32
Desde el Bío Bío hacia el mundo Doctor Álvarez: Testigo de los cambios en la salud de los angelinos Sara Montoya, feriante: Una vida en La Vega Profesora Flor González: La vida de una maestra en Los Ángeles Luis Caro, vecino: Las pueblerinas postales de Los Ángeles del ‘40 Distribución Gratuita-Los Àngeles, Chile-Año 0 - Nº7- Mayo de 2012 Edición Especial 273 aniversario de Los Ángeles

Bitacora del Bio Bio Nº 7

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Edición especial, aniversario Nº 273 de la ciudad de Los Angeles

Citation preview

Page 1: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Desde el Bío Bío hacia el mundo

Doctor Álvarez: Testigo de los cambios en la

salud de los angelinos

Sara Montoya, feriante: Una vida en La Vega

Profesora Flor González: La vida de una maestra

en Los Ángeles

Luis Caro, vecino: Las pueblerinas postales de Los Ángeles del ‘40

Dist

ribuc

ión

Gra

tuita

-Los

Àng

eles

, Chi

le-A

ño 0

- N

º7- M

ayo

de 2

012

Edición Especial 273 aniversario de Los Ángeles

Page 2: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl2

Índice03 Presentación 04 Estuvimos en06 Publireportaje08 Los Ángeles del recuerdo -Testigo de los cambios de la salud en los angelinos11 -La vida vida de una maestra en Los Ángeles14 -Las pueblerinas postales de Los Ángeles del ‘4018 -La Vida en la Vega20 Sociales22 Bitácora Artística -Que 50 años no es nada24 -Toma de espacios públicos25 -Bajo el cielo nacido tras la lluvia26 Visión Holística 28 Sociales30 Sabores de la zona31 Crianza

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl2

Foto del mes

Una hermosa postal es la que nos presenta cada otoño, la ave-nida Ricardo Vicuña. Sus numerosos árboles, constituyen un espacio de naturaleza en medio de la cada vez más ajetreada ciudad. Esta estación del año nos entrega su perfecta combi-nación de dorados y rojizos, un verdadero regalo en este mes aniversario.

Page 3: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 3

Representante Legal: Ximena Lagos Sánchez Directora General: Pilar Zapata Coloma Edición periodística: Pilar Zapata ColomaDiseño gráfico: Romina Peña ChávezFredy Muñoz Sandoval Fotografías: Fredy Muñoz Sandoval

Área comercial: Ximena Lagos Sánchez Sebastián González CarrascoColaboran en esta edición: Renato Canales, Carola Espinoza, Pedro Torres, Alfonso Lloveras, Mamazzzitas y Carla Burgos.Contacto:Prensa: 95051360 Publicidad: 97931468 /93520894Correo electrónico: [email protected] [email protected] www.bitacoradelbiobio.cl Bitácora del Bío Bío Es una publicación mensual independiente, que nace de un proyecto financiado por el Capital Semilla de Sercotec.Los contenidos de esta publicación pueden ser reproducidos citando la fuente.Las opiniones publicadas en este periódico, son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la opinión de la Bitácora del Bío Bío.Distribución gratuita.

Impreso en Imprenta América045-467601 - 045-467602Temuco

De pobre villa no poblada a próspera capital provincial

Presentación

Fue en marzo de 1739 que el gobernador de Chile, José Manso de Velasco, firmó el acta de origen de Los Ángeles, ordenando con ella su fundación. Por entonces, sólo unos ranchos levantados con empalizadas con barro o adobe y techos de paja, constituían el poco animoso panorama de esta pobre villa. Aunque no hay certeza de ello, se estima que dos meses más tarde –el 26 de mayo de 1739- el sar-gento mayor Pedro de Córdoba, comenzaba el trazado de sus calles. Más de dos siglos y medio han transcurrido desde que la vi-lla tuviera, en promedio, unos 400 habitantes. Durante sus primeros años de existencia, hubo mucha dificultad en po-blarla, básicamente por la presencia de vagabundos y, por otro lado, porque los agricultores se instalaban en los cam-pos. Tanto así, que el censo de 1749 especifica que hay 447 habitantes, pero sólo detalla 37 familias.

273 años han pasado desde que esta villa fuera un lugar tan poco codiciado en el que vivir. Actualmente, Los Ángeles es una ciudad en constante crecimiento, lo que ha permi-tido una mayor actividad comercial y de servicios, sin que se pierda –o no del todo- la sensación de que es una co-munidad en la que todavía existen lazos de cercanía entre sus integrantes. No obstante, también se han generado ele-mentos negativos –propios de las ciudades en crecimien-to- como la actividad contaminante de algunas industrias, la saturación de ciertos espacios, la pérdida de elementos de identidad. Y al igual que cuando cumplimos años, nos quedamos con esa rara mezcla de agradecer por lo que hemos vivido y, sin embargo, sentir la melancolía de un pasado mejor, pero irremediablemente perdido en el tiempo. Esta vez, como Bi-tácora del Bío Bío nos hicimos parte de la celebración de estos 273 años de nuestra ciudad, buscando rescatar algu-nos elementos del pasado. No quisimos hurgar en libros de historia, sino dejar que los propios vecinos de la comuna, recordaran aquellos hechos que más les marcaron.

Es así como incorporamos en estas páginas, los relatos de cuatro personas; destacados adultos mayores que han transcurrido toda una vida ligados a diversos ámbitos del quehacer: salud, educación, sociedad y comercio. A partir de sus conversaciones, reconstruimos aquí parte de la his-toria de Los Ángeles, con la mirada de quienes han sido par-te de ella y han ayudado a construir, una ciudad más amable en la que vivir.

Porque nuestros 273 años de historia nos ayuden a cons-truir una mejor comunidad en la que puedan desarrollarse las generaciones venideras. Feliz Aniversario.

Page 4: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl4

Estuvimos en...

Con la compañía de familiares, amigos y de la comunidad, el poeta angelino José Aravena, presentó su libro “80 vueltas al Sol”, en el cual recopila parte de su obra literaria. Con el título, el autor alude a sus años, equivalentes a “80 vueltas” al astro rey, tras los cuales quiso dejar su obra como un legado a las generaciones venideras. José Aravena forma parte del taller literario del Adulto Mayor de la Municipalidad de Los Ángeles.

Poesía en 80 vueltas

Logia celebra su cincuentenarioSu 50º aniversario celebró la Logia Perfección Nº 113 de Los Ángeles, con una entretenida gala cultural, en la que estuvieron presentes representantes de la masonería y la comunidad. En el evento, realizado en el teatro municipal, se presentaron el prestigioso Ballet Folclórico Municipal de Los Ángeles BAFOLA y el Grupo Instrumental del Colegio Concep-ción de esta ciudad.

“Trasvesti” en Los ÁngelesCon una llamativa puesta en esce-na, la comedia musical “Trasvesti” se presentó en el teatro municipal de nuestra ciudad. A cargo de la Compañía de Teatro Santobordell, el montaje contó la historia de tres travestis en un importante ca-baret. La obra, original de Lizardo Gutiérrez, cuenta con recursos del Fondo de Desarrollo de las Artes y la Cultura FONDART 2011, en su categoría regional.

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl4

Page 5: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 5

Festival por Día Mundial del Síndrome de Down Diversas demostraciones artísticas, entre las que destacaron la danza, el canto y la pintura, se dieron cita en el teatro municipal, en el Primer Festival del Síndrome de Down realizado en Los Ángeles. En el evento, unas cincuentas personas que tienen este síndrome, dieron vida a variados números artísticos. La actividad contó con una masiva asistencia de público.

Fiesta de la ChilenidadCon el objetivo de animar a las comunidades afectadas por los incendios forestales de la época estival y propiciar en ellas la actividad turística, se realizó en San Rosendo la Fiesta de la Chilenidad. Con la participación de autoridades y de la comuni-dad en general, se efectuó este llamativo evento, organizado por el Gobierno Regional, Sernatur Bío Bío y el municipio local.

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 5

Page 6: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl6

Publirreportaje

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl6

TERMINAL RODOVIARIO

Veinte años al servicio deCon servicios interprovinciales hacia todo el país, el Rodoviario presta un importante servicio a la comunidad, al conectarla con variados destinos de norte a sur, permitiendo que los angelinos se trasladen a otras ciudades y

cientos de visitantes lleguen hasta esta capital provincial de Bío Bío.

ciones de avenida Oriente con Sor Vicenta, en el sector norte de esta ciudad. Y es que cientos de viajantes dan vida a este lugar, en el que se em-plaza el Terminal Rodoviario Santa María de Los Ángeles. Único en su tipo –por la variedad de servicios que presta- el Rodoviario cuenta con 17 andenes y 22 oficinas en las que atienden variadas líneas de buses; restaurante, confitería, quiosco de diarios y revistas; locales de artesanía y rotisería, además de otros servicios como custodia y parquímetros.En total, son más de dos hec-

Un movimiento incesante fluye por las inmedia-

táreas de terreno en las que se emplaza este centro, que conecta Los Ángeles con el resto del país, a partir de los

servicios interprovinciales con los que cuenta. Su origen data de 1991, pe-riodo en el cual el municipio local decide sacar el servicio de buses desde el centro de la ciudad, por las molestias que generaba en cuanto a

congestión vehicular y movi-miento de pasajeros. Es allí cuando surge la oportunidad de cambiar de ubicación el terminal de buses, permitien-do descomprimir el centro angelino. Fue en esa instancia que la

Page 7: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 7Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 7

sociedad de responsabilidad limitada Inmobiliaria Andina, compuesta actualmente por Héctor Jara y Jorge Baeza, decide aprovechar esta opor-tunidad y generar un nuevo emprendimiento, establecien-do un moderno servicio de transporte para una ciudad en crecimiento. De esta manera, el Rodoviario se transformó en el princi-pal terminal de buses de la provincia. Con una amplia infraestructura y oferta de servicios, permite que a diario, cientos de personas se trasladen hacia otros puntos del país o, bien, lleguen hasta esta capital provincial. En estos veinte años, ha sido testigo de los cambios de esta ciudad en constante creci-miento. De un movimiento más lento al principio de los ’90, con menor cantidad de viajantes y de líneas de buses, a la actualidad, en la que

miles de personas se trasla-dan de un punto a otro, cada temporada. Por este aumento en la de-manda, es que en la actuali-dad se encuentran trabajando en la ampliación de los esta-cionamientos para vehículos. De esta manera, contará con 14 mil metros2 más, lo que aumentará la capacidad para otros 50 autos. La novedad es que funcionará con barrera electrónica, lo que permitirá controlar de manera más eficiente, siempre con el objetivo de entregar un mejor servicio a la comunidad.

la comunidad angelina

Page 8: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl8

legó hasta esta ciudad antes de comenzar su adolescen-cia. Durante siete años fue un aplicado alumno del Liceo

El doctor Álvarez lleva más de cincuenta años ejerciendo como médico pediatra en la capital provincial de Bío Bío. Para conocer de los cambios en la vida de la

población, de las acciones que lideró para mejorar la salud de los biobenses y de lo que implica vivir en la actualidad en Los Ángeles, conversamos con este desta-

cado profesional.

marinos, las familias chilotas tenían esas opciones. Además, había una Escuela Normal en Ancud, entonces la mayor parte estudiaba allí y eran profesores”, cuenta.

