18

De La Alquimia a Lavoasier

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: De La Alquimia a Lavoasier
Page 2: De La Alquimia a Lavoasier

“Mi intención es contar cómo los cuerpos revisten formas diferentes;

los dioses, autores de estos cambios, me ayudarán, o así lo espero,

con un poema que viene desde los orígenes del mundo hasta nuestros

días”.

Metamorfosis de Ovidio

Page 3: De La Alquimia a Lavoasier

CONTENIDO

INTRODUCCIÓN………………………………………………………………….. 4

1. LA ALQUIMIA EL ARTE DE TRANSMUTAR LOS METALES…………..

2. DE LA ALQUIMIA A LA QUÍMICA…………………………………………..

3. LAVOISIER Y EL SIGLO DE LAS LUCES DE LA QUÍMICA……………

4. DEL AIRE AL OXIGENO…………………………………………………….

5. EL OXIGENO DE LAVOISIER……………………………………………….

6. LA UNIVERSALIDAD DE UN METODO…………………………………….

BIBLIOGRAFIA.

COCLUSIONES

Page 4: De La Alquimia a Lavoasier

INTRODUCCIÓN

Por más de 1500 años en los grandes

centros urbanos de la antigüedad como

Alejandría y Bagdad, estuvo concentrado

todo el conocimiento y los cimientos de

las futuras artes y la ciencia, uno de los

aspectos que más intereso al hombre

antiguo, hace referencia al arte de mol-

dear los metales tan escasos en los pri-

meros tiempos y por ende tan valorados.

Es aquí y en estos lugares donde debe-

mos ahondar y escudriñar para encontrar los orígenes de lo que hoy conocemos

como química, su recorrido no ha sido menos doloroso que la de otras ciencias,

desde los alquimistas babilonios y caldeos, pasando por el antiguo Egipto y hasta

le edad media , la química ha trasegado caminos de aciertos y desaciertos. La

alquimia fue en sus orígenes una mezcla de lo sacro y lo profano, mitológico y

sacerdotal en Egipto y Asiria, pero filosófico en Grecia y en las antiguas escuelas

de Alejandría, alquimia, magia, astrología y matemática, mezcladas, confundidas y

cultivadas, por sabios y charlatanes; perseguida en unas épocas y aceptada en

otras, la alquimia es la base de la química moderna que vio con Lavoisier su ma-

yor esplendor.

Lavoisier fue el modelo a seguir, el fundamento e inicio de una nueva ciencia,

apoyado en el concepto de elemento, cambio el rumbo de la historia, fundamen-

tando además la universalización de la nomenclatura y demostrando lo inadecua-

do del flogisto como sustancia fundamental de los cuerpos. No obstante no vivió

demasiado para ver su creación, ni la revolución Francesa perdono al asentista, ni

el desconocido médico Jean Paul Marat, perdono la negativa a ser aceptado en la

Real Academia de la Ciencia, por Lavoisier, pero sea cual sea la causa; lo cierto

del caso es que nuestro genio murió un día cualquiera de mayo, en la guillotina,

cuando solo cumplía 51 años. Nos queda su legado y la convicción de su gran

aporte a las ciencias.

Page 5: De La Alquimia a Lavoasier

LA ALQUIMIA EL ARTE DE TRANSMUTAR LOS METALES

La alquimia precede la química

como la geometría al algebra y

tenía esta por objeto el estudio de

las sustancias que la componen y

la manipulación de estas, a tal

punto que se pudieran crear sus-

tancias nuevas , las historias ur-

banas cuentan de innumerables

alquimistas que lucharon durante

años para transformar en oro y en

plata los metales comunes y su

interés en perpetuar la existencia

humana, No obstante nos dice

Simón José Auals que “ en su

comienzo la alquimia , la magia y

la astrología anduvieron mezcla-

das, confundidas y cultivadas por

los mismos hombres , formando un solo cuerpo doctrinal con los conocimientos de

Medicina , de las virtudes de las plantas y aun de las matemáticas” Alquimia y química

pg. 7, pero esta unión solo era temporal y cada una tomo un rumbo diferente.

