INTRODUCCIÓN

La creación de los Consultorios Jurídicos, busca principalmente establecer un campo de práctica para los estudiantes que están próximos a terminar sus estudios de Derecho, y también va encaminada la creación de esos Consultorios Jurídicos a buscar que la gente que carece de recursos económicos pueda conseguir asesoría jurídica y representación en los estrados judiciales, en forma gratuita debido a que por su difícil situación económica, estarían privados de dicha asesoría y representación por no poder contar con los suficientes recursos para recurrir a los servicios de un abogado profesional.

No fue caprichoso del legislador entonces establecer como requisito para poder optar por el título de abogado que dentro de los programas de derecho las universidades implementaran la creación de los Consultorios Jurídicos, sino que es una de las formas de garantizar el cumplimiento del mandato constitucional de garantizar sino totalmente, al menos facilitar las condiciones para que todas las personas en nuestro país tengan acceso a la administración de justicia.

Es por ello que la responsabilidad de los estudiantes adscritos a un Consultorio Jurídico es tan importante, pues están siendo los Abogados de esas personas que se encuentran en una especie de estado de indefensión debido a su poca capacidad económica, es decir que estas personas que recurren a los servicios de los Consultorios jurídicos, lo hacen realmente por la necesidad de encontrar una asesoría jurídica o una representación judicial en los diversos procesos judiciales en que pueden verse envueltas.

Como consecuencia de lo anterior recae también sobre las Universidades que tienen en funcionamiento Consultorios Jurídicos, hacer una evaluación periódica y constante de la situación de los estudiantes, y del Consultorio Jurídico en particular, para garantizar que efectivamente el servicio que se presta a la comunidad sea de primera calidad, y que realmente con la prestación del servicio sé de cumplimiento a los presupuestos legales y constitucionales que son la razón de ser de su existencia.

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Actualmente el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana está próximo a cumplir cuatro años de haber entrado en funcionamiento, y es precisamente por ello que debe hacerse un diagnóstico lo más fiel posible, de la cantidad de consultas que se han atendido por parte de los practicantes que han pasado por el Consultorio Jurídico, determinando así el impacto de las consultas en las distintas áreas del derecho, y lo que es más importante acercarnos desde el punto de vista estadístico a la actuación por parte de los estudiantes y su desenvolvimiento principalmente en los asuntos que han sido conocidos en los estrados judiciales.

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1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN

El Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana, es un centro académico y administrativo de ella, que depende directamente de la Decanatura de la Facultad de Derecho, constituido en virtud de lo dispuesto por el Decreto Ley 196 de 1971 por el cual se dictó el “Estatuto del ejercicio de la abogacía”, por el Decreto Reglamentario 765 de 1977 y por la Ley 583 de 2000 que modificó al primero.

En atención a lo dispuesto por las normas ya mencionadas, el Consultorio Jurídico es de obligatoria constitución, pues en él y a través de él, los alumnos de los dos (2) últimos años de las facultades de derecho de todo el país, deberán ejercer sus prácticas durante dos (2) semestres académicos para cumplir con uno de los requisitos para optar al título de abogado.

El Consultorio Jurídico se constituye de ésa manera en el laboratorio de prácticas de los futuros abogados con un ingrediente que lo hace insustituible: quienes realizan prácticas de Consultorio Jurídico, reciben las facultades de abogados de pobres (como los denomina el Decreto Ley 196 de 1971) y por lo tanto pueden litigar en causa ajena dentro de las expresas y precisas facultades contenidas en la ley.

Precisamente los practicantes del Consultorio Jurídico son abogados de pobres, porque éstos deben consagrarse a suplir una necesidad creciente de asesoría y representación legal en nuestra sociedad.

Como ya se mencionaba anteriormente, el paso del estudiante de Derecho por el Consultorio Jurídico, es obligatorio, esta obligatoriedad sirve a dos propósitos fundamentales.

El primero de estos propósitos, es que los estudiantes que están por terminar los estudios correspondientes al programa de Derecho, comiencen a poner en práctica los conocimientos adquiridos durante el transcurso de los cuatro años de estudio, y que empiecen a desenvolverse en el ambiente propio en el que la mayoría deberán desempeñarse una vez reúnan los requisitos establecidos por la ley para poder optar al título de Abogado.

El segundo de estos dos propósitos, es que dicho desempeño, se haga en beneficio de la comunidad y de las personas con menores recursos económicos, las cuales debido a su situación, no tienen la capacidad

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de poder contar con los servicios de un Abogado profesional, para poder solucionar sus consultas y atender sus probables litigios. Como es sabido y como esta contemplado en la misma ley, el carácter de los estudiantes de los Consultorios jurídicos es de abogados de pobres, es decir que deben constatar la capacidad económica de la persona que acude a buscar sus servicios.

El desempeño de los estudiantes que se encuentran haciendo sus prácticas en los Consultorios Jurídicos por disposición legal y debido a que aun son precisamente estudiantes, debe estar supervisado por Abogados Profesionales Docentes de la Universidad correspondiente, y los cuales cumplen funciones de asesoramiento a los estudiantes para resolver sus dudas, aclarar los conceptos jurídicos, y brindar la orientación necesaria para el adecuado desenvolvimiento del estudiante en los aspectos procesales y sustanciales inherentes a todo proceso judicial.

Hasta el momento no se ha llevado a cabo ni existe un estudio o investigación que dé cuenta acerca del crecimiento y desarrollo de las prácticas de los estudiantes que han pasado y que en estos momentos se encuentran en el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana.

El presente estudio pretende hacer una descripción estadística del número de consultas y procesos de los cuales se ha tenido conocimiento en el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana desde su comienzo de funciones hasta la actualidad en las diferentes áreas del Derecho; lo anterior como instrumento para medir el nivel de crecimiento y de desempeño de los Estudiantes; teniendo en cuenta principalmente para efectos de la medición de ese desempeño, la cantidad de procesos fallados o terminados a favor de los usuarios que han sido representados por los estudiantes.

Esto permite formular el problema de esta investigación de la siguiente forma: “Establecer las posibles falencias y fortalezas en la prestación del servicio del Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana.”

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2. JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACION

La presente investigación se hace de suma importancia y necesaria ya que puede servir de base para hacer una evaluación en la cual se verifique el desempeño de los estudiantes y de los asesores docentes, para de esa forma poder determinar los aspectos positivos en la prestación del servicio del Consultorio Jurídico, e identificar las posibles falencias en aspectos como, calidad de los docentes asesores, deficiencias en el pénsum académico del programa de Derecho implementado por la Universidad, evaluar posibles refuerzos y capacitaciones para los practicantes en los temas y asuntos mas consultados.

Esta investigación estadística pretende contribuir y ser de utilidad a esta evaluación, identificando entre otras cosas la cantidad de consultas atendidas, la cantidad de procesos adelantados ante los estrados judiciales, las áreas del derecho en que se presentan estas consultas y los resultados que se han presentado en consecuencia de la actuación de los estudiantes en los mencionados procesos.

De lo anterior se espera poder identificar las fortalezas y aspectos positivos en el funcionamiento del Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana y hacer las recomendaciones que se crean necesarias para mejorar las falencias que llegaran a encontrarse. La experiencia obtenida en el desempeño del cargo de Coordinador de Monitores del Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana desde el mes de julio de 2005, ha permitido conocer de cerca el trabajo y desempeño de los estudiantes que han llevado a cabo su práctica en este ultimo año, para detectar las falencias y fortalezas con las que llega el estudiante al momento de comenzar su práctica jurídica, lo anterior sumado al manejo del archivo de los procesos llevados en esta dependencia, ha proporcionado acceso de primera mano a la información necesaria para poder llevar acabo la presente investigación, lo cual ha permitido adelantar esta investigación que como se ha visto es sumamente necesaria. Con este trabajo de investigación busco aportarle a la Universidad Surcolombiana y especialmente a la Facultad de Derecho una herramienta que puede ser útil al momento de implementar los mecanismos necesarios para reorientar y reestructurar políticas del Consultorio Jurídico, tendientes a la optimización del servicio que aquí

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se presta teniendo en cuenta que ese servicio debe prestarse de la mejor forma posible, ya que va dirigido y encaminado a los sectores mas vulnerables, desprotegidos y necesitados de la población del Municipio de Neiva.