-¿Había tenido oportunidad de conocer Los Ángeles antes de ve-nirse a estudiar?No conocía. Esa ciudad era muy diferente a la actual, era otro mun-do. Era mucho más pequeña, creo que no alcanzaba los 50 mil habi-tantes, había casas muy coloniales, la vida era muy tranquila. No ha-bía el tumulto que hay ahora, la gente se movilizaba a pie, a caballo o en carretilla. Era frecuente ver carretas dentro de la ciudad, tiradas por bueyes. La gente que iba en vehículo era muy poca. Las calles no estaban todas pavimentadas y había mucho polvo en todas partes. MÉDICO CON SENSIBILIDAD SOCIALA comienzos de la década de 1950 se trasladó hasta Santiago a estu-diar medicina en la Universidad de Chile. Pese a que los cupos a nivel nacional sólo eran 60, el joven Rodrigo Álvarez no tuvo dificultades para ingresar, una vez que aprobó el Bachillerato. Su rendimiento académico en el tradicional liceo angelino fue destacado, lo que le permitió concretar su sueño de convertirse en médico a finales de

Lde Hombres de Los Ángeles, en el que permanecía interno durante todo el año escolar, para retornar cada noviembre, hasta su hogar en Castro. El reconocido doctor Rodrigo Iván Álvarez Vera -que ha atendido a generaciones completas de niñas y niños angelinos-, es chilote. Aunque prácticamente toda su vida ha transcurrido en Bío Bío. “Teníamos un tío amigo que era profesor del liceo en esa época y, como tenía internado, me mandaron para acá. Estamos hablando de más de cincuenta años atrás, cuando los medios de transporte y comunicación no eran como los de ahora. Viajar de Los Ángeles a Castro significaba 3 o 4 días. Había que hacer transbordo, ya que no había nada directo en que irse. Había que tomar un barco, que hacía el trayecto por la isla. Así es que viajaba solamente en verano”, rememora. Es hijo de un matrimonio que tuvo tres niños, todos los cuales si-guieron estudios superiores. Su padre tenía una de las tres profesio-nes clásicas de la isla en esos años: era profesor; junto con marinos y sacerdotes, eran los oficios en el Chiloé de 1930. “Chiloé era pequeño y la gente, muy lugareña. Eran pescadores o

Los Ángeles del recuerdo

Por: Pilar Zapata Coloma

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl8

DR. RODRIGO ÁLVAREZ

Testigo de los cambios en la salud de los angelinos

Page 9: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 9

los ’50. Cumplió con su beca de especializa-ción en pediatría en el Hospital San Juan de Dios en Santiago, fue aprobado con distin-ción máxima. Luego debía trasladarse hasta alguna ciudad del país. El Ministerio de Salud le entregó un listado de lugares. Eligió retornar a Los Án-geles. Estaba casado y, en primera instancia, pensaban estar solamente un tiempo en esta ciudad. “Venía por poco tiempo, pero después me fui quedando. Se fue pasando la vida y, al final, me quedé”, sostiene.

-¿Dónde llega a ejercer cuando retorna a Bío Bío? Desde que llegué a Los Ángeles me incor-poré a trabajar en el hospital y a pediatría. Pediatría tiene una connotación social muy grande, por esa razón, siempre me identi-fiqué trabajando por las personas más ne-cesitadas. Y en esa línea he hecho bastante, fui fundador de Conil, trabajé por la desnu-trición infantil, dirigí un programa de salud rural que fue muy exitoso en la provincia. La verdad es que me ha ido muy bien y he tenido muchos reconocimientos nacionales e internacionales. Es que hemos trabajado mucho en el campo de la salud. El primer consultorio, que se hizo en el sector sur de Los Ángeles, fue construido por el Rotary Club de Los Ángeles, siendo yo su presi-dente en 1976. Por otro lado, como jefe de atención primaria, descentralicé este servi-cio. Antes, la atención de consultas se hacía en este mismo edificio, logramos llevarla hasta las poblaciones; lo mismo que hacen los CESFAM ahora, pero con casitas mucho más modestas. Fue un gran paso adelante, porque la gente se atendió en los lugares en que vivía.

- ¿Cómo eran las atenciones en la década del ’60?Han cambiado bastante respecto a la actualidad. Cuando llegué, la ciudad era muy provinciana y ahora es muy dife-rente, con mucho más dinamismo y más gente. También los medios para comuni-carse y transportarse han cambiado. En ese tiempo, llegar a Antuco era una ver-dadera odisea. Ir a cualquier lugar de la provincia no era fácil. Cuando salíamos a hacer atenciones rurales a Quilleco, San-ta Fe, Tucapel o Negrete, demorábamos bastante por el transporte, ya que los caminos eran muy malos. En ese tiempo sólo estaban los hospitales de Mulchén y Los Ángeles, así es que teníamos que ha-cer atenciones rurales a comunas.

- ¿Eso se financiaba con recursos estata-les? Había un grupo de personas voluntarias que los financiábamos. Participó mucho el Rotary Club, el Comité de Damas Rotarias y otras instituciones que se preocupaban de llevar el financiamiento. Además, como a las madres se les daba la leche, ellas las llevaban para que hicieran su alimentación. Se implementaba todo un sistema con per-sonal preparado. Esa fue la primera etapa. Posteriormente, el Servicio de Salud imple-mentó centros para desnutrición en Quille-co y luego, en Yumbel. Más adelante, apa-reció el CONIN en Los Ángeles, del cual fui fundador. Desde entonces, todas las otras estructuras dejaron de funcionar y pasó esa función a CONIN. Eso contribuyó bastante a bajar la desnutrición y hacerla casi desapa-recer, porque ahora ya no existe. CAMBIO RADICAL DE ESCENARIOEl doctor Álvarez se desempeña actualmen-te como jefe del Departamento de Planifica-ción Sanitaria del Servicio de Salud Bío Bío. Dentro de la vasta experiencia que tiene y de los cursos de perfeccionamiento que ha realizado, destaca su Magíster en Salud Pública, con mención en Epidemiología. Ha tenido innumerables reconocimientos a su labor.Además, sigue ejerciendo como pediatra, atendiendo en una consulta en un centro médico privado de esta ciudad. Claro que el escenario es totalmente opuesto a lo que le tocó en sus primeras décadas de profesión: de la desnutrición a la obesidad.

- ¿Hasta qué año la desnutrición fue un tema complejo en Los Ángeles? Yo diría que hasta 1985. De ahí empezó a cambiar la situación y ahora, hay niños muy gordos.

- ¿Cómo se entiende la obesidad, si las ge-neraciones ya están más educadas en tor-no a la alimentación? Es que han cambiado las circunstancias, por-que con el modernismo han aparecido otros vicios y la gente ya no hace ejercicios. Antes, to-dos los niños iban al colegio caminando, ahora todos van en furgón. Se bajan al colegio y no caminan nada. Llegan a sentarse y a la vuelta, lo mismo, pero en su casa. No hay actividad física. Además, comen en exceso y comida de mala calidad nutricional, chatarra. - Lo qué más le toca atender en la actuali-dad ¿tiene que ver con la obesidad o hay también otras patologías?Ahora estamos asistiendo a un incremen-

- ¿Qué tipo de enfermedades eran las más recurrentes? En la etapa infantil, predominaba la desnu-trición, los niños con diarreas e infecciones respiratorias, bronconeumonias, pero –so-bre todo- mucha desnutrición.

- La desnutrición ¿era más frecuente en zo-nas rurales o en las urbanas?No sólo en las rurales, también se presen-taba en las urbanas, especialmente en las poblaciones marginales. Las causas básica-mente pasaban por la despreocupación de las madres, su nivel educacional y la situa-ción económica-social de la familia. A medi-da que las personas tienen más conocimien-to y cultura, adquieren más conocimiento de salud y más preocupación por hacer las cosas bien. A principios de la década de 1970 hice un análisis de la desnutrición infantil en la pro-vincia de Bío Bío y encontré que el 25% de los niños controlados, tenían desnutrición en distinto grado. El dato era importante, porque si la desnutrición era muy severa,

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 9

afectaba no sólo el desarrollo físico, sino también el intelectual. Las personas con ese grado de desnutrición tenían hipotecado su futuro en sentido negativo, desde el punto de vista cultural-intelectual: menor posibi-lidad de rendimiento escolar, universidad, trabajo. Una serie de limitaciones que era como un círculo para su futuro.

- ¿Logró romperse ese círculo?Felizmente, se rompió. Al comienzo, para combatir la desnutrición, implementamos una estrategia que consistía en instalar en las poblaciones “Comedores Abiertos”, que eran lugares en los cuales se les daba a los niños desnutridos su mamadera, su desa-yuno y sus comidas. Eran financiados por la comunidad. Instalamos seis en Los Ángeles. Eso significó un paso adelante en la ciudad, ya que las madres iban a dejar a sus hijos en las mañanas y los recuperaban en las tardes. Eran una especie de guardería, pero sólo para niños desnutridos. Cada comedor aten-día entre 15 y 20 niños, así es que asistíamos a unos 80, a los que se les daba atención todos los días y felizmente, eso contribuyó mucho a que se recuperaran.

En la década del ‘70 en Bío Bío, el 25% de

los niños controlados, tenía algún grado de

desnutrición

“ “

Page 10: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl10

to de las consultas por enfermedades de las vías respiratorias. Esto es algo que todos los años afecta, porque el clima se pone más frío. Lo que ha cambiado es que estamos mejor pre-parados para enfrentarlos: hay más vacunas preventivas; los niños ya no están como antes, porque al estar desnutridos presentaban mucho ries-go. En la actualidad, las habitaciones son mejores, no hay poblaciones tan marginales como antes, ésas ya fue-ron erradicadas de Los Ángeles.

- Y ¿en cuanto a las enfermedades de los adultos? Como las personas están viviendo más años, tienen enfermedades que son propias de las edades mayores: los tu-mores y los cánceres. Antes, la gente se moría de otras cosas, porque éstas son enfermedades que aparecen so-bre los 65 años de vida.

de. Por otra parte, como la medicina ha avanzado tanto, en este momento nos enfrentamos a las malformaciones con-génitas: nacen niños de muy bajo peso, que antes no nacían. Antes nos preocu-paban las enfermedades infecciosas, pero ahora el parto prematuro apare-ce como un problema de salud pública muy importante, en relación con los niños que nacen previos a estar prepa-rados para vivir. Se sacan adelante niños de 800 gramos, pero eso tiene un costo muy alto para el país, porque consume muchísimos recursos desde que nace hasta que queda viable. Y en los adultos, los problemas funda-mentales son las enfermedades cró-nicas: la hipertensión, la diabetes, las discapacidades después de los 50 años. Son personas no activas socialmente, que no pueden trabajar y son una carga para el Estado. Ese tipo de personas ha ido aumentado progresivamente y ¿qué calidad de vida tienen?

Es importante que en los colegios se inculque el autocuidado, para que las nuevas generaciones no esperen que la salud se la entreguen envasada en

el hospital.

