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Contenido Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú Norma Noé Moceti / Francisco Ulloa S. / Paola Peña B. / Débora Santos V. / Carla Fernández C. /Henry Anchante H. / Angélica Terashima I. /Amanda Chávez V. / Néstor Falcón P. Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. Argentina Betina Daprato / Natalia Cardillo /Martín Kunic / Yanina Berra / Irma Sommerfelt Mascotas, medicina veterinaria y bioética clínica animal: quirón al rescate de los suyos Ricardo Roa-Castellanos Importancia socioeconómica de la brucelosis María Luisa Canal Barquero Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción Mario Alberto Muñoz Rojas / Ivonne Melissa Vargas rodríguez / Diego Soler-Tovar Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review Isaura I. Y. A. Wayop / Paul A. M. Overgaauw / Liny E. C. Keessen

Contenido Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas …sapuvetnet.org/Magazine/sapuvet journal 3.pdf · la casa y el 29,0% (36) ha observado gusanos en las heces de su mascota

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Contenido Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niñosde educación primaria del cono norte de Lima, PerúNorma Noé Moceti / Francisco Ulloa S. / Paola Peña B. / Débora Santos V. / Carla Fernández C. /Henry Anchante H. / Angélica Terashima I. /Amanda Chávez V. / Néstor Falcón P.

Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. ArgentinaBetina Daprato / Natalia Cardillo /Martín Kunic / Yanina Berra /Irma Sommerfelt

Mascotas, medicina veterinaria y bioética clínica animal: quirónal rescate de los suyosRicardo Roa-Castellanos

Importancia socioeconómica de la brucelosisMaría Luisa Canal Barquero

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducciónMario Alberto Muñoz Rojas / Ivonne Melissa Vargas rodríguez /Diego Soler-Tovar

Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands:A ReviewIsaura I. Y. A. Wayop / Paul A. M. Overgaauw / Liny E. C. Keessen

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [15]

Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú

noRma noé mocetti1

fRanciSco Ulloa S.2

paola peña b.3

déboRa SantoS v.4

caRla feRnández c.5

henRy anchante h.6

angélica teRaShima i.7

amanda chávez v.8

néStoR falcón p.9

Fecha de recepción: 12 de enero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 Laboratorio de Medicina Preventiva, Facultad de Medicina Veterinaria, Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Correo electrónico: nvnoemoccetti @gmail.com.

2 Médico Veterinario Zootecnista, Facultad de Veterinaria y Zootecnia, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: [email protected].

ResumenEl objetivo del estudio fue identificar y cuantificar las especies de parásitos que pre-

sentan las mascotas caninas y felinas de niños en edad escolar de nivel primario en

tres escuelas estatales de la zona norte de Lima, Perú. Para ello, se recolectaron mues-

tras de heces de 131 caninos y 49 felinos de ambos sexos y de diferentes edades. Las

muestras fueron analizadas mediante la técnica espontánea en tubo (TSET) y examen

directo. Además se extrajo información acerca de prácticas potencialmente riesgosas

en la relación niño-mascota a través de una encuesta epidemiológica. En caninos se

encontró un 20,6% de positivos para Toxocara canis, un 7,6% para Giardia sp., un

4,6% para Diphylidium caninum y un 0,8% para Diphyllobothrium pacificum. En feli-

nos se reportó el 14,3% de positivos para Toxocara canis y el 2,0% para Ancylostoma

sp. Con respecto a la relación niño-mascota, de 124 entrevistados el 79,0% mencionó

que los niños besaban a la mascota o se dejaban lamer por ella, el 82,3% compartía

el alimento con las mascotas y el 88,7% no desparasitaba periódicamente a las mas-

cotas. Además, el 28,2% de los entrevistados mencionó que las mascotas duermen

en la misma habitación del niño, el 66,9% refiere que la mascota defeca dentro de

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. ISSN: 2027–8047. Enero-junio de 2011, pp. 15-24 [15]

[16] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Mocetti, Ulloa, Peña, Santos, Fernández, Anchante, Terashima, Chávez, Falcón

la casa y el 29,0% (36) ha observado gusanos en las heces de su mascota. Debido a

la importancia zoonótica de los parásitos encontrados, se requiere establecer un pro-

grama educativo-sanitario con la finalidad de prevenir la posibilidad de infección con

parásitos zoonóticos en esta población.

Palabras claveSalud pública, zoonosis, escolares, caninos, felinos, parásitos.

parasitic zoonoses in pet dogs and cats of primary school children of northern cone of lima, peru

AbstractThe aim of this study was to identify and quantify the species of parasites that pet

dogs and cats of children in primary school age from three state schools in the north

zone of Lima, Peru, presented. For this purpose, fecal samples were collected from

131 dogs and 49 cats of both sexes and different ages. The samples were analyzed

by the spontaneous sedimentation technique in tube (TSET) and direct examination.

Besides it was collected information about potentially hazardous practices in the child

- pet relationship through an epidemiological survey. In dogs, 20.6% were positive

to Toxocara canis, 7.6% to Giardia sp., 4.6% to Diphylidium caninum and 0.8% to

Diphyllobothrium pacificum. In cats was reported 14.3% positive to Toxocara canis,

and 2.0% to Ancylostoma sp. Regarding the relationship between children and their

pets, from 124 respondents, 79.0% mentioned that children kissed their pets and /

or allowed pets to lick them, 82.3% shared food with their dogs and 88.7% didn’t

regularly deworm their pets. In addition, 28.2% of the respondents mentioned that

the pets slept in the same room as the child, 66.9% reported that the pet defecated

inside the house and 29.0% have observed worms in the their pet stool’s. Due to the

zoonotic importance of the parasites found, it is required to be established a health

education program, in order to prevent the possibility of infection with zoonotic

parasites in this population.

KeywordsPublic health, zoonoses, primary school children, dogs, cats, parasites.

3 Laboratorio de Medicina Preventiva, Facultad de Medicina Veterinaria, Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Correo electrónico: [email protected].

4 Médico Veterinario Zootecnista, Facultad de Veterinaria y Zootecnia, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: [email protected].

5 Médico Veterinario Zootecnista, Facultad de Veterinaria y Zootecnia, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: [email protected].

6 Instituto de Medicina Tropical Alexander Von Humboldt, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: [email protected].

7 Instituto de Medicina Tropical Alexander von Humboldt, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: angelica.terashima @upch.pe.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [17]

Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú

zoonoses parasitárias em cães e gatos de crianças da escola primária do cone norte de lima, peru

ResumoO objetivo deste estudo foi identificar e quantificar as espécies de parasitas que

apresentam as mascotes caninas e felinas de crianças em idade escolar em três escolas

estatais da zona norte de Lima, Peru. Para isso, recolheram-se amostras de fezes de

131 cães e 49 gatos de ambos sexos e diferentes idades. As amostras foram analisadas

mediante a técnica da sedimentação espontânea em tubo (TSET) e exame direto.

Além disso, recolheu-se informação sobre práticas de potencial risco na relação dos

crianças - animal de companhia através de um estudo epidemiológico. Em cães, 20,6%

foram positivos a Toxocara canis, 7,6% a Giardia sp., 4,6% a Diphylidium caninum e

0,8% pa Diphyllobothrium pacificum. Em gatos, reportaram-se 14,3% de positivos a

Toxocara canis e 2,0% a Ancylostoma sp. No que diz respeito à relação criança - animal

de companhia, de 124 entrevistados, 79,0% das crianças beijavam o seu animal e/

ou deixavam receber lambidelas, 82,3% partilhavam o alimento com os cães e 88,7%

não desparasitava periodicamente os animais. Para além disso, 28,2% dos inquiridos

mencionaram que os animais dormiam na mesma habitação da criança, 66.9% referiu

que o animal defecava dentro da casa e 29.0% observaram vermes nas fezes. Devido à

importância zoonótica dos parasitas encontrados, considera-se necessário estabelecer

um programa educativo-sanitário com a finalidade de prevenir a possibilidade de

infecção com parasitas zoonóticos nesta população.

Palavras chaveSaúde pública, zoonoses, escola, cães, gatos, parasitas.

8 Mg. Laboratorio de Microbiología y Parasitología Veterinaria, Facultad de Medicina Veterinaria, Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Correo electrónico: [email protected].

9 Médico Veterinario Zootecnista, Facultad de Veterinaria y Zootecnia, Universidad Peruana Cayetano Heredia. Correo electrónico: [email protected].

Introducción

Los animales que con mayor frecuencia se encuentran en hogares urbanos son los perros y los gatos, los cuales son mantenidos generalmente como mascotas. El contacto con los animales produce un vínculo afectivo y ayuda a los niños en su desarrollo emocional (Robertson et ál., 2000). Sin embargo, esta convivencia puede poner a los niños en riesgo de contraer alguna infección zoonótica debido al estrecho contacto que tienen con las mascotas en sus hogares (Leguía, 2002). La pobreza y la migración humana favorecen la transmisión y la prevalencia de focos

[18] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Mocetti, Ulloa, Peña, Santos, Fernández, Anchante, Terashima, Chávez, Falcón

endémicos de las enfermedades infecciosas, generalmente las zoonosis parasita-rias (OPS/OMS, 2005). Entre estas se pueden encontrar los parásitos intestinales como el Toxocara sp., la Ancylostoma caninum, la Giardia sp., entre otras (Acha y Szyfres, 2003).

Por su importancia en salud púbica, la toxocariosis representa una de las prin-cipales zoonosis que se transmiten a partir de animales y ambientes infectados (Leguía, 2002). La toxocariosis en caninos es producida por el Toxocara spp., que se encuentra en el intestino delgado de los cánidos (Álvarez, 2000; Leguía, 2002).

La toxocariosis humana se ocasiona por el síndrome de la larva migrans visceral. Cuando las personas consumen alimento contaminado con huevos de este pará-sito, las larvas son liberadas y migran a diferentes órganos y tejidos en los que pueden permanecer arrestadas por mucho tiempo. Las manifestaciones clínicas en las personas dependerán del número y la ubicación de las larvas. Entre las mani-festaciones que producen una grave secuela se encuentra la migración de la larva a los ojos (larva migrans ocular), cuyas consecuencias pueden ser la disminución progresiva de la visión y su pérdida repentina (Acha y Szyfres, 2003).

Sin embargo, el Toxocara no es el único parásito peligroso para el hombre. El Ancylostoma caninum puede producir un cuadro conocido como larva migrante cutánea, que se produce por la migración de larvas infectivas dentro de la piel des-protegida (Acha y Szyfres, 2003). Esta enfermedad se caracteriza por la presen-cia de un progresivo e intenso prurito, lesión eruptiva linear, los cuales son más intensos de acuerdo a la gravedad del cuadro (Hendrix, 1999; Leguía, 2002). Se ha comprobado también que el Ancylostoma caninum se desarrolla hasta la fase adulta en el interior del intestino delgado de los seres humanos (Hendrix, 1999).

En el caso de los protozoos, la giardiasis es una infección frecuente en humanos y animales. Giardia intestinales es uno de los protozoos de mayor trascendencia en salud pública (Cordero del Campillo et ál., 1999). Se ha comprobado que las especies que producen la giardiasis en humanos y en animales domésticos son genéticamente similares (López et ál., 2006). La enfermedad produce con mayor frecuencia cuadros subclínicos de enfermedad, y en caso de hacerse manifiestos los síntomas, estos incluyen malestar abdominal, diarrea, anorexia, tenesmo y flatulencia (Acha y Szyfres, 2003).

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [19]

Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú

Debido a la repercusión sobre la salud pública de estas parasitosis, se hace ne-cesario establecer medidas de tratamiento y control para evitar la infección en el humano. La estrecha relación hombre-mascota crea poblaciones en riesgo en las cuales los niños se presentan como un grupo de mayor vulnerabilidad. Por ello el objetivo del estudio fue identificar y cuantificar las especies de parásitos que se presentan en muestras de heces de mascotas caninas y felinas de niños en edad escolar en el cono norte de Lima.

Metodología

El estudio se realizó en tres instituciones educativas estatales (IEE) del cono norte de Lima. La población objetivo fueron las mascotas caninas y felinas que con-vivían con niños de edad escolar de nivel primario de dichas instituciones. La participación en el estudio fue voluntaria, tras recibir una charla de sensibilización en la cual se expuso la importancia de las diferentes enfermedades que pueden afectar a las mascotas y cómo ellas pueden ser transmitidas a las personas.

Las muestras de heces fueron extraídas directamente del recto de los animales, utilizando guantes quirúrgicos, cuando esto era posible; o eran recogidas por los mismos dueños a partir de las deposiciones de sus mascotas. Se tomaron aproxi-madamente 20 g de heces, los cuales fueron colocados en envases herméticos. Las muestras fueron analizadas el mismo día de recolección. Cada muestra estuvo acompañada de una encuesta en la que se indagaba acerca de prácticas potencial-mente riesgosas en la relación niño-mascota.

Las muestras fueron analizadas en el Laboratorio de Parasitología del Instituto de Medicina Tropical Alexander von Humboldt (IMTAvH). Se utilizaron las técnicas de sedimentación en tubo (TSE) (Pajuelo et ál., 2006) y el examen directo (Larra-gan, 1993). Tras los resultados de la prueba coproparasitológica y la evaluación de la encuesta, se determinó la frecuencia de infecciones para cada parásito hallado y la frecuencia de respuestas afirmativas para las prácticas potencialmente riesgosas consideradas en el estudio.

Resultados

En muestras de caninos se encontró Toxocara canis, Diphyllobothrium pacifi-cum y Diphylidium caninum. En muestras de gatos se encontró Toxocara cati y

[20] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Mocetti, Ulloa, Peña, Santos, Fernández, Anchante, Terashima, Chávez, Falcón

Ancylostoma caninum. En la tabla 1 se observa la distribución de formas parasita-rias encontradas en muestras de heces en mascotas de niños de educación primaria.

Tabla 1. Distribución de formas parasitarias encontradas en muestras de heces de mascotas de escolares de nivel primario del cono norte de Lima, Perú, 2008

Especie deparásito

Caninos domésticos(n = 131)

Felinos domésticos(n = 49)

Núm. % Num. %

Toxocara sp. 27 20,7 7 14,3

Giardia sp. 10 7,6 – –

Diphylidium sp. 6 4,6 – –

Ancylostoma sp. – – 1 2,0

Dyphyllobotrium sp. 1 0,8 – –

La encuesta epidemiológica reportó la presencia de prácticas potencialmente ries-gosas en la relación niño-mascota, sobresaliendo como prácticas comunes el per-mitir que el perro defeque u orine dentro de la casa, la observación de “gusanos” en las heces, la falta de costumbre de desparasitar al perro y el hábito de los niños de besar y dejarse lamer por la mascota. Un resumen de la encuesta se presenta en la tabla 2. Un hallazgo que puede indicar el nivel de infección de parasitosis en las mascotas es la observación de “gusanos” en las heces mencionado por el 29% (36) de los entrevistados.

Tabla 2. Prácticas potencialmente riesgosas en la relación niño-mascota entre escolares del cono norte de Lima, Perú, 2008

Prácticas de riesgo Respuestas afirmativas %

La mascota duerme en el cuarto del niño 35 28,2

La mascota defeca dentro la casa* 83 66,9

No se vacuna a la mascota 74 59,7

No se desparasita a la mascota 110 88,7

El niño se deja lamer o besa a la mascota 98 79,0

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [21]

Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú

Prácticas de riesgo Respuestas afirmativas %

El niño no se asea después de jugar con la mascota** 52 41,9

El niño comparte el alimento con la mascota*** 102 82,3

* Incluye respuestas algunas veces dentro de la casa.** Incluye respuestas nunca y a veces.*** Incluye respuestas a veces y siempre.

Discusión

Los niños en general representan una población potencialmente más expuesta a infecciones zoonóticas procedentes de sus mascotas debido al estrecho contacto que tienen con ellas. En la población de estudio, en particular, se suman otros factores de riesgo como es la condición socioeconómica del círculo familiar, que acarrea un descuido en la atención médica humana y animal. Los escolares de instituciones educativas estatales provienen en su mayoría de estratos socioeco-nómicos bajos en los que los animales que son mantenidos como mascotas no suelen tener un control veterinario periódico y por tanto no son desparasitados con frecuencia.

Los parásitos encontrados en caninos, T. canis, Giardia sp., D. caninum y D. pa-cificum, son responsables de enfermedades zoonóticas. La toxocariosis representa una de las más importantes porque puede producir en el hombre, especialmente en niños, el síndrome de larva migrante visceral y ocular que afecta diferentes órganos internos como el hígado, los pulmones, el cerebro y los ojos (Cordero del Campillo et ál., 1999; Acha y Szyfres, 2003).

Giardia sp. es considerado como uno de los principales agentes asociados a la pre-sentación de diarrea y cuadros de malabsorción, y es diagnosticado comúnmente entre los microorganismos intestinales en el mundo (Escobedo et ál., 2007). Se ha demostrado que la giardiasis es zoonótica: Traub et ál. (2004) evidenciaron esto al recuperar y aislar Giardia sp. genéticamente similares en perros y humanos que vivían en el mismo hogar. En tanto, D. caninum puede ser transmitido por la inges-tión accidental de pulgas infectadas con cisticercoides, sobretodo en la población infantil. Con respecto al D. pacificum, se reporta como complicación más grave en el hombre la anemia megaloblástica (Leguía, 2002; Acha y Szyfres, 2003).

[22] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Mocetti, Ulloa, Peña, Santos, Fernández, Anchante, Terashima, Chávez, Falcón

En el caso de los gatos, los parásitos encontrados, Toxocara cati y Ancylostoma caninum, llegan a causar no solo molestias gastrointestinales como diarreas, sino que la migración de estos parásitos a través de los órganos internos puede llegar a comprometer el buen funcionamiento de aquellos en los que se alojan (Gorrita Pérez, 2009).

La encuesta epidemiológica permitió mostrar algunas prácticas potencialmente riesgosas en la relación niño-mascota, entre ellas: besar, acariciar o dejarse lamer por las mascotas y la falta de higiene (lavado de manos) después de jugar con ellas. Así mismo, la ausencia por razones económicas de supervisión veterinaria y los malos hábitos de crianza (ausencia de un lugar específico para que las masco-tas orinen o defequen, y el compartir alimentos con la mascota) podrían ocasionar un incremento en el potencial riesgo para la transmisión de diferentes parásitos.

