Cuaderno Torreparedones

7/24/2019 Cuaderno Torreparedones

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UN ACERCAMIENTO A LACULTURA BERO-ROMANA

EN BAENA (CRDOBA)


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Cndido Rodrguez NavarroProfesor de Historia del Arte

Escuelas Profesionales Sagrada Familia. BAENA (CRDOBA)

Un acercamiento a laCultura Iberorromana

en Baena (Crdoba)

Cuaderno DidcticoTORREPAREDONES


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Cndido Rodrguez Navarro, profesor de SAFA Baena

(Crdoba, 1957 Baena, 2013)

Adems de la docencia, Cndido difundi entre sus alumnos los valores que

defendi durante su vida: el pacismo, el respeto, la igualdad y la lucha por los

derechos humanos. En el centro escolar donde desarroll su labor profesional

durante 25 aos ocup durante una etapa cargo direcvo. Con su llegada

a Baena, en el ao 1988, se hizo miembro de Ecologistas en Accin, donde

asumi la defensa del medio ambiente y la educacin para la paz. Adems

de a nivel local, tuvo responsabilidades a nivel regional en ese colecvo.

Este Cuaderno Didcco sobre el parque arqueolgico de Torreparedones

qued prccamente terminado pero indito. Sirva su publicacin como un

rendido homenaje a su autor que supo valorar la importancia del patrimonio

histrico y arqueolgico de Baena en el campo de la docencia.


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presentacin

El cuaderno didctico que tiene el lector entre sus manos constituye una publicacin quecontribuir tanto al conocimiento como a la promocin del yacimiento arqueolgico deTorreparedones, ya que ayudar a los estudiantes a profundizar en las nociones bsicas delas pocas beras y romanas y ser muy vlido para conocer ms sobre las tcnicas que seaplican en la ciencia de la arqueologa.

Al estudiar los temas ms recurrentes de la Historia del Arte es fundamental que losalumnos establezcan a nivel local lazos de unin con las piezas y yacimientos ms conocidosmundialmente. Por ello, al descubrir que a 22 kilmetros tienen la posibilidad de visitar unosrestos arqueolgicos de tales magnitudes enseguida se harn una idea del legado de nuestrosantepasados y de la trascendencia que tuvo esta ciudad milenaria.

El trabajo del profesor Cndido Rodrguez abre el camino para que el yacimiento se inte-gre en los temarios de asignaturas como Historia o Historia del Arte. Con ello, desde edadesbien tempranas aprenderemos a poner en valor nuestro patrimonio, encabezado por un vastoyacimiento que hoy por hoy ya est teniendo trascendencia a nivel internacional.

Gracias a los ingentes conocimientos de Cndido en diferentes materias, considero muytiles las numerosas actividades prcticas que se incluyen en el cuaderno, las cuales permitenconsolidar los conceptos tericos expuestos, no menos importantes que el planteamientode cuestiones por resolver, como el verdadero nombre de la colonia. Se trata pues de un ins-trumento ms que nos ayudar a interpretar cmo era la ciudad y a ir descubriendo variosinterrogantes que todava desconocemos.

Completamos ahora uno de los muchos proyectos que Cndido emprendi y que sinduda alguna vienen a enriquecer el patrimonio histrico y cultural de Baena. Solo me quedaagradecer la labor que Cndido realiz y admirar la huella que ha dejado en tantos alumnosy compaeros. Espero que este cuaderno didctico tenga la aceptacin que merece dentrodel mundo educativo y cultural y sea utilizado en el mayor nmero de departamentos deHumanidades e Historia del Arte.

Jess Rojano AguileraALDALDE DE BAENA


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presentacin

As comienza la primera pgina del primer cuadernillo que se imprimi en el colegio, conlas palabras de agradecimiento de un gran humanista Cndido a mi apoyo, mi apoyoamigo Cndido era muy fcil, tenindote a ti detrs de todo este trabajo.

El sentido que orient la elaboracin de este cuaderno didctico un ao antes, se con-cibi como la modesta aportacin de su autor, para sembrar semillas de HUMANISMO, entrenuestros alumnos (y lectores en general) semillas que susciten el inters por la Historia, lacultura clsica, la filosofa, las letras, reconociendo que en el centro de toda produccin estel genio creador humano y su despliegue de posibilidades, en multitud de formas expresivasque siguen alentando aquellos utpicos amaneceres, tan necesarios siempre.

Querido alumnado y lectores en general aprovechen este cuaderno y pongan en el co-nocimiento del mismo y de Torreparedones el mismo cario que en l puso su autor.

Ramn Martn SolanoDIRECTOR GERENTE SAFA BAENA


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prlogo

CNDIDO RODRGUEZ NAVARRO, MI GRAN AMIGO DE SIEMPRE

A Cndido, mi gran amigo de siempre.

Son tantas las virtudes que reuna en su persona nuestro compaero Cndido, mi granamigo de siempre, que se hace difcil sintetizarlas.Cndido fue un hombre honesto, sencillo, amable, conciliador, profundo, despierto,

soador, inteligente, con un proyecto de vida, consciente de la realidad, con una utopa a rasde suelo, buen compaero, buen amigo, excelente profesor, activo, justo, ecologista, sincero,conversador, entraable, certero, honrado, con convicciones inquebrantables, trabajador,

alejado de lo banal, preocupado por los males del mundo, adelantado a su poca, transcen-dente, buen padre y esposo, humilde, . . .

Cndido saba escuchar, saba luchar, saba comprender, saba mejorar, saba compartir,saba entusiasmar, saba mantener atentos sus odos al grito de dolor de los dems, sabasonrer de una forma muy especial, saba rer hasta desternillarse, saba pedir perdn y, sobretodo, saba perdonar.

Yo s, ciertamente, que Cndido era un convencido del mensaje de Cristo, al que admirabaprofundamente. Cndido, era un cristiano de hechos, de acciones concretas, de proyectoshondos y de reivindicacin social. Cndido saba que la peor de las ignorancias es la de noconocer los estigmas de los ms desfavorecidos del mundo, porque quien no conoce no actay Cndido conoca y saba actuar.

Cndido am profundamente a todos aquellos que tuvimos la enorme suerte de compartircon l su vida. Cndido, adems de gran amigo fue para m un maestro del que aprend mu-chas cosas que me han servido y me siguen sirviendo para vivir con un sentido holstico.

Cndido quiso poner su grano de arena para cambiar el mundo y, realmente, nos dejuna inmensa playa. Cndido pens en global y actu en local. Cndido supo ser valiente ydijo siempre la verdad. Cndido odiaba la hipocresa y reprobaba a quienes jugaban concartas falsas.

Nunca vi a Cndido llorar, pero s recuerdo el brillo de sus ojos y su semblante triste antelas situaciones de injusticia. l me deca mucho: Javi, no olvidemos nunca que de la Justiciabrota la Paz.

Cndido jams dej un proyecto sin terminar. El cuaderno didctico de Torreparedonesfue su ltimo proyecto, pero no pensemos que lo dej inacabado. Cndido ha puesto sualma en nosotros, ha llenado nuestros corazones y son su alma y su corazn los que guiarnnuestras manos para llevar a buen fin su proyecto.

Gracias, querido amigo Cndido, por tantas y tantas cosas. Gracias, sobre todo, por ha-bernos enseado con tu ejemplo a ser mujeres y hombres autnticos.

Francisco Javier Snchez Snchez-Caete


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Torreparedones

Versos en la historia que nos invitan a disfrutardel encanto y significado del lugar

Asomado yo a aquel balcn de Andalucay atalaya de atalayas, segn exactsimamentelo apellida el vulgo; absorto al dominardesde aquella estacin geodsicanumerosas villas, fuertes en otra edad porlo elevado de sitio y por el ingenio del hombre;

parecime tocar la pea de Martos,seis legua distante hacia donde sale el sol,

y al Sudoeste la encumbrada poblacin

de Espejo, alturas ambas que se comunicaninmediatamente con la Torre de las Vrgenes(Torreparedones);y contemplndome,a no dudar en una lnea estratgicade pujantes fortalezas romanas,bien enlazadas entre s, nunca ech de verni pude imaginar que en tal hora me asomabaa los altos adarves de la renombradaColonia Inmune Ituci Virtus Iulia,donde en el principio de la guerra contralos hijos de Pompeyo, hubo Csarde desplegar su valor y espritu hazadoso.