“ “

infantil: 50 años atrás, por cada mil niños que nacían, se morían cien; hoy, por cada mil que nacen, se mueren 40 o 50. Se ha cambiado mucho y la gente vive más años. El promedio de vida del chileno es de 78 a 80 años: un poco más para las mujeres y un poco menos para los hombres. Y an-tes, la expectativa era de 40 o 50 años.

- Hemos revisado un poco del pasado y de la actualidad, pero a futuro ¿qué se espera en salud? Mirando a largo plazo, en la parte infantil, el problema del sobrepeso y la obesidad aparece como un desafío bastante gran-

- Antes ¿de qué morían los adultos? Fundamentalmente, por infecciones. Aho-ra vivimos más, pero nos exponemos a mayores riesgos ambientales. Antes, como se vivía hasta los 40 o 50 años, no se al-canzaba a tener otras enfermedades, o el tiempo de exposición era muy poco como para provocar algún daño.

- Entonces ¿es falso que antes la gente era más sana? Eso es un mito. Si compara toda la situa-ción de salud actual, con la que había hace medio siglo atrás, evidentemente que es-tamos mejor. Ahora hay menos mortalidad

- Por último ¿qué recomendaciones entre-ga para quienes habitan en Los Ángeles? Es necesario fomentar los estilos de vida saludable. O sea, la forma cómo las perso-nas desarrollan su vida en el día a día, con alimentación sana y harto ejercicio. Es im-portante que en los colegios se inculque el autocuidado, para que las nuevas genera-ciones no esperen que la salud se la entre-guen envasada en el hospital. En la salud hay una responsabilidad muy grande, per-sonal y familiar, porque el ideal es que las personas vivan más, pero con una buena calidad de vida.

Page 11: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 11

artió su vida laboral en la comuna de Nacimien-to, en una escuela rural que ella misma creó. Sin posibilidades que el Estado se hiciera cargo de

Flor González Fuica es una profesora que se desempeñó duran-te la mayor parte de su vida laboral, en escuelas municipales de

Los Ángeles. Fue reconocida en innumerables ocasiones por sus pares y las instituciones relacionadas con el ámbito educativo. De los cambios en la enseñanza y la vida en las escuelas de los ‘70,

Flor conversó con la Bitácora del Bío Bío

finalmente, en la Blanco Encalada, donde estuvo veinte años como directora. Flor Inés González Fuica tuvo cinco hijos. En la actualidad tie-ne 15 nietos, siete de los cuales ya estudian en la universi-dad. Jubiló el 2005, luego de una larga trayectoria ligada a la educación, trabajando como profesora de enseñanza básica y luego, como directivo. Asimismo, estuvo veinte años ejer-ciendo la docencia en educación superior, en la sede local de la Universidad de Concepción; la misma casa de estudios que la formó como profesional a mediados de 1950.

-¿Cómo era la universidad en los años que estudió?Para empezar, era gratis. No se pagaba. Habíamos pocas mu-jeres, pero en educación era donde había la mayor cantidad. En las otras carreras, eran todos hombres.

- ¿De dónde nace la idea de estudiar pedagogía? Mi madre era profesora básica y yo tenía dos hermanos pro-

La vida de una maestra en Los Ángeles

HISTORIAS DE PIZARRÓN

Pfomentar la educación en “medio de puros cerros”, Flor –re-cién egresada de Pedagogía Básica- conversó con su suegro y él le implementó un espacio donde comenzó a funcionar la Escuela Santa Gertrudis, lugar en el que pudo volcar sus ansias por ejercer su profesión. Había nacido en Concepción, pero llegó a nuestra provincia, gracias a su esposo. Tenía 21 años cuando se casó. Pronto partió hacia el sector rural de Nacimiento, de donde prove-nía su marido. En el lugar, no hubiese tenido posibilidades de trabajar, de no ser por la escuela que pudo fundar. Partió con 48 niños y estuvo feliz ejerciendo durante los diez años que permaneció allí. Posteriormente, hizo los trámites para ha-cerla fiscal y ella se trasladó hasta Los Ángeles. Era principios de la década de 1970. Comenzó en la Escuela Las Vegas, en el sector rural de esta comuna; luego, en la Escuela España y,

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 11

Los Ángeles del recuerdo

Por: Pilar Zapata Coloma

Page 12: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl12

fesores: uno de matemática y la otra, parvularia. Entonces en la casa se ha-blaba siempre de educación, incluso con mi hermana jugábamos a las pro-fesoras. Me gustó siempre y volvería a ser profesora si volviera a nacer, porque encuentro que es una profesión mara-villosa. - Usted llega a Los Ángeles en 1970 ¿cómo recuerda la escuela de esa épo-ca? Con muy pocos materiales: la tiza y el pizarrón era lo único con lo que uno contaba en esos años. Con el paso del tiempo fueron llegando más implemen-tos, pero nunca fueron muchos. Ahora dicen que están fantástico, porque cada niño tiene computador, lo que es una maravilla. Pero antes se trabajaba muy pobremente, incluso los pupitres eran distintos: no eran anatómicos y tenían un hoyito para poner el tintero, porque se usaba tinta en ese tiempo.

- ¿Cómo era el rol de los papás?Costaba que enviaran a sus hijos al cole-gio, porque les sacaban mucho partido laboral, pero finalmente los niños estu-diaban, con mucho esfuerzo.

-¿Se fue notando con el tiempo que los apoderados eran más educados?Sí. Se notaba en las reuniones, porque antiguamente siempre estaban muy callados y aceptaban todo lo que el profesor proponía. Y ahora no, lo que está muy bien, porque tienen claro sus derechos y deberes. Están mucho más empoderados que antes. -¿Y cómo era la actitud de los niños de 1970?Llegaban ansiosos, porque la clase era la gran novedad. En sus casas no había un libro ni una revista y en la escuela una les llevaba. O bien, materiales como cartulina para dibujar. Siempre con los dineros de los centros de padres, por ejemplo, se compraba témpera. Un niño de campo jamás había tenido ac-ceso a ello. Recuerdo que el primer premio que tuve fue en Nacimiento, como profeso-ra rural. Me regalaron cien mil pesos en la municipalidad. Me compré una radio a pila, con tocadiscos. Y me sirvió tanto en la escuela, era una maravilla: llevaba la canción nacional para que la escu-

charan, cuecas y tonadas para bailar y aprender a cantarlas, podíamos hacer revistas de gimnasia. En ese tiempo, costaba muchí-simo enseñar, por el tema de los recursos. Pero creo que, por lo mismo, los niños eran mucho más recep-tivos.

- En esos años ¿el nú-mero de niños versus niñas era similar? Eran más hombres, porque a las familias les daba miedo enviar a las niñitas: cuan-do tenían hermanos, no había problema; cuando eran solas, es-taban más reacios. En ese tiempo, nosotros sa-líamos a matricular a las casas, porque los padres no eran muy adictos a ponerlos al colegio. Los hacían trabajar, nos decían: “Señorita, lo mando, pero des-pués de la vendimia” “Lo mando, des-pués de la cosecha”.

-¿Y el año escolar?Empezaba en abril o en mayo. Ellos aprovechaban a los niños para trabajar.

REPRESIÓN Y VIOLENCIA

-Respecto a los métodos de enseñanza ¿se mantuvieron en el tiempo? ¿Cam-biaron? Ha variado poco. Lo que más ha cam-biado tiene relación con la tecnología, porque los niños aprenden a trabajar con ella, a través de computadores, te-léfonos, pizarras digitales.

-¿Y qué cosas tienden a mantenerse? Quizás lo poco que han cambiado los colegas, es en cuanto a la disciplina. Creo que hay que mantenerla con moti-vación y no con represión, porque la re-presión trae más represión; la violencia, más violencia. Eso está comprobado.

-¿Cómo trabajaba usted con los niños?No sé si tuve suerte (sonríe), pero nun-ca tuve problemas. Recuerdo que partía por motivar a los papás. Siempre, en la primera reunión, los felicitaba por los hijos que tenían: inteligentes y estudio-

sos, pero que -a pesar de eso-, había que exigirles más. Uno se gana a los padres, a la familia, y así se va ganando al niño. El ideal es ganárselo por las buenas. Cuando era directora y me enviaban un niño a la oficina, no lo sancionaba, sino que hacía un trato con ellos, en el que se comprometían a cambiar. Claro, por-que si yo lo anotaba en el libro, el cabro se reía, porque era una anotación más entre las veinte que tenía. Si mandaba a buscar al papá, el papá le daba una tan-da y eso no solucionaba nada. Cuando ya los casos eran muy graves, los cam-biábamos a la Escuela F 900, ya que con la colega Mireya Contreras teníamos ese trato de intercambiar a los niños de es-cuela, cuando los casos eran muy graves. Ese cambio, los removía siempre. Creo que es cuestión de buscar fórmu-las. No están en los libros ni las enseñan, pero el sentido común le va a enseñando a uno. Y eso nos dio muy buen resulta-do.

- No expulsaba entonces…No. Yo les decía a los colegas “no pode-mos echar un niño de la escuela, porque ese niño en el día de mañana, es el que nos va a asaltar, lo convertiremos en un delincuente en potencia”. Jamás eché un

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl12

Page 13: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 13

niño ni rechacé una matrícula, aunque viniera con 20 mil antecedentes malos. Yo era funcionaria del Estado, no de un gobierno determinado, por ello recibí todo lo que llegara, bueno o malo…para eso estamos los profesores, para eso hemos estudiado ¡Cómo vamos a echar a un niño de la escuela! Y los siguen echando…

debemos devolvernos, porque si no, no podríamos entrar a Los Ángeles. Me dice: “Esto es en serio”. Repartimos a todo dar las tortas, sin platos, en las manos de los niños y nos subimos rápido a la camioneta. Pero no pudimos entrar a la ciudad. Tuvimos que dejar el vehículo en el campo y llegar a pie a la casa, en ese

PRUEBAS Y EVALUACIONES

- ¿Recuerda algún hecho en la educación en Los Ángeles que haya sido un hito?Los primeros SIMCE -a finales de la década del ’80-, porque no estábamos acostum-brados a ese tipo de mediciones. Y fue importante saber en qué nivel están las escuelas. Nos servía mucho, porque nos

Llegaban ansiosos, porque la clase era la gran novedad. En sus casas no había un libro ni una

revista y en la escuela una les llevaba.

““tiempo vivíamos en los departamen-tos de la Plaza Pinto. Yo iba preocu-pada pensando en cómo estarían mis hijos, pero una amiga, que era profe-sora también, me los había ido a bus-car al colegio. En todo caso, la gente estuvo tranquila cuando empezamos las clases de nuevo.

-¿Cuánto tiempo estuvieron sin cla-ses?No mucho. Después de la semana del ’18, estábamos en clases de nuevo.

- ¿Y cambió mucho la situación?Cambió. Cambió. Partimos con el himno nacional…y la gente también. Eran tiempos muy convulsionados. Tremendo (se calla). Tuve apodera-dos que no aparecieron más. No vol-vieron. Es increíble cuando uno hace un recuento, todo lo que le ha pasa-do en la vida. Esas cosas marcan.

