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EN LOS CUENTOS TRADICIONALES
PUEDE SUCEDER DE TODO, DESDE NABOS
QUE CRECEN MÁS DE LO COMÚN
HASTA ORUGAS QUE ATEMORIZAN
A LOBOS Y ELEFANTES.
MIS LIBROS DE PRIMERO
EL NABO GIGANTECUENTO POPULAR RUSO
EL TERRIBLE GUERREROCUENTO POPULAR AFRICANO
9 789504 659778
978-950-46-5977-8
SANTILLANA y los autoresceden los derechos de la reproducción parcial
de la obra en el marco dela cuarentena por el Coronavirus.
EL NABO GIGANTE - EL TERRIBLE GUERRERO se entrega gratuitamente con El libro de 1.° Lengua. Prácticas del lenguaje y no puede venderse por separado.
ESTE LIBRO PERTENECE A
ILUSTRACIONES DE RODRIGO FOLGUEIRA
1
Érase una vez un abuelo que plantó un nabo chiquito y le dijo:
¡CRECE, CRECE, NABITO! ¡CRECE DULCE!
¡CRECE, CRECE, NABITO!¡CRECE FUERTE!
EL NABO GIGANTECUENTO POPULAR RUSO
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2
Y el nabo creció fuerte y dulce, y llegó a ser enorme.
¡ENORME!
¡ENORME!
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3
Un día, el abuelo fue a sacarlo. Tiró y siguió tirando, pero no pudo arrancarlo.
Entonces, llamó a la abuela.
La abuela tiró del abuelo. El abuelo tiró del nabo. Y tiraron una y otra vez, pero no pudieron arrancarlo.
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4
La abuela llamó a la nieta.
La nieta tiró de la abuela. La abuela tiró del abuelo. El abuelo tiró del nabo. Y tiraron de nuevo una y otra vez, pero no pudieron arrancarlo.
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5
Los perros negros tiraron de la nieta. La nieta tiró de la abuela. La abuela tiró del abuelo.El abuelo tiró del nabo. Tiraron una y otra vez, pero no pudieron arrancarlo.
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6
Los perros negros llamaron a los gatos blancos.
Los gatos blancos tiraron de los perros negros. Los perros negros tiraron de la nieta. La nieta tiró de la abuela. La abuela tiró del abuelo. El abuelo tiró del nabo. Tiraron y tiraron una y otra vez, pero tampoco pudieron arrancarlo.
Los gatos blancos llamaron a la rata gris.
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7
La rata gris tiró de los gatos blancos. Los gatos blancos tiraron de los perros negros. Los perros negros tiraron de la nieta. La nieta tiró de la abuela. La abuela tiró del abuelo. El abuelo tiró del nabo.
Los perros negros llamaron a los gatos blancos.
Los gatos blancos tiraron de los perros negros. Los perros negros tiraron de la nieta. La nieta tiró de la abuela. La abuela tiró del abuelo. El abuelo tiró del nabo. Tiraron y tiraron una y otra vez, pero tampoco pudieron arrancarlo.
Los gatos blancos llamaron a la rata gris.
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8
Tiraron y tiraron y tiraron con todas sus fuerzas hasta que por fin…
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9
¡ARRANCARON EL NABO!
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10
Pero…
¡PÚMBATE!
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11
El abuelo cayó sobre la falda de la abuela.La abuela cayó sobre la nieta.La nieta cayó sobre los perros negros.Los perros negros cayeron sobre los gatos blancos.Los gatos blancos cayeron sobre la rata gris.Y sobre todos ellos cayó…
¡EL NABO!
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12
Pero no se asusten: ninguno se lastimó.
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13
¡Y QUÉ MARAVILLA ERA AQUEL NABO!
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14
Más tarde, hicieron con él una rica sopa y hubo suficiente…
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15
para el abuelo,para la abuela,para la nieta,para los perros negros,para los gatos blancos,para la rata gris…
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Y aun sobró un poquito de sopa para la persona que les contó el cuento.
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17
Una mañana, la liebre salió temprano de su cueva en busca de unos pastitos tiernos
para el desayuno. Aprovechando la ausencia de la liebre, una
pequeña oruga entró en su cueva.
EL TERRIBLE GUERREROCUENTO POPULAR AFRICANO
La o
ruga fue dejando en el suelo
una huella brillante
hast
a que se acomodó en una es
quinita oscura y tibia,
y allí
se quedó.
