Conocer Madrid Paso a Paso

7/25/2019 Conocer Madrid Paso a Paso

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CONOCER MADRIDPASO A PASO

EMILIO DOMINGUEZ - MARIA PAREDES


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NOTA DEL AUTOR

Madrid, es un pulpo con una enorme cabea! la capi"al# Es"a, e$"iende sus"en"%culos &as"a casi as'i$iar cuan"o le rodea, ( a sus mismos )ecinos# En"onces

Madrid, se con)ier"e en un au"*n"ico a+obio, ( no es e$"rao ue el eslo+an . Madridme ma"a/ &a(a sus"i"uido el dic&o "an conocido . de Madrid al cielo/, por cier"o, ue*s"e 0l"imo es corrupci1n, ( debe decirse de .Madrid el cielo/, lo cual, es muc&o m%s

a2us"ado a la realidad# Si de al+o "iene Madrid ue sen"irse )erdaderamen"e

or+ullosa, es de su cielo ( de su lu## en consecuencia, &as"a al propio 3el%ue lecau"i)aron##


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INDICE

MADRID###PUN4O 5 APAR4E#

MADRID 6AS4ILLO 7AMOSO

8A8ILONIA ESPA9OLA#

:M -O- OPERA#

UNA LINEA RE64A! LA 6AS4ELLANA#

GRAN 3IA ,UNA 6ALLE DE MADRID#

LA3APIES 5 EL 6;ULO MADRILE9O#

5 EN MADRID ADEMAS#

UNA GALA EL PAULAR#

EN4RE LOS 3ALLES DEL ;ENARES 5 DEL 4A=U9A#

MADRID > 4OROS DE GUISANDO#

ARAN=UEZ POR O4RO 6AMINO#

MAS ?UE 3ER#


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Que a Madrid le tocara la china de ser la capital del reino, no fue algo queella buscara. Lo decidi Felipe II y desde aquel mismo momento ao !"#, este hecho, transform por completo su car$cter, hasta con%ertirse en elcaos #en el buen sentido de la palabra#,que hoy conocemos. &esde aqu', se

tomaron decisiones histricas que afectaron al resto de los pueblos yciudades de la pen'nsula, para mal casi siempre. ( Madrid fue y a)n lo es criticada, denostada, %ilipendiada hasta la saciedad.

Los %ecinos de Madrid que tu%ieron y tienen que soportar el peso delenorme aparato burocr$tico se %ol%ieron desdeosos, pues sab'an bien,que las decisiones no eran suyas. *l mal tiempo, pusieron buena cara, yfueron por el mundo de casti+os, pues de alg)n modo, hay que defenderse.

*hora a Madrid, le ha tocado la china de ser comunidad autnoma.ampoco esta %e+, saben muy bien el por que los madrileos. -or no

quedarse sola haciendo el rid'culo ante tata rei%indicacin de identidad..( aqu' nos tienen, un tri$ngulo de nada, ni siquiera equil$tero, cercado por

ego%ia, *%ila, /uadala0ara y oledo. 1n el centro eso s' unos millonesde habitantes de ellos, el 2" por ciento %i%en en la capital.

La pro%incia de Madrid, no se constituye como tal hasta el ao 344. 5asta6sta fecha, su n)cleo inicial la %illa y tierra de Madrid fue aumentando conalgunas comarcas %ecinas 7 8ondado de -uonrostro, e9mo de8asarrubios y parte de la *lcarria :. ufri nue%os cambios, al aadirse

*lcal$ que perteneci a oledo hasta el ao ;22, y los reales sitios, que noestaban enmarcados en ninguna pro%incia.

ras un cont'nuo trasiego de poblaciones, la pro%incia se form tal y comoes hoy, recibiendo


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hubo asentamientos humanos en las terra+as del Aarama y del Man+anares yque no est$ probado, que fuera un punto cla%e de la 8arpetania romana,aunque si, se han hallado algunos restos de %illas romanas, en illa%erde y8arabanchel.

Fue el emir Muhammad I, quien mand construir en las orillas del

Man+anares, una fortale+a, que parec'a citada como Mayrit en los te9tos$rabes. 1ste encla%e, 0unto con alamanca, en tierras de =uitrago, fueronpuntos defensi%os fundamentales, para e%itar ela%ance cristiano por la ierray mantener protegidas las tierras de oledo.

1n torno a ese primer recinto fortificado, creci la %illa de Madrid, hechopropiciado, por la abundancia de aguas subterr$neas, que facilitaban lasubsistencia. -or eso, dice el primer escudo de la ciudad..E Fui sobre aguaedificadaE.

Madrid tu%o su primer fuero a principios del siglo GIII y , por entonces, ya

participaron madrileos en algunas acciones b6licas, como la la batalla deLas Ha%as de olosa. 1n 6sta misma 6poca, se conoce a la ciudad, como lailla del so y del Madroo, desde entonces, y hasta la capitalidad, lacapital, no es escenario de hechos pol'ticos detrascendencia, y slo se cita,como lugar de residencia pasa0era de los reyes, que %en'an aqu', atra'dospor las grandes e9tensiones de ca+a de sus alrededores. sea, que la %idatranscurr'a con cierta normalidad, hasta que de la noche a la maana, la %illase con%irti en capital.

8omparada con otras capitales de 1uropa, -ar's, Londres, Boma, -raga,Madrid, es insignificante. ampoco tiene el embru0o de e%illa, o la laboriosa%ibracin de =arcelona. ( sin embargo algo tiene esta ruidosa ciudad, queacaba por hacerse simp$tica, a pesar de todas las destrucciones que haconocido.

*lgo hay en el car$cter de su gente que las hace di%ersa y )nica, peculiarcomo ella sola. Madrid es mucho Madrid, dicen los casti+os. odos los que%ienen, lo notan y a)n m$s los que deciden quedarse. * /eorge =orroJ el%ia0ero ingl6s, que abri en la ciudad una librer'a# tambi6n le sorprendi estecurioso fenmeno,que ya hab'a llamado la atencin del legendario 8asano%ay, de0 escritoK D 5e %isitado casi todas las capitales importantes del mundo?

pero en con0unto, ninguna me ha interesado tanto como la %illa de Madrid7: Ho hablo de sus calles o edificios, de sus pla+as ni de sus fuentes7...:pero la poblacin N.. Mil seres humanos que forman la masa m$se9traordinaria del mundo entero, y no se ol%ide nunca que esta masa, esestrictamente espaola7...: aunque buena parte de ella, no haya nacido en lacapitalE.

Lo me0or de Madrid, su gente. La ciudad %aldr$ poco, pero que otra ciudadde 1spaa, puede preciarse de haber tenido %i%iendo en ella, a 8er%antes, aLope. * 8aldern, a Que%edo, Morat'n, /oya, el$+que+, -6re+ /alds, -'o

=aro0a, alle Incl$n etc etc.-or cierto, no en pocas pro%incias he o'do decir, a la gente mayor, que enel ao 42 cuando cay Madrid, cay 1spaa.


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Monumento de 8ibeles.

-uerta de *lcal$.


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Ona %ista de la 8asa de 8ampo.

8asa de 8ampo.


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M*&BI& 8*ILL F*M.

Magerit el primer Madrid all$ por el siglo IG era una medina %isible

desde el Man+anares, cuando toda%'a era un r'o serio. Lo de castillo famoso,se refiere al *lc$+ar moro, empleado donde hoy est$ el -alacio Beal.1l m$s antiguo Madrid urbano, se situaba en torno a lo que se conoce

como calle ego%ia. &esde lo alto, se %e'an a%an+ar los e06rcitos cristianos,por el -aseo de 19tremadura.

8*LL1 1/I*.

1sta calle, es torcida y empinada, muy angosta cuando nace, se %aensanchando hacia el final, y a pesar de los a%atares de los siglos, a)n tieneaspecto de haber sido un barranco.

1n tiempos $rabes, la surcaban numerosos riachuelos, entre otros, elarroyo de -o+acho, que acababa por afluir al Man+anares. Las huertas, seencaramaban por lo que hoy, son 0ardines de las istillas y 8uesta de la

ega. &e 6sta 6poca, m$s se adi%ina que se %e. -ero muchos nombres deeste barrio delatan su pasado morisco, ya se ir$ obser%ando. *dem$s #datointeresante el desarrollo general de la %illa, hasta bien entrado el siglo GIG,est$ supeditado, al %ie0o sistema moro de abastecimiento de aguas.

1n la 8uesta de la ega quedan unos restos, del segundo recinto de lamuralla $rabe, de la que alg)n dato histrico seala que ten'a >3 torres.

La calle ego%ia, antes, se llam de la -uente, y desde el siglo GI remataen el gran'tico puente de ego%ia, hecho, para poder cru+ar sin mo0arse. D el)nico r'o del mundo, que es na%egable a caballoE, como dec'a un e9tran0ero

del siglo GII refiri6ndose al Man+anares. 1l puente, se atribuye a Auan de5errera y sus laterales, se coronan porbolas de piedra, una de las cuales,sufri pena de c$rcel, por haber causado una muerte al caer de su sitio. 1lpaso del puente, fue salida de una caada importanteK la que entraba enMadrid por la carretera de *ragn, atra%esando *lcal$ y la -uerta del ol.


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8alle de ego%ia. Madrid.

*qu' situado a su espalda, quedar$ un inmenso mar de edificios, y trasellos el /uadarrama. -ero, estas grandes barriadas son relati%amenterecientes.

1l crecimiento inicial de Madrid, no se produce hacia el oeste, sino al

re%6s, desde poniente hacia la salida del sol. Mirando en ese direccin, loprimero que reclamar$ nuestra atencin, ser$ los arcos enormes del%iaducto.

1s el resultado final, de un montn de proyectos, pues, para esta %illa,siempre fue un problema la unin de la +ona del -alacio Beal, con lasistillas, sal%ando la gran %aguada de la calle ego%ia. 1stu%o a punto de ser%'ctima de la piqueta en el ao 2;!, pero por fin, se decidi conser%arlo yrestaurarlo. 5asta no hace mucho, ten'a el tr$gico sino, de ser el lugarelegido por los suicidas.

&esde el puente de ego%ia, es %isible el paseo de la irgen del -uerto,0unto al denostado Man+anares. &urante los siglos GIII y GIG fue concurridopaseo dominguero muy del gusto de soldados y criadas. La graciosa ermita


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de la irgen del -uerto, muestra de arquitectura t'picamente madrilea,tambi6n se puede apreciar desde aqu'. * un lado del puente, esta La Fiesta,una sala de baile en parte al aire libre, donde acude la gente cuando eltiempo lo permite. cupa el mismo espacio y la misma estructura que elpopular club La Bibera, donde en otros tiempos los 0efes, sol'an alternar con

sus secretarias al comp$s de los boleros.

1rmita de la irgen del -uerto.

eminario de las istillas


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* L* &1B185* &1 L* 8*LL1 1/I*.

-asando por deba0o del %iaducto, de0ando a un lado los Aardines de las

istillas y la 8uesta de los 8iegos, es precepti%o, perderse por las cuestas,escaleras, rincones y calle0as que conforman la subida hacia lo alto de lacalle ego%ia.

La +ona, pr$cticamente, no conser%a nada del antiguo barrio $rabe, sal%osu configuracin. 1n la placita del *lamillo, estu%o el alam'n, tribunal de losmoros. 1ste encla%e,0ug un papel destacado en la 1dad Media, pues estu%oaqu' el *yuntamiento, y se dice que el 8id, alance un toro en 6ste lugar.

On cruce de pasadi+os secretos, anida ba0o su suelo. La escalinata de laMorer'a lle%a a la pla+a del mismo nombre. 8asas pintorescas, tascas

aceitosas, restaurantes y pubs de hace nada, alternan por las cuestas, 0untoa alg)n crimen arquitectnico.5oy, nue%as gentes, se instalan en este lugar, tratando de conser%ar el

encanto de su ancestral estructura. uel%e a ser +ona preferida para %i%ir,despu6s de haber pasado por insalubre durante mucho tiempo. &e esto, sehan dado cuenta las constructoras y ya es casi imposible, encontrar lasgangas de hace tan solo unos pocos aos.

