16
OKUPACION en VALLADOLID luchas por la vivienda y contra la especulación Esta foto es de la puerta de entrada de LA CASA, justo antes de ser okupada, ediciones contra el miedo el olvido y la resignación

Dossier Okupa Valladolid (1ª edicion)

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Fancine "dossier" sobre experiencias de okupación en Valladolid (primera edición, ampliable). Okupación, vivienda y lucha contra la especulación. Versión imprimible en A5 (A4 doblado a doble cara).

Citation preview

  • OKUPACION en VALLADOLIDluchas por la vivienda y contra la especulacin

    Est

    afo

    toes

    dela

    puer

    tade

    entr

    ada

    deLA

    CA

    SA

    ,ju

    sto

    ante

    sde

    ser

    okup

    ada,

    ediciones contrael miedo el olvido y la resignacin

  • ESTE DOSSIER QUE TIENES ENTRE MANOS NACE de la necesidad de fijar la historia y la memoria de lucha de lasindividualidades y colectivos que puedan sentirse parte de un"movimiento" y de unas prcticas. Quiere ser una memoria decarcter prctico. Porque el poder no solo domina el lenguaje delpresente, sino que, sobre y por encima de todo, domina el discursodel pasado. Si muchas de las prcticas que aqu mencionamoshan resultado ejemplares en su momento, su ejemplaridad se pier-de en el trfago cotidiano, haciendo que las nuevas generacionesde militantes partan de cero cada vez. Contra esa tbula rasa quie-ren ser armas estas ediciones que ahora iniciamos, edicionescontra el miedo, el olvido y la resignacin.

    Muchos pueden pensar que no es Valladolid, quizs, el ejemploms claro de las prcticas y lgicas de la okupacin, la expropia-cin y/o la autogestin de nuestras vidas y nuestras necesidades,sin embargo pensamos que es -puede ser- realmente un buenejemplo de cmo todo es posible en cualquier parte -incluso enla fra estepa castellana masacrada.

    La necesidad de hablar de estas prcticas viene dada, como casisiempre, por circunstancias externas en las que nos vimos envuel-tos. Esa necesidad nos llev tambin a otra: la necesidad de recor-dar y valorar lo hecho por lxs compaerxs activxs, presentes opasados, y su aportacin al actual estado de cosas y a una posiblesuperacin del mismo por un movimiento anticapitalista coherenteen sus teoras y en sus prcticas.

    pprreesseennttaacciinn

    1 Edicion. 23 de noviembre 2013.Entendemos la okupacincomo una herramienta sub-versiva, para nosotros/asokupar, es decir, tomar porla fuerza espacios cuyo dis-frute se nos niega (ya seauna casa abandonada, launiversidad, la calle, etc) yutilizarlos para fomentarprcticas solidarias, paracrear nuevas herramientasque nos sirvan para recupe-rar el control sobre nuestrasvidas y para experimentarnuevas formas de relacinrompiendo con la que nosimpone el sistema, suponeun acto subversivo, unenfrentamiento con la il-gica capitalista. Sin embar-go consideramos tambinque ni el desarrollo de todoslos es-pacios ocupados nitodas las prcticas que sellevan a cabo dentro deestos tienen porque ser sub-versivas, es ms, en algu-nos casos son contrarrevo-lucionarias y acaban ha-ciendo consciente o incons-cientemente el juego al sis-tema que nos oprime.Entendemos tambin que laautogestin siempre ha idoligada al movimiento deokupaciones y nos parecefundamental para el des-arrollo positivo de cualquierokupacin, pero se handado casos en los que losespacios okupados se hanfinanciado me-diante dinerode alguna organizacin deizquierdas interesada ensacar beneficio poltico/par-tidista de ellos o inclusomediante subvenciones

    pblicas perdiendo as enambos casos su autonomay por tanto su potencialrevolucionario. En contrapo-sicin tambin nos pareceque las ideas y prcticassubversivas libertarias nopueden concluir en la con-servacin de un espacio yque la idea de la autoges-tin ha de extenderse atodos los aspectos de lavida y sobrepasar los lmitesdel espacio okupado encuestin para no acabarconvirtindose en la auto-gestin de la miseria ni de tupropio ghetto.Otra cuestion sobre las quecreemos necesario reflexio-nar es sobre la relacinentre quin decide okuparcon la intencin de crear unespacio de encuentro anta-gnico al orden establecidoy el resto de la poblacin ysobre las prcticas asisten-cialistas que se derivan deesta relacin. Muchas vecesquin okupa intenta llegar a"unas masas" a las que con-sidera engaadas sobre larealidad social (idea bastan-te pretenciosa) y acercarlasa "su" okupacin renuncian-do para ello a la radicalidadde su mensaje. En-tende-mos que a veces es necesa-rio medir nuestras palabrasante quin no est familiari-zado con ciertas ideas, peroeso no significa que deba-mos de rebajar por ellonuestro discurso ni muchomenos. Adems con laintencin de conseguir eseacercamiento se acaba ca-

