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EDITORIAL Diferentes países del mundo basan un alto porcentaje de su economía en el conocimiento; bajo este sistema, se trata de invertir en la generación de conocimiento aplicable al bienestar de la sociedad. En México, el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCT) publicó el “Ranking Nacional de Ciencia y Tecnología” en su versión 2011; dicho documento toma en cuenta, a nivel estatal, los siguientes parámetros: inversión para el desarrollo de capital humano, infraestructura para la investigación, inversión en ciencia, tecnología e innovación, población con estudios profesionales y de posgrado, formación de recursos humanos, productividad científica, infraestructura empresarial, tecnologías de información y comunicaciones, entorno económico y social y componente institucional. El Distrito Federal, Nuevo León y Morelos fueron los estados con los mejores promedios, mientras que el Estado de México se ubicó en el decimo sitio. Parte importante de la evaluación es el número de miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), a dicho sistema pertenecerán en 2012, 18542 miembros, 300 de ellos laborando en la Universidad Autónoma del Estado de México; en particular, 13 investigadores adscritos a la Facultad de Ciencias Agrícolas, casa editora de esta revista. Como se comprende, los parámetros de evaluación nacional en Ciencia y Tecnología son cada vez más estrictos; y, en este sentido, la revista CIENCIAS AGRÍCOLAS INFORMA está a las órdenes de sus autores colaboradores y lectores para aportar su parte en el esfuerzo de difundir conocimiento aplicable y de provecho a la sociedad. M. EN FIT. ARTEMIO BALBUENA MELGAREJO Director

EDITORIAL - Universidad Autónoma del Estado de …web.uaemex.mx/fcienciasagricolas/revistas/pdf/Revista 20-2.pdf · Secretaria de Difusión Cultural M. en A. Ed. Yolanda E. Ballesteros

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EDITORIAL

Diferentes países del mundo basan un alto porcentaje de su economía en el conocimiento; bajo este sistema, se trata de invertir en la generación de conocimiento aplicable al bienestar de la sociedad. En México, el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCT) publicó el “Ranking Nacional de Ciencia y Tecnología” en su versión 2011; dicho documento toma en cuenta, a nivel estatal, los siguientes parámetros: inversión para el desarrollo de capital humano, infraestructura para la investigación, inversión en ciencia, tecnología e innovación, población con estudios profesionales y de posgrado, formación de recursos humanos, productividad científica, infraestructura empresarial, tecnologías de información y comunicaciones, entorno económico y social y componente institucional. El Distrito Federal, Nuevo León y Morelos fueron los estados con los mejores promedios, mientras que el Estado de México se ubicó en el decimo sitio. Parte importante de la evaluación es el número de miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), a dicho sistema pertenecerán en 2012, 18542 miembros, 300 de ellos laborando en la Universidad Autónoma del Estado de México; en particular, 13 investigadores adscritos a la Facultad de Ciencias Agrícolas, casa editora de esta revista. Como se comprende, los parámetros de evaluación nacional en Ciencia y Tecnología son cada vez más estrictos; y, en este sentido, la revista CIENCIAS AGRÍCOLAS INFORMA está a las órdenes de sus autores colaboradores y lectores para aportar su parte en el esfuerzo de difundir conocimiento aplicable y de provecho a la sociedad.

M. en Fit. ArteMio BAlBuenA MelgArejo

Director

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MÉXICO

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CIENCIAS AGRÍCOLAS INFORMAEs una publicación semestral de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Autónoma del Estado de México. Cada autor es responsable del contenido de su texto. Se autoriza la reproducción total o parcial, siempre y cuando se cite el crédito literario de la fuente. Esta revista no responde por artículos no solicitados. Reserva de derechos al uso exclusivo del título 042006-102710130900-102, con ISSN 1870-7378. Número de certificado de licitud de título (en trámite). Número de certificado de licitud de contenido (en trámite). Editor Principal Omar Franco Mora ([email protected]). Oficinas: El Cerrillo Piedras Blancas, Municipio de Toluca, Méx. Km 12.5, carretera Toluca-Ixtlahuaca, desviación a Tlachaloya. Teléfono y fax: (01722) 296-55-18, 296-55-29 y 296-55-31, Ext. 153. Diseño, formato y corrección de estilo: Programa Editorial de la UAEM, Instituto Literario 215. Col 5 de Mayo, Toluca, México, Tels. (01-722) 277-38-35 y 277-38-36. Fotografía de portada: cultivo de caña, cortesia del Dr. Samuel Rebollar Rebollar. Imprenta CIGOME S. A. de C. V., Toluca, México.

SUMARIO

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Línea de investigación Genética Vegetal y FisiologíaAnálisis multivariado aplicado al estudio de las interrelaciones entre cultivares de maíz y variables agronómicas.

Multivariate analysis applied to the study of interrelationships among maize cultivars and agronomic characteristics.Andrés González Huerta, Delfina De Jesús Pérez López, Omar Franco Mora, Eufemio Gabino Nava Beltrán,

Francisco Gutierrez Rodríguez, Martín Rubí Arriaga y Álvaro Castañeda Vildózola

Desarrollo vegetal de Cissus tiliacea bajo tres intervalos de riego.Cissus tiliaceae plant development under three irrigation intervals.

Omar Franco Mora, Sara Lucia González Romero, Karina Mejia Segura, Verónica Ramos Avilés y Martín Rubí Arriaga

Efecto de la densidad de siembra sobre el rendimiento y usos en canola Cv. Monty.Effecf of the sowing density on yield and uses in canola Cv. Monty.

Rocío Díaz Huacúz, Alejandro Jiménez Lugo y Andrés González Huerta

Línea de Investigación Recursos Naturales y Protección AnimalRentabilidad y costos de producción en granjas porcinas productoras de lechón, en el centro del estado de México.

Profitability and production costs producing in pig farms piglets, in the center of the state of Mexico.Encarnación Ernesto Bobadilla-Soto, Antonio Rouco-Yáñez, José García-Gracía y Francisco Ernesto Martínez-Castañeda

La comercialización de la caña de azúcar (Saccharum officinarum) del sur del Estado de México.Sugarcane (Saccharum officinarum) fruit commercialization in the South of the State of Mexico.

Samuel Rebollar-Rebollar, Felipe De Jesús González-Razo, Daniel Cardoso-Jiménez y Juvencio Hernández-Martínez

AnexoLineamientos para autores y dictaminadores de la revista “Ciencias Agrícolas Informa”

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RESUMEN

La presente investigación se estableció en condiciones de secano en el año 1998 en El Fresno Nichi, Municipio de San Felipe del Progreso, Estado de México. Los objetivos principales fueron: determinar la diversidad fenotípica de 20 materiales criollos de maíz colectados en ese municipio así como sus interrelaciones con las variables evaluadas, para hacer inferencias sobre la raza de maíz a la que pertenecen.

En este estudio se incluyeron además seis cultivares introducidos del Valle de Toluca, que junto

ANÁLISIS MULTIVARIADO APLICADO AL ESTUDIO DE LAS INTERRELACIONES ENTRE CULTIVARES DE MAÍZ Y VARIABLES AGRONÓMICAS

MULTIVARIATE ANALYSIS APPLIED TO THE STUDY OF INTERRELATIONSHIPS AMONG MAIZE CULTIVARS AND AGRONOMIC CHARACTERISTICS

González Huerta, Andrés1*; Pérez López, Delfina de Jesús1; Franco Mora, Omar1; Nava Bernal, Eufemio Gabino2; Gutiérrez Rodríguez, Francisco1;

Rubí Arriaga, Martín1; Castañeda Vildózola, Álvaro1

CienCiAs AgríColAs inForMA, 201120(2): 58-65

Recibido: 28 de julio de 2011 Aceptado: 30 de septiembre de 2011

1 Centro de Investigación y Estudios Avanzados en Fitomejoramiento, Facultad de Ciencias Agrícolas, Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx). El Cerrillo Piedras Blancas, Municipio de Toluca, Estado de México. Tel. /Fax: 01(722) 2965518, Ext. 148. 2 Instituto de Ciencias Agropecuarias y Rurales de la UAEMéx. Km 15 Entronque Ixtlahuaca-El Cerrillo. Toluca, Estado de México. *Autor para correspondencia: [email protected].

con los criollos (26 tratamientos), fueron evaluados en campo en un diseño experimental de bloques completos al azar con cinco repeticiones. La variedad Ixtlahuaca fue considerada como testigo, debido a que pertenece a la raza Cónico. El rendimiento de grano y otras 14 variables morfológicas fueron sometidas al análisis de componentes principales y de conglomerados, que fueron útiles para estudiar las diferencias entre cultivares, variables agronómicas y para determinar la interrelación entre genotipos y las características evaluadas. Los 26 cultivares de maíz se agruparon en dos categorías: en el Grupo 1

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se clasificaron los 20 criollos, Gavilán e Ixtlahuaca, mientras que en el Grupo 2 se identificaron a Halcón, AS-820, H-33 y Jiquipilco. El Grupo 1 presentó las mayores dimensiones de planta y mazorca, ciclo biológico de precoz a intermedio y tuvo los mayores pesos volumétricos de grano y altos rendimientos de grano por planta y por hectárea. El Grupo 2 se caracterizó principalmente por presentar ciclo biológico tardío, bajos pesos volumétricos de grano, bajos rendimientos de grano por planta y por hectárea y mayores dimensiones en diámetro y peso de olote por mazorca. Se propone clasificar al material genético del Grupo 1 dentro de la raza Cónico, mientras que el identificado en el Grupo 2 se sugiere agruparlo dentro de complejos de las razas Cónico-Chalqueño y de otras de Valles Altos del CIMMYT.

Palabras clave: Análisis de componentes principales, análisis de conglomerados, razas de maíz, Zea mays.

SUMMARY

Present research was established under unirrigated conditions in 1998 at El Fresno Nichi, municipality of San Felipe del Progreso, State of México. Its main objectives were to determine the phenotypic diversity and the relationship between the 20 local corn materials and the evaluated variables in order to suggest the raze to which they belongs. Further six cultivars native of the Toluca Valley were also studied; every corn type had five replications in a randomized complete block design. Cv. Ixtlahuaca was considered control as it belongs to the Conico raze. Grain yield and other 14 morphological factors were measured and then principal components and cluster analysis were performed. Those analyses were suitable to elucidate differences among cultivars, variables and the relationship between cultivars and variables. Cultivars were grouped in two clusters, the 20 local materials as well as Gavilán and Ixtlahuaca

belonged to Group 1 and the Group 2 was formed by Halcón, AS-820, H-33 and Jiquipilco. Corns of Group 1 had higher plant and ear dimensions, early and medium biological cycle, and higher volumetric grain weight and grain yield by plant and hectare. Plants of Group 2 had late biological cycle, low volumetric grain weight, low grain production in both plant and hectare, and higher dimensions and weight for cob in the ear. These results suggest to classify the corns of Group 1 as Conic raze whereas corn in Group 2 might be related to the complex group involving Conico-Chalqueño raze and other materials of CIMMYT.

Key words: Corn razes, cluster analysis, principal component analysis, Zea mays.

INTRODUCCIÓN

En México, en las últimas décadas se ha especulado mucho sobre el valor económico del maíz (Zea mays L.) hasta el grado de recomendar su reemplazo por otros cultivos, ya que es más viable su importación de Estados Unidos de Norteamérica o de otros países como Argentina. También se ha subrayado que su potencial productivo pronto alcanzará su máxima expresión y que su valor nutritivo es inferior al de otros cereales, como arroz (Oryza sativa L.) y trigo (Triticum aestivum L.), por lo que debería emplearse principalmente en la alimentación animal. Sin embargo, hay otros factores que han hecho del maíz un cultivo indispensable en la alimentación humana y, especialmente, para los mexicanos. A nivel mundial, el maíz ocupa el tercer lugar en producción, después del trigo y del arroz, y en el continente americano se siembra desde Canadá hasta Argentina. En México, 90% de sus habitantes reciben del maíz la mayor proporción de calorías y su consumo per capita es de 175 kg al año, de las 23 millones de hectáreas cultivables en nuestro país, alrededor de 8 millones se siembran con este cereal (Pérez et al., 2000).

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González et al., 2011. Análisis multivariado en máiz

En los Valles Altos del Estado de México, con altitudes entre 2700 y 2950 m, el mejoramiento genético y la generación de tecnología con poblaciones mejoradas de las razas Cónico, Cacahuacintle y Palomero Toluqueño es reciente. En estos valles aún predomina la siembra de variedades criollas mejoradas por los agricultores, considerando principalmente las dimensiones de la mazorca, como en el caso de El Fresno Nichi, Municipio de San Felipe del Progreso, donde se obtienen rendimientos de grano inferiores a 2.0 t ha-1. En la parte alta de este municipio no se siembran variedades mejoradas e híbridos, quizás porque éstas no se adaptan a altitudes superiores a 2750 m (presentan pobre estabilidad fenotípica) y porque en esta región predomina la incidencia de heladas de septiembre hasta marzo. Se tiene una agricultura de secano o temporal, en el ciclo de cultivo se observan gradientes de temperatura y humedad extremosos y son comunes los días nublados, con incidencia de granizo y pobre radiación solar y se tienen serios problemas en el manejo agronómico del cultivo, ya que los agricultores no controlan la maleza con herbicidas y sólo se aplican fertilizantes orgánicos (estiércoles de diferentes animales) (Pérez et al., 1999). El estudio de la diversidad fenotípica y el tipo de raza a la que pertenecen los criollos del Municipio de San Felipe del Progreso en el Estado de México tampoco se ha documentado, por lo que es recomendable iniciar trabajos que permitan generar este tipo de información, como un prerrequisito para delinear mejores estrategias para su aprovechamiento integral. En el contexto anterior, el objetivo principal del presente estudio fue evaluar, desde una perspectiva multivariada, las diferencias entre cultivares de maíz, entre variables registradas y las interrelaciones entre el material genético y las características de planta, mazorca, ciclo biológico y rendimientos de grano, para hacer inferencias sobre la raza a la que pertenece el material genético aquí estudiado.

MATERIALES Y MÉTODOS

Esta investigación se hizo en condiciones de secano en el año de 1998 en El Fresno Nichi, Municipio de San Felipe del Progreso, Estado de México. Esta localidad está situada a 2890 msnm, a 20 km al sur de la Cabecera Municipal. Se consideraron 26 maíces recomendables para siembra comercial en los Valles Altos del Centro de México: 20 criollos de grano blanco, colectados en el año 1997 en El Fresno Nichi (11), San Jerónimo Mavatí (5) y San Nicolás Mavatí (4), y 6 cultivares introducidos del Valle de Toluca (Gavilán, Halcón, Ixtlahuaca, AS-820, H-33 y Jiquipilco). La variedad Ixtlahuaca fue considerada como testigo debido a que se sabe pertenece a la raza Cónico (Nava y Mejía, 2002; González et al., 2008). Este material genético fue evaluado preliminarmente por Pérez et al. (2000).

Los 26 maíces (tratamientos) fueron evaluados en campo en un diseño experimental de bloques completos al azar con cinco repeticiones. La parcela experimental constó de tres surcos de 6.0 m de longitud con separación entre hileras de 0.80 m, pero la unidad experimental útil fue el surco central. La preparación del suelo consistió de un barbecho, una cruza y una rastra. La siembra manual se hizo la última semana de marzo y se depositaron cuatro semillas cada 0.60 m, para posteriormente aclarear a tres plantas por mata. La fertilización se realizó con el tratamiento 75N-60P-00K y se manejó una densidad de población de 62 500 plantas por hectárea.

Las variables registradas en el experimento fueron floración masculina (FM), floración femenina (FF), altura de planta (AP), altura de mazorca (AM), diámetro del tallo (DT), diámetro del pedúnculo de la mazorca (DP), longitud del pedúnculo de la mazorca (LP), diámetro de mazorca (DM), longitud de mazorca (LM), número de hileras de grano (NH), peso de grano por mazorca (PG), peso de olote por mazorca (PO), peso volumétrico de grano (PV)

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y rendimiento de grano por hectárea (RG). Los datos se tomaron de Pérez et al. (2000) y fueron analizados con dos técnicas multivariadas: el análisis de componentes principales (ACP) y el de conglomerados (Cluster Analysis).

En el ACP, antes de obtener el biplot, los datos fueron estandarizados y su estructura de correlaciones fue sometida a la descomposición de valores singulares. La estandarización se hizo al restar la columna de medias (variables) y posteriormente al dividir los elementos de cada columna por la raíz cuadrada de la suma de cuadrados de las desviaciones. En el biplot se analiza la estructura de una matriz de datos (varianzas y correlaciones) compuesta de unidades taxonómicas (cultivares de maíz), asignadas a las hileras, y los promedios aritméticos de las variables que las caracterizan (rendimiento y componentes del rendimiento), asignados a las columnas. El biplot reemplazó la necesidad de usar gráficas múltiples y permitió la determinación visual y confiable de la existencia de patrones entre las unidades taxonómicas como resultado de los valores de sus variables, además identificó los valores que separan los grupos definidos y la relación que existe entre las variables. La similitud entre unidades taxonómicas o entre variables se puede determinar por la magnitud del ángulo que se forma entre parejas de vectores: un ángulo de 90° indica no correlación; un ángulo de 0 ó de 180° indica correlación de 1.0 ó -1.0, respectivamente. En un mismo cuadrante del biplot, puntos cercanos tienen valores similares y viceversa. Los resultados del ACP se obtuvieron con el programa escrito en lenguaje matricial interactivo del Sistema para Análisis Estadístico (Statistical Analysis System, SAS) para sistema operativo DOS; este programa fue descrito por Sánchez (1995) para el estudio de razas de teocintle (Zea mays spp. mexicana) en México y aplicado por González et al. (2010) para el estudio de las interrelaciones entre índices de estabilidad y la estabilidad de maíces de Valles

Altos del Centro de México. La gráfica del biplot se hizo con Microsoft Excel, y se consideraron simultáneamente las coordenadas de los 26 cultivares de maíz y de las 15 variables registradas, correspondientes a los 2 primeros componentes principales.