&ando %ueltas entre muros de distintas alturas y calles de distintos ni%eles,es posible dar con la calle de *lfonso I. olo se llama as', desde finales delsiglo pasado, pues antes era del *guardiente, en consonancia con un famosoestablecimiento en el que se e9pend'a esa bebida.

-or esta calle, entrar'a triunfal *lfonso I en Madrid, cuando la conquist alos $rabes, que entonces, quedaron reducidos e9clusi%amente a este barrio.i seguimos el itinerario, desembocaremos en la pla+a de la -a0a? iglesia yedificios episcopales 0alonan este cuadrado, un tanto irregular que fue elcentro comercial de la %illa durante su 6poca medie%al.

1n l'nea con la calle ego%ia, est$ an -edro el ie0o o el Beal. 1n suempla+amiento, debi estar la me+quita de la morer'a. u torre mud60ar, nolo puede negar. e le coloc m$s tarde un campanario y listo. *lfonso I

mand le%antar aqu', la parroquia de an -edro, para conmemorar la %ictoriade *lgeciras 7 4!< : y de0ar bien claro, quien mandaba ahora.

1n su portada plateresca, est$n los )nicos escudos reales, anteriores a losBeyes 8atlicos. La pla+a de la pa0a, est$ muy %inculada a la historia de8astilla. Los Lasso de la ega y los argas, tu%ieron aqu' sus palacios. Onode estos, a)n se conser%a? es el que se %e delante de la c)pula de la capillade an Isidro.

* la del obispo, tan solo se puede acceder por esta escalinata del sigloGI.La casa de los Lasso habitualmente, era residencia de los reyes de

8astilla cuando pasaban por Madrid, cosa que hac'an sobre todo, atra'dospor sus cotos de ca+a, pues entonces, la %egetacin era mucho m$sespesa, y la sierra segu'a estando bastante cerca. bser%aremos, que la


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pla+a hace una pronunciada pendiente hacia la calle de ego%ia, Austoenfrente, est$ la placita de la cru+ erde. &ebe su nombre, a la e9istencia deuna cru+ de ese color, repintada una y otra %e+, que era s'mbolo de los autosinquisitoriales, ah' celebrados, el )ltimo en tiempos de Felipe II.

iene una preciosa fuente, y al lado hay un restaurante con una agradable

terra+a. ambi6n en la misma pla+a de la -a0a %arios restaurantes se hacenuna gran competencia. 1n /ure 1t9ea, podemos degustar la cocina %asca.* la %uelta de an -edro en la misma calle del Huncio, a)n permanece

otro palacio que fue de los argas, y luego de don Bodrigo 8aldern, porquien se acu lo de D tener m$s %alor que don Bodrigo en la horcaE. 5oy, espalacio de la Hunciatura.

e puede subir hacia arriba, por cualquiera de las dos 8ostanillas, la dean -edro, o la de an *ndr6s, que casi parecen gemelas. &esde arriba,ser$ m$s e%idente la catica disposicin de las tapias. *rboles silenciosos

asoman por ellas. *lgunos, podr'an contar no pocas historias de ambicin, deamor, de cr'menes, de piedad incluso..

Bestaurante /ure 1t9ea. Madrid.


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=arra del Bte. /ure 1t9ea. Madrid.

Bte 8asa =otin. Madrid.


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an -edro la Beal. Madrid.

L* 8O*B -L*C*.#

1n seguida notar$ que tan pretencioso nombre solo corresponde a cuatroespacios de distintas dimensiones y l'mites nada claros. e encontrar$ con6ste con0unto, nada m$s subir una de las dos 8ostanillas. oda esta parte, yalgo de lo que hemos de0ado atr$s, est$ ligado a la %ida de an Isidro, patrnde la %illa. 1ste labrador, %i%i entre los siglos GI y GII, sir%i en casa de losargas, y por aqu' hi+o sus milagros. 8uando muri, se le enterr en an

*ndr6s, y luego se le cambi de sitio unas cuantas %eces, hasta que por finconsigui descansar ya en tiempos de 8arlos III, en la iglesia catedral de suad%ocacin, en la calle oledo. 1n la casa palacio de los 8ondes de -aredes,en este encla%e, se conser%an numerosos recuerdos del santo.

(a arriba la primera pla+a es 5umilladero, donde hubo uno de anFrancisco. *qu' %i%i *gustina de *ragn unos aos, y aqu' se instalabantio%i%os y barracas de feria durante la fiesta de la -aloma.

1l $pside de la capilla del obispo, aparece al descubierto. 1s unaconstruccin, edificada por *lfonso III en la parroquia de san *ndr6s. 1l

retablo es de francisco /iralte y las pinturas de illoldo el Mo+o. Marca, latransicin del gtico al renacimiento, cubre su $bside, una b%eda estrellada,es del ao !>@.


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La parroquia de an *ndr6s, ya aparec'a como tal, en el Fuero de Madriden >@>, se construy en tiempos de Felipe I y casi se destruy porcompleto en el ao 24". an solo queda en pie un muro y la torre con suscaracter'sticas re0as de hierro, tan madrileas.

*qu' fueron degollados esos Mancebos, que en realidad eran dos, u

nombre sigue per%i%iendo en una hermosa calle que hay al lado. * principiosdel siglo GIII se les acus de haber lan+ado la te0a que caus la muerte al0o%en rey de 8astilla 1nrique I.

-or la 8ostanilla de an *ndr6s, tiene su entrada la capilla de an Isidro,es un proyecto de mediados del GII, ane0o a la iglesia de an *ndr6s, perocuriosamente de mayores proporciones que 6sta. ambi6n tiene entrada porla portada este y constituye un e0emplo interesante de la arquitecturaherreniana, con elementos que anuncian un mayor barroquismo. u interior,estaba decorado con m$rmoles blancos y negros.

1l lado norte de esta capilla, da a la pla+a de los 8arros, antigua parada delos que transportaban mercader'as que luego se %end'a en la 8ebada. 1n ellado oeste, se le%anta un palacio del siglo GIII, hoy de los &uques delInfantado, y antes del &uque de Bi%as. 1n este lado, hay otro monumentom$s sencillo y tambi6n m$s accesible? el Bestaurante *roca.

-uerta de Moros, enfrente es la )ltima pla+a del con0unto. 1s e%idente, quesu nombre se 0ustifica por la pro9imidad de la Morer'a.

Ona falsa tradicin, asegura que por la puerta aqu' empla+ada que dabaal camino de oledo solo pod'an transitar los moros, quedando el pasoprohibido a los cristianos.

-la+a de los 8arros. Madrid.


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an *ntonio de la Florida. Madrid.

-alacio Beal. Madrid.


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8apilla de an Isidro. Madrid.

-la+a de la 8ebada. Madrid.


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-L*C* &1 L* 81=*&*.

1n l'nea con -uerta de Moros, hay otro t'pico lugar madrileo. *unque hoyno lo pare+ca, est$ cargado de referencias. 1s la pla+a de la 8ebada aunque m$s que pla+a es una calle bastante ancha #. 1st$ empla+ada enterrenos de la Latina, es decir, de =eatri+ /alindo, humanista y profesora delat'n de Isabel la 8atlica.

1n la pla+a de la 8ebada, los labradores, %end'an su cosecha y separabanlas distintas cantidades de grano que deb'an entregar como tributo al rey o alos p$rrocos.

&esde su formacin en el siglo GI, este lugar o espacio, estu%o destinado

a la %enta de cereales, tocino, legumbres y %erduras, D 1res m$s ordinariaque una %erdulera de la pla+a de la 8ebadaE, se dec'a hasta no hace muchotiempo. 1l dicho deb'a tener cierta %inculacin con la realidad, pues escribe/utierre+ olana..E aqu' est$n, pac'ficas y distra'das,estas %erduleras delmercado de la 8ebada, famosas por lo bragadas y temibles cuando estallabaun alboroto.

1n el siglo GIII, era tambi6n lugar de ferias, pero a principios del GIG, lecupo un destino mucha m$s siniestroK ser centro de e0ecuciones p)blicas.1sto sucedi despu6s de que cesaran las e0ecuciones y los autos de fe en la-la+a Mayor.

1l garrote, era un espect$culo al que acud'a numeroso p)blico. D 1sep)blico, que obser%aba los mo%imientos y la agon'a del reo, haciendo chistessobre su compostura y %alor en los momentos precursores a la muerte,mientras com'an churros y daban largos tientos a la botaE 7 /utierre+olana :.

Los balcones se llenaban y se llamaba a los amigos para que no seperdieran detalle del acontecimiento. *qu', fueron e0ecutados entre otros, elcura Merino, el general Biego y Luis 8andelas. 1l bandolero, se despidi delp)blico diciendo antes de morirK D 8omo hombre, he sido pecador, pero

nunca se mancharon mis manos con la sangre de mis seme0antes.E. *dispatria m'a? se feli+NN.

6A3A 8A=A

One humilladero con -uerta 8errada. a paralela a la 8a%a *lta, pero la

primera es la m$s aut6ntica. Las ca%as, eran t)neles subterr$neosconstruidos por los $rabes, para salir y entrar de la medina en tiempos de

guerra. -or 6sta ca%a que pasaba por deba0o de -uerta de Moros, huyeron almenos durante dos incursiones conocidas de reyes cristianos 7 Bamiro II y*lfonso I, pero tambi6n las utili+aban los cristianos cuando suced'a lo


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contrario.1sta ca%a, es la calle de las posadas histricas. *lgunas permanecenK

Mesn del ego%iano 7 antigua posada de an -edro que conser%a suprimiti%a estructura :. -osada del &ragn, de an Isidro, del Len de ro.-ero hab'a m$s. 1n ellas se alo0aban los campesinos que %en'an a cerrar

sus tratos, seg)n de donde procedieran se hospedaban en uno u otro local.abido esto, nadie se e9traar$ de que per%i%a alg)n tena+ comercio detoneler'a o cester'a. 1n otra 6poca eran abundantes, pues de ellos, sesurt'an las posadas. 1n 6sta ca%a, est$ uno de los restaurantes m$s populares de Madrid,8asaLucio. Osted mismo comprobar$ que la oferta es ampliaK hay locales, paratodos los bolsillos que conser%an intacta la tradicin del tapeo.

Mesn t'pico La 8hata. 8a%a =a0a.

-osada del Len de ro. 8a%a =a0a.


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8asa Lucio. 8a%a =a0a.

Fachada t'pica de la 8a%a =a0a.


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Ona calle de la 8a%a =a0a#

-O1B* 81BB*&*.

&e aqu' arranca la calle ego%ia. igue siendo -uerta 8errada unaencruci0ada. 1n torno a ella, permanecen calles de car$cter gremial7 latoneros, tintoreros y por supuesto cuchilleros : que conecta con la pla+aMayor. Ho hace mucho, se decoraron con %istosos coloridos, algunasparedes desnudas. obre una de ellas, obra de *lberto 8ora+n, un enormepedernal preside las siguientes frases, sin sentido aparenteK D Fui sobre aguaedificada, mis muros, de fuego son, esta es mi insignia y blasnE.

8orresponden al escudo que ten'a Madrid en el siglo GI. 1n -uerta8errada,se mantiene la una cru+ que es monumento p)blico en la %illa. 5uboaqu', una puerta llamada del &ragn o de la 8ulebra, por ostentar esteanimal esculpido en su parte superior. Lope+ de 5oyos madrileo p$rrocode la iglesia de an *ndr6s y maestro de 8er%antes ofreci el siguiente

testimonio, una de las primeras muestras de chuler'a madrileaK D 1sta esuna figura de dragn que los griegos pusieron como fundadores de 6sta


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soberbia muralla, y es claro haber sido ellos quien la fabricaron, pues en laspuertas principales pusieron sus armas, como es, en 6sta puerta que llamanla -uerta 8errada 7: conforme a 6sto, tiene Madrid, mayor noble+a deantigPedad que Boma ni muchos pueblos arcanosE.

