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©Asociación Civil Internacia

Boletín Año 2 - Nº 4 Agosto 2014

edición: Comisión de Investigación - Internacia

Diseño y Diagramación: Comisión de Imagen - Internacia

Colaboradores: Franco Velit, Alejanro Mejía, Marcy Castro, Priscilla Coria

Publicación webwww.internacia.org.pewww.fb.com/internacia.peru

ConfliCto israelí-Palestino:PersPeCtiva históriCa

sudamériCa frente al ConfliCto en Gaza: Consensos y diferenCias

Crisis en Gaza: rePerCusiones finanCieras

¿Crímenes de Guerra en la franja de Gaza?

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El martes 19 de agosto la Asociación Civil Internacia, con el apoyo de la facultad de Ciencias Sociales de la PUCP, llevó a cabo su evento inaugural de ciclo académico 2014-2, la Conferencia: Conflicto Israelí-Palestino: escenario internacional y crisis humanitaria. Este evento se llevó

a cabo en el auditorio Gustavo Gutiérrez de la Facultad de Ciencias Sociales y además se realizó una trasmisión en vivo a través del canal de la PUCP.

El evento comenzó con una mesa de introducción a cargo del periodista y profesor Carlos Novoa, quién explicó los puntos más importantes de la historia y contexto del conflicto desde una perspectiva imparcial. Seguidamente se dio paso a una mesa de debate a cargo del profesor Roberto Heimovits, economista y profesor de la Universidad del Pacífico, y del profesor Farid Kahhat, politólogo y profesor de la PUCP. Ambos profesor defendieron posiciones opuestas en un debate académico sumamente interesante, el profesor Heimovits defendió la posición israelí, mientras que el profesor Kahhat expuso sus argumentos desde la posición palestina. El debate cumplió la función de brindar una fotografía completa del conflicto a través de la suma de las dos posiciones opuestas, también logró abordar los puntos más complejos del conflicto árabe-israelí y, mediante la participación del público a través de preguntas, llegó a absolver muchas de las dudas de los asistentes.

ConfErEnCia:“ConfliCto israElí – PalEstino

EsCEnario intErnaCional y Crisis humanitaria

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La conferencia fue un éxito tanto en términos de asistencia como de contenido. En cuanto a la asistencia, se logró llenar el auditorio con alumnos, miembros de la comunidad judía y miembros de la comunidad palestina en el Perú. Y en términos de contenido, el debate cumplió con el objetivo académico de informar acerca del conflicto, y de brindar una visión completa de los puntos más importantes del mismo. Esperamos que este sea el primero de muchos grandes eventos a lo largo del ciclo y agrade-cemos tanto a nuestros estimados ponentes como a todos los asistentes al evento y a todos aquellos que lo vieron ya sea en la transmisión en vivo o en la grabación.

ConferenciaConflicto Israelí-Palestino:

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Por: franCo VElit sandoVal liCEnCiado En CiEnCia PolítiCa y GobiErno

PuCP

El territorio comprendido entre el mar Mediterráneo en el oeste y el río Jordán en el este; entre Líbano en el norte y el gofo de Aqaba en el mar Rojo en el Sur, ha sido conocido a lo largo de su historia por muchos nombres como Canaán, Judea, Palestina, Israel, etc. Ha sido la tierra del

nacimiento del monoteísmo y de dos de las religiones más importantes de la actualidad (cristianismo y judaísmo). Este territorio además ha tenido siempre una especial importancia estratégica debido a su ubicación como punto de cruce entre las caravanas que iban de Egipto a Mesopotamia y Persia, así como de Arabia hacia el Asia Menor y Europa. Además, es un territorio medianamente fértil en una región caracterizada por su aridez. Son estas razones las que explican porque este territorio ha sido disputado por la mayoría de los grandes imperios de la Antigüedad, y la Edad Media y Moderna: Egipto, Hitita, Babilonio, Asirio, Persa, Macedonio, Romano, Bizantino, Árabe, Cristiano (cruzados) y Turco.