El análisis de conglomerados empleado en este estudio fue el método de media aritmética no ponderada (Unweighted pair-group method using arithmetic averages, UPGMA Method), también conocido en la literatura especializada como método de ligamiento promedio (average linkage method). En este método, se estima la distancia promedio para formar un agrupamiento (i, j). En este proceso se usan las distancias de todas las parejas de individuos en el cluster (ni, nj) y las distancias entre el grupo (i, j) y otro cluster H. Esta metodología tiende a unir grupos con varianzas pequeñas y muestra sesgo ligero hacia la producción de grupos con la misma varianza, pero tiene la ventaja de ser la más simple de las técnicas multivariadas. El dendograma que se origina con el método UPGMA se obtuvo con el Sistema para Análisis Estadístico (Statistical Analysis System, SAS), versión para Windows (SAS, 1998).

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Análisis de conglomerados Al considerar una distancia promedio de ligamiento de 1.0 se detectó que la diversidad fenotípica evaluada en el presente estudio podía clasificarse en dos grupos: el primero estuvo integrado por 22 maíces: 20 variedades criollas colectadas en San Jerónimo Mavatí, San Nicolás Mavatí y El Fresno Nichi y los cultivares Gavilán e Ixtlahuaca. En el grupo 2 sólo se identificaron cuatro cultivares: Halcón, AS-820, H-33 y Jiquipilco (Figura 1).

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González et al., 2011. Análisis multivariado en máiz

Estos resultados fueron confirmados parcialmente por Pérez et al. (2000), quienes observaron variabilidad genética importante entre estos 26 cultivares y concluyeron que se diferenciaron estadísticamente en 14 de las 15 variables evaluadas; ellos estimaron que la variabilidad genética entre maíces para FM, FF, AP, AM, DT, DP, LP, DM, LM, NH, PG, PO, PV y RG fue de 79.6, 82.1, 82.2, 91.1, 72.9, 78.7, 69.1, 75.1, 53.4, 86.1, 52.9, 90.1, 92.0 y 17.0%, respectivamente.

Al comparar a los 20 criollos contra los seis cultivares, Pérez et al. (2000) también detectaron diferencias significativas en FM, FF, AP, AM, DM, PG, PO, PV y RG, pero los híbridos versus variedades mejoradas sólo difirieron estadísticamente en AP, AM, LP, LM y PG. El contraste, criollos de El Fresno Nichi versus criollos de San Jerónimo y San Nicolás Mavatí también fue significativo en FM, FF, AP, AM, DT, DP, NH y PV y la comparación entre criollos de San Nicolás versus los

de San Jerónimo Mavatí fue estadísticamente diferente para AP, AM, DT, LP, DM, LM, PO y PV.

Para el Grupo 1 se propone que los 20 criollos colectados en El Fresno Nichi, San Jerónimo Mavatí y San Nicolás Mavatí sean clasificados dentro de la raza Cónico, debido a que Nava y Mejía (2002) y González et al. (2008), al considerar características de floración, de mazorca y de rendimiento de grano concluyeron que el cultivar Ixtlahuaca pertenece a esta raza. Wellhausen et al. (1951) concluyeron que las razas Cónico, Chalqueño, Arrocillo Amarillo, Cacahuacintle y Palomero Toluqueño están distribuidas en los Valles Altos del Centro de México, que comprenden los Estados de Hidalgo, México, Puebla y Tlaxcala, pero que las dos primeras predominan ampliamente en esta región.

Para el Grupo 2 se propone que Halcón, Gavilán, AS-820, H-33 y Jiquipilco sean considerados como complejo de Cónico y otras razas de Valles Altos. Nava

Figura 1. Agrupación de los 26 cultivares de maíz con base en 15 variables morfológicas. Método de media aritmética no ponderada (UPGMA Method).

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y Mejía (2002) concluyeron que el cultivar Jiquipilco se agrupó con Ixtlahuaca dentro de la raza Cónico; quizás la variedad Jiquipilco tenga germoplasma de Cónico y Chalqueño, y esto explique el porque ésta no se encuentra en el Grupo 1. Con relación a los híbridos AS-820, Halcón y Gavilán, se desconoce su origen genético y geográfico, debido a las políticas de privacidad de las empresas de producción de semilla, pero González et al. (2008) concluyeron que el primero y el tercero podrían estar formados por líneas de Valles Altos del CIMMYT, derivados de compuestos de amplia base genética con origen racial complejo y de líneas derivadas del complejo Cónico-Chalqueño. Dichos autores concluyeron que el híbrido H-33 y la variedad Ixtlahuaca fueron clasificados en el grupo Cónico-Híbridos-Cónico-Chalqueño; H-33 es una cruza doble formado por el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y se originó a partir de las líneas M17, M18, M27 y M28 derivadas de la población Michoacán 21 (complejo racial de Cónico-

Chalqueño). Los resultados anteriores sugieren la necesidad de evaluar nuevamente el material genético considerado en el presente estudio para estudiar la diversidad fenotípica y la raza a la que pertenecen los maíces de este municipio del Estado de México; también podría evaluarse su interacción genotipo × ambiente y su estabilidad para identificar al material genético más sobresaliente en tiempo y/o espacio.

Análisis de componentes principales

En el presente estudio se detectó que los componentes principales 1 (39.4%), 2 (24%) y 3 (14%) explicaron 77.4% de la variación original, por lo que las correlaciones aproximadas que se pueden observar en el biplot de la Figura 2 entre cultivares de maíz, entre variables agronómicas y entre cultivares y variables pueden interpretarse confiablemente (González et al., 2010).

Figura 2. Interrelaciones entre 26 cultivares de maíz y 15 variables registradas en El Fresno Nichi, Municipio de San Felipe del Progreso, Estado de México. Análisis de Componentes Principales.

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González et al., 2011. Análisis multivariado en máiz

El CP1 estuvo determinado principalmente por las dimensiones de la planta (DT, AP, AM, DP y LP), por algunas dimensiones de la mazorca (DM y PG) y por el periodo de antesis (FM y FF); el CP2 se explicó principalmente por RG, PV, por algunas dimensiones de la mazorca (NH, PO y PG) y por FF; el CP3 se asoció principalmente con LM.

Los resultados observados en el presente estudio muestran que el incremento en el rendimiento de grano por mazorca y por hectárea en el material genético se atribuye principalmente a un aumento en las dimensiones de la planta y del ciclo biológico del cultivo. Louette y Smale (1998), Herrera et al. (2002) y González et al. (2006) comentaron que estos resultados podrían atribuirse a la forma como el agricultor selecciona su semilla, basado principalmente en mazorcas de mayor tamaño o sanidad, de mayor número de hileras, de mayor peso, de granos grandes, o considerando la combinación de dos o más de estas características. Este tipo de selección visual recurrente podría originar menor variabilidad genética o mayor uniformidad fenotípica en las características de la mazorca, pero favorece una mayor variación en altura de planta y mazorca, debido a que el agricultor no realiza selección de planta en campo (González et al., 2008).

En el biplot de la Figura 2 también se puede detectar que los 20 criollos y el cultivar Ixtlahuaca, propuestos para ser clasificados dentro de la raza Cónico, presentaron los mayores rendimientos de grano y las mayores dimensiones en planta y mazorca. Estos resultados podrían explicarse por el hecho de que este material genético está bien adaptado a las condiciones ambientales que predominaron en El Fresno Nichi, contrastantes con las que predominan en el Valle Toluca-Atlacomulco, Estado de Mexico; para AS-820 y Halcón se observó lo contrario y también podría explicarse por el hecho de que ambos híbridos tuvieron problemas de adaptación a esa región. Gavilán, H-33 y Jiquipilco, sobresalieron por sus mayores dimensiones en DM, NH, FM y FF.

Las interrelaciones que se observaron en el biplot de la Figura 2, entre cultivares y variables, permiten

concluir que el material genético más sobresaliente para fines de mejoramiento genético o para la generación de tecnología agropecuaria, está representado por los criollos identificados como 8, 16, 4, 9 y 10 y por el cultivar Ixtlahuaca y se explica principalmente por la superioridad que éstos tuvieron en RG, PG, LM, AM, AP, LP, DT y DP. Estos resultados también son consistentes con los resultados publicados por Pérez et al. (2000); ellos concluyeron que la variabilidad fenotípica para el material genético considerado en el presente estudio fue: a) para FM varió de 99 (Criollo 19) a 123 días (Criollo 14); b) para FF osciló de 104 (Criollo 19) a 129 días (Criollos 14 y Jiquipilco); c) en AP se estimó entre 1.4 (Halcón) y 2.1 m (Criollo 14); d) en AM se detectó de 0.57 (Halcón) a 1.3 m (Criollos 10 y 14); e) para DT varió de 1.3 (Halcón) a 1.7 cm (Criollos 4 y 14); f) en DP osciló entre 0.71 (Halcón) y 1.1 cm (Criollo 4); g) para LP osciló entre 6.9 (Halcón) y 11.0 cm (Ixtlahuaca); h) para DM varió de 3.9 (Criollos 3, 6, 12, 18, 19 y Halcón) a 4.5 cm (H-33 y Jiquipilco); i) para LM se estimó entre 9.2 cm (Criollo 13) y 12.9 cm (Ixtlahuaca); j) para NH cambió de 13.7 (Criollo 19 y AS-820) a 16.5 hileras (H-33 y Criollo 5); k) en PG varió de 54.3 (Halcón) a 108.6 g (Criollo 9); l) para PO las medias aritméticas variaron de 6.5 (Criollo 20) a 13.9 g (H-33); m) para PV se detectó en el intervalo de 676 (H-33 y Jiquipilco) a 774 g L-1 (Criollo 19), y en RG varió de 2.3 (Halcón y Jiquipilco) a 3.9 t ha-1 (Criollos 8 y16).

González et al. (2008) recomendaron el uso del cultivar Ixtlahuaca para incrementar el rendimiento de grano y la estabilidad de los maíces de los Valles Altos del Centro de México, debido a que este cultivar está bien adaptado a esta región, presenta ciclo biológico intermedio, tiene un rendimiento de grano de 6.5 t ha-1 y pertenece a un grupo genética y geográficamente diferente (Cónico) al de los híbridos recomendables comercialmente (Razas Chalqueño, complejos de Cónico-Chalqueño y otras de Valles Altos del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo, CIMMYT). González y Gervacio (1993) y Niño et al. (1998) también han subrayado el buen comportamiento del cultivar Ixtlahuaca; los rendimientos de grano

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que ellos estimaron fueron de 6.42 y 6.40 t ha-1, respectivamente.

CONCLUSIONES

Los 26 cultivares de maíz se agruparon en dos categorías: en el Grupo 1 se clasificaron los 20 criollos de El Fresno Nichi, municipio de San Felipe del Progreso, Gavilán e Ixtlahuaca, mientras que en el Grupo 2 se identificaron a Halcón, AS-820, H-33 y Jiquipilco. El Grupo 1 presentó las mayores dimensiones de planta y mazorca, ciclo biológico de precoz a intermedio y tuvo los mayores pesos volumétricos de grano y altos rendimientos de grano por planta y por hectárea. El Grupo 2 se caracterizó principalmente por presentar ciclo biológico tardío, bajo peso volumétricos de grano, bajo rendimiento de grano por planta y por hectárea y mayor diámetro y peso de olote por mazorca. Se propone clasificar al material genético del Grupo 1 dentro de la raza Cónico, mientras que el identificado en el Grupo 2 se sugiere agruparlo dentro de complejos de las razas Cónico-Chalqueño y de otras de Valles Altos del CIMMYT.

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RESUMEN

Cissus tiliacea pertenece a la familia Vitaceae y se encuentra naturalmente en algunas regiones del Estado de México. El género Cissus representa un gran potencial medicinal, y debido a su cercanía con las vides comerciales (Vitis vinifera) es interesante estudiar las posibilidades de manejo agronómico, evaluando su tolerancia a plagas, enfermedades y especialmente sequía. Se evaluaron algunos parámetros morfo-fisiológicos de plantas de C. tiliacea bajo tres intervalos de riego (IR): 1000 mL de agua cada 4, 7 y 15 d por dos meses; posteriormente se dio un periodo de recuperación con riegos semanales a saturación de campo en todas las plantas. Al mes de iniciar los tratamientos de riego se detectó un descenso en el índice de verdor (unidades SPAD) en

DESARROLLO VEGETAL DE Cissus tiliacea BAJO TRES INTERVALOS DE RIEGO

Cissus tiliacea-PLANT DEVELOPMENT UNDER THREE IRRIGATION INTERVALS

Franco Mora, Omar1*; González Romero, Sara Lucía2; Mejía Segura, Karina1;Ramos Avilés, Verónica1; Rubí Arriaga, Martín3

CienCiAs AgríColAs inForMA, 201120(2): 66-72

Recibido: 7 de noviembre de 2011 Aceptado: 8 de diciembre de 2011

las plantas con IR de 15 d, en comparación con los tratamientos de IR a 7 y 4 d (P ≤ 0.05); esto fue más evidente a los dos meses después del inicio de los tratamientos del IR en las plantas regadas cada 7 y 15 d, las cuales se defoliaron completamente. Sin embargo, tres meses después de iniciados los riegos de recuperación, el contenido de clorofila fue similar en las plantas de los tres tratamientos de riego y no se observaron diferencias en la altura del tallo principal, contenido de materia seca en el tallo joven (pámpano) y lignificado, así como en el contenido de azúcares y fenoles totales en la raíz. Los datos sugieren que Cissus tiliacea tiene la capacidad de soportar regímenes de riego limitados y potencial para recuperarse con riegos adecuados.

Palabras clave: Azúcares totales, compuestos fenólicos, materia seca, unidades SPAD, Vitaceae.

1 Laboratorio de Horticultura, Facultad de Ciencias Agrícolas, Universidad Autónoma del Estado de México. Toluca, México. Tel y Fax. 722-2965518 Ext. 153. 2 Centro Universitario UAEM Tenancingo. 3 Facultad de Ciencias Agrícolas, Universidad Autónoma del Estado de México. * Autor para correspondencia: [email protected]

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ABSTRACT

Cissus tiliacea belongs to Vitaceae family and it grows wildly in some regions of the State of Mexico. The Cissus genus is potentially interesting for pharmacological use; moreover, its agricultural potential must be evaluated. Due to its close relationship with commercial grapes (Vitis vinifera) it must be interesting to evaluate its potential as rootstock tolerant to pest and diseases and, especially, drought. Thus, main objective of present research was to determine physiological responses of C. tiliaceae plants under three levels of irrigation (LI). LI were 1000 mL water every 4, 7 or 15 d during two months; then, plants were fully irrigated during three months. One month after starting LI period, those plants irrigated every 15 d presented lower chlorophyll contents than the plants coming from the others LI (P ≤ 0.05). Moreover, two months after starting LI, plants belonging to 7 and 15 d LI did not present any leave. Three months after application of fully irrigation, it was no differences in the chlorophyll content, as well as in height of main shoot, dry matter content in young and mature shoot, and total sugars and phenolic compounds in the root. Present data suggest the capacity of Cissus tiliacea to survive under limiting water regimes and its capacity to recover under fully irrigation.

Keywords: Dry matter, phenolic compounds, SPAD units, total sugar, Vitaceae.

INTRODUCCIÓN

La poca disponibilidad de agua se ha convertido en un tema de interés social, político y económico para toda la humanidad. De manera particular, la agricultura es un sector en donde este problema crece año con año (Koundouri et al., 2006; D´souza y Devaraj, 2011). El estrés hídrico es considerado el mayor factor ambiental limitante para diversos cultivos, incluyendo las vides (Vitis vinifera) (Flexas et al., 2002; Gómez et al., 2004). A nivel mundial, en

diversas zonas productoras de vid, las plantas de esta especie deben adaptarse a condiciones áridas y tener una alta producción bajo condiciones ambientales no óptimas. Por tanto, la selección, basada en características ecofisiológicas de respuesta a sequía de los mejores portainjertos y cultivares, se considera de gran importancia en la viticultura (Gómez et al., 2004; Ghaderi et al., 2011).

La familia Vitaceae comprende alrededor de 165 géneros y 1370 especies, las cuales se encuentran distribuidas a lo largo de los trópicos (De Almeida et al., 2009). En el neotrópico se encuentran de manera natural los géneros Ampelocissus, Ampelopsis, Cissus y Vitis (Lombardi, 2007). De manera particular, en el Estado de México Cissus tiliacea (Kunth) se ha ubicado en Temascaltepec, Ocuilan y Malinalco (Rzedowski y Calderón, 2005; Jiménez-Martínez et al., 2011). En algunas regiones del país, las flores de esta especie se comercializan y su madera se emplea para elaborar jícaras y cucharas. Del fruto, que es una baya similar a la vid, se puede elaborar vinos artesanales, mientras que diversos órganos de la planta se han empleado en la medicina tradicional para controlar padecimientos nerviosos (Martínez y Matuda, 1979).

México no es ajeno a la problemática de encontrar soluciones para producir más productos agrícolas, conservando su calidad, y con la menor cantidad de agua. Se sabe que una gran cantidad de agua que se emplea para riego no se aprovecha de manera eficiente (Pérez-Arias et al., 2011). Entre las alternativas para enfrentar este problema está la búsqueda de recursos genéticos que se adapten a condiciones de sequía. La red de vid silvestre de la SINAREFI-SAGARPA tiene en sus colecciones de trabajo especies afines a Vitis, y en el caso particular de C. tiliacea, es importante evaluar su capacidad de regeneración (Jiménez-Martínez et al., 2011), así como el potencial de su fruto como materia prima para productos agroindustriales. En el presente trabajo se evaluó la capacidad de C. tiliacea para regenerar crecimiento vegetativo después de un periodo de riego limitado; esta capacidad se midió

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Franco et al., 2011. Desarrollo de Cissus tiliacea

principalmente con el índice de verdor de las hojas y el crecimiento.

MATERIALES Y MÉTODOS

Material vegetal

Se colectaron estacas de C. tiliacea en la localidad de Chalma, Municipio de Malinalco, México, y se llevaron al invernadero Núm. 1 de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Autónoma del Estado de México. El clima del Municipio de Malinalco se reporta como semicálido, subhúmedo con lluvias en verano, temperatura media anual de 20°C y máxima de 34.8 °C, con 1 177 mm de precipitación anual (Gobierno del Estado de México, s/f). La planta de la cual se obtuvieron las estacas se ubica a 1 650 m de altitud.

