriega estaba unaplacetay trescasasdecalycantoqueerancuesyadoratoriosdonde teníanmuchos ídolos de barro, unos como caras de demonios, y otros como demujeres, y otros de otrasmalas figuras, demanera que, al parecer, estabanhaciendosodomíaslosunosindiosconlosotros,ydentro,enlascasas,teníanunasarquillaschicasdemaderayenellasotros ídolos,yunaspatenillasdemedio oro y lo más cobre, y unos pinjantes, y tres diademas, y otraspecezuelasdepescadillosyánadesdelatierra,ytododeorobajo.Ydesquelohobimosvisto,ansíelorocomolascasasdecalycanto,estábamosmuycontentosporquehabíamosdescubierto tal tierra;porqueenaquel tiemponiera descubierto el Perú ni aun se descubrió de ahí a veinte años.Y cuandoestábamos batallando con los indios, el clérigo González, que iba connosotros, se cargó de las arquillas e ídolos y oro, y lo llevó al navío.Y enaquellasescaramuzasprendimosdosindios,quedespuésquesebautizaronsellamóeluno JuliányelotroMelchior,y entramboseran trastabadosde losojos.Yacabadoaquelrebatonosvolvimosalosnavíosyseguimoslacostaadelante descubriendo hacia do se pone el sol, y después de curados losheridosdimosvelas.Yloquemáspasóadelantelodiré.

  • CapítuloIII.Cómoseguimoslacostaadelantehaciaelponiente,descubriendopuntasybajosy

    anconesyarrecifes

    Creyendo que era isla, como nos lo certificaba el piloto Antón deAlaminos, íbamos con muy gran tiento, de día navegando y de noche alreparo,yenquincedíasquefuimosdestamaneravimosdesdelosnavíosunpueblo, y al parecer algo grande; y había cerca dél gran ensenada y bahía;creímos que habría río o arroyo donde pudiésemos tomar agua, porqueteníamosgranfaltadella,acausadelaspipasyvasijasquetraíamos,quenovenían estancas, porque como nuestra armada era de hombres pobres, y noteníamosorocuantoconveníaparacomprarbuenasvasijasycables,faltóelagua, y hobimos de saltar en tierra junto al pueblo, y fue un domingo deLázaro,yaestacausaposimosaquelpueblopornombreLázaro,yansíestáenlascartasdemarear,yelnombrepropiodeindiossediceCampeche.Puesparasalirtodosdeunabarcadaacordamosdeirenelnavíomáschicoyenlostres bateles con nuestras armas, no nos acaeciese como en la Punta deCotoche.Yporqueenaquellosanconesybahíasmenguamucholamar,yporestacausadejamoslosnavíosancladosmásdeunaleguadetierrayfuimosadesembarcarcercadelpueblo.Yestabaallíunbuenpozodeagua,dondelosnaturales de aquella población bebían, porque en aquellas tierras, segúnhemos visto, no hay ríos, y sacamos las pipas para las henchir de agua yvolvernos a los navíos.E ya que estaban llenas y nos queríamos embarcar,vinierondelpuebloobradecincuentaindios,conbuenasmantasdealgodónydepazyaloqueparescíadebíandesercaciques,ynosdicenporseñasquequébuscábamos,y lesdimosaentenderque tomaraguae irnos luegoa losnavíos,ynosseñalaronconlasmanosquesiveníamosdedondesaleelsol,ydecían:«Castilan,castilan»,ynomiramosenlodelapláticadel«castilan».

    Ydespuésdestaspláticasnosdijeronporseñasquefuésemosconellosasu pueblo, y estovimos tomando consejo si iríamos o no, y acordamos conbuen concierto de ir muy sobre aviso. Y lleváronnos a unas casas muy

  • grandes,queeranadoratoriosdesusídolosybienlabradasdecalycanto,ytenían figurado en unas paredes muchos bultos de serpientes y culebrasgrandesyotraspinturasdeídolosdemalasfiguras,yalrededordeunocomoaltar,llenodegotasdesangre,yenotrapartedelosídolosteníanunoscomoa manera de señales de cruces, y todo pintado, de lo cual nos admirarnoscomo cosa nunca vista ni oída. Y según paresció, en aquella sazón habíansacrificado a sus ídolos ciertos indios para que les diesen victoria contranosotros,yandabanmuchas indiasriéndoseyholgándose,yalparecermuyde paz; y como se juntaban tantos indios, temimos no hubiese algunazalagardacomolapasadadeCotoche.Yestandodestamaneravinieronotrosmuchosindios,quetraíanmuyruinesmantas,cargadosdecarrizossecosylospusieronenunllano,yluego,traséstos,vinierondosescuadronesdeindiosflecheros, con lanzas y rodelas y hondas y piedras, y con sus armas dealgodón,ypuestosenconcierto,yencadaescuadrónsucapitán,loscualesseapartaronpocotrechodenosotros;yluegoenaquelinstantesalierondeotracasa, que era su adoratorio de ídolos diez indios que traían las ropas demantasdealgodónlargas,quelesdabanhastalospies,yeranblancas,yloscabellosmuygrandes,llenosdesangrerevueltaconellos,quenosepuedendesparcirni aunpeinar sino secortan; los cuales indioseran sacerdotesdeídolos que en laNueva España comúnmente se llamaban papas, y ansí losnombrarédeaquíadelante.

    Yaquellospapasnostrujeronsahumerios,comoamaneraderesina,queentre ellos llaman copal, y con braseros de barro llenos de ascuas noscomenzarona sahumar,ypor señasnosdicenquenosvamosde sus tierrasantes que aquella leña que allí tienen junta se ponga fuego y se acabe dearder;sino,quenosdaránguerraymatarán.Yluegomandaronpegarfuegoalos carrizos y se fueron los papas, sin más nos hablar. Y los que estabanapercebidosenlosescuadronesparanosdarguerracomenzaronasilbaryatañer sus bocinas y atabalejos. Y desque los vimos de aquel arte y muybravosos,ydelodelaPuntadeCotocheaúnnoteníamossanaslasheridas,yaun se nos habían muerto dos soldados, que echamos a la mar, y vimosgrandes escuadrones de indios sobre nosotros, tuvimos temor y acordamosconbuenconciertodeirnosalacosta,ycomenzamosacaminarporlaplayaadelantehastallegarcercadeunpeñolqueestáenlamar.Ylosbatelesyelnavíochicofueronlacostatierraatierraconlaspipasyvasijasdeagua,ynonososamosembarcar juntoalpueblodondehabíamosdesembarcado,porelgrannúmerode indios que allí estaban aguardándonos, porque tuvimosporciertoquealembarcarnosdaríanguerra.Puesyametidanuestraaguaenlos

  • navíos y embarcados, comenzamos a navegar seis días con sus noches conbuen tiempo, y volvió unNorte, que es travesía en aquella costa, que durócuatro días con sus noches, que estuvimos para dar al través; que tan reciotemporalhabíaquenoshizoanclar,ysenosquebrarondoscables,queibayagarrandoelunnavío.¡Ohenquétrabajonosvimos,enventuradequesisequebraraelcable íbamosa lacostaperdidos,yquisoDiosqueseayudaronconotrasmaromasyguindalezas!

    Puesyareposadoeltiempo,seguimosnuestracostaadelante,llegándonosatierracuantopodíamosparatornaratomaragua,que,comoyahedicho,laspipasquetraíamosnoveníanestancas,sinomuyabiertas,ynohabíareglaenello; y como íbamos costeando creíamos que doquiera que saltásemos entierralatomaríamosdejagueyesopozosquecavaríamos.Puesyendonuestraderrotaadelante,vimosdesdelosnavíosunpueblo,yantesdeél,obradeunaleguahabíaunaensenada,queparescíaríooarroyo,yacordamosdesurgir;ycomo en aquella costa mengua mucho la mar y quedan muy en seco losnavíos, por temor dello surgimosmás de una legua de tierra, y en el navíomenor, con todos los bateles, saltamos en aquella ensenada, sacando todasnuestras vasijas para tomar agua, y con muy buen concierto de armas yballestasyescopetassalimosentierraapocomásdemediodía,yhabríadesdeelpuebloadondedesembarcamosobradeuna legua,yallí juntohabíaunospozosymaizalesy caseríosde cal y canto; llámase estepuebloPotonchan.Henchimosnuestraspipasdeagua,masnolaspodimosllevarconlamuchagentedeguerrerosquecargósobrenosotros.Yquedarsehaaquí,yadelantedirédelasguerrasquenosdieron.