AURELIANOFERNNDEZGUERRA(1875)


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Torreparedones. Un acercamiento ala cultura bero-romana en Baena

Departamento de HumanidadesSeminario de Historia del Arte

NDICE

PRESENTACIN Alcalde de Baena. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .7

P R E S E N T A C I N D i r e c t o r G e r e n t e S A F A B a e n a . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9

PRLOGO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11

INTRODUCCIN. El significado y objetivos de este Cuaderno Didctico . . . . . . . . . . . . . . . . 17

CUESTIONARIO INICIAL de ideas previas para el alumnado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21

APARTADO 1. TORREPAREDONES. UNAS CUESTIONES PREVIAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25

Breves apuntes sobre su singular localizacin geogrca . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26 Aproximacin al conocimiento antiguo de las ruinas de Torreparedones. . . . . . . . . . . 2 7 Las modernas investigaciones arqueolgicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31 Una sencilla aproximacin a la Arqueologa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 Mapa sobre las diferentes campaas arqueolgicas (19872008) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 35 El nombre de la ciudad: una incgnita por resolver . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 36 Actividades de aplicacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37

APARTADO 2. TORREPAREDONES. HALLAZGOS SIGNIFICATIVOS EN EL ENTORNO DELYACIMIENTO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45

Mausoleo de Los Pompeyos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46 Sillar de esquina (Relieve iberromano de Torreparedones) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47 La Mazmorra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49 El capitel ibrico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49 El Ara decorada. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 50 Lucerna romana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51 Cuestionario de aplicacin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 52 Actividades para la profundizacin bibliogrca . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 53 Actividades para la creatividad artstica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 53

APARTADO 3. RELIGIOSIDAD IBERROMANO. SANTUARIO Y EXVOTOS . . . . . . . . . . . . . . . . . 61 El santuario iberromano de Torreparedones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62 Localizacin geogrca. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62 Estructuracin arquitectnica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62 La cella o espacio sagrado del santuario. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 66 Los exvotos ibricos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67 Una guracin plstica asociada al culto religioso. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67 Exvotos antropomrcos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 68 Exvotos anatmicos. Caractersticas generales y simbologa de los exvotos. . . . . . . . 7 0 El agua de la Fuente de la Romana. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 71

Comentario de un exvoto singular. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 72


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ndice

Actividades para la comprensin del contenido . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7 3

APARTADO 4. ASPECTOS RELEVANTES DE LA ARQUITECTURA IBERROMANO EN

TORREPAREDONES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 81 La Puerta Oriental de acceso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 82 Las Torres . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 83 El Paso de Entrada. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 84 El foro . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 85 Generalidades sobre este espacio urbano . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 85 El trazado del decumano y el cardo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 86 La inscripcin en la plaza foral . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 88 Curiosidades en la planicacin urbanstica romana. El Gnomn. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 1 El Macellum. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 2 Las Termas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 5 Actividades para la reexin y comprensin del contenido. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 96

APARTADO 5. ESCULTURAS DE TORREPAREDONES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 101

Escultura iberromana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 102 Escultura femenina. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 102 Esculturas romanas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 104 Escultura thoracata. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 104 Retrato de Claudio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 106 Escultura togada de Tiberio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 108 Escultura icnica femenina. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 110

Actividades para el comentario tcnico de imgenes escultricas. . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 1 2

GLOSARIO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 121

B I B L I O G R A F A . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 2 3

La historia testigo de los tiempos, luz de la verdad, vida de la memoria, testigo de la Antigedad

CICERN


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introduccin


INTRODUCCIN.Significado de este Cuaderno Didctico

El significado bsico de este Cuaderno Didcticoresponde a un doble punto departida, considerado a modo de diagnstico inicial:

Por un aparte, conocer y valorar, desde la base del conocimiento objetivo, aspectos

de la realidad que conforman el Parque Arqueolgico de Torreparedones, como un re-levante exponente del importante patrimonio histrico y cultural de Baena, que no puedepasarse por alto desde la funcin educativa de un Centro Escolar.

Por otra, reconocer las dicultades que el profesorado de Humanidades encuentra en

una buena parte del alumnado, concretadas en el desconocimiento y despego emocionalrespecto al citado patrimonio.

Y es que unas veces por ignorancia, otras por desidia, otras por mor del prejuicio quelleva a valorar todo aquello que es forneo, magnificndolo desde la idealizacin, minimi-zando, en paralelo lo propio, lo cercano, otras etc, lo cierto es que en el seno de una so-ciedad marcadamente tecnoprctica, conocer y apreciar, desde la racionalidad y disfrute

sensorial, aspectos que trascienden la categora de piedras para convertirse en obras degran significacin histrica, cultural, artstica incluso, se convierte en una aventura un tantocompleja, por la dificultad que genera su acogida social, pero, precisamente por ello, exigede una atencin especial y de su correspondiente tratamiento didctico.


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OBJETIVOS

Desde las premisas anteriores formulamos unos objetivos, evidentemente, pues tene-

mos unos referentesque alcanzar, sencillos y sobre todo, contextualizados en el marco es-colar del alumnado de Bachillerato ( 1 y 2 cursos de la especialidad de Humanidades yCiencias Sociales).

Bsicamente, buscamos acercardiferentes realidades del Parque Ar-queolgico de Torreparedones atravs de un concepto gil de Cua-derno Didctico que recoja infor-macin documentada, imgenesrepresentativas y motivadoras y un

elenco de actividades de aplicacin,imbricadas en el programa generalde trabajo de competencias.

Evidentemente, no se pretendeun estudio de investigacin, ni untrabajo de profundizacin especia-lizada; ni es nuestro deseo, ni nues-tra preparacin responde a ello; setrata, s, de reorganizar la amplia ybien elaborada obra de los diferen-tes especialistas que desarrollan sulabor en el entorno del Parque Ar-queologgico de Torreparedonesy Museo Arqueolgico de Baena,sintetizarla adecuadamente, com-plementarla con otros documentosy estructurarla con unos mnimoscriterios pedaggicos, adaptados alos alumnos de Bachillerato para de-sarrollar, a lo largo del curso escolar

un Taller sistemtico, que permita que stos se sumerjan, con ms conviccin, profundidady delectacin en lo que significa este yacimiento, desde antao conocido y ahora estudiado,en una progresin temporal y una intensidad de hallazgos que asombra, en la historia y cul-tura de nuestro pueblo, Baena.

La base documental, como se precisa en la BIBLIOGRAFAse fundamenta, sobre todo,en las ediciones que regularmente se publican dentro del programa BAENA CULTURA,larevista BAENA ARQUEOLGICAy la consulta de otras publicaciones, generales y/o mo-nogrficas que acercan al alumnado, y al lector genrico, los secretos guardados por la tierray los aos y que la arqueologa va desvelando paulatinamente en su paciente y significativalabor de conocimiento.


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introduccin


Desde esta recopilacin textual y visual, hemos coordinado un trabajo de seleccin,sntesis, organizacin y secuenciacin ( que nos hemos esforzado que sea lo ms coherentey atractiva posible) que junto con la vertebracin de un conjunto amplio de actividades,

posibilite una dinmica de aprendizaje, con un referente constructivista, donde el alumno,a travs de una metodologa de procesos, vaya descubriendo una realidad que fascina en simisma, y con ello, avanzar hacia esa humanizacin, siempre tan precisa, que el estudio de lahistoria fomenta, tal y como expona Karl Jaspers:

El sentido de la historia es que nos convirtamos en hombres.

Este Cuaderno Didcticose completa ( debido a su dimensin de un Taller) con unapraxis de campo que integre la visita guiada y de trabajo, programado, tanto al Parque Ar-queolgico de Torreparedones, para conocer in situ lo que la arqueologa ha sacado a la

luz, el estado actual de estudios y lo que se continua en fase de excavacin; como al MuseoArqueolgico de Baena, para conocer,lo que representa un museo desde una comprensindinmica de sus contenidos expuestos. En ambas experiencias se busca potenciar la capa-cidad de observacin, de investigacin y suscitar un sentido crtico y valorativo, desde losparmetros definidos de la competencia cultural y artstica, que nos debiera aproximar aldisfrute, reexivo y sensorial, de la arqueologa y del arte como expresin y forma de comu-nicacin sublime.

NUESTRO DESEO

Avanzar hacia los objetivos que nos sirven como horizonte en estalabor formativa que se concreta en la publicacin de este sencillo Cua-derno Didcticoque ahora ofrecemos para que el conocimiento com-partido aune fuerzas y estrategias y nos ayude, como educadores cons-cientes, a alcanzar ese ansiada finalidad que buscamos, que el alumnadoreconozca en los estudios de Humanidades una fuente de sabidura, sinprepotencia ni soberbia, un deleite integral de los sentidos todos y unaposibilidad abierta de futuro, desde la puesta en valor de los bienesculturales, que haga de la cultura un elemento vivo, revitalizador denuestra existencia y todo ello desde el recto principio epistemolgico

que ya en la antigedad griega preconizara un conocido filsofo:

Orden y tiempo, el secreto de hacer bien las cosas(PITGORAS)


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cuestionarioinicial


CUESTIONARIO INICIALDeteccin de las ideas previas del alumnado

01. Qu conoces del Parque Arqueolgico de Torreparedones?

02. Lo has visitado?

03. Si la respuesta es afirmativa Qu aspectos concretos destacaras de la visita?


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04. De entre los hallazgos arqueolgicos destacan los EXVOTOS ibricos.Sabes lo que es un EXVOTO? Explica su significado y haz un sencillo dibujo de uno.