- Claro, es que también esta la presión por ren-dir bien en las mediciones estan-darizadas, como el SIMCE, y tener alumnos proble-máticos puede in-cidir en resultados negativos… Es que ¿qué gracia tiene lograr resul-tados fabulosos en el SIMCE si selec-cionaste los niños? Ninguna. La gracia está en sacar a los malos adelante. No tiene mérito ser ganadora con niños excelentes. Yo era enemiga que en el curso “A” estuvieran los bue-

nos; en el “B”, los regulares y en el “C”, los malos. Ponía de todo en todas partes. La vida está hecha por todos, en todas partes, no está seleccionada y, por tanto, no podemos hacer eso en la escuela.

DÍA DEL MAESTRO EN 1973

-¿Usted trabajaba en Las Vegas para el golpe militar?Sí. Recuerdo que mi marido nos fue a dejar, a mí y a una colega, y escucha-mos por la radio lo del golpe. Me dice que nos volvamos. Le dije que no, que sería lo mismo que en junio (“El Tanquetazo”); además que era el día del maestro y nosotras llevábamos una torta cada una, porque los niños en el campo, no podían donarlas, así es que celebrábamos con ellos. Cómo íbamos a dejar a los niños esperan-do. Estábamos repartiendo la torta, cuando llega mi viejo y me dice que

proponíamos subir cinco puntos cada año y estábamos obligados a trabajar mejor. Ahora hay premio para las escuelas con excelencia aca-démica. Eso es bue-no, porque los pro-fesores se ponen más la camiseta. Por eso sigo pen-sando que es bue-no que se aplique el SIMCE.

-¿Cómo ve que evolucione la edu-cación a futuro?Creo que con todo esto que han he-cho los chiquillos, las movilizaciones, va haber cambios

positivos. Encuentro regio que reclamen, el problema está en quienes se les meten a hacer leseras en las marchas. Tampoco creo que sea la forma que se tomen los colegios seis meses, pero así como lo planifican aho-ra, con una marcha en el mes, lo encuentro fantástico, porque mantienen la preocupa-ción de las autoridades de que hay que me-jorar. Y de hecho, ya han ido mejorando.

-¿Vio los resultados de la prueba Inicia?Espantosos. Me quedé sorprendida con los resultados. El problema es que ellos serán los futuros formadores del país. Creo que esta prueba debiera ser obligatoria. Y las acreditaciones ser procesos mucho más estrictos. Por otro lado, creo también que debieran subirse los sueldos de los profeso-res y entregar mayores incentivos a quienes tienen mejores resultados, para que real-mente se premie el trabajo de quienes se esfuerzan por enseñar a las futuras genera-ciones.

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 13

Page 14: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl14

LUIS CARO GÓMEZ RECUERDA

Las pueblerinas postales de Los Ángeles del ‘40

Nacido y criado en el sector cordillerano de la comuna de Quilleco, Luis Caro Gómez llegó a vivir a Los Ángeles de los años ‘40. Más de seis décadas han pasado desde entonces, tiempo que no ha mermado su memoria ni ha borrado las antiguas postales de esta ciu-dad. Con una capacidad prodigiosa para recordar, Luis nos cuenta cómo era el pueblo al

que emigró, buscando un mejor futuro para su vida.

Los Ángeles del recuerdo

Por: Pilar Zapata Coloma

Page 15: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 15

n viaje a Los Ángeles podía tardar ocho días. Lo más sacrificado era

hacerse cargo de su madre, Rosa Amelia. Sin más ilusiones, se empleó en el fundo El Avellano. El pueblo estaba al lado, así es que junto con su madre, cambiaron las condiciones de vida. Estuvieron un tiem-po trabajando en la lechería, pero pronto conseguirían una vivienda en calle Rodrí-guez. Se empleó en Cecinas Ferretti. Te-nía 23 años. Era 1950 y comenzaba una nueva vida, que transcurriría ahora en ambientes urbanos, entre carnes y mata-deros. Cinco años más tarde se casó con Elena Vargas, con quien tuvo siete hijos, por los cuales puede disfrutar ahora de 16 nietos y cinco bisnietos. Todos ellos nacieron ya en la ciudad. En el recuerdo de la familia, muy atrás en el tiempo queda el pasado montañés del abuelo Luis, así como también las lejanas postales del pueblo al que llegó a vivir a mediados del siglo pasado.

A VIVIR A LA CIUDAD“Cuando empecé con los Ferretti estaban en Villagrán; después, en calle Colón. Allí empecé a trabajar en todo lo que se hace en una fábrica, como picar las carnes y hacer las cecinas. Como fui bien intrusi-to, ya a los siete meses me pasaron como segundo maestro. Al poco tiempo, tuve

que cambiarme porque se empezaron a morir los dueños. Y se terminó eso ahí. Pero trabajé en varias fábricas más”, relata, precisando que se des-empeñó también en cecinas Fanda y Naranjo, además de otros trabajos que ha tenido en su extensa vida la-boral de más de 70 años.

-¿Cómo recuerda Los Ángeles del principio de la década de 1950?La ciudad era chica. Llegaba hasta calle Ercilla. Había una pandereta en Ercilla con Orompello, hasta el estero Maipo. De ahí para abajo (sur) eran puros fun-dos, animales, chacras, campos. Por el lado oriente, el pueblo llegaba hasta calle Villagrán. Donde hoy se ubica la población Galvarino era un fundo de don Luis Muñoz Pal; todo eso para el norte, donde están las poblaciones Clara de Godoy y Basilio Muñoz. La señora Clara, del finado Cirilo Godoy, regaló esos campos para que hicieran una población; la población Basilio Muñoz surge del terreno que regaló

Ucuando bajaban con un centenar de pavos, criados por su madre, para venderlos en un corral que arrendaban al lado de la estación de ferrocarriles, en calle Caupoli-cán. Luis Caro Gómez tenía 14 años y, acompañado de dos hermanos, recorría a pie los extensos kilóme-tros que separan la hacienda San Lorenzo de esta capital provincial –por entonces, sólo un pueblo- , arreando los pavos, con la única precaución de ir ahuyentando los perros para que, a su vez, no es-pantaran las aves y éstas salieran volando. En esos viajes, no había carreta que facilitara el trayecto, únicamente los pies eran los que permitían acortar las distancias. En un par de días vendían las aves. Para terminar con las últimas, se

La ciudad era chica. Llegaba hasta calle Ercilla. Había una pandereta en Ercilla con

Orompello, hasta el estero Maipo. De ahí para abajo (sur) eran puros

fundos, animales, chacras, campos.

“ “le hacía un precio a la clientela que llegaba comprar los pavos criados en medio de la cordillera de Bío Bío. Con el dinero se compraban víveres y luego, de vuelta, hasta la siguiente bajada del mes. Era otra vida. En plena adolescencia no había estu-dios ni esperanzas de contar con ellos a futuro. Luis era el penúltimo de nue-ve hermanos y su padre, Ismael, había muerto cuando tenía doce años, un poco después del terremoto de 1939, dejándolo a él como dueño de casa, ya que sus hermanos mayores se fueron a trabajar buscando otros destinos. En la hacienda, pronto les pedirían la puebla, lo que los obligó a buscar otras parcelas en las que criar los pocos ani-males que les iban quedando. Fue así como en 1946, llegaron al sector rural de Los Ángeles, específicamente a Pe-dregal. En dos carretas trasladaron to-das sus pertenencias. Ya con sus 18 años cumplidos, Luis buscaba su destino. Así es que partió a presentarse de voluntario al servi-cio militar. Alcanzó a estar cuatro días, cuando lo enviaron de regreso a su casa. Se presentó tres veces y siempre fue lo mismo. ¿El argumento? Debía

don Basilio, para que se poblara. Hasta José Manso de Velasco llegaba el pueblo. Donde hoy está la Contreras Gó-mez, eran puras lecherías, de propiedad de Horacio Contreras Gómez. En avenida Alemania era sólo una hilera de casas, el resto, puro campo, salvo unas posadas...

-¿Recibían visitantes en esas posadas?En realidad, ahí arrendaban para que, cuando uno viniera del campo, guardara sus carretas, sus bueyes y pudiera dormir. Había como cuatro en avenida Alemania, una de ellas era de un señor que se lla-maba Ofracio Seguel, que tenía unos si-tios sin casa y eso se llenaba de carretas y animales.

- En la práctica, la ciudad era entre Ercilla y Villagrán… Sí, esa era la ciudad antes. Y eran unas po-quitas calles de ripio, no había calles pavi-mentadas. Era puro empedrado en Colón y Almagro, pero había muchos hoyos. Vi-llagrán estaba con adoquines, aunque ro-tos. Mendoza y Ercilla eran de tierra.La ciudad, por el norte, llegaba hasta aquí en calle Chorrillos, aunque en ese tiempo teníamos algunas casuchitas de fonolas, y gente que las arrendaba. Era casi puro campo. Yo fui dirigente y conseguí que

Gentileza Juvenal Rivera S

Page 16: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl16

pudiéramos comprar los sitios en Bienes Nacionales. Empezamos los trámites en 1974. En ocho meses teníamos los títulos de dominio en mano, de ahí que hemos vivido tranquilos. Para el sur, el pueblo llegaba hasta Vicuña Mackena. Esta avenida, de punta a punta, tenía más de cien eucaliptos inmensos y gruesos, de hasta doce metros de diá-metro. Todos cayeron para un viento que hubo, una especie de huracán, en 1961. No quedó ninguno en pie. Después se siguió poblando para Pailli-hue, aunque entonces existía sólo hasta la calle Santiago Barrera, con algunas casas. Después era sólo un fundo con lecherías.

- ¿Y qué había en las cuadras que ro-dean la plaza de armas?En la cuadra donde están los edificios públicos, estaba el regimiento. En la cuadra donde está ahora la municipa-lidad, había unas casas viejísimas de madera, que luego las sacaron. En calle Lautaro, estaba el antiguo internado. Y en la cuadra por Valdivia, donde está ahora la catedral y unos bancos, había unas casonas viejas, con latas, que tam-bién las sacaron luego.

ACORTANDO LAS DISTANCIAS -¿Cuánto duraban los viajes a otras ciudades, por ejemplo, a Santiago? Para viajar a Santiago, había que ha-cer un rodeo, porque el puente del Salto del Laja no estaba. Además que los autitos eran vehículos no tan avan-zados. Se viajaba más en tren, pero el que quería viajar en vehículo tenía que dar la vuelta a Canteras, por Huépil. Un auto demoraba dos días en llegar a Santia-go, y era complicado, porque los caminos eran malos, había arenales y hoyos. En realidad, casi todas las personas viajába-mos en tren, además que la estación esta-ba acá mismo.

-¿Y existía locomoción dentro del pue-blo? La primera liebre que corrió en Los Án-geles se llamaba “La Ramona” y era una micro azul, vieja, toda parchada con esto-peroles. Corría en lo que actualmente es el recorrido Iansa-Avellano. Alcanzaba a hacer dos o tres vueltas en el día. Después trajeron ocho micros desde Santiago, que eran bien chicas. Sus propietarios eran los González, que tenían unas tiendas en

el centro. Dejaban una humareda cuan-do circulaban…las habían dado de baja en Santiago y las trajeron para acá. Cla-ro que no se llenaban mucho, porque la gente acostumbraba a andar en bicicleta y a pie, además las distancias no eran tan largas dentro del pueblo.

