Bogotá, el lugar donde los niños y las niñas viven bienDentro de las políticas de promoción y prevención para la primera infancia, el programa Creciendo Saludables es el abanderado de las acciones que para esta población de enorme importancia para la ciudad ha adelantado la Secretaría de Salud de Bogotá.

ALCALDÍA MAYORDE BOGOTÁ D.C.SECRETARÍA DE SALUD

EDITORIAL:LA CIUDAD Y LOS NIÑOS ARTÍCULO CENTRAL:TOCANDO PUERTAS,

PRESERVANDO LA VIDA

ESTADÍSTICAS:DISMINUCIÓN DE LA TASA DE MORTALIDAD EN LA PRIMERA INFANCIALA GENTE CUENTA:

UN JARDÍN PARA CADA SUEÑO

LAURA RESTREPO: UNA PROFESORA COMPROMETIDA

Febrero 2014 Publicación gratuita de la Dirección de Salud Pública de la Secretaría de Salud de Bogotá. Edición No. 1

PRIMERA INFANCIA

TerritorioSaludableBO

LET

ÍN

EDITORIAL Febrero 2014- Ed. No. 1

2 Territorio Saludable

Bogotá tiene niños en todas partes. Si se presta atención, y por casualidad se pasa cer-ca de la verja de un jardín, es

posible oírlos gritando o recitando la lección que les enseña la profe, incluso uno puede encontrárselos haciendo una fila india, cada uno de ellos agarrado de su compañero, yendo hacia un parque o esperando la ruta en la puerta del colegio o en el patio de recreo de los HOBIS. Tam-bién puede uno verlos acompañados por una abuela de regreso a la casa, cargando la maleta y contando alguna historia de lo que les sucedió en la escuela.

Es difícil percibirlos todo el tiempo, pero ahí están, jugando, aprendien-do, saltando o cantando una canción. Lo curioso es que en la conforma-ción de cada uno de esos menores están también la historia y el esfuer-zo del núcleo familiar que sostiene esa pequeña vida y que se preocupa por cada gripa o diarrea que les da, o porque el niño no crece lo sufi-cientemente rápido, o porque se fatiga cuando juega con los amigos, o simplemente por cada situación difícil que pueda cambiar la lozanía y crecimiento de los niños que uno se encuentra en cada calle y casa de la ciudad.

Dentro de esa idea de cuidar del crecimiento y el desarrollo de esos niños e incluso de los que ya empie-zan a llamarse a sí mismos “adoles-centes”, aunque uno no se resiste a decirles o a verlos como niños, la política pública para las familias de Bogotá, desarrolla el programa ‘Ser feliz, creciendo feliz’, que impulsa cuatro proyectos: ‘Corresponsabi-lidad’, ‘Ambientes adecuados para el desarrollo de la primera infancia’, ‘Educación inicial’ y ‘Creciendo salu-dables’.

La ciudad y los niños

Secretario de Salud

Aldo Cadena

Director de Salud Pública

Jaime Urrego

Coordinadora Territorios Saludables

Claudia Naranjo

Comité Editorial Territorios

Saludables

Jaime Urrego

Claudia Naranjo

Jaime Pedraza

Mauricio Torres

Ivonne Caro

Alexander García

Agradecimientos

Hospital Vista Hermosa

Hospital Pablo VI Bosa

Vivian Gutiérrez

Referente de Infancia (SDS)

Jair Ospina

Referente Poblaciones (SDS)

RedacciónMauricio Torres

Alexander García

Fotografía y diagramación

Alexander García

En particular el proyecto ‘Creciendo saludables’ reúne las acciones que tratan de garantizar para todos los niños de la ciudad el derecho a la sa-lud, y lo hace poniendo más personas que visitan y capacitan a profesores en jardines y colegios; también hace jornadas de vacunación, que previe-nen enfermedades y tratan de redu-cir cada vez más las tasas de muertes infantiles por diarrea o por neumo-nía, que desde hace un tiempo han aumentado por la contaminación del aire. Igualmente, el proyecto dispone en todos los planteles del Distrito de alimentación sana y equilibrada y el acceso a la atención integral en salud física y mental.

Todo ese esfuerzo se ha hecho en el actual gobierno con el modelo de te-rritorialización de la política de salud

del Distrito, por medio del programa ‘Territorios Saludables’, que ha im-plementado múltiples procesos de promoción de la salud y prevención de la enfermedad directamente en los territorios donde se desarrolla la vida de los niños, en asocio con sus núcleos familiares, comunidades y otras instituciones del orden distrital y nacional.