SIGNIFICADO:

05. Podras explicar en qu aspectos reside la importancia de Torreparedones?

06. Qu te parece, desde una valoracin crtica, el programa BaenaCultura?


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Apartado 1. Torreparedones.Unas cuestiones previas


07. Qu consideras bsico conocer del Patrimonio artstico y cultural de Baena?

08. Qu cosas puedes hacer para conocer y difundir a otras personas los valores delpatrimonio histrico artstico de Baena? Enumera algunas acciones concretas.

09. Qu preguntas te haces sobre Torreparedones, antes del trabajo en este CuadernoDidctico? Qu cuestiones te llaman ms la atencin para centrar el trabajo deconocimiento?


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apartado 1TORREPAREDONES:

UNAS CUESTIONES PREVIAS

OBJETIVOS ESPECFICOS: Saber localizar geogrficamente el yacimiento arqueolgico. Disponer de informacin sobre el conocimiento que se tena de l desde antiguo. Desarrollar una introduccin motivadora a la Arqueologa. Conocer, de forma sucinta, las intervenciones arqueolgicas en Torreparedones. Reflexionar sobre la incgnita que plantea saber el nombre antiguo del enclave.

DESARROLLO DE CONTENIDOS BSICOS

01. Breves apuntes sobre su singular localizacin geogrfica.

02. Aproximacin al conocimiento antiguo de las ruinas de Torreparedones.

03. Las modernas investigaciones arqueolgicas en Torreparedones.

04. Una sencilla aproximacin a la ARQUEOLOGA.

Etapas en una campaa arqueolgica.

Un ejemplo grfico de estratigrafa. Diario de campo de un arquelogo.

05. Mapa con informacin sobre diferentes campaas arqueolgicas en Torreparedones(19872008)

06. El nombre de la ciudad, una incgnita por resolver?

PROPUESTA DE ACTIVIDADES PRCTICAS Y DE APLICACIN


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UNOS BREVES APUNTES SOBRE SU SINGULAR LOCALIZACIN GEOGRFICA

El lugar conocido como Torreparedoneso Torre de las Vrgenesest ubicado en ple-

na campia cordobesa, entre los ros Guadalquivir al nortey el Guadajoz al sur, aunquems prximo a este ltimo y justo en el lmite septentrional de los trminos municipalesde Castro del Ro y Baena.

Son tierras frtiles, tanto por la composicin geolgica de los suelos, como por la dispo-nibilidad de agua, circunstancias determinantes en los asentamientos humanos en el lugardesde tiempos muy antiguos.

La situacin topogrfica de Torreparedones, sobre una de las cotas ms elevadas de lazona, es ciertamente estratgica, pues sus 579.60 metros de altitudsobre el nivel del mar,lo convierten en el techo de la Campia , circunstancia importante desde un punto de vista

estratgico, motivo por el cual estuvo ocupado por el hombre desde la Antigedad, comoiremos viendo.

En este sentido, y debido a, la ya citada significacin ubicacin geogrfica, se conoceque este asentamiento estuvo ocupado por el ser humano desde tiempos muy antiguos. As,al menos durante 3.500 aos(desde la Edad del CobreCalcoltico,hasta la Baja Edad

Media), diversos pueblos, con sus correspondientes culturas, dejaron su impronta y singula-ridad, a travs de los ms variados restos materiales: cermica, vidrio, piedra, metal, etc.

En las pocas ibrica y romanaTorreparedones alcanz su mximo esplendor; yadesde el siglo VI a.C. se rode de una potente muralla, reforzada con torres, que circundaun espacio de 10,5 hectreas.

Al sitio se accede por la A3125 de Baena a Caete de las Torres, en cuyo km. 17 parte unaantigua va pecuaria(Camino de Castro del Ro a Porcuna)desde la que parte, a su vez, otro

camino en direccin norte que conduce directamente al yacimiento de Torreparedones.


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APROXIMACIN AL CONOCIMIENTO ANTIGUO DE LAS RUINAS DETORREPAREDONES

Los estudios, sistemticos y documentados, dedicados a este importante enclave ar-queolgico no fueron muy abundantes, a pesar de su relevancia, hasta finales del el sigloXX, momento en el que comenzaron a realizarse los modernos trabajos de prospeccin,excavacin y anlisis, sobre los que desarrollaremos una informacin bsica ms adelante yque son la base del presente Cuaderno Didctico.

Ya en el siglo XIII, tras la conquista de Crdoba por los cristianos, el lugar fue conocidocomo Castro el Viejo, conforme a la existencia en el lugar de restos antiguos y medievalesislmicos.

Sabemos que ya, a mediados del siglo XVII, el poeta Miguel de Colodrero y Villalobosvisit el lugar y escribi unos versos en los que se burlaba, a la vez que criticaba, () laavaricia y supersticin de los buscadores de tesoros.


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Castillo de Castro viejo...cercado de cabacotes

te veo, cuando de caba,que de algunos tontos hizola codicia mentecataAdis, castillo de bienembejecida compaade estas virgenes prudentescuyas luces no se apagan.

Durante el siglo XVII el lugar era conocido como Torre de las Vrgenes, modo en quefue y contina siendo nombrado el cortijo all existente. El motivo no fue otro que el levan-tamiento de una ermita en el siglo XVII consagrada a las santas mozrabe Nunilo y Alodiaa las que se supuso, parece que sin demasiado fundamento histrico, martirizadas en esteparaje como consecuencia de su fidelidad a la fe cristiana.

En el siglo XVIII este parajefue identificado, errneamente, como el municipio de Cas-trum Priscum, debido a una inexacta interpretacin de una inscripcin honorfica procedentede Ipsca.

A lo largo del tiempo varios los eruditos se hicieron eco del lugar, pero con un tratamientosuperficial, puramente nominal y con la intencin de citarlo como enclave importante entiempos de romanos o en alusin al episodio, antes referido, de Nunilo y Alodia. En este

sentido, citar los trabajos de Snchez de Feria, E. Flrez o elPadre Ruano.

En el siglo XIX,Aureliano Fernndez Guerray otros investigadores, identificaron elenclave como Ituci VirtusIulia, colonia inmune citada por Plinio.

(Respecto a este afirmacin, es importante indicar que las recientes excavacionesllevadas a cabo en el centro monumental de la ciudad romana as como lo aportado porlos restos epigrficos y escultricos hallados parecen, en opinin del arquelogo JosAntonio Morena, confirmar que estamos en esa ciudad romana adscrita por Plinio alconventus astigitanus.)

Sobre este lugar escriba, all por el ao 1875,los siguientes versos:


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Asomado yo a aquel balcn de Andalucay atalaya de atalayas, segn exactsimamente

lo apellida el vulgo; absorto al dominardesde aquella estacin geodsicanumerosas villas, fuertes en otra edad porlo elevado de sitio y por el ingenio del hombre;parecime tocar la pea de Martos,seis legua distante hacia donde sale el sol,y al Sudoeste la encumbrada poblacinde Espejo, alturas ambas que se comunicaninmediatamente con la Torre de las Vrgenes(Torreparedones); y contemplndome,a no dudar en una lnea estratgicade pujantes fortalezas romanas,bien enlazadas entre s, nunca ech de verni pude imaginar que en tal hora me asomabaa los altos adarves de la renombradaColonia Inmune Ituci Virtus Iulia,donde en el principio de la guerra contralos hijos de Pompeyo, hubo Csarde desplegar su valor y espritu hazadoso.

Cuando a inicios del siglo XX se cartografa la zona, este enclave aparece denominado

como Torreparedones, trmino topogrfico derivado, posiblemente, de una elevacin prxi-ma, Torre de Padrones, que ya fuera mencionada por Fernndez Guerra.

El 16 de agosto 1833el yacimiento salt al escenario nacional, e incluso internacional,debido a un hallazgo casual, consecuencias e unas labores agrcolas, que est relativamentebien documentado. Se trata del llamado Mausoleo de los Pompeyos,una tumba monu-mental, al parecer con una estructura hipogea, en cuyo interior haba 12 urnas cinerariasde piedra con los nombres grabados de las personas cuyos restos haban sido depositadosen ellas.


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Un curioso texto escrito por de Rodrigo Amador de los Rosen 1905,y titulado:Lostesoros del Rey Pompeilustra, desde la fantasa literaria no exenta de cierto rigor en el co-

nocimiento de avatares histricos, el afn de curiosidad, de avaricia, o tal vez de notoriedad,que llev a muchos campesinos de la zona a la bsqueda de los tesoros, supuestamenteenterrados en el entorno de Torreparedones.

