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VENERABLE JERÓNIMO M. USERA Y ALARCÓNFundador de la Congregación de Hermanas del Amor de Dios

(1810-1891)

DONATIVOS PARA LA CAUSA DEL PADRE USERA

EVANGELIZAR LA DEVOCIÓN MARIANA

DEL PUEBLO

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Para sugerencias, comunicación de gracias, consultas y envío de donativos para laCausa, pueden dirigirse a:

DEPARTAMENTO DE CAUSASCausa de Canonización del Padre UseraCalle Asura, 90 - 28043 MADRIDTeléfono: 913 001 746 E-mail: dptocausas@amordedios.netwww.amordedios.net

Rogamos a las personas que alcanzan algún favor por intercesión del Venerable P. Usera, y nos lo comu-nican, tengan la bondad de firmar la relación de lo ocurrido para que la gracia pueda ser publicada.

ORACIÓNPara rezarla en privado - Con licencia eclesiástica

Señor, tú que has derramado en Jerónimo Usera un don especial de amor gra-tuito, danos también a nosotros un celo infatigable y un amor ardiente que nosimpulse a entregarnos al bien de los hermanos. Y concédenos, por su intercesión, la gracia que hoy te pedimos...Gloria al Padre...

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María madre de Dios y madre nuestra

¿Quién no ha alimentado y sigue alimentandosu fe desde la religiosidad “popular”? Casi todos

los creyentes en Cristo hemos absorbido la fe en el hogar de familiascristianas ricas en oración, en ritos, en celebraciones litúrgicas, romeríasy rituales, ofrendas y gestos que nos han llevado a un mundo trascen-dente y que, poco a poco, hemos modificado por una formación religio-sa más ajustada a los cánones eclesiales, purificando lo que pudiera con-taminar la verdadera religión.

Eco de María en la familia y en el pueblo

Ya hemos aludido en otras ocasiones a esta influencia de la tradiciónfamiliar en Jerónimo Usera. El eco de María resonó, además, y caló enlas raíces de la formación religiosa de Jerónimo, forjada en el Císter. Noignoraba Usera los Sermones sobre María, de San Bernardo, tambiénmatizados por la devoción popular medieval. Y la resonancia de ladeclaración del dogma de la Inmaculada Concepción en un momento delos más fértiles de su vida pastoral, 1854, que introdujo nuevo vigor enla piedad mariana popular de la cristiandad. El pueblo, sin suficiente formación religiosa, sin acceso a la Biblia ni

a la comprensión de los textos litúrgicos, que estaban en latín, se ceñíaa las enseñanzas y oraciones del catecismo, a los relatos piadosos fami-liares o locales, a los cantos para fiestas, procesiones o novenas, a vecesde gran valor literario, musical o plástico, muchas veces con una largatradición de raíces medievales o de la literatura religiosa de nuestroSiglo de Oro.Dos gestos son inseparables de la actuación del P. Usera misionero:

la implantación de la cruz de Cristo y la presencia de María, la Madrede Jesús y Madre nuestra. Contó con María para evangelizar al pueblo,a la vez que trató de evangelizar las formas de piedad y culto a María.

TESTIMONIOSomos un grupo de amigas de Madrid, que hemos

experimentado la gracia de curación rápida de nuestraamiga Emilia, a través de la intercesión del V. PadreJerónimo Usera. Emilia se encontraba hospitalizada conuna neumonía en estado avanzado, de forma que peligra-ba su vida. En esta situación, el grupo se puso en alertaa través del teléfono y comenzamos la oración de inter-cesión del P. Usera con esta consigna: Emilia necesitauna gracia especial de Dios para curar, y este Siervo deDios necesita nuestra oración para ser beatificado. Así,nos unimos en oración, y, sin tardar, apareció la mejoría.Además de la salud física, vemos que Emilia ha reci-

bido una especial luz interior en su vida cristiana. Portodo esto damos gracias a Dios y enviamos un donativopara gastos de la Causa.

