Carlos Monsiváis, "El secreto está en la mano izquierda"

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  • (todos lo conocamos por las fotos). Se sent en la primera fila y vio el espectculo como juzgndolo militarmente muy derechito. Sali Agustn y lo salud. Siqueiros grit:

    -Dedcale algo a las luchas del pueblo d e Mxico, Agustn! El maestro no se hizo del rogar y muy serio dijo: -Le dedico esta cancin, "Farolito", al pueblo d e Mxico, en la

    figura de su mejor representante David Alfaro Siqueiros. Toma esta cancin, David, apritala junto a tu pecho y luego reprtela entre los pobres.

    El seor Siqueiros se puso de pie y le agradeci el aplauso a los espectadores y organiz un breve mitin pidiendo apoyo para una huelga de mineros. Esto que le cuento s es la verdad, porque al morir el Flaco, don David se avent en la tele la ocurrencia de declarar que Lara compuso "Farolito" en homenaje a los muralistas. Nada de eso, "Farolito" ya era un xito y Agustn nicamente le dio por su lado al pintor. Si a l todo lo que no fuera la bohemia y las flores que enmarcaban a su Flor del da le daba igual. l nunca fue poltico. Gastaba todo y se endeudaba y compraba joyas y se las regalaba a la primera santita que se le cruzara, y al da siguiente a forcejear por otro adelanto con el empresario. "Los poetas no de- ban tener deudas, Agustn", le decan siempre. "Los poetas slo deben enamorarse d e las musas del Olimpo."

    Cmo borrar todo esto? Agustn Lara fue un personaje en mi vida, me regal ilusiones, la principal, pensar que algo celebrado por todos me suceda a m, personalmente. Fjese, cuando me sien- to muy contenta pongo sus discos para llorar y desatarme, y estar todava ms feliz. Ya ve usted que los jvenes lo acusan d e trasno- chado (eso cuando se acuerdan de l). Y quin les dice que eso es delito? Ya los ver en sus aforanzas y entonces hablamos.

    Dancing: El secreto est en la mano izquierda

    Mira mano, a m d e plano el baile es lo que ms me pasa. Empec muy chiquillo, al principio ni siquiera por el afn de ligar, sino de ha- cer algo para que se fijasen e n m. Yo vea a mi hermano que andaba siempre con Cada Cosa y eso me motivaba el resto. Ya que logr que me vieran, me propuse arrimarme. Pero eso en se- gundo lugar, conste. A lo mejor, s bailo ms cuando me interesa lanzrmele a alguien, pero lo primero es bailar. Ahora que un asun- to no niega lo otro y el bailoteo sigue siendo la manera ms senci- lla de acercarse a una chava. Se agarran maas, como que uno se tropieza o que te avientan y le llegas al roce, y d e nuevo, y el roce, y te vas d e frotada en frotada as de plano como maderitas para encender el fuego, y luego es ella y no uno quien se disculpa.

    Los bailes se hacen para lucir y conseguir, pero el baile es noms para uno, es el gusto de verte en la mirada d e tus cuates y los desconocidos. Y uno se va enviciando. Al principio, te digo, por lo menos as me pas a m, uno se la pasa recorriendo fiestas y salo- nes para ensayar y conocer a chavas. En las fiestas, luego luego te enteras d e que andas tras el noviazgo en serio, y si te descuidas, te presentan a sus padres. Y a huir. En los salones, te das color d e inmediato, as est la escena: ac los viejos, las lanzas muertas que ni chi ni cha ni cha-cha-cha. Son seores que ni con pase. Y luego estamos los chavos. La mayora le entramos apenas nos salimos d e la primaria, la terminemos o no. De pronto y rale, descubrimos lo que nos divierten unos pasos bien dados, moverla como se debe.