    yendo en prcticas asisten-cialistas, es decir, en ayu-dar, distraer, organizar acti-vidades y trabajar altruista-mente para quin siquieranos lo ha pedido y hacerlosin ningn transfondo polti-co. (...) Tambin hemos deasumir que mucha gente nocomparte nuestras ideas ninuestras ganas de liberar-nos de la opresin a la quenos vemos sometidos y quela confluencia de nuestrarealidad con el resto de rea-lidades sociales ha de sersincera y no espectacular niforzada.Por ltimo y ms importantetambin queremos hacerespecial incapi en que nohemos de permitir que losespacios okupados se pac-ten, es decir, se negociencon ninguna fuerza poltica.Una okupacin que se lega-liza es una TRAICIN, esvender nuestra rebelda alenemigo, pactar un espaciookupado o mendigarlo espermitir que el sistema recu-pere el carcter subversivode la okupacin acabandocon su potencial revolucio-nario. Es rebajarse a acep-tar las condiciones impues-tas por el poder, que siem-pre van a ser el impedimen-to de cualquier actividadque le pueda amenazar y laobligacin de aceptar la nor-malidad y la convivenciapacfica entre quienesdeben seguir aceptando lamiseria de sus vidas y quie-nes imponen esa miseria.

    Algunas aportaciones en torno al debate sobre la okupacin.

    [Mataelmiedo]

  • La idea de este dossier nace de la lec-tura de las notas tomadas despus deunos debates, planteados por la gentedel CSA LA GUARDERA, que se rea-lizaron en LA CASA durante la prima-vera del 2013, y en los que participa-ron gentes de la antigua Polilla, aut-nomos, la Guardera, el 15 M, elVergel, o la plataforma anti-desahucios(PAH). Desgraciadamente falt muchagente.

    Estas notas quieren llegar atoda esa gente que se sienteparte del movimiento de okupa-cin, a quien estuvo en lascharlas y a quien no pudoestar....para extender la llama.

    NOS VEMOS EN LOS CENTROS SOCIALES

    Apoya los centros sociales okupasos y los espacios liberados.

    apoya la

    subversiOn

    A LXS QUE FUERON, A LXS K SON, A TODXS LAS PERSONAS QUE COLABORANY HAN COLABORADO EN LA ELABORACION Y DIFUSION DE ESTE DOSSIER.

  • 1979. Okupacin en el ViejoCoso.1983. Intento de okupacinen Jos M Lacort. 1985. Okupacin del antiguoedificio del Gobierno Civil.Okupacin de El Quirfano

    (una semana de actividad).1987. Okupacin en la C/Ferrocarril.1993. Fundacin de laAsamblea de JvenesOkupas (AJO).1993-1995. Actividad de laAJO. Okupacin de laQuintanamari (barrio de LaRubia), con desalojo a lamaana siguiente. Okupa-cin del antiguo economatode RENFE que termin conduras cargas policiales. Manicontra el desalojo, con finalen la Plaza Mayor, contra lavilencia policlal. Jornadas deOkupacin1998, Solidaridad con SASE,difusin y eventos solidarioscon la okupacin rural. 1998. 31 de octubre/ 1 denoviembre. Incendio inten-cionado del Bar Kaos. Pocodespus, fundacin de la AC.La Polilla. Apertura del Lokalde Tudela de Duero. 1999-2000. Actividades de la AC

    La Polilla y llegada al CSA LaPolilla en los antiguos talle-res de RENFE. Intentos deokupacin en laC/Labradores y en laC/Ferrocarril, en esta ltimaenfrentndose a la guerrasucia y el matonismo.Apertura del Local social deCannabicum y Por los suelosen Pajarillos (C/ Esquila).Jornadas por la okupacin enLa Polilla denunciando lagran cantidad de casas vac-as y en desuso.Apertura deun Centro Social en la C/Democracia.2000. Campaa VVV 12000.Okupacin en San Jos deCalasanz (Delicias). Intentode okupacin en C/ Esquila.Csa La Polilla en La Renfe 2001-2004. CSA LA Polillaen C/Anade (Pajarillos).Cannabicum en Delicias.Campaa contra la inmobilia-rias y la especulacin. 2002. Okupacin de La Casaen las Arcas reales. La Casaha pasado desde entoncespor diversas fases, depen-diendo de sus habitantes(ms punk y ms activa alprincipio, ms ecologista yms hortelana en la actuali-

    CRONOLOGA (incompleta) DE OKUPAS y Centros Sociales Autogestionados en Valladolid

  • dad, etc). Okupacin paravivienda en La Overuela.2003, febrero. Se inician lasmovilizaciones vecinales enPajarillos contra la especula-cin y el narcotrfico.2005. Okupacin del CSOA ElLavadero en la carretera deBurgos. Dur medio ao, sien-do abandonado a raz devarios episodiosd e guerrasucia en connivencia entrepolicas y nazis. Apertura delCSA Las Dagas.Desde 2006. Okupacionestemporales de punks y skinsfundamentalmente pero tam-bin polticas para usos con-cretos de naves (conciertos,asambleas) tras La Micheln,en Las Flores, la carreteraLen... La tuneladora.2010. CSA La Nave (C/Minutisa), durante un ao reali-za gran cantidad de activida-des (encuentros, conciertos,charlas, talleres, boxeo...) sien-do un punto de dinamizacinde relieve. Es abandonado trasuna importante denuncia porruidos y fiestas ilegales2011-2012. Luchas vecinalesen La Rondilla por el uso pbli-co y social del C.P. San Juande la Cruz, abandonado.Okupacin simblica del edifi-cio (para actividades), poste-

    rior okupacin real que acabaen desalojo.2013, coincidiendo con unaconvocatoria de HuelgaGeneral a nivel estatal, seokupa el CSA LA Guardera enPza de la Universidad, quedurante un par de semanasrealizar una profusa actividad. Jornadas sobre Okupacin,celebradas en la Plaza dePortugalete, y posterior Intentode okupacin en La Vitoria(CSO La Tormenta) que debeser abandonado.

