Devocionales Diarios Campaña 100 Días de Oración por la Evangelización de Chile

IntroducciónLa oración es parte fundamental en la vida del creyente sin embargo invertimos poco tiempo en ella. Para Jesús la oración fue parte de su vida, de su intimidad y relación personal con el Padre, su Padre. Jesús consideró la oración no solo la llave que se abre para solucionar algu-nos con�ictos sino que estuvo presente como el arma y herramienta permanente y e�caz en su ministerio terrenal.

Cuando miramos a nuestras iglesias en los días de oración solo pode-mos pensar en la poca importancia que le hemos dado a una disciplina espiritual tan elemental. Aún a sabiendas de los grandes resultados que por ella se han obtenido en todo tiempo y momento.

Si la oración puede cambiar la vida de una persona, imagínese como cambiaría a una nación. Porque la palabra dice que sin fe es imposible agradar a Dios. Necesitamos hoy orar al Padre, rogarle a él que pueda escuchar nuestras plegarias y traiga sobre nosotros cambios que produzcan la transformación de una nación que está enferma y que necesita de Dios.

El libro de los Hechos nos dice que mientras Pedro estaba en la cárcel, la iglesia hacía incesantemente oraciones a Dios por su siervo. Y sabemos que Dios escuchó esas oraciones porque Pedro salió libre de ese lugar. Pero para que eso aconteciera hubo una iglesia que se reunió y no dejó de orar y creyó que la respuesta y socorro vendrían del cielo.

Esperamos y soñamos que algo grande pueda acontecer en nuestras iglesias, familias, vecindario y nuestro país; debemos entender que ese cambio vendrá cuando doblemos nuestras rodillas y nues-tros corazones para buscar el rostro de Dios. Para pedir perdón por nuestras faltas y pecados. Para pedir que Dios nos restaure y volvamos a andar en su propósito y en su voluntad.

Hemos buscado miles de formas y soluciones a nuestros propios problemas personales, congregacio-nales y nacionales y nada ha dado resultado y si hemos visto resultados no han sido los que Dios ha deseado. Debemos dejar de buscar la respuesta en otros, y volver nuestro rostro hacia Dios, necesita-mos poner nuestro rostro a tierra y rendirnos delante de la presencia de Dios. Muchas de las cosas que hemos realizado las hemos hecho según nuestras propias fuerzas y no ha sido su�ciente. Ahora queremos combatir con la fuerza de Dios, queremos buscar su poder y su dirección para ser instru-mentos de su gracia y levantar el nombre de Cristo en cada rincón de nuestra sociedad.

Tenemos esta hermosa oportunidad de orar como nunca antes lo habíamos hecho. Unirnos desde el norte hasta el extremo sur, de costa a cordillera. Debemos ponernos en acción y tocar el corazón de Dios con nuestras plegarias incesantes e insistentes, pero llenas de fe.

¡Queremos ver a las iglesias unidas y llenas de la presencia de Dios y su Espíritu Santo!, ¡queremos ver los pastores unidos, consagrados y con visión de Dios!, ¡queremos ver líderes unidos trabajando para engrandecer el reino de Dios!, ¡queremos ver familias unidas y transformadas!, ¡queremos ver a nues-tros amigos y vecinos sirviendo a Dios! Solo necesitamos creer y unirnos para ver lo que Dios puede hacer con un pueblo que se humilla ante su Señor

Viviana Faúndez VillegasDirectora DINEMIS

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“He aquí, que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado”. Isaías 6:7

Si vamos a orar para cambiar una nación, necesitamos ponernos a cuenta delante de Dios, reconociendo nuestras faltas y pecados. Cuando Isaías tuvo la visión de Dios en el templo, vio a un Dios Santo rodeado de majestad. Vemos por una lado la santidad de Dios versus la impureza y pecado del hombre. Isaías se sabe un hombre pecador, indigno de estar en la presencia de este Dios Puro y Santo. Si hay algo que le quita poder al creyente para actuar en el mundo como instrumento de la gracia de Dios es el pecado; este esclaviza y paraliza el obrar de Dios en nosotros. Solo cuando confesamos nues-tras faltas, nos transformamos en vasijas listas para ser llenadas de su presencia y preparados para aten-der la voz de Dios. Interesante observar que luego de recibir el perdón, Isaías pudo oír la voz de Dios llamándole a su servicio. Si queremos ser usados por Dios, necesitamos ir a su presencia y reconocer nuestras faltas. Hoy es el día para iniciar un nuevo camino. Pedro nos dice que debemos ser santos en toda nuestra manera de vivir. No podemos pasarnos la vida �ngiendo algo que no somos, la solución está en doblar nuestras rodillas y doblegar nuestro corazón buscando recibir de Dios su perdón y restauración.

Oración: “Señor presento delante de ti mi vida y te pido perdón por todas mis faltas y pecados. Restáurame Dios”.

DÍA 1, JUEVES 1 DE AGOSTO 2013

Vidas limpias para servir

DÍA 2, VIERNES 2 DE AGOSTO 2013

“Padre he pecado contra el cielo y contra ti; ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como uno de tus jornaleros” Lucas 15:18.19

Si hay una historia bíblica que nos muestra la mala actitud de un hijo hacia su padre, es justamente la parábola del hijo pródigo. El hijo menor lo tenía todo, sin embargo no fue su�ciente. Quería tener el control de su vida y hacer de ella lo que mejor le pareciera. Pero luego de malgastar todo lo que había recibido y viéndose en una situación decadente; recuerda lo bien que vivían los jornaleros de su padre. En ese momento, examina su vida y reconoce lo mal hijo que fue. La palabra dice que volvió en sí. Cuán-tas veces tendremos que volver a estar en sintonía con el Señor para darnos cuenta del error que come-temos cuando hacemos aquello que no debemos. Ahora, arrepentido y consciente de todo el daño que se provocó a sí mismo y a su padre, anhela volver a su hogar dispuesto a ser tratado como un simple peón y no como hijo. Muchas veces hemos actuado de igual manera, incluso sabiendo que somos hijos del Padre amoroso y Todopoderoso, nos comportamos delante de Él de forma arrogante, soberbia y pecaminosa. Sin embargo, Él nos perdona y nos vuelve a recibir en sus brazos porque somos sus hijos, su especial tesoro. Necesitamos volver al hogar, volver a los brazos del Señor y vivir bajo su gobierno para ser los hijos que Él siempre ha deseado. El joven se arrepintió de todo el mal hecho, pero tuvo la valentía de regresar y pedir perdón. ¿Y tú qué harás?

Oración: anhelas que yo sea.

El hijo que Dios anhela

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Una de las muchas maneras en que mostramos que el mundo no nos importa es la actitud frente a las situaciones diarias. Objetamos la conducta de otros, pero no nos miramos a nosotros actuando igual e incluso peor que las otras personas. Jesús habla de dar de comer al pobre, de visitar al enfermo, al desprovisto; pero no lo hacemos, porque creemos que no es asunto nuestro, y si lo llegamos a hacer asumimos que esa ocasión cubre la cuota de lo que Dios nos solicita en su Palabra. Nos hemos transfor-mados en discípulos indolentes, hoy en día la apatía y las prioridades personales están ocupando el lugar que le corresponde al amor, al sacri�cio y a la entrega en el reino. La soberbia, el orgullo, la como-didad y conformidad han cercenado nuestra compasión por nuestro prójimo. ¿A qué se debe tanta dureza, indolencia y desamor? Si el amor de Dios está en mí, entonces debe inte-resarme el mundo y los que en él habitan. Porque Dios tiene interés por su creación. Hoy necesitamos arrepentirnos y pedir perdón por las muchas veces que actuamos como si la gente no nos importara.

Oración: Padre te pido me perdones por las veces en que he actuado como si el mundo no me importara.

DÍA 3, SABADO 3 DE AGOSTO 2013

Pidiendo perdón por mi actitud con el mundo

“Así mismo un levita… viéndole pasó de largo… Pero un samaritano…vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia”. Lucas 10:32-33

La indiferencia está ligada fuertemente con la falta de amor y de compasión. Fue el amor de Dios hacia su creación lo que movió su corazón y nos envió a su Hijo Jesús para rescatarnos de nuestra pobre condición; por ello, es el amor lo que debe motivar nuestro corazón para compartir su mensaje con los que no recono-cen a Cristo como Señor y Salvador. Jesús ejempli�ca el amor al prójimo de una manera especial. Un varón víctima de la violencia y la maldad de otros, no fue su�ciente para conmover el corazón de dos cristianos de aquella época y conminarlos a brindarle la ayuda necesaria para su salvación; dos varones que inclusive poseían un conocimiento acabado de las sagradas escrituras, es decir, de Dios y su Palabra. La indiferencia y la falta de compasión fue la que hizo que estos dos hombres actuaran como si no supieran qué debían hacer. Es esa clase de indiferencia la que mantiene a la iglesia ocupada y entreteniéndose en lo interno, en lugar de trabajar llevando el mensaje de Jesús. Esto nos hace pensar que siendo amados por Dios y perdonados por su gracia in�nita, no atendemos la necesidad de los que claman por ayuda. Hoy necesitamos ser sanados de la enfermedad llamada indiferencia, la que no nos permite mirar con amor a los perdidos. Debemos apasio-narnos por el tesoro más valioso para Dios, su creación perdida. Pidamos a Él que ponga en nosotros amor y compasión por los perdidos, por los que no han alcanzado a conocer la palabra del evangelio. Pidamos a Dios que nuestras iglesias puedan comenzar a mirar con los mismos ojos con que un día Cristo nos miró, con amor, porque Él se interesa por cada uno de nosotros.

Oración: “Dios sana nuestras iglesias de la indiferencia por los que viven sin Cristo, pon amor en nuestros corazones para con ellos”.

DÍA 4, DOMINGO 4 DE AGOSTO 2013

Una enfermedad llamada indiferencia

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“No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu” Efesios 5:18

Podemos recordar la hermosa letra de una canción que dice: “Que tu presencia me inunde, haz de mi un odre nuevo, cámbiame, renuévame, enamórame de ti, Jesús”. No solo es una hermosa melodía sino una oración hecha canción. Hemos anhelado tanto que Dios nos llene, pero eso, en el diario vivir, no se produce. Y no es porque Dios no quiera, sino porque debemos renunciar a antiguos hábitos y pecados que están allí debilitando nuestra vida espiritual. No puede haber presencia de Dios plena y total sin que antes haya confesión del pecado y limpieza de la vida. No podemos llenar un vaso y querer usarlo si permanece sucio. Debemos renunciar a nuestros pecados, dejar que Dios nos limpie por completo y se producirá esa llenura de la presencia del Señor en nosotros.

El Espíritu Santo es el único que produce cambios en la vida del creyente de manera extraordinaria y sobrenatu-ral. Si hemos recibido algo en la vida como un regalo permanente que nadie nos arrebatará: es la salvación, pero hemos atesorado este regalo como si fuera algo exclusivo, cuando la realidad es que la salvación es para toda la humanidad. Actuamos de forma egoísta con los no creyentes y hasta con Dios mismo; pero si queremos vivir llenos de la presencia de Dios, entonces debemos estar dispuestos a pagar el precio y disponernos a servir, actuar hablar y no callar.

Oración: Señor, pido que tu Espíritu Santo me inunde de tu presencia y me limpie de todo pecado y mezquin-dad.

DÍA 5, LUNES 5 DE AGOSTO 2013

Llenos de la presencia de Dios

DÍA 6, MARTES 6 DE AGOSTO 2013

Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, y pusieron en ellos fuego, sobre el cual pusieron incienso, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que Él nunca les mandó. Y salió fuego de delante de Jehová y

los quemó, y murieron delante de Jehová. Lev. 10:1-2.

Son muchos los ejemplos bíblicos donde, a menudo, Dios nos enseña que si somos padres super�ciales, engen-draremos hijos super�ciales. No “Ofrecer”, pudiera ser más honesto que engañar a otros y a uno mismo, ya que resulta mucho más loable que ofrecer lo que no sentimos ni creemos, o promete lo que realmente no se preten-de cumplir.

Hoy estamos viviendo valores trastocados como nunca antes. Ha entrado en la iglesia el eufemismo, relativismo y la permisividad al grado de considerar que ya no existe la verdad absoluta de Dios. La Palabra está siendo cues-tionada por muchos, adornada por otros, y sus mandamientos minimizados. La falta de poder viene cuando no hay poder desde La Palabra. Se está ofreciendo mucho “fuego extraño” para conformar a los oyentes.

Acercarse al Señor tiene que tener un sólo objetivo: santi�car y glori�car a Dios. Cuando esto ocurre podremos sentir el perdón por nuestro pecado, adorar y evangelizar porque habrá pasión por Cristo... “en lo que a mí se acercan me santi�caré y en presencia de todo el pueblo seré glori�cado. Y Aarón calló”.

Oración: “Dios perdónanos por ser hijos super�ciales, te pido que me ayudes a cultivar una relación profunda contigo y tu Palabra”.

Hijos Super�ciales

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“Si yo cerrare los cielos para que no haya lluvia, y si mandare a la langosta que consuma la tierra, o si enviaré pestilencia a mi pueblo; si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. Ahora estarán abier-tos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar; porque ahora he elegido y santi�cado esta casa, para que esté

en ella mi nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre. II CRÓNICAS 7:13-16

El 12 de Febrero del 2010, René Préval, Presidente de Haití llamó a su nación a tres días de ayuno y oración. Más de un millón de haitianos acudieron a este evento épico. La multitud estaba reunida frente al Palacio Presidencial, en Puerto Príncipe. Un pastor inició la apertura, allí estaba un pueblo herido, clamando al Señor que los perdonara y que sanara a su nación. Desde las 6:00 de la madrugada hasta las 18:00 horas, cada día. Era tal la presencia de Dios que el Primer Ministro no pudo orar, solo lloró y lamentó durante una hora. Los pastores y líderes lo rodearon y oraron por él. Hubo 3.000 conversiones con�rmadas en esos tres días. 101 de ellos habían sido sacerdotes del Vudú.

Estas son las cosas que ocurren cuando un pueblo se une para orar y ayunar en un mismo sentir y con un mismo objetivo. Un pueblo que se propone ser útil a Dios, se humilla reconociendo su falta ante él.¿Y nosotros en qué estamos ocupados? ¿Qué necesitamos recuperar como pueblo? y ¿Por qué sentimos que Dios no nos escucha? El día que busquemos verdaderamente el rostro de Dios en quebranto y humillación podremos ser cana-les de bendición e instrumentos de su gracia.(El video se llama: “Haití, lo que cambia la historia de una nación” búsquelo)

Oración: Dios, me humillo delante de Ti y pido tu misericordia sobre mi vida para ser instrumento útil en tus manos, especialmente en mi nación.

DÍA 7, MIERCOLES 7 DE AGOSTO 2013


Esdras 3:10-13¿Sabe usted por qué este país escandinavo, en el ámbito de la educación, llamado Finlandia tiene las tasas más altas de éxito en los estudiantes que muchos otros países con mejor economía y recursos? Porque existe una herencia cultural luterana basada en la responsabilidad que fomenta la disciplina y el esfuerzo. La lectura es parte de su cultura y así como puedes encontrar entre tres a cinco periódicos en cada casa, encuentras también una Biblia, pero no de adorno sino una que se lee.Por otro lado, una de las promesas de postulantes a la presidencia de nuestra nación es una nueva Constitución para Chile; esto atrajo a muchos, pero si las leyes que rigen a un país no están cimentadas en las leyes de Dios, muy pronto la sociedad sentirá los efectos de tales hechos. Hay oscuridad en muchas de las ideas morales de estos tiempos, y los políticos, encargados de guiar nuestra nación, están cambiando para agradar al hombre y no a Dios.

Esdras es un ejemplo vivo de la restauración del altar y del culto. Los capítulos 9 y 10 son los más estremecedores; un repudio nacional, y no a lo que despreciaban, sino a sus mujeres, a quienes no amaban porque no eran israeli-tas. Estuvieron dispuestos a renunciar a ello con tal de agradar a Dios y bendecir a su nación; sin dudas, una simbólica enseñanza, ¿qué nos pide Dios para ser verdadera luz en medio de las tinieblas. ¿La iglesia de Cristo está resplandeciendo? ¿Qué hay de los Esdras de este tiempo?

Oración: Dios reconocemos que nuestro país necesita de Ti, y nos arrepentimos por no ser luz en medio de tanta oscuridad y a�icción.

Quiero ser un instrumento útil

Luz en medio de la oscuridad y de la a�icción

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En busca de tu perdón y tu pasión

Viviendo en santidad y llenos de su presencia

“Vino la Palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová. Y era

Nínive ciudad grande en extremo, de tres días de camino”. Jonás 3:1-3



“Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado”. Salmos 51.

Los estudiosos dicen que este Salmo es un cántico del rey, posterior a los acontecimientos ocurridos con Betsabé. No hay grito más desorbitante que el clamor de David. Un grito que pide la libertad de su yo interior egoísta, insensible y desconsiderado. Un reconocimiento de este placer de satisfacerse a sí mismo olvidando los que están a su alrededor. Es la petición más loable: “un corazón limpio, ser renovado con un espíritu recto que lo gobierne. No ser echado de la presencia de Dios, no se aparte del Espíritu Santo y el retorno del gozo del Señor”, son las peticiones que provoca la convicción de pecado, lo que produce el dolor, o la desesperación. Bendito sea Dios que tiene misericordia de nosotros.Pero la desobediencia es pecado, por tanto, no predicar el evangelio, el no obedecer el “Id y haced discí-pulos…” es pecado a mi modo de ver. Los mandatos de Dios son órdenes y de estas no hay una que sea más importante que otras. Dios se siente agradado cuando ve en nosotros un sincero interés por obe-decerle. Me pregunto si Él ve un verdadero interés en nosotros por extender su Palabra y el evangelio a toda criatura. “Señor abre mis labios y publicará mi boca, no sólo tu alabanza sino tu evangelio de salva-ción.”

Oración: Señor me rindo delante de Ti y pido me ayudes a vivir en santidad y lleno del poder de tu Espíritu Santo. Lléname de tu presencia.

He aquí un nacionalista, un patriota que al contrario de los otros profetas del Antiguo Testamento, dirigía su profecía a los habitantes paganos de Nínive y no hacia el pueblo de Israel. El único mensaje profético que tuvo que anunciar Jonás fue acerca del juicio que caería sobre Nínive si no se arrepentían (Jonás 1:2; 3: 2,4).

He aquí un profeta sin visión de reino, he aquí un profeta, un creyente que hace todo de mala gana. Obedece de mala gana y predica de mala gana. No solo Dios tiene que hablarle dos veces sino que hasta espera de mala gana. Y he aquí, una ciudad, nuestra “Nínive”, con una tremenda necesidad. Si tan solo se ocupara el 60% de nuestro tiempo, de nuestras energías, si nuestra plani�cación estuviera abocada, en un mayor porcentaje a servir a la comunidad, a predicar, a crear lazos de amistad con aquellos que deseamos su salvación y más tiempo a orar por ellos; creceríamos. ¿Están Nuestros proyectos dirigidos por el Espíritu Santo, o nos parecen tan absurdas sus motivaciones como le pareció a Jonás ir a Nínive a predicar? ¿Tenemos compasión por los perdidos? Nuestro país no está lejos de parecerse a una “Nínive”.

Oración: Dios perdona mi desamor, mi falta de pasión e interés por todos aquellos que no han sido alcanzados por tu evangelio.

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“Dios aborrece hasta la oración del que se niega a obedecer la ley” Proverbios 28:9 NVI



Alguna vez escuché que “en la obediencia está la ganancia”, en la Biblia encontramos muchos hermosos hombres de Dios que pudieron comprobar esta aseveración.Primero debemos ver qué ocurre cuando no obedecemos: Es de singular ejemplo lo que ocurrió con Adán y Eva en el huerto del Edén, no tuvieron la capacidad de obedecer a la Palabra de Dios, que enfáti-camente les ordenó que no debían comer del fruto prohibido, lamentablemente fueron expulsados de este hermoso lugar donde estaban en comunión con el Padre. La razón de su triste realidad fue la desobediencia a la Palabra de Dios.El diccionario en una simple de�nición sostiene que la obediencia es cumplir la voluntad de alguien que manda. En Mateo 28:20 encontramos un hermoso texto que nos muestra lo que nuestro Señor nos manda hacer por su Palabra “Enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el �n del mundo” (NVI).Hoy el Señor nos invita a re�exionar sobre la “obediencia de su Palabra”, obedecer trae consigo hermo-sas consecuencias para la vida del obediente, como así la desobediencia nos aleja totalmente de los buenos frutos.

Los cristianos estamos preparados para obedecer al Señor, ya que el Espíritu Santo está con nosotros, cuando Él nos ordena debemos obedecer, de hacerlo así, veremos hermosas consecuencias en nuestras vidas. “En la obediencia está la ganancia”.

La Obedicencia

“Pero tú sé sobrio en todo, soporta las a�icciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio” 2º Timoteo 4:5

Caminando por las calles de San Bernardo pude leer en un poste un letrero que decía: “Se necesitan jornaleros”. Evidentemente, si hay un ofrecimiento de trabajo es porque hay una urgencia de ejecutar un proyecto, y quien ofrece el trabajo es el dueño del proyecto que quiere terminarlo y necesita mano de obra cali�cada.Dios es dueño de un gran proyecto que trae consigo la salvación de las personas y el alejamiento de la ira de Dios. Dios necesita cristianos (jornaleros) obedientes a su mandato para desarrollar este hermo-so proyecto, ¿Estaría usted dispuesto a colocarse en la �la para ver si está cali�cado para el trabajo?Se debería decir que usted como cristiano está cali�cado para el trabajo ya que un día obedeció al llamado del Señor y Él lo dotó de buenas herramientas para la tarea. En síntesis, cuando Dios llama lo hace con un objetivo claro, ya que aún hay mucho trabajo por realizar. Si miramos en nuestro país, hay tantos lugares en los que la Palabra de Dios debe llegar para salvar vidas. Es por esto que surge la necesidad hoy en día de jornaleros para la obra, ¿será usted obediente a lo que demanda el Señor?

Oración: Señor quiero vivir obedeciendo tu Palabra y ser usado entre las multitudes de mi país.

