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FENÓMENOS ULTRASENSIBLES Es significativo el hecho de que la ciencia haya co- menzado a ocuparse, muy seriamente, de diversos fe- nómenos de tipo parapsicológicos que antes sólo pro- vocaban una sonrisa despectiva o un encogimiento de hombros. En este momento, por ejemplo, se está es- tudiando con el máximo rigor, en muy diversos lu- gares, el fenómeno de las voces de pr€>cedencia igno- ta... al parecer emitidas por... ¿por difuntos? (Hace unas semanas BLANCO Y NEGRO publicó un sen- s€ieional, un magnífico reportaje sobre el tema.) Por otra parte, para nadie es un secreto que la Santa Sede ha inaugurado en la Universidad Pontificia Latera- nense, especialmente para sacerdotes, unos cursos re- gulares de Parapsicología. En poco tiempo la Huma- nidud ha aprendido, en fin, que las puertas de per- cepción de la criatura humana tienen todavía mu- cho de una inmensa América parcialmente por des- cubrir. La verdad es que no faltan, cada día, fenómenos de carácter ultransensible, manifestaciones que des- bordan nuestra capacidad nuestra actual capaci- dadde comprensión. Es curioso el caso de una mu- chacha alemana que, cuando entra en su oficina, pro- voca una serie de fenómenos incomprensibles: giran los cuadros en las paredes, se encienden las lámpa- ras, suenan timbres, se alteran las comunicaciones te- lefónicas... El célebre profes&r Hans Bender, direc- tor del Instituto de Parapsicología de la Universidad de Friburgo, ha estudiado concienzudamente el caso de la mecanógrafa de Rosenheim y ha llegado a la conclusión de que ''"no existe explicación tógica^atgiP-~ na sobre los trastornos que de algún modo irradia o provoca esta muchacha". Concluye con estas palabras: ""Falla la ley de la causalidad física". En el mundo de la Parapsicología existen, obvia- mente, muchas supersticiones, alucinaciones, errores, ''''trucos'". Pero, admitido esto, hay que admitir también que se dan con frecuencia situaciones suprasensibles, supreísensoriales, cuya veracidad no admite discusión y que están más allá, por el momento, de los horizon- tes normales de nuestra capacidad de percepción y de comprensión. ¿Cómo explicar, por ejemplo, las singulares dotes de Gerard Croiset, el llamado mago de Utrecht, el holandés tantas y tantas veces consultado oficialmen- te por la Policía de diversos países y que en muchas ocasiones ha descrito, sin moverse de su domicilio, el lugar en que se hallaba tal o cual persona asesinada o tal o cual individuo u objeto desaparecido?... Otro fenómeno parapsicológíeo l a "'visión del fu- turó"está siendo '^revisado" con entusiasmo cientí- fico aquí y allá. Yo tuve ocasión de hojear, en Lon- dres, algunos informes de la ^''Society for Physical Research'". Me parece claro que muchos presuntos '^vi- dentes" de futuro son neuróticos o estafadores que in- tentan engañarse a sí mismo o engañar a los demás. Pero hay otros testimonios cuya realidad, objetividad y comprohabilidad no se pueden negar y que abren horizontes inaugurales de incalculable potencialidad. Creo que en cierto modo podríamos decir que nos hallamos en el año I, en el capítulo del Génesis de la Parapsicología. Luis DE CASTRESANA La forre «le Babel rán a las tiendas preferidas y verán desfilar en una pan- talla los productos existentes en el mercado. Les bastará apretar un botón para se- leccionar lo que ellas quis- ran. Una vez elegido el pro- ducto, marcarán su íimporte sobre una tarjeta de crédito y el Banco donde la tengan acreditada abonará el impor- te al comercio donde hayan adguirido el producto. Se- gún las previsiones, en el año 1990 en ios Estados Uni- dos habrá desaparecido el dheque y se sustituirá por tarjetas de crédito que per- mitan la transferencia de fondos instantánea mediante ordenadores electrónicos. Para ir al trabajo los nor- teamericanos utilizarán un servicio de transporte públi- co sin conductor. Las pocas veces que utilicen sus co- ches lo harán en vehículos de pequeñas dimensi o n e s que no ocasionen ningún ti- po de contaminación y que, posiblemente, serán propul- sa d o s mediante motores eléctricos. En los grandes trayectos, los coches esta- rán conducidos automática- mente por medio de cere- bros electrónicos. Entre las previsiones para el año 1990, está la de que muchas ifamilias se despla- zarán a vivir desde el centro de las grandes ciudades a los alrededores. Para T990 la mitad de los norteameri- canos vivirá alejada de los grandes centros urbanos. La mayoría de ellos habitaVán casas individuales. Según los cálculos previs- tos, una tercera parte de la población de las grandes ciu- dades será de raza negra, en lugar del 20 por 100, como ocurre actualmente. Katfaeríne Hepbirm viene a España La famosa actriz Katheri- ne Hepburn vendrá posible- mente a España en la próxi- ma primavera para interpre- tar 'la película «Viajes con mi tía», a las órdenes de George Cukor. Katherine Hepburn estuvo hace tres años en España, donde protagonizó «Las tro- yanas», de Michael Caco- yannis. Gran Bretaña: ta gripe hace consimtir naranjas «The Fruit Trades Jour- nal», revista londinense es- peciafizada en ef comercio de frutas y verduras, infor- ma que las naranjas españo- las tienen gran venta entre • las amas de casa británicas. Una de las causas que alega la citada publicación parí el aumento en las ventas de las naranjas españolas es que la gente trata con su consumo evitar la gripe. Llame usted al autobús La revista norteamericana «Time» informa la experien- cia que se realiza en una lo- calidad canadiense, Regine, de 143.000 habitantes. La población de un barrio ex- tremo de la citada ciudad se lamentaba del excesivo tiem- po que tenían que esperar en las paradas de los autobuses municipales. Ahora ~se ha realizado una experiencia que parece dar resultados satisfactorios. Cuando et ve- hículo de transporte público no pasa a la hora programa- da, los usuarios pueden lla- mar telefónicamente ai Servi- cio de Transportes def Ayun- tamiento y un autobús mu- nicipal pasa a recogerles. «El autobús traslada a los pasa- jeros a un edificio, en don- de, en una confortable sala, esperan ser avisados que los autobuses cte las líneas regu- lares han llegado para trans- porlíarles hasta el centro de Regina». De esta forma se evita que, en las épocas de frío o de calor intenso, los usuarios tengan que esperar mucho tiempo en las para- das sufriendo las incomodi- dades climáticas. 72 ., iiiiiiinr TnaiiMiBimiifTiror 'Tí "'iTT"rrni¥»ir"TBíT" Blanco y Negro (Madrid) - 18/03/1972, Página 72 Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.