    En esta cronologa faltan algu-nos que son (las villas, pajari-llos, las dagas) que ah estn ypor sus propios medios... A ELLXS, como a los compasde Palencia, Burgos, Cullar,Madrid, Euskal Herria,Asturies... dedicamos elesfuerzo de la elaboracin deeste dossier.

  • resumen de las ponencias

    Breves notBreves notas pas para una historia de la Okupara una historia de la Okupacin acin [Charla a cargo de un compaero del colectivo que okup el CSALa Guardera y organiz la jornada de debate]

    La okupacin es tan antigua como la lucha del hombre contra lapropiedad de la vivienda y el suelo, pero para empezar en algnpunto el compaero cita los aos que van de la Revolucin rusa alos la crisis de los aos 30 con la ocupacin de tierras y fbricas,por grupos de trabajadores y organizaciones obreras,Un compaero apunta al ejemplo de Pajarillos, a finales del sigloXIX, que se inici mediante las ocupaciones de terrenos paraviviendas en una zona entonces alejada de la urbe. Pero eso eranocupaciones de terrenos, donde se construa y viva. La okupacincomo herramienta de lucha se desarrolla posteriormente, en lasocupaciones de tierras de los aos 30 y otras ocupaciones realiza-das desde las organizaciones obreras.Un importante impulso social internacional se produce hacia 1968,con las okupaciones temporales de fbricas y universidades enFrancia y lo que se ha dado en llamar el movimiento de ocupacio-nes. Y sin embargo, es posible que fuera en Londres, poco des-pus, donde la okupacin se extendiera por primera vez con carc-ter de movimiento. Eran los aos 60 y 70 y hippies radicales, prole-tas, punks... empiezan a okupar viviendas y locales abandonadospara su uso social y colectivo. En el Estado espaol en los aos 70 la CNT practica la okupacindel patrimonio sindical como Okupacin reivindicativa (esta prcticatiene un largo recorrido posterior con okupaciones temporales detierras contra macroproyectos desarrollistas como en Valsusa..., ysin embargo no es la okupacin como reapropiacin de tierra ycasa, sino una okupacin reivindidativa, temporal (una zona tempo-ralmente autonoma, como la denomin H.Bey).Es en los aos 80 cuando se extienden y configuran a gran escalalas okupaciones tal y como ahora las entendemos. El componentepunk y autnomo, junto a la extensin de luchas como el ecologis-

  • mo, el antimilitarismo, el feminismo, la crtica a las ideologas, el antivan-guardismo, o la crtica al obrerismo y al movimiento clsico, se puedenresumir en la consigna: aqu y ahora, que implic e implica una toma deconciencia y una prctica acorde en este preciso momento, sin esperar ala revolucin.Las okupaciones autnomas se extienden por diversos pases, desdeBerln a Holanda, Italia, R.U... en el Estado espaol destacan los ejemplosde EH, Madrid y BCN Los primeros ejemplos fueron en muchos casoscomplicados pero ilusionantes. Hacia 1986 haba ya ms okupaciones quedesalojos al cabo de un ao y se haba producido un verdadero vuelco dela situacin. Es en esos aos cuando se empiezan tambin a extender enEH las okupaciones de pueblos como LAKABE. El movimiento pro gaztet-xes tendra mucho que ver tambin en la extensin de las okupacionesurbanas y los centros socialesy gaztetxes en muchas localidades de EH.En BCN se okupa ya entonces LA MUNTANYA que todava perdura a pesarde amenazas diversas de desalojo. A fines de los 80 no exista una legisla-cin especfica sobre okupacin, ser en 1996 cuando el Nuevo cdigopenal tipifique el delito de usurpacin con penas de prisin (30-90 das).Son los aos de las okupaciones del Princesa en Valencia (con todo lo quesucedi, dentro y fuera) o los sucesos de Barrafn 10 en Madrid que mar-caron un antes y un despus en lo que respecta a la respuesta ante losdesalojos. Tambin en estos aos se okupan locales y casas de los quean perduran restos en Madrid como la okupa de El Barrio enCampamento. Estos aos, de gran actividad, concluyen en Madrid con laescisin en LUCHA AUTNOMA.

    El panorama actuales complejo, ah van unos cuantos lugarescercanos donde sabemos que se sigue oku-pando: Galiza, Asturies, okupacin rural len-bierzo-asturies, Cantabria, Euskalherria,Nafarroa (a pesar del cierre del gaztetxe deIrua donde los palos fueron fuertes),Granada, Sevilla, Barcelona (a sako),Valencia, Madrid, y, en Castilla y Len,Valladolid (La Casa), Burgos o Salamanka...

  • PONENCIAPONENCIA DE STDE STOPOP DESAHUCIOS.DESAHUCIOS.El compaero de Stop Deshaucios agradeci la invitacin y advirtien-do de que ellxs no eran okupas afirm el inters del colectivo porparticipar en estos debates.