Dichos esfuerzos se han dividido en las acciones de los servicios de salud colectiva, que favorecen la atención de la familia en sus hogares, así como los servicios que se dan a los niños con discapacidad, a los que perte-necen a alguna etnia y a cada uno de ellos en su vida diaria.

Siempre vemos a los niños por ahí, y de seguro nadie querría dejar de ver-

los contando una anécdota, saltando un charquito, corriendo con otros niños, gritando en la calle… así son ellos.

La ciudad no quiere que eso cambie, lo que sí intenta cambiar con sus pro-puestas para la primera infancia, los niños y los adolescentes son las con-diciones sociales y de salud de todos, para que estén bien, para que crez-can mucho y sean lo que deseen ser, pero eso requiere que todos pongan de su parte.

Solo el esfuerzo diario de la ciudad y sus instituciones, de las familias y de cada ciudadano consciente de lo im-portantes que son los niños que cre-cen adecuadamente en una sociedad, pueden convertir a Bogotá en “el lu-gar donde los menores viven bien”.

técnicos y profesionales que conforman

equipos básicos de salud y

equipos complementarios realizan labores en escuelas, jardínes, sitios de trabajo y en general en donde se desarrolla la vida

de los ciudadanosDurante el 2013 ingresaron 165.878 familias al programa. Con 569.312 familias antiguas visitadas por los equipos de

salud en el territorio

han caracterizado

familias

6.000

1.005

941.63085

El programa Creciendo Saludables hace presencia en todas las localidades de la ciudad, su propósito primordial es garantizar el bienestar y salud de los niños y las niñas. El programa ha dispuesto de gran cantidad de recursos humanos y materiales para lograr este objetivo.

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3Territorio Saludable

ARTÍCULO CENTRALFebrero 2014- Ed. No. 1

Tocando puertas, preservando la vida

Luz Adriana Niño dio a luz a Isa-bel el 28 de noviembre de 2013, y aunque ahora todo está bien

y tanto la madre como la niña se en-cuentran en perfecto estado de salud, dos semanas antes del nacimiento el panorama era diferente.

La madre cuenta que poco o nada sabía acerca de los equipos de salud que recorren los territorios de Bogo-tá hasta que el 30 de octubre recibió la visita de los auxiliares del Hospital de Vista Hermosa, quienes carac-terizaron la situación de la familia y dentro de sus informes registraron la presencia de una mujer gestante cer-cana a la semana de nacimiento del bebé.

Los equipos territoriales, enterados de que había una madre próxima a dar a luz, de inmediato se movilizaron para saber las condiciones en la que se encontraba y evaluar qué ayuda brindar en esta situación.

Íngrid Marieth Bernal, médica del mi-crotterritorio Potosí Isla (que com-prende unas 800 familias) cuenta que en general encontró a Luz Adriana en condiciones óptimas para llegar al final de su embarazo, excepto por un síntoma que aquejaba a la madre desde algunos días atrás: dolores en la parte baja de la pelvis que no correspondían a los dolores comu-nes del parto. Esto le preocupó a la médica y entonces se decidió que la

madre debería ir al hospital para que le hicieran un examen general y va-loraran la posibilidad de adelantar el parto por cesárea.

Luz Adriana fue al hospital con las orientaciones que le dio Íngrid, pero en el hospital no quisieron atender su caso. En este momento la voz de Luz Adriana se llena de algo de indigna-ción: “Yo me sentía mal y, sin embar-go, me dijeron que tenía que volver después, que esos síntomas eran normales”. Finalmente, Luz Adriana tuvo que volver a su casa y pasar, se-gún nos contó, una de las noches más angustiosas de su vida.

Al otro día, sin que los síntomas desaparecieran y con la conciencia de lo que le había explicado Íngrid, Adriana resolvió volver al hospital. Allí otro médico la valoró y encontró necesario hacerla seguir a la sala de partos porque el diagnóstico dado días atrás por la médica de los ‘Territorios Saludables’ era cierto: el canal vaginal se hallaba inflamado y eso podía presentar complicaciones para el feto.