VIDA EN SOCIEDAD - En esos años ¿existían locales para ir a bailar?Estaba “El Pollito”. Hubo un tiempo, antes de 1950, en que yo trabajaba en la cons-trucción de la azucarera IANSA durante el

día; mientras que en la noche era garzón en “El Pollito”. Funcionaba desde el sába-do a las 22:00 hasta el domingo en la tar-de. Allí iban a bailar las niñas. Su dueño era Juan Jiménez y estaba ubicado en Al-magro con Colo Colo, donde actualmente hay un hotel. Era una casa de dos pisos y tenía pistas abajo y arriba; atendía unas 100 a 200 personas cada la noche. Iba de todo: matrimonios y grupos de niñas. Te-nía 200 mesas y se llenaba.

- ¿Qué se bailaba en ese tiempo?Lo que se bailaba era el cha cha chá, el rock and roll, corridos y cuecas. Toda la música se tocaba en tocadiscos. Además, se vendían bebidas y para comer, galletas y algunos dulces. No se pagaba entrada,

sólo el consumo. Pero con los años se ce-rró, debido a que se generaban muchos desórdenes. En los años de la construc-ción de la central El Abanico, bajaba la gente recién pagada, y a veces se arma-ban peleas.

- Por otro lado, ¿dónde se compraba la ropa? ¿En qué tiendas? En la “Tienda Novalles”, de don Alberto Novalles. Quedaba en Almagro donde cruza el río; por el otro lado, estaba “La Sevillana”. Eran las dos tiendas grandes en las que había ropa para todas las eda-

des. Y para comprar comestibles, en ese tiempo, el azúcar se daba racionada, había que recorrer todo el pueblo para ver dónde se estaba entregando azúcar. Había un negocio un poco más al sur del hospital, que se llamaba “Luna” de propiedad de don Eliodo-ro Luna; allá entregaban azúcar con tarjeta. Esto fue por una escasez que hubo entre el ’39 y el ’42, antes que nos viniéramos a vivir acá. Fue tanta la escasez que las señoras tomaban el mate con pastillas. Con la tarjeta, nos daban un kilo por persona, para todo el mes.

- ¿Sólo racionaban el azúcar? Sí, sólo el azúcar, pero lo demás era escaso también. Los almacenes no vendían, había que venir a una fábri-ca de fideos acá en Colón, al frente de la iglesia de los Cotolengos. Se com-praban los fideos sueltos, por kilos.

LA PLAZUELA- Aparte de los almacenes ¿existían

lugares dónde comer?Había muy poco, casi nada de restauran-tes, ni comida rápida ni nada. Se vendía comida en La Plazuela, por Tucapel entre Almagro y Villagrán. La llamaban La Pla-zuela o La Recova. Vendían comida en la calle, con mesitas sobre el empedrado. Hacían comida ahí mismo en los puestos y la vendían. No había lugares como para comer en restaurantes o algo más esta-blecido, se comía ahí en la calle.

- ¿Quiénes iban a comer allí?La gente de los campos, porque venían temprano en sus carretas a vender ver-duras a La Plazuela. Como llegaban cuan-do estaba aclarando la mañana, comían allí. Se ganaban con sus carretas, estaban

Page 17: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 17

todo el medio día, almorzaban, compra-ban sus cosas y regresaban al campo. Eso era la vega, donde estaba la Cooperativa Lechera Bío Bío y el Molino Vildósola. A principios de la década de 1950. Se co-cinaba con carbón en braseros; estaban instalados estos puestos.

- O sea que la única opción para comer era La Plazuela… También había un local, “El Lucerna”, que era una especie de restaurante de tragos y comidas, ubicado en Almagro esquina con Tucapel, antes de comenzar

con La Plazuela propiamente tal. Además del mercado, que estaba en Rengo con Almagro, esquinado con “La Covadonga”. Y allí también había algunas cocinerías. Luego empezó a arreglarse más este sec-tor.

- Y ¿qué tipo de comida era el más co-mún?Lo más común era la cazuela.

- En ese tiempo entonces ¿La Vega no estaba instalada como un centro esta-blecido?

No, no estaba así como ahora. Donde está La Vega y el mercado actualmente, estaba la Cooperativa Lechera Bío Bío. La fábrica estaba en un hoyo, en invierno crecía el río Quilque y se inundaba todo, hasta Lientur. La gente que vivía allí tenía que salir colgada por los alambres, por-que se les llenaba las casas de agua, to-dos los inviernos. Y seguían viviendo allí, porque había una parte que era munici-pal, entonces no pagaban. Era un campo con hartas casuchas, en que la gente no pagaba arriendo y por eso soportaban los metros de agua cada invierno.

Gentileza Juvenal Rivera S Gentileza Juvenal Rivera S

Talleres Vivenciales en JunioTaller Ejercicios Pleyadianos de luz: Sábado 16 y Domingo 17 de Junio- 15:30 a 18:30 hrs.

Taller Activación Glándula Pineal y Timo: Sábado 23 y Domingo 24 de Junio- 15:30 a 19:30 hrs.

Taller Reiki Nivel II, Tibetano y Metafísico, Sistema Shiki Ryoho: Sábado 30 de Junio y Domingo 1º de Julio- 15:30 a 19:30 hrs.

FaroLuzCrecimiento PersonalTerapias Complementarias

Consultas a Carola Espinoza J. Reiki Máster, Psicotarotista, Coach Ontológico.

Celular: 92422781

Page 18: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl18

legó a trabajar como feriante en la dé-cada del ‘60. El comercio de La Vega se instalaba entre las calles Villagrán

SARA MONTOYA, FERIANTE

Una vida en La VegaUno de los lugares tradicionales de Los Ángeles, es la popular Vega Techada.

La llegada de las grandes tiendas y centros comerciales no ha mermado

el movimiento que históricamente ha tenido este lugar.

Venta de variados productos y la constante llegada de personas de otras

comunas y sectores rurales, mantienen este céntrico polo

en que se mezclan identidad y comercio. Aquí, parte de su historia,

a partir del relato de Sara Montoya, una vendedora que ha trabajado toda su

vida en este lugar.

Ly Almagro, sin que estuviera tan claramente delimitado su territorio. Sara Montoya decidió dedicarse a vender ver-duras, en un período en que las opciones laborales para una mujer –sin estudios y del sector rural- no eran mu-chas. “Mi mamá tenía alguna idea de hacer negocios. En el cam-po tenía algunas cositas y las vendía. De ahí que nacimos nosotros con la idea de trabajar en esto”, recuerda. Sara es oriunda del sector de Pedregal. Allí vivían sus pa-dres y se mantuvo hasta su adolescencia, cuando decidió que los estudios no eran lo suyo. “Estudiábamos en el campo en ese tiempo. Yo iba al cole-gio y después, como era de la cabeza dura y no entendía nada, decidí dejarlo. Además que el profesor nos pegaba, porque antes nos castigaban. No sabíamos las tablas y nos pegaba con una varilla en las manos. Yo le decía al pro-fesor que él no era mi papá, que no tenía que pegarme;

después le dije que si me seguía pegando no iba a ir más al colegio. Mis papás me decían que fuera al colegio, pero me negué, decidí que iba a trabajar en el campo y que iba a ayudarles”, relata.Así fue como Sara decidió desertar de la escuela. Tenía unos doce años. Con el tiempo, se vino a Los Ángeles. Las opciones no eran muchas, trabajó como nana y luego se decidió por la actividad comercial. “Nos vinimos solos con un hermano. Él salió del colegio y le dije que porqué no trabajábamos. Así es que nos vini-mos cuando La Vega estaba al frente de Santa Isabel, mu-chos años atrás, por calle Villagrán, más cerca de Rengo. Me acuerdo que allí había una cervecería. Era 1972 cuan-do compré mi local, los tiempos de la Unidad Popular”, explica.

EL PASAR DE LOS AÑOSPronto su hermano partiría y ella quedaría sola, a cargo del puesto de verduras. En este primer tiempo vendía va-riados productos. Durante un tiempo debía levantarse de

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl18

Los Ángeles del recuerdo

Por: Pilar Zapata Coloma

Page 19: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 19

madrugada para partir a trabajar. Se esforzaba por ayudar a sus padres. “Cuando estaba mi mamita, un tiempo trabajé la fruta y la verdura también, pero después se acabaron mis papás y decidí no machacarme más, porque tenía que llegar aquí a las dos de la mañana para trabajar en esas cosas, decidí quedarme con lo que Dios me diera”, señala.Sin embargo, recuerda que eran bue-nos tiempos, en el sentido que la gen-te compraba bastante. Lo negativo eran las condiciones en que se encon-traban: sin pavimento ni techumbre, por lo que trabajaban en medio del barro que se generaba en los lluvio-sos inviernos angelinos. Pronto ven-drían los cambios de ubicación. Era la primera mitad de la década de 1980. “Nos cambiaron a una vega pelada por aquí, llena de barro. Después se-guimos debajo de una carpa, allí tra-bajábamos 4 personas a toda el agua: mi vecino del frente, otro joven que se fue para el campo y una señora que se fue a su casa. Pasábamos el día bajo la carpa, pero en la noche había que llevarse todas las cosas para la casa”, narra. En esa época, prácticamente no exis-tían poblaciones en los alrededores de La Vega. Sólo unas cuantas casas

en un lugar sin pavimento, cercano a calle Lientur. De a poco, los feriantes comenzaron a asentarse más “para afuera”, ya que en las inmediaciones de calle Rengo y Tucapel se insta-laron el mercado y otros locales co-merciales. Los vendedores de La Vega emigraron un poco más al norte, por avenida Costanera, lugar en el que “vendían más”, precisa Sara. “Lo que se ha mantenido, pese al tiempo, es que siempre ha venido a La Vega, gente de todas partes, todo el tiempo ha sido así. Yo antiguamen-te entregaba el apio pelado, la achi-coria, a los pueblos más chicos, pero en el tiempo de las enfermedades de las verduras, ya no las trabajé más”, dice.

50 AÑOS DESPUÉSCinco décadas han pasado desde que Sara decidiera convertirse en ferian-te. Su rutina actual parte pasadas las 07:30, hora en que llega a su local, el número 85. Allí, acompañada de un pequeño brasero y en medio de un centenar de cebollas y ajíes, transcu-rren sus días. El verdor y la variedad de las verduras de antaño dan paso a la gama de tonos rojizos en que está inmersa en la actualidad, en medio de ristras y botellas con salsas picantes.

Cada temporada vende más de mil ki-los de ajíes. Si en invierno se dedica a ellos y a las cebollas; en verano, a los melones. Su vida entera la ha pasado en La Vega. Y aquí fue también donde crió a Julio, un niño que desde pequeño vi-vió con ella. Ahora estudia en la uni-versidad, en Concepción, y es el or-gullo de Sara. Antes de que pudiera ir al jardín, ella lo llevaba temprano al puesto y lo dejaba sentado, abrigado con una frazada, mientras vendía sus productos. Se crió allí. Luego vino el tiempo de la escuela y el liceo; siem-pre fue buen alumno y responsable con ella. Mientras su madre biológica trabajaba en Santiago, Sara se trans-formaba en la madre que lo criaba y que se hacía cargo de su diario vivir.“Ahora está estudiando y él sabe que me va a pagar cuando termine de es-tudiar, antes que yo me muera. Pre-tendo ayudar a mi chiquillo dos o tres años más, y cuando le falte poquito para salir, arrendar este local. Aunque depende de cómo me sienta eso sí, porque si me hallo bien seguiré tra-bajando. Quedarse en la casa es más triste, qué voy a hacer sola, y el hijo por allá…”, dice lentamente, sobán-dose sus rodillas, presa de la artrosis, que la aqueja ahora a sus 68 años.