Herminia

Jerónimo Usera, Fundador de la Congregación de Hermanas del Amor de Dios Jerónimo Usera, Fundador de la Congregación de Hermanas del Amor de Dios

La Virgen María, madre de Dios y madre de los cristianos, ha estado y estámuchas veces como telón de fondo de este universo religioso que llamamos piedadpopular mariana, que consiste en solicitar la intervención de Dios en nuestra vida, ennuestras necesidades, a través de la mediación de María, hija de Dios Padre, Madrede Dios Hijo y esposa de Dios Espíritu Santo, y como tal, dispensadora de una graciaespecial participada del mismo Dios. Las innumerables advocaciones de nuestraSeñora no la multiplican. El pueblo creyente sabe que es una y la misma, pero lasiente más próxima cuando la llama y le reza con un nombre o un apellido, que laaproxima a su geografía e historia cotidiana. Ella es siempre la Virgen de… de… yde…, pero siempre es la Virgen María, Madre de Jesús. Usera la llamó María,Señora, Inmaculada, Carmen, Caridad, Belén y tantos otros nombres, que no nosconstan.

María modelo pedagógico

El pueblo cristiano, de oriente a occidente, ha estado muy atento a la propuesta de laVirgen María en la Iglesia como mujer hija de esta Humanidad, encumbrada a la dig-nidad de Madre del Hijo de Dios hecho hombre y que él nos dejó también comomadre al morir en la cruz, en la figura del Apóstol San Juan. Acudir a ella es lo másnatural, lo más piadoso en este universo de interrogantes y en medio de las situacio-nes difíciles de la vida. ¡Cuántos aprendizajes cristianos a partir de la «imitatioMariae»! «Las grandes virtudes de humildad, de atención y de caridad que ejecutóesta Señora, deben servirnos de instrucción para arreglar nuestra conducta; asícomo las maravillas que obró Dios por medio de María nos deben inclinar a amarmás y más a esta Señora, mirándola siempre como a nuestra vida, nuestra dulzuray nuestra esperanza después de Jesucristo» (Usera, Meditación ante la Virgen deBelén).Contando con la experiencia religiosa que el pueblo tenía, el P. Usera construía en

muchas ocasiones la catequesis de aprendizajes de vida cristiana a partir de la «imi-tatio Mariae», como camino para Jesucristo: «Inspíranos, Señora, / el más ardienteamor, /para seguir constantes /a nuestro Redentor». «Concédenos adornemos nues-tras almas con el tesoro de gracias y de virtudes que encierras, y muy principalmen-te con la santa humildad que te condujo a la alta excelencia de ser Madre de Dios»(en la Novena de la Virgen de Belén).María vive en el pueblo cristiano como camino de acceso a Dios, María creyente,

humilde y poderosa. Digna de ser visualizada y celebrada en las expresiones artísti-cas: escultura, pintura, música y literatura. Ave, María, como camino de salvación.Todo este universo de actos y vida religiosa lo encontramos en los escritos y sermo-nes del P. Usera, desde «el Descendimiento de Jesús de la cruz» al breve sermón lau-datorio a la Virgen del Carmen, Estrella del mar, por su intercesión extraordinaria en

favor de la tripulación de la fragata «Carmen» a punto de hundirse. La piedad de laIglesia hacia la Santísima Virgen es un elemento intrínseco del culto cristiano(Pablo VI, Marialis cultus, 56).Lo mismo que desde los primeros tiempos de la comunidad cristiana María, por

lógica, era respetada y venerada como «la Madre del Señor», este hecho de puralógica en la tradición cristiana y en el pueblo sencillo adquiere una enorme fuerzareligiosa posteriormente. María pertenece a la sustancia humana de Jesús, se halla ensu genética humana, es la gestante y nutricia de Jesús hombre. Jesús contó siemprecon María, aunque los evangelistas nos lo hayan dicho en pocas ocasiones.