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3. OBJETIVOS

3.1 GENERAL

Determinar las falencias y fortalezas en la prestación del servicio del Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana y formular las recomendaciones necesarias para mejorar la calidad y buscar la excelencia en el desempeño de los estudiantes que llevan a cabo esta práctica.

3.2 ESPECÍFICOS

Identificar los fundamentos legales y jurisprudenciales que justifican la existencia de los Consultorios jurídicos.

Determinar el número de consultas adelantadas en cada área del Derecho.

Establecer la cantidad de procesos adelantados ante los despachos judiciales y administrativos en cada área del derecho.

Determinar por medio del resultado obtenido al fin del proceso judicial el grado de eficacia de la actuación de los estudiantes.

Identificar los aspectos positivos y las falencias en la prestación del servicio de Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana.

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4. MARCO TEORICO

4.1 MARCO HISTORICO

4.1.1CONSULTORIO JURÍDICO DE LA UNIVERSIDAD SURCOLOMBIANA

Los trámites realizados por la Universidad Surcolombiana para buscar la autorización del Tribunal Superior de Distrito Judicial de Neiva para poner en funcionamiento el Consultorio Jurídico de la Universidad, comienzan con la aprobación del Acuerdo del Consejo Superior de la Universidad No. 017 del 31 de julio de 2001, con el cual se creó legalmente y se estableció el Reglamento Interno para el Consultorio Jurídico (aún vigente).

El 25 de octubre de 2001 se practicó la primera visita del Tribunal Superior de Distrito Judicial de Neiva a las instalaciones donde empezaba a funcionar el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho. Casi simultáneamente, el 12 de diciembre del mismo año, el ICFES, mediante Oficio No. 47206, informó que el Programa de Derecho de la Universidad Surcolombiana de Neiva se encontraba registrado en el Sistema Nacional de Información de Educación Superior – SNIES, con el código No. 111443400004100111100 para ser desarrollado en jornada diurna y presencial con duración de 10 semestres.

Para efectos de llevar a cabo estos trámites ante el Tribunal el Rector confirió al Doctor Guillermo Poveda Perdomo quien estaba designado para ser el Director del Consultorio Jurídico, este poder fue sustituido a la abogada Maria Alicia Escobar Muñoz el 8 de abril de 2002, quien desde entonces fue la primera Directora General del Consultorio Jurídico en funciones y como tal presentara los primeros listados de alumnos practicantes y solicitó realizar una nueva visita al Consultorio Jurídico la que se realizó el 16 de mayo de 2002.

El 4 de junio de 2002 se presentaron los últimos documentos al Tribunal Superior de Distrito Judicial de Neiva acreditando la

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designación de cuatro (4) profesores asesores del Consultorio y de dos (2) monitores con un (1) coordinador.

Con base en los documentos presentados hasta entonces, mediante Resolución No. 056 del 6 de junio de 2002 expedida por la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Distrito Judicial de Neiva y en desarrollo de las facultades que le confería el Artículo 2 del Decreto Reglamentario 765 de 1977, aprobó el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad Surcolombiana de Neiva.

Posteriormente, gracias a un concurso público y en aras de cumplir con la normatividad sobre los Consultorio Jurídicos, que exige contar con un profesor de tiempo y dedicatoria completa, se vinculó al primer director general titular (como lo denominaba el Acuerdo No. 017 de 2001 expedido por el Consejo Académico de la Surcolombiana) al posesionarse el abogado Álvaro Hernando Cardona González.

El 15 de diciembre de 2003, el Consejo Académico aprobó el Acuerdo No. 046 “Por el cual se reorganiza el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad Surcolombiana y se reforma su reglamento interno”, que dispuso en su artículo cuadragésimo segundo derogar en todas sus partes el Acuerdo No. 017 de julio 31 de 2001. Los artículos cuarto y quinto disponen que la coordinación del Consultorio está a cargo de un Director quien será docente de tiempo completo. Hoy éste es el reglamento vigente.

Actualmente la Directora General (e) del Consultorio jurídico de la Universidad Surcolombiana es la Dra. Dorys Trujillo Ramírez, quien se encuentra en reemplazo del titular del cargo Dr. Álvaro Hernando Cardona.

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4.2 MARCO CONCEPTUAL

4.2.1CONSULTORIOS JURÍDICOS

Los consultorios jurídicos de las universidades que tienen implementado el programa de derecho fueron creados por el Decreto 196 de 1971 “Por el cual se dicta el estatuto del ejercicio de la abogacía” en su Artículo 30, y posteriormente fueron reglamentados en cuanto hace referencia a su organización y requisitos de existencia por el Decreto 765 de 1977 el cual reglamento el precitado articulo del decreto 196.

“Decreto 196 de 1971. Art. 30 (Modificado L. 583 de 2000. art.1). Las facultades de derecho oficialmente reconocidas organizara, con los alumnos de los dos (2) últimos años lectivos, consultorios jurídicos cuyo funcionamiento requerirá aprobación del respectivo Tribunal Superior de Distrito Judicial, a solicitud de la facultad interesada. Los consultorios jurídicos funcionaran bajo la dirección de profesores designados al efecto o de los abogados de pobres, a elección de la facultad, y deberán actuar en coordinación con estos en los lugares en que este servicio se establezca.

Los estudiantes adscritos a los consultorios jurídicos de las facultades de derecho, son abogados de pobres y como tales deberán verificar la capacidad económica de los usuarios. En tal virtud, acompañaran la correspondiente la autorización del consultorio jurídico a las respectivas actuaciones judiciales y administrativas.

La prestación del servicio del consultorio jurídico en ningún caso será susceptible de omisión ni homologación…”

Como se puede ver los tres primeros incisos del artículo en mención, establecen las pautas generales por las cuales se deben regir los Consultorios Jurídicos y a su vez los requisitos generales para que estos puedan entrar a funcionar.

Son de destacar especialmente la disposición legal que indica que los estudiantes actúan siempre bajo la coordinación y supervisión de sus asesores docentes, lo cual implica que la labor del estudiante en forma alguna esta sujeta a su libre disposición y convicción, ya que teniendo en cuenta su falta de experiencia, y también la falta de profundidad en los conocimientos, se hace necesaria la continua supervisión y seguimiento de la actuación del estudiante por alguien que si tenga la

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experiencia suficiente y una mayor profundidad de conocimientos jurídicos, como es un docente.

También hay que resaltar que la misma ley es la que determina la calidad de abogados de pobres de los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, y es mas impone la obligación a estos de verificar la capacidad económica de los usuarios que acuden a buscar sus servicios, recalcando que el servicio que prestan tiene un carácter eminentemente social, y por lo tanto solamente debe brindarse a quien efectivamente lo necesita.

Por último hay que decir que el inciso tercero del artículo en comento establece la obligatoriedad de cursar el Consultorio Jurídico, no habiendo otra forma de poder terminar el plan de estudios de la carrera de Derecho.

A continuación el mismo artículo hace una relación de los procesos en los cuales pueden intervenir los estudiantes bien sea como defensores de oficio, o litigando en causa ajena.

