Centinela Libertario 2 Contrinsurgencia

8/18/2019 Centinela Libertario 2 Contrinsurgencia

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CENTINELA

LIBERTARIOSegunda edición

Guerra contra los pueblos o

contrainsurgencia: II

“Colectivo Cultural Doroteo Arango”


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¡Qué costumbre tan salvaje esta de enterrar a los

muertos!, ¡de matarlos, de aniquilarlos, de borrarlos de latierra! Es tratarlos alevosamente, es negarles la

posibilidad de revivir.

Yo siempre estoy esperando a que los muertos se

levanten, que rompan el atad y digan alegremente "por

qué lloras#

$or eso me sobrecoge el entierro. %seguran las tapas de

la caja, la introducen, le ponen lajas encima, y luego

tierra, tras, tras, tras, paletada tras paletada, terrones,

polvo, piedras, apisonando, amaci&ando, a'( te quedas,de aqu( ya no sales.

)e dan risa, luego, las coronas, las *lores, el llanto, los

besos derramados. Es una burla "para qué lo enterraron#,

"por qué no lo dejaron *uera 'asta secarse, 'asta que nos

'ablaran sus 'uesos de su muerte# "+ por qué noquemarlo, o darlo a los animales, o tirarlo a un r(o#

abr(a que tener una casa de reposo para los muertos,

ventilada, limpia, con msica y con agua corriente. -o

menos dos o tres, cada d(a, se levantar(an a vivir.

JAIME SABINES


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CONTRAINSURGENCIA ESTA!O " BARBARIE-a situación geopol(tica mundial pudiera describirse como una

cruda guerra para el dominio sobre amplios territorios provistos de

recursos naturales esenciales para la producción capitalista, y por

el control de rutas comerciales vitales para la circulación de

mercanc(as. -os intelectuales operantes de esta guerra /omero,

01234, como los militares del 5epartamento de 5e*ensa de Estados

6nidos, 'an de*inido que el principal de los objetivos vitales de

ese pa(s es asegurar acceso incondicional a mercados decisivos,

los suministros de energía y los recursos estratégicos 7ece8a,

01104. Entonces, la lógica que dirige la pol(tica internacional y la

estrategia militar de Estados 6nidos es de corte geogr9*ico la

e:plotación de todo territorio que albergue algn recurso naturalestratégico, o sea, que permita la reproducción de la vida

capitalista y de sus guerras contra los pa(ses imperialistas

contrarios, pero sobre todo, contra todos los pueblos.

El petróleo y el gas, entre otros minerales, de los pa(ses del

llamado ;)edio +riente4 contra el bloque c'ino?ruso del

capitalismo oriental @/A7S4, llevando al e:ilio masivo a millones

de personas y a la destrucción de inmensos territorios antes

considerados ;'ostiles< a E6. Esta guerra sólo recrudece la

pretendida dominación de espectro completo en los territorios

latinoamericanos, que igualan a los pa(ses de %sia central en

posibilidades para obtener tales recursos.

En )é:ico, el =ratado de -ibre 7omercio de %mérica del >orte

*ue sólo la obertura de los planes económicos del capital, sólo que,

con m9s urgencia que nunca, debemos dejar de entender el llamado

;desarrollo económico< de otra manera que no sea una o*ensiva


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integral contra todos los pueblos, en todos los rincones de nuestro

pa(s y del mundo, de car9cter pol(tico?militar. 5el mismo modo,

las o*ensivas pol(tico?militares ya no pueden ser comprendidas si

no es en su car9cter de guerra multidimensional o guerra de amplio

espectro.

-a guerra de amplio espectro, surgida de los manuales B) C1?D y

B) 211?01 de contrainsurgencia del ejército estadounidense

7ontral(nea 2F4, es un es*uer&o de intelectuales, como

)ontgomery )cBate2 -ópe& y /ivas, 01204 y militares como

Geo**rey 5emarest0

, que se plantean el dominio territorial total

1 McFate es una antropóloga estadounidense denunciada

por escribir manuales de contrainsurgencia que defenden

el uso de científcos sociales para asesorar expediciones

militares como la de Irak, donde se ha utilizado la

antropología para “conocer me!or a los pueblos

in"adidos e incluso para torturar, logrando, por e!emplo,

mediante humillaciones sexuales # tortura $ísica, que

insurgentes terminen colaborando con los in"asores% &ste

tipo de datos nos dan una idea de lo racionalizada que ha

sido algo como la tortura en las doctrinas militares del

mundo, haciendo ridículo cuando se dice que se trata de

un simple “exceso, por e!emplo, las "iolaciones sumarias

durante la represión del pueblo de 'tenco en ())*%

( +eore# -% .emarest es un militar estadounidense,

salido de la &scuela de las 'm/ricas, que ha publicado

traba!os sobre la llamada “geopropiedad, donde se0ala

todas las $ormas de propiedad de la tierra comunal,

e!idal, social2 di$erentes a la propiedad pri"ada como

enemigos del capital, en especial las comunidades

indígenas, donde los lazos sociales $uertes las "uel"en

“$ocos ro!os de insurgencia, al ser m3s propensas estas

comunidades a resistir ante el despo!o que los lugares

donde el te!ido social est3 $ragmentado 4a !ornada,


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por mar, tierra y aire4 del mundoH adem9s, se plantea que los

tiempos de la guerra sean ilimitados cada administración

gubernamental, tanto de E6 como de )é:ico o de cualquier

Estado del mundo, 'an tomado como tarea primordial la de la

guerra por la preservación in*inita del capitalismoH las luc'as de

pretendidos competidores en el imperialismo mundial son

intrascendentes ante los intereses del gran capital, dominado por

los banqueros y su sistema *inanciero.

$ero esta guerra es en esencia una guerra contrainsurgente, pues

para ejercer un dominio territorial es necesario el despojo de talterritorio, lo que no sólo implica un robo permanente de tierras,

sino toda una luc'a permanente de los pueblos en de*ensa de su

autonom(a *rente a la imposición del reordenamiento social

capitalista. -os manuales de contrainsurgencia estadounidenses

'an sido aplicados al pie de la letra por el Estado me:icano. =al es

el caso del creador de los grupos paramilitares en )é:ico, )ario/en9n 7astillo, quien llegó en *ebrero de 2CCI a 7'iapas como

comandante de la JAA /egión )ilitar para combatir al EK->, y se

encargó de traducir los manuales estadounidenses de

contrainsurgencia que sacó de la academia militar de Bort @ragg,

en E6. 5e esta traducción surgió el Manual de guerra irregular de

la SE5E>%, que 'a sido aplicado por los militares me:icanos

como su doctrina de guerra contra los pueblos -ópe& y /ivas,

2CCC4

-a guerra contrainsurgente desplegada en )é:ico se plantea no

sólo combatir al insurgente, sino evitar que surja. Qui&9 por eso las

)56)76182% &sto tambi/n nos da una idea de lo

racionalizada que est3 la desaparición $orzada, el

terrorismo # el asesinato de miles en el territorio

mexicano, teniendo la $unción de descomponer el te!ido

social para inhibir todo tipo resistencias, aunque no ha#an

aparecido siquiera%


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muertes por la ;guerra contra el narco< sean en su mayor(a de

jóvenes entre 2D y 0I a8os -a jornada, FL22L234 dis*ra&ados post?

mortem de narcos, por soldados, polic(as o por pseudo reporteros.