Es evidente que estas costumbres pueden favorecer la transmisión de diversos patógenos del animal a las personas, por ello se hace necesario corregirlos e im-plementar medidas sanitarias que reduzcan el potencial riesgo de cualquier tipo de infección en el que las mascotas actúen como reservorios. Se debe prestar aten-ción al lavado de manos antes de la comida, después de usar los servicios higiéni-cos y después de jugar con las mascotas. Además, se debe instruir a la población en la desparasitación periódica de las mascotas no solo como una preocupación por la salud de los animales, sino principalmente como medida preventiva para eliminar la posibilidad de que estos actúen como reservorio de parásitos zoonóti-cos; también se debe prestar atención a la eliminación higiénica de sus desechos.

Finalmente, los resultados del presente estudio deberían alertar a las autoridades correspondientes de la importancia de estas parasitosis potencialmente zoonóticas presentes en esta población y de la necesidad de tomar medidas que atenúen el riesgo de infección en humanos. Entre ellas se pueden considerar las campañas de desparasitación masiva de las mascotas y las campañas sostenidas de educación sanitaria que sensibilicen a la población acerca de la importancia de las parasito-sis en sus animales, y su potencial repercusión sobre la salud de las personas. El objetivo debe estar dirigido a producir un cambio en los conocimientos, actitudes y prácticas hacia los factores de riesgo y exposición a estas zoonosis.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [23]

Parasitosis zoonóticas en mascotas caninas y felinas de niños de educación primaria del cono norte de Lima, Perú

Conclusiones

Se diagnosticaron formas parasitarias de importancia en salud pública en mas-cotas caninas y felinas domésticas de niños de educación primaria de tres insti-tuciones educativas estatales. Se determinó que existen prácticas potencialmente riesgosas en la relación niño-mascota, que pueden favorecer la transmisión de una infección parasitaria zoonótica.

Referencias

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Álvarez, H. “Simposium. Toxocariosis”. Diagnóstico. 39.4 (2000).

Cordero del Campillo, Miguel; Rojo, F.; Martínez, A.; Sánchez, M.; Hernández, S.; Navarrete, I. et ál. Parasitología Veterinaria. España: McGraw-Hill, 1999. Impreso.

Escobedo Ángel; Pedro Almirall; Sergio Cimerman. “Actualidades en la terapéutica en giardiosis”. Revista Panamericana de Infectología 9.2 (abril-junio 2007): 41-46. Impreso.

Gorrita Pérez, Remigio. “Manifestaciones clínicas y tratamiento del parasitismo in-testinal”. Revistas de Ciencias Médicas La Habana 15.1 (2009).

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López, J.; Abarca, K.; Paredes. P.; Inzunza, E. “Parásitos intestinales en caninos y fe-linos con cuadros digestivos en Santiago, Chile: consideraciones en salud pública”. Rev Méd Chile 134.2 (2006): 193-200. Impreso.

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Pajuelo Camacho, Giovanni; Daniel Luján Roca; Bertha Paredes Pérez; Raúl Tello Casanova. “Aplicación de la técnica de sedimentación espontánea en tubo en el diagnóstico de parásitos intestinales”. Rev Biomed 17.2 (2006): 96-101. Impreso.

[24] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Mocetti, Ulloa, Peña, Santos, Fernández, Anchante, Terashima, Chávez, Falcón

Robertson, I. D.; Irwin, P. J.; Lymbery, A. J.; Thompson, R. C. A. “The role of com-panion animals in the emergence of parasitic zoonoses”. Int J Parasitol 30.12-13 (2000): 1369-1377. Impreso.

Traub, R. J.; Monis, P. T.; Robertson, I.; Irwin, P.; Mencke, N.; Thompson, R. C. A. “Epidemiological and molecular evidence supports the zoonotic transmission of Giardia among humans and dogs living in the same community”. Parasitology 128.3 (2004): 253-62. Impreso.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [25]

Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. Argentina

betina dapRato1

natalia caRdillo2

maRtín kUnic3

yanina beRRa4

iRma SommeRfelt5

Fecha de recepción: 1º de febrero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 Estudiante de grado de la carrera de Veterinaria, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires. Correo electrónico: [email protected].

2 Estudiante de posgrado de Doctorado, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires. Correo electrónico: [email protected].

3 Estudiante de grado de la carrera de Veterinaria, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires. Correo electrónico: [email protected].

ResumenToxocara cati es el parásito gastrointestinal más frecuente en el felino. Los adultos pro-

ducen huevos que son eliminados con la materia fecal al ambiente, en el cual evolu-

cionan hasta el estadio infestante. En las urbes existen poblaciones felinas que habitan

espacios públicos que les ofrecen albergue y protección, lo cual conlleva situaciones

de riesgo de transmisión de zoonosis prevalentes para otros hospedadores. El objeti-

vo del presente trabajo fue estudiar la persistencia de la contaminación ambiental por

huevos de T. cati a lo largo de un año, en un sitio público de la Ciudad Autónoma de

Buenos Aires, donde se observó la presencia de una población felina estable. Se realizó

un muestreo mensual de materia fecal recogida del ambiente desde agosto del 2009 a

julio del 2010. Las muestras fueron analizadas por la técnica de Benbrook y se constató

la viabilidad de las larvas por microscopía óptica. El promedio de muestras positivas fue

de 48,47 (95% IC = 41,79 - 55,16) y no presentó diferencias estadísticamente signifi-

cativas en función de los meses del año (F = 6,13; p = 0,1480), aunque se observó una

mayor proporción de muestras positivas en los meses más cálidos. En las áreas urbanas

es necesario educar a la población humana sobre el riesgo de transmisión de zoonosis

por parte de los felinos. Las organizaciones de salud deben actuar en esta dirección para

prevenir la transmisión y controlar las poblaciones felinas.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. ISSN: 2027–8047. Enero-junio de 2011, pp. 25-35 [25]

[26] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Daprato, Cardillo, Kunic, Berra, Sommerfelt

Palabras claveToxocara cati, contaminación, felinos.

persistence of environmental pollution by eggs of toxocara cati in a public space. argentina

AbstractToxocara cati is the most frequent feline gastrointestinal parasite. Eggs are eliminated

with fecal material in the environment, where they evolve until reaching the infestante

stage. In urban areas there are cat’s populations that inhabit public spaces which offer

them shelter and protection and entails a risk of transmission of zoonoses prevalent

to other hosts. The aim of this study was to study the persistence of environmental

pollution by eggs of T. cati during a one year study in a public space of the autonomous

city of Buenos Aires (CABA), where the presence of a feline population was observed. A

monthly sampling of fecal matter in the environment took place from August 2009 to

July 2010. The samples were analysed by Benbrook technique and found the viability of

the larvae by optical microscopy. Positive samples averaged 48.47 (95% CI = 41.79 -

55.16) and did not show statistically significant differences according to the months of

the year (F = 6.13; p = 0.1480), although a larger proportion of positive samples was

observed in the warmer months. In urban areas it is necessary to educate the human

population about the risk of transmission of zoonosis from cats and different health

organizations must work in this direction to prevent it and control feline’s population.

KeywordsToxocara cati, pollution, cats.

persistência da poluição ambiental por ovos de toxocara cati em um espaço público. argentina

ResumoToxocara cati é o parasita gastrointestinal mais comum no gato. Os adultos produzem

ovos que são eliminados com as fezes para o meio ambiente, onde evoluem para o

estágio infectante. Nas cidades existem populações de felinos que vivem em espaços

públicos e que lhes oferecem abrigo e protecção, levando a situações de risco de

transmissão zoonótica prevalente para outros hospedeiros. O objetivo deste estudo foi

investigar a persistência da contaminação ambiental por ovos de T. cati ao longo de

mais de um ano de estudo num local público da Cidade Autónoma de Buenos Aires,

4 Estudiante de grado de la carrera de Veterinaria, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires. Correo electrónico: [email protected].

5 Diplomado en Salud Pública. Doctora y Profesora titular del Área de Veterinaria en Salud Pública. Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad de Buenos Aires Correo electrónico: [email protected].

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [27]

Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. Argentina

onde foi observada a presença de uma população estável de gatos. Colheitas mensais

de material fecal recolhido a partir do ambiente, desde Agosto de 2009 a Julho de 2010.

As amostras foram analisadas pela técnica de Benbrook que mostrou a viabilidade das

larvas por microscopia. A média de mostras positivas foi de 48,47 (IC 95% = 41,79-

55,16) e não houve diferenças estatisticamente significativas em termos de meses

(F = 6,13, p = 0,1480), embora tenha havido uma maior proporção de mostras positivas

nos meses mais quentes. Nas áreas urbanas é necessário educar a população humana

sobre o risco de transmissão de zoonoses pelos gatos. As organizações de saúde devem

agir nesse sentido para evitar a transmissão e controle de populações de gatos.

Palavras chaveToxocara cati, gatos, poluição.

Introducción

La toxocarosis es una de las parasitosis de mayor prevalencia en los caninos y feli-nos a nivel mundial (Glikman, 1993; Magnaval et ál., 2001). La presencia de felinos infestados con T. cati en espacios públicos, sus hábitos de defecación y el contacto directo de esta especie con el hombre, podría suponer al igual que con T. canis, un riesgo zoonótico aún no cuantificado (Dubinsky et ál., 1995; Fisher, 2003).

Toxocara spp. tiene un ciclo parasitario con estadios de vida libre, en los que las condiciones ambientales y la presencia de hospedadores paraténicos desempeñan un papel fundamental en la dispersión del parásito (Dubinsky et ál., 1995). Los huevos inmaduros son eliminados con las heces del gato y desarrollan en el am-biente una larva infectiva (Sprent, 1958). La presencia de huevos larvados en es-pacios públicos representa una fuente de infección para hospedadores definitivos y paraténicos y para la población humana (Glickman y Schantz, 1981; O’Lorcain, 1994; Sommerfelt et ál., 1994; Alonso et ál., 2001; Sommerfelt et ál., 2006).

Los huevos de Toxocara spp. son altamente resistentes, y su viabilidad y evo-lución en el ambiente dependen del tipo de suelo, la temperatura ambiente y la humedad. En óptimas condiciones (25-35 ºC y 85% de humedad) la evolución ocurre en dos a seis semanas (Ludlam y Platt, 1989; Shimizu, 1993; Overgaauw, 1997; Lescano et ál., 1998; Alonso et ál., 2001).

[28] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Daprato, Cardillo, Kunic, Berra, Sommerfelt

Los felinos en condiciones silvestres tienen hábitos estructurados de defecación; suelen enterrar las heces en sectores comunitarios determinados, pero también pueden dejarlas expuestas como identificación olorosa en los márgenes del terri-torio donde habitan (Uga et ál., 1996; Matsuo y Nakashio, 2005; Afonso et ál., 2008). Normalmente utilizan el mismo lugar para defecar y la misma localización es utilizada por varios felinos cuando la densidad poblacional es alta (Uga et ál., 1996; Afonso et ál., 2008).

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires existen poblaciones felinas que habitan espacios públicos que les ofrecen albergue y protección. La organización territorial de estas poblaciones y el tamaño de la colonia es el resultado de factores ambien-tales, especialmente la accesibilidad y cantidad de alimento, así como la presencia de árboles o edificios que ofrezcan albergue (Mirmovitch, 1995; Remfry, 1996; MacDonald et ál., 2000; Mendes de Almeida et ál., 2004). En la dinámica de estas poblaciones interviene la conducta del ser humano en forma directa, con acciones que implican desde la sola alimentación hasta algunos cuidados sanitarios. Estas prácticas dan lugar a una tenencia semirresponsable que no contempla el papel del felino como transmisor de muchas enfermedades zoonóticas, dentro de las cuales se encuentra la toxocariosis. Es por ello que el objetivo del presente trabajo fue estudiar la persistencia de la contaminación ambiental por huevos de T. cati a lo largo de un año, en un sitio público de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Materiales y métodos

Área y población de estudio

El estudio se realizó en un espacio público de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con presencia de una población felina estable y abierta. El lugar se encontraba cercado al acceso de caninos. Los felinos permanecían bajo tenen-cia semirresponsable, siendo solo alimentados por personas ajenas al lugar y con ausencia de cuidados sanitarios.

Muestreo

Se contabilizó la cantidad de felinos presentes en el lugar y se realizó un muestreo de conveniencia, con el cual se recolectaron muestras de materia fecal del ambien-te en una proporción del 50% con respecto al número de felinos. El muestreo se realizó en forma mensual durante un año, desde agosto del 2009 a julio del 2010.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [29]

Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. Argentina

Procesamiento

Las muestras de materia fecal fueron analizadas individualmente con la técnica de flotación con solución azucarada concentrada de Benbrook (Dolcetti, 1947). En las muestras positivas con huevos larvados se constató la viabilidad de las larvas por observación de la movilidad por microscopía óptica. En las muestras no evo-lucionadas los huevos fueron recuperados de la materia fecal, concentrados por la técnica de Cardillo et ál. (2010) y se incubaron siguiendo la técnica descrita por Sommerfelt (2002).

Análisis estadístico

Se realizó el test de ANOVA para la comparación de medias, previa transforma-ción Rank de los datos, dado el comportamiento no paramétrico de estos. Se fijó un p valor de 0,05. Se utilizó el software Statistix 7.0 para el análisis estadístico y el OriginPro 7.5 para la representación gráfica.

Resultados

Los resultados de la recolección mensual de muestras se describen en la tabla 1.

Tabla 1. Proporción de muestras de materia fecal felina positiva a T. cati a lo largo de un año de estudio, en un espacio público de la CABA (2009-2010)

Mes Total de muestras Núm. positivas %Agosto 10 4 40,00Septiembre 12 5 41,67Octubre 8 5 62,50Noviembre 15 8 53,33Diciembre 13 7 53,84Enero 9 5 55,56Febrero 11 7 63,64Marzo 11 6 54,54Abril 14 7 50, 00Mayo 10 4 40, 00Junio 9 3 33,33Julio 12 4 33,33

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Daprato, Cardillo, Kunic, Berra, Sommerfelt

El promedio de muestras positivas fue de 48,47 (95% IC = 41,79 - 55,16) y no presentó diferencias estadísticamente significativas en función de los meses del año (F = 6,13; p = 0,1480). Se observa una tendencia de mayor proporción de muestras positivas en los meses más cálidos, en contraposición con los meses fríos invernales (desde mayo a julio) (figura 1).

Figura 1. Proporción de muestras de materia fecal felina positiva a T. cati a lo largo de un año de estudio, en un espacio público de la CABA (2009-2010)

Todas las muestras positivas con huevos inmaduros desarrollaron larvas en el término de quince a veinte días posinfección.

Discusión

Numerosos estudios se han realizado sobre la prevalencia de Toxocara spp. en muestras de suelo a nivel mundial, mostrando importantes porcentajes de conta-minación del medio ambiente, especialmente en parques y lugares de recreación (Snow et ál., 1987; Ludlam y Platt, 1989; Beugnet y Gadat, 1993; Jansen et ál., 1993; Minvielle et ál., 1993; Sommerfelt et ál., 1994; Alvares Santarém et ál., 1998; Castillo et ál., 2000; Ferré y Dorchies, 2000; Fonrouge et ál., 2000; Alonso et ál., 2001; Mizgajska, 2001a; Ruiz de Ybáñez et ál., 2001; Habluetzel et ál., 2003).

Estudios comparativos de contaminación entre zonas rurales y urbanas revelaron una mayor prevalencia en estas últimas (Grundlach et ál., 1996; Dubná et ál., 2007; Mizgajska, 2001b).

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [31]

Persistencia de la contaminación ambiental por huevos de Toxocara cati en un espacio público. Argentina

En el presente estudio, realizado en una población felina de una institución de la zona urbana de la CABA, se observó una persistencia en la contaminación am-biental por huevos de T. cati a lo largo del año. La conducta de grupos humanos alimentando felinos vagabundos en lugares e instituciones públicas ha promovido la creación de espacios donde poblaciones de gatos se establecen y conviven en forma permanente en condiciones semisilvestres (Ogan y Jurek, 1997; Sommer-felt et ál., 2006.) Si bien la diferencia entre los meses no resultó estadísticamente significativa, puede observarse una tendencia de mayor proporción de muestras positivas en los meses más cálidos. Es de suponer que los hábitos de defecación característicos de los felinos en estas condiciones y debajo de la humedad de los árboles (Ruiz de Ybáñez et ál., 2001) proporcione un sustrato protector a los huevos, favorezca su evolución y promueva la conservación en condiciones infec-tivas cuando el clima es favorable, tal como lo sugerido por Afonso et ál. (2004) en su estudio con Toxoplasma gondii. También podría deberse a una coincidencia con la época de parición de las hembras felinas y a la presencia de un mayor nú-mero de cachorros (Overgaauw, 1997).

Estudios realizados en Inglaterra y Wisconsin han documentado que los felinos domésticos bien alimentados continúan cazando presas naturales tanto como los felinos silvestres (Churcher y Lawton, 1987; Scott, 1976; Coleman y Temple 1997; Ogan y Jurek, 1997). Los roedores suelen ser abundantes en las zonas ur-banas. Los sitios de defecación pueden desempeñar un papel importante en la perpetuación del ciclo de T. cati en ambientes persistentemente contaminados, representando un riesgo para los roedores como hospedadores paraténicos y los mismos gatos, como lo describiera Afonso et ál., (2004) para Toxoplasma gondii.

Los resultados presentados señalan el riesgo ambiental para las poblaciones hu-manas y animales cuando no se aplican acciones de higiene del ambiente como la desparasitación frecuente y sostenida en el tiempo. El potencial zoonótico de los huevos de T. cati es subestimado en comparación con los huevos de T. canis con res-pecto a la toxocariasis humana, por lo que es importante considerar la situación de los felinos conviviendo en condiciones naturales en un contexto sociobiológico ur-bano y especialmente en instituciones donde concurren niños (Dubná et ál., 2007).

Los hábitos de los felinos de deambular e ingresar a espacios no protegidos, con-lleva situaciones de riesgo de transmisión de zoonosis prevalentes a los hospe-dadores susceptibles y estas poblaciones pueden convertirse en centinelas de la

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Daprato, Cardillo, Kunic, Berra, Sommerfelt

circulación de otros patógenos emergentes (MacDonald et ál., 2000; Mendes de Almeida et ál., 2004).

El manejo del riesgo zoonótico en las zonas urbanas a menudo se basa en el control de la demografía o la situación sanitaria de las poblaciones hospedado-ras. Sin embargo, este enfoque a menudo presenta dificultades prácticas o plantea problemas éticos (Afonso et ál., 2004). El control de los felinos en zonas urbanas requiere de la educación tanto de los amantes de los gatos como del público en ge-neral sobre los felinos que conviven en estas circunstancias (Ogan y Jurek, 1997).

Los organismos de salud deberán hacerse cargo de las situaciones planteadas para prevenir los riesgos de transmisión.