En este sentido, indicar que Valverde y Perales, en su clsica obra Historia de la Villade Baena,se hace eco de estas aventuras de localizacin apasionada de tesoros y recoge untexto que, cuanto menos, adems de evocador, resulta curioso:

Irs castro el ro, que es tierra de crdova dice uno de aquellos singulares documentos,

referido al ao 1615 y que recuerda algunos de los cuentos de las Mil y una noches, yPreguntars por el camino que va la dicha ciudad; y [all] preguntars por la fuente delos albercones, que est tres cuartos de legua del lugar; la mano izquierdadel caminodescubrirs los albercones, llegars la fuente, quitars el agua por donde ms bien tepareciere, y desaguars el albercn y quitars siete ocho ladrillos sobre la mano izquier-da; hallars una Puerta, atapiada con un betmen muy fuerte, que es hecho con sangredo vaca y polvo de ladrillo, y guijas, y cal; este betmen es muy fuerte de romper, por [lo]que quiere ms maa que fuerza, y despus de esto no entrars dentro en la cueva hastaque pasen veinte y quatro horas, porque te causara muy gran dao; en saliendo el airey vapor, que hayan pasado las 24 horas, entrars por la cueva adelante cosa de treinta quarenta pasos, hallars una Puerta con dos figuras que tienen dos tiros de bronce;

no temas, si no entra, que no te pueden hacer mal ninguno; hallars una quadra congrande lumbre[1]; tiene de ancho y largo treinta y dos Pies; en el medio della hallarsuna messa de marfil con quatro Pilares de alabastro;sta tiene encima dos coronas, unaimperial, y otra real, y un cetro que tiene una Piedra por remate, que la lumbre dellase pueden aSmar quinientos hombres enla obscuridad de la noche; y la redonda de laquadra, sobre unos Poyos, estn sietecofres cajones, los tres de seis Palmos de largo ytres de ancho y alto, y los quatro siete Palmos de largo y quatro de ancho y alto; stosestn llenos de zequies de oro; un lado de la quadra hallars tres gradas, subirs porellas, hallars una alhacena almario con tres candados muy fuertes, abrirlos as, queall estn las llaves colgadas, y all est la bajilla del rey Almanzor, y todo el servicio desu casa de Plata y oro.


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LAS MODERNAS INVESTIGACIONES ARQUEOLGICAS ENTORREPAREDONES

La publicacin del libro deJos A. MorenatituladoEl Santuario Ibrico de Torreparedo-nes (Castro del RoBaena, Crdoba) en 1989,supuso un hito en la historia del yacimientopues origin la puesta en marcha de un ambicioso proyecto de investigacin denominadoTheGuadajoz Proyectdirigido por los profesores M Cruz Fernndez Castro, de la UniversidadComplutense de Madrid, y Barry W. Cunliffe, del Instituto de Arqueologa de la Universidadde Oxford, junto a otros arquelogos de la Universidad de Crdoba.

En el transcurso de los siete aos de desarrollo del mismo (19871993) se llevaron acabo, de forma simultnea, o alternativa,segn proceda, trabajos de prospeccin, topografa,excavacin, anlisis de materiales arqueolgicos, planimetra y dibujo, fotografa, redaccin delos pertinentes informes, etc. que dieron como resultado varios libros publicados en Oxford

y que permiten on conocimiento sistemtico del recinto.

Entrado ya el siglo XXIel Ayuntamiento de Baena ha retomado las actuaciones con elobjetivo de crear en Torreparedones un parque arqueolgico de cara, no solo a su estudiocientfico, sino tambin a su puesta en valor como un producto turstico. Este trabajo continuaen la actualidad, adquiriendo una proyeccin de futuro que nos llevar a nuevos descubri-mientos y conocimientos, sin duada, relevantes

Los hallazgos realizados en las campaas de excavacin, hasta ahora realizadas, ponen de

relieve la excepcional importancia del yacimiento. Gracias a la ARQUEOLOGAvamosdescubriendo y conociendo la realidad histrica de Torreparedones


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Aproximacin a la ARQUEOLOGA. (1)

Vamos a acercarnos a lo que es la ARQUEOLOGA y a su metodologa de trabajo, sin

duda, rigurosamente cientfica y apasionante, a la vez Gracias e ella, hoy conocemosTorreparedones.

La ARQUEOLOGA es una disciplina histrica que posee una importancia extraordinaria amedida que retrocedemos en el tiempo para conocer los hechos del pasado. Una campaaarqueolgica consta de 3 etapas fundamentales:

Prospeccin. Despus de estudiar las posibilidades de una zona en mapas (toponimia)y documentos, se recorren aquellos lugares donde se tiene constancia y evidencias de laexistencia de yacimientos, y otros escogidos aleatoriamente, en busca de restos que hayanaorado a la supercie, por ejemplo, tras arar un campo de cultivo.

Excavacin. Una vez seleccionado el sitio arqueolgico, se procede a excavar el terreno porestratos. La premisa sobre la que se fundamenta la ARQUEOLOGA es que todo aquello queaparece en un mismo estrato, en principio, se corresponde con un mismo episodio histrico,pues se han enterrado ms o menos simultneamente. As, por ejemplo, si en un estratose encuentra una moneda del siglo III, se puede afirmar, con cierta seguridad, que el restode estructuras y de objetos que se descubran, tambin datan del siglo III. En ocasiones,sin embargo, como consecuencia de movimientos de tierras, tneles de topos, o cualquierotra circunstancia, los estratos se desordean o se susperponen. Adems, hay que guardarcierta cautela, ya que suele suceder que un objeto, por ejemplo, un anillo debido a su valoreconmico o sentimental, se conserve durante varias generaciones y cuando por fin se

entierra han transcurrido decenas de aos. Documentacin. A medida que se va excavando aparecen todo tipo de estructuras ( casas,

canales, cloacas, suelos, etc) y objetos ( cermicos, monedas, esculturas, etc) Es ese momentocuando comienza uno de los procesos ms intensos de las excavaciones; tratar de deducirqu ha sucedido, es la labor de investigacindocumentacin. Los arquelogos debern

reconstruir, con objetividad, los acontecimientos del pasado a travs de los restos materialeshallados.

En primer lugarse analiza cada resto en s mismo:

Es estudia la composicin de la tierra, por ejemplo, una tierra con coloracin roja puedeindicar que hubo un incendio.

Se observan y estudian todos los restos seos de animales y de semillas de plantas.

Los huesos humanos tambin son objeto de observacin y estudio pues aportan informacinsobre una gran variedad de aspectos ( sanitarios, demogrficos, etc)

Se analizan todos los restos de la cultura material ( objetos y estructuras) lo cual permiteconocer elementos culturales de diversa ndole: econmicos, polticos, sociales, etc.

En un segundo momento, se estudian todos los datos en conjunto para tratar de reconstruirlos acontecimientos, la poltica, la economa, la cultura, etc.


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Aproximacin a la ARQUEOLOGA. (2)Muy importantes es el estudio de la ESTRATIGRAFA del terrenos que se estudia. Observa este grfico y

cmo los diferentes restos materiales se localizan en distintos estratos que corresponden a diferentesculturas humanas; por lo general, las ms antiguas, estn en los niveles ms profundos, como resultalgico comprender.

Este grfico se complementa con la lectura del Diario de Campo que se recoge a continuacin.Lelo con detenimiento, pues hallars la descripcin de los encontrado.


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Aproximacin a la ARQUEOLOGA. (3)Diario de Campode un arqueolgo.

En el primer estrato apareci material contemporneo (latas, plsticos) y los restos de uanabadonada va de ferrocarril (10).

En el segundo estrato se encontraron restos de una pequea fortaleza medieval (9) consignos evidentes de haber sido saqueada ( haba una ausencia significativa de objetosde valor), destruida e incendiada. Por el tipo de cermica ( vidriada) y los restos de ladecocracin en las columnas y muros, se podra afirmar que esta forteleza estuvo habitadapor los rabes. En algunas habitaciones se descubrieron varios esqueletos que presentabennumerosas fracturas.

En el tercer estrato se descubri un asentamiento que mostraba rasgos caracterticos de lacultura romana ( desde el tipo de cermica lisa de color rojizo conocida con el nombre e terrasigillata, hasta varias monedas con la imagen de Teodosio el Grande y otros emperadoresromanos. Entre las estructuras ms llamativas figurban un precioso mosaico con el dibujode Medusa (7) y un canal (8) construido con losas planas dispuestas formandoun triuangulo,que comunicaba un ro cercano con el lugar.

En el cuarto estrato se localiz una colonia fenicia. Restos de enormes tinajas ( 5) en unashabitaciones de gtaandes dimensiones que podan haber servido de almacenes nos hablan

de su carcter comercial, pues sirvieron para guardar aceite, salsa de pescado, vino y otrosproductos. Adems se encontr un sarcfago (6), algo deteriorado.

El quinto estrato corresponde con la Cultura de El Argar. Entre otros restos de la culturamaterial, aparecieron vestigios de un poblado (4), con casas de piedra, bajo las cuales sehaban preparado diversos enterramientos en cista(2). Un basurero (3) prximo al pobladoaport mucha informacin, ya que all se encontraron desde restos de animales con los quese haban alimentado, hasta herramientas rotas, fragmentos cermicos, etc.

En el sexto y ltimo estrato, por debajo ya slo haba roca caliza, se encontraron los restosde un hogar y diversos tiles lticos pulimentados, hacha y puntas de flecha, muy afiladas

(1).

Bibliografa:Carrasco Mrquez, Celia y otros (1998). Ciencias Sociales. Geografa e Historia. EducacinSecundaria Obligatoria. Material Fotocopiable. Editorial Oxford.