  • CapítuloIV.Delasguerrasqueallínosdieronestandoenlasestanciasymaizalespormíya

    dichos

    Tomando nuestra agua vinieron por la costa muchos escuadrones deindiosdelpuebloPotonchan(queansísedice),consusarmasdealgodónqueles daba a la rodilla, y arcos y flechas y lanzas y rodelas y espadas queparescendeadosmanos,yhondasypiedras,yconsuspenachos,delosqueellos suelen usar; las caras pintadas de blanco y prieto y enalmagrado, yveníancallando,ysevienenderechosanosotros,comoquenosveníanaverde paz, y por señas nos dijeron que si veníamos de donde sale el sol, yrespondimos por señas que de donde sale el sol veníamos. Y paramosentonces en las mientes y pensar qué podían ser aquellas pláticas que nosdijeronagorayhabíandicho losdeLázaro;masnuncaentendimosal fin loquedecían.SeríacuandoestopasóysejuntaronalahoradelasAvemarías,yfuéronse a unas caserías que estaban cerca, y nosotros pusimos velas yescuchas y buen recaudo, porque no nos pareció bien aquellas juntas degentes de aquellamanera. Pues estando velando toda la noche oímos venirgranescuadróndeindiosde lasestanciasydelpueblo,y todosdeguerra;ydesque aquello sentimos, bien entendido teníamos que no se juntaban parahacemosningúnbien,yentramosenacuerdoparaverloqueharíamos,yunossoldadosdabanporconsejoquenosfuésemosluegoaembarcar.Ycomoentalescasossueleacaescer,unosdicenunoyotrosdicenotro,huboparecerdetodoslosmáscompañerosquesinosíbamosaembarcar,comoeranmuchosindios,daríanennosotrosyhabríariesgoennuestrasvidas,yotroséramosdeacuerdoquediésemosesanocheenellos,que,comodiceelrefrán,quequienacomete, vence; y también nos pareció que para cada uno e nosotros habíasobredocientosindios.

    Yestandoenestosconciertosamaneció,ydijimosunossoldadosaotrosqueestuviésemosconcorazonesmuyfuertesparapelearyencomendándoloaDiosyprocurardesalvarnuestrasvidas.Yadedíaclarovimosvenirpor la

  • costamuchosmás indiosguerreroscon susbanderas tendidasypenachosyatambores,ysejuntaronconlosprimerosquehabíanvenidolanocheantes,yluego hicieron sus escuadrones y nos cercaron por todas partes, y nos dantales rociadas de flechas y varas y piedras tiradas con hondas, que hirieronsobreochentadenuestros soldados,y se juntaronconnosotrospie conpie,unosconlanzasyotrosflechando,yconespadasdenavajas,queparecequesondehechuradedosmanos,deartequenostraíanamalandar,puestoquelesdábamosmuybuenapriesadeestocadasycuchilladas,y lasescopetasyballestasquenoparaban,unastirandoyotrasarmando.Yaqueseapartaronalgodenosotros,desdeque sentían lasgrandescuchilladasyestocadasquelesdábamos,noeralejos,yestopornosflecharytiraraterreroasusalvo.Ycuando estábamos en esta batalla y los indios se apellidaban, decían: «AlCalachuni, Calachuni», que en su lengua quiere decir que arremetiesen alcapitánylematasen;yledierondiezflechazos,yamímedierontres,yunodellosfuebienpeligroso,enelcostadoizquierdo,quemepasólohueco,yatodosnuestrossoldadosdierongrandeslanzadas,yadosllevaronvivos,quesedecíaelunoAlonsoBotoyotroeraunportuguésviejo.

    Yviendonuestrocapitánquenobastabanuestrobuenpelear,yquenoscercabantantosescuadrones,yqueveníanmuchosmásderefrescodelpuebloylestraíandecomerybeberymuchasflechas,ynosotrostodosheridosadosyatresflechazos,ytressoldadosatravesadoslosgaznatesdelanzadas,yelcapitán corriendo sangre de muchas partes, ya nos habían muerto sobrecincuenta soldados, y viendo que no teníamos fuerzas para sustentarnos nipelearcontraellos,acordamosconcorazonesmuyfuertesromperpormediosusbatallonesyacogernosalosbatelesqueteníamosenlacosta,queestabanmuyamano;elcualfuebuensocorro.Yhechostodosnosotrosunescuadrón,rompimosporellos;puesoírlagritaysilbosyvoceríaypriesaquenosdabandeflechazosyamantenienteconsuslanzas,hiriendosiempreennosotros.

    Puesotrodañotuvimos:quecomonosacogimosdegolpealosbatelesyéramosmuchos,nonospodíamossustentary íbanseafondo,ycomomejorpodimos,asidosalosbordesyentredosaguas,medionadando,llegamosalnavío de menos porte, que ya venía con gran priesa a nos socorrer, y alembarcar hirieronmuchos de nuestros soldados, en especial a los que ibanasidosalaspopasdelosbateles,ylestirabanaterrero,yaunentrabanenlamarconlaslanzasydabanamantiniente,yconmuchotrabajoquisoDiosqueescapamosconlasvidasdepoderdeaquellasgentes.Puesyaembarcadosenlosnavíos,hallamosquefaltabansobrecincuentasoldados,con losdosquellevaron vivos, y cinco echamos en la mar de ahí a pocos días, que se

  • murierondelasheridasydegransedquepasábamos.Yestuvimospeleandoenaquellasbatallasobradeunhora.LlámaseestepuebloPotonchan,yenlascartas delmarcar le pusieron por nombre los pilotos ymarineros Costa deMalaPelea.Ydesquenosvimosensalvodeaquellasrefriegas,dimosmuchasgracias a Dios. Pues cuando nos curábamos los soldados las heridas sequejabanalgunosdellosdeldolorquesentían,quecomosehabíanresfriadoyconelaguasalada,estabanmuyhinchados,yciertos soldadosmaldecíanalpiloto Antón de Alaminos y a su viaje y descubrimiento de isla, porquesiempreporfiabaquenoera tierra firme.Donde lodejaréydiré loquemásnosacaeció.

  • CapítuloV.CómoacordamosdenosvolveralaisladeCuba,ydelosgrandestrabajosquetuvimos

    hastallegaralpuertodelaHabana

    Después que nos vimos en los navíos, de la manera que dicho tengo,dimosmuchasgraciasaDios,ycuradoslosheridos(quenoquedóhombredecuantosallínoshallarnosquenotuviesenadosyatresyacuatroheridas,yelcapitáncondiez;sólounsoldadoquedósinherir),acordamosdenosvolveraCuba,ycomoestabanheridostodoslosmásdelosmarineros,noteníamosquienmarcaselasvelas,dejamosunnavíodemenosporteenlamar,puestofuego, después de haber sacado las velas, anclas y cables y repartir losmarinerosqueestabansinheridasenlosdosnavíosdemayorporte.Puesotromayor daño teníamos, que era la gran falta de agua, porque las pipas ybarrilesqueteníamosllenosenChampotón,conlagranguerraquenosdierony priesa de acogernos a los bateles, no se pudieron llevar, que allí sequedaron,quenosacamosningunaagua.Digoquetantasedpasamos,quelaslenguasybocasteníamoshechasgrietasdelasecura,puesotracosaningunapararefrigeriosnolohabía.¡Ohquécosatantrabajosaesiradescubrirtierrasnuevas,ydelamaneraquenosotrosnosaventuramos!Nosepuedeponderar,sinolosquehanpasadoporaquestosexcesivostrabajos.

    Demaneraquecon todoesto íbamosnavegandomuyallegadosa tierra,parahallarnosenparajedealgúnríoobahíaparapodertomaragua,ydesdeatres días vimos una ensenada que parecía ancón, y creímos hobiese río oesteroqueteníaagua.Ysaltaronentierraquincemarinerosdelosquehabíanquedado en los navíos que no tenían heridas ningunas, y tres soldados queestabanmássinpeligrodelosflechazos,yllevaronazadonesybarrilesparatraeragua;yelesteroerasalado,ehicieronpozosenlacosta,ytambiéneratanmalaaguaysaladayamargabacomoladelestero,pormaneraquemalayamargatrujeronlasvasijasllenas,ynohabíahombrequelapudiesebeber,yunossoldadosque labebieron lesdañó loscuerposy lasbocas.Yhabíaenaquelesteromuchosygrandeslagartos,ydesdeentoncessepusopornombre

  • elEsterodelosLagartos,yansíestáenlascartasdemarcar.Entretantoquefueronlosbatelesporelagua,selevantóunvientonordestetandeshecho,queíbamosgarrandoatierraconlosnavíos.