$ara evitar que surja el sujeto revolucionario, el estado me:icanose 'a posicionado en todos los *rentesH surge as( una guerra total

que abarca la guerra psicológica, económica, pol(tica, militar,

paramilitar y cultural, donde el ;enemigo< a vencer es cualquier

persona, as( se plantee una organi&ación pol(tica alternativa o no.

-a estrategia del poder en cada territorio es

desorgani&arLdestruirLreconstruirLreordenar -a jornada, 0ML21L2I4, por todos los medios posibles, todo territorio, para imponer un solo

tipo de propiedad, un solo tipo de organi&ación social en bene*icio

del gran capital. Entonces el terror y la represión se vuelven un

medio y un *in para el estado y los capitalistas.

)uc'o antes de la supuesta *uga del 7'apo, el 23 de junio pasado,

la )arina ya 'ab(a instalado dos bases de operaciones en

=ama&ula y en 7anelas, 5urango. Ese d(a, en la comunidad de

%ca'uane, en =ama&ula, tres 'elicópteros de la marina y elementos

terrestres entraron simplemente a causar terror torturando,

golpeando y, sobre todo, disparando desde tierra y aire 'acia las

casas y 'acia las personas que 'u(an de los uni*ormados

/evolución .1, 2ML1ML2I4. -os terroristas de los Black Hawkseran miembros de los Grupos %eromóviles de Buer&as Especiales

G%BES4, grupo entrenado por el ejército estadounidense e israel(

en operaciones de contrainsurgencia. 5esde entonces, la gente de

esa comunidad se vio obligada a despla&arse 'acia el municipio de

7osal9 Sinaloa4, donde siguen mani*estando su rabia contra las

*uer&as del estado. Este tipo de atentados no 'an sido e:cesos deunos cuantos elementos de la )arina, sino que se 'an repetido en

por lo menos veinte comunidades de la sierra, despla&ando a unas

trescientas *amilias m9s de mil personas4 de sus 'ogares.


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@ajo esta misma lógica se mueven los despla&amientos provocados

en el estado vecino de Sinaloa por la construcción de la $resa

$ic'acos, comen&ada durante el gobierno de Bo: e inaugurada por

7alderón, que implicó el despla&amiento de oc'ocientas *amilias

de por lo menos siete comunidades. =ambién implicó, en octubre

del 0123, el asesinato del organi&ador campesino %tilano /om9n

=irado, quien recibió un tiro en la cara por parte de dos sicarios, en

plena transmisión de su programa de radio, donde denunciaba los

despojos de tierras relacionados con la presa.

En 7'oi: *ue también asesinado, en mayo de 0123, /amón7orrales Jega, quien *uera organi&ador de la resistencia ante el

despojo de tierras para la minera $arado: Global /esourceH *ue

levantado y asesinado a tiros de escopeta. +tras D11 *amilias

*ueron despla&adas, pero no se sabe dónde est9n. % pocos

Nilómetros se encuentra la comunidad de Siba'aui, de ind(genas

mayos, que resiste ante la construcción del gasoducto Encino?=opolobambo. En estas &onas, las ci*ras estimadas de muertos ;por

el crimen organi&ado< ascienden a m9s de I mil Grieta.org,

2IL1IL2I4.

El asesinato selectivo, las ejecuciones sumarias, la tortura, la

masacre y el terror, parecieran sólo muestras de lo que pasa cuando

ya no 'ay ley, pero es necesario entender estas pr9cticas comoconsecuencias de la ley misma imponiéndose en bene*icio de la

acumulación capitalista.

En junio, oc'o alumnos de la Bacultad de umanidades *ueron

atacados con mac'etes, palos con clavos y bates por un comando

que entró a la casa donde estaban. -os polic(as presentes se

retiraron al momento de los 'ec'os y posteriormente se dedicaron

a tomar *otogra*(as, siguiendo las órdenes de agentes vestidos de


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civil. Esto ocurrió d(as antes de las elecciones, lo cual *ue

remarcado por los medios de comunicación, pero la coyuntura

electoral es insigni*icante tomando en cuenta la sistem9tica

represión vivida durante muc'os meses por los 'abitantes tanto de

Jeracru& como de $uebla, donde muc'a gente 'a sido 'ostigada y

encarcelada por de*ender sus tierras o protestar. El 02 de agosto

*ue asesinado /a*ael /ivera, alumno del campus $o&a /ica de la

6niversidad de Jeracru&, mientras iba dentro de un camión rumbo

a $uebla, con su *amilia. 5os sujetos se levantaron de sus asientos,

lo identi*icaron, le dispararon en el rostro y abandonaron la unidad.

El 0 de agosto *ue asesinado en su casa el pro*esor Kacar(as

%guirre 5om(ngue&H lo mataron a golpes mientras se encontraba

soloH su *amilia estaba *uera de la ciudad. $ocos d(as antes, dos

académicos m9s *ueron secuestrados durante 3D 'oras Sin

embargo, 03L1DL2I4. % estos casos se suman las muertes de la

activista >adia Jera y el periodista /ubén Espinosa, as( como la

estudiante Yesenia Quiro&, junto con la trabajadora %lejandra >egrete y )ile JirginiaH *ueron perseguidos desde Jeracru& 'asta

el 5B por asesinos pro*esionales $roceso, 1FL1DL2I4. -a represión

selectiva trasciende claramente los gobiernos estatales de 5uarte,

)ancera o cualquier administración local en turno.