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 19

Gentileza Juvenal Rivera S

Page 20: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl20

Sociales

En este nuevo aniversario, saludamos a los habitantes de la comuna de Los Ángeles y

esperamos que estos 273 años de historia, nos ayuden a construir un mejor lugar en el que vivir y en el que puedan desarrollarse integralmente, las

generaciones venideras

Búscanos B i tacora de l B í o B í o

Guillermo Quijada y Eduardo Reveco, hacen extensivos sus

deseos de éxito y prosperidad a todos los habitantes de la creciente comuna, capital provincial del Bío Bío.

Los Ángeles Televisión (señal 2 de VTR Cable).

Estamos cambiando para ti.

Los Ángeles Televisión, saluda a

Los Ángeles en su 273 aniversario

AlmAgro 911 2do piso - Fono 43-231453 mAil : [email protected] / www.lAtv.cl

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl20

Page 21: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 21

Sociales

Intenso trabajo con la gente logra inédita inversión en proyectos con aporte de la comunidad

Cincuenta y cinco proyectos de índole comunitario – por casi 90 millones de pesos– se han aprobado en nuestra comuna, como parte del trabajo desa-rrollado por la Municipalidad de Los Ángeles en coordina-ción con las juntas de vecinos de la comuna. Se trata de una cifra inédita en cuando a canti-dad de proyectos y en relación al monto de inversión.El alcalde Eduardo Borgoño, expresó su satisfacción por el trabajo desarrollado durante este 2012 a través del Progra-ma de Proyectos con Aporte de la Comunidad, denominado “80 – 20”, el que - dijo - es un beneficio directo para las co-munidades, quienes no sólo deciden que proyecto ejecu-tar, sino que también aportan un veinte por ciento de los re-cursos involucrados.“Esta es una excelente noticia, por eso hemos querido infor-

marla oficialmente en el mes de aniversario de Los Ánge-les”, precisó el edil agregando que durante esta gestión mu-nicipal “nos hemos empeñado en fortalecer el trabajo con la comunidad, haciéndola más partícipe de los proyectos”, dijo.La mayor cantidad de proyec-tos aprobados consideran la instalación de nuevas lumi-narias y de alarmas comuni-

tarias, no obstante, también se ejecutarán iniciativas para la instalación de garitas pea-tonales, juegos infantiles, cierres perimetrales de sedes sociales, construcción de in-fraestructura comunitaria, en-tre otras iniciativas.A través de esta línea de fi-nanciamiento municipal se han aprobado recursos para ejecutar durante los próximos meses, los proyectos de ins-

talación de alarmas comuni-tarias en las villas Montecea, Balmaceda, Parque Lauquén, Jardines de Luxemburgo y Los Profesores; en las junta de vecinos Ignacio Verdugo Cavada, Luis Orione y en el segundo sector de la pobla-ción Orompello.De la misma manera, ya es-tán aprobados los proyectos de ampliación del alumbra-do público e instalación de nuevas luminarias para be-neficio de las comunidades de Llano Blanco, Paso de Piedra, Santa Matilde, Mor-tandad, Las Trancas, Millan-tú, Villa Olímpica, Alto San Miguel, Chacayal Sur, Los Crisoles, San Antonio – Las Quintas, El Ciruelo Sur, Los Robles- Pata de Gallina, Las Encinas, Los Cristales, Las Quilas, La Capilla – Cerro Colorado, San Miguel y Mi-ramar.

Terminal Rodoviario Santa María de Los Ángeles, representado por Jorge Baeza V. y Héctor Jara S., saludan con especial atención al Sr. Eduardo Borgoño Bustos, Alcalde de la Ilustre Municipa-lidad de Los Ángeles y a través de su intermedio a toda la comunidad angelina, con motivo de celebrarse el 273º Aniversario de esta capital provincial.

Baeza y Jara, hacen propicia la ocasión para agradecer la importante obra de pavimentación del costado poniente del Terminal, lo que contribuirá a descongestionar Avda. Oriente y hermosear nuestro entorno, entregando una mejor calidad de vida a los vecinos del sector.

Los Ángeles, mayo 26 de 2012.

Avda. Sor Vicenta 2051Fonos: 363035 - 363066 - 363036

Mail: [email protected]

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 21

Solicitada

Page 22: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl22

Bitácora Artística

etrotraerme al año 62, la friolera de 50 años y posarme en la que en ese tiem-po era la Escuela Hogar Nº 8 del sector El Avellano, en Los Ángeles, es mi misión hoy. Tarea grata y que, seguramente, si este pedazo de memoria es hurgado por alguno de mis coetáneos, podré quizá ser reconocido y hacer el ejercicio de recordar en grupo lo que en solitario cuesta recom-poner.Tuve la fortuna, rara condición de arrogar-me el derecho de guardar la infancia en un internado, de pertenecer a la comunidad escolar de este establecimiento y compro-bar que mi condición de resilente se fue forjando allí con la conducción de mi pro-fesor artista, Don Aliro Rojas Aravena. En forma desordenada, van pasando frente a mí, imágenes de profesores, inspectores, personal de cocina y compañeros que se han alojado en esta memoria que se re-siste a olvidar. Una época en que la figura de Don Jorge Manríquez como director, exudaba autoridad bien reconocida y res-petada, Jorge su hijo fue compañero mío y destacaba por su vestuario y peinado que contrastaba con nuestra zurcida vestimen-ta.Recuerdo a Mardones, un as en las mate-máticas, no terminaba de explicar el pro-fesor el problema, cuando este Pitágoras ya sabía el resultado. Rubilar, era grande, mayor que los demás, un Garrón del libro Corazón. Se suman apellidos a la evoca-ción (los nombres se desdibujan) como Leal, Mónica Rojas, Carmona, Vidal, Cam-pos, Cabeza de Toro, Reveco, Rodríguez, Acuña, Cifuentes, cómo quisiera acordar-me de otros. De seguro más de alguien me corregirá y dejará en evidencia esta me-moria desvencijada.El pozo, construcción subterránea, cuyo contenido de misteriosa fuente alimen-taba mis sueños infantiles y prodigaba su producto ante nuestros esfuerzos que enrollaban la distancia hasta conseguir

Que 50 años no es nada, para una evocación con cariño

Por: Alfonso Lloveras Cuevas

traer de vuelta el balde colmado de fresca agua para el cocinero Melo. Los sembrados, con el técnico González, quien con tranco largo, a pesar de su estatura, nos hacía co-nocer y practicar faenas agrícolas que nos volvían remolones y carentes de afecto. Allí conocí la curiosidad de las plantas de maní que nos enseñaba. El Inspector Muñoz y su tremenda estatura y su bondad y prepa-rándose para sus clases de Topografía en la Universidad de Concepción, donde termi-nó siendo un destacado docente. También estaba a cargo nuestro el inspector Lagos, que después lo vi en el Liceo Comercial. Los profesores, Colomer y su hermosa moto, el profesor Vergara y mi curiosidad por una pequeña cicatriz que conservaba en su na-riz. Recuerdos de detalles que no alcanzan para la construcción de una hilvanada his-toria que merezcan mi consagración de cro-nista.Dentro de situaciones especiales que mi época de escolar como alumno interno de esta escuela recuerda, están aquellas que nos sacaban de la rutina y de aquella repe-tida escenografía, para encaramados en las liebres Avellano- Iansa, visitáramos lugares que eran toda una aventura y aires de liber-tad muy apreciados. La fábrica Osiris y sus tarros que ordenada y lentamente descen-dían a través de una huincha transportadora para recibir el contenido vegetal y sellarlos y etiquetarlos. Cada tarro en una cocina o mesa esperando ser postre, con la etiqueta hasta hoy vigente de esta empresa que mis años infantiles visitara, son reminiscencia de mi condición de estudiante imberbe. Así ocurrió también con la exposición de la SO-CABIO que estaba cerca del centro de Los Ángeles, creo no equivocarme, sorprendido con la robustez de sus animales que pre-miaban con cintas tricolores.La infausta noticia del asesinato del presi-dente Kennedy en Dallas, Estados Unidos, que recibiéramos cuando visitábamos el 23 de noviembre el Estadio Fiscal de Los Ánge-

R

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl22

Page 23: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 23

les, justo cuando pisábamos su verde cancha. Los cam-peonatos escolares de básquetbol que por alguna razón, que el tiempo ha borrado, me tenía como miembro de la selección y jugando en algún gimnasio municipal. Aquel coro que visitó nuestra escuela y que participaba en un importante encuentro y aquellos ensayos donde nos con-vertimos en avezados integrantes de un coro, al estilo de los niños cantores de Viena. Tengo fresca las melodías que ensayaban con nosotros y que, con el pasar del tiem-po las recreaba con mis alumnos. El internado y sus camas y mis dolores de piernas, por el crecimiento me señalaban unos, por el frío afirmaban otros. Mis limitaciones en cuanto a orientación, confun-dido con los puntos cardinales, me llevaban dependien-do por el lugar en que llegase por calle Rengo donde mi apoderada, Consuelo Castillo, de Rocío Regalo (hoy, no ayer) su casa estaba un día por el lado sur, en otro por el lado norte.No puedo, nobleza obliga, no reponer mi admiración por

Don Aliro Rojas Aravena, que inculcó en mí, la posibilidad cierta de convertirme en profesor, lo que me llevó el año ‘64 a ingresar a la hoy desaparecida, pero jamás olvidada Escuela Normal de Victoria. Fue allí donde un niño empe-zó a soñar y a creer que es posible revertir sus limitacio-nes, a generarse estrategias dignas de un equipo multi-profesional (que no existía) para aprender y dar zancadas para recuperar el tiempo de oscurantismo intelectual en que la condición socio-cultural lo tenía sumido.Me ha hecho bien recordar y sentir, la grata satisfacción, de saberme en los inicios escolares, un alumno con limi-taciones que supo a partir del ejemplo y la sabia lección de un maestro, que sin aspavientos sembró en mí, expec-tativas que, a través del tiempo, se han convertido en las herramientas de desarrollo personal y profesional que me hacen evocar, después de cinco décadas a la querida Es-cuela Hogar Nº 8 de Los Ángeles, la misma que hoy luce un hermoso edificio y que se denomina Escuela Hogar Nieves Vásquez Palacios.

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 23

Page 24: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl24

“5:30 de la mañana,cae fuerte la lluvia en Los Angeles, el viento eleva el vestido de una mujer que afirma su espalda contra el mural de Escribano,mientras un hombre le besa los pezones pasa un ciclista y canta ¡’O sole mio!la pareja sonríe, gime el amanecer.”