Útiles en las manos de Dios

Pastor Félix Arias

Pastor Félix Arias

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“Todo aquel que en Él cree, no será defraudado”. Romanos 10:11 NVI



Pablo enfatiza en que debemos creer y para ello debemos cada día desarrollar la fe. Esta es entregada por el Señor para su uso, el cristiano a cada momento debe aumentar su fe. Esto es posible a través del estudio constante de la Palabra de Dios y en la práctica de lo que estudia, así la fe aumenta. Muchas veces debemos aplicar la fe en nuestro diario vivir y el Señor nos sorprende frente a respuestas que nos da. En otras ocasiones, miramos al cielo esperando una respuesta y esta no llega, ¿Flaquea la fe? Quizás, Dios esté esperando el momento especí�co para darnos la respuesta.En la Biblia, las hermanas de Lázaro se desesperaron por la muerte de su hermano; pero, aún espera-ban con�adas en que su amigo hiciera algo. No obstante, cuando llegó Jesús le reprendieron. Ellas en el fondo de su corazón sabían que el Señor podía sanarle y así fue. Jesús lo levantó de los muertos. ¿Era imposible esto?Hoy nosotros debemos esperar siempre el actuar de Dios sobre las situaciones de nuestra vida. El Maes-tro sigue haciendo milagros. Él es el dueño de lo imposible para nosotros, pues lo hace todo posible. Él es Dios y sólo él puede bendecir a nuestro país y cambiar los corazones de los perdidos. ¡Dios bendice nuestra Nación!

Oración: Señor ayúdanos a creer que todo aquello que es imposible para nosotros, tú lo haces posible. Bendice mi país.

Creyendo en lo imposible

“En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan”. Hebreos 11:6

La Biblia nos muestra en todo su recorrido y desarrollo que los hombres que hicieron la historia alrede-dor del mandato de Dios, desarrollaron en sus corazones la fe, que palabra más corta, pero con tanto signi�cado. El libro de Hebreos nos menciona a hombres y mujeres que actuaron por fe mirando siem-pre a Dios.A través del ejemplo de sus vidas, comprendemos que aquellos que colocan su fe en dirección al Señor todo les es posible. En este sentido, lo primero que debemos decir es que todo hombre y mujer tiene fe y debe direccionarla siempre ante el maestro nazareno. Así cada día esta fe aumentará. Él que tiene fe y busca a Dios será recompensado.Si usted tiene fe en Jesús, está dotado para emprender grandes cosas en el Cristo de la Gloria. La volun-tad de Dios se busca en la fe que él nos dejó.Practique la fe y desarrolle grandes planes porque tenemos un Dios poderoso. El mundo hoy necesita salir de sus a�icciones e incredulidad y para lograrlo necesita que nosotros los podamos bendecir con la palabra de Dios. Por esto, debemos aumentar nuestra fe para que seamos capaces de llevar el mensa-je de Dios al que está gritando y de corazón anhelando soluciones para sus necesidades.

Oración: Señor aumenta nuestra fe para emprender grandes cosas para ti en medio de la a�icción y la incredulidad de los que están a mí alrededor.

Sin fe no se llega a ninguna parte

Pastor Félix Arias

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“Y los discípulos estaban llenos de Gozo y del Espíritu Santo”. Hechos 13:52



¡Qué difícil es ir y hacer discípulos, cuando no se entiende lo que es ser discípulo!Este es uno de los problemas más grandes de las iglesias, especialmente, cuando se trata de empapar al pueblo para que cumpla con la labor de evangelizar ¿Cuál es el centro de esta problemática? Entre las respuestas que podemos presentar, encontramos que cada día las iglesias invierten menos recursos, mano de obra, dinero y tiempo para el desarrollo de esta tarea. Esto impide que se pueda avanzar en la evangelización. El texto mencionado al inicio nos señala la clave: No debemos entender que el discipulado o el discípu-lo sigue tan solo la doctrina, pensamiento o �losofía del maestro. Este era el pensamiento antiguo de aquellos que se identi�caban con grandes pensadores y sus enseñanzas. Jesús vino a cambiar este pen-samiento. El Señor enseñó que discípulo es aquel que se relaciona en forma íntima con su maestro. Esta relación de apego se basa en el gozo que siente el discípulo y que es producto de la llenura del Espíritu. De esta manera, es como se debe madurar para hacer buenos discípulos y por consecuencia haremos discípulos intencionalmente, compartir lo que nosotros ya tenemos. ¿Usted es un discípulo? Entonces haga seguidores del Señor, nuestro país lo necesita.

Oración: Señor pido que las iglesias vivamos obedeciendo tu mandato de ir y hacer discípulos. Empezando por mi país Chile.

Ir y hacer discípulos

“Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos” (Mateo 13:58)

Hoy en día existe un poder que paraliza al pueblo de Dios, el cual se conoce como “incredulidad”. Este poder limita, y muchas veces impide, el obrar de Cristo en nuestras vidas y en la vida de nuestras comu-nidades de fe. No podemos pretender ver el poder de Dios desplegado, si en nuestra vida no existe la certeza de que Él puede hacer lo imposible. Como hijos de Dios, necesitamos decidir en nuestra mente y corazón, si realmente creemos en Dios y si además le creemos a Dios. Porque no es lo mismo conocer de nombre a aquel que nos salvó, que vivir experimentando el poder y el obrar del Padre cada día de nuestra existencia.

Necesitamos que Dios nos mueva como Iglesia Chilena para ver una iglesia renovada; y, que su poder, su gloria y su misericordia sean esparcidos por todo nuestro país para cumplir con la misión que Él nos encomendó.

Oración: Dios quita de nosotros todo espíritu de incredulidad y ayúdanos a creer que tú puedes hacer posble lo imposible.

Aparta mi incredulidad

Pastor Félix Arias

Pastor Samuel ObandoIglesia Las Vertientes

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“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen” Juan 10:27



La relación que establecemos con Dios tiene múltiples bene�cios. Principalmente, cuando se trata de esperar todas las cosas que Él tiene preparadas para sus hijos. Sin embargo, algunas cosas no resultan tan agradables cuando se trata de aquello que debemos hacer nosotros en relación a Dios.

El Señor espera de sus hijos dos cosas: “el oír” y “obedecer a su palabra”. Frente al primer punto, no presentamos mayores problemas, puesto que dos o tres veces por semana escuchamos en la iglesia lo que Dios espera de nosotros; y, si leemos diariamente la palabra, estamos en esta actividad escuchan-do su voluntad todos los días. No obstante, es en el segundo punto cuando la di�cultad comienza, ya que obedecer a su palabra es lo que le da sentido al escuchar. Si escuchas pero no obedeces entonces lo primero no tiene sentido. La palabra de Dios se hará realidad en nosotros, en la medida que dispon-gamos nuestras vidas para cumplir la voluntad de aquel que nos amó primero.

Oración: Señor, oro para que cada creyente de la Iglesia pueda aprender a escuchar tu voz para luego obedecer.

Ovejas que obedecen la voz de su pastor

“…que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible...” Mateo 17:20b

La vida de un cristiano siempre tiene un propósito. Nada es para nuestro propio bene�cio. Todo lo que logramos en el Señor es para el Señor y, también, para el bene�cio de aquellos que aún no le conocen. Muchas veces no somos un pueblo de fe porque nos acostumbramos a conformarnos con lo que Dios ya nos ha dado. Como toda nuestra necesidad ya está resuelta, entonces nuestros ojos se cierran frente a un mundo lleno de dolor.

Es por esta razón que debemos ser un pueblo que avance con fe para llevar el evangelio de Cristo. El nombre de Dios debe ser levantado en medio de todos los contextos en los que nos movemos en nues-tro diario vivir. Debemos ser un pueblo de fe para lograr aquello que nos parece imposible. Todo esto parte por la actitud de nuestros corazones.

Oración: Dios te pido que seamos un pueblo de fe y así manifestar tu gloria a los que no te conocen como Señor y Salvador.

Auméntanos la fe Señor

Pastor Samuel Obando


11

“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen” Juan 10:27



La relación que establecemos con Dios tiene múltiples bene�cios. Principalmente, cuando se trata de esperar todas las cosas que Él tiene preparadas para sus hijos. Sin embargo, algunas cosas no resultan tan agradables cuando se trata de aquello que debemos hacer nosotros en relación a Dios.

El Señor espera de sus hijos dos cosas: “el oír” y “obedecer a su palabra”. Frente al primer punto, no presentamos mayores problemas, puesto que dos o tres veces por semana escuchamos en la iglesia lo que Dios espera de nosotros; y, si leemos diariamente la palabra, estamos en esta actividad escuchan-do su voluntad todos los días. No obstante, es en el segundo punto cuando la di�cultad comienza, ya que obedecer a su palabra es lo que le da sentido al escuchar. Si escuchas pero no obedeces entonces lo primero no tiene sentido. La palabra de Dios se hará realidad en nosotros, en la medida que dispon-gamos nuestras vidas para cumplir la voluntad de aquel que nos amó primero.

Oración: Señor, oro para que cada creyente de la Iglesia pueda aprender a escuchar tu voz para luego obedecer.

Ovejas que obedecen la voz de su pastor

“Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres”

¿Qué es lo que más deseamos para nuestra vida? Probablemente al hacernos esta pregunta sin pensar en un contexto cristiano, obtendríamos respuestas como: mi mayor deseo es ser feliz en la vida, tener una linda familia, me gustaría viajar, conocer otros lugares, aspirar a un buen puesto laboral, entre otras. Pero, ¿Qué ocurre con los deseos de cumplir con la voluntad de Dios? Muchas veces nos a�rmamos en la misericordia de Dios. Vivimos como gente impactada por el amor de nuestro Padre, pero sin el deseo de proclamar su palabra. En este sentido, una muestra verdadera que podríamos dar del impacto que Dios ha causado en nosotros, es re�ejar en nuestra vida el deseo que tenemos por proclamar su pala-bra. Si este deseo no está entre nuestras principales prioridades, es porque aún necesitamos que la presencia de Dios nos inunde y eso se logra con una relación más estrecha entre el Salvador y aquel que ha sido salvado.

Oración: Señor haz de nosotros hombres y mujeres que impactados por tu presencia podamos trans-formarnos en proclamadores de tu Palabra sin temor.

Sin temor para hablar de Jesús



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“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí” Salmo 51:10



Qué tremenda profundidad de reconocimiento encontramos en estas palabras expresadas por el Rey David. Felizmente hubo alguien que le mostró la realidad de su vida. David estaba viviendo de apariencias, puesto que seguía reinando, viviendo en un palacio, siendo atendido con honores, vistiendo ropajes �nos; pero, en el interior de su ser no había una plenitud de vida. Él había pecado y cometido faltas que podía ocultar de sus súbditos, pero que no podían ocultarse del Dios Altísimo. Es en este contexto, en el que las palabras dichas por este rey expresan una íntima convicción de pecado y de reconocer la necesidad que tiene de renovar su vida interior. Estas palabras son producto de un verdadero arrepentimiento.

Es terrible darse cuenta que se ha pecado y no tener la esperanza de cambiar. Mantener la carga y el dolor que no nos permite disfrutar de las grandes bendiciones que nuestro Señor ha preparado para sus hijos, resulta igualmente doloroso. Tal como lo advirtió David, el único que puede crear un corazón limpio en nosotros es Jesús, nuestro Señor. Por este motivo, debemos dar gracias a Dios cuando uno de sus siervos �eles, nos avisa de algún pecado cometido. Esta confesión de pecado produce un avivamiento en nosotros. Ningún pecado es demasiado grande para no tener perdón del Señor. El reconocer el pecado y recibir el perdón de Dios nos permitirá renovar la obra de Dios en nosotros. Nos llevará a vivir en una mayor obedien-cia a Cristo y a su mensaje.

Oración: Señor despierta mi corazón y mi mente; aviva el fuego de tu presencia en mi corazón y mi vida.

Renovados en tu presencia

“Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido de modo que entendiesen la lectura. Y Nehemías el gobernador y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo,

Día santo es a Jehová nuestro Dios, no os entristezcáis ni lloréis, porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley”. Nehemías 8:8-9

El pueblo de Israel tenía conocimiento de la Escritura. Ellos sabían quién era Dios, puesto que habían experimentado su mano poderosa cuando los libró de la mano del opresor y abrió el mar para que pasaran por él. También, habían disfrutado de las bendiciones y provisión divina cuando cruzaban el desierto. En �n, Dios había sido muy protector con ellos en todo momento. Pero sus corazones se habían apartado de Él, adoptando costumbres y prácticas que eran tan distantes del llamado de Dios. Por estas últimas razones, estuvieron en muchos momentos de su historia esclavi-zados viviendo el rigor de los pueblos vecinos.Pero hay un hombre de Dios, uno que no era sacerdote, no un hombre religioso, sino uno como la mayor parte del pueblo, que hace un pacto nuevo con su Creador. Pone el sentido en la lectura, sabe que allí Dios habla palabras de vida eterna, que traen una real transformación a la vida y carácter de la gente. El tenía una verdadera relación con Dios, quería hacer su voluntad. Cuando las personas escucharon la Palabra, entendiendo el llamado del Señor, sus corazones fueron in�amados de un nuevo fervor, de una decisión que les consoló y cambió su futuro. De la misma manera nosotros podemos tener un cambio verdadero en nuestro caminar y ser impulsados por del poder de su Espíritu Santo.

Oración: Dios trae sobre la iglesia un avivamiento de tal modo que veamos vidas transformadas por tu poder.

Avivamiento venido del cielo

Pastor Ernesto Cornejo


13

“Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho, ¿No será este el Cristo? Juan 4:29

DÍA 23,VIERNES 23 DE AGOSTO 2013


Sí, la pregunta de la mujer es respondida con creces por las señales que se dan en el contexto de la historia narrada en este pasaje. Ella es una mujer desconocida, de la que no se sabe su nombre; pero ha quedado hasta el día de hoy registrada su experiencia personal con Jesús. Era mujer desvalorada, con una gran canti-dad de cargas, rechazo, abandono, prejuicio y descali�cación. A ella, la solitaria, que tenía que buscar agua cuando nadie más lo hacía para no sufrir más heridas; se le aparece Jesús y le pide agua. Entre esta mujer y Jesús, se establece el contacto que se convertirá en el puente con la vida eterna y un cambio en el corazón, una vida transformada y restaurada, muerte cambiada en vida, fracaso y descon�anza cambiados por fruto abundante y seguridad. No más religiosidad sino un verdadero culto al Dios vivo. No más sustitutos sino la verdadera comunión con Dios. Este encuentro con el Camino, la Verdad y la Vida es el que cambia y llena el vacío del corazón de una mujer que después de eso tenía mucho que decir. Ya nunca más se escondería, nunca más volvería a sentir temor y angustia.En este cambio de vida de tormentos a sanidad, habló con fuerza a su generación. Sus vecinos vieron y descubrieron la esperanza. Creyeron en Cristo y proclamaron que él era el Salvador del Mundo. A partir del ejemplo de esta mujer, reconocemos que una persona que está llena de la presencia de Dios provocará que aquellos corazones llenos de dolor puedan ser sanados. Déjate llenar del Espíritu de Dios y conviértete en un agente de cambio.

Oración: Señor que tu Espíritu Santo nos in�ame con el fuego de tu poder para predicar tu palabra en nues-tra nación

Avivados para ser usados


“Acercándose a Él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, más para Dios escogida y preciosa, vosotros también, como piedras vivas sed edi�cados como casa espiritual

y sacerdocio santo, para ofrecer sacri�cios aceptables a Dios por medio de Jesucristo” 1ª Pedro2:4-5

Cristo es la piedra viva, que fue rechazado por la humanidad; sin embargo, ante Dios, el Padre, él es el único sacri�cio aceptable. Permanentemente, el mundo se aleja de Dios, quiere hacer su propia voluntad, seguir en los deseos de su corazón, sin darse cuenta que eso lo lleva cada vez más a la destrucción. Nosotros debe-mos apreciar lo que Cristo hizo a nuestro favor y reconocer que la única solución a una vida abundante y plena es la edi�cación de nuestro ser bajo la dirección y principios divinos. La vida del Señor está en noso-tros y nos hace estar vivos. Podemos edi�car una casa espiritual, recibir la luz de Dios para proyectar la obra que el Señor quiere hacer en nuestra generación. Necesitamos edi�car de acuerdo a los planos que El ha diseñado, todos nosotros estamos convocados a realizar sacri�cios aceptables, esto es por medio de Jesu-cristo. No existe para ello una minoría selecta, sino que todo su pueblo puede ofrecer a Dios entrando hasta el trono de la gracia, viviendo una vida santa. Este tiempo que se aproxima es una nueva oportunidad que el Señor nos entrega para soñar y visionar con la piedra viva que es Cristo. Y al mismo tiempo ser avivados por el fuego de su presencia en nosotros.

Oración: Señor rogamos vivir un avivamiento en tu obra y que la visión y sueños vengan de ti.

Piedras Vivas


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“…. Y oí una voz que me decía: Levántate, Pedro, mata y come. Y dije: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda entró en mi boca”. Hechos 11:4-9



Nos habla esta historia de la ocasión en que Pedro relata la visión que le dio Dios estando en Jope, acerca de una obra especial que debía realizar. Por la variedad de animales que vio en un lienzo y por la voz que escu-chó en su visión, signi�có negarse a sus costumbres, sus tradiciones, su religiosidad, negarse a toda aquella rigurosidad en la que había sido formado para cambiar un paradigma para él. No era una decisión fácil de tomar, signi�caba también renunciar a su sistema de creencias y convertirse de nuevo. Pero había claras muestras que era de Dios lo que estaba produciéndose. Él observó atentamente e hizo memoria de lo que había aprendido desde la niñez. Consideró las implicancias de su decisión y comprendió que la voz que oía era del Señor. Él conocía la forma de hablar de Dios. Este hecho lo comunicó a la iglesia, lo conversó con sus hermanos y se hizo acompañar de ellos. Producto de su obediencia hubo un derramamiento de la presencia de Dios en medio de los gentiles. Había una multitud de personas que no conocían al Señor. Este derramamiento fue de gran bendición a la iglesia. Hoy también puede pasar, si alguno de nosotros escucha al Señor, dispone su vida, se decide a seguir el camino en obediencia, aun rompiendo con los cánones establecidos. Podremos ver, en este tiempo una iglesia llena de su Presencia y lograremos alcanzar al perdido en todo lugar porque Dios está con nosotros. Oración: Dios que podamos vivir pegados a ti cada día y tengamos la fuerza y el valor para emprender algo grande en nuestro país.

Emprendiendo grandes cosas

“… Oh Jehova, aviva tu obra en medio de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer” Hab.3:2

Necesitamos estar dispuestos a interceder por nuestra tierra. Necesitamos ser un catalizador que pueda producir cambios profundos en nuestra nación. Si Dios va a mover a su iglesia, debemos, en primer lugar, reconocer ante él que hemos pecado y no hemos tomado en serio la responsabilidad entregada de ser canales de bendición y de gracia en medio de una sociedad que ha perdido la importancia de considerar a Dios en cada una de sus acciones o toma de decisiones. Dios quiere mover a su iglesia para que juntos a través de la oración, el testimonio y nuestro compromiso con la sociedad, podamos corregir el curso de nuestra historia nacional. Dios busca corazones sinceros y contritos que puedan levantar un clamor espe-ranzador en bien de nuestro país. Corazones sinceros y contritos es la estrategia de Dios para cambiar nues-tra nación. Oramos para que Dios avive su obra en medio de estos tiempos, para que su palabra pueda �ore-cer y su Espíritu se pueda mover con absoluta libertad.

Oración: Dios trae sobre la iglesia un avivamiento de tal modo que veamos vidas transformadas por tu poder.

Aviva tu Iglesia, Señor

Pastor Mauricio Reyes


15

“Mirad, bendecid a Jehova, vosotros todos los siervos de Jehova. Los que en la casa de Jehova estáis por las noches. Alzad vuestras manos al santuario y bendecid a Jehova”. Sal. 134:1-2

DÍA 27 MARTES 27 DE AGOSTO 2013


Es tiempo de empezar a valorar las cosas que Dios valora. Lidiar con las cosas santas de Dios no siempre se nos torna fácil. Me sobrecoge leer que David era un hombre que constantemente estaba “tras el corazón de Dios”. Él era un perseguidor de la presencia de Dios. Pero ¿Qué ocurre con nosotros? Podemos levantar tem-plos muy hermosos, formar coros muy grandes, escribir música con excelencia, predicar sermones fenome-nales; pero, si no estamos siendo controlados por el Espíritu Santo y no hay un anhelo por su presencia mani�esta, entonces lo que hagamos a Dios no le complacerá. No podemos jugar con las cosas sagradas de Dios, pues en algún momento el Señor dirá “basta ya de tanta liviandad”. En este día, queremos que Dios nos incomode por nuestra super�cialidad y pereza al no asumir que el llamado del Señor es a marcar la diferencia en el mundo donde nos desenvolvemos. A manifestar a todos que en Cristo hay salvación, hay restauración. Que lo único que cambiará al mundo es nuestra decisión de aceptar el desafío de nuestro Rey y Señor de ser sal y luz para un mundo sin esperanza. Vuelva su rostro hacia él y pregúntele ahora qué es lo que realmente quiere de ti en particular. La respuesta le cambiará a usted para siempre.

Oración: Señor oramos para ser incomodados por ti, por tu presencia y por tu Espíritu Santo, no nos dejes Señor.

Anhelando tu presencia cada día

“Y viendo Jesús a la multitud alrededor de sí, mandó pasar a la otra parte del lago. Y llegándose un escriba, le dijo: Maestro, te seguiré a donde quiera que fueres. Y Jesús le dijo: Las zorras tienen cavernas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del hombre no tiene donde recueste su cabeza. Y otro de sus discípulos le dijo: Señor, dame permiso para que vaya

primero, y entierre a mi padre. Y Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos”. Mateo 8:18-22

Seguir a Jesús nunca ha sido fácil. Con frecuencia implica pagar un alto costo. Sin embargo, ser discípulo de Jesús es una inversión que repercute por la eternidad. Cuando Jesús invita a sus discípulos a mirar el campo que está listo para la siega, está imprimiendo en la vida de sus seguidores la urgencia de comunicar la verdad de salvación con prontitud. La gente se encuentra necesitada y requiere atención con urgencia. El discipulado al cual Jesús nos invita es un disci-pulado radical. Es tan radical como su exigencia, obediencia absoluta a sus mandatos. Por esto, pedir en oración volver nuestro rostro hacia el Señor en un mover de su presencia en nuestras vidas, es simplemente aceptar la radicalidad del discipulado al cual nos invita el Señor. Es aceptar de manera integral la enseñanza de Jesús de estar dispuestos no sólo a navegar en su barca sino literalmente ser discípulos sometidos a navegar en aguas profundas. Se dice que el creyente es un diamante en proceso de corte en el taller del maestro; pero, me gusta más la imagen del creyente como semilla cuyas posibilidades de crecimiento no tienen límites, salvo lo que al Padre le place hacer en nosotros.Amado hermano, buscar un mover de su presencia en nuestra vida es aceptar obediencia radical a aquel cuya gracia amorosa y �delidad nunca fallarán. Nuestra oración es que si vamos a pedir un mover de su presencia en nuestras vidas, hoy estemos dispuestos no sólo a escuchar la voz de Dios sino que a aceptarla y hacer lo que él nos pida. El disci-pulado radical es un proceso de autonegación y renuncia a la comodidad, seguridad y posición social.

