LOS TRES CERDITOS

Había una vez tres cerditos que eran hermanos; Hugo, Paco y Fernando los tres se fueron a vivir junto al rio para poder bañarse todos los días. El más grande de los hermanos que se llama paco les dijo que sería bueno que se pusieran a

construir sus propias casas para estar protegidos, porque ahí donde vivían siempre estaba lloviendo mucho y podrían llegar a mojarse. A los otros dos les pareció una buena idea, y se pusieron manos a la obra, cada uno construyó su casita. 

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Dijo el más pequeño que se llama Hugo la mía será de paja, porque la paja es blanda y se puede sujetar con facilidad. Terminaré muy pronto y podré ir a jugar, junto a la orilla del rio.

El hermano mediano que se llama Paco decidió que su casa sería de madera: - Puedo encontrar un montón de madera por los alrededores - explicó a sus hermanos, - Construiré mi casa rápidamente con todos estos troncos y me iré también a jugar, con mi hermano Hugo a la orilla del rio.

El mayor Fernando decidió construir su casa con ladrillos. - Aunque me

cueste mucho esfuerzo, será muy fuerte y resistente, y dentro estaré cuando comience a llover. Le pondré una chimenea porque cuando llueve hace mucho frio y me voy a congelar.

Cuando las tres casitas estuvieron terminadas, los cerditos cantaban y bailaban en la puerta, felices por haber acabado con sus casas y así podrán estar muy seguros de no mojarse con la lluvia.

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Jugaron por un rato, cuando de repente escucharon un ruido y se quedaron quietos escuchando, Detrás de un árbol grande apareció el lobo, rugiendo de hambre y gritando: tengo mucha hambre me comería unos cerditos o un caballo, pero se me antoja mejor una gran sandia, haaaa!!!! Mejor buscare un árbol de manzanas y ahí me quedare a comer.

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Los cerditos estaban escuchando y cada uno se escondió en su casa, pensando que el lobo se los podría comer y ahí dentro de su casa estarían a salvo, pero de repente comenzó a llover fuertemente y el Lobo Feroz no tenía donde refugiarse camino, camino y encontró la casita de paja del hermano pequeño Hugo y en la puerta aulló; pidiendo auxilio ayúdenme me estoy mojando. 

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¡Cerdito, ábreme la puerta! - No, no, no, no te voy a abrir. - Pues si no me abres, me voy a morir de frio, está lloviendo mucho.

El cerdito pequeño Hugo le dijo por la ventana que no le abriría porque temía que se lo fuera a comer, “ tú eres malo y los lobos se comen a los cerditos” el lobo se fue caminando enojado por el bosque tratando de encontrar una casa donde refugiarse.

La lluvia comenzó a caer que las casas de los cerditos Hugo y Paco, se derrumbaron todos corrieron tan fuerte a casa del cerdito mayor Fernando, pero atrás de ellos venia el lobo; los cerditos, pequeño y

mediano se asustaron porque pensaron que el lobo se los quería comer venia corriendo a tras de ellos.

Los cerditos entraron a la casa y dejaron al lobo a fuera, ellos tenían mucho miedo que se los comiera el lobo! Pero después se pusieron a

platicar que no deberían dejar al lobo pues el podría enfermarse. Decidieron brindarle una oportunidad y confianza; se asomaron por la ventana y le gritaban al lobo; lobo, lobo ven; vamos a confiar en ti, te vamos a dar una oportunidad.

Pero enseguida dejo de llover y los cerditos salieron a jugar e invitaron al lobo todos juntos en el bosque se divertían. Platicaron con el lobo; y le

propusieron que le ayudarían hacer su casa, así que manos a la obra comenzaron a levantar materiales para ayudarle.

Y así este cuento se ha terminado!! Que te pareció esta historia …………

¿crees que los cerditos debían confiar en el lobo?