*l salir por la -uerta del &ragn, cuando el arrabal estaba despoblado,

ocurr'an no pocos asaltos por las noches. e mand cerrar, y cuando eldespoblado se habit o pobl, %ol%i a abrirse sin por ello %ariar el nombrede -uerta 8errada como sigue conoci6ndose hoy por hoy.

&esde siempre este lugar ha sido punto tradicional de Madrid, lugar detr$nsito obligado para quienes acuden a sola+arse de los numerososmesones que siguen estando en la +ona. 1n sus inmediaciones, hay casasde comidas, tan famosas como =ot'n 7 cuchilleros :o 8asa -aco 7 en lamisma pla+a :.

=*=ILHI* 1-*L*.*s' llama el diablo 8o0uelo a Madrid, %isto desde la torre de an al%ador,

al final de la calle Mayor. -ara entonces "


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entrometido 1scobedoK D m$s %ale el trasero de *ntonio -6re+ que la cara deFelipe IIE, cuando aquel descubre, que se DentiendenE. -or la calle Mayor,luce su poder don Bodrigo 8aldern, al ritmo de sus engalanados corceles?por la misma calle, se le %e cru+ar a lomos de una mula camino de la penacapital. *qu', matan a 1scobedo por su incorregible %icio de espiar, y a Auan

de assis, conde de illamediana, en la esquina con Francisco I, y en otracasa es hecho preso el &uque de suna.&esde el 33 de esta calle, lan+a Mateo Morral, la bomba contra la carro+a

de *lfonso GIII, en la misma man+ana, donde se mantiene un popular'simorestaurante. 8asa 8iriaco.

8uando todas estas cosas suceden Mayor es la arteria principal delcomercio, sus tiendas, se agrupan alineadas por gremiosK 0oyeros, paeros,+apateros. 1s adem$s lugar de lucimiento de nobles, por supuesto, tambi6nde p'caros y busconas. * diferencia de otras ciudades europeas, se registra

aqu', una participacin de los estratos populares en +onas de pasoaristocr$tico.5oy la calle Mayor, sigue siendo arteria de mucho tr$fico. La acti%idad

comercial, es intensa, sobre todo entre la pla+a an Miguel y ol, donde a)n,hay algunos escaparates que parecen reliquias, con escudos her$ldicos,medallas militares o pollitos de colores, pollitos de %erdad.

La Mallorquina famosa pasteler'a, principia la calle, por el lado de losimpares. Austo en el mismo sitio, donde en tiempos de 8arlos I hab'anumerosas D casas de manceb'aE.

&onde est$ la calle del 8orreo, de infausto recuerdo, se le%antaba en el"@@ un edificio suntuoso? el con%ento de an Felipe el Beal. *l lado estabanlos esparteros, en la calle de ese nombre, traba0adores %alencianos quete0'an esteras para las casas madrileas. u hermandad ten'a la sede enan Felipe. Lo m$s popular de esta iglesia eran sus co%achuelas, donde se%end'an cosas de iglesia, cilicios, disciplinas, 0uguetes y chucherias. -arte deesta antigua tradicin, se mantiene %i%a en algunos comercios pr9imos alcine *lb6ni+.

obre el solar de an Felipe se edificaron las casas de 8ordero, amediados del siglo pasado. Fueron no%edad, por ser el primer gran bloque

de edificio de %i%iendas que se constru'a en Madrid. *qu' estu%o, el 8af6 delHue%o -ombo. iguen en pie en el n)mero de Mayor.

* la %uelta, est$ -onte0os donde se puede encontrar, cualquier )til demercer'a que podamos necesitar. * parte de las construcciones que secitar$n, la calle Mayor cuenta con interesantes edificios de origenmodernista. 8omen+aremos el recorrido por la parte m$s tranquila de lacalle, el final.

UNA ISLA! PLAZA DE LA 3ILLA#

1n tiempo de los *ustrias, la calle Mayor, terminaba aqu'. 5oy, muere en=ail6n, donde inicia su ba0ada tortuosa, la 8uesta de la ega. 1n la esquina


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con =ail6n, puede apreciarse, un edificio rectangular de principios del GII,en la l'nea del palacio de Lerma, de =urgos. Fue del &uque de Oceda, t'picorepresentante, de aquella aristocracia tan $%ida de pri%ilegios de la que serodearon los *ustrias. 5oy es sede de 8apitan'a /eneral. Ona de sus cuatrofachadas da al pintoresco pretil de los 8onse0os, que ba0a hacia la calle

ego%ia. 1n este para0e, tu%o su sede el /ran riente de la Masoner'a1spaola, entre el con%ento de las =ernardas y el palacio ducal. 1nfrente deeste en Mayor, se al+a otro de la misma 6poca que fue del &uque de*brantes, hoy, Instituto Italiano de 8ultura.

1n esta misma acera entre las calles Factor y =iombo, est$ la m$s antiguaiglesia de MadridK an Hicol$s de los er%itas. &icen que su torre, antes fuealminar. u registro parroquial data del ao


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5emeroteca en la -la+a de la illa. Madrid.

e0ados del %ie0o Madrid de los *ustrias.


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aliendo a Mayor estaremos a dos pasos de la -la+a de la illa. Forma unarmnico con0unto, y es casi un milagro que se haya sal%ado del paso deltiempo y de la especulacin. -or fin se prohibi, que los coches aparquenaqu', cosa esta que nos alegra la %ista. 1l *yuntamiento, o la 8asa de la illaes del siglo GII, de coherencia herreniana. Auan de illanue%a reform la

fachada que da a la calle Mayor en el siglo siguiente. u interior, tiene unamagn'fica decoracin a base de a+ule0os de ala%era. 8onser%a tablas ypinturas de /oya y =erruguete, y una espl6ndida custodia de plata, obra deFrancisco *l%are+ ao !;4. * la casa de la illa, est$ unida la de 8isneros, mediante un pasadi+o sobrela calle Madrid. 1sta casa es un bello edificio plateresco? su fachada principalda a la calle de acramento, y lo que se %e desde la pla+a, fue en tiemposuna entrada de caballeri+as, corrales y estancia de la ser%idumbre. La mandle%antar, un sobrino del 8ardenal 8isneros en el ao !4;. e restaur por

%e+ primera en el ao 2!, conser%ando su decoracin interior, todo el estilodel siglo GI. -ertenece hoy al *yuntamiento, y conser%a una rica coleccinde tapices.

8asa de 8isneros. Madrid.

Fachada lateral 8asa 8isneros. Madrid.


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* la i+quierda de la casa de de 8isneros, separada por la calle del 8ordn,est$ una de la casas de los Lu0anes, hoy 5emeroteca. La c6lebre torre de losLu0anes, se le%anta en la esquina, con la graciosa calle del 8odo, as' llamadapor su forma peculiar. * ella, da la puerta mud60ar de la torre. *qu' dicen queestu%o preso Francisco I tras la batalla de -a%'a. Las fuentes histricas,

sealan que m$s que prisin, fue para el rey franc6s, una mansinhospitalaria, donde se celebraron banquetes, y en la que el 8once0o de la%illa, honr con una gran fiesta al rey %encido. La casa ad0unta a la torre,mantiene su portada gtica tard'a de finales del siglo G, aqu' tu%o su sedela ociedad 1conmica de *migos del -a's, a la que perteneci Ao%ellanos.Fueron los fundadores del *teneo Madrileo. 1n la pla+a se yergue unaestatua de =enlliure representando a don *l%aro de =a+$n. 1n el pedestal,pueden leerse una redondillas de Lpe, donde dice que a don *l%aro, todo elmundo le tu%o espanto.

*yuntamiento de Madrid

OH -*1 IL1H8I.

* pesar de alguna que otra aberracin arquitectnica, que el %isitantemismo podr$ %alorar, el d6dalo de calles situadas detr$s de la pla+a de la%illa, es punto y aparte. Ho hay edificios notables ni espl6ndidos rincones. 1sun desorden e9trao, ceido por ambos muros con%entuales, desde dondeen ocasiones tae una campana. 1l a0etreo de la ciudad, est$ al lado, perono llega aqu', da la impresin de que el tiempo se detu%iera.

On rosario de calles, pla+uelas y pasadi+os se suceden. odos con

nombres seculares. *qu' los con%entos, se han empaado en marcarfrontera con la calle ego%ia, como si quisieran %i%ir de espaldas a ella.


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Bollo y 8ordn 7 antes calle0n de los a+otados :, no pueden negar, supasado inquisitorial. 1n la pla+a del 8ordn, en la casa del conde de-uunrostro, estu%o preso *ntonio -6re+, quien se fug por la contiguaiglesia, que estaba donde hoy se le%anta la pontificia de an Miguel. Hi

siquiera este templo de e%ocaciones centroeuropeas, desdice el sosiego dellugar. e construye a mediados del siglo GII, y es de notar, su fachadacombada, rematada en dos torres con originales capiteles. -asadi+o del-anecillo, pla+a de an Austo, pla+a de an Aa%ier, # la m$s diminuta deMadrid, 0unto a la calle del 8onde, calle del acramento, de -uonrostro,pla+a del conde de =ara0as, del conde de Miranda, iglesia delacramento,iglesia de las 8arboneras,, escaleras, re0as, pretiles,recodos...1s el Madrid del GII el que %i%e al calor del 8oncilio de rento.Humerosas rdenes religiosas llegan a la capital y le%antan sus edificios. La

sobriedad y rigide+ de sus l'neas y la pobre+a de materiales, sonsignificati%as del momento que %i%e la monarqu'a espaola.

-intores en la pla+a de =ara0as.

-la+a del 8onde de =ara0as.


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5*8I* L* -L*C* M*(B.

Hada m$s salir a la pla+a de an Miguel, #cosa poco menos que

ine%itable#, el paseo silencioso, habr$ terminado, a menos que la est6 muyentrada la noche. an Miguel limita abiertamente con la calle Mayor, y sehace eco de un ruido. Haturalmente aqu' tambi6n hubo en su momento unaiglesia. an Miguel de los ctoes, ya desaparecida. 5oy, este espacio, lodomina un mercado, el )nico en hierro que ha llegado hasta nuestros d'as. iseguimos por la ca%a de an Miguel otro subterr$neo que comunicaba conla 8a%a =a0a acabando en la puerta de /uadala0ara# acabar$ en 8uchilleros,donde est$ el arco del mismo nombre que da acceso a la pla+a Mayor.Llegar$ igual por =ringas y 8iudad Bodrigo, calle de soportales, con olor a

calamares fritos. *unque pare+ca un pecado gastronmico, el pueblo deMadrid, estima el popular D =ocata de calamaresE.

-L*C* M*(B.