    Nuestra lucha es por cambiar el futuro de algunas personas, por con-seguir pequeos logros. La Ley hipotecaria que sufrimos es de 1909.Depende todo mucho de los jueces (ej de "juez bueno" en burgos).Facilidad de crdito, todo dios hipotecado, cuantas ms hipotecasmejor para el banco. Burbuja inmobiliaria. Irresponsabilidad bancaria.Y de la gente, de las ilusiones capitalistas, pero evidentemente nopodemos cargar contra la gente. Los bancos salen de rositas, lo pagala gente. El banco malo es una artimaa financiera (40% del estado,60% de los grandes bancos) para comprar los activos txicos.Hay que denujnciar la Complicidad de los polticios de cualquiersigno: dice Carmen Chacn que es el momento de comprar pisossobrevalorados.Los tasadores y los notarios engaan a la gente. Y todo lo paga lagente que se compr piso.La iniciativa legislativa popular la tir atrs el PP. Parten de la basede que lo que se peda en realidad era muy poca cosa, pero es queni siquiera eso. La dacin en pago no es nada, pero quedarse con lapella es demencial. Es necesario un cambio de mentalidad. Solo en Valladolid se producen 4 o 5 desahucios al da.

    Del 15M surgi el grupo antidesahucios, antes V de vivienda, ahoraPAH. El grupo se creo en septiembre de 2011 en la asamblea deDelicias. Lo primero fue la documentacin. Pararon un desahucio enZaratn y luego otro en la Carretera Villabez con gentes del barriode Pajarillos.El grupo tiene un n de contactos, de gente ocn dificultades con unasola vivienda, asesoramiento mediante abogados, acompaamientoen todo el proceso, compromiso hasta el final, Acciones realizadas: ocupacin de Caja Espaa y BBVA, acampadaen la C/ Santiago, performances, okupacin de sedes bancariasLes desalojaron los antidisturbios a las 2 de la maana. Pero loscinco casos de desahucios que motivaron la accin se solucionaron.Presin a la banca y presin pblica. Lo que mejor funciona son lasacciones.

  • Cuentan con el respaldo de un grupo importante de gente y con bastan-te apoyo social. De hecho en Valladolid han tenido y tienen bastantefuerza. Se est produciendo una creciente criminalizacin (detenidos enMadrid, Salamanca).

    Alguien dice que en cierto sentido todo esto le recuerda a cosas quesuceden en la lucha antirrepresiva, en la que se apoya a una personapero es fcil caer en el asistencialismo puro y duro si no se tiene claroun objetivo anticapitalista. Pero que entiende que es normal que hayagente dedicada a estas cosas. Se valora el inters de colaborar yextender la okupacin para vivienda entre los deshaucios, as como elapoyo a los espacios liberados y okupados.

    STOP DESAHUCIOS V A L L A D O L I D

    6 0 5 4 1 8 1 99

  • CENTROS SOCIALES CENTROS SOCIALES YY OKUPOKUPACIONES ACIONES EN VEN VALLADOLID. ALLADOLID.

    La charla la realiz de un compaero de Pajarillos, que estuvo en elCSA La Polilla y en varias de las posteriores.

    Se parte de la premisa de crear locales autnomos autogestiona-dos e independientes de los poderes pblicos.

    El mximo: totalmente independientes del capital, casas-huertascomo la casa pero con actividad poltica. El medio: la okupacinpara CSOs y viviendas. El mnimo: los locales o centros socialesalquilados de barrio.Evidentemente, no es lo mismo una cosa que la otra, pero la oku-pacin tampoco debe ser sobredimensionada. Todo lo contrario: esuna herramienta de lucha, basada en la accin directa (tomar enlugar de pedir) y es en s misma un ataque contra el capital (la pro-piedad es el uso que haces de las cosas, no su ttulo). Creo since-ramente que otras experiencias (como okupaciones simblicas olocales negociados con el ayuntamiento y legalizados) no son oku-paciones y no deberan denominarse como tales. No digo que nosean vlidas esas formas de lucha atendiendo a las circunstancias,lo que digo es que no se debe confundir al personal y liquidar de unplumazo un arma tan interesante como la okupacin (de casas, tie-rras, fbricas).Evidentemente aqu se pueden juntar intereses diversos y formasdistintas de entender la lucha contra la especulacin y por la vivien-da y as lo respetamos. Pero nos partiremos los dientes con el quequiera vender okupacin edulcorada.

    Debe plantearse, sin asistencialismo, la okupacin para viviendacomo solucin a los desahucios. La okupacin de tierras y terrenospara parques y huertos de usos comunes, La okupacin para cen-tros sociales y culturales autogestionados y liberados del ocio enla-tado consumista. Centros culturales de arte y conciertos, con aso-ciaciones como fue la polilla. Okupacin anticapitalista y de comba-te. Un buen espacio para preparar la resistencia. Huertas, tierras, fbricas, extender a los vecinos, al barrio, a losobreros, a las organizaciones sociales.

    tada y ms generalizada que enEspaa.Hoy, treinta aos despus de quenaciera el movimiento, los europeossiguen okupando (ms de tres millo-nes de personas no tienen casa dondevivir y el 70% de ellos son jvenes. Lafalta de un puesto de trabajo agravaesta situacin). Aunque las legislacio-nes se lo ponen cada vez ms difcil.Ahora se penaliza incluso con conde-nas de hasta meses o incluso aos decrcel, lo que antes no ocurra pues elproblema se solucionaba por la vacivil -se condenaba a pagar una indem-nizacin y la persona responsable eracasi siempre insolvente-.El movimiento okupa no ha muerto: labatalla de la vivienda contina y cadavez ms jvenes se ven obligados apermanecer en casa de sus padres. Enel ltimo congreso de squatters deEuropa ( Berln,Abril del 96 ) el lemafue "la resistencia comienza en casa"

    OKUPACIN URBANAContra los problemas de suelo en laciudad ( altos alquileres, precios des-orbitados, especulacin...) surge eltipo de okupacin ms conocido, laque se desarrolla en las ciudades.Su reivindicacin principal es el dere-cho a la vivienda, razn por la cual seproducen la mayora de las okupacio-nes en el norte de Europa. En Espaaestas tienden ms a lo que se denomi-na Centro Social Autogestionado, quepretende ser un lugar alternativo dedesarrollo cultural y social, donde rea-lizar actividades como talleres (deteatro, malabares, idiomas, msica, tra-

    bajos manuales... ), bibliotecas, filmote-cas, foro de debates, charlas, concier-tos e incluso comedores vegetarianos.