Una vez en el invernadero, las estacas con tres o cuatro yemas se cortaron en la parte basal para adicionarles Radix 10000® y promover el enraizamiento. Las estacas se regaron cada tercer día y aproximadamente al mes se presentó la brotación de hojas. El enraizamiento se llevó a cabo directamente en un sustrato de agrolita/peat moss (v/v, 1:1) en bolsas de plástico negro de 30 x 30 cm. Tres meses después del proceso de enraizamiento las plantas presentaron al menos diez hojas y raíces desarrolladas; en ese momento se inició un periodo de simulación de sequía con tres intervalos de riego (IR). Las plantas se dividieron en tres grupos, a cada uno de ellos se les regó con 1 L de agua cada 4, 7 y 15 días por dos meses. En el lapso de todo el experimento las plantas fueron fertilizadas cada 25 días con 60 mL de una solución de 50 g de nitrato de calcio L-1 agua, además se aplicaron 30 y 130 mg L-1 de boro y calcio respectivamente, y 1 g L-1 de Captan® para el control de enfermedades fungosas.

Durante el periodo correspondiente a los IR se realizaron mediciones del índice de verdor foliar con un medidor SPAD (Minolta, Japón), en al menos diez repeticiones por tratamiento; los valores de

tres hojas maduras por planta se consideró como una repetición. Una vez terminado el periodo de simulación de sequía, todas las plantas se regaron cada tercer día a capacidad de campo y durante ese periodo se midió nuevamente el índice de verdor foliar. Finalmente, a los 90 días después de iniciado el riego de recuperación se determinó la altura de brote (cm), el porcentaje de agua en pámpanos y tallos lignificados, y el contenido de azúcares y fenoles totales en las raíces (Mora et al., 2009).

Las plantas de cada uno de los tres tratamientos de riego se distribuyeron en un diseño experimental de bloques completos al azar con el mismo número de repeticiones. Se realizó un análisis de varianza y cuando el valor de F fue significativo, los valores de las medias de los tratamientos se compararon con la prueba de Tukey al 0.05.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Simulación de sequía

Índice de verdor. A 30 días de iniciado el IR, las hojas de las plantas regadas cada 15 días presentaron un menor índice de verdor que aquellas con riego cada 4 días. Además, a los 60 días después de este inicio, las plantas sometidas a IR de 7 y 15 días no presentaron hojas (Cuadro 1). Estos resultados son diferentes a los encontrados por Greigh et al. (2011) en algodón (Gossypium herbaceum), en donde las plantas con menor disponibilidad de agua, por efecto del riego controlado, presentaron valores SPAD mayores que las plantas bien regadas. Sin embargo, se sabe que el olivo (Olea europea) es una planta bien adaptada a condiciones limitantes de agua y que una de sus respuestas a la falta de agua es una disminución en la fotosíntesis debido al cierre de los estomas (Bacelar et al., 2006). En tres cultivares de vid, se observó que a mayor estrés por sequía, la fotosíntesis neta disminuía; este fenómeno se correlacionó (R2) entre 0.76 y 0.83 con la conductancia estomática en los tres cultivares

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(Ghaderi et al., 2011). De manera similar, en V. vinifera ‘Riesling’ se observó mayor degradación de las clorofilas a y b por efecto de una simulación de sequía (Bertamini et al., 2006). En Begonia semperflorens-cultorum ‘Olimpia’ también se reportó que la menor frecuencia de riego generó valores menores de unidades SPAD, existiendo una diferencia de aproximadamente 16 unidades entre las plantas con riego cada dos días y aquellas sometidas a riego cada 14 días (Pérez-Arias et al., 2011). La reducción en la fotosíntesis y en la actividad estomática son fenómenos que aparecen frecuentemente correlacionados en plantas bien adaptadas a condiciones de sequía (Ghaderi et al., 2011). A este respecto, en el caso de la presente investigación, la reducción de la fotosíntesis, asumiendo una alta correlación de la misma con las unidades SPAD (Songsrei et al., 2008), es posiblemente un indicador de la adaptación de C. tiliacea a condiciones limitantes de riego.

Retomando la abscisión de hojas observada a los 60 días después de iniciado el IR en plantas regadas cada 7 y 15 días, se sabe que entre las respuestas a déficits de agua, las plantas reducen la superficie de evaporación. La senescencia de las hojas permite la reducción de dichas áreas de evaporación y la remoción del carbono y el nitrógeno a otros órganos (Riccardi et al., 2004; Tardieu, 2005). Esta situación puede sugerir la adaptación de C. tiliacea a condiciones de riego limitado, para este trabajo a riegos cada 7 y 15 días.

Cuadro 1. Índice de verdor (SPAD) en hojas de Cissus tiliacea durante un régimen de riego limitado.

Intervalo de riego Tiempo de desarrollo (días)

0 30 60

Cada 4 días 35.2 35.6 a 30.4

Cada 7 días 32.5 32.4 ab -

Cada 15 días 35.7 29.7 b -

F 0.05 NS 4.6*

Los datos son la media de al menos 10 plantas. Datos con letra diferente a nivel de la columna son estadísticamente diferentes con Tukey al 0.05. A los 60 días no existieron hojas en las plantas con riego cada 7 y 15 días. *, significativo a 0.05; NS, no significativo.

Riego de recuperación

Índice de verdor. Una vez suspendido el IR, y aplicado los riegos de recuperación, se generaron hojas en las plantas de los IR a 7 y 15 días. Dos meses después de estos riegos, las hojas de las plantas del IR a 15 días presentaron mayores contenidos SPAD que las hojas de las plantas con IR a 7 días. Posteriormente, 90 días después de aplicados los riegos de recuperación, el índice de verdor fue similar en las hojas de las plantas de los tres IR (Cuadro 2). Estos resultados son diferentes a los reportados por Ghaderi et al. (2011), quienes en tres cultivares de vid sometidos a condiciones limitantes de riego observaron que a mayor estrés por sequía, la recuperación de la actividad fotosintética era menor, esto a uno y cuatro días después del inicio del riego de recuperación. Por otro lado, en almendro (Prunus spp.) se ha reportado que la recuperación de la actividad fotosintética no alcanza 100%, incluso después de tres semanas de aplicar riegos de recuperación (Rouhi et al., 2007). Los datos de la presente investigación sugieren que las plantas de C. tiliacea soportan periodos de riego limitado, posiblemente porque esas sean las condiciones naturales en los lugares donde crecen de manera silvestre (Jiménez-Martínez et al., 2011). Finalmente, el aumento en las unidades SPAD a los 90 días después del inicio del riego de recuperación pudo deberse al manejo de la nutrición, y a la mayor madurez fisiológica de las plantas empleadas (Pestana et al., 2005).

Cuadro 2. Índice de verdor (SPAD) en hojas de Cissus tiliacea después de riego limitado y posterior riego de recuperación.

Intervalo de riego Días después del riego de recuperación

60 90

Cada 4 días 36.9 ab 41.7

Cada 7 días 32.6 b 41.5

Cada 15 días 42.8 a 41.8

F 8.1 *** 0.02 NS

Los datos son la media de al menos 10 plantas. Tres mediciones por planta. Datos con la misma letra a nivel de la columna no son diferentes con la prueba de Tukey al 0.05. ***, significativo a 0.001; NS, no significativo.

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Franco et al., 2011. Desarrollo de Cissus tiliacea

Altura del tallo. Después de los riegos de recuperación, aunque las plantas con riego cada 4 días presentaron una altura mayor, no existió diferencia estadística con las plantas sometidas a los otros dos intervalos. A los 90 días en riego de recuperación tampoco existió diferencia estadística (Cuadro 3). Esta situación concuerda con la idea de que esta especie tolera cierta limitante de agua de riego, ya que después de los riegos de recuperación los tres tratamientos alcanzaron valores estadísticamente iguales.

Cuadro 3. Altura del brote principal en Cissus tiliacea en riego intensivo después de tres intervalos de riego.

Intervalo de riego Altura (cm) después del riego intenso

60 días 90 días

Cada 4 días 40.0 64.5

Cada 7 días 33.7 61.8

Cada 15 días 31.3 70.2

F 2.5 NS 0.6 NS

Los datos son la media de al menos 10 plantas. NS, no significativo.

Materia seca. De manera similar a las unidades SPAD y la altura del brote principal, el contenido de materia seca, después de los riegos de recuperación, no presentó efecto por el IR (Cuadros 4 y 5). Se observó que existió diferencia significativa en el porcentaje de materia seca entre el pámpano (tallo joven) y el tallo lignificado, cuyo contenido de agua fue de 20 y 42%, respectivamente.

Cuadro 5. Contenido porcentual de materia seca en tallos y pámpanos de Cissus tiliacea después de un régimen de estrés hídrico y posterior riego de recuperación.

Intervalo de riego Tallo Pámpano

Cada 4 días 77.4 87.8

Cada 7 días 54.2 78.7

Cada 15 días 41.6 72.9

Los datos son la media de tres repeticiones, una planta por repetición.

Cuadro 4. Análisis de varianza para materia seca en tallos de Cissus tiliacea en respuesta a tres intervalos de riego y posterior riego de recuperación.

Fuente de variación S.C. G.L. M.C. F

Riego (R) 1973.4 2 986.7 2.9 NS

Madurez del tejido (Mt) 2194.3 1 2194.3 6.4*

R X Mt 340.4 2 170.2 0.5 NS

ERROR 4127.8 12

*, Significativo al 0,05. NS. No significativo.

Azúcares totales y compuestos fenólicos en la raíz. Al final del experimento, después del riego de recuperación, se determinaron los contenidos de azúcares y fenoles totales en la raíz, ambos considerados como marcadores de estrés oxidativo (D´souza y Devaraj, 2011), no encontrándose diferencias (Cuadro 6). En olivo y en Dolichos lablab se observó que las hojas de plantas con reducida disponibilidad de agua presentaron mayores contenidos de azúcares solubles y almidón almacenado (Bacelar et al., 2006; D´souza y Devaraj, 2011). Por otro lado, en V. vinifera ‘Riesling’ se indicó que limitando el riego se disminuye la actividad de la ribulosa-1,5-difosfato (RUBISCO) (Bertamini et al., 2006), lo cual en tabaco (Nicotiana tabacum) se asoció a una disminución en las cantidades de los carbohidratos de la planta (Paull y Driscoll, 1997). Los contenidos de azúcares en raíz de C. tiliacea sugieren, nuevamente, un buen proceso de recuperación de las plantas con limitantes de agua de riego y el potencial de la especie para resistir sequía. Finalmente, se sabe que el contenido de compuestos fenólicos puede relacionarse como una señal de estrés vegetal y que posiblemente tengan un rol protector (Djilianov et al., 2011; D´souza y Devaraj, 2011), por lo que después del periodo de riego de recuperación, las plantas de C. tiliacea parecieron no presentar afectación por el IR.

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CONCLUSIONES

Después de 30 días bajo un intervalo de riego de 1 L de agua cada 15 días, plantas de Cissus tiliacea disminuyeron su índice de verdor en comparación con plantas regadas cada 4 días. Posteriormente, a 60 días de tratamiento, tanto en el intervalo de 7 y 15 días se generó una defoliación completa. Las plantas de los tres intervalos de riego, después de los riegos de recuperación, alcanzaron los mismos valores para índice de verdor, altura de brote, materia seca y contenido de azúcares totales y compuestos fenólicos totales en la raíz, lo cual sugiere la capacidad de esta especie para soportar regímenes de riego a 7 y 15 días.

AGRADECIMIENTOS

El presente trabajo forma parte del proyecto “Exploración, usos y potencial del género Vitis en el centro de México”, financiado por el sistema PROMEP-SEP, México, a cargo del Cuerpo Académico UAEM-127 “Cultivos básicos y hortícolas”.

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Cuadro 6. Contenido de azúcares (Equivalentes de glucosa) y fenoles (Equivalentes a ácido gálico) totales en la raíz de Cissus tiliacea.

Riego Azúcares totales(mg EG g-1 PF)

Fenoles totales(mg EAG g-1 PF)

Cada 4 días 2.4 16.9

Cada 7 días 2.0 17.3

Cada 15 días

2.3 17.0

F 0.12 NS 0.03 NS

Los datos son la media de tres repeticiones, una planta por repetición. PF, peso fresco; NS, no significativo.

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RESUMEN

En el Valle de Toluca el cultivo de canola (Brassica napus L.) es una opción viable en cuanto a productividad y rentabilidad bajo condiciones de temporal. En los años recientes la canola se ha ido consolidando como uno de los cultivos de reciente introducción con más alternativas de producción. En el Estado de México se ha encontrado que cuenta con las condiciones apropiadas tanto de suelo como de clima para su establecimiento, además para su empleo y comercialización en diferentes usos. Con base en lo anterior se realizó el presente trabajo con el objetivo de evaluar la densidad de siembra óptima para cada uno de los usos de canola como hortaliza, forraje, silicua y grano. La presente investigación se realizó en condiciones de temporal en el ciclo primavera-verano de 2007 en Metepec,

EFECTO DE LA DENSIDAD DE SIEMBRA SOBRE EL RENDIMIENTO Y USOS EN CANOLA CULTIVAR MONTY

EFFECT OF THE SOWING DENSITY ON YIELD AND USES IN CANOLA CULTIVAR MONTY

Díaz Huacúz, Rocio1*; Jiménez Lugo, Alejandro2; González Huerta, Andrés2

CienCiAs AgríColAs inForMA, 201120(2): 73-86

Recibido: 25 de noviembre de 2011 Aceptado: 18 de diciembre de 2011

Estado de México, en el sitio experimental del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). El cultivar Monty fue evaluado en un diseño experimental de bloques completos al azar con cuatro repeticiones. La parcela experimental estuvo constituida por ocho surcos (0.80 x 10.0 m), pero la unidad experimental útil consistió de los dos surcos centrales de cada parcela (0.80 x 9.0 m), para evaluar los usos de la canola y para evitar los efectos de bordo y de competencia entre tratamientos. Las dosis de siembra utilizadas fueron de 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9 y 10 kg ha-1. Los resultados obtenidos en este estudio indicaron que la densidad óptima para el uso como hortaliza fue de 5 kg ha-1, con un rendimiento de 4032 kg ha-1 y empleando 10 kg ha-1 el rendimiento fue de 9

1 Sitio Experimental Metepec, Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). Zinacantepec, Estado de México. Código Postal 51350. Tel. 01(722) 2780039. 2 Centro de Investigación y Estudios Avanzados en Fitomejoramiento, Facultad de Ciencias Agrícolas, Universidad Autónoma del Estado de México. Apartado Postal 435. El Cerrillo Piedras Blancas, Municipio de Toluca, Estado de México. *Autora para correspondencia: [email protected].

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Díaz et al., 2011. Rendimiento de canola

manojos de corazones, con 2335 kg ha-1. Para forraje, a una densidad de siembra de 7 kg ha-1 se obtuvo un rendimiento de peso en fresco de 46.87 t ha-1 y un peso seco de 14.06 t ha-1, pero con 10 kg ha-1 se obtuvo un peso fresco de 43.12 t ha-1 y un peso seco de 12.93 t ha-1. Para la producción de silicua la densidad óptima fue de 4 kg ha-1, obteniéndose un rendimiento de 24305 kg ha-1. La densidad óptima para la producción de grano fue de 3 kg ha-1, obteniéndose 2665 kg ha-1, mientras que a 10 kg ha-1 se obtuvo un rendimiento de 1398 kg ha-1. En este estudio se concluye que el mayor rendimiento y la mejor calidad en canola para cada uno de sus usos están condicionados por las densidades de siembra de 3, 4, 5 y 7 kg ha-1.

Palabras clave: Brassica napus, densidad de siembra, usos de la canola, Valles Altos del Centro de México.

SUMMARY

In the valley of Toluca the canola (Brassica napus L.) production is a viable option in terms of productivity and profitability under rainfall conditions. In recent years the canola has been consolidating as one of the crops of recent introduction with more production alternatives. In the State of Mexico this crop have appropriate developing conditions, both soil and climate for their establishment, in addition to its favorable marketing and employment in their different uses. Based on the foregoing, this study was carried out to assess the optimum seeding rate for each one canola uses, so vegetable, fodder, siliqua and grain yield. This research was made under rainfall conditions in the spring-summer cycle of 2007 in the experimental field of the Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), located in Metepec, State of Mexico. The cultivar Monty was evaluated in a randomized complete block design with four replications. The experimental plots consisted on 8 furrows (at 0.80 x 10.0 m) but the useful experimental plot consisted

on 2 central furrows (at 0.80 x 9.0 m) in each plot to assess the canola uses and to avoid border competition effects between treatments. The seeding rates used were 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, and 10 kg ha-1. The results obtained in this research indicated that the optimum seeding rate for vegetable use was 5 kg ha-1, yielding 4032 kg ha-1, and with 10 kg ha-1 was obtained 9 bunches of hearts, equal to 2335 kg ha-1. For fodder use with a seeding rate of 7 kg ha-1 was obtained a fresh and dry production of 46.87 and 14.06 t ha-1, respectively, but employing a seeding rate of 10 kg ha-1 it was yielding a fresh and dry weight of 43.12 and 12.93 t ha-1, respectively. The optimum seeding rate for siliqua was 4 kg ha-1 obtaining 24305 kg ha-1. The optimum seeding rate for grain yield was 3.0 t ha-1, equal to 2664 kg ha-1, while using 10 kg ha-1 was obtained 1398 kg ha-1. In this study was concluded that a higher grain yield and a better quality for each one of the canola uses was conditioned by seeding rate employed, as 3, 4, 5, and 7 kg ha-1.

Key words: Brassica napus, Mexican Central Highlands, seeding rate, uses of the canola.

INTRODUCCIÓN

El interés por incrementar el nivel productivo y económico en la población mediante el uso de nuevas alternativas productivas ha promovido que cultivos como la canola (Brassica napus L.) sea una opción importante para la agricultura mexicana. Esta especie tiene un alto potencial para su aprovechamiento, lo que antes se veía como prometedor, ahora ya representa muchas ventajas sobre otros cultivos y esto es conveniente para los productores ya que se emplean menos recursos materiales, económicos y humanos, redituando en una mejor ganancia. En la actualidad, el recurso agua es muy demandado no sólo para las necesidades de la sociedad también para las diferentes regiones productivas del país que requieren de grandes volúmenes año tras año para la

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producción de granos, cereales, hortalizas, frutales, e incluso forrajes, que permitan satisfacer sus demandas en alimentos. La canola revoluciona ciertamente la costumbre de emplear grandes volúmenes de agua para su desarrollo ontogénico en comparación con otras especies de hortalizas, granos o forrajes (Díaz y Ortegón, 2006; Ortegón et al., 2009).