Llegue por donde llegue, qu6dese por un momento parado y cont6mplela.Qui+$s estar$ harto e %erla en fotograf'as o dibu0os, pero al natural es otracosa. La hacen especial sus proporciones, los tonos ro0i+o y ocre de sussim6tricos edificios y los millones de personas que lle%a conocidas. 8onnie%e o con sol, con bullicio o en soledad, slo se parece a s' misma. 1sta esla perla del Madrid de los *ustrias, se lo dir$n todas la gu'as. *ntes ya huboaqu' pla+a, la del *rrabal, situada fuera de la muralla,que llegaba hasta la8a%a de an Miguel. La pla+a como recinto cerrado no tiene nada que %ercon el primer proyecto de ";. 1staban las casas de la -anader'a y de la8arnicer'a? en torno a ellas otras casas de cinco pisos se agrupaban, solohab'a tres arcos. *qu' se reali+aba el comercio del pan, muy %inculado a losintereses de la 8orona. &e ah' la importancia de la casa de la -anader'a,cuyas habitaciones superiores estaban reser%adas para que la familia realcontemplara fiestas de toros y caas, celebraciones, autos de fe y

e0ecuciones. 1ran aquellos tiempos de pan y toros no los )nicos, claro ylo importante era el espect$culo? costaba lo mismo %er una comedia de Lopeque contemplar como se retorc'an en la hoguera los condenados por laInquisicin. 8on tanta profusin de hogueras, no es de e9traar que la pla+asufriera al menos tres pa%orosos incendios. 1l primero 0ulio del "4 durtres d'as. * falta de socorros humanos? se lle%aron im$genes de muchasparroquias cercanas, que en esto si que estaba pro%ista la %illa, pero fuein)til. Fue preciso acometer una nue%a construccin de la pla+a, se hi+o,siguiendo el anterior esquema. 1l segundo agosto del ";> fue toda%'a peor.

La casa de la -anader'a qued destruida y la que hoy conocemos se edifica partir de entonces. 1n el ao ;2@ ocurri el peor de todos. Lasautoridades, muy diligentes prohibieron el uso de los farolillos en los retablos


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de las im$genes religiosas. 1n los anteriores casos, no se prohibieron lashogueras? ahora ya no era necesario? los autos de fe hab'an deca'do y lapena capital se e0ecutaba en la pla+a de la 8ebada. 1ste tercer gran incendiosupuso que un tercio del per'metro de la pla+a quedara destruido. Auan deillanue%a se hi+o cargo de la reconstruccin definiti%a. 1ntre unas cosas y

otras, no qued terminada hasta el ao 3!>, se canoni+aron aqu', nada menos que cuatro santos7 eresa de Aes)s, Francisco Aa%ier, Ignacio de Loyola y Felipe Heri :, todosel mismo d'a, adem$s de an Isidro. Belatan las crnicas que el 0olgorio, fueindescriptible. ( si es cierto lo que dicen que aqu' cab'an !@@@@ personas, labataola debi de ser fina. 1n esta ocasin, el 0o%en FelipeI, no se luci en lafiesta de caas, pero si lo hi+o al ao siguiente. Las fiestas de toros, porentonces, se hac'an a caballo, y pueden imaginarse, como se engalanabanlos balcones. 1l mismo regoci0o cundi cuando se degoll a don Bodrigo de8aldern o al general -adilla y al marqu6s de la ega. * los nombresconocidos se unen muchos annimos. 1l pintor Francisco Bi++i, de0testimonio del tremendo auto de fe que tu%o lugar en 0unio de "3@, el m$slargo de cuantos aqu' se han sucedido. e hi+o el auto delante de la 8asa dela -anader'a, para que el rey y las ruinas pudieran presenciarlo bien? fueron3 los reos, > de los cuales fueron quemados %i%os. Los balcones, solo se alquilaban por las tardes y, tericamente, ten'anprecio fi0o? cuanto m$s cerca del pa%imento, m$s claro. -or las maanas, losinquilinos de las casas pod'an disfrutar de ellos. * principios del GIG, esta

clase de acti%idad febril decreci. olo es teatro de feste0os con moti%o deproclamaciones o bodas de reyes, en las que las corridas 0ugaban unimportante papel. -ero por esos tiempos, tambi6n la pla+a fue teatro deluchas ciudadanas en defensa de la 8onstitucin. 1ntretanto, el espacio sellenaba de tenderetes y puestos, en los que se %end'an toda clase demercanc'as. 5oy, esta acti%idad, solo se mantiene en las tiendas de lossoportales, muchas de ellas enfocadas hacia el turismo. -ara Ha%idad, seponen infinidad de puestos con art'culos propios. Los domingos se ponen lospuestos de filatelia y numism$tica, y tambi6n de algunos pintores. 1n los

soportales abundan los bares y restaurantes, cuando hace buen tiempo,colocan mesas en la terra+a. 1n cuanto a feste0os no tienen nada que %er,con los de Felipe I. 8on frecuencia hay conciertos de rocR. 1n fiestas, hay


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teatro y m)sica D en %i%oE. 1n 8arna%al, tambi6n acude una gran parte de lagente para celebrar el broche.

-la+a Mayor. Madrid.

-la+a Mayor. Madrid.


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SM. -1B*.

cioso decir que si est$ en Madrid, tra%esar$ esta +ona, en uno u otro

sentido, %arias %eces. 8asi siempre hallar$ aqu' aglomeraciones. eguro queya lo sabr$ usted mediante los medios de comunicacin. La actual configuracin de esta pla+a, empeada en llamarse puerta como tras muchas de la capital form parte, de un proyecto mucha m$samplio, surgido a principios del siglo GIG, con el relati%o auge de la burgues'aliberal. (a Aos6 =onaparte quiso urbani+ar y reconstruir las pla+as deriente, Bamales, an Miguel e Isabel II. ambi6n se plante dos nue%asa%enidas? una por *renal desde ol, hasta el -alacio Beal, y otra desde el-alacio hasta an Francisco el /rande, con un %iaducto por medio. 5ab'a

obsesin, por racionali+ar la ciudad, buscando ensanches y alineaciones,casi siempre, atendiendo a nue%as necesidades econmicas. La antiguaestructura resulta molesta, y el af$n por abrir espacios se lle%a por delantenumerosos %estigios del pasado. 1mpie+a a cobrar %igor, un nue%o e0e, el dela calle *lcal$, que pronto se llena de bancos y casas comerciales. La carade Madrid, %uel%e a cambiar, por ol, esta %e+. -asa a ser el D centroE.

ista de la -la+a de riente.


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-la+a de riente y eatro Beal. Madrid.

8B*CH &1 M*&BI&.

* estas alturas,, ya se habr$ percatado de que el cora+n de la %illa, ha ido%ariando de sitio con el tiempo. 1n realidad, no es culpa suya, es que lasnecesidades, siempre le %iene impuestas. ( todo se desfigura, por lo quepocos, sabr$s que desde antiguo, al -uerta del ol, est$ ligada a la lucha delos madrileos por su libertad. La historia registra el le%antamiento de losmadrileos, en pro de las comunidades, all$ por el ao !>@. 1n ol, selibraron entonces, sangrientas batallas, pero los comuneros perdieron. Onseor feudal, les traicion, por lo que 8arlos le otorg el t'tulo de conde de-uonrostro. &icen, que los rebeldes, con%irtieron en fortale+a la puerta aqu'presente, en cuyo arco hab'a un sol y que miraba a oriente.

1l mot'n de Madrid que hi+o caer a 1squilache desarroll en la pla+aalgunas de sus escenas y tambi6n el pueblo madrileo se enfrent aqu'contra las tropas francesas. 1n su centro se proclama la 8onstitucin de3> y se anuncia al pueblo, m$s de un siglo despu6s, la formacin de la

segunda rep)blica. 1n ol, detiene el cura Merino el coche de Fernando IIy, mostr$ndole la 8onstitucin, le espeta aquello de D r$gala tiranoE. 1sta


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memoria y la de otros sucesos, parece que qued borrada por el edificio dela &ireccin /eneral de eguridad. us muros, saben mucho de la recientehistoria de 1spaa. -or fortuna hoy ya es sede de la 8omunidad *utnomade Madrid, por lo que la -uerta del ol, se ha quitado un peso de encima. 1sta archiconocida construccin fue 8asa de 8orreos y se le%ant en el

;"3.e discuti mucho la decisin del rey que, en lugar de encargar elproyecto a entura Bodrigue+, lo hi+o a un arquitecto franc6s que hab'allamado para asesorarse sobre el pa%imentado de las calles 7 AaimeMarquet :, por eso corr'a entre la gente el dichoK D al arquitecto la piedra y ala casa el emperadorE. -ero la remodelacin definiti%a de la pla+a se inicia amediados del siglo GIG. -ero antes ya se hab'a derribado el con%ento de anFelipe el Beal, situado en lo que hoy, es calle del 8orreo.1n el 3!< seprocede a derribar el hospital del =uen uceso que e9ist'a entre *lcal$ y la8arrera de an Aernimo al menos desde los tiempos de los Beyes

8atlicos. -ara hacerse la pla+a que hoy es, se arrebat terreno a todas las calles dealrededor. ( as' se configura este espacio, no suntuoso pero si equilibrado,que mantiene sus casas de %i%iendas desde entonces. 1n 22, ol, %eabrirse la boca del metro. e inaugura la primera l'neaK *tocha#8uatro8aminos. La -uerta del ol, mantiene su car$cter comercial. 1n los %ie0oslocales, se abren nue%os comercios, pero siguen las tiendas de abanicos, deparaguas y de guantes. ( la c6lebre tienda de loter'a de la hermana de doaManolita, que por diciembre registra llenos hasta la bandera.. 8ualquier tardeque pase por aqu', notar$ que sigue siendo punto de encuentro predilecto.

Loter'a de &oa Manolita.


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Bestaurante 8asa Labra, cT etu$n.

ista a6rea de la -la+a del ol.


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-la+a de ol. Madrid.5*8I* L* &18*LC* B1*L1.

&e -reciados a 8allao, todo es comercio. obre todo mastodntico, pero alcalor de los gigantes los pequeos de animan y cientos de frusler'asambulantes,buscan comprador en torno a -reciados. &esde hace algunosaos, la +ona en peatonal, a pesar de ello no hay que ol%idar que cru+ar lacalle representa todo un riesgo. * los ruidos del tr$fico y a la riada humanade las calles, a %eces se superpone el sonido de los m)sicos calle0eros. Losamigos de lo a0eno completan el panorama.

-ara huir de este tr$fago, con%iene tirar por etu$n cuesta aba0o.&et6ngase antes en la aberna Labra que es %etusta y simp$tica y degustesus famosos Dsoldaditos de pa%iaE. 8on el estmago alegre, desembocar$ enla pla+a del 8elenque, 5aga caso omiso de ella y tire hacia arriba a lai+quierda, solo un poco. 1l panorama ser$ distinto? un amplio recinto decididoa ol%idar el hormiguero que circula a su alrededor, la pla+a de las &escal+as,5oy &escal+as y an Mart'n #pla+as diferentes en otro tiempo permanecenunidas, formando un espacio asim6trico con pendiente y todo, Frente al

con%ento un edificio de la 8a0a de *horros, mantiene una bella portada defactura barroca.


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Mercadillo en la pla+a de las &escal+as Beales.

Mercadillo en la pla+a de las &escal+as Beales.


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Monasterio de las &escal+as Beales.

1l Monasterio de las &escal+as Beales, conser%a en su interior, uno de losme0ores museos de Madrid? pinturas de Bubens, Curbar$n, i+iano, tallas,tapices, orfebrer'a religiosa. cupa el lugar, donde estaba el antiguo palaciode 8arlos . Fue una hi0a suya doa Auana, quien se decidi a le%antar aqu',un monasterio, en el mismo sitio donde ella %ino al mundo. 1l arquitecto*ntonio illero reali+ la obra en el !!2, pero la fachada, se atribuye a Auan=autista de oledo, illanue%a, la reno% en el siglo GIII. &entro hay unae9celente estatua orante de la fundadora, atribuida a -ompeo Leoni. La

historia de este con%ento de franciscanas descal+as, est$ muy ligada a la dela aristocracia espaola, pues no pocas de sus hi0as, profesaron aqu'. Felipe, otorg a las abadesas de este con%ento, la grande+a de 1spaa a t'tuloperpetuo. 1n di%ersas ocasiones, miembros de la familia real, se hospedaronaqu'. 5oy ya se puede %isitar, parte de la clausura. &urante el siglo pasado,el espacio que ocupaba, era mayor que el actual. 1n el flanco sur de la pla+aun coqueto palacio, llamado de i6polo, se al+a, donde estu%o el con%ento dean Mart'n, derribado en tiempos de Aos6 =onaparte. &entro hay un granpatio con cubierta de hierro y cristal, por donde la abundante lu+ se tami+a.5oy, es propiedad de la 8a0a de *horros, y se utili+a, para e9posicionesart'sticas. i %amos por el postigo de an Mart'n, entre los tenderetes dee%ocaciones hippies, ya estamos en 8allao. 8uesta aba0o por el lado opuesto


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llegaremos a la calle *renal que es de lo que se trata en este recorrido.