  • Al principio damos de patadas, el clsico un dos, un dos o el uno noms. De ah viene el baile d e brinquito. Antes de la onda disco, era muy chistoso ver en Tepito bailar d e brinquito. Fjate en otra cosa: los que ya tienen tiempo en la bailada se mueven calma- dos, los otros se alocan. Los que sabemos les decimos los "chapu- lines", sueltos y brincando.

    A m el swing me pasa mucho, por acrobtico, por el ritmo muy marcado, el movimiento de manos da la impresin d e que se mue- ve. Pero el swing mal acostumbra. Fjate qu pocos de los viejos bailan calmados. Les decimos los Acrobticos. Muchos aprendie- ron en las academias de baile que son los grandes robos. Y ahora el break tuvo cosas del swing, pero no pas a mayores. Para ese caso te metes al gimnasio, no hay manera. Cmo lo aprendes bien? No hay buenos instructores aqu, salvo esos veracruzanos viejos que te cuentan ancdotas y se ponen tan nostlgicos que salen de aqu a emborracharse. En Mxico ya se perdi la costumbre del paseo, no digamos el ladriilo. Y el danzn parece que noms apretan- d o a la chava la libras, pero hjole, es bien sexy bailar. El secreto est en la mano izquierda para sobrellevar a la dama. El saber raspar, el saber fajar sin las exageraciones d e las pelculas (o viendo las pel- culas) que parece que es lucha libre. La cosa es calmada. En el roce tocarle los pechos a la dama, empezar el juego, tocarle la torta o que rocen el miembro, fris fras, rale. Entonces baja uno la mano as sobre los senos. .. Bueno, sobre algunos senos. La misma ca- dencia del ritmo hay que sobrellevarla y sobrellevar el raspn. En eso del faje uno tiene que saber latn, latn y lmina acanalada.

    A m me pasan mucho las rutinas. Empec a practicarlas desde chavito. bamos en bola al programa d e Baile con Vanari. ramos buenos, te lo aseguro, porque luego hay tarados que llevan 10 alios y no aprenden a bailar. Iban los del grupo d e Brasil 80, d e la colonia Guerrero, d e la colonia Malinche, d e la Casas Alemn, d e Tepito (que es un barrio que ha tenido influencia en el modo d e bailar). A todas estas ondas van los d e siempre, los que le entran a cualquier concurso, algunos son bien buenos, un chavo se mante-

    na de eso.. . Ahora ya no voy tan seguido, ya casi no hay lugares, ahora todo es distinto aunque quien no lo sabe diga que todo se parece. Pero ya nada es fcil. A ver un buen grupo d e salsa, por ejemplo, ya slo pueden ir los ricos. Y como que la salsa con tocadiscos no aguanta. Es que la salsa te permite ms movimientos, pasearte por toda la pista si te da la gana, saltar obstculos a travs de la gente. En cambio, para el danzn casi no, fjate bien.. .

    El mexicano se menea de la cintura para abajo, el cubano se menea pa'rriba, y por eso da la impresin de que es ms rpido, sobre todo si hace algn numerito como la Campana o el Rehilete. Los cubanos y los puertorriquelios alzan los hombros. Nosotros casi no. Y no por nada, pero bailar se las trae. Tiene que producirte un gusto muy especial, algo que te apacige por dentro mientras ms te aceleras, algo que te haga sentirte distinto a estos payasos que dizque muy modernos, y muy videoclip. Algunos s lo hacen bien, pero su lugar es el gimnasio. Bailar no es demostrar condicin fsica, sino elegancia, algo as como entrarle al frenes sin despei- narte. Si no, noms te sacudes a ritmo d e lagartija y desarrollo d e pectorales.

    A los salones y a las fiestas se va a vivir la juventud. Eso es lo que tienes y hay que saber cmo gastarla. Si yo fuera muy bueno no saldra de los salones; como no lo soy, me voy al cine. Pero le tengo envidia a los que s la hacen. Pepe, un cuate mo, es cam- pen de mambo. Bueno, era. Se le hizo derrotar a un cuate que llevaba seis aos en el campeonato. Le hicimos una fiesta, se puso hasta atrs, se cay, se fractur una pierna, y lleva cuatro meses sin bailar.

