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ESCUELA NORMAL DEL ESTADO “PROFR. JESÚS MANUEL BUSTAMANTE MUNGARRO” Evaluación para el aprendizaje ENSAYO CRÍTICO COLABORATIVO SOBRE LOS AVANCES, LIMITACIONES Y RETOS ACTUALES DE LA EVALUACIÓN DEL APRENDIZAJE EN MÉXICO Profra. Martha Patricia Dorado Huitrón EQUIPO Barceló Vargas Martha Galilea German Robles Guadalupe Haydeé Guerrero Amador Ana Judith Hernández Murillo Héctor Francisco Leyva Moreno Alexandra Martínez Samaniego Anitza Rosario FEBRERO 2014

Ensayo crítico colaborativo sobre los avances

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ESCUELA NORMAL DEL ESTADO

“PROFR. JESÚS MANUEL BUSTAMANTE MUNGARRO”

Evaluación para el aprendizaje

ENSAYO CRÍTICO COLABORATIVO SOBRE LOS AVANCES,

LIMITACIONES Y RETOS ACTUALES DE LA EVALUACIÓN DEL

APRENDIZAJE EN MÉXICO

Profra. Martha Patricia Dorado Huitrón

EQUIPO

Barceló Vargas Martha Galilea

German Robles Guadalupe Haydeé

Guerrero Amador Ana Judith

Hernández Murillo Héctor Francisco

Leyva Moreno Alexandra

Martínez Samaniego Anitza Rosario

FEBRERO 2014

Introducción

La evaluación del aprendizaje constituye un proceso de comunicación

interpersonal, que cumple todas las características y presenta todas las

complejidades de la comunicación humana; donde los papeles de evaluador y

evaluado pueden alternarse, e incluso, darse simultáneamente. La comprensión

de la evaluación del aprendizaje como comunicación es vital para entender por

qué sus resultados no dependen sólo de las características del "objeto" que se

evalúa, sino, además, de las peculiaridades de quienes realizan la evaluación y,

de los vínculos que establezcan entre sí. Asimismo, de las características de los

mediadores de esa relación y de las condiciones en que se da ésta.

El objetivo de la evaluación del aprendizaje, como actividad genérica, es valorar el

aprendizaje en su proceso y resultados. Las finalidades o fines marcan los

propósitos que signan esa evaluación. Las funciones se refieren al papel que

desempeña para la sociedad, para la institución, para el proceso de enseñanza-

aprendizaje, para los individuos implicados en éste.

Avances de la educación en México

Al hablar de avances, nos referimos a ciertos progresos o mejoras que ha tenido la

evaluación en México a lo largo de su historia y para esto tomamos como muestra

una lectura de Escudero Escorza "Desde los test hasta la investigación evaluativa

actual”. En esta lectura se menciona que uno de los primeros modelos de

evaluación fueron los test psicométricos, los cuales se referían a la medición

científica de las conductas humanas, y llegaron a ser considerados sinónimo de

evaluación educativa porque tenían la finalidad de establecer discriminaciones

individuales olvidándose en gran medida de la congruencia con los objetivos

educativos.

Después Tyler nos presenta la corriente docimologica, donde se criticaba la

separación entre lo enseñado y las metas de instrucción, es decir se dejaba en

manos de una interpretación totalmente del profesor. Algo en que se ponía énfasis

en esta corriente es que el propósito más importante de la evaluación de los

alumnos es el de guiar su aprendizaje.

En los años 60’s nos señalan dos funciones distintas que puede adoptar la

evaluación:

Formativa: Para calificar aquel proceso de la evaluación al servicio de un

programa de desarrollo como objeto de mejorarlo.

Sumativa: Para aquel proceso orientado a comprobar la eficacia del

programa y tomar decisiones sobre su continuidad.

Aquí también se puede mencionar que México ha avanzado a la par de la

evaluación en el mundo, porque de ser una evaluación basada en las conductas

humanas, después con pruebas que solamente medían los conocimientos de los

alumnos, para después ser la que actualmente rige la educación, aquella “que

permite obtener evidencias, elaborar juicios y brindar retroalimentación sobre los

logros de aprendizaje de los alumnos a lo largo de su formación; por tanto, es

parte constitutiva de la enseñanza y del aprendizaje”.