Y en San Gins, chocolate. 1n *renal, a la altura del n)mero 4, est$ la

iglesia de an /in6s, en la pla+uela del mismo nombre. 1n este bre%efragmento de *renal que no significa otra cosa que erial arenoso %ol%emos a encontrar unos flecos del Madrid de los *ustrias. 1n la calle del*renal, estu%o instalado el barrio de los cristianos cuando en la %illadominaban los $rabes. ambi6n era un barranco, como la calle ego%ia, y desus desni%eles quedan pruebas fehacientes, al final de la calle donde est$ laque llaman 1scalinata. * partir del siglo GI, algunas familias lina0udas,instalaron aqu' sus palacios, pero de ellos, ya no quedan huellas. 1n cambio,si est$n en pie, %arios edificios de mediados del GIG, que hoy, son hoteles,

tiendas y oficinas. Aunto a san /in6s, si es por la tarde, le llamar$ laatencin, la cantidad de gente que hace cola. 1s debido a una discoteca elAoy 1sla%a? antes estu%o aqu', el aln 1sla%a especiali+ado en el g6nerochico# y el teatro del mismo nombre, donde estrenaron obras Lorca y*rniches. *l lado, est$ el pasadi+o de an /in6s con su tradicionalchocolater'a, donde acaban de rematarse las 0uergas nocturnas. *qu', tu%otaberna, restaurante y posada, un salmantino popular? L$+aro Lpe+, querecib'a en su casa, toda clase de persona0es de la %ida social madrilea. Onmal d'a, L$+aro de ahorc del balcn que hay en el arco del pasadi+o. 1lrincn de la iglesia de an /in6s, se conser%a como en el siglo GI. Laparroquia, fue primero mo+$rabe, pero la que hoy %emos se termin deedificar en al ao !"2. &el con0unto original, solo queda la estructura, queha ido sufriendo di%ersas restauraciones. 1n la b%eda que est$ deba0o de lacapilla del 8risto, se hac'an e0ercicios de meditacin D ha quedado en losanales de la %ida madrilea, con la memoria de sus disciplinantes, entre losque se me+claban gentes mi9tificadoras de la de%ocin, llegando a ser,escandalosamente conocidas sus escenas de tinieblas, flagelacin ydesnude+E 7-edro de B6pide.:. 1n uno de los rincones, permanece unantiguo puesto de libros. Los alrededores de la +ona, entre Mayor y *renal,

agrupan nombres de e%ocacin gremialK # =ordadores# un gremio rico#instalado aqu', desde tiempos de Auan II, 8oloreros, %enta de tintes para laropa. 5erradores para las caballer'as, Milaneses que se dedicaban a larelo0er'a de bolsillo principalmente.

-1B*.

1s el modo madrileo de llamar a la pla+a de Isabel II, recinto que presideel -alacio Beal. 1n el lado sur, obser%ar$ el desni%el que hemos citadoK la

escalera, ocupa una barrancada, que per%i%i, hasta principios del GIG. Oneesta pla+a con la calle de antiago, y hay un par de tascas, donde sir%en unmagn'fico pulpo gallego, adem$s del t'pico lacn. *ntes, este mismo encla%e,


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se llam de los 8aos del -eral, unas fuentes, que se alimentaban decorrientes de agua subterr$nea, que %en'an desde aba0o, desde la pla+aMayor. 1n estos caos, hab'an unos grandes la%aderos para la gente de la%illa. 1n un corral pr9imo a ellos, los rufaldines, una compa'a decantantes italianos, inici a principios del GIII sus actuaciones al aire libre.

u%ieron 69ito, y lograron permiso para le%antar un teatro 0unto a los 8aosdel -eral. &esde entonces y hasta el 3@@, los cantantes de pera italianospredominaban. 1n esa fecha, una orden real, proh'be las actuaciones enlengua e9tran0era y asimismo que canten artistas de otros pa'ses. Momentoque los nacionales apro%echan para lucir sus %oces. 1l 8oliseo, se demolien el ao 3; por amena+a de ruina. Haturalmente, todo esto es parailustrar la lgica de que sobre su solar,se comen+ara a construir al aosiguiente, lo que hoy es el eatro Beal. e inaugur en el ao 3!@, sin lagaler'a circular con la que se pretend'a unir al -alacio. Ho tiene el aspecto

suntuoso de los grandes teatros europeos, pero cumple su cometido encalidad de sala de conciertos, adem$s de acoger al 8onser%atorio y la1scuela de *rte &ram$tico. u aforo es suficiente para unas actuaciones yqui+$s algo escaso para otras, cuando de grandes di%os o de pie+aspopulares se trata. *s' que no e9trae si %e a la gente haciendo cola durantela noche, para no quedarse sin entrada.

-la+a de riente. Madrid.


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Monasterio de la 1ncarnacin. Madrid.

OH 8H1H 18H&I&.

&esde pera y siguiendo la calle del autor de DMarinaE, *rrieta, se sale alcon%ento de la 1ncarnacin, que domina los cipreses y cedros de la pla+a deigual nombre. 1s de principios del GII. -arte de sus tesoros, son huyaccesibles al p)blico, que de paso, puede comprobar, la bella factura de suinterior. La %isita es pl$cida a media maana y en d'a soleado. &e %e+ encuando, el con%ento, salta a las paginas de los peridicos, porque la sangrede an -antalen que se guarda aqu', en una ampolla de cristal se licuay luego se solidifica. &icen que de ese modo seala ciertas cat$strofes. 1neste con%ento se guardan no pocas an6cdotas. &oa Margarita esposa deFelipe III, tu%o especial inter6s en que se al+ara, para conmemorar lae9pulsin de las )ltimas familias de moriscos que quedaban en el barrio deLa%api6s, ciento %eintitr6s en total. * la reina, el hecho le pareci una %ictoria

tan asombrosa de la fe, que no escatim recursos para el Monasterio.8uando alguien le coment que la tra+a era pequea, respondi que noimporta. D(o la enriquecer6 de manera que no haga falta la tra+a.E. *ntes de


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fallecer, de0 escritas cartas a distintas partes del reino y a otros, para queremitieran a la nue%a 8omunidad, piedras preciosas, plata, bronce, sedas,brocados etc. i est$ en disposicin de seguir andando, siga el muro delcon%ento por la calle errano )er, y en un instante, est$ en la pla+a de laMarina 1spaola, sede del enado. *ntes, estu%ieron en el mismo palacio

las 8ortes /enerales del ao 3


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1stacin *tocha Fachada parcial. Madrid.

Interior de la estacin de *tocha.


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ista interior de la estacin de *tocha.

Ministerio de *gricultura.


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&etalle de la parte alta del Ministerio.

MO1 &1L -B*&.

*tocha es una de las denominaciones que en castellano recibe el esparto.Ho resulta a%enturado, afirmar que, en tiempos, lo que hoy es glorieta fue unsimple espartal. -osteriormente *tocha fue, y lo sigue siendo encruci0ada decaminos. La presencia de la estacin configura la +ona, cuya densidad dealo0amientos y lugares para repostar es alta. 5asta este ao un a6reo Dcale9tricE atra%esaba la glorieta de modo que %erse lo que se dice %erse nose se %e'a. (a se desmont y con ello se pretende, que la glorieta y susalrededores, respondan tambi6n a un n)cleo cultural de primer orden. -araello, se est$ rehabilitando el 5ospital /eneral de an 8arlos, frente a laestacin. La iniciati%a de construir aqu' un gran hospital, se debe a Felipe II,Fernando I retoma la idea y encarga los planos a Aos6 de 5ermosilla. 8onla subida al trono de 8arlos III, el proyecto, pasa a Francisco abatini, quienlo elabora en grandes dimensiones, incluso mayores que el -alacio Beal. &elo proyectado solo lleg a reali+arse un patio y las dos cru0'as que un'an eledificio con *tocha 7 *ctuales calles del &octor Mata y &rumen :. 1n las+onas reali+adas, se ad%ierte la con0uncin del barroco italiano y la tradicindel 1scorial. 1l hospital fue perdiendo en e9tensin y ganando en altura a lolargo de su historia, con lo que la idea del proyecto inicial en buena parte se

perdi. -asa a ser el 8entro 8ultural Beina of'a, con%irtiendo este tramo enreceptor de arte. 1l con0unto de la estacin de *tocha, se le%ant entre el ao


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3"> y 32>, las primeras construcciones, corresponden al edificioadministrati%o empla+ado al principio de la *%enida 8iudad de =arcelona. etrata de un grupo de %arios edificios, algunos unidos mediante pasos deestructura met$lica. u tra+a, constituye un buen e0emplo de la influenciaarquitectnica francesa durante los )ltimos aos del reinado de Isabel II. La

estacin que corresponde a una tipolog'a bastante sencilla, se comen+ aconstruir en el ao 333. 1n la esquina con la cuesta de Moyano se al+a otroedificio monumental, tambi6n de finales del siglo pasado. Fue ministerio deFomento y en su fachada, destaca el prtico adornado con dos cari$tidesrepresentati%as de la Industria y el 8omercio. 1n la cuesta de Moyano,pegadas a la %er0a del =ot$nico, est$n las casetas alineadas dedicadas a la%enta de libros. *qu', se pueden encontrar, tanto %aliosos e0emplaresantiguos, como los m$s actuales. i dispone de tiempo lo me0or es darse una%uelta cualquier d'a para comprobarlo paseando por los distintos puestos. *l

final de la cuesta a la derecha ya en las lindes del Betiro, est$ lo que sedenomin cerrillo de an =l$s, aqu', en tiempos de 8arlos III, hubo unpol%or'n, una ermita y un 0uego de pelota. e derribaron, para construir elbser%atorio por iniciati%a del marino Aorge Auan de illanue%a y data del;2@. e trata de un con0unto sobrio, de gran belle+a, que hoy padeceabandono, pues sus instalaciones apenas se utili+an. Ona asociacin de*strnomos aficionados se sir%e de alguno de los edificios. 8olocan untelescopio y por turno riguroso cualquier persona puede contemplar lasestrellas en las noches despe0adas.. 1l bser%atorio se integraba en elprograma cient'fico lle%ado a cabo, durante la ilustracin en el reinado de8arlos III. * principios de siglo, el cerro estaba ro'do por co%achas donde losgolfillos de refugiaban del mal tiempo y las busconas se ganaban la %ida a sumodo. On testimonio de este Madrid, nos lo ofrece -io =aro0a en D La =uscaE.

Interior del Museo del -rado.


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Museo del -rado. Madrid.

Interior del Museo del -rado. Madrid


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bser%atorio *stronmico. an =las. Madrid.


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L* BILL* &1B185* &1L -B*&.

5istricamente, el bser%atorio, se encuadra tambi6n en el denominado

1nsanche del =uen Betiro. oda esta +ona, es el lateral derecho de la8astellana 7 desde *tocha a 8ibeles :, sufri grandes cambios a partir de8arlos III, como ya se ha dicho. &e esta 6poca, es el acondicionamiento entorno al -rado de an Aernimo.

5oy, es un barrio bien tra+ado de clases acomodadas, con magn'ficasconstrucciones de finales y primeros de siglo, 1n su entramado, haynumerosas casas #palacio, algunos museos y edificios oficiales? como la Beal*cademia de la Lengua, el Museo Hacional de 1tnolog'a, y el Museo del106rcito.