Petición de Oración: Dios te pedimos que volvamos nuestro rostro hacia ti en búsqueda de un mover de tu presencia en cada una de nuestras vidas y de cada iglesia.

Buscando tu rostro cada día



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“Confía en el Señor y haz el bien. Entonces vivirás seguro en la tierra y prosperarás. Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón”. Salmos 37:3-4



Los problemas que enfrentamos diariamente en nuestra nación tienden a ser muchas veces abrumado-res. Pareciera que la falta de fe y esperanza impide que el alma del ser humano se pueda elevar como el águila. Extender las alas y colocar la mirada en los riscos pareciera ser un esfuerzo determinado al fraca-so. Dios nos desafía en este día a levantar nuestra mirada al cielo, postrados en una oración que se alza por encima de las nubes y nos aventura a remontarnos en medio de las montañas más altas. La fuerte tempestad y el ruido de las cascadas serán nuestra música y llamado para recorrer los corredores del cielo con un mensaje esperanzador “Dios nunca nos abandona” y él es poderoso en hacer grandes proezas en medio de nuestro país. Este es un tiempo para dejarnos guiar por la mano de Dios; éste es el tiempo en que él está actuando. Su reloj siempre es exacto y su mano sobre nuestra nación es un timón que nos conducirá a puerto seguro.

Oración: Señor que muchos en mi país sean impactados por lo que tú comenzarás a hacer en medio de nosotros.

Dios trabaja poderosamente en mí

“Tornaré camino todos mis montes” Is.49:11

Se dice acerca de Moisés que “él se sostuvo como viendo al invisible”. Moisés perseveró cuando las circunstancias no le fueron favorables. Y tú ¿Qué tipo de cristiano eres? Te sientes como un creyente tipo montaña rusa. Un día poderoso en el Señor porque te encuentras en la cima de la montaña, y mañana en el valle totalmente aproblemado y desanimado. También, puede que seas un creyente intermitente que mantienes tu luz sólo cuando las condiciones son favorables, pero en los tiempos de crisis te apagas fácilmente. La fe de Israel dependía de las circunstancias, la fe de Moisés dependía de las promesas de Dios. Nues-tra oración de hoy es que la presencia de Dios nos pueda mojar con su lluvia temprana y tardía, que su lluvia nos moje completamente de manera que nos pueda empapar con el fuego de su presencia. Que podamos desplegar nuestros corazones como alas que crecen de prisa y nos elevan al cielo levantándo-nos y remontándonos hacia Dios en pos de aquellos por los cuales él amó y murió.

Oración: Dios toca, renueva, transforma y llénanos del fuego de tu presencia en nosotros y de tu pasión por los perdidos.

Empapados de su presencia



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“Me complace hacer tu voluntad Dios mío, pues tus enseñanzas están escritas en mi corazón” Salmos 40


DÍA 32, DOMINGO 1 DE SEPTIEMBRE 2013

Amor y obediencia van de la mano en nuestro caminar cristiano. No podemos decir que amamos a Dios si no le obedecemos. Actualmente, estamos insertos en medio de una cultura evangélica que camina cada día más en pro de las emociones antes que de las convicciones. Nos estamos convenciendo que con sólo dar pequeñas muestras de espiritualidad con eso basta en nuestra devoción al Señor.Cuando recordamos que las mayores crisis espirituales que enfrentamos nacieron producto de nuestra falta de obediencia al Señor es ahí cuando debemos re�exionar en lo que verdaderamente es amar a Dios.

Es por ello que necesitamos levantar nuestro clamor al Señor para que él nos haga siervos y siervas que le amen y obedezcan por sobre todas las cosas, pues no hay dolor más grande con el cual debemos cargar cuando en nuestra intimidad con Dios sabemos que vivimos en base a las apariencias lo cual re�eja que efectivamente no amamos a Dios. Pero, así también no hay mayor gozo al descubrir que estamos cumpliendo con la voluntad del Señor para nuestras vidas.

Oración: “Señor pedimos que los pastores te amen a ti con todo su corazón y busquen hacer tu volun-tad”.

Dios trabaja poderosamente en mí

Pastor Marcelo Leiva

“Y levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba”.Marcos 1:35; (Hechos 6:1-7)

Una de las cualidades que más me impresionan del ministerio de Jesús aquí en la tierra, es que fue un hombre de oración. Y es verdad que la Biblia nos da testimonio de muchos otros hombres que también lo fueron y que esa cualidad les permitió ser usados tremendamente por el Señor; pero que JESÚS, el Hijo de Dios, nos dé testimonio de la importancia de la oración, es algo que nos debe desa�ar a pensar que si él descubrió y sintió la necesidad de orar, cuanto más nosotros.De esta manera, comprendemos el hecho de que cuando los apóstoles se sintieron tentados a emplear sus energías en otras tareas importantes y necesarias, determinaron entregarse continuamente a la oración y al ministerio de la Palabra (Hechos 6:4). Ellos habían sido formados e impactados por la vida de oración de Jesús.

Oración: “Señor pedimos que tus siervos sean llenos de tu poder y de tu presencia. Que sean hombres de oración”.

Hombres de Oración


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Un ángel del Señor habló a Felipe, diciendo: Levántate y ve hacia el sur, por el camino que desciende de Jerusalén a Gaza, el cual es desierto. Entonces él se levantó y fue. Hechos 8:26-40

DÍA 33, LUNES 2 DE SEPTIEMBRE 2013

DÍA 34, MARTES 3 DE SEPTIEMBRE 2013

Quisiera invitarle a re�exionar como el sólo hecho de vivir en un mundo tan avanzado en lo que a tecnología se re�ere, nos está transformando cada vez más en personas que disfrutan de la comodidad. Este hecho no está mal, pero cuando ese estado de casi pasividad se inmiscuye en nuestro ministerio al Señor estamos en problemas.Todavía puedo recordar cuando por primera vez llegó la señal de la radioemisora Armonía a mi ciudad natal. Toda una bendición era el sintonizar la radio y escuchar una emisora cristiana. Pero también puedo recordar como comenzaron a haber hermanos que ya no iban al culto dominical y se excusaban que se habían “alimentado espiritualmente” con la radio. Hoy ya estamos en el tiempo donde los cultos se transmiten online e incluso el pastor envía su sermón dominical a sus hermanos a través del correo electrónico. Frutos de una sociedad cómoda.Dios se caracteriza por deshacer nuestra comodidad y así nos encontramos con el relato de Felipe. Él era uno de los siete diáconos, hombre de buen testimonio, lleno del Espíritu Santo y lleno de sabiduría. Una de las cualidades en que más destacaba era ser un servidor: estaba a cargo de servir a las viudas judías de habla griega y a los pobres en la iglesia de Jeru-salén. También, era un evangelista que cuando se encontraba en lo mejor de su ministerio, Dios le ordena dejar “esa comodidad” y lo manda a un nuevo campo ministerial, donde descubre que no hay mayor gozo que obedecer al llamado del Señor.

Oración: “Señor te pedimos que nuestros ministerios y liderazgos sean dirigidos por tu Espíritu Santo y que recibamos la dirección de Dios para nuestras vidas”.

Ministrando con gozo

“Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres. Ellos entonces, dejando al instante sus redes,le siguieron”. Mateo 4:17-25

No hay mayor herramienta evangelizadora que el testimonio personal, es decir, que otros puedan evidenciar lo que Cristo ha hecho en nuestras vidas. Por eso resulta desa�ante comprender que nuestro ministerio lo desarrollamos “24/7”, es decir, las 24 horas del día los 7 días de la semana. No somos pasto-res sólo cuando estamos ministrando en el culto, en la visitación pastoral o en la consejería; somos ministros del Evangelio los 365 días del año. Por esto, es fundamental que vivamos una vida santa e integra para Dios la cual sea de testimonio para nuestra congregación y comunidad.Las personas están cansadas y aburridas de toparse con hombres que aparentan una religiosidad basada en moldes o estructuras; más están carentes de hombres y mujeres que vivan una espiritualidad real que motive a los demás. Un testimonio real fue el que los discípulos encontraron en Jesús que ante la sola invitación de seguirle lo dejaron todo y le siguieron.

Oración: “Señor que nuestras vidas sean vidas santas e integras de tal manera que seamos testimonio para nuestras congregaciones y comunidades”.

Vidas santas e integras para servir


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“Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: juzgas sí es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios”. Hechos 4:19

DÍA 35, MIERCOLES 4 DE SEPTIEMBRE 2013

DÍA 36, JUEVES 5 DE SEPTIEMBRE 2013

Días atrás en una reunión de pastores evangélicos de mi ciudad, se manifestaba la preocupación por aquellos “líderes” del pueblo evangélico pentecostal que se han abanderizado con ciertos candidatos presidenciales. Principalmente, cuando se sabe a vox pópuli la postura política de tales candidatos y los principios morales que promueven, los cuales van contra la Palabra del Señor. Esto me hacía re�exionar acerca de cuál será el motivo que debe impulsar a un hombre, que fue llamado por Dios a predicar su Palabra, a anhelar “estar al lado de…”; incluso, estando dispuesto a tranzar su fe.Distinto es el ejemplo bíblico que encontramos en Pedro y Juan, los cuales al ser intimidados a no seguir predicando de Jesucristo su respuesta unánime fue: “Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído” (Hechos4:19,20). Es decir, no estuvieron dispuestos a silenciar su predicación tan sólo por buscar el favorecimiento de sus gobernantes.

Oración: “Señor que busquemos agradarte a ti en lugar de los hombres y busquemos la santidad en vez de la alabanza de la gente”.

Servir agradando a Dios en lugar de otros

“Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra”. Hechos 6:4

Una hermana llama “desesperada” al pastor, quien responde prontamente al llamado y se dirige a la casa de la preocupada hermana. Al llegar a la casa, lo que realmente la hermana necesitaba no era un consejo ni una oración. Necesitaba que alguien le arreglara la llave de la cocina que se había dañado. El pastor ayudó a reparar la llave dañada, se despidió de la hermana y volvió a su casa. Él tenía sentimien-tos encontrados: Por un lado, feliz de haber ayudado a la hermana, que por cierto, tiene marido. Y, por otro lado, una sensación extraña de haber perdido tiempo precioso, que había destinado de antemano para buscar la presencia de Dios. Quizá hizo lo urgente, pero no lo prioritario. Sin darnos cuenta, olvidamos que el ministerio principal del siervo de Dios es la oración y la palabra. Estas acciones, que parecen tan obvias, muchas veces son descuidadas en la vida de un siervo, por hacer lo urgente por sobre lo prioritario. Además, resulta difícil aceptar que un pastor dedique todo un día a orar o leer la biblia, sin pensar que “no hizo nada en todo el día”. Que nuestro buen Dios, tenga misericordia de nuestras iglesias y pastores y nos permita, al igual que los apóstoles, actuar con convicción al decir: “No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas” (Hechos 6. 2). Que nuestros pastores puedan vivir sedientos de buscar el sustento en la palabra y el poder en la oración para cada ministerio y cada iglesia Bautista Chilena.

Oración: Dios que tu palabra sea su alimento y que la oración sea su sustento para un ministerio prós-pero y e�caz.

Una palabra que se sustenta en la Palabra y en la Oración

Pastor Leovaldo Chea

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“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación.” 1 Pedro 2:2

DÍA 37, VIERNES 6 DE SEPTIEMBRE 2013

Parecía increíble, pero el recién nacido presentaba serios problemas de Hipotiroidismo. Los exámenesposteriores al bebé y a la mamá arrojaron que una de las probables causas de esta alteración fue el consumo de leche adulterada con sal y agua, por parte de la madre. Este consumo es una práctica común en muchos lugares de la India a pesar del conocimiento del gobierno. Se a�rma que las dos terceras partes de la leche consumida en la India es adulterada, especialmente, con agua y sal. Fue este último elemento el que afectó al bebé provocando esta altera-ción. Es sabido que la leche adulterada, además de perder su valor nutritivo, puede ser dañina para quienes la consu-men.La biblia se re�ere a la leche adulterada, dando a entender los diferentes pensamientos ajenos a la pureza de la palabra de Dios. Hoy los pastores son tentados a combinar la palabra con otros pensamientos que parecen buenos, pero que pueden producir daños espirituales profundos en quienes los reciben. Aún sin darnos cuenta, hemos acepta-do y enseñado como doctrinas inapelables, formas de hacer las liturgias, que pueden parecer buenas, pero que alteran la pureza de la intención �nal del evangelio de Jesucristo. Hoy, desde los púlpitos, escuchamos tendencias �losó�cas diversas, teologías sociales, mensajes motivacionales de autoayuda, pasos sencillos para el éxito, entre otras ideas. Frente a esto, el apóstol San Pablo lo advierte: “teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros según sus propias concupiscencias” (2 Tim 4.3). Que nuestro buen Dios, guie a nuestros pastores a evitar que el mensaje nítido, puro y sencillo del evangelio, sea adulterado con pensamientos humanos y terrenales. El mensaje puro del evangelio es lo que nuestras iglesias, familias y sociedad necesitan escuchar de parte de los pastores, que son los profetas de nuestro tiempo.

Oración: Señor oramos para que tus siervos prediquen tu palabra y sean �eles ministros de ella.

Fieles a la Palabra

“Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? Y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo.

Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas”. Juan 21:17

DÍA 38, SABADO 7 DE SEPTIEMBRE 2013

El pequeño, desde el rincón de su silla, observaba absorto a aquel hombre, que hace unos minutos, había hablado en nombre de Dios desde el púlpito. En su pequeña mente, no cabía el gozo de poder imaginar que Dios mismo, hablaba por medio de ese hombre, que ahora le parecía tan especial y, por tanto, muy distante. Era una especie de “extra-terrestre”, que traía un mensaje desde las estrellas. De pronto, el hombre que ya estaba sentado, se volvió a mirar a la gente. El pequeño, agrandó sus ojos de impresión, cuando veía que la mirada del hombre estaba recorriendo todo el templo y se acercaba poco a poco al rincón donde él se encontraba. Al �n, las miradas se cruzaron. El hombre de Dios �jó sus ojos en el niño que ahora estaba “congelado”. En esos pequeños segundos, el hombre le sonrió al niño y le hizo un pequeño guiño con su ojo. Con ese pequeño gesto, el niño pudo sentir, que el hombre tan admirable, casi un extra-terrestre, era una persona común y corriente. Solo con la mirada, la sonrisa y el guiño le hicieron sentir como si fuera el niño más importante en ese momento. Parecía increíble que un hombre, que demostraba ser muy poderoso al subir al púlpito, era también muy cuidadoso en practicar el amor y la atención, incluso al más pequeño. Sin duda, el desarrollo del ministerio pastoral consiste en un gran equilibrio entre las alturas de hablar en nombre de Dios y mantenerse a nivel del suelo, con cada una de las ovejas del redil. Parece ser una gran tarea, además de compleja, preocuparse de los “negocios del padre” sin olvidar los pequeños detalles. Nadie mejor que Jesús, pastor de pastores, para darnos este ejemplo: “Cien por ciento Dios, habitando entre los seres humanos siendo uno más”. Él mostró que es completamente posible llevar un ministerio tan grande haciéndose muy pequeño. Precisamente él, entre otras acciones, se dio el tiempo para honrar a Dios, atendiendo a cada grupo, entre ellos puso de ejemplo a los niños. Esta es la forma de traer honra y gloria al Dios que les ha llamado.Oración: Dios que haya pastores con corazón de siervo y que sus ministerios traigan gloria y honra a tu nombre.

Simplemente siervos



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Cristo es la piedra viva, que fue rechazado por la humanidad; sin embargo, ante Dios, el Padre, él es el único sacri�cio aceptable. Permanentemente, el mundo se aleja de Dios, quiere hacer su propia voluntad, seguir en los deseos de su corazón, sin darse cuenta que eso lo lleva cada vez más a la destrucción. Nosotros debe-mos apreciar lo que Cristo hizo a nuestro favor y reconocer que la única solución a una vida abundante y plena es la edi�cación de nuestro ser bajo la dirección y principios divinos. La vida del Señor está en noso-tros y nos hace estar vivos. Podemos edi�car una casa espiritual, recibir la luz de Dios para proyectar la obra que el Señor quiere hacer en nuestra generación. Necesitamos edi�car de acuerdo a los planos que El ha diseñado, todos nosotros estamos convocados a realizar sacri�cios aceptables, esto es por medio de Jesu-cristo. No existe para ello una minoría selecta, sino que todo su pueblo puede ofrecer a Dios entrando hasta el trono de la gracia, viviendo una vida santa. Este tiempo que se aproxima es una nueva oportunidad que el Señor nos entrega para soñar y visionar con la piedra viva que es Cristo. Y al mismo tiempo ser avivados por el fuego de su presencia en nosotros.

Oración: Señor rogamos vivir un avivamiento en tu obra y que la visión y sueños vengan de ti.

“Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres �eles que sean idóneos para enseñar también a otros.”2 Timoteo 2:2


Finalmente aceptó la invitación. Después de varias invitaciones apareció en el culto principal de la iglesia, siendo un perso-naje público, conocido en la ciudad, no pasó desapercibido. Los ujieres se encargaron de darle el mejor asiento posible. La gente no podía dejar de mirarle mientras cantaban los himnos. Durante todo el servicio, se mantuvo atento y procuró inclu-so cantar las canciones con la letra que se proyectaba. Escuchó el mensaje y al momento del llamado, se atrevió a levantar la mano. El mismo pastor estaba sorprendido que un personaje tan ilustre y conocido en la ciudad haya levantado, tímida-mente, la mano para recibir a Cristo. Al terminar el servicio, el pastor procuró acercarse y le invitó a pasar unos minutos a su o�cina. Cuando estaban adentro, le agradece su asistencia y en la misma conversación “aprovecha” la oportunidad de pedir-le “un favor”, ya que hay trámites pendientes con el terreno del templo. El personaje felicitó al pastor por el lindo servicio, le pasó una tarjeta para que fuera donde corresponde a terminar su trámite y de paso le solicita salir por una puerta donde no haya mucha gente. Así, se fue de la iglesia, cumplió su palabra y nunca más volvió. En la iglesia, la mayoría de las veces, si vemos a un pobre queremos darle ropa y pan. Si vemos un rico, queremos pedirle un favor. Hacemos un evangelio utilitario, a favor de las actividades del templo para satisfacer nuestras propias conciencias. Olvidamos que el llamado de Jesús es a las personas y no a las cosas ni a las actividades. Mucho menos a los cargos. Los templos no llegarán al cielo ni lo harán nuestrasorganizaciones; lo harán las personas. Ciertamente el pobre y el rico, el niño y el anciano, el varón y la mujer; todos por igual necesitan escuchar la pureza del evangelio del reino de Dios y cada nuevo convertido, puede ser un mensajero �el del evan-gelio de Jesucristo a las personas de su alrededor. Esperamos que en este tiempo de oración, disminuya el activismo y crezca la pasión por las nuevas almas, y que se apliquen antiguas y/o nuevas estrategias; pero, que al �n el evangelio sea predicado de todas las formas posibles.Oración: Dios que los pastores sean hombres de la gran comisión, comprometidos con el evangelismo.

Ganando almas y equipando a los santos

“Este evangelio está dando fruto y creciendo en todo el mundo, como también ha sucedido entre ustedesdesde el día en que supieron de la gracia de Dios y la comprendieron plenamente”. Colosenses 1:6


No dejaba de llorar desconsoladamente, quienes estaban alrededor procuraban tranquilizarle, infructuosamente. Por su mente, pasaban los recuerdos de su padre, cuando jugaban juntos, cuando de manera “cómplice” le ayudaba a evitar algunas merecidas reprimendas de su mamá. Recuerda su sonrisa triste, cuando partió de casa y ella le reclamaba con su mente de niña, pues no quería que se fuera tan lejos.Él le dijo que la amaba tanto, que la llevaría en su corazón, pero que había muchas personas que aún no se encontraban con Jesús. Siguen sus recuerdos de cuando la tenía en sus brazos y le contaba historias bíblicas. Fue sentada a sus pies que decidió abrir su corazón al Jesús de su padre. Él le aseguró que si tenía a Jesús en su corazón, llegaría el momento que volve-rían a estar juntos; pero, nunca pensó que viviría un dolor tan grande. Le parecía imposible que en Corea del Norte, su propia patria haya hecho desaparecer a su padre. Nunca pensó que amar a Jesús involucraba pagar un precio tan alto. Desde ese día lleno de dolor, decidió seguir los pasos de su padre. Aunque no puede volver a Corea, junto a su esposo pastor, procura concientizar a todas las iglesias del mundo, sobre la gran y cruel persecución de Corea del norte. La comodidad de nuestros templos y nuestras metas locales, nos impiden entender en perspectiva el mandato de Jesús: “a las naciones”. Mientras pasan los años y nuestras iglesias crecen a un mínimo inacepta-ble, en otras latitudes, los creyentes son perseguidos, torturados y asesinados. Especialmente en países con ideología marxista e islámicas. Según datos concretos, Europa será musulmana en los próximos diez años. Mientras que Corea del Norte es una de las naciones más pobres del mundo, pero con una acérrima persecución a loscristianos. Es tiempo que los pastores y las iglesias despertemos de nuestro letargo y veamos que estamos en las mejores condiciones para extender el evangelio de Cristo a todas las naciones. La proclamación del evangelio debe ser siempre más allá de las fronteras de nuestro templo. Jesús dejó su comodidad, también Pablo abandonó su status y todos los discípulos renunciaron, no solo por ir a un nuevo templo, si no por llevar el evangelio hasta lo último de la tierra. Con�amos que estos cien días, remecerá nuestra comodidad y nos inquietará a una visión mundial de la evangelización.