Para no hacer una trascripción literal del Artículo baste decir que se da competencia a los estudiantes para actuar en los procesos civiles de mínima cuantía sin importar la naturaleza; en procesos laborales en los cuales la pretensión no exceda los 20 SMMLV; en los procesos penales que conozcan los jueces penales municipales o promiscuos municipales y las fiscalias delegadas ante ellos, bien sea a través de poder debidamente conferido o de oficio; en procesos de alimentos (Fijación, Regulación o Exoneración); y de oficio en los procesos disciplinarios, de responsabilidad fiscal, o sancionatorios, de diversos entes como procuradurías, contralorías u otros organismos de control o entidades administrativas.

El anterior decreto fue reglamentado por medio del Decreto 765 de 1977, en el cual se fijan los requisitos que se deben cumplir por parte de la Universidad para poder solicitar autorización de funcionamiento del Consultorio Jurídico al Tribunal Superior de Distrito Judicial correspondiente.

Dentro de lo más importante que cabe resaltar aquí es la norma que dispone que por cada área del derecho debe existir un asesor docente de tiempo completo; y que por cada veinte estudiantes debe haber un monitor en cada área del derecho.

Lo demás que se dispone en esta norma hace referencia al trámite que debe seguirse por la Universidad para lograr la aprobación por parte del Tribunal, para poner en funcionamiento el Consultorio Jurídico.

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4.2.2ABOGADOS DE POBRES

Como ya se ha venido mencionando una de las características y presupuestos contemplados por la ley para que los estudiantes adscritos a un Consultorio Jurídico puedan litigar en causa ajena, es que primero se verifique la capacidad económica de la persona que solicita el servicio del Consultorio.

Es decir que la ley además de fijar estrictamente las competencias y los procesos en que los estudiantes de los Consultorios Jurídicos pueden litigar en causa ajena, también les impone la obligación que los usuarios a quienes eventualmente representaran en un proceso judicial, sean personas que por sus escasos recursos, no puedan recurrir a contratar los servicios de un abogado titulado.

Esta autorización legal que se les da a los estudiantes para litigar en causa ajena, tiene como objetivo principal la realización de un derecho Constitucional como es el contemplado en el Artículo 229 de la Constitución Nacional:

“Art. 229. Se garantiza el derecho de toda persona para acceder a la administración de justicia. La ley indicara en que casos podrá hacerlo sin representación de abogado.”

El anterior postulado constitucional a pesar de no encontrarse dentro del Capítulo I del Título II de la Constitución, el cual contempla los Derechos Fundamentales de las Personas, ostenta ese rango de derecho fundamental, si se tiene en cuenta que a ninguna persona por ningún motivo se le puede privar de recurrir libremente y en cuanto lo necesite a la administración de justicia, para ventilar sus controversias ante esta institución estatal; si el Estado no garantizara y no concediera este derecho a todas las personas por el solo hecho de serlo, estaríamos en presencia de una discriminación negativa, y de una propia manifestación del estado que contribuiría a la deslegitimación de sus instituciones, ya que las personas deberían entonces acudir a aplicar “justicia” por su propia mano, lo anterior seria impensable pues precisamente la razón de ser de existir del aparato de administración de justicia, es que en cabeza del Estado está privativa e indelegablemente la facultad de administrar justicia.

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Obviamente que al hablar de este Derecho debe decirse que al igual que la mayoría de derechos, no es absoluto, por lo tanto el mismo Artículo 229, al decir que la ley establecerá los casos en que la persona no necesita abogado, esta también consagrando tácitamente que en todos los demás casos que no estén contemplados en la ley, la persona solamente puede acudir a la administración de justicia si esta debidamente representada por abogado.

Como es ampliamente conocido, la situación económica de nuestro país siempre ha sido muy difícil y la brecha entre los ricos y los pobres es muy grande, hay muchas personas que subsisten devengando el salario mínimo legal e incluso aunque no debería suceder hay mucha gente que ni siquiera devenga ese salario mínimo mensual; obviamente si alguna de estas personas de bajos recursos, necesita llevar algún asunto ante los estrados judiciales, se va a encontrar con la dificultad de no tener suficientes recursos económicos para poder cubrir los honorarios de un abogado titulado.

Ante esta situación de “indefensión” de amplios sectores de la población al tener que recurrir al aparato judicial, el legislador ha creado figuras e instituciones encaminadas a intentar garantizar efectivamente el acceso a la administración de justicia para las personas sin que por eso vean disminuido su ya de por sí exiguo patrimonio. Es así como se han establecido figuras como el Amparo de Pobreza, y se han creado instituciones como la Defensoria del Pueblo y los Consultorios Jurídicos de las Universidades que tienen implementado el programa de Derecho.

Respecto a los Consultorios Jurídicos, y a la autorización a sus estudiantes para litigar en causa ajena ha dicho la Corte Constitucional en Sentencia C-143 de febrero 7 de 2001 examinando demanda de inconstitucionalidad contra el Art. 1 de la ley 583 de 2000 que modificaba el Art. 30 del Decreto 196 de 1971, el cual establece los asuntos en que pueden litigar en causa ajena los estudiantes de Consultorio Jurídico:

“La Constitución Política consagra en el artículo 229 el derecho de toda persona para acceder a la administración de justicia y señala además que “la ley indicará en qué casos podrá hacerlo sin representación de abogado”.Y si se faculta al legislador para señalar en qué casos puede accederse a la administración de justicia sin representación de abogado, con mayor razón puede el legislador indicar las situaciones en que se acuda representado por alguien que tiene ya una formación jurídica básica, que la ley estima se tiene en la etapa final de la carrera de derecho. Está entonces dentro de la discrecionalidad del legislador, a la luz de la Constitución, el señalar los casos en los cuales se puede litigar en causa ajena, aun sin poseer todavía el título.

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En el Decreto 196 de 1971, por el cual se dicta el estatuto del ejercicio de la abogacía, se consagra en el artículo 1º que la abogacía tiene como función social la de colaborar con las autoridades en la conservación y perfeccionamiento del orden jurídico del país y en la realización de una recta y cumplida administración de justicia. También se consagra que la principal misión del abogado es defender en justicia los derechos de la sociedad y de los particulares.”

Hay sectores que se han pronunciado siempre en contra de esta facultad conferida a los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, aduciendo principalmente que los estudiantes aún no están capacitados para litigar en causa ajena, pues aun no son abogados como tal, debido a que no tienen la preparación y no reúnen las calidades suficientes para poder hacerlo sin que esto implique un gran riesgo para los usuarios de sus servicios.

Lo anterior es claramente controvertible, si se tiene en cuenta que los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, no tienen plena autonomía con respecto al desarrollo de los procesos judiciales en los cuales intervienen, muy por el contrario su labor es permanentemente vigilada y supervisada por docentes asesores, que están adscritos al Consultorio Jurídico, para cumplir con esa función. Es decir que si bien es cierto ante el aparato judicial el estudiante es quien figura como mandatario judicial del usuario, su actuación ante los despachos no es autónoma, sino que previamente estas actuaciones han sido supervisadas y orientadas por sus asesores. Es decir que cuando el usuario acude a buscar los servicios del Consultorio Jurídico tiene la certeza que las actuaciones de los estudiantes serán las mas adecuadas dentro de su proceso, pues si bien es cierto carece de la experiencia necesaria, ésta se suple con la asesoría que le brinda la misma Universidad.

Hay que decir también que esta facultad para poder litigar en causa ajena, es concedida por la ley exclusivamente a los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, es decir que en ningún otro caso se contempla que una persona que no sea abogado titulado pueda adelantar en causa ajena un proceso judicial.

Este es uno de los casos en que la Constitución justificadamente, en aras del hacer efectivo el derecho de igualdad real y efectiva (Art. 13 C.N) y de hacer posible el acceso a los Tribunales (Art. 229 C.N), faculta al legislador para no exigir títulos de idoneidad para el ejercicio de la abogacía, sin acreditar el ser titulado e inscrito.