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Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [37]

Mascotas, medicina veterinaria y bioética clínica animal: Quirón al rescate de los suyos

RicaRdo Roa-caStellanoS1

Fecha de recepción: 13 de enero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 MV. Profesor Investigador. Instituto de Bioética. Pontificia Universidad Javeriana. Correo electrónico: [email protected].

Resumen Los animales han sido reducidos por la sociedad contemporánea a usos o utilidades es-

pecíficas, pues la cultura determina conductas masificadas hacia el animal. La manera

social de asumir a estos seres como animales de compañía tiene efectos en su salud

física y mental. En consecuencia, el reentendimiento de los animales puede contribuir

favorablemente para su bienestar. La figura, símbolo médico, del centauro Quirón, que

sintetiza el criterio de una salud al abrir la progenie de terapeutas para los humanos

y para los animales, brinda elementos simbólicos bondadosos para tal propósito de

cambio actitudinal, necesario ante un contexto de maltrato y abuso contra la razón de

ser profesional para la veterinaria.

Palabras claveMascotas, teriomorfismo, símbolos animales, Quirón, bioética animal.

pets for humans in the bioethics animal pratices’ context: kyron to rescue their own

Abstract Animals have been reduced by contemporary society to certain uses or specific utilities.

Culture determines massive behaviors towards these live forms. Social ways to assume

these beings, such as companion animals, posses effects for their physical and mental

health. Consequently, a new understanding of animals may contribute in a better form

for their welfare. Centaur Kyron, medical symbol for human and veterinary practice,

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. ISSN: 2027–8047. Enero-junio de 2011, pp. 37-50 [37]

[38] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Roa-Castellanos

offers good elements to support this attitudinal change in front of a context of mistreat

and abuse against the professional reason of being for veterinary medicine.

KeywordsPets, Theriomorphism, animal symbolism, Kyron, Animal Bioethics.

animais para o ser humano na bioética da clínica animal: quironte ao resgate dos seus

ResumoOs animais têm sido restringidos a usos ou utilidades específicas pela sociedade

contemporânea. A cultura determina condutas massificadas para com os animais. A

forma social de considerar estes seres como animais de companhia tem efeitos na sua

saúde física e mental. Consequentemente, um re-entendimento dos animais enquanto

animais de companhia pode trazer um contributo favorável ao seu bem-estar. A figura

do Centauro Quironte, símbolo médico, fornece elementos simbólicos a considerar na

mudança de atitude necesaria, num contexto de abusos e maus tratos, que se figuram

contra os fundamentos do profissional médico-veterinário.

Palavras chaveAnimais de estimação, teriomorfismo, símbolos animais, Quironte, Bioética animal.

Introducción

En el semblante de un animal que no habla, hay todo un discurso que solamente

un espíritu sabio puede entender. Mahatma Gandhi

Según la norma de la autonomía valenciana en España, Ley 4 de 1994, los legis-ladores, en detalle realistas sobre el tema de los animales de compañía, considera-ron: “Esta ley será aplicable a todos los artrópodos, anfibios, peces, reptiles, aves y mamíferos de compañía cuya comercialización o tenencia no esté prohibida por la normativa vigente. Especialmente será de aplicación a las subespecies y varie-dades de perros (Canis familiaris) y gatos (Felis catus)”. Fueron excluidos los animales de experimentación y aquellos de cría con otros propósitos zootécnicos.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [39]

Mascotas, medicina veterinaria y bioética clínica animal: Quirón al rescate de los suyos

La realidad práctica, e incluso teórica, hace reflexionar cuando comadrejas (fe-rrets), cerdos pequeños o incluso caballos (Gómez Giraldo, 2011, p. 125) son con-siderados como animales de compañía, que por ende no componen la sinonimia de mascota.

Para la guía de tenencia de mascotas en el caso peruano, la categoría supone aves ornamentales, peces, hámsteres y, aunque describe animales silvestres en el mis-mo apartado, resalta que estos últimos no deben ser tenidos como mascotas. La medicina veterinaria de Cuba ha hecho un bello aporte en la nomenclatura local para el trato animal, entendiendo las mascotas como “animales afectivos” desde hace décadas.

Para la campaña de tenencia responsable de mascotas del gobierno chileno, a través de la guía expedida por el Servicio de Salud Metropolitano del Ambiente (SESMA), se expresa una laudable definición sobre la mascota que es la siguien-te: “Animal doméstico o domesticado que convive con el hombre para fines de compañía y entretención. Son absolutamente dependientes del ser humano para asegurar su bienestar y supervivencia. Muchas especies animales se utilizan como mascotas, la más común es el perro”. Y complementa: “No es recomendable adoptar especies de animales silvestres o exóticas como mascotas. Son animales obtenidos por cazadores inescrupulosos que producen un gran daño a los animales y al ambiente. Sufren mucho en cautiverio debido a que es muy difícil satisfacer sus necesidades. Estas especies deben estar libres en su ambiente natural”.

En el ejercicio adelantado por el Ministerio de la Protección Social de Colombia, varios gremios veterinarios, como la misma Asociación de Veterinarios de Pe-queños Animales (VEPA), en cabeza de su directora la Dra. Constanza Schuster, y el sector académico (con el liderazgo del Instituto de Bioética de la Pontificia Universidad Javeriana y el programa de Medicina Veterinaria de la Universidad de La Salle), se concluyó que el público debe saber cuál animal ser puede ser considerado como mascota y cuál no.

Por ejemplo, en una guía de tenencia responsable, la idea de mascota ha de ex-cluir de entrada a los animales silvestres o exóticos, advirtiendo la jurisprudencia penal, pues los tenedores, propietarios —o mejor— responsables (permanentes o temporales) de animales han de saber que las especies exóticas o silvestres no pueden ser consideradas mascotas, debido a que se configura una flagrante

[40] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Roa-Castellanos

violación del Código Penal Nacional, además de atentar de modo fáctico contra la biodiversidad nacional.

El tráfico de especies ya ha permeado incluso los imaginarios culturales, y es así como películas recientes como la animada en 3D “Río”, aborda la problemática del tráfico ilegal de especies con tal propósito. Un tema álgido que exige la acción de intervención del Quirón que reúne la medicina veterinaria, en especial, para salvaguardar las biodiversas tierras de América Latina. La costumbre analizada por el campo de la ética, sin embargo, es que el ciudadano “de a pie” desconoce el punto y, creyendo actuar de forma altruista, acepta animales exóticos tales como micos, ardillas, tortugas, osos perezosos, etc., elevando así su tasa de extracción, morbimortalidad y pérdida ecosistémica.

Los ejercicios argentinos dirigidos a concretar una guía con tal temática declaran que es estrictamente el gremio veterinario el encargado de liderar estos esfuerzos normativos. La salud pública en sus vertientes de la infectología, pero también de la salud mental de animales y humanos, debe ser protegida a ultranza por el actuar veterinario; no de los amigos animalistas, no de los médicos humanos, no de la política demagógica, ni de la inexperiencia filosófica, sino de los médicos de ani-males. Es decir, de quienes han sido formados para conocer la problemática, como lo hiciera Aristóteles, quien empezara sus estudios en el campo de la zoología y la veterinaria para terminar en la disquisición política y finalmente ética.

La anterior presunción va de la mano del documento de la OIE (74 SG/9), que em-pieza con un apartado de definiciones, señalando que: “La profesión veterinaria es la ciencia que trata toda la problemática de los animales y su relación con el medio ambiente, privilegiando algunas especies por su demanda como animal de com-pañía (mascotas), o bien como herramienta productiva, tanto para el trabajo como para la alimentación del ser humano (equino, bovino, cebuinos, peces, etc.)”.

Cuestionan los colegas argentinos que la sensibilidad animalista, que ha llevado a proponer municipalidades libres de eutanasia, puede como norma implicar un riesgo legal para el practicante de la medicina institucional ante epidemias. La peligrosidad de la demagogia en el tema para el caso colombiano ha llevado a candidatos a la Alcaldía de Bogotá a prometer la eliminación de los centros de zoonosis tras cabildeo animalista. De la mano del cambio climático y las inunda-ciones causadas sobre miles de hectáreas en el periodo 2010-2011, el riesgo de

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expansión de zoonosis, potencialmente injuriosa sobre mascotas, y presentes en el área como la leptospirosis (síndrome de Weil, en la salud humana), no encontraría los brazos institucionales necesarios para la defensa de la salud única, si este tipo de institución simplemente se lleva a centros de bienestar animal.

La solución consensuada puede ser el rediseño institucional de una dependencia existente previamente en Bogotá, conocida como los Institutos Zooprofilácticos (IZ). Los IZ articularían la preocupación de la correcta enseñanza veterinaria, con la solución y prevención de emergencias de problemas de salud pública, y podrían mejorar los mecanismos de adopción de mascotas extraviadas o animales callejeros, e incluso liderar programas de esterilización al estar respaldados por facultades de Veterinaria específicas.

En síntesis, esta sería una praxis en política pública del Principio de responsabi-lidad, de Hans Jonas, y de la política de poblaciones, o biopolítica foucaultiana, ampliando la inicial propuesta antropocentrista a las demás poblaciones —anima-les, en este caso—.

En otro orden de ideas, la condición de “paciente”, fundida en un solo ser para el médico humano, se escinde en el caso del terapeuta veterinario. El veterinario suele atender dos seres, que por las circunstancias se vuelven uno en cada con-sulta: a su paciente obvio —el animal— y al mal llamado propietario, dueño o responsable, que de buena fe, en realidad, es su protector. ¿Dónde quedan las arrogantes diatribas contra el paternalismo en el ejercicio médico sobre los que están en condición de máxima vulnerabilidad e indefensión, sobre los enfermos?

Esta situación probablemente hace lucir el discurso antipaternalista como un sinsentido. Empero, el paralelismo autorreferencial más cercano para la propia medicina humana está en la pediatría, que encuentra en su práctica rutinaria un pa-ciente y, aparte, un interlocutor con poder decisorio sobre ese paciente que habla con el médico. La acción dialógica se entabla entre la semiología del paciente, la interpretación médica y ciertas descripciones, deseos y autorizaciones emanadas del acudiente.

La recepción de una comunicación requiere una actitud empática de sintonía con el contenido afectivo de lo comunicado —lo que no se agota ahí—, ya que el lec-tor de la realidad clínica es enriquecido y conminado a responder a la semiología

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del paciente, y otra clase de mensajes que recibe, como anotan Kottow y Kotow (2009), en relación con el encuentro clínico y las reflexiones florecientes a partir de la observación de los cuerpos vivos y vividos. La semiología así fue concebida no solo en el ámbito médico humano, sino también en el veterinario.

¿Cómo comprender de mejor manera las conveniencias de los pacientes anima-les? Construir una base para una bioética clínica, por tanto, debe empezar por reentender las comprensiones humanas sobre los animales, que en muchos cam-pos, desde la psicología hasta la inmunología, han sido modelo de enfermedad humana (psicológica y orgánica).

Representantes del pensamiento en bioética animal como Peter Carruthers (filóso-fo de la ética de la calidad), reseñados en la obra Animal Bioethics (Marie, 2005), dicen que aunque los animales pueden “sentir algunas calidades de la vida”, ellos no tienen la habilidad de evaluar dichas cualidades.

Sin embargo, en la realidad, los animales muestran preferencias y elecciones si-tuacionales o contextuales, lo que desvirtuaría su planteamiento. El animal escoge lo que nota como mejor. En la noción mejor está implícita la idea de bien y sus contrastes. Intuitivamente el animal reacciona tendiendo a buscar lo mejor desde un sentido primario, es decir, lo que contribuye sensorialmente así sea por acto reflejo hacia su supervivencia. Entonces, como el humano, deja lo que no le con-viene, sufre al no haber otra alternativa —alejándose como puede de ello—, o ataca la fuente de amenaza contra su bienestar y su “bienser”.

Vincent Pompe (biólogo y filósofo) en la misma página en la que se cita a Ca-rruthers (Marie, 2005), dice: “Ni la zoología ni la filosofía pueden proveer certeza de que los animales son ‘conscientes’ de lo que sienten”. El trato veterinario, en conjunto con lo sugerido por la frase introductoria del Mahatma (alma grande), al igual que el notar la respuesta de gratitud de los animales —desde la evidencia empírica— sugieren precisamente lo contrario a las afirmaciones anteriores. In-directamente se sabe que puede haber (al menos rudimentos de) conciencia al ver actos de escogencia.

Probar a través de metodología indirecta es también probar para la filosofía, la veterinaria o la zoología. La divergencia del enfoque entre zoólogos (especialidad de la biología) y veterinarios, para contextualizar, es tan grande como la existente

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entre humanistas y médicos. El objeto del conocimiento es el mismo, pero la pers-pectiva y sus objetivos se hallan bastante distantes. Por suerte hay profesionales que construyen puentes de integralidad y auspician un equilibrio entre saberes: ese es el llamado de la bioética clínica en la práctica humana o veterinaria.

¿Un amuleto reacciona?

Los animales de compañía (perros, gatos, hámsteres u otros pequeños mamífe-ros, cerdos pequeños, aves ornamentales, reptiles —sí, reptiles, o también pe-ces—), son habitualmente llamados mascotas. Viven en torno al domo o dentro de él, y domo, de donde se origina la palabra doméstico, es la casa. En estos animales, dado el sentimiento que acompaña su relación con los seres humanos, suelen practicarse procedimientos clínicos similares a los de la práctica clínica humana. La preocupación de los “propietarios” en torno a estos seres ha pro-movido el avance científico-técnico de la medicina de animales, e incluso de la medicina humana. Pero, ¿cuál es la significación ética de las mascotas para el ser humano?

Ética, como bien lo sugiere Foucault (1997), más que el aséptico análisis de las costumbres, implica el cuidado de sí mismo y de los otros. ¿Y cómo cuidar de algo? ¿Cómo llevarlo al bien? ¿Somos los únicos seres merecedores del bien? ¿Dentro de los Otros también caben las mascotas, los animales?

El bien en ética, y en la realidad, lo elige cada cual acorde con su autoformación según el autor francés ya citado: la comprensión del fenómeno de la libertad se contrasta con las cárceles o las restricciones de movilización impuestas. No obs-tante, la libertad se ve como agobiante carencia también en guacales, peceras y jaulas animales. ¿Las agresiones de los animales hacia los humanos son gratuitas, o al contrario, provienen de entrenamientos o de una larga exposición a estímulos adversos hacia su libertad?

Los incidentes como el de la ballena macho Telikum, “Telly”, de treinta años y seis toneladas de peso, en Sea World, Florida, o las agresiones hechas por perros trabajadores en vigilancia —que son continuamente restringidos territorialmente por medio de cadenas, bozales, golpes, tirones o espacios sobrelimitados— son reacciones ante el desconocimiento de un ser que también tiene necesidades es-paciales para existir. El animal agrede, como en el caso de Telly que tuvo dos

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víctimas mortales previas no engullidas, donde azotó pero no se comió a la vícti-ma: aquí el animal suele ser el efector vivo de una situación frustrante. Las com-paraciones en la reacción ante la frustración, al perder el control sobre sí mismo, son totales tanto con mascotas como con los mismos humanos, ante amenazas territoriales y otra clase de atentados que diezman el ser.

¿Es necesario sacrificar a los humanos inconformes como suele ser la respuesta con los animales agresores? ¿Por qué proceder así con ellos manteniendo las con-diciones desquiciantes como sucedió con Telly? La falta de libertad genera com-portamientos estereotipados de desesperación y queja en los animales, mientras en el animal humano, ¿acaso crea mayores neurosis? Quien tenga oídos que oiga esa enseñanza que proviene de los animales, pero que envuelve una verdad que también se cumple en el humano.

En retrospectiva, la palabra mascota —que puede darnos luces como modelo de nuestras enfermedades no orgánicas— deviene del vocablo provenzal mascoto, que denotaba la idea de talismán, amuleto y brujería (Gómez de Silva, 2005). Tan absurda es la creencia esotérica que algunos hoy portan una pata de conejo o consumen partes específicas de animales para apropiarse de su “buena energía”. Cualquiera de los conceptos revela una idea supersticiosa. En congruencia, aún varias etnias como la wayuu creen que la presencia de un animal puede desviar las energías que de otra forma enferman al ser humano: la costumbre en mención es el poner una cabra en la puerta de la casa del enfermo: se cree que si la cabra enferma o muere se ha salvado la vida del enfermo dentro de la casa. Eso también lo ha visto el autor como creencia campesina andina.

Consecuentemente, los animales domésticos que han llevado a cabo una función de acompañamiento desde tiempos atávicos, según este enfoque primitivista de “uso”, perdieron su perspectiva de ser valiosos en sí mismos. El animal comienza a significar símbolos y el humano descuida, olvida u omite al “hermano” animal. El valor intrínseco a su maravillosa existencia desaparece. Sus sensaciones son irrespetadas, su estatus moral negado con base en “conceptos filosóficos” emiti-dos por la prepotencia intelectual denunciada por Karl Popper hacia sus congéne-res, que es una absoluta aberración contra las otras formas vivientes. Quienes “no saben lo que hacen” para el correlato evangélico son los seres humanos —por lo general letrados— que por sobre todo especulan y regentan basados en precon-ceptos culturales, hoy denodadamente insostenibles no solo para sí mismos, sino

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Mascotas, medicina veterinaria y bioética clínica animal: Quirón al rescate de los suyos

para la esfera biológica o ecológica. ¿De qué debe libertarse entonces la humani-dad, empezando por el lector y el autor de este escrito?

Sintomatología cultural

La obra Los arquetipos y lo inconsciente colectivo de Carl Gustav Jung (2002) describe la idea animal en sus significados sesgadamente negativos. El nivel atra-sado de la psique humana es el nivel animal (Jung, 2002, p. 465). El poltergeist, duende espantoso que da golpes, en no pocos relatos culturales tiene forma ani-mal (Jung, 2002, p. 457). Del mismo modo, el Manual de zoología fantástica, metamorfoseado en el Libro de los seres imaginarios, ambos de Jorge Luis Bor-ges, recoge varios animales cargados culturalmente de negatividad. Asimismo, los niños de ciudad hoy temen a los perros —puede temerse fácilmente cuanto se desconoce; es difícil amar en el miedo y el desconocer impide amar, acción que perfecciona el trato—.