Oración: Dios que tus siervos sean sensibles a las necesidades en el mundo y que tengan pasión por los que viven sin Cristo.

Sensibles y con pasión por los perdidos



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“Entonces él se levantó y fue…. Y el Espíritu dijo a Felipe: Acércate y júntate a ese carro”. Hechos 8:26-40


Gracias a un hombre de visión puedo escribir estas líneas. El pastor Luis Ramírez me contaba que un día fue a visitar por los campos en su vieja citroneta. Llegó a una casa donde había alrededor de diez personas a quienes les presentó el evangelio, pero ninguno aceptó a Cristo. Luego de ese encuentro defraudante, siguió su camino. Llegó a un lugar en el que se encon-traba un hombre arreglando el cerco de su terreno. El pastor le presentó el evangelio y el hombre aceptó a Cristo. Posterior-mente, llevó al pastor a su casa en donde su esposa también recibió al Señor. Más tarde, aquel hombre testi�caría que se había propuesto en su corazón abrazar la fe de la primera persona que le hablara de las cosas espirituales. Actualmente, dos de las hijas de aquel matrimonio campesino son profesionales y esposas de pastores en nuestro país. Un hombre de visión que luego visitaría la cárcel donde conoció a mi abuelo que se encontraba preso porque lo habían acusado de haberse robado una gallina. Mi abuelo estuvo el tiempo su�ciente en aquel lugar para conocer al Señor por medio del siervo Ramí-rez. Cuando salió en libertad, invitó al pastor a su casa y mi madre conoció al Señor. A partir de estos acontecimientos, se inició la obra en esa localidad y ahora existe una iglesia bautista.

Los hombres de visión siempre serán aquellos que estén dispuestos a oír y obedecer al Señor. Felipe es uno de ellos. “Leván-tate y ve” fue la orden (Hechos 8:26). Felipe “se levantó y fue”. Felipe estaba haciendo un buen ministerio en la ciudad de Samaria (Hechos 8:5, 12); sin embargo, no dudó en ir a los caminos solitarios y “desiertos” (8:28c), en busca de aquel hombre con la misma sed espiritual del campesino que arreglaba su cerco.

Pidamos a Dios entonces por los pastores para que sean hombres de visión y sus oídos espirituales estén atentos a la voz de Dios que les indica dónde quiere nuevamente volver a usarles.

Oración: Señor te pido que puedas dar tu visión a cada siervo que ministra tu Palabra y que ha sido llamado por ti.

Visión de Dios para ministrar

“El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de mi corazón” Salmo 40: 8;“Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud” Salmos 143:10


Junto al brasero, nos encontrábamos tranquilos en casa. De pronto, alguien llegó comentando que don Pedro al parecer había muerto. Pero, ¿Cómo saberlo? No había comunicación telefónica hacia los interiores del campo. Tampoco teníamos vehículos para trasladarnos a tal lugar. Teníamos excusas perfectas para no movernos; sin embargo, era imposible no escuchar la amonestación del Espíritu Santo. Entonces nos preguntamos: ¿Estaremos haciendo la voluntad de Dios o la nuestra? Una pregunta tan sencilla, pero que tuvo respuesta inmediata. Llamamos al pastor, que se encontraba a unos 50 kms, y vino rápidamente. “Llevemos una guitarra e himnarios por si acaso”-dijimos. “¿Y si no ha muerto?-nos preguntamos- “Bueno, hacemos un culto”, dijo el pastor. Finalmente llegamos a la casa de don Pedro. Un hombre de más de 90 años que con amor nos recibía cuando íbamos a predicar a los campos. Los rumores esta vez habían sido ciertos. En una sala de adobe oscura velaban sus restos. Luego lo subieron a una camioneta que corría como a 60 kms., porque estaban atrasados para el servicio religioso. Seis a�rmaban el cajón y en medio de una gran polvareda, nos dirigimos a la capilla. Posterior al servicio, los familiares le pasaron un sobre al cura y le preguntaron: ¿Usted nos acompaña-ría al cementerio para sepultar los restos de nuestro querido padre? El cura tajantemente les dijo: “No, no tengo tiempo” - y salió por una puerta. Caminamos silenciosamente con el cajón llevado a pulso. Había un viento tan fuerte que levantaba mucho polvo y nos di�cultaba el avanzar. Con respeto íbamos en el pequeño cortejo y debo reconocer que a veces me preguntaba qué es lo que hacíamos nosotros allí. Llegamos al cementerio y no soportando más el silencio, sacamos la guita-rra, empezamos a cantar y a predicar la Palabra. Cuando terminamos, se nos acercó un varón y nos dice: “¿Ustedes saben quién es la gran ramera? ¿Cómo puede decir un hombre de Dios: No tengo tiempo?”. El hombre nos dio su dirección y mani-festó su deseo de asistir a nuestra iglesia. Entonces, detrás de un nicho, entendí cuál había sido la voluntad de Dios y agrade-cí el estar allí, en vez de estar junto al brasero. El salmista dijo: “El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado” (Salmo 40:8a).Pidamos a Dios para que renunciemos a nuestra comodidad y a “excusas reales”, para hacer la voluntad de nues-tro Padre “y no satisfagamos los deseos de la carne”.Oración: Dios que cada siervo pueda buscar hacer tu voluntad en lugar de hacer la suya.

Haciendo la voluntad de Dios siempre

Pastor Abraham Kremar


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Lectura Bíblica: Hechos 16:9-10.


Recuerdo que cuando niño debíamos ir con mi padre y otra persona a una Caleta de pescadores. Como eran cuatro horas de camino y no teníamos vehículo, se nos ocurrió conseguir con el vecino unos burros. Para poder llegar a nuestro destino teníamos dos di�cultades: la primera es que nunca habíamos ido a la Caleta; y, la segunda, jamás habíamos andado en burros. Pero anima-dos por las recomendaciones del mismo vecino, decidimos emprender el viaje. Una advertencia surgió producto de estas recomendaciones: “Si quieren llegar a la Caleta déjense guiar por los burros”. En un principio hicimos caso a la advertencia; pero, cuando llegó la noche, guiamos a los burros por donde nosotros creíamos que era el camino correcto. Nos alegramos cuando escuchamos el sonido del mar, aun cuando en la oscuridad, con di�cultad veíamos nuestras propias siluetas. De pronto los burros se detuvieron en seco. Mi padre y la otra persona los tiraban, los empujaban, los golpeaban; pero, no hubo forma que los burros avanzaran. Cansados, dejaron de luchar con los animales. En esos momentos de no saber qué hacer, resonaron en nuestros oídos las palabras del vecino: “déjense guiar por los burros”. Así lo hicimos. Al cabo de unos 20 minutos, estábamos en nuestro destino.Al otro día al contemplar el lugar donde no habían querido avanzar los burros, nos dimos cuenta de que era un despeñadero. Si hubiéramos avanzado dos metros más, nos habríamos caído por un barranco hacia las rocas, desde una altura de unos 40 Metros. El riesgo de haber perdido la vida era una gran probabilidad. Por momentos guardamos silencio, como agradeciendo que los animales no hubieran hecho nuestra voluntad y dándonos cuenta quiénes habían sido los verdaderos burros: Nosotros.El apóstol Pablo fue impedido de ir dos veces en su ruta por el Espíritu Santo. Dios tenía una dirección de�nitiva para el apóstol. El hombre macedonio pidiendo ayuda era una muestra de la voluntad de Dios de dónde estaba la necesidad por la proclamación del evangelio (Hechos 16:9-10). El Espíritu Santo es quien nos guía a buenos lugares, pero también es quien nos aparta de los lugares peligrosos. ¿Cuántas veces nos hemos comportado como los viajeros hacia la Caleta? Seamos como Pablo quien responde al llamado del Espíritu, sin luchas y resistencias, para avanzar por el camino que Dios le había señalado. Pidamos para que cada pastor y siervo tengan la visión de Dios, porque sin ella van camino al despeñadero.

Oración: Dios muestra a cada pastor y siervo que sin tu visión no hay éxito en el ministerio.

El éxito proviene de Dios

Salmo 25:4; Proverbios 3:5-6; Hechos 9:6


¡Qué importante es la oración que acabamos de hacer! Dios tiene un plan y un sueño para cada congregación en particular. Cuán-tas veces hemos insistido en adoptar “modelos de éxito” de otras iglesias en las nuestras. Pero la iglesia en la cual usted se congrega es única, porque su gente es única. Si la iglesia quiere saber cuál es su propósito, este no lo encontrará enviando a mensajeros a congresos, cumbres, encuentros, plenarias, asambleas, cruzadas o como quieran llamarles a estas actividades que proliferan hoy en día; sino que lo encontrará cuando la iglesia, �rme y unánime, determine preguntarle al dueño de la obra en oración qué desea para ella. Saulo creía estar haciendo bien las cosas. Todo lo que hacía era producto de su celo religioso. Pensaba que estaba haciendo la voluntad de Dios. Sin embargo, en su experiencia camino a Damasco, no sólo se dio cuenta de que estaba muy lejos del plan de Dios, sino que sus actos eran un verdadero obstáculo para el desarrollo de los propósitos del Señor. A veces en nuestra vida, los siervos y los ministros también debemos caer al suelo para darnos cuenta que no estamos haciendo la voluntad de Dios. Hace unos días, me contaba un misionero que en su jardín salió una mata de tomates. La regó, la cuidó, le amarró sus ramas y le puso unos palos para a�rmarla; pero la mata de tomates no daba frutos, aun cuando se veía grande y verdosa. Un día recibió la visita de un amigo, ingeniero agrónomo, y le contó el problema de su querida mata de tomates. El ingeniero tomó un palo y empezó a darle golpes a la mata de tomates de tal manera que saltaban sus hojas. El misionero no podía creer lo que estaba obser-vando. No recuerdo por qué razón el ingeniero hizo eso, pero lo cierto es que la mata se fortaleció, �oreció y dio varios, ricos y grandes, tomates.A veces necesitamos también unos “buenos palos” o unas “buenas caídas al suelo” para volver en razón, tal como sucedió con Pablo, y darnos cuenta que estábamos haciendo nuestros propios planes y no los del Señor. Frente a esto, nace entonces la siguien-te pregunta: “Señor, ¿qué quieres que haga (“o hagamos”)?Pidamos a Dios que los siervos, los pastores y las iglesias locales estén más avocados y ocupados en comprender y ejecutar más los planes de Dios.

Oración: Señor oramos para que los planes y sueños que tú tienes para cada iglesia puedan ser puestos en el corazón de tus siervos.

Los Planes y Sueños de Dios



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“Jehová es mi pastor nada me faltará en lugares de delicados pastor me hará descansar, junto a aguas de repodo me pastoreará, confortará mi alma me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre”. Salmo 23


Cuando niño vivía en un campo, que colindaba con él de un vecino que tenía muchas ovejas y cabras. Los animales se asustaban ante su presencia, por esta razón le costaba mucho el poder apacentarlas y guiarlas. Muchas veces las cabras, que eran más rápidas, se dispersaban del rebaño y huían de él cuando intentaba juntarlas. La actitud de estos animales le causaba mucha ira, por lo que las devolvía al redil a partir de piedrazos y groserías. Casi todas las semanas, una cabra u oveja terminaba con una de sus patas quebradas o machucada por los golpes. Aquellas que lograban sobrevivir y no eran sacri�cadas, tenían que permanecer encerradas entablilladas hasta que se recuperaran. De esta forma, siendo aún un niño, me hice una apreciación de mi vecino como “el pastor malo”, porque maltrataba a su rebaño y golpeaba a sus animales.¿Les gustaría a ustedes tener un pastor así? ¿Existirán? ¡Dios nos libre! Isaías 40:11, nos dice: “Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas.”

Los seres humanos aprendemos por imitación ciertas conductas, como por ejemplo: si nos han tratado bien, tratare-mos de la misma forma a los otros; si nos han cuidado, cuidaremos a otros; y si nos han amado, amaremos a otros. En este sentido, si descubrimos en estos pasajes el cuidado de Dios sobre nosotros, seremos capaces de cuidar, amar e incluso llegar a dar la vida por quien la dio por nosotros. Los pastores que nos sentimos pastoreados por el Buen Pastor, somos desa�ados a imitarle. Contrario a mi vecino, las ovejas jamás deben tenernos miedo, jamás deben huir de nosotros por temor, jamás deben ser pastoreadas con enojo o como una carga, jamás deben ser maltratadas las que se desvían, jamás por nuestras acciones o actitudes deben ser quebradas.Cuando llegué a pastorear la iglesia, luego del fallecimiento del pastor anterior, se me acercó una hermana que no tenía mucho tiempo en la congregación, y me dijo: “El pastor anterior era un verdadero Jesús. Vaya - me dije a mi mismo – qué desafíos tan altos me quedan a mí”. Sería un gran honor para nosotros que al partir de esta vida, se dijese algo similar. Pidamos a Dios para que los ministros pastoreen sus congregaciones como Jesús lo haría.

Oración: Dios que los pastores guíen sus congregaciones con amor y les dirijan por medio del Espíritu Santo.

Los Pastores aman y cuidan de su rebaño

“…Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes”. Santiago 4:6b


La palabra del Señor dice claramente que Dios resiste a los soberbios, pero que da gracia a los humildes. Hoy en día, se requiere de ministros llenos de sabiduría, de presencia de Dios en sus vidas y ministerios y que sean llenos del poder del Espíritu Santo. Ellos deben ser hombres humildes con corazones de siervos. David fue reconocido como un hombre que tenía un corazón de siervo.Sin embargo, el mayor ejemplo de servicio y entrega lo vemos en nuestro propio Señor Jesucristo, que siendo Dios se hizo siervo de todos. Fue él quien se sometió a la voluntad de su Padre, aunque eso signi�caba cargar con todo el pecado de la humanidad. Los siervos de Dios son personas que se dejan guiar por Él, que deponen su voluntad y deseos para emprender el camino del sometimiento y rendición. Los siervos de Dios son aquellos que no esperan ser reconocidos por otros, ni andan en busca del poder o de lugares de privilegio como lo solicitaron Jacobo y Juan. Simplemente buscan agradar a quien les ha llamado al más grande ministerio: el del servicio. Señor gracias por los que te sirven con un corazón íntegro y con �delidad.

Oración: Que la humildad y sometimiento a ti Señor sea primordial en la vida de tus siervos.

Sometidos al Señor


Pastora Viviana Faúndez

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“Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres el Dios, y que tú vuelves el corazón de ellos. Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto,

la leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua que estaba en la zanja”. 1Reyes 18:37,38


Elías, el profeta de Dios, fue un siervo cuya fe es reconocida por su gran encuentro en el monte Carmelo. Una fe que le anima de tal modo a desa�ar y enfrentar a los profetas de Baal. Al leer el texto uno se puede imaginar esta escena, y pensar como un solo hombre podría atreverse a luchar contra esta gran multitud. Sabemos que Dios estaba con él; pero, sin duda alguna, Elías tenía la certeza de que Dios respondería en el momento de clamar. Elías conocía a Dios, creía en él y tenía fe en el Dios todopoderoso. Al �nal del relato vemos que Elías salió del monte Carmelo victorioso. Su fe lo mantuvo con�ado en que Dios respondería de manera sobrenatural y así lo hizo.Hoy necesitamos que los siervos de Dios puedan tener esa misma fe, que les lleve a emprender y a esperar gran-des cosas de parte de Dios. Pedimos también para que cada creyente tenga una fe inamovible.

Oración: Señor te pedimos aumentes la fe en tus siervos para emprender los grandes desafíos que tú les mues-tres.

Hombres de Fe


“Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber dónde iba” Hebreos 11:8

La Biblia nos muestra personajes que son ejemplos de fe y obediencia. Hoy queremos re�exionar en Abraham y María, madre de Jesús. Abraham fue llamado por Dios para salir de su familia y de su tierra. El Señor le mostró el lugar donde debía ir y formar allí una gran nación con la misión de bendecir a todas las familias de la tierra. Abra-ham tuvo la fe su�ciente para creer y obedecer a este llamado y visión de Dios. Él creyó que quien le había llama-do y lo invitaba a caminar por fe era alguien que tenía planes superiores a lo que él mismo hubiera soñado e imaginado. Él tuvo fe en lo que Dios le estaba señalando y comisionando. María, por su parte, es una joven mujer que creyó a un anuncio y que esperó con�adamente en que todo lo que aconteciera desde ese momento sería parte del plan de Dios para ella, para toda la nación y para las generaciones futuras.Ellos fueron parte del plan redentor que Dios se propuso para bene�ciar a toda la humanidad. Si Abraham y María no hubieran creído a lo que Dios les mostró, entonces no habrían sido escogidos para una tarea tan espe-cial y cuyo �n involucraba bendecir a toda la humanidad.Hoy se necesitan hombres y mujeres con esas características, con visión de Dios y con una fe que les permita ver más allá de lo que hasta ahora han experimentado. Abraham fue llamado para formar una gran nación y por medio de ella bendecir a todas las otras naciones. María fue la encargada de llevar en su vientre al Salvador del mundo. Pidamos a Dios que levante este tipo de siervos.

Oración: Dios oramos para que levantes hombres y mujeres con visión tuya, que puedan ser capaces de creer más allá de lo que hasta ahora han visto.

Una fe asombrosa


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“Pero recibiréis poder cuanto haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta lo último de la tierra”. Hechos 1:8


Lamentablemente hemos escuchado a siervos que sienten y creen que las misiones no son parte de la vida de un ministro del evangelio. Ese mismo sentir ocurre en algunos hermanos de las congregaciones que piensan que no es parte de su responsabilidad. Nos parece alarmante saber que en este siglo no nos interese el destino �nal de las personas. La obra misionera para algunos es asunto de unos pocos. Interesante es como acomodamos la Palabra a nuestro antojo y conveniencia. Causa tristeza que se enseñe el parecer y los pensamientos individua-listas, pasando por alto lo que el Dios de la Palabra nos dice al respecto. El mandato de “Id y haced discípulos” es tarea de todos y no de unos pocos. Quizás tendríamos que arrancar y borrar los versículos que nos hablan de la gran comisión para no asumir que esa es nuestra labor primordial: llevar el evangelio de Cristo a toda nación. He visto la dureza e indiferencia de algunos siervos y hermanos en cuanto a nuestra tarea misionera. ¿En qué momento hemos olvidado o reemplazado la tarea encomendada por Dios por nuestros propios asuntos e intereses? Y luego nos preguntamos ¿Qué hemos hecho mal? o ¿Por qué no crecemos? Hemos descuidado aquello para lo cual fuimos llamados. La obra misionera no es una opción, es un mandato. Se vuelve una necesi-dad imperante y un deseo de Dios. Es un estilo de vida y materia pendiente para algunos ministros del evangelio y creyentes. Dios rogamos para que seas tú quien trabaje en el corazón de tus siervos y uses sus vidas y ministerios para la gloria de tu nombre en todo lugar.

Oración: Pedimos que los pastores se involucren en la obra misionera y las misiones sean un estilo de vida permanente y no algo opcional.


Las Misiones en el Ministerio


“"Sembrad para vosotros en justicia, segad para vosotros en misericordia; roturad el barbecho, porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta que venga y os enseñe justicia." (Oseas 10:12.)

La historia registra varios avivamientos propiciados por personas que buscaban algo más de Dios. Personas como tú y yo, pero que no se conformaron con lo que hasta ahora habían conocido y experimentado en la vida cristiana. Ellos esperaban algo más, un despertar espiritual que trajera presencia y poder de Dios en la vida del creyente. Debemos comprender que ningún avivamiento viene solo porque se desea, sino por una búsqueda concreta e incesante de Dios en oración y ayuno. Si miramos el pasado recordaremos que: “Pasaron años antes que Carey bautizara el primer convertido en la India; antes que Judson ganara el primer convertido en Birmania”. Además de ello sabemos que el despertar no vino a las islas de Escocia por sólo desearlo. Los cielos fueron abiertos y el gran poder de Dios sacudió aquellas islas porque, "frágiles hijos del polvo… santi�caron un ayuno y convocaron a solemne asamblea" y esperaron con lágrimas, cansancio y dolores de parto ante el trono del Dios vivo. Sabemos que la respuesta está en la oración y en una búsqueda permanente de su presencia. Nuestro gran problema es que anhelamos el mover de Dios sobre nuestras vidas, iglesias, comunidades; pero no estamos dispuestos a pagar el precio de la humillación y de la negación. Pasar tiempo en oración es la clave para poder ver abierto el cielo de Dios sobre nosotros. De tal manera, veremos que detrás de nuestros púlpitos hay hombres y mujeres con poder del cielo, y cuyas congregaciones rebosarán de la presencia poderosa del Espíritu Santo de Dios. En otras palabras, una comunidad que esté siendo transformada por ese poder emanado del cielo.

Oración: Dios que cada siervo te busque para un avivamiento personal, en iglesia y en comunidad.


En busca de un avivamiento

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“Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí y velad conmigo” (Mt. 26:38).

Nuestro Señor Jesucristo, en uno de los momentos más difíciles y dolorosos de su vida terrenal, debió enfrentar de manera solitaria la muerte por causa de nuestro pecado. Él, a pesar de ser el único inocente, tuvo que sufrir todo el peso del castigo por el pecado de la humanidad. Cuando quedaba poco tiempo para su desenlace, llamó a tres de sus discípulos más cercanos: Pedro, Jacobo y Juan, a los quienes les mostró su debilidad y humanidad. A ellos les dijo: “Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí y velad conmigo” (Mt. 26:38).Jesús caracterizó su ministerio por su dependencia al Padre por medio de la oración. Siempre, Siempre, Siempre oraba al Padre y esa noche no fue diferente y oró: “Padre mío, si es posible pase de mí esta copa; pero que no sea como yo quiero, sino como tú. (Mt. 26:39 b). Pero aun así necesitó de la oración de sus hermanos que le conocían y le amaban. Hoy que nos enfrentamos a un fenomenal desafío de 100 días de oración, desa�amos a nuestros hermanos con estas palabras: “velad y orad” por nuestros siervos, los pastores y sus familias. Ellos son los que se encuentran en la primera línea de batalla por la predicación del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo; por lo tanto, ellos también son los más expuestos a sufrir por causa de Cristo. Hermanos unámonos intercediendo en este día para que el Señor les fortalezca y sean siervos fuertes en la Palabra, en la oración, llenos del poder de su Espíritu Santo y que puedan servir al Señor sin desanimarse. Oremos, a su vez, por sus familias para que estén unidos en amor y que juntos puedan servir con alegría y entrega. Y, también, pidamos para que las iglesias sepan cuidarles y sostenerles. Tristemente la Biblia nos relata que a pesar de la insistencia de Jesús a sus “más cercanos” a que oraran con él por una hora, estos no lo hicieron y se durmieron. Amados que no nos ocurra lo mismo a nosotros, oremos insistentemente en este día por nuestros pastores y sus familias.