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4.2.3DEFENSA TÉCNICA

El Decreto 196 de 1971 modificado por la ley 583 de 2000, estableció en su Art. 30 los procesos en los cuales se faculta a los estudiantes de los Consultorios Jurídicos para litigar en causa ajena.

En esta disposición legal se encuentra contemplada la posibilidad que los estudiantes de derecho adscritos a un Consultorio Jurídico puedan ser defensores en procesos penales que se adelanten ante los Jueces Penales Municipales o Promiscuos Municipales; las Fiscalias delegadas ante estos; en los procesos policivos contravencionales; procesos disciplinarios adelantados por la Procuraduría, Personerías Municipales, procesos administrativos adelantados por Autoridades Administrativas, los Organismos de Control y las entidades constitucionales autónomas; y procesos de responsabilidad fiscal adelantados por las Contralorías.

Hay que aclarar que en cuanto hace referencia a lo anterior, los estudiantes de Consultorio Jurídico pueden actuar en los procesos penales y policivos contravencionales ya sea por solicitud de defensor de oficio que haga el despacho o por medio de poder judicial debidamente conferido por el procesado; en lo que hace referencia a los demás procesos, la actuación del estudiante como apoderado del procesado, invariablemente debe ser producto de una solicitud de defensor de oficio hecha por el respectivo despacho.

Para poder comprender el motivo por el cual el legislador facultó a los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, para intervenir en los mencionados procesos, hay que hacer un breve análisis del concepto de defensa técnica.

El Artículo 29 de la Constitución Nacional, contempla el derecho fundamental al Debido Proceso, ese derecho está integrado por una serie de garantías y figuras jurídicas, que pretenden garantizar que toda persona sometida a un proceso judicial o administrativo, goce de las garantías mínimas de seguridad respecto a que su proceso será llevado a cabo con total transparencia, sin dilaciones injustificadas, que será escuchado en el proceso, a saber de antemano cual será el

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juez o la autoridad administrativa que adelantara su proceso, a apelar la sentencia o el fallo, entre otras.

En esta investigación es especialmente de vital importancia lo que hace referencia al derecho a la defensa en sus dos concepciones, tanto técnica como material, pero especialmente en lo atinente a la defensa técnica.

El debido proceso y el derecho a la defensa material y técnica, no es solamente reconocido en el ordenamiento Jurídico colombiano, sino que de antaño ha sido reconocido en diferentes países y por la comunidad internacional, ejemplo de esto ultimo son la Convención Americana sobre Derechos Humanos, Pacto de san José de Costa Rica, la que fue ratificada por medio de la ley 16 de 1972, en su artículo 8 contempla las garantías judiciales, y especialmente en los literales d y e:

“Art. 8. Garantías Judiciales……d) Derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido por un defensor de su elección y de comunicarse libre y privadamente con su defensor;

e) Derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el estado, remunerado o no según la legislación interna, si el inculpado no se defendiere por si mismo ni nombrare defensor dentro del plazo establecido por la ley;”

El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos ratificado por la ley 74 de 1968, en su Artículo 14 y especialmente en su numeral 3 literal d, también contempla el derecho a la defensa técnica y material:

“Art. 14…

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d) A hallarse presente en el proceso y a defenderse personalmente o ser asistida por un defensor de su elección; a ser informada, si no tuviere defensor, del derecho que le asiste a tenerlo, y, siempre que el interés de la justicia lo exija, a que se le nombre defensor de oficio, gratuitamente, si careciere de medios suficientes para pagarlo;”

En nuestro Ordenamiento Jurídico como ya se dijo este derecho es de carácter fundamental y esta contemplado en la Constitución Nacional, el aparte del Art. 29 de la C.N que contempla la defensa técnica dice así:

“Quien sea sindicado tiene derecho a la defensa y a la asistencia de un abogado escogido por el, o de oficio, durante la investigación y el juzgamiento.”

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Si bien es cierto el anterior aparte parece hacer referencia únicamente al proceso penal, también tiene aplicación en otros procesos administrativos que pueden ser adelantados por otros organismos del Estado y que tienen carácter sancionatorio; las garantías del Debido Proceso y entre ellas el derecho a una defensa técnica se extienden a todos estos procesos, en los cuales el Estado haga uso de su poder punitivo y sancionatorio, ya sean de carácter judicial o administrativo.

Hay que decir que el derecho a tener una defensa técnica dentro de un proceso ya sea judicial o administrativo, es para el procesado un derecho absoluto e inalienable, es decir que es requisito de validez del proceso que el encartado haya contado con un defensor nombrado por él o del cual haya sido provisto por el mismo Estado.

Son diversos los sucesos que pueden hacer que el procesado no nombre defensor para que lo represente en el proceso, como por ejemplo falta de capacidad económica para contratar un abogado, o simplemente que no haya sido posible que se apersone del proceso.

Tanto en materia penal como en materia administrativa, se ha solucionado el problema de no poder notificar o hacer comparecer al encartado al proceso.

En materia penal, una vez se hayan agotado todos los medios por parte de la Fiscalia para vincular al imputado al proceso por medio de indagatoria, sin conseguirlo, se procede a vincularlo por medio de resolución de persona ausente, la cual obligatoriamente debe ser notificada a un defensor de oficio que ha sido solicitado por el despacho.

En materia administrativa tanto en procesos disciplinarios como de responsabilidad fiscal, si no se logra notificar a la persona que está siendo investigada, se procede de igual forma, es decir el despacho solicita un defensor de oficio y con el se procede a notificar el pliego de cargos en el primer caso y en el segundo el auto de imputación de responsabilidad fiscal.

Como se puede ver tanto en los procesos judiciales como en los administrativos, se llega a una etapa en que es necesaria la existencia de defensor, de lo contrario el despacho debe solicitar un defensor de oficio, esto se estableció para que sea este defensor el que en ausencia del investigado y de su apoderado de confianza, asuma su defensa y adelante lo que él estime pertinente para defender al investigado.

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Para fines como este de garantizar el derecho a la defensa técnica de los procesados, es que se creo la Defensoria del Pueblo, cuya principal misión es la de proveer abogados de oficio, en los casos en que lo soliciten los diferentes despachos judiciales.

De todas formas solamente la defensoría pública no da abasto para todas las solicitudes de defensores de oficio que hacen los despachos judiciales, es por ello entre otras razones, que el legislador tomó la decisión de facultar a los estudiantes de Consultorios Jurídicos, para que puedan intervenir en determinados procesos penales como defensores de oficio.Empero sabiendo que aún son estudiantes y que les falta la experiencia propia de una abogado litigante, se restringió la posibilidad de su actuación a delitos menores, que son los de competencia de los Jueces Penales Municipales, o Promiscuos Municipales, y las Fiscalias delegadas ante ellos.

En múltiples ocasiones esa facultad otorgada a los estudiantes de los Consultorios Jurídicos, ha sido criticada argumentando que la Constitución Nacional establece que el procesado deberá ser representado por abogado. También ha sido criticada por otorgar y facultar a estudiantes carentes de experiencia y de conocimiento para que adelanten un asunto tan delicado como es la defensa de una persona, puesto que lo que se encuentra en juego es la libertad de esa persona.

Estos y otros argumentos han sido incluso invocados en sendas demandas de inconstitucionalidad contra las disposiciones legales que facultan a los estudiantes de derecho adscritos a los consultorios jurídicos para adelantar la labor de abogados de oficio.

Al respecto la Corte Constitucional se ha pronunciado en diversas sentencias como la SU-044 de febrero 9 de 1995 (M.P Dr. Antonio Maria Barrera Carbonell), C-071 de febrero 23 de 1995. (M.P Dr. Carlos Gaviria Díaz), C-049 de febrero 8 de 1996. (M.P Dr. Fabio Morón Díaz), C-25 de febrero 11 de 1998 (M.P Dr. Fabio Morón Díaz), Sentencia C-40 de 2003 (M.P Dra. Clara Inés Vargas Hernández), C-1076 de diciembre 5 de 2002 (M.P Dra. Clara Inés Vargas Hernández), entre otras.