-ero el encla%e que domina la +ona, est$ detr$s del Museo del -rado, setrata de la iglesia y con%ento de an Aernimo el Beal, desde la carrera dean Aernimo, se contempla una bonita perspecti%a de la airosa iglesia,donde la gente bien, suele celebrar sus bodas.

* este con%ento pertenec'a, lo que hoy es el parque del Betiro, que antesfue huerto. Felipe II sol'a retirarse all' para meditar. La iglesia primiti%a, eradel GI y corresponde a una fundacin de los Beyes 8atlicos. 1l inicial,guardaba relacin con anto om$s de *%ila, que en su momento seconsider prototipo de la iglesia con%entual. La primera restauracin data del3


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Interior de la iglesia de an Aernimo.

*ltar central de an Aernimo 1l Beal.


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1n el -rado, entre la cuesta de Moyano y el Museo, est$ el Aard'n=ot$nico# un delicioso lugar para huir de los calores propios del %erano# opara perderse entre sus senderos bordeados de olorosos =o0s.

1s c$lido sanatorio de $rboles enfermos, pero tambi6n incubadora deespecies reci6n nacidas, fuentecillas, recoletas pla+uelas, esculturas y

bancos, salpican cualquier recorrido.*qu' se puede aprender de bot$nica, o sencillamente, sentarse a leer elperidico a la fresca sombra de un %ie0o alme+. Ho de0e de entrar, en supequeo in%ernadero de especies tropicales.

1s muy posible, que en un pabelln trasero en ese momento, haya unae9posicin de inter6s de pintura, ciencia o flora del Hue%o Mundo. Losantecedentes, del Aard'n =ot$nico se sit)an en el reinado de Felipe I, quecrea en este espacio la huerta de D Migas 8alientesE. 8arlos III, decide en elao ;;


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8actus gigante. =ot$nico.

Aardines del =ot$nico.


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tra %ista del 0ard'n =ot$nico.

eatro 1spaol. Madrid.


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Interior del eatro 1spaol.

L* BILL* ICQOI1B&* &1L -B*&.

*lberga un en0ambre de calle0uelas que se han ido disponiendo a su airedesde hace siglos. Fue parte del primer sector de crecimiento de la capital,desarrollado a partir del antiguo n)cleo medie%al. 8omunicaba y comunica#la +ona del la -uerta del ol, con el Betiro y sin duda, su estructura har'a que8arlos III pusiera el grito en el cielo 1ste sector, ha ido despertando de unosaos a esta parte. 8omo Malasaa, se ha recuperado para otra %ida m$sacti%a sin perder su configuracin inicial. Austo es decir que los horrorosos

edificios de lo que fue 8asa indical y diario -ueblo, rompen su %ie0aarmon'a, pero como est$n en los l'mites se acaba por hacer caso omiso deellos. La calle de 5uertas, es hoy el e0e de la +ona. 1n torno a ella, hanproliferado y siguen #restaurantes, bares, pubs de todo tipo, caf6s conactuaciones musicales en directo, galer'as de arte, tiendas de artesan'a, ymuebles, y libros antiguos en los alrededores de la calle del -rado. Muypr9imo a este abigarramiento, descansan los huesos de nuestro ilustre8er%antes, en el con%ento de las rinitarias de la calle de Lope de ega. (para que todo quede en su sitio, en la calle de 8er%antes, permanece en pie,

la que fue casa de Lope de ega, el popular dramaturgo, la adquiri en elao "@, cuando la calle se llamaba Francos. 1n la calle 5uertas se le%anta lo que hoy es la Beal *cademia de la


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5istoria. illanue%a la proyect en el ao ;33 para que fuera oratoriomadrileo de la 8omunidad del 1scorial. -or eso es %isible en su portada unaparrilla de an Loren+o. 1s una de las aportaciones m$s afortunadas deillanue%a a la arquitectura neocl$sica de Madrid. 1n la calle del -rado 7 confundir con el paseo :, est$ el *teneo de Madrid,

fundado en el ao 33>. u fin, era la formacin de una sociedad patritica yliteraria para la comunicacin de ideas, el culti%o de las letras y de las artes,el estudio de las ciencias e9actas, morales y lol'ticas, y contribuir, en cuantoestu%iese a su alcance a propagar las luces entre sus ciudadanos. utalante, n6tamente liberal, se %io frenado con el paso reciente y ahora intentarecuperarse. 1n la carrera de an Aernimo, en la -la+a de las 8ortes, est$ el 8ongresode los &iputados. 1n este lugar, estu%o el con%ento del 1sp'ritu anto, quese utili+ como sede de las 8ortes, desde el ao 34< al 3


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tra fachada de cer$mica de illa#Bosa.

Monumento a 8aldern de la =arca. Madrid.


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H1-OH 8I=1L1.

La armon'a de este tramo sin duda se quiebra por un horrible edificiocercano a 8ibeles, el Museo Ha%al. -or lo dem$s, los aledaos de Heptuno,constituyen un con0unto equilibrado en que alternan el afrancesamiento delhotel Bit+, con la magnifica sobriedad del palacio istahermosa. 1ste )ltimo,hoy forma parte del Museo del -rado, y se pretende trasladar el con0unto dela obra de /oya a este edificio, cuya primera construccin data Lel siglo GII.1l proyecto de reforma, cuando la =anca Lpe+ Quesada, lo adquiri en lad6cada de los ;@ mereci en 2;2 el premio Auan de illanue%a al edificiome0or construido.

Aunto al obelisco de la pla+a de la Lealtad, al lado de Heptuno, est$ la=olsa de 8omercio de Madrid, que aunque no es de las m$s boyantes delmundo occidental, si, cuenta con un noble edificio de corte neocl$sico,bastante equilibrado. 1l obelisco del centro, rodeado de $rboles llamadosginRgos, 0aponeses, es hoy monumento al soldado desconocido.

-alacio istahermosa. -aseo del -rado.


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Fuente de *polo. -aseo del -rado.

&etalle parte superior de la fuente.


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Los bule%ares del paseo, desembocan en 8ibeles, en el medio, la fuentedel mismo nombre con la diosa sobre su carro, tirado por dos leones.5ipmenes y *talante. 1n principio miraba al -rado, despu6s, cambi depostura y all' permanece de espaldas a la puerta de *lcal$. 1n la pla+a, lo

que m$s destaca es 8orreos 7 -alacio de 8omunicaciones :, obra deprincipios de siglo 7 proyecto de -alacios y tamend'a : que resulta de lom$s peculiar. u torreada arquitectura, tiene algo de castillo, seentreme+clan detalles platerescos y modernistas, mientras que la fachadaque da a Montalb$n es casi racionalista o muy %ienesa. 1nfrente,asombrosamente, sigue en pie el palacio Linares, y decimos esto porque suactual propietario? 8onfederacin 1spaola de 8a0as de *horro# presente9pediente por derribo, por fortuna, en el ao 2;", fue declaradomonumento histrico art'stico y se sal%, pero est$ enfermo de polucin, y de

no tomar medidas lamentablemente se ir$ deteriorando con el paso deltiempo. 1s un e0emplo de arquitectura palaciega madrilea del GIG. 1l 0ard'ncuenta con interesantes pabellones, uno cl$sico y otro de corte rom$ntico. 1n la otra esquina, llama la atencin el frondoso y cuidado 0ard'n de lo quefue palacio de =uena%ista 7 5oy 8uartel /eneral del 106rcito:. Inicialmente,se construy para los &uques de *lba, es probable que se hiciera sobre unproyecto de entura Bodrigue+. *l morir la duquesa en el ao 3@>, pas aser propiedad de la 8orporacin Municipal, que lo adquiri, para ofrec6rseloa /odoy. ras la reforma del ao 3


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centenario del descubrimiento de *m6rica en 32>. 1s uno de los primerosedificios espaoles en el que se usa de forma masi%a el hierro. -ordesgracia, en sucesi%as transformaciones desaparecieron los patios $rabe yromano y un depsito de libros, magn'fico e9ponente de la arquitectura dehierro madrilea. *qu', se guardan m$s de milln y medio de libros, >!@@@

manuscritos antiguos, y >!@@ incunables.

Fuente Mariblanca. -aseo Becoletos.

1n Becoletos, se suceden las terra+as m$s coti+adas donde los persona0esde la %illa y corte, lucen su palmito como en otro tiempo, lo hicieran lospisa%erdes del -aseo del -rado. -or esta +ona, se dice que fue gestada lallamada D mo%idaE madrilea a la que tanto p$bulo se le ha dad, sin quenadie se atre%a a e9plicar en que consiste e9actamente.

L* BILL* ICQOI1B&* &1 B18L1.

La orilla i+quierda, lle%a camino de con%ertirse en la catedral de la moda.Bopa y diseo, se confunden por estas calles, donde debe acudir todo aquel,que sienta necesidad de ir a la )ltima. 1l complemento imprescindible# lacopa en sociedad#, tiene aqu' numerosos santuarios. ambi6n las galer'asde arte se %an asentando en esta +ona D redescubiertaE por un sector demadrileos hace unos pocos aos. 1n los aledaos est$ el con0unto de las

alesas, c6lebre en la historia reciente de Madrid y no por su car$cterbarroco. Iglesia de anta =$rbara y -alacio de Austicia.


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-alacio de 8omunicaciones. -la+a de 8ibeles.

odo ello, se cre por iniciati%a de la reina doa =$rbara de =ragan+a,esposa de Fernando I, de quien se dice, que era tal su obsesin por eldinero, que siempre andaba escondi6ndolo en grandes cantidades. La reina,pretend'a que se instalaran aqu', las Mon0as alesas, y para ello, se le%antel templo, monasterio, m)ltiples dependencias, y 0ardines que llegaban hastarecoletos y las Bondas. 8umpli esta funcin, hasta el ao 3;@, en que elcon%ento citado pas a ser -alacio de Austicia. e reform en el ao 2! al>", porque hab'a ardido casi todo el edificio. ambi6n en la orilla i+quierda de Becoletos, desde =arquillo, y en torno a lapla+a de 8hueca, hay cosas que %er, para quien guste de probar ambientesdistintos. Ho solo la 8asa de las iete 8himeneas, # del siglo GI, hoyMinisterio de 8ultura, en la pla+a del Bey#, o la hermosa c)pula del con%entode las /ngoras, sublime con la puerta de sol. ambi6n locales gay,restaurantes de rancia tradicin, # como D 1l 8omunistaE, D al%adorE, o La8armencitaE..bares de siempre con tapas e9celsas, nue%os antros, ad hocpara los m$s modernos y mercados de toda la %ida, donde la seora mar'a,sigue haciendo la compra. 1s el Madrid, que re%erdece por las calles, quehasta hace poco, nadie hubiera dado un duro, y que desde unos aos a estaparte, se est$n poniendo por las nubes los precios de %i%iendas y locales

comerciales.


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Iglesia de anta =$rbara.

Interior de la =iblioteca Hacional.


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Fachada de la =iblioteca Hacional.

ala de Lectura. =iblioteca Hacional.


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/B*H I* OH* 8*LL1 &1 M*&BI&.

D5e o'do dos %eces D La /ran 'aE, una calle de Madrid. 1s algo, que nopuede en modo alguno transplantarse. -ara hacerlo hay que ser un granu0a,

un indi%'duo de un hond'smo instinto y, adem$s, solemne, un terceto de tressolemnes, gigantescos, canallas, es lo m$s slido que he o'do y %isto?tambi6n la m)sica genial.E 1l 0ugoso comentario es nada menos que de don Federico Hiest+che.Haturalmente se refiere a la famosa +ar+uela del m)sico sabio 8hueca,madrileo por m$s seas. 1sta re%ista cmico#l'rica. Fant$stica y calle0era enun acto de cinco cuadros, fue su 69ito m$s rotundo, tal %e+, porque describ'acomo nada el esp'ritu de Madrid. anto es as', que la +ar+uela, e9isti natesque la calle.