Pero concentrémonos en la alquimia o arte de transmutar los metales, su origen

cronológico no está muy claro, algunos autores hablan de que ya en el año 300

d.c en el antiguo Egipto, el alquimista Zósimo de panópolis practicaba este arte y

a él se le atribuyen algunos escritos de los cuales traeremos un aparte con el que

inicia uno de sus libros “Aquí se establece el libro de la Verdad. Zósimo te saluda

¡oh Theosebeia! Todo el reino de Egipto, señora, depende de estas dos artes, la

de las cosas estacionales y la de los minerales. En lo que se refiere a aquella

que llaman arte divina, sea por aspecto filosófico o dogmático o por sus fenóme-

nos en general , fue dada a los que eran maestros en ella para que la custodiaran

, y no sólo esta arte , sino también aquellas que son llamadas las cuatro artes

liberales y los procedimientos técnicos , porque su capacidad creadora es propie-

Page 6: De La Alquimia a Lavoasier

dad de los reyes” y continua en otro aparte “ De la misma manera, bajo los reyes

Egipcios , los trabajadores de las operaciones químicas y aquellos que conocen

el procedimiento, no trabajan por su cuenta, sino que servían a los reyes Egipcios

, trabajando para llenar las arcas de sus tesoros” . No obstante otras fuentes

creen que la alquimia nace en algún lugar antiguo de habla griega como Alejandría

en el año 300 a.c, pero que ve su ocaso para el año 200 d.c en esta misma región,

de esta época encontramos el manuscrito más antiguo que data del año 100 d.c;

otros autores como Campbell Thompson, creen haber encontrado en una tablilla

asiria (siglo VII a.c) inscripciones que hacen referencia a la manipulación de la pla-

ta y la manufacturación de la misma. El hecho es que la alquimia fue en sus

inicios más una ciencia ocultista que cualquier otra cosa – F. SHERWOOD TAYLOR -

fondo de cultura económica. MEXICO - 1977.

Regresando a los alquimistas Egipcios, estos conocían ocho productos minera-

les alrededor de los cuales clasificaban cualquier tipo de sustancia, estos eran, el

oro, la aleación de plata y oro, la plata , mineral azul, mineral verde , bronce o

cobre , el hierro , el plomo; el estaño y el mercurio; no eran conocidos aun por

ellos, este último de suma importancia para los alquimistas futuros, con este saber

los Egipcios lograron la preparación de productos como la sosa, las sales amonia-

cales , el jabón, pastas cerámicas y colores, medicamentos y venenos, pero fue-

ron los alquimistas babilonios los que establecieron por vez primera una relación

entre los metales y los planetas , el sol produce el oro, la luna, la plata , Saturno el

plomo , Marte el hierro , Venus el cobre y Hércules el estaño, también encontra-

mos trabajos valiosos de los caldeos, Ostemés por ejemplo habla del agua que

cura todas las enfermedades , esto deja entrever que aun en el campo de la medi-

cina la alquimia incursiono. Otros pueblos no menos importantes como la antigua

china también desarrollaron la alquimia, atribuyéndose a Ko- Hong que vivió en la

dinastía de los U ( 222-227 d.c) el inicio de trabajos sobre la alquimia , también se

le atribuyen a la secta Tao y seguidores de Lao – Tsé el inicio de este arte, sea

cual sea el que haya iniciado esta práctica, lo cierto del caso es que en China por

esta época se inicia el trabajo tendiente a la transformación del estaño en plata y

la plata en oro, además de la preparación del salitre , el alumbre, la porcelana , el

cristal e incluso la pólvora.