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Mapa que recoge las diferentes campaas arqueolgicasdesarrolladas en Torreparedones (19872008)


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El nombre de la ciudad, una incgnita por resolver

Pese a la importancia del yacimiento arqueolgico deTorreparedones, an no dispone-mos de argumentos slidos para conocer el nombre que tuvo en la Antigedad, ni en pocaibrica, romana y medieval islmica.

Los primeros documentos escritos, tras reconquista, lo mencionan comoCastro el Viejo,denominacin que nada aporta sobre su nombre antiguo.

An as, se han barajado diversas hiptesis: Ituci Virtus Iulia y Bursavo.

ITUCI VIRTUS IULIALa poblacin de Ituci Virtus Iuliaes citada por Plinioen su Historia Natural,como

colonia inmune perteneciente al conventus Astigitanus, entre Ucubi Claritas Iulia(Espejo)y Tucci Augusta Gemella (Martos) y de momento no se conocen inscripciones que permitanestablecer una ubicacin ms definida, pero cada vez son ms numerosos los argumentosque la avalan.

BURSAVO

Bursavoaparece mencionada, exclusivamente, en el Bellum Hispaniense,una obrade autor annimoque relata el conicto blico que enfrent a mediados del siglo I a.C.a

Julio Csar con los hijos de Pompeyo.Cuando Csar estaba en pleno asedio del ncleo urbano pompeyano de Ategua, envi

una importante embajada de senadores y caballeros romanos a Bursavopara conseguir suapoyo; por su cercana geogrfica con la citada ciudad, se piensa que pudiera correspondera lo que hoy denominamos Torreparedones o Castro el Viejo, situada en el entorno deAtegua.

A pesar de los estudios efectuados, en la actualidad no hay confirmacin cientfica quepueda aportarnos datos precisos sobre el nombre cierto de este enclave berorromano,

aunque los investigadores parecen inclinarse por el de Ituci Virtus Iulia.


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Actividades de aplicacin

1. Lectura, detenida y comprensiva, de los diferentes documentos que integran esteapartado 1. No dudes en consultar las dudas para aclarar los contenidos recogidos.

2 Razonala importancia de los factores geogrficos descritos de la zona en la que seasienta el yacimiento de Torreparedones.

3. Localizacin geogrfica del yacimiento de Torreparedones. Sitalo, con precisinen el mapa que se adjunta.


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4. Localizala poesa completa del Colodrero y Villalobos y comenta,brevemente, sucontenido, en relacin con el yacimiento de Torreparedones y su expolio.

5.Qu signific la publicacin del libro El santuario ibrico de Torreparedonesen el conocimiento de este yacimiento? Redacta, con precisin, tus conclusiones.

6.Respecto al nombre de la ciudad. Argumentacon sentido lgicoQu razones permiten afirmar que se trata de Ituci Iulia Virtus?


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7. Taller de Lectura.Qu razones, segn el autor del texto apoyadas en el hallazgo de la inscripcin, permitenvincular a Torreparedeones con Ituci Iulia Virtus?

Una epigrafa vincula la colonia de Virtus Iulia con Torreparedones, la inscripcinse refiere a un militar retirado que se estableci en Baena.

El hallazgo de una pequea inscripcin, realizada en piedra de mina, en la zona donde alparecer estuvo la antigua ermita de las santas Nunilo y Alodia, constituira una prueba ms queavalara la hiptesis de que en Torreparedones estuvo la colonia Ituci Virtus Iuliade Plinio,segn informa el arquelogo municipal Jos Antonio Morena. Por su estado fragmentario,no sabemos si se trata del revestimiento de un pedestal honorfico de estatua o de un epitafioencastrado en un monumento funerario.

El profesor ngel Venturade la Universidad de Crdoba, comenta que lo verdadera-mente interesante de la inscripcin se encuentra al final de la lnea 2, que aparece tras elnombre del protagonista y formando parte de su cursus honorum,donde hay una letra G

seguida de una interpuncin y del nmero XXXIII suprabarrado, es decir, con una lnea incisahorizontal arriba. Este signo epigrfico se empleaba para indicar un numeral ordinario: eneste caso, trigsimotercero/a.

La abreviatura se resuelve con seguridad como una referencia a la Legin 33 del ejrcitoromano. Las inscripciones que mencionan a militares son muy escasas en la Btica, documen-tndose dichos veteranos en calidad de colonos de las colonias fundadas por Csar y Augustodurante la segunda mitad del s. I a.C. De tal modo, que el personaje al que alude el epgrafe,cuyo nombre no se ha conservado, sera un veterano perteneciente a la trigsimo terceralegin quien, tras licenciarse, se habra establecido en la colonia Virtus Iulia, junto con otros

soldados, donde debi recibir tierras como premio a su trayectoria militar.


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Esas tierras eran confiscadas por el Estado romano o expropiadas forzosamente a cambiode una compensacin econmica a los habitantes autctonos; de hecho se sabe que el propioAugusto declar en sus memorias haber gastado unos 260 millones de sestercios en tierras

para repartirlas entre los veteranos licenciados en los aos 30 a.C. y 14 a.C.

La legin XXXIII fue reclutada por Julio Csar entre la primera campaa de Hispania contraPompeyo (49 a.C.) y la batalla de Farsalia (48 a.C.), seguramente en Italia. Tras la muerte del

dictador, probablemente, luchara por el bando republicano en la batalla de Filipos, tras cuyaderrota pasara a manos del heredero de Csar, el joven triunviro Octavio (futuro emperadorAugusto). Combati en la batalla naval de Actium bajo sus rdenes (31 a.C.) contra la ota

de Cleopatra y Marco Antonio, siendo disuelta tras la victoria.

Despus de la conquista de Egipto (30 a.C.), Augusto reform el ejrcito, desmovilizandoa miles de veteranos y premindolos con tierras mediante la fundacin de colonias en Italia y

las provincias. Segn el profesor Ventura, este militar baenense participara en los aconteci-mientos de la Historia Grande de Roma, en el momento crucial del trnsito de la Repblicaal Imperio, habida cuenta de que la legin en la que milit slo perdur 18 aos y el servicio

activo de un legionario en estos tiempos duraba entre 6 y 16 aos.

Hasta el momento, slo se conoca el testimonio epigrfico de otro veterano de la mis-ma legin oriundo de Bovianum, en la regin samnita de Italia: Lucio Papio, princeps tertius(centurin), cuya inscripcin se asemeja mucho a la de Torreparedones desde el punto devista paleogrfico y estado de conservacin.

En definitiva, este hallazgo se suma a los ya realizados en el yacimiento recientemente,especialmente, en la zona del foro, que ponen de relieve la importancia de esta antiguaurbe romana y supondra un argumento ms a favor de su identificacin con aquellacolonia inmune que Plinio describe dentro del conventus Astigitanus junto a otras colo-nias como Tucci Augusta Gemella (Martos), Ucubi Claritas Iulia (Espejo), Urso GenetivaUrbanorum (Osuna) o la propia capital conventual Astigi Augusta Firma (cija).

Fuente de Informacin: www.terraeantiqua.com

7. Qu opinas de la Arqueologa, tras la lectura de los documentos que se acompaan?


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8.Actividad prctica sobre inscripciones epigrficas.

A continuacin reproducimos un basamento (no relacionado con Torreparedenes

pero s con la epigrafa romana) que incluye una inscripcin. Investiga, primero,qu se entiende por EPIGRAFA y luego procura leerla

Para traducirla, y entenderla mejor, se procede del siguiente modo:

IMP(eratori) CAESARIM(arco) AVRELIO COMMODO ANTONINO

AVG(vsto) PIO FEL(ici) GER(manico)SARM(atico) PON(tifici) MAX(imo)TRIB(vnicia) P(otestate) IIII IMP(eratori) XCO(n)S(vli) V P(atri) P(atriae) RES P(vblica)OCVRITANORUMDECRETO DECVRIONVM D(onvm) D(at)

Visita el Museo Arqueolgico de Baena, en las zonas donde se exponen restosarqueolgicos romanos encontrars una pieza similar. Procede para realizar la traduccinde ls inscripcin que integra.


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9.Concierta una cita con el arqueollogo municipal, Sr. Morena Lpez,elabora un guin amodo de entrevistay, tras la conversacin, redacta un somero informedonde destaqueslos grandes hitos de las campaas arqueolgicas desarrolladas en Torreparedones entre 1987

y 2012.

Elabora los puntos esenciales para el guin de la entrevista:

8.Elabora un logotipopara difundir la realidad cultural de Torreparedones, como Bien deInters Cultural.

Explica su significado:

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DIARIO DEL ALUMNADO.Reflexiones, sensaciones, valoraciones y compromisos.Apartado 1. Torreparedones. Unas cuestiones previas.


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HALLAZGOS SIGNIFICATIVOS EN EL ENTORNO DE TORREPAREDONES

Muchos y valiosos, desde muchos puntos de vista, han sido los hallazgos localizados araz de hecho fortuitos y, sobre todo, de las intervenciones arqueolgica llevadas a cabo en To-rreparedones. Destacamos los siguientes por su significacin histrica, cultural y artstico.