Este cultivo tiene mucho futuro para México y particularmente para el Estado de México, aunque aun son pocos los estados donde se produce. Así, el mercado para la comercialización de esta oleaginosa no tiene dificultad alguna, ya que sus etapas de desarrollo permiten destinar la producción para un fin específico: para grano y aceite, para hortaliza y como forraje. Para este último representa una excelente alternativa en relación a la ganadería lechera o de engorda que siempre demanda grandes cantidades y no siempre todos los forrajes son propicios para las zonas ganaderas razón por la cual se tiene que importar canola de otros países y como anteriormente se mencionó no es un cultivo que requiera de grandes volúmenes de agua como el maíz (Zea mays L.), el sorgo (Sorghum bicolor L.) u otros cultivos forrajeros (Díaz y Ortegón, 2006; Ortegón et al., 2009). Las hojas, tallos, flores y grano de canola son bien aceptados para la alimentación humana; el grano para la industria se emplea para la elaboración de aceites comestibles con menos toxicidad. El aceite que se extrae del grano es empleado para la elaboración de otros productos. La silicua de la canola también tiene mercado; los comerciantes la ofertan como alimento para pájaros, en forma de manojo y aun en estado verdoso, este mercado no es sólo regional por lo que tiene mayores canales de comercialización y ventajas para los productores (Díaz, 2007).

La canola ofrece muchas ventajas sobre otras especies debido a su excelente adaptabilidad a localidades con climas templados y suelos heterogéneos y pobres en nutrimentos, con pH tanto ácidos como alcalinos, por los múltiples usos que se le puede dar (forraje, hortaliza, grano, siliqua y aceite) y por lo económicamente redituable que es su cultivo.

La densidad de siembra es un factor que debe tomarse en cuenta para una buena productividad, esto a razón del eficiente desempeño que tienen las plantas en un espacio determinado y bajo una densidad óptima. En el Valle de Toluca, México hasta la década de los 1990’s no se habían realizado estudios para estudiar los efectos que origina la densidad de siembra en el cultivo de canola y, específicamente, sobre la determinación del número óptimo de plantas que permita obtener los mayores rendimientos de grano, y la mayor calidad en los diferentes usos que recibe esta oleaginosa (Díaz, 2007). En base al contexto anterior se plantearon los siguientes objetivos e hipótesis: Identificar la densidad de siembra óptima en la cual se manifieste el mejor desarrollo de planta y el mayor rendimiento y calidad según los diferentes usos de la canola bajo las condiciones ambientales que predominan en Metepec, Estado de México. Hipótesis, el cultivo de canola se adapta muy bien a diferentes distanciamientos entre plantas, pero el mayor rendimiento de grano y los mejores componentes del rendimiento se obtienen en las densidades de siembra de 3, 4 y 5 kg ha-1, respuesta que depende de los diferentes usos para los que se destina comercialmente.

MATERIALES Y MÉTODOS

Ubicación del trabajo experimental

El experimento se estableció durante el ciclo primavera–verano de 2007 en el Sitio Experimental Metepec del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), localizado en Metepec, estado de México a 19° 14’ de latitud norte y 99° 35’ de longitud oeste, a una altitud de 2600 m. El clima predominante en este sitio es C (w2)(w) big, que corresponde al templado, el más húmedo de los subhúmedos con lluvias en verano, con precipitación media anual de 500-700 mm, temperatura media anual entre 12° y 18° C, oscilación térmica de 5 a 7° C

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y el mes más cálido se presenta antes del solsticio de verano (García, 1981). Los suelos predominantes son los de textura franco–arcilloso–arenoso, con pH que varía de 5.5 a 6.5, el contenido de materia orgánica es de 3 a 4.2% (Castro, 2009).

Material genético

El cultivar Monty tiene las características siguientes: altura de 1.60 m, abundante ramificación con presencia de hojas grandes lobuladas con margen dentado de color verde claro, de ciclo relativamente corto (150 días), su inicio de floración ocurre 45 a 50 días después de la siembra y es muy abundante, las flores son de color amarillo y la floración tiene una duración de 45 días. Alcanza la madurez a los 150–160 días, teniendo una silicua de 11 a 12 cm de longitud. Su rendimiento es de 2500 a 3000 kg ha-1. El contenido de aceite en sus semillas es de 42% (Díaz, 2007).

Diseño y tamaño de la parcela experimental

Los ocho tratamientos o densidades de siembra fueron distribuidos en campo bajo un diseño experimental de bloques completos al azar con cuatro repeticiones, por lo que el experimento constó de 32 unidades experimentales. Las densidades empleadas fueron de 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9 y 10 kg ha-1. La parcela experimental estuvo constituida por ocho surcos de 0.80 m de ancho y 10.0 m de largo, teniendo una superficie de 64 m2. Para determinar los usos de la canola, cada parcela se subdividió en áreas de dos surcos de 9.0 m de longitud (eliminando 0.50 m de cada extremo para evitar el efecto de bordo), separados a 0.80 m (14.4 m2).

Manejo del trabajo experimental

El presente trabajo se estableció en condiciones de temporal. La preparación del terreno consistió en

un barbecho profundo y una rastra. Después de las primeras lluvias (4 de junio), se aplicó Treflan como herbicida preemergente y una rastra ligera para incorporarlo al suelo; posteriormente se formaron los surcos a 80 cm de distancia, con una cultivadora que llevaba en la parte trasera un tablón cuya finalidad era desmenuzar los terrones de la parte superior de los surcos, y de esta forma desmenuzar los terrones y trazar el área de siembra.

Siembra. Se realizó manualmente el 11 de junio de 2007. La semilla fue depositada en la parte superior del surco a hilera sencilla, a una profundidad no mayor a 3 cm.

Fertilización. Se aplicó el tratamiento 92 N–69 P–30 K, el fertilizante se fraccionó en dos partes; al sembrar se aplicó la mitad del nitrógeno y todo el fósforo y el potasio y el nitrógeno restante se aplicó antes de la segunda escarda. Las fuentes de estos nutrimentos fueron urea (46% N), superfosfato de calcio triple (46% P2O5) y cloruro de potasio (60% K2O).

Control de maleza. Ésta se llevó a cabo con tres escardas: la primera fue muy ligera y se realizó a los 25 días de la siembra, a las dos semanas se hizo la segunda, cuando las plantas estaban en roseta y la tercera se efectuó una semana después. La maleza entre plantas se controló manualmente y no se requirió de aplicaciones químicas para el control de plagas y enfermedades.

Variables de estudio

En este estudio se registraron las relacionadas con los usos que se le han dado a la canola.

Hortaliza. Se registró el número de días a corte (cuando las plantas alcanzaron el desarrollo de corazones; esta etapa se identificó por el desarrollo de ramificaciones secundarias, elongación del tallo principal y cuando se observaron los botones florales), número de manojos de corazones (NMC, se contó el número de tallos cortados y producidos en un área muestreada de cada parcela), peso de manojo de

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corazones (PMC, se registró el peso al cosechar y se expresó en g), número de cortes de corazones (NCC, cortes realizados en cada parcela cada 15 ó 20 días, hasta observar que la planta mostraba un estado de madurez avanzado), rendimiento total de corazones (RTC, en cada parcela se registró el peso de 10 manojos al azar y se extrapoló a kg ha-1).

Forraje. Se identificó la etapa de corte cuando las plantas mostraron color verde, follaje abundante, floración terminal y silicuas de 4 a 6 cm de longitud. Las variables registradas fueron: peso fresco (PF, peso del forraje al cosechar, registrado en g m-2), peso seco (PS, forraje con 70% de humedad, registrado en g m-2).

Silícua para pájaros. Ésta se determinó cuando las plantas presentaron floración terminal y silícuas de 6 a 8 cm de longitud. Las características evaluadas fueron: número de manojos de silicua (MMS, número de manojos producidos en el área muestreada de cada parcela), peso de manojo de silícua (PMS, peso en kilogramos de los manojos cortados en cada parcela), rendimiento de silícua (RTS, peso de 10 manojos tomados al azar en cada parcela registrado en kg m-2).

Producción de grano. Las variables que se registraron para este uso se midieron a un contenido de humedad de 14% y fueron: peso de 1000 semillas (P1000S, se consideró una muestra de grano al azar de 1000 granos en cada una de las parcelas, se contaron mil semillas con tres repeticiones y su promedio se registró en g), peso hectolítrico (PH, se determinó el peso de una muestra de grano proveniente de cada parcela experimental, en un recipiente de 1 L), rendimiento (RTO, se determinó el peso de grano total en cada parcela experimental útil y se expresó en kg ha -1).

Componentes del rendimiento

Para los usos como forraje, silícua y grano se tomaron: altura de planta (AP, altura promedio de 10 plantas establecidas en la parcela con competencia completa y registrada en cm, desde la base del tallo hasta el

ápice de la ramificación principal), diámetro del tallo (DT, registrada en centímetros al nivel de la primera ramificación), número de ramas por planta (NRP, en 10 plantas se cuantificaron las ramas secundarias que nacen del tallo principal y se registró su media), número de silícuas por planta (NSP, se cuantificaron las silícuas de cada una de 10 plantas), número de semillas por silícua (NSS, de 10 plantas elegidas al azar se tomaron 10 silícuas y se cuantificaron sus semillas); longitud de silícua (LS; se tomaron al azar 10 silícuas del tallo principal de cada planta seleccionada y se midió su longitud promedio, desde la punta hasta el pedúnculo).

Análisis estadístico

Los datos fueron sometidos a un análisis de varianza (Anova) y cuando los valores de F del Anova fueron significativos se hizo la comparación de medias entre tratamientos con la prueba de Tukey, a un nivel de significancia del 0.05. También se aplicaron los análisis de correlación y de regresión lineal simple, cuyos procedimientos algebraicos fueron descritos por Gomez y Gomez (1984). Las salidas del análisis estadístico fueron verificadas con el paquete estadístico “Menu”, de la Universidad Autónoma de Nuevo León (Olivares, 1994). El análisis de componentes principales con las ocho densidades de siembra y las 16 variables registradas se hizo con el programa para SAS (Statistical Analysis System), desarrollado por Sánchez (1995) y aplicado por González et al. (2010).

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Análisis de varianza para producción de hortaliza

Se detectaron diferencias altamente significativas para número de manojos de corazones (NMC) y rendimiento total de corazones (RTC). Entre bloques los efectos no fueron significativos (p > 0.05). Los coeficientes

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de variación para NMC, peso de manojo (PM) y RTC fueron de 5.9, 10.3 y 10.2% (Cuadro 1). Estos resultados indican que el incremento en la densidad de siembra originó variación fenotípica significativa en NMC y RTC.

Comparación de medias para el uso de canola como hortaliza

La densidad de siembra en la que se registró el mayor número de manojos cosechados (NMC) fue a 5 kg ha-1, con 15.5 manojos, equivalente a un rendimiento de 4032 kg ha-1; este tratamiento difirió significativamente de los demás. Las densidades de 3 y 4 kg ha-1, ambas con 13.75 ramilletes tuvieron un rendimiento equivalente a 3441 y 3454 kg ha-1, respectivamente. Las densidades restantes tuvieron promedios entre 9 y 11.75 manojos, con rendimientos estimados de 2335 a 2847 kg ha-1. En el caso del peso de manojos de corazones (PMC) los promedios aritméticos variaron de 325 a 400 g, pero en el análisis de varianza los efectos entre tratamientos no fueron significativos (Cuadro 2). Cabe mencionar que se realizaron cuatro cortes en la etapa vegetativa adecuada, cada dos semanas, tiempo suficiente para que la planta desarrollara nuevos brotes. Ortegón et al. (2007) concluyeron que a mayor densidad de población menor desarrollo de ramificaciones.

En este estudio también se observó que al incrementarse la densidad de siembra (DS) en 1 kg hubo una disminución en casi un manojo de corazones (valor de b), mientras que en rendimiento total de corazones se registró una disminución de 222 kg (valor de b). La regresión entre DS con NMC ó con RTC fue lineal y significativa; los coeficientes de determinación (R2) fueron de 0.78 y 0.67, respectivamente, lo que indica que el 78 ó 67 % de la variabilidad asociada a la variable dependiente es explicada por la variabilidad que existe en la variable independiente. La ecuación de predicción para NMC es Yi = 17.44 -0.90Xi, mientras que para RTC es Yi = 4349.57 – 222.28 Xi (Cuadro 2).

Producción de forraje

En peso fresco (PF) y en peso seco (PS) hubo diferencias altamente significativas entre tratamientos; las diferencias entre repeticiones también fueron significativas. Los coeficientes de variación para ambas variables fueron de 7.7% (Cuadro 3). Los resultados

Cuadro 1. Valores de F para número de manojos de corazones (NMC), peso de manojo de corazones (PMC) y rendimiento total de corazones (RTC), en Metepec, México. Verano 2007.

Fuente de variación

Grados de libertad NMC PMC RTC

Tratamientos 7 53.45** 0.59ns 19.86**

Repeticiones 3 0.08ns 0.62ns 1.02ns

Error experimental

21

C.V. (%) 5.9 10.3 10.2

** Altamente significativo. * Significativo. NS no significativo.

Cuadro 2. Comparación de medias entre tratamientos para número de manojos de corazones (NMC) y rendimiento total de corazones (RTC), en Metepec, México. Verano 2007.

Densidades de siembra (DS, kg ha-1) NMC RTC (kg ha-1)

3 13.75 b 3441.84 abx

4 13.75 b 3454.86 ab

5 15.50 a 4032.11 a

6 11.75 c 2847.22 bc

7 10.00 d 2317.70 c

8 9.75 d 2534.72 c

9 9.00 d 2274.30 c

10 9.00 d 2335.07 c

DMSH (Tukey, p=0.05) 1.627 705.36

R2 entre DS y NMC ó RTC 0.78** 0.67*

Valor de a 17.44 4349.57

Valor de b -0.90 -222.28

xValores con la misma letra dentro de cada columna son estadísticamente iguales.

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anteriores sugieren que la densidad de siembra afectó significativamente la producción de forraje en canola.

Cuadro 3. Valores de F para pesos fresco y seco, en Metepec, México. Verano 2007.

Fuente de variación Grados de libertad

Peso fresco Peso seco

Tratamientos 7 7.09** 7.08**

Repeticiones 3 3.12* 3.12*

Error experimental 21

C. V. (%) 7.70 7.70

* Significativo al 0.05; ** Altamente significativo al 0.01;

Comparación de medias para el uso de canola como forraje

En teoría se esperaba que a mayor densidad de plantas por unidad de superficie, mayor rendimiento de biomasa, pero las plantas de canola llegan a un límite de crecimiento y desarrollo cuando la competencia por agua, luz, espacio y nutrimentos es muy alta. En peso fresco (PF) y en peso seco (PS) la densidad de siembra en la que se registró el mayor promedio aritmético (46.8 y 14.0 t ha-1 para PF y PS) fue la que correspondió a 7 kg ha-1, pero este tratamiento sólo difirió significativamente de 3 kg ha-1 (Cuadro 4).

Aún cuando la regresión de la densidad de siembra (DS) sobre ambas variables no fue significativa (valores de R2 de 0.46 para PF y PS), se observó que al incrementarse la DP en 1 kg ha-1 hubo una reducción en la producción de materia verde y seca de 1.21 y 0.36 t ha-1, respectivamente. Estos resultados se explican por el hecho de que a mayor densidad de siembra la planta tiene mayor competencia por luz, espacio, nutrimentos y agua para la producción de materia verde y seca. Resultados similares fueron encontraron en girasol (Helianthus annus L.) por Escalante et al. (2008) y por Vega et al. (2001); ellos observaron que al elevar la densidad de siembra se redujo la producción de biomasa por planta, pero que la producción de materia verde por unidad de superficie fue mayor.

Cuadro 4. Comparación de medias entre tratamientos para peso fresco (PF) y seco (PS), en Metepec, México. Verano 2007.

Densidades de siembra (DS, kg ha-1)

PF (t ha-1) PS (t ha-1)

3 33.75 bx 10.12 b

4 40.62 ab 12.18 ab

5 40.00 ab 12.00 ab

6 46.25 a 13.87 a

7 46.87 a 14.06 a

8 45.62 a 13.68 a

9 44.37 a 13.31 a

10 43.12 a 12.93 a

DMSH (Tukey, p=0.05) 7.781 2.33

R2 entre DS con PF o con PS 0.46 ns 0.46 ns

Valor de a 34.69 10.40

Valor de b 1.21 0.36

xValores con la misma letra dentro de cada columna son estadísticamente iguales.

Producción de silicua para pájaros

Los resultados que se muestran en el Cuadro 5 indican diferencias altamente significativas entre tratamientos para número de manojos (NMS) y rendimiento total de silicua (RTS). Los efectos entre repeticiones para ambas variables no fueron significativos. Los coeficientes de variación para RTS y NMS fueron de 3.84 y 4.14%, respectivamente. Estos resultados sugieren que el incremento en la densidad de siembra tuvo efectos significativos en la producción de silicua de canola.

Cuadro 5. Valores de F para número de manojos (NMS) y rendimiento total de silicua (RTS), en Metepec, México. Verano 2007.

Fuente de variación Grados de libertad

NMS RTS

Tratamientos 7 42.59** 51.33**

Repeticiones 3 0.95ns 0.63ns

Error experimental 21

C.V. (%) 4.14 3.84

* significativo al 0.05;** altamente significativo al 0.01; ns no significativo.

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Díaz et al., 2011. Rendimiento de canola

Comparación de medias para el uso de silicua para pájaros

En número de manojos (NMS) y en rendimiento total de silicua (RTS) el mejor tratamiento correspondió a 4 kg ha-1 (34 manojos y 24305 kg ha-1, respectivamente); este tratamiento difirió estadísticamente de los otros siete (Cuadro 5). Estos resultados sugieren que a mayor densidad de plantas (DS) menor número de manojos y, por lo tanto, menor rendimiento total de silicua. La regresión de la DS sobre NMS ó sobre RTS fue significativa (valores de R2 de 0.88 y 0.87, respectivamente); al incrementarse la DS en 1 kg ha-1 hubo una disminución en el NMS ó en el RTS de 1.5 manojos ó 1056 kg ha-1, respectivamente (Cuadro 6). Los resultados anteriores se explican por el hecho de que la planta de canola tiende a desarrollar menor ramificación y menor número de silicuas en altas densidades de siembra. Ortegón (2003) mencionó que una baja densidad de población incrementó el número de ramas por planta. En el caso del peso de manojos de silicua (PMS) las medias aritméticas fluctuaron de 950 a 1050 g, pero en el análisis de varianza no hubo

Cuadro 6. Comparación de medias entre tratamientos para número de manojos (NMS) y rendimiento total de silicua (RTS), en Metepec, México. Verano 2007.