En Jeracru& ya 'ay 311 po&os de fracking, amena&ando tierras

comunales de ind(genas y campesinos. )ientras tanto, pueblos

ma&a'uas y totonacas se organi&an contra el despojo en la sierra

que une $uebla y Jeracru&H m9s de cien comunidades con*luyen en

9 4os manuales de los +'F&: # los +';F&:, adem3s de

establecer un dominio territorial “por mar, tierra # aire,

tambi/n racionalizan la pr3ctica #a generalizada2 del uso

de agentes "estidos de ci"il “seg( e$ecti"os de los 77)) que con$orman

estos grupos habían sido reasignados “desertaron2 a

colaborar con di$erentes c3rteles como 4os ?etas # el de

:inaloa @ontralínea, 186)*6)52%


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la %samblea en 5e*ensa de la Jida y el =erritorio, y ya antes

detuvieron la construcción de cuatro 'idroeléctricas que pretend(an

privati&ar el agua del r(o %pulco. El $royecto /egional $etrolero

$o&a /ica?%ltamira y %ceite =erciario del Gol*o 012?01I4

plantean m9s de 00mil obras en MM,3F 'ect9reas, abarcando CC

municipios de Jeracru&, idalgo y $uebla.

% simple vista pareciera que las tesis gubernamentales tienen

ra&ón, que se trata un estado *allido, de in*iltración del narco en el

gobierno o 'asta de ;descomposición social


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punto de tr9*ico de personas y de mercanc(as en el mundo4 y los

municipios colindantes de )ic'oac9n y GuerreroH la segunda en el

7orredor Anteroce9nico de =e'uantepec de 7oat&acoalcos,

Jeracru&, a Salina 7ru&, +a:acaH y *inalmente, en $uerto 7'iapas,

cerca de la *rontera con Guatemala otro gigantesco punto de

tr9*ico de personas4. $odemos entender que, previo a estos planes,

se 'ayan instalado, por ejemplo, I0 @ases de +peración )i:ta en

Guerrero y +a:aca, destinadas a coordinar acciones entre polic(as

municipales, estatales y *ederales con el ejército, la marina y

grupos paramilitares o del narco, una de las cuales, por cierto, se

encuentra en Aguala.

7ada iniciativa gubernamental es una o*ensiva integral pol(tica,

económica, militar, psicológica y cultural, contra todos los

pueblos, procl9mense éstos libres o no. >o podemos, entonces,

entender la labor de cada administración del gobierno sin los

proyectos del gran capital, ni su injerencia económica sin la guerraclandestina que ésta implica. >o podemos entender la e:istencia de

un presidente sin la del sicario, ni la de un empresario sin el

torturadorH no podemos entender la vida pac(*ica institucional sin

la muerte de millones sobre la que se sostiene. =odas las

pretendidas e:presiones de ;normalidad< institucional se sustentan

con la muerte. =odas las iniciativas de las instituciones del estado

para mantenerse en pie, con todo y luc'a de *acciones y

oposiciones entre poderosos, con*luyen en el nico proyecto de la

acumulación in*inita de capital.


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$ero, "qué es lo que 'ace temblar a los capitalistas y sus proyectos,

al grado de que deben encomendar a los Estados nuevas *ormas de

'acer la guerra#

@asta con mirar la realidad y notar, por ejemplo, las cientos demiles de 'ect9reas de tierras comunales en 7'iapas y +a:aca que

no 'an sido saqueadas por el capital e:tranjero gracias a que

movimientos como el &apatista o el magisterial, junto a los

pueblos, las 'an de*endidoH 'oy d(a, en +a:aca, 320 municipios,

de IF1, se rigen por usos y costumbres mediante asambleas

comunitarias, y m9s de la mitad del territorio de 7'iapas es'abitado por comunidades autónomas. =enemos también ejemplos

como los que suceden en las m9s de F1 Escuelas Antegrales de

)ic'oac9n, donde los maestros se plantean que ;lo ético, lo

pol(tico y lo pedagógico deben ser, junto con lo 'istórico,

cient(*ico y tecnológico, los re*erentes *undamentales de la

*ormación del magisterio


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necesario por los niveles de represión, pero lo principal es la

concepción comunitaria de la justicia reapropiada por los pueblosH

est9n los medios alternativos de comunicación impulsados por el

magisterio democr9tico en +a:aca, los 7aracoles &apatistas donde

se plantea qui&9 m9s *uertemente la unidad de todo lo antes

mencionado, entre miles de e:periencias que van desde la

organi&ación de inmensos pueblos y territorios 'asta las

insumisiones cotidianas de todos nosotros.

Ansurgencias populares como las resultantes de la %samblea

$opular de los $ueblos de +a:aca, el EK->, la 7oordinadoraEstatal de =rabajadores de la Educación de Guerrero o el 7omité

Ejecutivo >acional 5emocr9tico, se plantean 'oy resistencias de

espectro completo, donde la luc'a pol(tico?territorial se embona

por *in a la cultura popular y la autonom(a. =odo esto, no se debe

olvidar, en medio de la guerra planteada por el Estado y el capital,

presentada a'ora ante nosotros casi desnuda, mostrando suverdadera piel de dinero y sangre, pero también podemos ver que

la dominación absoluta que pretende es y siempre ser9 imposible.


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#$I$A %RANCISCO $ILLA " LA RE$OLUCI&N'


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AS(ECTOS CR)TICOS !E LA CONTRAINSURGENCIAINTERNA

El poder libra con ventaja la guerra desde el momento en que logra

interiori&arse en la carne de quien luc'a por la emancipación ylibertad. 5ic'o lo anterior, no basta sólo una conciencia

revolucionaria, sino un constante planteamiento cr(tico *rente

aquello que desde adentro nos identi*ica con el opresor. -a guerra

de contrainsurgencia, como ya se 'a mencionado, actualmente

plantea el desplegar las estrategias de e:terminio, no sólo contra lo

que ya se 'a con*ormado como sujeto colectivo cr(tico y enresistencia, sino que también tiene la intención de desplegarse de

tal manera que se evite que surja siquiera ese sujeto colectivo

cr(tico al régimen, al establishment .

$ero aun si vamos m9s lejos, adem9s de que la estrategia de

contrainsurgencia es operada desde el aparato estatal represivo y

policiaco o narco4, también opera dentro de las propias

colectividades y organi&aciones que se incluyen dentro del

movimiento social de i&quierda. Es la contrainsurgencia interna

que se e:presa a partir de la b!squeda de protagonismo, la

e:presión de un celo político, de rivalidad entre colectivos y

organi&aciones, en la b!squeda de prestigio, en la falta de juicio

crítico dentro de las colectividades y en la e"altaci#n de laindividualidad , esto sólo por mencionar algunas *ormas.

En alguna ocasión ugo Kemelman dec(a que en los a8os D1

;O4 cuando uno anali&aba los discursos, desde el conservador al

'(per revolucionario, ambos ten(an algo en comn que compart(an

los mismos par9metros. Era no romper con los par9metros del

poder, desde el discurso m9s conservador 'asta el discurso

8 &s un t/rmino ingl/s usado para re$erirse al grupo

dominante "isible o /lite que ostenta el poder o la

autoridad en una nación%


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aparentemente m9s rupturista, respetaban una lógica de mirada.