Todo parecía ir bien. Luz Adriana tie-ne otra hija, Ana Sofía, y la experien-cia que había tenido con ella le decía que estando dentro del hospital ya todo iría mejor; sin embargo, otro problema se sumó a su inminente la-bor de parto: los exámenes previos arrojaron una duda en su prueba de

En el 2013 el programa de Territorios Saludables

ha atendido

menoresde

6 años

hastalos

13 años

gestantes

niños y niñas

12.417

450.270

44%56%

El BoletínTerritorio Saludable conoció la historia de Luz Adriana, Isabel e Ingrid, tres mujeres que se encontraron en un momento de grandes acontecimientos. Su historia describe a la perfección los esfuerzos que hace la Secretaría Distrital de Salud, por garantizar el bienestar de cada ciudadano en cada hogar.

La atención dedicada y de calidad ha hecho del programa de Territorios Saludables un modelo de salud nacional. El procedimiento se basa en la calidez y la calidad del trato profesional y humano que los equipos tienen con los usuarios del programa.

días después de esos momentos de tensión y valor ambas llegaron a su casa.

Pasados unos meses acompañados por la doctora Ingrid a la casa de Isa-bel y Luz Adriana. La médica hizo la valoración de reflejos nerviosos y de succión, oyó el pequeño pero fuerte corazón de la niña y dio recomenda-ciones útiles a la madre, relacionadas con la lactancia exclusiva por los pri-meros seis meses y el cuidado del ombligo de la niña, que está por caer-se. La doctora Ingrid nos dijo: ‘Esto es muy gratificante, yo trabajaba en consulta, pero me parece que poder tener todo el tiempo para dar estas orientaciones es lo mejor’”. Ahora hay una familia alrededor de una recién nacida: la madre, la her-mana, la abuela, el abuelo, la tía y la doctora Íngrid, que ahora es como de la casa. Por supuesto, Isabel dis-fruta del regalo de la salud y la vida que un buen día tocó a sus puertas.

La familia Niño Roncancio celebra la llegada de su nuevo integrante.

VIH. “Dijeron que salía indetermi-nado: ni positivo ni negativo”, dice Adriana con la voz entrecortada. “Yo no sabía qué pensar y me dio tanto miedo, que creo que eso impidió que la niña bajara; se quedó aquí arriba en mi barriga, era como si no quisiera salir”.

Varias horas pasaron dentro de la incertidumbre, se repitieron los exá-menes y finalmente se concluyó que la prueba era negativa; el bebé podía nacer. Pero ante la negativa de Isabel a bajar y acomodarse en la posición correcta, se determinó que se le ha-ría una cesárea a Luz Adriana. Siete

CAMINAND0 EL BARRIO Febrero 2014- Ed. No. 1

4 Territorio Saludable

Esta es la imagen del portal en internet por el que los menores de edad de la ciudad pueden acceder a la atención especializada del equipo de psicólogos y a entretenidas actividades para pasar creativamente el tiempo.

Hablar con niños y niñas:un gran trabajoLa Línea 106 de la Secretaría de Salud de Bogotá se creó con el deseo de atender a los menores de edad que se encuentran solos en su casa, para hablar con ellos, saber de sus vidas y oír sus mejores historias.

Esta fotografía tomada en Diciembre del 2013, muestra a los psicólogos de la Línea 106, con algunos de los niños que atienden a diario. Acompañados por sus padres los niños tuvieron la oportunidd de conocer a las personas que los escuchan en sus ratos libres. Esta reunión se hace con el propósito de estrechar los lazos entre las familias y los psicólogos que aconsejan en muchos aspectos a los menores de edad.

El teléfono suena en una ofici-na de la Secretaría Distrital de Salud:

—Línea 106, buenas tardes.

—Hola —dice una tímida voz.

—Recuerda que esta es la línea amiga de niños, niñas y adolescentes de Bo-gotá, cuando desees conversar, con mucho gusto lo haremos…

De pronto la pequeña voz dice:

—¿Qué hacen allá?

—¿Aquí? Hablamos con los niños y las niñas que marcan al 106, habla-mos de todo lo que les parece im-portante

—¿Y tú cómo te llamas?

—Me llamo Carolina y soy psicóloga, y ¿tú cómo te llamas?

—Me llamo… Felipe. Es que estoy aburrido. ¿Usted en qué trabaja?