MAUSOLEO DE LOS POMPEYOS

Es una tumba subterrneaque estuvo en uso desde los momentos finales de la Rep-blica, hasta bien entrado el siglo I d.C.

Algunas de las personas all enterradas desempearon cargos importantes en la admi-nistracin municipal de la antigua ciudad de Torreparedones, como Cneo Pompeyo Afroque fue edil y diumvirum


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Apartado 2. Torreparedones.Hallazgos significativos


SILLAR DE ESQUINA RELIEVE IBERROMANO DE TORREPAREDONES

En una de cuyas caras presenta en relieve prominente que representa una escena deculto, en la que dos mujeres, ataviadas con tnica y manto, depositan un vaso en forma decliz (caliciforme)en el tesoro sagrado del templo.


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Conozcamos algo ms de esta interesante pieza:

Significado:Considerada como una pieza excepcionalde la escultura ibrica enpiedra.

Datacin cronolgica: Se sita entre los siglos II y I aC. (Baja poca Ibrica.)

Fecha de su hallazgo: Se produjo en el ao 1985 por pura casualidad, debido a lastareas de labranza en el lugar donde se encuentra este singular yacimiento arqueo-lgico.

Material empleado: El relieve est realizado sobre un bloque cbico de piedracaliza areniscade color blanquecino, un material blando sobre el cual las formasesculpidas se hacen suaves, consiguiendo texturas singulares. La procedencia del

material es local, es decir, de las inmediaciones de Torreparedones.

Localizacin del relieve: La escena est labrada en el lado mayor del sillar.

Dimensiones:Tiene: 75 cm de largo, 83 cm de altura y 46 cm de profundidad.

Estado de conservacin: es relativamente bueno aunque algunas partes se hanperdido (rostros de las figuras humanas representadas, y del animal, como conse-cuencia de las faenas agrcolas con arados).

Temtica: recoge una escena cotidiana en la poca. Se representa un grupo escul-tricoformado por dos figuras femeninas en el momento de realizar una ofrenda

religiosa (vaso caliciforme) y una columna estriada que sirve de soporte a una figu-ra zoomrfica (len, al parecer, animal de arraigado simbolismo en muchas culturasmediterranas y que parece estar vinculado su significacin con el mundo y creen-cias religiosas de la vida de ultratumba.)

La iconografaa la que se alude en esta obra est llena de simbolismos que plan-tean algunos problemas de interpretacin, aunque se apunta a una escena de ca-rcter religiosocultual ante un edicio religioso (tal vez un templo) en la que se

lleva a cabo una ofrenda.

Su funcionalidadparece estar relacionada con usos funerarios, aunque los inves-

tigadores no descartan que esta pieza hubiera formado parte de un monumentoconmemorativo.

Bibliografa:MORENA LPEZ, Jos Antonio (2000), El sillar decorado de Torreparedones, en Boletn dela Asociacin Provincial de Museos Locales de Crdoba, n 1, pp. 4766. Museos Locales deCrdoba.


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La Mazmorra

Con esta denominacin nos referimos a otro mausoleo romanode poca altoim-perial que, al parecer, estuvo decorado con singulares relieves, y que estaba situado enla misma zona que el de los Pompeyos.

Se trata de una estructura realizada en opus caementiciumde planta rectangularcubierta con bveda de can y con un pasillo en su lateral oeste, a modo de entradaa la cmara sepulcral.

Capitel ibrico

Decorado con motivos vegetales tales como volutas y espirales destacando la or-namentacin principal a base de la roseta; sin duda, una pieza de gran valor artsticopor el excelente trabajo escultrico realizado y la belleza plstica resultante.


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Tras la LECTURA del aparato 2, elabora con precisin este Cuestionario

01. Podemos afirmar que han sido muchos y variados los hallazgos encontrados?

02. Cronologa estimada del Mauselo de los Pompeyos.

03. Escribe la temtica que se recoge en el Sillar de esquina ibrico.

04. Qu significado tiene el concepto caliciforme?

05. En realidad, qu era la Mazmorra?

06. Podras explicar en qu consista la tcnica de obra denominada opuscamenticiun

07. Qu decoracin caracteriza al capitel ibrico?

08. Qu significa el concepto Ara?

09. Cul era la funcin prctica de una lucerna romana?

10. Qu diosa se representa en el interior de la lucerna?


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13. Bsqueda de informacin.

Observa ambas imgenes que estn relacionadas con Torreparedones y los hallazgos

arqueolgicos que se estn obteniendo. Busca informacin en las direcciones webque se indican.

Elabora una cha descriptiva de las mismas, atendiendo a su importancia

arqueolgica.

Baena. Ciudad del Olivar y del Aceite. Informativo Digital

Arquelogos. Red Espaola de Historia y Arqueologa

(www.historiayarqueologia.com)


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14. Observa las ilustraciones de ambos capitales ibricos y elabora un comentariosobre las influencias orientales y clsicas en el arte ibrico.

Capitel ibrico de rosetas. Torreparedones. Museo Histrico (Baena)

Capitel ibrico de volutas. Museo Arqueolgico de Jan.


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15. ACTIVIDADES SOBRE DOCUMENTOS GRFICOS COMPLEMENTARIOS.

A lo largo de este apartado hemos conocido diferentes piezas de gran valor arqueolgicoprocedentes de Torreparedones. En su desarrollo han aparecido referencias alusivas a la

cultura ibrica. Conozcamos algo ms de ella a travs de estas imgenes

a) Mapa histrico que nos muestra la realidad cultural de la Espaa prerromana.

Qu zona geogrfica ocupa la denominada cultura bera en general?

A qu concrecin cultural perteneceran los beros de Torreparedones?


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DIARIO DEL ALUMNADO.Reflexiones, sensaciones, valoraciones y compromisos.Apartado 2. Hallazgos significativos en el entorno del yacimiento arqueolgico

de Torreparedones.


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Apartado 3. Religiosidad iberromana.Santuario y exvotos


Apartado 3RELIGIOSIDAD IBERORROMANA.

SANTUARIO Y EXVOTOS

OBJETIVO ESPECFICO: Profundizar en aspectos de la religiosidad iberorromana como factor que explica la

existencia del santuario y los exvotos de Torreparedones.


01. El santuario iberromano de Torreparedones.

Localizacin geogrfica en el entorno del yacimiento. Edificios de culto.

Estructura arquitectnica.

La cella o espacio sagrado.

02. Los exvotos ibricos de Torreparedones.

Definicin.

Figuras asociadas al culto religioso. Exvotos antropomrficos y anatmicos.

Caractersticas y simbologa.

El agua curativa de la Fuente de la Romana.

Comentamos uno de los exvotos ms singulares.



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EL SANTUARIO BERORROMANO

En cuanto al santuario, localizado a extramuros, en el extremo sur, hay que decir que

se han excavado varias estructuras pertenecientes a dos edificios de culto diferenciados, delos cuales el mejor representado es el segundo en orden cronolgico:

> El primer templo, se podra datar en poca romana republicana.

> El segundo en poca altoimperial.

Este ltimo, consta de tres espacios, uno al norte, a modo de cella, que era la zona mssagrada, y delante, al sur un gran patio a cielo abierto en el cual quedan restos de algunosbancossobre los que se depositaran los exvotosy se realizaran determinadas ceremoniasreligiosas y ms al sur, un vestbuloal que se entrada a travs de una acusada rampa o, tal

vez, escalinata.

(Torreparedones. Santuario iberromano. Zona exterior reconstruida tras las excavaciones.)

Al fondo de la cella, en la pared norte estuvo adosada unacolumnaque no tuvo, al pare-cer, una funcin tectnica (de sustentacin), sin basa, levantada sobre un rea cuadrangularpavimentada y delimitada por unas lajas de piedra alineadasen posicin vertical.

Esta columna representaba la divinidad adorada en el templo que eraDea Caelestisy

que en este caso se represent de forma anicnica,en forma de betilo estiliforme.


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La actividad religiosocultual se desarroll entre el siglo II a.C. y mediados del siglo II

d.C., momento en el que, no sabemos con exactitud las causas, se produjo el abandono ydestruccin del edificio religioso.

Entre los hallazgos ms significativos cabe sealar numerosas piezas de cermica, dosaltares tallados en piedra caliza local y ms de300 exvotostambin realizados en piedracaliza extraida de las proximidades geogrficas.

Torreparedones. Santuario . Interior reconstruido.


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Reconstruccin de la columna sacra del santuario de Torreparedones(Segn CunlieFernndez, 1999)


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EXVOTOS DE TORREPAREDONES

Una primera aproximacin

Representan figuras antropomorfas (femeninas y tambin masculinas), partes delcuerpo (piernas) y tan slo un quido.

Son manifestaciones de una piedad y de unas creencias religiosas, cuya naturalezaest por descubrir, pero que se limitan a ser una exposicin del sentimiento hacia la divinidad,debiendo entenderse como ofrendas realizadas en accin de gracias por un favor recibidoque sola consistir en:

> La curacin de un miembro enfermo del cuerpo (piernas)

> La curacin de cualquier otra enfermedad,

>Invocar alumbramientos sin problemas para madre e hijo, por lo que es posible quela diosa se venerara bajo la advocacin de Juno Lucina, patrona de las parturientasromanas, cuya festividad tena lugar el da 1 de marzo.