En resumidas cuentas, los argumentos expuestos por la Corte para justificar la constitucionalidad de esas normas, han sido que el legislador esta constitucionalmente autorizado para exigir títulos de idoneidad para ejercer determinados casos; que el legislador puede por mandato constitucional determinar los eventos en los cuales se podrá acudir a la administración de justicia en causa propia, por intermedio de persona que no sea abogado titulado e inscrito; que los

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estudiantes del Consultorio Jurídico no desarrollan su actividad de acuerdo a su propio criterio sino guiados por la asesoría y continua supervisión de sus docentes asesores.

“Por tanto, es claro que existe un derecho constitucional fundamental reconocido en la Carta Política llamado derecho de defensa técnica que adquiere dimensiones especiales en materia penal, como quiera que el constituyente fue explícito en la materia al disponer lo que aparece en el mencionado artículo 29 de la Carta. En este sentido asiste razón al Procurador General quien manifiesta que la alocución “toda” consignada en el mandato superior en cita, debe ser entendida como comprensiva de todo el itinerario en que se vierte la actuación judicial en el campo penal y así lo ha dicho esta Corporación; además, al igual que la referencia que en el mismo texto se hace al “sindicado” de la misma disposición superior debe entenderse receptora de aquéllas que en la misma normatividad aluden a los imputados, procesados, y aún a los condenados, pues en toda la actuación procesal previa de instrucción, juzgamiento y ejecución de pena, debe prevalecer como garantía mínima la asistencia del defensor habilitado profesionalmente para dicho fin.

Bajo estos supuestos es requisito indispensable que quien obre en representación del sindicado en materia penal sea un profesional del derecho; empero tampoco puede desconocerse la realidad en la que en ciertas condiciones no es posible contar con abogados titulados para que cumplan la labor de defensor de oficio en asuntos penales, lo que le ha llevado a aceptar dentro del marco de la jurisprudencia de esta corporación que en casos excepcionalísimos, la ley pueda habilitar defensores que reúnan al menos las condiciones de egresados o de estudiantes de derecho pertenecientes a un consultorio jurídico, desde luego, garantizando un mínimo de formación e idoneidad técnica y profesional para que pueda atender a las necesidades profesionales del defendido. Se trata simplemente de permitir que personas calificadas por sus estudios profesionales, bajo la coordinación científica y académica de los consultorios jurídicos de las universidades con facultades de derecho y egresados de las mismas, en trance de obtención del título profesional o del cumplimiento de requisitos especiales para el mismo como el de la judicatura, pongan sus conocimientos profesionales adquiridos y actúen como abogados en la defensa de los intereses de los sindicados en los procesos penales, durante las etapas de investigación y juzgamiento.” (Sentencia C-049 de febrero 8 de 1996. Magistrado Ponente: Dr. Fabio Morón Díaz).

“Observa la Corte que la disposición últimamente transcrita, en cuanto establece que el defensor de oficio debe ser un abogado titulado, o un egresado de facultad de derecho oficialmente reconocida por el Estado, debidamente habilitado conforme a la ley o un estudiante miembro de consultorio jurídico, obedece a los lineamientos que la norma constitucional consagra sobre la asistencia del sindicado por un abogado dentro del proceso penal y, desde luego, en el policivo penal, el cual por su naturaleza jurídica similar, se rige por los mismos principios o garantías del debido proceso; pero se aclara, que aunque la norma permite confiar la defensa a quienes no son abogados titulados, ello no contraría el precepto del artículo 29 en referencia, pues debe entenderse que el legislador, facultado por la Constitución (art. 26) para determinar en qué casos se

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exigen títulos de idoneidad, ha habilitado especialmente al egresado de facultad de derecho que ha obtenido licencia temporal y al estudiante de derecho miembro de consultorio jurídico para actuar como defensores”. (C. Const. sent. SU-044/95, M.P. Antonio Barrera Carbonell).

“De conformidad con lo previsto en el artículo 26 de la Constitución, es la ley la que puede exigir títulos de idoneidad para el ejercicio de las profesiones y, por lo tanto, mientras no contravenga preceptos constitucionales ni desconozca los elementos mínimos de los derechos fundamentales (como ocurre, según lo ha destacado la jurisprudencia, cuando se permite que cualquier persona sin aptitud ni preparación en el campo jurídico, asuma la defensa de un procesado), el legislador está autorizado para establecer los requisitos exigibles para el desempeño de las distintas actividades profesionales así como para estatuir grados o escalas de condiciones académicas según la naturaleza, contenido e importancia de los servicios que se presten en el ámbito de cada una de ellas.“Del mismo modo, será el propio legislador el que defina cuándo determinados rangos de la gestión profesional no hacen exigible un título, dando lugar a la validez de las actuaciones correspondientes si se cumplen otros requisitos que la misma legislación consagre”. (C. Const. S. Plena. Sent. C-626/96 nov. 21, M.P. José Gregorio Hernández Galindo).

“En efecto, la reciente adquisición de conocimientos jurídicos, la necesaria actualización del estudiante aprovechado en materia legislativa y jurisprudencial y la proximidad de los docentes especialistas en el tema —elementos todos estos que se esperan de los centros universitarios competentes, autorizados y supervisados por el Estado— permiten concluir en la capacidad práctica de defender los intereses del procesado en circunstancias de necesidad impostergable en las cuales se carezca en absoluto de los servicios de un abogado titulado y también a falta de un defensor público. (Sent. C-019, feb. 8/96, M.P. Fabio Morón Díaz).

Los anteriores argumentos han sido utilizados reiteradamente por la Corte Constitucional en diversas oportunidades en las cuales se ha demandado la inconstitucionalidad de las normas que contemplan la facultad de que los estudiantes de los consultorios jurídicos puedan ser abogados de oficio en procesos disciplinarios, de responsabilidad fiscal, y penales y policivos contravencionales.

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5. ESTADISTICA

El 21 de marzo del 2006, se verificó el ingreso de la consulta número 8000 al Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana, por razones de conveniencia la estadística que a continuación se presenta se hace sobre estos primeros 8000 procesos y consultas, aunque al momento de elaborar este documento según la radicación que se maneja al interior del Consultorio Jurídico van 8273 procesos, debido al ingreso diario de procesos y consultas es verdaderamente difícil poder llevar una estadística a diario como la que aquí se presenta.

La presentación de esta estadística se hará primero determinando cuántos asuntos han sido atendidos solamente en consulta, y cuántos se han ventilado ante los estrados judiciales; así mismo se verá el número de procesos y consultas que ha habido por área de Derecho, para efectos de este trabajo, se presentará la división en cuatro áreas del Derecho que son Penal, Civil (Civil, Familia y Comercial), Laboral y Publico (Asuntos Administrativos y Constitucionales), y finalmente se destacara cuántos procesos ha habido por cada clase de estos, por ejemplo cuántos por Abuso de Confianza, Lesiones Personales Dolosas, Alimentos, Ordinarios Laborales, Ejecutivos Singulares, entre otros. Así mismo se determinará como han finalizado esos procesos para al menos desde el punto de vista cuantificable, examinar la actuación y el desenvolvimiento de los estudiantes, sabiendo como terminó el proceso.

5.1 TOTALIDAD DE PROCESOS Y CONSULTAS ARCHIVADAS Y EN TRAMITE

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En la siguiente tabla se muestra como se ha dado la distribución entre procesos como tal que se han ventilado ante los estrados judiciales, y consultas, de los 8000 asuntos de los cuales ha tenido conocimiento el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana.