Densidades de siembra (DS, kg ha-1)

NMS RTS (kg ha-1 )

3 32.00 bx 22222.22 bc

4 35.00 a 24305.55 a

5 32.25 ab 22395.94 bc

6 29.50 bc 20486.10 cd

7 28.00 cd 19444.44 de

8 25.75 de 17534.72 f

9 25.50 de 17708.33 ef

10 23.75 e 16493.05 f

DMSH (Tukey, p=0.05) 2.846 1829.76

R2 entre DS con NMS o con RTS 0.88** 0.87**

Valor de a 38.73 26938.69

Valor de b -1.50 -1056.13

xValores con la misma letra dentro de cada columna son estadísticamente iguales.

diferencias significativas entre tratamientos (Datos no presentados).

Producción de canola para grano

En el análisis de varianza se detectaron diferencias altamente significativas entre tratamientos para peso de mil semillas (P1000S), peso hectolítrico del grano (PH) y rendimiento de grano (RTO). Entre repeticiones sólo se detectaron diferencias estadísticas para RTO. Los coeficientes de variación para PH, P1000S y RTO fueron de 1.15, 4.17 y 5.63%, respectivamente (Cuadro 7). Estos resultados indican que las tres variables fueron afectadas significativamente por la variación en la densidad de siembra, en el intervalo de 3 a 10 kg ha-1. Ortegón et al. (2006) y Ortegón et al. (2009) también detectaron diferencias altamente significativas en PH y RTO cuando ellos evaluaron genotipos de canola en Río Bravo, Tamaulipas.

Cuadro 7. Valores de F para peso hectolítrico del grano (PH), peso de 1000 semillas (P1000S) y rendimiento de grano (RTO), en Metepec, México. Verano 2007.

Fuente de variación

Grados de libertad

PH P1000S RTO

Tratamientos 7 35.59** 5.67** 63.58**

Repeticiones 3 1.75ns 1.13ns 3.44*

Error experimental

21

C.V. (%) 1.15 4.17 5.63

* Significativo al 0.05; ** Altamente significativo al 0.01; ns no significativo.

Comparación de medias para la producción de grano

Peso de 1000 semillas (P1000S). El P1000S fluctuó de 4.06 a 4.62 g. El mejor tratamiento correspondió a la densidad de 4 kg ha-1 (4.62 g), pero ésta sólo se diferenció estadísticamente de 7, 8, 9 y 10 kg ha-1. La regresión entre DS y P1000S fue significativa (R2

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de 0.92); por cada incremento en DP en 1 kg ha-1 se redujo en 0.083 g el P1000S (Cuadro 8).

Peso hectolítrico del grano (PH). En la densidad de siembra de 4 kg ha-1 se obtuvo el mayor promedio aritmético (672.5 kg L-1) y esta se diferenció estadísticamente de 5, 6, 8 y 10 kg ha-1 (medias de 620 a 642 kg L-1). Ortegón et al. (2009) concluyeron que la variedad Monty tuvo un PH superior (660 g L-1) al registrado en los cultivares Snoop, Karoo y Hyola 401 (medias de 644, 624 y 613 g L-1, respectivamente). En teoría se esperaba una reducción lineal en el PH al incrementarse la DS, pero el valor de R2 de 0.17 entre ambas variables indica que la relación entre éstas no fue lineal ni significativa (Cuadro 8).

Rendimiento de grano (RTO). Los promedios aritméticos fluctuaron de 1397 a 2664 kg ha-1. El mejor tratamiento correspondió a la densidad de siembra (DS) de 3 kg ha-1 (2664 kg ha-1) y éste superó significativamente a las otras densidades. Ortegón et al. (2006) evaluaron 18 genotipos de canola en Rio Bravo, Tam., y concluyeron que el cultivar Monty produjo 1417 kg ha-1, rendimiento de grano

estadísticamente inferior al registrado en la mejor variedad (Hyola 401; 1827 kg ha-1). Castro (2009) evaluó 12 genotipos de canola en Metepec, Estado de México y detectó que el RTO varío de 2188 a 3222 kg ha-1; el cultivar P2-C1-145 produjo el mayor RTO pero no superó estadísticamente al registrado en los cultivares Monty y Hyola 401 (2890 y 2944 kg ha-1, respectivamente). Estos resultados fueron confirmados con el análisis de regresión, debido a que el valor de R2 entre DS y RTO fue de 0.94, es decir, sólo 6% de la variación del modelo se atribuyó a desviaciones de regresión; por cada incremento en DS en 1 kg ha-1 hubo una disminución en el RTO de 169.8 kg ha-1 (Cuadro 8). Henderson et al. (2000) concluyeron que las altas densidades de población en amaranto (Amaranthus hypochondriacus) incrementaron la producción de semilla y disminuyeron el acame, debido quizás a una reducción en el peso de grano por planta. Vázquez (2003) y Canales (2004) mencionaron que en girasol un aumento en la densidad de siembra también aumentó el rendimiento de semilla por hectárea y la altura de las plantas.

Cuadro 8. Comparación de medias entre tratamientos para peso de 1000 semillas (P1000S), peso hectolítrico del grano (PH) y rendimiento de grano (RTO), en Metepec, México. Verano 2007.

Densidades de siembra (DS, kg ha-1) P1000S (g) PH (g L-1) RTO (kg ha-1 )

3 4.61 abx 658.75 ab 2664.79 a

4 4.62 a 672.50 a 2350.21 b

5 4.40 abc 628.75 cd 2002.01 c

6 4.41 abc 642.50 bc 1905.13 c

7 4.19 bc 666.25 a 1822.48 cd

8 4.18 c 617.50 d 1597.44 de

9 4.16 c 665.25 a 1528.86 e

10 4.06 c 620.00 d 1397.93 e

DMSH (Tukey, p=0.05) 0.424 17.64 255.07

R2 entre DS con P1000s, con PH o con RTO 0.92** 0.17 0.94**

Valor de a 4.87 671.00 3012.9

Valor de b -0.083 -3.78 -169.8

xValores con la misma letra dentro de cada columna son estadísticamente iguales.

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Díaz et al., 2011. Rendimiento de canola

Análisis de varianza para los componentes del rendimiento

En el Cuadro 9 se detectaron diferencias altamente significativas entre tratamientos (P < 0.01) para todas las variables fenológicas. Estos resultados indican que el incremento en la densidad de siembra es factor clave para originar variabilidad fenotípica en canola en la altura de la planta (AP), en el diámetro del tallo (DT), en el número de ramas por planta (NRP), en el número de silicuas

Comparación de medias para los componentes del rendimiento

Altura de planta (AP). Las plantas sembradas a una densidad de 10 kg ha-1 tuvieron el mayor promedio (162.67 cm), pero éstas sólo se diferenciaron estadísticamente de los establecidos en los tratamientos con 3, 6 y 8 kg ha-1 (medias de 147.75, 147.35 y 147.55 cm, respectivamente). Ortegón et al. (2006) evaluó 18 cultivares de canola en Rio Bravo, Tam., y concluyeron que sus AP variaron de 99 (‘Monty’) a 134 cm (‘IMC 207’). La regresión lineal entre la densidad de siembra (DS) y AP no fue significativa (R2 de 0.21) y por cada incremento en DP en 1 kg ha-1 hubo una disminución en AP de sólo 1.01 cm (Cuadro 10).

Diámetro del tallo (DT). En la densidad de 3 kg ha-1 se registró el mayor diámetro del tallo (1.62 cm) y éste y el resto de los tratamientos fueron estadísticamente

diferentes (medias de 0.70 a 1.30 cm). Ortegón et al. (2006) midieron, en comparación a las densidades bajas que fueron consideradas en el presente estudio, DT similares en el cultivar Monty (1.55 cm). La reducción lineal y significativa que se detectó entre densidad de siembra (DS) y DT se debe a que el valor de R2 fue de 0.87; por cada incremento en DP de 1.0 kg ha-1 se redujo el DT en 0.124 cm (Cuadro 10). Escalante et al. (2008) concluyeron que a mayor densidad de siembra mayor altura en las plantas, ya que la competencia por luz favorece el crecimiento pero reduce el grosor del tallo.

Número de ramas por planta (NRP). El mayor NRP se registró en la densidad de siembra (DS) de 3 kg ha-1 (6.25 ramas), que difirió estadísticamente de los tratamientos con 5, 8, 9 y 10 kg ha-1. Ortegón et al. (2007) registraron 5.2 ramas por planta en el cultivar Monty. La regresión entre DS y NRP fue lineal y significativa (R2 de 0.80) y por cada incremento en DP en 1 kg ha-1 el NRP disminuyó

Cuadro 9. Valores de F para altura de planta (AP), diámetro del tallo (DT), número de ramas por planta (NRP), número de silicuas por planta (NSP), número de semillas por silicua (NSS) y longitud de silicua (LS), en Metepec, México. Verano 2007.

Fuente de variación GL AP DT (cm) NRP NSP NSS LS (cm)

Tratamientos 7 3.37** 61.72** 5.48** 78.85** 43.17** 83.42**

Repeticiones 3 4.19* 1.60 ns 1.00ns 1.43ns 1.28ns 4.12*

Error experimental 21

C. V. (%) 3.83 8.37 12.31 7.93 4.08 1.80

* Significativo al 0.05; ** Altamente significativo al 0.01; ns no significativo.

por planta (NSP), en el número de semillas por silicua (NSS) y en la longitud de la silicua (LS). Ortegón et al. (2006) y Castro (2009) también detectaron variabilidad fenotípica significativa en éste y otro grupo de variables agronómicas cuando ellos evaluaron 18 ó 12 cultivares de canola en Rio Bravo, Tamaulipas, ó en Metepec, Estado de México, respectivamente. Los efectos entre repeticiones sólo fueron significativos para AP y LS. Los coeficientes de variación se ubicaron en el intervalo de 1.8 (LS) y 12.3% (NRP).

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en 0.258 (Cuadro 10). Ortegón (2003) mencionó que la baja densidad de población contribuyó a un incremento en el número de ramas por planta, resultados que confirman la menor eficiencia de la canola para producir ramificaciones en altas densidades de población.

Número de silicuas por planta (NSP). El NSP es un indicativo importante del potencial de rendimiento de grano. En la densidad de siembra (DS) de 3 kg ha-1 se registró el mayor promedio aritmético (368.75 silicuas) y esta densidad fue estadísticamente superior al resto de los tratamientos. Ortegón et al. (2007) y Ortegón et al. (2009) observaron que el cultivar Monty produjo 262 y 272 silicuas por planta, respectivamente, pero Ortegón et al. (2006) registraron un promedio aritmético hasta de 372 para esta variable. La regresión entre DP y NSP fue lineal y significativa (R2 de 0.96); al incrementarse la DP en 1 kg ha-1 se detectó una disminución en el NSP de 33.5 silicuas (Cuadro 10). Ortegón (2003) señaló que en parcelas con mayor densidad de plantas disminuye significativamente el número de silícuas y de ramas por planta. Andagi et al. (2003) indicaron que

el mayor número de silícuas estuvo relacionado con el mayor número de ramas primarias y secundarias, por lo que el número de silícuas es el componente del rendimiento de grano más importante en el cultivo de canola.

Número de semillas por silicua (NSS). Otro componente primario del rendimiento de grano en canola es el NSS. Las mejores densidades de siembra (DS) fueron 3, 4 y 5 kg ha-1, con medias de 31.0, 30.5 y 28.5 semillas, pero sólo la primera difirió estadísticamente de 6, 7, 8, 9 y 10 kg ha-1 (entre 10.75 y 27.25 semillas). Ortegón et al. (2006) registraron 26 semillas por silicua en el cultivar “Monty”. El valor de R2 de 0.97 indica que la regresión entre DP y NSS fue lineal y altamente significativa; por cada incremento en DP en 1 kg ha-1 se estimó una reducción en NSS de 1.43 semillas (Cuadro 10).

Longitud de la silicua (LS). La longitud de silicua y la cantidad de semillas que ésta contiene están relacionadas estrechamente con el rendimiento de grano (Cuadro 10).

Cuadro 10. Comparación de medias entre densidades de siembra (DS) para altura de planta (AP), diámetro del tallo (DT), número de ramas por planta (NRP), número de silícuas por planta (NSP), número de semillas por silícua (NSS) y longitud de silicua (LS), en Metepec, México. Verano 2007.

Densidades de siembra (kg ha-1) AP (cm) DT (cm) NRP NSP NSS LS (cm)

3 147.35 b 1.62 a 6.25 a 368.75 a 31.00 a 10.08 a

4 156.90 ab 1.30 b 5.50 ab 316.50 b 30.50 a 9.73 ab

5 150.57 ab 1.08 c 4.75 b 303.25 b 28.50 ab 9.58 bc

6 147.72 b 1.00 cd 5.00 ab 234.25 c 27.25 bc 9.23 c

7 152.85 ab 0.78 e 5.00 ab 199.00 cd 25.75 c 8.68 d

8 147.55 b 0.81 de 4.25 b 181.75 d 25.25 cd 8.54 de

9 153.30 ab 0.70 e 4.25 b 172.50 d 23.00 de 8.27 ef

10 162.67 a 0.70 e 4.25 b 126.00 e 20.75 e 8.07 f

DMSH(Tukey, p=0.05). 13.851 0.197 1.432 44.75 2.565 0.383

R2 entre DS y cada variable 0.21 ns 0.87** 0.80** 0.96** 0.97** 0.98**

Valor de a 145.76 1.81 6.59 455.88 35.82 10.96

Valor de b 1.01 -0.124 -0.258 -33.56 -1.434 -0.298

Valores con la misma letra dentro de cada columna son estadísticamente iguales.

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Díaz et al., 2011. Rendimiento de canola

En 3.0 kg ha-1 se registró la mayor LS (10.08 cm) pero ésta y la de 4 kg ha-1 fueron iguales estadísticamente y la primera superó significativamente a los seis tratamientos restantes. En Ortegón et al. (2006) y Ortegón et al. (2009) se registró una menor LS (5.47 y 5.09 cm, respectivamente) en el cultivar Monty. La regresión entre DS y LS fue lineal y altamente significativa (R2 de 0.98); al incrementarse la DS en 1 kg ha-1 se estimó una reducción en la LS de 0.298 cm (Cuadro 10).

Análisis de componentes principales (ACP)

Los componentes principales 1 (78.9%) y 2 (8.21%) explicaron 87% de la variación original, por lo que las correlaciones aproximadas que se pueden observar en el biplot de la Figura 1, entre densidades de siembra (DP), entre variables evaluadas (V) y entre DP con V, según Sánchez (1995) y González et al. (2010), son confiables. La componente principal 1 se explicó principalmente por el peso fresco (PF), por el número de manojos de silicua (MS) y por el peso de éstos últimos (PMS).

La componente principal 2 se asoció principalmente con peso hectolítrico del grano (PH). Otros resultados sobresalientes que se pueden detectar en el biplot es que los mayores pesos frescos y las mayores alturas de las plantas de canola se obtuvieron con 7, 8, 9 y 10 kg ha-1. En el otro extremo del biplot se detectó al resto de las variables agronómicas, las cuales fueron favorecidas fenotípicamente en las densidades de siembra de 3, 4, 5 y 6 t ha-1. Los resultados anteriores indican que para producir mayor cantidad de biomasa por unidad de superficie, para propósitos forrajeros, para mejorar la producción de hortaliza o para la producción de biodisel, deben utilizarse mayores densidades de siembra, mientras que para incrementar el rendimiento de grano, para mejorar la calidad del grano o de la semilla en esta especies deben utilizarse bajas densidades de siembra. El cultivar Monty debe sembrarse a densidades de 3, 4 ó 5 kg ha-1, debido a que el incremento en el número de plantas por unidad de superficie intensificó la competencia por luz, espacio, agua y nutrimentos y redujo significativamente el RTO y sus principales componentes primarios y secundarios del RTO.

Figura 1. Interrelaciones entre ocho densidades de siembra (números del 3 al 10) y 16 variables agronómicas (con letra) registradas en la variedad de canola ‘Monty’.

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Los análisis de correlación, de regresión y de componentes principales (ACP) generaron información similar; quizás porque el coeficiente de correlación (r) es la raíz cuadrada del coeficiente de determinación (R2) (Gomez y Gomez, 1984) y el ACP se hizo con base en la estructura de una matriz de varianzas y correlaciones, donde los datos estandarizados y su estructura de correlaciones fue sometida a la técnica de descomposición de valores singulares (Sánchez, 1995).

CONCLUSIONES

El incremento en la densidad de siembra en canola de 3 a 10 kg ha-1 originó variabilidad fenotípica significativa en el rendimiento de grano y en todos sus componentes primarios y secundarios, excepto en peso de manojos de corazones. Con 3 kg ha-1 se obtuvieron los mayores promedios aritméticos para rendimiento de grano (2666 kg ha-1), diámetro del tallo (1.62 cm), número de ramas por planta (6.25), número de semillas por planta (368.75), número de semillas por silicua (31) y longitud de silicua (10.08 cm). En 4 kg ha-1 se obtuvieron los mayores promedios para el número de manojos de silicua (32), rendimiento total de silicua para pájaros (24305 kg ha-1), peso de 1000 semillas (4.62 g) y peso hectolítrico del grano (672.5 kg L-1). En la densidad de siembra de 5 kg ha -1 se registró el mayor número de corazones cosechados (15.50) y el mayor rendimiento total de corazones (4032 kg ha-1). Con 7 kg ha-1 se registraron los mayores pesos fresco (46.87 t ha-1) y seco (14.06 t ha-1) y para la altura de las plantas se observó el mismo efecto con 10 kg ha-1 (162.67 cm). El cultivar Monty debe sembrarse preferentemente en densidades de 3, 4 ó 5 kg ha-1, debido a que el incremento en el número de plantas por unidad de superficie intensificó la competencia entre éstas por luz, espacio, agua y nutrientes y redujo significativamente al RTO y afectó negativamente a los principales componentes primarios y secundarios del RTO.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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RENTABILIDAD Y COSTOS DE PRODUCCIÓN EN GRANJAS PORCINAS PRODUCTORAS DE LECHÓN, EN EL CENTRO DEL ESTADO DE MÉXICO

PROFITABILITY AND PRODUCTION COSTS PRODUCING IN PIG FARMS PIGLETS, IN THE CENTER OF STATE OF MEXICO

Bobadilla-Soto, Encarnación Ernesto1*; Rouco-Yáñez, Antonio2; García-Gracía, José3; Martínez-Castañeda, Francisco Ernesto1

Ciencias Agrícolas Informa, 201120(2): 87-95

Recibido: 27 de octubre de 2011 Aceptado: 8 de diciembre de 2011

1 Instituto de Ciencias Agropecuarias y Rurales. Universidad Autónoma del Estado de México. Ignacio López Rayón Sur 510. Col Cuauhtemoc. Toluca, Estado de México. 50130. 2 Facultad de Veterinaria, Universidad de Murcia. Campus Espinardo. Murcia, España. 30100. 3Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario. Mayor, s/n. La Alberca, Murcia, España. 30150. *Autor para correspondencia: [email protected]

RESUMEN

El objetivo de este trabajo fue evaluar la rentabilidad y los costos de producción de tres granjas porcícola de pequeños empresarios productores de lechones en el municipio de Xonacatlán, Estado de México en 2010. El tamaño de las granjas fue de 16, 20 y 25 cerdas reproductoras. El costo de producción de lechón destetado fue de $ 407.7, $ 451.2 y $ 488.7 con una ganancia de $ 192.3, $ 148.7 y $ 111.3 para el productor y una relación B/C fue 1.47, 1.33 y 1.23%. El costo variable de producción de lechón comercial que más incide es la alimentación fue de 86%, seguida de los costos de oportunidad 5.2%, los medicamentos que representan entre 3.9 y 4.2% y la amortización de los reproductores fue entre 3.0 y 5.3%.