    Y AQU TAMBIN...Quinta Ana Mari, en ValladolidAlgo as sucedi en Valladolid, en laokupacin que se produjo hace un parde aos en la Carretera de Rueda, enla "Quinta Ana Mari"; un majestuosocasern, propiedad del Ayuntamiento,que llevaba muchos aos sin ningnuso. Vistas las posibilidades que esteedificio tena, decidieron intervenir.

    La AJO (Asamblea de JvenesOkupas) tena como meta realizar unCentro Social Autogestionado paralos vecinos del barrio, pero no lolograron, pues slo estuvieron all 15horas, hasta que la polica logr des-alojarlos. Por lo visto fue un pequeodescontrol, pues pese a que estabaplaneado que entrasen tan slo unospocos, se meti dentro de la casa unmontn de gente, algunos de ellosbuscando slo el folklore que hay alprincipio de toda okupacin. Desdeentonces ese edificio sigue sin ningnuso y en un estado de deterioro cadavez mayor (pese a las promesas delAyuntamiento). Un ao despus laAJO lo intent de nuevo en una navecerca de la estacin de RENFE, perocon el mismo resultado. Despus deesto, no hubo buena organizacindentro de la Asamblea y se disolvi.

    [Este texto ha sido extrado de la haine,no sabemos si fue publicado pero por loque relata se escrii hacia 1997]

  • Hay que apoyar todas estas formas pero cada una pide cosas distintas:Vivienda: decisin personal y apoyo colectivo, soporte y solidaridad.Tierras: colectivo, barriosCentros sociales: asambleas con proyectos claros y gente con tiempoy ganas para dedicar a estos proyectos.

    Otras soluciones en caso de quelas posturas sean irreconcilia-bles: an con separacin de activida-des, el Apoyo a/en la resistencia alos desalojos y la represin es unabase slida para forjar una unidad (lo contrario, evidentemente, no),el apoyo mutuo y constante. lasolidaridad activa y la comunicacin... Desarrollar Lneas paralelas quese suman cuando es necesario.

    Lo importante al

    fin

    y al cabo

    es

    luchar

    Londres, 3 de Julio de 1978.Ana llega ala ciudad de las nieblas para estudiarFilologa. Enseguida contacta con ungrupo de jvenes para compartir casa.La mayora son de propiedad municipaly estn deshabitadas. Le dicen quemucha gente se instala en ellas pues noes difcil forzar la puerta, slo hay quelimpiarla y arreglarla para que sea loms parecido a un hogar. No son delin-cuentes; es una solucin alternativa alproblema de la vivienda y miles de fami-lias viven as.A partir de ahora Ana seruna okupa.

    No es fcil definir el prototipo de okupao "squatter". Puede que no sean RobinHood, portadoresdel altruismo y amor al prjimo, perotampoco son esos jvenes descarria-dos, vagos y camorristas que puedenparecer por las noticias. Est claro quesu actuacin supone apropiarse de algoajeno, pero es algo ms: okupar es unaforma de pensar y actuar ante las cosas.Es un acto social de protesta.Una formade llamar la atencin para planteardeterminadas reivindicaciones como lafalta de vivienda, trabajo y ocio, la ausen-cia de oportunidades en la creacin deiniciativas no dependientes de las admi-nistraciones y el nulo control institucio-nal sobre la especulacin del suelo.

    MOVIMIENTO OKUPA EN EUROPAAprovechan tierras y recursos queotros han abandonadoEl movimiento "squatter" nace en Gran

    Bretaa a finales de los 60, como conse-cuencia del movimiento hippie y poste-riormente del punk. Pronto se extiendepor todo el viejo continente (los"Crackers" holandeses, los "Besetzers"en Alemania y los "Okupas" en Espaa).Con el paso del tiempo surgen autnti-cas ciudades okupadas, comoChristiania, un antiguo cuartel en plenocentro de Copenhague con miles depersonas viviendo en edificios que noson suyos. Incluso a lo largo de estosaos se han llegado a normalizar y lega-lizar barrios como el "Krenzberg" deBerln ,okupado en su totalidad; se fir-maron contratos de alquiler aceptablesy se subvencionaron las reformas de losedificios. Pero al cambiar el partido pol-tico en el poder volvieron los desalojosy las detenciones. Algo similar sucedien la parte oriental con la cada delmuro.La okupacin no siempre va ligada a unaideologa determinada, ni siquiera a unaesttica de tribu urbana. Aunque escierto que se caracteriza por no estarde acuerdo con el sistema establecido.Incluso hay diferencias segn el pas enque estemos. En los aos 90 enInglaterra hay miles de familias viviendoen squats con lavadora, televisin, aguacorriente... A diferencia de Espaa,donde los okupas son generalmentejvenes de una determinada tendenciaideolgica, en Inglaterra existen autenti-cas "inmobiliarias" okupas, donde teinforman de las casas deshabitadas(generalmente de propiedad municipal).Es una forma de vivir socialmente acep-

    CASA OKUPADA, CASA ENCANTADA

    Cartel del Pucelmelapela, mediados de los 90

  • PRIMERAS EXPERIENCIAS. El colectivo anarquista el Garbanzo Negro.