¡¿Cómo?! ¡Es un trabajo hablar con los niños y las niñas! Quizás la pre-gunta puede parecer extraña, pero en una sociedad en la que la mayo-ría de los padres deben ir al trabajo

y dejar a sus hijos solos o en com-pañía de cuidadores, no es extraño que exista una línea que funcione las 24 horas del día para escuchar a los niños, orientarlos, acompañarlos e informarlos.

La Línea 106 es una estrategia de la Secretaría Distrital de Salud que brinda este servicio de forma gratui-ta, apuntando a mejorar la salud de la población infantil y adolescente; soportada en un equipo de profe-sionales del área de la psicología que escuchan todo tipo de historias.

Según las estadísticas de 2013, el 23% de las intervenciones estuvieron rela-cionadas con algún tipo de violencia, el 60% fueron dirigidas a la promo-ción de hábitos saludables y factores protectores, por ejemplo, educar sobre cómo identificar una posible situación de abuso, promover la con-fianza entre padres e hijos y ayudar a que los comprendan la importancia de los limites, las normas o las reglas que hay en el hogar.

Entre las estrategias están contar cuentos, jugar a las adivinanzas, in-ventar historias que promuevan el pensamiento lógico deductivo y el proceso narrativo de los niños que se ven enfrentados a estar muchas

horas sin la compañía de sus padres o de un adulto que esté con ellos.

Por otro lado, es curioso que un niño nos diga que se siente solo o que esta aburrido, y que a la vez esté acompañado de un adulto. Los adul-tos no conversan, juegan o interac-túan con los niños, en parte porque llevan trabajo a casa, le dan priori-dad a su propia recreación o porque atienden múltiples oficios del hogar, sin que logren involucrar a los niños, entonces, a ellos los habita una sen-sación contradictoria: estar acom-pañados, pero a la vez solos, según

refiere uno de los psicólogos que atiende la Línea 106.

Por eso es posible que un día uno de sus hijos le entregue un cheque, una hoja de vida, una carta o una esquela manifestándole de forma original que les brinde tiempo o su más atenta es-cucha, ya que a través de estas misi-vas, las cuales promueve la Línea 106, hay una mejor comunicación entre padres e hijos, y en el caso de los más pequeños, es posible que sorpren-dan a sus padres con historias que le demostrarán que hablar con niños es ciertamente un trabajo grandioso.

CAMINANDO EL BARRIOFebrero 2014- Ed. No. 1

5Territorio Saludable

Una mascota para cuidar y que nos cuidaLa estrategia ‘Mi mascota verde y yo’, impulsada en los hogares comunitarios del Bienestar Familiar, jar-dines y colegios del Distrito por la Secretaría de Salud de Bogotá y los hospitales de la ciudad, pretende rehacer el nexo perdido entre las generaciones presentes y futuras con la naturaleza.

Esta es la imagen del portal en internet por el que los menores de edad de la ciudad pueden acceder a la atención especializada del equipo de psicólogos y a entretenidas actividades para pasar creativamente el tiempo.

En el jardín infantil Mafalda, ubi-cado en la localidad de Rafael Uribe Uribe, los niños cantan así: “Caminando por la calle

me encontré una semillita. Sin saber de qué sería, en una taza la sembré. Pasan los días y al abuelo le conté y él se reía, porque agua no le eché...”. El canto describe una estrategia que se implementó desde marzo de 2013 y que lleva por nombre ‘Mi mascota verde y yo’.

La idea de la estrategia es que los niños de los colegios, jardines y ho-gares comunitarios de la ciudad adopten una planta, preferiblemente medicinal (como caléndula, manzani-lla o canela), con el objetivo de que apropien el concepto de cuidado y autocuidado como elementos cen-trales de la construcción de una vida saludable. “Se les invita al cuidado de las plantas primero que todo, al cui-dado del medio ambiente, porque a raíz de eso ya recogen botellas para hacer trabajos o para sembrar mati-

cas” afirma la profesora Inés Torres. “La conciencia de ellos cambió hartí-simo, porque ya no piensan en des-truir las maticas o en que esta mata me va a hacer daño, o sea que han aprendido mucho con la naturaleza”, añade.

Así es la nueva relación que tienen los menores con las plantas que adoptan, y que estimula procesos dentro del aula de clase como materia de com-prensión y conocimiento; porque el cuidado que dedican a sus mascotas verdes pone a los niños en relación con el respeto por la naturaleza y el ambiente, adquiridos y fortalecidos a partir de la apropiación de la planta como ser vivo a su cargo.