Por otro lado México adoptó las siguientes formas de evaluar en su sistema

educativo lo cual permite valorar el aprendizaje de los alumnos:

Diagnóstica: Es aquella que ayuda a conocer los conocimientos previos del

alumno, es decir lo que los alumnos ya conocen desde el contexto familiar y social

que rodean.

Formativa: Es aquella que se realiza durante el procesos de aprendizaje,

Sumativa: Se realiza al finalizar, se usa por lo general para tomar

decisiones para asignar una calificación pertinente.

Autoevaluación: Es cuando un alumno se evalúa a sí mismo.

Coevaluación: Es cuando dos o más personas evalúan a un alumno su

trabajo.

Además de todo lo anteriormente mencionado, hace algunos años comenzó la

participación de México en algunas pruebas internacionales a gran escala, mismas

que se conocen como pruebas estandarizadas y al analizar los resultados se dan

cuenta cuáles han sido las carencias en la enseñanza- aprendizaje que a su vez

permiten que existan mejoras, estas pruebas son:

PISA: Programa para la evaluación del estudiante (pir sus siglas en inglés).

ENLACE: Exámenes Nacionales del Logro Académico en Centros

Escolares.

Limitaciones

El desarrollo curricular, en cualquiera de sus niveles, está recorrido por un proceso

evaluador de triple naturaleza: la evaluación diagnóstica, la evaluación procesual y

la evaluación de término. La anterior idea mencionada es de gran aporte

cognoscitivo para los estudiantes de escuelas normales puesto que se ha venido

notando una ligera confusión acerca de la evaluación ya que a nosotros como

generaciones anteriores se nos evaluaba solamente al final, es por eso que

considero interesante el que nos saquen de nuestro error dándonos a conocer que

la evaluación es un proceso que se debe llevar a cabo durante toda la secuencia.

En el complejo mundo de la educación se realizan diversos procesos evaluadores

del currículo que están afectados por las patologías más diversas. La evaluación

puede ser manejada para servir los intereses del evaluador ya que éste puede

llamar “evaluación” a la operación que desee, puede evaluar aquello que le

interese, en las formas y momentos que determine, con los instrumentos que

considere oportunos para utilizarla en los fines que su particular interpretación

aconseje. Debido a lo anterior podríamos hacer la analogía de que la educación

está casada con la evaluación.

En el sentido de que sólo se evalúa al alumno se puede considerar al alumno

como un protagonista ya que se le examina siguiendo una temporalización

determinada. No parece concebirse el currículo sin la evaluación del alumno, pero

sí sin la evaluación genérica del mismo.

En la lectura se menciona que a cada alumno se le asigna en el expediente un

valor numérico que parece ser de su exclusiva responsabilidad. La calificación del

alumno es el resultado de su capacidad y de su falta o derroche de esfuerzo. De lo

anterior mencionado yo difiero ya que se sabe que el docente tiene mucho que ver

en los resultados de los alumnos; “actualmente se entiende la enseñanza más

como una tarea de orquestación de un complejo entorno de aprendices y

actividades que como una línea de ensamblaje en la que el conocimiento de

transfiere (disemina) de alguien que sabe (el profesor) a personas que no saben

(los alumnos) a través de un monólogo. Un creciente número de investigadores

sostiene que la enseñanza y el aprendizaje son esencialmente un proceso social y

lingüístico (un proceso de comunicación), más que un único proceso cognitivo”

Díaz y Hernández (2002).

Dentro del campo de evaluación no solo es importante el resultado si no también

el proceso mediante el cual se estará evaluando. En definitiva, no sólo importa qué

es lo que se ha conseguido, sino el cómo, a qué precio, con qué ritmo, con

cuántos esfuerzos, a qué costa y para qué fines. Analizar sólo los resultados

obtenidos es, cuando menos, parcial. Y la parcialidad suele ir acompañada de

imprecisión y de tergiversaciones.