Los pueblos de origen semítico lo habitaron desde tiempos remotos. La llegada del pueblo judío se remonta al éxodo. Es desde tiempos de Moisés que los judíos se enfrentaran a los pueblos arábigos que habitaron en la región y crearon un reino entre los siglos XI y VIII a.c. Sin embargo, la diáspora causada por las invasiones de distintos imperios alejaría a los judíos del lugar hasta inicios del siglo XX. Por otro lado, es recién a partir del siglo VII d.c. que los árabes conquistaron este lugar y lo islami-zaron, se puede decir que desde aquella época el territorio está habitado por un pueblo de origen árabe llamado “palestino”, aunque este término solo fue utilizado a partir del siglo XX.

Luego de haber hecho esta breve introducción, la intención de este artículo es de hacer una revisión histórica de los hechos ocurridos a partir del siglo XX, explicando así la génesis y el desarrollo del conflicto entre los pueblos judío y árabe palestino en su disputa por este territorio.

El conflicto entre estos dos pueblos comienza a gestarse hacia fines del siglo XIX. Muchos judíos europeos eran perseguidos y acosados en distintos países como Francia, Alemania y Rusia. Un ejemplo de esto son los conocidos progromos en donde se linchaba y masacraba a judíos solo por el hecho de

ConfliCto israElí – PalEstino: PErsPECtiVa históriCa

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pertenecer a esta condición étnica o religiosa. Es en este contexto que surge el movimiento sionista. Los judíos debido a estos constantes acosos vieron que la única forma de garantizar su seguridad era creando un Estado propio que los protegiera. Por razones históricas y religiosas vieron que esta nueva patria judía debía establecerse en lo que se conoce como la Tierra Prometida, es decir, Palestina. Este movimiento, fundado por el periodista austro-húngaro Theodr Herzl, promovió migraciones masivas de judíos hacia la llamada tierra prometida. Así, entre 1880 y 1915 la población judía de Palestina aumentó de 24 000 a 87 5001.

Iniciada la Primera Guerra Mundial ocurrieron ciertos hechos que contribuyeron a la gesta del conflicto. Los británicos en su esfuerzo de guerra contra los turcos buscaron tanto el apoyo de los judíos como de los árabes. En su búsqueda por obtener el apoyo (básicamente financiero y político) de los judíos, el secretario de relaciones exteriores Arthur James Balfour le escribió al Barón Lionel Rothschild (líder de la comunidad judía británica) en noviembre de 1917 una carta en donde le prometía que en caso de ganar la guerra contra los turcos apoyaría la creación de un Estado judío en la región. A la misma vez, los británicos, en su búsqueda de ganarse el apoyo de las poblaciones locales palestinas en su lucha contra los otomanos, le prometieron al rebelde árabe Husayn de La Meca, la creación de un Estado árabe que abarcara toda la región. Claramente ambas promesas eran contradictorias e incongruentes.

Terminada la guerra, los franceses y británicos se repartieron los restos del imperio otomano dividiéndolo en mandatos. Este fue el origen de los actuales Estados ubicados en el medio Oriente. El mandato de Palestina (que incluía los territorios del actual Israel y Jordania) estuvo a cargo de los británicos. En todo el periodo de entreguerras hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial, el movimiento sionista siguió impulsando la migración masiva de judíos y se fueron armando paulatinamente para que llegado el momento oportuno pudieran declarar su independencia. Los palestinos, por otro lado, no tenían la aspiración de formar un estado, sino de pertenecer a un gran Estado nación árabe que abarcara toda la región. Es por ello que no se prepararon para la lucha confiándose en que la abrumadora superioridad numérica y el apoyo de todos los árabes del Oriente Medio le darían una rápida victoria. Sin embargo, para 1947 la población judía ya representaba casi un tercio de la población en Palestina.