Palabras clave: Destete, ganancia, porcicultura, productividad.

SUMMARY

The objective of this study was to evaluate the profitability and production costs of three small-scale piglet systems in the municipality of Xonacatlán, State of Mexico in 2010. Farm size was 16, 20 and 25 sows. Piglet production cost was the $ 407.7, $451.2 y $ 488.7, Mexican pesos with a profitability of $192.3, $ 148.7 y $ 111.3 and a Cost/Benefit ratio of 1.47, 1.33 and 1.23. The most important variable cost was feeding cost with 86%, followed by opportunity cost which represents 5.2%, medicines with a

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Bobadilla-Soto et al., 2011. Producción de lechón

mexicana (Bobadilla et al., 2010), el crecimiento desmedido de la población y la presión de la mancha urbana (Bobadilla-Soto et al., 2009). La disminución en el número de explotaciones agropecuarias se produce por inviabilidad económica, más que por problemas de liquidez, la insolvencia financiera es un problema esporádico, mientras que la inviabilidad es un fenómeno más persistente y extendido más en las explotaciones agrícolas. Las explotaciones evitan la quiebra financiera vendiendo activos, reduciendo inventarios y no haciendo inversiones (Argilés, 2007).

Los sistemas de producción de porcino de pequeña escala, se han mantenido gracias a una compleja red de interacciones sociales y económicas que han permitido su permanencia (Ramírez-Flores y Martínez-Castañeda, 2010), entre las que destacan el acceso a mercados locales (Batres-Márquez et al., 2006) y las estructuras económicas que ofrecen los núcleos poblados (Torres-Lima y Rodríguez-Sánchez, 2008). De acuerdo con la clasificación de Trujillo y Flores (1988), en la porcicultura se identifican cinco tipos de producción a) granjas productoras de pie de cría; b) de ciclo completo, c) productoras de lechones, d) engordadoras y e) granjas tipo familiar, cada una de ellas con características y necesidades claramente identificadas.

La determinación de los costos de producción en granjas porcinas es una herramienta muy práctica y fácil de utilizarla en cualquier actividad productiva. Las explotaciones de producción de lechones tienen por objetivo obtener el máximo número de lechones destetados por cerda al año. Uno de los factores técnicos a considerar para el análisis económico de las explotaciones porcinas es la prolificidad de las cerdas, este factor depende básicamente de las razas porcinas maternas y paternas que se utilizan en la explotación. De los costos de producción depende el éxito o fracaso de una granja porcícola. Por lo anterior, el objetivo de este trabajo fue evaluar la rentabilidad y los costos de producción de tres granjas porcícola de pequeños empresarios productores de lechones.

range of 3.9 to 4.2% and breeding amortization with 3 to 5.3%.

Key words: income, pig culture, productivity, weaning.

INTRODUCCIÓN

En una economía abierta como la mexicana, con más de una decena de tratados y acuerdos comerciales con países de tres continentes, las actividades económicas están sujetas al entorno internacional y la porcicultura mexicana no es la excepción. Esta se enfrenta a un mercado internacional que presenta tres características principales: a) productores altamente eficientes, que les permite reducir sus costos de una forma dinámica; b) productores con altos niveles de apoyos y subsidios directos e indirectos, que provocan excedentes artificiales de producción, no son consumidos en los países de origen y que saturan los mercados internacionales trayendo consigo el desplome de los precios y c) mercados fuertemente protegidos a las importaciones (Nava et al., 2009). En México el sector porcícola tecnificado es competitivo tanto a nivel nacional como internacional. La porcicultura semitecnificada y de pequeña escala están totalmente desprotegidos de las importaciones de carne de cerdo, los apoyos y subsidios para este sector son pocos o nulos y, enfrentan a una competencia desigual.

La porcicultura mexicana en 2009 produjo 1.2 millones de toneladas de carne en canal, el Estado de México, aportó 20 mil toneladas que correspondió el 1.7% de la producción nacional (SIAP-SAGARPA, 2011). La producción de carne de cerdo en el Estado de México en los últimos 30 años ha tenido una tasa de decremento anual de -5%. La pérdida acumulada asciende a casi 70 mil toneladas, y destacan como principales factores involucrados en esta situación, las crisis recurrentes en la década de los ochentas y noventas; la falta de ajuste de los porcicultores a las nuevas condiciones del mercado; la apertura comercial que modificó negativamente la porcicultura

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MATERIALES Y MÉTODOS

Los datos fueron obtenidos para el año 2010 de tres granjas productoras de lechones. El estudio se realizó en el municipio de Xonacatlán, Estado de México. Aproximadamente se encuentra a 40 km de la Ciudad de México y a 15 km de la Ciudad de Toluca. Los animales que se utilizaron fueron PIG, Camboro 22, 23 y 29 y cruzas de Yorshare-Landrace.

Costos de producción

Los costos se determinaron modificando la propuesta por Rouco y Muñoz (2006), quienes realizaron para explotaciones “Tipo” en España. Para ello se utilizaron los datos contables de la explotación y, el valor del semental en caso de aplicar. Con la fórmula general de costos se planteó:

C = F + VC: son los costos totales; F: son los costos fijos o de

estructura; V: son los costos variables o de ejercicio.En base a la formula anterior, la función de costos

quedó:Costos fijos: Las partidas contables hasta llegar a la

unidad de producción donde el nivel de producción no tendrá ninguna trascendencia. Para el caso del lechón comercial se desglosó de la siguiente manera:

F = L + S + Co + R + A +CO + OtDonde:L: costos laborales; S: costos de suministros; Co:

costos de combustible y energía; R: costos de reparación y mantenimiento; A: costos de amortización de activos fijos; CO: costos de oportunidad; F: costos financieros; Ot: otros costos de menor cuantía.

Costos variables: Las partidas contables que dependen directamente del nivel de producción y para el lechón comercial se desglosaran de la siguiente manera:

V = ((AR + AM + M + AMV + AV + AL + T + CO)/(TOTCER*W))*z

Donde:

AR: costo de amortización de la reproductora; AM: costo de alimentación de madres; M: costos de medicamentos; AMV: costo de alimentación del verraco; AV: costo de amortización del verraco; AL: costo de alimentación de lechones; CO: costo de oportunidad

TOTCER: número total de cerdas; W: es el factor de ponderación en virtud del cual se va a referir a todos los costos variables en esa fase a la unidad de producción del lechón comercial; z: cantidad de lechones destetados

La amortización de reproductores se calculó de la siguiente forma:

AR = (PH – (PD – (1 - MORR))) / (PARM/PAR)-REP

PH: precio de compra de la cerda; PD: precio de venta del desecho; MORR: mortalidad de las reproductoras expresado en porcentaje; PARM: número de partos medios de la cerda de las reproductoras; PAR: número de partos por cerda al año; REP: reposición.

El número de partos medios por reproductora se calcula en cualquier momento del ciclo reproductivo

PARM = ∑(CER * n)/TOTCERDonde:CER: el número de cerdas dependiendo el número

de partos; n: número de partos.Así mismo se consideró la tasa de reposición como

factor técnico determinante en el número de partos medios, la expresión matemática es la siguiente:

REP = PAR / PARMA su vez, el factor de ponderación será igual a:w = PAR * VIV * (1 – MOR) * (1 – MORT)PAR: número de partos cerda al año; VIV: lechones

vivos por parto; MOR: mortalidad en lactancia expresada en porcentaje; MORT: mortalidad en transición destete a lechón comercial, expresado en porcentaje.

La amortización del verraco es algo que se debe imputar al sistema productivo ya que forma parte del mismo. Para este caso se utilizará una amortización lineal y se aplica una amortización uniforme a lo largo de todos los años de la vida útil del verraco:

AV = ((CIV - (PVD – (1 – MORV)))/VU) * NVAV: amortización del verraco; CIV: costo inicial

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Bobadilla-Soto et al., 2011. Producción de lechón

del verraco; PVD: precio de venta del verraco de desecho; MORV: mortalidad de verracos expresado en porcentaje; VU: vida útil expresada en años productivos; NV: número de verracos

Cálculo del punto muerto o umbral de rentabilidad en función al número de lechones

Iz = Cz; Iz: ingreso por el precio del lechón; Cz = F + Vz

Ganancia neta:Ganancia neta = Ingresos – costo totales Relación Beneficio/Costo (B/C)Para la relación beneficio costo, se determinó la

relación entre los beneficios y costos totales, descontados a futuro. La expresión matemática es:

Donde: Bt= Beneficios en cada periodo del proyecto; Ct=

Costo en cada periodo del proyecto; r = la tasa de descuento; r= Tasa de actualización; t= Tiempo en años; (1+r)-t= Factor de actualización.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La estructura contable expresada en términos absolutos se muestra en la Cuadro 1. En los tres casos el costo de la reproductora fue de $3500, el costo del semental fue de $8000 para el productor 1 (P1), $12000 para el productor 2 (P2) y $15000 para el productor 3 (P3). El costo de alimentación es el rubro más alto y estuvo en función al número de cerdas y de lechones nacidos y destetados, todos los costos incluyen el correspondiente costo de oportunidad, calculado como uso alternativo del capital de la explotación en cuentas bancarias de ahorro sin riesgo. El interés que se le aplicó fue del 5.4% en función de la tasa de interés que pagan los bancos.

( )

( )t

t

rCtrBt

CB

+

+=

1

1

Cuadro 1. Datos productivos y estructura de los costos de producción de lechón en pesos ($).

Concepto P1 P2 P3

Censo actual de madres (inventario) 16 20 25

Número de partos/cerda/año 2.44 2.37 2.35

Número de lechones destetados por parto 10 9 10

Número total de lechones destetados al año 390 426 587

Costo de la reproductora 3500 3500 3500

Precio medio del desvieje 1500 1500 1500

Costo del semental 8000 12000 15000

Precio de venta del verraco de desecho 2000 2000 2500

Costo de alimento de reproductoras 93583.3 122961.8 153006.1

Costo total de alimento de lechones 4684.8 3566.4 4018.5

Costo total de alimento de sementales 2920 2920 5840

Costo total de medicamentos y otros 4880 5925 7343.7

Costo laborales en transición 36400 36400 52000

Consumo de suministros y combustible 3120 5520 10920

Amortización total 706.8 781.2 532.8

Precio de venta por lechón 600 600 600

Fuente: Elaboración propia con datos de campo

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El productor 1 tuvo el mayor número de partos por cerda al año (2.44) con respecto a los otros dos productores, porque el periodo de lactancia que tiene en su sistema productivo es de 21 días y de 28 días para los dos productores restantes. Evidencia de este efecto son los datos reportados por Martínez-Castañeda et al. (2003) donde con lactancias de 42 días promedio el número de partos de las granjas estudiadas fue de 1.9. En cuanto al número de lechones destetados por parto, el productor 1 y 3 destetan en promedio 10 lechones (24.4 y 23.5 lechones/cerda/año), y el productor 2 desteta 9 dando un promedio de 21.3 lechones/cerda/año. Estudios realizados en unidades de producción similares reportan valores de 7.02 (Mota et al., 2002); 7.08 (Martínez-Castañeda et al., 2003:103); 8.43 (Enríquez, 2010); 8.61 (Martínez y Fonseca, 2011); y 8.09 (Santos, 2011).

En 2007 los cerdos destetados por cerda al año en países europeos como Alemania, Francia, Dinamarca y España fueron 22.4, 24.5, 26.4 y 23.4 (Mateos, 2009), datos similares a los obtenidos en esta investigación, con lo que se puede deducir que con mejores indicadores técnicos se incrementa el ingreso total y representa el mejor medio para ser competitivos (De Caro, 2004). La tasa de parición, la cantidad de partos por cerda al año y el número de lechones destetados, son indicadores zootécnicos relacionados con la eficiencia productiva que reflejan en forma directa el efecto de la productividad sobre el beneficio económico de la empresa porcina (Di Pietre et al., 2000).

En la mayoría de las explotaciones porcinas de traspatio la mano de obra familiar no tiene una remuneración regular determinada, en consecuencia Sabata (2008), propone que se haga una estimación en términos de los costos de oportunidad, el valor a aplicar será el costo de oportunidad por dedicarse a dicha actividad. En este trabajo se le aplicó a cada productor 700 pesos semanales como sueldo, debido que la porcicultura es su actividad principal y ellos no contemplan su mano de obra.

En el sector porcino, la amortización en función del uso, se aplicará a las cerdas reproductoras y los verracos. La amortización de las cerdas reproductoras depende del número de partos. Por un lado la productividad de la cerda (número de lechones nacidos vivos por parto) disminuye a partir del sexto parto (De Andres et al., 2010); y por otro lado, el impacto financiero que se tiene en la paridad de la cerda, donde se alcanza el cien por ciento del valor actual neto a un promedio de 3.26 partos, equivalente a cerdas de 6 a 7 partos por vida (Stalder et al., 2003). La amortización de los verracos tiene serias dificultades de aplicación en la práctica, ya que es difícil predecir el número de inseminaciones o montas o inclusive lechones producidos, se realiza en función de la vida útil con una amortización constante (Sabata, 2008).

La amortización de las cerdas representó entre 0.9 a 1.3%, el porcentaje disminuye al ir incrementando el número de reproductoras. El porcentaje que representó la amortización de los sementales se vio afectada por el costo de adquisición ($8000, $12000 y $15000 pesos, respectivamente), además el productor 3 tiene dos sementales por lo cual el costo de amortización es mayor. En este trabajo la amortización se realizó por la vida útil del semental y se calculó en tres años.

Los costos de producción más elevados y, por lo tanto, con más importancia económica fue la alimentación (86%), los medicamentos (3.9 a 4.2%), la amortización de los reproductores fue entre 3.0 y 5.3% (Cuadro 2). En la porcicultura, como en otras actividades pecuarias, el insumo más importante para la producción es el alimento, trabajos realizados en producción de cerdo en ciclo completo el costo de alimentación lo ubicaron entre 65 y 95% (Magaña-Magaña et al., 2002; García et al., 2005; Hernández-Martínez et al., 2008; Martínez y Fonseca, 2011). En este caso 86% de los costos de producción correspondieron al costo total de alimentación (cerdas, sementales y lechones), haciendo un desglosé del costo de alimentación, 95% de esta cantidad correspondió a las madres, 2.7% a los lechones, el restante fue para los sementales.

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Bobadilla-Soto et al., 2011. Producción de lechón

El costo de oportunidad que se le aplicó fue el que paga la banca comercial (5.4% anual) y representó el 5.2% de los costos de producción. El cálculo del costo de oportunidad se puede calcular con el tipo de interés medio de lo que pagan una entidad crediticia (Rouco y Muñoz, 2005); para García y García (2010), se debe considerar en función del interés medio de lo que pagan una entidad crediticia y la inflación correspondiente al año del ejercicio.

El costo de producción de lechón destetado para los productores fueron de 407.7, 451.2 y 488.7 pesos mexicanos, obteniendo una ganancia de 192.3, 148.7 y 111.3 pesos mexicanos por lechón vendido para el productor 1, 2 y 3. En cuanto a la ganancia neta el productor 1 es que tiene mayor ganancia con menor cerdas (16), el costo marginal fue entre $ 299, $ 345

Cuadro 2. Estructura porcentual de los costos de producción

Concepto P1 P2 P3

Amortización de la cerda 1.3 1.0 0.9

Amortización del semental 1.7 2.3 4.4

Alimentación de madres 81.0 83.2 80.5

Alimentación de sementales 2.5 2.0 3.1

Alimentación de lechones 4.1 2.4 2.1

Medicamentos 4.2 4.0 3.9Fuente: elaboración propia con datos de campo.

y $ 326, el punto muerto o umbral de rentabilidad por el número de lechones fue de 141, 177 y 348 y que está en función al número de vientres. En este análisis se indica que los tres casos fueron rentables (Cuadro 3).

Los costos totales (fijos y variables) fueron en función al número del hato reproductor y lechones, esto se debe principalmente a los costos de alimentación como se observa en la Cuadro 2. El mejor criterio para asegurar el correcto cálculo del beneficio es considerar el costo total de la producción, es decir la integración de los gastos más las depreciaciones y el costo de oportunidad del capital, los gastos están relacionados con la eficiencia productiva (De Caro, 2004).

La mayor ganancia neta obtenida fue para el productor 1, lo cual se debió que tiene costos fijos

Cuadro 3. Análisis de costos de producción, ingresos y ganancias por lechón destetado.

Partida ($) P1 P2 P3

Costos fijos 109 106 162

Costos variables 299 346 327

Costo total 408 452 489

Ingreso total 600 600 600

Ganancia neta 192 148 111

Costo marginal 299 346 327

Punto muerto (No. de lechones) 141 177 348

Relación B/C 1.47 1.33 1.23

Fuente: elaboración propia con datos de campo.

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más bajos y tuvo el mejor parámetro productivo 24.4 lechones destetados por cerda al año. Son diversas las variables que afectan a los componentes del resultado económico, ingresos y costos, entre ellas, la eficiencia productiva, tamaño de la unidad y situación de los precios de venta (De Caro, 2004).