Oración: Señor que las familias pastorales sean familias sanas, comprometidas y bendecidas por ti.

Velad y Orad

Pastor Carlos Díaz

“Orad por nosotros; pues con�amos en que tenemos buena conciencia, deseando conducirnos bien en todo”. (Hebreos 13: 18)

Es el deseo de cada pastor, cada siervo de Dios, misioneros, diáconos, maestros, en general cada líder espiritual anhela conducirse bien en todo. Y mucho más en lo relacionado con su rol de padre y líder espiritual de su propia familia.El autor de esta carta a los hebreos con�aba en que su comportamiento ejemplar, tal vez de muy poco se le podía reprochar, pero aun así pide la oración a la iglesia para él y sus consiervos. Se da cuenta que para cumplir este buen deseo se requiere la poderosa ayuda de Dios, en el versículo 7 también pide a los hermanos que se acuerden de sus pastores, y que se �jaran en el resultado de la conducta de ellos y que les imitaran. Hoy es tan importante que estemos orando por nuestros pastores y por sus familias porque necesitamos ejemplos para imitar, en estos tiempos escasean las familias que sean ejemplos, ejemplos en compromiso con el Señor. Los pastores y sus familias necesitan de la oración constante de la iglesia, no solo para que deseen conducirse bien en todo, sino también para que sean realmente familias que bendigan la obra del Señor, ellas necesitan su oración, el autor de Hebreos pide oración, el apóstol Pablo recomienda que los integrantes de la familia del pastor (esposa e hijos) sean creyentes, esto implica que tengan un compromiso con el Señor. Oremos pidiendo al Señor que las familias de nuestros líderes espirituales estén �rmes en el servicio al Señor, comprometidas con su obra, a �n de que la congregación se vea desa�ada a imitar la fe de ellas.

Oración: Señor oramos por cada familia pastoral, por cuidado, unidad y fortaleza espiritual.

Conducirnos bien en todo

Pastor Carlos Díaz

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“Y a ti, mi �el compañero, te pido que ayudes a estas mujeres que han luchado a mi lado en la obra del evangelio… (Fil. 4: 3a)

Normalmente usamos este texto de la Palabra de Dios para exhortarnos frente a los con�ictos entre los que servimos al Señor. Pero, en esta ocasión quisiera poner la mirada más bien en esta tremenda verdad que resalta el apóstol Pablo cuando señala a las: “mujeres que han luchado a mi lado en la obra del evangelio” . Me encanta esta declaración. Pablo, el apóstol, destaca el grado de compromiso con el ministerio de la evangelización que tienen estas hermanas. Las pone al mismo nivel que a “Clemente y que a todos los demás colaboradores suyos”. El libro de los Hechos y las Cartas del apóstol Pablo mencionan por lo menos 50 colaboradores. Solo en el capítulo 16 de la Carta a los Romanos, el após-tol menciona 36 colaboradores, de los cuales 9 son mujeres destacadas. La historia del evangelio está llena de mujeres como éstas que nos bendicen con sus oraciones y sus enseñanzas; son servidoras incansables del Señor. En los días de su ministerio terrenal, nuestro Señor Jesús fue seguido y apoyado por mujeres comprometidas con su obra redentora, estas le servían a sus propias expensas (Luc.8:2-3). El amor de estas colaboradoras por su Señor era tan grande, que ponían todo a su disposición: su dinero, su tiempo, sus casas y sus propias vidas.

Así también hoy, en nuestras iglesias, las esposas de pastores son las que comparten las luchas de ellos en el evange-lio. El compromiso en la obra, sus trabajos en el Señor, su �delidad y la fortaleza que muestran, nos hablan de su entre-ga y dependencia en el Señor. Oremos para que esta clase de siervas que Dios ha puesto al lado de los pastores se mantengan �rmes y luchando en la obra del Señor. Pidamos para que el testimonio de Cristo crezca por causa de ellas.

Oración: Señor oramos por cada familia pastoral, por cuidado, unidad y fortaleza espiritual.

Combatiendo juntos por el Evangelio

Pastor Carlos Díaz



“He aquí, herencia de Jehová son los hijos… (Salmo 127:3)

Para todos los padres es muy importante y tranquilizador ver que sus hijos son personas (ya sea niños, jóvenes o adultos) que están bien en cada área de sus vidas. Todos queremos que nuestros hijos sean felices. Los pastores no son personas diferentes a los demás padres en este aspecto, es por esta razón que la oración por sus hijos es una de las tareas más importantes, ellos oran por sus hijos fervientemente rogando a Dios que cuide, dirija y guie el corazón de su hijos a una relación personal con Jesucristo; que sean bendecidos y “crezcan en gracia para con Dios y con los hombres” Y cuando a esta tarea de orar por los hijos se suma la iglesia traerá bendición no solo a los hijos de nuestros pastores, sino mucho más a los pastores y al ministerio de la predicación y la enseñanza del evangelio de nuestro Señor Jesucristo en medio de la congregación.

Este Salmo, en el versículo 5 nos indica que los padres de aquella época (los días del rey Salomón) y que tenían muchos hijos (especialmente varones) eran bienaventurados, dichosos, felices, estos hijos son como �echas en mano de valientes, eran verdaderas defensas para el padre frente a los juicios que se desarrollaban en las puertas de las ciudades de aquellos días. Así también los pastores de nuestros días, son más bienaventurados, felices y dichoso cuando sus hijos están bajo una cobertura de oración, amados por la iglesia. Unámonos en oración por los hijos de cada familia, en especial por los de los pastores, sobre todo para que amen a Dios y a sus padres, para que sean saetas en manos de valientes que dan justo en el blanco.

Oración: Dios que los hijos de tus siervos puedan crecer amándote a ti Señor y que puedan tener una relación verdadera contigo.

Herencia de Jehová

Pastor Carlos Díaz

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“Todo fue creado por medio de Él y para Él” (Colosenses 1:16)


Todo, todo, todo, absolutamente todo le pertenece a Dios, esto es lo que aprendió Abraham cuando se enfrentó al mandato del Señor “Toma a tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas… y ofrécelo allí en holocausto…” (Génesis 22: 2). Así como Abraham, cada siervo y sierva de Dios en algún momento de la vida se encuentra en la situación de aprender esta misma lección, que Dios es el proveedor de ellos en todas las áreas de sus vidas. Abraham le llamo “Jehová Jireh” (Dios es mi proveedor) en el monte Moriah. Este es el mismo Señor en el que se goza Pablo el Após-tol en su carta a los Filipenses en el capítulo 4 versículo 10, es motivo de gran gozo contar con un Dios que suple todas nuestras necesidades. Pablo a�rma que sabe vivir humildemente y también tener abundancia (v 12) El siervo de Dios debe tener paz porque su provisión es responsabilidad de Dios.

Bien hicieron los hermanos de la iglesia en Filipos al ser parte de las “tribulaciones” de Pablo y enviar ofrendas para su sostenimiento una y otra vez (Fil 4: 15-18), Pablo no busca “dádivas”, es decir que le den solo para tener, sino más bien busca frutos de amor de genuinos siervos que sumen en bene�cio de ellos mismos, agradando a Dios. El Apóstol libre de toda avaricia sabe vivir contento cualquiera sea su situación, no como los predicadores de la prosperidad que cosieran pecado tener momentos de necesidad económica y para ellos el apóstol era un ignorante de la revelación de Dios al “contentarse cualquiera sea su situación” Pablo llego a decir “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”

Oremos hermanos por nuestros pastores, que ellos sean este tipo de siervos, a los que Dios les provea para cada una de sus necesidades, que sus hogares estén guardados por el Señor y que todo en ellos sea del Señor, sus hijos, su esposa, sus bienes y sobretodo sus propias vidas sean sólo del Señor.


Jehová Jireh

Pastor Carlos Díaz

Acordaos de vuestros Pastores que os hablaron la palabra de Dios. Considerad cual haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe. Obedeced a vuestros pastores y someteos a ellos, porque ellos velan por vuestras almas

como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría y sin quejarse, pues esto nos es provechoso. Hebreos 13:7, 17

Las Iglesias deben comprender que la tarea de predicar el evangelio es un ministerio, y que el Señor ocupa a los pastores para edi�car la vida de los creyentes. De igual manera la iglesia debe reconocer y valorar a sus pasto-res, ya que se han entregado a este ministerio. Muchos de ellos han dejado y renunciado a otras tareas para dedi-carse a la obra del Señor.

La congregación de creyentes tiene el deber de amar, valorar, respetar a su pastor, ya que Dios los ha puesto allí para cuidar del rebaño. Además, deben cuidar de él y su familia, para que sirvan al Señor con alegría. El Señor bendecirá a las iglesias que digni�quen a sus pastores.

Oración: Dios que las iglesias sean amorosas y respetuosas en sus tratos para con la familia pastoral.

Iglesias que honran a las familias Pastorales

Pastor Jorge Neira V.

30

He aquí herencia de Jehová son los hijos y cosa de estima el fruto del vientre. Salmos 127.1Por lo tanto, fortaleced las manos debilitadas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies,

para que lo cojo no se salga del camino sino que sea sanado. Hebreos 12: 12-13


Los pastores tienen la tarea de gobernar bien su casa, la palabra dice: “que herencia de Jehová son los hijos”, pero hay hijos de pastores, que han sido heridos por los hermanos o por tratos de los miembros a sus padres, y han quedado en el camino sin querer seguir adelante.

La Palabra nos dice que debemos levantar las manos caídas es decir permitir que cobren ánimo para seguir. La Iglesia debe orar y buscar la forma de restaurar la vida de los hijos de los siervos del Señor, que han quedado en el camino con sus rodillas paralizadas. Debemos orar por ellos y restaurarles.

La iglesia debe ser sabia en su trato con toda la familia ministerial especialmente cuando hay niños de por medio. Hemos de cuidar nuestros comentarios que no siempre son de edi�cación y orar cuando asoman los con�ictos y respetar a quienes nos presiden. De esa manera los hijos de los siervos crecerán en un ambiente de amor cristiano y hermandad. Seamos amorosos, pacientes con ellos y entendamos que nuestro llamado como iglesia es bendecirles.

Oración: Señor, oramos por los hijos de los pastores que han sido heridos y que hoy no te sirven. Pedimos perdón por ello y oramos para que tú les sanes y los traigas de vuelta a tu servicio.

DÍA 58, MIÉRCOLES 25 DE SEPTIEMBRE 2013

Los hijos de pastores


Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová y anda en sus caminos: Cuando comas del trabajo de tus manos, serás feliz, y te irá bien. Tu mujer será como una vid que lleva fruto a los lados de tu casa; tus hijos serán como

plantas de olivo alrededor de tu mesa. Salmos 128:1-3

Sin duda, el propósito del Padre es que el hombre y la mujer sean felices en el matrimonio, cumpliendo cada uno con sus roles y que se sientan realizados como pareja. Pero las di�cultades de la vida provocan desazón y pérdida de lo elemental del matrimonio, Muchos de nuestros matrimonios pastorales no están exentos a estos proble-mas.

La Iglesia debe ser la primera en levantar oración a favor de sus líderes espirituales, por los matrimonios y fami-lias pastorales, para que reciban sabiduría, fortaleza y puedan seguir adelante en su trabajo y llamado.Nadie está exento de pasar situaciones difíciles y a Satanás le interesa apuntar sus dardos justamente sobre sus siervos y familia. Es por ello que la congregación debe cubrir les en oración. Como también creemos que los matrimonios pastorales deben ser los primeros en buscar la dirección y fortaleza de Dios para sus vidas y ministerios. Y la iglesia hará su parte, orar por ellos en todo tiempo.El ministerio no es fácil, por lo mismo les invitamos a orar por los matrimonios que han sufrido situaciones difíci-les y que han quedado heridos. Por las esposas que muchas veces sufren en silencio y por los esposos para que Dios les dé sabiduría en los momentos de di�cultades.

Oración: Señor pedimos para que los matrimonios pastorales sean guardados, guiados y fortalecidos por ti. Restaura y repara la vida matrimonial de los que están viviendo situaciones difíciles.

Matrimonios Pastorales


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“Al que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y que tenga hijos creyentes”. Tito 1:6


Sí, la palabra ordena al pastor que gobierne bien su casa y sin duda debe ser el primero en amar y respetar a su esposa y tratar bien a sus hijos.

Como esposos esperamos que ellos amen a sus esposas y le den el lugar que ellas se merecen en su vida y minis-terio. Deben ser esposos amorosos que traten a su compañera con respeto y que prediquen con el ejemplo. El pastor debe cumplir varios roles, pero los más importantes son esposo, padre y pastor, por tanto la exigencia es mayor. Él debe ser modelo a seguir no solo para los creyentes sino para su propia familia. Debe estar atento en detectar la necesidad espiritual de su esposa así mismo la de sus hijos e interceder por ellos. Sabemos que es Dios es quien provee de sabiduría a los siervos para proveer de la educación, cuidado, forma-ción y desarrollo espiritual e integral de toda la familia.

Pidamos al Señor Cada pastor de nuestro país sea bendecido por el Señor y sea un buen esposo y un buen padre ante los ojos de Dios, la Iglesia y la sociedad.Oremos, para que la Iglesia comprenda que el pastor también se debe a su familia y que la Iglesia provea para que el pastor reciba lo necesario para que la familia pastoral sea bendecida.

Oración: Señor, oramos para que cada pastor, sea un buen esposo y padre. Que su testimonio sea intachable


Pastores, esposos y padres


Ninguno que milita, se enreda en los negocios de la vida, a �n de agradar a aquel que lo tomó por soldado. Timoteo 2:4

Ciertamente esperamos que las familias pastorales sean �eles re�ejo de la Palabra de Dios y al mismo tiempo sean ejemplos dignos de imitar por su rebaño. Si nos mantenemos en comunión con Dios y no descuidamos esa relación a nivel familiar entonces habremos pasado con éxito cualquier desafío que la vida les presenta. La obediencia a la Palabra y al Dios de la Palabra evidencia la dependencia y sumisión que tienen los siervos junto a los suyos. El desafío para el ministro no es solo predicar la Palabra sino hacerla vida en su vida y en el resto de la familia. Hoy más que nunca donde hay tanta inestabilidad y con�ictos en los hogares, se espera que los que estén al frente del rebaño cultiven una vida familiar ejemplar. Y que puedan vivir cada día reconociendo lo grande que Dios es en medio de ellos. El testimonio familiar es crucial en la vida de cualquier pastor que ha sido llamado a servir en medio de la iglesia y la comunidad.Oremos, para que las familias pastorales, no tengan que enredarse en asuntos económicos, por verse alcanzados en sus necesidades diarias. Oremos, para que los pastores y esposas den buen testimonio en todo lugar y que les sea posible no deber a nadie nada y así el Señor sea glori�cado y el mundo no tenga de qué acusarles. Pidamos a Dios para que las fami-lias pastorales sean ejemplo a los �eles, y que imiten la fe y la conducta de sus pastores.

Oración: Señor, oramos para que las familias pastorales vivan obedeciendo tu palabra y den testimonio en todo lugar de lo grande que tú eres.

Obedientes a tu Palabra


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La palabra del Señor dice claramente que Dios resiste a los soberbios, pero que da gracia a los humildes. Hoy en día, se requiere de ministros llenos de sabiduría, de presencia de Dios en sus vidas y ministerios y que sean llenos del poder del Espíritu Santo. Ellos deben ser hombres humildes con corazones de siervos. David fue reconocido como un hombre que tenía un corazón de siervo.Sin embargo, el mayor ejemplo de servicio y entrega lo vemos en nuestro propio Señor Jesucristo, que siendo Dios se hizo siervo de todos. Fue él quien se sometió a la voluntad de su Padre, aunque eso signi�caba cargar con todo el pecado de la humanidad. Los siervos de Dios son personas que se dejan guiar por Él, que deponen su voluntad y deseos para emprender el camino del sometimiento y rendición. Los siervos de Dios son aquellos que no esperan ser reconocidos por otros, ni andan en busca del poder o de lugares de privilegio como lo solicitaron Jacobo y Juan. Simplemente buscan agradar a quien les ha llamado al más grande ministerio: el del servicio. Señor gracias por los que te sirven con un corazón íntegro y con �delidad.

Oración: Que la humildad y sometimiento a ti Señor sea primordial en la vida de tus siervos.

“Al que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y que tenga hijos creyentes”. Tito 1:6


"Así mismo, esposas, sométanse a sus esposos, de modo que si algunos de ellos no creen en la palabra, puedan ser ganados más por el comportamiento de ustedes que por sus palabras, al observar su conducta íntegra y respetuosa. Que la belleza de ustedes no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. Que su belleza sea más bien la inco-rruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Ésta sí que tiene mucho valor delante de Dios." (1 Pedro 3.1-4, NVI)

La oración por alcanzar a nuestros esposos o esposas para Cristo, debe ir acompañado de un comporta-miento cristiano dentro del hogar. En el hogar no se predica con palabras, las palabras no funcionan. En cambio, nuestra conducta íntegra y respetuosa, tendrá un impacto transformador en la vida de nuestra familia. Juan, en su primera carta nos enfatiza la idea de que nuestras acciones, valen más que mil pala-bras: "no amemos de palabra ni de labios para afuera, sino con hechos y de verdad." (1 Juan 3.18, NVI)

Oración: Padre, ruego por mi compañero de vida que aún no te conoce. Abre, oh Dios, su mente a la verdad de tu Palabra para que se rinda a ti y su vida sea transformada con el poder de tu Espíritu Santo.


Esposos no creyentes

Pastor José Enriquez Pérez, Cuba

"Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la puri�có, lavándola con agua mediante la palabra, para presentársela a sí mismo como una iglesia radian-te, sin mancha ni arruga ni ninguna otra imperfección, sino santa e intachable. Así mismo el esposo debe

amar a su esposa como a su propio cuerpo. El que ama a su esposa se ama a sí mismo, pues nadie ha odiado jamás a su propio cuerpo; al contrario, lo alimenta y lo cuida, así como Cristo hace con la iglesia,"

(Efesios 5.25-29, NVI)

Cuando el evangelio comienza en el hogar por el esposo y este cumple con el papel que Dios le ha asig-nado en la familia como guía y proveedor para el hogar, el camino para que su esposa llegue a los pies de Jesús, será fácil. El esposo que ame a su esposa como así mismo, que la cuide de la misma manera que Cristo lo hace con su iglesia, difícilmente encontrará oposición en ella para conducirla a los pies de Cristo. El amor es la llave que más fácilmente abre los corazones a Dios.

Oración: Padre, pongo ante ti la vida de mi esposa. Señor toca su vida, su mente y su corazón para que se vuelva a ti y te sirva de todo corazón.

Esposas no creyentes


33

Elías, el profeta de Dios, fue un siervo cuya fe es reconocida por su gran encuentro en el monte Carmelo. Una fe que le anima de tal modo a desa�ar y enfrentar a los profetas de Baal. Al leer el texto uno se puede imaginar esta escena, y pensar como un solo hombre podría atreverse a luchar contra esta gran multitud. Sabemos que Dios estaba con él; pero, sin duda alguna, Elías tenía la certeza de que Dios respondería en el momento de clamar. Elías conocía a Dios, creía en él y tenía fe en el Dios todopoderoso. Al �nal del relato vemos que Elías salió del monte Carmelo victorioso. Su fe lo mantuvo con�ado en que Dios respondería de manera sobrenatural y así lo hizo.Hoy necesitamos que los siervos de Dios puedan tener esa misma fe, que les lleve a emprender y a esperar gran-des cosas de parte de Dios. Pedimos también para que cada creyente tenga una fe inamovible.

Oración: Señor te pedimos aumentes la fe en tus siervos para emprender los grandes desafíos que tú les mues-tres.

"¡No les tengan miedo! Acuérdense del Señor, que es grande y temible, y peleen por sus hermanos, por sus hijos e hijas, y por sus esposas y sus hogares." (Nehemías 4.14, NVI)


¡Lucha por llevar a tus hijos a los pies de Cristo! No temas a las circunstancias. ¡Libra la batalla! Es tu responsabilidad como padre instruir a sus hijos en el camino a Dios. No es responsabilidad del gobier-no, la escuela, la iglesia, o el pastor. Ellos pueden ayudar, pero la responsabilidad por la salud espiritual de los hijos es tuya como padre. La Biblia dice esto en Efesios: "Y ustedes, padres,… críenlos según la disciplina e instrucción del Señor." Note que no es opcional; ¡es un mandamiento! Tú dices, ya es un poco tarde, mis hijos tienen ya 50 años. ¡Nunca es demasiado tarde! Tal vez lo olvidaste en esos prime-ros años, cuando tus hijos estaban en la casa. Pero nunca es demasiado tarde para guiar a tus hijos en disciplina e instrucción del Señor. Puedes tener 80 ó 90 años… ¡puedes empezar ahora!. Nunca es demasiado tarde y nunca es demasiado pronto. Mientras estés vivo y ellos estén vivos, tienes la respon-sabilidad de ser padre.

Oración: Padre, nuestro ruego es por la salvación de cada uno de nuestros hijos. Guárdalos en todo momento y que Cristo Jesús sea la respuesta a sus vidas.