La Virgen María ya estaba allí

La historia de la Iglesia nos enseña que el cristianismo ha contado siempre conMaría, colocada en lugar preeminente junto a Dios. En su honor, himnos, lugares deveneración y fiestas litúrgicas. Cuando Usera llegaba a una localidad, la VirgenMaría ya estaba allí. Él liberaba y rescataba lo que en aquella cultura religiosa nece-sitara de sanación. Y así rescató en varios casos el culto a María con la dignificaciónde ermitas y santuarios, purificándolos y liberándolos de toda exageración y supers-tición o explotación económica. El santuario tiene que ser un testimonio de la gra-tuidad de Dios, ya que es referencia de esta misma gracia.¿Podía proponer Usera un camino mejor que la persona santa de María para acce-

der a la fe en Cristo, mejor que la Caridad del Cobre como acontecimiento teofánicopara el pueblo cubano? Renovar para purificar y santificar.¿Podía encontrar mejor propuesta de intercesión para un pequeño pueblo de

Sanabria, fundido en sus quehaceres y trajines que la Virgen de la ermita de su aldea,que tenía grabada en su alma sencilla? De ahí que el recinto debía ser cuidado y ele-vado a centro de convocatoria y celebración para el puñado de gente que allí vivía ycelebraba.El P. Usera celebraba a María desde el pueblo y con el pueblo. Se inculturó en

cada lugar desde la proximidad a la gente, a sus cuitas y a su forma de honrar a Dios.María se coloca como referente para acceder al propio Cristo o a Dios, que a veces

los sentimos más allá de nuestro espacio de experiencia; la piedad mariana obedeceal don de piedad infundido por el Espíritu Santo, y pasa por la devoción del puebloque, con frecuencia, consiste en repetir fórmulas oracionales con fidelidad diaria, ovarias veces al día, en forma de jaculatorias, besos a medallas, triduos, novenas otiempos más largos. Pero estos hábitos de oración vocal como comportamiento reli-gioso externo, no siempre llevan a lo que entendemos como fruto de la devoción: lacaridad con el prójimo y la vida moral.Aquí es donde el P. Usera hizo fuerte hin-capié: aborrecer lo que Dios aborrece y amar lo que Dios ama, arreglar nuestraconducta, llegar a la sencillez de corazón.

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VENERÁVEL JERÓNIMO M. USERA Y ALARCÓNFundador da Congregação das Irmãs do Amor de Deus

(1810-1891)

DONATIVOS PARA A CAUSA DO PADRE USERA

32017157

Para dar sugestões, comunicação de graças, consultas e envio de donativos para aCausa, podem dirigir-se a:

DEPARTAMENTO DE CAUSASCausa de Canonização do Padre UseraCalle Asura, 90 - 28043 MADRIDTel: 913 001 746E-mail: dptocausas@amordedios.netwww.amordedios.net

Pedimos às pessoas que obtêm graças por intercessão do Venerável P. Usera, e no-las comunicam,tenham a bondade de assinar a descrição das mesmas a fim de que estas possam ser publicadas.

EVANGELIZAR A DEVOÇÃO MARIANA

DO POVO

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Maria, mãe de Deus e nossa mãe

Quem não alimentou e continua a alimentar a suafé partindo da religiosidade «popular»? Quase

todos os crentes em Cristo absorvemos a fé no lar de famílias cristãsricas em oração, em ritos, em celebrações litúrgicas, romarias e rituais,oferendas e gestos que nos transportam para um mundo transcendente eque pouco a pouco fomos modificando por uma formação religiosa maisajustada aos cânones eclesiais, purificando o que poderia contaminar averdadeira religião.