    Comoaquellacostaestravesíayreinaelnorteynordeste,ycomovieronaqueltiempolosmarinerosquehabíanidoatierraporelagua,vinieronmuymásquedepriesaconlosbateles,ytuvierontiempodeecharotrasanclasymaromas, y estuvieron los navíos seguros dos días y dos noches, y luegoalzamos anclas y dimos velas para ir nuestro viaje a la isla de Cuba. Y elpilotoAlaminosseconcertóyaconsejóconlosotrosdospilotos,quedesdeaquelparajeadondeestábamosatravesásemosalaFlorida,porquehallabaporsus cartas y grados y altura que estaría de allí obra de setenta leguas, ydespués de puestos en la Florida dijo que era mejor viaje y más cercananavegaciónparairalaHabanaquenoladerrotapordondehabíamosvenido,yansífuecomolodijo,porque,segúnyoentendí,habíavenidoconunJuanPoncedeLeónadescubrirlaFloridahabríayacatorceoquinceaños,yallíenaquellamisma tierra le desbarataron ymataron al Juan Ponce.Y en cuatrodíasquenavegamosvimoslatierradelamesmaFlorida,yloqueenellanosacaeciódiréadelante.

  • CapítuloVI.CómodesembarcamosenlabahíadelaFloridaveintesoldadosconelpilotoAlaminosabuscaragua,ydelaguerraqueallínosdieronlosnaturalesdeaquellatierra,ydeloquemáspasó

    hastavolveraLaHabana

    Llegados a laFlorida, acordamosque saliesen en tierraveinte soldados,los que teníamosmás sanos de las heridas, e yo fui con ellos e también elpilotoAntón deAlaminos, y sacamos las vasijas que había, y azadones, ynuestrasballestasyescopetas.Ycomoelcapitánestabamuymalheridoyconlagransedquepasabaestabamuydebilitado,ynosrogóqueentodocasoletrujésemos agua dulce, que se secaba y moría de sed, porque el agua quehabíaera saladayno sepodíabeber, comootravezhedicho, llegadosquefuimosa tierra,cercadeunesteroqueestabaen lamar,elpilotoAlaminosreconosciólacostaydijoquehabíaestadoenaquelparaje,quevinoconunJuan Ponce de León, cuando vino a descubrir aquella costa, y que allí leshabían dado guerra los indios de aquella tierra y que les habían muertomuchossoldados,yqueestuviésemosmuysobreavisoapercebidos.Yluegopusimos por espías dos soldados, y en una playa que se hacia muy anchahecimospozosbienhondos,dondenosparescióhaberaguadulce,porqueenaquella sazón era menguante la marca. Y quiso Dios que topásemos buenagua, y con el alegría y por hartarnos della y lavar paños para curar losheridosestuvimosespaciodeunahora.

    Eyaquenosqueríamosveniraembarcarconnuestraagua,muygozosos,vimos venir al un soldado de los dos que habíamos puesto en vela, dandomuchas voces diciendo: «Al arma, al arma, que vienen muchos indios deguerraportierrayotrosencanoasporelestero».Yelsoldadodandovocesylosindiosllegaroncasiquealaparconélcontranosotros.Ytraíanarcosmuygrandesybuenas flechasy lanzasyunasamaneradeespadas,ycuerosdevenados vestidos, y eran de grandes cuerpos; y se vinieron derechos a nos

  • flechar, y hirieron luego seis denosotros, y amimedieronun flechazodepoca herida. Y dímosles tanta priesa de cuchilladas y estocadas y con lasescopetas y ballestas, que nos dejan a nosotros y van a lamar, al estero, aayudarasuscompañeroslosqueveníanenlascanoas,dondeestabanconlosmarineros, que también andabanpeleandopie conpie con los indios de lascanoas,yaunlesteníanyatomadoelbatelylollevabanporelesteroarribaconsuscanoas,yhabíanheridocuatromarinerosyalpilotoAlaminosenlagarganta;yarremetimosaelloselaguaamásdelacintura,yaestocadasleshecimossoltarelbatel,yquedarontendidosenlacostayenelaguaveinteydosdellos,ytresprendimosqueestabanheridospocacosa,quesemurieronenlosnavíos.

    Despuésdesta refriegapasada,preguntamosal soldadoquepusimosporvelaquequésehizosucompañeroBerrio,queansíse llamaba.Dijoquelovioapartarconunhachaenlasmanosparacortarunpalmito,equefuehaciael estero por donde habían venido los indios de guerra, y desque oyó lasvoces,queerandeespañol,queporaquellasvocesvinoadarmandado,yqueentoncesledebierondematar.ElcualsoldadosolamenteélhabíaquedadosinlodarningunaheridaenlodePotonchan,yquisosuventuraquevinoallíafenecer.Yluegofuimosenbuscadenuestrosoldadoporelrastroquehabíantraídoaquellosindiosquenosdieronguerra,yhallamosunapalmaquehabíacomenzadoacortar,ycercadellamuchahuella,másqueenotraspartes,pordonde tuvimos por cierto que lo llevaron vivo, porque no ha la rastro desangre,yanduvímoslebuscandoaunaparteyaotramásdeunahora,ydimosvoces,ysinmássaberdélnosvolvimosaembarcarenlosbatelesyllevamoselaguadulce,conquesealegraron,todoslossoldadoscomosientonceslesdiéramoslasvidas.Yunsoldadosearrojódesdeelnavíoenelbatel,conlagransedqueteníatomóunabotijaapechosybebiótantaaguaquesehinchóymuriódendeadosdías.

    Yembarcadosconnuestraagua,metidos losbateles,dimosvelapara laHabanaypasamosenaqueldíay lanoche,quehizobuen tiempo, juntodeunas isletas que llaman Los Mártires, que son unos bajos que ansí losllamaronlosBajosdelosMártires.Yíbamosencuatrobrazaslomáshondo,ytocólanaocapitanaentreunascomoisletas,yhizomuchaagua,que,condartodoslossoldadosqueallííbamosalabomba,nopodíamosestancarla,yíbamoscontemornonosanegásemos.Traíamosunosmarineroslevantiscos,y lesdecíamos:«Hermanos, ayudadadar labomba,puesveisqueestamostodosmuymalheridosycansadosde lanocheydeldía».Yrespondían loslevantiscos: «Hácetelo vos, pues no ganarnos sueldo, sino hambres y sed y

  • trabajos y heridas, como vosotros». Por manera que les hacíamos queayudasen, y que malos y heridos como íbamos marcábamos las velas ydábamos en la bomba, hasta que Nuestro Señor nos llevó al puerto deCarenas,dondeagoraestápobladalavilladelaHabana,queenotrotiempoPuerto de Carenas se solía llamar. Y cuando nos vimos en tierra dimosmuchasgraciasaDios.

    VolvamosadecirdenuestrallegadaalaHabana,queluegotomóelaguadelacapitanaunbuzoportuguésqueestabaenaquelpuerto.YescrebimosaDiegoVelázquez,gobernador,muyenposta,haciéndolesaberquehabíamosdescubiertotierrasdegrandespoblacionesycasasdecalycanto,ylasgentesnaturalesdellastraíanvestidosderopadealgodónycubiertassusvergüenzas,y tenían oro y labranzas demaizales, y otras cosas que nome acuerdo. Ynuestrocapitán,FranciscoHernández,sefuedesdeallíportierraaunavillaquesedecíaSantispíritus,dondeeravecinoydondeteníasusindios,ycomoibamalherido,muriódendeadiezdías,ytodoslosmássoldadosnosfuimoscadaunopor supartepor la islaadelante.Yen laHabanasemurieron tressoldadosdelasheridas,ynuestrosnavíosfueronalpuertodeSantiago,dondeestabaelgobernador.