Page 7: De La Alquimia a Lavoasier

Pero regresando a Egipto el mismo Zósimo describe haber revisado un viejo

horno en el templo de Menfis, cuenta además el uso de colorear el oro con barni-

ces y líquidos corrosivos, artes que posteriormente aplicarían los alquimistas de la

edad media, son conocidos también los papiros de Leyden y de Estocolmo, escri-

tos hacia finales del siglo III d.c, donde encontramos infinidad de fórmulas para

falsificar más que para preparar oro, plata, el asemos(Metal blanco parecido a la

plata), piedras preciosas y colorantes.

para aumentar el peso del oro por ejemplo se fundía este con una cuarta parte

de cadmia(Mezcla impura de óxidos de metales comunes, cobre, zinc, arsénico,

etc. obtenida en las paredes de las chimeneas en las fundiciones de cobre), resul-

tando este más pesado y duro , pero había otras formas de producir oro, por

ejemplo mediante el tratamiento de la superficie, lo cual se hace a través del ca-

lentamiento al rojo de objetos a base de oro con sulfato de hierro, alumbre y sal, lo

cual desprende ácidos sulfúrico y clorhídrico, que separan los metales comunes

del oro de la superficie, dejando una capa delgada de oro puro, que luego es puli-

da y presentada como oro puro. Y aún más los papiros presentan una fórmula

para convertir objetos de cobre en oro, de tal suerte que ni frotándolos contra las

piedras se descubra su falsedad, así escribieron; se tritura oro y plomo hasta que-

dar en polvo fino, dos partes de plomo por una de oro, mézclese goma y y cúbrase

el objeto con esta mezcla y caliéntese, repitiéndose este proceso hasta que el ob-

jeto tome el color dorado, finalmente el calor explican consume el plomo y no el

oro.

El alquimista no obstante tenía una gran diferencia con el químico moderno, ya

que mientras el uno buscaba reinterpretar los escritos antiguos, el segundo prefe-

ría innovar a través de nuevos métodos y descubrimientos; en la alquimia se pro-

curo aplicar el principio más simple, cual intentar introducir propiedades que los

metales comunes no tenían, así por ejemplo pensaban que se podía sacar el color

blanco de la plata y amarillo del oro en introducirlos en otros metales, pues para

ellos el color era un “pneuma” o “espíritu” como el que poseían las plantas. De to-

das formas de las actividades llevadas a cabo por los alquimistas la más eficiente

fue el doblado de oro, proceso al que los alquimistas griegos llamaron diplosis, es

decir una duplicación del peso, en virtud de una aleación del oro con plata y cobre,

Page 8: De La Alquimia a Lavoasier

ya que la primera da un color verdoso y la segunda uno rojizo, lo que difícilmente

permite un cambio del color en dicho metal. ¿Pero qué técnicas o equipos usaban

los alquimistas para desarrollar sus técnicas y poder colorear superficialmente los

metales para que pareciesen oro? Pues bien fueron estos quienes crearon y usa-

ron por vez primera los destiladores o alambiques, dicho aparato fue probable-

mente inventado por los alquimistas griegos, la primera descripción que se tiene

de este, aparece referido en los escritos de Zósimo quien atribuye su construcción

a la llamada María la Judía y en cuyas líneas encontramos “ He de describiros el

tribikos. Porque así se llama el aparato hecho de cobre y descrito por María, la

transmisora del Arte. Dice lo que sigue: Háganse tres tubos de cobre dúctil un po-

co más gruesos que los de una sartén de cobre de pastelero; su longitud ha de ser

aproximadamente de un codo y medio. Háganse tres tubos así y también un tubo

ancho del ancho de una mano y con una abertura proporcionada a la de la cabeza

del alambique. Los tres tubos han de tener sus aberturas adaptadas en forma de

uña al cuello de un recipiente ligero, para que tengan el tubo-pulgar, y los dos tu-

bos dedo unidos lateralmente en cada mano. Hacia el fondo de la cabeza del

alambique hay tres orificios ajustados a los tubos, y cuando se hayan encajado

éstos se sueltan en su lugar, recibiendo el vapor el superior de una manera dife-

rente. Entonces, colocando la cabeza del alambique sobre la olla de barro que

contiene el azufre y tapando las juntas con pasta de harina, colóquense frascos de

cristal al final de los tubos, anchos y fuertes para que no se rompan con el calor

que viene del agua del medio.

