La verdad y el Código Da VInci

1. ¿Qué es verdad?

R/ La verdad es la adecuación de la mente con la realidad.

2. ¿Qué es certeza?

R/ Es el estado de la mente en el cual ella no duda, con seguridad y sin miedo a errar, de la proposición ofrecida al intelecto.

3. ¿A qué fundamentos acudimos en la disputa despertada por el Código da Vinci y su respectiva versión de lo que son los evangelios canónicos y los evangelios gnósticos?

R/ Podemos acudir definitivamente a los hechos mismos, recurriendo a los textos validados por la Tradición como verdaderos y confrontados o comparados con los textos encontrados en Qumrán y en Nag Hammadi. Es decir, sin prejuicios confrontar los textos mismos, ¿qué dicen ellos? ¿En qué contexto se encuentran?

4. Con sinceridad diga Ud. Cómo se puede resolver esa disputa. O si honestamente no tiene solución.

Sí tiene solución. Como lo demuestran las aclaraciones que han hecho grandes investigadores del Opus Dei y de otras comunidades. En efecto, en confrontación con los hechos mismos de los textos se puede decir que el Código Da Vinci es una historia ficticia, el problema es que el autor dice que está basada en hechos reales, lo cual hace de su novela un ataque (turba algunas conciencias) directo (aunque falso!) al cristianismo. La cuestión de ahora es ir desmintiendo todas y cada una de sus premisas fantasiosas a partir del dato verdadero de la realidad. Por ejemplo (los datos de aquí son sacados del artículo “las mentiras y desvaríos del Código da Vinci” del Dr. James Kennedy): es mentira que el Nuevo Testamento sea un falso testimonio, la verdad es que por él, los apóstoles y sus discípulos, murieron, fueron martirizados. En cambio, los evangelios gnósticos estaban escritos por herejes, libertinos por un lado y rigoristas por el otro, al parecer, nadie murió por defender sus creencias. Es falso que Constantino se inventara la divinidad de Jesús, ya los primeros cristianos lo llamaban Señor, kurios, que designa la divinidad; incluso para un judío era totalmente prohibido llamar a un humano “señor”; aun más, a Cristo lo mataron por declararse Hijo de Dios. Es falso que Cristo se casara con la Magdalena, los evangelios nunca lo atestiguan, solamente aun pasaje muy endeble en el supuesto libro de Felipe que dice que Jesús besaba a la Magdalena, en todo caso, dice un teólogo se trataba del ósculo santo de la paz, además, este texto

data del 200 d.C, dando pie a informaciones manipuladas o tergiversadas por intereses personales. Es mentira que Leonardo Da Vinci pintara a María Magdalena junto a Jesús en la Última Cena, la verdad es que ¿dónde, entonces, estaba Juan? ¿Debajo de la mesa? Es mentira que los evangelios gnósticos enseñen la feminidad sagrada, expresando que el sexo con una mujer es el camino de una relación con Dios, la verdad es que en los evangelios gnósticos hay una visión totalmente negativa de la mujer, incluso para ser salvada Dios la debe transformar en un hombre. Así termina maravillosamente el artículo de Kennedy: “Asombrosamente, aunque vivimos en la edad de la información, también vivimos en la edad de la desinformación masiva. La Biblia dice que Satanás es “el príncipe del poder del aire” (Ef. 2.2) y que en los últimos tiempos, “los hombres no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír se apartarán de la verdad y se volverán a las fábulas” (2 Tim. 4.3). ¿No es eso lo que está sucediendo en nuestros días? Yo confió que Dios puede cambiar todo esto para nuestro bien y que lo usará para darnos la oportunidad de compartir el verdadero evangelio del verdadero Salvador que dio su vida y derramó su sangre para poder ser perdonados, redimidos y salvos por su gracia, por la fe.”

5. Consulte en Internet sobre los documentos hallados en Qumrán y en Nag Hammadi.

R/Qumran, antiguo asentamiento judío en Palestina, cerca de las grutas donde se encontraron los denominados Manuscritos del Mar Muerto en 1947; está situado en la orilla noroeste de dicho mar. En la época de Cristo, Qumran era el centro de una gran comunidad religiosa, probablemente de la secta esenia. Los esenios se escindieron de la religión judía en el siglo II a.C., y, perseguidos por los Macabeos, huyeron al desierto, que les pareció muy adecuado para su vida ascética. El enclave de Qumran, donde muchos vivían en las cuevas y en los acantilados circundantes, fue probablemente ocupado hacia el 135 a.C. Abandonado tras un terremoto en el 31 a.C., fue finalmente destruido por los romanos en el 68 d.C.

Tras el descubrimiento de los manuscritos, Qumran fue cuidadosamente excavada. Los arqueólogos pudieron identificar algunas habitaciones que se habían utilizado para el estudio y el culto, otras aparentemente usadas para las comidas comunales, una espaciosa cámara con tinteros (quizá el escritorio donde se copiaron los manuscritos) y piscinas para el baño. En un cementerio situado en las proximidades aparecieron más de mil tumbas.

En 1945, en la antigua Nag-Hammadi, en el Alto Egipto, fueron encontrados en torno a 50 textos gnósticos en escritura copta. Podrían ser datados en el siglo IV d.C., pero el estudio de sus características y de su contenido mostró que eran traducciones de textos griegos quizás del siglo II, lo que los situaría entre las fuentes más antiguas para el cristianismo gnóstico. Estos textos han aportado información muy valiosa para comprender la evolución del cristianismo en Egipto, especialmente para sus variantes no ortodoxas. La colección completa de los textos de Nag-Hammadi fue publicada en inglés en 1977.

6. Exponga su parecer sobre la relación que existe entre esos documentos y los cuatro evangelios canónicos de Marcos, Mateo, Lucas y Juan.

R/ Según la Tradición de la Iglesia por acción del Espíritu Santo declaró canónicos los Evangelios de Marcos, Mateo, Lucas y Juan. Diciendo, en efecto, que son inspirados por Dios. En cambio, los otros evangelios no los tomó como canónicos, muchos están influenciados con doctrinas personales del escritor, a diferencia de los canónicos que son impersonales, también están influenciados por doctrinas que fueron declaradas heréticas y combatidas posteriormente como el gnosticismo, el maniqueísmo, esoterismo, doctrinas, en definitiva, ajenas al espíritu del Buena Nueva de Cristo. Sin embargo, no por eso pierden su valor, muchos evangelios apócrifos nos dan valiosa información filológica; también nos ofrecen conocimientos de las antiguas comunidades cristianas, algunas creencias que tenían; nos dan incluso algunos datos afirmados por la Tradición pero que no se encuentran en la Escritura, por ejemplo, los padres Joaquín y Ana de la Virgen María, o su presentación en el Templo y muchas más.

7. Finalmente, como filósofo, atrévase a plantear una salida airosa ante el tema de la verdad o relación de la idea con la realidad.

R/ La verdad es una adecuación de la mente con la realidad. Las ideas contenidas en ella deben estar de acuerdo con las cosas. De lo contrario, habría error (sin percatarse) o mentira (sabiéndolo). La verdad como adecuación también muestra una característica esencial de la verdad como develación, es así que si se adecúa la mente a la cosa es que ella se muestra de alguna forma, no está dormida, está activamente iluminando nuestro intelecto que aprehende la cosa y se hace de una forma ella. Así se puede resumir que la verdad es la adecuación del intelecto con la manifestación luminosa de la realidad.