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  • FENMENOS ULTRASENSIBLES

    Es significativo el hecho de que la ciencia haya co-menzado a ocuparse, muy seriamente, de diversos fe-nmenos de tipo parapsicolgicos que antes slo pro-vocaban una sonrisa despectiva o un encogimiento de hombros. En este momento, por ejemplo, se est es-tudiando con el mximo rigor, en muy diversos lu-gares, el fenmeno de las voces de pr>cedencia igno-ta... al parecer emitidas por... por difuntos? (Hace unas semanas BLANCO Y NEGRO public un sen-sieional, un magnfico reportaje sobre el tema.) Por otra parte, para nadie es un secreto que la Santa Sede ha inaugurado en la Universidad Pontificia Latera-nense, especialmente para sacerdotes, unos cursos re-gulares de Parapsicologa. En poco tiempo la Huma-nidud ha aprendido, en fin, que las puertas de per-cepcin de la criatura humana tienen todava mu-cho de una inmensa Amrica parcialmente por des-cubrir.

    La verdad es que no faltan, cada da, fenmenos de carcter ultransensible, manifestaciones que des-bordan nuestra capacidad nuestra actual capaci-dad de comprensin. Es curioso el caso de una mu-chacha alemana que, cuando entra en su oficina, pro-voca una serie de fenmenos incomprensibles: giran los cuadros en las paredes, se encienden las lmpa-ras, suenan timbres, se alteran las comunicaciones te-lefnicas... El clebre profes&r Hans Bender, direc-tor del Instituto de Parapsicologa de la Universidad de Friburgo, ha estudiado concienzudamente el caso de la mecangrafa de Rosenheim y ha llegado a la conclusin de que ''"no existe explicacin tgica^atgiP-~ na sobre los trastornos que de algn modo irradia o provoca esta muchacha". Concluye con estas palabras: ""Falla la ley de la causalidad fsica".

    En el mundo de la Parapsicologa existen, obvia-mente, muchas supersticiones, alucinaciones, errores, ''''trucos'". Pero, admitido esto, hay que admitir tambin que se dan con frecuencia situaciones suprasensibles, supresensoriales, cuya veracidad no admite discusin y que estn ms all, por el momento, de los horizon-tes normales de nuestra capacidad de percepcin y de comprensin.