    YdespuésquehobierondesembarcadolosdosindiosquehobimosenlaPuntadeCotoche,quesedecíanMelchorejoyJulianillo,ysacaronelarquillacon las diademas y anadejos y pescadillos y otras pecezuelas de oro, ytambiénmuchos ídolos, soblimábanlo de arte, que en todas las islas, así deSantoDomingoyenJamaicayaunenCastillahobogranfamadello,ydecíanque otras tierras en el mundo no se habían descubierto mejores. Y comovieronlosídolosdebarroydetantasmanerasdefiguras,decíanqueerandelos gentiles. Otros decían que eran de los judíos que desterró Tito yVespasianodeJerusalén,yquelosechóporlamaradelanteenciertosnavíosque habían aportado en aquella tierra. Y como en aquel tiempo no eradescubiertoelPerúnisedescubriódeahíaveinteaños,teníaenmucho.PuesotracosapreguntabaDiegoVelázquezaaquellos indios:quesihabíaminasdeoroensutierra,yporseñaatodoledanaentenderquesí.Ylesmostraronoroenpolvo,ydecíanquehabíamuchoensutierra;ynoledijeronverdad,porque claro está que en la Punta de Cotoche, ni en todoYucatán, no hayminas de oro ni de plata. Y ansimismo lesmostraban losmontones dondeponenlasplantasdecuyasraícessehaceelpancazabe,yllámaseenlaisladeCuba«yuca»,y los indiosdecíanquelashabíaensutierra,ydecían«tlati»porlatierraenquelasplantaban;pormaneraqueyucacontlatiquieredecirYucatán, y para declarar esto decíanles los españoles que estaban con el

  • Velázquez, hablando juntamente con los indios: «Señor, dicen estos indiosquesu tierrasediceYucatán».Yansísequedóconestenombre,queensulenguanosediceansí.

    Dejemosestapláticaydiréque todos los soldadosque fuimosenaquelviajeadescubrirgastamoslapobrezadehaciendaqueteníamos,yheridosyempeñados volvimos a Cuba; y cada a soldado se fue por su parte, y elcapitán luego murió. Estuvimos muchos días curando las heridas, y pornuestra cuenta hallamos que murieron cincuenta y siete. Y esta gananciatrujimosdeaquellaentradaydescubrimiento.YelDiegoVelázquezescribióaCastilla, a los señores oidores quemandaban en elRealConsejode Indias,queéllohabíadescubiertoygastadoenlodescubrirmuchacantidaddepesosdeoro,yansílodecíaypublicabadonJuanRodríguezdeFonseca,obispodeBurgos y arzobispo de Rosano, porque ansí se nombraba, porque erapresidentedelConsejodeIndias,yloescribióaSuMajestadaFlandes,dandomucho favor en sus cartas al Diego Velázquez, y no hizo memoria denosotros,quelodescubrimos.Yquedarsehaaquí,ydiréadelantelostrabajosquemeacaescieronamiyaotrostressoldados.

  • CapítuloVII.DelostrabajosquetuvehastallegaraunavillaquesedicelaTrinidad

    Ya he dicho que nos quedamos en la Habana ciertos soldados que noteníamos sanos los flechazos, y para ir a la villa de la Trinidad, ya queestábamosmejores,acordamosdenosconcertartressoldadosconunvecinodelamismaHabana,quesedecíaPedrodeÁvila,queibaansimismoaquelviajeyllevabaunacanoaparairporlamarporlabandadelsur,yllevabalacanoacargadadecamisetasdealgodónavenderalavilladelaTrinidad.

    Ya he dicho otra vez que canoas son de hechura de artesas cavadas yhuecas,yenaquellastierrasconellasnaveganalremocostaacosta.Yenelconcierto que hecimos con elÁvila fue que le daríamos diez pesos de oroporquefuésemosensucanoa.Puesyendopornuestracostaadelante,avecesremandoyaratosalavela,yaquehabíamosnavegadooncedías,yenparajedeunpueblodeindiosquesedecíaCanarreo,queeratérminosdelavilladela Trinidad, se levantó un tan recio viento de noche, que no nos pudimossostenerenlamarconlacanoaporbienqueremábamostodosnosotrosyelPedro de Ávila y unos indios de la Habana, muy buenos remeros, quetraíamosalquilados;hobimosdedaral travésentreunos seborucos,que loshaymuygrandesenaquelparaje,pormaneraquesenosquedólacanoayelÁvila perdió su hacienda, y salimos descalabrados y desnudos en carnes,porquepara ayudarnosyqueno sequebrase la canoaypodermejornadar,nos apercebimos de estar sin ropa ninguna. Pues ya escapados de aquelcontraste,parairalavilladelaTrinidadnohabíacaminoporlacosta,sinoporunosseborucosymalpaíses,queansí sedice,quesonunaspiedrasquepasanlasplantasde lospies;y lasolas,quesiemprereventabanydabanennosotros,yaunsin tenerquecomer.Yporacortarotros trabajosquepodríadecir,delasangrequenossalíadelasplantadelospiesyaundeotraspartes,lodejaré.

    Y quiso Dios que con mucho trabajo salimos a una playa de arena, y

  • dendeadosdíasquecaminamosporellallegamosaunpueblodeindiosquesedecíaYaguarama,elcualenaquellasazóneradelpadrefrayBartolomédelas Casas, clérigo presbítero; y después le conoscí licenciado y frailedominico,y llegóa serobispodeChiapa.Yenaquelpueblonosdierondecomer,yotrodíafuimosaotropuebloquesedecíaChipiona,queeradeunAlonsodeÁvilaydeunSandoval(nolodigoporelcapitánSandovaldelaNueva España, sino de otro, natural de Tudela de Duero). Y desde aquelpueblofuimosalavilladelaTrinidad,yunamigomío,naturaldemitierra,que se decíaAntonio deMedina,me dio unos vestidos según en la isla seusaban;ydesde allí, conmipobrezay trabajo,me fui aSantiagodeCuba,dondeestabaelgobernador,ymerecibiódebuenagracia;elcualandabayamuydiligenteenenviarotraarmada,ycuandolefuiahablaryahaceracato,porqueéramosdeudos,seholgóconmigo,ydeunaspláticasenotrasmedijoquesiestababuenoparavolveraYucatán,yriéndomelerespondíquequiénlepusonombreYucatán,queallánolellamanansí.Ydijoquelosindiosquetrujimos lodecían.Yo respondíquemejornombre seria la tierradondenosmataronmásdelamitaddelossoldadosqueaaquellatierrafuimos,ytodoslosmássalimosheridos.Yrespondió:«Bienséquepasastesmuchostrabajos,y ansí es descubrir tierras nuevas por ganar honra. Su Majestad os logratificará,yyoansíloescribiré,yagora,hijo,volvedotravezenlaarmadaque hago, que yomandaré al capitán Juan deGrijalva que os hagamuchahonra».Yquedarsehaaquí,ydiréloquemáspasó.

    Aquí se acaba el descubrimientoquehizoFranciscoHernándezy en sucompañía Bernal Díaz del Castillo, y digamos en lo que entendió DiegoVelázquez.

  • CapítuloVIII.CómoDiegoVelázquez,gobernadordelaisladeCuba,ordenódeenviarunaarmadaalastierrasquedescubrimos,yfueporcapitángeneraldellaunhidalgoquesedecíaJuande

    Grijalva,parientesuyo,yotrostrescapitanes,queadelantedirésusnombres

    Enelañodemilequinientosydiezyocho,viendoelgobernadordeCubalabuenarelacióndelastierrasquedescubrimos,quesediceYucatán,acordódeenviarunaarmada,yparaellasebuscaroncuatronavíos;losdosfuerondelostresquellevamosconFranciscoHernández,ylosotrosdosnavíoscompróel Diego Velázquez nuevamente de sus dineros. Y en aquella sazón queordenabalaarmada,halláronsepresentesenSantiagodeCuba,donderesidíael Velázquez, un Juan de Grijalva y un Alonso de Dávila, y Francisco deMontejo y Pedro de Alvarado, que habían ido a ciertos negocios con elgobernador, porque todos tenían encomiendas de indios en lamisma isla yeranhombresprincipales.ConcertósequeelJuandeGrijalva,queeradeudodelDiegoVelázquez,vinieseporcapitángeneral,yqueAlonsoDávilavinieseporcapitándeunnavío,yPedrodeAlvaradodeotro,yMontejodeotro;pormaneraquecadaunodestoscapitanespusobastimentosymatalotajedepancazabeytocinos,yelDiegoVelázquezpusoloscuatronavíosyciertorescatede cuentas y cosas de poca valía y otras menudencias de legumbres. YentoncesmemandóDiegoVelázquezquevinieseconaquelloscapitanesporalférez[2], y como había fama de las tierras que eran ricas y había en ellascasasdecalycanto,yelindioJulianilloquellevamosdelaPuntadeCotochedecía que había oro, tornaron mucha voluntad y codicia los vecinos ysoldadosqueno tenían indiosen la isladeveniraestas tierras,pormaneraquedeprestonosjuntamosdocientosycuarentacompañeros,ypusimoscadauno de la hacienda que teníamos para matalotaje y armas y cosas queconvenían.