Procesos 1985Consultas 5158Procesos y Consultas Activos Actualmente 857

Como se puede ver solamente en una proporción pequeña de los asuntos conocidos por el Consultorio Jurídico se ha llevado a cabo un proceso judicial como tal.

El número de las consultas, es elevado con relación a los procesos, en este grupo de “consultas” se incluyen los asuntos en los cuales se ha requerido del estudiante un concepto legal, también los asuntos que ameritaban la iniciación de un proceso judicial pero que debido a diferentes factores han sido abandonados por los usuarios.

Por último los procesos y consultas activos actualmente, son precisamente asuntos que ya se están ventilando ante los despachos judiciales, o que están en trámite de ser interpuestas las acciones correspondientes.

5.2 PROCESOS POR AREA DEL DERECHO

Los asuntos se dividirán en cuatro áreas: penal, civil (civil, familia, comercial), laboral y publico (Asuntos administrativos y Constitucionales).

AREA DERECHO PROCESOS CONSULTASPenal 1357 495Civil 126 2886Publico 301 895Laboral 42 882

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La cifra que destaca en lo que hace referencia a los procesos que se han llevado a cabo es la de los procesos penales, esta cifra es la más relevante con respecto a las demás, la explicación es que en la gran mayoría de estos procesos, los estudiantes han actuado ante solicitud de defensores de oficio por parte de los Juzgados Penales Municipales, y de las Fiscalias delegadas ante ellos.

En lo que hace referencia a las consultas se observa que la mayoría de esos asuntos fue en el área de civil, la explicación es que a esta área del derecho pertenecen la mayoría de las inquietudes de los usuarios, estas van desde sucesiones, controversias contractuales (Arrendamiento y Compraventas principalmente), títulos valores, y en gran proporción asuntos del área de familia (Alimentos, constitución y liquidación de sociedad conyugal entre compañeros permanentes, divorcio, cesación de efectos civiles de matrimonio religioso, custodia y cuidado personal de menores principalmente).

A continuación se describirá lo que tiene que ver con los procesos como tal, que se han adelantado en cada una de las áreas del derecho haciendo la estadística de cada uno de los tipos de procesos que se han llevado, y viendo la forma en que terminaron.

5.2.1PENAL

DELITO Sent. Cond Sent. Absol Ces. Proced Precl. Invest OTRO TOTALIn. aliment. 140 24 82 197 195 638

Hurto 85 8 6 186 72 357Les Per Dol 29 12 10 54 36 141Les. Per Cul 15 7 8 43 32 105Daño. B. Aj 2 1 - 19 8 30Ab. confian 3 2 1 12 12 30Vio. Intrfliar 1 - 2 20 7 30

Estafa 3 1 - 10 7 21Viol Hab Aj - - - 2 - 2

Alz. Bie - - - 1 - 1Usura - - - - 1 1

Pert. pos - - - - 1 1

Los procesos penales en los cuales pueden intervenir los estudiantes como defensores son los de competencia de los Jueces Penales Municipales, si bien es cierto los delitos contemplados en la tabla no recorren toda la gama de competencia de estos Juzgados, también es

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cierto que corresponden a los procesos que se han llevado en el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana.

Como se puede observar los procesos más comunes han sido los de Inasistencia Alimentaria, Hurto (Simple, Calificado, Agravado, Calificado y Agravado), Lesiones Personales Dolosas y Lesiones Personales Culposas.

También se puede observar en la tabla que si bien es cierto a nivel general en los procesos que han llegado hasta sentencia del Juez, la mayoría de las veces sé ha proferido sentencia condenatoria al procesado, también debe observarse que el número de procesos que han terminado con resoluciones de preclusión de la investigación y con auto de cese de procedimiento, es más alto que el de las sentencias condenatorias.

Lo anterior en modo alguno puede atribuírsele única y exclusivamente a la labor de los estudiantes, pero si se debe reconocer que en muchos de los casos en que los procesos han terminado de esta manera, la actuación de los estudiantes en la presentación de alegatos y recursos, ha sido el detonante para que se produzcan estas decisiones por parte de fiscales y jueces.

La penúltima columna de la tabla muestra la casilla OTRO, dentro de ésta, se encuentran incluidos los casos en que por ejemplo el procesado nombra abogado de confianza y se desplaza al estudiante, los casos en que se presenta desistimiento, indemnización integral, conciliación, entre otras formas anormales de terminación del proceso contempladas por nuestro ordenamiento penal.

Del análisis de los datos anteriormente mencionados se podría aseverar entonces que el desempeño de los estudiantes en los procesos penales en forma general, ha sido muy bueno si se tiene en cuenta que en la mayoría de los casos han logrado que el proceso se resuelva a favor del procesado.

Hay que acotar que esta labor no es nada fácil debido a que en la mayoría de los casos los estudiantes, llevan a cabo la labor de defensor de oficio de personas que han sido vinculadas al proceso mediante la figura de Persona Ausente, o que a pesar de haber sido vinculados mediante indagatoria no se comunican con su defensor, lo que dificulta mucho mas la tarea de la defensa, y hace mas meritorio el desempeño de los estudiantes.

5.2.2CIVIL

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CIVILPROCESO SUJETO PROCESAL MOTIVO DEL ARCHIVO

Demandante DemandadoSent. Favo

Sent. Desf.

Desis Conc Trans Otro

Alimentos 15 8 10 3 1 5 - 4Ejecutivo Singular 46 10 10 8 12 3 9 24

Restitución Inmueb Arren 37 1 4 1 11 6 10 6Incumplimiento Cto. 6 - - - - 1 3 2

Repos – Canc. Tit. Valo 3 - - - 1 - - 2

Dentro de esta área de civil se han incluido los procesos que se adelantan en materia civil, familia y comercial; es por lo anterior que dentro de la tabla se pueden observar las estadísticas de procesos de alimentos, junto con ejecutivos singulares, reposiciones y cancelaciones de títulos valores, por ejemplo.

Como ya se había visto en una tabla anterior, al área de civil corresponde el mayor número de consultas que hacen los usuarios.La diferencia entre la gran cantidad de consultas y el poco número de procesos que se han adelantado respecto de estas, se explica volviendo a hacer énfasis en que la gente que acude al Consultorio Jurídico es de escasos recursos y se ve en la práctica que muchos usuarios deciden no iniciar el proceso, cuando se enteran de la probable duración del mismo, o cuando se les informa de los gastos procesales en que deben incurrir.

Otra razón es que en gran cantidad de casos el entuerto jurídico en el cual están envueltos no tiene salida; y también en gran proporción de ocasiones el usuario consulta sobre asuntos que sobrepasan la mínima cuantía que es en la cual pueden litigar los estudiantes del Consultorio Jurídico, o por su naturaleza, tampoco pueden ser llevados por los estudiantes, por ejemplo las consultas en el área de familia son la gran mayoría pero en esta área los estudiantes solo pueden adelantar procesos que versen sobre alimentos.

Como se puede ver en la tabla los procesos que más se han adelantado en esta área son en orden los Ejecutivos Singulares, Restituciones de Bien Inmueble Arrendado, y Alimentos (Fijación, Exoneración, Aumento, y Reducción), en términos generales la Sentencia ha sido favorable a los intereses del usuario en más de la mitad de los procesos que han sido adelantados. Aunque también debe tenerse en cuenta que los Mecanismos Alternativos para la Solución de Conflictos también han sido utilizados en la mayoría de las veces para poner fin al proceso, es así como se puede observar un buen número de procesos terminados por conciliación o por transacción. Por

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desistimiento del proceso también se han terminado una gran cantidad de procesos pues cuando el demandado ve que se ha recurrido al aparato judicial, cumple con su obligación para evitar que el proceso siga adelante.