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Los exvotos antropomorfos

Significado

Etimolgicamente, el trmino exvotosignifica:Ofrenda hecha a los seres sobrenaturales en cumplimiento de una promesa.

Hoy da se entiende como una ofrenda que se materializa en un objeto, y que para defi-nirse como tal debe reunir unos rasgos, que quizs tambin tuvo en la Antigedad: debe serpblico, dando a conocer el favor recibido por la accin benefactora del ser sobrenatural, porlo cual es siempre ofrecido para ser expuesto y conocido pblicamente junto a las imgenesbenefactoras, bien en sus altares, camarines, paredes de ermitas, etc.

Tiene siempre una intencin divulgadora de los poderes y eficacia de los seres

sobrenaturales, ya que los exvotos dan testimonio y perpetan la memoria del favorque ha sido otorgado.

Para comprender significado de los exvotos antropomorfos de Torreparedones hemosde considerar que el exvoto constituye en s uno de los aspectos que mejor definen la reli-giosidad popular, definida por una finalidad eminentemente pragmtica.

Uno de los componentes bsicos de la religiosidad popular es que tiende a satisfacer,sobre todo, ciertas necesidades primarias del hombre; si estas no encuentran una respuestasatisfactoria en la sociedad que le rodea, se acude a la religin, a la divinidad para solicitarsu ayuda.

En Torreparedones se han encontrados ms de 350 exvotos De una forma sumaria,

presentan, por lo comn, las siguientes caractersticas:


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Representan a figuras humanas, tanto masculinas, como femeninas, estas lti-maen mayor proporcin.

Pueden estar estantes o sedentes, vestidas o desnudas y portan diversos obje-tos, de entre los que sobresale el vaso, con el que presumiblemente realizaranlibaciones.

Son de pequeo tamao y estn tallados en piedras calizasareniscas localesmuy fciles de trabajar.

Destacan por su esquematismo y aspecto tosco, con rasgos faciales apenasinsinuados, aunque conviene recordar que tenan un valor ms simblico queartstico.

Las figuras sedentes deben representar, ms que personajes de alto rango socialo divinidades, a fieles aquejados de enfermedades en las piernas que estaran,por ello, sentados ante la divinidad en el momento mismo en que solicitaban

su curacin. Por su parte, los exvotos que representan a mujeres grvidas (embarazadas)

seran el reflejo de uno los favores ms frecuentemente solicitados: un partosin problemas.

Diferentes ejemplos de EXVOTOS (Torreparedones):


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Comentamos uno de los exvotos descubiertos en Torreparedones

Descripcin formal y significado de la obra

Tamao:Es de los de mayor tamao pues supera los 30 cm.

Iconografa:Se trata de una figura antropomorfa masculina en

actitud oferente y, aunque est completo, resulta difcildeterminar su posicin; es probable que el artista solo hayarepresentado la mitad superior de la figura correspondiendola parte inferior a una peana de unos 6 cm de grosor.

Somera descripcin: La cabeza est exenta, de forma redondeada, con los

rasgos faciales bien marcados: ojos almendrados, nariz alar-gada, boca pequea y orejas grandes.

Parece tener sobre la cabeza un gorro o caso ceido que

se marca mediante un ligero resalte en la frente que desciendea los lados dejando libres las orejas.

Slo se han representado las extremidades superiores,

pegadas al cuerpo, con el antebrazo izquierdo doblado enngulo obtuso, sujetando con la mano un cuenco o, tal vez, un

lucernario; por su parte, el antebrazo derecho se sobla formandoun ngulo recto portando en la mano un vaso caliciforme.

La parte posterior de la gura y la base son planas, lo que

permite pensar que estuvo adosado a la pared. Las 2 piezas que porta indican algunas de las actividades

que los fieles desarrollaban en este lugar de culto:

El Vaso CaliciformeEs propio de ambientes sagrados y se utilizaba para realizar libaciones.

El lucernario(lmpara de aceite)Pone de manifiesto que, adems de emplearse como ofrenda de la divinidad, algunasceremonias podran llevarse a cabo por la noche.

Fuente de Documentacin:JOSANTONIOMORENA, Baena Arqueolgica, n 9, noviembre 2010.


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Actividades

01. Elabora un planocon la estructura arquitectnica del Santuario de Torreparedones.

02. DefineQu es un betilo?


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06. Qu se entiende por exvotos anatmicos? Qu simbolismo tena en el sistema decreencias iberromano?

07. Razona y deduce. Por qu han aparecido muchos en Torreparadeones representando

piernas?

08. En tu prxima visita al Parque Arqueolgico de Torreparedones haz una fotografade laFuente de la Romana, ya restaurada. Explica el proceso tcnico seguido.


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09. Siguiendo los pasos que se recogen en el comentario de uno de los exvotos ( ver pginas

45 y 46 del Cuaderno) elabora un comentario sobre otro exvoto de inters localizado en elentorno de Torreparedones.

Dimensiones:

Iconogrfica:

Somera descripcin formal:

Simbologa (asociada a las prcticas religiosas)

Comentario personal


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12. TALLER de LECTURA.

EL BETILO Y EL RITONo hay consenso sobre el origen y significado del trmino betilo. As, para algunos

investigadores ste tiene un origen preindoeuropeo o presemtico. Para la mayora de losautores se trata de una palabra griega queprocede del rea semtica donde los betilos seconocerancomo BeitEl,es decir, la morada del dios. Tambin se ha interpretado comoorigen del trmino, la palabra griega (cabra o piel de cabra), en referencia a la piedraenvuelta en piel de cabra que Cronos trag en sustitucin de Zeus, piedra que fuera vene-rada y por extensin aadi significado a todas las piedras sagradas.

Se puede decir en este sentido que el betilo representa una imagen cultural ptreaanicnica de la divinidad. No se trata necesariamente de una concepcin primitiva o simplesino distinta, que coexisti en ocasiones con formas antropomrficas de representacin dela divinidad. El betilo de Torreparedones constitua en este sentido una no representacin

antropomrfica de la divinidad, considerada como no necesaria.Estamos pues ante una piedra (natural o tallada) habitada por la divinidad, presentando

forma cuadrangular o cnica, as como forma flica en ocasiones. El betilo de Torreparedoneses un pilar columna con las connotaciones de Axis Mundi y Universalis Columna.

Se trata de una columna csmica o pilar de la casa, ligado en ocasiones a deidades decarcter funerario o tambin a la idea de fertilidad y renovacin. Todos los betilos tienen lafuncin propia de una estatua de culto y en tal sentido se la unge, viste, invoca, baa o sepresentan ante ella ofrendas y sacrificios. Se localizaban por igual tanto fuera como dentrodel templo, presentando en el caso de Torreparedones una tipologa morfolgica similar ala de las columnas betlicas del frica pnica si bien en stas la columna era de fuste aca-nalado, con basa y capitel jnico, mientras que aqu el fuste es liso. Tambin se diferencia

de los betilos griegos de tipo cnico, siendo un betilo con capitel vegetal ms cercano a losde tipo corintio que a los ibricos de tipologa vegetal. En todo caso se acerca al smbolo debetilo rbol o betilo eje, reforzado con el uso del cordn sogueado tambin presente en losbetilos neopnicos. Este cordn se representara a imagen y semejanza de los verdaderoscordones con los que a modo de bandas se vestira habitualmente el betilo. Conforme a sutipologa el betilo sagrado de Torreparedones no debi sersacado en procesin.

La relacin del santuario ibrico de Torreparedones con la existencia de un manantialen el mismo enclave, es sustancial para la explicacin del mismo. El agua siempre estuvopresente en la tradicin de los templos semitas, de donde podra surgir tambin la relacinentre la fuente sagrada con el betilorbol. El ritual junto al betilo estaba acompaado

generalmente por la ceremonia de libacin, de ah la disposicin de una serie de lajas

de piedra alrededor de la columna. Este detalle sirve para recrear una imagen de rbolpetrificado, a manera de alcorque en torno al betilorbol. Parece claro pues que el ritualen torno al betilo de Torreparedones daba una funcin principal a la presencia del agua, ala que posiblemente se sumaran ofrendas de otro tipo a la vez que el propio betilo seravestido y desvestido siguiendo diferentes pautas temporales.

Los rasgos rituales de la cultura pnica se entremezclan con aquellos propios de laveneracin betlica del mundo mediterrneo antiguo, dirigido todo ello en Torreparedonesa una funcin oracular ms que probable.

ANTONIOZAFRAy JOSANTONIOMORENA, Parque arqueolgico de Torreparedones. Un Tesoro pordescubrir, Ayuntamiento de Baena (Crdoba), 2012.