Nossa Senhora na família e no povo

Já temos mencionado noutras ocasiões esta influência da tradição fami-liar em Jerónimo Usera. O eco de Maria resoou igualmente e penetrounas raízes da formação religiosa de Jerónimo, ajustado no convento doCister. Usera não ignorava os Sermões de S. Bernardo sobre Maria, tam-bém adornados pela devoção popular medieval. E ressonância da decla-ração do dogma da Imaculada Conceição num momento dos mais férteisda sua vida pastoral, no ano de 1854, que insuflou novo vigor à piedademariana popular da cristandade. No seu tempo, o povo, sem suficiente formação religiosa, sem acesso

à Bíblia nem à compreensão dos textos litúrgicos, que estavam emlatim, aderiu aos ensinamentos e orações do catecismo, aos relatos pie-dosos familiares ou locais, aos cânticos para festas, procissões ou nove-nas, às vezes de grande valor literário, musical ou plástico, muitas vezescom uma larga tradição de raízes medievais ou da literatura religiosa donosso século de Ouro.Dois gestos são inseparáveis da atuação do P. Usera missionário; a

implantação da cruz de Cristo e a presença de Maria, Mãe de Jesus enossa Mãe. Contou com Maria para evangelizar o povo, ao mesmotempo que tratou de evangelizar as formas de piedade e culto a Maria.

ORAÇÃOPara rezar em privado - Com licença eclesiástica

Senhor, Vós que concedestes a Jerónimo Useraum dom especial de amor gratuito, dai-nos também a nós um zelo infatigável eum amor ardente que nos leve a entregar-nos ao bem dos irmãos e concedei-nospor sua intercessão a graça que hoje vos pedimos...Glória ao Pai...

TESTIMONIOSomos um grupo de amigas de Madrid, que experi-

mentámos a graça da rápida cura da nossa amiga Emília,através da intercessão do V. Padre Jerónimo Usera.Emília encontrava-se hospitalizada com uma pneumoniaem estado avançado, de forma que a sua vida corria peri-go. Nesta situação o grupo ficou em alerta através dotelefone e começámos a oração de intercessão do P.Usera com esta consigna: Emília precisa de uma graçaespecial de Deus para se curar e este Servo de Deus pre-cisa da nossa oração para ser beatificado. Unimo-nosassim em oração e sem demora apareceram as melhoras.Além da saúde física, vemos que Emília recebeu uma

luz interior especial na sua vida cristã. Por tudo istodamos graças a Deus e enviamos um donativo para gas-tos da Causa. Herminia.

Herminia

Jerónimo M. Usera - Fundador da Congregação das Irmãs do Amor de Deus Jerónimo M. Usera - Fundador da Congregação das Irmãs do Amor de Deus

A Virgem Maria, mãe de Deus e mãe dos cristãos, tem estado e está muitas vezescomo pano de fundo deste universo religioso que chamamos piedade popular maria-na, que consiste em solicitar a intervenção de Deus na nossa vida, em nossas neces-sidades, através da mediação de Maria, filha de Deus Pai, Mãe de Deus filho e esposade Deus Espírito Santo, e como tal, dispensadora de uma graça especial participadado mesmo Deus. Os inumeráveis títulos de nossa Senhora, não a multiplicam. O povocrente sabe que é uma e a mesma, mas a sentem mais próxima quando a chamam e arezam com um nome ou um apelido, que a aproxima da sua geografia e história quo-tidiana. Ela é sempre a Virgem de… de… e de…,mas sempre é a Virgem Maria, Mãede Jesus. Usera chamou-a Maria, Senhora, Imaculada, Cármen, Caridade, Belém etantos outros nomes, que não nos constam.

Maria, modelo pedagógico

O povo cristão, do Oriente ao Ocidente, tem estado muito atento à proposta daVirgem Maria na Igreja como mulher e filha desta Humanidade, elevada à dignidadede Mãe do filho de Deus feito homem e que Ele nos deixou também como mãe aomorrer na cruz, na figura do Apóstolo S. João. Acudir a ela é o mais natural, o maispiedoso, neste universo de interrogações e no meio das situações difíceis da vida.Quantas aprendizagens cristãs a partir da «imitatio Mariae»! «As grandes virtudes dehumildade, de atenção e de caridade que executou esta Senhora, devem servir-nosde instrução para modificar a nossa conduta; do mesmo modo, as maravilhas queDeus realizou por meio de Maria nos devem levar a amar mais e mais a estaSenhora, olhando-a sempre como a nossa vida, nossa doçura e nossa esperançadepois de Jesus Cristo» (Usera, Meditação ante a Virgem de Belém).Contando com a experiência religiosa que o povo tinha, o P. Usera construía em

