-
8/17/2019 El libro en llamas.docx
1/4
El libro en llamas
Carlos Yusti
La historia de la literatura, o para especifcar, del libro como
objeto
curioso de conocimiento/entretenimiento, es el de una
enormehoguera iluminando ese camino arragoso de la intolerancia.
Elcombustible es el temor (y el odio) debido al contenido de
algunoslibros. o obstante (desde !ue ardi" la gran biblioteca de
#lejandr$apasando por los auto de e de la china, de los religiosos
contra losc"dices del nue%o mundo, de los na&is y por las piras
emprendidas porlos dictacto&uelos de terror y sangre !ue ha
padecido Latinoam'rica) ellibro ha llegado hasta nuestros d$as. oy
no los !uemamos, pero loahormamos en un Kindle y en ocasiones los
pasamos por esa r agaluminosa del escáner , !ue es un poco como
!uemarlos desde lamet ora de estos tiempos cibern'ticos en la !ue
estamos
entrampados.
Cuando era un escritor primeri&o, con m s $n ulas y malas
maneras!ue olios escritos, lo !ue deseaba era !ue mis
gusanosmecanografados uesen tachados por la censura, !ue pasaran
por laaflada y dips"mana tijera del censor* !ue mis escritos se
con%irtieranen mariposas de ceni&as colando sobre el cadalso de
la pira p+blica.
n escritor censurado, un libro !uemado era un pase directo a
lagloria, a la inmortalidad. -ue os imb'ciles de ju%entud.
En un remate de libros me hice con un ejemplar del libro 0el
buen
sal%aje al buen re%olucionario1 de Carlos 2angel. Libro maldito
pore3celencia en nuestro pa$s (y !uemado simb"licamente1 en
algunasuni%ersidades) !ue daba algunos puntapi's a esa
ideali&aci"n de lare%oluci"n y del proletariado asaltando el
cielo. El libro ue presa de lain!uina de nuestra i&!uierda
e3!uisita y de cub$culo uni%ersitario.
Los incendiarios y encapuchados de ayer son nuestros
ilustresuncionarios de hoy. Ya no tienen necesidad de !uemar
libros. #hora
desde sus ofcinas de bur"cratas desaparecen el papel y se hacen
conlas tintas y pri%ati&an las imprentas. Ya no censuran los
libros,sencillamente no los publican o los asf3ian en una fla
interminable delibros y autores por publicar.
4orge Luis 5orges ha escrito algo !ue podr$a ser un efca&
corta uego6Yo sigo jugando a no ser ciego, yo sigo comprando
libros, yo sigo
llenando mi casa de libros. Los otros d$as me regalaron una
edici"n dela o 7899 de la Enciclopedia de 5ro:hause. Yo sent$ la
presencia de eselibro en mi casa, la sent$ como una suerte de
elicidad1.
-
8/17/2019 El libro en llamas.docx
2/4
ablamos para el reino de lo e $mero. -e escriben libros para
esahoguera de lo eterno o como lo escribi" ;s
-
8/17/2019 El libro en llamas.docx
3/4
Esto de gente gra a !ue !uiere publicar me recuerda dos
pel$culas.na basada en la no%ela de Eduardo Liendo, Los platos del
diablo .
En la pel$cula, protagoni&ada por el desaparecido usta%o
2odr$gue&,2icardo #&olar, escritor mediocre con ansias de
reconocimiento conocea Lisbeth, especie de musa, !ue lo saca un
tanto de su amargura, por
ser s"lo un escritor&uelo, y lo acerca a la es era de amigos
de 0anielFalencia, un adinerado y reconocido escritor. Falencia
muere en rarascircunstancias, dejando la lectura de #&olar su
nue%o libro in'dito.#&olar lo plagia y alcan&a '3ito y
prestigio. #l fnal el plagio esdescubierto y la implicaci"n de
#&olar en la muerte de Falencia. La otrapel$cula Un hombre
ideal es similar. La cinta, protagoni&ada por?ierre ine, con
gui"n y direcci"n es de Yann o&lan, relata la historiade
Dathieu Fasseur, un jo%en de G9 a os, !ue trabaja con un
amiliarhaciendo mudan&as, pero cuya aspiraci"n es ser un
escritor de '3ito,aun!ue tiene un s"lo un obst culo6 su alta de
talento. Con un librorecha&ado por una editorial sigue en un
trabajo !ue no le agrada, pero
un d$a, en mitad de una mudan&a, encuentra por a&ar el
diario de uncombatiente de la guerra de #rgel. El manuscrito relata
la e3perienciadel e3soldado !ue acaba de allecer, solo y sin
amiliares. El jo%en selle%a el manuscrito. En su pe!ue o cuarto
escribe. El cursor de lacomputadora parpadea, pero a Dathieu no se
le ocurre nada y s"lo una
rase de -tephan Hing, en un pi&arr"n de corcho, le dice6
EscribirG.IJJ caracteres por d$a1. 0ecide entonces plagiar la
historia y su %idacambia radicalmente. Como %edette literaria en
ascenso se enamora.El jo%en escritor se con%ierte en un mentiroso y
en un asesino pararesguardar su oscuro secreto.
Cual!uiera (creo) tiene derecho a e3presarse a tra%'s de la
escritura.asta esa %edette, del bistur$ y el silic"n, llamada 0iosa
Canalesescribi" su libro. Como digo, &utano puede escribir un
libro y hastapublicarlo. o creo !ue hagan da o los poetas del
ripio, ni las ConnyD'nde& de la autoayuda, mucho menos los pro
esores de literaturacomparada y sus boste&antes libros de a o
sab tico. Como tampocoson sospechosos habituales los empleados
bancarios !ue buscan darrienda suelta a sus %ersos en el tono de
4usto 5rito y 4uan a%ares,mucho menos las ama de casa y sus recetas
de cocina ligera. Loda ino son a!uellos !uienes creen !ue los
libros pueden cambiar la%ida. Ya 0on Auijote lo crey" e intent"
lle%arlo a la pr ctica y todo ue
un imponente desastre.
-e !ueman libros y se erigen murallas, lo dice uno con un
estiloborgiano en pobre. ?ero esas murallas intangibles se edifcan
con losladrillos de nuestros prejuicios, de esos terrores
ancestrales. Ennuestra piel de lectores como 0on Auijote !ueremos
!ue la realidad seamolde al poema o a la fcci"n le$da, deseamos !ue
la realidad sea ens$ misma una escultura l'3ica de la belle&a.
Cuando se escribe esa otra
-
8/17/2019 El libro en llamas.docx
4/4
hoguera, la del ol%ido es m s %i%a y ardiente. Brancisco mbral
lo suposiempre y ante la pregunta6 KEscribe usted para s$ mismo,
para elp+blico, para la posteridad ... , respondi"6 Escribo para la
hoguera,como todos1.