=ueno, pues esta calle con nombre de +ar+uela, signific para Madrid, unade las reformas m$s importantes, en el $mbito urban'stico. 8uando seconstruy lo que se pretend'a era remodelar el casco antiguo, rompiendo eltra+ado medie%al de la ciudad en pro de las calles rectas y abiertas. Onmo%imiento, que surge con pu0an+a a mediados del siglo GIG. La /ran 'a,supuso adem$s, la unin o comunicacin de dos barrios ricos, por entonces,de construccin reciente. *rgPelles y alamanca. *ntes se un'an porcircun%alacin. 1l tra+ado de la /ran 'a, se reali+ cuidando especialmente el aspectomonumentalista de las fachadas. 5oy permanecen la mayor'a tal cual, m$ssucias muchas de ellas, aunque en los )ltimos tiempos se han tomadomedidas bastante eficientes para restaurarlas o al menos la%arles la cara.*unque se haya pasado cientos de %eces por esta escandalosa calle,siempre que se le%ante la %ista que no todo han de ser escaparates setopar$ uno con algo desconocido.

/ran 'a de Madrid.


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tra %ista de la /ran 'a madrilea.

1dificio 8apitol. Madrid.


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1dificio de la elefnica de 1spaa. Madrid.

L &IIH B*M.

La /ran 'a, arranca en la calle de *lcal$, 0unto a la iglesia de an Aos6,construida en el siglo GIII, pero en enlace directo con el barroco del GII.1n la /ran 'a propiamente dicha, el )nico edificio, que no es de primeros desiglo, o posterior, es el oratorio del 8aballero de /racia. 1s un monumentoneocl$sico, con planta basilical, iniciado seg)n planos de Auan de illanue%a. Las obras se reali+aron siguiendo tres tramos bien definidosK el primero de*lcal$ a la red de an Luis? el segundo hasta 8allao? y el tercero hasta lapla+a de 1spaa.

&el primer tramo, sin duda el edificio m$s caracter'stico, es el llamado D1dificio MetrpolisE 7 La Onin y el F6ni9 :, en chafl$n, con su magn'ficarotonda de columnas corintias y el grupo escultrico que remata la oscura


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c)pula que data del ao 2@!. &el segundo destaca y no por su belle+a,sino por ser punto de citas y por su relo0 fluorescente, %isible desde cualquierpunto de la +ona el edificio de la elefnica. 1sta blanca imitacin de Manhattan, # Drascacielos americano condecoracin barroca madrileaE #, en palabras de /iner de los B'os fue en

su tiempo, el edificio m$s alto de 1spaa. e construy en un tiempo record,y cabe sealar, a modo de chascarrillo, que por primera %e+ en Madrid, un%oladi+o de tablas, se coloc sobre la acera, para e%itar que las obras, dieranalg)n susto a los %iandantes. 1s del ao 2>2. 1l tercer tramo de la /ran 'a lo marca ese edificio tan com)n en lastar0etas postales? el 8ine 8apitol, con sus luminosos de nen. Fue el primeredificio le%antado para hotel residencia por apartamentos. e ha con%ertido,el el s'mbolo m$s genuino de la agitada /ran 'a. 1s del ao 24.8onstituye una de las pocas manifestaciones e9istentes en la ciudad del

e9presionismo alem$n en arquitectura. 5*8I* M*L***.

*tra%esada la pla+a de 1spaa, ya en la calle de la -rincesa y muy cercade la mirada de doa 1milia -ardo =a+$n, con%ertida en estatua, est$ elsuntuoso palacio de Liria, propiedad de los &uques de *lba, es obra deabatini y entura Bodrigue+, el grueso de las obras, se reali+ entre ;;@ y3@, y tu%o que ser restaurado tras la guerra ci%il. On magn'fico 0ard'n ocultael edificio. &esde aqu', lo m$s recomendable es, calle0erar, perderse por el lateralderecho de la calle -rincesa, atra%esando los tradicionales laberintosmadrileos. anto se puede acabar en la /lorieta de =ilbao, como en la pla+adel &os de Mayo. 1star$ en Malasaa en cualquier caso, antiguamentebarrio de las Mara%illas, como el t'tulo de una no%ela de Bosa 8hacel, quenaturalmente transcurre aqu'.

8uartel del 8onde &uque. Madrid.


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-la+a de las 8omendadoras. Madrid.

-or esta +ona encontrar$ innumerables, tascas, bares, pubs, y restaurantesde todos los precios y sabores, gallegos o peruanos, tanto da. *dem$s esf$cil que el 8uartel del 8onde &uque haya una e9posicin interesante, o si es

6poca, un buen concierto de 0a++ u otra clase de representaciones. iguiendo todo recto hacia an =ernardo, dar$ usted con la placita de las8omendadoras, 0unto a la calle *maniel. *qu' se le%anta muy oscurecida supiedra por la contaminacin, la iglesia y el con%ento de las 8omendadoras deantiago el Mayor. on del siglo GII, aunque ebatini reali+ unareestructuracin en siglo GIII, uniendo las distintas edificaciones en queestaba distribuido. i opta por ba0ar por la calle del -e+, en la esquina de an =ernardo, est$el palacio =auer 7 hoy 1scuela uperior de 8anto :, es del siglo GIII y

cuenta con un magn'fico interior. -e+, es una de las calles m$s casti+as deMadrid, y toda%'a conser%a curiosos comercios. -or desgracia, haydemasiado abandono y magn'ficos edificios esperan la necesariarestauracin.

i ha optado, por seguir la calle &aoi+, desembocar$ en la -la+a del &os deMayo, en cualquiera de los dos recorridos, no encontrar$ restos de%egetacin, sal%o los floridos tiestos que colocan algunos %ecinos en susbalcones. i es de d'a el &os de Mayo, presentar$ los rasgos de cualquier

barrio madrileo. La pla+a est$ cerrada a la circulacin y en ella e9isten%arios bares y cafeter'as. -ero si es de noche, la cosa cambia, se con%ierteen un crisol de gentes de todos los colores? se liga se trapichea y se alterna,


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cada uno a su gusto, porque para todos hay sitio. &esde aqu', tanto daa%an+ar por La -alma o por an icente Ferrer. *cabar$ dando con8hurriguera, es decir, con lo que fue antiguo 5ospicio de an Fernando, enla calle de Fuencarral. u portada es prototipo del estilo churrigueresco, yseguramente, la habr$ %isto reproducida en %arias ocasiones. Lo que es

menos sabido, es que este edificio, contiene el Museo y =iblioteca Municipaly, seg)n di0o don Federico ain+ de Bobles, D est$ toda la tinta que ha %ertidoel ingenio humano sobre la %illa de Madrid a tra%6s de los siglosE. 1n suseccin teatral, se guardan manuscritos de ? Lope Bamn de la 8ru+, y8aldern entre otros. La e9plicacin es que durante los siglos GII y GIII, alser los teatros municipales# pues ten'an ese car$cter# cada autor, deb'aremitir un e0emplar de las obras estrenadas. 1l edificio inicial, es de principios del siglo GIII y sufri reformas en el ao2>


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L**-I1 ( 1L 85OL M*&BIL1.

La%api6s o *%api6s, fue uno de los tantos barrios que crecieron

e9tramuros de la ciudad. enemos numerosos testimonios escritos desde elsiglo G, pero seg)n parece, en tiempos de los $rabes, aqu' estu%o asentadala poblacin 0ud'a. Lleg a ser, el m$s casti+o y madrileo de los barrios. Le sonar$ sin duda,por sainetes, +ar+uelas, y obras de costumbre, que de0an traslucir, unpeculiar modo de ser, lo que se llama casta. 1ra el barrio de los manolos oma0os, la manoler'a, es consecuencia del cambio religioso acaecido en elbarrio con la destruccin de la 0uder'a en el ao . * ra'+ de esto,llamarse Manuel, era ostentacin de ser un cristiano nue%o, y de ese modo

se llamaban los primog6nitos de las familias. M$s que sugerirle un recorrido, en este caso, lo interesante es captar laesencia del lugar de la que toda%'a queda algo. La cercan'a de 1l Bastro, leconfiere car$cter, con su abundante poblacin de gitanos y cambalacherosde todas clases. *qu', la gente, toda%'a es comunicati%a, y en las noches de%erano madrileo, muchos, siguen sacando las sillas a la puerta de suscasas, para hacer tertulia. 1n sus bares, a)n se sir%en tapas ya e9traas enotros lugares como? +ara0os, galline0as,o criadillas, siempre en compa'a dela caa o el chato. 1sta es patria de un especial modo de hablar, que con el tiempo, se ha idoe9tendiendo a otras muchas +onas y del que se hace alarde comomanifestacin e9terna de estar al loro. ambi6n aqu' en estos )ltimos aos,se han abierto numerosos locales de copas los antiguos que a)n se resistena cerrar. &e estos, uno de los m$s famosos es la taberna de *ntonio$nche+# en la calle Mesn de -aredes# hace poco se ha con%ertido enrestaurante. 1l primiti%o barrio hebraico se agrupaba en torno a la sinagoga. 1n su lugarse empla+ una iglesia consagrada al m$rtir an Loren+o, sin duda con af$nde purificar el sitio. -or la misma ra+n se bauti+ calle de la Fe, aquella en

la que se asentaron los primeros 0ud'os que llegaron. ras la e9pulsin, a)nquedaron en el barrio un reducto morisco, pero no ser'a por mucho tiempo?en los aos de Felipe III, el trinitario imn de Bo0as logr echarlosrebauti+ando los para0es con el nombre de *%e Mar'a. -ara celebrar laha+aa se construy el monasterio de la 1ncarnacin. &urante los siglos GIII y GIG, la manoler'a, se e9tendi a la poblacin delos barrios ba0os madrileos. * los habitantes de =arquillo, an *ntn yMara%illas, se les llamaba chisperos, eran los D ti+naosE # traba0adores delhierro# pues entorno a =arquillo e9ist'an numerosas fraguas. u aspecto

sucio y desaseado, pro%ocaba el desprecio de los manolos gente pintureraque se caracteri+aban# por su aspecto atildado y elegante. 1l manolo y la manola, son los que en el siglo GIG se llam chulo y chula,


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chulapos. 1sta ri%alidad, llegaba a desencadenar, peleas, e0ercitadas enforma de pedreas por los cha%ales. 8asi siempre, se lle%aban el gato al agualos m$s brutos, es decir, los chisperos. &ice un persona0e de don Bamn dela 8ru+K D *qu' est$n las mara%illas, con deseos de reir? menos lengua ym$s pedradas, seores del =arquill'E..

&esde el siglo GII. La%api6s, fue el barrio de las buoler'as. -or qu',proliferaban esos rtulos que tanto chocan a los forasterosK D F$brica dechurros y buuelosE. Mesn de -aredes, es una calle t'pica del barrio. 8uando esto no eraciudad, tu%o aqu' una posada muy espaciosa imn Miguel -aredes, famosaen los contornos. -er%i%en un par de corralas o casas de corredor, queconfiguran la historia popular de la %illa en los )ltimos siglos. Las corralas, se construyeron como respuesta a la necesidad de acomodaral enorme flu0o de traba0adores que acuden a un Madrid ahogado dentro de

sus murallas. 5ay que tener en cuenta que la poblacin, pasa de ;@@@@habitantes en el ao ">! a >@3.@@@ en el 3"3. on edificios estructuradosen torno a un gran patio central, con corredores a los que se abren las%i%iendas. La comunicacin hori+ontal, se reali+a mediante las galer'as, y la%ertical, por la escalera situada en el e9tremo. 8ada planta tiene un aseocom)n. La que est$ 0unto a ribulete ha sido restaurada en el ao 2;;, y es,de las escasas muestras que quedan de ese Madrid popular. 1n la corrala, los %ecinos, celebraban %erbenas, bailes y representacionesde teatro, con lo que la %i%ienda cumpl'a una doble funcin. &e nuestrosno%elistas, fue -'o =aro0a quien me0or supo captar, la %ida que bull'a en lascorralas. Ona )nica ad%ertenciaK quien %isite La%api6s, no ha de buscarcomodidad, pulcritud o l'neas rectas. i de alg)n sitio puede decidirse quelas calles de amontonan, es 6ste. &60ese lle%ar por la curiosidad, ydispngase a ba0ar y subir cuestas. -or supuesto, no se le ocurra hacerlo encoche.