Page 9: De La Alquimia a Lavoasier

Lo cierto del caso es que parte de la alquimia se convertiría en parte de la quími-

ca, si bien entre ambas existe un gran abismo, también sabemos que ambas fue-

ron alimentadas por un cordón umbilical común, la curiosidad. Desde los propósi-

tos hasta los métodos hay diferencias tangibles en ambas, pues en la primera los

alquimistas buscan la perfección de todas las cosas, en tanto que en la segunda,

es la adquisición del conocimiento y su uso para diferentes fines lo que la estimu-

la, en cuanto al método, la alquimia se limita al estudio de los textos antiguos en

los que se encuentra la verdad y las leyes generales que rigen el comportamiento

de los cambios, lo que solo se lograba a través de los experimentos aleatorios que

se limitaban a encontrar las condiciones y resultados expuestos en los textos, en

cuanto a la química su método es una descripción cuidadosa de los cambios en la

materia, cuyo fin último es descubrir leyes generales que permitan ser demostra-

das y aplicadas en todos los contextos . ¿Pero entonces que hay en común en

ambas ciencias? Los alquimistas fueron los únicos laboratoristas hasta finales del

siglo XVI, disgregados en diferentes puntos del planeta como Europa, medio orien-

te, china y áfrica; desarrollaron técnicas para separar y combinar la materia. Los

equipos usados prácticamente no tuvieron cambios en los laboratorios de química

hasta mediados del siglo XVIII, cuando se inicia la técnica para la captación y el

estudio de los gases.

Page 10: De La Alquimia a Lavoasier

DE LA ALQUIMIA A LA QUÍMICA

Fue Teofrasto Paracelso (1493- 1541)

quien propone las primeras ideas primitivas

de lo que luego se llamaría química , al

ampliar el significado de la alquimia y defi-

nirla como el arte de separar lo puro de lo

impuro, ampliando su uso a un variado

número de personas como médicos, pana-

deros, fundidores de metales, cocineros y

otros, luego se pasa por uno de los prime-

ros atomistas que vivió en el siglo XVI,

Giordano Bruno ( 1548-1600), el cual escri-

bió en su libro sobre los principios , ele-

mentos y causas de las cosas en 1590, “

los compuestos se forman por mezcla de

los cuerpos, pero están compuestos de

átomos” . Luego fue Robert Boyle quien

intento construir una teoría de la materia

que fuera útil para la ciencia y cuya hipótesis fundamentalmente era una teoría

atómica, hipótesis esta argumentada en sus obras “Sceptical Chymist” 1661 y en

el “Origin of Forms and Qualities” 1667 y en la cual expresa que el mundo de la

materia está formado por racimos de átomos en movimiento y que los diferentes

cambios en la naturaleza se dan por los continuos choques de una partícula con

otra. Igualmente Boyle junto a Van Helmont, Joseph Priestley, Henry Cavendish

y Joseph Black, quienes iniciaron el camino que daría al traste con la empírica al-

quimia y con la teoría del flogisto creada por los químicos Alemanes Johann Joac-

chim Becher y Georg Ernst Stahl y que domino el pensamiento occidental durante

un siglo, y la cual planteaba que cuando arden los objetos, el flogisto se escapa

de estos con movimientos de rotación y cuando se recupera por educción, el flo-

gisto regresa a dicho objeto; expone además dicha teoría que algunos cuerpos

como el carbón o el azufre contienen mas flogisto que otros, y pueden cederlo a

otros que lo han perdido.

