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¿Democracia utópica? Alejandro J. Morón Jiménez

¿Democracia utópica?

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¿Democracia utópica?

Alejandro J. Morón Jiménez

¿Democracia utópica?

Alejandro J. Morón Jiménez

- Importancia de conciencia de realidad

- Medios de comunicación

- Conductismo social

- La Europa de las dos velocidades

- Contexto histórico y revolución democrática

Índice

Si hay algo que sigue en importancia el conocimiento de la Memoria Histórica, es decir, el entendimiento de un pasado en un contexto territorial, ese algo es entender el propio presente.

Cuando una persona no posee conocimiento alguno del contexto en el que vive, esta comienza a entender la vida que se le ha presentado delante como algo inevitable, razonable e inamovible, dándose un resultado hacia un conformismo pasivo de su estigma.

El ser humano evoluciona socialmente con el paso de los siglos, mejora su convivencia o la empeora (en el caso de una involución social), y la única manera de transformar un contexto social hacia un avance cualitativo es mediante una revolución, del tipo que sea (puede darse pacífica)

Luego, ¿cuál son los pasos a seguir para estimar una revolución y cambiar un paradigma a que una población puede no agradarle? Son estos, en este orden:

- Conciencia del contexto histórico en el que se vive- Indignación normalmente por injusticias o afán de supervivencia- Actuación y revolución.

La importancia de conocer el presente o nuestra realidad

En este contexto histórico en el que nos encontramos podemos entender la importante intervención de los medios de comunicación en nuestro día a día, ellos son nuestros ojos y oídos, nos aportan todas las noticias que suceden a todos y al mismo tiempo.

Esto lleva a una coyuntura al entender estos medios como formas de transmisión de ideas, y que roza la parte más restringida de nuestra sociedad, pues un periódico o una cadena de televisión son inversiones de grandes, grandes sumas de dinero, y eso, ya nos acerca al entendimiento de que quien tiene dinero transmite la noticia.

Absolutamente todas los medios de comunicación actuales (limitemonos a nuestro contexto nacional) se rigen por una idea política a querer propagar a toda costa, por eso la importancia de conocer todas los medios para poder compararlos, y sobre todo, acceder y buscar de forma inteligente a la fuente más democrática que existe actualmente: internet.

Medios de comunicación

El conductismo social puede considerarse como el ámbito adecuado tanto para la descripción del individuo como del grupo social. Ello se advierte a partir de la utilización del concepto de actitud, por cuanto implica el vínculo existente entre el individuo y el grupo social.

En realidad, resulta difícil priorizar al individuo o al grupo social por cuanto sin los primeros no existe el segundo, mientras que si no existe el grupo social, la actitud del individuo prácticamente no puede formarse, excepto a un nivel cultural muy limitado. Gino Germani escribió:

“Una actitud se define como una disposición psíquica, para algo o hacia algo, disposición que representa el antecedente interno de la acción y que llega a organizarse en el individuo a través de la experiencia –vale decir, es adquirida- y resulta de la integración de elementos indiferenciados biológicos y de elementos socioculturales específicos”.3

Conductismo social

Europa está podrida. Vivimos un momento crucial en la Historia en el que las grandes maquinarias multinacionales económicas y financieras así como las grandes entidades bancarias, se han convertido en los aparatos más importantes y legítimos del Estado, en concreto, del comportamiento común en la UE.

Es por ello, que la desigualdad entre países crece de forma exponencial, los países nórdicos europeos viven en contextos políticos, económicos y sociales muy diferentes de los países del sur (Italia, Grecia, Portugal, Irlanda, España…) todos ellos viven el auge de un imperio alemán aparentemente inquebrantable, locomotora de Europa, que controla y sobre todo, coloniza a todos los países del sur mediante sus políticas económicas que para nada están arreglando el problema social y económico en el que nos encontramos, tal es así, que todos estos países están perdiendo su soberanía popular en favor de saciar una deuda económica producida por la mala gestión de los bancos nacionales sacrificando todos los regímenes políticos públicos que se crucen en el camino de este objetivo de pagar una deuda multimillonaria e impagable.Es tal la diferencia entre países del norte y sur, que hace cuestionarse si vamos por buen camino.

La Europa de las dos velocidades

Pero ante todo este barullo de injusticia, y este sistema capitalista egoísta y codicioso que aleja del ser el sentido común y que dibuja la idea falsa de una democracia como forma de gobierno, comienza a emerger entre la maleza ciertas tendencias hacia lo que podría ser una revolución democrática, así como la recuperación de nuestra soberanía respecto a la elección de problemas que intervienen en nuestro estado.

Una auténtica democracia en la que el ciudadano no sea una simple hormiga del poder sino una voz más que intervenga en el debate estratégico, político y económico (como podía suceder en la Antigua Grecia)

Pero ante este aparente empoderamiento de la ciudadanía, ¿qué estrategia utiliza el Poder para frenar este avance democrático? El miedo. Muy rastrero pero cierto, al ser humano se le conoce bastante bien, y como tal, se sabe qué hacer para frenar a un gran número de la población, y es utilizar el miedo como estrategia ‘’impedir avanzar por el bosque oscuro y tenebroso lleno de hombres lobo’’ aunque después del bosque resulte encontrarse un amanecer tras una cadena de montañas. Y todo esa idea es propagada por esos medios de comunicación.

Este gran problema azota nuestra sociedad dormida actualmente, aunque por suerte, la revolución ha comenzado y el cambio hacia una Europa mejor ya es inminente. Aunque todavía queda mucho camino que recorrer y mucho miedo que recibir de los medios, a este sistema pútrido ya se le comienza a ver sus nombres y sus apellidos más influyentes.