En lugar de acercar a las especies el orden legal está acentuando estas conductas de desunión. La legislación misma (Ley 746 del 2002 de la República de Colom-bia) comienza a cercar al mejor amigo del hombre, prohibiéndolo y empezando gradualmente tal cerco por razas específicas. Perros como los pit bull, rottweiller, mastín napolitano, stanfordshire terrier, dogo argentino, fila brasilero, dóberman o dogo de Burdeos, son por ley estigmatizados. La prevención cultural hacia es-tos seres es mayor, lo que significa sujeciones con correas, gritos de los niños al verlos, evitaciones del trato por parte de la gente que huye de ellos y hasta los persigue para eliminarlos (envenenándolos, sacándolos) y otras conductas que re-sienten los animales. Tal y como sucede con los humanos, los animales en muchos casos desempeñan el papel que les es impuesto. Una traumática manera de dejar de ser lo que en realidad son.

Otra expresión del desmembramiento de la actitud favorable entre animal y hu-mano son los reglamentos de propiedad horizontal, que pueden vetar la tenencia de mascotas para la totalidad de los residentes de un conjunto. Las ciudades así se van haciendo desiertos para la vida que no sea humana, pues los derechos regentes desde la citadina y legalista ilustración (que comienza una cruzada antinaturalista excepto por Rousseau, para quien la naturaleza es la primera maestra), son aque-llos derechos exclusivos del hombre. La carga negativa hacia los animales predo-mina y lo único admisible es su uso. Eso es un síntoma social. Si ello ha pasado

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con las mascotas, envestidas socialmente de afecto, no es de extrañar que del total de las 47.677 especies descubiertas, a la fecha el actuar del ser humano tiene en peligro de extinción a 17.921 (IUCN, 2009). Frente a lo expuesto, se plantea el interrogante de si la causa sea que el ser humano promedio cada vez desconozca más la naturaleza.

Lo opuesto a la noción utilitarista es la valoración campesina del animal que lo considera un miembro más de la familia, y como tal, coopera en ella sin que esa sea su única función. Lo opuesto es también la valoración del niño, o del adulto mayor, que en la soledad de la neurótica vida moderna (según el concepto de neu-rosis de Víctor Frankl [2009]) descubre al ser animal —su mascota— lentamente, en cada una de sus reacciones, gestos, gustos, disgustos y expresiones. Como re-sultado, para la mayoría de los casos vendrá el llanto al momento de la despedida, pues lo que termina por surgir del verdadero conocimiento es el amor.

El mundo afectivo del animal es un conocimiento vivencial, independiente de la percepción o sensibilidad humana, que trasciende jaulas, rejas y especulaciones, dando per se —en cada animal— origen a sensaciones, emociones y sentimien-tos morales, es decir, generando comportamientos de escogencia para el cuidado de sí mismo, de sus seres queridos y de su hábitat (moral que viene del latín moris, morada).

Desvinculación: teriomorfismo humano-animal

En algún momento de la historia, el animal comenzó a significar culturalmente cosas distintas a su ser. De ser el amigo, el espíritu compañero o el hermano protector, el animal comenzó a ser objeto con el cual recrearse, el alimento, el sa-crificio, la compañía. El teriomorfismo de las antiguas religiones de Medio Orien-te demuestra esa transición. De la valoración totémica indígena, que extractaba —contemplativamente— de cada especie animal sus características existenciales (cualidades y defectos tanto en lo orgánico como en lo comportamental), se pasa a una personalización de los animales, en conjunción con caracteres humanos, lo cual crea ideales mundos de quimeras (organismos en los que se fusionan dos o más especies que conservan sus rasgos representativos intactos).

Ejemplo de ello son el dios egipcio Pe (cabeza de halcón, cuerpo humano), el licántropo (cabeza de lobo, cuerpo de hombre) o la esfinge (cara y pecho de

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mujer, patas y cola de león, alas de ave) que justamente pregunta, según Apolodo-ro, a Edipo sobre la naturaleza humana desde criterios animales: “¿Cuál es el (ser) que al mismo tiempo es un bípedo, un trípedo y un cuadrúpedo?” (camina, gatea y se vale de un bastón, lo que define etapas del desarrollo humano). Los defectos humanos (agresión, lujuria, mala intención) suelen alinearse hacia el componente animal en estos mitos. La esfinge asesina con sus patas. En la realidad el humano comete actos nocivos para los otros y para sí mismo tras pensarlo.

Las mascotas se vuelven dependientes del ser humano y de la manía de este último por artificializarlo todo —dados sus “bestiales” afanes por verse inteligente—. La mayoría de las mascotas jóvenes (cachorros) ha de sufrir de cuadros frecuentes de ansiedad por separación cuando su “propietario” no está con ellos (ver la psi-cología de la neurosis de angustia en Frankl). Es decir, ellos comparten nuestra cruz. Destruyen en su sufrimiento cuanto tengan a la mano y como retribución, por parte del iracundo “propietario”, recibirán un castigo físico por el asunto de la pantufla destruida, y cargará con la insatisfacción laboral o emocional del dueño. ¿Es esto justo? ¿Un ser puede ser un desahogo de otro? No, según el kantiano Jahr, pues los seres son fines en sí mismos (Roa-Castellanos y Bauer, 2009), no solo medios. El respetado etólogo veterinario Néstor Calderón lo advierte con la infatigabilidad inherente a la justicia: el maltrato contra la mascota animal es una oprobiosa alerta de intolerancia, por cuanto anticipa o discurre, en frecuentes casos, con la violencia intrafamiliar no animal.

Asimismo, la alimentación es masificada, artificial y técnicamente dirigida. Se llega a un punto tal que a los carnívoros, canes o felinos, se les niegan los huesos en las recomendaciones dietarias de los médicos de animales, que son lecciones aprendidas desde las rentables compañías de concentrados. Comer diariamente caviar y solo caviar sería una condena para el humano, nutricionalmente más peligrosa que la dieta de pan y agua.

La interdisciplinariedad grita que las perversiones del mercado han ocasionado, por el orden natural, que las vacas alimentadas con harina de sangre en los con-centrados —lo cual no se daría en la naturaleza— desarrollen “vaca loca” (encefa-lopatía espongiforme bovina), o que los carnívoros perros, alimentados a base de harina presenten tempranas cirrosis hepáticas. Sin embargo, hablar de actos con-tra natura es inconcebible en el apogeo de la actual artificialidad antropocentrista (en torno al ser humano), del reduccionismo biológico, o de la idolatría en pos

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de la falacia naturalista. Casualmente, Inglaterra es simultáneamente la víctima endémica de la “vaca loca”, y además la cuna, no sólo de la Revolución Industrial —que fabrica alimentos animales en serie, como estas comidas procesadas—, sino también del padre de la gran falacia en cuestión, el londinense G. E. Moore.

La palabra teriomorfismo proviene del griego therion, que significa animal sal-vaje, y morfismo, que supone forma. Pero no cualquier forma, sino una forma morphe —valga la aparente redundancia— que eran aquellas suscitadas en los sueños. Morfeo, dios de los sueños y actor en la obra Las metamorfosis del roma-no Ovidio, en latín narra la creación de los mundos mitológicos. Pero en la misma construcción del concepto teriomorfismo hay error: Morfeo en esa obra se centra-ba en manejar los elementos humanos de los sueños, pero era su hermano Fobetor el responsable de la participación animal en estos. En adición, el otro hermano, Fantaso, hacía el mismo trabajo en lo que tenía que ver con el manejo de los ob-jetos inanimados. Tres categorías diferentes aparecen entonces en la semiótica del relato: humanos, animales y, aparte, cosas.

Y el ser animal, sin embargo, en tanto animal es usurpado, abusado, hipertrofiado (en la terminología de Jung), culturizado y, hoy por hoy, muerto o coartado rutina-riamente por el ser humano sin cargas morales, arrepentimientos o culpas, pues el animal —incluso para muchos ignotos de la naturaleza animal— equívocamente representa lo peor de nosotros. La conciencia en el humano puede obnubilarse ante el error, y así, seguir tomando decisiones inadecuadas sobre otros y sobre sí mismo, que ni siquiera son objeto de reflexión y menos aún de corrección.

Hablamos de la prepotencia cientificista que señala la respuesta límbico-hipo-talámica (cerebro R en el cerebro límbico) como portadora de carga animal para indicar la negatividad en el comportamiento, es decir, la alusión a la agresión, lo instintivo, la sexualidad incontrolada o la violencia, que en el ser humano —muy a diferencia de los animales— suelen ser, en verdad, procesos premeditados cuando se llega a su consumación. Al sistema límbico en la realidad científica se le debe la vida afectiva, la preservación del organismo y la especie, la integración genética y ambiental a través del aprender lo que contribuye a las reacciones conductuales.

El animal actúa instantáneamente, además de instintivamente ante lo que ve como una amenaza según sus necesidades —entre las cuales se cuenta la super-vivencia—. Las porciones de la neocorteza prefrontal en el humano regulan el

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procesamiento de las respuestas límbicas configurando la conciencia. A juzgar por las conductas “conscientes” del humano, este erraría al poseer la libertad de la escogencia y escoger, según la ética y la espiritualidad, lo inadecuado para sí y para los otros.

Por ejemplo, suele ser causal de agresión animal que el humano vea a los perros territoriales a los ojos. La recompensa ante el desafío territorial es la agresión; quien pasa caminando aligerando el paso, viendo humildemente al piso, salva el pellejo. En contraste, hemos reiterado que el ser humano maquina frecuentemente sus acciones. ¿Maquinan las máquinas, Descartes? La ética, como vía para alcan-zar una vida colectiva mejor a través de la recta razón, incluyendo a los animales, es una urgencia perentoria.

Una vez más: la medicina salva

Quirón, símbolo griego de la medicina y de la veterinaria, tiene condición humana, desde su torso al tiempo que posee patas de brioso caballo. Un poderoso ser cuya ineluctable plataforma es de ágil y poderoso animal. Es descrito como educador de moral, medicina y cirugía, tanto humana como animal, que contó entre sus alum-nos a Asclepio (Esculapio para los romanos), el dios de la medicina, que la tradi-ción juzgaba era ancestro del actualmente vituperado Hipócrates. Higia (diosa de la medicina) y Panacea (cura para todos los males), todos citados en el juramento hipocrático, son descendientes de esa misma familia, que como tronco originario, mínimo representa otra clase de estructura simbólica sobre los animales.

Por ello, es importante comenzar a reconstruir nuestra relación ética con los anima-les, desde la cual persiste un vínculo humano y un conocimiento afectivo con el Otro animal. La ética es el cuidado de sí mismo y de los otros. ¿Cómo se puede satisfacer la protección y el cuidado de ese Otro si no se lo valora como ser en sí mismo?

La discusión, entonces, conlleva de la ontología al campo de la ética metafísica. Para Aristóteles, filósofo, padre de la veterinaria, que empezó siendo zoólogo, uno de los tres pilares de la metafísica era justamente éste: el ser es en tanto que ser. Por sobre cualquier circunstancia los animales son seres…

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Agradecimientos

A mi madre, otra Leonor “miura” que parió un Corazón de León, y a la Dra. Audrey Calderón DMV, que compartió con nosotros la bella frase del Mahatma.

Referencias

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Frankl, Viktor. Psicoanálisis y existencialismo. México: Fondo de Cultura Econó-mica, 2009. Impreso.

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Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [51]

Importancia socioeconómica de la brucelosis

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Fecha de recepción: 21 de enero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 Estudiante de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, C/Miguel Servet 177, 50013 Zaragoza, España. Correo electrónico: [email protected].

ResumenEste artículo hace una breve revisión de las diferentes estrategias que se han usado en

los últimos años para erradicar la brucelosis. Las estrategias de control y erradicación

se han basado en el diagnóstico, sacrificio y vacunación dependiendo de situaciones

locales y de la posibilidad de intervención de los organismos sanitarios de cada región.

Las nuevas vacunas que permiten diferenciar vacunados de infectados favorecen un

sacrificio selectivo que promueve una mejor colaboración de los ganaderos, que es

completamente necesaria para conseguir la erradicación. Los países latinoamerica-

nos muestran diferencias en el nivel de control, muy dependiente de los tres factores

enumerados: ayudas al ganadero, participación activa de este y aplicación correcta del

diagnóstico y la vacunación.

Palabras claveBrucelosis, erradicación, prevención, economía.

socioeconomic importance of brucellosis

AbstractThis report makes a short review of the different strategies which have been used in

recent years to eradicate brucellosis. The control and eradication strategies have been

based on diagnosis, slaughter and vaccination depending on local situations and the

possibility of intervention by local health agencies in each region. New vaccines, which

allow distinction between vaccinated and infected animals, favour selective slaughter,

that promotes better cooperation among farmers, which is completely necessary to

achieve eradication. Latin American countries show differences in the level of control,

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Canal

very dependent on the three factors listed: farmer livestock aid, farmer´s active

participation, and correct application of diagnosis and vaccination.

KeywordsBrucellosis, eradication, prevention, economics.

importância sócio-econômica de brucelose

ResumoEste artigo apresenta uma breve revisão de diferentes estratégias que têm sido

utilizadas nos últimos anos para erradicar a brucelose. As estratégias de controle e

erradicação têm sido baseadas no diagnóstico de abate e vacinação de acordo com as

situações locais e da possibilidade de intervenção dos organismos de saúde em cada

região. Novas vacinas que podem diferenciar vacinados e infectados favorecem uma

melhor colaboração dos agricultores, o que é absolutamente necessário para conseguir

a erradicação. Países latino-americanos mostram diferenças no nível de controle, muito

dependente de três factores referidos: auxílio ao agricultor, a sua participação activa e

aplicação correcta do diagnóstico e vacinação.

Palavras chaveEconomia erradicação da brucelose, prevenção.

Introducción

La brucelosis es una enfermedad causada por un coco-bacilo, gram negativo e in-tracelular, perteneciente a la familia Proteobacteria. Existen ocho especies acepta-das dentro de este género bacteriano, de las cuales seis tienen capacidad de afectar al hombre (B. abortus, B. melitensis, B. suis, B. canis, B. ceti y B. pinnipedialis). Debido a que no han sido documentados casos de transmisión horizontal directa entre personas, se acepta que la forma de contraer la brucelosis para el hombre es por contacto directo con los animales, por consumo de productos animales con-taminados, sobre todo leche y productos derivados como el queso fabricado con leche no pasteurizada (Seleema et ál., 2010), o por fuga en laboratorio (se estima que la brucelosis representa un 2% de las infecciones asociadas a laboratorio). Por tanto, existen dos vías de actuación para prevenir la brucelosis en el hombre:

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [53]

Importancia socioeconómica de la brucelosis

la primera a nivel de la industria alimentaria y la segunda, la cual vamos a tratar en este artículo, reduciendo la infección en los animales. Esto nos lleva a plantear la necesidad de instaurar programas adecuados de control y erradicación de bru-celosis en los distintos países.

Además, la brucelosis es una enfermedad que produce grandes pérdidas económi-cas tanto en producción animal, debidas a pérdidas directas (abortos, infertilidad) y a pérdidas indirectas (disminución de las producciones), como en salud pública (costes del tratamiento y costes de los programas de prevención). Por ejemplo, las estimaciones oficiales para las pérdidas anuales debidas a brucelosis bovina en América Latina son aproximadamente de seiscientos millones de dólares (Se-leema et ál., 2010). Este artículo al que se hace referencia nos muestra también que, aunque un programa de erradicación para la brucelosis puede ser costoso, por cada $1 que se dedica a este pueden llegar a ahorrarse $7 (por las pérdidas anteriormente mencionadas).

Para poder profundizar en los distintos programas de control y erradicación, es importante conocer más exhaustivamente las distintas especies que causan brotes tanto en Europa como en América Latina. En Europa, la región donde están do-cumentados mayores problemas para controlar la brucelosis es en los países de la Cuenca Mediterránea: aquí, la especie que causa el 99% de los casos en el hombre es B. melitensis (Blasco Martínez, 2010). Esta especie provoca en el hombre una infección aguda, mientras que la infección por otras especies suele ser subaguda o crónica (Seleema et ál., 2010). Además las especies hospedadoras preferencia-les son pequeños rumiantes (ovinos y caprinos), pudiendo afectar en determina-das ocasiones también a la especie bovina; de hecho se han documentado brotes ocasionados por esta cepa en vacuno de leche en España (Álvarez et ál., 2011). En estos animales el signo clínico más característico es un aborto tardío, aunque también podemos encontrar otras manifestaciones clínicas como mortinatos, dis-minución de la fertilidad y de la producción de leche, laminitis, parálisis de las extremidades posteriores o epididimitis y orquitis en machos; en ocasiones y con menos frecuencia se pueden ver mamitis o abscesos. Es importante tener en cuen-ta a la hora de plantearnos un programa de vigilancia que la causa fundamental de introducción de B. melitensis en los rebaños es la introducción de un animal in-fectado, a pesar de la alta resistencia en el medio de este agente (Blasco Martínez, 2010). Por ello las medidas de cuarentena y los análisis de epidemiovigilancia son muy importantes para frenar la extensión de la cepa.

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Canal

Sin embargo, en América Latina la principal especie productora de zoonosis es B. abortus, aislada generalmente de ganado bovino (Moreno, 2002). El hospedador preferencial de esta especie, a diferencia de la otra, es el ganado vacuno sobre todo el de aptitud lechera, principalmente por la forma de producción en intensivo en la que los animales tienen un mayor contacto entre ellos, pues hay mayor carga ganadera por hectárea que en extensivo. En algunos países como Brasil, donde no está presente B. melitensis, se han encontrado sueros positivos a B. abortus en la especie caprina cuyo único síntoma era una baja producción de leche, lo que nos indica que aunque no es su hospedador preferencial, podría haber un contagio (Li-lenbaum et ál., 2007). Los síntomas clínicos producidos por B. abortus son muy parecidos a los de la especie anteriormente mencionada, destacando que después del aborto puede haber retenciones placentarias, metritis y están documentadas disminuciones en la producción de leche del 25% (Alcina et ál., 2010).

En ambas especies de brucella el mecanismo de entrada en los animales es a través de la mucosa oral, nasofaríngea, conjuntival y sexual, se multiplica en un primer momento en los ganglios regionales para luego diseminarse por vía sanguínea o linfática a sus órganos preferenciales (en estos será donde veamos los síntomas clínicos). Hay que tener en cuenta que existe una manifestación peligrosa a nivel preventivo, que son los animales infectados latentes, es decir, animales que se infectaron en las últimas semanas de gestación, nacen aparentemente sanos, no presentan reacción serológica, son resistentes a una posterior infección porque tienen una reacción celular pero son infectantes en el momento en que se quedan gestantes. Por último, es necesario comentar que la diseminación de la bacteria ocurre por la excreción mamaria, secreciones vaginales (sobre todo tras el parto o el aborto) y en el semen (Blasco Martínez, 2010).

