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Profesiones g 19 nº 141 g enero-febrero 2013 Eugenio Sánchez Gallego Economista Recientemente podemos disfrutar del libro publi- cado por el Consejo General de Economistas (CGE) escrito por José María Casado Raigón. Economistas en el tiempo. Cuarenta años de Consejo General , como así se llama la obra, se trata, ante todo, de un gran homenaje a la profesión de economista y a la inmensa labor de vertebración y apoyo de esta por parte del consejo desde su creación el 28 de junio de 1971. La importancia de la labor de los economistas en el entra- mado profesional de un país quedó reflejada, a modo de ejemplo, en las palabras que J.M. Keynes pronun- ció en su visita a España en 1930: «Nada es más im- portante para el desarrollo de un país que una buena escuela de economía». Y, más tarde, cuando afirmó que «el economista debe ser matemático, historiador, estadista y filósofo en algún grado». Evolución de la profesión El origen de la ciencia económica en España tal y como describe el libro se encuentra en el siglo XVI en la Universidad de Salamanca, concretamente, con la conocida segunda escolástica y, posteriormente, ya en el siglo XVIII y principios del XIX se expandió en los círculos intelectuales con los mercantilistas e ilus- trados. No obstante, la profesionalización de los eco- nomistas se produjo de forma tardía en comparación con nuestros homólogos europeos. En 1807, las pri- meras enseñanzas de economía fueron incorporadas en la Facultad de Leyes, pero solo eran consideradas una formación secundaria para los juristas. No fue hasta el año 1943 cuando gracias, entre otros, al profesor Jo- sé-María Zumalacárregui, la licenciatura de Economía fue implantada en la Facultad de Ciencias Políticas y Económicas en Madrid dando lugar en 1947 a la pri- mera generación de economistas. Precisamente, Casa- do realiza una serie de entrevistas a personajes tan ilustres, de esta generación pionera y prolífica, como José Luis Sampedro, el cual afirma: «nos encontramos ante una multicrisis de naturaleza no solamente eco- nómica, sino de componentes morales, éticos e insti- tucionales y debemos evolucionar hacia una economía Economistas en el tiempo. Cuarenta años de Consejo General más sociológica». Por otro lado, Juan Velarde Fuertes, destaca que España adolece de falta de competitividad exterior y debería, además, ejercer un mayor control sobre el gasto público. Economistas de la talla de José Barea Tejeiro, Fabián Estapé, Manuel Varela Parache o Ramón Tamames Gómez, dibujan de forma amena la silueta de los últimos sesenta años de acontecimientos económicos en España y coinciden, sobre todo, en el avance que ha experimentado nuestra economía ahora en grandes dificultades. Mujeres economistas El libro dedica un apartado especial a la gran aporta- ción de la mujer en la profesión. Así, se destaca que, en los últimos años, el Premio Nobel de Economía abrió su espectro y, de esta forma, en 1998, el profesor Amartya Sen y, especialmente, la economista Elinor Ostrom, en 2009, fueron galardonados. Joan Robin- son, Marjorie Grice-Hutchinson, o Elizabeth Boody Schumpeter, Rose Friedman y Harriet Taylor Mill, estas tres últimas, mujeres de los conocidos econo- mistas, también realizaron grandes contribuciones. En España, Emilia Pardo Bazán, a pesar de no ser econo- mista, realizó estudios sobre la situación sociolaboral de las mujeres. Labor del Consejo General de Economistas El abundante y comprometido trabajo del CGE en es- tos últimos 40 años de su función reguladora de la pro- fesión y representante de los colegios de economistas de España también queda patente en la obra sin caer en la apología. Es por ello, que el consejo entre sus objetivos esencia- les, también de ca- rácter social, busca una mayor presen- cia de la economía ya en la Educación Secundaria Obli- gatoria (ESO) y en una ampliación en el bachillerato para impulsar una for- mación económica más solvente de los ciudadanos que se antoja tan vital en los tiempos que vi- vimos. «Nos encontramos ante una multicrisis de naturaleza no solamente económica, sino de componentes morales, éticos e institucionales y debemos evolucionar hacia una economía más sociológica». ECONOMÍA