Era la lógica de mirada que impon(a el poder.< Esto quiere decir

que, desde el momento en que se adoptan las *ormas de pensar que

el poder dicta, de recuperar la lógica de mirada de la pol(tica que le

pertenece al opresor, sustentada esta en )aquiavelo, en obbes, en

Bouc'é, etc., desde ese momento la contrainsurgencia ya se 'ace

e*ectiva en nosotros y contra nosotros. %s( pues, la *orma y la

mirada del poder est9 interiori&ada y se reproduce de manera

consciente y sobre todo desde la inconsciencia que la represión

*ormo en nosotros.

- (ol*tica +e terror e in+i,i+ualis-o

El miedo a la muerte nos trastoca y es vivido d(a a d(a desde lo

m9s recóndito de la propia corporalidad. )as el terror se 'a

implantado a su ve& desde una pol(tica de estado que impulsa la

masacre, la desaparición *or&ada, el encarcelamiento y el asesinato

pol(tico selectivo, etc., y todo pensado en *unción de las lógicas y

necesidades que el despliegue del capital impone. 7omo sociedad

vivimos el traumaI de una realidad apabullante, violenta, llena de

incertidumbre de un *uturo incierto, de un presente borroso, de un

pasado que se nos muestra enga8oso y cubierto de desmemoria4.

7 &l trauma aparece a partir de cualquier suceso quepro"oque en las personas una sobreexcitación que "a#a

m3s all3 de la propia tolerancia psíquica, razón por la cual

se "ea impedida la capacidad psíquica normati"a de las

personas para hacer la elaboración # la descarga de los

estímulos% .e no hacer consciente la experiencia

traum3tica, /sta se expresar3 en duraderos # di"ersos

trastornos # patologías en el su!eto, trastocando con ello

cierta organicidad psíquica que lo constitu#e% 'nte tal

situación, el trauma no sólo queda en quien lo padeció de

manera directa, este a$ectar3 tambi/n a las posteriores

generaciones%


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"Qué es entonces lo que el terror, el 'orror traumati&ante, provoca

en nosotros como sociedad# El terror parali&a, lo traum9tico nos

lleva a ;un estado de inde*ensión in*antil particularmente

signi*icativo en el caso de los traumati&ados por determinadas

e:periencias y donde4 el trauma puede producir desorientación

radical, con*usión, *ijación en el pasado y e:periencias *uera?de?

conte:to< -acapra, 011M4. -a e:periencia traum9tica de la

represión, del terror, como ya se 'a dic'o antes, implica en el

sujeto el desastre ps(quico debido a que la e:periencia traum9tica

reacomoda las coordenadas ps(quicas del sujeto. %nte la presencia

de un terror constante, dentro de una determinada realidad socio?

'istórica, como mecanismo de de*ensa se presenta en el sujeto el

*enómeno del repliegue a s( mismo, producto del sentirnos en un

estado de inde*ensión, lo que 'ace colocarnos en el pasado en

donde nos sent(amos m9s seguros ese lugar y ese tiempo sin

tiempo es el tero de la madre. =omando en cuenta lo anterior, una

sociedad llena de terror, es una sociedad en la que los la&ossociales se ven severamente lastimados. Se presenta como

*enómeno psicosocial cierto autismo generali&ado dentro de la

comunidad aterrori&adaH se implanta la e:presión social del

privilegio de la individualidad por sobre todo loLlos dem9s. %nte

esta situación, la e:periencia organi&ativa se vuelve en suma

compleja, pues implica reconstruir un tejido social roto organi&ar en nosotros mismos la capacidad de ser con el otro, con todo, para

lograrnos dentro de la con*ormación de una colectividad cr(tica y

contestataria contra el poder. El superar ese individualismo social

generador de escepticismos, con*ormismos y oportunismos dentro

de los espacios de poder, no es tarea *9cil, mas es una gran

limitante a superar si queremos incluirnos cada ve& m9s personas

dentro de e:periencias pol(tico?organi&ativas.

$ero la cat9stro*e causada en nosotros no termina con el repliegue

a s( mismo del sujetoH también, ante la idea abrumadora de la

pérdida de identidad, que surge por el terror, se presenta como


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mecanismo de de*ensa ps(quico lo que %nna Breud llamaba ;la

identificaci#n con el agresor


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a partir de la *orma Estado. 5esde occidente se nos 'a e:portado al

mundo Pde manera violenta? la concepción del estadoM como

mecanismo de control poblacional y territorial, y la *orma partido

como *orma de organi&ación pol(tica represiva también, en tanto

que reproduce la división del trabajo enajenante y la división de

sus miembros entre dirigentes y dirigidos, entre autoridad y

subordinado, lógicas que se reproducen, cabe mencionar, también

en la producción de valor capitalista como sistema económico?

pol(tico.

%s( pues, un estado de represión nos lleva a sentirnos objetos de la'istoria, a sentirnos maniatados, y el sabernos, consciente e

inconscientemente, inmersos dentro de una realidad terror(*ica que

no podemos trastocar, nos 'ace sentir culpables. Esta situación nos

aprisiona de cierta manera dentro de nosotros mismos, logra que

ante la realidad nos mostremos, 'asta cierto punto, ajenos e

incapaces de ser sujetos activos de su construcción, desde un posicionamiento ético?pol(tico cr(tico. /al $9ramoF, retomando el

an9lisis de las causas sociales del malestar psicológico, nos dice

que por ello, y en relación a la articulación con nuestro conte:to

;O4 nuestra reacción est9 te8ida por sentimientos de culpa

* &l &:A'.B, #a sea el burgu/s o el proletario, es, a

pesar de los motes # re$undaciones que se le quiera dar,un aparto utilizado por el poder para e!ercer un control #

dominio territorial # poblacional% &l surgimiento del estado

pues, solo se puede entender a partir de una sociedad

estratifcadaC por e!emplo, con la aparición de burguesía #

proletariado o, como en la DE::, con la aparición de

proletariado # politburó%

Ea


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*undamentalmente inconscientes4 ante nuestra *alta de

compromiso, ante nuestro relativo bienestar económico y ante

nuestra impotencia para reparar


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intenta negar a toda costa la e:presión colectiva de grupos, barrios

y comunidades, la propia imposibilidad mostrada 'asta cierto

punto por los grupos de lograr la construcción de e:presiones

organi&ativas, lleva a que se planteen acciones desmedidas y *uera

de conte:to, alejadas de un pensamiento estratégico. Si bien dic'as

acciones generan un ambiente propicio para la pol(tica del

espect9culo, no contribuyen a la autocreación de una subjetividad

rebelde, dada a partir de la e:periencia ganada al intentar construir

otros mundos emancipadores. En este sentido, la demostración de

valent(a y compromiso en las acciones servir(a para encubrir en

realidad ;la ausencia de re*le:ión y capacidad de trabajo


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$ero el celo no es propio del amoroso, también est9 presente en el

organi&ador, el dirigente, el militante, en el miembro de un

colectivo. /etomando la pregunta anterior, pareciera que el celoso

celara la capacidad del otro para reali&arse queremos tener, poseer,

ser como el otro, pero no lo somos. %parece as( pues en nuestra

carne una 'erida causada por la *rustración surgida ante la

ine*iciencia de reali&arnos, no sobre el otro, sino con el otro.