Bitácora Artística

Toma deespAcios públicos

Por: Carla Burgos Escobar

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl24

-

,

,

n

Page 25: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 25

José Pacheco debe ir en la docena de libros publica-dos; libros de poesía que, emulando el viejo recurso de Benedetti, siempre tienen algo del anterior.Pacheco tiene algo de poeta popular, de poeta maldi-to, de lárico, reforzado con una tozudez que espanta. Sus poemas han sido definitivamente mal recibidos y mal leídos por la ciudadanía, y el poeta…como si llo-viera. De vez en cuando ha obtenido algún galardón en algún concurso literario de poca monta, de vez en cuando ha ocupado alguna tribuna en las escasas muestras de poesía local y los paseantes contemplan curiosos, “¡bah!, ¿esto es poesía?”; alguna vez un es-cucha de buenas maneras ha celebrado alguno de sus versos con una sonrisa comprensiva y ha reparado en el ingenio de este: “cada vez que viajo / no soy yo el que regreso”. Pero lo demás ha sido decepcionante. El poeta recorriendo estas vastedades buscando me-cenas que financien la edición de sus libros; autoedi-tando ejemplares horrorosos en imprentas baratas; el poeta rondando los oscuros círculos del poder para recoger alguna migaja; el poeta mendigando prólogos de escritorcillos pretenciosos; el poeta entrando ceñu-do a las cantinas de calle Galvarino hacia el poniente; don José entrando sigiloso a alguna emisora local para leer sus poemas ; el “transeúnte del tiempo” ofrecien-do sus libros y talleres literarios en liceos de la comuna para estudiantes que luego harán caricaturas de sus trajes gastados; el poeta saliendo zigzagueante de al-guna cantina lúgubre; Pacheco enviando sus poemas a todos los concursos literarios que el poder de turno se le ocurre inventar. En fin, Pacheco, ninguneado; evadi-do y pauperizado culturalmente. En fin, José Pacheco –don José para los que respetan su boina nerudiana, su cuello encorbatado y su maletín de profesor básico- convencido hasta la médula de sus misión de poeta.En fin, la autenticidad de Pacheco. El empecinamien-to. El hombre de carne y dolores, el obrero que ha gas-tado su exiguo jornal para leerse en letritas de molde, le ha dado un golpe duro a nuestra manera soberbia, prejuiciada y maqueteada de concebir la poesía y a los

José Pacheco, el verdadero poema

Por: Renato Canales L.

que la escriben. Porque don José ha dejado las ins-talaciones eléctricas para componer versos; y no ha claudicado. Y es tal vez esto lo que nos molesta, lo que nos mueve a la burla. Nos estorba su figura andarie-ga, empecinada en escribir, tarea que seguramente reservamos para otros.Acostumbrados al constreñimiento público, a la fo-medad, a lo invariable, al estereotipo, nos provoca un poco de vergüenza el personaje. Quisiéramos que desistiera, que no pasara por loco, que vistiera su ove-rol y muy temprano viniera en una bicicleta a hacer las instalaciones eléctricas que faltan en el mall; que esperara hasta fin de mes para recibir su paga y que más tarde se fuera a casa a ver televisión. Pero Pacheco no transa. En este rato debe ir camino a su casa portando el borrador de su nuevo libro, so-ñando que mañana el gerente de alguno de los su-permercados se interesará en el proyecto y lo hará imprimir en una edición de lujo.Y es ésta tal vez las más auténtica misión poética de Pacheco, su poema mejor logrado, su texto para la antología más real y necesaria de este país: ir y venir por las calles con un nuevo libro bajo el brazo; entrar a los bares de mala muerte a leerle sus poemas a los otros obreros, cesantes, que como siempre tuvieron un mal día; envejecer en alguna sala de espera de la oficina del gerente de esta empresa maderera tan co-nocida a ver si le compromete la adquisición de unos cuantos ejemplares del libro que está escribiendo; es-perar desde temprano la imposible audiencia con el alcalde, el gobernador o las autoridades de turno para que le asignen algún presupuesto para lanzar del libro del que ya les habló en una carta. Esa es la vocación de José Pacheco, recordarnos, por su intermedio, que existimos, a contrapelo del maquillaje, de la tersura de nuestras buenas maneras.Ese debe ser el mejor poema que ha escrito José Pa-checo. Ahora falta que aprendamos a leerlo y tal vez a decla-marlo en alguna de nuestras plazas interiores.

bAjo el cielo nAcido trAs lA lluviA

Este texto fue originalmente publicado en la Revista “COMOdato” (N° 1, mayo de 2003). COMOdato fue una publicación periódica del Centro Cultural Víctor Jara, de Los Ángeles, destinada a la divulga-ción cultural, literaria y a la promoción y defensa de los Derechos

Humanos, que alcanzó seis ediciones durante el año 2003.

Bitácora Artística

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 25

Page 26: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl26

Visión Holística

Anteriormente hablamos de cómo todo el proceso de evo-lución universal incidía en nuestra galaxia, sistema solar y planeta, logrando producir cambios radicales en nuestro ser; cuerpo físico, mental, emocional y electromagnético.Es imposible hablar del “angelino” como un ser desco-nectado del resto del mundo, pues en la Unidad, estamos en conexión con todo y todos, a través de la energía. Y así como la que recibe nuestra Madre Tierra, Gaia, Pacha Mama, o como le llamemos, desde el cosmos (las llamara-das solares, bandas fotónicas, etc,) afectando sus ritmos, también nuestro propio Ser, cada sistema, órgano, parte del, célula, átomo, va cambiando. Y cambiar no es fácil. Pero de acuerdo a la teoría llamada “del mono 100”, si cambiamos juntos, será más rápido, llevadero y conciente, entre más seamos. Hemos hablado del sistema de chakras, encargado de digerir la energía recibida de la Fuente, Cosmos, Vida o Dios, como sea tu gusto llamar. En lo principal son 7 y se ubican en los lugares donde tenemos las glándulas más importantes. Ellas regulan nuestros procesos vitales, de ahí lo fundamental de mantener estos chakras depurados y operativos.

Ellos son:Primer Chakra o Raíz: ubicado en el coxis, color rojo. Co-nexión con la Madre Tierra. Segundo Chakra o de la Vida: ubicado a la altura del útero o testículos, color anaranjado.Tercer Chakra o de la Conciencia: ubicado en el plexo solar o boca del estómago, color amarilloCuarto Chakra o del Corazón: centro del pecho, color verdeQuinto Chakra o Laríngeo: a la altura de la garganta, color azulSexto Chakra o de la Percepción: entrecejo, color índigoSéptimo Chakra o Coronilla: sobre la cabeza, color blanco-violeta. Conexión con el Padre Divino.

Nuestra Madre Tierra también posee sus propios chakras, como los océanos, montañas, flores, los polos y gran-des lagos. También las campanas constituyen pequeños chakras. Desde hace varios años la energía Kundalini o de Vida, que fluye desde el primer al séptimo chakra ascen-dentemente en todo Ser, se ha movido desde la “columna vertebral” de Gaia ubicada por siglos en las montañas Hi-malaya a nuestra Cordillera de los Andes. Al activar este despertar, comprendemos los movimientos, sociales,

económicos, telúricos, de agua y de información desde el sur del planeta, incluyéndonos, cuando se activa el primer chakra, raíz de Gaia a los pies de nuestro país. Así al ir as-cendiendo veremos zonas cada vez más al norte, ir cam-biando. Sin embargo, como Madre, también Gaia nos puede ayu-dar con este cambio, conteniéndonos. En el ejercicio de Cimentación nos unimos a ella, recargamos energía y libe-ramos las que hemos alojado en forma negativa en nues-tro ser, en cualquiera de las 7 formas de pautas kármicas primarias de energía baja que hemos venido a aprender a extinguir como raza, pues generan odio, dolor y sentido de separación y son: arrogancia, prejuicio, adicción, odio, violencia, tortura y vergüenza.

Es importante comprender que si bien como angelinos podemos identificarnos con una zona geográfica, también podemos identificarnos con un Rayo Cósmico o del Espíritu Santo actuando a través nuestro (misión). Como en nues-tro pecho se ancla la Llama Trina que contiene los rayos Dorado, Rosa y Azul, podemos conectar con ellos desde este chakra, como verás en el ejercicio de activación.Los Rayos se pueden invocar, en nuestra condición de hijos del Padre y por el hecho de ser “antenas” receptoras, a través de nuestro campo electromagnético. También eso explica porqué necesitamos protegernos de energías am-bientales nocivas (aparatos eléctricos, cableados, antenas emisoras, personas en estados alterados, lugares recarga-dos de gente o de situaciones negativas). Puedes invocar los rayos de acuerdo a tu necesidad y/o cerrar tu Círculo Electrónico para protegerte, como verás en el ejercicio. Nuestra Madre tierra también los recibe, como ves en las imágenes, y en nuestra percepción humana, al ser electri-cidad les hemos nombrado en varias formas, tales como auroras boreales.

Los Rayos son:Primer rayo, Azul-Cristal: Fuerza, Voluntad, Protección, Armonía. Arcángel Miguel. Domingo.Segundo Rayo, Dorado: Sabiduría, Iluminación, Paz, abun-dancia. Arcángel Jofiel. Lunes.Tercer Rayo, Rosa: Amor Puro Divino, Adoración, Cohesión. Arcángel Chamuel. Martes.Cuarto Rayo, Blanco: Pureza, Resurrección, Ascensión, Alegría, Música. Arcángel Gabriel.

Fortaleciendo nuestra identidad angelina desde el espíritu

Por: Carola EspinozaPsictarot Evolutivo, Master Reiki

Centro Holístico El Faro

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl26

Page 27: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 27

Visión Holística

Quinto Rayo, Verde: Verdad, Curación, Consagración, Con-centración. Arcángel Rafael.Sexto Rayo, Oro-Rubí (anaranjado):Paz, Curación, Gracia y Ministración. Arcángel Uriel.Séptimo Rayo, Violeta: Misericordia, compasión, Invoca-ción, transmutación, Liberación. Arcángel Zadkiel.

Solicita al Arcángel del rayo que necesitas su asistencia y lleva ese color a través de tu pensamiento al chakra relacio-nado con tu dolencia o emoción a limpiar. O puedes bañar-te entero visualizándote bañado por una Luz líquida que baja del cosmos y te envuelve, de ese color.Pero mejor aún, hazte consciente del mal uso de la energía que recibes y pide perdón cada vez que lo percibas, así evi-tas que entre en tu Ser. Así será uno más despertando en forma consciente (Conciente: personalidad, terrenal. Cons-ciente: alma, espiritual).

Cimentación o Enraizamiento: Parado, siente como si fue-ras un árbol, extiende raíces al centro de la tierra, ánclate a ella. Desde tu primer chakra o coxis, siente tu Luz que baja al centro de la Tierra. Extrae a través de ella su Luz verde líquida, muévela hacia arriba y baña tus chakras uno a uno. Por la corona, siente como chorrea en tu entorno, devolviendo a la tierra todo lo que ha limpiado a su paso. Repite, pero esta vez, al llegar a la corona, lleva la Luz Verde Tierra hacia arriba, fúndela con Luz Blanca que recibirás del Padre para re energizar nuestra amorosa Madre. Entrégala a través tuyo, como un gesto de amor y agradecimiento. Recoge tus raíces y Luz personal.

