EL EURO-MERCADO DEL IV REICHPara tapar la burbuja hipotecaria alemana, con el

Deutsche Bank como uno de los mayores implicados en el enorme agujero financiero, se ha institucionalizado el “mercado casino” de información privilegiada y apuestas anónimas. Esta bolsa privada y sin transparencia, localizada en Nueva York y Londres, está en manos de un cartel compuesto por seis megabancos norteamericanos y seis europeos, todos quebrados y rescatados por sus Gobiernos, es decir, por los contribuyentes. (Fuente; M. BALLBÉ /Y. CABEDO El País, 29 NOV 2012)

Los ciudadanos alemanes fueron las primeras víctimas de la voracidad de sus bancos. Ahora especulan con la deuda soberana de los países del sur. La causa de la crisis, pues, no es ni la burbuja inmobiliaria española, ni el endeudamiento —las deudas inglesa y alemana eran superiores—, ni la indisciplina fiscal.

Alemania promovió las apuestas contra la deuda del sur. El Deutsche Bank fue uno de los artífices de este nuevo Merk-ado de deuda soberana —y de su índice de precios Markit— que disparó los ataques especulativos. Goldman Sachs asesoró a Grecia para ocultar su deuda y así logró entrar en el euro, después, con esta información privilegiada, apostó junto con Deutsche Bank que Grecia se hundiría. Atacar a países del sur fue la fórmula del Gobierno y bancos alemanes para recuperar las pérdidas de sus bancos ludópatas.

Semejante giro depredador contra la propia zona euro lo motivó la filtración del informe confidencial del supervisor financiero alemán, el BaFIN (confirmado por otro de Merrill Lynch), que valoraba en 800.000 millones los activos tóxicos del país en 2009. Dichos datos delatarían que una Alemania especulativa había reemplazado a su reputado capitalismo industrial. En vez de procesar a los responsables, cerraron filas e iniciaron el descrédito del sur para desviar la atención y sojuzgarlos.

WALL STREET Y LA REPRESIÓN MARCA ESPAÑA

NOS ESPERAN CARCELES CONSTRUIDAS CON LOS LADRILLOS DE LA BURBUJA.

Los bancos de Wall Street organizaron la represión de la movilización popular que ocupó los aledaños de Wall Street con el FBI, el ministerio de interior de EE.UU. la policía, los políticos y seis universidades.

Utilizaron datos bancarios y compañías de seguridad para espiar Occupy Wall Street, pagadas por los bancos o incluso por la Reserva Federal en Virginia (sede de la CIA). Juntos diseñaron una estrategia de disparos, palos, arrestos violentos y tortura. Planearon asesinar con francotiradores a los supuestos líderes (como le pasó a Martin Luther King y otros).

Este complot de bancos parapoliciales, públicos y privados, considera una acampada una amenaza terrorista, y ataca a ciudadanos indefensos que sólo intentan expresarse libremente como en la acampada de la Puerta del Sol. Se trata de la represión integral de la disidencia por el Estado-Empresa (The Guardian, 29-12-12)

La marca España sigue estas nuevas tácticas en la represión del movimiento Rodea el congreso. Los detenidos del 25S denuncian a la Policía por lesiones, arresto ilegal y torturas (eldiario.es). Varios detenidos denuncian que les metieron piedras en sus mochilas.

El 27 de octubre fueron multados con 500 euros quienes se encontraban cerca del punto de inicio de una manifestación desde dos horas antes de que empezara. Otro fue multado media hora antes de que comenzara la manifestación. Por el momento se sabe que han llegado 60 multas, pero podrían ser hasta 300.

Alfonso Fernández Ortega, Alfon es un joven de 21 años del barrio de Vallecas de Madrid que fue detenido el miércoles 14 de noviembre, día de huelga general, y desde entonces permanece en prisión preventiva y, hoy, en FIES.

Acusado de llevar gasolina en la mochila al salir de su casa, donde le estaban esperando, fue detenido sin delito, pues ni la gasolina fue utilizada ni se han encontrado sus huellas, por lo que pudo ser colocada igual que las piedras del 25S. Alfon fue acusado del inexistente delito de alarma social, y después del también inexistente delito de riesgo de fuga. ¿Para que va a fugarse alguien que no ha cometido ningún delito?

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