muitas ocasiões a catequese de aprendizagem de vida cristã a partir da «imitatioMariae», como caminho para Jesus Cristo: «Inspira-nos, Senhora, / o mais ardenteamor, / para seguir constantes / o nosso Redentor». «Concede-nos adornemos nossasalmas com o tesouro de graça e de virtude que encera, e muito particularmente coma santa humildade que te conduziu à alta excelência de ser Mãe de Deus» (duranteNovena da Virgem de Belém).Maria vive no povo cristão como caminho de acesso a Deus, Maria crente, humil-

de e poderosa. Digna de ser observada e celebrada nas expressões artísticas: escultu-ra, pintura, música e literatura. Ave, Maria, como caminho de salvação. Todo esteuniverso de atos e vida religiosa encontramo-lo nos escritos e sermões do P. Usera,desde «a Descida de Jesus da cruz» ao breve sermão laudatório à Virgem do Carmo,Estrela do mar, por sua intercessão extraordinária em favor da tripulação da fragata«Carmem» a ponto de afundar-se. A piedade da Igreja até à Santíssima Virgem é umelemento intrínseco do culto cristão (Paulo VI, Marialis cultus, 56).

Do mesmo que desde os primeiros tempos da comunidade cristã, Maria, por lógi-ca, era respeitada e venerada como «a Mãe do Senhor». Este facto de pura lógica natradição cristã e no povo simples adquire uma enorme força religiosa posteriormente.Maria pertence à substância humana de Jesus, encontra-se na sua genética humana;ela gerou e alimentou o Jesus homem. Jesus contou sempre com Maria, contudo, osevangelistas no-lo dizem em poucas ocasiões.

A Virgem Maria já lá estava

A história da Igreja ensina-nos que o cristianismo contou sempre com Maria colocadaem lugar predominante junto de Deus. Em Sua honra, hinos, lugares de veneração efestas litúrgicas. Cuando Usera chegava a uma localidade, a Virgem Maria já lá estava. Ele resga-

tava e libertava o que naquela cultura religiosa tivesse necesidade de sanação, e assímele recuperou em vários casos o culto a Maria com a dignificação de ermitas e san-tuários purificando-os e libertando-os de todo o exagero e superstição ou exploraçãoeconómica. O santuário tem que ser um testemunho da gratuidade de Deus, já que éreferência desta mesma graça.Poderia propor Usera um caminho melhor que a pessoa santa de Maria para aceder

à fé em Cristo, melhor que a Caridade do Cobre como acontecimento teofânico parao povo cubano? Renovar para purificar e santificar.Poderia encontrar melhor proposta de intercessão para um pequeno povo de

Sanábria, reunido nos seus trabalhos e lavores, que a Virgem da ermita da sua aldeia,que tinha gravado na sua alma simples? Daí que o recinto devia ser cuidado e elevadoa centro de convocatória e celebração para o punhado de gente que ali vivia e cele-brava.O P. Usera celebrava Maria a partir do povo e com o povo. Inculturou-se em cada

lugar a partir da proximidade às gentes, os seus cuidados e à sua maneira de honrara Deus.Maria coloca-se como referência para aceder ao próprio Cristo ou a Deus, que às

vezes os sentimos mais além do nosso espaço de experiência. A piedade mariana obe-dece ao dom de piedade infundido pelo Espírito Santo, e passa pela devoção do povoque muitas vezes consiste em repetir fórmulas oracionais com fidelidade diária, ouvárias vezes ao dia, em forma de jaculatórias, beijos a medalhas, tríduos, novenas outempos mais longos. Contudo, estes hábitos de oração oral como comportamento religioso externo, nem

sempre acompanham o que entendemos como fruto da devoção: a caridade para como próximo e a vida moral. Foi aqui onde o P. Usera fez um forte fincapé: aborrecero que Deus aborrece e amar o que Deus ama, rever a nossa conduta, chegar àsimplicidade de coração.