Por otra parte la lectura nos menciona que no se puede rechazar el aprendizaje de

contenidos ya que son necesarios para articular el pensamiento para adaptarse a

la realidad y para poder manejarla. Siendo así de gran importancia la selección de

contenidos así como su articulación.

Se menciona que no se contemplan debidamente en el proceso evaluador:

actitudes, destrezas, hábitos, valores… lo anterior mencionado causa una

problemática escandalosa ya que deberían de considerarse dichos aspectos en el

proceso evaluador ya que son parte importante de la formación de los alumnos.

Por todo lo anterior mencionado podemos determinar que la evaluación no es

tarea fácil.

En la actualidad se espera que la evaluación sea en base al proceso de formación

que lleva el alumno y al mismo tiempo el desempeño del maestro, sin embargo no

siempre fue así, anteriormente las evaluaciones eran de una manera competitiva

(niños contra niñas), y en su mayoría era para comparar la calificación que tenían

unos alumnos con otros, esta comparación con el fin de que unos quisieran tener

mayor calificación que otra, desde mi punto de vista es una situación muy errónea,

pues el comparar niños hacía que los “ganadores” se sintieran orgullosos mientras

que los “perdedores” se sentían humillados por aquellos con más calificación,

menciona la lectura de Miguel Ángel Santos, que los profesores no querían que su

evaluación fuera publicada o dada a conocer a los otros docentes, ya que unos

aparecían con más alto nivel que otros, a pesar de ello la evaluación de éstos

hacia los alumnos es de igual manera publicada y escalonada en cierta manera, a

mi parecer esta situación no debe de ser así, pues hay alumnos que necesitan de

ayuda o que por alguna razón no salen bien en las evaluaciones y aun así son

calificados y etiquetados por la misma, se dice que “la evaluación es, muchas

veces, un modo de etiquetar a los alumnos en las instituciones educativas”

(Ormart, 2004).

Cada vez que los alumnos entran a un nuevo ciclo escolar, tienen la duda de cuál

es la forma de evaluar de los profesores, importándoles solamente un número

como calificación y no el proceso o los aprendizajes y saberes que deben tener

para poder ser evaluados, de igual manera actualmente aún existen muchos

docentes que solo califican de cierta manera y no se fijan en la forma de aprender

o simplemente no conocen a sus alumnos aplicándoles la misma forma de

evaluación a todos por igual. Por otra parte existen muchas formas de evaluar,

incluso cada maestro tiene su propio estilo para evaluar o bien sus métodos para

aplicar la evaluación, el autor de la lectura nos dice que a pesar de los diferentes

cursos que se imparten hay una forma idéntica de evaluar, yo tomo esto como

una contradicción que se plantea y que es cierta, ya que es verdad que cada

maestro tiene su estilo pero a su vez hoy en día se evalúa en torno a los

programas y planes de estudio, siendo la evaluación la misma pero aplicada a los

alumnos dependiendo del estilo del maestro.

La evaluación puede convertirse en algo negativo, en ciertas ocasiones algunos

maestros pueden manipular a alumnos o padres de familia con la misma, para ello

es responsabilidad del docente saber cómo evaluar y dar a conocer a los alumnos

y sus padres su método para calificar, con el fin de evitar problemas o malos

entendidos, desde tiempo atrás “la evaluación ha sido un instrumento de control,

amenaza e, incluso, de venganza, respecto a algunos alumnos que se han

permitido ejercitar el derecho a la crítica, a la discrepancia o a la indisciplina”

(Santos, 2005), esta cita nos indica que algunos docentes desde hace tiempo

toman la evaluación como un derecho que no es justo para los alumnos, pues no

es ético de un maestro que realice acciones de esta índole, menos siendo

alumnos de una edad temprana, esta forma de calificar negativa puede también

estar bajo intereses de los maestros o padres de familia, poniendo esta situación

en alerta o como problema importante que se puede presentar en la educación

básica.