Finalizada la Segunda Guerra Mundial y viendo los judíos la clara situación de debilidad del Imperio Británico, percibieron que era el momento para declarar su independencia. Esto desató una ola de violencia entre grupos armados judíos y árabes en la región. Los británicos ante esta situación decidieron marcharse y dejarle a la ONU la responsabilidad de resolver el conflicto. La Asamblea General de Naciones Unidas aprobó el 29 de noviembre de 1947 una resolución que dividía al territorio en dos Estados: uno judío y otro árabe, ambos con una extensión similar de territorio. Sin embargo. Es importante resaltar que los judíos, que solo representaban el 30% de la población, recibieron el 52% del territorio, lo cual causó un gran descontento y rechazo entre las poblaciones árabes. Además, las ciudades de Jerusalén y Belén serían ciudades autónomas administradas por la ONU. La Liga árabe rechazó tajantemente la resolución. Horas antes de expirar el Mandato Británico en Palestina, el 14 de mayo de 1948, los judíos declaraban la independencia del Estado de Israel. Al día siguiente los 5 países árabes vecinos (Egipto, Líbano, Jordania, Siria e Iraq) invadieron al naciente Estado de Israel. Luego de de poco más de un año de lucha, Israel se había apoderado de un 26% adicional de territorio. No obstante, Egipto ocupaba Gaza y Jordania ocupaba lo que actualmente se conoce como Cisjordania. Este fue el nacimiento de lo que se conoció originalmente como el conflicto árabe-israelí.

A la guerra de 1948 le sucedieron otras tres guerras entre los países árabes e Israel por el control de Palestina. En 1956 se desató la guerra de Suez entre Egipto e Israel (apoyado éste por fuerzas francesas y británicas); sin embargo, las presiones diplomáticas de Estados Unidos y la URSS llevaron a un cese al fuego. A raíz del conflicto la ONU desplegó cascos azules en la zona fronteriza entre Israel y Egipto. En 1967 estalló la Guerra de los 6 días, en donde Israel derrotó totalmente a las fuerzas de Egipto, Siria y Jordania, ocupando Gaza, Cisjordania, Jerusalén, los Altos del Golán y el Sinaí. Esta guerra fue la que

1 Zionism and the Arabs, 1882-1948: a study of Ideology, Yosef Gorny, Oxford University Press, 1987, ISBN 0-19-822721-3, p. 5.

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ocasionó la mayor cantidad de refugiados palestinos, ya que Israel había ocupado los territorios donde habitaban la mayoría de ellos. En 1973 estalló una nueva guerra entre Egipto y Siria contra Israel que terminó en una suerte de empate. Egipto recuperó el Sinaí, sin embargo los territorios ocupados pales-tinos permanecieron bajo control israelí. Luego de esto, se firman los acuerdos de Camp David que pone fin a los enfrentamientos entre Israel y Egipto, aceptando este último el status quo.

Esta situación va a producir un cambio radical en el conflicto. En 1964, pocos años antes del estallido de la Guerra de los 6 días, se funda la OLP (Organización para la Libración de Palestina), liderada por Yasser Arafat, la cual tenía como fin último la destrucción del estado de Israel y la independencia de Palestina. Esta organización en sus inicios estará bajo la protección y dirección del Egipto de Nasser. Sin embargo, tras la derrota en la guerra de 1967, y, más aún, tras los acuerdos de paz de Camp David, la OLP va a tener plena independencia y se convertirá en la única representante del pueblo de Palestina. Es a partir de este momento que la lucha por la independencia palestina pasa de manos de los países árabes vecinos a la de los mismos grupos palestinos. La OLP va a lanzar una serie de ataques y atentados contra Israel a lo largo de la década del 70. Esto va a producir respuestas violentas de Israel como: el septiembre negro, en donde las fuerzas de la OLP van a ser expulsadas de Jordania debido a presiones israelíes; la Operación Litani, que implico la invasión del sur de Líbano por parte de Israel para expulsar a la OLP de esa región en 1978; y la Primera Guerra del Líbano de 1982, con el mismo objetivo de destruir a las fuerzas palestinas en ese país.