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Cuando la liebre regresó, descubrió la huella brillante que iba desde el camino hasta la puerta de su casa y tuvo miedo.
–¿QUIÉN ESTÁ EN MI CUEVITA?
Preguntó la liebre.
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19
La oruga, desde el rincón de la cueva, respondió con voz atronadora:
–¡SOY UN TERRIBLE GUERRERO! ¡MI PADRE ES EL JEFE DE TODOS LOS GUERREROS! ¡PUEDO VENCER AL LOBO Y PATEARAL ELEFANTE!
La liebre salió corriendo, temblando de terror.
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Por casualidad, la liebre se encontró con el lobo y le dijo:
–¡AMIGO LOBO, AYUDAME A VENCER AL TERRIBLE GUERRERO QUE SE INSTALÓ EN MI CUEVA!
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21
El lobo acompañó a la liebre.
Él también observó en el suelo la huella brillante
que iba desde el camino hasta la puerta de la cueva.
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22
Entonces, el lobo preguntó:
–¿QUIÉN ESTÁ EN LA CUEVITA DE LA LIEBRE?
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La oruga, desde el rincón de la cueva, respondió con una voz atronadora:
–¡SOY UN TERRIBLE GUERRERO! ¡MI PADRE ES EL JEFE DE TODOS LOS GUERREROS! ¡PUEDO VENCER AL LOBO Y PATEAR AL ELEFANTE!
El lobo escuchó la respuesta de la oruga y huyó.
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La liebre corrió entonces a pedir ayuda al elefante, que se enojó mucho al saber que un terrible guerrero decía que podía patearlo fácilmente.
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25
El elefante acompañó a la liebre.
Él también observó en el suelo la huella brillante que iba
desd
e el camino hasta la puerta de la cueva de la liebre.
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Con su voz más potente, preguntó el elefante:
–¿QUIÉN ESTÁ EN LA CUEVITA DE LA LIEBRE?
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La oruga, desde el rincón de la madriguera, respondió con una voz atronadora:
–¡SOY UN TERRIBLE GUERRERO! ¡MI PADRE ES EL JEFE DE TODOS LOS GUERREROS! ¡PUEDO VENCER AL LOBO Y PATEAR AL ELEFANTE!
El elefante escuchó la respuesta de la oruga y huyó.
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Una rana pasó por allí. La liebre le dijo:
–¡POBRE DE MÍ! SI ESTOS ANIMALES GRANDOTES NO SE ATREVEN A LUCHAR CON EL TERRIBLE GUERRERO, ¿CÓMO PODRÉ SACARLO DE MI CUEVA?
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La rana decidió acompañar a la liebre para ver de cerca al terrible guerrero que asustaba a los animales más fuertes del lugar.
Ella ta
mbién observó en el suelo la huella brillante que iba
desd
e el camino hasta la puerta de la cueva de la liebre.
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La rana preguntó con su voz más potente:
–¿QUIÉN ESTÁ EN LA CUEVA DE MI AMIGA, LA LIEBRE?
La oruga, desde el rincón de la cueva, respondió con una voz atronadora:
–¡SOY UN TERRIBLE GUERRERO! ¡MI PADRE ES…!
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La rana no dejó que la oruga terminara de hablar y exclamó:
–¡SÍ, YA SÉ QUE PUEDES VENCER AL LOBO Y PATEAR AL ELEFANTE! PERO TENDRÉ QUE VERTE. LOS VALIENTES SE HABLAN FRENTE A FRENTE. ¡SAL DE ALLÍ!
La rana avanzó saltando hacia la entrada de la cueva.
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Cuando la oruga la vio, se arrastró hacia afuera y dijo temblando de miedo:
–NO TE ENOJES, RANITA, POR FAVOR. SOY UNA POBRE ORUGA PEQUEÑITA.
La rana decidió perdonar la broma de la oruga.
El lobo y el elefante tuvieron vergüenza por ser tan grandes y tan miedosos.
Y la liebre volvió feliz a su cueva.
La oruga se alejó de la cueva dejando en el suelo
una huella brillante com
o dejan todas las orugas.
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EL NABO GIGANTE - EL TERRIBLE GUERRERO se entrega gratuitamente con El libro de 1.° Lengua. Prácticas del lenguaje y no puede venderse por separado.
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