    Una de las primeras okupaciones fue la de la plazadel Viejo Coso en 1979, lugar donde haba unasviviendas abandonadas por la Guardia Civil. "El entor-no estaba lleno de basura y escombros, as que unaserie de colectivos de jvenes de partidos de izquier-da, sociales y culturales decidimos que era un buenlugar de uso para nuestras crecientes actividades",afirma Miguel ngel, una de las personas que formaronparte del proceso. A finales del verano de ese ao entraron provistos deescobas y mangueras y comenzaron a limpiar las navesde la parte baja. A continuacin distribuyeron su usoconjuntamente con otras personas de grupos de teatrocomo Teloncillo, T de hilo o Mono Azul. Tras variosdas de limpieza y asambleas, una madrugada se presen-t la polica y desaloj a las personas de la plaza.A continuacin se tapi todo.

    El siguiente punto de referencia debemos ubicarlo enel edificio de la calle Jos Mara Lacort 20 (actual-mente hay all una residencia de ancianos). Corra el

    ao 1983 cuando el colecti-vo El Garbanzo Negro, decarcter libertario, entren una antigua escuela paraconvertirla en una vivienday centro social autogestio-nado.

    La experiencia dur de unviernes por la tarde a lamadrugada del lunes, tiempo

    en el que las ochenta personas implicadas organizarontalleres, conciertos, recitales de poesa y obras deteatro. "Fue espectacular, por all pas todoValladolid y todos los grupos musicales y teatralesalternativos", recuerda Henar, una de las mujeres queestuvo all. La experiencia acab, como viene siendohabitual, cuando las fuerzas de seguridad entraron adesalojarlos.

    PINTADA de los 90

    algunosdocumentos

  • El Garbanzo Negro haba empezado a funcionar en esta poca.Integrado por un grupo de amigos que formaban parte de gruposanarquistas y maostas al que se sum gente ms joven, haba surgido con el objetivo de trabajar autogestionariamen-te, al margen de toda relacin con partidos y sindicatos.

    Algunas de sus acciones fueron la ocupacin de la Cadena Serdurante varias horas para protestar por la compra de variosaviones de combate F16 por parte del Ministerio de Defensa,sus movilizaciones anti-OTAN, la publicacin de un fanzinesobre la actualidad poltica local y nacional del momento, laorganizacin de marchas cicloturistas o la emisin de un pro-grama en la radio libre Carib. La emisora estaba situada enla Plaza de Cantarranas y se financiaba a travs de concier-tos. Dentro de su programacin se hablaba de rock & roll yantimilitarismo, se haca crtica social, de las institucio-nes, del Estado... Emitan todos los das, y ellos fueron losresponsables de traer a grupos como La Polla Records (que vinopor primera vez a Valladolid gracias a El Garbanzo Negro) oSiniestro Total.

    La experiencia termin con la incautacin de todos los mate-riales de la radio por parte del Gobernador, y con esto llegel fin del colectivo. Antes de eso, en 1985, parte de losintegrantes del Garbanzo Negro hicieron un intento de 'okupar'la antigua sede del Gobierno Civil (Palacio de losVillena).Entraron un sbado y regresaron al da siguiente,pero ese da lleg la polica. Tras una breve asamblea deurgencia decidieron abrir el portn, y fue as como la expe-riencia lleg a su fin. Tal y como afirma uno de los inte-grantes de esta breve intentona, lo primero que dijo la poli-ca al verlos fue: "qu cabrones, nos habis jodido lostoros".

    En esos aos empez a funcionar tambin El Quirfano, situadoen la zona del Hospital Clnico, que dur unos meses, hastaque lo tapiaron.

    La calle Ferrocarril sera el siguiente punto a resaltar den-tro del movimiento 'okupa' vallisoletano. Fue en esta calledonde un grupo de personas decidi entrar a travs de uno delos portales para hacer del edificio abandonado una vivienda.Corra el ao 1987, y las siete personas que vivan all per-manecieron casi cien das. Por la casa pasaron personas delmovimiento por la insumisin (una de ellas era la portavoz delgrupo de insumisos), gente aficionada al rock & roll y alpunk... Tal y como cuentan dos de las personas que formaron

    Sin embargo, la dinmica de LA CASA (que dej de ser un referentecolectivo al convertirse en sede especfica del colectivo BAH, aunqueen alguna ocasisn sigue abriendo sus puertas a otros proyectos) y elposterior cierre del CSA LA NAVE, nave alquilada por una asambleaen las afueras del barrio de Pajarillos, han hecho de nuevo ver lanecesidad de tener un CENTRO SOCIAL OKUPADO PARA MUCHAGENTE.