DÍA 64, MARTES 1 DE OCTUBRE 2013

La Salvación de nuestros hijos


"Cree en el Señor Jesús; así tú y tu familia serán salvos… Luego les expusieron la palabra de Dios a él y a todos los demás que estaban en su casa… El carcelero los llevó a su casa, les sirvió comida y se alegró

mucho junto con toda su familia por haber creído en Dios." (Hechos 16.31-34, NVI)

Aunque la salvación es individual, el propósito del Señor es alcanzar con el mensaje y su bendición a “todas las familias de la tierra” (Gén.12.3). Es lo más común que cuando alguien se convierte, en poco tiempo uno o varios más de su familia le sigan en su experiencia. Pero el cristiano no se conforma con eso, quiere más, los quiere a todos para Cristo. ¿Cuántos son tus parientes? ¿Cuántos viven contigo bajo tu mismo techo? Si tuviesen una celebración familiar, de todos los parientes: padres, hermanos, abue-los, tíos, primos, sobrinos, abuelos, nietos, cuñados, yernos, nueras, ¿cuántos se reunirían? Si diseñaras una estrategia misionera para ellos, ¿no te convertirías en un misionero para un verdadero pueblo… el pueblo de tu familia? Una vez Moisés dijo a su suegro: “Ven con nosotros y te haremos bien” (Núm.10.29). Haz lo mismo con tus parientes. Oración: Padre, pedimos por cada familiar que no ha tenido un encuentro personal con Cristo Jesús. Señor, que tu Espíritu Santo ponga en ellos hambre y sed de ti y se transformen en hijos tuyos.

La Salvación de nuestros parientes


34

“Nadie entre los tuyos deberá sacri�car a su hijo o hija en el fuego; ni practicar adivinación, brujería o hechicería; ni hacer conjuros, servir de médium espiritista o consultar a los muertos." (Debut 18.10-11, NVI) "No practiquen la

adivinación ni los sortilegios… No se hagan heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuajes en la piel… No acudan a la nigromancia, ni busquen a los espiritistas…" (Lev 19.26-31, NVI)

DÍA 65, MIÉRCOLES 2 DE OCTUBRE 2013

Dios prohibía las prácticas supersticiosas. El desconocimiento o la desobediencia consciente de la Pala-bra de Dios, sume a muchas personas en la superstición a causa de temores e inseguridad. Adivinación, augurios, bolas de cristal, consultas a muertos, magia, horóscopos, prohibiciones, daños, fetiches, resguardos y otras muchas, son prácticas que sumen a la gente en la esclavitud de sus temores. Para todos ellos las buenas noticias provienen del mismo Señor Jesucristo: “conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8. 31, 32). Las prohibiciones del Señor en este aspecto, más que una actitud de enojo y condenación, son una expresión de amor y compasión, liberando a las personas del yugo de las supersticiones.

DÍA 66, JUEVES 3 DE OCTUBRE 2013

Liberación del Ocultismo


"No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean llenos del Espíritu." (Efesios 5.18, NVI)

¿Cuántas personas hay en tu familia que necesita un cambio de vida? ¿Cuántos de ellos lloran hoy día por la pobreza de su condición espiritual, sin tener a alguien que con toda humildad y amor venga y les dé el mensaje que el mismo Dios nos ha con�ado para compartir?

“Marginales” son todas aquellas personas que presentan vicios, necesidades, enfermedades y formas de vida inaceptables para el resto de la sociedad que les ha segregado en el trato, la consideración y la atención. Alcancemos con el mensaje de salvación a la familia que vive atada a estos vicios; recuerde que el mensaje de Dios es dinamita, es poder que transforma, libera y da vida en abundancia. Hay espe-ranza para los marginados de nuestra familia: "También escogió Dios lo más bajo y despreciado, y lo que no es nada, para anular lo que es, a �n de que en su presencia nadie pueda jactarse." (1 Co 1.28-29, NVI)

Oración: Padre, pedimos por nuestros familiares que están atrapados en las drogas y el alcohol. Pedi-mos para que les des libertad en Cristo Jesús. Señor, ayuda a cada persona que hoy vive atada a estos vicios.

Liberación de vicios


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"No te portes con indiferencia." (Deut. 22.3, NVI) "Tu hermana Sodoma y sus aldeas pecaron de soberbia, gula, apatía, e indiferencia…” (Eze. 16.49, NVI)

DÍA 67, VIERNES 4 DE OCTUBRE 2013

Nuestra sociedad muere por el pecado de la indiferencia. Al nihilismo, relativismo, escepticismo, ateís-mo; lo llaman tolerancia, pero en realidad, se trata de indiferencia. En Hechos 17.30-31 y 1 Pedro 1.3-12 se aborda la posibilidad de que alguien haya podido vivir ignorando la realidad de Dios haciendo caso omiso de su salvante amor, pero que también tal persona puede llegar a tener una experiencia viva con Jesús. El testimonio de vida de los creyentes, puede tener un peso importante en aquellos familiares que niegan la existencia de Dios o se muestran indiferentes hacia Él. "…para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros." (Hechos 17.27-29, RVR60). Negar a Dios no es cuestión de argumentos, sino de actitud. Quizá nuestra actitud, mueva a nuestra familia a meditar en las realidades espirituales de la vida, y les conduzca a Dios.

Oración: Padre, nuestro ruego es por la vida de mi familia que permanece indiferente a tu palabra; oro para que toda indiferencia e incredulidad hacia Ti pueda ser derribada en el nombre de Jesús.

DÍA 68, SÁBADO 5 DE OCTUBRE 2013

El toque a indiferentes e incrédulos


"Por tanto, amados míos, huid de la idolatría. Como a sensatos os hablo; juzgad vosotros lo que digo." (1 Corintios 10.14-15, RVR60)

Algunos de nuestros familiares profesan ser cristianos, sin embargo "cambiaron la gloria del Dios inco-rruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible” (Ro 1.23, RVR60). Hoy viven atados a un falso cristianismo, que les impide tener una auténtica relación con Dios. El mismísimo papa Benedicto XVI, dijo en Paris el 13-09-2008:

“La primera carta de San Pablo, dirigida a los Corintios, nos hace descubrir, hasta qué punto sigue siendo actual el consejo dado por el Apóstol: "No tengáis que ver con la idolatría" (1 Co 10: 14)… Fuera del pueblo de Israel, que había recibido la revelación del Dios único, el mundo antiguo era esclavo del culto a los ídolos. Los errores del paganismo,… debían ser denunciados porque eran una potente alienación y desviaban al hombre de su verdadero destino. Impedían reconocer que Cristo es el único Salvador, el único que indica al hombre el camino hacia Dios… Este llamamiento a huir de los ídolos sigue siendo válido también hoy… Ésta es una cuestión que todo hombre honesto consigo mismo se plantea un día u otro… ¿Qué es lo que importa en mi vida? ¿Qué debo poner en primer lugar? La pala-bra "ídolo" viene del griego y signi�ca "imagen", "�gura", "representación", pero también "espectro", "fantasma", "vana apariencia". El ídolo es un señuelo, pues desvía a quien le sirve de la realidad para encadenarlo al reino de la apariencia...”

Oración: Padre, te pedimos por los familiares que viven inmersos en la idolatría y en falsas religiones; clamamos para que Tú te rebeles a ellos y toda mentira del diablo pueda ser combatida y derribada con tu poder.

Huid de la idolatría


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"Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos." (Oseas 4.6, RVR60)

DÍA 69, DOMINGO 6 DE OCTUBRE 2013

Este es un versículo muy asustadizo. Aquí, Dios va directo al punto. Él dice: “por falta de conocimiento mi pueblo ha sido destruido” ¿Qué signi�ca? Las familias se deshacen porque ellos no conocen la Pala-bra de Dios. La cultura se cae a pedazos, porque ellos no conocen. Las empresas quiebran porque no conocen a Dios y Sus órdenes. Él dice que cuando no le conoces, tu vida se caerá a pedazos. El texto dice también: “Ya que te olvidaste de la ley de tu Dios, yo también me olvidaré de tus hijos.” ¡Esto es algo importante! Dice que si me olvido de enseñar a mis hijos las instrucciones espirituales, los principios de Su Palabra, Sus ideales; dice que si olvidaras esto en tu matrimonio, si olvidaras esto en tu familia; entonces Él se olvidará de bendecir a tus hijos. ¡Es así de simple! No esperes que Dios bendiga a tu fami-lia, si Dios no es una parte en tu mesa, en tus conversaciones, si Su Palabra no es declarada de continuo en tu casa. (Deut. 6:1-9)

Oración: Padre, pongo delante de Ti a todos mis familiares para que coloques en ellos un corazón receptivo a Tu palabra.

DÍA 70, LUNES 7 DE OCTUBRE 2013

Receptividad a la palabra de Dios


"Todavía estaba lejos cuando su padre lo vio y se compadeció de él; salió corriendo a su encuentro, lo abrazó y lo besó. El joven le dijo: “Papá, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no merezco que se me llame tu hijo.” Pero el padre ordenó a sus siervos: “¡Pronto! Traigan la mejor ropa para vestirlo. Pónganle también

un anillo en el dedo y sandalias en los pies. Traigan el ternero más gordo y mátenlo para celebrar un banquete. Porque este hijo mío estaba muerto, pero ahora ha vuelto a la vida; se había perdido, pero ya lo

hemos encontrado.”" (Lucas 15.20-24, NVI)

La parábola del hijo perdido, es un mensaje de aliento para aquellos que sufren el extravío de un fami-liar. A menudo, nos decepcionamos por los seres en que invertimos valores espirituales y, desechando nuestros consejos, se apartaron del Señor. Es importante que sepas que la respuesta a tu a�icción siem-pre es Dios. Jeremías 17:7 dice: "Benditos son los que confían en el Señor y han hecho que el Señor sea su esperanza y con�anza." (NTV). ¿Qué sucede si confías en el Señor? Mira la promesa de Dios en Isaías 49:23: "Los que en mí confían no quedan defraudados" (DHH).

Oración: Padre, tú conoces el dolor que causa el extravío; clamo a Ti, para que tu Espíritu Santo, haga la obra poderosa en mis familiares que te han rechazado; pido para que tengan la oportunidad de arre-pentirse.

Oración por los apartados


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“En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia” (Proverbios 17:17 RV 1960)

DÍA 71,MARTES 8 DE OCTUBRE 2013

Dios nos permite a lo largo de la vida tener amigos y amigas entrañables. Amigos que aunque uno no los vea seguido por vivir en lugares distantes uno puede contar con ellos y amarse a sabiendas que sólo el pensar en ellos o ellas alegra nuestra vida. Estas amistades con el tiempo nos bendicen. Es tal la amis-tad que uno incluso programa junto las vacaciones y pasar el mayor tiempo con ellos. Es tal la amistad que se prolonga en cariño a los hijos y esa cercanía produce lazos perdurables. ¿Hasta dónde puede perdurar esa amistad si mi amigo o amiga no recibe a Jesús como Salvador? Es lo que le comparto siem-pre a uno muy especial para mi familia. Le digo, quiero seguir nuestra amistad juntos en la eternidad. No quiero que mueras sin Cristo. La amistad de Jesús, es incluso superior a la nuestra.

Oración: Señor pongo la vida de mis amigos en tus manos y pido que tengan un corazón receptivo a tu Palabra cuando les hable de Ti

DÍA 72, MIERCOLES 9 DE OCTUBRE 2013

Esos amigos como no hay otros

Pastor Patricio San Martín Torres

“..¡Por medio de ti, serán benditas todas las familias de la tierra!” (Génesis 12:3b NVI)

La mayoría de nuestro tiempo la pasamos en nuestros lugares de trabajo. En esos lugares tenemos todo tipo de situaciones donde conviven las exigencias laborales, las metas de la empresa y relaciones humanas que van y vienen. Ya sea que estemos organizados por secciones y/o departamentos, es obvio que se producen relacionamientos entre personas. Ese lugar donde Dios nos ha puesto se convierte en nuestro campo para cumplir la misión de Dios, “El Señor…no quiere que nadie perezca sino que todos se arrepientan” (2°Pedro 3:9 NVI). Es un lugar donde se convive con todo tipo de estados de ánimo, además de la presión, buen o mal humor, etc. Es un lugar donde más es posible mostrar nuestro carác-ter como cristianos y cristianas; y en donde nuestros colegas buscarán al Dios en que creemos. De verdad, una tremenda responsabilidad de testimonio consecuente con nuestra fe. Ahí Dios quiere usarte, porque en todo lugar encontramos personas con necesidad de Él.

Oración: Señor te pido por mis compañeros de trabajo que puedan ver en mí tu amor y tu actuar; de tal manera que deseen conocerte.

Mis colegas no quedan fuera


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“Y todos sobrecogidos de asombro, glori�caban a Dios; y llenos de temor, decían: Hoy hemos visto maravillas” Lucas 5:26

En una ocasión mientras Jesús enseñaba dentro de una casa, cuatro varones trajeron a su amigo paralítico en una camilla. Como no podían ingresar con él por causa de la multitud, fueron por el techo, en el cual hicieron un ori�cio y desde allí lo bajaron. Jesús al ver la fe de ellos responde a la necesidad de este varón y no solo le sana, sino que le perdona sus pecados. Este hombre salió del lugar caminando y llevando consigo su camilla. Esto produjo en las perso-nas del lugar gran asombro, pero no solo eso, sino que glori�caban a Dios. Ellos reconocían que eran testigos de las maravillas de Dios. A partir de este hecho, resulta imposible pensar que estas personas hayan sido las mismas luego de ser testigos de un hecho tan increíble y poderoso de parte de Jesús. El milagro realizado por Jesús trajo convicción a los que estaban en aquella casa. Quizás se trataba de amigos, vecinos, personas conocidas y otras no, pero que fueron impactadas de manera sorprendente por lo sucedido en aquél momento.

De la misma manera hay muchas personas a nuestro alrededor, como nuestros vecinos, que no son gente desconoci-da para nosotros, siempre han estado allí. Estamos tan acostumbrados a ellos que no vemos la necesidad de salvación para sus vidas. Y muchos de ellos buscan de Dios o creen en Dios pero a su manera. Quizás ya le has hablado y no ha sucedido nada, tal vez le hayas invitado al templo y no hubo una respuesta favorable. Pero allí debe estar surgiendo una oración: “Dios has una obra sobrenatural en ellos de tal manera que puedan creer en ti”. Pidamos para que Dios use situaciones y obre poderosamente de tal modo que nuestros vecinos puedan reconocer que solo Dios puede responder de manera milagrosa y sobrenatural.

Oración: Señor te pido que hagas una obra sobrenatural en mis vecinos para que te glori�quen con sus vidas.

Una obra sobrenatural

DINEMIS

“Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas”. Hechos 2.44

Se espera que los que hayan tomado una decisión por Cristo puedan congregarse, crecer y desarrollarse como nuevos creyentes. No obstante, en estos últimos años nos hemos visto enfrentados a la conservación de estos nuevos herma-nos en la fe y pese a los esfuerzos realizados muchos de ellos se quedan en el camino.Quizás nuestra gran problemática es que no hemos sabido crear relaciones de cuidado y de apoyo permanente hacia ellos; y nos quedamos con interrogantes como ¿Por qué se van? o ¿Por qué no se quedaron? y no cuestionamos nues-tro papel como maestros discipuladores en el crecimiento y desarrollo de su fe cristiana. En este sentido, la iglesia tiene la responsabilidad de dar las bases para que el nuevo creyente pueda permanecer y dar fruto dentro y fuera de la congregación. La iglesia primitiva nos entrega un modelo de unidad, comunión, oración, testimonio, enseñanza y alabanza, digno de ser imitado por nosotros. Es más todos los que recibían la palabra perseveraban. La iglesia vivía en un ambiente de convivencia y efervescencia tal que los nuevos creyentes vivían su fe en medio de la congregación.Nuestras iglesias necesitan volver al modelo bíblico, un modelo donde el amor de Dios hacia los nuevos creyentes es real, donde la enseñanza bíblica es esencial y vívida, donde la vida en comunidad es participativa y donde la oración es alimento y búsqueda permanente del plan y propósito de Dios para toda la iglesia.Si queremos que ellos perma-nezcan y se desarrollen como verdaderos discípulos, debemos aprender a ser iglesia, pero una iglesia conforme al corazón de Dios.

Oración: Señor pido que mi amigo (a) pueda asumir un compromiso real contigo. Pon el deseo y la necesidad de congregarse para que crezca en su nueva vida cristiana.

Creyentes que perseveran

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“El Rey les responderá: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el más pequeño, lo hicieron por mí” (Mateo 25:40 NVI)

DÍA 75, SABADO 12 DE OCTUBRE 2013

Quedé asombrado cuando con mi hijo caminábamos en el sector donde vivíamos. Iba con mi esposa y él cuando se nos cruzaron tres personas indistintamente y lo saludaron por su nombre. Mi hijo devolvió el saludo espontá-neamente. Sólo a una de esas personas yo había visto en el área común del edi�cio; a las otras dos, no las conocía. Me hizo re�exionar ¿Cuánto conozco a mis vecinos? Vivir en departamento te hace vivir más aislado. Pero mi hijo era conocido, por lo tanto; siendo esto cierto, puede ser una excusa. Es cosa de abrirse y atreverse a compartir más.

Me puse a mirar más mi propio barrio y me di cuenta cuantos adultos mayores viven junto a mí, cuantas señoras solas viven junto con una mascota; cuantas familias jóvenes con hijos. Cuantos niños pasan muchas horas solos, cuantos adolescentes, cuantos jóvenes.La sola instancia de conversar y compartir momentos nos ha dado tiempo de conocer vecinos preciosos, perso-nas con historias de vidas interesantes y abiertas a recibir palabras de vida que vienen de Jesús. Las aceptan con gusto. Así también nuestras oraciones y sobre todo la ayuda efectiva. ¡Qué alegría ser de bendición!

Oración: Señor usa las necesidades de mis vecinos para que yo pueda compartir el mensaje de salvación con ellos.


Personas valiosas, mis vecinos


“Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo. ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído?

¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?”. (Romanos 10:13-14)

Algo muy importante que se indica en la primera parte de estos versículos, y es que las personas serán “salvas” solo si invocan a Jesús como Señor y Salvador. Pero para invocar al Señor Jesucristo tienen que “creer en ÉL” y para que “crean en ÉL”, la gente tiene que “oír”, y para que “oigan” nosotros somos los encargados de “predicarles”. Esto solo se concretará si nosotros estamos dispuestos a movernos de nuestro confort e ir a compartir estas “buenas nuevas” con quienes viven a nuestro alrededor. Los que están a nuestro lado necesitan escuchar las “buenas noticias de salvación” urgente. El mundo está lleno de malas noticias, por eso es que nosotros debemos marcar la diferencia en medio de ellos y con la autoridad que el Señor Jesucristo nos da a través de su “Palabra”, hablare-mos de ÉL con convicción, sin dudar de estas “buenas nuevas” para ellos. Preparémonos, busquemos al Señor en oración para compartir esa “Palabra” y así la gente “oirá”, “creerá” e “invocará” al único que vive y reina por los siglos de los siglos, nuestro Señor Jesucristo. Amados en el Señor, hoy es el tiempo de que nuestros “pies” busquen a los perdidos (vecinos, compañeros de trabajo y estudio), estamos en deuda con ellos, y están tan cerca nuestro, no podemos perder el tiempo. Ellos nos necesitan, recuerden que la bendición de la “salvación” la hemos recibi-do, por lo tanto hoy debemos compartirla. Las “buenas nuevas” son la bendición que todos necesitan “oír”.

Oración: Señor ayúdame para que con mi vida pueda ser un canal de bendición en mi vecindario, compañeros de trabajo y de estudio.

Mi vida, un canal de bendición

Jake y Lissette Troppa

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“Ponte de pie en presencia de los mayores. Respeta a los ancianos. Teme a tu Dios. Yo soy el Señor.” Levítico 19:32


Un mandato del Señor es honrar a las personas ancianas, respetarlas y escucharlas. Si el Señor demanda eso de nosotros, hoy te animo a buscar esos ancianos en el entorno donde vives, cuántos de ellos quizás te ven pasar todos los días, te has preguntado alguna vez, si ellos tienen al Señor Jesucristo en su corazón. Ellos son un grupo de nuestra sociedad que necesita “urgente” escuchar las “buenas nuevas” y como iglesia quizás hemos descuidado este grupo de personas. Ellos necesitan conocer del amor de Dios de una manera prácti-ca, porque quizás están solos en sus casas, enfermos, sin fuerzas para salir. Por lo tanto nosotros debemos “IR” donde ellos y compartir del “amor” de nuestro Señor Jesucristo de una manera integral, ver su necesidad y ver cómo puedo ayudarles. Así ellos conocerán de una manera práctica como Dios les ama y está interesa-do en ellos. Necesitan paz y salvación, porque piensan más en la muerte y quien mejor que nosotros que podemos llevar la bendición de la vida eterna a sus vidas. Así una sonrisa adornara su rostro cuando el Señor le llame a su presencia, porque sabrán que irán a un lugar especial con el Señor Jesucristo. Y nosotros que fuimos parte de esta alegría esperaremos el momento de verles nuevamente cuando nuestro turno llegue. Recuerda la historia de Ruth y Noemí, es una historia de amor que comenzó con la decisión de una joven mujer de cuidar una anciana en su familia. Es un ejemplo digno de seguir y Dios se agrada de esto.

Oración: Por los ancianos de mi vecindario, oro para que puedan conocer tu amor, tu paz y tu salvación.


Mostremos amor por los ancianos


“El Señor está cerca, para salvar a los que tienen el corazón hecho pedazos y han perdido la esperanza”. Salmos 34:18

Dios nunca está lejos de nosotros, muchas de sus promesas nos indican que él jamás nos “dejará” ni “olvida-rá”, y él no miente, por lo tanto tenemos esa gran esperanza y fuerza del Señor en nuestras vidas. Hoy día somos los portadores de esta “esperanza” y de estas “promesas” maravillosa de nuestro Señor Jesucristo a todos aquellos amigos y vecinos que sabemos que viven con un vacío en su corazón. Si nos acercamos a ellos, escucharemos como sus vidas están en pedazos por los sufrimientos que están viviendo en su entorno familiar, por la situación que ocurre en el mundo, el dolor de la enfermedad, la pérdida de un trabajo, la falta de recursos. Por lo tanto, nuestro trabajo es ir a ellos, animarlos y visitarlos. Solo así verán el “gran amor” de nuestro Señor Jesucristo a través de nosotros, y veremos cómo sus corazones se abrirán para escuchar “el mensaje de salvación” y conocerán de la gran misericordia de nuestro Señor Jesucristo por ellos. Recuerden que el Señor “restaurará” y “reparará” esas vidas para la “gloria de EL”, y sus vidas serán un testimonio para que muchos otros conozcan y reciban al Señor Jesucristo como el Señor de sus vidas.