Adicionalmente, a partir del contac-to con la mascota verde, los niños se aproximan a los usos y conceptos de las plantas medicinales, como un medio alternativo para tratar dolen-cias sin procesamientos químicos. Así lo afirma la profesora: “Los niños

quedaron encantados con el sabor, y ahora todos se quejan de su dolor de estómago [risas], eso es algo curio-so… es que el sabor como es similar a la canela, entonces cuando ellos se lo toman dicen: ‘Ay, sí, ya me sirvió para el dolor de estómago’, pero en-tonces ya cogieron la costumbre de que cada nada se enferman del dolor de estómago para que les den el agua aromática”.

Los profesores y los referentes técni-cos de los hospitales, que han traba-jado la estrategia de manera conjun-ta, refieren igualmente que los niños se involucran de tal modo que jalo-nan los intereses de la familia, discu-ten con sus abuelos las propiedades de las plantas que cuidan, aprenden y enseñan, se hacen constructores de vínculos afectivos, de los que termi-nan haciendo partícipes a todos los que tienen a su alrededor, y de se-guro transmitirán esos valores y buen trato a las personas con las que sigan creciendo más adelante.

“Pasaron uno, dos, tres, cuatro, cin-co, seis, siete, ocho días, y la mata sí crecía porque agua si le eché…”.

En el jardín infantil Mafalda se sigue haciendo esta ronda, y todos sonríen después de cantarla. Están conten-tos porque profesionales de la salud, maestros y alumnos construyen con pequeñas acciones como esta un mundo en armonía con la natura-leza, más niños que la cuidan y, por supuesto, más canciones con finales felices.

Los mejores trabajos

ESTADÍSTICAS Febrero 2014- Ed. No. 1

6 Territorio Saludable

Disminución en las tasas de mortalidad 2012/2013

11,5%9,6%

36,7%

23,5%

33,8% 14,6%

Disminución en la tasa de mortalidad por enfermedad diarreica aguda

OUCH!!!

0,3% de muertes por EDA (Enfermedad Diarreica Aguda)

1,3% de muertes por EDA (Enfermedad Diarreica Aguda)

En 2013, porcentaje de mortalidad por cada 100.000 menores de 5 años en el Distrito Capital.

En 2011, porcentaje de mortalidad por cada 100.000 menores de 5 años en el Distrito Capital.

Fuente: Bases de datos SDS y RUAF, corte 31 de dic. 2013.Datos preliminares 2011 con corte al 31/12/11 actualizado 02/02/12

me duele la pancita

Cifras de primera infancia

Mortalidadinfantil2011 Mortalidad

infantil2013

Mortalidadmaterna2011

Mortalidadperinatal2011

Mortalidadperinatal2013

Mortalidadmaterna2013

7Territorio Saludable

ESTADÍSTICASFebrero 2014- Ed. No. 1

Cobertura de vacunación en niños y niñas de un año o con edades inferiores

Haemophilus Influenzae tipo B Sarampión

Difteria Tos ferina

RubeolaTétano

Hepatitis B

ParoditisPolio, Neumococo,

Rotavirus

Menores de un 1 año

102,6% Un año de edad

92,7%

Cobertura de vacunación para tos ferina en mujeres gestantes

102.923 vacunas para Tos ferina fueron aplicadas a mujeres gestantes en el periodo de enero a agosto de 2013 lo que redujo la cifra de:

23 niños y niñas muerto en 2012 a

3

0% en muertes por desnutrición en el 2013

9,6% de muertes por neumoníaEn 2011, porcentaje de mortalidad por cada 100.000 menores de 5 años en el Distrito Capital.

7,2% de muertes por neumoníaEn 2013, porcentaje de mortalidad por cada 100.000 menores de 5 años en el Distrito Capital.

Disminución en la tasa de mortalidad por enfermedad respiratoria aguda

niños y niñas muertos, a octubre de 2013

8 Territorio Saludable

LA GENTE CUENTAFebrero 2014- Ed. No. 1

Un jardín para cada sueño

Lorena Restrepo, una profesora comprometida

Lorena Restrepo trabaja en un jar-dín privado que lleva por nombre Mis Mejores Años. Nos contó cuales son las bondades y los aspectos por mejorar del programa ‘Creciendo Saludables’ desde su perspectiva de profesional que trabaja con la prime-ra infancia.