Economistas en el tiempo. Cuarenta años de Consejo General

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Profesiones g 19nº 141 g enero-febrero 2013

Eugenio Sánchez GallegoEconomista

Recientemente podemos disfrutar del libro publi-cado por el Consejo General de Economistas (CGE) escrito por José María Casado Raigón. Economistas en el tiempo. Cuarenta años de Consejo General, como así se llama la obra, se trata, ante todo, de un gran homenaje a la profesión de economista y a la inmensa labor de vertebración y apoyo de esta por parte del consejo desde su creación el 28 de junio de 1971. La importancia de la labor de los economistas en el entra-mado profesional de un país quedó reflejada, a modo de ejemplo, en las palabras que J.M. Keynes pronun-ció en su visita a España en 1930: «Nada es más im-portante para el desarrollo de un país que una buena escuela de economía». Y, más tarde, cuando afirmó que «el economista debe ser matemático, historiador, estadista y filósofo en algún grado».

Evolución de la profesiónEl origen de la ciencia económica en España tal y como describe el libro se encuentra en el siglo XVI en la Universidad de Salamanca, concretamente, con la conocida segunda escolástica y, posteriormente, ya en el siglo XVIII y principios del XIX se expandió en los círculos intelectuales con los mercantilistas e ilus-trados. No obstante, la profesionalización de los eco-nomistas se produjo de forma tardía en comparación con nuestros homólogos europeos. En 1807, las pri-meras enseñanzas de economía fueron incorporadas en la Facultad de Leyes, pero solo eran consideradas una formación secundaria para los juristas. No fue hasta el año 1943 cuando gracias, entre otros, al profesor Jo-sé-María Zumalacárregui, la licenciatura de Economía fue implantada en la Facultad de Ciencias Políticas y Económicas en Madrid dando lugar en 1947 a la pri-mera generación de economistas. Precisamente, Casa-do realiza una serie de entrevistas a personajes tan ilustres, de esta generación pionera y prolífica, como José Luis Sampedro, el cual afirma: «nos encontramos ante una multicrisis de naturaleza no solamente eco-nómica, sino de componentes morales, éticos e insti-tucionales y debemos evolucionar hacia una economía

Economistas en el tiempo. Cuarenta años de Consejo General

más sociológica». Por otro lado, Juan Velarde Fuertes, destaca que España adolece de falta de competitividad exterior y debería, además, ejercer un mayor control sobre el gasto público. Economistas de la talla de José Barea Tejeiro, Fabián Estapé, Manuel Varela Parache o Ramón Tamames Gómez, dibujan de forma amena la silueta de los últimos sesenta años de acontecimientos económicos en España y coinciden, sobre todo, en el avance que ha experimentado nuestra economía ahora en grandes dificultades.

Mujeres economistasEl libro dedica un apartado especial a la gran aporta-ción de la mujer en la profesión. Así, se destaca que, en los últimos años, el Premio Nobel de Economía abrió su espectro y, de esta forma, en 1998, el profesor Amartya Sen y, especialmente, la economista Elinor Ostrom, en 2009, fueron galardonados. Joan Robin-son, Marjorie Grice-Hutchinson, o Elizabeth Boody Schumpeter, Rose Friedman y Harriet Taylor Mill, estas tres últimas, mujeres de los conocidos econo-mistas, también realizaron grandes contribuciones. En España, Emilia Pardo Bazán, a pesar de no ser econo-mista, realizó estudios sobre la situación sociolaboral de las mujeres.

Labor del Consejo General de EconomistasEl abundante y comprometido trabajo del CGE en es-tos últimos 40 años de su función reguladora de la pro-fesión y representante de los colegios de economistas de España también queda patente en la obra sin caer en la apología. Es por ello, que el consejo entre sus objetivos esencia-les, también de ca-rácter social, busca una mayor presen-cia de la economía ya en la Educación Secundaria Obli-gatoria (ESO) y en una ampliación en el bachillerato para impulsar una for-mación económica más solvente de los ciudadanos que se antoja tan vital en los tiempos que vi-vimos.

«Nos encontramos ante una multicrisis de naturaleza no solamente económica, sino de componentes morales, éticos e institucionales y debemos evolucionar hacia una economía más sociológica».

ECONOMÍA