  • Yenesteviajevolvíyoconestoscapitanesporalférez,comodichotengo,yparescióserque la instrucciónqueparaellodioelgobernador fue, segúnentendí,querescatasetodoeloroyplataquepudiese,ysiviesequeconveníapoblaroseatrevíaaello,poblase,ysinoquesevolvieseaCuba.YvinoporveedordelaarmadaunoquesedecíaPeñalosa,naturaldeSegovia,ytrujimosunclérigo,quesedecíaJuanDíaz,naturaldeSevilla,y losdospilotosqueantes habíamos traído, que se decían Antón de Alaminos, de Palos, yCamacho,deTriana,yJuanÁlvarezelManquillo,deHuelva,yotroquesedecíaSopuerta,naturaldeMoguer.Puesantesquemetalaplumaenlodeloscapitanes,porquenombraréalgunasvecesaestoshidalgosquehedichoqueveníanenelarmada,yparecerácosadescomedidanombrallessecamentesusnombres, sepan que después fueron personas que tuvieron ditados, porquePedrodeAlvaradofueadelantadoygobernadordeGuatemalaycomendadordelSeñorSantiago,yelMontejofueadelantadodeYucatánygobernadordeHonduras.ElAlonsoDávilanotuvotantaventuracomolosdemás,porqueleprendieronfranceses,comoadelantediréenelcapítuloqueadelantetrataré;yaestacausanolesnombrarésinosuspropiosnombres,hastaquetuvieronporSuMajestadlosditadospormínombrados.

    Y quiero que volvamos a nuestra relación, y diré cómo fuimos con loscuatronavíosporlabandadelnorteaunpuertoquesedicedeMatanzas,queestácercadelaHabanaviejaqueenaquellasazónnoestabapobladalavilladondeagoraestá,yenaquelpuertoteníantodoslosmásvecinosdelaHabanasusestancias.Ydesdeallíseproveyeronnuestrosnavíosdelcazabeycarnedepuerco,queyahememorado,quenohabíavacasnicarneros,porqueeranuevamente ganada aquella isla, y nos juntamos, ansí capitanes comosoldados,parahacernuestroviaje.

    Yantesquemáspaseadelante,yaunquevaya fueradenuestrahistoria,quierodecirporquécausallamabanaquelpuertoMatanzas,yestotraigoaquíalamemoriaporquemelohapreguntadouncoronistaquehablasucorónicacosasacaecidasenCastilla.Aquelnombreselepusoporestoquediré.Queantes que aquella isla de Cuba se conquistase, dio al través un navío enaquellacosta,cercadelríoypuertoquehedichoquesedicedeMatanzas,yvenían en el navío sobre treinta personas españoles y dos mujeres, y parapasallosdelaotrapartedelrío,porqueesmuygrandeycaudaloso,vinieronmuchosindiosdelaHabanaydeotrospueblosconintencióndematallos,yde que no se atrevieron a dalles guerra en tierra, con buenas palabras yhalagoslesdijeronquelosqueríanpasarencanoasyllevallosasuspueblosparadallesdecomer.Yaqueibanconellosamediodelríoenlascanoas,las

  • trastornaronymataron,quenoquedaronsinotreshombresyunamujer,queerahermosa,ylallevóuncaciquedelosquehicieronaquellatraición,ylostresespañolesrepartieronentresí.YaestacausasepusoaquelnombrepuertodeMatanzas.Yoconocíalamujer,que,despuésdeganadalaisladeCuba,sequitóalcaciquedepoderdequienestaba,ylavicasadaenlamismaisladeCuba,enunavillaquesedicelaTrinidad,conunvecinodellaquesedecíaPedroSánchezFarfán.Ytambiénconocíalostresespañoles,quesedecíaeluno Gonzalo Mejía y era hombre anciano, natural de Jerez, y el otro sellamabaJuandeSantisteban,yeramancebo,naturaldeMadrigal,yelotrosedecíaCascorro,hombredelamar,naturaldeMoguer.

    Muchomehedetenidoencontarcosasviejas,ydiránquepordecirunaantigüedad dejé de seguir mi relación. Volvamos a ella. Ya que estábamosrecogidos todosnuestros soldados, ydadas las instruccionesque lospilotoshabíandellevarylasseñasdelosfarolesparadenoche,ydespuésdehaberoídomisa,enochodíasdelmesdeabrildelañodequinientosydiezyochoañosdimosvela,yendiezdíasdoblamoslaPuntadeGuaniguanico,queporotronombrese llamadeSantoAntón,ydentrodediezdíasquenavegamosvimos la isla deCozumel, que entonces la descubrimos, porquedescayeronlos navíos con la corriente más bajo que cuando vinimos con FranciscoHernández deCórdoba.Yendoque íbamos bajando la isla por la banda delsur,vimosunpueblodepocascasas,yallícercabuensurgideroylimpiodearrecifes, saltamos en tierra con el capitán buena copia de soldados. Y losnaturalesdeaquelpueblosehabíanidohuyendodesquevieronvenirelnavíoalavela,porquejamáshabíanvistotal,ylossoldadosquesaltarnosatierrahallamosenunosmaizalesdosviejosquenopodíanandar,ylostrujimosalcapitán;ycomolosindiosJulianilloyMelchorejo,quetrujimoscuandolodeFrancisco Hernández, que entendían muy bien aquella lengua, les habló,porquesutierradellosyaquellaisladeCozumelnohaydetravesíadelaunaalaotrasinoobradecuatroleguas,ytodoesunalengua.Yelcapitánhalagóalosdosviejosylesdiounascontezuelas,ylesenvióallamaraloscaciquesdeaquelpueblo;yfueronynuncavolvieron.

    Pues estándoles aguardando, vino una india moza, de buen parecer, ycomenzódehablarenlalenguadeladeJamaica,ydijoquetodoslosindioseindiasdeaquelpueblosehabíanidohuyendoalosmontes,demiedo.Ycomomuchosdenuestrossoldadoseyoentendimosmuybienaquellalengua,quees como la propia deCuba, nos admiramos de vella y le preguntamos quecómoestabaallí,ydijoquehabríadosañosquedioaltravésconunacanoagrande, en que iban a pescar desde la isla de Jamaica a unas isletas, diez

  • indiosjamaicanos,yquelascorrienteslesechóenaquellatierra,ymataronasumaridoyatodoslosmásindiosjamaicanos,suscompañeros,yqueluegolossacrificaronalosídolos.Yelcapitán,comovioquelaindiaseríabuenamensajera, envió conella a llamar los indiosy caciquesde aquelpueblo,ydiola de plazo dos días para que volviese, porque los indios Julianillo yMelchorejo tuvimos temorquesiseapartabandenosotrosquese iríanasutierra,queestácerca;yaestacausanoosábamosenviarlosallamarconellos.

    Puesvolvamosa la indiadeJamaica;que la respuestaque trajo,quenoqueríavenirningúnindiopormáspalabrasquelesdecía.PusimosnombreaestepuebloSantaCruz,porquefuedíadeSantaCruzcuandoenélentramos.Había en él muy buenos colmenares de miel y buenas patatas y muchospuercosdelatierra,quetienensobreelespinazoelombligo.Habíaenéltrespueblos;aquestedondedesembarcamoseraelmayor,ylosotrospueblezuelosmáschicos;estabanencadapuntadelaislaelsuyo.Yestoyoloviyanduvecuando volví por tercera vez con Cortés; y terná de bojo esta isla de dosleguas.YvolvamosadecirquecomoelcapitánJuandeGrijalvavioqueeraperdertiempoestarallíesperando,mandóquenosembarcásemos,ylaindiadeJamaicasefueconnosotros,yseguimosnuestroviaje.