7elamos la destre&a de reali&ación de trabajo organi&ativo del otro,

su agude&a de pensamiento, la 'abilidad de relacionarse con los

dem9s, etc., mas al no poseer dic'as potencias la autoestima

decrece, y por tanto una *orma de restablecerla, se muestra de

manera agresiva al momento de plantear la negación de diversas

*ormasC4 del otro que representa la reali&ación de nuestros deseos

que desde la propia corporalidad se mani*iestan *rustrados.

-a presencia del celo implica la imposibilidad de la relación

solidaria con el otro. El compa8erismo entonces y la solidaridad,desde el celoso, se presentan como demagogia, pues el celoso

rivali&a, ya que el otro, en este sentido, siempre se presenta como

algo 'ostil dispuesto y capa& de robarle el amor de los dem9s, el

protagonismo, el prestigio, las relaciones con los otros, el

reconocimiento de la comunidad. El narcisismo desbordado que se

e:presa en el *enómeno del celo, contiene latente ;una me&cla de

depresión, agresividad y envidia


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prestigio, *ue la implicación ps(quica del sentirnos *rustrados,

incapaces de ligarnos activa e (ntegramente en la construcción de

la realidad social que nos oprime. 5ic'os sentimientos generan

gran displacer en tanto que la estima propia se pone en juego la

piel supura dolor, rencor, odio, coraje, *rustración, debido a la

sensación de impotencia pol(tica. -os estragos que la culpa logra

en el propio sentir son devastadores, pues la lógica perversa que

surge desde la concepción jud(o?cristiana, dicta que la culpa se

redime con castigo. $or ello la auto*lagelación del escepticismo,

del con*ormismo ;cada quien tiene el gobierno que se merece


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7uando un pueblo cree en s( mismo se vuelve invencible. El

sentimiento de impotencia y *rustración desaparece en la medida

de que nos involucramos a consciencia en procesos de

construcción de espacios de vida con compa8erismo, solidaridad,

autonom(a y dignidad.

- La 2alta +e 3uicio cr*tico

-a *alta de juicio es una actitud que imposibilita la con*ormación

sólida de una colectividad cr(tica. 5entro de las colectividades en

ocasiones se da la *alta de participación. El problema comien&a

cuando la individualidad comien&a a perderse dentro del grupo, y

ante el trauma de quedar e:puesto que el terror produjo en

nosotros, surge el miedo a desnudarse dentro de este. En ese

sentido dir(a /al $9ramo ;Quien simplemente obedece, no toma

sobre s( los riesgos de equivocarse. Se a'orra las incertidumbres

propias del ejercicio de la inteligencia


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individualidades. -o anterior 'ace que se prepondere la

individualidad, pero curioso es que, en el momento en que se

enjuicia a los operadores del poder, esa individualidad queda

disipada al cobijo de una totalidad abstracta. =al es el caso del

criminal de guerra na&i, %dol* Eic'mann, el cual *ue encargado de

operar uno de los campos de e:terminio de la %lemania *ascista.

En el momento del juicio, el perro del poder reconoció los atroces

cr(menes que cometió, pero carente de toda culpa, pues el criminal

declaraba ;yo sólo segu( las ordenes


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*amilia, siendo la *amilia21 a su ve& ncleo represivo y abstracto

que constituye al sujeto. -eón /o&itc'ner, en su libro Moral

burguesa y $evoluci#n, e:plica que el sentido de la totalidad se

deja de lado para sabernos no responsables tanto de los actos

propios, as( como del de los otros. En una parte de dic'o libro,

surgido a partir de entrevistas reali&adas a sujetos del poder, en el

conte:to de la invasión norteamericana a $laya Girón en 7uba, se

anali&a el caso de la pérdida del sentido de totalidad, tomando

como punto de partida a las tropas invasoras, diciendo de esto que

;En tanto avan&ada del capitalismo su presencia en 7uba

adelantaba, en el grupo, el esquema 'umano b9sico del sistema que

iban a implantar. $or eso encontraremos bajo la organi&ación

militar de las brigadas invasoras una jerarqu(a de *unciones

sociales que sinteti&a y compendia la división del trabajo social y

moral de la burgues(a el sacerdote, el 'ombre de la libre empresa,

el *uncionario diletante, el torturador, el *ilóso*o, el pol(tico, y los

innumerables 'ijos de buena *amilia. 7ada uno de ellos ejerc(a una*unción espec(*ica, y sin embargo *ue la totalidad, el grupo, quien

proporcionaba el sentido a las actitudes individuales.< $ero dic'o

lo anterior, ante los ojos del *ilóso*o, por ejemplo, dado que se

aleja de la noción de totalidad, logra entender su actividad como

un mero pensar, alcan&ando con esto autoe:imirse de su

responsabilidad en los actos del torturador.

ay que destacar que, si se da la constitución del sujeto represivo

y autoritario, entonces es a su ve& porque lo 'emos permitido. %s(

como el p9rroco y el pol(tico, a pesar de que cada uno cumple su

1) 4as primeras relaciones humanas que trabamos

comienzan con la madre, # el abrirse poco a poco al

mundo social implica abrirse dentro de la $amilia% M3s

cuando esta $amilia es nuclear, # no entendida como

te!ido social amplio, se constitu#e el primer n


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*unción, est9n implicados con el torturadorH as( también cada uno

de nosotros, que constituimos la sociedad, parte de la totalidad de

esta, estamos implicados en el 'ec'o de la emergencia del operante

de la dominación. El sentir la responsabilidad, y el sabernos

irresponsables, nos causa dolor, pues implica desnudarnos ante los

dem9s y estar dispuestos a poner en juego la propia estima, lo que

somos, el cómo somos, nuestras *ortale&as y debilidades, as( como

poner en juego el propio narcisismo al vernos incapaces de

comprometernos con nuestra realidad social, con la colectividad.