    Para m, lo nico malo de los dancings es que ya no estn pro- hibidos. A mi mam sus jefes nunca la dejaron ir. Mi hermana no va

  • porque no le ve el chiste. Quesque es de ms categora ir a una disco. Que sea menos. Lo que pasa es que como est tan desnutrida apenas consigue moverse, y en el tumulto no se nota.

    Ora no te digo que los dancings siempre sean divertidos. Hay veces que te aburres pero te aguantas. Yo falto muy pocas veces. En dnde la pasara mejor? Cuando tienes una buena pareja, es el cielo. De lo contrario, llegas a tu casa rendido y golpeado. A un cuate mo le dicen el Terror de las Medias. No deja una viva y tampoco se le va un zapato. Las chavas lo ven y fingen demencia. Con lo caras que estn las medias.

    A qu vienen las chavas? Las que aguantan vienen ms a bailar que a ligar, aunque tambien le entren parejo y aunque se vistan de colores llamativos para atraer. Siempre la misma: "Si vieras qu bien me siento, qu bonito cuando la gente se rene en torno a m cuando bailo". Y te lo explican con detalle: "En una fiesta no es igual. La mam o la abuelita siempre quieren bailar, y te apenas". Pero en hombres y mujeres es igual: lo principal es sentir la msi- ca, sentir el ritmo.

    Lo mejor del bailoteo es sentir el cuerpo, y lo malo de los dancings es que a veces tampoco hay espacio y a fuerzas tienes que or, como en el teatro. Y lo que a m me gusta es soltarme de a tiro. Yo tengo 26 aos y bailo desde los once. Y cada vez me muevo me- nos, cada vez me aloco menos, y siento ms el cuerpo. Es una sensacin padrsima, estoy consciente de todos mis msculos, como dicen que te pasa con el yoga. Yo creo que por eso nunca he ido a las discotheques. Se me hace que all no importa si bailas bien o de la patada. Nadie se fija, nadie te hace rueda. Qu mala onda! A m lo que me gusta es saber si la estoy haciendo o no, despacito, sin prisas, aunque nadie me pele. Pero no es cierto. Si bailas cual debe acaban todos fijndose en ti. Yo n o soy payaso ni faroln pero me gusta que se den cuenta d e que la muevo, d e que no en balde he ensayado y le he metido ganas. El que no conoce el baile no conoce SU cuerpo.

    Mexicaneras: El momento de las Jovencitas

    ~asJouencitas al acecho (1): El autdgrafo

    En la entrada lateral del teatro d e revista, las jovencitas esperan. Se aferran premiosamente a sus discos recin comprados, con- dicin previa para la audiencia en donde obtendrn la bendi- cin inacabable del autgrafo (la firma es el alma apresada del firmante, y un museo d e trazos caligrficos contiene la clave de la fama, se aceptan graflogos y no se admiten burlas). De dos en dos, las jovencitas entran al Santa Sanctorum. Se intensifican los comentarios:

    -Yo quiero que abuse de mi. -Si mi mam se enoja porque llego tarde, le dir que me emba-

    raz en su camerino para vengarme. -Si me mira fijamente estoy perdida. -Si l me dijera "Te casas conmigo ahorita?", no sabra qu

    responder. -Estoy tan nerviosa que no voy a poder seducirlo. Con languidez, el artista las acepta y las saluda, inscribe lneas

    enriaablemente idnticas, pregunta: "iCmo te llamas, mi amor?" La interesada suelta su nombre con nerviosismo, en susurro, como prescindiendo d e un estorbo. Una actriz, en el camerino, se dirige a una peticionaria:

    -Quieres llorar? rale. -Si no me faltan ganas. Lo admiro mucho. Leo todo lo que sale

    sobre l. -Razn de ms para llorar ahorita.