Page 11: De La Alquimia a Lavoasier

Pero para lograr demostrar la inefectividad de dicha teoría tendremos que retro-

ceder en el tiempo hasta el año de 1630 cuando Van Helmont quién crea la pala-

bra gas, para referirse por lo menos a dos gases, el silvestre (dióxido de carbono)

y gas pingüe (Hidrógeno impuro o gas de los pantanos),expresa la imposibilidad

de recogerlos y contenerlos en un recipiente, pero fue Robert Boyle, quien de-

mostró lo contrario al recoger por vez primera un gas y descubrir su poder infla-

mable, era el hidrógeno, también descubre Boyle en el año de 1662 la ley que

lleva su nombre y que establece que el volumen de un gas dado a temperatura

constante es inversamente proporcional a la presión. Posteriormente Joseph

Priestley diseño muchos de los equipos usados hasta ahora en el manejo de los

gases, con los cuales recogió gases sobre el agua, y demostrando que las sustan-

cias solubles en agua podían ser recogidas sobre el mercurio. En esta larga fila de

hombres de ciencia encontramos también a Joseph Black quien trabajo con álca-

lis, demostrando que estos desprenden gas y por lo tanto esta era la causa de la

pérdida de peso, pero añade “Del mismo modo con el que las tierras calcáreas y

los álcalis atraen fuertemente a los ácidos y pueden saturarse con ellos, también

atraen al aire fijo y en su estado natural se saturan con él”. historia de la química –

Jr.PARTITINGTON 1945- pg109 , las experiencias de Black fueron ratificadas por Henry

Cavendish en su primera publicación referente a los temas de química y la cual

titulaba On Factitious Air (1766) , en su obra Cavendish da el nombre de aire ficti-

cio a cualquier aire contenido en un cuerpo cualquiera y que se puede liberar de

forma controlada a través de los experimentos, por lo tanto para Cavendish, el gas

fijo de Black era un ejemplo de esto. Otros descubrimientos de Cavendish fue que

“el aire que contiene un décimo de su volumen de aire fijo, apaga una vela encen-

dida, que el agua absorbe un poco más de su volumen de aire fijo, a la temperatu-

ra ambiente y una cantidad mayor en frío, la que es expedida al hervir el agua y

que el espíritu del vino absorbe cerca de 2 ½ veces su volumen de aire fijo” “historia

de la química –Jr.PARTITINGTON 1945-pg115. En síntesis fueron estos algunos hombres de

ciencia, los que abrieron el camino que cerraría Lavoisier y que haría que la quí-

mica como el ave Fénix renaciera de sus cenizas.

Page 12: De La Alquimia a Lavoasier

LAVOISIER Y EL SIGLO DE LAS LUCES DE LA QUÍMICA

Antoine Laurent Lavoisier nace en Paris el 26

de agosto de 1743 y muere el 8 de mayo de

1794. De familia rica Lavoisier fue educado en el

Collège Mazarin, pero siguió también y de forma

independiente , un curso de Astronomía, dictado

por La Caille, otro de Botánica, dictado por Ber-

nard de Jussien y de química con Rouelle, fue

designado académico en el año 1768, y nombra-

do posteriormente por Turgot , inspector de pólvo-

ra y salitre, secretario de hacienda en el año

1791 y finalmente después de la Revolución

formo parte de la comisión encargada de estable-

cer el Sistema Métrico; en 1793 es encarcelado y acusado de mojar el tabaco des-

tinado a los soldados y llevado a plaza pública el 8 de mayo de 1794, donde fue

guillotinado junto a su suegro. Aunque largo tiempo olvidado, Lavoisier recibió su

estatua en París en el año de 1900.