  • CapítuloIX.CómofuimosladerrotasegúnydelamaneraquelohabíamostraídocuandolodeFranciscoHernándezdeCórdoba,yfuimosa

    desembarcaraChampotón,ydelaguerraqueallínosdieronyloquemásavino

    Pues vueltos a embarcar y yendopor las derrotas pasadas cuando lo deFrancisco Hernández, en ocho días llegamos en el raje del pueblo deChampotón,quefuedondenosdesbarataronlosindiosdeaquellaprovincia,como ya dicho tengo en el capítulo que dello habla. Y como en aquellaensenadamenguamucholamar,ancleamoslosnavíosunaleguadetierra,ycontodoslosbatelesdesembarcamoslamitaddelossoldadosqueallííbamosjunto a las casas del pueblo. Y los indios naturales dél y de otros suscomarcanos se juntaron todos como la otra vez cuando nos mataron sobrecincuentayseissoldadosytodoslosmássalimosheridos,segúnmemoradotengo,yaestacausaestabanmuyufanosyorgullosos,ybienarmadosasuusanza, que son arcos, flechas, lanzas tan largas como las nuestras y otrasmenores,yrodelasymacanas,yespadascomodeadosmanos,ypiedrasyhondas y armas de algodón, y trompetillas y atambores, los más dellospintadas las caras de negro y otros de colorado y blanco, y puestos enconcierto,esperandoenlacostaparaenllegandoquellegásemosatierradarennosotros.Ycomoteníamosexperienciadelaotravez, llevábamosenlosbatelesunosfalconeteseíbamosapercebidosdeballestasyescopetas.

    Pues llegadosque llegamosa tierranoscomenzarona flechar,ycon laslanzas dar amanteniente, y aunque con los falconetes les hacíamosmuchomal, tales rociadas de flechas nos dieron, que antes que tomásemos tierrahirieronamásdelamitaddenuestrossoldados.Ydesquehobieronsaltadoentierratodosnuestrossoldados,leshicimosperderlafuriaabuenasestocadasycuchilladasyconlasballestas,porqueaunquenosflechabanaterrero,todosnosotros llevábamos armas de algodón, y todavía estuvieron buen rato

  • peleando,yleshicimosretraeraunasciénagasjuntoalpuerto.Enestaguerramataron a siete soldados, y entre ellos a un Juan de Quiteria, personaprincipal,yalcapitánJuandeGrijalvaledieronentoncestresflechazosylequebraron dos dientes, y hirieron sobre sesenta de los nuestros. Y desquevimosquetodosloscontrariossehabíanidohuyendo,fuimosalpuebloysecuraronlosheridosyenterramoslosmuertos;yentodoelpueblonohallamospersona ninguna ni los que se habían retraído en las ciénagas ya se habíandesgarrado.

    En aquellas escaramuzas prendimos tres indios: el uno dellos eraprincipal.Mandóleselcapitánquefuesenallamaralcaciquedeaquelpueblo,yselesdiomuybienaentenderconlaslenguas,JulianilloyMelchorejo,quelesperdonabanlohecho,ylesdiocuentasverdesparaquelesdiesenenseñalde paz. Se fueron y nunca volvieron, y creímos que los indios Julianillo yMelchorejo no les debieron de decir lo que les mandaron, sino al revés.Estuvimos en aquel pueblo tres días. Acuérdome que cuando estábamospeleando en aquellas escaramuzas por mí memoradas, que había allí unosprados y en ellos muchas langostas de los chicas, que cuando peleábamossaltabanyveníanvolandoynosdabanen la cara,ycomoeranmuchos losindios flecheros y tiraban tanta flecha como granizos, nos parecía que eranalgunasdellaslangostasquevolaban,ynonosrodelábamos,ylaflechaqueveníanoshería;otrasvecescreíamosqueeranflechas,yeranlangostasquevenían volando; fue harto estorbo para nuestro pelear. Dejemos esto, ypasemos adelante, y digamos cómo luego nos embarcamos y seguimosnuestraderrota.

  • CapítuloX.Cómoseguimosnuestroviajeyentramosenunríomuyanchoygrande,quelepusimosBocadeTérminos,yporquéentoncesle

    pusimosaquelnombre

    Yendopornuestranavegaciónadelante,llegamosaunabocacomoderíomuy grande y caudaloso y ancho, y no era río, como pensamos, sinomuybuenpuerto,yporqueestáentreunastierrasyotrasyparescíacomoestrecho,tan anchaboca tenía, decía el pilotoAntóndeAlaminosque era islayquepartía términos con la tierra; y a esta causa le pusimosnombredeBocadeTérminos,yansíestáenlascartasdemarcar.YallísaltóelcapitánJuandeGrijalva en tierra, con todos los demás capitanes por mí memorados ysoldados, y estuvimos tres días sondando la boca de aquella entrada ymirando bien arriba y abajo del ancón, adonde creíamos que venía o iba aparar,ynohallamosserisla,sinoancónymuybuenpuerto.Yhabíaentierraunascasasdeadoratoriosdeídolos,decalycanto,ymuchosídolosdebarro,ydepaloypiedra,queerandellosfigurasdesusdiosesydellosdesuscomomujeres,yotroscomosierpes,ymuchoscuernosdevenado,ycreímosqueporallícercahabríaalgunapoblazón,yconelbuenpuerto,queseriabuenoparapoblar,locualnofueansí,queestabamuydespoblado,porqueaquellosadoratorioserandemercaderesycazadoresquedepasadaentrabanenaquelpuerto con canoas y allí sacrificaban. Y había mucha caza de venados yconejos,ymatamosdiezvenadosconunalebrelaymuchosconejos.

    Yluegodesquetodofuevistoysondado,nostornamosaembarcar,yallísenosquedóla lebrela.LlamanlosmarinerosaestepuertodeTérminos.Yvueltosaembarcar,navegamoscostaacostajuntoatierra,hastaquellegamosaunríoquellamandeTabasco,queallílepusimosnombreríodeGrijalva.

  • CapítuloXI.CómollegamosalríodeTabasco,quellamandeGrijalva,yloqueallínosavino

    NavegandocostaacostalavíadelPoniente,ynuestranavegacióneradedía,porquedenochenoosábamosportemordebajosyarrecifes,acabodetresdíasvimosunabocaderíomuyanchayllegamoscercadetierraconlosnavíos; parecía un buen puerto, y como nos fuimos acercando cerca de laboca vimos reventar los bajos antes de entrar en el río, y allí sacamos losbatelesyconlasondaenlamanohallamosquenopodíanentrarenelpuertolosdosnavíosdemayorporte.Fueacordadoqueanclasenfuera,enlamar,yconlosotrosdosnavíos,quedemandabanmenosagua,queconellosyconlos bateles fuésemos todos los soldados el río arriba, por causa que vimosmuchosindiosestarencanoasenlasriberas,yteníanarcosyflechasytodassus armas, según de la manera de Champotón. Por donde entendimos quehabía por allí algún pueblo grande, y también porque viniendo comoveníamos navegando costa a costa, habíamos visto echadas nasas con quepescabanenlamar,yaunadosdellasselestomóelpescadoconunbatelquetraíamosajorrodelacapitana.

    Aqueste río se llama de Tabasco porque el cacique de aquel pueblo sedecíaTabasco,ecomolodescubrimosdesteviajeyelJuandeGrijalvafueeldescubridor,senombraríodeGrijalva,yansíestáenlascartasdemarear.

    Tornemosanuestrarelación;queyaquellegábamosobrademedialeguadelpueblo,bienoímoselgranremordecortarmaderadequehacíangrandesmamparosy fuerzasypalizadas,yaderezarseparanosdarguerra,pormuycierta; y desque aquello sentimos desembarcamos en una punta de aquellatierra,adondehabíaunospalmaresqueerandelpueblomedialegua,ydesquenos vieron entrar vinieron obra de cincuenta canoas con gente de guerra, ytraíanarcos,flechasyarmasdealgodón,rodelasylanzas,ysusatamboresypenachos. Y estaban entre los esteros otras muchas canoas llenas deguerreros,yestuvieronalgoapartadosdenosotros,quenoosaronllegarcomo

  • losprimeros.Ydesque losvimosdeaquel arte, estábamospara tiralles conlostirosyconlasescopetasyballestas,yquisoNuestroSeñorqueacordamosde los llamar; e con Julianillo yMelchorejo, que sabían muy bien aquellalengua,selesdijoquenohobiesenmiedo,quelesqueríamoshablarcosasquedesquelasentendiesenhabríanporbuenanuestrallegadaallíeasuscasas;equelesqueríamosdardelascosasquetraíamos.