Oración: Por mis amigos y vecinos que viven con un profundo vacío en sus corazones. Piden que vean tu amor y misericordia a través mí.

Un canal de tu gracia para mi prójimo


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““Más bien, honren en su corazón a Cristo como Señor. Estén siempre preparados para responder a todo el que les pida razón de la esperanza que hay en ustedes”. 1 Pedro 3:15


Amados cuando oremos en este día en contra de argumentos y tinieblas que rodean a nuestros amigos y vecinos en nuestro derredor, signi�ca que debemos centrarnos en Cristo primeramente. Exaltarlo a ÉL, darle el primer lugar en nuestras vidas, nutrirnos de sus enseñanzas para no caer en las artimañas de Satanás, cubrirnos con su “sangre preciosa”. Nuestra lucha es contra “huestes espirituales” que les están cegando la vista, con el propósito de que no vean que hay “esperanza”, en el Señor Jesucristo. Nosotros tenemos esta esperanza y con�anza en el “Rey de Reyes” y “Señor de Señores”. Por lo tanto, estaremos listos para responder contra todo argumento que viene de Satanás, pero no cualquier respuesta, sino una respuesta lógica y razonada, por eso necesitamos “prepararnos” no descuidar nuestra relación con el Señor Jesucristo. Recordemos que hemos sido sacados de las tinieblas a su luz admirable, nuestros testimonios, son reales y poderosos para hablar de las maravillas que nuestro Señor Jesucristo ha reali-zado en nuestras vidas y familia. Por lo tanto, dejémonos guiar por el “Espíritu Santo” el cual hablará por intermedio nuestro y convencerá aquellos corazones duros.

Oración: Señor por aquellos que te rechazan con sus propios argumentos. Padre que todas tiniebla y argumento sean derribados en el poder de tu espíritu.


Ningún argumento es válido ante Dios


“Y esta es la vida eterna, que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado”. Juan 17:3

A través del Señor Jesucristo hemos conocido al Padre amoroso, misericordioso, perdonador, personal, restaurador, sanador y podríamos seguir enumerando muchas características de él. Pero una cosa tene-mos que entender que esta revelación vino a nuestras vidas, porque el Señor Jesucristo estuvo dispues-to a obedecer al Padre, para cumplir la misión que él le encomendó. Hoy muchos de nosotros tenemos esta bendición y revelación en nuestras vidas y miramos el mañana con esperanza, porque sabemos a dónde vamos. Hoy día, si miramos a muchos de nuestros amigos y vecinos, nos daremos cuenta que ellos no tienen la bendición de la vida eterna. No conocen al Dios único y verdadero y Jesucristo su hijo, por lo tanto, quien más que nosotros, que tenemos este conocimiento y revelación, debemos ir a ellos y darles a conocer las “buenas nuevas”, para que así, ellos puedan proclamar junto a nosotros que han conocido al Dios único y verdadero y a su Hijo Jesucristo. Está en nuestras manos que esto se cumpla, pues cuando nos movemos Dios hace el resto. Esperemos y veremos grandes cosas del Señor.

Oración: Señor por mis vecinos y amigos, rebélate a ellos como el Dios único y verdadero. Ten compa-sión de sus vidas Señor.

Que te conozcan a Ti


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“… Y que por las Escrituras de los profetas, según el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer, a todas las gentes para que obedezcan a la fe”. Romanos 16: 25-27


La misión transformadora es de Dios. Pero Dios encarga ésta tarea a su Iglesia, de reconciliar al mundo, y por lo tanto, toda la iglesia está llamada a interceder y a hacer todo lo posible para que personas de toda raza, pueblo y nación, sean alcanzados con las buenas nuevas de Dios.La misión transcultural se explica como el esfuerzo de la iglesia en su conjunto, para salir de su propio contexto cultu-ral y llevar el mensaje hacia otros contextos culturales.La acción de Dios por medio de su Santo Espíritu en el corazón del hombre es sobrenatural - Las culturas comenzarán a ser transformadas realmente y conforme a la voluntad de Dios. Vemos en muchos lugares la incorporación de “formas cristianas o evangélicas”, pero sin una verdadera transformación del corazón del hombre. Una vez que el corazón del hombre cambia, éste cambia su cultura.El pueblo mapuche es la etnia más importante de Chile. Generalmente se les destaca por su valentía, un gran porcen-taje aún tienen viva su cultura, idioma, costumbres, muchos campesinos, trabajadores de la tierra, pueblo esforzado.

La cultura pascuense, es en verdad muy rica, en la religión, éstos adoran Hiva, Make Make, el creador del mundo, y posteriormente el culto a Tangata Manu, el hombre pájaro. Su religión conserva algunos matices con otras culturas polinesias. Hoy Rapa Nui cuenta con una autonomía, mantienen su cultura, sus jefes y otros. Poseen escuelas, centros hospitalarios y año a año se intenta avanzar para recortar la brecha respecto a las distancias que permiten una mejor calidad de vida en relación al continente.Que el Santo Espíritu de Dios, nos enseñe a amar al pueblo mapuche y pascuense, a orar por ellos, para que gran parte de éstos pueblos sean alcanzados por el poder de la predicación del Evangelio de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

Oración: Señor por el pueblo Mapuche y Pascuense para que sus ojos sean abiertos a tu evangelio y puedan declarar-te como Señor y Salvador de sus vidas.


Por amor a los pascuenses y mapuches

Pastor y esposa: Pablo y Marcela Olivares

“… Te alaben los pueblos oh Dios; todos los pueblos te alaben…” Salmo 67

El pueblo Aymara es un pueblo muy religioso, sin embargo, para llegar a ellos y que luego se desarraiguen de sus tradi-ciones ancestrales centradas en la idolatría, implica, muchas veces un largo proceso, que sólo es posible por obra y gracia del espíritu Santo. Bien lo saben los misioneros que con gran sacri�cio han servido al Señor en medio de medio de este amado pueblo.Oremos por ellos para que no sean tan postergados y para que el gobierno desarrolle políticas públicas que vayan directamente en su bene�cio. Al decir “Aymará” pareciera que se olvida que también son chilenos.Oremos para que nuestra obra bautista no los abandone, aún sabiendo que posiblemente jamás se forme una iglesia grande, por el amplio radio geográ�co donde residen. Tal vez nunca envíe recursos al plan cooperativo o Dinemis, pero el Señor ama también a quienes están en el desierto, como el eunuco, y envía a su mejor evangelista.Oremos para que Dios toque el corazón del pueblo Aymará. Oremos para que Dios toque los corazones de hermanos empresarios y profesionales y hagan misiones proveyendo de vehículos y combustible para el traslado de los misione-ros y pastores que trabajan con el pueblo Aymará.

Desafíos: Llamar hoy a alguien que se encuentre ministrando al pueblo Aymará y orar por ellos. Ver la manera de cómo nuestra iglesia puede ser fuente de bendición para ellos.Oración: Dios oramos por el pueblo Aymará, para que tú derribes toda creencia pagana de sus vidas y crean en Ti como el único Dios y Salvador.

Miremos con amor a los Aymaras

Pastor Abraham Kremar V.

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“… Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces…” Juan 21: 1-14


Mi hermano mayor un avezado pescador artesanal salió aún siendo oscuro a recoger las redes, sin embargo, le ocurrió lo mismo que a los discípulos a quienes: “se levantó una gran tempestad que echaba las olas en la barca, de tal manera que se anegaba”, (v.37). Mi hermano cayó al mar y jamás su cuerpo apareció. En un principio también reaccionamos como los discípulos: ¿“No tuviste cuidado que nuestro hermano pereciera?”

La viuda quedó con cuatro niños pequeños que hacía aún menos comprensible tal desgracia. ¿Cómo se criarían? Sin embargo, con los años hemos visto a Jesucristo levantarse y reprender los mares y vientos contrarios de mi cuñada y sus hijos. Mi hermano mayor que tenía un amor entrañable hacia su madre, hoy ha sido reemplazado por el amor y cuidado especial, como verdaderos hijos, de estos queridos nietos.Jesús se ha encargado de calmar nuestras aguas, disipar nuestros temores y fortalecer nuestra fe.Jesús tiene un amor especial por los pescadores y puede hacer de ellos, como sus discípulos, verdaderos pescadores de hombres. ¡Qué maravilloso!

En cuanto a su labor, valore su trabajo. Nosotros en términos generales, cuando compramos siempre andamos regateando, pero debemos considerar que traer ese pez a tierra requirió de un gran esfuerzo y sacri�cio, incluso, como mi hermano, hasta poner en riesgo su propia vida. Oremos con fervor por los pescadores que trabajan con gran sacri�cio para poder obtener su sustento. Oremos por el consuelo de las familias que han perdido a un ser querido en el desarrollo de tan noble o�cio.

Oración: Pedimos por los pescadores que trabajan con tanto sacri�cio, por cuidado y protección. Pedimos que sus corazones tengan necesidad de ti y muchos de ellos te reconozcan como el Señor de sus vidas.


Los hombres de mar


“… Y te hará Jehová tu Dios abundar en toda obra de tus manos, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, para bien; porque Jehová volverá a gozarse sobre ti para bien de la manera que se gozó

sobre tus padres”. Deuteronomio 30:8, 9

El We Tripantu para los mapuches, el Machac-Maraes para los aymara; celebra un cambio de ciclo de la vida, cuya clara señal es el solsticio de invierno. ¿Sabías que en Chile hay un total de 1.146.922 personas que pertenecen a alguno de los 9 pueblos originarios (Mapuche, Aymara, Atacameño, Rapa Nui, Kawashkar, Yaganes, Coya, Quechua y Diaguita)? Este es el tiempo en que la tierra se prepara para dar sus frutos, es cuando todo ser viviente se alista para la procreación. Los trabajadores del campo esperan con ansias que sus árboles, sus viñedos, sus sembrados, produzcan en abundancia. Y noso-tros mismos esperamos ser prosperados en todas las cosas.No debe extrañarnos que a Dios también le importe lo que pasa con nuestras vidas y nuestra tierra. De hecho, te quiere bendecir, o sea, ¡Dios te quiere hacer bien en la vida! ¡Que te vaya bien en todo!Pero en tu caso, ¿qué querrá decir que Dios te quiere prosperar en el trabajo de tus manos?Este tiempo es una buena oportunidad para buscar la bendición de Dios en lo que emprendemos a diario, porque ese es el trabajo de tus manos… y esperar que nos vaya bien en todo. Puede resultar difícil… ¡pero Dios dice que nos quiere hacer bien!Por cierto, hay que tener presente que los resultados de la tierra no llegan solos, porque primero hay que trabajar. Pero lo inevitable, para que nos vaya bien, es volver a obedecer al Señor y cumplir todos sus mandatos. Señor, oramos por nuestra tierra. Al comenzar un nuevo ciclo, bendice la productividad de los campos y de los ganados. Bendice nuestra vida. Amén.

Oración: Padre pedimos por las familias que trabajan en los campos, que sus tierras puedan producir el alimento necesario, y que tú te transformes en el alimento para sus vidas

Campos bendecidos, vidas transformadas

Pastor Marcelo Valenzuela

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La parábola del hijo perdido, es un mensaje de aliento para aquellos que sufren el extravío de un fami-liar. A menudo, nos decepcionamos por los seres en que invertimos valores espirituales y, desechando nuestros consejos, se apartaron del Señor. Es importante que sepas que la respuesta a tu a�icción siem-pre es Dios. Jeremías 17:7 dice: "Benditos son los que confían en el Señor y han hecho que el Señor sea su esperanza y con�anza." (NTV). ¿Qué sucede si confías en el Señor? Mira la promesa de Dios en Isaías 49:23: "Los que en mí confían no quedan defraudados" (DHH).

Oración: Padre, tú conoces el dolor que causa el extravío; clamo a Ti, para que tu Espíritu Santo, haga la obra poderosa en mis familiares que te han rechazado; pido para que tengan la oportunidad de arre-pentirse.

“… Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios…” Lucas 18:15-17


Observaba con admiración por TV como un perro había adoptado prácticamente a dos niños en condiciones de abandono. Las noticias aclamaban y se conmovían por el héroe perro. Más por mi parte, sentí tristeza que un animal, con su acto de amor, avergonzara a la raza humana incapaz de cobijar a sus propias criaturas.Las primeras víctimas en una guerra son los niños. Las primeras víctimas en un fracaso matrimonial son los niños. Los prime-ros blancos del enemigo hoy son los niños. Es una lástima que aun existan congregaciones que aún no permitan que los niños vayan a Jesús. ¿Y qué sucede con las palabras de Jesús: “Dejad a los niños venid a mí”? ¿Y qué sucede con los niños que llegan maltratados a nuestros templos? ¿Cómo reacciona la iglesia frente a ello? ¿No debemos involucrarnos? Ante la discri-minación de los mismos discípulos con sus “programas de atención para adultos”, Jesús levanta con fuerza su voz: “Dejad”. Si no fuera porque Jesús llegó a nuestras vidas muchos de nosotros viviríamos totalmente perdidos por las difíciles expe-riencias que nos tocó vivir, ver y soportar en la niñez. Razones tenemos de sobra para que hoy se declare oración y ayuno por los niños de nuestro país y más allá de nuestras fronteras. Desafío para hoy: Orar y ayunar es muy importante, pero también aprovechemos esta ocasión para ser fuente de bendición para algún niño, que su Santo Espíritu nos muestre mientras lo pensamos.

Oración: Dios rogamos por los niños que han sido víctima de violencia física y psicológica, pedimos que tengan la oportu-nidad de conocerte y sean sanados por ti.


Niños, pequeños tesoros


“… Y habéis olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por él…”Hebreos 12:5-11

En mi última reunión de apoderados recibí a los padres con este texto bíblico escrito en la pizarra. Realmente provocó una buena reunión.Cuando en los colegios se sufre la maldad del que se siente superior, el que insulta, ofende, hace bullying (intimidación), violencia psicológica, agresión física; y cuando hablamos de lo que ocurre en la sala de clases, en los pasillos de una escuela o entre apoderados y maestros, es casi imposible no tocar el punto de “la autoridad y disciplina del hogar”. Hay un reconoci-miento generalizado de que cada vez es más difícil hacer clases y cada vez es más difícil hacer familia.

Cuando veo el programa de televisión “Nanas a domicilio” donde estas observan durante toda una semana la problemática de los padres con sus hijos, siempre resultó que la solución comenzaba por el cambio y respeto a las nuevas reglas. Muchas veces vi cómo estas “nanas” encararon a los padres por su falta de autoridad, y cómo acostumbraron a sus propios hijos a la irreverencia, los insultos, la manipulación, la desobediencia y a malos hábitos que, �nalmente, desde muy temprana edad les permitieron desarrollar conductas rebeldes. El concepto de autoridad apareció en Roma como opuesto al de poder. El poder es un hecho real, una voluntad se impone a otra por el ejercicio de la fuerza; en cambio, la autoridad está unida a la legitimidad, dignidad, calidad, excelencia de una institución o de una persona, es decir, como le dijera un alumno a su padre después de ser citado a Inspectoría General: “Tienes el poder para obligarme, pero NO la autoridad para que te siga”.

La Autoridad es el arte de conseguir que la gente haga lo que tú quieres debido a tu in�uencia personal (eso se llama Liderazgo también). La autoridad tiene que ver con el Ser, el poder tiene que ver con el Hacer; y como padres, se ejercen ambas.

TENGO QUE SER PARA HACER… mi voluntad es que mis hijos me obedezcan, me respeten, tengan valores. Y esos los practi-quen en la escuela, en la universidad, en el trabajo, y, a futuro, en su vida como adultos.

Oración: Dios, rogamos por aquellos que sufren violencia en los colegios, que tu mano poderosa les alcance y les libres de vivir en ese clima de maldad y maltrato.

Enseñemos respeto a los nuestros

Hna. Olga Hartard45

“De ocho años era Josías cuando comenzó a reinar y treinta y un años reinó en Jerusalén. Este hizo lo recto ante los ojos de Jehová, y anduvo en todo el camino de David su padre, sin apartarse a derecha ni a izquierda” 2ª Crónicas 34: 1-8.


He aquí un Currículum de un creyente: A los 8 años comienza a buscar a Dios, a los 12 comenzó a limpiar Judá y Jerusalén de la idolatría y a los 18 años, mientras arreglaban la casa de Dios, bajo sus órdenes, el sacerdote Hilcías halló el libro de la ley de Jehová dada por medio de Moisés. Josué hizo pacto de caminar en pos de Jehová y de guardar sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo su corazón y con toda su alma, poniendo por obra las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y era apenas un joven muchacho.

He aquí un niño, un adolescente de 12 años que como consecuencia de recibir la instrucción adecuada decide comenzar a hacer las cosas bien, las que agradan a Dios. ¿Cómo están nuestros adolescentes?, ¿están en la senda de la verdad y en pos del Señor de la Palabra? Es responsabilidad de los padres y de los maestros fortalecer la enseñanza de la Palabra sobre la vida de las nuevas generacio-nes. Pero debemos preguntarnos: ¿Maestros, por qué se van los chicos de nuestras clases? Padres, ¿por qué sus hijos ya no les quieren acompañar a la iglesia?

Déjeme decirle que la carencia de atención y la soledad en que viven muchos de nuestros adolescentes es la que los lleva a acompañar-se de este mar tecnológico que, a la vez, los arrastra lejos de los templos. Por otro lado, hay padres que han querido suplir estas ausen-cias con objetos y con darles en el gusto en todo, con la excusa de premiar sus buenas costumbres escolares. Los padres no pueden esperar y conformarse a que la educación cristiana sea dada en la iglesia cuatro domingos al mes. Nuestros adolescentes son una generación que precisa de nuestra atención, y de a�anzar con convicción su fe y valores cristianos en esta etapa de la vida.

Oración: Padre, pedimos por los adolescentes para que sus corazones se vuelvan a ti, y sean sensibles a tu voz y tu llamado.


Adolescentes instruidos por el buen camino

Hna. Olga Hartard

“… Pero antes que se acostasen, rodearon la casa los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo….”Génesis 19:1-10

Cuán grande era la maldad que había en Sodoma y Gomorra que Lot experimentaba la violencia más extrema de parte de los habitantes “ahora te haremos más mal que a ellos. Y hacían gran violencia al varón, a Lot, y se acercaron para romper la puerta.”v.9

La experiencia de aquella toma fue muy devastadora. Recuerdo que el grupo de jóvenes que se agolparon en los techos del colegio gritaban e insultaban al que pasara cerca de ellos. Se podía ver en sus rostros un odio a todo lo que se les oponía y sabíamos que muchos eran manipulados. Ellos no entendían que hacían daño a quienes nada tienen que ver con el sistema por el cual reclaman. Las acciones de romper, destruir, quemar, golpear objetos son algunos de los actos de este tiempo. También, podemos hablar de grandes ciudades donde la delincuencia y la maldad aumentan. Hay un desenfreno moral, porque se dice que nuestro país es retrasado por no aceptar la ley de aborto terapéutico o por violación. Se critica en que aún no se ha aprobado la ley de matrimonio civil entre homo-sexuales.

Cuando, en este pasaje, “los varones alargaron la mano, y metieron a Lot en casa con ellos, y cerraron la puerta” v.10 creo que representa muy bien lo que nosotros estamos haciendo. Cerramos las puertas de los templos. Necesitamos visión para capacitarnos y atender estos casos. Dar una mano a la comunidad, que atienda a adolescentes y que dirija la vida de jóvenes inseguros.

Cuando vemos que autoridades están dispuestas a cambiar su línea de pensamiento para tener el favor de las minorías es cuando el pueblo de Dios debe estar alerta levantando grupos especí�cos de atención a los necesitados de Dios, dar otra salida que no sea el suicidio, la droga, el alcohol, el sexo, el dinero, la fama o la violencia. Oración: Padre pedimos misericordia por las grandes ciudades en donde la delincuencia y la maldad han aumentado. Señor, pedimos que transformes la mente y el corazón de los que procuran el mal.

Se multiplica la maldad

Hna. Olga Hartard

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“… Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes…” Deut. 6:5-9


“La asociación Europea Laica reclama que la enseñanza de la doctrina católica y de otras religiones no se imparta en las escuelas”. "Ningún alumno o alumna está obligado a asistir a clases de religión en cualquier centro público o privado del Estado español", sostiene dicha agrupación. A�rman, además, que las imposiciones de carácter religioso "vulneran principios constitucionales"; e insisten en que impartir Religión en un colegio "en ningún caso" debe suponer una discriminación hacia los alumnos que no reciban esta materia. Europa Laica recuerda, asimismo, que la asignatura es voluntaria y no debe formar parte del currículo general. “Madalyn Murray O'Hair es muy conocida por la demanda Murray vs. Curlett, que condujo a un histórico fallo de la Corte Suprema de los Estados Unidos y que terminó con la prácti-ca de la oración diaria en las escuelas públicas de Estados Unidos.

Cuando sacaron las clases de religión en los colegios, tanto en países europeos como en Estados Unidos, no pasó mucho tiempo en que se vieron las consecuencias sociales que esta acción trajo a la niñez y juventud. Si bien es cierto hoy se está pidiendo que se enseñen más valores, creo que los maestros de la Biblia son los mayores colaboradores de padres y profesores en esta era de indiferencia e incredulidad masiva. Más aun, cuando se ha levantado tanto viento de doctrina, de tantos eventos cristianos de sana entretención. Solo la Palabra de Dios transforma profundamente y trae convicción al corazón. Creo que en las iglesias debemos realizar más eventos evangelísticos que apunten a grupos especí�cos. El 70% de nuestra in�uencia cristiana es para los mismos miembros de las iglesias. El mayor porcentaje de los presupuestos no son para la tarea evangelística y misionera. El servicio que puede prestar la iglesia a la comunidad donde se encuen-tren hospitales, centros educativos, plazas, jardines infantiles, museos, teatros o estaciones de metro, requiere organizarse para ellos, no para nosotros. Mi responsabilidad como creyente es edi�carme espiritualmente en mi hogar, en mi relación con Dios semanal. Vamos a adorar a Dios también el domingo a través de la tarea para la cual fuimos llamados.

Oración: Señor, intercedemos por cada jardín infantil, colegio y universidad que tu presencia se haga notoria a través de tus hijos. Y que traigas transformación al corazón de muchos de ellos.