En la década del 80 surgirá además un nuevo elemento en el conflicto: los grupos islamistas. La revolución iraní del Ayatollah Khomeini va a producir un cambio en el mundo árabe musulmán. Se abandonaran progresivamente los viejos nacionalismos para abrazar a la religión islámica como nuevo motor para la lucha. Así surgen dos movimientos islamistas catalogados por muchos Estados y organismos como terroristas: Hezbollah, en 1982 de origen chií libanés;y Hamas en 1987, de origen sunita palestino. Ambas organizaciones se unirán a la lucha contra Israel, teniendo como objetivos la creación de un Estado islámico en Palestina y la destrucción de Israel. Se apartarán así de los objetivos seculares y nacionalistas de la OLP. Ésta última, toma un giro hacia la moderación al reconocer en 1988 al Estado de Israel y abandonar el terrorismo como método de lucha por la independencia. Esto, sumado al estallido de la primera Intifada (revuelta civil palestina contra la ocupación de Israel en los Territorios Ocupados) en 1987, llevó a las partes a sentarse en la mesa de negociaciones. Es así como se llevaron a cabo las conferencias de Madrid en 1993 y el Acuerdo de Oslo de 1994 entre el primer ministro israelí Ystzhak Rabin y Yasser Arafat. El principal acuerdo era el de paz a cambio de la desocupación progresiva de los Territorios Ocupados. Sin embargo, la implementación de estos Acuerdos fracasará en Camp David y Taba en el 2000 y 2001 respectivamente.

El fracaso de las negociaciones en Camp David disparó de nuevo la violencia en la región, iniciándose así la segunda Intifada en el 2000. Israel respondió a la creciente violencia con mayor represión, inter-viniendo militarmente en Cisjordania en el 2002 y en Gaza en el 2004 (Operación Escudo Defensivo y Operación Arco Iris). En 2005 el Primer Ministro israelí Ariel Sharon lanzó la operación de desocu-pación de Gaza. Sin embargo, un año después, en 2006, el ejército israelí volvía a intervenir en Gaza debido a los ataques de cohetes provenientes de Hamas. Estos enfrentamientos en Gaza se sucedieron continuamente entre los años 2006 y 2009, con sucesivos bombardeos e intervenciones terrestres por parte de las Fuerzas de Defensa Israelíes, con el objetivo de dispersar y eliminar a las fuerzas de Hamas y sus instalaciones para lanzamiento de cohetes Qassam. Asimismo, Israel implementó un férreo cerco a Gaza, controlando el ingreso de suministros de todo tipo. Los líderes de Hamas argumentan que sus acciones violentas son para responder el bloqueo del que son víctimas los palestinos en Gaza.

A pesar de que recientemente en noviembre del 2012 Palestina fue reconocido como Estado obser-vador no miembro de las Naciones Unidas, y la Autoridad Palestina en Cisjordania (Fatah) ha buscado entablar negociaciones con Israel; el constante enfrentamiento en Gaza, entre las fuerzas de Hamas y las Fuerzas de Defensa de Israel, ha imposibilitado cualquier acercamiento fructífero entre las partes.

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El 8 de julio del 2014 el gobierno de Israel lanzó la operación Margen Protector contra Gaza, debido a la violencia desatada tras el asesinato de tres jóvenes judíos el 12 de junio del 2014 y el posterior asesinato en represalia de un joven palestino el 2 de julio. El conflicto desatado el mes pasado aun no termina y ya se ha cobrado la vida de más de 2000 palestinos y más de 60 israelíes. Las víctimas son en su mayoría civiles2.

Por último, considero importante resaltar que las autoridades palestinas ponen el énfasis en tres ejes primordiales para poder conseguir la paz: 1. El reconocimiento de Palestina como Estado independiente y soberano (lo que implica el cese de facto de la ocupación de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental);2. El desmantelamiento de las colonias judías en territorios ocupados; y 3. El permitir el retorno de los refugiados palestinos. Fue este último punto el que hizo fracasar las últimas negociaciones importantes que han tenido lugar entre judíos y palestinos en Camp David y Taba.