Usa este ejercicio cada vez que estés desesperanzado, triste, sin fuerzas, sin ganas de vivir o cuando sientas que

percibes entidades negativas en tu entorno. Estar desen-raízado, y nosotros lo estamos a diferencia de los pueblos originales, puede generar falta de ganas de vivir y salir de nuestra dimensión normal, quedando abierto a percibir energías bajas astrales.

Activación de la Llama Trina: céntrate en tu corazón, res-pira tres veces profundamente, siente cómo se expande tu chakra y visualiza una Llama Azul al lado derecho que crece y al expandirse, gira y sale por tu brazo izquierdo, equilibrando tu Fuerza y Voluntad, alineándola al Padre y Su Voluntad para ti. Siente ahora una Luz Rosa que al lado izquierdo de tu corazón o chakra se enciende, gira y sale por tu brazo derecho, proporcionándote Amor Puro, para poder alinearte con el sentido de Unidad, tomando el rit-mo con tu Propósito de Vida. Siente ahora al centro de tu chakra una Llama Dorada que sube por tu chakra cardíaco hasta la Corona y sube llegando al Padre. Ella traerá sabi-duría para que percibas cómo desarrollar tu vida terrena en concordancia con el Plan Divino. Siente y agradece esta conexión, apaga lentamente tus Llamas y enciérralas en una cápsula en tu corazón. Da tres golpecitos suaves para activar tu Timo, glándula de la felicidad. Haz este ejercicio cuando necesites dirección, guía, propó-sito y disfrutar tu vida.

Círculo electrónico de protección: párate y respira tres veces profundo. Visualízate envuelto en una esfera blanca o violeta, desde la Corona hasta bajo tus pies, da la orden internamente de que se active y se selle en tu contorno, sin fuerza física ni de forma autoritaria, sino afirmando tu decisión.

Como la energía que recibimos en modo “antena” es eléc-trica, el Círculo de Protección al ser electrónico vibra en una frecuencia más alta, protegiéndonos y transmutado lo que llega a nosotros. Haz este ejercicio al despertar y al dormir, a tus objetos que quieras proteger y enséñalo a tus seres queridos para que se protejan. Es la antesala para activar otros campos de Luz de tu Ser. Entre más lo realices más fuerte e intuitivo te hará.

Así pues, solo nos resta mencionar que la tremenda pro-tección con que cuenta Los Ángeles y que, además de sus personas, lo hace especial, es la realización de Portales An-gélicos en la zona cordillerana, alineados con nuestra ciu-dad hace muchos años y la existencia de un tubo de Luz en el centro de nuestra Plaza de Armas, rodeado de 7 fuentes de agua, que conectan con un centro energético puesto allí por nuestros protectores de la quinta dimensión, a donde nos dirigimos en nuestra evolución, que ocurre ahora.

Referencias:Meditaciones Diarias, Thomás Printz. En la web y librerías.Metafísica al alcance de todos, Conny Méndez, Volúmen Uno. En la web y librerías.Ciudad Blanca Etérica. Facebook

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 27

Page 28: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl28

Con Orquesta y Coro UdeC celebra 50 años

En el marco de celebración de su cincuentenario, la Universi-dad de Concepción trajo a Los Ángeles, la sinfónica y coro de esa casa de estudios para ofrecer “Carmina Burana”, del compositor alemán Carl Orff. De esta forma inicia su celebración oficial de los 50 años de vida, desde que fuera fundado como centro universitario de Bío Bío, un 7 de mayo de 1962.La presentación en nuestra

ciudad se realizó en el gimna-sio del campus Los Ángeles de esta universidad y en ella, junto a la Orquesta Sinfónica y al Coro de la Universidad de Concepción, se contó con la presencia de la soprano chilena Claudia Pereira, el te-nor chileno Germán Greene, y el barítono argentino Fabián Veloz, bajo la dirección gene-ral del maestro ruso Vladimir Simkin y el director del coro,Carlos Traverso.

Luis Avila, Liliana Montoya, Gloria González

Miguel Campos, Suboficial mayor José

Montoya Rivas; subdi-rectora UdeC,Lorena

Antileo Miño; Director Universidad de Con-cepción, campus Los

Angeles, Luis Hauens-tein

Enrique Maass, Waldo Acevedo, An-gélica Rivera.

Lisbeth Giacomozzi,

Juan Mar-chant, Clau-

dio Maldona-do Díaz. Raquel Matus, Consuelo Arriagada, Marcela Garay.

Sociales

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl28

Page 29: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 29

Una cultura distinta en muchos aspectos, pero que se destaca por su constante re-invención y espíritu de su-peración para sobreponersea la desgracia, es lo que pre-tende proyectar la muestra “Nueve grados, seis minutos, un año”. Inaugurada recien-temente en la sala de arte

de Mall Plaza Los Ángeles, la exposición destaca por los paisajes estremecedores, ruinas enormes y gente en acción, que dan cuenta de cómo los japoneses sufrie-ron y luego enfrentaron la devastadora catástrofe ocurrida el 11 de marzo de 2011.

Josefina Calonge, Brunilda Gilardoni, Miyuki Yoshida, Norka Flores, Cristian Calonge.

Edith Cuevas, Takashy Ito, Gladys González, Eduardo Quiroz

Inauguran muestra sobre terremoto y tsunami de Japón

Pedro Hermosilla, Akio Imamura

María Pía Paredes, Moisés Alvarez, Raquel Fuica.

Kosue Harada, Heidi Inostroza, Paula Inostroza, Silvia Valen-zuela, Miyuki Yoshida

Marcelo Valdebenito, Valeria Salinas, Carlos González

Fabián Navarro, Yasna Salcedo, Juan Pa-blo Díaz.

Sociales

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 29

Page 30: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl30

Sabores de la Zona

Pedro Torres, Gastrónomo Internacional,

INACAP

Especial Pollona Angelina

En fechas en las que recordamos un nuevo aniversario de nuestra ciudad, a continuación comparto a ustedes una

excelente receta de la tradicional pollona angelina,considerada un plato típico de la zona.

La receta mencionada, está tomada de una tradición familiar elaborada, durante largos años, por la familia Torres Torres,

con especial estima y recuerdo a la Sra. Sara Torres, mi madre.

1pollo entero1/2taza de coñac3hojas de laurel2tazas de salsa de to-mateAceite Sal y pimienta

Despresar el pollo y sellar las piezas con un poco de aceite, una vez selladas, flambear el pollo con el coñac, agregar la salsa de tomate y las hojas de laurel, y si fueranecesario un poco de agua fría. Dejar cocinar a fuego lento, hasta que el pollo esté cocido.

-Este exquisito y sencillo plato debe ser servido en fuentes de greda y, aún mejor, si es cocinado en una olla de las mismas.-Una vez en la mesa, esta preparación debe ser acompañada con unas deliciosas sopaipillas, pebre y una infaltable ensalada a la chilena.-Se recomienda como acompañamiento unas deliciosas papas fritas.

Ingredientes

Datos importantes

Preparación

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl30

CHANCHO EN PIEDRAIngredientes1 ½ kilo de tomates bien maduros3 dientes grandes de ajo2 atados de cilantro1 atado de perejil1 ramita de orégano fresco o 2 cucharaditas de orégano secoPreparaciónEn un mortero amplio de piedra ponga sal, los ajos y los granos de pimienta, muela hasta obtener una pasta. Parta los ajíes a lo largo, elimine sus pepas y nervaduras, píquelos y muela en el mortero. Agregue el orégano, el perejil y el cilantro bien picados y continúe moliendo. Incorpore dos tomates a la molienda para que licuen la pasta y vacíela en una fuente de greda, donde estarán los tomates pelados y trozados gruesamente; añada el aceite y revuelva con la mano, apretando y reventando los trozos de tomate. Algunas notas de vinagre tinto no están demás de más si el ácido del tomate fuera insufi-ciente.

3 ajíes verdes1/3 taza de aceite10 granos de pimienta1 ½ cucharadita de sal

Genti

leza

Res

taur

ant

El A

lero

(Fot

o re

fere

ncia

l)

Page 31: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bíowww.bitacoradelbiobio.cl 31

¿Vamos de paseo? ¡Síííí!

Pensando en el buen tiempo del que se-guimos gozando, para alegría nuestra por el ahorro en calefacción y medicamentos y para tristeza de agricultores y regan-tes, les propongo que revisemos juntos algunos lugares de nuestra ciudad, Los Ángeles, donde salir con los peques a disfrutar de un par de horitas de diver-sión ojala descontrolada; la idea es que lleguen tan cansados a casa que puedan dormir profundamente.

¿Usted, angelina, angelino, recuerda dónde lo llevaban sus padres habitual-mente? El paseo obligado por ejemplo para fiestas patrias, era la Plaza de Ar-mas. El principal centro cívico de nuestra ciudad teñido de colores, de niños con globos, del infaltable perro tirado de guata en medio del desfile es una postal que conservaré en mi memoria, espero por mucho tiempo.

Lástima que con la “media plaza” que tenemos ahora no se pueda

hacer mucho y lo peor es que esa situación se mantendrá

así de manera indefinida, pero como la idea es ver el vaso medio lleno y con ello opciones reales de paseo, creo que la pla-za Pinto es un lugar que destaca dentro de la urbe. Piensa por ejem-plo @mamazzzita en lo

distinto que puede ser salir con tu tesorito, bien

abrigado, a recoger tilo, a comer esas ricas frutillas que

venden ahí mismo o a descubrir los añosos árboles que allí perma-

necen.

Otro lugar que de seguro conocen e in-cluso debe estar dentro de sus favori-

tos, es el parque Laguna Esmeralda con sus enormes dinosaurios, debidamente identificados y con un lomo firme para cargar a los pequeños y aguantar sus brincos.¿Se le ocurren más lugares para pasar una tarde agradable? En la avenida Ri-cardo Vicuña, ahí justo frente al super-mercado, existe otro parque tan añoso que tengo fotos de cuando era niña y mis abuelos me llevaban...lo malo de este centro de entretención, es que no pre-senta mantenimiento, le hace falta una manito de pintura o un retoque, aunque de todas formas los cachorritos no lo no-tan, porque ellos sólo quieren correr y jugar.

Sin duda se me escapan otros lugares, como granjas educativas, pisciculturas y centros experimentales, a los que se puede acceder idealmente con buen tiempo y en vehículo...pero ¿sabe qué está al alcance de la mano? ¡Su barrio! Y no necesita arreglarse tanto.

Como @mamazzitas consideramos que potenciar nuestro vecindario, donde están creciendo y desarrollándose nues-tros hijos, es una opción que le permite al tesorito sentir seguridad sobre su en-torno, con pequeños gestos como salu-dar al vecino, conociendo a la persona que atiende el almacén o al que entrega el diario.

Esto puede significar no sólo que estén preparados en caso de alguna eventua-lidad, sino también que sepan de dónde vienen, lo que va generando una identi-dad ciudadana donde el mall y la cadena de comida rápida no son lo principal. En este nuevo aniversario de nuestra ciu-dad, fomentemos la identidad y comen-cemos por nuestros retoños...harto falta que nos hace.

Crianza

Por: @Kosmita

Page 32: Bitacora del Bio Bio Nº 7

Bitácora del Bío Bío www.bitacoradelbiobio.cl32