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Apartado 4. Aspectos de la arquitecturaiberromana en Torreparedones


Apartado 4ASPECTOS RELEVANTES DE LA

ARQUITECTURA IBERROMANO ENTORREPAREDONES

OBJETIVO ESPECFICO: Posibilitar un acercamiento sucinto a elementos de inters arquitectnicos que verte-

bran la realidad urbanstica de Torreparedones, destacando el FORO, como aspectos es-pecialmente relevante.


La puerta Oriental.

Las Torres

El paso de entrada.

El foro.

La inscripcin en el pavimento del foro.

Curiosidades en la planificacin urbanstica romana.El Macellum.

Las Termas.



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La obra que hubo de realizarse fue de tal envergadura que debieron de extraerse to-neladas de piedra y tierra previamente para, con posterioridad, incrustar las dos torresy el correspondiente paso de entrada entre ambas.

Se tienen evidencias de que la muralla antigua fue seccionada y rehecha con

posterioridad.

LAS TORRES

Ambas torres se edificaron con un sistema de aparejo poligonal de gran porte, denomi-nados muros ciclpeos, con bloques someramente escuadrados, asentados en seco, y conripios y lajas de piedra para asegurar su encaje y solidez constructiva.

En su interior se dispone un muro en forma de cruzque conforma cuatro espacios rec-tangulares que estaban rellenos de tierra y de cascotes.

Vista area de las torres de acceso a la ciudad.

El hallazgo de sendas quicialerasen la zona ms externa de las torres indica que lapuerta exterior estaba compuesta por dos hojas de madera de 1.5 m. de anchura cada una,por lo que se puede suponer una altura de unos 4 metros; al interior, a unos 14 metros, sedocument la presencia de una contrapuerta, tambin de dos hojas de madera, con sus

correspondientes quicialeras.


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LAS TERMAS

En el sector comprendido entre el decumano maximo y el limite Sur del foro se localizan

unas pequeas termas.

Aun no se han excavado al completo, pero se puede concluir que el acceso se realizabadesde el decumano a travs de unos escalones desde los que se acceda a un vestbulo.

Las termas romanas eran baos pblicos con estancias reservadas para actividades gim-nsticas y ldicas. Tambin eran considerados lugares de reunin y a ellos acuda la gente queno poda permitirse tener uno en su casa, como los plebeyos o los esclavos.

El uso de estas construcciones se generaliz en el mundo romano a partir del siglo I a.C., cuando se descubri un sistema que permita calentar y distribuir el aire caliente gracias

al ingeniero Cayo Sergio Orata.

En Torreparedones se han identificado los siguientes espacios: vestbulo, apodyterium(vestuario), frigidarium (ala destinada a los baos de agua fra), tepidarium (habitacinde temperatura tibia que preparaba al baista para la de agua caliente), caldariumcon sucorrespondiente hypocaustumy el horno. Los pavimentos de las distintas estancias son deopus spicatum, opus signinum y opus tessellatum, este ultimo muy perdido. El interior delas estancias y las piscinas de agua caliente se realizaba mediante el sistema de hypocaus-tum, basado en la distribucin mediante tneles y tubos de agua caliente y vapor que seextenda por debajo de los suelos de las estancias y piscinas y era alimentado por una seriede hornos.

(Torreparedones. Vistal parcial de las Termas.)


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07. El cartel que se encuentra en la pgina 72 incluye una imagen que recrea, de forma ideali-zada, el foro antiguo de Torreparedones, en su poca de esplendor.

Qu te sugiereesta imagen en la actualidad? Observas algn anacronismo?

08. Epigrafa en la pavimentacin del foro.

Escribe la traduccin al castellano de la inscripcin latina.

09. Lee y elabora un comentariosobre el texo que se incorpora en la pgina 45, en relacincon el foro de Torreparedones.


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10. Qu era el Gnomon?

11. Cuando empleamos el conceptomacellumA qu nos estamos refiriendo en una ciudad romana?

Qu indicaba?

12. Las termas.

Denicin:

Espacios diferenciados:

Signicacin social:


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DIARIO DEL ALUMNADO.Reflexiones, sensaciones, valoraciones y compromisos.Apartado 4. Aspectos relevantes de la arquitectura iberorromana de

Torreparedones.


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Apartado 5. Esculturasde Torreparedones



Esta pieza se hall de forma casual en el ao 1833 y se conserva actualmente enel Museo Arqueolgico y Etnolgico de Crdoba.

Ya a comienzos del siglo . XX, Francisco Valverde y Perales la consideraba comohispanorromana, comparndola muy acertadamente con las esculturas halladas en elsantuario ibrico del Cerro de los Santos(Montealegre del Castillo, Albacete):

Mide 1,20 metros de altura, y es comprable, por los pliegues de su traje ydisposicin de las manos, a las descubiertas en el Cerro de los Santos, aunquede menos sabor egipcio chipriota....

Por cierto, se dice que se extrajo de los escombros de un templo en el sitio quellaman la iglesia, prximo a la torre de las Virgenes.

Es muy probable que esa referencia aluda al propio santuario existente en el yaci-miento.

Se trata de una dama sin cabeza (acfala) que viste tnica lisa y un velo.

Tiene los brazos exionados a la altura de la cintura, coge el velo con las manos,

los puos cerrados y afrontados se apoyan en el vientre.

La actitud de esta escultura no difiere, como ya se ha apuntado, de algunas de laspiezas encontradas en el Cerro de los Santoso de los exvotos de El Cigarralejoy, porsupuesto, de los propios exvotos del santuario de Torreparedones.

Esta escultura, aunque conserva la tradicin ibrica en la posicin, actitud eindumentaria, su tamao y estilo la diferencian de los primeros talleres y la sitan enpoca posteriores.

El movimiento de la figura, con una inclinacin del cuerpo y el modelado quepermite apreciar la anatoma femenina bajo la vestimenta, junto con la realizacin del

velo marcando su transparencia y el plegado no excesivamente rgido, conducen a unapoca ms tarda, inspirada en las corrientes helensticoromanas,

Cronolgicamente, la podemos situar a finales del siglo II a.C. o comienzos del sigloI a.C, en pleno perodo denominado iberorromano.


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Estatua acfalatallada en mrmol blanco que fue hallada durante las excavacionesrealizadas en Torreparedones en la zona del foro durante 2010.

La pieza ha perdido adems las piernas hasta la parte superior de la rodilla, el brazoizquierdo y el antebrazo derecho. Se conserva parte de la pierna izquierda.

Representa a un personaje masculino con el paludamentum sobre su hombroizquierdo que se recoga en su extremo por el desaparecido antebrazo.

Porta la coraza que se decora en su parte superior con la cabeza de Medusa y enla parte central con un motivo axial, como es normal en este tipo de elementos: dosVictorias enfrentadas con un thymiaterionen el centro, bajo el cual hay una figura fe-

menina, tendida sobre el manto y cubierta por ste en la mitad inferior de su cuerpo.

Las Victorias tocan el thymiaterioncon una mano, y con la otra sostienen una espaday lo que parece ser un yelmo.

La simetra no se consigue porque a la izquierda del grupo aparece una pequeafigura alada que porta un vexiliumen la mano derecha y un escudo en la izquierda.Por debajo de la coraza, dos filas depterygescon motivos tpicos de estos elementos:palmetas, medusas, cabezas de felinos y escudos cruzados. Por debajo, una sola bandade launas que terminan con el extremo inferior de la tnica ocolobiumque viste elpersonaje bajo la coraza.

Bajo el brazo izquierdo de la figura y a la altura de las launas, un taco marmreoindicara la presencia de la espada. De la pierna izquierda se conserva el pie calzado conuna bota de piel abierta por delante como sandalia y atada en la parte frontal. Estarahecha de cuero rojo y forrada con la piel de cachorros de len, de los que la cabeza ylas piernas se usan como lengetas que sobresalen en el borde superior. La bota sesujeta a la pantorrilla mediante aros metlicos abiertos, cuyos bordes podran atarsecon una cuerda.

El personaje est en una posicin de ad locutiobien conocida en este tipo de piezas,con el brazo derecho levantado arengando a los soldados, y apoyado sobre la pierna

izquierda, quedando la derecha semiexionada. Esculturas similares las encontramosen Montoro, otra de la coleccin Loring en Mlaga e Itlica. Llama la atencin que elelemento ornamental central de nuestra pieza cuenta con una gran representacin en elperiodo que va del nal de la dinasta avia hasta, incluido, el principado de Trajano.

Estas esculturas con coraza que representaron al emperador en su papel decomandante supremo de las legiones ejercieron, junto a las estatuas togadas ya las de carcter ideal, un importante papel en el mbito de la propaganda delpoder imperial desde poca de Augusto.

La pieza se puede fechar en la segunda mitad del siglo I d.C.


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Escultura tallada en mrmol blanco que representa a un personaje masculino,(probablemente Tiberio) portando la toga, smbolo del statusciudadano. Se encontren la zona del foro de Torreparedones durante la excavacin arqueolgica de 2009.

Le falta la cabeza, los brazos y parte de los pies.

La pieza se sostiene en el pie izquierdo, estando el derecho exionado y apoyado

Documents

Cuaderno Torreparedones