Programas de control y erradicación

A la hora de plantearnos realizar en una región un programa de control y erradi-cación tenemos que hacer un estudio exhaustivo de la zona, es decir, conocer las prevalencias de la infección, los recursos económicos y técnicos, la situación de los ganaderos, la forma de producción. todo ello para hacer un programa realista que sepamos que va a funcionar. Una vez que conocemos la zona hay que analizar los costes previstos y estimar los beneficios, la duración del programa, así como el objetivo que deberá alcanzarse una vez realizado. Deberá establecerse una au-toridad central responsable del control y coordinación de los servicios compe-

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [55]

Importancia socioeconómica de la brucelosis

tentes en la aplicación del programa. Además, esta autoridad deberá realizar una normativa que garantice la obligatoriedad de la declaración de todos los casos sospechosos o confirmados o de todos los focos en la zona de que se trate. Es im-portante también llevar un sistema de registro de todas las explotaciones incluidas en el programa y de todos los animales. También estará legislado qué productos se consideran contaminantes y por tanto deberán ser destruidos en un plazo y condi-ciones determinadas, por ejemplo las placentas, los fetos y las secreciones de los animales abortados (Decisión 90/638/CEE).

En principio y cuando hablamos de prevalencias bajas, bastaría con aplicar una estrategia de diagnóstico y sacrificio de los positivos para eliminar esta enferme-dad de nuestras explotaciones.

Si tenemos prevalencia por encima de un 10% de la colectividad ya debemos plantear una vacunación que proteja a los animales, evitando que contraigan la enfermedad y, por tanto, que se extienda. Lo ideal es combinar esta vacunación con una estrategia de diagnóstico y sacrificio, pero para ello es necesario utilizar una vacuna que no interfiera en el diagnóstico, bien por sus características o bien por el momento de aplicación.

Diagnóstico

La pauta diagnóstica más recomendable es el uso de una prueba de sondeo que detecte la mayor proporción posible de animales con anticuerpos, seguida de una prueba de confirmación mucho más específica, que detecte solo a los verdadera-mente infectados.

En la Unión Europea (UE), la pauta diagnóstica está normalizada por la decisión 90/638/CEE, según la cual se establecen los criterios comunitarios aplicables a las medidas de erradicación y vigilancia de determinadas enfermedades de los animales. Las pruebas usadas son:

• Rosa bengala. Como prueba de sondeo, se trata de una prueba barata, sensible pero poco específica, que detecta inmunoglobulina (Ig) G1.

• Fijación de complemento (FC). Se usa como prueba de confirmación. Es una técnica muy específica que detecta Ig M e Ig G, aunque es más cara que la anterior.

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Canal

En América Latina no está tan normalizado el uso de las distintas técnicas: hay países que usan las técnicas mencionadas anteriormente como Brasil (Padilla Poester et ál., 2002), y en otras regiones como en Centro América, en las que la prueba de aglutinación en placa y la prueba de rosa bengala son usadas como pruebas de sondeo, sin embargo, muy frecuentemente estas son las únicas pruebas disponibles sobre todo en zonas rurales. La prueba usada más frecuentemente para confirmar es el test del Rivanol: la especificidad y sensibilidad de esta prueba es menor que las obtenidas con FC (Herrera-López et ál., 2010). Solo unos pocos laboratorios localizados en las ciudades más importantes de Centro América están preparados para realizar pruebas de FC o ELISA de competición los cuales, nor-malmente, realizan los test para la exportación de ganado (Moreno, 2002).

Podemos concluir que para conseguir la erradicación de la brucelosis es impres-cindible tener unas buenas técnicas estandarizadas de diagnóstico que nos permi-tan aplicar una estrategia de diagnóstico y sacrificio de los positivos. También es necesario llevar un registro de todos los animales que hayan sido vacunados, san-grados y sometidos a una prueba de diagnóstico. Además de todo esto, es esencial contar con la colaboración de los ganaderos. Una de las causas de los fallos de los programas de erradicación en Centro América fue que al no poder subvencionar (amortizar) el sacrificio de los animales positivos, la población optó por ocultar estos animales, usar la venta clandestina y por tanto favorecer el movimiento de animales positivos a zonas donde es posible que no los hubiera, extendiendo la enfermedad (Moreno, 2002).

Vacunaciones

En principio es importante conocer qué se entiende por vacuna ideal; en el caso de la brucelosis las características que deberemos valorar serán las siguientes:

1. Todas las vacunas usadas para la brucelosis en la actualidad son vacunas vi-vas. La primera característica que le pediremos a una vacuna será la eficacia.

2. El coste económico es una característica importante de las vacunas, pues estas deberán ser baratas.

3. Tienen que producir una inmunidad que perdure en el tiempo.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [57]

Importancia socioeconómica de la brucelosis

4. No producir enfermedad en los animales vacunados.

5. Prevenir la infección en ambos sexos y a cualquier edad.

6. Prevenir el aborto y la esterilidad.

7. Proveer durante un tiempo largo una protección frente a la infección y el abor-to, con una sola inoculación.

8. No debe estimular la producción de anticuerpos que interfieran con un diag-nóstico serológico.

9. Que no se transmita a otros animales, si la cepa vacunal permanece como infección latente durante largo tiempo.

10. Ser estable biológicamente en ambientes hostiles (fácil de almacenar y de conservar).

11. No ser patógena para el hombre.

12. No debe contaminar leche, ni productos cárnicos.

13. Debe ser fácilmente cultivable bajo condiciones de fermentación a gran esca-la, para poder hacer vacunas de forma industrial.

Además de todo esto, la vacuna ideal deberá contener marcadores específicos genéticos o fenotípicos que la hagan diferente a las cepas de campo (WHO/EMC/ZDI/98.14). Vamos a referirnos a tres vacunas principalmente, que son las más usadas en todo el mundo, una para combatir B. melitensis y dos para B. abortus:

1. La vacuna B. melitensis Rev-1. Es una vacuna específica para ovinos y ca-prinos que suele aplicarse en zonas de alta prevalencia de brucelosis donde es difícil la eliminación de la enfermedad con una estrategia de diagnóstico y sacrificio. Se puede aplicar por vía subcutánea, produciendo una infección generalizada en los animales vacunados, con una multiplicación activa en los ganglios y los órganos linfoides. Esta vía de administración tiene por ventaja la producción de una respuesta inmune tanto celular como humoral persistente

[58] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Canal

en el tiempo, aunque por desventaja produce tasas de anticuerpos elevadas que son indiferenciables de una infección de campo, es decir, interfiere en el diagnóstico y es incompatible combinarla con una estrategia de diagnóstico y sacrificio. La vacuna Rev-1 la podemos aplicar también por vía conjuntival, de tal forma que produce una respuesta eficaz vía celular pero la infección se res-tringe a los ganglios linfáticos craneales, es decir, la inmunidad es similar a la conseguida aplicándola de forma subcutánea pero la respuesta en anticuerpos es menor, por lo que podemos combinarla con una estrategia de diagnóstico y sacrificio. Esta vacunación suele aplicarse antes de los cuatro meses de edad a la reposición. Es importante tener en cuenta que en estos animales la cepa se excreta durante dos a tres semanas posvacunación en los ollares pudiendo depositar la cepa vacunal en bebederos o comederos, por ello habrá que tener la precaución de no mezclar la reposición recién vacunada con los animales adultos para evitar reacciones anamnésticas secundarias en algunos animales adultos ya vacunados (Blasco, 2010). Por último es importante mencionar que esta vacuna ha sido evaluada para la vacunación del ganado vacuno bajo condiciones de altas prevalencias, obteniéndose resultados satisfactorios ya que provee de una inmunidad similar o incluso superior a la inducida por B. abortus S19 (WHO/EMC/ZDI/98.14). Esta vacuna tiene además la desventa-ja de que es patógena para el hombre, al igual que la B. abortus S19.

2. En segundo lugar se encuentra la vacuna de B. abortus S19. Se trata de una cepa lisa y atenuada con débil poder patógeno, que es incapaz de usar el eri-tritol, un azúcar utilizado por el género Brucella. Esta característica provee a esta cepa de un marcador que permite diferenciarla de las cepas de campo. La aplicación de esta vacuna se realiza a los terneros de dos a seis meses de edad, produciendo una muy buena respuesta de base celular duradera para toda la vida económica y una débil respuesta humoral en estos animales (Martínez Chavarría et ál., 2006).

3. Por último está la vacuna B. abortus RB51. Cuando la bacteria se cultiva en un medio sólido puede presentar colonias lisas o rugosas. La cepa de campo B. abortus presenta unas colonias lisas de forma natural, pero se encontró la cepa B. abortus RB51 que daba colonias rugosas; esto se debía a unas diferencias en la composición del lipopolisacárido (antígeno, principal blanco de los an-ticuerpos neutralizantes). La conclusión obtenida es que los anticuerpos que se producen contra esta cepa son diferenciables de los que se producen contra

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [59]

Importancia socioeconómica de la brucelosis

la infección natural. La forma de administración es por vía subcutánea a los animales de reposición o a las hembras adultas; la respuesta de base celular obtenida con esta vacuna es similar a la infección natural y es menos abortí-gena si se aplica a animales adultos (WHO/EMC/ZDI/98.14). Esta vacuna ha sido aprobada para los programas de control y erradicación mexicanos y es actualmente la más usada en América Latina. Esta cepa vacunal, junto con las anteriores, puede infectar al hombre, aunque se considera una infección rara, el problema reside en que es una cepa resistente a la rifampicina, que es un medicamento usado normalmente para la quimioprofilaxis o el tratamiento de la infección causada por brucelosis en el hombre (Martins et ál., 2009).

Consideraciones generales

En resumen, lo más importante de un programa vacunal, además de la vacuna, es la combinación de los esfuerzos humanos (ganaderos, veterinarios y autoridades competentes), la coordinación de estos y su combinación con una estrategia de diagnóstico y sacrificio (Martins et ál., 2009). Pero antes de esto y como hemos mencionado anteriormente, el estudio anterior al programa es lo que va a determi-nar si va a ser exitoso o no, ya que cada región requiere un programa de control y erradicación adecuado a su situación climática y al sistema de producción del rebaño en esa zona. Hay que realizar campañas de concienciación popular, ya que en el pasado ha habido problemas en los programas porque los ganaderos no querían aplicar la vacuna por la creencia de que producía abortos. También hay que luchar contra la clandestinidad y la ocultación de animales sospechosos, de ahí la necesidad de un buen estudio económico de las granjas a las que va dirigido el estudio y cómo compensar económicamente a esos ganaderos.

En España hoy día podemos decir que el programa de erradicación, tras años aplicándolo, ha permitido que en un futuro cercano ya no sea necesaria la vacuna-ción (se ha prohibido en Comunidades Autónomas con una prevalencia colectiva inferior al 2,5%), y por tanto la erradicación administrativa se va a conseguir en muy poco tiempo.

Agradecimientos

A la Dra. Lohendy Muñoz Vargas, de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional de Costa Rica, por la información facilitada, y al Dr. José

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Canal

Luis Alonso Martínez, profesor de la Unidad de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, por su ayuda en la prepa-ración del artículo y sus consejos.

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Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [63]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

maRio albeRto mUñoz RojaS1

ivonne meliSSa vaRgaS RodRígUez2

diego SoleR-tovaR3

Fecha de recepción: 2 de febrero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 Estudiante, Programa de Medicina Veterinaria, Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de La Salle. Correo electrónico: [email protected].

2 Estudiante, Programa de Medicina Veterinaria, Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de La Salle. Correo electrónico: [email protected].

3 Profesor Asistente, Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad de La Salle. Grupo de Epidemiología y Salud Pública, Universidad de La Salle. Correo electrónico: [email protected].

ResumenLa difícil condición de los animales de la calle es uno de los asuntos de bienestar animal

más visibles en el mundo de hoy. Los caninos hacen parte de los animales más afec-

tados: de los quinientos millones de estos animales calculados en el mundo, cerca del

75% son callejeros. Al haber una alta población de caninos vagabundos, se hace inmi-

nente el control de estas poblaciones como una herramienta para evitar la difusión de

enfermedades infecciosas. Para llevar a cabo esta revisión, se realizó una recolección de

referencias bibliográficas en fuentes de información, tanto primarias como secundarias,

en un periodo aproximado de cuatro meses, de las cuales se fueron seleccionando los

métodos llevados a cabo en la actualidad para realizar control de poblaciones caninas

en el mundo. Quizás el método más utilizado para llevar a cabo el control de poblacio-

nes caninas sea la esterilización quirúrgica, pero es importante e inminente conocer que

existen varios métodos para realizar dicho control, los cuales se pueden clasificar como

métodos quirúrgicos y no quirúrgicos.

Palabras claveAnticonceptivos, control, métodos, perros, población.

methods for dog population control: an introduction

AbstractThe poor condition of abandoned animals is one of the most important issues on

animal welfare in today´s world. Canine are one of the most affected animals and from

500 millions of these animals calculated to exist in the world, 75% are street animals.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. ISSN: 2027–8047. Enero-junio de 2011, pp. 63-79 [63]

[64] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

Having a high population of street dogs makes urgent the control of these populations

as a tool to prevent spread of infectious diseases. To carry out this review a collection

of bibliographic references from information sources was conducted, both primary and

secondary sources, in a period of approximately 4 months, in which the methods carried

out in the present for dog population´s control in the world, were selected. Perhaps the

most used method is surgical sterilization, but it is important to know that there are

other several methods to control dog´s populations, which can be classified as non-

surgical and surgical methods.

KeywordsContraceptives, control, dogs, methods, population.

métodos para o controle populacional de cães: uma introdução

ResumoO sofrimento dos animais abandonados é uma das questões de bem estar animal

mais discutidas no mundo de hoje. Os caninos são parte dos animais afetados e

dos 500 milhões de animais que se estimam existir a nível mundial, cerca de 75%

são vadios. Ter uma elevada população de cães errantes significa o controlo urgente

dessas populações como uma ferramenta para prevenir a propagação de doenças

infecciosas. Para realizar esta revisão, recolheram-se referências bibliográficas de fontes

de informação, tanto primárias como secundárias, por aproximadamente quatro meses,

e foram selecionados os métodos utilizados atualmente para o controle populacional

de cães no mundo. Talvez o método mais comum para esse controle populacional seja

a esterilização cirúrgica, mas torna-se importante e iminente saber que existem vários

outros métodos que podem ser classificados como métodos cirúrgicos e não cirúrgicos .

Palavras chaveContracepção, controle, cães, métodos, população.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [65]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

Introducción

En las últimas décadas la sociedad colombiana ha experimentado cambios que han modificado hábitos y conductas, dentro de las cuales se presenta una tenden-cia creciente a la tenencia de animales como mascotas, siendo el perro y el gato las especies animales de mayor preponderancia (SDS, s. f.). Actualmente, existe una carencia de estadísticas confiables de la población canina total existente, así como de su distribución por edad, sexo, natalidad, mortalidad, entre otros aspec-tos (SDS, s. f.).

La sobrepoblación canina tiene un efecto directo en la salud humana, ya que exis-ten más de cien enfermedades zoonóticas que los caninos pueden transmitir, como rabia, leptospirosis, toxocariasis, brucelosis, salmonelosis, entre otras (Ortega Pa-checo, 2001). Esto tiene mayor importancia cuando los perros tienen acceso a la calle para defecar y orinar, puesto que las personas, al estar en jardines y parques públicos, se encuentran en alto riesgo de contagiarse (Zunino, 2000; Bono, 2001) .

La problemática se presenta por el crecimiento incontrolado de la población ca-nina, el cual en diez años puede ser de un 85%, comparado con el 23,5% de la población humana. Se ha estimado que una hembra gestante, junto con su des-cendencia, en seis años puede producir un total de 67.000 perros (Bogel, 1990).

Por otro lado, el control de la población canina en ciudades densamente pobladas dista de ser simple; a pesar de que se instrumentan costosas campañas de esteri-lización, la sobrepoblación canina se incrementa constantemente (Serrano et ál., 2001). Con este crecimiento constante de las poblaciones caninas en el mundo, en la actualidad se han incrementado los factores de riesgo de ocurrencia y contagio de enfermedades entre perros y humanos, lo cual presenta grandes problemas para la salud pública.

Para entender la problemática existente, asociada a la relación humanos-perros, es fundamental saber reconocer y diferenciar entre cuatro tipos de perros, división teórica hecha para dar soluciones reales al tema (Espinola, 2004; Brusoni, 2007):

• Perro supervisado. Es el perro que no sale de la casa si no es con su dueño e idealmente con un medio de sujeción que lo una directamente al propietario (correa o traílla) (WHO-WSPA, 1990, citado en Ibarra et ál., 2006).

[66] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

• Perro callejero. Es el perro que tiene dueño y hogar pero que se puede en-contrar en la calle solo, constantemente o de forma temporal (WHO-WSPA, 1990, citado en Espinola, 2004).

• Perro de vecindario. Es el perro que no tiene un hogar asociado ni dueño que se responsabilice por los problemas que pueda producir. Se asocia a un barrio y lo alimentan una o más personas (Espinola, 2004).

• Perro vagabundo. Es el perro que no tiene hogar asociado y, aunque puede ne-cesitar de los desperdicios humanos para su sustento, nadie es responsable de él (WHO-WSPA, 1990, citado en Espinola, 2004; OIE, 2010; ICAM, 2007).

Por otro lado, existen diferentes métodos para realizar control de poblaciones caninas, que por facilidad y para un mayor entendimiento se han clasificado en métodos quirúrgicos y no quirúrgicos, los cuales, respectivamente, se pueden di-vidir en los realizables para machos y para hembras (figura 1).

Figura 1. Métodos quirúrgicos y no quirúrgicos para el control de poblaciones caninas

Fuente: los autores

MÉTODOS DE CONTROL DE POBLACIONES CANINAS

Métodos quirúrgicos

Progestágenos

Proligestona

Clormadinona

Acetato de megestrol

Andrógenos

Análogos de GnRH

Acetato de medroxiprogesterona

Anticonceptivos químicos

Orquiectomía química

Inmunoesterilización Aislamiento de la hembra

durante el celo

Dispositivo intrauterino

Macho

Hembra Macho

OVH medial Orquiectomía

OVH lateral Vasectomía

Esterilización

Técnicas para realizar control de poblaciones caninas

Métodos no quirúrgicos

Hembra

Control de celos por hormonas

esteroidales

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [67]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

Métodos quirúrgicos

Ovariohisterectomía

Técnicamente denominada ovariectomía (extracción de ovarios) u ovario-histe-rectomía (OVH) (extracción de ovarios y útero), esta debe ser realizada por un mé-dico veterinario bajo anestesia general (Goethem et ál., 2006; Silva et ál., 2007).