Antonio Laurent Lavoisier se caracterizó toda su vida por hacer uso constante

de la balanza y no fue el único, otros lo hicieron antes, pero su obsesión por la

precisión fue algo único en él, su laboratorio bien dotado fue obtenido con el dine-

ro que le dejaba el buen puesto de “asentista”, al cual accedió en 1770 cuando fue

integrado a la Fermé Générale, una compañía privada que fue contratada por el

rey de Francia Luis XV, para cobrar los impuestos a una Francia cada vez más

pobre y hambrienta, esta labor le dejo a Lavoisier grandes dividendos, con los cua-

les pudo construir su laboratorio, un año más tarde se caso con la joven Marie An-

ne Pierrette Paulze, con quien nunca tuvo hijos, pero quien fue su mano derecha

en su labor investigativa. Aunque Lavoisier fue el gran Newton de la química y

constructor de una verdadera Ciencia en esta rama del conocimiento, fue poco lo

que aporto en materiales a esta ecuménica obra; y sus trabajos fueron dirigidos a

organizar y terminar de forma sistemática los trabajos de otros, como Black,

Priestley y Cavendish, de quienes no solo culmino sus obras, si no que además

interpreto de forma brillante

DEL AIRE AL OXIGENO

Page 13: De La Alquimia a Lavoasier

Con Carl Wilhelm Scheele (1742-1786) el

aprendiz de un boticario, se inicia un camino que

habría de culminar el gran Lavoisier, pues fue

este quien en su pequeño y frío laboratorio en

Köping Suecia, sentó las bases que explicarían

la composición del aire y el descubrimiento del

oxígeno como elemento fundamental en los pro-

cesos de la respiración, esto sucede cuando

Scheele, buscando la explicación al fenómeno

por el cual el volumen de una cantidad dada de

aire encerrada en un recipiente y en contacto

con diferentes materiales , experimentaba una

contracción. Scheele trataba de explicar a través del flogisto estas diferencias, pe-

ro descubrió algo mas, la existencia de una sustancia inflamable diferente del aire

común que no solo no lo igualaba en peso, 1/3 del total, sino que además resulta-

ba ser más liviano, que la segunda ¾ del total, la existencia de dos fluidos en el

aire, el segundo que atraía al flogisto y el primero más liviano que no lo hacía, y

nombrados por Scheele como Aire Inmundo y Aire del fuego, fue de vital impor-

tancia para los trabajos posteriores de Lavoisier, estos dos fluidos se conocieron

más tarde como nitrógeno y oxígeno, gracias a Joseph Priestley cuando “obtuvo el

oxígeno el primero de agosto de 1774 en Calne, mediante el calentamiento del

óxido de mercurio, usando para dicho calentamiento una lente convergente” ” histo-

ria de la química –Jr.PARTITINGTON 1945- PG131. Priestley demostró además que dicho gas

no era soluble en agua y que su capacidad de combustión era sumamente alta. Y

fue el mismo Priestley, quien en 1775 demostraría que un ratón vivía el doble del

tiempo en una cantidad dada de este gas, que en otra de aire solo. No obstante

continuaba en él la idea del flogisto y explicaba que cuando ese nuevo gas ardía

en un recipiente cerrado, este se saturaba de flogisto y por eso se apagaba, cosa

que no sucedía al aire libre, de todas formas lo que Priestley evidencio es que “el

nuevo aire contiene muy poco o nada de flogisto y por ese motivo lo llamó aire

deflogisticado. El gas que queda en el aire común cuando los cuerpos queman en

él se llamó, por ese motivo, aire flogisticado” historia de la química –Jr.PARTITINGTON 1945-

pg133.

EL OXIGENO DE LAVOISIER

Page 14: De La Alquimia a Lavoasier

Una de las características más específicas

en los trabajos de Lavoisier es su carácter

sistemático y cuantitativo, pues como dijimos

en páginas anteriores, este era un hombre

sumamente obsesivo con la precisión en los

pesos y medidas, su uso constante de la ba-

lanza lo llevo a tener cada vez pesos más

exactos; pero el método cuantitativo propone

además cumplir con una ley sumamente im-

portante para la química “ la de la indestructibi-

lidad de la masa ” y que fue enunciada por el

mismo Lavoisier en los siguientes términos “

porque nada se crea en los procesos, sean

éstos naturales o artificiales, y puede tomarse como un axioma que en todo proce-

so existe igual cantidad de materia, antes y después del mismo, permaneciendo

constantes la cantidad y la naturaleza de los principios que intervienen, siendo

todo lo que sucede, sólo cambios y modificaciones” historia de la química –

Jr.PARTITINGTON 1945- PG138.