El costo de producción de lechón destetado para los productores fueron de $407.7, $451.2 y $488.7 y una ganancia de $192.3, $148.7 y $111.3 por lechón vendido para el productor 1, 2 y 3, tomando en cuenta que el precio en esta región en 2010 fue de 600 pesos mexicanos por lechón. Esto destaca la dificultad de cada productor de crecer por concepto de sus estructuras económicas. Una de las principales implicaciones de estos resultados y de los trabajos realizados en otras estructuras económicas de las granjas, hacen difícil desplazar los costos a la baja. En trabajos realizados por Martínez y Fonseca (2011), donde no se considera el costo de oportunidad de la mano de obra, se reportan costos de producción de lechón destetado de $266 pero con diferencias en cuanto a los resultados técnicos con respecto a este estudio.

El punto muerto o umbral rentabilidad fue 141, 177 y 348 lechones, para este estudio las tres granjas son rentables porque producen por arriba del umbral de rentabilidad (390, 426 y 587). La rentabilidad de las granjas porcinas pueden ser rentables o no de un año a otro, por varios factores entre ellos la entrada de carne de cerdo de otros países, debido a la economía abierta que tiene México y a los escasos o nulos apoyos que tiene la producción de pequeña escala productoras de lechones y el encarecimiento de los insumos principalmente el alimento.

La relación B/C es una relación entre los costos de producción y la ganancia, fue el productor 1 el que tuvo mejor relación B/C de 1.47%, y el productor 3 fue el que tuvo la relación más baja con 1.23%, esto quiere decir que por cada peso invertido los productores está ganando 47, 33 y 23 centavos respectivamente. La relación B/C reportada por Fonseca y Martínez (2011) es de 2.11%, evidencia de las diferencias estructurales tanto técnicas como económicas.

CONCLUSIONES

Los resultados obtenidos en este trabajo con la aplicación de esta metodología de análisis de costos de producción se muestra como una herramienta para el diagnóstico zootécnico y económico de las granjas estudiadas. El costo de producción de lechón destetado fue de $407.7, $451.2 y $488.7 y una ganancia neta de $192.3, $148.7 y$ 111.3, la relación B/C fue 1.47, 1.33 y 1.23% para el productor 1, 2 y 3. Los ingresos totales están relacionados con el número de lechones destetados al año donde el productor 3 vendió 161 lechones más que el productor 2 y 197 más que el productor 1; y el productor 2 vendió 36 más que el productor 1. Sin embargo, dada la estructura de costos en este estudio el productor 1 obtuvo los mejores beneficios seguidos del productor 3 y finalmente el productor 2.

AGRADECIMIENTOS

A los productores por su apoyo a la elaboración de este trabajo. Al proyecto CONACyT Ciencia Básica 83467.

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RESUMEN

Con el objetivo de analizar los canales y márgenes de comercialización de la caña de azúcar (Saccharum officinarum) para fruta, se realizó una investigación de agosto de 2010 a enero de 2011, con datos provenientes de 15 productores seleccionados por intención en el sur del Estado de México, específicamente de la zona productora más importante de esta fruta, que fue el municipio de Temascaltepec. Se utilizó el método de determinación de canales, agentes y estimación de márgenes de comercialización de acuerdo al grado de participación en el proceso hasta el consumidor final. Los resultados indicaron que más del 90% de la producción se comercializa a través del canal:

LA COMERCIALIZACIÓN DE LA CAÑA DE AZÚCAR PARA FRUTA (Saccharum officinarum) DEL SUR DEL ESTADO DE MÉXICO

COMMERCIALIZATION OF SUGARCANE (Saccharum officinarum) FRUIT NATIVE OF THE SOUTH OF STATE OF MEXICO

Rebollar-Rebollar, Samuel1*; González-Razo, Felipe de Jesús1; Cardoso-Jiménez, Daniel; Hernández-Martínez, Juvencio1

CienCiAs AgríColAs inForMA, 201120(2): 96-103

Recibido: 19 de mayo de 2011 Aceptado: 29 de agosto de 2011

Productor → mayorista de destino (acopiador regional) → detallista → consumidor final. El valor mayor del margen de comercialización se lo apropió el mayorista de destino al obtener 77.1% del precio que pagó el consumidor final equivalente a la unidad vendida. Se concluye que del valor total generado en el proceso de comercialización, el productor y el mayorista de destino obtuvieron la menor y mayor apropiación del margen; sin embargo, con nuevos nichos de mercado, el productor podría ampliar y apropiarse de un mayor margen.

Palabras clave: canales de comercialización, caña de azúcar para fruta, márgenes.

1 Centro Universitario UAEM Temascaltepec-Universidad Autónoma del Estado de México. Km. 67.5, carr. Toluca-Tejupilco. Barrio de Santiago S/N. Temascaltepec, Estado de México. 51300. * Autor responsable: [email protected]

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SUMMARY

With the aim of analyzed the channels and commercialization margins of sugarcane (Saccharum officinarum) for fruit, a research was conducted from August 2010 to January 2011, 15 producers were selected by intention in the southern region of the State of Mexico, were Temascaltepec municipality as the main producing area of this fruit. The method of determination of channels, agents and marketing margins, was used in according to the degree of participation in the process until the final consumer. Results indicated that over 90.0 % of production is sold through the wholesale channel → target producer (regional gatherer) → retailer → consumer. The largest value of the marketing margin was obtained by the wholesaler who got 77.1 % of the final price paid by the consumer equivalent to the unit sold. We conclude that the total value generated in the process of marketing, the producer and wholesaler of destination obtained the lowest and highest of the margin, however, exploring new market niches might help producers in getting greater margin.

Key words: commercialization channels, margins, sugarcane fruit.

INTRODUCCIÓN

En 2009, en México se cultivaron 5.8 millones de hectáreas con cultivos perennes, destacando pastos, café cereza (Coffea arabica L.), caña de azúcar (Saccharum officinarum) y naranja (Citrus aurantium L.). En volumen de producción la caña de azúcar ocupó la primera posición seguida de pastos, alfalfa (Medicago sativa) verde y geranio (Pelargonium crispum) (planta). Para el mismo año, la producción nacional de caña de azúcar se ubicó en 48.8 millones de toneladas. De ese total, 56.6% se obtuvo bajo la modalidad de temporal y 43.4% bajo riego. Los principales productores de este cultivo fueron Veracruz (37.5%), Jalisco (11.5%),

San Luís Potosí (7.6%), Oaxaca (6.6%) y Tamaulipas (5.4%), quienes aportaron 68.6% al volumen total del país. El rendimiento promedio nacional alcanzó 70.4 t ha-1 y el precio medio rural (PMR) de 387.4 $ t-1 (SIAP, 2011).

En el mismo año, el Estado de México contribuyó con 24.7 miles de toneladas, cantidad poco representativa con respecto al total nacional; el rendimiento promedio estatal fue 77.0 t ha-1 y el PMR de $2 077 t-1. Por Distritos de Desarrollo Rural (DDR), la caña de azúcar se cultivó sólo en el VI Coatepec Harinas y en el IV Tejupilco, siendo este último el más importante, al representar 73% del total estatal (SIAP, 2011; SAGARPA, 2011). En el DDR IV Tejupilco, el municipio de Temascaltepec, específicamente, en los pueblos de San Pedro Tenayac, El Salitre de Tenayac, La Finca de Tenayac y Potrero de Tenayac es donde se ubicó la totalidad de la superficie cultivada y producción de caña de azúcar para fruta. En esta zona, la actividad data de más de 50 años, a través de los cuales ha ido retomando cada vez más importancia, en términos de superficie cultivada, debido a cambios favorables en los gustos de demandantes-consumidores del principal mercado comprador, conformado por las ciudades de Toluca, Estado de México y el Distrito Federal.

El cultivo de la caña de azúcar para fruta es de gran importancia, ya que actualmente representa un sostén económico de muchas familias de la región y de creación de empleos temporales, esta actividad ha desplazado por completo los cultivos de maíz (Zea mays), frijol (Phaseoulus vulgaris L.), durazno (Prunus persica L.), aguacate (Persea americana Mill.) y guayaba (Psidium guajava) principalmente, los que se cultivan en suelos con poca vocación e interés por la caña para fruta. En esta región, la caña se cultiva en el ciclo primavera verano y la cosecha se obtiene en el otoño y parte del invierno; periodo en el cual se comercializa por completo, siendo diciembre el mes de mayor venta, debido a las fiestas de diciembre y de año nuevo.

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Los productores de la región, señalan que de los últimos cinco años, a la fecha, los consumidores han modificado sus gustos y preferencias por esta fruta, al preferir la caña completa y con hojas, situación que ha provocado más movilización de transporte hacia la zona de producción, debido principalmente a un aumento en la demanda.

Por lo anterior, surgió el interés de analizar tanto los canales y márgenes de comercialización que ocurren entre los participantes en este mercado, ello con el propósito de obtener indicadores que permitan establecer estrategias para que los productores tengan una mayor apropiación del valor agregado por esta actividad productiva. La hipótesis central de la investigación supone la existencia relativa de pocos intermediarios y que el mayor margen de comercialización se lo apropia el mayorista de destino.

MATERIALES Y MÉTODOS

La investigación se realizó en el municipio de Temascaltepec, Estado de México, que para tales fines se consideró como la región sur de la entidad, región productora de caña de azúcar para fruta, durante agosto de 2010 a enero de 2011. Temascaltepec se localiza ligeramente hacia el suroeste de la Ciudad de Toluca; en las coordenadas geográficas 100° 02’ longitud oeste y 19° 03’ de latitud norte y una altitud de 1740.0 m. Colinda al Norte con los municipios de Valle de Bravo y Amanalco de Becerra, al Sur con Tejupilco, San Simón de Guerrero y Texcaltitlán, al Este con Zinacantepec y Coatepec Harinas y al Oeste con Zacazonapan y Tejupilco. La extensión territorial es 547.5 km2, equivalente a 2.4% del territorio estatal. Con relación al clima, se tienen identificadas dos zonas: la templada subhúmeda, al norte y al este y, la semiárida húmeda, al sur y al oeste, predominando el subhúmedo. La temperatura media anual oscila entre 18° y 22° C. La precipitación pluvial anual va de 800 a 1,600 mm (Borboa, 2008).

Canales de comercialización

Por canal de comercialización se entiende como etapas o rutas por las cuales deben pasar los bienes en el proceso de transferencia entre productor y consumidor final (Caldentey, 1979). Por su parte, un agente de comercialización es toda persona natural o jurídica que, directa o indirectamente, añade alguna utilidad al producto (García et al., 1990).

De acuerdo con Mendoza (1991), Rebollar et al. (2011) y Rebollar et al. (2007), algunos de los agentes que participan en cualquier proceso de comercialización, son: Productor. Es el primer agente participante en el proceso, desde el momento mismo de tomar una decisión en la producción; Acopiador regional. Conocido también como camionero o intermediario-camionero. Es el primer enlace entre el productor y el resto de los intermediarios. Reúne o acopia la producción rural dispersa y la ordena en lotes uniformes; Mayorista. Tiene la función de concentrar la producción y ordenarla en lotes grandes y uniformes que permitan la función formadora del precio y faciliten operaciones masivas y especializadas de almacenamiento, transporte y, en general, de preparación para la etapa siguiente de distribución; Detallistas. Son intermediarios que tienen por función básica el fraccionamiento o división del producto y el suministro al consumidor; Consumidor. Es el último eslabón en el canal de mercadeo.

El margen de comercialización se determinó por la diferencia entre el precio de venta de una unidad de producto por los agentes de comercialización y el pago efectuado en la compra de la cantidad equivalente a la unidad vendida (Caldentey, 1979; García et al., 1990).

En base a lo anterior, se siguió el canal de comercialización de la caña, desde el lugar de producción, la parcela o la finca del productor, hasta el mercado principal (Distrito Federal), para determinar el número de agentes participantes, precios y costos de comercialización a cada nivel de comercialización. En

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el cálculo de márgenes de comercialización, se utilizó información de campo proveniente de 15 productores de caña de azúcar para fruta, seleccionados por

Cuadro 1. Información utilizada para el cálculo de márgenes de comercialización de caña de azúcar.

Concepto Siglas Unidad de medida Valor

Precio de la caña de azúcar en rancho PAR Pesos/rollo 57.2 ± 1.5

Precio de la caña de azúcar en la CEDA-Distrito Federal PACA Pesos/rollo 250.0 ± 0.0

Precio de la caña de azúcar por el consumidor final,en porciones, en el Distrito Federal

PAFP Pesos/rollo 350.0 ± 0.0

intención (Cochran, 1984), de un total de 80 ubicados en la región de estudio. Las variables utilizadas en el cálculo de márgenes se presentan en el Cuadro 1.

Para comparar los precios en cada nivel de comercialización, se calculó el valor equivalente (VE) al productor de caña de azúcar para fruta, considerando como unidad de medida un rollo de 25 cañas producidas en parcela y a la vez, ese mismo rollo pero vendido en porciones por kilogramo al consumidor final.

Para el cálculo de márgenes absolutos (M) y relativos totales (m), se utilizaron las siguientes fórmulas: M = Pc-VE, y m = (M/Pc)*100, mismas que se adecuaron a cada una de las etapas del proceso de comercialización.

Expresiones utilizadas:VE = Valor equivalente pagado al productor de

caña de azúcar para fruta, por la cantidad de producto agrícola que se requiere para producir una unidad de producto final disminuido en el subproducto. Para esta investigación, el término subproducto, debe entenderse como la caña comercializada en porciones; es decir, en pedazos envasados en bolsas de plástico y transparentes, con capacidad de un kilogramo.

Dado que esta fruta se consume, en su totalidad, en estado natural (no pasa por un proceso de transformación), no fue posible la estimación del valor equivalente para las demás etapas, sino que solamente incrementa de precio (por la misma unidad vendida) en función a cada agente participante (utilidad de posesión), además del costo de transporte (utilidad de lugar), hasta que esta fruta llega al consumidor final.

VRC = Valor relativo de la caña de azúcar en rollos de 25 cañas, convertida a kilogramos en la venta de porciones, en el valor total generado por el proceso de venta; VEPF = Valor equivalente del producto final; Pc = Precio que paga el consumidor de caña de azúcar.

Utilizando la nomenclatura anterior, se procedió a efectuar los cálculos siguientes:

a) Cantidad de caña (QC) necesaria para obtener un rollo de caña de azúcar vendido al consumidor final (K): QC = K/ QCF = 25/25 = 1.0 rollo.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

En la región de estudio, la cosecha de caña de azúcar para fruta inicia en octubre de un año y termina en enero del siguiente año. El nivel más alto de producción se registra entre la última semana de noviembre y el mes de diciembre, y corresponde con festividades de fin de año y año nuevo. En este periodo, los consumidores demandan gran cantidad de caña de azúcar para fruta, cuyo consumo, básicamente se realiza en su estado natural o elaboración de la bebida “ponche”.

La comercialización de esta fruta se realiza de la siguiente forma: 100% de la producción que se recolecta de la finca se vende en el mismo sitio,

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Rebollar-Rebollar et al., 2011. Comercialización de caña de azúcar

estableciéndose en este mismo lugar el precio de venta por un rollo de 25 cañas cada uno. Posteriormente, la fruta se transporta en camiones de redilas, tipo Torton, de dos ejes, con capacidad de 12 t. Los compradores son los que acuden al lugar de producción para transportar el producto, principalmente a centrales de abasto de Toluca y Distrito Federal.

De esta manera, la comercialización de la caña inicia desde el momento en que el comprador y vendedor acordaron un precio de venta de caña de azúcar en parcela, e incluye los servicios de comercialización para hacerla llegar desde el lugar de producción hasta el consumidor final. Es importante mencionar que durante la comercialización de la caña, no hubo evidencia de agregación de valor, dado que ningún agente participante, le da a esta fruta alguna transformación (Caldentey, 1991). Por tanto, el producto sólo va incrementando su precio (debido a los costos de comercialización) conforme esta fruta pasa de un agente a otro hasta llegar al consumidor final.

Cuadro 2. Desglose de costos de comercialización de la caña de azúcar para fruta. Agosto 2010-Enero 2011.

Concepto Costo

Corte, conteo y pelado de la caña 6.0 ±1.2 pesos/rollo

Cargar o subir la caña al camión 8.0 ± 0.8 pesos/rollo

Capacidad camión-1: 130 rollos

Costo por cargar un camión 1820.0 ± 8.0 pesos/camión

Transporte: finca-Distrito Federal 25.0 ± 3.0 pesos/rollo

Costo de transporte al Distrito Federal 3250.0 pesos/camión

Gasto en combustible 5.4 ± 0.0 pesos/rollo

Gasto en casetas 2.8 ± 0.0 pesos/rollo

Pago del chofer-viaje redondo 3.8 ± 0.5 pesos/rollo

Descarga en Central de Abastos-Distrito Federal 6.2 ± 0.7 pesos/rollo *

Total 57.2 ± 1.5 pesos/rollo

* Incluye las maniobras de picado o picar una caña en porciones pequeñas para la venta.

Por tanto, transportar o mover un rollo de 25 cañas, en camión, desde la finca del productor, al Distrito Federal, costó, en promedio, $57.2 ± 1.5 /rollo, el ± significa la desviación estándar (Cuadro 2). Cabe señalar que el costo de transporte lo paga el comprador al momento de realizar la compra en parcela; esto es, es el comprador quien contrata personas, de la misma comunidad, necesarias para realizar actividades de corte, pelado, picado, selección, conteo, amarrado de rollos (de 25 cañas) y carga de camiones. Entre algunos riesgos que llegan a ocurrir durante la comercialización, son aquéllos que tienen que ver, principalmente, con seguridad en el camino, esto es, si ocurriese una volcadura del camión, el costo de pasar el producto a otro camión va con cargo al productor, en tanto que los daños de la unidad de transporte los cubre el propietario del mismo. Sin embargo, son situaciones que quedan poco fuera del análisis en cuestión.