Revolución democrática

- Importancia de conciencia de realidad

- Medios de comunicación

- Conductismo social

- La Europa de las dos velocidades

- Contexto histórico y revolución democrática

Índice

Si hay algo que sigue en importancia el conocimiento de la Memoria Histórica, es decir, el entendimiento de un pasado en un contexto territorial, ese algo es entender el propio presente.

Cuando una persona no posee conocimiento alguno del contexto en el que vive, esta comienza a entender la vida que se le ha presentado delante como algo inevitable, razonable e inamovible, dándose un resultado hacia un conformismo pasivo de su estigma.

El ser humano evoluciona socialmente con el paso de los siglos, mejora su convivencia o la empeora (en el caso de una involución social), y la única manera de transformar un contexto social hacia un avance cualitativo es mediante una revolución, del tipo que sea (puede darse pacífica)

Luego, ¿cuál son los pasos a seguir para estimar una revolución y cambiar un paradigma a que una población puede no agradarle? Son estos, en este orden:

- Conciencia del contexto histórico en el que se vive- Indignación normalmente por injusticias o afán de supervivencia- Actuación y revolución.

La importancia de conocer el presente o nuestra realidad

En este contexto histórico en el que nos encontramos podemos entender la importante intervención de los medios de comunicación en nuestro día a día, ellos son nuestros ojos y oídos, nos aportan todas las noticias que suceden a todos y al mismo tiempo.

Esto lleva a una coyuntura al entender estos medios como formas de transmisión de ideas, y que roza la parte más restringida de nuestra sociedad, pues un periódico o una cadena de televisión son inversiones de grandes, grandes sumas de dinero, y eso, ya nos acerca al entendimiento de que quien tiene dinero transmite la noticia.

Absolutamente todas los medios de comunicación actuales (limitemonos a nuestro contexto nacional) se rigen por una idea política a querer propagar a toda costa, por eso la importancia de conocer todas los medios para poder compararlos, y sobre todo, acceder y buscar de forma inteligente a la fuente más democrática que existe actualmente: internet.

Medios de comunicación

El conductismo social puede considerarse como el ámbito adecuado tanto para la descripción del individuo como del grupo social. Ello se advierte a partir de la utilización del concepto de actitud, por cuanto implica el vínculo existente entre el individuo y el grupo social.

En realidad, resulta difícil priorizar al individuo o al grupo social por cuanto sin los primeros no existe el segundo, mientras que si no existe el grupo social, la actitud del individuo prácticamente no puede formarse, excepto a un nivel cultural muy limitado. Gino Germani escribió:

“Una actitud se define como una disposición psíquica, para algo o hacia algo, disposición que representa el antecedente interno de la acción y que llega a organizarse en el individuo a través de la experiencia –vale decir, es adquirida- y resulta de la integración de elementos indiferenciados biológicos y de elementos socioculturales específicos”.3

Conductismo social

Europa está podrida. Vivimos un momento crucial en la Historia en el que las grandes maquinarias multinacionales económicas y financieras así como las grandes entidades bancarias, se han convertido en los aparatos más importantes y legítimos del Estado, en concreto, del comportamiento común en la UE.

Es por ello, que la desigualdad entre países crece de forma exponencial, los países nórdicos europeos viven en contextos políticos, económicos y sociales muy diferentes de los países del sur (Italia, Grecia, Portugal, Irlanda, España…) todos ellos viven el auge de un imperio alemán aparentemente inquebrantable, locomotora de Europa, que controla y sobre todo, coloniza a todos los países del sur mediante sus políticas económicas que para nada están arreglando el problema social y económico en el que nos encontramos, tal es así, que todos estos países están perdiendo su soberanía popular en favor de saciar una deuda económica producida por la mala gestión de los bancos nacionales sacrificando todos los regímenes políticos públicos que se crucen en el camino de este objetivo de pagar una deuda multimillonaria e impagable.Es tal la diferencia entre países del norte y sur, que hace cuestionarse si vamos por buen camino.

La Europa de las dos velocidades

Pero ante todo este barullo de injusticia, y este sistema capitalista egoísta y codicioso que aleja del ser el sentido común y que dibuja la idea falsa de una democracia como forma de gobierno, comienza a emerger entre la maleza ciertas tendencias hacia lo que podría ser una revolución democrática, así como la recuperación de nuestra soberanía respecto a la elección de problemas que intervienen en nuestro estado.

Una auténtica democracia en la que el ciudadano no sea una simple hormiga del poder sino una voz más que intervenga en el debate estratégico, político y económico (como podía suceder en la Antigua Grecia)

Pero ante este aparente empoderamiento de la ciudadanía, ¿qué estrategia utiliza el Poder para frenar este avance democrático? El miedo. Muy rastrero pero cierto, al ser humano se le conoce bastante bien, y como tal, se sabe qué hacer para frenar a un gran número de la población, y es utilizar el miedo como estrategia ‘’impedir avanzar por el bosque oscuro y tenebroso lleno de hombres lobo’’ aunque después del bosque resulte encontrarse un amanecer tras una cadena de montañas. Y todo esa idea es propagada por esos medios de comunicación.

Este gran problema azota nuestra sociedad dormida actualmente, aunque por suerte, la revolución ha comenzado y el cambio hacia una Europa mejor ya es inminente. Aunque todavía queda mucho camino que recorrer y mucho miedo que recibir de los medios, a este sistema pútrido ya se le comienza a ver sus nombres y sus apellidos más influyentes.

Revolución democrática