Y es as( como se recupera el segundo punto. "Qué causa el 'ec'o

de que se dé la *alta de participación activa dentro del grupo

opinar, pensar las tareas, cumplir con lo acordado en colectivo#

@ien, pues ante esto cabr(a retomar el impacto que el terror social

vivido logró en nosotros, en tanto causa *undamental de la

con*ormación de sujetos replegados en s( mismos. $ues dic'o

sentimiento est9 implicado al momento de que participamos dentroy ante el grupo con miedo por temor a quedar desnudos, por

ejemplo, al momento de opinar y e:poner la propia ignorancia, al

proponer y ser denostados, al criticar y ser e:cluidos del cobijo de

la colectividad, etc. 7laro es, no solo se debe partir de la mirada

desde la autoin'ibición dentro del grupo, mas cabr(a preguntarnos

"por qué podemos llegar a sentirnos ju&gados dentro del grupo,valorados en poca estima y alejados de sentir con*ian&a para

criticar al otro# %nte esta cuestión, podr(amos decir que, aparte de

la propia consciencia represiva, que nos lleva a autocensurarnos, y

que es parte de nuestra constitución ps(quica debido al triun*o del

terror, se podr(a decir también que aparte de lo anteriormente

dic'o, se necesita la presencia real y e*ectiva de la represión

e:terna para que una colectividad acr(tica y vertical se dé. 7uando

un compa8ero opina y le denostamos por su participaciónH cuando

un compa8ero propone una actividad y demostramos desprecio en

lugar de cr(ticaH cuando un compa8ero critica, y a urdidas le

anulamos con calumnias, c'ismes, c'istes, logrando as(


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despla&arloH cuando a un compa8ero lo criticamos *ocali&adamente

de *orma visceral como si las v(sceras no *ueran contra el

enemigo4, d9ndole a la cr(tica en este sentido la intención,

consciente o inconsciente, no de plantear una observación, sino de

anular al otro por desprecio a este lacer9ndole la autoestima y su

capacidad de abrirse en con*ian&a dentro de la colectividad.

7uando ocurre el anterior tipo de cosas dentro de los grupos que se

posicionan autónomos, 'ay que 'acer consciente el 'ec'o de que

reproducimos la represión del estado, le 'acemos el trabajo al

poder, logramos la contrainsurgencia interna. $or tanto, es

necesario que dentro de la organi&ación, como miembros, esté el

es*uer&o siempre presente en todos nosotros de 'acernos

responsables de nuestro 'acer, de ser autocr(ticos con la *orma en

que nos relacionamos como compa8eros.

)as cabe mencionar, que no se puede partir de la voluntad de

autocr(tica del otro para no ser reproductor del poderH de 'ec'o,muc'as de las veces, la autocr(tica dentro del colectivo, lejos de

e:ponerme, en realidad in'ibe la capacidad de cr(tica que los otros

pudieran tener en m(. Es decir, me ;autocr(tico< ante el grupo para

no 'acerlo de verdad. -a autocr(tica no es pues el mero acto de

reconocer, por ejemplo, el mac'ismo en uno mismo, ¡no!, la

autocr(tica implica estar dispuestos a negar lo que somos a travésde reali&ar la displacentera tarea de empe&ar a reconocer lo que no

quiero ver en m( y que por tanto aparece generalmente ante

nuestros ojos como oculto o develado. % pesar de los es*uer&os que

todos pudiéramos tener, en*ocados en no reproducir el poder, el

ejercicio de de*ender la autonom(a en todo momento dentro de la

colectividad es esencial, y esto tiene que ser a costa de toda

represalia yLo en contra de toda conveniencia.

-a disposición real a ser sujetos constructores de la 'istoria, 'oy

debe estar presente ante el estado global de las condiciones

sociales de vida. + intentamos construir un mundo en donde Eros


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cabalgue sobre el lomo potrero de la muerte, o =9natos se posar9

orgulloso sobre los millones de esqueletos vivientes que a diario

desec'a el capital en nombre de su dios 5inero. El reto de

organi&arnos, de crear colectividades y resistencias desde la

autonom(a y tomando en cuenta cualquier 9mbito, es esencial para

construir espacios de vida a nivel global.

LA GUERRA CONTRA LA E!UCACI&N COMO (ARTE

!E LA GUERRA CONTRA LOS (UEBLOS

El M de agosto del a8o 011, la polic(a irrump(a violentamente en

la normal rural de )actumact&9 en el estado de 7'iapas. Este

suceso se convert(a en el punto m9s alarmante de una resistencia

que comen&ó ese mismo a8o, cuando el gobierno 7'iapaneco de

$ablo Sala&ar )endiguc'(a, con el *in de *inanciar el aeropuerto y

el estadio J(ctor )anuel /eina, solicito un préstamo al @anco

)undial, el cual accedió con la nica condición de que se cerrara

la escuela normal y se convirtiera en una secundaria técnica

semiprivada. %nte esto, los estudiantes, junto los maestros y la

comunidad, reali&aron movili&aciones para de*ender la normal a

las cuales el estado respondió con la represión del M de agosto. -os

'ec'os violentos culminaron con la detención de m9s de 011

personas entre alumnos, maestros y padres de *amilia. ubo

cientos de personas 'eridas y la polic(a asesino a golpes al joven

oel )art(ne&.


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El caso de la escuela normal de )actumact&9 resuena entre otros

casos m9s donde la violencia del estado me:icano se 'a ejercido

contra proyectos de educación popular. -a destrucción de*initiva

de la normal rural del )e:e para ser convertida en una escuela

técnica o la desaparición de los 3 normalistas de %yot&inapa en

Aguala son solo algunos ejemplos. %nte esto 'abr(a que preguntarse

"qué es aquello que liga estos 'ec'os de violencia por parte del

estado contra proyectos educativos# "% qué responde la intención

de desaparecer las ltimas escuelas normales rurales del pa(s y

convertirlas en escuelas técnicas# "7u9l es el papel de los

organismos *inancieros internacionales como el @anco )undial y

el Bondo )onetario Anternacional#

% lo largo de los ltimos a8os en los cuales el modelo neoliberal se

'a venido desplegando, se 'a planteado una guerra contra los

pueblos en todas las dimensiones posibles pol(tica, militar,

económica, psicológica y cultural4. El intento, por parte del poder global, para desaparecer los proyectos de educación popular y

establecer una educación 'omogénea acorde a sus intereses, no se

puede ver separado de esta guerra contra la vida a nivel mundial.