    El cierre de La Nave, con una importante sancin pendiente, hahecho ver a todos la necesidad de luchar por otros medios, y los inten-tos han sido varios, de muy diverso signo, desde la propuesta vecinalen torno al colegio San Juan de la Cruz -ms legalista y con dilogocon las instituciones, partidos, etc-, al intento de okupacin en la

    Victoria tras las Jornadas deOkupacin realizadas en laPlaza de Portugalete (que fra-cas ante la falta de apoyo o lapoca participacin) y/o el msmultitudinario del Csa laGuardera que se realiz en lapropia Plaza de la Universidaddejando a ms de uno boquia-bierto.

    LA OKUPACIN en VALLA-DOLID, y en cualquier ciudado parte del mundo, por msrepresin y polica que exista,es posible.

    FORMAD BANDASTOMAD CASAS.

  • parte del movimiento 'okupa' de Valladolid durante losaos ochenta, muchos se conocan del ambiente musicaldel momento. Bares como La Bici, Kaos, Kraken o lasdiscotecas Land y Ziggy eran puntos habituales deencuentro.

    En esos aos circulaban fanzines como Degello cerebral(costaba 125 pesetas), El Corte de la Astilla o ElBolero, lo que unido a la gente que viajaba por ciuda-des como Londres, Barcelona o Madrid serva como fuen-te de informacin. Se beba de lo que pasaba enValladolid, pero tambin de lo que pasaba fuera. En elao 1984 se dio especial cobertura televisiva a una delas 'okupaciones'' que se haba efectuado enMadrid,ciudad a la que muchos viajaban con cierta fre-cuencia para asistir a conciertos y visitar los cen-tros 'okupados' que iban surgiendo. Emisoras como Radio3 se hacan eco por aquel entonces de todo lo que ibapasando, y de nuevo los viajes dentro y fuera deEspaa, como por ejemplo a pases como Holanda, serv-

    an para estar altanto de un movimien-to al que muchos sefueron integrandoautodenominndosecomo "squatters".

    De aquellos aosvienen algunas prc-ticas y grupos quehan perdurado a sumodo en el tiempo:los cicloturistasdelexnables, la fies-ta saludable del 28de diciembre... losaos terminaban, lle-gaba el NO92 y pocoa poco las lgicas deokupacin se extend-an a todos los rinco-nes del ESTADOESPAOL.

    esfuerzo de mucha de lagente que apoy la primerapolilla, gentes del Kaos,punks... esa dinmica dominel inicio de La Casa, con lacelebracin de conciertos, jor-nadas punks, comedores...pero la gente que habitaba LaCasa (que ha ido cambiandocomo es lgico al correr de losaos) tambin fue cmabiando.La creacin del BAH!, loscambios de personas, otrasrazones, llevaron a la dinmi-ca de huerta y autogestin ali-mentaria posterior que hoysigue rigiendo la forma de fun-cionar de La Casa y su asam-blea. Le pese a quien lepese, la casa, okupada y auto-gestionada, sigue ah, des-pus de ms de 10 aos,como ejemplo prctico de laOKUPACIN en tierras vallisoletanas.

    Posteriormente, hacia 2005 se okup el Lavadero, una interesante expe-riencia en la que se conjugaban dos casa okupadas, una casa para viendacon huerto para la autogestin de las necesidades mas bsicas y otracasa-nave okupada como Centro Social en la que funcion una asamblea amplia y que desarroll bastante actividad.LA GUERRA SUCIA ms descarada volvi en aquellos das a recordarnosla realidad de la guerra en que vivimos, la guerra social del capital contralos explotados y excluidos. Tras el desalojo (voluntario ante el cariz de lascircunstancias con la colaboracin entre nazis y policas quemando cochesen la Avenida Salamanca para demonizarnos) se inicia un periodo deOkupaciones temporales de naves en diversos sitios de Valladolid: detrsde la Micheln, en el Barrio Las Flores, en la Carretera Len, y otros espa-cios que no diremos por si pudieran volverse a utilizar han sido okupadospara actividades de diverso tipo, desde asambleas, a aconciertos, encuen-tros, pintar pancartas y otras. Al mismo tiempo, diversas gentes han seguidookupando a su libre albedro para su propia vivienda, lo que ha hecho quehaya varias viviendas okupadas en la actualidad. Calendario del Kaos-CTD, ADS (1990)

  • LLaa AASSAAMMBBLLEEAA DDEE JJVVEENNEESS OOKKUUPPAASS

    De la dcada de los noventa hay que destacar el surgimiento de AJO, laAsociacin de Jvenes Okupas, integrada por una treintena de personas. Suorigen viene dado por la demanda de un grupo de jvenes de contar con unespacio social liberado para ofrecer conciertos y otras actividades que, segnconsideraban, el Ayuntamiento no ofreca. Esta demanda se haba materiali-zado tambin en la fundacin de la COORDINADORA de BANDAS deROCK. Sin embargo, para nuestro tema, lo ms importante fue la creacin dela AJO y sus dos intentos de okupacin, la Quintanamari y el local en en LaRenfe. Este ltimo acab con una importante represin policial que nos ense- como podamos ser realmente peligrosos para el poder y no podamosesperar nada ms que palos ante la lucha sin intermediarios y la okupacin .Uno de los integrantes de esta asociacin cuenta que en el ao 1991,cuando apenas contaba los 16 aos, tuvo ocasin de visitar el CentroSocial Minuesa, situado en Madrid, a raz de un multitudinario conciertode Monstruacin al que asistieron en torno a las dos mil personas. Elimpacto de esta visita y dever las dimensiones delmovimiento punk enla capital, el hartazgo de noencontrar nada semejanteen Valladolid y de pedir sinxito la cesin de locales deensayo y de salas dondepoder tocar fueron generan-do un caldo de cultivo queles hara plantearse probaralgo semejante en nuestraciudad. Una de las primerasacciones de AJO fue 'oku-par'' La Quinta Ana Mari enel ao 1993, situada en lacarretera de Rueda. Tras laQUintanmaria se okup elantiguo economato deRENFE, la brutal represinllev a muchos de los parti-cipantes de la AJo a emigrarde Valladolid hacia tierrasprobablemente ms propi-cias para la okupacin.