Esta cirugía tiene diferentes fines, siendo el principal objetivo prevenir en un 100% la reproducción y el nacimiento de animales no deseados. Existen dos for-mas de abordar la OVH en las hembras: la medial y la lateral, siendo esta última la más utilizada en Colombia, la cual se popularizó como el método de rutina para esterilizar a las hembras sin propietario, luego de las experiencias de la Universi-dad de Antioquia en los años noventa (figuras 2, 3 y 4) (Forero, 2006; Goethem et ál., 2006; Silva et ál., 2007).

Figura 2. Abordaje OVH lateral

Fuente: adaptado de Forero (2006)

Figura 3. Abordaje OVH lateral, límites de referencia

1. Límite de la porción muscular del oblicuo abdominal externo; 2. Proyección dorsal del pezón; 3. Borde de las apófisis transversas de las vértebras lumbares; 4. Borde anterior del pubis; 5. Última costilla.Fuente: adaptado de Forero (2006)

[68] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

Figura 4. Abordaje OVH medial

Fuente: adaptado de Forero (2006)

En Colombia la OVH es el método más frecuentemente utilizado para controlar las poblaciones caninas, pero tiene como desventaja sus costos, ya que una cirugía de estas en una clínica promedio oscila aproximadamente en doce días de salario mínimo legal vigente, por ende el acceso a la comunidad es dificultoso.

De cualquier manera, se deberían realizar campañas de esterilización canina que busquen reducir dicha población de manera masiva: durante los tres primeros años de la campaña se debe esterilizar al 10% de la población estimada, pues de otra manera ningún programa tendrá éxito por debajo de dichos índices, debido a la reproducción geométrica de los animales (Still Alive Fish, 2003; Goethem et ál., 2006; Silva et ál., 2007).

El crecimiento de la población se habrá detenido o moderado luego del tercer año de esterilizaciones masivas, pudiéndose reducir oportuna y progresivamente la intensidad del programa, aclarándose que para que este funcione debe realizarse de forma gratuita y con fácil acceso a las comunidades menos favorecidas (Still Alive Fish, 2003; Goethem et ál., 2006; Silva et ál., 2007).

Orquiectomía

Involucra la remoción quirúrgica de los testículos. Es el más seguro de los méto-dos, ya que elimina la fuente de producción de espermatozoides como también de las hormonas testiculares, las cuales controlan el crecimiento de los órganos que influencian la conducta sexual (Morales, s. f., citado en Velasco y Visiedo, 2004).

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [69]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

Tiene dos formas de acceso: la preescrotal y la perineal. La primera es la más co-mún y presenta menores dificultades; se puede realizar de forma abierta o cerrada, como única diferencia que la túnica vaginal es diseccionada en la forma abierta (figura 5) (Velasco y Visiedo, 2004).

Figura 5. Anatomía topográfica del método preescrotal

Fuente: adaptado de Forero (2006)

Vasectomía

Comprende la sección del conducto deferente (canal por donde salen los esper-matozoides). Generalmente se realiza en el área escrotal, pero también se puede abordar a través de la región abdominal como una alternativa de la técnica con-vencional (Morales, s. f. citado en Velasco y Visiedo, 2004).

Comparada con la orquiectomía, la vasectomía es más simple, aunque también re-quiere anestesia y de los cuidados posoperatorios correspondientes (Morales, s. f. citado en Velasco y Visiedo, 2004).

Después de la vasectomía los perros continúan con una líbido normal, así como con las conductas asociadas a los machos; sin embargo, son incapaces de preñar, aunque dado que con esta técnica no se extirpa una porción del conducto deferente sino que solo se secciona, existe la posibilidad remota de que se produzca una reca-nalización de este, volviendo a ser fértil el macho canino (Velasco y Visiedo, 2004).

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Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

Métodos no quirúrgicos

Métodos de control de celos por hormonas esteroidales

Estos tienen la función de controlar temporalmente la reproducción de la hembra canina por la no presentación de los ciclos estrales. Se han convertido en una me-dida de control para la creciente fertilidad en poblaciones de caninos domésticos y salvajes; no obstante, no existe en la actualidad ningún protocolo totalmente seguro y eficaz para prevenir la ciclicidad sexual en esta especie (Gobello, 2005).

Los anticonceptivos son medicamentos efectivos que pueden impedir la gestación en perras. Se pueden suministrar en forma de tabletas vía oral o en inyecciones de manera parenteral. Existen distintos tipos de anticonceptivos que pueden ejercer este efecto, pero los más eficaces son los progestágenos, los cuales tienen el efecto de la hormona progesterona, que inhibe la ovulación en las hembras gestantes. Cuando se quiere evitar la gestación, el uso de hormonas sintéticas evita la apari-ción del celo (Reyes, 1997).

Progestágenos

Los progestágenos son las hormonas sintéticas tradicionalmente usadas para el control temporal de los ciclos estrales en perras. El mecanismo de la actividad de anticonceptivos de progestágenos aún no está claro; en muchas especies, existe evidencia que estos reducen las concentraciones séricas de las gonadotropinas (De Gier et ál., 2008). Los progestágenos sintéticos más utilizados son (Reyes, 1997; Gobello, 2005):

• Acetato de medroxiprogesterona.• Proligestona.• Clormadinona.• Acetato de megestrol.

Acetato de medroxiprogesterona (MPA, Singestar, Depoprovera-humanos)

El MPA es un progestágeno inyectable de larga acción que se metaboliza lenta-mente en el hígado (Gobello, 2005). Debe ser administrado durante el anestro, aproximadamente un mes antes del inicio de la fase folicular. La dosis durante el anestro es de 3 mg/kg IM, pudiéndose repetir cada cuatro a seis meses (Gobello,

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [71]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

2005). También se puede administrar por vía oral 5-10 mg/d por veintiún días (De Gier et ál., 2008).

Proligestona (Covinan)

La proligestona es un progestágeno de segunda generación, que se administra en una sola inyección vía intramuscular a intervalos regulares para prevenir la presentación del celo. Preferiblemente se debe utilizar en anestro para postergar ciclos estrales. También se puede utilizar para interrumpir el celo ya iniciado du-rante el proestro temprano y los síntomas desaparecen cinco o siete días después de la aplicación. Se recomienda utilizar dosis de 10-33 mg/kg SC durante tres o cuatro semanas antes del inicio del celo esperado. Para la postergación permanen-te del celo se recomienda repetir la segunda dosis a los tres meses, la tercera dosis cuatro meses después y luego continuar cada cinco meses (Intervet, 2007).

Acetato de megestrol (Ovaban, Megace)

Es uno de los métodos más inocuos y de rápido metabolismo. Se puede utilizar en dosis bajas durante el anestro (0,5 mg/kg/d oral por 32 días) o con dosis más altas (2,2 mg/kg/d por ocho días) en proestro (Gobello, 2005). El retorno al celo después de un tratamiento es variable y se describen intervalos de cuatro a seis meses (Gobello, 2005).

Los progestágenos no son hormonas inocuas y producen una gran variedad de efectos colaterales:

• Aumento de peso, sedentarismo y cambios de conducta.• Exceso de estimulación del endometrio, dando lugar a endometritis y piómetra.• Enfermedades mamarias, como tumores e hiperplasias.• Alteraciones pancreáticas, como la diabetes.• Desfases en los ciclos menstruales, que pueden variar de dos a nueve meses

(Reyes, 1997; Gobello, 2005).• Los compuestos inyectables pueden provocar reacciones locales en el punto

de inyección, como la pérdida de pelo, la decoloración de este y, posible-mente, la atrofia de la piel y de los tejidos circundantes. Estos efectos pueden minimizarse si la inyección se administra estrictamente por vía subcutánea.

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Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

En general, los productos a base de progesterona no se deben suministrar en indi-viduos con historia de trastornos uterinos/mamarios, diabetes mellitus, historia de neoplasia o gestación. Tampoco es recomendable aplicarlos durante el proestro, estro o diestro, en hembras prepúber ni antes del primer estro (Ramírez, 2010).

Andrógenos

Los andrógenos actúan por un mecanismo de acción similar al descrito para los progestágenos; se ha reportado un efecto masculinizante (hipertrofia del clítoris, vulvovaginitis, entre otros) y anestro prolongado y hasta definitivo en las hembras tratadas con andrógenos.

Andrógenos (mibolerone) y testosterona

El mibolerone es un andrógeno sintético que se utilizó para prevenir ciclos es-trales. Se recomienda utilizar dosis de 30-180 ug vía oral desde un mes antes del ciclo esperado y durante el tiempo que se quiera postergar el celo. El estro reapa-rece entre setenta a cien días después de suspender el tratamiento. No se encuentra disponible en el mercado veterinario (Gobello, 2005).

Análogos GnRH

Los agonistas de la GnRH son péptidos sintéticos cuya estructura química se de-riva del hipotálamo decapéptido GnRH con determinadas sustituciones de ami-noácidos. En el perro, los agonistas de la GnRH de acción prolongada pueden utilizarse para indicaciones tales como posponer la pubertad en ambos sexos, el control de la ciclicidad reproductiva, entre otras (Romagnoli et ál., 2009).

Deslorelin

Este es un implante subcutáneo de GnRH comercializado en Australia y Nueva Zelanda desde comienzos de este siglo, y en países de la Unión Europea desde el 2008. A diferencia de la esterilización, este método es reversible (Virbac, 2008).

En un estudio realizado, se demostró que el uso de deslorelina con dosis de 3, 6 o 12 mg/kg en perras adultas suprimió el celo para periodos que van entre los diez y los veinte meses (Romagnoli et ál., 2009).

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [73]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

Inmunoesterilización

Consiste en la inducción de anticuerpos contra las hormonas endógenas o tejidos reproductivos. En castración inmunológica, los animales son inmunizados contra la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH o LHRH), molécula clave en el control de la reproducción en los mamíferos. En perros se ha desarrollado la inmunocastración neonatal, la cual provoca una supresión completa del sistema reproductivo.

En un estudio realizado por Basulto et ál. (2003) se evaluaron clínicamente los efectos de la administración del preparado vacunal sintético GnRHm1-TT sobre la concentración de testosterona en suero, la calidad del semen y la morfología testicular en perros beagles adultos. Concluyeron que la concentración de testos-terona en el suero de los animales inmunizados disminuyó después de la primera y la segunda administración del preparado vacunal, y los animales inmunizados mostraron daños en la estructura de los testículos, lo que pudiera indicar que la GnRH endógena fue bloqueada por los anticuerpos detectados en la seroconver-sión hacia GnRH.

La inmunización con proteína de la zona pelúcida de ovocitos porcinos (PZP) evi-ta la fertilización por el efecto antagonista de los anticuerpos (Gobello, 2005). La inmunoesterilización en los caninos se encuentra todavía en estudio, puesto que aparentemente provoca esterilización definitiva (Intervet, 2007).

Dispositivo intrauterino

Consiste en la aplicación de un dispositivo intrauterino (DIU), el cual conduce a una reacción inflamatoria por cuerpo extraño que atrae a los neutrófilos; sus productos de degradación son tóxicos para los espermatozoides y esta acción espermicida evita la fertilización. La reacción inflamatoria cesa una vez que se retira el DIU.

Este es un método menos invasivo, doloroso y riesgoso que la OVH y al mismo tiempo, seguro, reversible y de bajo costo; por otra parte, fomenta el respeto a la salud física y psíquica de los animales (Mendoza y Ruiz, 2010).

El uso del DIU para controlar las poblaciones caninas es una opción viable en circunstancias en las que las condiciones económicas, el número de animales a

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Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

esterilizar u otros elementos impiden la implementación de aditamentos químicos o físicos como formas de control de poblaciones (Mendoza y Ruiz, 2010).

Este método tiene como desventaja que el dispositivo no evita las enfermedades de transmisión sexual como el sarcoma de Sticker, pues las perras siguen entrando en celo normalmente (Mendoza y Ruiz, 2010).

El DIU demostró ser un método que no altera las funciones sexuales ni metabóli-cas del animal a diferencia de la OVH; es una manera rápida y reversible de pro-ducir la esterilidad. Además, mantiene íntegro el equilibrio hormonal y fisiológico de la perra, no provoca alopecias, obesidad ni deforma el cuerpo del individuo. Evita posibles vaginitis, y no predispone a enfermedades tumorales ni piometra (Mendoza y Ruiz, 2010).

Anticoncepción física a través del aislamiento de hembras durante el periodo de celo

Se puede educar a los dueños para que sepan reconocer las señales de celo en una hembra y puedan asegurar que esta sea aislada de los machos enteros durante todo el periodo. Al planear la forma de aislar a la hembra, debe prestarse atención al bienestar tanto de esta como de los machos. El comportamiento sexual puede volverse problemático, ya que los machos intentarán tener acceso a las hembras; sin embargo, el aislamiento es de costo mínimo y no requiere de la intervención de un veterinario capacitado en cirugía (ICAM, 2007).

Métodos anticonceptivos químicos en los machos

Se han propuesto como una alternativa a los métodos quirúrgicos, evitando así las desventajas de la cirugía como costo y cuidado posoperatorio. Estos métodos involucran la inyección bilateral de sustancias irritantes dentro de las colas de los epidídimos, cuya reacción cicatricial, que se da en el tejido epididimiario en el sitio de la inyección, bloquea el pasaje de espermatozoides desde el epidídimo al conducto deferente. Se pueden llegar a desarrollar áreas necróticas y úlceras en el escroto cuando la solución cae dentro de la cavidad escrotal (Reyes, 1997).

Los investigadores se han propuesto trabajar en el desarrollo de productos que fa-ciliten la esterilización química, mediante su aplicación directa sobre los órganos reproductivos.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [75]

Métodos para el control de poblaciones caninas: una introducción

Ante la necesidad de un método práctico con beneficio inmediato, una opción es este tipo de esterilización, mediante la aplicación en la cola del epidídimo de diversas sustancias como el gluconato de clorhexidina, el etanol, la formalina y el cadmio, aunque muchos de estos requieren de dosis altas y tienen efectos colate-rales severos como en el caso del cadmio. Para estar seguros de la utilización de estos productos debería tenerse presente:

• El efecto de la esterilización deberá perdurar durante la vida reproductiva del animal.

• El producto no inducirá efectos colaterales indeseables que pongan en riesgo la salud y el bienestar de los perros.

• El producto tendrá un costo accesible con relación a las condiciones socioeco-nómicas del país.

Se realizó un estudio en México, en el cual se utilizó metilcianoacrilato para apli-cación en la cola del epidídimo de los perros; arrojó como resultados la azoosper-mia en el 86,7% de los perros estudiados, por ende se concluyó que es un método sencillo y fácil para inducir esterilidad en machos (Galvan et ál., 1994).

En México se ha diseñado un producto llamado Repcon JLDH de Cyta Labo-ratorios, el cual se aplica directamente sobre la cola del epidídimo de los perros machos (figura 6), lo que trae como consecuencia la paralización inmediata de los espermatozoides con los que tiene contacto el compuesto. Se ha observado que los perros que recibieron el producto disminuyeron progresivamente su cuenta de espermatozoides hasta llegar a valores no compatibles con la fertilidad y algunos en corto tiempo fueron azoospérmicos.

Figura 6. Dirección de aplicación de la inyección intraepididimal

Fuente: adaptado de Repcon JLDH. Cyta Labs.

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Muñoz, Vargas, Soler-Tovar

Por otro lado, la orquiectomía química consiste en aplicar una inyección intrates-ticular de determinadas soluciones, como gluconato de zinc, que produce necrosis del tejido testicular causando la no producción de células germinales (Burchard, 2005), así como alteración de la producción hormonal sexual. Esta técnica re-quiere un mayor estudio con respecto a las sustancias utilizadas, las reacciones colaterales y el tiempo de infertilidad.

Conclusiones

Además de la esterilización en hembras y machos, es evidente que actualmente existen variedad de métodos para llevar a cabo el control de poblaciones caninas, los cuales podrían llegar a ser fáciles y prácticos de utilizar en ciudades donde el control de los caninos se hace importante por el alto crecimiento de estos; sería factible poder mostrar investigaciones como estas a las autoridades y a los tomado-res de decisiones encargados para que estudien y planteen cuál podría ser el mejor método a utilizar, dependiendo del número de caninos y los recursos disponibles.

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Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

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Fecha de recepción: 31 de enero del 2011 Fecha de aprobación: 5 de mayo del 2011

1 BSc. Student Faculty of Veterinary Medicine, Utrecht University, The Netherlands. E-mail: [email protected].

2 DVM PhD. Institute for Risk Assessment Sciences, Division Veterinary Public Health, Utrecht University, The Netherlands. E-mail: [email protected].

3 DVM. Institute for Risk Assessment Sciences, Division Veterinary Public Health, Utrecht, University, The Netherlands. E-mail: [email protected].

Abstract Agritourism literally means tourism to the countryside and includes many activities that

take place at farms open to the public. Agritourism is popular with farmers as a source

of supplementary income, and with visitors from an idealistic perspective, involving a

generally romantic image of nature and the country lifestyle. However, with agritourism

many extra risk factors occur, such as direct contact with animals and manure, as well

as the consumption of homemade farm products. Not much has been published about

the link between agritourism and the risk of zoonotic diseases, although much material

exists regarding zoonotic diseases. Therefore, this article describes the risks of zoonotic

diseases in agritourism and offers an overview of publications and discussions among

experts on this subject. Zoonotic diseases can be caused by different types of agents,

such as bacteria, parasites, fungi and viruses, all of which possibly existing at farms open

to the public. This emphasizes the importance of strict adherence to hygiene measures

by workers and visitors on farms in The Netherlands. The four most important zoonotic

diseases in agritourism today are Escherichia coli, Salmonellosis, Campylobacteriosis

and the Q fever. In the past, measures were only taken after serious outbreaks of

zoonotic diseases. Under the motto “prevention is better than cure”, it would be wise

to introduce preventative measures in agritourism before more serious cases occur,

which is something that experts already predict. General hygiene measures, such as

an information board and hand washing facilities, can be followed in order to prevent

zoonotic diseases in agritourism. All general hygiene measures can be described in a

code like the one that for children’s farms in The Netherlands.

KeywordsAgritourism, Zoonotic Diseases, Higiene, Prevention.