    Ycomoentendieronlaplática,vinieroncercadenosotroscuatrocanoas,yen ellas obra de treinta indios, y luego se les mostró sartalejos de cuentasverdes y espejuelos y diamantes azules. Y desque lo vieron parescía queestabandemejorsemblante,creyendoqueeranchalchiuis,queellostienenenmucho.Entonceselcapitánlesdijo,porlaslenguasJulianilloyMelchorejo,queveníamosdelejostierrasyéramosvasallosdeungranemperadorquesedice don Carlos, el cual tiene por vasallos a muchos grandes señores ycaciques,yqueellosledebentenerporseñor,yquelesiríamuybienenello,y que a trueque de aquellas cuentas nos den comida y gallinas. Yrespondierondosdellos,queelunoeraprincipalyelotropapa,quesoncomosacerdotes que tienen cargo de los ídolos, que ya he dicho otras veces quepapaslosllamanenlaNuevaEspaña,ydijeronquedaríanelbastimentoquedecíamos y trocarían de sus cosas a las nuestras, y en lo demás que señortienen,yqueagoraveníamosysinconoscerlosyalesqueríamosdarseñor,equemirásemos no les diésemos guerra, como en Potonchan, porque teníanaparejados sobre tres jiquipiles de gente de guerra de todas aquellasprovinciascontranosotros;soncadajiquipilochomilhombres.

    Ydijeron que bien sabían que pocos días ha la que habíamosmuerto yheridomás de docientos hombres en Potonchan, y que ellos no son de tanpocasfuerzascomofueronlosotros,yporestacausahabíanvenidoahablarparasabernuestravoluntad,yaquellaspalabrasquelesdecíamosqueselasirían a decir a los caciques demuchos pueblos que están juntos para tratarguerraopaces.Yluegoelcapitánlesabrazóenseñaldepazylesdiounossartalejos de cuentas y les mandó que volviesen con la respuesta conbrevedad,equesinovenían,queporfuerzashabíamosdeirasupueblo,ynopara los enojar. Y aquellos mensajeros que enviamos hablaron con loscaciques y papas, que también tienen voto entre ellos, y dijeron que eranbuenas las paces y traer comida; y que entre todos ellos y losmás puebloscomarcanos se buscaría luego un presente de oro para nos dar y haceramistades,nolesacaescacomoalosdePotonchan.

    Por lo que yo vi y entendí después el tiempo andando, en aquellas

  • provincias e otras tierras de la Nueva España se usaba enviar presentescuando se tratan paces, como adelante verán. Y en aquella punta de lospalmaresdondeestábamosvinieronotrodíasobretreintaindios,yentreelloselcacique,ytrujeronpescadoasadoygallinas,yfrutasdezapotesypandemaíz,yunosbraserosconascuasyconsahumerios,ynossahumaronatodos;yluegopusieronenelsuelounasesteras,queenestatierrallamanpetates,yencima una manta, y presentaron ciertas joyas de oro, que fueron comodiademas y ciertas joyas como hechura de ánades, como las de Castilla, yotrasjoyascomolagartijas,ytrescollaresdecuentasvaciadizas,yotrascosasde oro de poco valor, que no valían ducientos pesos, y más trujeron unasmantasycamisetasdelasqueellosusan,ydijeronquerecibamosaquellodebuena voluntad, y que no tienenmás oro que nos dar; que adelante, haciadonde se pone el sol, hay mucho; y decían «Colúa, colúa» y «México,México»,ynosotrosnosabíamosquécosaeracolúaniaunMéxico.Ypuestoque no valía mucho aquel presente que trujeron, tuvímoslo por bueno porsaberciertoqueteníanoro.Ydesquelohubieronpresentado,dijeronquenosfuésemos luego adelante. Y el capitán Juan deGrijalva les dio gracias porello, y cuentas verdes, y fue acordado de irnos luego a embarcar, porqueestabanamuchopeligrolosdosnavíos,portemordelNorte,queestravesía,ytambiénporacercarnosadondedecíanquehabíaoro.

  • CapítuloXII.Cómoseguimoslacostaadelante,haciadondeseponeelsol,yllegamosalríoque

    llamandeBanderas,yloqueenélpasó

    Vueltosaembarcar, siguiendo lacostaadelante,dendeadosdíasvimosunpueblojuntoatierraquesediceelAyagualulco.Yandabanmuchosindiosdeaquelpueblopor lacosta, conunas rodelashechasdeconchade tortugaque relumbranconel solquedabaenellas,yalgunosdenuestros soldadosporfiaban que era de oro bajo. Y los indios que las traían iban haciendopernetas,comoburlandodelosnavíos,comoellosestabanensalvo,por losarenalesycostaadelante.YpusimospornombreaestepuebloLaRambla,yansíestáenlascartasdemarear.Eyendomásadelante,costeando,vimosunaensenada, donde se quedó el río de Tonalá, que a la vuelta que volvimosentramosenél,yleposimosnombrederíodeSantoAntón,yansíestáenlascartasdemarcar.Eyendomásadelantenavegando,vimosdóndequedabaelparajedelgranríodeGuazacalco,yquisiéramosentrarenlaensenada,noporsaberquécosaera, sinoporel tiempocontrario.Y luegoseparescieron lasgrandessierrasnevadasqueentodoelañoestáncargadasdenieve,ytambiénvimosotrassierrasqueestánmásjuntoalamar,quesellamandeSanMartín.YpusímosleaquestenombreporqueelprimeroquelasviodesdelosnavíosfueunsoldadoquesedecíaSanMartínyeravecinode laHabana,que ibaconnosotros.

    Y navegando nuestra costa adelante, el capitán Pedro de Alvarado seadelantó con su navío y entró en un río que en nombre de indios se dicePapaloaba,yentonceslepusimosnombreríodeAlvarado,porqueentróenélelmismoAlvarado.Allí ledieronpescadounosindiospescadores,queerannaturalesdeunpuebloquesediceTacotalpa.Estuvímosleaguardandoenelparajedelríodondeentrócontodostresnavíoshastaquesaliódél;yacausadehaberentradoenelríosinlicenciadelgeneral,seenojómuchoconél,ylemandóqueotraveznoseadelantasedelaarmadaporquenoleaviniesealgúncontraste en parte dondeno le pudiésemos ayudar.Y luegonavegamos con

  • todoscuatronavíosenconservahastaquellegamosenparajedeotrorío,quelepusimospornombreríodeBanderas,porqueestabanenélmuchosindiosconlanzasgrandesyencadalanzaunabanderademantagranderevolándolayllamándonos,locualdirésiguiendoadelantecómopasó.

  • CapítuloXIII.CómollegamosenelparajedelríodeBanderasydeloqueallísehizo

    YahabránoídodecirenEspañaalgunoscuriososletoresyotraspersonasquehanestadoenlaNuevaEspañacómoMéjicoestangranciudadypobladaenelaguacomoVenecia;yhabíaenellaungranseñorqueerareyenestaspartesdemuchasprovinciasy señoreaba todas aquellas tierrasde laNuevaEspaña, que son mayores que dos veces nuestra Castilla. El cual señor sedecíaMontezuma, y como era tan poderoso, quería saber y señorear hastamásde loquenopodía.Ytuvonoticia,de laprimeravezquevenimosconFrancisco Hernández de Córdoba, lo que nos acaesció en la batalla deCotoche y en la de Champotón, y agora desde viaje con los mesmos deChampotón,ysupoquesiendonosotrospocossoldadosylosdeaquelpuebloyotrosmuchosconfederadosquese juntaronconellos, lesdesbaratamos,ycómoentramosenelríodeTabasco,yloqueenélpasamosconloscaciquesde aquel pueblo, y, en fin, entendió que nuestra demanda era buscar oro, atruequedelrescatequetraíamos,ytodoselohabíanllevadopintadoenunospañosquehacendehenequén,queescomodelino.Ycomosupoqueíbamoscostaacostahaciasusprovincias,mandóasusgobernadoresquesiporallíaportásemosconlosnavíos,queprocurasendetrocaroroanuestrascuentas,especial a lasverdes, queparescíanalgoa sus chalchiuis, que las tienenenmuchocomoesmeraldas,y también lomandóparasabere inquirirmásporentero de nuestras personas y qué era nuestro intento.Y lomás cierto era,segúnentendimos,queleshabíandichosusantepasadosquehabíandevenirgentesdehaciadondesaleelsol,conbarbas,queloshabíandeseñorear.