    en aquellos momentos nos acordamos, hay que reconocer que el nivel deactividad en el barrio y en la zona este, en todos los sentidos, era mayorque ahora. Pero menos organizado, al haber tres puntos de reunin, lagente mova muchas cosas, pero sin orden, individualmente. Lo que es cier-to es que al final el proyecto del local polilla pequea slo interesaba a 4personas o 5,6 y que 2 de ellas se pusieron a okupar en ese instante lo

    que hoy es LA CASA. Las otras dos decidie-ron, como era lgico, cerrar el chiringuito yempezar de cero...De toda esta dinmica, del declive de lasegunda polilla pero tambin de las semillasque ella sembr surgieron las dos okupacio-nes ms perdurables de la historia vallisole-tana reciente:la okupacin que todava hoy perdura de LaCasa (desde el 2002). Poco despus un parde compaeros empezaron a vivir en unaCasa Okupada en la Overuela, que condiversos cambios de habitantes (y diersasamenazas) sigue estando okupada todavaen la actualidad. En la OKUPACIN DE LACASA en un primer momento se volc el

    Los baos de la casa

    Uno de los panfletos elaborados por la AJO (aos 90)antes de okuparse

  • En torno al Kaos (y la Bici que,no se olvide, estaba y cercacomo ahora sigue a su modo)nos juntamos gentes -jvenes- dediversos barrios obreros.Conocimos el punk, el veganis-mo, la liberacin animal, el D.I.Y.,las distris anticomerciales y elnon-profit, los cso's de otras ciu-dades, los disturbios okupas enAlemania, en Madrid (Barrafn,Minuesa) y AK K? Puesnada, por esas estaba la AJO consus reuniones interminables ysus castillos en el aire, los prime-ros intentos con la diversa -perointensa- repercusin que tuvie-ron. Y las carreras y pedradas, elda de capitana, la quinta ana-mari, la renfe, la fumada en laplaza mayor, la mani del 20-N enlos Arces, la plaza de toros, elsan juan de los escenariosardiendo Pues en esas estba-mos cuando queman el Kaos yun grupillo de gente, con una afi-nidad ms o menos ya creada entorno a msica, amistad y pocoms, se decide por buscar lamanera de hacer un centro socialde todos modos, alquilado, oku-pado, prestado, como fuera. Eso

    s, autogestionado y sin subven-ciones. As que nos decidimos ahacer papeles y sacamos adelan-te aquella historia que muchosconocis: la A.C. La Polilla (delBalance de 10 aos) En aquella historia se implicmucha pea, unas 30 personasllegaron a formar parte de laasamblea, las actividades que sellevaron a cabo son innumerables(charlas, comedores, taller deteatro, de soldadura, de autoges-tin, emocaf, tetera, conciertosinolvidables, asambleas, fiestashorteras o solidarias...). Por aquellos aos (desde 1998)los compaeros de Tudela deDuero empezaron a dar vida alLokal, el Centro social ms anti-guo de cuantos resisten en lazona de Valladolid.

    Desde la fundacin de La Polilla(1998-99) hasta su desaparicindefinitiva (2002??) hubo unaimportante actividad social, convarios intentos de okupacin yuna difusin constante y cons-ciente de la temtica de la espe-culacin y la okupacin. Esosaos supusieron en cierto modo

    CSA La polilla I(Renfe)CSA LA POLILLA II(Anade)

    la irrupcin de una nueva genera-cin de miitantes que poco despusdara el salto a las okupaciones y auna lucha declarada contra la espe-culacin inmobiliaria. En esos aosse inicia la campaa Vvv.12000 queculmina en un intento fracasado enla c/ la esquila de Pajarillos (condos identificados) y un breve xitoen la okupacin de una vivienda enlas Delicias en al que se conviviuna semana. El desalojo, con variasacciones de propaganda que retra-saron su ejecucin. Los intentos sesucedieron en varios puntos de laciudad (C/ Panaderos,Labradores...). Poco despusCannabicum se traslad a lasDelicias, mientras La polilla de laRenfe tuvo que ser abandonadaante las presiones de CCOO y UGTa la empresa que no renov el con-

    trato. La gente ms politizada de laasamblea decidi entonces abrir unCentro Social de barrio en la C/nade en San Isidro-Pajarillos. El marco de la polilla pequea fuemenos "espectacular" pero quizsms fructfero polticamente. Elexperimento fracas a corto plazo:no se consigui que el barrio nosviera como parte de l ni que fueraal local tampoco. Pero a medioplazo sirvi para cimentar las basesreales de nuestro proceso de cons-truccin como organizacin. Loslazos que se establecieron con elbarrio no fueron generalizados, perola gente del Bierzo y el Pato (que,no se olvide, ya haba apoyado laanterior polilla, si no fue parte de los30, s que lo fue de los 150 quepusieron la pasta al principio) volvia engancharse al proyecto. Cuando