En 1772 Lavoisier demuestra a través de las experiencias que cuando se queman

sustancias en recipientes cerrados, el producto generado resulta ser más pesado

que el compuesto inicial, lo que sucede según el por la absorción de aire en medio

de la combustión , esto lo demostró al repetir las experiencias de Boyle, calcinan-

do plomo y estaño en retortas de vidrio, las cuales peso antes y después de la

quema, sin abrirlas, encontrando que su peso no variaba; luego abrió por un ex-

tremo dichas retortas y encontró que el aire que ingresaba a ellas hacia que estas

pesaran mas en una proporción similar al aumento que presentaba el metal des-

pués de ser quemado y formar la cal, a dicho aire respirable lo llamo “mofette at-

mosphérique o aire residual”. Más tarde lo llamo “azote” y al final Chaptal lo de-

nominó nitrógeno en el año de 1790, en este punto Lavoisier se empieza a encon-

trar con el gas de Scheele y con la teoría antiflogista, la cual estructuro finalmente

al describir cuatro conclusiones después de muchas experiencias en la combus-

tión de diferentes sustancias y que fueron expuestas como siguen:

1. Las sustancias sólo arden en el aire puro.

Page 15: De La Alquimia a Lavoasier

2. Los no metales, tales como azufre, fósforo y carbón, al quemar producen áci-

dos y por este motivo al gas se le llama oxigeno.

3. Los metales por combustión producen cales con absorción de oxigeno.

4. La combustión no es, de ningún modo, un proceso debido al escape de flogis-

to, sino a la combinación de la sustancia combustible con oxígeno. historia de la

química –Jr.PARTITINGTON 1945- pg133.

Si bien es cierto Lavoisier no descubrió el oxigeno, si fue el primero en reconocer

la importancia de este y en determinar que este era un elemento o principio, en-

tendido este como la etapa última en la que no es posible separar una sustancia

simple, por lo tanto hasta no demostrarse lo contrario no se entenderá como un

compuesto; Cavendish demostró que el agua se podía producir quemando un gas

inflamable en aire y Lavoisier posteriormente repitió el experimento de un modo

más moderno y bautizó al aire inflamable con el nombre de hidrógeno. Otro de los

grandes aportes de Lavoisier fue el estructurar la teoría de la combustión y de la

calcinación de los metales, a través de experiencias cuantitativas, demostrando la

ley de las proporciones definidas y la de las atracciones específicas de los cuer-

pos. Finalmente llega a la conclusión que la teoría del flogisto es innecesaria para

explicar los fenómenos de la combustión, propone en 1777 en su memoria “Consi-

deraciones generales sobre la naturaleza de los ácidos y de los principios que los

componen” el nombre de oxígeno y expone que dicho elemento es el constituyen-

te de todos los ácidos.

Para finalizar en sus experimentos sobre la respiración demuestra Lavoisier que

hay una gran similitud entre la combustión y la respiración, pues ambas se reali-

zan en presencia de oxigeno, y que esta última se realizaba en los pulmones

cuando el oxigeno inhalado, oxida los compuestos de la sangre, entre los que se

encuentran el carbono, el cual se convierte en dióxido de carbono. Si bien es cier-

to Mayow demostró que dicho proceso se realizaba en todo el organismo del ani-

mal, el gran aporte de Lavoisier radica en el uso que empieza a dar al nuevo ele-

mento.