2 http://j.mp/tregua5dias

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El conflicto que viene teniendo lugar en la Franja de Gaza vuelve a enfrentar a Israel y Palestina, países que parecen encontrarse cada vez más lejos de hallar una solución diplomática que lleve al cese al fuego entre ambas naciones. Sin duda alguna, el mundo ha quedado consternando

frente a las múltiples violaciones a los derechos humanos que han tenido lugar a raíz del conflicto. Del mismo modo, América Latina no ha estado al margen de esta coyuntura internacional, por lo que varios países, sobre todo en Sudamérica, han manifestado distintas posiciones con respecto a los sucesos en Gaza. Sin embargo estos países no han logrado llevar a cabo acciones más pragmáticas contra la diplomacia israelí.

Una gran parte de los gobiernos sudamericanos se han manifestado, ya sea a través de manifestaciones de la sociedad civil frente a los sucesos, o a través de un congelamiento en sus relaciones diplomática con Israel1. Empero, Brasil, uno de los primeros países en manifestarse en torno al Conflicto en Gaza, logró esto a una escalada aún mayor. Las declaraciones desafortunadas por parte de Israel, al tildar de “enano diplomático” al gigante sudamericano, han enfriado notablemente las relaciones entre ambos países. Brasil, que en los últimos años ha reducido su protagonismo en los foros internacionales, buscó con estas acciones volver a la escena internacional, sobre todo haciendo un contra peso a la influencia del aliado estratégico de Israel en América: EE.UU.

Visto esto, otro país que saltó a la escena internacional en torno a este contexto fue Bolivia. Las declaraciones de Evo Morales al declarar a Israel como parte de la lista de “estados terroristas” y, del

1 http://j.mp/posturaslatinoamericanos

Por: alEjandro mEjía tarazona liCEnCiado En CiEnCia PolítiCa

PuCP

sudamériCa frEntE al ConfliCto En Gaza: ConsEnsos y difErEnCias

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mismo modo, denunciar un acuerdo suscrito con Israel desde 1972, en el cual los ciudadanos israelíes no necesitan visa para ingresar a territorio boliviano, son quizá, hasta el momento, las medidas más pragmáticas contra la diplomacia israelí llevas a cabo en Sudamérica2. Algunos podrían argumentar que son medidas populistas en materia de política exterior; otros pueden señalar que la diplomacia boliviana ha logrado establecer como “política de Estado” el enfrentarse directamente con Estados Unidos y sus aliados internacionales

Teniendo en cuenta los casos de Brasil y Bolivia, resultan paradójicas las conductas de la diplomacia de Perú y Chile. Como es sabido, ambos países son parte de la Alianza del Pacífico y son aliados importantes de EE.UU en la región. Empero, la diplomacia de ambos países ha retirado a sus respec-tivos embajadores de Tel Aviv, resaltando argumentos como la vulneración del Derecho Internacional Humanitario y la escala de la violencia No existen antecedentes previos, en base a lo acontecido en anteriores brotes del conflicto entre Israel y Palestina, en los cual ambos países optarán por llegar a dichas instancias. Ambas conductas pueden ser explicadas a partir de “las cuerdas separadas”, ya que teniendo en cuenta la presencia de capitales israelíes tanto en Perú y Chile, en lo político existe un margen mayor de maniobra, como por ejemplo, el proceder con el retiro de embajadores. Esta sería aproximación a entender sus conductas en política exterior frente a la diplomacia israelí.

Siguiendo lo anterior, si bien existen distintas conductas en materia de política exterior frente al conflicto en Gaza, también hay países que han reducido notablemente su protagonismo a partir este contexto. La Venezuela de Nicolás Maduro, si bien ha condenado enérgicamente el uso de la fuerza por parte de Israel en Gaza, ya no ejerce la misma influencia en el escenario internacional. Del mismo modo, Argentina, más preocupado por un posible “default”, se ha limitado a condenar las acciones en Gaza y no presentarse a jugar la Copa Davis, en solidaridad con Palestina. Después de esto, no hay mayores acciones por parte de ambos países.