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Canales de comercialización

El principal mercado de destino de la caña de azúcar para fruta, producida en Temascaltepec, Estado de México es el Distrito Federal (80%) y en menor participación, la Ciudad de Toluca (20%). Un alto porcentaje de la producción se comercializa en el Distrito Federal, una vez que la capacidad de compra (en volumen) es mayor. Se observó en campo, que del total de la producción, solo 10% se comercializa en la región (Valle de Bravo, Zacazonapan, Temascaltepec, Luvianos, Tejupilco, todos ellos pertenecientes al Estado de México) y el resto se vende en los mercados ya mencionados. De la producción que queda en campo, ésta se comercializa de forma variada; esto es, los compradores acuden con productores para adquirir el producto, o los productores venden en municipios aledaños, en el afán de obtener mayor ganancia por rollo de caña vendido.

Con relación a la comercialización de la caña de azúcar para fruta, esta pasa por diferentes agentes o intermediarios hasta llegar al consumidor final. Así, en la cadena de comercialización, el primer eslabón lo ocupó el productor, quien vendió al consumidor final en parcela, al acopiador local a un precio que osciló entre $57.2 y 65.0 por rollo, diferencia que se explicó principalmente por el periodo de consumo de la fruta; esto es, a medida que se acerca el periodo navideño (posadas) y año nuevo, la caña adquiere un precio mayor, por ser época de mayor demanda. Este canal de comercialización lo representaron 100% de los productores y la participación de éstos en el precio que pagó el consumidor final fue 22.9%, considerando un precio de $250.0/rollo o $10.0/caña en la Central de Abastos (CEDA) del Distrito Federal.

Se observó que en la CEDA, la venta se realiza 20% en picado y 80% en rollo. Así, el ingreso total por venta de un rollo de caña picada fue $250.0. Por tanto, el productor habría participado con 22.9%

del precio con relación al precio final que pagó el consumidor en la CEDA.

El segundo eslabón (agente) de la cadena lo representó el acopiador regional, quien a la vez desempeñó funciones de mayorista de destino en la CEDA, tiene grandes bodegas para almacenar, distribuir y vender la caña, ya sea al consumidor final o en el mercado al menudeo. Este agente de comercialización participó en 100% en las relaciones de compra-venta ocurridas con el productor, es propietario de camiones utilizados en el transporte, a la vez, compró en $57.2/ rollo de caña al productor, incluyendo las maniobras del Cuadro 1, y vendió al detallista y al consumidor final en $140.0 por rollo. Este canal opera en 60% como venta al consumidor final. Desde el punto de vista de la teoría de la comercialización de productos agropecuarios (Caldentey, 1979; Caldentey, 1991), este agente de comercialización, no agrega valor al producto porque no realiza ningún cambio de forma o transformación al producto analizado.

El tercer participante de la cadena fue el detallista. Agente o intermediario de la comercialización, cuya función consistió en adquirir o comprar caña de azúcar al mayorista de destino, a un precio de $140.0 por rollo y vender a su vez dicha fruta en porciones al consumidor final, a un precio (convertido en rollo de cañas) de $250.0 por rollo, la participación de este agente fue en 20%, con relación a la venta al consumidor final.

Finalmente, el último eslabón dentro de la cadena producción-consumo de la caña de azúcar para fruta, lo representó el consumidor final. Este agente en quien recibe todo el efecto del resto de los agentes de mercadeo y paga todos los servicios incurridos, desde que el producto sale de la finca del productor hasta la mesa de consumo. En este proceso, el consumidor pagó $250/rollo de caña bajo esa forma de consumo y el mismo precio bajo consumo de la fruta en porciones. Lo anterior puede apreciarse en la Figura 1.

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Rebollar-Rebollar et al., 2011. Comercialización de caña de azúcar

Márgenes de comercialización

En la comercialización de la caña de azúcar para fruta, el productor, como primer eslabón, fue quien menos se apropió del valor total, respecto al precio que pagó el consumidor final del Distrito Federal por la adquisición de un rollo de 25 cañas; su participación se centró sólo en 22.9%, porcentaje obtenido como el cociente de dividir el precio al que vendió el productor en finca y el precio que pagó el consumidor final en el mercado de destino, por la

Figura 1. Canales de comercialización de la caña de azúcar para fruta, producida en Temascaltepec, Estado de México.

misma unidad comercializada. La diferencia se la quedó el mayorista de destino (77.1%). El mayorista de destino compró la misma unidad de producto al productor de caña en finca, transportó el producto a la CEDA del Distrito Federal y la comercializó en forma de rollo, percibió 71.4% del valor total de la comercialización de dicha fruta, dicho porcentaje se obtuvo por la diferencia de $250.0 - $57.2 y luego dividirlo entre el precio al consumidor final de dicha unidad, que fue $250.0 (Cuadro 3).

Cuadro 3. Márgenes de comercialización de la caña de azúcar para fruta del sur del Estado de México. Agosto 2010-Enero 2011.

Agente Absoluto (pesos/rollo) Relativo %

1. Valor equivalente al productor de caña 57.2 22.9

2. Precio pagado por el mayorista de destino 57.2 22.9

5. Precio pagado por el consumidor final por rollo de cañas 250.0 100.0

6. Precio pagado por el consumidor final por rollo picado 250.0 100.0

7. Margen de comercialización de la caña en rollo (5-1) 192.8 77.1

8. Margen de comercialización del rollo de caña picado (6-1) 292.8 77.1

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Ciencias Agrícolas Informa 20(2): 96-103. Julio-Diciembre 2011

Sin embargo, al considerar que el rollo de caña se vendió al consumidor final en porciones (20% del total comercializado), se tuvo que el productor se apropió del mismo valor en todo el proceso; esto es, al dividir $57.2 entre $250.0, el cociente multiplicado por 100 fue 22.9%, la diferencia se la quedó el detallista.

CONCLUSIONES

Desde la finca del productor, la caña se comercializa y se consume en su estado natural, no se observó la incorporación de algún proceso de transformación. La comercialización de la caña se da, en su mayoría, a través de la venta de rollos de 25 cañas y en porcentaje menor en forma de caña picada. En el primer caso, se observó predominancia del canal: productor → mayorista de destino → consumidor final. Para el segundo caso, el canal de comercialización fue: productor → acopiador regional (mayorista de destino) → detallista → consumidor final. En ambos casos, fue el mayorista de destino quien se apropió del mayor margen generado en toda la cadena de comercialización, seguido del detallista y al último el productor. Finalmente, el precio que recibió el productor por la unidad equivalente de producto en campo, representó menos de una cuarta parte con relación al precio que pagó el consumidor final por la misma unidad de producto.

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LINEAMIENTOS PARA AUTORES Y DICTAMINADORES DE LA REVISTA “CIENCIAS AGRÍCOLAS INFORMA”

Julio de 2011

A) Aspectos generales del texto

• Se recibirán artículos producto de una investigación original, ensayos, notas bibliográficas, o revisiones de libros recién editados, que no hayan sido publicados en otras revistas. Las propuestas de artículos de una investigación tendrán una extensión no mayor a 25 cuartillas, mientras que las notas breves, ensayos, revisiones bibliográficas y de libros tendrán una extensión hasta de diez cuartillas. El trabajo deberá enviarse por correo electrónico a [email protected]

• El escrito deberá estar en letra Times New Roman, tamaño 12 puntos a doble espacio y con número de renglón en el lado izquierdo de la página y tendrá márgenes de 2.5 cm por los cuatro lados.

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• El trabajo escrito llevará una página de presentación donde se escribirán los datos generales del trabajo como son título, nombre completo de los autores (Iniciando por el/los apellido(s), adscripción, sus direcciones, teléfonos y correo electrónico donde se puedan recibir mensajes o intercambiar información. Indicar al autor responsable.

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B) Formato

• Las partes a considerar en el artículo son: TÍTULO, TÍTULO EN INGLÉS, RESUMEN, SUMMARY, INTRODUCCIÓN, MATERIALES Y MÉTODOS, RESULTADOS Y DISCUSIÓN, CONCLUSIONES Y REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS. • TÍTULO. Debe ser preciso y resaltar el aspecto más importante del trabajo. Además de ser breve, no

exceder de 15 palabras. Escrito en mayúsculas a excepción de los nombres científicos. Inmediatamente después del título en español se incluirá su traducción correcta al inglés.

• RESUMEN Y SUMMARY con una extensión no mayor a 300 palabras.

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Lineamientos para autores y dictaminadores de la revista Ciencias Agrícolas Informa

• Palabras clave. Después del RESUMEN o SUMMARY incluir, en orden alfabético, tres o cuatro Palabras

clave o Keys words, según sea el caso y que de preferencia no aparezcan en el título del trabajo.

• INTRODUCCIÓN. Definir el problema de estudio, antecedentes que contextualicen el problema (con las

respectivas referencias bibliográficas que apoyen este apartado), objetivos e hipótesis de trabajo.

• MATERIALES Y MÉTODOS. Consistirá de una breve descripción del lugar y condiciones en donde se realizó

la investigación. También se mencionarán los materiales, equipo, metodologías y procedimientos utilizados

congruentes con los objetivos. Asimismo, se deberán indicar las variables de estudio involucradas, modelo

estadístico utilizado y los análisis de estudio implicados. Sólo en caso de que se utilice una metodología

innovadora, ésta deberá ser descrita con mayor detalle, así como los autores que respaldan la metodología

en cuestión.

• RESULTADOS Y DISCUSIÓN. Presentación e interpretación escrita en forma ordenada, clara, objetiva e

imparcial del fenómeno observado, sin repetición de la información de cuadros y figuras. Comparación

de los resultados del trabajo con relación a lo publicado por otros autores, así como el señalamiento de

posibles causas de las respuestas observadas del fenómeno de estudio, evitando caer en especulaciones de

cualquier tipo. Preferentemente deberán presentarse los resultados en Cuadros y Figuras apegándose a los

lineamientos que más adelante se describen.

• CONCLUSIONES. Deberán ser de manera categórica, breve y precisa enunciando las aportaciones

concretas al conocimiento de acuerdo a los objetivos planteados y apoyados en los resultados obtenidos

en el trabajo.

• REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS. Todas las publicaciones citadas en el artículo deberán enlistarse

alfabéticamente. Evitar consultas de tesis o memorias de congresos sin arbitraje o en corto.

C) Presentación de REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

• Las REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS deberán incluirse en estricto orden alfabético con el apellido paterno

del primer autor. A continuación se citan algunas formas para las referencias bibliográficas (para mayor

información consultar un número reciente de la revista CAI).

En español:

Libro con varios autores

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Libro con dos autores

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Fundación Salvador Sánchez Colín-CICTAMEX. Coatepec Harinas, México. 30 p.

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Ciencias Agrícolas Informa 20(2): 107-113. Julio-Diciembre 2011

Libro con un autor

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Capítulo de libro

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Revista Ciencias AgrícolasI•N•F•O•R•M•A110

Lineamientos para autores y dictaminadores de la revista Ciencias Agrícolas Informa

Fuentes de información electrónica en línea:Mercy A. O., N. S. Lang, F. W. Ewers and S. A. Owens. 2006. Xylem vessel anatomy of sweet cherries grafted onto dwarfing and nondwarfing rootstocks. J. Amer. Soc. Hort. Sci. 131: 577-585. (consultado en http://www.electronic.com/JournalEZ/toc.cfm?code=0420001&lssueSelector=13105&CFID=2188994&CFTOKEN=16427495F6F3-439D-A4BF7749EOFBD4AF, fecha de consulta 09 de noviembre de 2006).Valenzuela, V. H., T. Herrera, M. I. Gaso, E. Pérez-Silva y E. Quintero. 2004. Acumulación de radiactividad de hongos y su relación con roedores en el bosque del Centro Nuclear de México. Rev. Int. Contaminación Amb. 20: 141-146 (consultado en http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=3702401&iCveNum=1699, fecha de consulta 09 de noviembre de 2006).

D) Para los autores

• El proceso de publicación en la revista Ciencias Agrícolas Informa (CAI) iniciará con una revisión de la propuesta por parte del editor principal. Si la decisión es que el artículo es de interés de CAI, el autor responsable recibirá una clave de identificación del manuscrito, para su posterior seguimiento. El artículo será enviado a dos pares académicos de reconocido prestigio en el área del conocimiento correspondiente para su evaluación anónima. El autor responsable recibirá, en un plazo no mayor de dos meses, la comunicación de los comentarios de los revisores a su artículo. El resultado podrá ser: ACEPTADO EN SU FORMA ACTUAL, ACEPTADO CON CORRECCIONES MENORES, CONDICIONADO A CORRECCIONES SUSTANTIVAS, RECHAZADO. Una vez que el autor responsable reciba las sugerencias de los árbitros, tendrá tres semanas para remitir la versión corregida de su trabajo. CIA se reserva el derecho de rechazar los trabajos cuyo autor responsable no cumpla el plazo sugerido.

E) Para los revisores

• Los revisores tendrán un plazo máximo de 30 días hábiles para remitir el dictamen correspondiente mediante un oficio dirigido a la Coordinación Editorial de la Revista y el dictamen por separado sin firma. En el oficio se debe incluir si el dictamen es aceptado en su estado actual, aceptado con correcciones menores, condicionado y sujeto a modificaciones que mejoren su presentación o si es rechazado con la debida argumentación.

F) Anexos

Presentación de cuadros• Los cuadros deben presentarse numerados en forma progresiva (por ejemplo: Cuadro 1, 2, 3, ..., n). Su

colocación será inmediatamente después de haber sido citado. Los cuadros deben presentarse en el formato de “tabla” de Word únicamente (no se aceptarán cuadros hechos con tabulaciones).

• El título de los cuadros deberá colocarse en la parte superior de cada cuadro y escribirse en letra minúscula a excepción de su inicio y de los nombres propios. El mismo procedimiento se seguirá para los encabezados de las columnas o hileras en caso de tratarse de cuadros de doble entrada.

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Ciencias Agrícolas Informa 20(2): 107-113. Julio-Diciembre 2011

• En los cuadros solamente se aceptarán tres líneas principales en forma horizontal, sin líneas verticales. Los números deberán alinearse por el punto. Se sugiere un tamaño de línea de 1.5 puntos para las líneas principales del cuadro y de 0.5 puntos para la línea que divide los títulos del cuadro y los datos del cuadro en si.

Ejemplos de Cuadros

Cuadro 1. Valores de F y su significancia estadística de los análisis de varianza para número de tallos (NT) longitud de tallos(LT), peso fresco de forraje (PFF), peso seco de forraje (PSF), peso seco de tallo (PST) y peso seco de hoja (PSH) en ocho genotipos de triticale evaluados en dos etapas de corte. Ciclo Verano 2005, Toluca, México.

F. V. GL NT LT PFF PSF PST PSH

Bloques 2 0.2 ns 1.6 ns 0.23 ns 0.49 ns 0.3 ns 0.5 ns

Genotipos 7 5.7 ** 6.8 ** 11.36 *** 8.47 *** 15.9 *** 19.5 ***

Etapa de corte 1 19.0 *** 5676.2 *** 16.58 *** 95.84 *** 50.7 *** 3.9 ns

G X E 7 3.2 * 17.0 *** 2.28 ns 10.28 *** 0.1 ns 6.8 ***

C.V. (%) 9.2 2.5 8.57 9.08 15.5 8.2

ns = no significativo. *, **, *** = Significativo al 0.05, 0.01 y 0.001, respectivamente.

Cuadro 2. Valores de F y su significancia estadística de los análisis de varianza para días de crecimiento (DC), número de tallos (NT) longitud de tallos (LT), peso fresco de forraje (PFF), peso seco de forraje (PSF), peso seco de tallo (PST) y peso seco de hoja (PSH) en cinco líneas y dos variedades de triticale, evaluados en la etapa de embuche. Ciclo Verano 2005, Toluca, México.

Cultivar DC NT LT PFF PSF PST† PSH† PSE†

d cm ________ t ha-1 _______ __________ g _________

Bronceada 95 368 ab‡ 122.3 a 43.9 a 10.9 a 28.6 a 7.3 cd 6.6 bc

Concha Lisa 91 396 a 122.4 a 37.7 ab 9.3 ab 22.9 b 7.4 c 5.4 c

Burtons 90 339 ab 105.5 d 36.3 b 8.5 b 23.7 b 7.3 cd 7.2 b

92 316 ab 112.6 bc 38.3 ab 8.4 b 30.3 a 11.0 a 8.8 a

White 88 335 ab 117.6 ab 35.6 b 8.4 b 23.5 b 6.8 cd 6.3 bc

Promedio 91 351 116.1 38.4 9.1 25.8 8.0 6.9

Bonita 81 365 ab 107.5 cd 27.0 c 7.9 bc 19.1 c 6.3 d 6.0 c

Criollo 90 285 b 106.3 cd 23.1 c 6.0 c 21.1 bc 9.4 b 6.6 bc

Promedio 86 325 106.9 25.1 7.0 20.1 7.9 6.3

DMS (0.05) 90 6.6 6.9 2.0 3.4 1.1 1.2

† Peso seco de una muestra de 10 tallos. ‡ Medias con la misma letra dentro de cada columna no difieren significativamente entre sí

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Lineamientos para autores y dictaminadores de la revista Ciencias Agrícolas Informa

Presentación de figuras• Se consideran como Figuras las fotografías, grabados, gráficas, dibujos, mapas, planos de localización y

esquemas que den idea del fenómeno estudiado. Las Figuras no deben ser repetición de los cuadros o del texto y también se numeran como sigue: Figura 1, 2, 3,...,n.

• La colocación de las Figuras será inmediatamente después del texto que las menciona. Su título deberá colocarse al pie de la Figura con letra mayúscula al inicio del párrafo y los nombres propios. La Figura debe explicarse por sí misma para evitar repeticiones en el texto.

• Solo podrán presentarse Figuras en blanco y negro.• Las gráficas deberán enviarse en Excell o Sigmaplot, indicando la versión utilizada. Se recomienda no presentar

gráficas con efectos en tercera dimensión a menos que sea estrictamente necesario o la naturaleza de la gráfica así lo requiera.

Ejemplos de Figuras

Figura 1. Comportamiento promedio de cinco líneas de triticale (LTCL), dos variedades de triticale (VTCL) y una variedad de avena para peso fresco de forraje (a) y peso seco de forraje (b). Las líneas verticales de cada barra indica el error estándar de la media de cada grupo.

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Ciencias Agrícolas Informa 20(2): 107-113. Julio-Diciembre 2011

Figura 2. Producción de materia seca como una función de los días de crecimiento de la planta en etapa de antesis.

Ciencias Agrícolas Informa No. 20(2), es una revista publicada por la Facultad de Ciencias Agrícolas, se terminó de imprimir en el mes de diciembre de 2011, en Editorial CigoMe s.A. de C.v. La edición consta de 500 ejemplares.