LA UNIVERSALIDAD DE UN METODO

Page 16: De La Alquimia a Lavoasier

“La imposibilidad de separar la nomenclatura de la ciencia, y la ciencia de la nomenclatura, de-

pende de que toda ciencia física se forma precisamente de tres cosas: de la serie de hechos que

constituyen la ciencia: de las ideas que los recuerdan; y de las palabras que las expresan.” Toma-

do de un texto de Lavoisier- tratado elemental de química – EL INVESTIGADOR DEL FUEGO - HORACIO

GARCIA – 2003

Ya sentados los nuevos pilares de

la química moderna, Antonio Lavoisier,

se prepara para realizar lo que nin-

guno de los antecesores de la química

había hecho, ni la alquimia, ni la iatro-

química, formalizar una nomenclatura

capaz de unificar estas ciencias alre-

dedor de un lenguaje común y univer-

sal capaz de nombrar desde lo ele-

mental, lo más complejo. Si bien es

cierto ni Cavendish, ni Priestley , qui-

sieron salir del modelo del flogisto,

otros hombres de ciencia como Black

,Bergman en Suecia y Klaproth en

Alemania siguieron las doctrinas de

Lavoisier.

En compañía de otros hombres de

ciencia como Berthollet y Fourcroy,

Lavoisier pública en el año de 1787 su

obra “Métodos de nomenclatura Quí-

mica”, donde se establecen las prime-

ras normas que se usaban para dar

nombre a cada sustancia con base a

los elementos que componían dicho compuesto y así ponerlos de acuerdo con las

nuevas teorías; la idea central era identificar los elementos que formaban el com-

puesto con el solo nombre, y este era tan claro que fue adoptado de forma vertigi-

nosa en el planeta.

En 1789 pública un texto llamado “ Tratado elemental de Química” en el cual se

estructura su nueva doctrina, convirtiéndose en el primer texto de química moder-

Page 17: De La Alquimia a Lavoasier

na y donde se hace un compendio de todos los elementos químicos conocidos en

esa época y que corresponden muchos de ellos a sustancias que aun no se ha-

bían podido descomponer; en cuanto al flogisto si bien es cierto destruyo una teo-

ría inviable, su clasificación del calor y la luz como elementos , así como llamar al

primero “fluido imponderable o calórico”, hicieron que este reemplazara al flogisto

y permaneciera en el seno de la comunidad científica por medio siglo mas.

No obstante Lavoisier tuvo un merito mayor al superar la critica misma de Boyle en

cuanto a su concepto de elemento, pues lo libera de la teoría mecánico-

corpuscular, permitiendo con esto que la química se separe de la física y adquiera

su estructura propia y nacer como una ciencia independiente, con capacidad de

crear métodos nuevos para alcanzar sus propios conocimientos

CONCLUSIONES

Page 18: De La Alquimia a Lavoasier

Lavoisier, llamado el Newton de la química, saca a la alquimia de su prehistórica

coraza y hace de esta una herramienta sofisticada capaz de transformar el mundo,

convierta lo empírico en experimental , lo dudoso en lo cierto y lo oculto en visible,

su genialidad logra discernir entre el pasado y el futuro y haciendo uso de un mé-

todo científico bien desarrollado y de una lógica poco común , organiza los viejos

símbolos en un cuerpo capaz de permitir a todos los hombres leer una misma len-

gua.

La obra de Lavoisier tiene una connotación trascendental en la química moderna,

por una parte, desmitifica la teoría del flogisto, la cual había atrasado el desarrollo

de tan noble ciencia más de un siglo; segundo da fin a las discusiones alrededor

de los gases y de la combustión y por último instaura la nomenclatura química,

como una rama de la química, que permitirá a esta organizar elementos y com-

puestos en un cuerpo común.

BIBLIOGRAFIA

Taylor F. Sherwood. Los alquimistas fundadores de la química moderna. Fondo de

cultura Económica. México, 1961

Simón José Avais. Los titanes de la química. Editorial Nacional S.A . México, 1954

J.R. Partington. Historia de la química. Espasa-alpe. Argentina, 1945

Teresa de la selva, De la alquimia a la química, Fondo de cultura Económica,2003

Horacio García, El investigador del fuego, Alfaomega Colombiana S.A. 2003

http://quimica.ugto.mx/revista/1/Lavosier.htm