Como hemos visto, los diversos países sudamericanos han tenido distintas formas de reaccionar frente al Conflicto en Gaza, teniendo en cuenta determinadas conductas en materia de política exterior frente a Israel. Esto pone en evidencia, en primer lugar, un consenso en el rechazo a las acciones llevadas a cabo por Israel contra civiles palestinos, así como declaraciones de condena dentro de un marco diplomático – protocolar; y, en segundo lugar, la existencia de diferencias entre algunos países sobre la mejor forma de actuar contra la diplomacia israelí. De ese modo, este conflicto en Medio Oriente contribuye a entender distintos comportamientos de las naciones sudamericanas frente a un suceso extraordinario en la escena internacional.

2 http://j.mp/boliviaisrael

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Hace más de un mes que la Franja de Gaza se encuentra en estado de emergencia. Tras años de disputas, el 8 de Julio estalló un nuevo episodio en la guerra entre palestinos e israelíes. El conflicto se remonta a tres hechos fundamentales: la proclamación del Estado de Israel

en 1948, la consiguiente crisis de refugiados palestinos en territorio israelí y la ocupación de más territorios palestinos por parte de Israel en 1967. El 2006, tras la elección de Hamas como presi-dente, el gobierno Israelí decide bloquear la Franja de Gaza argumentando la necesidad de garantizar su seguridad interna ante el presunto gobierno terrorista electo, ocasionando así que las tensiones aumenten. Según la ONU, Gaza está devastada. Pero, ¿qué ha significado en cifras la guerra para este territorio? ¿Qué ha implicado para el gobierno de Israel? ¿Qué repercusiones ha tenido para el mundo?

Según el FMI, las repercusiones del conflicto hasta el momento han sido locales. Si bien, eso parece tranquilizar al mundo, la situación en Gaza, con un millón 700 mil habitantes, es crítica. Hasta el momento, el conflicto ha barrido con la vida de más de 2000 personas de las cuales aproximadamente 459 son niños y 239 son mujeres. Sin embargo, la situación para los sobrevivientes no es prome-tedora. Son 365.000 las personas alojadas en los refugios del gobierno y con familias de acogida. Y al menos 373.000 niños requieren apoyo psicosocial directo y especializado debido a las repercusiones del conflicto. A esto se suma que el cierre de fronteras, impuesto por Israel, ha ocasionado condiciones de vida deplorables; teniendo fuertes repercusiones, en su mayoría económicas, debido principalmente a una escasez crónica de agua e importantes problemas de suministro de energía eléctrica.

“1 975 palestinos y 67 israelíes han muerto” - ONU 15 de Agosto del 2014.

Por: marCy Castro

EstudiantE dE EConomía

PuCP

Crisis En Gaza rEPErCusionEs EConómiCas

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El evento en sus inicios dio lugar a un elevado desempleo, elevadas tasas de pobreza y una fuerte contracción del sector privado que se había basado principalmente en los mercados de exportación; en suma, ocasionaron la crisis económica del 2008. Los habitantes de Gaza decidieron invertir en los túneles que discurrían bajo la frontera con Egipto para traer combustible, materiales de construcción y bienes de consumo; pero julio del 2013, las autoridades egipcias comenzaron una ofensiva seria hacia los túneles, causando nuevamente escasez en Gaza.

Actualmente, el mercado negro de los túneles se encuentra en crisis. Las fuerzas israelíes han bombar-deado 4 de cada 5 ocasionando que la población dependa de los gastos del gobierno - tanto por la Autoridad Palestina como por el gobierno de facto de Hamás - y la asistencia humanitaria. Además se ha creado un gran descontento en los inversores que responsabilizan a Hamas por sus pérdidas. A esto se suma el hecho de que tras un bombardeo israelí la única central eléctrica de la Franja de Gaza dejó de funcionar.

Por otro lado, aunque la Franja de Gaza importa la mayor parte de los alimentos, la producción local es también muy importante. Según la FAO, unas 28.600 personas dependen para su subsistencia de la agricultura, la ganadería y la pesca. Aproximadamente 17.000 hectáreas de cultivo en Gaza han resultado dañadas en el operativo militar israelí, la mitad del ganado avícola ha perecido por efecto directo de los enfrentamientos o por falta de agua y comida, otras 64.000 cabezas de ganado necesitan ser atendidas con urgencia para que puedan sobrevivir; y en el sector pesquero, se han perdido más de 234 toneladas de pesca, o un 9,3% de la producción anual, debido a la paralización de esa actividad.