    Agoraseaporlounooporlootro,estabanenpostayvelamuchosindiosdelgranMontezumaenaquelríoconunasvarasmuylargasyencadavarauna bandera de manta de algodón blanca, enarbolándolas y llamándonos,como que parescían eran señas de paz, que fuésemos adonde estaban. Ydesquevimosdesdelosnavíoscosastannuevas,nosadmiramosyparasaberqué podía ser fue acordado por el general con todos losmás capitanes que

  • echásemosdosbatelesenaguayquesaltasenenellostodoslosballesterosyescopeterosyveintesoldadosdelosmássueltosyprestos,yqueFranciscodeMontejofueseconnosotros,yquesiviésemosqueeragentedeguerralosqueestaban con las banderas, que de presto se lo hiciésemos saber, o otracualquiercosaquefuese.

    YenaquellasazónquisoDiosquehaciabonanzaenaquellacosta,locualpocasvecessueleacaescer,ycomollegamosentierrahallamostrescaciques,queelunodelloseragobernadordeMontezuma,yconmuchosindiosdesuservicio. Y tenían allí gallinas de la tierra y pan de maíz, de lo que ellossuelencomer,yfrutasqueeranpiñasyzapotes,queenotraspartesllamanaloszapotesmameyes.Yestabandebajodeunasombradeárbolesepuestasesterasenelsuelo,yallí,porseñas,nosmandaronasentar,porqueJulianillo,el de la punta de Cotoche, no entendía aquella lengua, que esmejicana, yluego trujeron braseros de barro con ascuas y nos sahuman con uno comoresina.ElcapitánMontejolohizosabertodoloaquímemoradoalgeneralycomolosupoacordódesurgirallícontodoslosnavíos.Ysaltóentierraconloscapitanesysoldados.Ydesqueaquelloscaciquesygobernadoreslevieronen tierra y entendieron que era el capitán general de todos a su usanza lehicierongranacato,yélleshizomuchasquericiasylesmandódardiamantesazules y cuentas verdes, y por señas les dijo que trujesen oro a trocar anuestros rescates.Locual luegoel indiogobernadormandóa sus indiosdeque todos lospuebloscomarcanos trujesende las joyasdeoroque teníanarescatar,yenseisdíasqueallíestuvimostrujeronmásdediezyseismilpesosenjoyezuelasdeorobajoydemuchadeversidaddehechuras.Yaquestodebeser lo que dicen los coronistas Gómara y Illescas y Jovio que dieron enTabasco,yansíloescribencomosifueraverdad,porquevistacosaesqueenlaprovinciadelríodeGrijalvanitodossusrededoresnohayoro,sinomuypocasjoyasdesusantepasados.Dejemosestoypasemosadelante.YesquetomamosposesionenaquellatierraporSuMajestad,ydespuésdeestohechohabló el general a los indios diciendo que se querían embarcar, y les diocamisasdeCastilla.Ydeallítomamosunindio,quellevamosenlosnavíos,el cual después que entendió nuestra lengua se volvió cristiano y se llamóFrancisco,ydespuéslevicasadoconunaindia.

    Volvamosanuestraplática.Puescomovioelgeneralqueno traíanmásoro que rescatar y había seis días que estábamos allí y los navíos corríanriesgo,porsertravesíaelNorteyNordeste,nosmandóembarcar.Ycorriendolacostaadelante,vimosunaisletaquebañabalamaryteníalaarenablancayestaba,alparescer,obradetresleguasdetierra;yposímoslenombreislaLa

  • Blanca,yansíestáenlascartasdelmarear.Ynomuylejosdestaisletablancavimosotra islaque teníamuchosárbolesverdesyestabade la costacuatroleguas,yposímoslepornombreislaVerde.Eyendomásadelantevimosotraislaalgomayorquelasdemás,yestaríadetierraobradeleguaemediayallíenfrentedellahabíabuensurgidero.Ymandóelgeneralquesurgiésemos.Yechados los bateles en el agua, fue el Juan de Grijalva, con muchos denosotroslossoldados,averlaisleta,porquehabíahumosenella,yhallamosdoscasashechasdecalycantobienlabradas,yencadacasaunasgradas,pordondesubíanaunoscomoaltares,yenaquellosaltaresteníanunosídolosdemalasfiguras,queeransusdioses.

    Y allí hallamos sacrificados de aquella noche cinco indios, y estabanabiertosporlospechosycortadoslosbrazosylosmuslos,ylasparedesdelascasas llenas de sangre. De todo lo cual nos admiramos en granmanera, ypusimosnombreaestaisletaisladeSacrificios,yansíestáenlascartasdelmarcar. Y allí enfrente de aquella isla saltamos todos en tierra y en unosarenalesgrandesqueallíhay,adondehecimosranchosychozasconramaycon las velas de los navíos. Habían venido y allegándose en aquella costamuchosindiosquetraíanarescatarorohechopecezuelas,comoenelríodeBanderas. Y según después supimos, lo mandó el gran Montezuma queviniesen con ello, y los indios que lo traían estaban temerosos, y eramuypoco;pormaneraqueluegoelcapitánmandóquelosnavíosalzasenanclasydiesen velas y fuésemos a surgir enfrente de otra isleta que estaba obra demedialeguadetierra.YestaislaesdondeagoraeselpuertodelaVeracruzobrademedialeguadetierra.Ydiréadelanteloqueallínosavino.

  • CapítuloXIV.CómollegamosaquellaisletaqueagorasellamaSanJuandeUlúa,eaquécausase

    lepusoaquelnombre,yloqueallípasamos

    Desembarcadosenunosarenales,hecimoschozasencimadelosmásaltosmédanosdearena,queloshayporallígrandes,porcausadelosmosquitos,quehabíamuchos.Yconlosbatelessondaronmuybienelpuertoyhallaronque con el abrigo de aquella isleta estarían seguros los navíos del Norte yhabía buen fondo. Y hecho esto fuimos a la isleta con el general treintasoldadosbienapercebidosendosbateles,yhallamosunacasadeadoratorios,dondeestabaunídolomuygrandeyfeo,elcuallellamabanTescatepuca,y,acompañándole,cuatro indiosconmantasprietasymuy largas,concapillasquequierenparesceralasquetraenlosdominicosoloscanónigosyaquélloseran sacerdotes de aquel ídolo, que comúnmente en la Nueva Españallamabanpapas,comoyalohememoradootravez.Yteníansacrificadosdeaqueldíadosmochachos,yabiertosporlospechosyloscorazones,ysangreofrescidaaquelmalditoídolo.

    YaquellossacerdotesnosveníanasahumarconloquesahumaronaquelsuTescatepuca,porqueenaquellasazónquellegamosloestabansahumandoconunoquehueleaensencia,ynoconsentimosquetalsahumerionosdiesen;antestuvimosmuygranlástimadevermuertosaquellosdosmochachosyvertan grandísima crueldad. Y el general preguntó al indio Francisco, por mimemoradoyque trujimosdel ríodeBanderas,queparescíaalgoentendido,que por qué hacían aquello; y esto se lo decía medio por señas, porqueentonces no teníamos lengua ninguna, como ya otra vez he dicho, porqueJulianillo y. Melchorejo no entendían la mejicana. Y respondió el indioFrancisco que los de Ulúa los mandaban sacrificar; y como era torpe delengua, decía: «Ulúa, Ulúa», y como nuestro capitán estaba presente y sellamabaJuanyeraporSanJuandejunio,pusimospornombreaaquellaisletaSanJuandeUlúa;yestepuertoesagoramuynombradoyestánhechosenélgrandesmamparosparaqueesténseguroslosnavíosparaamordelNorte,y

  • allí vienen a desembarcar lasmercaderías deCastilla paraMéjico yNuevaEspaña.

    Volvamos a nuestro cuento. Que como estábamos en aquellos arenalesvinieron indios de pueblos comarcanos a trocar su oro de joyas a nuestrosrescates;mas era tan poco lo que traían y de poca valía, que no hacíamoscuenta dello. Y estuvimos siete días de lamanera que he dicho, y con losmuchosmosquitosquehabíanonospodíamosvaler,yviendoqueeltiemposenospasaba enbalde, y teniendoyapor ciertoque a ellas tierras no eranislas, sino tierra firme, y que había grandes pueblos y mucha multitud deindios, y el pan cazabe que traíamos muy mohoso y sucio de fatulas yamargaba,ylossoldadosqueallíveníamosnoéramosbastantesparapoblar,cuanto más que faltaban ya trece soldados que se habían muerto de lasheridas,yestabanotroscuatrodolientes,yviendotodoestopormíyadich