    Cmo explicar, por ejemplo, las singulares dotes de Gerard Croiset, el llamado mago de Utrecht, el holands tantas y tantas veces consultado oficialmen-te por la Polica de diversos pases y que en muchas ocasiones ha descrito, sin moverse de su domicilio, el lugar en que se hallaba tal o cual persona asesinada o tal o cual individuo u objeto desaparecido?...

    Otro fenmeno parapsicolgeo la "'visin del fu-tur" est siendo '^revisado" con entusiasmo cient-fico aqu y all. Yo tuve ocasin de hojear, en Lon-dres, algunos informes de la ^''Society for Physical Research'". Me parece claro que muchos presuntos '^vi-dentes" de futuro son neurticos o estafadores que in-tentan engaarse a s mismo o engaar a los dems. Pero hay otros testimonios cuya realidad, objetividad y comprohabilidad no se pueden negar y que abren horizontes inaugurales de incalculable potencialidad.

    Creo que en cierto modo podramos decir que nos hallamos en el ao I, en el captulo del Gnesis de la Parapsicologa.

    Luis DE CASTRESANA

    La f o r r e

    le Babel

    rn a las tiendas preferidas y vern desfilar en una pan-talla los productos existentes en el mercado. Les bastar apretar un botn para se-leccionar lo que ellas quis-ran. Una vez elegido el pro-ducto, marcarn su importe sobre una tarjeta de crdito y el Banco donde la tengan acreditada abonar el impor-te al comercio donde hayan adguirido el producto. Se-gn las previsiones, en el ao 1990 en ios Estados Uni-dos habr desaparecido el dheque y se sustituir por tarjetas de crdito que per-mitan la transferencia de fondos instantnea mediante ordenadores electrnicos.

    Para ir al trabajo los nor-teamericanos utilizarn un servicio de transporte pbli-co sin conductor. Las pocas veces que utilicen sus co-ches lo harn en vehculos de pequeas dimensi o n e s que no ocasionen ningn t i -po de contaminacin y que, posiblemente, sern p r o p u l -sa d o s mediante motores elctricos. En los grandes trayectos, los coches esta-rn conducidos automtica-mente por medio de cere-bros electrnicos.

    Entre las previsiones para el ao 1990, est la de que muchas ifamilias se despla-zarn a vivir desde el centro de las grandes ciudades a los alrededores. Para T990 la mitad de los norteameri-canos vivir alejada de los grandes centros urbanos. La mayora de ellos habitaVn casas individuales.

    Segn los clculos previs-tos, una tercera parte de la poblacin de las grandes ciu-dades ser de raza negra, en lugar del 20 por 100, como ocurre actualmente.

    Katfaerne Hepbirm viene a Espaa

    La famosa actriz Katheri-ne Hepburn vendr posible-mente a Espaa en la prxi-ma primavera para interpre-tar 'la pelcula Viajes con

    mi ta, a las rdenes de George Cukor.

    Katherine Hepburn estuvo hace tres aos en Espaa, donde protagoniz Las tro-yanas, de Michael Caco-yannis.

    Gran Bretaa: ta gripe hace consimtir naranjas

    The Fruit Trades Jour-nal, revista londinense es-peciafizada en ef comercio de frutas y verduras, infor-ma que las naranjas espao-las tienen gran venta entre las amas de casa britnicas. Una de las causas que alega la citada publicacin par el aumento en las ventas de las naranjas espaolas es que la gente trata con su consumo evitar la gripe.

    Llame usted al autobs

    La revista norteamericana Time informa la experien-cia que se realiza en una lo-calidad canadiense, Regine, de 143.000 habitantes. La poblacin de un barrio ex-tremo de la citada ciudad se lamentaba del excesivo tiem-po que tenan que esperar en las paradas de los autobuses municipales. Ahora ~se ha realizado u n a experiencia que parece dar resultados satisfactorios. Cuando et ve-hculo de transporte pblico no pasa a la hora programa-da, los usuarios pueden lla-mar telefnicamente ai Servi-cio de Transportes def Ayun-tamiento y un autobs mu-nicipal pasa a recogerles. El autobs traslada a los pasa-jeros a un edificio, en don-de, en una confortable sala, esperan ser avisados que los autobuses cte las lneas regu-lares han llegado para trans-porlarles hasta el centro de Regina. De esta forma se evita que, en las pocas de fro o de calor intenso, los usuarios tengan que esperar mucho tiempo en las para-das sufriendo las incomodi-dades climticas.

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