El gran impacto en la producción local se debe principalmente a los problemas de abastecimiento de agua, ya que actualmente las fuentes de agua se encuentran bajo dominio del gobierno israelí. Esto ha ocasionado un elevado incremento de precios en algunos productos básicos haciéndolos inaccesibles. La paralización de la producción local y la interrupción de las importaciones de alimentos han provocado que casi toda de la población de Gaza dependa de la asistencia externa.

En suma, según el viceministro palestino de Economía, Taysir Amro, los daños les han costado entre US$ 4.000 y 6.000 millones y explicó que esa cifra no toma en cuenta “los daños directos que impactan a la economía de Gaza y podría aumentar una vez que se sumen los efectos indirectos sobre la población”.

Israel, con una economía mucho más estable y desarrollada, promete un escenario más positivo. El banco central israelí calcula que son 12.000 millones de shékels (3.508 millones de dólares), 147 millones al día, el costo del conflicto; un precio que, a pesar de ser el más caro que ha pagado por una confrontación desde 2006, apenas debilitará su economía. Cabe resaltar que gran parte de estos gastos es subvencionada por las continuas donaciones del gobierno estadounidense; lo que ofrece a Israel una ventaja comparativa rescatable.

En un país como Israel, en el que desde 1948 se produce una gran guerra y una operación militar de envergadura cada diez años, este tipo de partidas están ya incluidas en los presupuestos de todos los ministerios, por lo que los mecanismos de canalización sólo tienen que solicitarla. Los expertos creen que la guerra afectará a las finanzas públicas israelíes durante al menos los próximos tres años y el Ministerio calcula que el índice de crecimiento del PIB para 2014 será afectado en apenas 0,2 puntos porcentuales, estimado antes del 8 de julio en 2,9 puntos. Y tras la última donación estadounidense de 225 millones de dólares, el Banco de Israel está más preocupado por los acontecimientos internacio-nales que afectan a la economía mundial, ya que la economía local es lo suficientemente fuerte.

Hasta el momento, las cifras exhiben un conflicto asimétrico mostrando claramente mayores repercu-siones para Palestina. Mientras que para Israel, los costos de reconstrucción se encuentran ya progra-mados en sus presupuestos anuales y prometen ser autosostenibles; Palestina necesitará más de 6 mil millones de dólares. El Presidente palestino, Mahmoud Abbas, está en conversaciones con Estados Unidos, la Unión Europea, los Estados Árabes y el Banco Mundial para que se realice una cumbre de donantes. Mientras tanto, las posibilidades de una pronta reconstrucción para la Franja de Gaza se ven lejanas.

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Desde que empezó el conflicto armado inter-nacional en la Franja de

Gaza, han tenido lugar una serie de muertes de civiles, heridos y cuantiosos daños materiales debido a los bombardeos reali-zados por el gobierno israelí. Es por ello, que a través de este artículo se va analizar si efectivamente el Estado Israelí cometió crímenes de guerra durante el presente conflicto en la franja de Gaza.

El origen del concepto de crimen de guerra, fue definido por el Estatuto del tribunal de Nuremberg como una “violación de los usos y costumbres de la guerra, podían consistir en asesinatos, malos tratos, deportación, ejecución de rehenes y destrucciones no debidas a razones militares”. En la actualidad, los crímenes de guerra, son violaciones graves del derecho Internacional Humanitario, es decir, de los Convenios de Ginebra 1949 y de su protocolo I adicional, también de las normas y usos aplicables a los conflictos armados internacionales o internos que implican una responsabilidad penal internacional al ser crímenes imprescriptibles. Este tipo de crimen se recogió en el Estatuto Roma de la Corte Penal Internacional, en ella se menciona primero todos los elementos generales de los crímenes (U.N. Doc. PNICC/2001):

• Una persona será penalmente responsable y podrá ser penada por un crimen de la competencia de la Corte únicamente si los elementos materiales del crimen se realizaron con intención y conoci-miento.