5.2.3LABORAL

LABORAL

PROCESOSUJETOS PROCESALES MOTIVOS DEL ARCHIVO

Demandante DemandadoSent. Fav

Sent. Cond

Desc Conc Trans Otro total

Ordinario 36 4 6 3 2 18 2 10 40

Ejecutivo 2 - - - - 1 1 - 2

En el área laboral se ve el menor número de procesos y consultas de las cuatro áreas del derecho en que para fines de este trabajo se han dividido los asuntos que se han conocido en el Consultorio Jurídico.

Pero también en esta área se encuentra la mayor diferencia entre consultas realizadas por los usuarios y procesos adelantados por los estudiantes.

Esta diferencia se debe a diversos factores, por ejemplo en ocasiones los usuarios no pueden conseguir los testigos que les sirvan para probar la existencia de la relación laboral en los casos en que el contrato laboral es verbal; otro factor es que también en numerosas ocasiones la cuantía de las pretensiones estimadas excede la cuantía de 20 S.M.M.L.V en la que pueden litigar los estudiantes en materia laboral, también en múltiples ocasiones las consultas se refieren a temas de seguridad social especialmente lo que hace referencia a verificar el cumplimiento de requisitos para pensión de vejez o de invalidez, pero esto se ingresa como consulta ya que la solución a estas inquietudes se da a través de la interposición de derechos de petición ante las entidades respectivas.

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Se puede observar en el Consultorio Jurídico que en algunas ocasiones, son los mismos estudiantes los que rehuyen la iniciación de un proceso y aún más, ni siquiera ingresan el usuario al Consultorio Jurídico para no tener que llevar adelante procesos laborales, lo anterior esta motivado principalmente por las falencias que la gran mayoría tiene en el área laboral y especialmente en lo que hace referencia a procedimiento laboral.

Si se examina la tabla se puede determinar que son mas los procesos que terminaron con sentencia favorable al usuario que los que lo hicieron con sentencia desfavorable.

5.2.4PUBLICO

PÚBLICO

ADMINISTRATIVO

PROCESO

DESPACHO MOTIVO DE ARCHIVO

Procur. Region.

Procur. Prov.

PersoneriaCont. Gen

Cont. Dptal

Otro TotalFallo

en contra

Fallo a

favorArchivo

Disciplinario17 40 6 - - 33 96 20 28 48

Res. Fiscal - - - 40 46 - 96 17 21 51

En el área de público se incluyen los asuntos de carácter administrativo, como por ejemplo, procesos disciplinarios adelantados por organismos como las Procuradurías Provincial y Regional, la Personería Municipal y otros procesos adelantados en las oficinas de Control Disciplinario Interno como son las de la Universidad Surcolombiana y la Alcaldía Municipal. De igual forma aquí se incluyen los procesos de Responsabilidad Fiscal que se adelantan tanto en la Contraloría Departamental, como en la Contraloría General, y en la Auditoría General de la República.

Se debe recordar que la actuación de los estudiantes en este tipo de procesos, no se debe a que el usuario se acerque a las instalaciones del Consultorio Jurídico para solicitar que se le asigne un defensor, sino que se debe a las solicitudes de defensor de oficio que remiten los organismos anteriormente mencionados al Consultorio.

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Aunque se observa que al igual que en las otras áreas del derecho examinadas con la excepción del área penal, y en las cuales se han adelantado procesos judiciales, cuando los procesos terminan en fallo este es favorable a los usuarios en mayor numero que cuando resulta desfavorable.

En el área de publico, también se incluyen además de los asuntos anteriores, los asuntos que tienen que ver con el área Constitucional, es decir lo que hace referencia a conceptos, y especialmente acciones constitucionales, como Tutelas, Populares, de Cumplimiento, etc.

CONSTITUCIONAL

Acciones de Tutela Derechos de Petición Acciones Populares Total

146 155 - 301

En lo relacionado con Constitucional, aunque las consultas son diversas, se puede observar que los procesos judiciales que se han llevado a cabo, son los que tienen que ver con Acciones de Tutela; estas Acciones son incoadas en su gran mayoría por solicitud de medicamentos que no cubre el P.O.S, para exigir respuesta a derechos de petición sin contestar y para reclamar la pensión de vejez por vía de Tutela; aunque obviamente se han presentado más casos en que se ha recurrido a la Tutela, estos tres aspectos son en los que ha habido más consultas, y así mismo en los que se ha llevado a cabo el mayor número de procesos.

No se tienen datos exactos acerca de fallos favorables o desfavorables, debido principalmente a que los usuarios son quienes presentan en nombre propio la Acción de Tutela, lo que dificulta el seguimiento que se puede hacer del fallo, pues los usuarios la mayoría de veces no vuelven una vez se ha proferido este. Sin embargo hay que decir que en los pocos procesos judiciales por acción de Tutela, de los que se ha tenido conocimiento en el Consultorio Jurídico en su gran mayoría el Fallo ha sido favorable al tutelante.

Lo anterior es de resaltar pues debe tenerse en cuenta que los estudiantes de la Universidad Surcolombiana así como presentan falencias en gran medida en algunas áreas como Laboral y Disciplinario, en menor medida en Civil, también presentan gran

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fortaleza en lo que hace referencia con el área Penal, y específicamente con el área Constitucional, esto ultimo puede deberse en gran parte a la forma en que han sido privilegiadas estas áreas en la conformación del pénsum académico.

En lo que hace referencia a los Derechos de Petición, la estadística de la forma en que ha sido contestado, es aun mas difícil de recaudar, pues casi en la totalidad de los casos el usuario no vuelve a las instalaciones del Consultorio Jurídico para comunicarle al estudiante cual fue el resultado de su gestión. En muy pocas ocasiones vuelven y especialmente lo hacen cuando la entidad no contestó dentro del término legal y en consecuencia solicitan que se les elabore acción de tutela por la violación de ese derecho fundamental.

6. CONCLUSIONES

Del análisis de las cifras aportadas en el presente trabajo, puede llegarse a la conclusión que los estudiantes del Consultorio Jurídico han presentado un desenvolvimiento muy bueno en la gestión de los procesos judiciales que han adelantado dentro de su año de práctica en el Consultorio.

Consecuencia de esa gestión es que los estudiantes de la Universidad Surcolombiana estén catalogados como buenos practicantes por los funcionarios de los despachos judiciales y administrativos en los cuales se adelantan estos procesos.

Con muy pocas excepciones, los usuarios se han sentido insatisfechos por el servicio que les ha prestado el Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana a través de sus estudiantes, y prueba de ello es la gran cantidad de usuarios que se han acercado al Consultorio jurídico de la Universidad a pesar de llevar escasamente cuatro años en funcionamiento, es decir que aproximadamente cada año en promedio se han atendido 2000 consultas nuevas en las diferentes áreas del derecho que se han mencionado.

Respecto a lo académico se debe resaltar que los mayores logros y las fortalezas que demuestran la gran mayoría de los estudiantes que han hecho su práctica en el Consultorio Jurídico, se dan en las áreas de Constitucional y Penal.

En cuanto al área Constitucional, ya se ha hablado acerca del buen manejo que tienen los estudiantes de Derecho Constitucional, y

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especialmente la facilidad que tienen para manejar Jurisprudencia de la Corte Constitucional, para fundamentar así sus actuaciones en esa área.

En lo que hace referencia al área Penal, hay que decir que de las cifras se desprende fácilmente que es precisamente en esta área en donde más se desempeñan los estudiantes, un estudiante por durante el desarrollo de su práctica (Noveno y décimo semestre) en promedio ha tenido que adelantar y conocer durante esta alrededor de veinte a treinta procesos penales, esto les ha dado una gran base de conocimientos en esta área, es de destacar el dominio que tienen la mayoría de los estudiantes al momento de realizar los análisis fácticos, probatorios, y jurídicos, en sus actuaciones en especial al momento de presentar Alegatos de Conclusión de la etapa de investigación, al momento de intervenir en la Audiencia Publica, así como los recursos de apelación que se han presentado contra las sentencias condenatorias.