Este autor nos menciona que la evaluación en la educación no suele ser educativa

y que no repercute en la mejora de la calidad educativa, desde mi perspectiva la

evaluación se ha implementado para la mejora de la práctica de los docentes, al

igual que conocer que tanto saben los alumnos evaluando el proceso de

aprendizaje, claro esta que esta perspectiva es en relación a los planes y

programas actuales vigentes. La evaluación va muy apegada al control o querer

controlar al grupo, es importante que maestros y directivos conozcan que son

funciones en la educación muy diferentes y que sin embargo las dos son

necesarias, debe de existir también una retroalimentación en la evaluación pues

con ella se toman decisiones importantes acerca del proceso que se está llevando

a cabo con los alumnos.

Se evalúa para conocer y adoptar decisiones que conduzcan a la mejora de lo que

se evalúa. Evaluar se considera hoy una necesidad para que cualquier

organización avance y crezca, pues sin evaluación es difícil que mejore la calidad.

Por eso cada día crece más el número de partidarios de la evaluación, no sólo

para conocer la realidad sino que también se considera un elemento de cambio y

oportunidad para su mejora. La evaluación sistemática establecida como un

proceso de mejora continua es ya un indicador de su propio funcionamiento y

buena organización. Pero depende de los objetivos, del diseño previo y de los

planteamientos de partida que hagamos de la evaluación, (en resumen, éstos

deben responder a preguntas como: ¿para qué evaluamos?, ¿qué evaluamos?,

¿cómo evaluamos? y ¿qué haremos después de la evaluación?) podremos decir

que existe una relación entre evaluación y cambio educativo. (Lobeto, 2005)

A pesar de esto, hoy en día, se siguen observando que en la evaluación existen

diversos factores o hechos que hacen que esta no se lleve a cabo de la mejor

manera o que incluso la llevan por el camino equivocado, donde realmente no se

le está dando un sentido formativo que apoye al alumno a mejorar sus áreas de

oportunidad sino uno donde solo se le perjudica y se le clasifica con un número.

Algunas veces la evaluación es utilizada para dar poder a unos y quitarlo a otros,

dejando de lado que todo ser humano tiene derecho y es capaz de superarse a sí

mismo partiendo de su errores, hoy mejor conocidos como áreas de oportunidad, y

así convertirlos en logros y aprendizajes significativos. Otra falla que se está

encontrando en las aulas es la carencia de un sistema de evaluación externa, esto

no se da debido a que no es fácil encontrar maestros que presten su tiempo para

realizarla ya que no sería productivo ni transparente que el mismo docente titular

de grupo la hiciera ya que pudieran intervenir ciertos factores que no brinden una

verdadera información que apoye a los alumnos.

Otro aspecto que se considera que se realiza pero no de la manera correcta es la

autoevaluación, muchos se preguntarán por qué puede ser errónea ya que

mediante la autoevaluación los alumnos pueden reflexionar y tomar conciencia

acerca de sus propios aprendizajes. Dentro de la autoevaluación se contrasta el

nivel de aprendizaje con los logros esperados en los diferentes criterios señalados

en el currículo, detectando los avances y dificultades y tomando acciones para

corregirlas. La autoevaluación no se logrará si el docente no realiza con

anterioridad los aspectos que el alumno debe de considerar al momento de

reflexionar sobre su desempeño como estudiante.

Retos

La evaluación del proceso de aprendizaje trae consigo el viejo problema de la

individualización de la enseñanza, en el sentido de reconocer y atender las

diferencias individuales entre los alumnos. Es bien conocido que los estudiantes

pueden llegar a similares resultados, siguiendo vías diversas, con modos

diferentes de proceder, pertinentes e impertinentes en relación con los

procedimientos científicos correspondientes y con las operaciones intelectuales

implicadas.