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. ISSN: 2027–8047. Enero-junio de 2011, pp. 81-112 [81]

[82] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Wayop, Overgaauw, Keessen

risco das doenças zoonóticas e agro-turismo na holanda. uma revisão

ResumoAgro-turismo significa literalmente turismo em zonas agrícolas e inclui diversas

atividades, organizadas em quintas abertas ao público. O Agro-turismo é popular

entre os agricultores pois constitui uma fonte suplementar de lucros e com visitantes

de uma perspectiva idílica, envolvendo geralmente um quadro romântico da Natureza

e do estilo de vida rural. No entanto, com o Agro-turismo vêm também importantes

fatores de risco como os “YOPI´s” (young, old, pregnant and Ill people ), o contato direto

com os animais e estrume e consumo de produtos agrícolas caseiros. Pouco tem sido

publicado sobre a relação entre o Agro-turismo e o risco de doenças zoonóticas, apesar

de existir muita informação sobre doenças zoonóticas. Assim, este artigo visa descrever

o risco das doenças zoonóticas em Agro-turismo e oferecer um resumo das publicações

e discussões existentes entre especialistas neste assunto. As doenças zoonóticas podem

ser causadas por diferentes tipos de agentes tais como bactérias, parasitas, fungos e

vírus, podendo qualquer um deles existir em quintas abertas ao público. Isto enfatiza a

importância da aderência estrita a medidas de higiene pelos trabalhadores e visitantes

das quintas na Holanda. As quatro doenças zoonóticas mais importantes na atualidade

em Agro-turismo são Escherichia coli, Salmonelose, Campilobacteriose e Febre Q. No

passado apenas eram tomadas medidas após a ocorrência de graves surtos de doenças

zoonóticas. Perante o lema “mais vale prevenir que remediar” seria sensato introduzir

medidas preventivas no Agro-turismo antes de ocorrerem casos mais sérios, algo já

previsto pelos especialistas. Para prevenção de doenças zoonóticas em Agro-turismo,

medidas de higiene gerais, tais como uma placa informativa e instalações para lavagem

das mãos, deveriam ser instituídas. Todas as medidas de higiene geral podem ser

descritas num código como o utilizado nas quintas para crianças.

Palavras chaveAgro-turismo, doenças zoonóticas, higiene, prevenção.

riesgo de enfermedades zoonóticas y agroturismo. una revisión

ResumenAgroturismo literalmente significa turismo en el campo e incluye muchas actividades

que tienen lugar en granjas abiertas al público. El agroturismo es popular entre los agri-

cultores, pues representa una fuente de ingreso suplementaria y cuenta con visitantes

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [83]

Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

que tienen una perspectiva ideal que involucra una imagen romántica de la naturaleza

y del estilo de vida de campo. Sin embargo, con el agroturismo vienen muchos facto-

res de riesgo extra como los “YOPI´s” (young, old, pregnant and Ill people)”, contacto

directo con animales y sus excrementos, así como el consumo de productos de campo

hechos a mano. Se ha publicado poco sobre la relación ente el agroturismo y el riesgo de

enfermedades zoonóticas, aunque existe mucho material referente a las enfermedades

zoonóticas. Este artículo describe, por tanto, los riesgos de enfermedades zoonóticas en

el agroturismo y ofrece un resumen de publicaciones y discusiones entre los expertos

en la materia. Las enfermedades zoonóticas pueden ser causadas por diferentes tipos

de agentes, tales como bacterias, parásitos, hongos y virus, todos los cuales posible-

mente existen en granjas abiertas al público. Esto enfatiza la importancia de adherirse

estrictamente a medidas higiénicas para los trabajadores y los visitantes en granjas en

Holanda. Las cuatro enfermedades zoonóticas mas importantes hoy en día en el agro-

turismo son: Escherichia coli, Salmonellosis, Campylobacteriosis y Q fever. En el pasado,

solo se tomaron medidas después de que ocurrieron serios brotes de enfermedades

zoonóticas. Bajo el lema “prevenir es mejor que curar”, sería inteligente introducir las

medidas preventivas en el agroturismo antes de que más casos serios ocurran, algo que

los expertos ya están prediciendo. Para la prevención de las zoonosis en el agroturismo,

se pueden seguir medidas generales de higiene tales como tableros de información

e instalaciones para el lavado de manos. Todas las medidas pueden ser descritas con

códigos como aquellos utilizados para las granjas de niños.

Palabras claveAgroturismo, enfermedades zoonóticas, higiene, prevención.

Introduction

There has been an increase in agritourism, or, in other words tourism to the countryside (Reitsema & Pierik, 2009). The definition of agritourism is an activity, holiday or service at a farm open to the public, ranging from the provision of accommodation or camping, to the hiring of a covered wagon, bicycle or canoe. Furthermore, catering, petting animals, organized sports and games are covered by agritourism. Agritourism brings more visitors to farms, resulting in higher amounts of people having close contact with animals, bringing about an increased risk of zoonotic diseases. Any disease or infection that is naturally transmissible

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Wayop, Overgaauw, Keessen

from vertebrate animals to humans and vice versa is classified as a zoonosis (Acha & Szyfres, 2003). Zoonotic diseases have been described for many centuries and have caused a variety of disease outbreaks among humans. They can be caused by different types of agents, such as bacteria, parasites, fungi and viruses. A wide variety of zoonoses have been scientifically investigated and described, reason why literature reviews of all kind of zoonoses are made. These literature reviews provide essential sources of information for zoonotic public health services, enabling multiple stakeholders to keep up with the rapidly increasing amount of primary research in the field (Waddell et al., 2009). Published work about agritourism itself is relatively scarce, which raises the question as to whether zoonotic diseases for this form of leisure need to be more thoroughly investigated and the material published in a comparable manner. A publication from the ‘The Food and Consumer Product Safety Authority’ (VWA) of the Netherlands shows that zoonoses are present at public farms (Heuvelink et al., 2007). However, there is a lack of reviews about zoonotic diseases in agritourism in the Netherlands or even Northern Europe. As a result, this article describes the risks of zoonotic diseases in agritourism and gives an overview of publications and current expert discussion on this issue.

Agritourism in Perspective

According to the Central Office of Statistics in the Netherlands, the definition of agritourism is tourism, accommodation or leisure at a farm (CBS, 2009). This means holiday tourism (camping, summer houses, group accommodation and Bed & Breakfast), receiving visitors at the farm (tours, museum, cafe and restaurant) and rental recreation, petting animals, education or recreational facilities. The Central Office of Statistics in the Netherlands sees other non-agricultural activities such as nature conservation, care provision and direct product sales as separate activities. Other agencies or countries view all non-agricultural activities at a farm as agritourism, including care farms and children’s farms. No two farms are alike, so agritourism enterprises are equally diverse, thus making it difficult to describe the “typical” agritourism business (Beus, 2008). Generally speaking, however, an agritourism enterprise is a business, conducted by a farm operator, for the enjoyment and education of the public, which thereby generates additional farm income. Agritourism is referred as “agriturismo” in Italy, “sleeping in the straw” in Switzerland, “farm stays” in New Zealand, and “farm holidays” in England, which concludes that agritourism is well established throughout Europe and in

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many other countries (Beus, 2008). Extra income was the reason why farmers started these secondary activities, which provide more contact with people and also promote the agriculture sector. It can start with the making of a footpath on a farmer’s land. The farmer will receive € 0.45 per meter for this path every year and perhaps more sponsors can be found for fences or other necessary materials. At the website (www.boerenlandpad.nl) of such an initiative, named the Walking Platform Foundation, there is no information about the risks of zoonoses for walkers in the pastures, where close contact with animals and their feces can be expected. A significant and popular business is Vekabo Nederland (VeKaBo Nederland, 2010). Here, over 1,600 different accommodations for recreation and camping in the countryside are available for visitors. Their website (http://www.vekabo.nl/) does not include any information about zoonoses, but there is a link to the Animal Health Service Deventer (GD), for more information. This is only one example of agritourism in the Netherlands, but searching the Internet you may find many possibilities and initiatives related to agritourism. At the moment 3 out of 100 farmers offer tourist activities (Heuvelink & Valkenburg, 2006). Farmers enjoy the work, but it is also time consuming and the income generated is relatively low (Siemes, 2004).

Figure 1. Number of farms with agritourism activities

Source: CBS (2009)

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Figure 1 shows the total number of farms with agritourism in the Netherlands, according to the definition provided by the Central Office of Statistics in the Netherlands. Agritourism has increased by a total of 3.76 percent since 1999. The total number of farms in the Netherlands has decreased by 31.23 percent since 1999. From the latter, one can conclude that the 3.76 percent increase seen in agritourism is high. However, other supplementary activities such as nature preservation and care provision are also becoming increasingly popular among farmers and market gardeners.

This raises the question about the reasons for visitors to come to public farms, buy products and even bring their children. So what does bring people down to the farm? For some people Agritourism fulfills an idealized, often romanticized, perception of nature and social life at a farm. Many people today are busy and embrace the 18th century view of nature as pure and good in opposition to the moral decay and dehumanizing experiences of urban environments. “In the 1960s and 1970s, the countryside lost the physical but won the mental battle: the rural lifestyle is increasingly valued as a salve for people suffering the bruises of the urban lifestyle” (Koc, 2008). Therefore, people in the Netherlands want to visit farms in their leisure time and are willing to buy expensive products to give themselves a piece of the good country lifestyle. In contrast, another reason is the relatively low price of some direct farm products. This article provides an outline of the various sections of agritourism.

Care farms

A care farm is a farm where people with a care demand find valuable daily activities or work. These can be former alcohol and drug addicts, people with mental disabilities, the elderly and people in need of care. There are more than 700 care farms in the Netherlands. The number of care farms in 2009 has increased by 10 percent compared to 2008, as seen in Figure 2 (Reitsema & Pierik, 2009), and since 2003 the number of care farms has almost doubled.

Camp Sites

Farmers provide 45,000 camping locations, which correspond to 15% of the total camping sector (Heuvelink & Valkenburgh, 2006). A tourist in the Netherlands can choose among 2,250 farms to visit, which represents an increase of 4 percent compared to 2008.

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Figure 2. Number of farms with diversified activities

Home Sale Activities

Another option for farmers to supplement their incomes is direct selling and processing of agricultural products. In 2009 more than 2,250 farmers pursued home sale activities, which is 3% more than in 2008. Examples of these include cheese, jam, honey, flowers, potatoes, apples and flour. The number of farmers engaged in processing agricultural products has increased by 5 percent, up to 730.

Financial Results

Income from agritourism differs per farmer, but a farmer receives an income of between € 8,500 – 9,500 per year on average. Some incomes peek above € 50,000 per year. Tourists spend more than a quarter of a billion euro each year on agritourism (Siemes, 2004).

Zoonotic Diseases in Agritourism

Zoonotic diseases are infectious diseases of animals that can cause disease when transmitted to humans. Zoonosis and zoonoses are terms that encompass a variety of diseases, including toxoplasmosis and avian influenza, as well as a range of causative agents such as bacteria and viruses, to unconventional agents such as prions. “Zoonoses are not confined to a specific area but rather a global occurrence”

Source: CBS

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(Stirling et al., 2008). A comprehensive literature review identifies 868 species that cause zoonotic diseases; this represents 61% of the infectious organisms (Taylor et al., 2001). Zoonotic diseases, viruses and protozoa are twice more likely to be associated with emerging diseases compared with non-zoonotic diseases.

In the Netherlands different agencies are involved with zoonotic diseases. The Center for Infectious Disease Control from the National Institute of Public Health (RIVM) plays an important role in the prevention and control of infectious diseases. The RIVM receives its assignments from clients such as the Ministry of Health, Welfare and Sport (VWS), the Ministry of Agriculture, Nature and Public Health (LNV) and the EU.

In 2004 the RIVM published a zoonoses report that includes the following general outcome (Giessen et al., 2004). It is impossible to predict which zoonoses will emerge in the coming years. The emergence of zoonoses will often be the result of a complex mix of risk factors, in which the intensity of contact between animals and human beings seems to be crucial. Concerted action on a European level will be required in order to respond timely and effectively to zoonoses threatening public health in Europe. It is therefore concluded that zoonotic diseases are important and that prevention is necessary.

However, how many people in the Netherlands are infected with zoonotic diseases? This question is difficult to answer. The RIVM publish diseases with the highest incidence.

In 2003 the incidence of infections from the lower respiratory and gastrointestinal tract was between 300,000 and 1,000,000 a year (Poos et al., 2009). There are a lot of factors responsible for zoonotic diseases, such as Campylobacteriosis, Salmonellosis, E. coli infections and the Q fever. How reliable are these numbers? People with mild symptoms will not seek medical help and these cases will not be reported. Only the cases (See Fig. 3) with significant symptoms, hospitalization or severe complications are reported. Therefore the agencies can only estimate the total zoonotic diseases in the Netherlands.

Different transmission routes by direct or indirect contact with animals can infect the visitors of agritourism, as seen in Figure 4. Zoonoses are not only acquired directly from animals, but also through environmental transmission. This means

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that walking on a farm, swimming in a lake or a canal, can also cause zoonotic diseases. Consequently there are many possible transmission routes in agritourism. Many routes also means many possible zoonotic diseases.

Figure 3. The exact total number of zoonoses is unknown because of this pyramid structure. Only the cases in the top are reported

Figure 4. Different transmission routes of zoonoses

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Extra risk factors for humans to get zoonoses are:

• Direct contact with infected animals• Presence in an environment with contaminated manure• Skin lesions• Immunosuppression such as in Young, Old, Pregnant and Ill people (YOPI’s)

All these factors may be found in agritourism. There are animals, there is manure, and many families with young children, pregnant mothers and grandparents who visit farms. An overview is presented in the appendix of all the potential zoonoses in agritourism in the Netherlands. These 32 zoonotic diseases do not contain possible unknown emerging diseases that can also be a risk for agritourism, although these tables do show the most important risks of zoonotic diseases from agritourism.

Risk Analysis

An article was published in 1995 about farm visits and zoonoses (Dawson, 1995). There were recent reports of outbreaks of gastrointestinal illness associated with public farms. The conclusion was that the risks of zoonotic diseases seem to be small but that the people at farms need to be alert to simple precautions in order to prevent infections. Much has changed since 1995, and as can be seen from previous sections of this paper, agritourism is at higher risk of zoonotic diseases. At the farms visitors have closer contact with animals, which is crucial for zoonotic diseases (Giessen et al., 2004). The question is, how much higher is that risk, and which zoonotic diseases need extra attention? The 32 zoonotic diseases described in the appendix are not equally important. The risk for a zoonosis can be estimated using the formula: risk = hazard x exposure x impact. Applying this risk analysis to the zoonotic diseases establishes the four with the highest risks for the veterinary public health in agritourism: Escherichia coli O157, Salmonellosis, Campylobacteriosis and at present also Q fever (Wijck, 2004). E. coli, Salmonella and Campylobacter are classic enteropathogens (Heuvelink & Valkenburgh, 2006) and most microbiological investigations on farms are related to these three zoonotic diseases. In 2001 a ‘Code for hygiene at the children farms in the Netherlands’ was published as a result of a 1.5 year old child, with a haemolytic-uraemic syndrome caused by infection with E. coli O157 (Heuvelink et al., 2002). This boy had visited a children’s farm five days before he became ill.

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Later investigation showed the presence of E.Coli at this farm, and the human and the animal isolates were indistinguishable by molecular sub typing. Results from this study and from other on-farm investigations highlighted the risk of acquiring severe zoonotic infections during visits to children’s farms. The ‘code for children farms’ is a guideline for a structured hygiene system and an optimal business against all bacteria that can cause diseases in humans. The code helps to reduce the chances of visitors contracting a zoonotic disease, but next to the code there is also a role for visitors themselves, who need to follow the rules.

In 2002 the Food and Consumer Product Safety Authority (VWA) visited 132 children’s farms to undertake an investigation about hygiene and hygiene facilities (Valkenburgh & Heuvelink, 2006). Hygiene was overall satisfactory, but certain points still needed to be improved. A microbiological investigation was carried out, revealing the presence of E. coli, Salmonellosis and Campylobacteriosis at 64.9 percent of children’s farms (See Table 2). These results show that there is a real risk for zoonotic diseases at a children’s farm. Unannounced visits were made in 2004 to 125 children’s farms, and once again hygiene was generally good, but still not 100%, which is the goal of the code and an information board. The conclusion was that they are on the right track but that there needs to be a closer adherence to the code.

In 2003 the VWA visited 91 care farms and hygiene was good in 87% of these places (Heuvelink, & Valkenburgh, 2005). However, more than the half of these farms was positive for at least one of the three bacteria, as can be seen in Table 1.

Table 1. STEC 0157, Salmonellosis and Campylobacteriosis at child, care and camping farms in the Netherlands

Year FarmNumber positives (%)

STEC 0157 Salmonellosis Campylobacteriosis Combinations

2002 Child farm 13 (10.2) 19 (14.5) 74 (56.5) 85 (64.9)

2003 Care farm 14 (15.4) 7 (7.7) 46 (50.5) 51 (56.0)

2004 Camping farm 10 (11.9) 2 (2.4) 30 (35.7) 38 (45.2)

Source: Heuvelink & Valkenburgh (2006)

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In 2004, the VWA visited 84 camping farms. Hygiene was good in 92% of the cases, but the visits had been announced in advance. Forty-five point two percent (45.2 %) of the camping farms came out positive for one or more of the three bacteria. The report from this VWA project concluded the following:

The microbiological study confirms that there is a real risk of zoonoses when handling animals at a camping farm, care farm or children’s farm. This underlines the importance of hygiene by farmers and all visitors. Information for farmers and recreationists about the chance of illness due to contact with (manure) animals plays an important role. The results ask for a general quality system for the camping farm based on the code for children farms possibly secured by a system of certification. The code for children farms is approximately 80% applicable for camping on farms. The VWA still recommend a specific hygiene code for the sectors in agritourism.

Relevant Zoonotic Diseases in the Agritourism

Salmonellosis

Salmonellosis is an infection caused by a bacterium called Salmonella. Salmonella germs have been known to cause illness for over 100 years. They were discovered by an American scientist named Salmon, after who they are named. It is one of the most common zoonoses and is found all around the world. Each year in the Netherlands there are an estimated 50,000 cases from Salmonella. Every year there are about 700-800 hospital visits and 52-64 deaths (Warris-Versteegen & Vlie, 2005). Salmonella live in the intestinal tracts of humans and other animals, including birds. Salmonella is usually transmitted to humans by eating contaminated food that usually looks and smells normal. This can be all foods of animal origin such as eggs, milk or poultry but also includes vegetables and other products affected by cross contamination. Another transmission route important for agritourism is through contact with animal feces, which occurs in 5 to 10% of all reported Salmonella cases. The Salmonella enterica bacterium may develop a carrier state in the host after primary challenge and such carriers typically excrete high levels of bacteria during recovery from enteric or systemic disease, often in the absence of clinical signs. In some cases, the carrier state may exist throughout the host’s entire lifetime, so animals can be healthy carriers for a long time (Tomley & Shirley, 2009). Reptiles and birds, in particular, are often carriers

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and show no clinical signs, as opposite to humans, who show different symptoms such as fever, diarrhea and abdominal cramps. These symptoms usually last from 4 to 7 days before recovery takes place. In 3 to 5% of the cases people develop complications, such as pneumonia, arthritis, sepsis and shock. The disease is mostly seen in YOPI’s.