Territorio Saludable (TS):Como educadora de menores, ¿cuál cree que es el recurso más importan-te que ha recibido por parte del Hos-pital Pablo VI para la atención en sa-lud de los niños que tiene a su cargo?

Lorena Restrepo (LR): Desde siempre el hospital se ha in-teresado por brindarnos capacitacio-nes que nos mantienen al tanto de lo que debemos observar y estar pen-dientes de la salud de los niños.

TS: ¿Cómo llevan ustedes esa infor-mación a los padres?

LR: En la hora flujo, que es cuando los niños llegan con sus adultos res-ponsables, porque a veces los acom-paña uno de los abuelos o el her-manito mayor. En ese momento se les informa cuáles son las conductas saludables que deben hacer para evi-tar enfermedades: lavado de manos, aseo general, actividad física… Todas las cosas que la gente del Hospital nos enseña nosotros se las contamos a ellos.

TS: De esa experiencia y de esas capacitaciones recibidas, ¿qué des-taca como fundamental en su labor como docente?

LR: Las capacitaciones han involu-crado tanto a docentes como a pa-dres, y eso es muy positivo. Creo que ellos [los padres], todas las maestras de este jardín y me imagino que to-dos los del sector quieren que haya cada vez más presencia de los pro-fesionales de ‘Territorios Saludables’.

TS: ¿Qué cree que debe mejorar en el programa ‘Creciendo Saludables’ para que la atención sea óptima?

LR: Las capacitaciones son buenas, pero extrañamos la presencia casi permanente en todas las actividades de los profesionales que nos acom-pañaban en la atención y promoción, frente a los padres y frente a nuestras compañeras. Esa atención constante brindaba mucha confianza a los acu-dientes y a nosotras mismas. La ver-dad es que esperamos que vuelvan a trabajar con toda la comunidad de una manera más presencial.

Visitamos la localidad de Bosa y allí conocimos la opinión de Lorena Restrepo, una profesora que trabaja de la mano de los ‘Territorios Sa-ludables’ desde hace diez años.

Estella García, coordinadora del jardín infantil La Cabaña, de la Secre-taría de Integración Social, nos contó su experiencia con el acompa-ñamiento que ha recibido del Hospital Pablo VI de Bosa en el desarro-llo de sus actividades diarias.

Territorio Saludable (TS):

¿Cuáles son las ventajas que us-ted ha encontrado en la labor que hace el hospital dentro del jardín?

Estella García (EG): Pues la labor siempre ha sido muy buena. Desde la administra-ción anterior, los niños recibie-ron valoraciones en psicología, medicina, nutrición y salud oral, muy buenas para la salud de los chiquitos. Cada vez que necesi-tan algún servicio, los profesio-nales que vienen aquí y hacen las remisiones, que son entregadas a sus padres. Esta manera de hacer las canalizaciones ha mejorado muchísimo la calidad de salud de los niños. Llevo trabajando más de diez años y he visto lo que ha servido a la comunidad.

TS: De los servicios que han recibido los menores en los úl-timos años, ¿cuáles son los que usted más destacaría?

EG: Los servicios de enferme-ría. A nosotras el hospital nos capacitó en atención integral a las enfermedades prevalentes de la infancia (AIEPI) y nos certificó como agentes comunitarios. Con esto, ya hemos podido hacer prevención de las enfermedades que más afectan a los niños del jardín.

TS: ¿Qué hace falta en la estra-tegia ‘Creciendo Saludables’ para que sea cada vez más eficaz en

el control de enfermedades para los menores de la ciudad?

EG: Que haya cada vez más presencia de la Secretaría de Salud en todas las actividades que tenemos. Después de la certificación, nosotras nos he-mos sentido algo solas frente a los padres de familia, que hacen todo tipo de preguntas acerca de la salud de sus hijos. Si tuviéra-mos un funcionario del Hospital y de la Secretaría, ganaríamos mayor credibilidad con la gente, en especial cuando hacemos los talleres de salud con los padres. Pero en general estamos conten-tas con las capacitaciones que hemos recibido, que se reflejan en el buen estado de salud de los niños.

Nutrición de calidad.

La hora de comer, una de las mejores del día.

La coordinadora: Estella García.

Atención y afecto.Lorena reconoce que las capacitaciones que brinda el hospital y la asistencia a eventos es importante, pero

declara que también se necesita presencia permanente de los equipos territoriales.