• La existencia de la intención y el conocimiento puede inferirse de los hechos y las circunstancias

Por: PrisCilla Coria

EstudiantE dE dErECho

PuCP

un ultrajE moral y un aCto Criminal

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del caso.

• El término “autor”, tal y como se emplea en los elementos de los crímenes, es neutral en cuanto a la culpabilidad o la inocencia.

En específico, en el artículo 8 requiere de un elemento para que se configure los crímenes de guerra:

• Únicamente se exige el conocimiento de las circunstancias de hecho que hayan determinado la existencia de un conflicto armado, implícito en palabras “ha tenido lugar en el contexto de … y que haya estado relacionado con él”.

Los ataques del Estado Israelí calzan con los elementos de crímenes de guerra antes señalados, teniendo en cuenta los datos de las Naciones Unidas y el centro Palestino de Derechos Humanos (CPDH), hay alrededor de 2000 muertes del lado palestino, todos ellas de civiles, entre los que hay 468 niños. En cambio, Israel perdió 64 militares y 3 civiles y los terroristas de Hamás lanzaron sobre su territorio 3.356 cohetes, de los cuales 578 fueron interceptados por su sistema de defensa y los demás causaron solo daños materiales. Por lo tanto, se puede señalar que el gobierno Israelí ha incurrido en los siguientes crímenes de guerra, precisados en el artículo 8.2 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional:

• Homicidio intencional;

• Dirigir ataques contra la población civil, en cuanto tal o contra civiles que no participen directa-mente en las hostilidades;

• Dirigir intencionalmente ataques contra objetos civiles, es decir, objetos que no son objetivos militares;

• Dirigir intencionalmente ataques contra personal o bienes participantes en una misión de mante-nimiento de paz o de asistencia humanitaria;

• Causar incidentalmente muertes, lesiones o daños excesivos;

• Atacar o bombardear, por cualquier medio, ciudades, aldeas, pueblos o edificios que no estén defen-didos y que no sean objetivos militares;

• Causar la muerte o lesiones a una persona que éste fuera de combate;

• Ataques dirigidos intencionalmente contra edificios dedicados al culto religioso, las artes, las ciencias o la beneficencia, los monumentos, los hospitales y los lugares en que se agrupa a enfermos y heridos, y que no sean objetivos militares.

Ante esta situación el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, emitió el 23 de Julio la resolución S21/1, en el cual decide enviar una comisión de investigación internacional e indepen-diente, que designará el Presidente del Consejo de Derechos Humanos, para que investigue todas las violaciones del derecho internacional humanitario y del derecho internacional de Derechos Humanos en el territorio Palestino, incluida Jerusalén Oriental, especialmente la Franja de Gaza. Esta comisión de investigación tiene como fin establecer los hechos y circunstancias de dichas violaciones y de los crímenes cometidos e identificar a los responsables, formulando recomendaciones, tanto sobre medidas en materia de rendición de cuentas, con vistas a evitar y erradicar la impunidad de los autores, así como sobre medios y formas de proteger a los civiles frente a nuevos ataques.

Producto de los constantes bombardeos muchas de las escuelas, mezquitas, clínicas, viviendas, hospi-tales, centros de refugios, e instalaciones de la ONU en Gaza, han sido destruidas. Además la población de Gaza tiene que sobrevivir en un espacio de 360 kilómetros cuadrados al que Israel, desde el 2006,

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impuso un bloqueo por mar, tierra y aire; impidiéndole importar, exportar, pescar y sobre todo recibir ayuda. Cabe mencionar que los servicios públicos en Gaza ya no dan para más, solo tienen luz eléctrica por cuatro horas al día. Hay alrededor un millón de personas no tiene acceso a agua potable, de igual manera, cada día los suministros médicos escasean. Por lo tanto, nos encontramos ante un sufrimiento humano sin precedentes que ha originado que medio millón de desplazados se conviertan en refugiados, un tema que se tendrá que discutir en el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en un futuro cercano.

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/INTERNACIAPUCP