En cuanto al área de Civil, si bien es cierto que en lo que hace referencia a los procesos judiciales, la mayoría de los casos se han resuelto a favor de los usuarios, también hay que decir que se presentan muchos vacíos e inseguridades especialmente en lo que tiene que ver con derecho sustancial.

En el área laboral y en lo que hace referencia a procesos administrativos, se puede evidenciar una serie de falencias de gran calibre entre la mayoría de los estudiantes, lo que hace que el desempeño de este en el Consultorio Jurídico no sea tan eficiente como si lo es en las mencionadas áreas Penal y Constitucional.

En el área Laboral, se presentan muchos vacíos en lo que tiene que ver especialmente con Procedimiento Laboral, esto se debe principalmente a que en las asignaturas ofrecidas por el Programa de Derecho, no se alcanza a incluir este tema, lo cual ocasiona que al momento del estudiante tener que adelantar un proceso de esta naturaleza, debe estudiar y aprender sobre la marcha del proceso, ya que su conocimiento en esta área es casi nulo.

En lo que tiene que ver con los procesos administrativos (Disciplinarios y Responsabilidad Fiscal), la situación es aun más delicada, pues el estudiante maneja escasamente la parte general del Derecho Disciplinario, pero carece de nociones de regímenes disciplinarios especiales, o de procedimiento disciplinario en general; debido en gran parte a que el Derecho Disciplinario en su parte sustancial y procesal es muy extenso para siquiera poder aprender lo básico en un semestre.

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En cuanto a los Procesos de Responsabilidad Fiscal, el estudiante no tiene ni tan siquiera las nociones básicas de responsabilidad fiscal, no maneja la normatividad que hace referencia a este tipo de procesos, y mucho menos aun tiene idea del procedimiento; lo cual es apenas lógico pues en ninguna asignatura del Programa de Derecho, se ofrecen al menos las nociones básicas de este tipo de procedimiento administrativo. Debe destacarse dentro de los puntos fuertes del Consultorio Jurídico que siempre ha contado con la dedicación de los docentes asesores, los cuales han sido de gran ayuda para los estudiantes dentro del desarrollo de su práctica, en lo que tiene que ver a orientaciones sobre procedimiento, revisión de memoriales, demandas, asesoría en la elaboración de estos documentos, y principalmente en la asesoría para poder relacionar efectivamente los supuestos fácticos de un asunto con el material probatorio, y la fundamentación jurídica de las pretensiones.

Todo lo anterior permite decir finalmente que si bien es cierto el servicio que presta el Consultorio Jurídico a través de los estudiantes es de muy buena calidad, también hay aspectos que presentan falencias y en los cuales la Universidad Surcolombiana y especialmente la Facultad de Derecho, pueden y deben tomar medidas adecuadas para poder llenar esos vacíos y así mejorar aun más un servicio que se debe recordar existe por y para la comunidad mas necesitada.

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7. RECOMENDACIONES

Aunque hasta ahora solo se ha tocado lo que hace referencia al desempeño de los estudiantes en los procesos ventilados ante los despachos judiciales, también hay que hacer referencia a lo que respecta al funcionamiento interno del Consultorio Jurídico.

En cuanto a esto hay que decir que hay aspectos que si inciden directamente en lo que tiene que ver con el desempeño de los estudiantes, como por ejemplo la insuficiencia de asesores en determinadas áreas del derecho; y otros aspectos que influyen no en el desempeño de los estudiantes, pero si por ejemplo en la celeridad con la cual deben ser atendidos los asuntos que llegan al Consultorio Jurídico.

La Facultad de Derecho debe implementar una asignatura electiva dedicada a Procedimiento Laboral, o en su defecto llevar a cabo talleres o seminarios sobre procedimiento laboral para los estudiantes que van a empezar a cursar el Consultorio Jurídico, pues el desconocimiento de esta materia es total, al igual que una gran cantidad de vacíos en lo que tiene que ver con la parte sustancial; la necesidad de estos talleres o seminarios es urgente, ya que no se puede permitir que los estudiantes lleguen a aprender las nociones básicas de procedimiento laboral en él tramite de un proceso

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judicial en el cual sé esta poniendo en juego las pretensiones de usuarios de escasos recursos.

Seria recomendable que se aumentara el número de docentes asesores en el área Laboral, para que se pudiera brindar una orientación mas adecuada a los estudiantes, ya que al momento de entrevistar al usuario, se manifiestan las dudas y vacíos más grandes en los conceptos, la ausencia de un docente asesor experto en el área, incide en que el estudiante no pueda brindar una buena asesoría al usuario, lo cual repercute negativamente en el nivel de calidad del servicio que se presta en el Consultorio Jurídico.

En lo que tiene que ver con los procedimientos administrativos (Disciplinarios y Responsabilidad Fiscal) al igual que en el área Laboral, se debería implementar la creación de una asignatura electiva o al menos la asistencia obligatoria a seminarios sobre estas materias, antes que los estudiantes comiencen a asumir procesos de este tipo, lo anterior se hace aun más necesario en esta área, si se tiene en cuenta que la complejidad de los procesos disciplinarios y los de responsabilidad fiscal es aun mayor a la de los procesos laborales, además en este caso los estudiantes están obligados a asumir el proceso y adelantarlo, pues lo hacen en calidad de defensores de oficio, cargo que no puede ser rechazado fácilmente.

A nivel de docentes asesores en la actualidad se necesita por lo menos un asesor mas en áreas del derecho como Laboral, Procesos Administrativos y Penal, lo anterior teniendo en cuenta que en estos procesos es en donde más se solicita asesoría por parte del estudiante, y actualmente solamente hay un asesor en el área Laboral (4 horas en la semana), y un asesor en el área penal (4 horas en la semana), las pocas horas en la semana que pueden prestar su asesoría estos docentes, son insuficientes para dar abasto a todas las asesorías que les plantean los estudiantes.

Se requiere que los monitores para cada una de las áreas del Derecho que se manejen en el Consultorio Jurídico, sean escogidos rápidamente, lo anterior se hace de extrema necesidad si se tiene en cuenta que en los monitores recae en primer lugar la asesoría de la que requieran los estudiantes en el desempeño de sus funciones; también es importante resaltar que los monitores cumplen la función de hacer reparto a los estudiantes de los procesos ingresados al consultorio, por lo tanto desde el punto de vista logístico y de funcionamiento ágil del consultorio Jurídico, se hace indispensable la permanencia de monitores en el.

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La implementación de las anteriores recomendaciones contribuirían en gran medida para optimizar aun más el desempeño de los estudiantes del Consultorio Jurídico en sus funciones.

8. BIBLIOGRAFÍA

Archivo de procesos y consultas del Consultorio Jurídico de la Universidad Surcolombiana No. 0001 a No. 8000.

Decreto 196 de 1971 “Por el cual se dicta el estatuto del ejercicio de la abogacía”.

Decreto 765 de 1977 “Por el cual se reglamentan los artículos 30, 31 y 32 del Decreto 196 de 1971”.

Sentencia SU-044 de febrero 9 de 1995, M.P Dr. Antonio Maria Barrera Carbonell.

Sentencia C-071 de febrero 23 de 1995, M.P Dr. Carlos Gaviria Díaz

Sentencia C-049 de febrero 8 de 1996. M.P Dr. Fabio Morón Díaz.

Sentencia C-25 de febrero 11 de 1998, M.P Dr. Fabio Morón Díaz.

Sentencia C-40 de 2003. M.P Dra. Clara Inés Vargas Hernández.

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Sentencia C-1076 de diciembre 5 de 2002. M.P Dra. Clara Inés Vargas Hernández.

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