Dios presente en las aulas

Hna. Olga Hartard

“… Y oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!...” Marcos 10:46-52

He aquí un hombre de “situación de calle” como lo llamamos socialmente. Sobre Bartimeo podemos decir que pese a ser ciego, no era sordo, pues, sólo al oír que era Jesús quien pasaba por allí comenzó a gritarle. No le preguntó a nadie quién era el que pasaba por el lugar. Por tanto, la deducción es que en más de alguna ocasión escuchó hablar de él. Estar junto al camino, a mi modo de ver, signi�ca mostrarse, no esconder su condición de mendigo -inhabilitado para trabajar y valerse por sí solo- .Además, no estaba solo, Mateo habla de dos ciegos, ambos recibieron la bendición. No hay contradicción, recuerdo cuando eran bebés las mellizas de mi hermano menor, ambas comenzaron a quejarse y llorar por su mamadera, pero una gritaba más que la otra (v.48 “clamaba mucho más”). Y fue la primera en ser tomada en brazos, pero ambas recibieron su biberón. Posiblemente, Marcos y Lucas se enfocaron en el que más gritaba, hacien-do valer con mayor insistencia su necesidad al grado que quedó registrado su nombre y no el del otro ciego.

Al pasar por algunas calles principales de la ciudad, uno puede ver gente ciega, rodeada o con alguien, y cosas para vender. Este hombre tenía solo una cosa, la capa con la cual se cubría, probablemente, en las noches. Me enfoco en la actitud de este necesitado y no en la egoísta, y equivocada, actitud de los discípulos. Fue tanto su impacto de saber y sentir que Jesús tenía interés en él, que dejó “TODO” lo que tenía. Su fe fue tan grande que supo que al ir a Jesús recibiría más de lo poco que tenía. Su vida entera sería transforma-da, vería más allá de su necesidad física.

Hoy, no solo en las calles, la visión de muchos es nula, o muy corta. Somos llamados a llevarles la luz de Cristo, la Palabra de Salvación. El Señor puede, cada mañana, guiarnos por las calles hacia las personas que ya están preparadas para recibirles, que andan buscando dónde depositar su fe. Pero estamos tan inmersos en nuestras cosas, tenemos tan poco tiempo, hermanos, andamos siempre apura-dos; el tiempo se nos hace tan corto que no lo tenemos ni siquiera para orar antes de salir. Si decimos que Él tiene el control, entonces también puede guiarnos, con su Santo Espíritu, hacia una persona a quien podamos llevar a Cristo.

Oración: Señor, oramos por todos aquellos que viven en la calle; que sus ojos sean abiertos y que encuentren en ti esperanza y salvación para sus vidas. Transfórmales Señor.

Jesús, Esperanza de Vida

Hna. Olga Hartard

47

“Entonces una mujer llamada lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo; y el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía” (Hechos 16:14).


Muchas de las personas de clase alta en Chile tienen conocimiento de Dios, y piensan que a su manera lo adoran, igual que Lidia. Sin embargo, ella no conoció a Dios hasta que escuchó el verdadero evange-lio y abriera su corazón a Cristo.

Notemos la disposición de Pablo y Silas. Fueron donde estaba Lidia y entraron en conversación con ella. Tengamos la convicción que hay personas como Lidia en Chile, que tienen hambre y sed de la verdad. Pidamos a Dios que quite las barreras sociales que impidan que el evangelio llegue con poder a los ricos.

Oremos para que Dios nos use a dar testimonio a toda clase de personas. Oremos en especial por los jóvenes profesionales para que reconozcan que su trabajo es su campo misionero. Que puedan formar-se grupos de estudio bíblico en o�cinas, empresas y universidades a lo largo del país, para que las buenas nuevas de Jesús lleguen a la clase alta.

Oración: Señor, pedimos por los ricos de nuestro país; toca sus vidas y convierte sus corazones para que puedan reconocer que la mayor riqueza en este mundo eres tú.


La riqueza verdadera

Misionera Karen Wright

“Porque de tal manera Dios amó al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna” (Juan 3:16).

Alá, el dios de los musulmanes, es tan exaltado y tan transcendente, que ningún hombre podría jamás conocerlo personalmente. También es caprichoso e indigno de con�anza; no está limitado por su propia naturaleza, ni por su palabra. Mientras el amor es el principal atributo del Dios de la Biblia, el amor no se presenta como característica importante de Alá.

Oremos por los musulmanes en Chile, que vean en los hijos de Dios su amor. Que Dios nos quite los prejuicios y el temor de testi�carles a ellos; que Dios levante misioneros llamados a llevar el evangelio a musulmanes en Chile, y que Cristo se revele con poder a ellos.

Oración: Padre, por los Musulmanes que nos rodean, Dios, revélate a ellos, sácalos de las tinieblas para que puedan reconocer que tú eres Dios de amor, poderoso y bondadoso.

Los musulmanes necesitan conocer de Dios


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Dios nunca está lejos de nosotros, muchas de sus promesas nos indican que él jamás nos “dejará” ni “olvida-rá”, y él no miente, por lo tanto tenemos esa gran esperanza y fuerza del Señor en nuestras vidas. Hoy día somos los portadores de esta “esperanza” y de estas “promesas” maravillosa de nuestro Señor Jesucristo a todos aquellos amigos y vecinos que sabemos que viven con un vacío en su corazón. Si nos acercamos a ellos, escucharemos como sus vidas están en pedazos por los sufrimientos que están viviendo en su entorno familiar, por la situación que ocurre en el mundo, el dolor de la enfermedad, la pérdida de un trabajo, la falta de recursos. Por lo tanto, nuestro trabajo es ir a ellos, animarlos y visitarlos. Solo así verán el “gran amor” de nuestro Señor Jesucristo a través de nosotros, y veremos cómo sus corazones se abrirán para escuchar “el mensaje de salvación” y conocerán de la gran misericordia de nuestro Señor Jesucristo por ellos. Recuerden que el Señor “restaurará” y “reparará” esas vidas para la “gloria de EL”, y sus vidas serán un testimonio para que muchos otros conozcan y reciban al Señor Jesucristo como el Señor de sus vidas.

Oración: Por mis amigos y vecinos que viven con un profundo vacío en sus corazones. Piden que vean tu amor y misericordia a través mí.

“En esto conocerán todos que sois mis discípulos, ti tuviereis amor los unos con los otros” (Juan 13:35).


Todos conocemos la frase de la canción: “y verás cómo quieren en Chile, al amigo cuando es forastero”, pero como hijos de Dios, ¿realmente entregamos amor a los extranjeros? En los últimos 10 años, Chile ha recibido miles de extranjeros, especialmente de Perú, Bolivia y Colombia; todos buscando una vida mejor. Las personas nunca están tan receptivas al evangelio que cuando están lejos de su hogar y lo conocido. Reconozcamos que de todo lo que ellos buscan en un nuevo país, lo mejor que pueden encontrar es Cristo. Algunos volverán a sus países y llevarán el evangelio a sus familias. Consideremos nuestra disposición para compartir con los extranjeros en nuestro país. Pidámosle a Dios que nos use para mostrarles su amor y para presentarle a Cristo.

Oración: Señor, oremos por los extranjeros que viven en medio de nosotros, que tengan el privilegio de conocerte y puedan disfrutar de una vida nueva en la persona de Jesús.


Amando a los extranjeros


“Más Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.” (Hechos 3:6)

Hay muchos programas sociales dedicados a los discapacitados; sin embargo muchos viven en situa-ciones precarias, y sus familias también sufren. Dios quiere que vivan con dignidad y quiere usar a sus hijos para darles lo que tenemos, es decir, las noticias de Jesús; quien puede transformar sus vidas. Dios quiere que su iglesia esté dispuesta a hacer ajustes para poder entregar su evangelio a todas las perso-nas. Señor, abre nuestros ojos a las personas en nuestro alrededor. Úsanos a mostrarles a los discapaci-tados que son personas de valor en tus ojos. Sana cuerpos, mentes y espíritus, y sea glori�cado en ellos.

Oración: “Pedimos por todos los discapacitados de nuestro país; muéstrales tu amor y misericordia en medio de las circunstancias que les toca vivir. Úsame para bendecirles.”

Mostremos amos a los discapacitados


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A través del Señor Jesucristo hemos conocido al Padre amoroso, misericordioso, perdonador, personal, restaurador, sanador y podríamos seguir enumerando muchas características de él. Pero una cosa tene-mos que entender que esta revelación vino a nuestras vidas, porque el Señor Jesucristo estuvo dispues-to a obedecer al Padre, para cumplir la misión que él le encomendó. Hoy muchos de nosotros tenemos esta bendición y revelación en nuestras vidas y miramos el mañana con esperanza, porque sabemos a dónde vamos. Hoy día, si miramos a muchos de nuestros amigos y vecinos, nos daremos cuenta que ellos no tienen la bendición de la vida eterna. No conocen al Dios único y verdadero y Jesucristo su hijo, por lo tanto, quien más que nosotros, que tenemos este conocimiento y revelación, debemos ir a ellos y darles a conocer las “buenas nuevas”, para que así, ellos puedan proclamar junto a nosotros que han conocido al Dios único y verdadero y a su Hijo Jesucristo. Está en nuestras manos que esto se cumpla, pues cuando nos movemos Dios hace el resto. Esperemos y veremos grandes cosas del Señor.

Oración: Señor por mis vecinos y amigos, rebélate a ellos como el Dios único y verdadero. Ten compa-sión de sus vidas Señor.

“Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas”. Romanos 13:1

DÍA 96, LUNES 4 DE NOVIEMBRE

Nosotros como pueblo bautista creemos en la separación de la iglesia y estado, y la libertad religiosa. El estado debe protec-ción y completa libertad a toda iglesia en el ejercicio de sus �nes espirituales. Al proveer tal libertad ninguna denominación o grupo eclesiástico debe ser favorecido por el estado sobre otros grupos. Como el gobierno civil es ordenado por Dios, nuestro deber como cristianos es mostrar obediencia. Hoy nuestro país está pronto a vivir el proceso de un nuevo gobierno. Aún cuando muchos decimos no ser políticos, tenemos como creyentes la obligación de orar por quienes nos presiden. Independiente si son o no de nuestra entera satisfacción, la Biblia nos dice que Dios es quien pone a reyes en sus tronos y quien también se encarga de sacarlos. En un mundo tan confuso, de tantas injusticias y corrupción nos cuesta imaginar que haya autoridades que quieran servir para el bienestar de la nación. Por ello, debemos pedir a Dios que las autoridades que nos dirijan sean hombres con temor a Dios y con un corazón receptivo al mensaje de Cristo. Hombres que de�endan los intereses de la nación en lugar de los personales. En este sentido, es nuestra obligación y deber como creyentes orar por estos hombres y mujeres para que en la misericordia y sabiduría de Dios, estos realicen su labor apoyados en valores y principios cristianos.

Oración: Señor oramos por nuestras autoridades para que sean temerosos de Dios y por hombres y mujeres que hagan justicia para el bien de nuestra nación. Toca sus vidas Señor y que sus corazones se conviertan a ti.

DÍA 97, MARTES 5 DE NOVIEMBRE

Pedimos por las autoridades

DINEMIS

“Entonces Jesús le dijo: De cierto, de cierto te digo que hoy estarás en el paraíso” Lucas 23:43“Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los…” Hebreos 13:3a

Chile es un país que, en Latinoamérica, cuenta proporcionalmente con la mayor población penitenciaria, alcanzando una tasa de 318 por cada 100 mil habitantes. Nuestra realidad es que tenemos una población penal enorme y que ha ido en aumento durante los últimos cinco años. Sin embargo, aun cuando hay nuevas infraestructuras, todavía hay recintos penitenciarios no concesionados donde estas personas viven hacinadas y en condiciones precarias. Esto no permite tener un sistema de reinserción social justamente por las condiciones imperantes. Por otro lado, la condición de los adolescentes en los recintos del estado es muy parecida. Sin nada de oportunidades y escasas probabilidades de cambio.Estas personas que están privadas de su libertad y que están pagando por sus actos, se merecen tener la oportunidad de cambiar y conocer el amor, misericordia y compasión de Jesús.¿Qué podemos hacer nosotros desde fuera? La respuesta es: Orar, aunque pensemos que estas personas merecen estar allí y deben pagar por lo que han cometido.

La escena de la cruz nos invita a tener misericordia de ellos, porque Jesús la tuvo antes de morir. Había dos criminales que morirían junto a Jesús, uno de ellos se arrepintió y Jesús amorosamente lo aceptó y le aseguró un lugar en el cielo.En ocasiones, olvidamos que Jesús murió por toda la humanidad sin hacer excepciones. Así como “el sol sale sobre buenos y malos”; la salvación es para todos aquellos que se arrepientan y declaren a Jesús como Señor y Salvador de sus vidas.

Señor pedimos por nuestros hermanos en la fe privados de su libertad que alaban y sirven a Dios desde recintos penitencia-rios. Oremos por los capellanes que realizan el ministerio de la misericordia y la predicación de la Palabra.

Oremos por los hermanos y hermanas que desarrollan un ministerio en estas instituciones. Oremos para que más iglesias se decidan a ministrar en estos recintos.

Oración: Señor pedimos por los que están en las cárceles y hogares privados de su libertad. Dios que sus vidas puedan ser transformadas con tu poder y que sus mentes sean renovadas para hacer el bien.

Que los presos conozcan la verdadera libertad.

Pastora Viviana Faúndez Villegas

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El pueblo Aymara es un pueblo muy religioso, sin embargo, para llegar a ellos y que luego se desarraiguen de sus tradi-ciones ancestrales centradas en la idolatría, implica, muchas veces un largo proceso, que sólo es posible por obra y gracia del espíritu Santo. Bien lo saben los misioneros que con gran sacri�cio han servido al Señor en medio de medio de este amado pueblo.Oremos por ellos para que no sean tan postergados y para que el gobierno desarrolle políticas públicas que vayan directamente en su bene�cio. Al decir “Aymará” pareciera que se olvida que también son chilenos.Oremos para que nuestra obra bautista no los abandone, aún sabiendo que posiblemente jamás se forme una iglesia grande, por el amplio radio geográ�co donde residen. Tal vez nunca envíe recursos al plan cooperativo o Dinemis, pero el Señor ama también a quienes están en el desierto, como el eunuco, y envía a su mejor evangelista.Oremos para que Dios toque el corazón del pueblo Aymará. Oremos para que Dios toque los corazones de hermanos empresarios y profesionales y hagan misiones proveyendo de vehículos y combustible para el traslado de los misione-ros y pastores que trabajan con el pueblo Aymará.

Desafíos: Llamar hoy a alguien que se encuentre ministrando al pueblo Aymará y orar por ellos. Ver la manera de cómo nuestra iglesia puede ser fuente de bendición para ellos.Oración: Dios oramos por el pueblo Aymará, para que tú derribes toda creencia pagana de sus vidas y crean en Ti como el único Dios y Salvador.

“Que el hombre trabaje con sabiduría, y con ciencia y con rectitud”. Eclesiastés 2:21a

DÍA 98, MIERCOLES 6 DE NOVIEMBRE

En nuestras congregaciones encontramos hermanos y hermanas con variadas características como ocurre con el lugar de procedencia, el nivel educacional, el estrato social, entre otros aspectos. Entre esta diversidad, hay algunos que trabajan como empresarios y que son miembros activos de nuestras Iglesias. Su presencia en las congregaciones también cumple un propósito, como ser un modelo cristiano frente a sus trabajadores, un mensajero de la palabra de Dios ante otros empresa-rios y colaborar económicamente en la obra del Señor. Dios a cada hermano o hermana le dado la oportunidad de desenvol-verse en distintos ámbitos de la vida con el �n de que su palabra sea comunicada en todo lugar de la sociedad.No obstante, también es nuestro deber orar por los empresarios que no han recibido a Cristo en su corazón. Sabemos que ellos ejercen un liderazgo en su vida laboral frente a muchas personas y qué mejor si esta función la desempeñan bajo la cobertura del Señor. En este sentido, te invitamos a orar por los empresarios que son parte de nuestras congregaciones como por aquellos que no han aceptado al Señor en su corazón, para que ellos reconozcan que el Señor es el único que puede guiar sus decisiones y para que vean que su profesión se puede convertir en una herramienta e�caz para servir al Señor. En la biblia encontramos muchos ejemplos de hermanos que sirvieron al Señor por medio de sus profesiones y esta invitación también la pueden aceptar los empresarios.

Oración: - Oramos por los empresarios para que tengan un corazón compasivo, justo con sus trabajadores. Señor que puedan escuchar de tu Palabra y sus estilos de vida sean modi�cados.

DÍA 99, JUEVES 7 DE NOVIEMBRE

Los empresarios al servicio del Reino


Nehemías es un hombre y siervo de Dios, que a través de su ejemplo nos invita a interceder por Chile. Cuando Nehemías supo la situación en la que se encontraba Jerusalén y el remanente que allí quedó, lo que hace es llorar. Es un hombre que se duele por la condición de sus hermanos y no solo ello, sino que ora buscando en Dios la respuesta para un cambio y una transformación en todo aquello que estaba aconteciendo. Nehemías no fue indiferente, se puso en el lugar de los que estaban sufriendo. Los judíos estaban padeciendo todo ello por causa de su pecado y por el abandono a los mandamientos de Dios y su persona. Jerusalén estaba en ruinas. Frente a este hecho, nuestro país no está tan lejos de ello, si dejamos que la gente se aleje cada día más de Dios.

Nehemías fue un intercesor, decidió colocarse en la brecha por amor a los que sufrían. Nosotros necesitamos asumir este compromiso más allá de estos cien días. Debemos estar en las trincheras de la intercesión de manera permanente y sistemá-tica. Estamos librando una batalla espiritual y no debemos parar hasta levantar los muros de nuestras vidas, familias, vecinos y de nuestra sociedad.

Nehemías no solo fue un intercesor sino que se transformó en un reconstructor y es eso lo que necesitamos hoy día:Reconstruir los muros en ruinas de la ética, de los valores trastocados y de vidas consumidas por el pecado y la maldad.

Es la oración la que puede cambiar esta nación y podremos ver la mano de Dios obrando poderosamente en medio de cada uno de sus habitantes. Que este día sea usado para bendecir a Dios y exaltarle en gran manera.

Oración: Señor hoy oro para seguir siendo un intercesor de mi nación. Tú haces que las cosas imposibles sean posibles por eso te alabo y te bendigo.

Que los presos conozcan la verdadera libertad.


“Cuando oí estas palabras me senté y lloré, hice duelo por algunos días, ayuné y oré delante del Dios de los cielos” Nehemías 1:4

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“Bienaventurada la nación cuyo Dios es el Señor, el pueblo que él escogió como heredad para sí” Salmos 33:12

DÍA 100, VIERNES 8 DE NOVIEMBRE 2013

El pueblo de Israel era una nación bendecida y feliz por gozar de la presencia del Dios único y verdadero. Una nación formada por Dios y que procuró guiar desde sus inicios. Aunque gozaban del favor, provisión y cuidado de Dios, se alejaron de él y le dieron la espalda en muchas ocasiones. El pueblo de Israel se vio envuelto en la idolatría, pervirtieron sus mentes y corazones desviándose a tal grado de servir a otros dioses y lo que más grave dejaron a un lado los mandamientos dados por Dios para ellos. Se contagiaron con otras naciones y se dejaron seducir por ello.

No es así de cierto que nuestro país está imitando los malos modelos de las naciones vecinas al igual que lo hicie-ra Israel. Es también cierto que hemos dejado de sentir ese respeto y temor por Dios. Nuestra sociedad se ha corrompido, ha ido cambiado y transado sus valores por conveniencia y por agradarse a sí misma. Si nuestro país tiene la capacidad de volver su rostro hacia Dios entonces seremos una nación bienaventurada porque Dios será quien guie y dirija los destinos de cada uno de sus habitantes. Solo Dios puede traer restauración y bienestar a la vida de cada habitante.

Oración: Señor te pido por cada habitante de mi nación para que Tú transformes, levantes, perdones y restaures cada una de nuestras vidas y nos volvamos a ti con todo nuestro corazón.

Mi Nación entregada al Señor


En mi última reunión de apoderados recibí a los padres con este texto bíblico escrito en la pizarra. Realmente provocó una buena reunión.Cuando en los colegios se sufre la maldad del que se siente superior, el que insulta, ofende, hace bullying (intimidación), violencia psicológica, agresión física; y cuando hablamos de lo que ocurre en la sala de clases, en los pasillos de una escuela o entre apoderados y maestros, es casi imposible no tocar el punto de “la autoridad y disciplina del hogar”. Hay un reconoci-miento generalizado de que cada vez es más difícil hacer clases y cada vez es más difícil hacer familia.

Cuando veo el programa de televisión “Nanas a domicilio” donde estas observan durante toda una semana la problemática de los padres con sus hijos, siempre resultó que la solución comenzaba por el cambio y respeto a las nuevas reglas. Muchas veces vi cómo estas “nanas” encararon a los padres por su falta de autoridad, y cómo acostumbraron a sus propios hijos a la irreverencia, los insultos, la manipulación, la desobediencia y a malos hábitos que, �nalmente, desde muy temprana edad les permitieron desarrollar conductas rebeldes. El concepto de autoridad apareció en Roma como opuesto al de poder. El poder es un hecho real, una voluntad se impone a otra por el ejercicio de la fuerza; en cambio, la autoridad está unida a la legitimidad, dignidad, calidad, excelencia de una institución o de una persona, es decir, como le dijera un alumno a su padre después de ser citado a Inspectoría General: “Tienes el poder para obligarme, pero NO la autoridad para que te siga”.

La Autoridad es el arte de conseguir que la gente haga lo que tú quieres debido a tu in�uencia personal (eso se llama Liderazgo también). La autoridad tiene que ver con el Ser, el poder tiene que ver con el Hacer; y como padres, se ejercen ambas.

TENGO QUE SER PARA HACER… mi voluntad es que mis hijos me obedezcan, me respeten, tengan valores. Y esos los practi-quen en la escuela, en la universidad, en el trabajo, y, a futuro, en su vida como adultos.

Oración: Dios, rogamos por aquellos que sufren violencia en los colegios, que tu mano poderosa les alcance y les libres de vivir en ese clima de maldad y maltrato.

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Devocionales Diarios Campaña 100 Días de Oración por la Evangelización de Chile