Por otra parte, los estilos de aprendizaje, los ritmos, las diferentes visiones,

intereses, propósitos, conocimientos previos, proyectos de vida; que suelen

quedar implícitos en los resultados "finales" del aprendizaje, aparecen en un

primer plano durante el proceso y pueden condicionar los resultados. La

evaluación debería penetrar hasta las diferencias individuales de los sujetos de la

actividad y proporcionar a los profesores y a los propios estudiantes la información

que permita, respetando esas diferencias, orientar el proceso hacia el logro de los

objetivos comunes, socialmente determinados.

A su vez el aprendizaje es específico, único, en el sentido del "aquí y ahora". Cada

aprendizaje se da en una situación determinada con unos estudiantes y profesores

que guardan cierta relación peculiar entre sí y con el objeto de conocimiento, en

un espacio y tiempo dados. Los modelos ecológicos de la investigación y la

evaluación educativa ofrecen un rico caudal de información que subraya la

singularidad del hecho educativo y la perspectiva del aprendizaje contextualizado.

Según la lectura analizada sólo se evalúan los resultados directos, pretendidos. La

puesta en marcha de muchos proyectos curriculares que siguen un criterio de

encadenamiento literal no tiene en cuenta la evaluación de aquellos efectos

secundarios o imprevistos. Estos efectos son inevitables y la mayoría de las

ocasiones son mucho más importantes que los resultados buscados en el

producto a realizar.

Por lo tanto solo se evalúa un producto final, pero no debe de ser así ya que la

evaluación debe de ser formativa no solo basarse en el resultado final sino en

todo el proceso por el cual pasó el alumno para poder llegar a un resultado y todos

los obstáculos los cuales pudo superar a lo largo del proyecto.

Por otra parte también se menciona que solo se evalúan los efectos observables,

existen efectos que no son directamente observables. Estos efectos, buscados o

no suelen pasar inadvertidos a los ojos del evaluador. El hecho de que no sea

observable no significa que no puede ser evaluable ya que el proceso por el cual

tuvo que ver pasado el alumno tiene mucho significado. Mucho menos no se

puede decir que no es relevante ya que la sensación exitosa que se provoca en el

alumno tiene mucho valor.

Los modelos de evaluación basados en la programación por objetivo operativos

(Manger, 1972), (Bloom, 1972), Popham, 1975), exigen un modelo correlativo de

evaluación que descanse sobre la aplicación de instrumentos de comprobación de

carácter experimental.

Aquí se hace énfasis en lo que llamamos currículum oculto. Según (Díaz Barriga,

2006) De este modo el aprendizaje que los estudiantes absorben a través del

currículum oculto puede convertirse en una influencia importante en su formación,

por ello es importante el equilibrio y honestidad intelectual del personal docente y

paradocente que se desempeñan en los institutos educativos ya que transmiten

enseñanzas morales y sociales mediante su forma de actuar, claro que también

debemos considerar que estas experiencias didácticas complementarias no sólo

provienen de los docentes, sino también de los otros estudiantes.

En el texto antes analizado se menciona que se evalúa principalmente la vertiente

negativa en la práctica habitual del docente, la evaluación está marcada por las

correcciones. Una evaluación rigurosa requiere un tratamiento holístico de los

fenómenos y de los productos. El desequilibrio de perspectiva hace que la escuela

esté más atenta a los errores que a los aciertos de los alumnos y que los equipos

de evaluación externa se apresten más a describir problemas y deficiencias a que

resaltar valores y logros.

Los errores (Knapp-Potthoff 1987,205) pueden ser un signo positivo dentro del

proceso de aprendizaje y por tanto este hecho ha de reflejarse en la evaluación

para no caer en una incoherencia. También se ha de enseñar al alumno una

nueva actitud para reaccionar de forma positiva ante el error, relativizandolos,

evitando la importancia, empleando estrategias de evasión, evitando a corrección

inminente entre otros. Es lo que podríamos denominar como “cultura del error”. Se

ha de despertar el sentimiento de que cometer errores puede ser también un

hecho creativo y un paso más en el aprendizaje.

Lo que el autor nos transmite es que de los errores se aprende y hay que

inculcarles a los alumnos que la mayoría de la veces se aprende más del error. La

evaluación debe de ser balanceada no por el hecho de que algún reactivo sea

incorrecto se enfocará sólo en el error, sino que también en los aciertos hay que

prestar atención y poder llevar todos los conocimientos a la práctica.