In order to prevent visitors of agritourism from contracting an infection with salmonellosis, the following guidelines should be observed: farmers who prepare food need to follow the general kitchen hygiene measures, including cooking poultry thoroughly and not serving any food with raw eggs or unpasteurized milk. Have a separate dirty and clean path for visitors in order to avoid contact with manure. It is important that visitors wash their hands with soap after handling animals or coming into contact with feces, especially before eating. Therefore, good washing facilities are necessary at convenient places. People tend to take more care at these facilities if information is given about the reason. Children should be warned not to put their hands in their mouth touching animals, or their environment, before washing them.

Campylobacteriosis

Campylobacteriosis, is an infectious disease caused by bacteria of the genus Cam-pylobacter. The total estimated number of people with campylobacter infection in the Netherlands is of 80,000 a year (Havelaar et al., 2005), 18,000 of which visit a general practitioner. There are also 600 hospital admissions and 30 patients die, mainly elderly. The cost due to this disease is estimated at 21 million euro’s per year. The most cases are seen during the summer and by children (<5 years) and young adults (18-29 years). Nevertheless, it can be concluded that direct contact with infected animals and consumption of unheated foods (vegetables, fruit, raw fish and unpasteurized milk) are the most significant transmission routes. Campylobacter is a normal gut habitant amongst different animals. Adult animals are usually healthy carriers, but young animals can get diarrhea, sometimes with fever. There are people who show no symptoms but most people infected with Campylobacteriosis become ill. The symptoms are diarrhea (bloody), cramping, abdominal pain and fever, for around one week. Some people develop sepsis when Campylobacter spreads to the bloodstream. The incubation period is usually 3 days but can be take from one to seven days. Sometimes Campylobacter infection even

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results in long-term consequences such as arthritis and Guillain-Barré syndrome, both diseases involving the immune system.

The transmission routes from Campylobacteriosis and Salmonellosis are similar, so the prevention measures adopted for Salmonellosis are often also effective in limiting Campylobacteriosis.

Escherichia coli 0157

Escherichia coli is a group of bacteria. Most strains of E. coli are harmless and it is one of the main inhabitants of the intestinal tract of most mammalian species, including humans, and birds. However, E. coli can cause diarrhea and other illnesses because of the ‘Shiga toxin producing’ (STEC), which is also called Verocytotox E. coli (VTEC) or enterohemorrhagic E. coli (EHEC). The disease is also called the ‘hamburger disease’ because of transmission by eating improperly heated burgers. The most commonly identified STEC is E. coli O157:H7 and, when referring to infections, they are usually talking about this one. However, non-O157 zoonotic strains are increasing and were probably underestimated, as they had been less well characterized and are more difficult to detect in samples than O157:H7 (Fairbrother & Nadeau, 2006). In the Netherlands the intensive surveillance was extended with STEC non-O157 in 2007. The results of this surveillance are presented in the RIVM bulletin from February 2010 (Friesema et al. 2010). Forty-five (45) cases were diagnosed with STEC 0157 in 2008 and 45 with non-O157 STEC. Forty-seven percent (47%) of these cases were hospitalized (32-54% in previous years) and 11% developed the haemolyticuraemic syndrome (HUS) (8-21% in previous years). Fourteen percent (14%) of the STEC non-O157 cases were hospitalized and none developed HUS. Eighty-six percent (86%) of the non-O157 cases who were younger than 10 had contact with animals or their manure. Based upon laboratories using PCR, it was estimated that the actual number of STEC non-O157 infections in the Netherlands is about 3.5 times higher than the reported number. Figure 5 shows clearly that most cases are reported during the summer months (this was also described earlier for the Campylobacteriosis bacteria). Probable explanations are barbecues, the climate and more farm, animal and holiday visits. Agritourism mainly takes place during the summer months.

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Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

Figure 5. Percentage of patients per month for STEC O157 (1999-2007 and 2008) and STEC non-O157 (2008), exclusive the STEC O157-patients from the explosions in 2005 and 2007

Ruminants and especially cattle are the most important reservoirs of zoonotic E. coli. STEC that cause human illness generally do not make animals sick, cattle are healthy carriers. The bacteria are transmitted to humans through the ingestion of contaminated foods or water, or through direct contact with the infected animals or their environment. Risk factors that have been identified for infection of animals with O157 include age, weaning, movement of the animals, season, feed composition, and the ability of the bacteria to persist in the environment. Humans have different symptoms of STEC infections but often include severe stomach cramps, diarrhea (often bloody), vomiting and fever (usually not very high). Most people recover within a week but patients diagnosed with STEC infection have a 5-10% chance of developing a potentially life-threatening complication known as the hemolytic uremic syndrome (HUS). Most people who develop HUS recover within a few weeks, but some suffer permanent damage or die. The incubation period is usually 3-4 days after exposure but can also be after 1 or up to 10 days.

The same prevention measures described for earlier Salmonellosis are effective for these bacteria but there are also other prevention options. Cattle are the most important reservoir of these zoonoses, so children under the age of 5 years old should be extra cautious around cattle because they are more sensitive. When visitors at the farm come into contact with cattle, it is important that they are free from E. coli O157:H7. Farmers can test the cattle before buying for O157:H7 and

Source: infectieziekten bulletin RIVM february 2010

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if they have it, remove it from the public farm. Unfortunately, diagnosing cattle is not an easy task because E. coli O157 is shed sporadically, and more tests become necessary after several days or even weeks. Additionally, diagnostic tests for E. coli O157 of cattle feces can be quite expensive and time consuming (Callaway et al, 2004). Another possible strategy is probacterials; probiotics are defined as commensal bacteria used to reduce pathogenic bacteria. Probiotics in general have not always been widely used because of the lack of real results. Due to increased concerns about antimicrobial resistance it is expected that the use of probiotics will increase in the future (Zhao et al, 2003). Refreshing is important in order to avoid decreasing opportunities for pathogens to multiply in food and water.

Q fever

The Q fever is a zoonotic disease caused by the Coxiella burnetti bacterium. The cause of the disease was unknown until 1937 which explains the name: Q stands for query. Cases of C.burnetti are found worldwide and have been in the Netherlands for many years. The C.burnetti bacterium has a high resistance against physical and chemical influences, including disinfectant. Until 2007 there were annually 10 to 20 cases reported (Roest et al., 2009) and Q fever was seen as an occupational disease for veterinarians, farmers and slaughterhouse staff. An investigation by Richardus in 1987 showed that 87% of veterinarians were positive for C.burnetti (Houwers & Richardus, 1987). During this investigation from 1968 to 1983 there had been no increase in the percentage of infected people. Q fever has been endemic in The Netherlands for a long time (Richardus et al., 1987). In 2007 there was a difference, where 191 cases of Q fever were reported, especially from the Nord-Brabant Province, around Herpen Village. The disease is reported in the newspapers as a mysterious epidemic, whereby 80 residents in Brabant are infected, during the months of May and June. About three months later the RIVM confirmed that it is indeed Q fever. The RIVM started an investigation into residents on Wednesday, September 12th (Roes, 2010). In the years from 2007 and until this moment, March 2010, there have been more and more reported cases of Q fever, as seen in Figure 6. At the end of 2008 there were 906 confirmed cases, making it the biggest documented epidemic of Q fever in the world (Roest, 2009).

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Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

Figure 6. Number of patients reported with Q fever within the week of the receiving notification by the Public Health Service (GGD), period 1.1.2007 to 17.2.2010

There are also comments about the numbers from Figure 5. During a presentation at the University of Veterinary Medicine in January 2010, F. Knapen, Professor of Veterinary Public Health at Utrecht, stated that ever since the reported cases in 2007 everyone was alerted to the disease Q fever. The cases from 2007 are probably related to the increasing size of dairy goat farms. Patients before 2007 with the same clinical signs were not reported or investigated for Q fever, whereas now they are. The question is whether the numbers from 2008 and 2009 went up because of the increasing bacteria or due to the increasingly alerted people. The authorities took measures for the Q fever outbreak such as a cull of animals at infected commercial goat farms. No culling took place at children’s farms, which were obliged to vaccinate the animals.

The most important reservoirs from Q fever are goats, sheep and cows, but the bacteria can be found in the whole environment and many animals, including insects. Infected animals are usually healthy carriers. Since 2005 it has been observed that dairy goat and sheep farms in the Netherlands have abortions due to a Coxiella burnetii infection. During an abortion or birth the infected placenta

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and the amniotic can infect the environment. The bacteria can also infect the environment through the urine and feces of infected animals. The most people affected in the Netherlands are infected by inhalation of contaminated fine dust particles from infected goat farms. About 60% of the infected humans show no clinical signs of illness. A thirty (30%) of people have fever, headaches, general malaise, confusion, sore throat, chills, sweats, non-productive cough, nausea, vomiting, diarrhea, abdominal pain, and/or chest pain. If the disease goes untreated it can become chronic but usually it passes. Complications, such as pneumonia, hepatitis and endocarditis can occur in 10% of all infected animals. Chance of death is less than 1 percent even without treatment. Treatment with antibiotics is usually effective. The incubation period of the disease is usually from two to three weeks, depending on the number of organisms that initially infect the patient.

Q fever has not yet been investigated with regards to the agritourism environment. However, and as previously described, the bacteria can be everywhere in this environment and an epidemic is present in the Netherlands. The impact of Q fever is high and Q fever reports occur in many newspapers. The RIVM has reported an outbreak of 2,293 human cases in 2009, including 6 deaths. Still, the disease was considered important in the past and is described in 2001 as a disease in the top five from attention asked infections at the children farm.

C.Burnotti can be mineralized in order to prevent infections from the Q fever, but the bacteria cannot be totally removed. Prevention measures for farmers of agritourism are vaccination, separation of animals that give birth and appropriate disposal of placenta, birth products, fetal membranes, and aborted fetuses. If goats abort it is wise to keep the animals ‘far’ away from visitors.

Discussion

Many risks of zoonotic diseases have been described and a lot of reviews from experts can be found. The diagnostic methods are improving and our knowledge of zoonotic diseases is increasing. Compared to the decreasing number of farmers in the Netherlands, the percentage of farmers involved with agritourism is increasing. Humans are often in close proximity to animals during the holidays, or other activities which seem to be harmless, but which do carry the risk of disease. Agritourism involves many extra risk factors, including YOPI’s, direct contact with animals and manure, as well as consumption of farm products. Therefore,

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Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

zoonotic diseases become an increased risk and a reaction is inevitable. The Food and Consumer Product Safety Authority (Heuvelink et al., 2007) carried out microbiological investigations confirming that zoonotic diseases are often present. This emphasizes the importance of strict adherence to hygiene measures by both workers and visitors on farms in The Netherlands. Bacteria such as E. Coli, Campylobacteriosis and Salmonellosis are found to be present at public farms and are three of the highest risk zoonotic diseases in agritourism. At the farms not only bacteria but also viral, endoparasitic, fungal and arthropod zoonotic diseases, constitute a risk to health. The tables in the Appendix included in this paper are all possible zoonotic diseases in agritourism as described in Northern Europe. Q fever is the fourth high risk zoonotic disease in agritourism, a bacterium that has always been present in the Netherlands and that will remain there. Today there are still many consequences brought by Q fever. In 2005/2006 the Animal Health Service Deventer (GD) released a warning about the C. burnetti bacterium, but there were other priorities and no research funds available at the time. Measures have been taken due to the serious cases of Q fever in the last three years and its heightened impact. Some people, even experts like Mr.F.Knapen (professor of Veterinary Public Health in Utrecht), see some measures as a reaction to ‘hysteria’. Political decisions have been made which could have been avoided otherwise. Another example is that of children’s farms, as described in the ‘code for children farms’ instigated after a serious case of E. coli O157. The conclusion drawn is that measures are only taken after the occurrence of serious cases with serious consequences.

Not all people see hygiene protocols such as the “code of children farms” for prevention of zoonotic diseases as necessary. The hygiene hypothesis, for example, goes against it. “This hypothesis suggests that in the modern world, children’s immune systems have a lack of external signals in their environment, which can cause a ‘cytokine dysbalance’, resulting in allergies” (Steerenberg et al., 2002). In 2006 the PARSIFAL (Prevention of Allergy - Risk factors for Sensitization In children related to Farming and Anthroposophic Lifestyle) showed that the prevalence of atopic disease was up to 50% lower among farm children (Schram-Bijkerk, 2006). The protective factors from farm life were consumption of unpasteurized milk, pregnant mother working at the farm and the higher dust and microbial agent levels. However, a reaction to the hypothesis is that there has been no study of the natural selection of these farmers. One reason for the low prevalence is that only strong farmers survived. Could it also be that more and

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more children now suffer from asthma or is the increased diagnosis a result of more and improved research into this disease? Epidemiological studies suggest the relationship between allergic diseases and infections in childhood, but there are also several well-conducted studies that do not support this relationship. A paper published in 2009 states that the term hygiene hypothesis is misleading and that a better term would be ‘microbial deprivation hypothesis’ (Bjorksten, 2009). In this article epidemiological, clinical and animal studies are taken together, which suggest that broad exposure to a wealth of commensal, non-pathogenic microorganisms early in life are associated with protection. “This has little relationship with ‘hygiene’ in the usual meaning of the word”, notes the article.

In 2007 the European Commission introduced a new strategy for animal health in the European Union. Under the motto “prevention is better than cure” the union wants to promote prevention, science, innovation, research etcetera (EU, 2007). No serious cases have yet been found in agritourism but there are no measures for prevention. With the current knowledge of all existing zoonotic diseases, and possible emerging zoonotic diseases which can occur in agritourism, it would be wise to further investigate prevention. The code for children’s farms can be taken as a guideline for the hygiene measures in agritourism and would cover it for about 80 percent. However, experts advised in 2006 that a code specifically for agritourism is required (Heuvelink & Valkenburgh, 2008). Reasons for this are the differences between children’s farms and farms in agritourism, notably the duration of stay, the number of animals and the form of contact with animals. The code for agritourism hygiene needs to be detailed and applicable to all public farmers. The code would include such general hygiene measures as a visitor information board with a warning and explanation about zoonotic diseases. Other prevention measures would be good hand washing facilities, keeping animals separated from eating and drinking areas, good hygiene practices regarding manure (for example rapid removal) and keeping animals that have given birth separately. Information for the farmer and visitor plays a very important role. When the reasons for the hygiene measures and the risk of zoonotic diseases are better understood, people and farmers will be more inclined to follow the hygiene measures.

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ce: e

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2009

, Koc

, 200

8, He

uveli

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, 200

2, Ha

velaa

r, 200

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llawa

y, 20

04

Table

3. Fu

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No

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ce: W

ijck,

F, 200

4

[108] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Wayop, Overgaauw, Keessen

Table

4. En

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al m

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statio

n in

the h

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deer,

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resen

tNo

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [109]

Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

Endo

para

sites

Nam

e cau

sativ

e or

ganis

mPr

incipa

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als

involv

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Cont

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No

(Con

t.)

[110] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Wayop, Overgaauw, Keessen

Endo

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Nam

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sativ

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lly no

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s so

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rcent

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Toxo

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y

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S or m

yoca

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1926

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. Wild

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.

No

Sour

ce: Ta

ylor e

t al.,

2007

Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011 [111]

Zoonotic Disease Risks and Agritourism in the Netherlands: A Review

Table

5. Ar

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Nor

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me c

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dise

ase

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ith an

imals

No

Sour

ce: Ta

ylor e

t al.,

2007

Table

6. Vi

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Nor

d Eur

ope

Virus

esNa

me c

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influ

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Close

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coug

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dead

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with

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Rode

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d, go

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e

Tick b

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r ing

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n of in

fected

un

derco

oked

milk

or

chee

se

Bipha

sic ill

ness

with

fev

er, en

ceph

alitis

, pa

ralys

is,

neur

opsy

chiat

ric

sym

ptom

s

Usua

lly no

sign

sNo

t pres

ent in

th

e Neth

erlan

ds.

Prese

nt in

Germ

any,

Austr

ia, Sw

eden

, Fin

land,

Norw

ay,

Croati

a, Slo

venia

and

Hung

ary

No

(Con

t.)

[112] Una Salud. Revista Sapuvet de Salud Pública, Vol. 2, N.º 1. Enero-junio de 2011

Wayop, Overgaauw, Keessen

Virus

esNa

me c

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tive

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nism

Princ

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Cont

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anim

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Distr

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n and

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Neth

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rtable

hu

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ase

Cont

agiou

s ec

thym

aOr

f viru

s (pa

rapox

)Sh

eep,

goat,

wild

un

gulat

esCo

ntac

t with

infec

ted

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als or

mate

rial

Papu

le(s)

that

umbil

icate

and

ulcera

te, us

ually

on

hand

s and

arm

s; dis

sem

inatio

n rare

Bum

ps, p

imple

s, bli

sters,

crus

ty sp

ot

aroun

d mou

th,

eyeli

ds an

d arou

nd

the e

xtern

al ge

nitali

a. Ea

t prob

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Each

shee

p or g

oat

No

Hant

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l dise

ases

Buny

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Rode

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m ro

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cretio

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d se

cretio

ns

More

or le

ss se

vere

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seNo

sick

ness

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sing (

27 ca

ses

in 20

07)

Yes (

grou

p C)

Rabie

s and

rabie

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infec

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Lyssa

virus

es Ra

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Duv

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ge vi

rus

Mok

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rus I

bada

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Wild

and d

omes

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s, m

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vam

pire

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nsec

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ironm

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Pares

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ia or

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, feve

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ges,

prog

ress

to hy

perve

ntila

tion,

gene

ral pa

resth

esia,

pa

resis,

seizu

res,

hydr

opho

bia;

mor

tality

>99

%

aggr

essiv

e beh

avior

, iso

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rom he

rd,

paral

ysis,

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m

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ity

Since

vacc

inatio

n in

1992

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e Not

pr

esen

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ild an

imals

. On

ly ba

ts ca

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th

e viru

s

Yes (

grou

p B1)

Sour

ce: W

ijck,

2004

; Tom

ley, F.

M. &

Shirle

y, 20

09