- El -o+elo +e e+ucaci4n neoliberal co-o pro.ecto +econtrainsurgencia

-a guerra contrainsurgente desplegada por el capital se presenta

de distintas maneras desde la m9s visible, mediante ataques

directos a las comunidades por parte de grupos militares,

policiacos o del narcotr9*icoH perpetuando asesinatos, violaciones,

desapariciones *or&adas, generando despla&amientos poblacionales

y destruyendo el tejido social para apoderarse de recursos, 'asta de

*ormas sutiles encubiertas que muc'as veces se dis*ra&an de

progreso o de solidaridad.

-os nuevos proyectos educativos del neoliberalismo *orman parte

de esta guerra y se despliegan en ambas *ormas por una parte


30/38

est9n los ataques directos del estado como en los evidenciados en

las represiones que los normalistas rurales 'an padecido y por otra

parte se encuentra el plan de establecer un modelo educativo

privado que 'omogeni&a la propuesta pedagógica para la

*ormación de mano de obra capacitada que sea capa& de seguir

abonando a las grandes arcas del capital.

El interés del proyecto neoliberal se vuelve evidente cuando se

sabe que organismos internacionales, como el @anco )undial, la

+75E y el Bondo )onetario Anternacional son los m9s

involucrados en impulsar modelos educativos en los distintos pa(ses alrededor del mundo, modelos que est9n inclinados a

privati&ar y 'omogeni&ar la educación. El mismo banco mundial

'a calculado que si la educación se privati&ara podr(a generar una

ganancia de 3 trillones de dólares anuales, un bot(n jugoso que el

capital no se puede permitir perder. "En qué consisten estos

modelos educativos#

-os grandes proyectos de educación que se desprenden de los

organismos internacionales, se crean partiendo del suponer al

sistema actual como la nica *orma en la cual se puede organi&ar el

mundo. %nte esto, las relaciones de dominación caracter(sticas del

capitalismo son reproducidas dentro de la relación que se da entre

los educadores y los educandos. %s(, la din9mica de aprendi&aje seda entre un sujeto que sabe educador4 y un sujeto que no sabe

educando4, el educador se encarga de proporcionar la in*ormación

que se necesita y el educando de recibirla pasivamente sin

cuestionarla. $aulo Breire nos dice en su libro %edagogía del

oprimido, que esta *orma de aprender responde a una educación

que él denomina como educación bancaria, educación ;Oque se basa en una de las mani*estaciones instrumentales de la ideolog(a

de la opresión la alienación de la ignorancia con la cual esta se

encuentra siempre en el otro< Breire011I4 %nte esto, el sujeto que

aprende no es otra cosa que un recipiente que recibe la


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in*ormación, de manera que se perpetua la cosi*icación del sujeto,

lo cual es el principal supuesto antropológico que da sentido al

proceso de la *ormación. En este caso, cosi*icar a un sujeto es

reducir todas las dimensiones de su ser a la condición de un

;objeto< que solo e:iste en cuanto es mercantili&able. Se deben

resaltar dos aspectos en primer lugar, quitarle a un sujeto la

capacidad de elegir y elegirse es instrumentali&arlo y subordinarlo

a la voluntad de otros para decidir por él. En segundo lugar,

cuando se mira a un ser 'umano como un ;simple objeto< el

aspecto ético que debe mediar las relaciones 'umanas desaparece

porque este no e:iste en una relación sujeto?objeto.

+tro aspecto importante a resaltar es el car9cter individuali&ante

t(pico de estos modelos educativos. En la actualidad, es comn que

los planes de estudio desde la educación b9sica a la superior se

estable&can bajo el modelo de competencias, el cual parte de la

idea de que la educación debe proporcionar a los sujetos ciertas'abilidades para poder competir por empleos en el mercado

laboral. $or supuesto que dic'as 'abilidades est9n subordinadas al

criterio de o*erta y demanda en el mercado, y lo impl(cito es que

para obtener un empleo el otro se vuelve un rival al cual 'ay que

superar. 5inami&ar la educación bajo esta perspectiva rompe con el

tejido social y *omenta la violencia entre los sujetos que ya no se

observan como un nosotros sino como sujetos atomi&ados que

solo pueden pensar en el bene*icio propio. -a educación deja de

ser con el otro para convertirse en una educación que tiene como

*inalidad situar al individuo sobre el otro.

"5e qué manera se puede relacionar todo lo anterior con el

proyecto contrainsurgente# En primer lugar una educación quecosi*ica a los sujetos ya es lo bastante violenta, cosi*icar es

des'umani&ar, convertir al sujeto en autómata, desproveerlo de

toda dignidad, es matarlo. En segundo lugar, una educación que

tiene como *inalidad adaptar al sujeto al mundo de la dominación


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niega toda posibilidad de que se cuestione y se critique dic'o

mundo, con esto, queda reducida la posibilidad de trans*ormarlo o

de crear nuevos mundos. -a persona que se *orma bajo los

par9metros de un modelo neoliberal ni siquiera tiene la posibilidad

de pensarse a s( misma sino que es pensada por alguien m9s para

*ormar parte de la maquinaria del capital. -a sociedad

individuali&ada disminuye la posibilidad de la organi&ación en

comunidad, de la reunión de los sujetos para pensar las

problem9ticas y resolverlas en conjunto. 5e esta manera la

contrainsurgencia se vuelve e*ectiva al in'ibir al sujeto

revolucionario antes de que surja y da pie a que el sistema

'egemónico se siga reproduciendo. 7rear sujetos ajenos a las

problem9ticas de su propio entorno también *acilita que los

proyectos de despojo puedan llevarse a cabo sin ninguna

oposición.

En )é:ico, el despliegue de este proyecto mundial no se 'a 'ec'oesperar, desde el establecimiento del modelo por competencias

como modelo nico en las escuelas de todos los niveles, 'asta la

re*orma educativa impulsada por el gobierno de Enrique $e8a

>ieto y que, m9s que re*orma educativa, es una re*orma laboral

dis*ra&ada que tiene como principal *inalidad, desarticular los

movimientos de resistencia dentro del magisterio y, por otro lado,

dar pie a la privati&ación paulatina de la educación22.

11 =ara tener una "isión m3s amplia de lo que representa

la re$orma laboral sería de suma importancia "erifcar el

apartado de la misma que habla sobre una supuesta

“autonomía de gestión, en la cual se pretende que los

padres de $amilia se encarguen de cubrir los gastos que

surgen de las instalaciones escolares, lo cual sería mu#

di$ícil para las $amilias de ba!os recursos # daría pie a que

el sector pri"ado entrara con m3s $acilidad en el 3mbito

de la educación ba!o el pretexto de cubrir dichos gastos%


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%nte esto, la resistencia no se 'a 'ec'o esperar, y distintos sujetos

colectivos se 'an lan&ado a la re*le:ión por crear proyectos

pedagógicos que *orman parte de su agenda de luc'a y resistencia

contra el capitalismo.