Seguidamente se menciona que es un error someter a los alumnos o a los

profesores de un centro, a los coordinadores de una reforma a un evaluación

conclusiva sin tener en cuenta las condiciones, los medios, los tiempos, los

contextos en que se mueven.

Es necesario conocer los contextos en los cuales se desarrolla el alumno, ya que

estos factores son de gran influencia para su aprendizaje. Por lo tanto no hay que

dejarlos de lado al momento de la evaluación.

Conclusión

Más allá de un evaluación sumativa, cuantitativa y formativa en este ensayo

hemos llegado a la conclusión de que este proceso se sitúa en un escenario

meramente abierto al área educativa, a la evaluación educativa, al proceso

evaluador y a los instrumentos del evaluador. Esto con el fin de crear una práctica

evaluativa, que nos lleve a la reflexión de cómo queremos ser nosotros al

enfrentarnos a una escena de evaluación, todo aquello que hace rutinaria e injusta

la evaluación del docente, así como también que visión debemos tener para llegar

a realizar una verdadera evaluación, justa y correcta.

No es posible evaluar los efectos no observables, pues se dice que el alumno

desarrolla ciertos aprendizajes que deben ser evaluados explícitamente, pues con

una simple evaluación superficial no sería suficiente para hacer notar este nuevo

conocimiento, he ahí el trabajo muy profundo que debe realizar el docente para

llegar a tomar en cuenta esto. En la práctica habitual del docente la evaluación

está marcada por las correcciones, las cuales deben de construir el aprendizaje de

los alumnos, pues hemos estudiado durante todo nuestro proceso educativo que

el error es parte del aprendizaje, por esta razón, el mismo lenguaje descubre la

actitud predominante: “corregir” significa “enmendar lo errado”.

Para puntualizar reconocemos que un individuo con un gran almacén de datos en

la cabeza pero incapaz de comunicarse, no estaría auténticamente formado, ya

que al presentar algunos instrumentos de evaluación, por mencionar un ejemplo:

un examen escrito, sería algo que sometería al alumno a un acto memorístico, que

por decirlo así, lo haría salir del paso, siendo que los instrumentos son diversos y

se adaptan según la condición que presenta cada aprendiz.

Por ello no debemos ver la evaluación como algo malo, cuando se nos dice que lo

único que es malo es ser injusto, pues también debemos de saber que la

evaluación es el acto más complejo, pues se debe de realizar cuidadosamente,

nos es importante mencionar que también el docente debe de caer en su propio

acto de evaluación así como de sus métodos, y así trabajando todo esto con

mucha ética, pues de ello dependerá el estado en el que realmente encontramos

al educando, frente a los conocimientos que se van monitoreando en él.

Referencias bibliográficas:

Díaz Barriga, A. (2006). La educación en valores: Avatares del curriculum

formal, oculto y los temas transversales.

KNAPP, K. y A. KNAPP-POTTHOFF (1987). “The man (or the woman) in

the middle: Discoursal aspects of non-professional interpre-ting”. En K.

Knapp, W. Enninger. y A. Knapp-Potthoff (eds.), Analysing Intercultural

Communication. Berlin: Mouton de Gruyter: 181-211.

Díaz, F. y Hernández, G. (2002). Estrategias docentes para un aprendizaje

significativo (2° Ed.). México: Mc Graw Hill.

Ormart, E. (2004). LA ÉTICA EN LA EVALUACIÓN EDUCATIVA.

Recuperado el 21 de febrero de 2014, de

http://www.ugr.es/~sevimeco/revistaeticanet/numero6/Articulos/Formateado

s/7La.pdf

Santos, M. A. (2005). Patología general de la evaluación educativa .

Málaga, España : Travesía Marcos Zapata .

Lobato, E. M. (2005). Avances en supervisión educativa. Obtenido de

http://adide.org/revista/index.php?option=com_content&task=view&id=177&

Itemid=45