-atio de una corrala.


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8orrala Mesn de -aredes.

=odega y Bestaurante *ntonio $nche+.


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-uesto en el Bastro de Madrid.

ista parcial del Bastro. Madrid.


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-la+a de 8ascorro. Madrid.

&MIH/ 1H 1L B*B.

i pretende comprar algo en serio, entonces no %aya en domingo, pero silo que quiere es entender que se hace en el Bastro, no le quedar$ otroremedio que fundirse con la marea humana que circula en torno a la Biberade 8urtidores. 1n su retina, quedar$n miles de im$genes fragmentariasempapadas de color? fuelles, coladores, te0idos, barreos, lo m$s peregrinoque se le pueda ocurrir, all' seguro que lo encuentra.. On curioso documento del siglo G ya recomienda a los curtidores aqu'asentados, que Dlimpien los manaderosE, y que hagan nue%os Dcaos de cal y

ladrilloE a cambio de conced6rseles el apro%echamiento de las aguas, se lesobliga a reparar sus lagares y fuentes p)blicas, siempre con inter%encin delos alarifes oficiales de la %illa que generalmente, eran 0ud'os o musulmanes. 1ste testimonio tiene que %er con lo que significa rastro, era el lugar, dondese mataban reses para su posterior %enta de carne. 1l el 8erro del Bastro,estu%o hasta el siglo pasado el matadero de cerdos, y al lado, estaban lastener'as y f$bricas de curtidos donde se apro%echaban las pieles. 1l Bastro casi es uni%ersal, desde que nuestro /oya, lo inmortali+ara en DLos 8artones del 8iegoE o 1l 8acharreroE, una ra+n m$s para conocerlo.

odo el mundo %iene esperan+ado en encontrar alg)n chollo. -ero si unocompra algo que es de su gusto, la misin es cumplida. tra cosa distinta escompetir con la destre+a de los %endedores, aunque los hayan que se las


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den de regateadores consumados, salirse con la suya es otro cantar. &etodos modos, lo del regateo es aqu' una costumbre secular y por lo tanto,puede intentar en practicarla. Ho es nada f$cil, lograr un precio m$s barato. UQue se %a a encontrar aqu', si estos comerciantes saben ya incluso hablaren lat'nV. odos los ob0etos, al ba0ar al Bastro han pasado de mano en mano

por traperos y han sido pesados en una tasacin mayor de lo que %alen7 menos lo que se march : seg)n dicen estos chamarilerosV. Lo cierto es que el Bastro permanece porque en el siempre se hace dinero.i hace tiempo que no lo %isita, se sorprender$ al %er que los tent$culos delcitado rastro, %an cada %e+ m$s le0os..Los tiempos de crisis, lo hacenengordar.

( 1H M*&BI&, *&1M*...

1n el lugar donde hoy est$ el palacio real estu%o la fortale+a $rabe y,despu6s el alc$+ar de los reyes castellanos. 1n el, sol'an habitar habitardurante sus estancias madrileas. 8arlos no lleg a %i%ir en ese edificio,pero orden ampliarlo, porque su hi0o Felipe cur en el de unas cuartanas yqued agradecido al sitio. 1ntonces, el alc$+ar, estaba rodeado de bosquesde pinos que sua%i+aban el paso del fr'o aire de la ierra. * principios del siglo GII, el alc$+ar, ten'a quinientos aposentos. 1n sugaler'a, estu%o el estudio de el$+que+, y una parte de aquella, sir%e defondo al famoso cuadro de Las Meninas. 1n el ao ;4


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-arque del Betiro.

ista del -arque del =uen Betiro.


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-alacio de 8ristal, en el parque del =uen Betiro.

&ibu0o del antiguo *lc$+ar de Madrid.


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aln del rono -alacio Beal.

Fachada del -alacio Beal.


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aln comedor del palacio real.

5ay nada menos que treinta b%edas principales, decoradas por pintoresc6lebres? =ayeu, i6polo? Mengs, icente Lpe+..,La =iblioteca Beal, fuefundada por Felipe en ;4


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madrileos. e encarg la reali+acin de fuentes y 0ardines a 8osme Lotti,fontanero y escengrafo florentino que hab'a traba0ado en la corte de losM6dicis. 1n%ueltas en sus escenograf'as se representaban obras de teatro yse celebraban simulacros y batallas na%ales, todo impregnado de la pompade una corte barroca.

&el primiti%o palacio y el coliseo no quedan restos, desaparecieron 0untocon casi todo el 0ard'n inicial, cuando los franceses, se sir%ieron del Betiropara asediar a la ciudad de Madrid. olo el 8asn, que fue saln de baile yhoy es pinacoteca, recuerda la primera 6poca de los *ustrias 7 "4; :.

8arlos III el rey ilustrado, embellece y sanea la ciudad 0unto con suscolaboradores y arquitectos abatini, entura Bodrigue+, y illanue%a# creaen torno al Betiro un primer n)cleo de car$cter cient'fico. Aard'n =ot$nico,Museo de 8iencias Haturales 7 hoy Museo del -rado : y bser%atorio

*stronmico. 8on la re%olucin del 3"3, el Betiro, se abre a todos losciudadanos y pasa a pertenecer al poder municipal. 1ntre otras mara%illas, el parque cuenta con una bell'sima muestra de laarquitectura en hierro de finales de siglo el palacio de cristal #, donde hoyse celebran e9posiciones art'sticas, y una magn'fica escultura de =ell%er? el$ngel ca'do, la )nica estatua a atan$s le%antada en 1uropa.

OH* /*L*GI* &1 M1HO.

on los pueblos del resto de 1spaa quienes configuran Madrid. &e laamalgama de todos los que aqu' residen, surge lo que se define madrileos ,y eso ya es otra cosa? algo creado por todos y que es distinto. 1s posible,que una de las caracter'sticas de tanta me+cla de sangre sea ciertadesfachate+, eso que a %eces se llama D chuler'aE. ( aqu', ni al besugo le dacorte llamarse D a la madrileaE, lo cual, no de0a de ser una hilaridad. 8ocina madrileaV .=)squese y lo m$s madrileo, posiblemente seamanchego. 5ay quien dice que hasta el cocido madrileo es de La Mancha.Los churros, harina y agua en sabias dosis es in%ento de los $rabes. Loscallos, ya lo conoc'an los romanos, sin embargo, son platos, que en cualquier

parte se les reconoce como madrileos. sea, que su poquito de arte debentener. *l bucear entre lo que pod'a llamarse cocina tradicional, llaman la atencindos cosasK que es una cocina muy sencilla y que lo de darse garbeos, hasido cosa que siempre ha gustado en esta tierra.. anto las 0ud'as a lo 'oLucas unas 0ud'as blancas del =arco de *%ila, preferiblemente# como elcocido, son guisos que lo que m$s piden es el lento y pausado calorcillo delfuego. Lo de D me subo que tengo puesto el cocidoE, fue hasta no hacemucho lugar en los labios de las %ecinas de Madrid. sea, que es plato, que

permite seguir otras tareas. 8uando no, son platos r$pidos, como la sopa dea0o. ( con mucha frecuencia, fueron platos para ir de merienda. 1nsaladaslustrosas, como las del santo, con lechuga, hue%o duro, trope+ones de


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escabeche y aceitunas negras, o grandes tortillas de patata que se com'anen la pradera de an Isidro o en la 8asa de 8ampo. Ho quedan tan le0anosaquellos letreros de los merenderos, donde pod'a leerse D se admitenmeriendasE, y pod'a %erse a las familias entretenidas con limonada y sangr'a.&el ancestral gusto de salir de casa, nos sigue quedando el tapeo.

Que los pueblos de 1spaa, sean los que han dado lugar al madrileo, nosignifica que huyan renunciando a su peculiaridad. *s', que no es dee9traar, que la ciudad, est6 inundada de restaurantes %ascos comoCalaca'n y /ure 1t9ea, a la cabe+a, gallegos y andaluces, e9tremeos,murcianos,, tal %e+, la peor representada en el foro sea la cocina catalana. *pesar de que )ltimamente, se est$n produciendo empeos. -rueba de amorque se tiene aqu' al forastero, es la tradicional aficin al marisco, que comoes sabido, aqu' no se da bien. -or eso, el madrileo que no puede pagaraqu', cantidades astronmicas por un buen fruto marino, se queda

sorprendido cuando come un boga%ante en /alicia, o un centollo encualquier puerto asturiano.

L* *L1/BI* &1L *-1.

Lo de tapear, dicen que es costumbre andalu+a, pero en Madrid se adopt,como cosa propia, y es costumbre que per%i%e hasta en los e0ecuti%os. *ntes,raro era el bar en que el %ino o la cer%e+a no iba acompaada alguna tapaincluida en el precio. 5oy, es menos habitual, aunque sigue manteni6ndosea)n en bastantes establecimientos de los llamados t'picos. 5ay tascasfamosas por su tapasK los pepinillos en 8asa -aco al igual que loschicharrones, 8asa 8iriaco, la taberna de *ntonio $nche+, 8asa ierra,8asa Labra, por fortuna, la lista sigue siendo bastante larga hoy d'a enMadrid. iene lugares tradicionales, donde suelen preparar men)s caseros amuy buen precio como los que ofrecen en La Camorana, 8asa Bicardo. 1nlos )ltimos aos se han abierto un buen n)mero de bares con aire de latasca t'pica, pero a todos les faltan esos detalles propios que suelen darle laantigPedad propia de los aos.

L* IHIO8IH1.

1n esto de la comida, hubo en Madrid, instituciones muy calle0eras? algunasper%i%en solo en las +ar+uelas y ya casi es imposible unir la imagen deMadrid al mielero, con su blusn de rayas %erdes y negras? a la churrera conel delantal blanco y la cesta de mimbre, al barquillero, con sus artefactoscolorados y su %isera, a la castaera con su chiscn encendido y su pauelonegro. 1se Madrid, ha muerto, solo nos queda algunas reliquias. 8omo elmerendero, antes tan abundante en los barrios. &e todos modos, la gente, se

empea en e%ocarlo. i hace buen tiempo, la puesta de sol desde lasistillas, es de las m$s rabiosas del mundo.. ( si no se es, demasiadorom$ntico, se puede contemplar el ocaso 0unto a una fuente de cone0o al


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a0illo y una buena ensalada de las que aqu' se preparan. an /in6s,# enconcreto el chocolate con churros#, sigue siendo punto obligado de0uerguistas que quieren desentumecerse, y si es aficionado a la cer%e+a bientirada, no de0e de pasar por La &olores o La 8ru+ =lanca. 1l c6 de lasno%elas de principios de siglo casi ha desaparecido, esos caf6s, donde la

gente se pasaba buena parte de la tarde haciendo sus tertulias, como sol'ahacerse en el 8af6 de Le%ante, -ombo, an Mill$n, iena, 1l *narquista,Lepanto, 8olonial, ahora la mayor'a tan solo est$n presentes en la literatura.Flecos de aquellos D fastosE son el 8omercial, el /i0n y el Lin. Imitacionesde los antiguos caf6s, abundan hoy por todos lados, aunque, en honor a la%erdad, hay que decir, que el %elador de m$rmol y las cortinillas de enca0es,iniciaron su nue%

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