- Una alternati,a en la re2le5i4n pe+ag4gica1

-os distintos sujetos colectivos que se 'an dado la tarea de pensar

una pedagog(a alternativa a la propuesta por el proyecto neoliberal,

'an partido de la idea de que, ante una situación de violencia como

en la que se vive actualmente, no se puede pensar en una

pedagog(a que parte desde otra cosa que no sea la condición de

sujetos que buscan liberarse, es por eso que se piensa en una

pedagog(a de la liberación de la cual tenemos diversos ejemplos.

El )ovimiento $edagógico >acional $opular )$>$4 que se

desprende del 7omité Ejecutivo >acional 5emocr9tico 7E>54

parte de re*le:ionar otras maneras de pensar la educación. -a problem9tica que este movimiento se 'a planteado es que la mala

calidad de la educación que se vive en )é:ico actualmente, es

producto de una crisis arti*icialmente deducida por la ultraderec'a

me:icana para legitimar el proyecto de nación pensado desde el

neoliberalismo ern9nde& Ariberri, 01224 ante esto, el movimiento

llegó a la conclusión de que lo ético, lo pol(tico y lo pedagógicodeben ser, junto con lo 'istórico, cient(*ico, tecnológico y art(stico,

los re*erentes *undamentales en la *ormación del magisterio.

El )$>$ denuncia que en la discusión sobre los modelos

pedagógicos a nivel nacional se 'a dejado a*uera al magisterio y,

sin embargo, es a este al que se le culpa de la mala situación

educativa del pa(s. Es por esto que el debate pedagógico dentro delmagisterio no se 'a 'ec'o esperar para generar una

contrapropuesta que 'aga *rente al modelo impuesto desde el

poder.


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El movimiento se 'a encargado de replantearse cu9l es el papel

que juega el maestro en una sociedad que 'a quedado subordinada

a los intereses del mercado mundial, por lo cual la identidad del

maestro se 'a puesto a discusión para proponer un sujeto

pedagógico popular que se encuentre al servicio del pueblo antes

de venderse a los intereses de la elite me:icana que trabaja para el

capital mundial.

@uena parte del producto de las discusiones que 'an llevado a

cabo este movimiento esta vertido en el documento ;$rograma

>acional %lternativo de Educación y 7ultura< $>%E74 quecaptura la e:periencia de distintos procesos educativos que se 'an

gestado dese lo popular.

En dic'o documento, se promueve una educación bajo la m9:ima

de que la ense8an&a debe ser un instrumento liberador. Este es un

modelo que incluye una *ormación 'uman(stica, que va ligada a la

de*ensa de la integridad y la soberan(a sobre el patrimonio

económico, pol(tico, social, natural y cultural de la nación, lo cual

ya entra en contradicción con el proyecto de despojo que el

capitalismo mundial 'a venido desplegando en todas las partes del

planeta.

+tra parte importante que el programa busca *omentar es lademocracia, la solidaridad, la dignidad y la convivencia tomando

en cuenta todas las dimensiones del sujeto y abord9ndolo tanto en

su car9cter individual como colectivo. Ya de inicio, digni*icar al

educando da cuenta de una manera totalmente distinta de pensar la

educación, contraponiéndose a la visión alienante y cosi*icadora de

la educación neoliberal, adem9s de que una educación pensada

desde la dignidad da pie a construir nuevas *ormas de relacionarse.

-o que se recupera en dic'o documento se 'a llevado a la pr9ctica

desde 2CCI en los que 'oy se conoce como las Escuelas Antegrales


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en el estado de )ic'oac9n, en las cuales, la actividad de la

educación toma una perspectiva totalmente distinta.

Estas escuelas se caracteri&an por la inclusión activa de los padres

de *amilia y de toda la comunidad, en ellas se promueve desde lom9s peque8o 'asta lo m9s grande la organi&ación asamblearia en

la que todas las voces cuentan. %dem9s, son escuelas estructuradas

de manera que no tiene un director, esta *igura es sustituida por un

coordinador que ejerce sus *unciones bajo la m9:ima &apatista de

mandar obedeciendo, y que es rotativo, por lo cual, toda la

comunidad, alumnos, maestros y padres de *amilia se encargan de participar directamente en el proyecto.

El aprendi&aje de o*icios y actividades pr9cticas para la vida

cotidiana juegan un papel importante y este no solo incluye a los

alumnos sino también a los padres de *amilia. Se desarrollan

actividades posteriores a las clases como el trabajo en 'uertos, o la

elaboración de artesan(as.

Este tipo de escuelas 'an *ortalecido el tejido social en &onas

donde la violencia por parte del narcotr9*ico se encuentra presente,

de manera que proyectos como este 'an mantenido alejados a los

ni8os y jóvenes del crimen organi&ado, adem9s de que las

organi&aciones dentro de la misma comunidad se 'an *ortalecidoante los proyectos de despojo o de violencia por parte del estado.

% la *ec'a e:isten 0M escuelas integrales adem9s de 33 que se

encuentran en proceso de incorporación, lo que quiere decir que

son F1 escuelas de los niveles de educación Anicial, preescolar,

primaria regular e ind(gena4 y secundaria atendidas por II1 a M11

maestros, que servir(an a una población de 3,D11 a I,111alumnos. Esto representa un proyecto que est9 'aciendo *rente

ante los modelos educativos alienantes y cosi*icadores que se

gestan desde el orden mundial 'egemónico y dan cuenta de la


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posibilidad de una educación al servicio de la gente que sirva para

que los sujetos se realicen en conjunto.

%ctualmente, es necesario recuperar la importancia de la

educación para dejar de reproducir las relaciones que se imponendesde el capitalismo y comen&ar a construir la idea de otra

realidad. -as Escuelas Antegrales y el )$>$ son solo dos ejemplos

de la diversidad de propuestas. El én*asis aqu( es la importancia de

la luc'a por la educación. Ampedir que los poderosos 'agan de la

educación un instrumento para la dominación, priv9ndonos de la

posibilidad de que se *ormen sujetos activos, cultos, cr(ticos,sensibles y solidarios que den cabida a la posibilidad de pensar

otros mundos.

)N!ICE

CONTRAINSURGENCIA ESTA!O " BARBARIE


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AS(ECTOS CR)TICOS !E LA

CONTRAINSURGENCIA INTERNA

LA GUERRA CONTRA LA E!UCACI&N COMO

(ARTE !E LA GUERRA CONTRA LOS (UEBLOS


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contribuir al an6lisis la cr*tica . la re2le5i4n +es+e la reali+a+

pol*tico7social 0ue se ,i,e en M85ico1 So9a-os la a9orana

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